ESTACIÓN CIENTÍFICA FONT ROJA NATURA-UA Manual Técnico para el control de la especie invasora Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en Espacios Naturales Protegidos 1 MANUAL TÉCNICO PARA EL CONTROL DE LA ESPECIE INVASORA AILANTHUS ALTISSIMA (MILL.) SWINGLE EN ESPACIOS NATURALES PROTEGIDOS Alcoy, julio de 2013 Equipo de trabajo Soraya D. Constán Nava Doctora en Biología Estación Científica Font Roja Natura-UA, del Vicerrectorado de Investigación, Desarrollo e innovación. Universidad de Alicante Andreu Bonet Jornet Doctor en Biología. Profesor Titular del Departamento de Ecología. Universidad de Alicante. Instituto Multidisciplinar para el Estudio del Medio (IMEM) Ramón Margalef, Universidad de Alicante. Coordinador de la Estación Científica Font Roja Natura-UA, del Vicerrectorado de Investigación, Desarrollo e innovación. Universidad de Alicante. Cómo citar este informe técnico: Constán-Nava, S. Bonet, A. 2013. Manual técnico para el control de la especie invasora Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en Espacios naturales Protegidos. Estación Científica Font Roja Natura. Universidad de Alicante. ISBN XXX 2 FINANCIACIÓN Ministerio de Economía y Competitividad / Gobierno de España / Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT). Obra Social de "La Caixa". Ajuntament d'Alcoi - Departament medi ambient. ENTIDADES COLABORADORAS CEMA Font Roja-Alcoy Fundació LIMNE. Conselleria d'Infrastructures, Territori i Medi Ambient - Parc Natural del Carrascar de la Font Roja 3 ÍNDICE 1. MARCO GENERAL Pág. 6 1.1. INTRODUCCIÓN Pág. 6 1.2. PROBLEMÁTICA ESPECIES VEGETALES EXÓTICAS INVASORAS Pág. 7 1.3. AILANTHUS ALTISSIMA (MILL.) SWINGLE Pág. 8 1.3.1. DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE Pág. 8 1.3.2. EFECTOS Pág. 11 1.3.3. SITUACIÓN ACTUAL DE LA ESPECIE Pág. 12 1.3.4.SITUACIÓN EN EL PARQUE NATURAL DEL CARRASCAL DE Pág. 13 LA FONT ROJA Y LIC SERRA DE MARIOLA I CARRASCAL DE LA FONT ROJA 2. OBJETIVOS 2.1. OBJETIVO GENERAL 2.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS 3. MÉTODOS 3.1. PREVENCIÓN 3.2. METODOS DE CONTROL 3.2.1. DETECCIÓN TEMPRANA 3.2.2. MÉTODOS 3.2.3. ESTUDIO DE CASO A LARGO PLAZO 3.2.4. PROTOCOLO DE ACTUACIÓN RECOMENDADO 3.3. PARTICIPACIÓN ACTORES INTERESADOS 3.4. CRITERIOS DEL PLAN DE ACTUACIÓN 4. ANÁLISIS ECONÓMICO 5. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES 6. BIBLIOGRAFÍA Pág. 15 Pág. 15 Pág. 15 Pág. 16 Pág. 16 Pág. 17 Pág. 18 Pág. 20 Pág. 22 Pág. 23 Pág. 29 Pág. 30 Pág. 32 Pág. 37 Pág. 38 4 5 1. MARCO GENERAL 1.1. INTRODUCCIÓN Las especies exóticas invasoras son aquellas especies capaces de sobrevivir, de establecerse y de reproducirse en un lugar biogeográficamente distinto al original, pudiendo tolerar y superar las condiciones bióticas y abióticas (Williamson 1996; Mack et al. 2000; Balaguer 2004). Los espacios naturales protegidos se caracterizan por la representatividad de sus ecosistemas o la singularidad de la flora, fauna o formaciones geomorfológicos lo que les confieren de un alto interés de conservación y protección. Aunque los espacios naturales protegidos generalmente representan las últimas áreas alteradas (Vitousek et al. 1997), no dejan de ser susceptibles a la presencia de especies exóticas invasoras (Drake 1988), ya que muchas especies vegetales exóticas han invadido con éxito hábitats con un alto grado de conservación (Luken 1988). Este fenómeno, directa o indirectamente relacionado con la actividad humana, se está generalizando como un problema de manejo prioritario (Luken y Thieret 1997). Cada vez son más las áreas protegidas que se encuentran amenazadas por las invasiones biológicas (Luken y Thieret 1997; MacDougall y Turkington 2004). Ante este problema, los planes de gestión de las áreas protegidas recogen el control y erradicación de estas especies, pero se trata de algo complejo, dado que son áreas con usos restringidos, los cuales limitan los métodos de actuación. Por ello, en las dos últimas décadas ha sido necesaria la implantación de sistemas de gestión y actuación para el control de especies alóctonas invasoras en varios Parques Nacionales de la Red. PP.NN. Ejemplos de ello son los llevados a cabo en Garajonay, para el control de Tradescantia fluminensis Vell., en la Caldera de Taburiente contra Ageratina adenophora (Spreng.) R. M. King & H. Rob., o en Doñana contra Gomphocarpus fruticosus (L.) Aiton fil, y Nicotiana glauca R. C.Graham. 6 1.2 PROBLEMÁTICA ESPECIES VEGETALES EXÓTICAS INVASORAS Las invasiones biológicas obedecen a un fenómeno natural, pero la presencia del ser humano ha acelerado el proceso exponencialmente (Mooney y Hobbs 2000; Vilà 2000). Actualmente, se consideran como una de las causas principales de la pérdida de biodiversidad a escala global (Lonsdale 1999, Mack et al. 2000, Didham et al. 2005), solamente por detrás de la destrucción de hábitats y la fragmentación del paisaje, ya que se trata de un agente de cambio global (Vitousek 1990; Vitousek 1994, Williamson 1996). Las especies vegetales invasoras provocan efectos que van desde niveles genéticos hasta paisajísticos (Vilà 2000; Castro-Díez et al. 2004), alterando la estructura y funcionamiento del ecosistema invadido y causando daños ecológicos y socioeconómicos (Dukes y Mooney 1999; Mack et al. 2000; Moore 2005). Entre los efectos ecológicos que pueden provocar las especies vegetales invasoras, se encuentra la alteración de las relaciones entre especies (Traveset