Texto Base

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ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA
REPÚBLICA DE COSTA RICA
PROYECTO DE REFORMA CONSTITUCIONAL
REFORMA DE LOS ARTÍCULOS 158, 163 Y 165 DE LA CONSTITUCIÓN
POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA PARA REGULAR EL
NOMBRAMIENTO Y DESTITUCIÓN DE LOS MAGISTRADOS
DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
VARIAS SEÑORAS DIPUTADAS
Y SEÑORES DIPUTADOS
EXPEDIENTE N.º 18.900
DEPARTAMENTO DE SERVICIOS
PARLAMENTARIOS
PROYECTO DE REFORMA CONSTITUCIONAL
REFORMA DE LOS ARTÍCULOS 158, 163 Y 165 DE LA CONSTITUCIÓN
POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA PARA REGULAR EL
NOMBRAMIENTO Y DESTITUCIÓN DE LOS MAGISTRADOS
DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
Expediente N.° 18.900
ASAMBLEA LEGISLATIVA:
El reciente escándalo acontecido en el seno del Poder Judicial con las
denuncias que pesan sobre un magistrado por aparentes conductas impropias, en
perjuicio de una funcionaria judicial y el Informe que la Corte Plena remitió a la
Asamblea Legislativa recomendando, luego del debido proceso, su destitución por
encontrarlo responsable de las mismas, ha generado una gran polémica hasta el
punto que abrió la discusión sobre si es posible o no destituir a un magistrado.
El numeral 182 de la Ley N.º 8 de 29 de noviembre de 1937, Ley Orgánica
del Poder Judicial y sus reformas, dispone una serie de reglas sobre la destitución
del magistrado, según el cual, corresponde a la Corte aplicar el régimen
disciplinario sobre sus miembros, siendo necesario dos tercios del total de sus
miembros para remitir a la Asamblea la solicitud de revocatoria del nombramiento
para que esta resuelva.
Ahora bien, de acuerdo con esa remisión, se vuelve imperioso revisar qué
puede hacer la Asamblea Legislativa al respecto. El Reglamento es omiso en
cuanto a este tema, por lo que es necesario referirse a la Constitución Política.
Según el artículo 158 de nuestro Texto Fundamental, corresponde a la
Asamblea Legislativa nombrar a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia
por períodos de ocho años y se considerarán reelegidos para períodos iguales,
salvo que en votación no menor de las dos terceras partes del total de los
miembros de esta se acuerde lo contrario. Queda claro cómo se nombra, pero no
se especifica si es posible revocar ese mandato ni cuál es el procedimiento para
hacerlo.
La única referencia en cuanto a sanciones sobre magistrados se encuentra
en el artículo 165 constitucional, de acuerdo con el cual, solamente podrán ser
suspendidos por acuerdo de la Corte Suprema de Justicia, tomado por votación no
menor a los dos tercios del total de sus miembros. Pero, nuevamente, no se habla
en ningún momento de la destitución.
ÁREA DE PROCESOS
LEGISLATIVOS
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EXP. N.º 18.900
Si bien podría pensarse que quien tiene la competencia para nombrar, tiene
la competencia para revocar el mandato otorgado, lo cierto es que, al no estar
expresamente indicado en la Constitución, hay un problema jurídico.
De ahí que, recientemente, el Departamento de Servicios Técnicos de la
Asamblea Legislativa manifestara que esta no puede destituir al magistrado en
cuestión porque el artículo 182 riñe con la Constitución, toda vez que según esta,
el máximo castigo disciplinario para un magistrado es la suspensión, y no la
revocatoria de nombramiento. Asimismo, indicó que los legisladores únicamente
pueden conocer el asunto cuando se les remita un expediente penal y no uno
disciplinario, como ocurrió en este caso. Para agravar el asunto, existe una acción
de inconstitucionalidad presentada contra el supracitado artículo 182, que hace
imposible que la Asamblea emita una decisión al respecto.
Por todo lo anterior, puede concluirse que nuestro marco normativo no es
claro a la hora de establecer los mecanismos por los cuales se puede revocar un
mandato, de ahí la intención que conlleva este proyecto de ley para establecer,
precisamente, las reglas por las cuales se puede destituir a un magistrado de la
Corte Suprema de Justicia.
No es de recibo que en un sistema político como el costarricense, donde la
soberanía reside en la nación, los ciudadanos -o sus representantes- no puedan
ejercer ningún tipo de control político sobre los magistrados, sea por las
actuaciones de estos en el ejercicio de sus cargos o por conductas impropias.
