A. Langle, Ed. Sues-Gasse 10, 1150 Viena (2012) alfried.laengle@existenzanalyse.org Histeria Comprensión y terapia de la Histeria (y de trastornos de personalidad) Indice 1. El tema existencial fundamental de la histeria ............................................................................... 2 2. Nombre e historia ........................................................................................................................... 2 3. Descripción ...................................................................................................................................... 4 4. Líneas del cuadro histérico .............................................................................................................. 5 5. Tendencias histéricas en la persona sana ....................................................................................... 6 6. Diagnóstico y clasificación clínica .................................................................................................... 7 6.1. Reacción histérica..................................................................................................................... 7 6.2 Neurosis histérica ...................................................................................................................... 7 6.3 Trastorno de personalidad histriónico .................................................................................... 10 7. Vistazo a la auto-experiencia ........................................................................................................ 11 8. Etiología de la histeria ................................................................................................................... 14 8.1 Psicodinámica de la patogénesis............................................................................................. 14 8.2 Psicopatogénesis de la histeria a nivel existencial .................................................................. 17 9. Terapia........................................................................................................................................... 19 9.1 psicoterapia de la histeria ....................................................................................................... 19 9.2 Preguntas específicas .............................................................................................................. 22 Abstract: La formación del propio Yo exige una interacción con el entorno social. Un déficit en el ser-visto y el encuentro, resp. vulneraciones en este ámbito central del ser persona, conducen a un desarrollo insuficiente o al bloqueo del acceso a sí mismo. Como secuela aparecen en consecuencia síntomas histéricos y múltiples trastornos de personalidad, que tienen justamente este déficit como tema. Literatura: Längle A (Editor) Histeria. Viena: Wiener Univ.-Verlag Fakultas 1. El tema existencial fundamental de la histeria Temática existencial referida al desarrollo Ser persona en la comunidad, individualidad – sociedad → encuentro de sí mismo y poder ser-uno-mismo solo es imaginable en el marco de una estructura social. Encontrar y vivir lo propio en delimitación del otro, y por otro lado, necesitar al otro, ser dependiente de él, y llegar así al encuentro. Lugar de la histeria: tiene lugar en la interrelación con los otros. Por eso, la Hi siempre ocurre en lo público, a diferencia de la angustia y la depresión. Temática antropológica: La tensión inabrogable entre lo propio y lo otro, que se fertiliza mutuamente, pero también oprime, limita. La temática histérica está asentada en este campo: ¿Cómo puedo ser yo mismo – conmigo y contigo, en la comunidad? Cuando no se está consigo y no llega al encuentro en la comunidad. Histeria – el ser-persona no encontrado. → Sufrimiento debido a la estrechez y limitación de la existencia humana (porque el Yo no puede expandirse en el Tú – y por eso queda encerrado en sí mismo). La Hi es un intento frustrado de superación de esta problemática. 2. Nombre e historia Nombre: he hystéra (griego) = útero Mentzos también señala como posible explicación: Oistros (griego) = el tábano (insecto); ataque de rabia, pasión intensa (celo); verb. = incitar (de esta palabra también se derivan “estrógenos) Histriónico: Histrio (latín) = actores, del etrusco “ister” Historia: Existe una idea antigua que procede de Egipto y llegó a Grecia. Hipócrates la enseñó. La idea era, que el útero podría abandonar la pelvis y producir trastornos visuales, dolores cervicales y parálisis. Platón redactó la historia más detalladamente en el Timaios (obra cosmológica de vejez): “El útero es un animal que ansía fervientemente tener hijos. Si se queda infértil por mucho tiempo más allá de la pubertad, se enoja, recorre todo el cuerpo, tapa las vías respiratorias, traba la respiración y, de este modo, empuja al cuerpo a los mayores peligros y origina una variedad de enfermedades [cit. según Haas 1976, Mentzos 22] … hasta que por fin el deseo y el amor unen al hombre y a la mujer.” [cit. según Spiegel] 1486, en tiempos de Inocencio VIII fue publicado en Espira el “Martillo de las brujas” (“Malleus maleficarum”) del dominicano Heinrich Institoris (Kramer) (y Jakob Sprenger?), en el cual se explica la histeria claramente (dtv 2003). Era considerada una “obsesión”. Causa: por contacto con el diablo → “stigmata diaboli” – por eso se reconocía a la bruja, que por contacto con el diablo adquirió los síntomas histéricos. El libro tuvo influencia en el entendimiento de la histeria y la forma de tratarla hasta el siglo XVIII. Las quemas de brujas son por largos períodos una historia penosa del tratamiento de la histeria. Siglo XVII: Thomas Sydenheym describió por primera vez la Hi como enfermedad. Siglos XVIII/XIX: La Hi era considerada exclusivamente como enfermedad orgánica-neurológica. Siglo XIX: Charcot, en la Salpetrière en Paris, logró por primera vez la disolución de los síntomas histéricos. Traspaso del muro mediante hipnosis → nuevos conocimientos: 1. La Hi es superable con medios psicológicos → no es una enfermedad orgánica 2. Aparecen contenidos que el paciente histérico no tiene en su conciencia. Charcot encontró la importancia del inconsciente: descubrió las primeras regularidades en la “Simulación y arbitrariedad enigmática” de la histeria (Freud). Freud valoraba ante todo su trabajo sobre la paralización traumática en la histeria. Freud opinó en una conferencia 1893 (Edición de estudio Vol. VI, pág. 13), que su trabajo y el de Breuer eran justamente una continuación de este trabajo de Charcot, y que todos sus progresos y conocimientos de la histeria se anudan al trabajo de Charcot. Breuer trató entre 1880 y 1882 a la señorita Anna O., quien “durante el cuidado de su padre enfermo había contraído una histeria grave y complicada con parálisis, contracturas, trastornos del habla y de la visión y múltiples peculiaridades”. Publicado en 1893 (junto con Freud), fue éste “el primer caso transparentado de histeria” (Freud 1893, en Edición de Estudio, vol.VI, pág. 15). A través de la obra de Freud llegó, mediante la histeria, la hora del nacimiento de la psicoterapia moderna. (1896 en Zur Ätiologie der Hysterie, en Edición de Estudio vol.VI): “Nos enteramos de que ningún síntoma histérico puede derivar solo de una vivencia real, sino que siempre participa el recuerdo suscitado por asociación con vivencias antiguas en la producción del síntoma. Si este principio – como estimo – es verdadero sin excepción, también nos señala el fundamento