GESTIÓN INMOBILIARIA La gestión inmobiliaria en épocas de incertidumbre Aplicación al desarrollo de proyectos inmobiliarios Autor: MONEO ABREU, Rafael. Director de Germaconsulting. (rafaelmoneo@yahoo.de) Título: La gestión inmobiliaria en épocas de incertidumbre. Fuente: Directivos Construcción nº 170 pág. 38. Septiembre 2004. Resumen: El éxito de una promoción pasa, entre otras cosas, porque el promotor estudie el ciclo inmobiliario y se familiarice con los factores que puedan influir en éste. Una de las cosas que debe considerar son estrategias de inversión anticíclica en caso de proyectos de calidad, cierto margen financiero y la seguridad de poder optimizar el coste del proceso constructivo. Factores clave del éxito de una inversión de este tipo son proyectos flexibles y excelentes localizaciones. La inversión anticíclica está generalmente más restringida al promotor que podemos considerar como “habitual”, que tiene dificultades para aprovisionarse de fondos en las situaciones de mayor incertidumbre, no dispone de la flexibilidad necesaria y está sumido en la psicología habitual del mercado. Descriptores: Promociones inmobiliarias/ Inversión/Gestión. Directivos Construcción • 38 El desarrollo de promociones inmobiliarias es una de las actividades que generan un mayor riesgo. Saber invertir en ellas y saber hacerlo en el momento adecuado son dos claves fundamentales a la hora de hacer que esa inversión sea rentable y se eliminen lo más posible la incertidumbre del riesgo. Pocas actividades dentro del sector tienen un nivel tan alto de riesgo como el desarrollo de promociones inmobiliarias. Esta actividad es la encargada de combinar la elección de un emplazamiento, una idea de proyecto, una concepción de uso, una asignación de recursos y finalmente debe encontrar un usuario. Este proceso, a su vez, debe ofrecer una rentabilidad mediante la adecuada gestión del mismo y cumplir con una serie de estándares y requisitos económicos, sociales, medioambientales y urbanísticos La palabra aquí definida como desarrollo de proyectos puede tener distintas interpretaciones, entendidas como tales las diversas fases en las que se puede dividir la vida útil de un edificio. Una definición limitada com- prendería la fase de concepción y realización del inmueble, para la puesta a disposición de un tercero. Una noción más amplia podría llegar a la gestión y utilización posterior, concebir futuras reconversiones, e incluso su demolición final. La gestión del riesgo de cada promotor y la concentración en su rama de actividad principal nos dará el alcance final de su intervención (Gráfico 1). El tipo m ás h abitual d e p romotor es aquel que realiza un proyecto, desde su concepción inicial hasta su realización final, que culmina con la enajenación del mismo al usuario o inversor final. Característica básica de este proceso es la asunción total del riesgo de gestión del mismo, por lo que su propensión al ciclo es enorme. La duración de su actividad se estima en Nº 170 • Septiembre de 2004 un intervalo de dos a cuatro años en función de la complejidad de gestión del mismo. La comercialización posterior suele ser encargada a un tercero. Otra figura es la del promotor patrimonialista, que construye, desarrolla y procede a gestionar el edificio tras su consecución. Su riesgo es sensiblemente menor, tiene un horizonte temporal de 10 a 30 años, por lo que su exposición al ciclo queda compensada con la duración de la inversión. Una figura cada vez más frecuente es la del mero gestor de la promoción. Su actividad consiste en la gestión o concepción del proyecto. Su riesgo es mucho menor, es un simple prestador de servicios, aunque ciertamente el fracaso en la comercialización del mismo puede mermar sustancialmente su honorario final. En general suele ser un contratista de inversores que mantienen el edificio en cartera, como pueden ser los institucionales o gestoras de inversión a largo plazo. POLÍTICA ANTICÍCLICA DE PROYECTOS Nº 170 • Septiembre de 2004 ANTICÍCLICA La primera consecuencia de una buena inversión anticíclica es obtener una mayor rentabilidad. Situación ideal es la salida de un proyecto al mercado en el momento en que comience a aumentar la demanda, a la que acompañará una considerable subida de la renta por unidad de superficie. Es