◆ 7 Atención de enfermería en el paciente quirúrgico ELENA DEL AMO MUÑOZ GEMA Mª PÉREZ PRUDENCIO Se describen a continuación las fases del proceso quirúrgico: Introducción El proceso quirúrgico tiene tres partes (preoperatorio, intraoperatorio y postoperatorio), en las que las circunstancias del paciente y las actividades de enfermería son diferentes. Los profesionales de la enfermería quirúrgica deben conocer con detalle estas fases. ◆ Para garantizar la correcta asistencia en el proceso quirúrgico por parte de los/as enfermeros/as disponemos de dos medios fundamentales: uno es la formación de los profesionales y el otro es la estandarización de los procesos a aplicar. ◆ Se entiende por enfermería perioperatoria: “El papel que la profesión de enfermería ha desarrollado con la asistencia del paciente quirúrgico. Esta disciplina comprende su asistencia total antes, durante y después de la cirugía. Entre los deberes de la enfermera perioperatoria se incluye el desarrollo y la implantación de un plan preoperatorio de asistencia al paciente”. 197 Preoperatorio: comienza cuando se toma la decisión de someter al paciente a una intervención quirúrgica. Durante esta fase, la enfermera identifica las necesidades fisiológicas, psicosociales y espirituales del paciente, así como los problemas potenciales. A continuación, el profesional enfermero lleva a cabo las acciones encaminadas a resolver cada uno de los problemas que se hayan planteado, ofreciendo así una ayuda individualizada. Esta fase termina cuando el paciente se traslada a la mesa quirúrgica. Intraoperatorio: empieza con el traslado del paciente a la mesa quirúrgica. Todas las actividades se enfocan con el único fin de cubrir sus necesidades y de procurar su bienestar durante todo el proceso; el paciente reconoce a la enfermera que ha realizado la visita preoperatoria y establece con ella una relación paciente-enfermera. En esta fase el profesional enfermero ha de realizar sus funciones dentro del plan quirúrgico con habilidad, seguridad, eficiencia y eficacia. Esta etapa fi- ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN EL BLOQUE QUIRÚRGICO naliza cuando se admite al enfermo en la sala de recuperación. ◆ Postoperatorio: se inicia con la admisión del paciente en la Unidad de Recuperación Postanestésica (URPA) y finaliza cuando el cirujano suspende la vigilancia. Las enfermeras deben cerciorarse de que todos los procedimientos y técnicas de enfermería se ejecutan de forma correcta; así, los indicadores del buen resultado del proceso perioperatorio serían la satisfacción de todas las necesidades del paciente y el logro de los resultados deseados. Examinar el nivel de anestésico líquido que queda en cada vaporizador (desfluorano, halotano, fluorano, etc.). Nunca debe llenarse en exceso, ya que podría ser bombeado al interior del circuito. Cerrar correctamente el tapón de llenado, que es la fuente más común de fugas. ◆ Demostrar que la válvula de oxígeno rápida libera instantáneamente flujo al ser accionada (O2 puro al 100%). ◆ Comprobar que la concertina se mueve libremente durante el ciclo respiratorio. ◆ Dirigir el selector de sistema anestésico hacia la ventilación espontánea o manual sin encontrar dificultad alguna. ◆ Verificar que la válvula de escape nos permite girar el disco obturador para abrirla o cerrarla, permitiendo así liberar posteriormente el exceso de gases a la atmósfera. ◆ Inspeccionar el nivel del absorbedor de CO2 (cal sodada). El absorbedor se empieza a agotar desde la parte inferior cambiando a color violeta. Dicha parte no debe superar la mitad del depósito. ◆ Comprobar que los tubos anillados (permiten la conducción de la mezcla de gases) estén perfectamente colocados en sus respectivas válvulas unidireccionales. ◆ Asegurar la correcta elección de la bolsa reservorio (en adultos es de 2 l). ◆ Controlar que el sistema de depuración que elimina los gases anestésicos de desecho esté conectado. ◆ Revisar todo el material accesorio que debe encontrarse en el respirador: ◆ Preparación del quirófano Antes de la llegada del paciente al quirófano para comenzar una intervención quirúrgica, la Enfermera Circulante (EC) y la Enfermera Instrumentista (EI) deben realizar una serie de