A/A Fernando Rodríguez Director Ejecutivo de Ecoener-Hidralia en Centroamérica Estimado Sr. Rodríguez, Como he sabido gracias a la campaña de tres ONG (Alianza por la Solidaridad, Amigos de la Tierra y Asociación Mujeres de Guatemala AMG), su empresa pretendía construir una central hidroeléctrica en el municipio de Santa Cruz de Barillas, en Guatemala, a pesar del rechazo de la inmensa mayoría de la población local, cometiendo para ello graves atropellos a los derechos humanos de las comunidades locales. La central hidroeléctrica que su empresa proyectaba suponía la apropiación del agua del Río Canbalam, en clara contradicción con los usos de los pobladores locales. Así mismo su construcción y explotación implicaban graves impactos ambientales, incluyendo movimientos de tierra, inundación de una amplia zona, pérdida de biodiversidad y destrucción de sitios sagrados. Además, su empresa no respetó el derecho a la consulta previa, libre e informada de los pueblos indígenas, como señala la normativa internacional*, para la implantación de este proyecto hidroeléctrico, denominado Canbalam I. Bien al contrario, la estrategia deliberada de criminalización y persecución de líderes comunitarios e indígenas, implantada en Barillas por su empresa, contraviene los derechos civiles y políticos de la población. En una consulta comunitaria llevada a cabo por las propias comunidades locales de la zona, más del 90% de la población se posicionó en contra de su proyecto. Es por ello que le solicitamos que abandonen definitivamente Santa Cruz de Barillas, cesen las intimidaciones y se responsabilicen de los daños causados hasta el momento a la comunidad y sus habitantes, llevando a cabo medidas de reparación, individuales y colectivas, por los daños causados. Gana la imagen de su empresa, ganan las comunidades y ganamos todos y todas. Un cordial saludo, * Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre pueblos indígenas y tribales de 1989.