DEMARCACIÒN DE TIERRAS INDÌGENAS EN PERIJÁ 1.- ¿Cuál es la verdadera problemática de la Demarcación de Tierras Indígenas en la subregión Perijá del estado Zulia? Es importante destacar que los productores agropecuarios no se han negado “nunca” al proceso de demarcación de tierras indígenas, ya que es un planteamiento legal, constitucional que debe respetarse. Lo que realmente se cuestiona es la forma como se viene realizando el proceso de demarcación de tierras indígenas. Esta se ha dado a espaldas de los productores agropecuarios, de los campesinos, de la etnia Wayuu que comparte territorio con los yukpas, con criterios empíricos, basándose en entrevista a ancianos yukpas sobre sitios históricos, ancestrales (donde existieron cementerios, sitios de pesca, escuelas) para trazar una poligonal donde existen 600 predios en plena producción; se ha dado con injerencia de actores externos que desconocen la cultura del indígena y la convivencia que por años en sana paz han llevado productores y yukpas, con el agravante de que han invadido, saqueado y robado bienes de fundos cuyo trabajo data desde hace más de 70 años, sustentado en una cadena documental que va de generación en generación. 2.- ¿Cuándo se comienza a hablar del tema de demarcación de tierras en Venezuela? Qué leyes lo establecen? Durante una Convención de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se aprobaron dos convenios internacionales que prevé entre otros asuntos relativos al sector indígena la obligación del estado de demarcar y titular según su legislación interna, la tierra y el hábitat de los pueblos y comunidades indígenas. En Venezuela, dicho convenio se hizo ley interna, mediante una ley aprobatoria de dicho convenio. En su artículo 14 prevé la acción de demarcación de las tierras y hábitat indígena, exigiendo como condición que el área a demarcar debe estar ocupada actualmente por los indígenas además de que dicha posesión u ocupación por parte del sector indígena sea tradicional y ancestral; de manera que para demarcar un área como tierra y hábitat indígena, se necesita que la ocupación por parte del pueblo o comunidad indígena sea ancestral, tradicional y además actual. El artículo 119 de la Constitución Nacional reproduce estos principios establecidos en el convenio, conjugando el verbo ocupar que requiere para la demarcación en tiempo presente. La Ley Orgánica de Pueblos y Comunidades Indígenas (LOPCI) reproduce estos principios, partiendo de que no obstante, en anteriores épocas desde la colonización de América, pasando por los procesos de independencia en el que en el caso de Venezuela no participaron los indígenas resulta imposible dado el surgimiento de la sociedad mestiza con el descubrimiento, devolver todos los territorios que pertenecían a los indígenas que necesariamente ahora han de convertir con esa población mestiza. Conclusión: Ninguno de estos instrumentos prevé anexión territorial o reivindicación de territorio en el procedimiento administrativo de demarcación. Tanto el convenio internacional como el resto de nuestro sistema legal interno remiten a la legislación ordinaria (Ley de Expropiación por causa de utilidad pública y social y articulo 115 de la Constitución) las acciones legales que puede tomar el estado para afectar la propiedad de terceros cuando necesite tomar de un particular un bien cualquiera para cumplir un fin público o de ineteres social. Ello conlleva a un precio justo evaluado por un experto y a un pago oportuno del bien que se necesite. 3.- ¿Cuántos predios, fincas y/o parcelas se verán afectadas por la propuesta de Demarcación de Tierras en Perijá? Cuántas hectáreas abarca aproximadamente? La Comisión Nacional de Demarcación realizó una propuesta de poligonal, que abarca una zona de estudio en acto de apertura, desde la margen sur del río Santa Rosa en Machiques hasta las inmediaciones de la planta de Cementos Catatumbo en Rosario de Perijá, con líneas rectas hacia el límite con Colombia. Son aproximadamente 600 predios en plena producción, sólo en el municipio Machiques de Perijá. Esto representa un 35% de la geografía del municipio para una población indígena de 12 mil habitantes según el último censo del Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que constituye una desproporción demográfica, tomando en cuenta que el resto de la población lo componen 160 mil habitantes. 