evidente que se obtiene con ello un excelente posicionamiento en el mercado. Si a ello unimos un suelo más barato, un bajo coste de construcción por haber elegido el “timing” adecuado, en el que las constructoras, al no poder detener su actividad ordinaria, ofrecen mejores condi- Fases del desarrollo-promoción de proyectos Proceso de desarrollo del proyecto Inicio Concepción Concreción Gestión Facilities Management Especialmente importante es la elección del momento adecuado de la inversión, la sincronización lo más per- LIMITACIONES Y OPORTUNIDADES EN LA PROMOCIÓN E INVERSIÓN Estrategia El alto perfil de riesgo de este tipo de actividad se acentúa evidentemente con la existencia del ciclo inmobiliario. Las inversiones anticíclicas tienen una primera dificultad: la determinación del estado del ciclo actual. No olvidemos que los ciclos son recurrentes, pero lo difícil es medir la amplitud de tal recurrencia y la llegada de nuevas tendencias de mercado, cuyos indicadores pueden no ser lo precisos que se esperan o contener amplias contradicciones, especialmente en el análisis de los distintos submercados. No hay método fiable que pueda determinar en qué posición estamos. fecta p osible (la denominación anglosajona conocida como el “timing”), que no es nada fácil de aventurar. Un mismo proyecto un año antes o después puede pasar de éxito rotundo a fracaso absoluto. Lo importante será analizar si esta estrategia de implantación es posible y qué tipo de promotores son los más indicados para llevarla a cabo. También es importante estudiar estrategias alternativas para la promoción inmobiliaria en momentos de alta incertidumbre; concretamente, cómo las empresas de tal sector pueden posicionarse para aminorar los fuertes efectos del ciclo inmobiliario. Promoción DP en sentido concreto DP en sentido amplio Gráfico 1 www.directivosconstruccion.es 39 • Directivos Construcción generalmente en grandes proyectos comerciales, es esencial la introducción a tiempo de un sistema integrado facility management, para mejorar el ciclo de vida del inmueble, su flexibilidad para usos posteriores y optimizar sus gastos de gestión y funcionamiento. No obstante existen notables riesgos en estrategias que van al margen del mercado. No olvidemos que un promotor profesional debe continuar su negocio también en momentos recesivos. Y hay un tercer factor: la financiación. Hemos señalado anteriormente la inherente tendencia procíclica de los bancos en su política de concesión de créditos. Paradójicamente, en fases alcistas obtienen financiación proyectos deficientemente concebidos, mientras que otros muchos y más aptos, quedan suspendidos en fases más recesivas por falta de medios. Para una correcta implementación de una estrategia anticíclica son necesarias una serie de condiciones: • Riguroso análisis de situación que comprenda un detalladísimo estudio de las condiciones de emplazamiento y mercado. • Comienzo anticipado de la comercialización del inmueble. La situación ideal es la salida de un proyecto al mercado en el momento en que comienza a aumentar la demanda. ciones. Tales circunstancias optimizan la rentabilidad obtenida. Invertir de forma anticílica puede además tener excelentes efectos si el edificio, en previsión de la incierta salida al mercado, se ha diseñado de forma que permita una posterior flexibilidad de usos. Para promotores, Directivos Construcción • 40 • Establecimiento de alianzas con otros promotores o gestores finales del inmueble para una mejor limitación del riesgo. • Desarrollo de sofisticados modelos de cálculo que no se limiten a realizar proyecciones, sino cambios de escenario e introducción de variables que influyan en el ciclo inmobiliario. Considerar preferentemente factores lo más cuantificables y objetivos posibles, para evitar precisamente intentar imitar o “dejarse llevar” por el éxito de otros proyectos, al haber salido al mercado en otra fase distinta del ciclo. Nº 170 • Septiembre de 2004 • Evitar en lo posible la dependencia de la financiación ajena. Alternativa de financiación interesante es el llamado “Private Equity”. Veremos más detalladamente la política de algunos fondos de inversión de carácter más especulativo como ejemplo de este tipo de actuación. • Extrema precaución con los habituales y a