La Fertilización La Fertilización La fertilización del suelo está destinada a restituir, mantener o aumentar el potencial productivo del suelo para que las plantas que se cultiven tengan todos los aportes que necesitan para poder desarrollarse adecuadamente. El suelo ya cuenta con un grado de fertilidad que viene dado por la naturaleza de la roca madre, los depósitos aéreos, la composición (complejo arcillo-húmico) y otros factores como el clima, la topografía, y la circulación del agua. Dependiendo de estos factores se necesitará más o menos trabajo para que el suelo consiga una fertilización óptima. Los objetivos que se persiguen con la fertilización de la tierra son tanto mantener y aumentar la fertilidad del suelo sin malgastar los recursos no renovables ni las energías, ni introducir elementos tóxicos o contaminantes que a la larga ayudan a morir a la tierra de cultivo. También se evitan las pérdidas de nutrientes por lavado y se incorporan residuos orgánicos vegetales y animales y se mantiene la cubierta vegetal. El suelo puede considerarse como un ser vivo que pasa por diferentes etapas a lo largo de su vida, en atención a esto nos encontramos con suelos jóvenes, maduros y viejos. El suelo debe recibir un trato diferente dependiendo de la etapa de su vida en la que se encuentre: Suelos jóvenes: Tienen el horizonte A poco desarrollado y la roca madre está muy poco alterada. Abundan en estos suelos los elementos gruesos como arenas y limos. Las arcillas escasean, no existen grandes cantidades de complejo húmico-arcilloso. La fertilización se basa en la aportación de humus y arcillas (compost) y elementos de enlace como calcio, hierro y magnesio que favorecen la formación del complejo así como tomar medidas como el cultivo de pasturas y el mulching que aceleren la alteración de la roca madre, aumenten el contenido de humus y limiten la lixiviación y la erosión. Suelos maduros: Poseen un horizonte B desarrollado y gran capacidad de intercambio catiónico. La fertilización debe ir dirigida a mantener o aumentar el porcentaje del complejo húmico-arcilloso mediante la restitución del humus que se va mineralizando. Suelos viejos: Se ha producido la desestructuración de complejo húmicoarcilloso y sus elementos constitutivos se han degradado, las uniones con calcio, hierro y magnesio se han perdido por lixiviación y el humus se mineraliza. Para conseguir el aumento de la fertilidad de estos suelos deben aportarse arcillas de buena calidad, humus, y los elementos de enlace (calcio, hierro y magnesio). Además se usarán medios protectores para frenar la erosión, como las cubiertas permanentes, limitación de riegos, cultivos protectores y mulching. En los tres casos la frecuencia de las aportaciones se verá condicionada por el clima que http://www.agriculturaecologica.iespana.es/agriculturaecologica/lafertilizacion.htm (1 of 6) [04/09/2001 08:21:11 a.m.] La Fertilización afecte a la zona y el tipo de cultivo. En climas más cálidos serán más frecuentes al igual que en el caso de cultivar hortalizas que favorezcan la mineralización de las materias orgánicas. En cambio en climas fríos las aportaciones se efectuarán con menos frecuencia al igual que en el cultivo de pastos, porque en estos casos la mineralización es más lenta. Por otra parte, en el momento de la fertilización hay que atender también a los factores que han intervenido en la formación del suelo ya que en este sentido se pueden modificar las condiciones microclimáticas mediante la construcción de setos o invernaderos. También se puede actuar sobre la topografía construyendo terrazas; con el drenaje y la puesta en regadío se actúa sobre la circulación del agua, y eliminando piedras en suelos pedregosos, aportando arena en suelos arcillosos o arcilla en los arenosos se actúa sobre la textura del suelo. FERTILIZACIÓN DE LOS MICROORGANISMOS DEL SUELO Los organismos que se encuentran en el suelo son los que se encargan de proporcionar a las plantas todos los nutrientes que las constituyen además de realizar una función estructuradora positiva y favorecer la circulación de los elementos nutrientes. Los microorganismos que se encuentran en el suelo se dividen en tres grandes grupos: 1. Quimiolitótrofos: Están relacionados con la materia mineral, son los que se encargan de alterar los minerales que forman las rocas. Para activarlos es necesario aportar arcillas de buena calidad en suelos arenosos que sean deficitarios en arcilla al igual que en suelos donde la arcilla presente no sea de buena calidad agrícola. Aportando rocas molidas que contengan el elemento o elementos en los que interviene el grupo que se quiere activar. Por eso se aportarán micas o basaltos para fertilizar siderobacterias, así como fosfatos naturales para activar microorganismos del ciclo del fósforo, azufre nativo para los del azufre y carbonato de calcio para los del calcio. 