Identidad familiar como factor esencial en la vida de los niños, niñas y adolescentes Patricia Ruiz Ruiz Introducción Nuestra actual legislación contempla una serie de derechos para todos los ecuatorianos, como el derecho al buen vivir: salud, educación, transporte, vivienda, a una familia y a desarrollar medidas alternativas para que el sistema sea de bienestar a nivel global; pero no hay normativa para los niños niñas y adolescentes sin identidad cultural, sin familia, sin nombre, establecidos en una lista de los llamados centros de atención para niños N.N.- niños, niñas, adolescentes privados de su medio familiar. Se pretende establecer un análisis de los mecanismos de protección y exigibilidad de derechos para los niños, niñas, adolescentes privados de su medio familiar; considerando las prácticas, usos y costumbres de los involucrados en el sistema: cuidadores, directores de los centros de cuidado, equipos técnicos, personal administrativo, autoridades, operadores de justicia; así como factores de riesgo y de protección que han permitido la construcción o crisis de la identidad familiar; procesos de adaptación, de dificultades y de fortalecimiento de la estructura familiar. Refiriendo datos estadísticos de los años 2007 y 2008 de los niños de 0-5 años de edad ingresados en el centro de atención del sector público y de las alternativas que se ha viabilizado para evitar la institucionalización; así como dilucidar los procesos técnicos, administrativos, jurídicos establecidos para la adopción nacional e internacional desde la experiencia de los Comités de Asignación Familiar Regional Costa y del seguimiento, apoyo técnico de las Unidades Técnicas de Adopciones. Estableciendo características de los padres postulantes para la adopción nacional e internacional; así como de las características de los niños, de las causas y consecuencias que originaron la privación de su medio familiar. Considerando la existencia de un modelo de atención para niños privados de su medio familiar; se pretende definir una normativa que restituya los derechos que le han sido violados, dado el alto nivel de exclusión de los niños, niñas, adolescentes; delimitando políticas públicas y estrategias de intervención que faciliten una alternativa de vida permanente y oportuna; instaurando mecanismos de exigibilidad de derechos frente a los derechos que han sido violados, así como de organismos de protección, apoyo, control y vigilancia de los procesos establecidos. 1 Objetivo general Analizar los mecanismos de protección y exigibilidad de derechos de los niños, niñas y adolescentes privados de su medio familiar Objetivos específicos Visualizar las prácticas, usos y costumbres de los involucrados en el sistema de protección integral Establecer los factores de riesgo y de protección que han permitido la construcción de la identidad familiar y en el fortalecimiento de la estructura familiar. Tipificar características de los postulantes para la adopción, así como las características de los niños, de las causas y consecuencias que originaron la privación de su medio familiar. Dilucidar los procesos técnicos, administrativos y jurídicos establecidos para la adopción nacional e internacional. Definir una normativa, políticas públicas y estrategias de intervención que restituyan los derechos violados. Desarrollo La legislación ecuatoriana del 2008 contempla la incorporación del título VII denominado “Régimen del Buen Vivir”, entendiéndola que la nueva Constitución garantiza que la educación, y la salud sean gratuitas, que nuestro derechos a la vivienda, el apoyo a las ciencias a la cultura, la producción de alimentos y el manejo responsable de los recursos naturales, permitirá desarrollarnos y mejorar nuestra calidad de vida, donde las leyes, instituciones y servicios tengan como una de sus principales finalidades el respeto a todos nuestros derechos, donde el Estado y la participación de los ecuatorianos en la planificación, gestión y control de éstos permitirá la construcción de un poder ciudadano. Se visualiza una mayor garantías para el cumplimiento de los derechos, pero pese a la existencia de esta normativa el sistema de protección a niños en situación de 2 vulnerabilidad sigue visualizándose; hay un divorcio innegable entre el marco legislativo y la doctrina de protección integral, desconociéndose a su vez todos los derechos especiales de la niñez y más aún su aplicabilidad y al ejercicio progresivo de los mismos. Dentro del Código de la Niñez y Adolescencia expedido en el año 2003 hace prevalecer la convivencia familiar frente a la institucionalización (Título II.