veces imprevisibles retardos temporales en cuanto a todos los posibles permisos y aprobaciones del proyecto. Una estrategia competitiva interesante sería intentar disociar la fase de preparación y concepción de un proyecto, incluida la concesión de todos sus permisos, de la fase de realización. Con tal actuación se evita el riesgo de posibles bloqueos administrativos reduciendo los tiempos totales, lo que ayudaría a reducir el riesgo temporal del proyecto. Es evidente que tal estrategia genera un coste real de adquisición de la parcela y gastos asociados al proyecto, costes de alta cuantía, en general en torno al 20 por ciento del volumen total. Tal estrategia obligaría al promotor a realizar un cálculo de los costes de oportunidad de tal actuación. En principio sería beneficioso el hecho de utilizar personal fijo, que en épocas de baja actividad tiende a estar más ocioso. También habría que considerar tal coste en cuanto a la compra de parcelas, o el generado por opciones de compra de las mismas en caso de una posterior no realización. Tales costes serán más altos cuanto más se demore el comienzo del proyecto; es decir hasta la percepción de una mayor demanda de superficie. Este tipo de estrategia se optimiza cuando se consigue ser el primer ofertante en momentos de mayor demanda, con el efecto adicional de mantener una situación provisional de cierto dominio de mercado, hasta que los posibles competidores consiguen las aprobaciones necesarias para la consecución de proyectos similares. Nº 170 • Septiembre de 2004 UN EJEMPLO DE INVERSIÓN ANTICÍCLICA: LOS FONDOS DE OPORTUNIDAD La estrategia fundamental de este tipo de inversión consiste en diseñar estrategias de entrada y salida en la compra de inmuebles, un proyecto de promoción o un portfolio completo, en las cuales el precio de adquisición esté por debajo del de mercado, para poder revenderlo, con o sin remodelación posterior, a un precio superior cuando cambien las condiciones del mismo. Los momentos de alzas del mercado son aprovechados como “oportunidad” de entrada, apoyados en la letargo general del resto de in- La estrategia fundamental de los fondos de oportunidad es diseñar estrategias de entrada y salida en la compra de inmuebles, en las que el precio de adquisición esté por debajo del de mercado. www.directivosconstruccion.es 41 • Directivos Construcción versores o promotores, que se dejan llevar por la falta de actividad y del mal ambiente reinante. La entrada y salida posterior en el ya definido el “timing” correcto es de gran importancia. Premisa fundamental para este tipo de actuación es la solidez financiera. Tal capacidad de compra se constituye mediante fondos que, según el nivel de riesgo aceptable, contienen una ponderación entre capital ajeno (fuerte apalancamiento) y capital propio (Private Equity). Se entiende como tal a la parte de capital propio destinada a proyectos de inversión o financiación inmobiliaria a corto o medio plazo, realizada frecuentemente por inversores institucionales ingleses y americanos, entre los que se encuentran bancos de inversión, fondos e inversores directos. Regla general es la permanencia en el mismo en un plazo de dos a siete años, sirviendo como medida de la inversión, la tasa interna de rentabilidad sobre el capi- tal propio. Se supone asimismo una calificación excepcional en el proceso de estudio y gestión de la inversión. El volumen característico oscila por término medio entre 25 y 50 millones de euros, al cual se le aplica el precepto clásico de un inversor de carácter más especulativo: a menor permanencia en la inversión mayor tasa de rentabilidad exigida. Las mayores tasas, en torno al 25 por ciento, son aquellas que presentan los llamados fondos de oportunidad, cuyos gestores canalizan aportaciones de inversores con clara avidez al riesgo. La ganancia del gestor suele radicar en sobrepasar ciertos umbrales de rentabilidad, las llamadas “hurdles”. Estas inversiones se caracterizan por una duración máxima de tres años y una parte porcentual importante cubierta con fondos ajenos. La segunda c ategoría está compuesta por los llamados inversores principales, que asumen parte del riesgo. Bajo esta clasificación se en- La existencia de submercados hace que no todos los tipos de inmuebles tengan por qué seguir