Según la forma en la que está redactada la norma constitucional en la actualidad,
solamente puede evitarse que un magistrado continúe en su puesto si,
transcurridos los ocho años de su nombramiento, 38 ó más diputados votan en
contra de su reelección, cuestión de difícil logro, lo cual termina permitiendo que
estos permanezcan en sus puestos casi de forma indefinida.
No hay duda que los magistrados de la Corte Suprema de Justicia son, en
estos momentos, actores con una enorme cuota de poder político, pues de ellos
depende en muchas instancias la última palabra sobre lo que es o no válido tanto
en las relaciones entre individuos como en las relaciones entre estos y el Estado.
Y ese poder no está controlado: sus decisiones no tienen ningún costo para ellos,
a pesar que con ellas puedan beneficiar o perjudicar a miles de ciudadanos. Su
responsabilidad política es nula a pesar de ser actores tan importantes.
De ahí que, por medio de esta iniciativa, se procure cambiar las reglas de
nombramiento y destitución de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia
para que su elección sea por períodos de ocho años pero que su reelección no
sea automática sino se consiguen los 38 votos en contra sino que, más bien, se
requiera el voto afirmativo de esa mayoría calificada para continuar. Al mismo
tiempo, se establece la posibilidad de que, mediante la decisión de dos tercios del
total de los miembros de la Corte Suprema de Justicia, se solicite a la Asamblea la
destitución de un magistrado, la cual deberá ser tomada también por una mayoría
calificada.
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LEGISLATIVOS
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EXP. N.º 18.900
Por las razones expuestas, se somete a consideración de los diputados el
siguiente proyecto de reforma constitucional.
LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA
DECRETA:
REFORMA DE LOS ARTÍCULOS 158, 163 Y 165 DE LA CONSTITUCIÓN
POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA PARA REGULAR EL
NOMBRAMIENTO Y DESTITUCIÓN DE LOS MAGISTRADOS
DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
ARTÍCULO 1.Modifícase el artículo 158 de la Constitución Política, para que
se lea como se presenta a continuación:
“Artículo 158.- Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia serán
elegidos por un período de ocho años y por los votos de dos terceras
partes de la totalidad de los miembros de la Asamblea Legislativa. En el
desempeño de sus funciones, deberán actuar con eficiencia y se
considerarán reelegidos para períodos iguales solamente si cuentan con
el voto afirmativo de dos terceras partes de la totalidad de los miembros
de la Asamblea Legislativa. Las vacantes serán llenadas para períodos
completos de ocho años.”
ARTÍCULO 2.Refórmase el artículo 163 de la Constitución Política, para que
se lea como se presenta a continuación:
“Artículo 163.- La elección y reposición de los magistrados de la Corte
Suprema de Justicia se harán dentro de los treinta días naturales
posteriores al vencimiento del período respectivo, de la destitución o de
la fecha en que se comunique que ha ocurrido una vacante.”
ARTÍCULO 3.Modifícase el artículo 165 de la Constitución Política, para que
se lea como se presenta a continuación:
“Artículo 165.- Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia no
podrán ser suspendidos o destituidos sino por declaratoria de haber lugar
a formación de causa, o por los otros motivos que expresa la ley en el
capítulo correspondiente al régimen disciplinario. En este último caso, el
acuerdo habrá de tomarse por la Corte Suprema de Justicia, en votación
secreta no menor de los dos tercios del total de sus miembros.
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EXP. N.º 18.900
Para decretar la destitución, la Corte deberá tomar el acuerdo
por dos tercios del total de sus miembros y comunicarlo a la
Asamblea Legislativa para que esta decida si revoca el
nombramiento, para lo cual requerirá una votación no menor de los
dos tercios del total de sus miembros.”
TRANSITORIO ÚNICO.- Los actuales magistrados de la Corte Suprema de
Justicia permanecerán en su puesto hasta el final del período por el que han sido
elegidos. Una vez finalizado, tendrán que someterse a lo dispuesto en esta
reforma.
Rige a partir de su publicación.
Marielos Alfaro Murillo
Damaris Quintana Porras
Danilo Cubero Corrales
Mireya Zamora Alvarado
Patricia Pérez Hegg
Adonay Enríquez Guevara
Víctor Emilio Granados Calvo
Ernesto Chavarría Ruiz
Wálter Céspedes Salazar
Luis Alberto Rojas Valerio
DIPUTADOS Y DIPUTADAS
3 de setiembre de 2013
NOTA.
Este proyecto ingresó el 3 de setiembre de 2013 en el orden del
día del Plenario y se encuentra en la Secretaría del Directorio,
donde puede ser consultado.
DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS
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