et al. 2004), pudiendo reemplazar especies nativas (Groves 1986; Mooney y Drake 1987; Simberloff 2001), hasta incluso provocar una extinción local, sobre todo si se trata de especies de poblaciones reducidas (Vilà 2000). Pueden alterar los procesos de los ecosistemas mediante la alteración de ciclos biogeoquímicos, modificación de procesos de erosión y sedimentación, alteración de la fertilidad de los suelos, reducción o agotamiento de los niveles de agua, alteración de los patrones de drenaje, y/o modificación de los regímenes de incendios (Mack et al. 2000; Didham et al. 2005). Además, favorecen la invasión de otras especies exóticas (Murphy et al. 2006), y tienen un gran impacto potencial sobre la regeneración y dinámica natural de muchos ecosistemas terrestres (Valladares et al. 2004). En relación a los ecosistemas invadidos, generalmente las especies invasoras encuentran facilitada su introducción en comunidades perturbadas por la acción humana (Hobbs y Huenneke 1992), así como en áreas agrícolas, las cuales son muy susceptibles a la invasión (Elton 1958; Baker 1986). Las zonas verdes, dado que están sujetas al estrés ambiental y a causa de su proximidad a sitios de introducción de especies exóticas y su función como borde de otros hábitats, son el principal hábitat para las especies invasoras, las cuales se extienden hacia hábitats menos urbanos (Vitousek et al. 1997). La presencia de especies exóticas invasoras implica elevados costes económicos debido a las inversiones realizadas en medidas de prevención (análisis de riesgos, educación ambiental), detección temprana (localización de especies invasoras, evaluación de impactos), control y 7 erradicación, así como en medidas de restauración de ecosistemas invadidos (Dukes y Mooney 1999; Mack et al. 2000; Vilà 2000; Castro-Díez et al. 2004; Moore 2005). Asimismo, afectan a un nivel cultural, ya que implican una alteración de la percepción del ser humano (en muchos casos consideran a las especies invasoras como nativas debido a su uso común en jardinería). 1.3. AILANTHUS ALTISSIMA (MILL.) SWINGLE 1.3.1. Descripción de la especie Ailanthus altissima (Mill) Swingle 1916 (ailanto, árbol del cielo, ailante) pertenece a la familia Simaroubaceae, siendo una de las cinco especies del género Ailanthus Desf. Este árbol, nativo de China y del Norte de Vietnam, fue introducido en Francia en los años 1740 por el misionero Pierre d´Incarville en forma de semillas, y posteriormente (1751), al ser confundida con la especie Rhus verniciflua, fue transportada a Londres y a otras partes de Europa y América (Hu 1979), expandiéndose como especie invasora en todos los continentes salvo en la Antártida (Kowarik y Säumel, 2007; Fig. 1.3.1.). Figura 1.3.1. Área de expansión de Ailanthus altissima con una diferenciación del área nativa en China y Norte de Vietnam (rallado) y su distribución secundaria a lo largo del Mundo (negro) a partir de su introducción en Europa en los años 1740 (Extraído de Kowarik y Saümel 2007). 8 Es una especie pionera, es decir, aprovecha espacios abiertos para su colonización, de crecimiento rápido de 1 a 1.5 m/año (Zasada y Little 2002) y que posee un único tronco, de corteza lisa o rugosa pardo-grisácea y con vetas longitudinales, a partir del que crecen nuevos retoños en la estación de crecimiento (Kowarik y Säumel 2007). El rango de tamaño que se puede encontrar es de 27-30m en zonas templadas y de 18-20m en zonas meridionales (Hunter 2000; Arnaboldi et al. 2003).Las ramas se presentan extendidas formando una copa aparasolada de color grisáceo y ramillas rojizas. Posee hojas compuestas, alternas, pinnadas grandes, con 13-27 foliolos, siendo de desarrollos similares en zonas climáticas diferentes (Kowarik y Säumel 2007). Contiene un receptáculo hueco en la base, de olor fétido 7-9 pares de hojuelas aovadas o lanceoladas, enteras o con 2-4 lóbulos en la base y una glándula junto al ápice en la cara inferior. Es un árbol dioico, algunos autores señalan que las flores pueden ser bisexuales o los árboles monoicos, aunque esto aún no está demostrado (Kowarik y Säumel 2007). Las flores femeninas producen un olor desagradable. La floración se produce en forma de panícula, a partir de la cual, los carpelos se desarrollan en 5 sámaras con alas membranosas (Hu 1979) de color amarillo verdoso hasta marrón rojizo (Kowarik y Säumel 2007). Cada una de las sámaras contiene una única semilla situada en la zona central y se dispersan de manera anemócora a partir de septiembre-octubre permaneciendo muchas de ellas en el árbol hasta mayo del año siguiente (Bory y Clair-Maczulajtys 1980). La producción de sámaras es de hasta 325.000 sámaras por individuo (Hoshovsky 1988), pudiendo aumentar la probabilidad de permanencia de su especie en el ecosistema receptor. 