14.1. H U R A CREPITANS LÁMINA LXXIII (2395) Hura crepitans L., Sp. PL: 456. 1753. ETIMOLOGÍA.— Del latín "crepitus-us-um" = ruido seco, chasquido; aludiendo al sonido que hacen los frutos cuando explotan violentamente. SINONIMIA.— Sterculia crepitans L., Sp. PL: 37. 1753. Hura brasiliensis Willd., Enum. Hort. Berol.: 997. 1809 Hura strepens Willd., Enum. Hort. Berol.: 997. 1809. Hura senegalensis Baill., Adansonia 1: 77. 1861. La madera es de buena calidad, pero muy poco empleada en ebanistería y construcción por la dificultad de su manejo al contener el látex cáustico. La leña, al arder, auyenta los mosquitos. El látex es empleado en algunas regiones (Pacho y Topaipí) para matar los peces en los ríos (embarbascar), incluso algunas tribus indígenas lo empleaban para envenenar sus flechas. En los años cincuenta hubo en Colombia demanda de látex para la fabricación de gases lacrimógenos en Estados Unidos. Por su gran porte y frondosa copa se ha plantado como ornamental en parques, jardines y avenidas. Se han realizado experiencias de reforestación en la Costa Atlántica, consiguiéndose crecimientos muy rápidos. El nombre de "Arenillero" le viene por haberse empleado antaño, sus cápsulas, para llevar un poco de arena con la que se secaba la tinta al escribir. Se ha escrito mucho sobre las propiedades y peligros del látex que, según Santiago Cortés (1897), produce ceguera inmediata si se pone en contacto con los ojos, incluso las emanaciones prolongadas pueden producir fiebre e inflamación de las manos y la cara. Se ha empleado también como remedio de muchas enfermedades de la piel, reumas y para combatir los gusanos intestinales. En medicina popular se emplea como emetocatártico e hidrogogo y, en contacto con la piel, como vesicante y rubefaciente. A las hojas y la corteza se les atribuyen propiedades antileprosas. La pulpa que envuelve las semillas posee un aceite purgante tan drástico y enérgico que hace difícil su empleo en medicina. En un ejemplar del herbario COL (Idrobo 4690), del Amazonas, se recoge el siguiente comentario sobre las propiedades de este árbol: Árboles de hasta 30(-40) m de alto (mucho más pequeños cuando se emplean como cerca o seto vivo); tronco columnar de hasta 180 cm de diámetro, muy ramificado; corteza lisa, de color castaño, con aguijones negruzcos en cuya base la corteza adulta forma una cubierta gruesa que los rodea; copa amplia y frondosa; ramas, a veces, aculeadas o con protuberancias. Estípulas linear-lanceoladas, pubescentes, de 1-1,5 cm de largo, caducas. Pecíolos delgados, de hasta 20 cm de largo, con dos glándulas en el ápice. Lámina foliar de ovada a orbicular, membranácea, penninervia, de 12-25 cm de largo por 7-18 cm de ancho, glabra o con pelos largos dispersos por el envés; margen de crenado a subentero, con dientes a menudo glandular-punteados; base cordada; ápice acuminado o subcuspidado; nervios prominentes, a menudo pelosos por el envés. Flores masculinas 60-80 en ejes cónicos, gruesos y carnosos, de 2-4,5(-6) cm de largo; pedúnculos de 5-11 cm de largo; cáliz de c. 1 mm de largo; columna estaminal de hasta 2 mm de largo, con 2-5 verticilos de anteras, raramente todos completos. Flores femeninas con pedicelos de hasta 5 cm de largo; cáliz de 3-5 mm de largo, truncado o, raramente, con 5 dientes poco marcados; columna estilar de 2,5-5 cm de largo; disco apical grueso, carnoso, con los radios de hasta 1 cm de largo. Cápsula leñosa, oblata, de hasta 8 cm de diámetro; dehiscencia explosiva en unos 15 cocos semilunares. Semillas lisas, lenticulares, aplanadas, de hasta 2,5 cm de diámetro. HÁBITAT Y DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA.—Se encuentra desde el sur de Costa Rica hasta Perú, Bolivia y Brasil; además en las Antillas, desde Cuba y Jamaica hasta Trinidad y Tobago. Ha sido introducida en Estados Unidos (sur de Florida y California), Bahamas y Antillas Holandesas. Se cultiva también en los trópicos del Viejo Mundo. En Colombia es muy frecuente en la costa atlántica, en los departamentos de Atlántico, Bolívar y Magdalena; encontrándose también en Amazonas, Antioquia, Chocó, Cundinamarca, Meta, Norte de Santander, Santander y Tolima. Es característica de formaciones litorales, zonas pantanosas y márgenes de arroyos, por debajo de los 1000 m, si bien se ha cultivado como ornamental a altitudes mayores. "Un ticuna dice que es un veneno muy potente. Los paugiles comen sus semillas y si se da caldo, carne o huesos de éstos a los perros, mueren después de correr como locos durante dos o tres días. Al segundo día se ven como borrachos, después chillan o aullan y corren hasta que mueren". OBSERVACIONES TAXONÓMICAS Y NOMENCLATOR ALES.—La otra especie del género, Hura poliandra Baill., se diferencia por tener 810 verticilos de anteras en las flores masculinas, no habiendo diferencias relevantes en los caracteres vegetativos. Hura poliandra tiene el límite sur de su área de distribución en Costa Rica. ICONOGRAFÍA MUTISIANA.—Una excelente lámina policroma, catalogada con el número 2395, ilustra esta especie; está acompañada de una copia semicoloreada (2395a). La lámina policroma está firmada por F.J. Matis y lleva, en caligrafía original, el rótulo "Hura crepitans." Muestra el extremo de una rama que lleva una espiga masculina con una flor femenina en la base y una cápsula en la axila de una hoja basal. La copia, incompleta, no se publica. NOMBRES VERNÁCULOS.—"Arenillo", en Cundinamarca; "Acuapar", en Amazonas y Cundinamarca; "Barbasco", "Ceiba brujo" y "Ceiba blanca", en Magdalena; "Ceiba", en Atlántico y Bolívar; "Ceiba de leche", en Bolívar; "Ceiba lechosa", en Atlántico; "Ceibo", en Antioquia; "Ceibo de leche", en Santander; "Garillo" y "Jarillo", en Meta; "Havilla", en Norte de Santander (Ocaña). También se conoce como "Arenillero", "Castañeto", "Catagua", "Ceiba amarilla", "Ceibo milpesos", "Havillo", "Javillo", "Milpesos" y "Tronador". EJEMPLARES REPRESENTATIVOS.—No existen ejemplares de esta especie en MA-MUT. AMAZONAS: Trapecio amazónico, río Loretoyacu, R. E. Schultes & G. A. Black 8518 (COL 60696). ATLÁNTICO: entre Palmar de Varela y Ponedera, A. Dugand & R. Jaramillo 3466 (COL 14543). ANTIOQUIA: Puerto Berrio, W. A. Archer 1424 (MA 250303). MAGDALENA: Malino, O. Haught 4138 (COL 21206). NORTE DE SANTANDER: Corregimiento de Reyes, Hoya del río Sardinata, H. García Barriga & G. Lozano 18465 (COL 115369). USOS.—Son muy numerosas las referencias a las propiedades y usos de este árbol, y sobre todo al carácter tóxico de muchos de sus órganos. Todas las partes de la planta segregan abundante látex acuoso o ligeramente blancuzco, que es irritante y muy venenoso; al contacto con la piel produce úlceras. 100 —