un ciclo determinado. Directivos Construcción • 42 cuentran bancos de inversión, compañías de seguros, o empresas de carácter inmobiliario. La rentabilidad oscila en un entorno del 20 por ciento, el plazo de permanencia de tres a cinco años y parte de capital ajeno en torno al 70 o el 80 por ciento de la inversión. Se tiende a invertir en inmuebles con cierta capacidad de revalorización, como puedan ser edificios en mal estado o una cartera completa con rentas altamente fluctuantes. Y finalmente los más conservadores que esperan tasas de rentabilidad del 12 al 15 por ciento, compuestos por fondos de pensiones o inversores más contrarios al riesgo. La financiación ajena se acerca al 60 por ciento y se buscan inmuebles con menor riesgo que en los casos anteriores, aunque capaces de ofrecer una mayor rentabilidad a la habitual. El plazo de la inversión es el máximo de la categoría, en torno a siete años. En esta filosofía de actuación se prefiere invertir en inmuebles con capacidad de revalorización, anticiparse en la elección de mercados emergentes y no mantener el edificio en cartera un periodo demasiado largo de tiempo. Un objetivo interesante es adquirir inmuebles de empresas que precisan hacer un fuerte saneamiento de sus balances. También la adquisición de una cartera de créditos bancarios en inmuebles que han sufrido fuertes correcciones en su valoración o aquellos con alto nivel de riesgo por haber sufrido una considerable pérdida de inquilinos. Una alternativa interesante es la compra de inmuebles en poder de organismos públicos, como cooperativas de viviendas con fuerte endeudamiento. Situación que se da actualmente en Berlín, donde numerosos fondos americanos se están posicionando en la compra a bajo precio de enormes conjuntos residenciales. Y también la posibili- Nº 170 • Septiembre de 2004 dad de adquirir inmuebles en rentabilidad, pero con reserva adicional de suelo que pueda permitir, de forma mucho más especulativa, una promoción posterior. Observemos sin embargo lo distinta que es esta filosofía de inversión de la de los fondos abiertos, que operan básicamente con capital propio (aportaciones de sus partícipes) y en inmuebles con bajo nivel de riesgo. La transparencia existente en el abierto en su política de inversión contrasta con la opacidad de este tipo de producto. Los fondos de oportunidad podrían posicionarse también en inmuebles en zonas técnicamente “buenas y atractivas”, con inquilinos solventes, pero tenderán a evitar aquellas consideradas como “las mejores” (clásicas “prime”), para tratar de no competir directamente con los abiertos y no pagar el alto precio que este tipo de inmuebles exige. La expansión inmobiliaria a nivel internacional ha contribuido al enorme desarrollo de este tipo de productos. En general para aplicar esta estrategia fuera de las fronteras propias, los inversores extranjeros buscan el acompañamiento de un socio local con el que comparten riesgo y rentabilidad. Y tienden a aplicar modelos de participación conjunta entre inversor y socio, que dependerán del resultado final de la inversión, asegurándose el inversor una parte inicial de la rentabilidad obtenida. En el Cuadro 1 vemos la parte estimada de capital propio destinada a inversiones extranjeras de este tipo de fondos, con un importe final de 14 millardos de dólares: La parte de capital propio de las inversiones actuales en EEUU, aproximadamente el cuatro por ciento del PIB, es mucho más alto que en Europa, donde la pionera de este tipo de estrategia es Inglaterra con el 0,9 por ciento. Países como Alemania alcanzan una cifra cercana al 0,2 por ciento. Nº 170 • Septiembre de 2004 ESTRATEGIAS ALTERNATIVAS DE EMPRESAS PROMOTORAS EN ÉPOCAS DE INCERTIDUMBRE La implementación de este tipo de estrategias debe estar en concordancia con la estrategia general, gestión y tipo de posicionamiento de la empresa correspondiente. Por ello las líneas de actuación que aquí ofrecemos se deben aplicar como base de razonamiento y posible apertura de nuevas líneas de actuación. También como una alternativa a considerar para poder seguir siendo operativos y competir más activamente en épocas de incertidumbre. Como factor central de actividad de las promociones está su fortísima componente cíclica, por lo que cualquier estrategia de