sobre el cual es posible construir una teoría psicológica de la histeria.” (Pág. 58f.) “Afirmo por lo tanto, que en el fondo de todo caso de histeria se encuentran – reproducibles mediante el trabajo analítico, a pesar del intervalo de tiempo de decenios – una o varias vivencias de experiencia sexual anterior, que pertenecen a la primera juventud. Considero esto una revelación importante para el descubrimiento de un caput Nili1 de la neuropatología…” (Pág.64) A esto está ligada un hecho cultural-histórico trágico, que Freud redactó una teoría tan influyente, pero luego abandonó este enfoque de la seducción real, resp. del abuso real, a favor de uno fantaseado y con esto sucumbió a una dinámica defensiva propia (aparentemente tuvo él mismo este tipo de experiencias sexuales). → Por cerca de cien años se omitió la importancia del abuso sexual real y generalmente se desechó como fantasía. Freud redactó en 1901 su famoso caso Dora, pero que recién se publicó en 1905. En esta descripción de caso se expresa por primera vez abiertamente en contra de la teoría de Breuer de los ‘estados hipnoides’, y le dio la preferencia a su teoría de la defensa. La segunda diferencia de opinión entre Freud y Breuer consistió en que Freud sostuvo más tarde, que en casos de histeria nunca faltaría la etiología sexual. Breuer nunca pudo adherir a esta opinión. (Pág.12 Edición de Estudio). Freud dio por primera vez una explicación acerca de los síntomas de conversión y los entendió como reacciones corporales directas a conflictos psíquicos insolubles y como escenificaciones ideadas por el inconsciente. En el psicoanálisis se entienden como consecuencia de la ‘escena primaria’: el deseo sexual infantil por uno de los padres, mesclado con agresión. Freud publicó en 1909 un trabajo con el título: “Generalidades sobre el ataque histérico”. En él escribe: “…que estos ataques no son más que fantasías representadas pantomímicamente, traducidas a lo motor, proyectadas sobre la motilidad. …tienen…bajo la influencia de la censura deformaciones muy análogas, a las que experimentan las fantasías alucinatorias del sueño”. (199) “Ya los antiguos decían que el coito era una ‘pequeña epilepsia’. ¡Podemos modificar! El ataque histérico convulsivo es un equivalente del coito… En toda una serie de casos, la neurosis histérica corresponde solo a una forma excesiva del típico empujón represivo, que al eliminar la sexualidad masculina [en la niña], hace surgir a la mujer”. (203) 1954 Fairbairn denominaba la forma especialmente grave como: “histeria maligna”, que tampoco sería curable por psicoanálisis. La debilidad de la fuerza de integración del Yo → a la disociación de partes del Yo, que son separadas. = en realidad, una descripción temprana de la actual teoría del trastorno de personalidad histérico. En los años 60: el concepto cayó en descrédito, el concepto nuevo narcicismo se fue ampliando y ocupó muchos ámbitos histéricos, lo que indujo a adoptar una nueva denominación: histrio, el actor. 1 Caput Nili = origen real (N. de la trad.) Actualmente: La neurosis histérica ya no está en los manuales de diagnóstico, solo el trastorno histriónico de personalidad. Se puede constatar: la histeria en todas las épocas refleja el espíritu de la época, y su sintomatología es como un camaleón, que se adapta a él. Frecuencia: La histeria es diagnosticada en mujeres 2-3 veces más frecuentemente en todas las estadísticas (Mentzos 104). Pero antes de la pubertad parece ser 1:1. El diagnóstico se encuentra más frecuentemente en pacientes con dificultades sexuales. La relación entre la neurosis histérica sintomática y el carácter histérico supuestamente es solo: r = .5 (Schlatter 1943) (en: Bräutigam; Mentzos pág. 91). [Entre neurosis compulsiva y carácter compulsivo r = .8] [No he encontrado investigaciones más nuevas!] 3. Descripción La histeria es como un torbellino o como un tornado: al medio quieto y vacío, afuera mucho revuelo. “Mucho ruido por nada”. Atrapan la atención Detrás del no querer ser vistos => angustia: “Si supieran como soy realmente, nadie me apreciaría”. = un sentimiento realista: cuando está solo, siente cuan vacío está por dentro. Difícilmente asible. ¿Qué en realidad lo verdadero en el histérico? – Juega con el límite entre ser y aparecer: lo disociativo se extiende. Lo disociativo se muestra en varios ámbitos de los síntomas: o o o o o o Salta en los temas, habla con muchas palabras que mantienen al otro a la distancia y no ofrecen nada asible. Puede producir como un estado crepuscular en el auditor, uno cree estar atento, pero internamente pierde la concentración, divaga, comienza a pensar en otras cosas – es decir, uno está y no está, internamente no está en ello. – Se puede extender a un cansancio paralizador, que lo ataca a uno, de manera que se pierde vigilancia. Contenido y sentimiento frecuentemente no concuerdan (disociación contextual). Pensamiento en blanco y negro. Todo se trata de ellos y sin embargo no están. Se intuye una potencia. Los hechos solo deben ser como lo describe. Modifica la realidad según su imaginación, una pregunta desagradable referente a ellos simplemente se ignora y se borra. Hace presión. – No se interesa por el ser-así del otro, no contra-pregunta. Por eso también se pone rápidamente reprochador. Para histéricos todo es posible de hacer: “sí, eso se puede – ya lo haré. ¡Ningún problema!” No se atiene a límites naturales. Siempre enjuiciando: rápido, sin detalle, no profundiza. No hay sentimiento en ello, no hay vivencia. Exageraciones: hablar en superlativos, números grandes → conducen a un estilo de lenguaje impresionista: p.ej.: “¡Fue un concierto encantador!” Impaciencia, es rápido, no puede soportar el vacío, no puede esperar, tiene que decidir inmediatamente (para pasar por alto su vacío interno y mantener el torbellino). Nunca es culpable: en este sentido, lo histérico es el antípoda a lo depresivo: el histérico va hacia afuera, no a la retirada; nada es un problema. Diferencia con la manía: fuerte, persistente, fásico, pero también sobrepasador de límites. Pero a diferencia de lo histérico, lo maníaco no es sugestivo, la culpa no es tema, le da lo mismo, no la rechaza (: el histérico no la soporta), no hay pensamiento en blanco y negro. Cuando los histéricos imitan a los depresivos, nunca fueron ellos mismos los ‘perdedores’, sino los ‘pobres’, las víctimas, buscan compasión. Resumen: => Cambiante entre liviano, estimulante, inspirador, ameno, sugestivo, adaptable y ejerciendo poder, arrollador, manipulador, cohibidor, instructor, incriminador, acosador, extorsionador. Una contradicción tensa. 4. Líneas del cuadro histérico =constante búsqueda de ser alguien, ser ahí como alguien. Que exista como persona. 1. debido a ausencia de relaciones 2. falta de límites, no atenerse a límites Ambos le dan un sentimiento de sustituto como persona: la libertad anhelada (independencia). Estar libre de todo. Persona = lo libre en el hombre → tiene una idea de qué se trata, pero por el camino que va, no llega a la verdadera libertad, sino al extravío. ad 1) Patrón continuo de distancia. a) Falta de relaciones hacia afuera: mantenerse afuera en su libertad y ausencia de compromiso (no estar encasillado). No tiene relaciones que lo comprometan y/o no se siente comprometido en las relaciones. => temor a la relación y distanciamiento. b) Falta de relación hacia adentro: No se siente, le falta la emoción, no hay pasión real, no siente su forma de ser, por eso tampoco sabe qué efecto produce en los otros (autoimagen), cómo le va a los otros con él, porque no tiene acceso a su propio sentimiento. Esta carencia de emoción se suple con amaneramiento => sentimentalismo, extravagancia, activismo, intenta causar efecto. => en el fondo, soledad. En las relaciones y en general le interesa la forma, pero no el contenido. La forma es más importante para él. (Le importa más que algo ocurra, antes de qué es lo que ocurre; que algo quede terminado, más que ‘cómo’ es…) ad 2) Un segundo elemento estructural es el tema: el límite El histérico no soporta los límites => no soporta nada que oprima. Su dinámica es dinamitar los límites, hacer algo cada vez en forma diferente, lo que vivencia como liberador, lo que deja espacio a lo nuevo. 