SAN PEDRO CANISIO 1.− BIOGRAFÍA 1.1 Nacimiento y educación San Pedro Canisio nació el 8 de mayo de 1521 en la ciudad de Nijmegen, en los Países Bajos. Era, por tanto, holandés. Hizo sus estudios en la Universidad de Colonia; en Alemania. 1.2 Apostolado San Pedro Canisio se hizo jesuita en el año 1543 y fue profesor sucesivamente en las Universidades alemanas de Colonia e Ingolstadt y, más tarde, en la Universidad austríaca de Viena. También fundó centros universitarios, como el alemán de Munich (1559), el austríaco de Innsbruck (1562), otros tres alemanes en Dillingen (1563), Wurzburgo (1567) y Ausburgo, y otro austríaco en Viena. El trabajo de San Pedro Canisio que tuvo más influencia fue su Triple Catecismo, que escribió entre los años 1555 y 1558. 1.3 Muerte y canonización San Pedro Canisio murió el 21 de diciembre de 1597 en la ciudad suiza de Friburgo. Fue canonizado en el año 1925 y su fiesta es el día de su muerte; es decir, el 21 de diciembre. 2. ESPIRITUALIDAD DE SAN PEDRO CANISIO 2.1 La Compañía de Jesús La vida de San Pedro Canisio estuvo muy ligada a los primeros años de la Compañía de Jesús. Por lo tanto, para entender bien la espiritualidad de San Pedro Canisio habría que referirse primero a las circunstancias en que se fundó esta orden religiosa. La Compañía de Jesús fue fundada por San Ignacio de Loyola, español que se trasladó a París en 1528 y se quedó en esa ciudad como estudiante hasta 1535. Durante esta época reunió a los compañeros que habían de ser con él co−fundadores de la Compañía de Jesús. El 15 de agosto de 1535, San Ignacio llevó a su grupo de amigos (entre los que estaba San Francisco Javier, que sería uno de los más grandes misioneros jesuitas) a la Iglesia de Monmartre, en París, donde todos hicieron votos de pobreza, castidad y obediencia, así como de ir a Jerusalén en peregrinación y dedicar luego su vida para la salvación de las almas, aunque todavía sin la intención expresa de crear una orden religiosa. En 1535, San Ignacio tuvo que dejar París por razones de salud. En Venecia se reunieron con él sus compañeros con la intención de ir en peregrinación a Jerusalén, pero la guerra entre Venecia y el Imperio Turco hizo que el viaje fuera imposible. San Ignacio y la mayoría de sus compañeros fueron ordenados sacerdotes el 24 de junio de 1537. En 1539, San Ignacio y sus compañeros decidieron unirse para siempre formando una orden religiosa, y añadieron el voto de obediencia a un superior elegido por ellos a los votos que ya habían hecho de pobreza, 1 castidad y obediencia al Papa. El Papa Pablo III aprobó, en 1540, el Instituto de la Compañía de Jesús, es decir, el plan de la nueva orden religiosa. San Ignacio de Loyola fue elegido por sus compañeros General de la Compañía de Jesús en 1541. Como dije antes, San Pedro Canisio se hizo jesuita en 1543. Este Santo fue uno de los más famosos seguidores de San Ignacio. San Ignacio de Loyola, especialmente en sus últimos años, estuvo muy preocupado y ocupado con lo que pasaba en Alemania y la India. Envió a San Pedro Canisio a Alemania y a San Francisco Javier a la India. El momento en que se fundó la Compañía de Jesús coincidió con la reacción y lucha contra la reforma de Lutero (el nacimiento del protestantismo) y los primeros jesuitas se dedicaron con todo su empeño a esta lucha contra las ideas de Lutero. 2.2 Espiritualidad de San Pedro Canisio Quizás más que ninguno de sus contemporáneos, San Pedro Canisio retrasó el avance del protestantismo con su participación en los debates religiosos de Worms (Alemania, 1557), en el Concilio de Trento (poco después de esto, fue llamado a Roma por San Ignacio de Loyola) y en la Dieta de Ausburgo (Alemania, 1559). Canisio hizo caso de la urgente llamada que le hizo el Duque Gillermo I de Baviera para reformar la Iglesia Católica allí. En 1552, el Rey Fernando pidió a Canisio que intentase mejorar el catolicismo en Viena. Sus misiones de Alemania le hicieron ganar muchos amigos de todo tipo de clases, incluido el Emperador. Hizo también otras misiones importantes en Praga, en el sur de Alemania y en Austria, en Bohemia y en Suiza, donde en 1580 se quedó a vivir en Friburgo y fundó un colegio jesuita que ahora es la Universidad de Friburgo. Su Triple Catecismo, que escribió entre los años 1555 y 1558, contenía una muy buena explicación de las doctrinas del catolicismo. Su catecismo fue el más famoso de la Contrarreforma y tuvo alrededor de cuatrocientas ediciones en ciento cincuenta años. Su vida y su trabajo demostraron que era un hombre de una gran inteligencia y una gran fe, además de ser muy culto y sabio. Gracias a todo esto, San Pedro Canisio recibió el nombre de Segundo Apóstol de Alemania. Además es un Doctor de la Iglesia. 3. REFLEXIÓN PERSONAL Yo pienso San Pedro Canisio fue un santo muy particular porque no cualquier persona es capaz de convertir a tanta gente como lo hizo él. Logró convertir a tantas personas que le llamaban de un montón de sitios para que enseñase a los habitantes de dicho pueblo lo que era, de verdad, Dios y la Iglesia Católica y, así, que fuese más difícil que el protestantismo avanzase y desapareciese la religión católica. Para San Pedro Canisio, ir de lugar en lugar para convertir a gente y a más gente debía de ser muy duro pero, por amor a Dios, era capaz de hacer cualquier sacrificio con tal de agradarle y de cumplir su voluntad. San Pedro Canisio fue una persona muy caritativa, pues se preocupó mucho por los demás y puso mucho empeñó en que supiesen lo bueno que es Dios y que la Iglesia Católica es la verdadera. Fue además muy inteligente porque pudo convencer a muchas personas, que seguro que eran también inteligentes, de que las 2 ideas de Lutero no eran correctas y de que el protestantismo no era la religión verdadera. En resumen, yo creo que San Pedro Canisio fue una persona que, en la tierra, se porto muy bien con su prójimo y pudo alcanzar la santidad, cosa que también yo puedo llegar a alcanzar. 4. BIBLIOGRAFÍA • Diccionario Enciclopédico Espasa, 9ª. ed., 1985, tomo 4, pp. 267−268. • Encyclopaedia Britannica, 15ª. ed., 1985, tomo 2, p. 802. • Encyclopaedia Britannica, 15ª. ed., 1985, tomo 7, pp. 527−528. • Vicens Vives, Jaime, Historia General Moderna: del Renacimiento a la Crisis del Siglo XX, Barcelona, Montaner y Simon, S. A. Editores; 7ª ed., 1971, tomo I, p.162. 2 4 • 3