actuación debe reducir por norma general este tipo de implicación. Lo interesante es intentar desligarse en la medida de lo posible de la influencia del ciclo inmobiliario. Metódicamente se desarrolla un modelo basado en una matriz con referencia al mercado y al tipo de producto. Se proponen cuatro estrate- Fondos de oportunidad en millardos de dólares. Capital destinado a inversiones en Europa, año 2000 SOCIEDAD GESTORA Whitehall Fung, GS MSREF, Morgan Stanley Peabody Global JP Morgan Chase CSFB/DLI Private Equity Soros Int Real Estate Partners Blackstone RE Lehman Brothers Apollo RE GE Capital RE Orion Capital Detusche Bank RE PE Prioca Jer Dougty Hanson Carlyle Otros Total Fuente: Jones Lang Lasalle www.directivosconstruccion.es CAPITAL PROPIO 2,20 2,10 0,83 1,20 1,00 0,60 1,20 1,00 – 0,30 – 0,45 0,40 0,55 0,50 1,50 13,83 Cuadro 1 43 • Directivos Construcción gias alternativas: penetración en el mercado, desarrollo de nuevos mercados, desarrollo de nuevos productos y diversificación (Cuadro 2). 1. Estrategia de penetración: Supone la concentración en la misma variedad de proyectos que se han venido desarrollando hasta el momento. El objetivo es ampliar cuota de mercado a costa de la competencia. Suele ser implementado en mercados con cierta saturación como pueda ser el mercado de grades superficies comerciales en ciudades importantes, situación que vive en la actualidad Berlín. El aumento de cuota tenderá a reforzar su posición competitiva frente a arrendatarios, inversores, bancos, y demás participantes en el proceso. 2. Apertura de nuevos mercados. Esta estrategia consiste en ofrecer los productos existentes en nuevos mercados. Será solamente válida como minimizadora del riesgo del ciclo cuando dichos mercados tengan un proceso de desarrollo y una dinámica distinta al de origen. Tal estrategia debe comenzar con un salto a nivel regional. Decisivo para el éxito de la misma será si la promotora en expansión es capaz de generar ventajas competitivas frente a los ya asentados competidores locales. No olvidemos que la estrategia de pene- Cuadro general: planteamiento estratégico MERCADO EXISTENTE PRODUCTO NUEVO EXISTENTE NUEVO Penetración de mercado Desarrollo de nuevos mercados Desarrollo de nuevos productos Diversificación Cuadro 2 Directivos Construcción • 44 tración en nuevos mercados está ligada al alto riesgo del componente local que implica la actividad inmobiliaria. Se requerirá en este caso disponer de ventajas adicionales, como las derivadas de un importante knowhow del producto, mejores alternativas de financiación, o la existencia previa de usuarios e inversores para los inmuebles en proyecto. Un eslabón posterior en la cadena estratégica de dicho fenómeno es la posterior internacionalización. A ello contribuye la estandarización cada vez mayor de determinados inmuebles, como oficinas, centros comerciales y hoteles, que empiezan a ser fuertemente demandados en países de economías incipientes. Receptores clásicos han sido los países del este de Europa, muchos de ellos hoy incorporados a la CE. Ejemplo interesante es también la entrada de inversores extranjeros, fondos americanos, en mercados duramente castigados como el alemán, que ofrece precios enormemente atractivos e impensables en comparación con inmuebles similares en sus países de origen. Indispensable para este tipo de actuaciones se antoja el establecimiento de alianzas estratégicas o “joint ventures” con socios locales que cooperen en el desarrollo del la fuerte componente local del negocio inmobiliario y contribuyan a una ponderada asunción de riesgos. A este respecto deberemos tener en cuenta las nuevas tendencias, riesgos y oportunidades que ofrece la globalización y su connotación particular en el sector inmobiliario. Dentro de las distintas actividades del sector inmobiliario hay que distinguir qué grado de globalidad tiene cada una de ellas. La promoción, al girar tanto en torno a la materia prima suelo, requiere un conocimiento local profundo, tanto en su fase de adquisición como en el seguimiento de la compleja normativa que sigue a su desarrollo. Nº 170 • Septiembre de 2004 • Es precisamente la inversión la actividad más globalizable, y ello ha contribuido a la presencia cada vez más importante de gestores globales como los fondos de