rx | reflujo gastroesofágico Enfermedad por reflujo gastroesofágico Acidez crónica Causada por una falla en el músculo que une el estómago con el esófago, es una patología que podría requerir medicación de por vida. Para evitar complicaciones severas, debe recibir una atención temprana / Javier Graterol García Desarrollada cuando el contenido gástrico, rico en ácido clorhídrico y pepsina, asciende –de manera frecuente y continua– desde el estómago y produce irritación y quemaduras en el tejido esofágico, la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) afecta aproximadamente a 12% de los venezolanos. El trastorno se inicia por una falla en el esfínter esofágico inferior, músculo que constituye la denominada “barrera antirreflujo” y se encarga de impedir que los jugos gástricos lleguen al esófago. En condiciones normales, el esfínter sólo se abre con el reflejo de la deglución y, una vez que los alimentos llegan al estómago, se cierra nuevamente. “Es similar a una válvula de presión: permite la salida de gases y aire, pero frena el escape de líquidos y sólidos. Cuando no tiene suficiente fuerza, el esfínter falla y se produce el reflujo, porque deja pasar hacia arriba el contenido del estómago”, explica Raúl Aponte Rendón, internista, gastroenterólogo especializado en el estudio de la motilidad esofágica. Los especialistas advierten que la ERGE es una patología crónica que –de no tratarse a tiempo– puede 20+SALUD generar complicaciones que dañan las paredes del esófago, modifican sus células y, en casos graves, pueden derivar en cáncer. Malestar permanente Las molestias de la ERGE –a veces comparables con las provocadas por una insuficiencia cardíaca– pueden presentarse en cualquier momento del día: en una reunión de trabajo, en una fiesta o durante el sueño. “Es una condición recurrente que tiene un costo anual muy elevado en la productividad laboral y una disminución importante en la calidad de vida del paciente”, asegura Aponte. Si bien la ERGE puede provocar náuseas, hipo, dolor de garganta, tos crónica (cuando los jugos gástricos llegan a los pulmones), asma, otitis, laringitis, disfonía y, en estados avanzados, sangrado, pérdida de peso y disfagia o dificultad para tragar, los síntomas cardinales son dos: • Pirosis. Sensación de dolor o ardor intenso en el centro del pecho. Esta molestia se convierte en una señal de alerta cuando se presenta más de dos o tres reflujo gastroesofágico | rx 12% de los venezolanos, aproximadamente, sufre la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) veces por semana, y puede empeorar con ciertos alimentos, ejercicios o cambios bruscos de postura. • Regurgitación. Ascenso –sin esfuerzo o sacudida de vómito– del contenido gástrico hacia la orofaringe (región anatómica que nace en la porción posterior de la boca). Cuando la regurgitación es frecuente, el ácido de los jugos estomacales se mantiene alojado en el esófago y daña su capa protectora, provocando úlceras que, al cicatrizar, hacen cada vez más estrecha la cavidad esofágica. Factores potenciales Algunos factores aumentan las probabilidades de desarrollar la enfermedad por reflujo gastroesofágico: • Obesidad. La probabilidad de sufrir los síntomas de ERGE es dos veces mayor en quienes tienen sobrepeso, asegura Gilbert Silvestri, cirujano de vías digestivas y especialista en reflujo gastroesofágico, pues la acumulación de grasa en el abdomen produce un incremento de la presión intra-gástrica, que contribuye a que el contenido del estómago ascienda al esófago. • Envejecimiento. Si bien puede presentarse a cualquier edad, los mayores de 60 años son más propensos a padecer ERGE, debido a que sufren degeneración de la barrera antirreflujo, disminución de la peristalsis secundaria esofágica (contracción muscular que se produce para eliminar del esófago algunos restos de alimentos y ácidos) y déficit en la producción de bicarbonato en la saliva, el cual amortiza la acidez del reflujo. • Medicación. Ciertos medicamentos, como los anticolinérgicos (indicados en el tratamiento de enfermedades como el mal de Parkinson), la nitroglicerina (vasodilatador utilizado contra las anginas de pecho) y la benzodiacepina (sustancia incluida en sedantes musculares) producen relajación del esfínter esofágico inferior y facilitan el paso de ácidos hacia el esófago. • Hernia hiatal. Es una afección en la que la zona de unión entre el estómago y el esófago se introduce en el tórax y daña la barrera antirreflujo. • Estilo de vida. El consumo excesivo de alcohol, cigarrillo, bebidas gaseosas, cafeína y chocolate puede desencadenar reflujo gastroesofágico. Diagnóstico certero Si se trata a tiempo, la ERGE se mantiene bajo control y se minimizan los daños en la mucosa del esófago. Los especialistas enumeran las técnicas utilizadas para realizar el diagnóstico y descartar enfermedades asociadas: Sueño alterado • PHmetría. Es una prueba –con 97% Aproximadamente de efectividad para el diagnóstico de la 60% de los pacientes ERGE– que permite medir durante 24 hocon la enfermedad ras las variaciones de la acidez (pH) de las por reflujo gastroesofágico