2. Organotrofos: Son los relacionados con la materia orgánica y dentro de este grupo se pueden hacer dos distinciones, los que colaboran en la humificación de la materia orgánica (hongos) que se activan mediante la aportación del compost y los que se dedican a la mineralización de la materia fresca o humificada, se trata de los microorganismos que descomponen las materias orgánicas en los elementos minerales básicos que las componen. Para activar estos últimos es necesario realizar labores que favorezcan la aireación del suelo como la escarificación, drenaje o laboreo; además de aportar materias orgánicas ricas en nitrógeno y compuestos solubles que bien pueden ser purines, sangre, abonos verdes... 3. Microorganismos de la rizosfera: Son los que están asociados a las raíces de las plantas. La activación de estos organismos se consigue mediante las rotaciones y asociaciones de cultivos. Pero hay que tener en cuenta que esta asociación entre planta y microorganismo se produce en las primeras fases del desarrollo de las raíces, por eso si en este momento en el suelo aparece fósforo soluble esta http://www.agriculturaecologica.iespana.es/agriculturaecologica/lafertilizacion.htm (2 of 6) [04/09/2001 08:21:11 a.m.] La Fertilización asociación no se llega a producir. De la misma forma, los biocidas que se utilizan para el control de plagas y enfermedades así como los tratamientos destinados a desinfectar el suelo (bromuro de metilo, vapor de agua, solarización) tiene un efecto negativo sobre estos microorganismos. FERTILIZACIÓN DE LAS PLANTAS Para diseñar la fertilización de las plantas es necesario estudiar las pérdidas y aportes de nutrientes que se dan en la zona de cultivo. Para mejorar el aporte de nutrientes a las plantas se cuenta con elementos que proceden del suelo y de la atmósfera. Procedentes de la atmósfera: Son el carbono, oxígeno, hidrógeno y nitrógeno. El carbono y el oxígeno forman el 88% de la planta y proceden del dióxido de carbono. Las plantas y otros organismos autótrofos fijan este gas mediante la fotosíntesis y lo devuelven de nuevo a la atmósfera en la respiración y luego es dispersado por el viento. El hidrógeno procede del agua de lluvia también es fijado en el proceso de fotosíntesis y después devuelto mediante la respiración. Por eso no hay que preocuparse de este elemento. En las zonas deficientes en agua se interviene en la gestión del agua, pero en estos casos se considera el agua sólo como transportador de nutrientes. En el caso del nitrógeno es necesaria la aportación al suelo. Con el cultivo de leguminosas utilizadas como abono verde, cultivando el suelo para favorecer la actividad del Azotobacter y aportando materias orgánicas ricas en nitrógeno, humus, purines, harina de sangre o gallinaza. Procedentes del suelo: Cuando se produzcan pérdidas debidas a la acción humana se intentarán reincorporar al suelo restos de cosechas (abonos verdes) así como estiércoles. Si se han producido pérdidas por lixiviación hay que potenciar la presencia de raíces y de humus. FERTILIZACIÓN ORGÁNICA Los productos que aportan humus y nutrientes al suelo y son de naturaleza orgánica son denominados fertilizantes orgánicos, además son bioactivadores de microorganismos. El estiércol fresco procedente de los excrementos animales y de sus camas se utiliza si el suelo tiene buena actividad biológica y buen equilibrio mineral, si el tiempo es favorable (caliente y húmedo) y en cultivos como viña, árboles frutales, praderas permanentes y en cultivos exigentes en nitrógeno como alcachofa, apio, calabaza, col, maíz, patata, puerro, tomate, etc. La composición del estiércol depende del ganado, de la cama y del manejo posterior, para una utilización correcta hay que tener estas variantes en cuenta. El estiércol procedente de las aves de corral o gallinaza es el más concentrado y rico en nutrientes sobre todo en nitrógeno, por este