inversión abiertos, con criterios de rentabilidad y gestión prácticamente estandarizados en todos los países. Nuevas técnicas de gestión aplicadas (portflio management) orientadas a la rentabilidad a largo plazo y a la gestión activa del inmueble han facilitado enormemente esta actividad. • El sector residencial, se caracteriza por un componente local más alto, donde imperan las costumbres y gustos autóctonos de la población. Sin embargo se exportan cada vez más fórmulas concretas de desarrollo urbano, como ha sido la forma anglosajona tradicional del chalet adosado o el esponjamiento de las superficies edificadas en los hogares. Las actuales grandes promociones de viviendas en China, las más lujosas, imitan en lo básico la forma de vida de la civilización occidental. • El mercado de oficinas tiende claramente a la estandarización. Los usuarios tienen cada vez más necesidades comunes, y las telecomunicaciones han tenido una influencia vital a la hora de determinar el equipamiento de las superficies de trabajo. El usuario marca la pauta, se ha profesionalizado el sector y las características del producto. • El mayor grado de estandarización lo experimentan las nuevas superficies comerciales. Pese a las diferencias de gustos, consumos y costumbres existen enormes analogías en el comportamiento de compra de los consumidores, especialmente en el mundo occidental. La comunicación y las campañas de marketing a nivel global han sido un factor predominante. • Finalmente las grandes cadenas de hostelería, debido a la concentración del sector hotelero, especialmente Nº 170 • Septiembre de 2004 El tipo más habitual de promotor es el que realiza un proyecto, desde su concepción inicial hasta su realización final. en los segmentos más altos, que deben ofrecer al usuario condiciones estándar con independencia del país o la zona geográfica. Análogo desarrollo experimentan los parques de ocio, temáticos, donde la presencia de gustos locales incidiría en detalles concretos, pero la pauta general estará dirigida por tendencias basadas en nuevas tecnologías ya mundialmente aceptadas. Los riesgos de tal estrategia son los derivados de las importantes barreras que implica el fenómeno de internacionalizar el negocio inmobiliario: la seguridad jurídica es la primera referencia de un inversor, especialmente en países emergentes. • Proceso largo en el negocio tradicional desde la compra de un suelo hasta su venta final. Las condiciones previstas pueden ser alteradas, factor que puede entorpecer enormemente el proceso. • Intervención de las Administraciones Públicas. La legislación suele ser en este campo de cierta complejidad, con competencias no definidas cla- www.directivosconstruccion.es ramente por la estructura nacional, regional y municipal de los países. • Normativas distintas dependiendo de cada país. Se refleja en normas urbanísticas, civiles (arrendamiento), uso de materiales de construcción, de edificación, etc. • Idiosincrasia particular de ciertos países que tienden a ver la inversión extranjera como una usurpación en la capacidad de decisión de su territorio. Véase por ejemplo las restricciones a las inversiones en el mercado de suelo y de la vivienda en ciertos países del este europeo, normas que con su ingreso en la CE tenderán a desaparecer. • Finalmente, la falta general de transparencia en el mercado inmobiliario, en especial en aquellos estratos menos internacionalizables, donde el conocimiento local para detectar ofertas interesantes es decisivo para el éxito de una inversión. 3. Desarrollo de nuevos productos. La ya explicada existencia de los llamados submercados hace que no to- 45 • Directivos Construcción dos los tipos de inmuebles tengan por qué seguir un ciclo determinado. Por ello puede resultar interesante, no sólo limitarse a una estrategia de ampliar mercado, sino concentrarse en nuevos productos que puedan aminorar la incidencia del ciclo. Este tipo de estrategia será adecuada para empresas con un fuerte posicionamiento zonal e importante implantación local, donde hayan alcanzado una ventaja competitiva en su ámbito de actuación. Básicamente parece lógico pensar en el efecto sinérgico existente en la promoción de distintos productos, por la existencia de un sinfín de actividades que pueden considerarse