preparativos encaminados a asegurar el correcto desarrollo de la actividad quirúrgica. Estos preparativos varían según el tipo de cirugía, por lo que se debe conocer de antemano qué operación se va a llevar a cabo. Consisten en: Comprobación del aparataje y del equipo accesorio Inspeccionar las conexiones de alimentación de gases para asegurar que no existan fugas. ◆ Verificar la conexión de las tomas de alimentación con el código de color adecuado (que depende del fabricante). El código de colores habitual es: blanco: O2 ; azul: protóxido; amarillo: vacío; gris: aire comprimido. ◆ Comprobar que el flotador de los caudalímetros (O2, N2O, etc.) quede en la parte inferior del tubo cuando estén cerrados. ◆ Asegurar la falta de movimientos erráticos de los flotadores al ajustar el flujo de los gases en los caudalímetros. ◆ Crear una mezcla de O2/N2O hipóxica y comprobar el correcto funcionamiento de la alarma de seguridad. ◆ – Mascarillas faciales de varios tamaños. – Dos laringoscopios, uno con pala larga y otro con pala corta (comprobar que funcione la luz). – Guedell de tamaño adecuado a cada paciente. – Pinzas de Maguill. – Fonendoscopio. – Esparadrapo de tela y papel. – Venda para sujetar el tubo endotraqueal. – Fiadores de varios tamaños. – Tijeras. – Ambú. ◆ 198 Encender el monitor y comprobar que todas las determinaciones que necesitamos estén configuradas. Atención de enfermería en el paciente quirúrgico Disposición de mesas y material accesorio Conectar los aspiradores (uno para anestesia y otro/s para la cirugía) a la toma de vacío y dejar el de anestesia preparado con una sonda de aspiración (tipo yankauer). ◆ Comprobar que la/s bomba/s de perfusión estén conectadas a la red. ◆ Verificar que el nivel de agua bidestilada del calentador de sueros (hot line) sea el adecuado. ◆ Conectar la placa de bisturí eléctrico. ◆ Tener preparado el calentador térmico con una manta de brazos y otra de piernas para su posible uso. ◆ Encender las lámparas quirúrgicas, revisar su haz de luz e intensidad y moverlas en diferentes posiciones para comprobar que todos sus giros son posibles. ◆ Probar que la mesa quirúrgica realiza todos los movimientos correctamente. ◆ Encender el negatoscopio y revisar que luce adecuadamente. ◆ A la hora de organizar el interior del quirófano, retiraremos todas las mesas y el equipo innecesario (Ver Imágenes 1 y 2). Reloj de pared: comprobar la hora y su correcto funcionamiento. ◆ Mesa de instrumental: sobre ella se colocará ropa estéril donde se depositará el material necesario para cada intervención. ◆ Mesa de mayo: se utiliza para ubicar el instrumental que será usado con más frecuencia durante la operación. Se cubrirá antes de la cirugía y se situará directamente sobre el paciente, pero no en contacto con él. ◆ Mesas accesorias: en ellas se ubican los materiales e instrumental complementarios para cada operación y para las distintas técnicas de enfermería y anestesia (vía central, sondaje vesical, etc.). ◆ Imagen 1. Disposición del quirófano antes de la intervención 199 ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN EL BLOQUE QUIRÚRGICO Imagen 2. Vista de la organización de los aparatos del quirófano antes de la intervención la EI, con la ayuda del auxiliar de enfermería, comienzan la reposición de los medicamentos necesarios para la práctica de la anestesia y el desarrollo de la cirugía, así como la reposición de todo material fungible y no fungible que sea necesario en cantidades mínimas, para poder renovarlo con frecuencia. Carro con el material indispensable: suturas, hojas de bisturí, compresas, drenajes, etc. ◆ Cubetas: se usan como cubo de basura. Están cubiertas por una bolsa de plástico y suelen tener una base con ruedas. ◆ Cesto para ropa sucia: provisto de la bolsa de color indicada según cada hospital. ◆ Carro de anestesia: con toda la medicación necesaria, sueros, tubos endotraqueales, sistemas arteriales, vías centrales y todo el material fungible esencial para que el anestesista pueda desarrollar su trabajo. ◆ Preparación específica para la intervención Según la intervención quirúrgica a realizar, la EC y la EI se encargarán de traer el equipo textil y la/s caja/s de instrumental y también de preparar todo el material