manual técnico - Ajuntament d`Alcoi

Anuncio
ESTACIÓN CIENTÍFICA FONT ROJA NATURA-UA
Manual Técnico para el control de
la especie invasora
Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en
Espacios Naturales Protegidos
1
MANUAL TÉCNICO PARA EL CONTROL
DE LA ESPECIE INVASORA
AILANTHUS ALTISSIMA (MILL.) SWINGLE
EN ESPACIOS NATURALES PROTEGIDOS
Alcoy, julio de 2013
Equipo de trabajo
Soraya D. Constán Nava
Doctora en Biología
Estación Científica Font Roja Natura-UA, del Vicerrectorado de Investigación, Desarrollo e
innovación. Universidad de Alicante
Andreu Bonet Jornet
Doctor en Biología. Profesor Titular del Departamento de Ecología. Universidad de Alicante.
Instituto Multidisciplinar para el Estudio del Medio (IMEM) Ramón Margalef, Universidad de
Alicante.
Coordinador de la Estación Científica Font Roja Natura-UA, del Vicerrectorado de Investigación,
Desarrollo e innovación. Universidad de Alicante.
Cómo citar este informe técnico:
Constán-Nava, S. Bonet, A. 2013. Manual técnico para el control de la especie invasora
Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en Espacios naturales Protegidos. Estación Científica Font
Roja Natura. Universidad de Alicante. ISBN XXX
2
FINANCIACIÓN
Ministerio de Economía y Competitividad / Gobierno de España / Fundación Española para la
Ciencia y la Tecnología (FECYT).
Obra Social de "La Caixa".
Ajuntament d'Alcoi - Departament medi ambient.
ENTIDADES COLABORADORAS
CEMA Font Roja-Alcoy
Fundació LIMNE.
Conselleria d'Infrastructures, Territori i Medi Ambient - Parc Natural del Carrascar de la Font Roja
3
ÍNDICE
1. MARCO GENERAL
Pág. 6
1.1. INTRODUCCIÓN
Pág. 6
1.2. PROBLEMÁTICA ESPECIES VEGETALES EXÓTICAS INVASORAS
Pág. 7
1.3. AILANTHUS ALTISSIMA (MILL.) SWINGLE
Pág. 8
1.3.1. DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE
Pág. 8
1.3.2. EFECTOS
Pág. 11
1.3.3. SITUACIÓN ACTUAL DE LA ESPECIE
Pág. 12
1.3.4.SITUACIÓN EN EL PARQUE NATURAL DEL CARRASCAL DE Pág. 13
LA FONT ROJA Y LIC SERRA DE MARIOLA I CARRASCAL DE LA
FONT ROJA
2. OBJETIVOS
2.1. OBJETIVO GENERAL
2.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
3. MÉTODOS
3.1. PREVENCIÓN
3.2. METODOS DE CONTROL
3.2.1. DETECCIÓN TEMPRANA
3.2.2. MÉTODOS
3.2.3. ESTUDIO DE CASO A LARGO PLAZO
3.2.4. PROTOCOLO DE ACTUACIÓN RECOMENDADO
3.3. PARTICIPACIÓN ACTORES INTERESADOS
3.4. CRITERIOS DEL PLAN DE ACTUACIÓN
4. ANÁLISIS ECONÓMICO
5. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
6. BIBLIOGRAFÍA
Pág. 15
Pág. 15
Pág. 15
Pág. 16
Pág. 16
Pág. 17
Pág. 18
Pág. 20
Pág. 22
Pág. 23
Pág. 29
Pág. 30
Pág. 32
Pág. 37
Pág. 38
4
5
1. MARCO GENERAL
1.1. INTRODUCCIÓN
Las especies exóticas invasoras son aquellas especies capaces de sobrevivir, de
establecerse y de reproducirse en un lugar biogeográficamente distinto al original, pudiendo
tolerar y superar las condiciones bióticas y abióticas (Williamson 1996; Mack et al. 2000;
Balaguer 2004).
Los espacios naturales protegidos se caracterizan por la representatividad de sus
ecosistemas o la singularidad de la flora, fauna o formaciones geomorfológicos lo que les
confieren de un alto interés de conservación y protección. Aunque los espacios naturales
protegidos generalmente representan las últimas áreas alteradas (Vitousek et al. 1997), no dejan
de ser susceptibles a la presencia de especies exóticas invasoras (Drake 1988), ya que muchas
especies vegetales exóticas han invadido con éxito hábitats con un alto grado de conservación
(Luken 1988).
Este fenómeno, directa o indirectamente relacionado con la actividad humana, se está
generalizando como un problema de manejo prioritario (Luken y Thieret 1997). Cada vez son
más las áreas protegidas que se encuentran amenazadas por las invasiones biológicas (Luken y
Thieret 1997; MacDougall y Turkington 2004). Ante este problema, los planes de gestión de las
áreas protegidas recogen el control y erradicación de estas especies, pero se trata de algo
complejo, dado que son áreas con usos restringidos, los cuales limitan los métodos de actuación.
Por ello, en las dos últimas décadas ha sido necesaria la implantación de sistemas de gestión y
actuación para el control de especies alóctonas invasoras en varios Parques Nacionales de la
Red. PP.NN. Ejemplos de ello son los llevados a cabo en Garajonay, para el control de
Tradescantia fluminensis Vell., en la Caldera de Taburiente contra Ageratina adenophora
(Spreng.) R. M. King & H. Rob., o en Doñana contra Gomphocarpus fruticosus (L.) Aiton fil, y
Nicotiana glauca R. C.Graham.
6
1.2 PROBLEMÁTICA ESPECIES VEGETALES EXÓTICAS INVASORAS
Las invasiones biológicas obedecen a un fenómeno natural, pero la presencia del ser
humano ha acelerado el proceso exponencialmente (Mooney y Hobbs 2000; Vilà 2000).
Actualmente, se consideran como una de las causas principales de la pérdida de biodiversidad a
escala global (Lonsdale 1999, Mack et al. 2000, Didham et al. 2005), solamente por detrás de la
destrucción de hábitats y la fragmentación del paisaje, ya que se trata de un agente de cambio
global (Vitousek 1990; Vitousek 1994, Williamson 1996).
Las especies vegetales invasoras provocan efectos que van desde niveles genéticos hasta
paisajísticos (Vilà 2000; Castro-Díez et al. 2004), alterando la estructura y funcionamiento del
ecosistema invadido y causando daños ecológicos y socioeconómicos (Dukes y Mooney 1999;
Mack et al. 2000; Moore 2005).
Entre los efectos ecológicos que pueden provocar las especies vegetales invasoras, se
encuentra la alteración de las relaciones entre especies (Traveset et al. 2004), pudiendo
reemplazar especies nativas (Groves 1986; Mooney y Drake 1987; Simberloff 2001), hasta
incluso provocar una extinción local, sobre todo si se trata de especies de poblaciones reducidas
(Vilà 2000). Pueden alterar los procesos de los ecosistemas mediante la alteración de ciclos
biogeoquímicos, modificación de procesos de erosión y sedimentación, alteración de la fertilidad
de los suelos, reducción o agotamiento de los niveles de agua, alteración de los patrones de
drenaje, y/o modificación de los regímenes de incendios (Mack et al. 2000; Didham et al. 2005).
Además, favorecen la invasión de otras especies exóticas (Murphy et al. 2006), y tienen un gran
impacto potencial sobre la regeneración y dinámica natural de muchos ecosistemas terrestres
(Valladares et al. 2004).
En relación a los ecosistemas invadidos, generalmente las especies invasoras encuentran
facilitada su introducción en comunidades perturbadas por la acción humana (Hobbs y Huenneke
1992), así como en áreas agrícolas, las cuales son muy susceptibles a la invasión (Elton 1958;
Baker 1986). Las zonas verdes, dado que están sujetas al estrés ambiental y a causa de su
proximidad a sitios de introducción de especies exóticas y su función como borde de otros
hábitats, son el principal hábitat para las especies invasoras, las cuales se extienden hacia
hábitats menos urbanos (Vitousek et al. 1997).
La presencia de especies exóticas invasoras implica elevados costes económicos debido a
las inversiones realizadas en medidas de prevención (análisis de riesgos, educación ambiental),
detección temprana (localización de especies invasoras, evaluación de impactos), control y
7
erradicación, así como en medidas de restauración de ecosistemas invadidos (Dukes y Mooney
1999; Mack et al. 2000; Vilà 2000; Castro-Díez et al. 2004; Moore 2005).
Asimismo, afectan a un nivel cultural, ya que implican una alteración de la percepción del
ser humano (en muchos casos consideran a las especies invasoras como nativas debido a su
uso común en jardinería).
1.3. AILANTHUS ALTISSIMA (MILL.) SWINGLE
1.3.1. Descripción de la especie
Ailanthus altissima (Mill) Swingle 1916 (ailanto, árbol del cielo, ailante) pertenece a la
familia Simaroubaceae, siendo una de las cinco especies del género Ailanthus Desf. Este árbol,
nativo de China y del Norte de Vietnam, fue introducido en Francia en los años 1740 por el
misionero Pierre d´Incarville en forma de semillas, y posteriormente (1751), al ser confundida con
la especie Rhus verniciflua, fue transportada a Londres y a otras partes de Europa y América (Hu
1979), expandiéndose como especie invasora en todos los continentes salvo en la Antártida
(Kowarik y Säumel, 2007; Fig. 1.3.1.).