2 formas principales del traspaso de límites del histérico: a) => insinuante (correspondiente a la reacción de coping del activismo): 1.) seductor (metiéndose secretamente detrás del límite del otro). 2.) atrayente, afectuoso, amable, encantador (= acampando ante el portal, a la espera – cuadro del caballo de Troya => hace que uno le condescienda, que uno también sea tan afectuoso con él, como él con uno => típico. b) => atropellando con violencia en doble sentido (paralelo: reacción de coping de la agresión) => hiriente, lastima el límite del otro, lo traspasa, pasa por encima de él en forma desconsiderada (opinión, deseos) o si no puede traspasar el límite: => ejerciendo presión – exigiendo para él – en forma manipulativa o apelativa (envía llamadas de socorro, amonestación…) – extorsivo. Resultado => lo propio no puede permanecer a) lo propio del otro. b) lo propio del histérico mismo. Así domina, como estructura fundamental, continua del Hi el tema libertad: Un anhelo férreo de libertad, un deseo ilimitado de ser libre, de ser independiente, un tener-que-serlibre a toda costa, incluso instintivo, forzado = libertad aparente, ≠libertad personal, que también incluye un ser-libre para algo. El puro ser-libre de, que se persigue. a) el plano personal se imita, pero no se alcanza. Eso significa en la práctica: tenemos en vez de emoción o impresión => afectos, estimulados desde afuera, no nacidos desde adentro expresión => efectos: impactos producidos, pero no comunicación de contenido encuentro => actuaciones y manipulación: no respetar el Tú y mantenerse detrás de sus propios límites, sino pasar por encima del otro Tú personal => público Ser => apariencia: la persona no está, solo una patarata de ella. b) no se alcanza el plano existencial – no se trata de montar algo en forma constructiva y de trascender, o de comprometerse con el mundo, sino preponderantemente de imponerse, encontrarse, adaptar el mundo a algo que no conoce, sino recién está buscando, es decir, a sí mismo. Por eso, en el modo histérico tampoco se trata de asumir responsabilidad, sino de vivenciarse. Se trata de él – no está ‘abierto al mundo’. Se podría describir el problema de la libertad de la histeria del siguiente modo (Alfried Längle): Mientras menos se sabe, lo que uno quiere, más importante se torna la libertad – en la esperanza de finalmente poder querer a través de ella. 5. Tendencias histéricas en la persona sana Comenzamos en lo normal, en el punto cero, y vamos primeramente al límite, donde comienza lo patológico. Luego empezamos allí y describimos el trastorno. = como vectores. En el enfoque, toda persona sana tiene elementos de la Hi. Adicción Depr. Inicio del Pac. ** sano reacción * Patología Angustia *…p.ej. partes sanas angustiosas: inseguridades. Falta → falta franqueza. **…partes sanas depresivas → si no falta empatía Histeria 1. El prestarse atención, la auto-referencia. 2. Extraversión: poder salir de sí mismo, apertura. 3. Estar en movimiento, personalidad dinámica. 4. Poder vivir espontaneidad e impulsividad. 5. Rapidez: poder reaccionar rápido, poder delimitarse, ser sagaz, tener ideas en forma rápida. Presencia: poder vivir en el aquí y ahora = otro aspecto de la temporalidad. Facultades organizadoras: talento para la forma → puede organizar bien, dar cuerpo a algo → es diligente. Sentido de lo estético. 6. Estar interesado por el efecto. 7. Sensibilidad e intuición: poder darse cuenta de qué le importa al otro (poder intuir lo que sienten otros), resp. de qué se podría tratar en una situación. 8. Amor a la libertad: cada persona desea espacios de libertad y poder ser libre. Resumen: Lo sano tiene mucha habilidad, vitalidad, puede moverse bien en público y no se hunde. Cuando se vuelve histérico, es difícilmente asible y difícil de alcanzar. Se evade, pero reaparece inmediatamente, de nuevo, con ímpetu y aspaviento. Extraño cambio de evadirse e imponerse. Tiene mucha flexibilidad, rapidez y fuerza, que lo hace tan difícilmente asible. Es más vivificante que cálido, más burbujeante y chispeante que saciante. Es menos persistente, permanente, constante, que pertinaz, resistente (terco, obstinado = testarudo). 6. Diagnóstico y clasificación clínica 6.1. Reacción histérica Ligado a cargas situacionales que poseen efecto histerizante → reacción de coping excesiva, que dura más que la situación. 6.2 Neurosis histérica Neurosis Hi => “ciertos motivos, de los cuales el paciente no está necesariamente consciente, producen o un estrechamiento del campo de consciencia, o un trastorno funcional en el ámbito de la motricidad y/o de lo sensorial. Los síntomas representan para el paciente una cierta ventaja subjetiva (ganancia patológica subjetiva) y frecuentemente parecen tener un significado simbólico”. (Benesch, pág. 304) En el trastorno de personalidad → todas las vivencias y la conducta poseen un tinte hi. La neurosis está caracterizada o por: a) síntomas de conversión ↓ el cuerpo está afectado Las funciones corporales están perturbadas, o b) estado crepuscular ↓ la conciencia está afectada La característica más notoria es el estrechap.ej. parálisis, tremor, ceguera, sordera, ataques, fiebre, miento de la conciencia; en general lo prácticamente todas las enfermedades… acompaña una amnesia selectiva ( no es Concepto “conversión = la energía psíquica se recordable); en la conducta, el paciente incluso transforma (se “convierte” en un síntoma puede imitar una psicosis, o más bien, su corporal) imaginación de una psicosis. Los 11 síntomas más importantes de la neurosis histérica clásica: 1. Sensoriales: trastornos visuales, auditivos, olfatorios, gustativos, analgesias, insensibilidades e hipersensibilidades simultáneas 2. Motricidad: parálisis, abulias (trastornos de impulsión), afonías (falta de voz), hipermotricidad de las extremidades. 3. Conversiones: tics, bléfaroespasmo (contracción del párpado), tortícolis (contractura del cuello), calambres musculares, respingos, espasmos de deglución, de llanto, de gritos, tremor (temblor), movimientos coreiformes (corea), parálisis (mono- y hemiplejias), trastornos de órganos internos (vómitos nerviosos, diarrea, taquicardia, asma nervioso), alergia, tetania de hiperventilación [Diferencia; simulación: el simulador es más temeroso y está más preocupado por el síntoma que el Hi] 4. Trastornos tróficos: formación de ronchas, sangramientos histéricos, accesos de fiebre, urticaria… eczemas, verrugas, alopecia 5. Gran ataque histérico. Ante sustos, peleas, desilusiones, cuando quiere forzar algo o protegerse, etc. se producen estados de convulsión, en los que los pacientes, en el “arc de cercle” (arco de círculo), quedan apoyados solo en la cabeza y los talones. Predominan los extensores sobre los flexores – en el psicoanálisis se consideraba esta posición como equivalente a un coito oculto. – El ataque no tiene los espasmos fuertes de la epilepsia, con la que se puede confundir, no hay mordedura de lengua, no hay Secessus (pérdida de heces y orina), no hay lesiones por caída, se conserva la reacción pupilar a la luz, no remite con Valium. El ataque declina por sí solo cuando no hay público. 