fungible y no fungible necesario para poder realizar dicha intervención. Solicitarán la ayuda del auxiliar de enfermería y del personal de servicios generales para el traslado de material pesado, como consolas de motores, bisturí eléctrico de pie, equipo de laparoscopia, etc. Reposición de medicamentos y de material fungible y no fungible Una vez que se ha comprobado que la disposición de los materiales del quirófano es la adecuada y se ha confirmado su perfecto funcionamiento, la EC y 200 Atención de enfermería en el paciente quirúrgico do quirúrgico. Una enfermera no apresurada y comprensiva invita a la confidencia del paciente. La visita ha de realizarse antes del día de la operación. Los principales objetivos de esta visita son: Recepción del paciente Antes de la realización de cualquier procedimiento quirúrgico, los pacientes deben ser preparados de forma adecuada para minimizar el impacto y los riesgos potenciales de la intervención. Esto incluye una preparación tanto física como emocional. Para ello se cuenta con herramientas como la consulta preanestésica y la visita preoperatoria. Aliviar la ansiedad y los temores del paciente. ◆ Proporcionar información veraz y aclarar malos entendidos. ◆ Permitir al paciente expresar sus sentimientos y conocer su punto de vista sobre la operación. ◆ Orientar y preparar al enfermo y a sus familiares para la cirugía y el período postoperatorio. ◆ Contribuir a la cooperación y participación del paciente y facilitar la comunicación. ◆ Consulta preanestésica, visita preoperatoria y funciones de la enfermera La valoración preanestésica es realizada por un médico especialista en anestesia y reanimación y tiene como objetivo asegurar que el paciente sea intervenido en las mejores condiciones posibles y conseguir una mejor calidad asistencial. Se lleva a cabo en el servicio de anestesiología una vez que el paciente es programado para un procedimiento quirúrgico. Los objetivos básicos de dicha valoración son: La enfermera de la Unidad de Hospitalización recibe al paciente a su ingreso. El paciente puede ser admitido en el hospital uno o más días antes de una operación programada. Pueden estar indicados estudios radiológicos, endoscópicos o de otro tipo para confirmar el diagnóstico médico. Efectuar la anamnesis y la exploración. ◆ Realizar exámenes complementarios. ◆ Valorar el riesgo anestésico-quirúrgico. ◆ Establecer las recomendaciones anestésicas. ◆ Reducir la morbimortalidad perioperatoria. ◆ Obtener el consentimiento informado. ◆ Familiarizar al paciente con la información preoperatoria. ◆ Valorar la situación social del enfermo. ◆ La enfermera es la encargada de: Revisar la valoración realizada por el anestesista, en la que nos indicará si es necesario administrar alguna medicación antes de la intervención. ◆ Administrar medicamentos orales que el paciente toma de forma habitual, si el médico así lo prescribe. ◆ Aplicar medidas específicas para la preparación de cada intervención (tratamiento antibiótico preventivo, profilaxis antitrombótica, preparación de colon, extracción de analíticas, etc.). ◆ Comprobar que el preoperatorio y las pruebas complementarias se hayan realizado y que todos los consentimientos informados estén debidamente cumplimentados. ◆ Informar al paciente de que no debe tomar nada por vía oral desde 6-8 horas antes de la intervención. En algunas ocasiones será necesaria la canalización de vía periférica para administrar fluidos, como en el caso de pacientes diabéticos, personas ancianas propensas a la deshidratación, etc. ◆ Enseñar al paciente cómo realizar un aseo completo con jabón antimicrobiano la noche anterior y la misma mañana de la intervención. En el caso ◆ La visita preoperatoria es un instrumento al servicio de los profesionales de enfermería implicados en todo el proceso, con especial énfasis en la colaboración entre las enfermeras de la Unidad de Hospitalización y las del Bloque Quirúrgico. Los pacientes que esperan una intervención quirúrgica suelen experimentar distintos miedos y esperanzas. El personal de enfermería debe determinar las percepciones, emociones, conductas y sistemas de apoyo que pueden ayudar o interferir en la capacidad del paciente para progresar durante el