Figura 1.3.1. Área de expansión de Ailanthus altissima con una diferenciación del área nativa en
China y Norte de Vietnam (rallado) y su distribución secundaria a lo largo del Mundo (negro) a partir de su
introducción en Europa en los años 1740 (Extraído de Kowarik y Saümel 2007).
8
Es una especie pionera, es decir, aprovecha espacios abiertos para su colonización, de
crecimiento rápido de 1 a 1.5 m/año (Zasada y Little 2002) y que posee un único tronco, de
corteza lisa o rugosa pardo-grisácea y con vetas longitudinales, a partir del que crecen nuevos
retoños en la estación de crecimiento (Kowarik y Säumel 2007). El rango de tamaño que se
puede encontrar es de 27-30m en zonas templadas y de 18-20m en zonas meridionales (Hunter
2000; Arnaboldi et al. 2003).Las ramas se presentan extendidas formando una copa aparasolada
de color grisáceo y ramillas rojizas. Posee hojas compuestas, alternas, pinnadas grandes, con
13-27 foliolos, siendo de desarrollos similares en zonas climáticas diferentes (Kowarik y Säumel
2007). Contiene un receptáculo hueco en la base, de olor fétido 7-9 pares de hojuelas aovadas o
lanceoladas, enteras o con 2-4 lóbulos en la base y una glándula junto al ápice en la cara
inferior.
Es un árbol dioico, algunos autores señalan que las flores pueden ser bisexuales o los
árboles monoicos, aunque esto aún no está demostrado (Kowarik y Säumel 2007). Las flores
femeninas producen un olor desagradable. La floración se produce en forma de panícula, a partir
de la cual, los carpelos se desarrollan en 5 sámaras con alas membranosas (Hu 1979) de color
amarillo verdoso hasta marrón rojizo (Kowarik y Säumel 2007). Cada una de las sámaras
contiene una única semilla situada en la zona central y se dispersan de manera anemócora a
partir de septiembre-octubre permaneciendo muchas de ellas en el árbol hasta mayo del año
siguiente (Bory y Clair-Maczulajtys 1980). La producción de sámaras es de hasta 325.000
sámaras por individuo (Hoshovsky 1988), pudiendo aumentar la probabilidad de permanencia de
su especie en el ecosistema receptor.
9
Figura 1.3.2. Ejemplar ornamental adulto femenino de A. altissima y detalle de panícula de
semillas.
Este árbol produce una raíz pivotante y numerosas raíces laterales de una longitud media
de 114,4 m, donde almacena la mayor parte de las reservas de carbohidratos y proteínas
(Davies 1944; Kowarik y Säumel 2007).
La corteza de la raíz, y de otras partes de la especie, así como hojas, y sámaras contienen
componentes alelopáticos (principalmente la ailanthona) que son tóxicos para muchas especies
(Heisey 1990; Lawrence et al. 1991; Heisey 1996).
Fuera de su rango nativo está sujeta a baja presión herbívora, lo que se ha atribuido a los
componentes tóxicos de sus tejidos (Ohmoto y Koike 1984). En Europa se ha encontrado dos
especies de insectos se alimentan de esta especie, Hyphantria cunea en Austria y Samia cynthia
en Italia y se han identificado 46 artrópodos fitófagos en su rango nativo (Kowarik y Säumel
2007). Se han descrito 65 especies de hongos asociados a la especie (Ding et al. 2006).
Todas las características anteriormente descritas (especie pionera, de rápido crecimiento
juvenil, fuertemente rebrotadora, con un sistema radicular potente producción de sustancias
10
alelopáticas y herbicidas y capacidad de producir un elevado número de semillas) le han
permitido colonizar un elevado número de ecosistemas fuera de su rango nativo, invadiendo
desde ecosistemas antropizados hasta ecosistemas naturales (Kowarik 1995; Knapp y Canham
2000; Kowarik y Säumel 2007).
1.3.2. Efectos de la especie invasora
Ailanthus altissima puede reducir la vegetación nativa por competencia (espacio y luz
solar) a causa de las densas poblaciones que conforma, así como por efectos alelopáticos, a
través de la acumulación en el suelo de las sustancias alelopáticas que produce, lo que inhibe el
crecimiento de otras especies (Gómez-Aparicio y Canham 2008a; Kowarik y Säumel 2007). El
establecimiento de poblaciones de A. altissima implica fuertes efectos en las comunidades
vegetales. Se ha encontrado un descenso en la riqueza de especies en parcelas invadidas en
islas Mediterráneas respecto a las parcelas no invadidas (Vilá et al. 2006), así como que produce
cambios en la estructura de la vegetación en bosques de ribera (Constán-Nava et al. 2008). A.
altissima puede alterar el funcionamiento de los ecosistemas al aumentar las tasas de paso de
los elementos y la disponibilidad de nutrientes, esto es, induce a un incremento en el N total, C
orgánico y pH del suelo, y disminuye la proporción C/N (Gómez-Aparicio y Canham 2008b;
Traveset et al. 2008; Vilá et al, 2006), aumentando la tasa de descomposición de la hojarasca
frente a especies nativas (Castro-Díez et al. 2009).
Los efectos sobre la salud humana también se conocen. Ballero et al (2003) en un estudio
realizado en Cerdeña (Italia), encontraron que 10 de un total de 54 pacientes mostraban alergia
al polen de A. altissima. El contacto con la savia de A. altissima puede, en algunos casos, causar
dermatitis (Derrick y Darley 1994) y en casos raros o de mayor tiempo de exposición a la
especie, miocarditis, debido a proteínas quasinoides (Bisognano et al. 2005).
Las poblaciones de A. altissima situadas a lo largo de las carreteras pueden causar peligro
al reducir la visibilidad de los conductores (Burch y Zedaker 2003). Las raíces pueden romper
pavimientos (Danin 2000) y también entrar en pozos y canales de aguas residuales (Hu 1979).
En áreas urbanas puede provocar daños a construcciones históricas a causa de su extenso
sistema radicular, como las murallas y tejado de la catedral de Coimbra, en Portugal (Almeida et
al. 1994). En Italia, A. altissima se trata de una especie gran impacto sobre restos arqueológicos
(Celesti-Grapow y Blasi 2004). En la agricultura se le considera como mala hierba, pero no existe
información sobre el coste económico que supone y las pérdidas que acarrea (ISSG 2008).
11
Figura 1.3.3. Expansión de Ailanthus altissima donde oculta una de las señales de circulación
(izquierda) e invasión en campo de cultivo de olivos (derecha).
1.3.3. Situación actual de la especie
Actualmente se encuentra incluida en la lista negra preliminar de Especies Exóticas
Invasoras de España (Capdevila-Argüelles et al. 2006), así como en la lista Top 20 de especies
de prioridad para su control en Europa (Sheppard et al. 2006). Además se encuentra entre las 15
especies de mayor impacto en las Islas Mediterráneas dentro del proyecto Exotic Plant
Invasions: Deleterious Effects on Mediterranean Island Ecosystems (EPIDEMIE), financiado por
la Comisión Europea en el marco de su Acción Clave Vulnerabilidad de Ecosistemas (Balaguer
2004). En la Comunidad Valenciana, se encuentra incluida en el Anexo II del Decreto 213/2009
de Control de Especies Exóticas Invasoras de la Comunidad Valenciana, prohibiendo su
introducción, siembra o plantación en terrenos forestales. Estas limitaciones no afectarán a los
recintos ajardinados y viveros lindantes o incluidos en los citados terrenos, siempre que los
ejemplares plantados no se propaguen fuera de sus límites.
El hecho de que se encuentre como invasora en un elevado número de lugares se debe a
su empleo como especie ornamental, así como en restauración de taludes de carreteras,
existiendo aún en la actualidad manuales técnicos publicados por la Administración Española en
los que se recomienda expresamente el uso de la especie en proyectos de obra civil, a pesar de
que esta especie está considerada como uno de los invasores más agresivos en la cuenca del
Mediterráneo (Balaguer 2004). Son numerosos los espacios naturales españoles en los que se
12
ha confirmado el carácter invasor del ailanto, como son los casos del Parque Nacional de Sierra
Nevada (Castroviejo et al. 2004) o el Parc de Collserola (Barcelona) (Meggaro y Vilà 2002), en
otros está siendo objeto de diferentes planes de gestión, como en los Parques Naturales de
Cardeña y Montoro, P.N. de las Sierras Subbéticas, P.N. de Hornachuelos y en la Reserva
Natural de la Laguna de Tíscar (provincia de Córdoba), y otros lugares su erradicación está
planteando grandes dificultades (Algarra et al. 2005).
Figura 1.3.4. Poblaciones de la especie A. altissima debidas a su empleo en restauración de
taludes de carretera (izquierda) y de la antigua Vía Verde de Alcoy, Alicante (derecha).
1.3.4. Situación en el Parque Natural del Carrascal de la Font Roja y LIC Serra de
Mariola i Carrascal de la Font Roja
Los diversos estudios realizados por el grupo de trabajo hasta el momento (Climent et al.