- Niños sujetos de derechos, Capítulo I, Art.8); desconociéndose a su vez en su Art.9, que la atención de los niños privados de su medio familiar se dé en el menor tiempo posible y priorizando en ambiente familiar. Pese a la existencia de una normativa garantista para niños, niñas y adolescentes privado de su medios familiar, como parte protectora de derechos contrasta con una realidad, donde la función del Estado es aun incipiente, donde los servicios públicos son deficientes, por no decir de mala calidad; sin normas o estándares de calidad que puedan medir los avances de las políticas públicas de protección de derechos implementadas en los últimos años; sin procesos de participación activa de todos los involucrados. Los modelos de atención para niños privados de su medio familiar intentan contribuir al problema de la institucionalización de los niños, por ende su erradicación, pero éste niega el derecho a vivir en un medio familiar, a relacionarse con una comunidad, a vivir con libertad; y cuando salen (los niños, niñas, adolescentes) son altamente endebles, manifestándose en su comportamiento emocional y en otros ámbitos. Los principios del modelo de atención se basan en que para cada niño es necesario garantizar el derecho a vivir en familiar, el derecho a una familia y por ende en derecho a afectos familiares; entendiéndole como una alternativa única, dado que la familia es insustituible para el crecimiento de todos los niños, favoreciendo el desarrollo integral, porque se forma su personalidad con afecto y confianza, valores y principios; una identidad familiar y de base comunitaria. El ambiente familiar favorece el desarrollo psicosocial, preparando para las competencias para una vida sana y productiva. “El niño para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad necesita amor y comprensión. Siempre que sea posible, deberá crecer al amparo y bajo la responsabilidad de sus padres, y en toda casa en un ambiente de afecto y seguridad 3 moral y material: salvo circunstancias excepcionales, no deberá separarse al niño de corta edad de su madre. La sociedad y las autoridades públicas tendrán la obligación de cuidar especialmente a los niños sin familia o que carezcan de medios adecuados de subsistencia”1. “Los niños y adolescentes albergados como medida de protección en instituciones públicas y privadas por encontrarse en presunto abandono material y moral, reflejan la grave crisis que atraviesa la familia en nuestro país, producto de un conjunto de factores económicos, políticos, sociales y culturales que han afectado su normal desarrollo y amenazan su existencia como tal” 2. Para asegurar el desarrollo y bienestar del niño implica que todo niño se desarrollo en su propia familia; esto permitirá la transmisión de su cultura, de sus valores y principios ineludibles e intransferibles que determinarán su identidad; el ambiente circundante y en su contexto más cercano: barrio, escuela, familia ampliada garantizarán el marco de referencia para la afirmación, negación y reproducción de su propia personalidad. Desconocer, desvalorizar el papel fundamental e irrevocable de la familia implicaría manifestaciones de deficiencias en los hábitos lingüísticos, de comunicación, en la conciencia moral, desarrollo psicomotriz, normas disciplinarias, entre otras. Los servicios públicos, la atención social que ofrecen debe conceptualizarse como un derecho de todos los ciudadanos; más aún de los niños, niñas y adolescentes; el nivel de desarrollo (económico, social, entre otros) es un factor, pero ello no excluye el deber del “Estado el implementar estos derechos en la mayor de sus posibilidades; en donde el principio de progresividad exige mas bien, que a medida que mejore el nivel del desarrollo del estado, mejora el nivel de compromiso de garantizar los derechos económicos, sociales y culturales. Y, ello, garantizar los derechos exige en mayoría de los casos un gasto público destinado a los programas sociales”3. 1 Principio 6 de la “Declaración Universal de los Derechos del Niño”. 20xi-1959. Lic. Gian Franco Vacchelli Sicheri.-licenciado en Psicología.- estudio sobre la situación psicosocial de los niños y adolescentes albergados en el hogar "Jesús mi luz" de la ciudad del Cusco-Perú.- derivados de los juzgados de familia por encontrarse en presunto estado de abandono. 3 Pérez Marcos.- Comision Interamericana de Humanos.- principio de progresividad. 2 4 La actual ley para niñez y adolescencia provee medidas de protección (Título VI.