perío201 ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN EL BLOQUE QUIRÚRGICO de los pacientes que no puedan asearse solos, el lavado personal lo realizará la enfermera junto con el auxiliar de enfermería. ◆ Advertir a los pacientes que deben retirarse todas las joyas y elementos metálicos que lleven. ◆ Mantener libres de esmalte las uñas del paciente. ◆ Proporcionar apoyo emocional y espiritual. Facilitará el contacto con un sacerdote, si así lo solicita el paciente, y ayudará a la enfermera quirúrgica a preparar al paciente para afrontar positivamente el proceso quirúrgico hasta el traslado a la zona de intervenciones. ◆ Cumplimentar el registro preoperatorio de la Unidad de Hospitalización. Comprobación de datos Debe realizarse a la llegada del paciente al antequirófano. La EC es la encargada de verificar la identidad del paciente, así como su historia clínica, y de comprobar que la preparación preoperatoria es la adecuada. En este momento es importante que se haya realizado la visita preoperatoria, ya que el paciente agradecerá el ver una cara familiar (Ver Imagen 3). Imagen 3. Llegada del paciente al antequirófano En la historia clínica hay que revisar (Ver Imagen 4): Exámenes de laboratorio: en general se solicitará una hematología completa y una bioquímica sanguínea. También pueden ordenarse un estudio de coagulación, la determinación general de orina y pruebas cruzadas para transfusión sanguínea (sólo en los casos en los que pueda ser necesaria). ◆ Radiografía de tórax: se aconseja en pacientes mayores de 65 años, obesos, fumadores o en aquellos en los que la historia clínica y la exploración sugieran la existencia de alguna patología específica. ◆ Electrocardiograma: es una prueba inocua, rápida y de bajo coste. No se requiere de forma rutinaria. Puede pedirse a pacientes de más de 35 años, así como a todos los que tengan problemas cardiacos. ◆ Registro preoperatorio de la Unidad de Hospitalización: se comprueba que la administración del tratamiento indicado ha sido la adecuada y que las pruebas específicas se han llevado a cabo. ◆ Imagen 4. Comprobación de la historia clínica 202 Atención de enfermería en el paciente quirúrgico ◆ Consentimiento informado: debe comprobar que esté firmado. Servir como un medio de comunicación útil y efectivo entre los profesionales enfermeros de las distintas unidades implicadas. ◆ Favorecer la continuidad de los cuidados de enfermería. ◆ Proporcionar una base legal y administrativa del trabajo realizado. ◆ Servir de instrumento escrito para la evaluación e investigación de los cuidados de enfermería. ◆ Revisión del paciente Ayunas: hay que confirmar con el paciente el momento en que dejó de tomar alimentos sólidos y líquidos. ◆ Paciente: verificar que no trae consigo ningún objeto metálico ni prótesis dental móvil y que la única prenda de vestir que lleva puesta es el camisón del hospital. ◆ Alergias: es necesario informarse de si tiene alguna alergia; si la tuviera, se comunicará a todo el equipo quirúrgico dicha alergia para evitar errores en la administración de medicamentos y técnicas intraoperatorias. ◆ El registro intraoperatorio de enfermería consta de distintos apartados: ◆ – Nombre y número de historia del paciente. – Número de cama. – Número de intervención asignado en el parte de quirófano (en cirugía de urgencias no se cumplimentará). – Fecha de intervención (día, mes y año). – Número de quirófano en el que se realiza la intervención. – Nombre del departamento que efectúa la intervención. Registro intraoperatorio de enfermería Es un documento en el que se recoge por parte del personal de enfermería una serie de procedimientos realizados durante el proceso quirúrgico, los cuales afectan o pueden afectar a los cuidados posteriores del paciente. Alergias: se anotarán las alergias del paciente; en caso de no padecer ninguna se anotará: “No conocidas”. Este espacio nunca debe quedar en blanco. ◆ Diagnóstico preoperatorio: se anotará el diagnóstico preoperatorio que se suponga. ◆ Personal: se registrará el nombre del cirujano responsable, ayudantes, anestesiólogo, EI, EC y enfermera perfusionista (si la hubiera). ◆ Tipo de anestesia. ◆ Posición del paciente: se señalará la posición del paciente durante