2006; Constán-Nava et al., 2007; 2008; 2009; 2010a; 2010b), indican una serie de patrones de
distribución y comportamiento de la especie en el Parque y su comarca, que es conveniente
considerar para la elaboración de planes de gestión:
• El ailanto se encuentra preferentemente ocupando zonas en las que sus suelos se
encuentran alterados y mermadas sus buenas características edafológicas y/o en zonas
próximas a márgenes de carretera, barrancos o cursos de agua, ya que su capacidad de
crecimiento se ve influenciada positivamente por la presencia de este elemento.
13
• Dentro de los diferentes tipos de ambientes definidos en la zona de estudio (Terrones et
al. 2006) se sitúa con mayor frecuencia en las zonas de la umbría y en un rango altitudinal que
va desde los 650 m hasta los 1040m.
• Los rodales de superficie media mayor se localizan en aquellos ambientes que gozan de
mayor disponibilidad hídrica, preferentemente en bosque en galería.
• La clase de vegetación más afectada por la invasión de la especie son los bosques de
ribera y pinares de Pinus halepensis, y la que menos las comunidades maduras que se
encuentran en el parque, compuestas principalmente de carrasca. De modo que la madurez del
bosque diferencia los diferentes grados de establecimiento y expansión.
• Los rodales de mayor superficie media según la clase de vegetación en la que se
asientan se dan en bosques de ribera, pero también en áreas de cultivos abandonados y
canteras, por la facilidad de expansión donde la competencia por la luz, nutrientes y espacio es
menor que la que se puede dar en zonas donde existan comunidades vegetales establecidas.
• El despoblamiento de las masías y abandono de los usos tradicionales en la zona ha
dejado paso a la de entrada y asentamiento de especies exóticas. Además, se ha perdido el
mantenimiento de campos y zonas perimetrales de estas fincas, con lo que son factores que
actúan a favor de estas especies.
Figura 1.3.5. Colonización descontrolada por A. altissima en construcciones antrópicas
abandonadas dentro de Espacios Naturales Protegidos (Sierra de Mariola).
14
2. OBJETIVOS
2.1. OBJETIVO GENERAL
Erradicar la especie invasora Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en espacios naturales protegidos
en el ámbito mediterráneo.
2.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
a) Establecer bases para la gestión y control de la especie invasora Ailanthus altissima en
espacios naturales protegidos.
b) Proporcionar el conocimiento sobre técnicas, procedimientos y métodos para su manejo.
c) Proporcionar al personal relacionado con la gestión los conocimientos y fundamentos para
su erradicación, así como del riesgo de invasión que presenta.
15
3. METODOS
3.1. PREVENCIÓN
La prevención es el primer paso para combatir el problema de las especies exóticas
invasoras. Para ello, se parte de los principios orientadores 1 y 2 del Convenio sobre Diversidad
Biológica recogidos en la resolución COP-CBD VI/23 (CBD 2002):
Principio de orientación 1: Enfoque de precaución
Puesto que no pueden predecirse las vías y los impactos de las EEI sobre la diversidad
biológica, los esfuerzos por identificar e impedir introducciones intencionales, así como las
decisiones relativas a introducciones no intencionales, deberían basarse en el enfoque de
precaución, en particular con referencia al análisis de riesgos, de conformidad con los principios
de orientación que siguen. El enfoque de precaución es el establecido en el Principio 15 de la
Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, de 1992 (Conferencia de las
Naciones Unidas sobre el medio ambiente y el desarrollo, 1992), y en el preámbulo del Convenio
sobre la Diversidad Biológica (CBD, 1992). El enfoque de precaución debería también aplicarse
al examinar las medidas de erradicación, contención y control en relación con las especies
exóticas que se han establecido. La falta de certidumbre científica acerca de las diversas
consecuencias de una invasión no debería utilizarse como una razón para aplazar o para no
adoptar medidas adecuadas de erradicación, contención y control.
Principio de orientación 2: Enfoque jerárquico en tres etapas
1. En general, la prevención tiene, con mucho, la mejor relación entre costo y eficacia, y es
preferible desde el punto de vista del medio ambiente a la adopción de medidas después de la
introducción y el establecimiento de EEI.
2. Debería darse prioridad a prevenir la entrada de EEI, entre los Estados y dentro de un Estado.
Si ya se ha producido la entrada de una especie invasora, una pronta detección y una acción
rápida son decisivas para impedir su establecimiento. Con frecuencia la respuesta preferida es
erradicar los organismos tan pronto como sea posible (Principio 13). En caso de que no sea
posible la erradicación o que no se disponga de recursos para su erradicación, deberían
16
aplicarse medidas de contención (Principio 14) y medidas de control a largo plazo (Principio 15).
Todo examen de los beneficios y de los costos (ambientales, económicos y sociales) debería
realizarse a largo plazo.
Las medidas de prevención son las más efectivas, y entre ellas, se pueden encontrar:

Marco legal que contemple la problemática de las especies exóticas invasoras. En la
actualidad se están trabajando en ello a diferentes ámbitos, desde autonómico a estatal
(véase por ejemplo, el Decreto 213/2009 de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua,
Urbanismo y Vivienda de la Comunidad Valenciana).

La creación de listas de especies exóticas invasoras es de vital relevancia para el
conocimiento de las especies invasoras.

El uso de material autóctono en jardinería es fundamental para evitar la invasión de especies
no deseadas.

El desarrollo de campañas de educación ambiental a diferentes niveles de la población,
profesionales y sectores productivos implicados.

Las medidas preventivas según el modo de introducción (voluntario/involuntario) también son
importantes. Hay que destacar que la mejor estrategia de prevención es la de mantener los
ecosistemas con una alta integridad ecológica, por lo tanto, es necesaria una planificación
eficaz y una ordenación de los usos dentro de los Espacios Naturales Protegidos que
asuman que las perturbaciones, tales como movimientos del terreno, pisoteo de los
visitantes, apertura de sendas, caminos, cortafuegos, quemas prescriptas, etc., facilitan
directa o indirectamente las invasiones biológicas.
3.2. MÉTODOS
DE CONTROL
En este apartado se describen diversos métodos de control sobre la especie invasora A.
altissima, partiendo de la detección temprana como primera medida de prevención. Finalmente,
se presenta el protocolo de actuación, resultado del estudio desarrollado a largo plazo en el P.N.
del Carrascal de la Font Roja (Alicante) por la Universidad de Alicante, para determinar la mejor
estrategia de control de la especie invasora en espacios naturales protegidos bajo clima
mediterráneo.
17
3.2.1. Detección temprana
Las acciones de detección temprana deben estar acompañadas por una evaluación
expeditiva de impacto y por una gestión de los recursos necesarios para concretar
intervenciones rápidas, toda vez que se haya detectado la introducción o el establecimiento de la
especie exótica nueva en el área monitoreada. Las nuevas invasiones, particularmente las que
impliquen alto impacto, deben ser tratadas como de primera prioridad.
Para ello, el primer paso es conocer la localización de la especie invasora dentro del
espacio natural protegido para analizar el grado de invasión en los distintos ecosistemas que
forman parte del mismo. El uso de sistemas de información geográfica es muy útil para disponer
de información sobre la localización de las especies invasoras de cara a la gestión.
Figura 3.2.1. Mapa de distribución actual de Ailanthus altissima en la ZEPA Sierras de MariolaCarrascal de la Font Roja.
Una vez conocida su distribución, el empleo de análisis multicriterio es una buena técnica
para determinar áreas de mayor prioridad para actuar sobre la especie, como son ecosistemas
de ribera o carrascal, con alto interés para la conservación (Terrones et al. 2006).
18
Es muy importante para la gestión y el control de especies de plantas invasoras identificar
las áreas con alto riesgo de invasión (Hobbs y Humphries 1995; Mack et al. 2000), así como
identificar los usos de suelo que puedan favorecerlas.
La cartografía de hábitat disponible para especies de invasoras es un instrumento de gran
utilidad en la gestión de áreas protegidas, ya que pueden ayudar en las tareas de control,
erradicación y restauración de los hábitat afectados. Su utilidad permite establecer prioridades en
la vigilancia y monitoreo de las poblaciones de EEI y también para planificar correctamente las
actuaciones.
El estudio de Ailanthus altísima en el P.N. del Carrascal de la Font Roja ha permitido
identificar las posibles fuentes de diásporas y factores territoriales de expansión, siendo en este
caso la proximidad a carreteras, pistas forestales, ríos, barrancos, vía verde, edificaciones
dispersas y núcleos urbanos (Terrones et al. 2007; Constán-Nava et al. 2007; Peña et al. 2008).
La evaluación multicriterio es una metodología fiable y de fácil utilización para la
zonificación del territorio en el control de especies exóticas invasoras. La obtención de mapas de
hábitat disponible para determinadas especies es un instrumento muy útil en la gestión de áreas
protegidas (Terrones et al. 2006).
Figura 3.2.2. Hábitat disponible para la especie Ailanthus altissima, con una clasificación del riesgo
de propagación, en el P.N. del Carrascal de la Font Roja (Alcoy, Alicante) (Extraído de Constán-Nava et
al. 2007).