motivo es importante ser prudente en su empleo ya que un exceso de nitrógeno produciría mayor sensibilidad al parasitismo, mala http://www.agriculturaecologica.iespana.es/agriculturaecologica/lafertilizacion.htm (3 of 6) [04/09/2001 08:21:11 a.m.] La Fertilización conservación y hortalizas con un exceso de contenido en nitratos. Deben rechazarse los procedentes de la cría industrial ya que es frecuente que contengan residuos de antibióticos. El método del compostaje es una de las bases de fertilización del suelo en agricultura ecológica. Con este método se consigue que los residuos orgánicos siguiendo una degradación natural se transformen en un producto rico en compuestos húmicos que ayudará a mantener y aumentar la fertilidad del suelo. Existen varios métodos de compostaje: ● En montón: es el más utilizado y consiste en realizar montones con los residuos orgánicos. ● En superficie: consiste en esparcir el material orgánico directamente por el suelo. Los principales causantes de la formación del compost son los microorganismos que proceden tanto del suelo como del agua o de la propia materia orgánica utilizada. Pero para realizar bien su trabajo necesitan: ● Materia orgánica: de la cual se alimentan, y en la que deben mezclarse celulosa (paja, cortezas, serrín), azúcares (vegetales verdes) y nitrógeno (estiércoles frescos, purín, leguminosas). El desmenuzamiento de esta materia posibilita que los microorganismos actúen de forma más rápida. ● Oxígeno: Es fundamental para que no se produzca putrefacción y malos olores por eso hay que favorecer que el aire penetre fácilmente. ● Agua: Tiene que estar presente en todo momento, pero sin llegar a la inundación, un bajo contenido de agua detiene el proceso porque los microorganismos la necesitan para seguir actuando y demasiada llegaría a producir la putrefacción. ● Temperatura adecuada: hay que proteger la mezcla del calor excesivo y también de la lluvia. ● PH adecuado: El ideal es en torno al neutro, pero entre 5 y 8 está bien. Los abonos verdes ayudan a mejorar la estructura del suelo protegiéndolo de fenómenos meteorólogicos como es la lluvia. Se suelen utilizar sobre todo entre cultivos, o en cultivos que requieren alto contenido en nutrientes. También son estimulantes de la vida microbiana de la tierra y suprimen el lavado de nutrientes a la vez que mejoran la circulación del agua a través del suelo y limitan la invasión de malas hierbas. Pero los abonos verdes también tienen aspectos desfavorables y es que en algunos casos puede llegar a producirse fermentación sin aire, esto provoca la aparición de sustancias tóxicas que serán perjudiciales para el cultivo posterior. Por eso no se debe incorporar el abono en niveles profundos ni en suelos mal drenados o demasiado compactos. Además hay que tener en cuenta, en climas secos, la competencia que puede ejercer con el cultivo principal y por eso hay que elegir para el abono verde especies poco exigentes en agua y también procurar enterrarlo lo antes posible. Las algas y sus derivados son productos con alto contenido en calcio que proceden del http://www.agriculturaecologica.iespana.es/agriculturaecologica/lafertilizacion.htm (4 of 6) [04/09/2001 08:21:11 a.m.] La Fertilización mar. Su aplicación suele ser por vía foliar o bien como complemento de la fertilización orgánica. Proporcionan al cultivo resistencia frente a las enfermedades, el ataque de parásitos y los estados de estrés. El purín debe ser aplicado inmediatamente después de su fabricación, en el caso de que sea almacenado durante un tiempo es necesario airearlo de forma frecuente mediante la agitación enérgica o inyectándole aire a presión. Con el fin de que los purines recientes no penetren demasiado en el suelo el aporte debe ser moderado y nunca en tiempo lluvioso. Si se realiza de esta manera el purín efectuará una siembra microbiana y un aporte orgánico muy beneficioso para la tierra. Los restos de matadero o subproductos de industrias transformadoras se pueden encontrar en el comercio y son la sangre, carne, huesos en polvo, cuernos, cueros, lanas, plumas, etc. La sangre y la carne contienen mucho nitrógeno, por eso sus aportes deben ser moderados, en cambio los restos orgánicos procedentes de huesos, cuernos, plumas, etc., son menos ricos en nitrógeno y su descomposición es más lenta debido a lo cual es preferible que sean incorporados al compost. En