ECOS DE LA ASAMBLEA DE UNIFICACIÓN DE AMÉRICA LATINA El 18 de julio de 2012, sor Ernestina, sor Mónica y yo sor Lourdes pasamos a formar una comunidad de trabajo y discernimiento, trabajando el proyecto de la Creación de la Provincia Única en América. El tiempo pasó y el día 30 de mayo de 2016, comenzó un nuevo capítulo en nuestra historia de Hospitalarias en el Continente de la Esperanza. Las tres estructuras presente en siete países de América pasaron a conformar un solo miembro de este hermoso cuerpo congregacional, que busca sin descanso vivir la misión sanadora de Jesús, promoviendo la vida y la dignidad de los enfermos mentales. El sueño de crear una Única Provincia en América Latina, fue el gran propósito que durante estos años compartimos paso a paso con la comunidad hospitalaria de América. Los trabajos, los encuentros, la diversidad cultural, los logros y desafíos hicieron parte del caminar y de las búsquedas de Unificación. Lo especifico de cada pueblo, su manera de hacer y vivir la hospitalidad, sus colores, músicas y el cuidado con la vida fortaleció mi convicción de que el carisma hospitalario es un patrimonio para la humanidad. El tiempo vivido en la Comisión de Hospitalarias América Latina, marco mi existencia y será una experiencia inolvidable en mi historia personal y vocacional. Diariamente apoyadas en la Palabra de Dios, en la oración y en la Comunidad hospitalaria, avanzamos hasta la celebración de la Asamblea de Unificación de América. Miles de personas participarán en esta danza de Recrear la hospitalidad, viviendo la pasión por el Reino y el empeño por la causa que nos une: la salud mental. Abrazamos juntas/os un sueño y fuimos superando los desafíos del camino con la esperanza y la confianza puesta en Aquel que suscito el Carisma, por eso la palabra que late en mi corazón es ¡GRACIAS! La celebración y construcción de esta Asamblea confirman la actualidad, potencialidad y posibilidades del Carisma hospitalario. La nueva melodía que resuena ahora es: ASOMBRATE EN COMUNIÓN, NACEMOS DE NUEVO. Somos herederos de la riqueza carismática, humana, religiosa y multicultural de América y del Carisma que Dios infundió en la vida de San Benito Menni, eso nos lleva a soñar grande y ampliar la tienda de la esperanza en la misión de comunicar la Buena Noticia de Jesús, samaritano y misericordioso. La voz que se levanta para dar visibilidad a este nuevo tiempo tiene rostros y nombres; son las hermanas: Ernestina Aros, Dolores Buitrago, Nayara Santana, Angélica Flores Lucy Campos y Blanca Guerrero. Gracias hermanas por vuestro SI. Somos una sola familia, vuestros proyectos y preocupaciones serán los nuestros. Deseo que la vida y la hospitalidad que desbordan de vuestra generosidad y entrega lleguen a todas parte y que escuchemos al unísono la suave y dulce canción de la HOSPITALIDAD que no conoce límites y ni fronteras. Hna. Lourdes Vieira - hsc