6. Labilidad emocional, sugestibilidad, infidelidad, estados de ánimo malhumorado (“loquear”) 7. Afán de protagonismo 8. Pérdidas de memoria (olvido del abuso) 9. Estado psíquico crepuscular: ausencia interior, a pesar de aparente participación externa = “estados crepusculares plácidos” (Dörner, Plog 1978) = la “belle indifférence” (Freud). Sievers 1971: “Su extraña manera de dedicación, que inicialmente parece una capacidad de contacto especial, pero detrás de la cual - por así decirlo – ‘no viene nada’. Pero a diferencia del distanciado que no quiere participar, el histérico es alguien que no puede participar”. 10. Angustia específica: temor a la estrechez (aprietos, agobio, constreñimiento => pérdida de libertad), a lo desagradable y en forma más densa al dolor, a estar solo = soledad, ser abandonado. 11. Provoca desvalorizaciones de sí mismo por su conducta, que impresiona como falsa, artificial, tendencioso y es vivenciada como manipuladora. Es considerado vanidoso, engañoso, hace calumnias, intrigas, sospechas falsas, difamaciones. Líneas detrás de los síntomas neuróticos: 1. Cambios entre demasiado poco y excesivo, como expresión de la falta de centro, p.ej. en los afectos y sentimientos: 2.) Eje disociativo como dinámica de la falta del centro: El centro une los extremos – cuando falta, falta el ligamento central. Cuando uno no se tiene, solo quedan las alas externas = lo histérico es disociativo desde su estructura! “Disociativo” = que deshace la ligazón, produce distanciamiento. Pensamiento en o esto-o lo otro, y no “tanto esto – como también” (separando en vez de integrando) Pensamiento en blanco y negro: se entusiasma con una persona, y si no va como él desea, es esa la peor persona… Idealizar tiene una parte disociativa: disociación de partes de la realidad, lo crítico y negativo se oculta, porque molesta. Ocultar, negar, olvidar. 3.) relaciones: usar al otro como centro sustituto Las relaciones transcurren según el patrón: mi centro eres tú! → mucho miedo a estar solo, resp. a separaciones, puede ocasionar amenazas de suicidio, resp. conducir a intentos de suicidio (resp. parasuicidalidad). Y naturalmente tiene muchas identificaciones e imitaciones, porque le falta el centro. El otro = Yo-sustituto, que asume por él el sentir. → Funcionalización de las relaciones! → fácilmente se sexualizan si de ese modo se puede lograr más (también dinero). 4.) Externalización: El histérico vive en lo externo. Le da importancia a lo externo, a la imagen, el efecto en lo externo – los contenidos son secundarios para él, son intercambiables. Expulsar los sentimientos hacia otros El mundo de los sentimientos está en el afuera, en el afecto → en palabras y teatralización. Característica de camaleón del histérico: se adapta al entorno, pero sin embargo llama la atención. La Hi es vida externalizada – adentro no ocurre nada. Efecto general: Su aparición es una entrada a escena y su irse es una salida de escena – pero no deja nada de sí mismo, ningún contenido, nada sustancial, solo estados de ánimo y alusiones. Sobre la crítica del concepto de histeria: Mentzos: Neurosis Hi ≠ unidad de síntomas (por eso se suprimió la denominación “neurosis histérica), sino una forma de solución de conflictos y procesamiento de conflictos. Por eso representaría un proceso uniforme de elaboración. AE: Un cuadro marcado por capacidad de adaptación, sugestionabilidad y no comprometerse, solo puede reconocerse a través de su esencia, su dinámica y su temática existencial → esto requiere de fenomenología. Existe un tema unitario de la neurosis histérica: la 3ª MF. Temas y procesos (no síntomas) son lo uniforme, que autoriza a hablar de una “neurosis histérica, aunque no se encuentre en la tendencia diagnóstica. 6.3 Trastorno de personalidad histriónico El punto esencial está en la dinámica y en la conducta (desde la neurosis, en el cuerpo y la conciencia, pasando por alto, negando, no percibiendo, hasta el ataque histérico). CIE-10: F60.4 1. Dramatización en referencia a la propia persona, conducta teatral, expresión exagerada de sentimientos. 2. Sugestionabilidad, fácilmente influenciable por otros. 3. Afectividad superficial y lábil. 4. Egocentrismo, egolatría y falta de referencia a otros. 5. Constante anhelo de aprobación, elevada tendencia a sentirse ofendido. 6. Apetencia de suspenso emocionante y de actividades, en que la persona en cuestión se encuentre en el centro de la atención. 7. Constante conducta manipuladora para satisfacción de necesidades propias. DSM IV: 301.5 1. Se siente incómodo en situaciones, en que él/ella no se encuentra en el centro de la atención. 2. La interacción con otros frecuentemente se caracteriza por una conducta inapropiada sexualmente seductora y provocadora. => ¿Produce más efecto esto en el puritanismo de EEUU o llama más la atención? 3. Muestra expresión facial rápidamente cambiante y superficial. 4. Emplea sin excepción su apariencia corporal, para llamar la atención. 5. Tiene un estilo de lenguaje exageradamente impresionista, poco detallado. 6. Muestra auto-dramatización, teatralidad y exagerada expresión de sentimientos. 7. Es sugestionable, es decir, fácilmente influenciable por otras personas o circunstancias. 8. Interpreta relaciones como más cercanas de lo que realmente son. =pérdida en comparación con el DSM III – esta versión es más tenue y abarca menos. 7. Vistazo a la auto-experiencia Cadena de experiencias del histérico – del propio como del ajeno Lo histérico (propio como ajeno) tiene un efecto de escisión sobre el propio cuerpo: Aviva → libera→ entusiasmo→ estimulante dinámico con fuerza despierta habilidades abre nuevos horizontes, inspira; estimula, rompe las ataduras de lo antiguo excitante; produce felicidad cielo*) habilidad de aparecer; resaltante - flotante de causar impacto extrae un sentimiento de felicidad de todo enerva → (= activación que aleja de sí mismo), caer mal, dar la lata, demasiado hueco cohibe→ forzado sometido a presión soledad malestar→ menosprecio, desprecio, ser pasado por alto, no tomar(se) en serio, no hacer(se) justicia sentimiento de felicidad asco vomitivo sin vergüenza horrendo ser abusado “tipo asqueroso” infierno Típica vivencia de lo histérico: Forma intermedia (Hi es molesto y desagradable) reacción fuerte (Hi es vivenciado como amenazante) dinámica resistencia protegerse y retirarse ir con él renunciar a los propios límites ponerse terco, enojarse negarse resignar paralizado Actividad Aversión Pasividad Peligro: involucración corte de relación dejar hacer (heridas internas por conceder) Frecuente = el cambio en el vivenciar entre actividad, aversión y pasividad Uno no logra alejarse ni llegar ∑: → Lo histérico lo empuja a uno desde el centro a su límite protección vulneración →Lo Hi nos coloca ante la pregunta y con eso nos deja en claro: ¿Cuán bien estoy centrado dentro de mí? = el desafío existencial en el encuentro con el Hi: seguir siendo persona en su presencia. Porque toda reacción a lo histérico es co-actuar. Por eso es muy importante para la psicoterapia, conocer mi forma de reaccionar y observar mi co-actuación oculta. Porque mientras reacciono y no me posiciono como persona, estoy preso. Mientras respondo a lo histérico de una