244-MS-12 EN LA SALA DE AUDIENCIAS DE LA CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: San Salvador, a las nueve horas de cinco de diciembre de dos mil doce. Siendo estos el lugar, día y hora señalados para la realización de la AUDIENCIA ESPECIAL del incidente de apelación del auto definitivo pronunciado por la señora Jueza de lo Civil de Soyapango a las nueve horas cincuenta y siete minutos de diez de septiembre del presente año, en el proceso monitorio DESARROLLO MICROREGIONAL DE LOS promovido por la “AGENCIA DE MUNICIPIOS DE ILOPANGO, SOYAPANGO Y SAN MARTIN DEL AREA METROPOLITANA DE SAN SALVADOR” que se abrevia “ADEMISS” por medio de su apoderado licenciado Reny Francisco C. R. contra la señora MIRIAM M. M.. Presentes los señores magistrados de esta Cámara licenciados ELSA IRMA GONZÁLEZ DE HENRÍQUEZ y EDUARDO JAIME ESCALANTE DÍAZ, acompañados de su secretaria de actuaciones licenciada Eleonora Maristela Cabrera Herrera. 1. Comprobación de la presencia de las partes. La secretaria de este colegiado manifiesta a los suscritos magistrados que se ha convocado en legal forma a la parte apelante “ADEMISS”, y se encuentra presente su apoderado licenciado Reny Francisco C. R., de […], con Tarjeta de Identificación de Abogado número […]; LA PRESIDENTA DE LA CÁMARA DECLARA ABIERTA LA PRESENTE AUDIENCIA. 2. Identificación del proceso y objeto del recurso. La secretaria de este Colegiado hace un resumen de la solicitud, del auto definitivo impugnado y de haberse incoado el recurso que motiva la presente audiencia; 3. Alegatos conforme al artículo 514 CPCM. Descrito que ha sido el sub litem se procede a darle la palabra a la apelante “ADEMISS”, por medio de su apoderado licenciado Reny Francisco C. R., para que haga su alegato, quien manifiesta: “Con instrucciones precisas de su mandante interpuso el recurso de apelación, y en base al Art. 497 inciso tercero del CPCM el cual faculta a criterio del suscrito el poder interponer esta clase de procesos ya que este inciso es separado de los demás y lo lee, y en el presente caso se cuenta con la constancia extendida por FUNDASAL en la cual consta que a la demandada se le acreditó o se le proporcionó una unidad habitacional y tenemos un estado de cuenta extendido por mi poderdante y en los que consta que han sido hechos unilateralmente por el acreedor como dice el artículo antes mencionado el cual no menciona que tengan que estar suscritos por el deudor por lo tanto los documentos presentados cumplen los requisitos del Artículo 497 inciso tercero y es de tomar en cuenta de que la contraparte tiene la facultad de poder ejercer su derecho de defensa formulando oposición o aceptando los hechos que se reclaman por ello solicita que se revoque la resolución venida en apelación por los motivos antes mencionados.” Concluidos los alegatos, esta Cámara hace un receso para proceder a deliberar conforme a lo dispuesto en los artículos 219 y 220 CPCM (…). 4. Pronunciamiento del auto definitivo correspondiente. Artículo 515 CPCM. Reanudada la audiencia con la presencia del apoderado de la apelante, esta Cámara procede a pronunciar el auto definitivo, así: I) ANTECEDENTES DE HECHO: La “AGENCIA DE DESARROLLO MICROREGIONAL DE LOS MUNICIPIOS DE ILOPANGO, SOYAPANGO Y SAN MARTIN DEL AREA METROPOLITANA DE SAN SALVADOR” que se abrevia “ADEMISS” por medio de su apoderado licenciado Reny Francisco C. R. promueve proceso monitorio en contra de la señora MIRIAM M. M. por el incumplimiento de un contrato de tenencia que los demandados celebraron con la “FUNDACIÓN SALVADOREÑA DE DESARROLLO Y VIVIENDA MÍNIMA” sobre un inmueble identificado como casa número cincuenta y tres, Calle Los Sones, de la Colonia Santa Teresa, en San Martín, de este departamento, del cual es cesionaria la actora, y ha sido incumplido por la tenedora al no pagar la totalidad de las cuotas para la adquisición de la vivienda, por lo que pide que se le ordene a la demandada que en el plazo que establecen los Arts. 500 y 493 CPCM, entregue a “ADEMISS” la unidad habitacional o en su defecto conforme al Art. 498 CPCM, le pague la cantidad adeudada que asciende a UN MIL CUATROCIENTOS QUINCE DÓLARES CON VEINTINUEVE CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA. II. SUSTANCIACIÓN DEL PROCESO: A. EN PRIMERA INSTANCIA. 1) A fs. 10 p.p. se encuentra el auto definitivo impugnado pronunciado a las nueve horas cincuenta y siete minutos de diez de septiembre del presente año, por medio del cual se declaró improponible la solicitud monitoria. 