OBLIGACIONES 393 • Si la confusión se opera entre el acreedor y deudor principal, los fiadores son liberados. Pero si hay confusión entre fiador y acreedor, el deudor principal y los demás fiadores quedan obligados: el acreedor pierde solamente una de las garantías de su crédito. • Si la confusión se produce entre el acreedor y uno de los deudores correales, crea solamente para el acreedor una imposibilidad de hacerse pagar por este deudor. f) El mutuo disentimiento. El mutuo disentimiento es uno de los medios extintivos de las obligaciones, pero solamente de aquellas obligaciones de contratos consensuales. Si para la creación del contrato solo se requería el mutuo consentimiento de las partes, para extinguirlo se requería también solamente el consentimiento encaminado a su terminación. El mutuo disentimiento obra de pleno derecho y de una manera absoluta. Pero este efecto extintivo sólo se produce con una condición: que el mutuo disentimiento intervenga, omnibus integris, antes de toda ejecución, de manera que extinga simultáneamente todas las obligaciones nacidas del contrato. Los contratos consensuales son sinalagmáticos, la voluntad de las partes crea obligaciones por ambos lados; el disentimiento debe producir el resultado inverso y llevar una doble liberación. Sin embargo, cuando una de las partes había ejecutado ya su obligación, se admitió que el mutuo disentimiento podía aun producir su efecto, si las cosas eran previamente restablecidas a su estado primitivo. Así, cuando se trata de una venta, si el vendedor ha entregado ya la cosa puede aún ser disuelto el contrato, por mutuo disentimiento, si el comprador restituye la cosa vendida. e) La pérdida de la cosa debida. En principio una obligación no puede existir sin objeto. Si el objeto perecía, la obligación no se podía cumplir tal como se había pactado.