ESPAÑA EL PAÍS, lunes 15 de marzo de 2004 13 Elecciones 2004 Simpatizantes del PSOE festejan la victoria electoral ante la sede del partido, en la calle Ferraz de Madrid. / GORKA LEJARCEGI Zapatero vence con casi 11 millones de votos El PSOE supera el 42% de los votos y logra 164 escaños, mientras el PP pierde 35 diputados y el Gobierno JOSÉ MANUEL ROMERO, Madrid Los españoles decidieron ayer cambiar de Gobierno y destrozar todos los pronósticos de los últimos días. Los votantes dieron su apoyo mayoritario en las urnas al PSOE y se lo quitaron al PP, que lo atesoraba desde 1996. Las elecciones generales más tristes de la historia de España, celebradas sólo tres días después de la matanza terrorista que causó 200 muertos y más de 1.400 heridos en Madrid, relegaron al PP a la segunda posición y lo dejaron fuera del poder. La candidatura socialista, que José Luis Rodríguez Zapatero encabezaba por Madrid, se convirtió en la más votada de unas elecciones generales (10,9 millones de votos, casi 600.000 votos más que los cosechados por Aznar en 2000). El PSOE sentará a 164 diputados en el Congreso frente a los 148 del PP, según los resultados con el 99,8% del voto escrutado. A las diez en punto de la noche, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, oficializó la victoria: “El PSOE ha ganado las elecciones y se muestra en condiciones suficientes de gobernar España”. El vuelco electoral del 14 de marzo fue inesperado y contundente. El PSOE logró 2,8 millones de votos más que cuatro años Zapatero: “Prometo guiarme por la Rajoy: “Estoy orgulloso de haber Constitución; mi primera iniciativa será trabajado a las órdenes de Aznar buscar la unidad de todos contra el terror” y seguiré haciéndolo por este proyecto” antes y el PP, 700.000 menos. La víctima del avance socialista fue IU, que perdió 140.000 votos y recogió cinco escaños (cuatro menos de los que tenía). La apelación al voto útil que el PSOE repitió en la campaña tuvo los efectos temidos por la coalición. El candidato socialista siguió el escrutinio desde la sede central del PSOE, en la calle de Ferraz, y se encerró a partir de las nueve y media de la noche en su despacho para redactar en solitario el discurso de futuro presidente. Una hora y media después, su primera frase fue para las víctimas del atentado del pasado jueves: “Quiero expresar un recuerdo a las familias que aguardan a sus seres queridos en las salas de espera de los hospitales y a quienes lloran a los suyos todavía. En este momento pienso en las vidas rotas el jueves por el terror y pido que guardemos aquí un minuto de silencio y de recuerdo para no olvidar nunca”. Se hizo el silencio en la sede socialista y después, Zapatero agradeció “a todos los gobiernos y pueblos del mundo” su apoyo tras lo ocurrido. Sólo entonces, el futuro presidente habló de los resultados: “Quiero que el cambio de talante comience esta misma noche, por eso manifiesto mi respeto y mi consideración a Ma- riano Rajoy, ha sido un digno rival, le tiendo la mano desde ahora mismo para cooperar en los asuntos de Estado”. Zapatero destacó entre sus prioridades la lucha contra el terrorismo, su compromiso de formar “el Gobierno del cambio” y su garantía de guiarse “por la Constitución”. “Me propongo impulsar la España social, actuar desde el diálogo, la responsabilidad y la transparencia, traba- jar por la cohesión, la concordia y la paz, y combatir toda forma de terrorismo”. El líder socialista anunció que su primera iniciativa será “buscar la unidad de las fuerzas políticas para concentrar todos los esfuerzos” en la lucha antiterrorista. Y concluyó: “Esta noche me comprometo a encabezar el cambio tranquilo y gobernar para todos, con humildad. Y os aseguro que el poder no me va a cambiar”. Zapatero ha conseguido en sólo tres años y medio de liderazgo sacar al PSOE del fondo del pozo en el que se situó cuando cosechó en 2000 uno de los peores resultados de su historia, con la formación fracturada y sin dirección, tras la dimisión de Joaquín Almunia. Ayer, Zapatero logró incluso que el PSOE ganará en León, su provincia natal y la única plaza de esa comunidad que no cayó del lado de los populares. El PSOE sólo perdió ante el