la intervención quirúrgica y las protecciones necesarias durante su posicionamiento. ◆ Horas: se anotará la hora de los distintos momentos del proceso quirúrgico (se utilizará el horario de 0-24 horas). ◆ Con dicho documento se registran, aparte de una serie de datos administrativos necesarios para el correcto funcionamiento de la unidad, los cuidados y acciones a los que se ha sometido al paciente, así como la situación en la que se encuentra a la salida del Área Quirúrgica. Hay que considerar que el paso de los pacientes por este área dura un tiempo limitado, y a menudo corto, en el cual se le deben administrar gran cantidad de cuidados que en muchos casos pueden pasar inadvertidos, pero que se realizan sistemáticamente. Los objetivos de este documento son: ◆ Datos administrativos: – Llegada a quirófano. – Comienzo y fin de la anestesia. – Comienzo y fin de la cirugía. – Salida de quirófano. Ofrecer una relación escrita de los cuidados de enfermería aplicados al paciente durante el procedimiento quirúrgico. 203 ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN EL BLOQUE QUIRÚRGICO así como las precauciones especiales que se deben tomar para prevenir cualquier tipo de contagio. ◆ Drenajes: se anotará el tipo y situación de los drenajes con los que el paciente termina la intervención quirúrgica. ◆ Apósito: habrá que apuntar el tipo y localización del apósito con el que el paciente sale de quirófano. ◆ Destino del paciente: se señalará el área donde se va a trasladar al paciente a su salida de quirófano. ◆ Observaciones: será necesario anotar los cuidados que han sido necesarios durante la intervención y los comentarios de enfermería que sean precisos para el cuidado posterior del paciente. ◆ Firma: se registrará la firma legible de la EC responsable del paciente durante la intervención quirúrgica. Vías: se anotará el tipo y localización de las vías sanguíneas que tenga el paciente a su llegada o que le sean insertadas en quirófano. ◆ Sondajes: se registrará tipo y número de sonda nasogástrica y vesical que se le inserte en quirófano. ◆ Preparación de la piel: ◆ – Apuntar si es preciso rasurar al paciente en la zona quirúrgica. – Registrar la situación de la placa de bisturí. – Anotar con qué preparado se realiza la limpieza de la piel. Isquemia: se anotará la zona de isquemia, así como la hora de inicio y fin de la misma. ◆ Pruebas diagnósticas: se apuntarán las pruebas diagnósticas realizadas y enviadas desde quirófano (anatomía patológica, citología, muestras para microbiología, analíticas de sangre, etc.). Es importante anotar el número de muestras y el nombre de la pieza remitida. ◆ Administración de hemoderivados: si el paciente ha recibido transfusión sanguínea, reflejar el tipo y cantidad administrada (concentrado de hematíes, plaquetas, plasma fresco congelado, crioprecipitados). ◆ Radiología: si durante la intervención el paciente ha estado expuesto a rayos X se registrará. ◆ Implantes costosos: se anotará si el paciente ha recibido algún tipo de prótesis, ya sea ortopédica, vascular, malla abdominal o cualquier otro tipo de implante que sea necesario reflejar. También se tomará nota de la referencia o código y/o el lote del producto implantado o utilizado. ◆ Recuentos: se hará un recuento de compresas, gasas, agujas, instrumental y otros objetos añadidos al campo quirúrgico para verificar que no ha quedado ninguno dentro del cuerpo del paciente y se anotará cualquier incidencia respecto al contaje. Cuando se haga un packing terapéutico se registrará el número de compresas que se dejan en el interior. ◆ Tipo de intervención: se señalará el tipo de cirugía dentro de la clasificación establecida. ◆ Precauciones especiales: se apuntará si el paciente padece alguna enfermedad (VIH, hepatitis, etc.), ◆ Atención psicológica Los individuos difieren en su habilidad para enfrentarse a situaciones de tensión; la enfermedad vuelve vulnerables a las personas. La cultura, la religión y los factores socioeconómicos modifican la actitud del paciente hacia la enfermedad y hacia una operación inminente. La aprensión anticipada, a pesar de ser normal en cierto grado, puede disminuir el pensamiento crítico y la habilidad en la toma de decisiones. Los pacientes