9 Figura 1.3.2. Ejemplar ornamental adulto femenino de A. altissima y detalle de panícula de semillas. Este árbol produce una raíz pivotante y numerosas raíces laterales de una longitud media de 114,4 m, donde almacena la mayor parte de las reservas de carbohidratos y proteínas (Davies 1944; Kowarik y Säumel 2007). La corteza de la raíz, y de otras partes de la especie, así como hojas, y sámaras contienen componentes alelopáticos (principalmente la ailanthona) que son tóxicos para muchas especies (Heisey 1990; Lawrence et al. 1991; Heisey 1996). Fuera de su rango nativo está sujeta a baja presión herbívora, lo que se ha atribuido a los componentes tóxicos de sus tejidos (Ohmoto y Koike 1984). En Europa se ha encontrado dos especies de insectos se alimentan de esta especie, Hyphantria cunea en Austria y Samia cynthia en Italia y se han identificado 46 artrópodos fitófagos en su rango nativo (Kowarik y Säumel 2007). Se han descrito 65 especies de hongos asociados a la especie (Ding et al. 2006). Todas las características anteriormente descritas (especie pionera, de rápido crecimiento juvenil, fuertemente rebrotadora, con un sistema radicular potente producción de sustancias 10 alelopáticas y herbicidas y capacidad de producir un elevado número de semillas) le han permitido colonizar un elevado número de ecosistemas fuera de su rango nativo, invadiendo desde ecosistemas antropizados hasta ecosistemas naturales (Kowarik 1995; Knapp y Canham 2000; Kowarik y Säumel 2007). 1.3.2. Efectos de la especie invasora Ailanthus altissima puede reducir la vegetación nativa por competencia (espacio y luz solar) a causa de las densas poblaciones que conforma, así como por efectos alelopáticos, a través de la acumulación en el suelo de las sustancias alelopáticas que produce, lo que inhibe el crecimiento de otras especies (Gómez-Aparicio y Canham 2008a; Kowarik y Säumel 2007). El establecimiento de poblaciones de A. altissima implica fuertes efectos en las comunidades vegetales. Se ha encontrado un descenso en la riqueza de especies en parcelas invadidas en islas Mediterráneas respecto a las parcelas no invadidas (Vilá et al. 2006), así como que produce cambios en la estructura de la vegetación en bosques de ribera (Constán-Nava et al. 2008). A. altissima puede alterar el funcionamiento de los ecosistemas al aumentar las tasas de paso de los elementos y la disponibilidad de nutrientes, esto es, induce a un incremento en el N total, C orgánico y pH del suelo, y disminuye la proporción C/N (Gómez-Aparicio y Canham 2008b; Traveset et al. 2008; Vilá et al, 2006), aumentando la tasa de descomposición de la hojarasca frente a especies nativas (Castro-Díez et al. 2009). Los efectos sobre la salud humana también se conocen. Ballero et al (2003) en un estudio realizado en Cerdeña (Italia), encontraron que 10 de un total de 54 pacientes mostraban alergia al polen de A. altissima. El contacto con la savia de A. altissima puede, en algunos casos, causar dermatitis (Derrick y Darley 1994) y en casos raros o de mayor tiempo de exposición a la especie, miocarditis, debido a proteínas quasinoides (Bisognano et al. 2005). Las poblaciones de A. altissima situadas a lo largo de las carreteras pueden causar peligro al reducir la visibilidad de los conductores (Burch y Zedaker 2003). Las raíces pueden romper pavimientos (Danin 2000) y también entrar en pozos y canales de aguas residuales (Hu 1979). En áreas urbanas puede provocar daños a construcciones históricas a causa de su extenso sistema radicular, como las murallas y tejado de la catedral de Coimbra, en Portugal (Almeida et al. 1994). En Italia, A. altissima se trata de una especie gran impacto sobre restos arqueológicos (Celesti-Grapow y Blasi 2004). En la agricultura se le considera como mala hierba, pero no existe información sobre el coste económico que supone y las pérdidas que acarrea (ISSG 2008). 11 Figura 1.3.3. Expansión de Ailanthus altissima donde oculta una de las señales de circulación (izquierda) e invasión en campo de cultivo de olivos (derecha). 1.3.3. Situación actual de la especie Actualmente se encuentra incluida en la lista negra preliminar de Especies Exóticas Invasoras de España (Capdevila-Argüelles et al. 2006), así como en la lista Top 20 de especies de prioridad para su control en Europa (Sheppard et al. 2006). Además se encuentra entre las 15 especies de mayor impacto en las Islas Mediterráneas dentro del proyecto Exotic Plant Invasions: Deleterious Effects on Mediterranean Island Ecosystems (EPIDEMIE), financiado por la Comisión Europea en el marco de su Acción Clave Vulnerabilidad de Ecosistemas (Balaguer 2004). En la Comunidad Valenciana, se encuentra incluida en el Anexo II del Decreto 213/2009 de Control de Especies Exóticas Invasoras de la Comunidad Valenciana, prohibiendo su introducción, siembra o plantación en terrenos forestales. Estas limitaciones no afectarán a los recintos ajardinados y viveros lindantes o incluidos en los citados terrenos, siempre que los ejemplares plantados no se propaguen fuera de sus límites. El hecho de que se encuentre como invasora en un elevado número de lugares se debe a su empleo como especie ornamental, así como en restauración de taludes de carreteras, existiendo aún en la actualidad manuales técnicos publicados por la Administración Española en los que se recomienda expresamente el uso de la especie en proyectos de obra civil, a pesar de que esta especie está considerada como uno de los invasores más agresivos en la cuenca del Mediterráneo (Balaguer 2004). Son numerosos los espacios naturales españoles en los que se 12 ha confirmado el carácter invasor del ailanto, como son los casos del Parque Nacional de Sierra Nevada (Castroviejo et al. 2004) o el Parc de Collserola (Barcelona) (Meggaro y Vilà 2002), en otros está siendo objeto de diferentes planes de gestión, como en los Parques Naturales de Cardeña y Montoro, P.N. de las Sierras Subbéticas, P.N. de Hornachuelos y en la Reserva Natural de la Laguna de Tíscar (provincia de Córdoba), y otros lugares su erradicación está planteando grandes dificultades (Algarra et al. 2005). Figura 1.3.4. Poblaciones de la especie A. altissima debidas a su empleo en restauración de taludes de carretera (izquierda) y de la antigua Vía Verde de Alcoy, Alicante (derecha). 