PP en la batalla del Senado (93 escaños frente a 102). En el lado contrario, Mariano Rajoy suspendió su primer examen. El líder del PP designado por José María Aznar fracasó en su intento de revalidar la mayoría absoluta o mantener al partido como primera fuerza. Ni los peores pronósticos de los populares apuntaban en esa dirección. Unos minutos antes de la intervención de Zapatero, habló Rajoy escoltado por José María Aznar, que le abrazó unos segundos, y por Rodrigo Rato. El candidato del PP explicó que había llamado a su adversario para felicitarle y añadió: “Como español, estoy orgulloso de haber trabajado a las órdenes de Aznar. Desde mañana, seguiré trabajando con convicción cerca de los ciudadaPasa a la página 14 14 / ESPAÑA EL PAÍS, lunes 15 de marzo de 2004 Elecciones 2004 Viene de la página 13 nos por este proyecto político con el que nos identificamos”. La participación alcanzó ayer niveles muy altos (77,2%), lo que todas las formaciones políticas interpretaron como un mal síntoma para el PP, dando por sentado antes del escrutinio que la movilización del voto beneficiaba a los intereses del PSOE. La masiva asistencia a las urnas que habían reclamado los candidatos como respuesta a la masacre de los trenes fue valorada por todos los portavoces políticos: “Ha sido un triunfo de la democracia y un respaldo de la ciudadanía a esos valores”. Las comunidades más participativas fueron aquellas donde el Gobierno central y el Partido Popular han cargado más las tintas de sus ataques políticos contra los ejecutivos autonómicos en los últimos meses. Tanto Euskadi como Cataluña y Andalucía reflejaron aumentos próximos a los 10 puntos respecto al voto registrado en las elecciones de 2000 e infringieron un duro varapalo al PP, que sufrió en estas comunidades una sangría de escaños (perdió 14). La victoria de mayo La última referencia general, correspondiente a los resultados de las elecciones municipales de mayo pasado, situó al PSOE por delante del PP. La diferencia, favorable a los socialistas, fue de 120.000 sufragios. Ayer amplió esa distancia en más de un millón de votos. Esquerra Republicana de Cataluña, que presentó a las elecciones generales a Josep Lluís Carod Rovira con la intención de refrendar ante su electorado catalán la entrevis- ERC eleva de 1 a 8 su representación en el Congreso y tendrá grupo propio ta de su líder con la cúpula de ETA, cosechó un avance espectacular. ERC logró ocho escaños (en las elecciones de 2000 sólo consiguió un diputado) y el 2,7% de los votos, cuando cuatro años antes apenas alcanzó el 0,85%. CiU fue la víctima de este aumento al perder cinco diputados (de 15 se queda en 10) y casi un punto en el porcentaje de apoyos recibido por parte del electorado. En sólo seis meses, los nacionalistas de CiU han perdido el Gobierno de Cataluña y cinco de los 15 diputados que mantenían en el Congreso. Además, su posible posición de bisagra en el caso de que el PP no logrará mayoría absoluta, se difuminó ante los espectaculares resultados de Zapatero, que se garantiza la mayoría absoluta para sacar adelante las leyes con el apoyo de IU y ERC. En Euskadi, los votantes incrementaron su apoyo al PNV, que pasaba del 1,53% de los sufragios al 1,64%, aunque no gana escaños, y al PSOE, que ganó tres diputados hasta lograr siete. Cataluña, Euskadi, Andalucía y Galicia, las que más castigan al Partido Popular La participación se incrementó 8,51 puntos respecto de las elecciones de 2000 COMPOSICIÓN DEL CONGRESO PARTICIPACIÓN (%) 99,90% ESCRUTADO 78,83 ESCRUTADO: 99,90% PARTICIPACIÓN: 77,22% 79,97 76,44 77,38 77,22 VOTOS BLANCOS: 1,57% VOTOS NULOS: 1,01% CENSO: 34.563.545 2004 (2000) 70,94 CiU 10 PP 69,74 68,04 68,71 148 (183) PSOE 164 (15) ERC 8 (1) PNV 7 (7) IU 5 (9) (4) (3) (1) (1) (0) (125) CC 3 1977 79 82 86 89 93 96 BNG 2 00 2004 CAMILO VALDECANTOS, Madrid La participación en las elecciones —a la 1.30 de hoy, con un 99,98% del voto escrutado—, fue del 77,21%, frente al 68,71%, de 2000, es decir, 8,50 puntos más que hace cuatro años. Este es uno de los datos fundamentales para explicar la victoria socialista, ya que entonces los análisis de voto dieron por seguro que una gran parte de la abstención