19
3.2.2. Métodos de control
Se proponen actuaciones dirigidas a la intervención directa sobre el ailanto. Se pueden
diferenciar los siguientes métodos:
Métodos manuales y mecánicos
Los métodos manuales y mecánicos incluyen la extracción de plantones jóvenes, desbroce
de parte aérea, cortes anulares en el tronco y excavación para extracción de las raíces. La
extracción manual puede hacerse para pequeños plantones, pero deja de ser efectiva cuando las
plántulas desarrollan su sistema radicular, por lo que al eliminar los tallos se puede producir
rotura de la raíz y propagarse (Kowarik y Säumel 2007). Asimismo, es difícil llevar a cabo esta
metodología si el individuo tiene un sistema radicular completamente desarrollado.
El desbroce, es decir, la eliminación de la parte aérea a mano, con tijeras de podar y
hachas, o mecánicamente con desbrozadoras de distinto calibre, es un método muy utilizado
para controlar el ailanto, pero tras ello se produce un rebrote importante en tallos y raíces
(Meloche y Murphy 2006; Constán-Nava et al. 2010). Lo mismo ocurre cuando se trata de
eliminar el cambium del tronco, el tronco muere, pero se producen rebrotes de las raíces. La
excavación y extracción de raíces sólo puede llevarse a cabo en pequeñas extensiones.
Figura 3.2.3. Aplicación de métodos mecánicos sobre individuos adultos de ailanto en el P.N. del
Carrascal de la Font Roja (Alcoy, Alicante).
20
Se ha de tener en cuenta que la erradicación es difícil y costosa, principalmente si se
pretenden usar métodos mecánicos, pues no son definitivos y requieren un seguimiento a largo
plazo (Burch y Zedaker 2003).
Métodos químicos
Los métodos químicos pueden controlar o defoliar un individuo de esta especie, pero el criterio
más importante para cualquier tratamiento mediante herbicidas es el éxito en el control en los
rebrotes del tocón y el sistema radicular, y la eliminación de los troncos. Un tratamiento con
herbicidas necesita eliminar el tronco a la vez que se moviliza hacia las raíces para controlar el
rebrote. Este control debe llevarse a cabo dentro de unos límites aceptables si se pretende
mantener la integridad ecológica del lugar, por lo que una estrategia eficiente debe permitir
controlar poblaciones e individuos de ailanto sin comprometer la funcionalidad de la comunidad
vegetal autóctona. En áreas templadas la combinación de métodos mecánicos con químicos son
los que han presentado mejores resultados (Meloche y Murphy 2006). En estas zonas, se han
empleado diferentes metodologías para controlar el numero de rebrotes del ailanto en áreas
protegidas, entre los cuales, los que han presentado mejores resultados han sido tras la
combinación de métodos mecánicos junto con la aplicación de glifosato (Burch y Zedacher 2003;
Meloche y Murphy 2006). Asimismo, bajo clima mediterráneo, el desbroce junto a la aplicación
de glifosato también ha resultado ser la metodología más eficaz contra el rebrotado de la especie
a largo plazo (Constán-Nava et al. 2010; ver apartado Estudio de caso a largo plazo).
Métodos biológicos
Según la literatura científica, en el área original de A. altissima existen 46 artrópodos
fitófagos, 16 especies de hongos y un potyvirus que causan un daño significativo a la especie
(Ding et al. 2006). Esto sugiere que el control biológico puede ser una alternativa potencial, pero
esta técnica debe ser evaluada (Ding et al. 2006).
Otros métodos
La quema y el pastoreo pueden eliminar los troncos de ailanto y debilitar las raíces, pero
ninguno de los dos métodos ha demostrado ser una solución a largo plazo debido a los
continuos rebrotes (Meggaro y Vilà 2002).
21
3.2.3. Estudio de caso a largo plazo
A pesar de la necesidad de control de A. altissima bajo clima mediterráneo y la falta de
eficacia en los métodos existentes, los planes de manejo específicos son escasos y recientes, y
se desconocía la mejor metodología para su erradicación.
Debido a la capacidad de recuperación de la especie como especie rebrotadora, y a la
posibilidad de agotar sus reservas, desde la Universidad de Alicante, en colaboración con la
Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, se realizó un estudio a largo plazo
para determinar el método más eficaz para controlar a la especie en el P.N. del Carrascal de la
Font Roja (Constán-Nava et al. 2010).
En este estudio se compararon 3 tratamientos frente a un control (desbroce anual, dos
desbroces anuales, y desbroce junto a aplicación de herbicida (glifosato)) en el periodo 20052009, repitiendo anualmente los tratamientos desde 2005 a 2008. Como resultado de este
estudio se obtuvo que el tratamiento de corte y glifosato redujo la biomasa, la altura y el área
foliar de los rebrotes de A. altissima en más del 80% a partir del primer año, llegando a
eliminarse algunas de las poblaciones tras 4 años de repetición del tratamiento (Tabla 3.2.1.,
Figura 3.2.4.).
Figura 3.2.4. Parcelas sin rebrotes de A. altissima tras cuatro años de aplicación de corte y herbicida
anual.
22
Tabla 3.2.1. Resultado de los tratamientos aplicados sobre el ailanto en el estudio a largo
plazo.*Diferentes letras indican estadísticamente diferencias significativas para p<0,05 (extraído de
Constán-Nava et al. 2010b)
Tratamiento
Biomasa (gr m-2 )
Control
Un corte
Dos cortes
Corte y herbicida
Densidad (num m-2)
Control
Un corte
Dos cortes
Corte y herbicida
Altura (m)
Control
Un corte
Dos cortes
Corte y herbicida
Previo
(2005)
Primer año
(2006)
Segundo año
(2007)
Tercer año
(2008)
Cuarto año
(2009)
1318,4 (602,7) a
1878,6 (1204,7) a
2262,1 (1825,3) a
827,9 (245,8) a
2422,2 (1042,3) a
283,3 (84,9) ab
340,7 (143,7) ab
35,9 (25,2) b
3329,6 (1511,3) a
801,8 (463,5) ab
414,1 (163,5) ab
115,2 (42,4) b
3129,1 (1366,2) a
234,7 (81,5) ab
534,5 (54,7) a
45,2 (30,0) b
3560,1 (1655,8) a
159,9 (68,9) a
206,0 (100,9) a
15,5 (15,3) b
8,2 (1,6) a
3,8 (0,4) a
7,7 (3,1) a
5,2 (1,2) a
8,3 (1,7) a
7,9 (1,3) a
9,9 (3,3) a
3,0 (0,7) a
6,5 (0,9) a
10,6 (2,9) a
13,3 (4,7) a
6,5 (3,0) a
6,7 (1,0) a
13,6 (3,6) a
16,0 (5,8) a
5,1 (1,6) a
6,7(1,4) a
12,1 (6,3) a
11,0(4,0) a
2,0(0,9) a
1,2 (0,3) a
1,3 (0,3) a
1,4 (0,4) a
1,0 (0,2) a
1,3 (0,4) a
0,6 (0,1) ab
0,6 (0,2) ab
0,2 (0,0) b
1,5 (0,3) a
0,7 (0,2) ab
0,6 (0,0) b
0,3 (0,0) b
1,4 (0,3) a
0,5 (0,1) b
0,5 (0,0) b
0,1 (0,0) b
1,6(0,5) a
0,5 (0,1) b
0,4 (0,0) b
0,07(0,0) b
Los tratamientos de un desbroce y dos desbroces no redujeron a la especie invasora (Tabla
3.2.1., Figura 3.2.5.)
Figura 3.2.5. Rebrotes de ailanto tras cinco años de estudio en tratamientos de un corte (izquierda)
y dos cortes anuales (derecha).
Como resultado de este estudio se ha desarrollado el protocolo de actuación descrito a
continuación.
23
3.2.4. Protocolo de actuación recomendado
Se distinguen dos zonas de actuación, afectando tanto a terrenos de titularidad pública
como privada, en el ámbito de la zona PRUG como PORN. Además se distinguen dos
situaciones:
•
Rodales de ailanto
•
Pies de ailanto con fin ornamental
Esta división en las actuaciones considera la zonificación del Parque Natural, permitiendo
diferenciar situaciones administrativas. También desde el punto de vista ecológico, el manejo
será diferente. Por un lado, encontramos rodales de ailanto, sin selvicultura; de crecimiento
espontáneo. Por otro lado, pies de ailanto que reciben cuidados culturales, cuya finalidad es
integrarse en el jardín de alguna masía. Este hecho condicionará el tipo de actuaciones y cómo
se llevarán a cabo.
Para el primer caso el procedimiento recomendado es el siguiente:
1. Desbrozado de los individuos a nivel cercano al cuello de la raíz. Debe procurarse
eliminar al máximo la parte aérea de la planta, de forma que se dejen pocas yemas que puedan
rebrotar.
24
Figura 3.2.6. Desbroce de individuos de ailanto mediante tijeras de podar.
2. Aplicación del herbicida Glifosato (sal isopropilamina al 36% p/v) sin diluir sobre la
base del tocón del pié apeado mediante un pincel. Alternativamente, y dependiendo de la
extensión a tratar y considerando la fragilidad del hábitat, lejanía a los cursos de agua, etc.
podría aplicarse mediante mochila difusora, pero valorando siempre el riesgo que comporta
contaminar la vegetación herbácea circundante, la fauna edáfica, etc., por lo que, aunque se
haga con este segundo método, las aplicaciones deben ir siempre dirigidas al punto de corte del
tronco. Nuestra recomendación es que se utilice el pincel siempre que sea posible.