1.3.4. Situación en el Parque Natural del Carrascal de la Font Roja y LIC Serra de Mariola i Carrascal de la Font Roja Los diversos estudios realizados por el grupo de trabajo hasta el momento (Climent et al. 2006; Constán-Nava et al., 2007; 2008; 2009; 2010a; 2010b), indican una serie de patrones de distribución y comportamiento de la especie en el Parque y su comarca, que es conveniente considerar para la elaboración de planes de gestión: • El ailanto se encuentra preferentemente ocupando zonas en las que sus suelos se encuentran alterados y mermadas sus buenas características edafológicas y/o en zonas próximas a márgenes de carretera, barrancos o cursos de agua, ya que su capacidad de crecimiento se ve influenciada positivamente por la presencia de este elemento. 13 • Dentro de los diferentes tipos de ambientes definidos en la zona de estudio (Terrones et al. 2006) se sitúa con mayor frecuencia en las zonas de la umbría y en un rango altitudinal que va desde los 650 m hasta los 1040m. • Los rodales de superficie media mayor se localizan en aquellos ambientes que gozan de mayor disponibilidad hídrica, preferentemente en bosque en galería. • La clase de vegetación más afectada por la invasión de la especie son los bosques de ribera y pinares de Pinus halepensis, y la que menos las comunidades maduras que se encuentran en el parque, compuestas principalmente de carrasca. De modo que la madurez del bosque diferencia los diferentes grados de establecimiento y expansión. • Los rodales de mayor superficie media según la clase de vegetación en la que se asientan se dan en bosques de ribera, pero también en áreas de cultivos abandonados y canteras, por la facilidad de expansión donde la competencia por la luz, nutrientes y espacio es menor que la que se puede dar en zonas donde existan comunidades vegetales establecidas. • El despoblamiento de las masías y abandono de los usos tradicionales en la zona ha dejado paso a la de entrada y asentamiento de especies exóticas. Además, se ha perdido el mantenimiento de campos y zonas perimetrales de estas fincas, con lo que son factores que actúan a favor de estas especies. Figura 1.3.5. Colonización descontrolada por A. altissima en construcciones antrópicas abandonadas dentro de Espacios Naturales Protegidos (Sierra de Mariola). 14 2. OBJETIVOS 2.1. OBJETIVO GENERAL Erradicar la especie invasora Ailanthus altissima (Mill.) Swingle en espacios naturales protegidos en el ámbito mediterráneo. 2.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS a) Establecer bases para la gestión y control de la especie invasora Ailanthus altissima en espacios naturales protegidos. b) Proporcionar el conocimiento sobre técnicas, procedimientos y métodos para su manejo. c) Proporcionar al personal relacionado con la gestión los conocimientos y fundamentos para su erradicación, así como del riesgo de invasión que presenta. 15 3. METODOS 3.1. PREVENCIÓN La prevención es el primer paso para combatir el problema de las especies exóticas invasoras. Para ello, se parte de los principios orientadores 1 y 2 del Convenio sobre Diversidad Biológica recogidos en la resolución COP-CBD VI/23 (CBD 2002): Principio de orientación 1: Enfoque de precaución Puesto que no pueden predecirse las vías y los impactos de las EEI sobre la diversidad biológica, los esfuerzos por identificar e impedir introducciones intencionales, así como las decisiones relativas a introducciones no intencionales, deberían basarse en el enfoque de precaución, en particular con referencia al análisis de riesgos, de conformidad con los principios de orientación que siguen. El enfoque de precaución es el establecido en el Principio 15 de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, de 1992 (Conferencia de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente y el desarrollo, 1992), y en el preámbulo del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD, 1992). El enfoque de precaución debería también aplicarse al examinar las medidas de erradicación, contención y control en relación con las especies exóticas que se han establecido. La falta de certidumbre científica acerca de las diversas consecuencias de una invasión no debería utilizarse como una razón para aplazar o para no adoptar medidas adecuadas de erradicación, contención y control. Principio de orientación 2: Enfoque jerárquico en tres etapas 1. En general, la prevención tiene, con mucho, la mejor relación entre costo y eficacia, y es preferible desde el punto de vista del medio ambiente a la adopción de medidas después de la introducción y el establecimiento de EEI. 2. Debería darse prioridad a prevenir la entrada de EEI, entre los Estados y dentro de un Estado. Si ya se ha producido la entrada de una especie invasora, una pronta detección y una acción rápida son decisivas para impedir su establecimiento. Con frecuencia la respuesta preferida es erradicar los organismos tan pronto como sea posible (Principio 13). En caso de que no sea posible la erradicación o que no se disponga de recursos para su erradicación, deberían 16 aplicarse medidas de contención (Principio 14) y medidas de control a largo plazo (Principio 15). Todo examen de los beneficios y de los costos (ambientales, económicos y