- De las medidas de protección) cuando existe un riesgo inminente de que se produzca una violación de sus derechos sea esta por acciones u omisiones del Estado, su familia, la sociedad o el propio niño, niña, adolescentes; pese a esta normativa el propio sistema judicial, las autoridades administrativas, personal técnico y/o cuidadores de los niños de los centros de atención de niños privados de su medio familiar vulneran sus derechos. Esto es, se conserva un enfoque asistencialista con el que se opera, se mantiene una cultura de tolerancia arraigada ante los incumplimientos y violaciones de derechos; una ausencia de enfoque de derechos en la definición de estrategias de intervención conjugándose con una no participación activa en la toma de decisiones para la planificación de los proyectos alternativos que conlleven a erradicar la institucionalización, servicios con funcionamiento desarticulado y disperso; con poca coordinación interinstitucional, con manejo centralista en la gestión; disminuyendo la calidad de la atención de los centros por falta de equipo técnico calificado, por la disminución y/o mantención de su financiamiento para la administración (ello conlleva a no contar con material para la estimulación y aprendizaje de los niños, falta de implementos de aseo, para actividades recreativa y lúdicas de los niños, para control de su salud, entre otros). Pese a estas limitaciones el Código señala que se proporcionará medias de protección como la custodia de emergencia sea este en una entidad de atención o en un hogar de familia; entendida ésta última como una familia debidamente calificada por el sistema nacional de protección integral para la niñez y adolescencia; que muchas veces a sustituido la responsabilidad social de los progenitores, de su propia familia y de la familia extendida. Éste tipo de alternativas son utilizados por los directivos de los centros de atención y por las propios operadores de justicia, sin que se haya establecido un proceso técnico que incluya la capacitación, apoyo y seguimiento; de ello cabe señalar que pocos son los que han concluido el proceso satisfactoriamente; los otros niños se encuentran en proceso de espera de una alternativa de vida familiar, sin nombre, sin identidad, sin pertenencia. En el sistema de justicia especializado en niñez y adolescencia están presentes las ineficiencias técnicas, una falta de formación, especialización y el enfoque entorpecen sus intervenciones, aunque mucho se ha referido a la falta de jueces, procuradores y personal técnico-administrativo; sin considerar que los problemas de los niños son 5 problemas humanos más no de carácter judicial y las sentencias y/o resoluciones se quedan en el papel; el ejercicio pleno y verdadero de los derechos es proporcionarlo a tiempo y en el momento en que se produce la violación. En este sistema la visión totalmente sesgada no permite visualizar los problemas en su contexto, donde se desconocen en los principios universales como todo ciudadano y los principios fundamentales atribuibles a todo niño, niñas y adolescente, un ejemplo clásico es invocar el principio de interés superior del niño cuando no se encuentra el sustento normativo en la ley, se lo aplica creyendo que hay conflicto de intereses y peor aún hay que esperar de 3 a 4 años para obtener una declaratoria de adoptabilidad y ello conlleva que si el niño tenía 1 año al inicio del proceso técnico - judicial, al concluir esta fase tiene 3 ó 4 años, lo que se constituye en un niño de difícil adopción y las alternativas de encontrar una familia son escasas y por no decirlo nulas; ellos constituyen los niños que estadísticamente pasan a los centros de cuidado sin alternativas de vida; siendo el Estado y todo el sistema de protección integral son responsables del mismo. De la sistematización del trabajo realizado por el Comité de Asignación Familiar Regional Costa, se hace referencia en el Cuadro No. 94 concierne del año de inicio de las causas de los niños ingresados en centro de atención de la Regional Costa (Provincia del Guayas, Manabí, Los Ríos, El Oro, Galápagos-Ecuador) del año 2008 se desprende que se obtuvieron 24 sentencias de adoptabilidad; éstas corresponden a causas iniciadas desde el año 2004 al 2008; del total, su mayor porcentaje corresponde a legalizar las ilegalidades, es decir son niños que se encuentran viviendo con familias desde su nacimiento, sin que el proceso de esclarecimiento de sus orígenes haya sido el más idóneo, se habla de las entregas directas, donde han participado desde técnicos, directivos, autoridades judiciales; lo restante corresponde a 4 causas que fueron iniciadas en el año 2007; 3 en el año 2006, 2 en el año 2008 y 1 en el año 2005; lo que da un promedio de 2,5 años, siendo su mayor porcentaje responsables los Juzgados de la Niñez y adolescencia de la provincia del Guayas, porque los procesos en las otras provincias se han resuelto en menos tiempo. Siendo importante señalar que del total de asignaciones realizadas en el año 20075 que representa 28 niños, el tiempo utilizado en el proceso judicial considerando la fecha de nacimiento y la fecha de la sentencia de 4 5 Informe del Comité de Asignación Regional Costa, para las adopciones nacionales e internacional.