Figura 3.2.7. Aplicación del herbicida sobre individuos recién cortados de Ailanthus altissima en el
P.N. del Carrascal de la Font Roja (Alcoy, Alicante).
25
En caso de pasar 15 minutos desde el desbroce hasta la aplicación del herbicida, se
deberá realizar de nuevo un corte y aplicar el fitosanitario, ya que la absorción deja de ser
efectiva transcurrido ese tiempo. El momento de la actuación corresponde al periodo otoñal, que
es cuando se produce la traslocación principal de los nutrientes desde la parte aérea hacia el
sistema radicular. Algunos autores recomiendan que la aplicación del herbicida sea a finales de
primavera porque la traslocación es más intensa que en otoño. Por tanto, es posible realizar una
primera aplicación a finales de primavera y una segunda tras el rebrote, en otoño.
En cuanto a la preparación y aplicación del herbicida, se debe realizar cumpliendo una
serie de medidas de seguridad:
•
utilizar ropas y protectores adecuados (guantes, mascarilla, pantalones y camisas
largas, botas, protector facial y sombreros)
•
aplicar el herbicida mediante pincel, evitando pulverizaciones aéreas, sobretodo
cerca de poblaciones, lagos o cursos de agua, así como sobre zonas boscosas.
•
no aplicar este producto en presencia de fuertes vientos o en horas de mucho
calor.
•
inutilizar y eliminar adecuadamente los envases vacíos
•
no lavar los envases o equipos de aplicación en lagos, ríos, arroyos y demás
fuentes de agua
•
mantener fuera del alcance de los niños y personas inexpertas. Necesario el carné
de manipulador de fitosanitarios.
•
no transportar ni almacenar con alimentos.
3.Eliminación del material vegetal extraído. La presencia de semillas en los individuos
se ha de tener en cuenta y deberán separarse del resto del material vegetal para evitar futuras
propagaciones. No es recomendable utilizar el material vegetal como compost, ya que se ha
indicado el elevado efecto inhibidor de la germinación de la flora autóctona (alelopatía).
26
Figura 3.2.8. Desbrozado de individuos de ailanto mediante trituradora.
Se recomienda la realización de los apartados 1., 2., y 3., dos veces al año, la primera a
finales de primavera (tras el primer rebrotado de la especie) y en otoño (segunda fase de
crecimiento vegetativo).
4. Seguimiento de las actuaciones. Para poder evaluar los efectos de los tratamientos es
necesario realizar un seguimiento de los nuevos rebrotes después de las actuaciones y
repetir el protocolo a largo plazo para su erradicación. Un Plan de gestión adaptativa
deberá desarrollar los mecanismos pertinentes de evaluación de las actuaciones
realizadas mediante el correcto seguimiento. Para ello será conveniente elaborar
informes anuales de seguimiento, reflejando resultados sobre los parámetros
indicadores seleccionados sobre os rodales afectados por los tratamientos:
•
Área basimétrica total
•
Tasa de crecimiento diametral
•
Tasa de crecimiento en altura
•
Parámetros reproductivos (Número total de racimos de flores y frutos)
27
Figura 3.2.9. Resumen de los pasos recomendados para el control de A. altissima en Espacios
Naturales Protegidos Mediterráneos.
En el caso de pies ornamentales o situados en fincas privadas y cercanos a jardines o
viviendas, además del protocolo anterior, se recomienda:
•
En el caso de pies ornamentales, se recomienda realizar podas selectivas en los
pies adultos ornamentales de masías, en general, masculinos y/o femeninos.
Consiste en la poda del último tramo de los brazos del árbol, lugar donde se
localizan los racimos con las flores. El hecho de no concretar sobre qué sexo
actuar es con la idea de ser consensuado con los afectados, los propietarios. Una
vez tomada la decisión, sobre pie femenino o masculino, se ha de seguir esa línea
ya que la aplicación de estas podas selectivas tienen por objeto obstaculizar o
bien, el transporte del polen al pie femenino, cuando se actúa sobre el pie
masculino, u eliminar el punto de fecundación de la flor femenina, cuando se actúa
sobre el pie femenino. Sea cuál sea la decisión tomada será válida y efectiva. El
28
momento de hacer estas podas selectivas coincidirá justamente antes de la
floración, cuando todavía las flores aparecen cerradas, de modo que se evite que
el polen de las flores masculinas vaya a las femeninas, y así eliminar la
fructificación y producción de semillas.
•
Destoconamiento mecánico y retirada de los pies de ailanto si el propietario
accede a ello. En cuanto a la elección del sexo, es preferible la retirada de los pies
femeninos frente al pie masculino (aunque es éste el que desprende un olor más
desagradable). La retirada del ejemplar femenino es más efectiva, porque supone
la eliminación de producción de nuevas semillas, germen de nuevos pies.
•
El empleo de destoconado mecánico es recomendable en áreas extensas como
cultivos abandonados o similares.
•
Sustitución por otros ejemplares no alóctonos de similares características.
Excepciones: podas de las partes reproductoras de los individuos adultos, (en el
caso de que el propietario no quiera eliminar el ejemplar).
•
No se recomienda el empleo del herbicida en zonas cercanas a los cursos de
agua, por lo que en estos lugares se puede combinar la extracción donde fuera
posible (destoconamiento) con el control mecánico.
•
Uso de la técnica manual para plántulas de ailanto. Control de nuevas
germinaciones y plantones, situación frecuente en la cercanía del pie adulto.
3.3. PARTICIPACIÓN ACTORES INTERESADOS
El ámbito de aplicación de las actuaciones afecta a diferentes situaciones administrativas.
Por un lado está el área PRUG sobre titularidad pública, cuya toma de decisiones recae sobre el
La Conselleria de Medio Ambiente y el Director‐Conservador del parque, apoyado por un Consell
de Protecciò, órgano consultivo cuya misión es asesorar a éste. Por otro lado, el área PRUG
privada, donde la potestad de las decisiones recae sobre el propietario de la finca. La ejecución
de las actividades será llevada a cabo por la Brigada de Mantenimiento del Parque; previo
acuerdo y consentimiento en las zonas privadas.
Fuera del PRUG se encuentra la zona PORN, cuya gestión y toma de decisiones compete
a los Ayuntamientos que la zona abarque (Ibi, Alcoy) si son terrenos públicos, o de lo contrario,
29
al propietario de la finca. Por otra parte, cabe recordar que se trata de una especie catalogada en
el Anexo II del Decreto 213/2009 de Control de especies invasoras, en el que se definen las
competencias y limitaciones de actuación.
Es importante la participación activa de todos los actores afectados directa y/o
indirectamente por la especie invasora (así como de otras especies). Entre los actores afectados
se pueden encontrar:

Personal de las áreas naturales protegidas. Es necesaria la formación sobre especies
exóticas invasoras (legislación, listas de especies exóticas, efectos, control) de todo el
equipo de trabajado del espacio natural, para desarrollar una buena medida de
prevención, control y erradicación.

Personal competente de la Administración Local y Autonómica en el ámbito del área
protegida y zona de influencia. Es igual de necesaria su formación sobre especies exóticas
invasoras (legislación, listas de especies exóticas, efectos, control), así como el desarrollo
de proyectos para el control y seguimiento de poblaciones de las especies invasoras,
campañas de educación ambiental a diferentes niveles de la ciudadanía.

Los propietarios de fincas existentes dentro de las áreas protegidas, dentro de las cuales
pueden incluir a la especie debido a su uso como ornamental dentro de sus áreas
ajardinadas o por debido a la entrada espontánea tras su uso en taludes cercanos a las
propiedades privadas.

Visitantes de las áreas protegidas. Es importante que toda persona que acceda al espacio
natural sea informado sobre la problemática de las especies exóticas invasoras.

Centros de Investigación. La investigación sobre especies exóticas invasoras es muy útil
para combatir el problema de las especies exóticas invasoras, aportando información
sobre aspectos ecológicos que pueden ayudar a mejorar el control de estas especies.
3.4. CRITERIOS DEL PLAN DE ACTUACIÓN
Objetivos operacionales

Control y eliminación de las poblaciones de la especie
30

Control de la dinámica de las masas a través de las revisiones planteadas.
Para ello se definirán parámetros de control que serán indicadores de la
evolución.
Prioridades en las actuaciones
Este Plan de actuación propone tratamientos diferentes según las prioridades. Se trata
de priorizar control y erradicación en la zona PRUG , frente a control en la zona PORN. Se prevé
que en el plazo de siete años, aproximadamente, los rodales en la zona PRUG hayan sido
erradicados o disminuido hasta un 20% de su situación inicial. Justo en ese momento, para el
año siguiente en que se manejen esas cifras, se pretende hacer un cambio de objetivos. En este
caso sería la escala de prioridades sería de control de la situación conseguida en el área PRUG
y control y erradicación en el área PORN.
En resumen, las actuaciones a realizar en cada fase serían las siguientes:
a. Reuniones informativas (inicio)
b. Tratamientos silvícolas según el caso indicado anteriormente (anual)
c. Control de nuevas poblaciones y reclutamientos (anual)
d. Recogida de datos para el plan de seguimiento (anual)
e.