quirúrgicos están en una situación psicológica peligrosa. El temor a perder la vida, el dolor, la inmovilización, la dependencia y la alteración de la vida y del organismo derivados de la cirugía despiertan una fuerte respuesta emocional que puede desempeñar un importante papel en la evolución quirúrgica y en la posterior recuperación (Ver Imagen 5). Los temores que suelen asociarse a la cirugía y a la anestesia son: ◆ 204 Temor a lo desconocido: que puede estar relacionado con la incertidumbre ante el resultado quirúrgico. Atención de enfermería en el paciente quirúrgico Imagen 5. Perspectiva del paciente desde la mesa quirúrgica riable en las actividades cotidianas, sociales y profesionales de los pacientes. ◆ Temor a la pérdida de una parte del cuerpo: la cirugía altera la integridad física y amenaza la imagen corporal. ◆ Miedo al procedimiento inminente y al pronóstico que se produzca. ◆ Desconfianza a la incompetencia del personal médico. ◆ Temor a la muerte: ya que no existe ninguna intervención ni anestésico que ofrezca una total seguridad. Pérdida del control: los pacientes pueden estar preocupados por sus acciones o verbalizaciones mientras están bajo los efectos de fármacos y anestésicos. Además, durante el proceso quirúrgico, el paciente queda en una situación de dependencia casi total en relación con el equipo asistencial. ◆ Ansiedad por la anestesia: miedo a una inducción desagradable o a que se produzcan imprevistos durante la anestesia. ◆ Miedo al dolor: por una analgesia postoperatoria inadecuada. ◆ Temor a la separación del grupo de apoyo habitual: el paciente queda separado de su familia y pasa a ser cuidado por extraños. ◆ Pérdida de la intimidad: los pacientes deben responder a preguntas personales en relación con su cuerpo y vida privada, ser sometidos a distintas pruebas y exámenes por parte de personas extrañas y aceptar ayuda para realizar las funciones corporales. ◆ Dudas por la alteración de los patrones de vida: la cirugía y la recuperación interfieren de forma va◆ Los niños responden a sus miedos de una manera diferente a la de los adultos. En la mayoría de los casos no pueden comprender el entorno quirúrgico. El sentimiento más abrumador es la ansiedad que provoca la separación de su familia. Además, no entienden el estado de inconsciencia y frecuentemente asocian el sueño anestésico con la muerte. Un acercamiento positivo disipará los temores infantiles. Al niño hay que hacerle confiar en que su 205 ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN EL BLOQUE QUIRÚRGICO enfermeras, o en forma no verbal a través de expresiones físicas, como manos en puño o labios apretados. Los pacientes responden a sus sensaciones de inseguridad y dependencia haciéndose agresivos y exigentes, en un intento de controlar su ambiente. ◆ Choque: es una reacción frecuente cuando por primera vez se les revela la existencia de un padecimiento maligno. El paciente puede responder de forma automática, sin pensar o sentir o ser incapaz de responder a preguntas o actuar con coherencia. En esta situación necesitan comprensión y apoyo para enfrentarse a la realidad. ◆ Aflicción y congoja: los sentimientos de soledad, pérdida e infelicidad suelen acompañar a la pérdida de algo valioso o a la desfiguración corporal, ya sea en caso de quemaduras graves, amputación o alteración en la estructura corporal. El paciente se apena por el cambio sufrido o se acongoja por su muerte inminente, sobre todo en caso de padecimientos malignos avanzados. Las visitas de otras personas que han pasado por el mismo tipo de experiencias ayudan a los pacientes en el período de adaptación. operación le hará sentir mejor, pero nunca se le debe engañar sobre ningún aspecto de la cirugía, especialmente sobre el dolor. Es conveniente prepararlo para cada paso que se va a tomar mientras esté todavía despierto. Los pacientes expresan sus temores con una serie de reacciones: Preguntas: los pacientes ansiosos tratan de encontrar la razón de sus enfermedades. Se preguntan: “¿Por qué yo?”