sociales) debería realizarse a largo plazo. Las medidas de prevención son las más efectivas, y entre ellas, se pueden encontrar: Marco legal que contemple la problemática de las especies exóticas invasoras. En la actualidad se están trabajando en ello a diferentes ámbitos, desde autonómico a estatal (véase por ejemplo, el Decreto 213/2009 de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda de la Comunidad Valenciana). La creación de listas de especies exóticas invasoras es de vital relevancia para el conocimiento de las especies invasoras. El uso de material autóctono en jardinería es fundamental para evitar la invasión de especies no deseadas. El desarrollo de campañas de educación ambiental a diferentes niveles de la población, profesionales y sectores productivos implicados. Las medidas preventivas según el modo de introducción (voluntario/involuntario) también son importantes. Hay que destacar que la mejor estrategia de prevención es la de mantener los ecosistemas con una alta integridad ecológica, por lo tanto, es necesaria una planificación eficaz y una ordenación de los usos dentro de los Espacios Naturales Protegidos que asuman que las perturbaciones, tales como movimientos del terreno, pisoteo de los visitantes, apertura de sendas, caminos, cortafuegos, quemas prescriptas, etc., facilitan directa o indirectamente las invasiones biológicas. 3.2. MÉTODOS DE CONTROL En este apartado se describen diversos métodos de control sobre la especie invasora A. altissima, partiendo de la detección temprana como primera medida de prevención. Finalmente, se presenta el protocolo de actuación, resultado del estudio desarrollado a largo plazo en el P.N. del Carrascal de la Font Roja (Alicante) por la Universidad de Alicante, para determinar la mejor estrategia de control de la especie invasora en espacios naturales protegidos bajo clima mediterráneo. 17 3.2.1. Detección temprana Las acciones de detección temprana deben estar acompañadas por una evaluación expeditiva de impacto y por una gestión de los recursos necesarios para concretar intervenciones rápidas, toda vez que se haya detectado la introducción o el establecimiento de la especie exótica nueva en el área monitoreada. Las nuevas invasiones, particularmente las que impliquen alto impacto, deben ser tratadas como de primera prioridad. Para ello, el primer paso es conocer la localización de la especie invasora dentro del espacio natural protegido para analizar el grado de invasión en los distintos ecosistemas que forman parte del mismo. El uso de sistemas de información geográfica es muy útil para disponer de información sobre la localización de las especies invasoras de cara a la gestión. Figura 3.2.1. Mapa de distribución actual de Ailanthus altissima en la ZEPA Sierras de MariolaCarrascal de la Font Roja. Una vez conocida su distribución, el empleo de análisis multicriterio es una buena técnica para determinar áreas de mayor prioridad para actuar sobre la especie, como son ecosistemas de ribera o carrascal, con alto interés para la conservación (Terrones et al. 2006). 18 Es muy importante para la gestión y el control de especies de plantas invasoras identificar las áreas con alto riesgo de invasión (Hobbs y Humphries 1995; Mack et al. 2000), así como identificar los usos de suelo que puedan favorecerlas. La cartografía de hábitat disponible para especies de invasoras es un instrumento de gran utilidad en la gestión de áreas protegidas, ya que pueden ayudar en las tareas de control, erradicación y restauración de los hábitat afectados. Su utilidad permite establecer prioridades en la vigilancia y monitoreo de las poblaciones de EEI y también para planificar correctamente las actuaciones. El estudio de Ailanthus altísima en el P.N. del Carrascal de la Font Roja ha permitido identificar las posibles fuentes de diásporas y factores territoriales de expansión, siendo en este caso la proximidad a carreteras, pistas forestales, ríos, barrancos, vía verde, edificaciones dispersas y núcleos urbanos (Terrones et al. 2007; Constán-Nava et al. 2007; Peña et al. 2008). La evaluación multicriterio es una metodología fiable y de fácil utilización para la zonificación del territorio en el control de especies exóticas invasoras. La obtención de mapas de hábitat disponible para determinadas especies es un instrumento muy útil en la gestión de áreas protegidas (Terrones et al. 2006). Figura 3.2.2. Hábitat disponible para la especie Ailanthus altissima, con una clasificación del riesgo de propagación, en el P.N. del Carrascal de la Font Roja (Alcoy, Alicante) (Extraído de Constán-Nava et al. 2007). 19 3.2.2. Métodos de control Se proponen actuaciones dirigidas a la intervención directa sobre el ailanto. Se pueden diferenciar los siguientes métodos: Métodos manuales y mecánicos Los métodos manuales y mecánicos incluyen la extracción de plantones jóvenes, desbroce de parte aérea, cortes anulares en el tronco y excavación para extracción de las raíces. La extracción manual puede hacerse para pequeños plantones, pero deja de ser efectiva cuando las plántulas desarrollan su sistema radicular, por lo que al eliminar los tallos se puede producir rotura de la raíz y propagarse (Kowarik y Säumel 2007). Asimismo, es difícil llevar a cabo esta metodología si el individuo tiene un sistema radicular completamente desarrollado. El desbroce, es decir, la eliminación de la parte aérea a mano, con tijeras de podar y hachas, o mecánicamente con desbrozadoras de distinto calibre, es un método muy utilizado para controlar el ailanto, pero tras ello se produce un rebrote importante en tallos y raíces (Meloche y Murphy 2006; Constán-Nava et al. 2010). Lo mismo ocurre cuando se trata de eliminar el cambium del tronco, el tronco muere, pero se producen rebrotes de las raíces. La excavación y extracción de raíces sólo puede llevarse a cabo en pequeñas extensiones. Figura 3.2.3. Aplicación de métodos mecánicos sobre individuos adultos de ailanto en el P.N. del Carrascal de la Font Roja (Alcoy, Alicante). 