Destoconamiento y sustitución de pies ornamentales (inicial)
f.
Informes (anuales)
31
4. ANALISIS ECONÓMICO
Vizcaíno (2007), en un Proyecto de Plan de control y manejo de la especie en el Parque
Natural desarrollado en la ECFRN UA, realiza un análisis del coste económico sobre una serie
de propuestas de actuación. El plan que se propone contiene unos objetivos a alcanzar, que irán
verificándose en el tiempo mediante informes. Una duración en el tiempo de diez años, más dos
años de control, lo que supone un total de doce años planificados para el control y manejo de la
especie en la zona de estudio. El coste total del proyecto sobre el cálculo de superficies
afectadas en el Parque Natural, con una duración total de 10 años de actuación y 2 más de
control asciende a un presupuesto total de ejecución material de 70.509 € (sin considerar gastos
generales, beneficio industrial ni IVA).
A continuación se indican los precios unitarios, las unidades de obra y el coste unitario
de las actuaciones.
Tabla 4.1. Precios unitarios de las diferentes actuaciones para el control del ailanto (adaptado de
Vizcaíno, 2007)
ud
Unidad
Descripción de la unidad
Planta arbórea tamaño grande (200-400 cm frondosas)
Precio (€)
83,2900
l
Herbicida con Glifosato 36% p/V (Glifos)
64,3000
hora
Motosierra de 2,8/5 cv (48-70 cm), sin m.o
1,4800
km
Vehículo todo terreno 111/140 cv, sin m.o
0,3300
hora
Tijera de podar, con m.o
hora
Remolque basculante hidráulico, para 2000 kg
hora
Capataz Forestal (con desplazamiento)
21,0738
hora
11,4227
hora
Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte proporcional
de capataz)
Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento)
ud
Cantidad fija para el cálculo del importe de un informe
hora
Estación de trabajo para Windows con monitor 21"
0,9600
hora
Software para análisis de datos
3,4100
hora
Técnico responsable del plan
hora
Astilladora accionada por motor de explosión, sin mano de obra
11,5000
0,9400
45,6908
195,9200
28,8400
2,3400
32
Tabla 4.2. Unidades de obra de las actuaciones para el control del ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007)
Descripción
Unidad
Precio (€)
Ud. de arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su
cepa, y eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares.
ud
70,24110
Ud. de arranque de árbol mediano sin posterior utilización, empleando
maquinaria, e incluyendo el arranque de la cepa y la eliminación de restos.
Incluye herramientas y medios auxiliares.
ud
13,12600
M2 de desbroce y limpieza del terreno por medios manuales, incluyendo carga
y transporte de residuos a vertedero, herramientas y medios auxiliares
m2
1,85490
M2 de desbroce y limpieza del terreno por medios mecánicos, incluyendo carga
y transporte de residuos a vertedero, herramientas y medios auxiliares
m2
0,43500
Ud. de excavación manual de un hoyo de 0,343 m3 en terreno compacto, para
plantación de árboles de tamaño normal (100 - 200 cm) y arbustos o
trepadoras de tamaño grande (150-200 cm), incluyendo herramientas y medios
auxiliares.
ud
3,03040
Roza manual de una hectárea de matorral con diámetro basal igual o inferior a
3 cm, en pendientes inferiores al 50%, y con una superficie cubierta del 100%,
respetando aquellos ejemplares que, por cualquier motivo, deban conservarse.
En el caso de que la superficie cubierta sea inferior al 100%, la medición se
verá afectada por un coeficiente reductor equivalente a la proporción de
superficie cubierta expresada en tanto por uno.
ha
636,24750
Roza manual de una hectárea de matorral con diámetro basal comprendido
entre 3 y 6 cm, en pendientes inferiores al 50%, y con una superficie cubierta
del 100%, respetando aquellos ejemplares que, por cualquier motivo, deban
conservarse. En el caso de que la superficie cubierta sea inferior al 100%, la
medición se verá afectada por un coeficiente reductor equivalente a la
proporción de superficie cubierta expresada en tanto por uno.
ha
1.214,65 €
Recogida y apilado de una Ha. de residuos forestales procedentes
conjuntamente de desbroces o rozas, podas y/o claras o clareos, con densidad
inferior a 10 toneladas/hectárea (estimación previa del residuo en verde),
distancia máxima de recogida de 30 metros y pendiente del terreno inferior al
30%.
ha
116,83 €
Recogida y apilado de una Ha. de residuos forestales procedentes
conjuntamente de desbroces o rozas, podas y/o claras o clareos, con densidad
inferior a 10 toneladas/hectárea (estimación previa del residuo en verde),
distancia máxima de recogida de 30 metros y pendiente del terreno
comprendida entre el 30 y el 50%.
ha
128,51 €
33
Tabla 4.3. Unidades de Obra de las actuaciones para el control del ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007)
Cantidad
60
15
15
25
2
5
15
25
2
5
1
1
hora
hora
hora
hora
555
15
1
1
7
2
0,25
1,5
1
Unidad Actuación y obra
Precio
Subtotal
ha
Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo
formadas por árboles de fuste débil y diámetro superior a 10 cm
hora
Motosierra de 2,8/5 cv (48-70 cm), sin m.o
1,48
88,8000 €
hora
Astilladora accionada por motor de explosión, sin mano de obra
2,34
35,1000 €
hora
Capataz Forestal (con desplazamiento)
21,0738
316,1070 €
hora
Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento)
45,6908
1.142,2700 €
%
Medios auxiliares (% s/total)
31,6455 €
Total
1.613,9225 €
ha
Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo
formadas por árboles de fuste débil y diámetro inferior a 10 cm
hora
Astilladora accionada por motor de explosión, sin mano de obra
2,34
11,7000 €
hora
Capataz Forestal (con desplazamiento)
21,0738
316,1070 €
hora
Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento)
45,6908
1.142,2700 €
%
Medios auxiliares (% s/total)
29,4015 €
Total
1.499,4785 €
ha
Arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y
eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares.
hora
Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte
11,4227
57,1135 €
proporcional de capataz)
%
Medios auxiliares (% s/total)
0,5711 €
Total
57,6846 €
ud
Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual
fuere la cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación,
objeto del informe.
ud
Cantidad fija para el cálculo del importe de un informe
195,92
195,9200 €
Total
195,9200 €
ud
Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis
y redacción de informes
10 Estación de trabajo para Windows con monitor 21"
0,96
9,6000 €
10 Software para análisis de datos
3,41
34,1000 €
10 Técnico responsable del plan
28,84
288,4000 €
Total
332,1000 €
ha
Aplicación de glifosato sobre tocón
l
Herbicida con Glifosato 36% p/V (Glifos)
64,3 35.686,5000 €
hora
Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento)
11,4227
171,3405 €
%
Medios auxiliares (% s/materiales)
0,01
358,5784 €
Total
36.216,4189 €
ha
Control de las actuaciones
km
Vehículo todo terreno 111/140 cv, sin m.o
0,33
0,3300 €
hora
Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento)
45,6908
319,8356 €
ZZ%T Medios auxiliares (% s/total)
0,02
6,4033 €
Total
326,2389 €
ha
Poda de flores y/o frutos de los pies de ailanto (para pies a
15*15m marco)
hora
Capataz Forestal (con desplazamiento)
21,07
5,27
hora
Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte
11,42
17,13
proporcional de capataz)
%
Medios auxiliares (% s/total)
0,01
0,22
Total
22,6265 €
34
Continuación Tabla 4.3.
70,4
1
ud
Excavación manual de un hoyo de 1 m3 de terreno compacto, para plantación de árbol
ornamental de tamaño grande (200-400 cm), incluyendo herramientas y medios auxiliares
hora
Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte
proporcional de capataz)
Medios auxiliares (% s/total)
%
ud
80
1
hora
%
ud
8,8
hora
44
2
ud
%
11,42
804,16
0,01
8,04
Total
812,1997 €
Arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y
eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares.
Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento)
45,6908
3.655,2640 €
Medios auxiliares (% s/total)
36,5526 €
Total
3.691,8166 €
Plantación manual de un árbol ornamental de tamaño grande (200-400 cm) en hoyo previo
de 1 m3. Incluye tapado del hoyo, precio de la planta y transporte al tajo,herramientas y
medios auxiliares
Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte
11,4227
100,5198 €
proporcional de capataz)
Planta arbórea tamaño grande (200-400 cm frondosas)
83,29
3.664,7600 €
Medios auxiliares (% s/total)
0,02
75,3056 €
Total
3.840,5854 €
35
Tabla 4.4. Coste de las actuaciones para el control de ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007)
Unidad
Actuación
Precio
TRATAMIENTO: CORTE DE TEMPORADA Y GLIFOSATO
ha
Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo
formadas por árboles de fuste débil y diámetro superior a 10 cm
1613,92254
ha
Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo
formadas por árboles de fuste débil y diámetro inferior a 10 cm
1499,47854
ha
Aplicación de glifosato sobre tocón
36216,4189
TRATAMIENTO: CORTE
TOTAL
39.329,82 €
ha
Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo
formadas por árboles de fuste débil y diámetro superior a 10 cm
1613,92254
ha
Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo
formadas por árboles de fuste débil y diámetro inferior a 10 cm
1499,47854
TOTAL
ha
CONTROL DE LAS ACTUACIONES
Control de las actuaciones
ha
PODAS SELECTIVAS
Poda de flores y/o frutos de los pies de ailanto (para pies a 15*15m marco)
DESTOCONAMIENTO Y SUSTITUCIÓN
3.113,40 €
326,238912
TOTAL
326,24 €
22,626525
TOTAL
22,63 €
ha
Arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y eliminación de
restos. Incluye herramientas y medios auxiliares.