- Año 2008- Ecuador Informe del Comité de Asignación Regional Costa, para las adopciones nacionales e internacional.- Año 2007- Ecuador 6 adoptabilidad del Juzgado fue de 9 meses como mínimo y como tiempo máximo utilizado fue de 4años con 4 meses; si se establece la media porcentual se está hablando de es 1 año 8 meses. En referencia a los centros de atención para niños privados de su medio familiar no se ha establecido una reingeniería del proceso, el fortalecimiento ha quedado en intenciones, los llamados técnicos responsables del cuidado de los niños oscilan entre 60 y 65 años de edad, otros en cambio no poseen la instrucción adecuada para el rol que deben cumplir en estos centros, en donde el proceso de selección para su contratación no se dio, y el número personal en general es insuficiente considerando el número de niños que atiende, sin desconocer que el presupuesto establecido para actividades de estimulación, recreación es mínimo, con un retraso considerable del presupuesto, sumándose una inadecuada administración y por el excesivo centralismo; debiéndose considerar que no presupuesto para el proceso técnico de apoyo y seguimiento; esto es en lo público. En organizaciones no gubernamentales u ONG el proceso técnico es endeble; con la única diferencia es que tienen asegurado el presupuesto para la alimentación y cuidado; donde pasan a ser niños de engorde para ofrecerles al mejor postor. Los niños ingresados en dichos centros tienen una edad que fluctúa de entre 3 meses y 7 años, donde sus demandas y necesidades en general no están satisfechas, pudiéndose establecer la existencia de un retraso psicomotor, problemas de lenguaje, de comunicación, desarrollo de habilidades y/o destrezas, no hay una ficha de control médico, fotos de los lugares, de los eventos, de los paseos, del cumpleaños, sobre actitudes de cambio o de acontecimientos significativos o importantes de su vida; no hay juegos dirigidos, de expresión corporal, de habilidades sociales. No existe un proceso de archivo ni de sistematización de la información de los niños ingresados en los centros, ésta es sesgada y dependiente de la memoria de los que cuidan a los niños; por lo cual se ha perdido parte de la historia y que al buscar o intentar reconstruirla quedan vacíos que no puede satisfacerse cuando regresan éstos niños a buscar sus orígenes, el porqué del abandono. Quintero Velásquez, en su libro Trabajo Social y procesos familiares dice que la familia responde a dos funciones: “a) la protección psico-social de sus miembros: engrenda nuevas personas y responde al desarrollo integral de todos los miembros y b) la inserción del individuo en la cultura y su transmisión, lo que se conoce como la socialización”; la 7 familia es el único que permite un desarrollo integral, se constituye en la matriz de la identidad y del desarrollo psicosocial de sus miembros; las experiencias iniciales de los primeros años de vida se asimilan y son determinantes en su evolución; ninguna otra institución ha logrado suplir a la familia; sobre todo en relación a las necesidades biológicas y afectivas de los niños. Los factores de protección se establecen a través de la familia, es el lugar donde se producen y se reproducen los valores, principios, normas, preceptos de vida; donde se construyen la identidad familiar y la visión de mundo que la familia tiene, como niño, como adolescente, como hombre o mujer, como profesional; donde los roles consistentes, las reglas claras, son propios ineludibles del contexto familiar; donde la comunicación clara, directa, indirecta, instrumental, afectiva y las propias habilidades son esenciales para manejar las demandas, necesidades propias y del contexto social. Los rasgos familiares son propios de cada familia, Curran (1983)6 “los identifica y destaca al sentido del humor, la capacidad del juego, los rituales familiares, las tradiciones, las creencias religiosas y valores claros, contribuyen a los comportamientos sanos para la salud familiar y a su estabilidad en el tiempo”. Los factores protectores de funcionamiento familiar más conocidos como son la cohesión y la flexibilidad, (Olson&cols, 1979)7 incluye aspectos como la confianza, aprecio, soporte emocional y respeto por la individualidad. La factores protectivos y de riesgo de la familia es gravitante dada su participación clave en a salud de los individuos. Se debe considerar