20 Se ha de tener en cuenta que la erradicación es difícil y costosa, principalmente si se pretenden usar métodos mecánicos, pues no son definitivos y requieren un seguimiento a largo plazo (Burch y Zedaker 2003). Métodos químicos Los métodos químicos pueden controlar o defoliar un individuo de esta especie, pero el criterio más importante para cualquier tratamiento mediante herbicidas es el éxito en el control en los rebrotes del tocón y el sistema radicular, y la eliminación de los troncos. Un tratamiento con herbicidas necesita eliminar el tronco a la vez que se moviliza hacia las raíces para controlar el rebrote. Este control debe llevarse a cabo dentro de unos límites aceptables si se pretende mantener la integridad ecológica del lugar, por lo que una estrategia eficiente debe permitir controlar poblaciones e individuos de ailanto sin comprometer la funcionalidad de la comunidad vegetal autóctona. En áreas templadas la combinación de métodos mecánicos con químicos son los que han presentado mejores resultados (Meloche y Murphy 2006). En estas zonas, se han empleado diferentes metodologías para controlar el numero de rebrotes del ailanto en áreas protegidas, entre los cuales, los que han presentado mejores resultados han sido tras la combinación de métodos mecánicos junto con la aplicación de glifosato (Burch y Zedacher 2003; Meloche y Murphy 2006). Asimismo, bajo clima mediterráneo, el desbroce junto a la aplicación de glifosato también ha resultado ser la metodología más eficaz contra el rebrotado de la especie a largo plazo (Constán-Nava et al. 2010; ver apartado Estudio de caso a largo plazo). Métodos biológicos Según la literatura científica, en el área original de A. altissima existen 46 artrópodos fitófagos, 16 especies de hongos y un potyvirus que causan un daño significativo a la especie (Ding et al. 2006). Esto sugiere que el control biológico puede ser una alternativa potencial, pero esta técnica debe ser evaluada (Ding et al. 2006). Otros métodos La quema y el pastoreo pueden eliminar los troncos de ailanto y debilitar las raíces, pero ninguno de los dos métodos ha demostrado ser una solución a largo plazo debido a los continuos rebrotes (Meggaro y Vilà 2002). 21 3.2.3. Estudio de caso a largo plazo A pesar de la necesidad de control de A. altissima bajo clima mediterráneo y la falta de eficacia en los métodos existentes, los planes de manejo específicos son escasos y recientes, y se desconocía la mejor metodología para su erradicación. Debido a la capacidad de recuperación de la especie como especie rebrotadora, y a la posibilidad de agotar sus reservas, desde la Universidad de Alicante, en colaboración con la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, se realizó un estudio a largo plazo para determinar el método más eficaz para controlar a la especie en el P.N. del Carrascal de la Font Roja (Constán-Nava et al. 2010). En este estudio se compararon 3 tratamientos frente a un control (desbroce anual, dos desbroces anuales, y desbroce junto a aplicación de herbicida (glifosato)) en el periodo 20052009, repitiendo anualmente los tratamientos desde 2005 a 2008. Como resultado de este estudio se obtuvo que el tratamiento de corte y glifosato redujo la biomasa, la altura y el área foliar de los rebrotes de A. altissima en más del 80% a partir del primer año, llegando a eliminarse algunas de las poblaciones tras 4 años de repetición del tratamiento (Tabla 3.2.1., Figura 3.2.4.). Figura 3.2.4. Parcelas sin rebrotes de A. altissima tras cuatro años de aplicación de corte y herbicida anual. 22 Tabla 3.2.1. Resultado de los tratamientos aplicados sobre el ailanto en el estudio a largo plazo.*Diferentes letras indican estadísticamente diferencias significativas para p<0,05 (extraído de Constán-Nava et al. 2010b) Tratamiento Biomasa (gr m-2 ) Control Un corte Dos cortes Corte y herbicida Densidad (num m-2) Control Un corte Dos cortes Corte y herbicida Altura (m) Control Un corte Dos cortes Corte y herbicida Previo (2005) Primer año (2006) Segundo año (2007) Tercer año (2008) Cuarto año (2009) 1318,4 (602,7) a 1878,6 (1204,7) a 2262,1 (1825,3) a 827,9 (245,8) a 2422,2 (1042,3) a 283,3 (84,9) ab 340,7 (143,7) ab 35,9 (25,2) b 3329,6 (1511,3) a 801,8 (463,5) ab 414,1 (163,5) ab 115,2 (42,4) b 3129,1 (1366,2) a 234,7 (81,5) ab 534,5 (54,7) a 45,2 (30,0) b 3560,1 (1655,8) a 159,9 (68,9) a 206,0 (100,9) a 15,5 (15,3) b 8,2 (1,6) a 3,8 (0,4) a 7,7 (3,1) a 5,2 (1,2) a 8,3 (1,7) a 7,9 (1,3) a 9,9 (3,3) a 3,0 (0,7) a 6,5 (0,9) a 10,6 (2,9) a 13,3 (4,7) a 6,5 (3,0) a 6,7 (1,0) a 13,6 (3,6) a 16,0 (5,8) a 5,1 (1,6) a 6,7(1,4) a 12,1 (6,3) a 11,0(4,0) a 2,0(0,9) a 1,2 (0,3) a 1,3 (0,3) a 1,4 (0,4) a 1,0 (0,2) a 1,3 (0,4) a 0,6 (0,1) ab 0,6 (0,2) ab 0,2 (0,0) b 1,5 (0,3) a 0,7 (0,2) ab 0,6 (0,0) b 0,3 (0,0) b 1,4 (0,3) a 0,5 (0,1) b 0,5 (0,0) b 0,1 (0,0) b 1,6(0,5) a 0,5 (0,1) b 0,4 (0,0) b 0,07(0,0) b Los tratamientos de un desbroce y dos desbroces no redujeron a la especie invasora (Tabla 3.2.1., Figura 3.2.5.) Figura 3.2.5. Rebrotes de ailanto tras cinco años de estudio en tratamientos de un corte (izquierda) y dos cortes anuales (derecha). Como resultado de este estudio se ha desarrollado el protocolo de actuación descrito a continuación. 