3691,81664
ha
Excavación manual de un hoyo de 1 m3 de terreno compacto, para plantación de árbol
ornamental de tamaño grande (200-400 cm), incluyendo herramientas y medios auxiliares
812,199661
ha
Plantación manual de un árbol ornamental de tamaño grande (200-400 cm) en hoyo previo de 1
m3. Incluye tapado del hoyo, precio de la planta y transporte al tajo, herramientas y medios
auxiliares
TOTAL
INFORME ANUAL
Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes
Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la
cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del
informe.
TOTAL
INFORME QUINQUENAL
3840,58536
Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes
Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la
cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del
informe.
332,1
195,92
TOTAL
528,02 €
ud
ud
ud
ud
INFORME CONTROL
Ud
Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes
ud
Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la
cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del
informe.
TOTAL
8.344,60 €
332,1
195,92
528,02 €
332,1
195,92
528,02 €
36
5. CONCLUSIONES GENERALES Y RECOMENDACIONES
La prevención, el control y la erradicación son los pasos necesarios para combatir las especies
exóticas invasoras, en concreto A. altissima.
El método de control recomendado sobre el ailanto a largo plazo es el de desbroce a nivel de
cuello de la raíz de los individuos y la aplicación de glifosato sobre el tocón recién cortado (ver
apartado Protocolo de actuación recomendado).
Es importante una participación de todos los actores implicados.
Se indican los criterios y las bases económicas de aplicación de un Plan de actuación, que
tomando como ejemplo las diferentes situaciones en el Parque Natural del Carrascal de la Font
Roja y una duración de 10 años más dos de control, ascendería a un presupuesto total de
ejecución material de 70.509 €.
Es necesaria una gestión que integre dos estrategias, en función de la titularidad del terreno
(público y privado) del área afectada por la especie invasora, y sus características (rodales
silvestres o introducción ornamental).
Las actuaciones deben iniciarse en las áreas prioritarias de conservación y considerando las
zonas de mayor probabilidad de invasión.
Se ha de considerar que el abandono de casas rurales donde el ailanto se cultivó como especie
ornamental provoca el crecimiento incontrolado de la especie.
Las campañas de educación ambiental a diferentes niveles y voluntariados ambientales son
útiles como herramienta en la lucha contra las especies exóticas invasoras.
37
6. BIBLIOGRAFÍA
•
Arnaboldi F, Conedera M, Fonti P. 2003. Caratteristiche anatomiche e auxometriche di
Ailanthus altissima una apecie arborea a carattere invasivo, Sherwood, V.91
•
Algarra JA, Quero JM, Rodríguez Hiraldo C, Osuna UM. 2005. Conservación de flora en la
Provincia de Córdoba, Conserv. Vegetal, 9: 9-11
•
Baker HG. 1986. Patterns of plant invasion in North America. In: Ecology of Biological
Invasions of North America and Hawaii, eds: Mooney, H.A., and J.A. Drake. SpringerVerlag, New York, NY, pp. 44-58
•
Balaguer L. 2004. Las plantas invasoras, ¿el reflejo de una sociedad crispada o una
amenaza científicamente contrastada? Historia Natural, (5):32-41
•
Ballero M, Ariu A, Falagiani P, Piu G. 2003. Allergy to Ailanthus altissima (tree of heaven)
pollen. Allergy: European Journal of Allergy and Clinical Immunology 58 (6), pp. 532-533
•
Bisognano JD, McGrody KS, Spence AM. 2005. Myocarditis from the Chinese sumac tree.
Annals Internal Medicine 143(2):159
•
Bory G, Clair-Maczulajtys D. 1980. Production, dissemination and polymorphism of seeds
in Ailanthus altissima. Revue Generale de Botanique 88(1049/1051): 297-311.
•
Burch PL, Zedaker SM. 2003. Removing the invasive tree Ailanthus altissima and restoring
natural cover. Journal of Arboriculture 29(1):18-24
•
Capdevila L, Iglesias AJ, Orueta F, Zilletti B. 2006. Especies Exóticas Invasoras:
diagnóstico y bases para la prevención y manejo. Organismo Autónomo de Parques
Nacionales. Ministerio de Medio Ambiente. 287 pp
•
Castroviejo S, García R, Quintanar A. 2003. Estudio preliminar de las Plantas vasculares
alóctonas de los parques nacionales españoles. R.S.E.H.N. Organismo Autónomo
Parques Nacionales, MMA
•
Castro-Díez, P; Valladares, F. y Alonso. 2004. La creciente amenaza de las invasiones
biológicas. Ecosistemas 3
38
•
Castro-Díez P, González-Muñoz N, Alonso A, Gallardo A, Poorter L. 2009. Effects of exotic
invasive trees on nitrogen cycling: a case study in Central Spain. Biol Invasions 11:1973–
1986CBD. 1992. Convenio sobre la diversidad biológica. Río de Janeiro 1992
•
CBD. 2002. Resolución VI/23: Especies exóticas que amenazan a los ecosistemas, los
hábitats o las especies. Sexta reunión de la Conferencia de las Partes en el Convenio
sobre la Diversidad Biológica, La Haya, 7-19 de abril de 2002
•
Celesti-Grapow L, Blasi C. 2004. The role of alien and native weeds in the deterioration of
archaeological remains in Italy. Weed Technology, 18: 1508-1513
•
Climent A, Constán-Nava S, Terrones B, Pastor E, Bonet A. 2006. Distribució de les
poblacions de l´especie invasora Ailanthus altissima (Mill.) Swingle al Parc Natural del
Carrascal de la Font Roja. Rev. IBERIS. pp 89-102. Alcoy
•
Constán-Nava S, Bonet A, Terrones B, Albors JL. 2007. Plan de actuación para el control
de la especie Ailanthus altissima en el Parque Natural del Carrascal de la Font Roja,
Alicante. Bol. Europarc 24: 34-38
•
Constán-Nava S, Bonet A, Serra L. 2008. Efectos de la especie invasora Ailanthus
altissima (Mill.) Swingle sobre la diversidad vegetal en bosques de ribera del LIC Serra de
Mariola y Carrascal de la Font Roja. Rev. Iberis, pp. 65-76. Alcoy
•
Constán-Nava S, Pastor E, Bonet A. 2009. Gestión de la especie invasora Ailanthus
altissima (Mill.) Swingle en Áreas Protegidas. Estudio de caso en el P.N. del Carrascal de
la Font Roja (Alicante). Ref: 5CFE01-178:1-11. En: S.E.C.F-Junta de Castilla y León (eds.),
Actas del 5º Congreso Forestal Español. Montes y sociedad. Sociedad Española de
Ciencias Forestales. Pontevedra. ISBN: 978-84-936854-6-1. 21/25septiembre 2009.
Centro Municipal de Congresos y Exposiciones de Ávila
•
Constán-Nava S, Bonet A, Pastor E, Lledó MJ. 2010a. Long–term control of the invasive
tree Ailanthus altissima: insights from Mediterranean Protected Forests. For Ecol Manage
260 (6): 1058–1064
•
Constán-Nava S, Bonet A, Lledó MJ. 2010b. Técnicas silvícolas para el control de
Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en Espacios Naturales Protegidos. En: Invasiones
Biológicas: Avances 2009. GEIB Grupo Especialista en Invasiones Biológicas. Serie
Técnica N. 4. Depósito Legal: LE-740-2010, pp. 147-153
39
•
Danin A. 2000. The inclusion of adventive plants in the second edition edition of Flora
Palaestina. Willdenowia 30:305-314
•
Davies PA. 1944. The root system of Ailanthus altissima. Transactions of the Kentucky
Academy of Sciences 1 1(34):33-35
•
Decreto 121/2004, de 16 de julio, del Consell de la Generalitat, por el cual se aprueba el
Plan de Ordenación de los Recursos Naturales y la revisión del Plan Rector de Uso y
Gestión del Parque Natural del Carrascal de la Font Roja. DOGV 4801
•
Decreto 213/2009, de 20 de noviembre, del Consell, por el que se aprueban medidas para
el control de especies exóticas invasoras en la Comunitat Valenciana
•
Derrick EK, Darley CR. 1994. Contact reaction to the tree of heaven. Contact Dermatitis
30:178
•
Didham RJ et al. 2005. Are Invasive species the drivers of Ecological Change? Trends in
Ecology and Evolution. Vol.20. Nº9
•
Ding J, Wu Y, Zheng H, Fu W, Reardon R, Liu M. 2006. Assessing potential biological
control of the invasive plant, tree-of-heaven, Ailanthus altissima. Biocontrol Science and
Technology 16 (6), pp. 547-566
•
Drake JA. 1988. Biological invasions into nature reserves. Trends in Ecology and Evolution
3: 186- 187
•
Dukes JS, Mooney HA.1999. Does global change increase the success of biological
invaders? TREE, 14:135-139
•
Elton CS. 1958. The ecology of invasions by animals and plants. London. Methuen
•
Gómez-Aparicio L, Canham CD. 2008a. Neighborhood models of the effects of invasive
tree species on ecosystem processes. Ecological Monographs
•
Gómez-Aparicio L, Canham CD. 2008b. Neighborhood analyses of the allelopathic effects
of the invasive Ailanthus altissima in temperate forests. Journal of Ecology 96: 446-458
•
Groves RH. 1986. Invasion of Mediterranean ecosystems by weeds. In: B. Dell, A.J.M.