que entre los factores de riesgo está el tiempo de permanencia de los niños en las instituciones; éste obstaculiza la posibilidad de un proceso de adaptación y de ajuste familiar con menos dificultades dado que, todo niño requiere de afectividad, estabilidad emocional, de una estructura y soporte familiar que le permita desarrollarse integralmente, al carecerlas puede traer efectos y/o consecuencias irreversibles en su vida. De esto han hablado muchos autores, pero se señala que “Los niños, niñas y adolescentes se enfrentan a: sentimiento de abandono, rebeldía, depresión, agresividad, inseguridad, incertidumbre, apatía hacia la escuela, pocas relaciones interpersonales, deserción escolar, bajo rendimiento escolar, baja autoestima, pérdida de identidad, abuso 6 Teoria acerca del funcionamiento familiar.- Salud familiar: un modelo de atención integral en la atención primeria.- Hidalgo C. y Carrasco E.- Universidad Católica de Chile 7 Teoria acerca del funcionamiento familiar.- Salud familiar: un modelo de atención integral en la atención primeria.- Hidalgo C. y Carrasco E.- Universidad Católica de Chile 8 sexual, estigmatización” 8,9, no visión de futuro, tendencias de suicidio, precocidad, trastornos en el aprendizaje, ausencia y/o pérdida de valores culturales, normas, de principios rectores, de preceptos básicos. Prevalece la idiosincrasia discriminatoria en el proceso de adopciones; dado que del total de parejas postulantes para la adopción nacional hay un interés de solicitar adoptar a niños que su edad debe ser preferentemente de meses hasta 1 año; y preferentemente recién nacidos; de éste total se reciben apenas el 5%; los restante de los niños se han entregado directamente. No debe entenderse que no hay demanda y oferta: obsérvese estos datos: desde el año 2005 al 2008 se han receptado un total de 137 solicitudes para adoptar en la Unidad Técnica de Adopciones de la Región Costa; de éste total se han asignado 84 niños, esto es el 61,3% de la demanda satisfecha. Del total de solicitudes del año 2007 (45) solo a 14 postulantes fueron asignados un niño; en cambio 10 solicitudes fueron asignadas en el año 2008 de un total de 43 solicitudes; esto representa el 23,25% de ese año, lo restante corresponde a solicitudes realizados en años anteriores; esto es 8 del 2007, 3 del año 2006 y 1 solicitud correspondiente al año 2005. Aunque es necesario señalar que el tiempo promedio de espera de los postulantes para la adopción es de 2 a 3 años; refiriéndose desde la fecha de solicitud a la Unidad Técnica de Adopciones del MIES hasta la fecha de la asignación; pero en casos de padres que postulan a través de otros organismos privados, el tiempo de espera está de 3 a 4 años, porque se estableció una nueva normativa que conllevó cambios; pero pese a esto no se ha logrado establecer acuerdos para mejorar la calidad de la atención por una visión asistencialista del problema. Siendo necesario señalar que la edad y las características de la raza son limitantes para la adopción nacional; percibiéndose discriminación y rechazo de los postulantes; más las condiciones socio-económicas no ha sido limitante; de los cuales en el 85% provienen de condiciones socio-económicas medias; con nivel de educación media-superior, que ha conllevado a facilitar el proceso. Del proceso técnico, administrativo y judicial para la adopción nacional se la establecido un programa que ha permitido iniciar un proceso de construcción y fortalecimiento, pero con problemas que no se ha podido superar como son equipos técnicos desgastados profesionalmente y emocionalmente para la atención en los centros de atención; sin 8 El derecho a una familia.- Gilda Orellana Rodriguez.- Diario El Expreso.- Guayaquil.- 2007.- orellanag@granasa.com.e. Vulnerabilidad e impacto psicosocial.- Consecuencias de la migración.- Dra. María Elena Moreira.- funcionaria de la Direccion de Derechos Humanos del Ministerio de Relaciones Exteriores del Ecuador.9 9 presupuesto para desarrollar capacitación y cuidado de los equipos, Arón y Llanos 10 dicen ” el desgaste y el agotamiento se refiere a una reacción caracterizada por síntomas como el cansancio, fatiga, …… Síntomas conductuales como llegar tarde al trabajo, ausentismo laboral, trabajar menos horas pero lograr poco, ……. rigidización y dificultad para tomar decisiones. Síntomas que se expresan interaccionalmente como aislarse de los colegas, cerrarse a nuevas informaciones……” . Las formas de cuidado es de responsabilidad de los directivos y para ello requiere de una inversión, para generar condiciones “cuidadosas”11 y protectoras para el trabajo de los equipos. Siendo una de las fortalezas la existencia de un equipo