¿sabes qué soy? denarios romanos

¿SABES QUÉ SOY? DENARIOS ROMANOS VAMOS A CONTAR… HISTORIAS En el año 251 a.C., el cónsul Lucio Cecilio Metelo derrotó a Asdrúbal en la batalla de Panormos (Palermo, Sicilia). Los cartagineses contaban con elefantes en su ejército lo que espantaba a los generales romanos, que no se atrevían a enfrentarse a ellos. Mediante una hábil maniobra, Metelo consiguió que los elefantes se volviesen contra sus propias tropas, y mientras los cartagineses huían de los elefantes, los romanos, una vez rotas las filas enemigas, consiguieron una gran victoria. Los elefantes fueron capturados y posteriormente exhibidos en su triunfo en Roma. Su nieto Quinto Cecilio Metelo, de sobrenombre Macedónico, también fue un brillante militar, participó en la conquista e incorporación de Macedonia al imperio romano, provincia de la que fue nombrado pretor en 148 a.C. Tras su vuelta a Roma se le concedió un triunfo y el sobrenombre por el que es conocido. Estas notables hazañas, recogidas por los historiadores antiguos, también fueron reflejadas en las monedas acuñadas en el año 127 a.C. por su bisnieto Marco Cecilio Metelo. Tenía que quedar constancia de que ellos eran la gens Caecilia (la familia Cecilia), orgullosa estirpe que había dado al pueblo de Roma grandes hombres y numerosas glorias, por ello en el reverso de una de sus acuñaciones se muestra un escudo macedónico con una cabeza de elefante en el centro, y todo envuelto en una corona de laurel Otra importante familia, la Iulia (Julia) procedía de Alba Longa (en los Montes Albanos, cerca de Roma) y se hacían descender a sí mismos del troyano Ascanio también conocido como Iulus, hijo de Eneas, quien a su vez era hijo de Anquises y Venus. Uno de sus más ilustres miembros, Cayo Julio Cesar, se ocupó de recordar este ascendente genealógico en un discurso fúnebre pronunciado a la muerte de su tía Julia, pero también lo hizo su antepasado el magistrado Lucio Julio Cesar, quien acuñó moneda en el año 103 a.C. Sus emisiones representan en el reverso a la diosa Venus conduciendo una biga que es tirada por dos cupidos o amorcillos que son la representación del culto doméstico familiar. Además de contar las hazañas familiares y mostrar el origen del linaje, hay monedas que indican mediante su iconografía el lugar de procedencia del monedero. Tal es el caso de la moneda que en el año 80 a.C. emite el magistrado Lucio Procilio: Juno Sospita era una de las diosas a las que se rendía culto en Lavinium, ciudad fundada por Eneas y origen de Roma. Su apelativo Sospita (salvadora, libertadora) indica las funciones de la diosa que aparece armada con escudo, blandiendo una jabalina, cubierta por una piel de cabra y con una serpiente a los pies. Según el mito, cada primavera una muchacha virgen ofrecía a la serpiente alimentos; si eran aceptados significaba buenas cosechas y riquezas para el año, si no lo eran, porque la joven era considerada impura, ésta se sacrificaba para evitar las hambrunas. Además la diosa va cubierta por una piel de macho cabrío (por lo que también se conoce como Juno Caprotina), y en su festividad, las Nonas Caprotinas del 7 de julio se ensalza la fecundidad y se conmemora una victoria de los romanos sobre sus enemigos, victoria cuyas protagonistas fueron las esclavas de Roma. También la diosa Diana, representada con su arco y su carcaj, le sirve el año 79 a.C. a Tiberio Claudio Nero para contarnos su origen sabino, el mismo del que proviene la diosa. El emisor es miembro de una famosa estirpe con numerosos magistrados monetales. Su familia, la Claudia, tuvo varias ramas ilustres una de las cuales dio lugar a la primera dinastía de emperadores, la de Octavio y Livia y sus descendientes Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón. Estas piezas forman parte de un lote de monedas aparecidas en el año 1941 en el lugar llamado Barranco Romero (Cañadas, Nerpio). Se trata de un conjunto de 67 denarios de plata, que debieron ocultarse durante las Guerras Sertorianas, una guerra civil entre los partidarios de la dictadura de Sila u optimates y los antisilanos o populares entre los que se encontraba Sertorio, gobernador de Hispania. La Península Ibérica fue el territorio donde se desarrolló el conflicto, y la guerra civil fue la causante de un amplio movimiento de tropas de una y otra facción. Como ha estudiado Rubí Sanz, la posible explicación de su aparición en Nerpio debe relacionarse con el traslado de las tropas silanas comandadas por Quinto Cecilio Metelo Pio desde la Bética a Levante, cruzando por el entorno del ocultamiento. Este brillante militar era descendiente de los militares y magistrados mencionados al principio, acumuló numerosos títulos como el de Imperator (Comandante Jefe) por sus victorias o el de Pontifex Maximus (Pontífice máximo) otorgado por Sila. También acuñó moneda en el año 81 a.C., contando el tesoro de Nerpio con dos ejemplares que muestran en su reverso la jarra y el báculo, instrumentos sacerdotales del Pontifex, dentro de una corona de laurel, con la palabra IMPER (Imperator) en el exergo, distintivos de su carrera triunfal. Son algunos ejemplos, —a los que se podrían añadir bastantes más—, que muestran cómo las monedas, que fueron usadas para el pago de los ejércitos, para la compra de avituallamiento y posiblemente también de voluntades, se convierten además, en un importante elemento de difusión de la cultura romana y de sus protagonistas: sus dioses, sus mitos, sus epopeyas y sus personajes, y hoy, más de veinte siglos después, estos denarios nos siguen hablando y contando su historia… no hay más que estar atentos y saber escuchar. GRANDES FECHAS 268 a.C. Según Tito Livio primera acuñación de denarios 212 a.C: El denario se convierte en la moneda de cuenta de los romanos 189‐180. Denario más antiguo del tesoro de Nerpio 83‐82 a.C. Primera Guerra Civil 83 a.C. Quinto Sertorio llega a Hispania Ca. 81‐72 a.C. Guerras Sertorianas 74 a.C. Denario más moderno del tesoro de Nerpio 72 a.C. Asesinato de Sertorio EL HALLAZGO ARQUEOLÓGICO El 1 de junio de 1941, el carbonero Enrique Gil Romero estaba aterrando una carbonera y al remover las tierras encontró 62 monedas que formaban, junto con otras 5 que se habían encontrado anteriormente, el atesoramiento; Joaquín Sanchez Jimenez, director del Museo y comisario provincial de excavaciones arqueológicas tiene conocimiento del descubrimiento en el mes de septiembre. Se pide al ayuntamiento de Nerpio que recabe información y tras reunir el lote, el 7 de octubre la colección pasa a engrosar los fondos del Museo de Albacete. PARA SABER MÁS SANZ GAMO, Rubí, 1997: Cultura ibérica y romanización en tierras de Albacete: los siglos de transición. Albacete, IEA. VIDAL BARDÁN, José María, 1984: "Tesorillo de denarios romano‐republicanos de Nerpio (Albacete)". Numisma 186‐191, pp. 41‐50. AUTORA DEL TEXTO Blanca Gamo Parras. Técnica del Museo de Albacete Denarios romanos. Plata, acuñación. S. II, I a.C Publicado en La Tribuna de Albacete, sábado 30 de junio de 2012, pág. 17