persona o reacciono a ello → siempre se pone embarazoso. Lo Hi es como una telaraña, es una red invisible que lo envuelve a uno, cuando se aproxima a estos hilos pegajosos. Formas en que reaccionamos a lo Hi y le damos planos de ataque: Querer aventajarlo en su exageración, estar contagiado dejarlo hacer Confrontación y decirle mi opinión ningunearlo, pasar por encima de él tomar distancia YO delimitación luchar contra él deseos, expectativas hacia él justificarse, defenderse Ilustración 1 Reacciones a lo histérico Solo hay un modo de conducta que no le da poder al histérico: Cuando me mantengo dentro de mí y actúo y hablo desde mi centro. Porque entonces no le doy el poder a través de rivalizar, estar fascinado, querer superarlo, convertirme en espectador - y con eso le cedo mi espacio, le doy un plano de ataque. Pero cuando hablo desde mí – entonces el histérico también puede mantenerse en su centro. Única protección: YO vivir desde mi centro, estando tranquilo dentro de mí, refiriéndome a mí (¿me gusta eso, está bien para mí?), dejándolo contestarme a mí, referirme a mí Eso también le hace bien al histérico, encontrarse con alguien de esta manera. No es un ataque a él, no es una crítica ni una corrección. Él vivencia un Tú centrado y eso es sanador. Es justamente eso lo que busca en su desasosiego. → le da sostén, orientación, sabe mejor donde está parado → amortigua las puntas y los momentos histéricos, no exacerban, sino chocan contra firmeza y quietud. → permite dejarlo ser como es, sin expectativas, etc. → esto quita la presión, a la cual es tan sensible, y lo libera de verdad. Reacciones a nivel psicodinámico 1. a) Tomar distancia, mantenerlo lejos YO TÚ Relación P.ej. no tomarse en serio, sentirse repugnado. Retirarse, distanciarse internamente 1.b) Mantenerse oculto, no involucrarse, no ser atacable = no ser tocado mantenerse escondido Tanto el histérico se mantiene escondido, como también la persona en el entorno, cuando le sigue el juego, aunque internamente no está presente. El Hi se mueve entre distancia y ocultamiento, porque no tiene límites. 2.) Querer ser visto = traspasando límites Intruso (sobrepasa los propios límites y los del otro), se extralimita, sin vergüenza Se pone estridente, agudo, también corporalmente toca constantemente al otro… 3.) Impertinencia como ataque = presión sobre el otro Imposición del cuadro/deseo/problema/culpa 4.) Perderse, volverse solitario, vaciarse Estos son los patrones más recurrentes, con que opera la persona histérica. Y el otro reacciona en espejo – lo histérico histerifica, contagia. 8. Etiología de la histeria 8.1 Psicodinámica de la patogénesis El factor central de la psicopatogénesis – tanto en la psicodinámica como también en la dinámica existencial – es el dolor. DOLOR 1. Muro protector de “tejido protector” → Anestesia 2. Dinámica: externalización → fuerzas centrífugas = alejarse del dolor Psicodinámica … memoria afectiva, la sensibilidad y disposición a reaccionar anclada en el afecto. Se activa como protección, debido a la violencia del dolor constante. Dinámica existencial … se activa paralelamente a ello en la conducta – ver abajo Lo histérico se caracteriza por 3 intolerancias afectivas específicas, porque estos temas tocan el dolor central del no-poder-ser-persona = sensibilidades contra tres ámbitos principales, que el Hi lleva dentro de sí y que conducen a reacciones de protección espontáneas (=> gatilla rápidamente reacciones de coping). A ellos se reacciona en forma afectivamente hiper-sensible (“alérgicamente”) (→ alerta frente a esos puntos + reacciones exageradas). Como protección se originan los temores específicos de la histeria, que se refieren a estos tres temas. Pero a pesar de las reacciones de coping, las intolerancias se siguen temiendo y/o experimentando, lo que – en combinación con la dinámica existencial (cf. hoja siguiente) – conduce a la cronificación de las reacciones de coping y de los temores (=> histerificación). Cuando el histérico se puede mantener alejado de las sensibilidades → libre de dolor = anestesia, pero vacío. 1.) ESTRECHEZ/PRESIÓN → Tipo de dolor de TORMENTO y de INCOMODIDAD a) “Arrinconarlo” desde afuera: circunstancias vitales sociales, económicas, psíquicas, relacionales, etc. P.ej. posición social marginal (minorías, trabajadores extranjeros, cárcel, rol femenino tradicional, estrechez del ambiente pueblerino, presión de conformidad en grupos, expectativas sexuales), funciones que se desempeñan y roles que se cumplen, fijaciones de otros (“tú eres así”), acoso psicológico, secretos y tabúes (temas que están en el ambiente, pero sobre los que no se debe hablar). b) Desde adentro: p.ej. por exigencias a sí mismo, por imágenes de sí mismo, por incapacidad vivenciada (debilidades) o por tensiones instintivas (sexualidad!), a las que difícilmente se puede o no se puede oponer resistencia. Bajo esta presión interior no aceptada, pueden rápidamente originarse sentimientos de incomodidad. También surge estrechez, cuando no se puede confesar conductas erróneas, cuando ya no se puede “echar para atrás”, porque se perdería la imagen, lo que, p.ej. podría suceder en una conducta dentro del grupo, debido a manifestaciones o afirmaciones, o incluso más trascendental, cuando p.ej. se ejerce una profesión con éxito, pero que uno mismo considera “equivocada”. Ante todo surge estrechez al no poder posicionarse ante sí mismo. Esto ocurre siempre que una debilidad, una inseguridad o una peculiaridad debe ser escondida frente a la mirada pública, porque no se quiere o puede confesar. Todo intento de represión, de obstaculización o de evitación de algo que está allí, produce presión interna. Querer ocultar una nerviosidad existente al hablar ante un grupo, hacer como que no existiera en una conferencia, porque “no debe ser” y porque uno mismo no podría sostenerse frente al propio juicio (por miedo a la pérdida de autoestima, al descrédito), produce más angustia aún y origina estrechez interna, presión interna. O el temor de un hombre a las mujeres (o viceversa) y ante los sentimientos y deseos de una relación, produce una estrechez, que en el lenguaje popular se llama “estar atascado”. Otra forma de no poder posicionarse ante sí mismo consiste en la inmadurez de decisión: no querer comprometerse no querer ligarse, porque la decisión podría ser errónea, lo que es comprensible, porque la persona histérica no se conoce realmente a sí misma y por eso no sabe realmente lo que quiere. Pero la necesidad de tomar decisiones produce entonces una presión especial y lo coloca contra la pared, lo que típicamente lleva a postergar las decisiones hasta el último minuto. Reacciones contrarias → reacciones de coping características: distanciarse, activismo (disimular, evadirse hacia la acción), enojo y rabia como formas de agresión, reflejo de posición de muerto como para ocultarse, conducta de máscara, conducta de apariencia. Una presión fuerte puede llevar al conocido ataque histérico. La persona, subjetivamente se siente como “violada”, inundada por el dolor. La incomodidad surge, cuando la estrechez/ la presión está ligada a la autoestima, resp. la vergüenza. P.ej., si uno quiere ocultar a toda costa algo que subjetivamente se considera una debilidad, es bochornoso hablar sobre ello o ser sorprendido en ello. “Pein”, tormento es un concepto que se refiere a un dolor intenso, constante, a un estado que martiriza (parecido a lapidar2), que es vivenciado como un suplicio. Es una palabra prestada del latín medio “pena” – castigo del infierno, y viene del latín “poena”, en griego “poiné” – penitencia (Kluge 1975). 