23 3.2.4. Protocolo de actuación recomendado Se distinguen dos zonas de actuación, afectando tanto a terrenos de titularidad pública como privada, en el ámbito de la zona PRUG como PORN. Además se distinguen dos situaciones: • Rodales de ailanto • Pies de ailanto con fin ornamental Esta división en las actuaciones considera la zonificación del Parque Natural, permitiendo diferenciar situaciones administrativas. También desde el punto de vista ecológico, el manejo será diferente. Por un lado, encontramos rodales de ailanto, sin selvicultura; de crecimiento espontáneo. Por otro lado, pies de ailanto que reciben cuidados culturales, cuya finalidad es integrarse en el jardín de alguna masía. Este hecho condicionará el tipo de actuaciones y cómo se llevarán a cabo. Para el primer caso el procedimiento recomendado es el siguiente: 1. Desbrozado de los individuos a nivel cercano al cuello de la raíz. Debe procurarse eliminar al máximo la parte aérea de la planta, de forma que se dejen pocas yemas que puedan rebrotar. 24 Figura 3.2.6. Desbroce de individuos de ailanto mediante tijeras de podar. 2. Aplicación del herbicida Glifosato (sal isopropilamina al 36% p/v) sin diluir sobre la base del tocón del pié apeado mediante un pincel. Alternativamente, y dependiendo de la extensión a tratar y considerando la fragilidad del hábitat, lejanía a los cursos de agua, etc. podría aplicarse mediante mochila difusora, pero valorando siempre el riesgo que comporta contaminar la vegetación herbácea circundante, la fauna edáfica, etc., por lo que, aunque se haga con este segundo método, las aplicaciones deben ir siempre dirigidas al punto de corte del tronco. Nuestra recomendación es que se utilice el pincel siempre que sea posible. Figura 3.2.7. Aplicación del herbicida sobre individuos recién cortados de Ailanthus altissima en el P.N. del Carrascal de la Font Roja (Alcoy, Alicante). 25 En caso de pasar 15 minutos desde el desbroce hasta la aplicación del herbicida, se deberá realizar de nuevo un corte y aplicar el fitosanitario, ya que la absorción deja de ser efectiva transcurrido ese tiempo. El momento de la actuación corresponde al periodo otoñal, que es cuando se produce la traslocación principal de los nutrientes desde la parte aérea hacia el sistema radicular. Algunos autores recomiendan que la aplicación del herbicida sea a finales de primavera porque la traslocación es más intensa que en otoño. Por tanto, es posible realizar una primera aplicación a finales de primavera y una segunda tras el rebrote, en otoño. En cuanto a la preparación y aplicación del herbicida, se debe realizar cumpliendo una serie de medidas de seguridad: • utilizar ropas y protectores adecuados (guantes, mascarilla, pantalones y camisas largas, botas, protector facial y sombreros) • aplicar el herbicida mediante pincel, evitando pulverizaciones aéreas, sobretodo cerca de poblaciones, lagos o cursos de agua, así como sobre zonas boscosas. • no aplicar este producto en presencia de fuertes vientos o en horas de mucho calor. • inutilizar y eliminar adecuadamente los envases vacíos • no lavar los envases o equipos de aplicación en lagos, ríos, arroyos y demás fuentes de agua • mantener fuera del alcance de los niños y personas inexpertas. Necesario el carné de manipulador de fitosanitarios. • no transportar ni almacenar con alimentos. 3.Eliminación del material vegetal extraído. La presencia de semillas en los individuos se ha de tener en cuenta y deberán separarse del resto del material vegetal para evitar futuras propagaciones. No es recomendable utilizar el material vegetal como compost, ya que se ha indicado el elevado efecto inhibidor de la germinación de la flora autóctona (alelopatía). 26 Figura 3.2.8. Desbrozado de individuos de ailanto mediante trituradora. Se recomienda la realización de los apartados 1., 2., y 3., dos veces al año, la primera a finales de primavera (tras el primer rebrotado de la especie) y en otoño (segunda fase de crecimiento vegetativo). 4. Seguimiento de las actuaciones. Para poder evaluar los efectos de los tratamientos es necesario realizar un seguimiento de los nuevos rebrotes después de las actuaciones y repetir el protocolo a largo plazo para su erradicación. Un Plan de gestión adaptativa deberá desarrollar los mecanismos pertinentes de evaluación de las actuaciones realizadas mediante el correcto seguimiento. Para ello será conveniente elaborar informes anuales de seguimiento, reflejando resultados sobre los parámetros indicadores seleccionados sobre os rodales afectados por los tratamientos: • Área basimétrica total • Tasa de crecimiento diametral • Tasa de crecimiento en altura • Parámetros reproductivos (Número total de racimos de flores y frutos) 27 Figura 3.2.9. Resumen de los pasos recomendados para el control de A. altissima en Espacios Naturales Protegidos Mediterráneos. En el caso de pies ornamentales o situados en fincas privadas y cercanos a jardines o viviendas, además del protocolo anterior, se recomienda: • En el caso de pies ornamentales, se recomienda realizar podas selectivas