4.- ¿ Cuántos productores, campesinos y parceleros se verán afectados? Son aproximadamente 200 fundos de medianos y grandes productores, más 400 parcelas en manos de campesinos y parceleros en su mayoría de la etnia Wayuu y quienes están organizados en un “Frente Campesino Revolucionario para la defensa del pequeño y mediano productor en el municipio Machiques de Perijá”. 5.- ¿ Qué porcentaje de la producción de carne y leche representa la zona de demarcación propuesta por la Comisión Nacional de Demarcación de Tierras? Según los cálculos establecidos por la Asociación de Ganaderos del municipio Machiques de Perijá (GADEMA), la zona que entra dentro de la propuesta de demarcación de tierras representa el 40 por ciento de la producción de carne y 200 mil litros de leche diarios que dejaría de generar Machiques. Son aproximadamente 120 mil cabezas de ganado y 6 millones de kilogramos anuales. 6.- ¿Cuál es el impacto económico que tendrá en el municipio Machiques y el estado Zulia? Tomando en cuenta que la zona en “estudio” representa el 40 % de la producción de carne y leche del municipio Machiques de Perijá y que este mueve su economía en un 85% en la producción agropecuaria, se calcula que se generaría un tremendo impacto económico desde todo punto de vista negativo para la región zuliana y el país, ya que el municipio Machiques es el municipio con más cabezas de ganado en Venezuela y uno de los principales productores de carne y leche. Quedarían sin empleo 4 mil 500 trabajadores directos y unos 10 mil trabajadores indirectos (latoneros, herreros, mecánicos, carpinteros, transportistas, etc. 7.- Existen intenciones diferentes a la necesidad de tierras para los indígenas que se esconden detrás de la problemática de demarcación? Existen evidencias, físicas, palpables, de que detrás del tema de la demarcación en Perijá hay otros intereses más allá de la necesidad manifiesta de tierras para el cultivo. La ampliación exagerada de la vía Machiques-Tokuko, dan cuenta de una vialidad con proporciones para el transporte de carga muy pesada. Hay antecedentes y denuncias específicas por parte de la población barí, de que existen concesiones mineras vigentes para la explotación del carbón en la Sierra de Perijá; son testigos de visitas de especialistas explorando la zona y han difundido en las comunidades indígenas que esto generaría empleo para el pueblo indígena, pero estos han investigado y saben que la explotación requiere de modernos equipos, uso de tecnología y mano de obra calificada y no se corresponde con la cantidad de empleos que pudiera generar esta actividad, en comparación con el daño ecológico. Existen documentos en la alcaldía de Machiques que dan cuenta de esta realidad. El tema más delicado y polémico, es que se dejaría un vasto territorio libre, en plena frontera colombiana donde hacen vida grupos irregulares y ligados al narcotráfico. Allí no existiría control por parte de civiles, autoridades militares o de otra índole, ya que se constituiría en territorio yukpa. El tema ha sido debatido ampliamente en asambleas de ciudadanos, con participación de productores, campesinos e indígenas, quines coinciden en evitar la penetración de estos grupos insurgentes con presencia activa en los predios y parcelas a lo largo de la frontera colombo-venezolana. Se ha denunciado en reiteradas oportunidades a las Fuerzas Armadas sobre la presencia de uniformados regulares que ofrecen custodia a cambio de dinero; los productores son extorsionados con vacunas para evitar ser secuestrado. Esta verdad se observa a diario con las estadísticas sobre secuestro en los estados fronterizos. 8.