Informe del Consejo Técnico del ORSEP sobre la mitigación de crecidas sobre el Río Neuquén, mediante la construcción del Sistema Chihuido. Referencia: Seguridad hidrológica de la presa de Portezuelo Grande. Causa: Rozniatowsky, Rosa Cristina c/Estado Nacional – Secretaría de Energía de la Nación s/amparo Con motivo del fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación de fecha 3 de marzo de 2009, que declara desierto el recurso ordinario de apelación deducido por el Estado Nacional contra la sentencia de la Cámara Federal de Apelaciones de General Roca dictada en los autos de la referencia, denegando la medida solicitada, el Consejo Técnico del ORSEP estima oportuno formular las siguientes consideraciones con el objeto de aportar información que pudiera resultar de interés para dar respuesta a la cuestión. El fallo de la Corte implica la ratificación de la sentencia de primera instancia que condena al Estado Nacional a “… realizar las obras necesarias para garantizar la seguridad de la presa Portezuelo Grande, integrante del Complejo Cerros Colorados emplazada sobre el río Neuquén, ampliando su capacidad para que resista una crecida máxima probable (pico instantáneo, de 14.520 m3/seg.)…”, y lo intima para que dentro del plazo de 120 días de quedar firme la sentencia, “… informe al Tribunal sobre las características de la obra a realizar y sobre su plazo de ejecución, el que deberá atender únicamente los aspectos técnicos de la obra y, con posterioridad, la ejecute en los términos propuestos y en el plazo informado…”. Consiguientemente, la elaboración de una respuesta al mencionado requerimiento judicial, no debería soslayar aspectos de la historia del Río Neuquén y del Complejo Cerros Colorados, que resultan determinantes de la situación presente, a saber: a) El Complejo Hidroeléctrico Cerros Colorados y su obra de cabecera, la presa y derivador de Portezuelo Grande, inaugurados en el año 1972, fueron concebidos con el propósito de evitar las recurrentes y devastadoras inundaciones que se producían en los tramos medio e 1 inferior del Río Neuquén y que afectaban también a los productores del Alto Valle del Río Negro. Mediante el vertedero derivador de Portezuelo Grande se vuelca una fracción no inferior al 70 % del caudal del Río Neuquén hacia las depresiones naturales de Los Barreales y Mari Menuco, aliviando considerablemente las condiciones hidrológicas del curso original. b) Las obras fueron proyectadas con ajuste a los criterios de seguridad vigentes en aquél momento, basados en el análisis estadístico de los registros de caudales máximos anuales y considerando un período de retorno de 5.000 años. De este modo, se estableció la crecida de diseño de 11.500 m3/s que, por entonces, superaba ampliamente a las máximas crecidas observadas en el Río Neuquén, con un margen de seguridad acorde con estándares universalmente aceptados. c) Durante los 40 años transcurridos desde la finalización del proyecto definitivo de las obras, se han producido cambios significativos en los criterios de diseño y de seguridad de presas, y se han observado crecidas de magnitud extrema que alteraron sensiblemente la estadística hidrológica del Río Neuquén. Paralelamente, ha crecido progresivamente la ocupación de áreas incluidas en la planicie de inundación del río por parte de pobladores y productores rurales, incrementando la exposición de vidas y bienes a los riesgos derivados de crecidas extraordinarias. Todas estas circunstancias llevaron al ORSEP (al Estado Nacional) a promover la realización de estudios tendientes a determinar las condiciones reales de seguridad bajo las cuales se encuentra operando el sistema de Portezuelo Grande, y evaluar la necesidad de ejecutar obras de ampliación de su capacidad. d) En el año 1999, la Autoridad Interjurisdiccional de las Cuencas de los ríos Limay, Neuquén y Negro (AIC) determinó el valor actualizado de la Crecida Máxima Probable (CMP) del Río Neuquén en proximidades de 2 Portezuelo Grande, cuyo caudal máximo instantáneo se calculó en 14.520 m3/s. Ahora bien, las reglas del buen arte de la ingeniería de presas, establecidas por las entidades internacionales de mayor relevancia en la especialidad, admiten en determinados casos la adopción de crecidas de diseño inferiores a la CMP. Sin embargo, la ocupación de la planicie de inundación del Río Neuquén aguas abajo de Portezuelo Grande, sumado a lo dispuesto por el más alto tribunal de justicia de la Nación, obligaron a analizar el comportamiento de las obras ante la ocurrencia de la CMP y a diseñar soluciones para los problemas de capacidad identificados en dicho análisis. Con el propósito de restablecer las condiciones de seguridad en la operación global del Complejo Cerros Colorados, se han considerado dos estrategias alternativas basadas en los siguientes principios: • Reformular el esquema de atenuación y control de crecidas del Complejo Cerros Colorados, considerando el paso de la CMP, limitando las descargas de Portezuelo Grande al Río Neuquén e individualizando las obras de ampliación que resulten necesarias para la operación segura de todas las instalaciones componentes del sistema, incluyendo los vertederos de Loma de la Lata, Planicie Banderita y El Chañar. • Impulsar la construcción de una presa aguas arriba de Portezuelo Grande, destinada al control de crecidas y con capacidad suficiente como para atenuar el paso de la CMP, descargando hacia Cerros Colorados un caudal máximo compatible con la capacidad actual del Complejo. El Estado Nacional, reconociendo la mayor conveniencia de esta segunda solución, dispuso la prosecución de los estudios y anteproyectos existentes para la construcción del Aprovechamiento Multipropósito Chihuido I, ubicado sobre el Río Neuquén aguas arriba de Portezuelo Grande. 3 Uno de los objetivos fundamentales del mencionado emprendimiento será el control de crecidas del río, aliviando las eventuales sobrecargas hídricas afluentes a Portezuelo Grande y permitiendo incrementar la capacidad de generación de energía en el Comahue, a partir de la utilización de un recurso renovable. El proyecto de Chihuido I contempla una crecida de diseño de hasta 25.000 m3/s y una descarga máxima hacia Portezuelo Grande de 11.500 m3/s, valor coincidente con la capacidad operativa actual del sistema presa – derivador. El proyecto Chihuido I se encuentra en su etapa licitatoria, habiéndose previsto el acto de apertura de ofertas el día 11 de junio del corriente año, en la Ciudad de Neuquén. 4