Lazarillo Compañía Claroscuro Guión original: Julie Vachon Ayudante guión: Francisco de Paula Sánchez Dirección y escenografía: Francisco de Paula Sánchez Diseño iluminación: José L. Vázquez Luengo Vestuario: Mariana y Leonor Piñar Capi Vallecillo y Javier Fernández (Lazarillo, Hidalgo, sirvientes y zapatos). Mayte Arco y Lidia Alanis (sombreros, tocados y arreglos) Zapatería Lerma (zapatos Señorita). Carmen Rosales y Julie Vachon (arreglos) Francisco de Paula (envejecimiento) Construcción de títeres: Lazarillo: Antonio Espadas (escultor) Francisco de Paula Sánchez (cuerpo y articulaciones) Cerdo: Mathieu René Objetos: María Matas, Julie Vachon y Sebastián Torres Carpintería: Antonio Carlos Castillo y Carpintería Moraleda Herrero: Manuel García Máscaras: Sebastián Torres y Julie Vachon Dirección musical: Sara Águeda Selección repertorio musical: Francisco de Paula Sánchez Grabación padre: Suso Ramallo Coreografía: Silvia Romero Bueno REPARTO: ACTORES/TITIRITEROS Julie Vachon: La Señorita francesa, voz y manipulación de Lazarillo, la madre de Lazarillo Eva López: El cerdo, manipulación Lazarillo Concha Medina: Elvira, el hidalgo, el ciego, la viuda y manipulación Lazarillo Chema Caballero: Felicio, El clérigo, Alguacil pregonero, Calderero, persona por la calle, manipulación Lazarillo Francisco Ortuño: Voz en off del padre de la Señorita MÚSICOS Sara Águeda, arpa de dos órdenes y canto María Alejandra Saturno, vihuela de arco REPERTORIO MUSICAL (por orden de aparición) Pierre Attaignant: Tourdion «La Magdalena» Alonso de Mudarra: Tiento Eustache du Caurroy: Une Jeune filette a 3 Josquin des Prez/Pierre Phalèse: Mille regretz Juan del Enzina: Qu’es de ti desconsolado Diego de Ortiz: Recercada segunda a solo Anónimo: Al villano se la dan Anónimo: Dies Irae Luys de Narváez: La canción del Emperador Diego de Ortiz: Recercada segunda sobre el pasamezzo moderno Tradicional: Ese niño tiene sueño Juan del Enzina: Todos los bienes del mundo Lucas Ruyz de Ribayaz: Tarantela Antonio de Cabezón: Para quien crié yo cabellos Juan del Enzina: Triste España sin ventura Antonio de Cabezón: Pavana con su glossa Luys de Narváez: La canción del Emperador Anónimo (cancionero del Duque de Calabria): Ay luna que reluzes! Juan del Enzina: Todos los bienes del mundo Thoinot Arbeau: Belle qui tiens ma vie Luys de Narváez: La canción del Emperador Miguel de Fuenllana: Tant que vivray Coproducción del Festival Internacional de Música y Danza de Granada, Festival Internacional de Música y Danza Ciudad de Úbeda, Festival de Música Antigua de Sevilla FeMÁS y Festival de Otoño de Jaén Con la colaboración del Ayuntamiento de Granada y Ayuntamiento de Huétor Vega Con la participación de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales Lazarillo «Pues sepa V.M. ante todas cosas que a mí llaman Lázaro de Tormes, hijo de Tomé González y de Antona Pérez, naturales de Tejares, aldea de Salamanca. Mi nacimiento fue dentro del río Tormes, por la cual causa tomé el sobrenombre, y fue desta manera». La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, 1554. Anónimo. En el siglo XVI, periodo en el que España alcanzó grandeza política y económica sin precedentes, vio la luz la popular novela anónima conocida como Lazarillo de Tormes. Cargada de ironía y crítica social, este magistral texto de nuestra literatura es ahora utilizado como marco para la reinvención y recreación, a propuesta de la compañía Claroscuro, en el espectáculo que hoy podremos disfrutar: Lazarillo. Bajo la dirección de Julie Vachon y Francisco de Paula Sánchez, la producción aúna e integra teatro y escena, títeres para narrar la trama, danza e interpretación musical, en un combinado mágico que traslada al espectador al siglo de oro español. En lo referido al ámbito musical, el espectáculo presenta una selección de obras vocales e instrumentales, de origen español y francés, encuadradas en el periodo renacentista. Comienza esta colección con una danza calificada