técnico encargado exclusivamente del proceso técnico, administrativo y judicial para la adopción; lo que ha permitido fortalecer el seguimiento y apoyo a las familias adoptantes y a su vez generar un proceso de concientización con las autoridades judiciales, sociedad en general. La complejidad del sistema de adopciones no se ve reflejada en los análisis de los objetivos de los procesos, dado que es indispensable señalar que no contempla el proceso histórico vivido, los conflictos e ilusiones que vive cada niño; así como cada familia postulante a la adopción; pero es necesario que para el cumplimiento de los principios deben solucionarse los puntos críticos: actitud ambivalente, por no referir de inercia de los directivos, autoridades en general dado el tiempo que toma la determinación de la aptitud legal para ser adoptado, dicho proceso hasta la resolución de adopción no debería durar más allá de 1 año; ello implica, que de antemano se tomaría medidas sustitutivas como la reinserción familiar, acogimiento familiar y/o pre-asignación para evitar la institucionalización. El proceso técnico tiene carencias de protocolos, de indicadores que permitan sistematizar la problemática tanto para la prevención como la atención; tampoco hay protocolos, estándares para los procesos de capacitación de postulantes para la adopción nacional ni de un modelo de atención para el acogimiento institucional, sin claridad en la planificación de los proyectos educativos y proyectos de vida de los niños privados de su medio familiar; por lo que tampoco hay un sistema de información que 10 Arón, Ana María Ph.D.- y Llanos, María Teresa.- Cuidar a los que cuidan: desgaste profesional y cuidado de los equipos que trabajan con violencia.- Revista Sistemas Familiares 20 (1-2) 5-15. 11 Arón, Ana María Ph.D.- y Llanos, María Teresa.- Cuidar a los que cuidan: desgaste profesional y cuidado de los equipos que trabajan con violencia.- Revista Sistemas Familiares 20 (1-2) 5-15. 10 permita establecer estadísticas nacionales del total de niños en riesgo, ni datos del número total de niños que se encuentran en la fase judicial y de éstos tampoco hay estándares de medición, tanto de organismos privados como públicos. El flujo determinado en el proceso es idóneo, dado que contempla a todos los actores responsables del proceso; las competencias y responsabilidades están determinadas, lo que no existe un ente tutelar para la defensa de los niños en riesgo; y de los elementos sancionadores por el incumplimiento, como dice Edson Seda, “Crear condiciones reales para que los derechos no sean amenazados, significa mantener en funcionamiento el servicio público que garantice los derechos declarados como válidos. Las sanciones son fundamentales para restituir el equilibrio social, cuando los que omiten o abusen, vulneran estos derechos.....”12 En relación al trabajo con familias postulantes para la adopción no se ha establecido indicadores psicológicos para determinar características, indicadores de riesgo que permitan prevenir crisis o desistimientos del proceso; esto incluye el proceso de seguimiento y apoyo a los padres adoptivos. La participación de los padres adoptivos en el proceso de construcción del sistema de adopción es nulo; no existe asociaciones u organizaciones, no hay información ni se ha sistematizado el proceso que han vivido, de las dificultades así como los elementos que han permitido su cohesión. Uno de los aspectos a ser señalados como valederos del proceso de adopciones es que se ha construido indicadores sociales de las familias postulantes, de las características generales de los niños en riesgo, pero no de sus causas; sin importante desarrolar estrategias de prevención. 12 Seda, Edson.- Conferencia sobre políticas de protección integral.- UNICEF.- Instituto Nacional del Niño y la Familia INNFA- Ecuador 1995.- 11 Conclusiones El trabajo propone una serie de alternativas que conllevan a una reingeniería el sistema de protección integral para niños privados de su medio familiar; donde la responsabilidad social de todos los involucrados en el sistema permitirá contribuir a restituir uno de los derechos principales para el desarrollo sano de todo niño, niña, adolescente y por ende del futuro ciudadano ecuatoriano; el de su propia familia. Los lineamientos preventivos con la familia es el campo de acción del Trabajador Social; replantearse y/o recrear nuevas formas de intervención familiar con un abordaje y manejo integral es el reto; potenciar los factores protectivos y disminuir los factores de riesgo permitirá contribuir al bienestar de la familia, de su contexto y por ende de la sociedad. Para restituir los derechos violados de los niños