. ◆ Suspicacia: carecen de confianza, no aceptan todo lo que se les dice o sienten que no se les ha dicho todo. Estos pacientes suelen estar a la defensiva. También pueden ser suspicaces los enfermos con problemas de audición. ◆ Culpabilidad, vergüenza, castigo: el paciente puede sentirse avergonzado por su enfermedad o pensar que ésta representa una forma de castigo por algún comportamiento previo o mala acción imaginaria. ◆ Depresión: las enfermedades pueden llegar a deprimir al paciente que desea escapar de una situación intolerable. La depresión puede manifestarse en signos agitados de desesperación, desesperanza, falta de interés o desconsuelo. ◆ Retraimiento: puede acompañar a la depresión. Es una reacción al sentimiento de que se ha violado su intimidad física y emocional. ◆ Dependencia: la enfermedad obliga al paciente a depender de los demás. Muchos enfermos se sienten molestos porque otros toman decisiones por ellos. ◆ Regresión: puede acompañar a la dependencia. Los pacientes pueden retroceder a niveles de comportamiento de menos madurez, llorar de forma incontrolable, no responder o estar irritables. ◆ Renuncia: para proteger su ego algunos pacientes pueden negar la realidad y el peligro, con el fin de reducir su ansiedad, conservar la estabilidad y controlar el pánico. Puede ser una reacción peligrosa si la persona no reconoce que tiene una enfermedad grave y no acepta el tratamiento indicado. ◆ Furia, hostilidad: la tensión emocional puede expresarse en forma verbal por medio de críticas a las figuras representativas de autoridad, como médicos y ◆ La comunicación es la base de la continuidad en la atención del paciente y del trabajo en equipo del personal. Dicha comunicación sólo es efectiva cuando paciente, médico y enfermera se entienden entre sí. La comunicación permite establecer las relaciones interpersonales, hacer claras las acciones y ayudar a los pacientes a adaptarse a los problemas relacionados con la salud y el ambiente hospitalario. La comunicación se facilita al poner en práctica: El contacto visual, mirar a los ojos del que habla. La atención a quien transmite la información. ◆ La capacidad receptiva, reconocer que el mensaje que transmite se expresa sin prejuicios. ◆ ◆ Los criterios para determinar el éxito de la comunicación son: ◆ 206 Dejar que el paciente repita el mensaje que se le ha transmitido, para comprobar que lo ha comprendido correctamente (retroalimentación). Atención de enfermería en el paciente quirúrgico en confiar y creer en el mensaje no verbal. Se afirma que las señales no verbales son más espontáneas, más difíciles de simular y menos susceptibles de ser manipuladas. ◆ Sustitución: la conducta no verbal puede sustituir a los mensajes verbales. A veces, cuando la conducta no verbal sustitutiva fracasa, el comunicante recurre a la verbalización. ◆ Complementariedad: la conducta no verbal puede modificar o elaborar mensajes verbales. Las funciones complementarias de la comunicación no verbal sirven como señal de las actitudes e intenciones de una persona respecto a la otra. ◆ Acentuación: el comportamiento no verbal puede acentuar las partes del mensaje verbal, así como el subrayado y determinados signos sirven para enfatizarlas en el lenguaje escrito. A menudo, los movimientos de cabeza o de manos se usan para acentuar el mensaje verbal. ◆ Regulación: las conductas no verbales también se utilizan para regular los flujos de comunicación. Cuando una persona interrumpe muy a menudo o es desatenta, se siente que ello equivale a una declaración acerca de la relación y, tal vez, a una muestra de falta de respeto. Conseguir respuestas correctas por parte del paciente. ◆ Lograr cambios en el comportamiento del paciente. ◆ A través de la comunicación verbal la enfermera influye en el comportamiento individual del paciente animándolo a expresar sus sentimientos, a la vez que le proporciona información e intercambio de ideas. Por medio de la comunicación no verbal la enfermera consigue indicadores sobre los sentimientos y actitudes sobre la propia interpretación de signos. Cuando el paciente se siente triste, solo o aislado, el contacto físico constituye la forma más empática de comunicación. Michael Argyle identifica las aplicaciones del comportamiento no verbal en la comunicación humana: Expresar emociones. ◆ Transmitir actitudes interpersonales (gusto/disgusto, dominación/sumisión, etc.). ◆ Presentar a otros la propia