- ¿ Es la naturaleza de los indígenas la producción agropecuaria? Cuál es la experiencia de fincas tomadas por los indígenas yukpas en Machiques? La tradición ancestral de los indígenas yukpas es la siembra de café, malanga, y otros rubros agrícolas, la artesanía, la caza y pesca. En un mínimo porcentaje algunos grupos yukpas comenzaron a experimentar con la producción agropecuaria, cuyos resultados son incipientes. La más clara muestra de esta realidad la contituyen fundos que fueron invadidos por indígenas yukpas en la Sierra de Perijá, alegando que las tierras le pertenecen. La toma se ha realizado de manera violenta, muchas de ellas bajo amenazas de muerte hacia los productores, sin darle oportunidad de sacar sus bienes, por lo que muchos de ellos no solamente se quedaron sin sus tierras, sino sin ganado ni implementos de trabajo. FINCAS INVADIDAS POR YUKPAS Los casos más resaltantes son la invasión a las fincas: * Hacienda Maracay------------------ (Año 2001) ** Hacienda Tizina -----------------(Año 2003-RECUPERADA) * Hacienda Ceilán y La Gran China----- (Año 2004) * Hacienda Paja Chiquita------------------- (Año 2004) * Hacienda Medellín-------------------------- (Año 2008) ** Hacienda Tizina------------------(Año 2008) * Hacienda Kusare-------------------------- (Año 2008) * Hacienda Brasil ---------------------------- (Año 2008) Ninguna de las fincas invadidas por un pequeño grupo yukpa producen actualmente ni una cuarta parte de la producción que tenían antes de ser ocupadas ilegalmente, de hecho, en su mayoría están desoladas, sin pasto, han construido viviendas y algunas solo procesan quesos artesanales. Aquí se manifiesta claramente que no existe vocación agropecuaria en la comunidad yukpa. 9.- ¿Qué dicen las autoridades: municipales, regionales, nacionales? En un principio el alcalde actual del municipio Machiques, Vidal Prieto (PSUV), evitó por todos los medios ofrecer declaraciones sobre la problemática, sin embargo, con la visita de los ministros al municipio Machiques de Perijá, se solidarizó con sus opiniones sobre la “deuda histórica” que tenia el gobierno de reivindicar a los pueblos indígenas entregando tierras que ancestralmente “ocupan”. “Estoy con los yukpas, apoyamos la demarcación” , expresó Prieto durante la caminata realizada en Machiques el día de los pueblos indígenas. El Gobierno regional, representado por el Gobernador Pablo Pérez Alvarez (UNT), indicó que “con el Zulia lo que se pretende en una matanza laboral, al intentar acabar con el aparato productivo en Perijá 10.- ¿Qué opinan los productores agropecuarios, los campesinos, los indígenas yukpas y el pueblo perijanero? Los Productores: • No estamos en desacuerdo con la Demarcación de Tierras Indígenas, pero si estamos en contra de la forma como se está llevando el procedimiento, de espalda a los productores, tomando en cuenta criterios empíricos e irrespetando el derecho al trabajo de los terceros. • La demarcación debe hacerse ajustada a la ley, a lo que establece la Constitución Nacional, respetando el derecho al trabajo, tomando en cuenta las leyes ordinarias para la expropiación de fundos, bajo justo precio con avalúo de un experto y pago oportuno de las bienechurías. Campesinado: • Estamos en desacuerdo con la convivencia luego de la entrega de títulos colectivos, rechazamos la propuesta de este tipo de convivencia donde los “terceros” compartiríamos nuestro trabajo de años con el pueblo yukpa • Proponemos el respeto a nuestros derechos, al reconocimiento como pueblo Wayuu, trabajador, como única actividad contamos con la producción en nuestras tierras, queremos que nos indemnicen o nos reubiquen en tierras similares a la que hemos trabajado. • Solicitamos al gobierno ayuda para nuestra actividad, ya que hasta ahora el Plan Integral incluye solo al pueblo yukpa desconociendo al pueblo Wayuu. • De ser sacados, exigimos el pago oportuno, antes de la entrega de títulos colectivos. • Que el gobierno nacional se comprometa a evitar enfrentamientos y odio étnico entre yukpas y Wayuu, ya que ha habido situaciones de agresión. Yukpas • Queremos que nos demarquen la tierra que tenemos años a la espera del gobierno nacional. • Queremos escuelas, ambulatorios y vialidad, no queremos bases militares ni explotación de carbón en la Sierra • No queremos conflictos con ganaderos, que el gobierno pague las fincas que queremos y nos la entreguen.