vías digestivas y determinar su relación sufre alteraciones del sueño, con los síntomas. El estudio consiste en aseguran los especialistas. introducir a través de las fosas nasaEn horas de la madrugada, les una sonda, la cual se conecta a un el ácido del estómago dispositivo que el paciente debe activar es más fuerte y la posición cuando siente molestias. horizontal del cuerpo • Manometría esofágica . Por medio contribuye a que los jugos gástricos lleguen más de un sensor que se introduce a través de fácilmente al esófago, las fosas nasales, se mide la presión en las pudiendo causar ronquidos paredes del esófago y en los esfínteres e insomnio, entre otros esofágicos superior e inferior. trastornos. • Endoscopia . Se introduce por vía bucal un tubo flexible con una luz en el extremo que permite observar en un monitor los daños que pudieran haber causado los ácidos gástricos en el esófago. Con esta técnica se puede también determinar la presencia de hernia hiatal. • Radiografía esofágica superior. Se utiliza para descartar otras patologías relacionadas con la ERGE. Se trata de una serie de radiografías tomadas para observar el desplazamiento de los alimentos a través del esófago, el estómago y el intestino delgado. Riesgo mayor Silvestri refiere que en 70% de los pacientes el reflujo gastroesofágico no produce lesiones visibles en 21+SALUD rx | reflujo gastroesofágico Alrededor de 60% de los pacientes con la enfermedad por reflujo gastroesofágico sufre alteraciones del sueño la mucosa del esófago. Sin embargo, el 30% restante puede presentar la forma más severa de la condición que, en muchos casos, puede conducir al desarrollo de cáncer. El ácido estomacal irrita, inflama y produce úlceras en la superficie interna del esófago. Si el daño se extiende a 75% de este conducto del tubo digestivo, se considera que la enfermedad está en su grado más avanzado. “Cuando esas úlceras cicatrizan, desarrollan tejido fibroso excesivo y pueden producir una estrechez del esófago”, agrega Silvestri. En estas condiciones, el paciente podría desarrollar el esófago de Barrett –más frecuente en hombres–, un trastorno en el cual el revestimiento interno del esófago presenta displasia (malformación de las células), condición previa al cáncer esofágico. Aponte aclara que “solamente de 1 a 3.% de los pacientes llega a tener ese tipo de cáncer”. Además, subraya el especialista, “aparece 20 o 25 años después del inicio de la enfermedad”. utilizados en caso de ERGE. La terapia debe ser continua y a largo plazo. Algunas veces, incluso, debe mantenerse de por vida. Generalmente, cuando se abandona la medicación, las molestias vuelven a aparecer alrededor de los seis meses siguientes. Los especialistas aseguran que los denominados “inhibidores de la bomba de protones”, fármacos que regulan la producción de ácido en el estómago, son los más efectivos para el tratamiento de la ERGE. “Esos medicamentos no actúan directamente sobre el esfínter, sino sobre el contenido gástrico, pues permiten disminuir la acidez”, explica Silvestri. De esa manera, el reflujo se hace menos irritante, subraya el especialista. Los inhibidores de la bomba de protones pueden ir acompañados de los “agentes de promotilidad”, fármacos utilizados para aumentar la fuerza de la contracción muscular que ayuda al esófago a limpiar los ácidos alojados en sus tejidos y contribuye, además, a acelerar la cicatrización de sus paredes. Alivio quirúrgico Terapia a largo plazo Eliminar los síntomas y evitar las complicaciones son los objetivos principales de los tratamientos Medidas de cuidado Los especialistas recomiendan algunas medidas para disminuir las molestias causadas por la ERGE: • Reducir las porciones de comida. • Evitar el uso de ropa ajustada porque contribuye a aumentar la presión intra-abdominal. • Disminuir el consumo de chocolate, café, menta y té. • Restringir la ingesta de alimentos cítricos, pues producen ardor intenso en el esófago. • Eliminar el consumo de bebidas alcohólicas y cigarrillo. • Utilizar varias almohadas para dormir o elevar la cabecera de la cama. • Esperar dos horas después de la cena para acostarse. 22+SALUD Se consideran candidatos para una intervención quirúrgica los pacientes que no responden al tratamiento o presentan esofagitis severa (úlceras esofágicas) o estrechez del esófago, las personas jóvenes que deben ser tratadas a largo plazo o quienes han desarrollado formas avanzadas de ERGE (esófago de Barrett o cáncer). La cirugía –realizada por laparoscopia– busca devolver la fuerza al esfínter esofágico inferior y tiene un porcentaje de éxito de alrededor de 90%. • F ue n t e s c o n s ul t ada s ºRaúl Aponte Rendón, gastroenterólogo y especialista en estudio de la motilidad esofágica. Centro Médico Maracay (estado Aragua). ºGilbert Silvestri, cirujano de vías digestivas y especialista en reflujo gastroesofágico. Hospital de Clínicas Caracas. ºERGE: tratamiento médico. Juan Carlos González, gastroenterólogo. Presentación para Taller sobre Enfermedad de Reflujo Gastroesofágico de Nycomed. ºThe American College of Gastroenterology. ºwww.medlineplus.com.