correspondía a electores de izquierda. Los votos en blanco sumaron ayer 406.759, que representan el 1,57%, idéntico porcentaje al de hace cuatro años. La participación ciudadana en las elecciones generales celebradas ayer se disparó respecto de las del año 2000. Desde las dos y media de la tarde, los datos provisionales ofrecidos por el Gobierno anunciaban un gran aumento de la afluencia a las urnas. De las nueve elecciones generales celebradas en España desde 1977, la participación más alta se registró en 1982, con un 79,97%. En aquella ocasión, el PSOE ganó con una mayoría absoluta, nunca repetida ni por socialistas ni por populares, con 202 escaños de los 350 que conforman el Congreso. La participación más baja se registró en la segunda convocatoria, la de 1979, cuando acudió hasta las urnas el 68,04% de los censados. Fue en algunas de las comunidades autónomas en las que se registró mayor aumento en el porcentaje de voto donde se fraguó la victoria del PSOE y el PP resultó duramente castigado. A la cabeza de todas ellas, Cataluña, donde con 12,97 puntos más de participación ciudadana, el PP pasó de 12 escaños en 2000 a seis en estos comicios. La mitad de sus diputados se evaporó en las urnas. Andalucía es otra de las comunidades donde los resultados de las elecciones generales ofrecen efectos devastadores para los populares. Mientras en 2000 el PSOE se impuso, pero sólo por dos diputados (30 frente a 28 en el conjunto de las ocho provincias), en esta ocasión el vuelco ha supuesto que los socialistas se hagan con 38 escaños, frente a 23 del PP, lo que representa 15 de ventaja en el ámbito andaluz. Galicia, un feudo tradicional y seguro del PP, ofrece también EA 1 Chunta A. 1 350 diputados Na-Bai 1 RESULTADOS PROVISIONALES 2004 ESCRUTADO: 99,90% Escaños PSOE PP CiU ERC EAJ-PNV IU CC BNG CHA EA Na-Bai Votos 164 10.900.444 148 9.621.701 10 829.046 8 649.999 7 417.154 5 1.268.912 3 219.237 2 205.613 1 93.865 1 80.613 Partido Socialista Obrero Español Partido Popular Convergéncia i Unió Esquerra Republicana de Catalunya Partido Nacionalista Vasco Izquierda Unida Coalición Canaria Bloque Nacionalista Gallego Chunta Aragonesista Eusko Alkartasuna 1 Coalición Nacionalista de Navarra 60.645 2000 % Escaños Votos 42,64 37,64 3,24 2,54 1,63 4,96 0,86 0,8 0,37 0,32 125 183 15 1 7 9 4 3 1 1 7.918.752 10.321.178 970.421 194.715 353.953 1.382.333 248.261 306.268 75.356 100.742 34,16 44,52 4,19 0,84 1,53 5,96 1,07 1,32 0,33 0,43 % 0,24 - - - EVOLUCIÓN DEL MAPA ELECTORAL Resultados por número de votos obtenido PSOE PP Otros 2004 PNV PNV CiU 2000 PNV PNV CiU CiU un resultado digno de atención. El PP es la fuerza más votada en esta comunidad, con 812.212 votos, frente a 653.597 del PSOE, pero los populares pierden cuatro escaños que gana el PSOE. En el cómputo general, supone ocho escaños de diferencia a favor del partido que lidera Rodríguez Zapatero. El País Vasco marca también otra zona de castigo para las huestes de Mariano Rajoy. Mientras en 2000 los populares fueron la segunda fuerza, con 323.235 votos, ahora han pasado a ser la tercera, con 232.577, y se ven sobrepasados por el PSOE, que ayer sumó en las tres provincias vascas 336.958 votos. Esos da- tos, traducidos en escaños, han supuesto que el PP pase de siete a cuatro y que el PSOE consiga exactamente el resultado contrario, saltar de cuatro a siete. Se depositaron en las urnas algo más de 400.000 votos en blanco, el 1,57% La Comunidad Valenciana ofrece también dos diputados más a los socialistas y le resta otros tantos a los populares. En Madrid el PP viene gana- do en votos desde las elecciones generales de 1993. Ayer repitió la victoria, aunque de modo muy ajustado, 1.559.082 votos frente a 1.530.498 de los socialistas, es decir, 29.584 de diferencia. Sin embargo, son suficientes para que los candidatos de la lista que encabezaba Rajoy perdieran dos escaños y el PSOE, en cambio, ganara cuatro, lo que supone que la capital de España desequilibra la balanza en seis diputados a favor del PSOE. Aquí, además, IU se deja un diputado, aunque la fosa parlamentaria se haya abierto con profundidad en Andalucía, donde pierde los tres diputados que consiguió hace cuatro años.