personalidad. ◆ Acompañando el habla, alimentar las intervenciones, la retroalimentación, la atención, etc. ◆ Las señales no verbales, al igual que las palabras y las frases, pueden tener múltiples usos y significados. Por ejemplo, una sonrisa puede ser parte de una expresión emocional, un mensaje relacionado con una actitud, parte de una autopresentación o la respuesta de un interlocutor para controlar la interacción. Así, el comportamiento no verbal tiene las siguientes funciones: El movimiento del cuerpo comprende de un modo característico los gestos, los movimientos corporales, los de las extremidades, las manos, la cabeza, los pies y las piernas, las expresiones faciales, la conducta de los ojos (parpadeo, dirección y duración de la mirada, dilatación de la pupila) y también la postura. Hay diferentes tipos de conducta no verbal. Algunas señales no verbales son muy específicas y otras, más generales. Unas tienen la intención de comunicar y otras son meramente expresivas. Otras proporcionan información acerca de las emociones, mientras que otras dan a conocer rasgos de la personalidad o actitudes. Las manifestaciones no verbales repetidas con más frecuencia durante el período preanestésico son: Repetición: la comunicación no verbal puede meramente repetir lo que se dice verbalmente, por ejemplo, indicar a una persona que tiene que ir hacia la derecha y señalar con la mano en esa dirección. ◆ Contradicción: el comportamiento no verbal puede contradecir la conducta verbal. Si no hay razón para sospechar que puedan estar presentes señales de conflicto, es probable que confiemos preferentemente en los mensajes verbales. No obstante, se dice que cuando se reciben mensajes contradictorios entre lo verbal y lo no verbal, se hace mejor ◆ ◆ 207 El llanto: puede ser por temor, ira, humillación o impotencia hacia algo, por depresión, etc. ACTUACIÓN DE ENFERMERÍA EN EL BLOQUE QUIRÚRGICO La autopalpación: algunos pacientes tienden a cruzarse de brazos y piernas como medida de autoprotección. Freedman sugiere que puede existir una estrecha unión entre el hecho de tocarse el cuerpo y la preocupación por uno mismo. ◆ La risa: el miedo nos provoca una risa que parece incongruente en una situación dada, nos hace fingir tomar a broma algo temeroso; lo que Ekman llama “ocultamiento de una emoción o el sustituir una emoción que se siente por una que no se siente” (Ver Imagen 6). Transmitir responsabilidad. ◆ Hacerle partícipe de los cuidados. ◆ Mantener la confidencialidad y el respeto. ◆ ◆ Monitorización y anestesia Una vez que el quirófano está preparado, la historia clínica comprobada y el paciente debidamente identificado y revisado, éste puede ser trasladado a su interior. Las actividades enfermeras ante las expectativas y temores del paciente son: Transferencia a mesa quirúrgica Conocer las expectativas y temores del paciente. Reconvertir ideas erróneas. ◆ Mostrar empatía. ◆ Informar sobre su situación. ◆ Tolerar la angustia. ◆ No actuar precipitadamente. ◆ Establecer límites. ◆ Ser asertivos. ◆ Ayudar al paciente a moverse desde la camilla hasta la mesa de operaciones. Debe proporcionarse la asistencia adecuada para transferir con seguridad al paciente y para prevenir lesiones del personal durante el traslado. ◆ Prestar especial atención a los catéteres, tubos de drenaje y aparatos de tracción. No han de desprenderse. ◆ Evitar la exposición innecesaria del paciente, preservando cuidadosamente su intimidad. ◆ Asegurar la comodidad al aplicar las sujeciones. Explicar al enfermo que son para su seguridad. ◆ Colocar los brazos del paciente a los lados de la mesa. El ángulo de abducción del brazo no debe ser mayor de 90º debido a que el plexo nervioso braquial puede ser lesionado por una exagerada abducción prolongada del brazo. ◆ ◆ Monitorización Las técnicas quirúrgicas y anestésicas se han hecho cada vez más complejas, permitiendo a muchos pacientes en estado crítico someterse a procedimientos quirúrgicos. Durante la cirugía extensa bajo anestesia, el cuerpo se ve sometido a mucho estrés. Para medir de forma continua las reacciones del paciente ante el estrés, la valoración clínica por auscultación, inspección y pal- Imagen 6. El tacto como elemento tranquilizador 208