similares, o donde el know how de las mismas sea fácilmente transmisible. Tradicionalmente parece adecuado pensar que un promotor de oficinas pueda dedicarse a un sector menos cíclico como la vivienda. Esta estrategia puede no estar exenta de riesgos, básicamente al no ser especialistas en el producto a desarrollar. No conviene infraponderar las fuertes diferencias existentes que pueden aparecer al intentar promocionar nuevos tipos de inmuebles con un mayor grado de sofisticación, como son los grandes centros comerciales. Y no olvidemos, que a la dificultad general de determinar la sincronización perfecta del ciclo general, se une la adicional subyacente e inherente de cada uno de los submercados. Porque es muy frecuente que una situación recesiva afecte a todo el sector en general, siendo extremadamente difícil determinar las diferencias temporales de cada uno de los subciclos. El ajuste temporal lo más preciso posible en este tipo de actuaciones puede resultar fundamental. 4. Diversificación. En principio diversificar parece ser la mejor estrategia, la que más elimina el riesgo del factor ciclo. Alternativa intere- Directivos Construcción • 46 sante para un promotor en el sentido estricto es su conversión y adaptación en fases recesivas como consultor y prestador de servicios, en aquellos campos y técnicas que mejor domina. rios, que en épocas recesivas del sector prevean un fuerte retroceso de su actividad, deberán desarrollar modelos empresariales que aminoren los efectos del fuerte impacto que genera el ciclo. Y especialmente útil puede ser si el inversor o usuario pretende desarrollar un proyecto y carece del know– how necesario para el mismo. La liquidez a escala mundial es enorme y siempre hay capital dispuesto a participar en buenos proyectos que ofrezcan garantías de funcionamiento. Clientes importantes de esta nueva esfera de actividad pueden ser inversores privados, o institucionales, como fondos de pensiones o aseguradoras, que tienen importantes portfolios en cartera. La experiencia del promotor puede aportar una reducción en el coste del proyecto de construcción o una mejora en la gestión de los intervalos temporales. El riesgo existe en la medida que tal reconversión como prestador de servicios supone una revisión completa del modelo de negocio hasta ahora desarrollado. Y no olvidemos señalar quiénes son más proclives a la realización de proyectos en épocas recesivas. Hay dos perfiles básicos de actuación: Sobre formas de diversificación y desarrollo de estrategias de diversificación vertical y horizontal se podría aportar información adicional, que creemos rebasa ampliamente el desarrollo de este estudio. CONCLUSIONES El promotor actual debe estudiar minuciosamente el ciclo inmobiliario y familiarizarse con los factores que puedan influir en éste. Por la dificultad de su pronóstico, debe considerar solamente estrategias de inversión anticíclica en caso de proyectos de calidad, cierto margen financiero y la seguridad de poder optimizar el coste del proceso constructivo. Factores clave de éxito de una inversión de este tipo son proyectos flexibles y excelentes localizaciones. Los promotores inmobilia- • El promotor inversor que pretende reaccionar rápidamente a cambios de mercado y busca nuevas oportunidades en mercados emergentes. Condición necesaria es una fuerte solidez financiera, alta capacidad de negociación con socios locales y un excelente conocimiento de su actividad. Típico de tal comportamiento son los fondos de oportunidad. • Grandes sociedades de inversión colectiva o importantes empresas inmobiliarias patrimonialistas, cuya inversión tenga un alto horizonte temporal, que les permita pagar sobreprecios por inmuebles o promocionar proyectos, susceptibles de corregir su valor en posteriores periodos recesivos. También podrían entrar en operaciones para aumentar su reserva de suelo. Requisito imprescindible, una gran solidez financiera y el largo plazo en la inversión. La inversión anticíclica estará generalmente más restringida al promotor que podemos considerar como “habitual”, que tiene dificultades para aprovisionarse de fondos en las situaciones de mayor incertidumbre, no dispone de la flexibilidad necesaria y está sumido en la psicología habitual del mercado. !!! Nº 170 • Septiembre de 2004