100 MOTIVOS PARA IR AL ODONTÓLOGO 28 PARA TRATAR LAS CÁRIES La carie es una destrucción de los tejidos dentales, por desintegración provocada, en la mayor parte de las veces por bacterias que forman una película de consistencia gelatinosa y que, por ser pegajosa, se adhieren a la superficie de los dientes formando la placa dental, que por su origen, hoy es más conocida como placa bacteriana. Por mala higiene bucal, forma o descomposición de los dientes, dieta alimentaria, raza o factores hereditarios, pueden presentarse más en la infancia, adolescencia o inicio de la fase adulta. La carie se inicia por el esmalte de los dientes. En algunos casos es identificada por una mancha blanca opaca, en otros no se la puede percibir por encontrarse localizada en saliencias o concavidades o todavía en áreas de poco contacto con los dientes. La carie se propaga por la dentina, que es la parte interna de los dientes y si no es tratada, alcanza los canales de los dientes. Estos al ser atacados por la bacteria inician una degeneración celular, que es el principio del fin del diente, como elemento principal de la masticación. Su tratamiento, en primer instancia, debe ser preventivo; a través de una cuidadosa higiene bucal después de las comidas y antes de dormir. Esta debe incluir el cepillado convencional, limpieza de la parte sub-gingival con hilo y cinta dental, además de recursos propios para la edad de mayor riesgo, tales como selladores, aplicaciones tópicas de flúor y otros cuidados especiales para cada caso. Los cuidados especiales serán indicados por su Odontólogo como por ejemplo: cepillos unitufos, cepillos interdentales o antisépticos bucales. Uno de estos métodos será siempre más barato y rápido que los largos tratamientos dentales, motivados por caries y perdida de los dientes. Su no-realización puede provocar la carie, que se trata removiendo la parte cariada del diente y su posterior restauración, que además de reconstruir la forma anatómica y estética del diente, tiene como finalidad inhibir la continuidad de la carie, por la aplicación de materiales que evitarán el progreso del proceso carioso. Tratar caries en la primer etapa de su iniciación, es la manera económica de no gastar más en la continuidad del proceso, además de lo que se evita. Así no serán necesarios procedimientos dolorosos, como los tratamientos de conducto y de encías. Las restauraciones pequeñas, identificadas tempranamente cuando alcanzan sólo el esmalte de los dientes, pueden en su mayoría, realizarse sin anestesia, por localizarse sólo en la parte mineral del diente, sin implicaciones sensoriales. Cuando son más importantes, además de requerir un forraje para la protección de la pulpa, envuelve preparaciones con la finalidad de sujetar el material restaurador, que será utilizado para obturar el diente. Tratándose de casos avanzados es necesario la confección mecánica de la propia restauración y de la parte remanente del propio diente, que por mayores remociones del tejido con carie, se tornan más frágiles y con eso el riesgo de fracturas en la masticación es más probable, si los arreglos no se hacen de forma adecuada. No confíe en su intuición odontológica sin haber estudiado para tal profesión, intentando descubrir si tiene caries o no. Visite su Odontólogo de seis en seis meses. En la mayor parte de las visitas sabrá que no tiene nada para hacerse. Y si llegara a tener algo con seguridad será algo sencillo y que implicará poco gasto. De esta forma no sentirá dolor físico en el tratamiento, ni dolor en el bolsillo por no haberse tratado antes. Tratar caries es uno de los tratamientos más rápidos y seguros de la Odontología, principalmente en su fase inicial y todos los Odontólogos están aptos para realizarlo sin la necesidad de especialistas. Para las revisiones periódicas, busque siempre su Odontólogo, que a causa de conocerlo y por tener su ficha de su pasado odontológico, sabrá buscar los problemas en los lugares correctos, algunos ya son conocidos por tratarse del origen de problemas anteriores. Los que hagan un programa de mantención y control con su Odontólogo tendrán como premio no necesitar jamás de grandes tratamientos. Antônio Inácio Ribeiro