351292. . Tercera Sala. Quinta Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo LXXV, Pág. 1028. DEPOSITARIO SUSTITUTO, CARECE DE ACCION PARA EXIGIR DEL SUSTITUIDO LA ENTREGA DE LOS BIENES SECUESTRADOS. El depósito que recae sobre cosas litigiosas, se denomina secuestro y se constituye desde el momento en que el depositario recibe la cosa ajena, con la obligación de guardarla y restituirla al terminar el litigio, al litigante a quien la pertenencia de la misma cosa se atribuya. Cuando se ha realizado este acto jurídico, la Suprema Corte de Justicia reconoce que el depositario puede ejercitar las acciones de derecho común y aun acudir a la vía constitucional, para que, en el ejercicio de sus funciones legítimas, evite un desposeimiento, con menoscabo de sus atribuciones de depositario, y con perjuicio de la persona indeterminada a quien de modo definitivo habrá de corresponder la indicada posesión; pero este reconocimiento de capacidad procesal a favor del depositario, no opera cuando el nombrado por la autoridad judicial, en sustitución del depositario anterior, no ha contraído obligación o responsabilidad alguna con ese carácter, por no haber recibido en custodia la cosa ajena, pues en tal caso, para que se cumpla la determinación judicial, sólo existen los medios de apremio. Por otra parte, la acción de restitución del depósito, no se da al depositario sustituido, sino al litigante o tercero a quien se le atribuya en definitiva la pertenencia de la cosa secuestrada. Si el demandado fuere absuelto de la demanda, actor y depositario serán solidariamente responsables de la entrega de los bienes secuestrados, o en su defecto del valor de ellos; y si el actor obtuviere sentencia favorable, la ley le otorga la acción restitutoria, mas no contra el demandado salvo el caso en que este sea el depositario, sino contra el depositario, cuya obligación de entrega, dimana precisamente, de haberse constituido el depósito en sus manos. En consecuencia, el depositario sustituto carece de acción para lograr que el sustituido le entregue los bienes que recibió en custodia, porque aquél no es titular de tal acción, toda vez que no existe precepto legal alguno, que prevenga el depósito a su favor como accipiente legal, ni hay entre los depositarios alguna relación jurídica que por su naturaleza, admita la posibilidad de hallarse uno de ellos como actor, frente al otro, como demandado. Amparo civil directo 1190/41. Guerrero Méndez Eligio. 14 de enero de 1943. Unanimidad de cinco votos. La publicación no menciona el nombre del ponente. -1-