cuanto a los subproductos de origen vegetal están las raicillas de malta, cáscara de cacao, vinaza, alpechín, etc. Los guanos aves, del Perú y Mozambique, aparecen por acumulación de las deyecciones de aves marinas y son excelentes abonos naturales que no contienen ningún tipo de contaminación. Como están muy concentrados es necesario moderar mucho las dosis que se aportan al suelo. FERTILIZACIÓN MINERAL Los aportes minerales no provienen de materias orgánicas y en el caso de hacerlo es que han sufrido tal transformación que sólo conservan el esqueleto de lo que fue un organismo vivo, este es el caso de vegetales calcinados o algas marinas calcificadas. Son numerosos los materiales que pueden ser utilizados en agricultura ecológica y el punto que los diferencia de los abonos químicos que se utilizan en la agricultura convencional es que las transformaciones que han sufrido han sido como consecuencia de la trituración, lavado o calcinación y en ningún momento han sido tratados químicamente. Estos fertilizantes se utilizan sobre todo en períodos de reconversión para corregir problemas de acidez y de carencias de minerales. Raramente son indispensables pero algunos como las cenizas de madera o rocas en polvo son muy benéficos aunque se pueda prescindir de ellos. Después de ser aplicados y con el tiempo pasarán a ser asimilados por las plantas debido a la acción de los organismos del suelo, pero por su indisolubilidad deberán ser aplicados meses antes de ser absorbidos por las plantas para que los microorganismos tengan tiempo de convertirlos en asimilables. Las enmiendas de calcio: Se utilizan para regular el pH en suelos demasiado ácidos. http://www.agriculturaecologica.iespana.es/agriculturaecologica/lafertilizacion.htm (5 of 6) [04/09/2001 08:21:11 a.m.] La Fertilización Pueden formar parte de estas enmiendas todas las rocas calcáreas como caliza triturada, marga, dolomita o lithothamne que es uno de los pilares de la fertilización. Los aportes de enmiendas calizas no deben utilizarse en suelos calizos y en los suelos en los que se deban aplicar habrá que hacerlo con moderación sobre todo si se encuentran en forma de polvos muy finos. En carencias agudas de magnesio las aportaciones deben ser de dolomitas, rocas silíceas en tierras ácidas o neutras y de sal natural de sulfato de magnesio en tierras calizas. Para corregir las carencias de fósforo se utilizarán de forma general fosfatos naturales blandos. También los productos procedentes del fosfato alumínico-cálcico limitado a suelos básicos. En el caso de que exista fuerte carencia de potasio se utilizarán productos procedentes de la sal potásica en bruto y rocas silíceas o cenizas de madera siempre y cuando no hayan sido tratadas químicamente. La carencia extrema de potasio no es muy frecuente y para poder aplicar estos productos es necesario que un organismo de control reconozca la necesidad de este elemento en el suelo. Los oligoelementos que se aportan a un suelo con esta carencia se pueden obtener de rocas silíceas o lithothamne. Pero debido a que todos los materiales orgánicos contienen oligoelementos no es frecuente encontrarse con un suelo que presente una fuerte carencia. Por último, la ceniza de leña que es un fertilizante rico en potasio y oligoelementos se puede añadir al montón de compost o bien añadir directamente al suelo. En resumen, la fertilización deberá basarse en el aprovechamiento adecuado de la fertilidad del suelo mediante la elección de cultivos, sus rotaciones y asociaciones; aportando humus y reciclando nutrientes con el compost. También mediante los abonos verdes se da vida y se moviliza los nutrientes del suelo. Con inoculaciones biofertilizantes y técnicas agronómicas adecuadas se potenciarán organismos beneficiosos como las micorrizas y fijadores de nitrógeno. Por último, mediante la aportación de minerales de origen natural y productos ricos en uno o varios elementos se corregirán los últimos desequilibrios. De esta forma se puede conseguir llegar a una fertilidad óptima del suelo sin tener que utilizar para ello ningún abono químico ni otros productos que puedan influir a largo plazo en la destrucción del suelo o en la degradación alimenticia que pasa por los animales y llega a los humanos en última instancia. http://www.agriculturaecologica.iespana.es/agriculturaecologica/lafertilizacion.htm (6 of 6) [04/09/2001 08:21:11 a.m.]