privados de su medio familiar se propone la siguiente normativa jurídica y la creación de mecanismos de exigibilidad. Mediante decreto ejecutivo reforma a la Ley de la niñez y adolescencia donde se enmarque a través de norma sustantiva para que se instituya la figura jurídica del Procurador para la defensa de los niños privados de su medio familiar, dependiente del Ministerio Público. Serán nombrados por el Ministerio previo concurso de mérito y aposición, además de cumplir con los requisitos establecidos en la ley para fiscales, deberán demostrar que se han especializado o capacitado en los temas a Derechos del niño, Doctrina de protección integral, Convención de los Derechos del Niño y los tratados internacionales relativos a la niñez y adolescencia. Las facultades exclusivas del Procurador son: 1. Investigación de los procesos judiciales para la suspensión de la patria postestad previo la declaratoria de adoptabilidad, de uno o de ambos cónyuges. 2. Investigación, asesoramiento de los procesos para el consentimiento voluntario de uno o de ambos padres, previo al proceso de adoptabilidad. 12 3. Investigación de los procesos de acogimiento familiar de los niños sin declaratoria de adoptabilidad. 4. Investigación de los procesos para establecer medidas de protección, establecidas en el Art. 217, numeral 6. 5. Investigación de los procesos de pre-asignación de los niños sin declaratoria de adoptabilidad. 6. Investigación de los procesos de declaratoria de adoptabilidad de los niños privados de su medio familiar. Corresponde al Procurador: Elaborar, investigar, solicitar informes periciales y aprobarlos relativos a los procesos para la suspensión de la patria potestad previo la declaratoria de adoptabilidad de uno o ambos padres. Elaborar, investigar, solicitar informes periciales y aprobarlos relativos a los procesos para el consentimiento voluntario para la adopción establecida previa el proceso de adoptabilidad. Elaborar, investigar, solicitar informes periciales y aprobarlos relativos a los procesos para acogimiento familiar previo el proceso de declaratoria de adoptabilidad. Elaborar, investigar, solicitar informes periciales y aprobarlos relativos a los procesos para esclarecer medidas de protección establecidas en el Art. 217, numeral 6. Elaborar, investigar, solicitar informes periciales y aprobarlos relativos a los procesos de pre-asigación de los niños sin declaratoria de adoptabilidad. Elaborar, investigar, solicitar informes periciales y aprobarlos relativos a los procesos de declaratoria de adoptabilidad de los niños privados de su medio familiar. DURACIÓN.- 13 La etapa de investigación no podrá durar más de 30 días, los mismos que son improrrogables, en caso de incumplimiento se aplicará las sanciones establecidas en la ley. PLAZO.Tipificar el proceso judicial como tiempo máximo para su resolución de 12 meses; en caso de incumplimiento de la norma se determinará la amonestación económica de 50 salarios mínimos vitales por una sola vez, descontados de su sueldo; la suspensión de 15 días sin sueldo en caso de 2 veces y la separación definitiva del cargo en caso de 3 veces. Dicha regla será aplicada a todos los miembros integrantes de los Juzgados de la niñez y adolescencia, así como de los Procuradores, la DINAPEN u otras unidades de la Policía Nacional y la Oficina Técnica. Bibliografía Arón, Ana María PH.D.- y Llanos, María Teresa.- Cuidar a los que Cuidan: Desgaste Profesional y cuidado de los equipos que trabajan con violencia.- revista Sistemas Familiares 20 (1-2) 5-15. Edson Seda.- conferencia sobre Políticas de Proteción Integral en el Ecuador.- UNICEF.Instituto Nacional del Niño y la Familia -INNFA.- 1995.- Ladeas Global de Niñez y Juventud. Campinas. sp., Brasil, 1997. Hidalgo C. y Carrasco e.- Teoria acerca del funcionamiento familiar.- salud familiar: un modelo de atención integral en la atención primeria.- Universidad Católica de Chile Moreira, Maria Elena, Dra.- Vulnerabilidad e impacto psicosocial.- Consecuencias de la migración.- funcionaria de la Direccion de Derechos Humanos del Ministerio de Relaciones Exteriores del Ecuador.- Orellana Rodriguez, Gilda.- El derecho a una familia.- diario El Expreso.- Guayaquil.2007.- orellanag@granasa.com.e. Principio 6 de la “Declaración Universal de los Derechos del Niño”. 20xi-1959. 14 Pérez Marcos.- Comision Interamericana de Humanos.- Principio de Progresividad. Vacchelli Sicheri Gian Franco, Lic.- licenciado en Psicología.- estudio sobre la situación psicosocial de los niños y adolescentes albergados en el hogar "Jesús mi Luz" de la ciudad del Cusco-Perú.- derivados de los Juzgados de Familia por encontrarse en presunto estado de abandono. 15