2) Mediante providencia de folios 17 p.p., tuvo por interpuesto el recurso de apelación. B. EN ESTA INSTANCIA. Por resolución de fs. 5, se admitió la apelación interpuesta por “ADEMISS” por medio de su apoderado licenciado Reny Francisco Co. R., y se señaló lugar, día y hora para la celebración de la presente audiencia. III) FUNDAMENTACIÓN DEL RECURSO DE APELACIÓN. La recurrente “ADEMISS” por medio de su apoderado licenciado Reny Francisco C. R., en el escrito de apelación pretende que se revise la valoración de la prueba hecha por la Jueza A-quo quien consideró que los documentos probatorios de la relación entre acreedor y deudor presentados con la solicitud no cumplen los presupuestos materiales y esenciales de los Arts. 19 y 227 CPCM, y rechazó la solicitud en base al Art. 492 CPCM. Argumenta que con la constancia extendida por el Comité de Selección de la “FUNDACIÓN SALVADOREÑA DE DESARROLLO Y VIVIENDA MÍNIMA”, se prueba el origen de la obligación y la relación comercial, en dicho documento se encuentran los nombres de los demandados y el derecho que FUNDASAL le transfiere a su representada sobre un inmueble entregado en calidad de tenencia, documento que por desconocimiento administrativo fue entregado en original a la tenedora del inmueble, y que no es un título de propiedad, pero en él se relaciona la ubicación del inmueble y las condiciones del contrato, y si bien es cierto que la referida constancia no es un documento creado por “ADEMISS” y que no está firmado por los demandados justifica un elemento de prueba suficiente y el Art. 497 Inc. 3 CPCM, faculta el proceso monitorio cuando la obligación resulte acreditada como en el presente caso. Señaló además que adjuntó a la demanda un documento de estado de cuenta en el que consta la cantidad adeudada y en las mismas condiciones de la constancia mencionada, no deja de tener relación probatoria ya que existen documentos creados unilateralmente que no son firmados por los deudores como el quedan, nota de envío, facturas, etc. Solicita de esta Cámara también la recurrente la revisión del derecho aplicado para resolver, pues la Jueza de la causa aplicó los Arts. 497 al 500 CPCM, y a juicio de la apelante debió aplicar el Art. 497 Inc. 3 del mismo código, que relaciona los documentos con que se puede incoar el proceso monitorio en los cuales encaja perfectamente la constancia presentada. IV. FUNDAMENTACIÓN DOCTRINARIA Y DE DERECHO: 1. DEL PROCESO MONITORIO. Ha sido definido por don Juan Pablo Correa Delcasso, en su obra “El Proceso Monitorio”, José María Bosh Editores, Pág. 211 como “un proceso especial plenario rápido, que tiende, mediante la inversión de la iniciativa del contradictorio, a la rápida creación de un titulo ejecutivo con efectos de cosa juzgada en aquellos casos que determina la ley.” El proceso monitorio se presenta en dos clases, el primero es el “proceso monitorio puro” en el que la orden condicionada de pago se libra por el juez a base de la sola afirmación, unilateral y no probada del acreedor, y de igual forma, la simple oposición no motivada del deudor hace caer en la nada la orden de pago, el segundo en cambio, es el “proceso monitorio documental”, que se distingue porque el mandato de pago presupone que los hechos constitutivos del crédito sean probados mediante documentos, y la oposición del deudor no hace caer sin más el mandato de pago, pero tiene el efecto de abrir un proceso de cognición en contradictorio, en el cual el tribunal, valorando en sus elementos de derecho y de hecho las excepciones del demandado debe decidir si éstas son tales, que demuestren la falta de fundamento del mandato de pago o si, por el contrario, este merece, a base de las pruebas escritas proporcionadas por el actor, ser mantenido y hecho ejecutivo. Nuestro Código Procesal Civil y Mercantil regula el proceso monitorio documental, y en el Art. 489 DISPONE: “Puede plantear solicitud monitoria el que pretenda de otro el pago de una deuda de dinero, líquida vencida y exigible, cuya cantidad determinada no exceda de veinticinco mil colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos de América, cualquiera que sea su forma y clase o el soporte en que se encuentre, o que el acreedor justifique un principio de prueba suficiente. En todo caso, el documento tendrá que ser de los que sirvan para acreditar relaciones entre acreedor y deudor, y aun cuando hubiera sido creado unilateralmente por el acreedor deberá aparecer firmado por el deudor o con constancia de que la firma fue puesta por orden suya, o incorporar cualquier otro signo mecánico electrónico.” de igual forma las obligaciones de dar, hacer o no hacer pueden reclamarse por el proceso monitorio cuando no existe un título ejecutivo que las documente, según lo dispuesto en el Art. 497 CPCM, que PRECEPTÚA: “El proceso monitorio también será aplicable cuando se exija el cumplimiento de una obligación de hacer, de no hacer o dar cosa específica o genérica, si el valor del bien o servicio no supera los veinticinco mil colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos de América. La obligación deberá constar en documento, cualquiera que sea su forma y clase, o el soporte en que se encuentre, y siempre que aparezca firmado por el demandado o con firma que hubiese sido puesta por su orden