como “baja”, puesto que se bailaba sin apenas levantar los pies del suelo y con pasos casi deslizantes. Se trata del turdión La Magdalena, de Pierre Attaignant (1494-1552), quien fue impresor y editor musical y uno de los responsables de su popularización. A continuación se interpreta un tiento de Alonso de Mudarra (1510-1580), vihuelista sevillano, cuyas composiciones quedan representadas en la obra Tres libros de música en cifra para vihuela (1546). Seguidamente, una evocadora pieza de tempo pausado, Une Jeune fillette [Una joven niña], del compositor francés Eustache du Caurroy (1549-1609). Paulatinamente se van sucediendo las piezas musicales en concordancia con la trama escénica. Llega el turno ahora del popular Mille regretz [Mil pesares] del compositor franco-flamenco Josquin Desprez (c1450–55-1521), en la edición del impresor Pierre Phalèse (1510-1573). La melodía se caracteriza por los pasajes imitativos y las entradas en forma de canon, aunque diversas secciones son homofónicas y enfatizan el texto. Éste expresa el dolor debido a la despedida y ausencia del ser amado, indicando: «Mil pesares por abandonaros y por alejar vuestro rostro amoroso. Siento tanto duelo y pena dolorosa, que se me verá en breve acabar mis días». La canción del emperador está basada en esta obra vocal de Josquin e igualmente tiene continuada presencia en diversos momentos del espectáculo. Se trata de una composición para vihuela del granadino Luys de Narváez (1500-1555), de la que se dice era la pieza favorita del emperador Carlos V. La tablatura original se recoge en Los seys libros del Delphin de música de cifra para tañer vihuela (1538). Por otra parte, los cancioneros musicales renacentistas están también representados en esta producción. Al cancionero de Palacio pertenecen el romance ¿Qu’es de ti desconsolado?, que narra la historia del Rey moro de Granada ante la pérdida de su reino a manos de los Reyes Católicos; la obra Triste España sin ventura, lamento por la muerte del príncipe Juan (hijo de los reyes Isabel y Fernando); y Todos los bienes del mundo. Esta última atañe a lo pasajero de las riquezas terrenales, enfatizando: «Todos los bienes del mundo, pasan presto y su memoria, salvo la fama y la gloria». La música de las tres piezas es de Juan del Enzina (1468-1529), el autor con más presencia en el cancionero de Palacio. Además, del Cancionero de Uppsala (también conocido como cancionero del Duque de Calabria) disfrutaremos de la obra anónima ¡Ay luna que reluzes! Igualmente destaca la obra anónima Dies Irae [Día de la ira], en sus orígenes un himno del siglo XIII, que ha sido reelaborado y reinterpretado a lo largo de toda la historia de la música occidental hasta nuestros días, haciendo su aparición en misas réquiem, sinfonías, sonatas, cantatas y un largo etcétera. Otras obras vocales seleccionadas son la tradicional canción de cuna Ese niño tiene sueño, la pavana Belle qui tiens ma vie de Thoinot Arbeau (1520-1595), y la danza popular anónima Al villano se la dan. Esta danza es mencionada en el entremés El rufián viudo de Miguel de Cervantes, quien era un gran conocedor de la realidad musical de su tiempo, y así lo muestra a través de su obra. Entre las piezas instrumentales, se encuentran también dos recercadas (o estudios) de Diego de Ortiz (c1510-c1570), pertenecientes al Tratado de glosas (1553), libro que recoge composiciones para instrumentos de cuerda. Igualmente, hay una tarantela de Lucas Ruyz de Ribayaz, guitarrista y arpista español, así como dos composiciones de Antonio de Cabezón (1510-1566): Para quien crié yo cabellos y Pavana con su glossa. Finaliza el espectáculo con Tant que vivray [Mientras viva] de Miguel de Fuenllana. Su melodía nos conduce hacia el final de la historia, y entre arpegios de sonoridades brillantes, nos recuerda que a pesar de las dificultades, la vida nos depara cuantiosas fortunas, como las que acaecieron a nuestro insigne Lazarillo. Miriam Albusac Jorge