2.) VULNERABILIDAD →Tipo de dolor del REPUGNANCIA y AVERSIÓN Provienen de vulneraciones al límite personal, de que lo propio es pasado por alto por otros, del abuso, del ser utilizado, de la violación. a) Estas traumatizaciones frecuentemente ocurren en el ámbito de la sexualidad. Debido al involucramiento de la intimidad, que es vivenciado intensamente, lo que en la sexualidad es inevitable, estas experiencias forman parte de las lesiones más graves de la persona. b) “Violaciones asexuales” de sentimientos, de cercanía, de intimidad y de autonomía. P.ej. el ser sujetado en un abrazo que uno no desea, puede ser vivenciado como “horrible”, aunque no se trate de sexualidad. P.ej., como niño, uno se puede sentir entregado en el abrazo de un adulto. Más aún cuando el niño siente, que para el adulto no se trata de su bienestar, sino de la satisfacción de su propia necesidad de cercanía a través del niño (Los niños ya son sensibles a esto a la edad de 1-2 años). Los sentimientos relacionados con estas experiencias se suelen describir 3 con el color gris y derivados de esta palabra. El recuerdo de esas vivencias es “gris”, sin vida, sin color, sin emoción; cuando aparece un sentimiento en relación a ellas, se convierte en atroz4, horrible, a uno lo asalta un horror al pensar en lo ocurrido. Lo obsesionante, desconsiderado del acto de la lesión de límite, al pasar por alto lo propio, lo íntimo, es vivenciado como cruel, a uno mismo lo asalta el horror frente a la dominancia desconsiderada, insensible de lo ajeno en lo propio, en lo más interno, de tener que vivenciar algo no sintonizado con la voluntad de la persona. Horror es otra palabra para repugnancia, el típico e intensivo sentimiento acompañante del límite personal lesionado. 3.) SOLEDAD ABANDONADA → Tipo de dolor del TORMENTO a) Externa: Muchos pacientes han vivenciado un ser-abandonado y haber-sido-dejado-solos por otras personas en forma lo más dolorosa y no lo han podido superar: por parte de los padres (especialmente doloroso es el ser abandonado por la madre y su calor) y otras personas de referencia, por ser abandonado físicamente, por ser abandonado psíquicamente o ser-dejado-a merced de, por carencia de esfuerzo para comprometerse o protegerlo ante otras personas. En particular, la falta de una relación cálida y cariñosa hacia la madre puede originar una añoranza larga y muy dolorosa, que por años y décadas puede volver a ser sentida como muy dolorosa, especialmente cuando aparece el peligro de volver a ser abandonado o se vivencia un nuevo abandono real. 2 El autor se refiere a que en alemán, las palabras martirizar (peinigen) y lapidar (steinigen) suenan parecidas. (Nota de la trad.) 3 En alemán (N.de la trad.) 4 Todas estos calificativos comienzan en alemán con la sílaba “grau” = gris (N. de la trad.) También la soledad sola puede causar síntomas histéricos, no se requiere siempre del abandono. Comp. también: expedición a la Antártida → síntomas histéricos en el grupo. b) Interna: se origina prácticamente en forma constante e inevitable como consecuencia de la “externalización histérica” y la falta de centro. El actuar y las decisiones son “conducidos desde lo ajeno”, por el temor al rechazo, al castigo, a perder la cara, por la ambición y el anhelo impetuosos de aprobación o por deseos, que no provienen del centro propio, sino del afán histérico “de ser más” de lo que se es, por ansia de experiencias, ansia de relaciones y evitación del dolor. Los deseos reemplazan la falta del auténtico conocimiento de lo que uno quiere, y copian frecuentemente lo que otros consideran valioso o manifiestan. El reemplazo de la voluntad propia por deseos, también hacen a la persona histérica receptiva para los deseos de otros (lo que explica en parte su sugestionabilidad). Debido a la falta de acceso a su propia emocionalidad (a la emoción primaria y a la emoción integrada), existe un grado mayor de ser afectado desde afuera (capacidad de entusiasmarse) y una carencia de moralidad anclada internamente. HISTERIA – Psicopatología, psicopatogénesis: resumen Sintomatología Afán de ser el centro, preocupado por el efecto, ser intocable, conducta manipuladora ↑ Externalización Psicopatología manifiesta =reacc.coping fijada Psicodinámica estrechez/presión (sensibilizado a/ protección ante) PSICOPATOGÉNESIS exageraciones, evaluador-hiriente, afectividad exagerada, cambiante, inseguridad personal y temor a la crítica ↑ ↔ insensibilidad resp. horror/ aversión ↑ vacío interno → horror (aversión) → soledad/abandono vulneración (pérdida de rel.interna) (sentimientos desagradables) DOLOR (condición de vulnerabiliad) sensibilización a ↔ insatisfacción personal, estar perdido, deseo en vez de voluntad, búsqueda de aprobación, egocentrismo sensibilización En relación recíproca Entre psicodinámica + Dinám. Existencial Falta diálogo y posicionamiento (nivel de contenido) hacia sí mismo → falta autoestima y delimitación Dinámica exist. Vulneración de su no haber encontrado lo integridad y límites, no propio → no puede referirse respetar su pudor en las relaciones, a sí mismo (no vivir la su dignidad autonomía) → falta de encuentros reales utilización de los sentimientos de otros, para obtener algún sentimiento de lo que vivenció o hizo. = proceso más profundo que mantiene el trastorno no enfrentarse a sí mismo no ser visto por los otros 8.2 Psicopatogénesis de la histeria a nivel existencial En el AE entendemos la histeria como trastorno del llegar-a-ser-persona, debido al desprecio de la persona por otros y/o por ella misma. La persona se pierde, lo que → vivencia como dolor, y lo que en consecuencia conduce a otras → reacciones psíquicas (sentimientos, reacciones de coping), que se relaciona con la sensibilización basada en la “memoria afectiva” y la ya movilizada psicodinámica. El trastorno hace referencia a varias actividades básicas personales y produce efectos múltiples en las vivencias y la conducta: 1) La persona está “en contacto y en diálogo consigo misma”: En la Hi: no se mantiene la cercanía hacía sí mismo: en el centro existe un “horror” → no se “tiene”, se pierde a sí mismo, no se enfrenta y no es visto por otros en ello la persona en diálogo interno persona no vista → se vuelve excéntrica desplazamiento por en conversación en contacto distancia no lograr verse por no yo Totalidad de la persona [=normal] mí logrado distanciamiento no haber aprendido a evaluarse cercanía duele no poder sentir en el aturdimiento conduce a: frente a sí mismo: por pudor, culpa no ser tomado en serio, ser abusado, no creerle al niño (→ pierde el contacto, la realidad interna, que oculta detrás de la fachada: comienzo de la escisión) delimitación insuficiente frente a los otros → sacado de su centro, porque está más con el otro (“¡mi yo eres tú!”) lejanía del Yo (que se refleja, resp. traduce en el distanciamiento externo) Vida “en el límite”, en la superficie (un ojo puesto en el efecto sobre otros, un ojo puesto sobre la propia imagen = como desea aparecer) falta la “persona de enfrente interna”→ perderse Debido a este ser-apartado del centro propio, debido a la carencia de trato “yo conmigo” → modos de vivenciar y conducirse: → alienación vacío interno insensibilidad distanciamiento trastornos disociativos del cuerpo 2) La persona puede enfrentarse a sí misma y evaluarse En la Hi: posicionamiento ante sí mismo no encontrado → carencia de autoestima real → afán de ser el centro como lucha por aprobación, ratificación, halago y para encontrar desde allí la respuesta que no se puede dar a sí mismo. Las personas Hi son inseguras de sí mismas. Por la falta de posicionamiento ante sí mismo → no hay firmeza interior. 