o incorpore cualquier otro signo mecánico o electrónico. También podrá aplicarse el proceso monitorio cuando la obligación resulte acreditada mediante facturas, certificaciones de relaciones entre las partes, telegramas, telefax u otros documentos que, en el tráfico jurídico, documenten relaciones entre acreedor y deudor, aun cuando hubieran sido creados unilateralmente por el acreedor.” V. EXAMEN DE LOS AGRAVIOS: La recurrente por medio de su apoderado licenciado C. R. expresa su inconformidad con la resolución de las nueve horas cincuenta y siete minutos de diez de septiembre del presente año, en la que la Jueza A-quo rechazó la solicitud monitoria por considerar que los documentos presentados con la solicitud no son de los que habilitan para promover el proceso monitorio. Al respecto esta Cámara estima que el Art. 497 Inc. 2 CPCM es claro en cuanto a que para reclamar por medio del proceso monitorio, la obligación debe constar en un documento que aparezca firmado por el deudor, por su orden o por cualquier otro signo mecánico o electrónico del cual se deduzca la intención de obligarse; en el inciso tercero de la citada disposición el legislador previo que en el tráfico jurídico, por la agilidad que caracteriza al comercio, las personas utilizan diversos medios para llevar a cabo sus negocios, por ello deja abierta la puerta para que pueda promoverse el proceso monitorio también con facturas, telegramas, telefax u otros documentos, pudiendo incluirse aquí los correos electrónicos por ejemplo, y que algunos de ellos a pesar de que por su naturaleza no son firmados, documentan relaciones entre acreedor y deudor, en virtud de que contienen declaraciones de voluntad en las que las partes contraen obligaciones, en este sentido, se torna necesario examinar los documentos que acompañan a la solicitud monitoria a fin de determinar si cumplen con estos requisitos, así: En la fotocopia certificada por notario -en contravención al Art. 30 de la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y Otras Diligencias-, consta que el Comité de Selección de la “FUNDACIÓN SALVADOREÑA DE DESARROLLO Y VIVIENDA MÍNIMA”, adjudicó a la señora MIRIAM M. M. el inmueble que ahí se detalla en el año de mil novecientos noventa y dos, y que la mencionada fundación cedió los derechos sobre los contratos de tenencia a la actora “ADEMISS” en noviembre del año dos mil; por otra parte, en el Estado de Cuenta emitido por “ADEMISS”, aparecen una serie de abonos realizados por la señora MIRIAM MENDOZA con el detalle de la cantidad que se ha imputado a intereses y capital y el saldo para cancelar la vivienda al treinta y uno de julio del presente año. Como vemos, en los versados documentos no aparece firma autógrafa de la señora MIRIAM M. M., ni contienen declaración alguna en la que contraiga obligación con la actora, por consiguiente, éstos no documentan relaciones entre acreedor y deudor, por lo que la actora carece del documento habilitante para ejercer la pretensión, pues en ellos no consta una deuda líquida, vencida y exigible ni obligaciones de dar, hacer o no hacer, como las que exige alternativamente la actora consistentes en la entrega de una unidad habitacional o el pago de cantidad de dinero adeudada por un contrato de tenencia; lo que lleva a esta Cámara a concluir que la señora Jueza A-quo correctamente ha valorado los versados documentos y aplicó los Arts. 492 y 497 para rechazar la solicitud presentada, y en razón de ello, deberán desestimarse los agravios alegados, por lo que, deberemos confirmar el auto definitivo venido en apelación. POR TANTO: De conformidad a lo antes expuesto y a los artículos 1, 2, 11, 15, 18, 172 Inc. 3º, 182 Ord. 5º Cn.; 1, 2, 3, 14, 15, 216, 217, 489, 492, 497, 514 y 515 CPCM, EN NOMBRE DE LA REPÚBLICA DE EL SALVADOR ESTA CÁMARA RESUELVE: A) CONFÍRMASE en todas sus partes el auto definitivo pronunciado por la señora Jueza de lo Civil de Soyapango a las nueve horas cincuenta y siete minutos de diez de septiembre del corriente año, en el proceso monitorio promovido por la “AGENCIA DE DESARROLLO MICROREGIONAL DE LOS MUNICIPIOS DE ILOPANGO, SOYAPANGO Y SAN MARTIN DEL AREA METROPOLITANA DE SAN SALVADOR” que se abrevia “ADEMISS” por medio de su apoderado licenciado Reny Francisco C. R. contra la señora MIRIAM M. M., por encontrarse apegado a derecho; B) NO HAY CONDENA EN COSTAS PROCESALES. En este estado, el licenciado Reny Francisco C. R. queda notificado del auto definitivo que se ha dictado en forma oral en esta audiencia, quien manifiesta que no interpondrá recurso alguno del mismo, en consecuencia, esta Cámara en este acto lo declara firme, debiendo devolverse la pieza principal al juzgado de su origen, con certificación de lo resuelto en la presente audiencia, para los fines de rigor. No habiendo nada más que hacer constar damos por terminada la presente acta y previa lectura para constancia firmamos.