Hopkins and B.B. Lamont (eds.), Resilience in Mediterranean-type Ecosystems. Junk,
Dordrecht, pp. 129-145.Heisey RM. 1990. Allelopathic and herbicidal effects of extracts
from tree of heaven (Ailanthus altissima). Am. J. Bot. 77: 662–670
40
•
Heisey RM. 1990. Allelopathic and herbicidal effects of extracts from tree of heaven
(Ailanthus altissima). Am J Bot 77: 662–670
•
Heisey RM. 1996. Identification of an allelopathic compound from Ailanthus altissima
(Simaroubaceae) and characterization of its herbicidal activity. Am. J. Bot. 83(2):192–200
•
Hobbs RJ, Huenneke LF. 1992. Disturbance, diversity, and invasion: Implications for
conservation. Conserv Biol 6: 324–337
•
Hobbs RJ, Humphries SE. 1995. An integrated approach to the ecology and management
of plant invasions. Conservation Biology 9(4): 761-770
•
Hoshovsky M. 1988. Element Stewardship Abstract for Ailanthus altissima. The Nature
Conservancy, Arlington, VA
•
Hu SY. 1979. Ailanthus. Arnoldia 39, 29-50
•
Hunter JC. 2000. Ailanthus altissima (Miller) Swingle. Pages 32-36, in: C.C. Bossard, J.M.
Randall y M.C. Hoshovsky (eds.). Wildland Weeds of California. University of California
Press, Berkeley
•
ISSG. 2008. Global Invasive Species Database. Invasive Species Specialist Group (ISSG)
de
l'IUCN
Species
Survival
Commission.
24
de
mayo
de
2008.
http://www.issg.org/database/species/ecology.asp?fr=1&si=319
•
Knapp LB, Canham CD. 2000. Invasion of an old-growth forest in New York by Ailanthus
altissima: sapling growth and recruitment in canopy gaps. Journal of the Torrey Botanical
Society. 127(4): 307-315
•
Kowarik I. 1995. Clonal growth in Ailanthus altissima on a natural site in West Virginia. J
Veg Sci 6: 853–856
•
Kowarik I, Säumel I. 2007. Biological flora of Central Europe: Ailanthus altissima (Mill.)
Swingle. Perspect. Plant Ecol. Evol. Systematics 8(4): 207-237
•
Lawrence JG, Colwell A, Sexton, O. 1991. "The Ecological Impact of Allelopathy in
Ailanthus altissima (Simaroubaceae)". American Journal of Botany 78 (7): 948–958
•
Lonsdale WM. 1999. Global patterns of plant invasions and the concept of invasibility.
Ecology
41
•
Luken JO. 1988. Population structure and biomass allocation of the naturalized shrub
Lonicera maackii (Rupr.) Maxim. In forests and open forests. American Midland Naturalist
119: 258-267
•
Luken JO, Thieret JW. 1997. Assessment and Management of Plant Invasions, JO Luken y
JW Thieret (eds.), 324 pp. New York: Springer
•
MacDougall A, Turkington R. 2004. Are invasive species the drivers or passengers of
ecological change in highly disturbed plant communities? 16th Annual Conference of the
Society for Ecological Restoration. Victoria, Canadá
•
Mack RN, Simberloff D, Lonsdale WM, Evans H, Clout M, Bazzaz F. 2000. Biotic invasions:
causes, epidemiology, global consequences, and control. Ecol Applic 10: 689–710
•
Meggaro Y, Vilà M. 2002. Distribución y regeneración después del fuego de las especies
exóticas Ailanthus altissima y Robinia pseudoacacia en el parque de Collserola
(Barcelona). Montes 68: 25-32
•
Meloche C, Murphy SD. 2006. Management of invasive tree-of-heaven (Ailanthus
altissima) in a provincial park. Environ Manage 37:764-772
•
Mooney HA, Drake JA. 1987. Ecology of Biological Invasions of North American and
Hawaii: New York, Springer
•
Mooney HA, Hobbs RJ. 2000. Invasive species in a changing world. Island Press,
Washington
•
Moore BA. 2005. Alien Invasive Species: Impacts on Forests and Forestry. Forestry
Department. 63pp
•
Murphy HT, Westcott DA, Metcalfe D J. 2006. Functional diversity of native and invasive
plant species in tropical rainforests. In: Proceedings of the 15th Australian Weeds
Conference (eds C. Preston, J. H. Watts, N. D. Crossman) pp. 199–202. Weed
Management Society of South Australia, Adelaide
•
Ohmoto T, Koike K. 1984. Studies on the constituents of Ailanthus altissima Swingle. III.
The alkaloidal constituents. Chem Pharm Bull 32: 170- 173
•
Peña J, Bonet A, Pastor E, Terrones B, Constán-Nava S. 2008. Capítulo 13. Los Sistemas
de Información Geográfica y la Ecología Espacial. En: Introducción al Análisis Espacial de
Datos en Ecología y Ciencias Ambientales: Métodos y Aplicaciones (eds. Maestre, F. T.,
42
Escudero, A. y Bonet, A.). Asociación Española de Ecología Terrestre, Universidad Rey
Juan Carlos y Caja de Ahorros del Mediterráneo, Madrid., Dykinson S.L., Madrid, España.
Pp 495-540. Análisis Espacial en Ecología: Métodos y Aplicaciones. I Reunión de Trabajo
del Grupo de Ecología Espacial de la AEET. ISBN: 978-84-9849-308-5, 849 pp
•
Sheppard AW, Shaw RH, Sforza R. 2006. Top 20 environmental weeds for classical
biological control in Europe: a review of opportunities, regulations and other barriers to
adoption. Weed Research 46, 93-117
•
Simberloff D. 2001. Biological invasions – how are they affecting us, and what can we do
about them? West N Amer Natur 61: 308–15
•
Terrones B, Bonet A, Carchano R, Brotons J, Segura M. 2006. Cartografía de la cubierta
vegetal del Parque Natural del Carrascal de la Font Roja. Iberis nº 4: 73-87
•
Terrones B, Constán-Nava S, Vizcaíno N, Climent A, Bonet A. 2007. Hábitat disponible
para la especie invasora Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en el P.N. del Carrascal de la
Font Roja, Alicante. En: GEIB Grupo Especialista en Invasiones Biológicas (ed) 2007
Invasiones biológicas: un factor de cambio global. EEI 2006 actualizando conocimientos.
Pp. 121-132. 2º Congreso Nacional sobre Especies Exóticas Invasoras “EEI 2006” GEIB,
Serie Técnica Nº 3, 280 pp
•
Traveset A, Santamaría L. 2004. Consecuencias de la introducción de especies exóticas
en la disrupción de los mutualismos en islas. In: Fernández-Palacio JM, Morici C (eds)
Ecología Insular. Asociación Española de Ecología Terrestre (AEET) y Excmo. Cabildo
Insular de La Palma, La Palma
•
Traveset A, Brundu G, Carta L, Mprezetou I, Lambdon P et al.2008. Consistent
performance of invasive plant species within and among islands of the Mediterranean
basin. Biological Invasions 10:847–858
•
Vilà M. 2000. Causas y consecuencias ecológicas de las invasiones Cap. 14 pp.373-390 in
Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Asociación Española de Ecologia
Terrestre Ecosistemas Mediterráneos, análisis funcional
•
Vilà M, Tessier M, Suehs, CM, Brundu G, Carta L et al. 2006. Local and regional
assessments of the impacts of plant invaders on vegetation structure and soil properties of
Mediterranean islands. J. Biogeogr 33: 53–861
43
•
Vitousek PM. 1990. Biological invasions and ecosystem processes: towards an integration
of population biology and ecosystem studies. Oikos 57: 7-13
•
Vitousek PM. 1994. Beyond global warming: ecology and global change. Ecology 75: 18611876
•
Vitousek PM, Mooney HA, Lubchenco J, Melillo J. 1997. Human domination of Earth´s
ecosystems. Science 277:494-499
•
Vizcaíno N. 2007. Plan de control y manejo de la especie invasora Ailanthus altissima
(Mill.) Swingle en el Parque Natural de la Font Roja. Proyecto fin de Carrera. ETSIM, UPM
•
Williamson M, Fitter A. 1996. The characteristics of successful invaders. Biological
Conservation 78: 163-170
•
Zasada JC, Little S. 2002. Ailanthus altissima (P. Mill.) Swingle. En: Bonner, Franklin T,
tech. coord. Woody plant seed manual, [Online]. Washington, DC: U.S. Department of
Agriculture, Forest Service (Producer)
44
45
Descargar