3) La persona puede referirse a lo propio, delimitarse de otros e interceder a favor de sí misma: En la Hi: no establecer límites, no atenerse a límites → carencia de protección, sobre-exigencia, exageraciones al actuar, estrechez, presión 4) La persona es vulnerable en su intimidad e integridad: En la Hi: vulneraciones: dolores y vulneraciones no integrados (= disociados, apartados) de los límites del pudor, de la dignidad, de la autonomía; experiencias de haber sido pasado por alto/atropellado. En el Hi esta intimidad está tan lesionada, que ya no puede quedarse en ella y no puede mantenerse este centro → la intimidad no puede ser vivida → Vivenciar/ actuar el horror insoportable del dolor insensibiliza negro ascetismo desviación hacia los extremos altruismo rigidez terca, tozudo, quisquilloso insensibilidad frío glacial blanco hedonismo egoísmo flexibilidad cariñosa, manejabilidad alta sensibilidad olfato, vulnerabilidad No puede unir los extremos, porque en el centro duele, donde está el dolor de la persona: → sensibilizado a la violencia (duele mucho y apenas se soporta, aunque sea solo al verla) → al percibir tensión → inmediata armonización o disimulación. Insensibilidad para sí mismo se mantiene, porque la vida solo se vive en los extremos y no puede ser mantenida en el centro propio. Pero cuando la persona histérica se acerca a su centro “horroroso”, surge sensibilidad, luego repugnancia. 5) La persona tiene su originalidad en lo propio (hasta dentro de la conciencia): En la Hi: Lo propio no encontrado/ expresado/vivido, no mantenerse en lo propio: el ser-sí-mismo se borra, cuando se vive “desde los otros”. → Depende de ellos → lo histérico es parasitario, en su naturaleza utilizador, abusador. El sentido de la intimidad – su secreto, su intención – es ser intercambiado y regalado en la profundidad del encuentro personal – envuelto cuidadosamente en el pudor (p.ej. la intimidad de la sexualidad) = vivir hacia el otro. Esta dimensión del ser-humano le está dolorosamente negada al Hi → busca sustituto en lo externo, en la cantidad (p.ej. público) → (soledad (interior), vacío existencial, sugestionabilidad (al estar dependiendo de otros), ingenuidad (el ser-uno-mismo no se expone a la vida y permanece infantilmente inexperto). El deseo reemplaza la voluntad. 6) La persona es un ser social: En la Hi: enfrentamiento personal con el otro no logrado, con la sociedad, falta de encuentros reales → abandono, soledad con reacciones como manipuleo (actuar, asentir a lo que dicen los otros), hacer presión, extorsionar, resp. seducir, testear las relaciones; lo Hi está atravesado por la angustia, (no) ser visto (ambas cosas: ser visto y no ser visto! – “¡Mírame pero no veas quien soy realmente!” 9. Terapia 9.1 psicoterapia de la histeria 1. Actitud terapéutica: Tomar en serio al paciente en su búsqueda y sus padecimientos ocultos, y quedarse con uno mismo. 2. Setting, encuadre, y estructura: Normas claras desde el comienzo: Contrato terapéutico claro: acuerdo de duración de sesiones, alargamientos (si son posibles, que sean pagadas), horas extraordinarias, llamadas y lo que puede ser tratado en ellas (este punto en general aparece recién en el transcurso de la terapia cuando es la ocasión). Remuneración de sesiones canceladas a última hora. Ayuda a la estructura: avisar el término de la sesión cinco minutos antes, cuando el paciente mismo no puede hacerlo. Acuerdo: manifestar insatisfacciones y expresarlas al otro. → después alivia hacerlo también. Cuando llaman parientes: que conversen sus preocupaciones con otros terapeutas. No aceptación de la pareja en terapia, mientras está un Hi en terapia. Cuando Hi traen regalos: rechazar futuros regalos. 3. Estilo de terapia: Está marcado por firmeza en la conducción: claridad en la mantención de la línea terapéutica de tomarse mutuamente en serio. “Quiero y puedo tomarte en serio y a mí y lo que hacemos juntos aquí”. Esta actitud y enfrentamiento personal + objetivo le permite centrarse. Deben observarse los elementos: El encuentro claro, definido y aclarar, explicar. El querer-comprender seriamente al ver su dolor. Mostrarse auténtico, objetivo, abierto como terapeuta. Formular en forma positiva. Terapia de ámbitos problemáticos especiales: 4. Tratar problemas actuales. Conflictos, tensiones, inseguridades, delimitaciones, seguir sentimientos de estrechez, observar angustias, formar opiniones. 5. Incluir entorno social: Objetivo: Reducir éxito y efecto del actuar, volver hacia sí mismo. Privar de público, sacar del actuar. Pregunta: ¿Dónde consigue público? ¿En qué apoya su entorno la patología? ¿Dónde soy yo mismo público para él? (p.ej al hablar desbordadamente) 6. Paso de ensayo: soportar lo desagradable: Aprender: lo que es desagradable, no es necesariamente erróneo. Cuando aparecen sentimientos desagradables (p.ej. sentimientos de estrechez, intranquilidad, etc.) en la conversación → Pregunta: “¿Puede soportar el sentimiento por un momento?” Practicar el estar solo → aprender a soportar, entrenamiento. Ejercitar la calma: aprender a quedarse tranquilamente sentado por cinco minutos. Despertar interés: Sería interesante ver por cuántos minutos puede hacerlo. Objetivo: a) Salir de la orientación puramente psíquica (reacciones de coping), no enfocarse solo hacia lo agradable, porque no es razón suficiente para actuar. con sentido/correcto/bueno agradable desagradable sin sentido Orientación en lo agradable → sabor insípido, deja un vacío b) + Ejercicio previo a la confrontación con el dolor. c) + descarga de la situación: desactivar situaciones actuales, que son desagradables y lo agobian (p.ej. conversación con la pareja, situación laboral, etc.) 7. Analizar insatisfacciones: Inseguridades y sentimientos de vacío aparecen como síntomas del vacío interior y de la falta de relación. Observar las insatisfacciones y retomarlas: ¿Cómo se llegó a eso? ¿Cómo podría hacerlo de otra manera? Explicación: Tiene que estar inconforme, porque él mismo no aparece en su vida. Porque no vive lo propio. Buscar con él, qué podría ser y reflexionar, cómo podría aplicarlo, llevarlo a su vida, enfocar su vida según eso y actuar de acuerdo con ello. Permitir que vivencie la conducta insatisfactoria: “¿Cómo se siente con eso?” → Para que la insatisfacción se haga sentir. Positivo: hacerse conscientes posibles satisfacciones: “¿Dónde estoy realmente satisfecho conmigo?” → hace posible tranquilizarse, no ser dejado solo por sí mismo, la decepción de expectativas difusas, inmaduras se reduce. → Se estimula la configuración del centro propio. Estrategias de superación: Iniciar la relación (contacto) consigo mismo, fomentar la autopercepción (transición al punto siguiente): tomar partido por sí mismo (posicionarse y no abandonarse una y otra vez). Terapia más profunda (habitualmente no antes de 10 – 20 horas, en caso de trastornos de personalidad requiere más tiempo: 40 – 60 horas) 8. Inducción de la autoimagen / de la auto-evaluación: Pregunta básica: “¿Qué piensas de ti? - ¿Y de lo que hiciste?” → Objetivo: Inducción del auto-aprecio mediante la auto-percepción. “¡En realidad, qué pienso yo mismo de eso? - ¿Cómo me va con eso?” Mirarse seriamente, tomar posición hacia sí mismo, evaluando lo problemático, en vez de pasarlo siempre por alto o negarlo, y relacionarse con lo problemático. 9. Tratamiento fenomenológico más profundo de los problemas en lo actual: → pasa al tratamiento de heridas que están implicadas en las dramatizaciones. Lo que produce presión y estrechez, lo que desata afectos o reacciones de coping, conflictos, temores sociales, sobre-exigencias → debe ser analizado de acuerdo al contenido fenomenológico. Consultar y agregar ahora también las emociones. Preguntas: ¿Qué hace el sentimiento desagradable? ¿Qué me falta ahí? ¿Le llega algún sentimiento respecto a eso? ¿Se da cuenta, dónde se desampara constantemente? ¿Lo que hace con usted mismo? - ¿Por qué lo hago? Tratamiento del dolor más profundo con AE Personal. Cuidado: no empezar demasiado pronto con el trabajo del dolor más profundo. El paciente debe estar preparado: aliviado de lo actual, de lo agudo; acumular ejercitación y experiencia en lo actual, antes de que pueda ser trabajado el dolor grande. “Portal de la muerte (de la disolución)” en la terapia Hi: Soportar lo desagradable, el dolor, hasta el límite de la disolución – al comienzo siempre está el sentir, que este dolor no es soportable. Sentimientos de soledad, de desamparo, de abandono – cuando aparecen, sujetarlos, al comienzo juntos en la sesión. Una y otra vez con la pregunta: ¿Qué sientes? ¿Qué pasa cuando no lo puedes soportar? Correr el riesgo de que a uno lo disuelva, lo destruya. El paciente naturalmente requiere que se le acompañe en esto, no puede ir solo. A través del soportar → se tranquiliza, y como los pacientes pueden vivenciar, que no ocurre nada de lo temido, finalmente sienten fuerza, porque aparece un piso que los sostiene: la fuerza de la vida, la fuerza de estar-consigo-mismo. Así se llega mediante el AA al primer sentimiento de “ser-uno-mismo”. = Nacimiento personal en la HI. 10. Trabajo biográfico: ¿Cuál es mi historia de abandono, de vulneraciones, de presión? Tema principal: Enfocar trasfondo de la historia vital, historia del haber-llegado-a-ser y proyectos de vida (también los inducidos por padres, profesores). Resumen: El procedimiento terapéutico en la histeria se parece a una espiral: observar la conducta actual explicaciones de problemas actuales sentir emociones aprender a permanecer en el tema, mantenerlo profundización fenomenológica YO* Biografía: dolor más profundo problemas especiales ejercitar calma y estar solo interrelación con el entorno social soportar lo desagradable insatisfacciones Soportar dolores El propio YO detrás del dolor mayor Acercarse en círculos cada vez más estrechos al Yo, al núcleo, y levantar los traumas reprimidos uno por uno, hasta la infancia. Objetivo: formación del centro propio, encontrar el núcleo mediante la supresión de la anestesia del dolor. 9.2 Preguntas específicas 1. Estructuración de la terapia: esta estructuración es un esquema general, que en un caso concreto también puede variar. – El modelo de espiral es importante. 2. Rigor en la conducción del diálogo ¿Hay que dejar que se explaye el histérico? – Sí y no: a) mientras le ayude b) mientras se le pueda seguir bien y, por eso, estar uno mismo con él; 3. Manejo de la suicidalidad / parasuicidalidad En el caso de los histéricos, generalmente hay una “parasuicidalidad”. Suicidio, resp. suicidalidad: deseo inequívoco de matarse. Parasuicidio: en primer plano hay una función de llamada o una llamada de socorro a la sociedad. a) Gesto parasuicidal: la agresión no se dirige tanto hacia sí mismo, sino contra el entorno (acción de castigo: que tengan sentimientos de culpa → para lograrlo, amenaza con suicidio). b) Pausa parasuicidal: Huida al sueño profundo mediante medicamentos, por el deseo de una cesura o pausa en la vida. No hay agresión apreciable, ni hacia sí mismo, ni hacia otros. A) Aclaración del suicidio en la terapia 1. ¿Qué necesita ahora? – Generalmente es así: cuando puede hablar sobre lo que duele, (después de la sesión) está aliviado. Luego nuevamente la pregunta por la auto-evaluación: “¿Cree que estará bien hasta la próxima vez?” → devuelve la auto-responsabilidad. Si no resulta: 2. Auto-evaluación de la necesidad de ayuda: patrón: “¿Por cuánto tiempo piensa que puede soportarlo?” Luego acordar una nueva fecha. Exigir promesa de que no se hará daño hasta entonces. = traspaso de responsabilidad! Fomento de la propia maduración. 3. Si entretanto hay llamadas, que no es capaz y existe la sospecha del gesto parasuicidal: → fijar fechas propias o remitir al servicio de emergencia y transferencia de responsabilidad. 4. En caso de suicidalidad real: pedir promesa de suicidio. B) Asistencia de parientes de histéricos, a los que amenazan con suicidio 1. Consultar sobre qué trasfondo se hace la amenaza de suicidio. ¿Hay indicios de psicosis (depresión)? ¿Es realmente histérico? Si es histeria: explicar la histeria al paciente / a los parientes (dificultad de estar solo, medio de hacer presión, etc.) y como puede manejarlo (→ esto puede aliviar la relación, cuando puede enfrentar esto). = “Miniformación-terapéutica sobre tratamiento de la histeria”. Trazar límites por sí mismo, determinación, firmeza, claridad, sinceridad y contratos → constriñe cada vez más al histérico → algunos intuyen que ahora han perdido el poder sobre el otro → algunos ya no llegan a la amenaza de suicidio. 2. Aclarar y abordar lo que el histérico necesita, y decirle donde hay ayuda. No huir de la responsabilidad de una relación vivida. El pariente debe enfrentarlo con la actitud: “Con gusto te ayudo a conseguir ayuda. Pero yo mismo ya no te la puedo dar.” 3. Transferencia de la responsabilidad: Si el histérico después de todo esto continúa con amenazas de suicidio → el pariente debe decirle: “Si te quieres suicidar, nadie te lo puede impedir. Toda persona tiene la libertad de hacerlo, pero también la responsabilidad. Es y será siempre tu decisión y responsabilidad. Si yo me voy, no es asesinato, sino te dejo en tu libertad y responsabilidad.” En un suicidio, el pariente no es el asesino, sino el suicida mismo. Por eso, volver a decirle al pariente: “No soy responsable de tu vida. Lo eres tú mismo. Te puedo mediar ayuda, también la puedes encontrar tú mismo, y también tienes la responsabilidad de hacerlo si ya no aguantas. – Tu conducta, cuando amenazas con suicidio, no es búsqueda de ayuda, sino proviene de una dependencia de mí. Pero en ese caso hay un trastorno, y entonces se necesita ayuda.” Cuando no se le devuelve la responsabilidad al paciente, se llega fácilmente al suicidio-llamada. El histérico separa libertad y responsabilidad: la libertad la tengo yo, la responsabilidad tú. = típica actitud inmadura. Pero es una realidad muy dura, que el hombre es inabrogablemente libre y que por eso, lo que hace recae sobre él mismo. Este punto también puede ser dado de inmediato, cuando no se dispone del tiempo o el que consulta ya no tiene la fuerza para ello, etc. 4. Capacidad de resistencia En general, los histéricos al comienzo no están sobre-cargados o en peligro de suicidio. Pero uno no debe engañarse por esta fortaleza inicial del Hi: aunque no tenga inmediatamente una crisis, pero cuando la tiene es permanente! Parece más fuerte de lo que es.5. Ejercicio de “centro” en reiterada pérdida de sí mismo en personalidad histriónica y soledad Ejercicio de centro: Sentarse/tenderse, cerrar los ojos, relajarse con algunos respiros profundos y preguntarse: “¿Dónde está mi centro? - ¿Lo siento? - ¿Siento mi respiración?” – Según Freud, el resultado de la terapia de la histeria es: haber transformado la desdicha de la neurosis en una desventura humana normal. - ¿?