en los pies adultos ornamentales de masías, en general, masculinos y/o femeninos. Consiste en la poda del último tramo de los brazos del árbol, lugar donde se localizan los racimos con las flores. El hecho de no concretar sobre qué sexo actuar es con la idea de ser consensuado con los afectados, los propietarios. Una vez tomada la decisión, sobre pie femenino o masculino, se ha de seguir esa línea ya que la aplicación de estas podas selectivas tienen por objeto obstaculizar o bien, el transporte del polen al pie femenino, cuando se actúa sobre el pie masculino, u eliminar el punto de fecundación de la flor femenina, cuando se actúa sobre el pie femenino. Sea cuál sea la decisión tomada será válida y efectiva. El 28 momento de hacer estas podas selectivas coincidirá justamente antes de la floración, cuando todavía las flores aparecen cerradas, de modo que se evite que el polen de las flores masculinas vaya a las femeninas, y así eliminar la fructificación y producción de semillas. • Destoconamiento mecánico y retirada de los pies de ailanto si el propietario accede a ello. En cuanto a la elección del sexo, es preferible la retirada de los pies femeninos frente al pie masculino (aunque es éste el que desprende un olor más desagradable). La retirada del ejemplar femenino es más efectiva, porque supone la eliminación de producción de nuevas semillas, germen de nuevos pies. • El empleo de destoconado mecánico es recomendable en áreas extensas como cultivos abandonados o similares. • Sustitución por otros ejemplares no alóctonos de similares características. Excepciones: podas de las partes reproductoras de los individuos adultos, (en el caso de que el propietario no quiera eliminar el ejemplar). • No se recomienda el empleo del herbicida en zonas cercanas a los cursos de agua, por lo que en estos lugares se puede combinar la extracción donde fuera posible (destoconamiento) con el control mecánico. • Uso de la técnica manual para plántulas de ailanto. Control de nuevas germinaciones y plantones, situación frecuente en la cercanía del pie adulto. 3.3. PARTICIPACIÓN ACTORES INTERESADOS El ámbito de aplicación de las actuaciones afecta a diferentes situaciones administrativas. Por un lado está el área PRUG sobre titularidad pública, cuya toma de decisiones recae sobre el La Conselleria de Medio Ambiente y el Director‐Conservador del parque, apoyado por un Consell de Protecciò, órgano consultivo cuya misión es asesorar a éste. Por otro lado, el área PRUG privada, donde la potestad de las decisiones recae sobre el propietario de la finca. La ejecución de las actividades será llevada a cabo por la Brigada de Mantenimiento del Parque; previo acuerdo y consentimiento en las zonas privadas. Fuera del PRUG se encuentra la zona PORN, cuya gestión y toma de decisiones compete a los Ayuntamientos que la zona abarque (Ibi, Alcoy) si son terrenos públicos, o de lo contrario, 29 al propietario de la finca. Por otra parte, cabe recordar que se trata de una especie catalogada en el Anexo II del Decreto 213/2009 de Control de especies invasoras, en el que se definen las competencias y limitaciones de actuación. Es importante la participación activa de todos los actores afectados directa y/o indirectamente por la especie invasora (así como de otras especies). Entre los actores afectados se pueden encontrar: Personal de las áreas naturales protegidas. Es necesaria la formación sobre especies exóticas invasoras (legislación, listas de especies exóticas, efectos, control) de todo el equipo de trabajado del espacio natural, para desarrollar una buena medida de prevención, control y erradicación. Personal competente de la Administración Local y Autonómica en el ámbito del área protegida y zona de influencia. Es igual de necesaria su formación sobre especies exóticas invasoras (legislación, listas de especies exóticas, efectos, control), así como el desarrollo de proyectos para el control y seguimiento de poblaciones de las especies invasoras, campañas de educación ambiental a diferentes niveles de la ciudadanía. Los propietarios de fincas existentes dentro de las áreas protegidas, dentro de las cuales pueden incluir a la especie debido a su uso como ornamental dentro de sus áreas ajardinadas o por debido a la entrada espontánea tras su uso en taludes cercanos a las propiedades privadas. Visitantes de las áreas protegidas. Es importante que toda persona que acceda al espacio natural sea informado sobre la problemática de las especies exóticas invasoras. Centros de Investigación. La investigación sobre especies exóticas invasoras es muy útil para combatir el problema de las especies exóticas invasoras, aportando información sobre aspectos ecológicos que pueden ayudar a mejorar el control de estas especies. 3.4. CRITERIOS DEL PLAN DE ACTUACIÓN Objetivos operacionales Control y eliminación de las poblaciones de la especie 30 Control de la dinámica de las masas a través de las revisiones planteadas. Para ello se definirán parámetros de control que serán indicadores de la evolución. Prioridades en las actuaciones Este Plan de actuación propone tratamientos diferentes según las prioridades. Se trata de priorizar control y erradicación en la zona PRUG , frente a control en la zona PORN. Se prevé que en el plazo de siete años, aproximadamente, los rodales en la zona PRUG hayan sido erradicados o disminuido hasta un 20% de su situación inicial. Justo en ese momento, para el año siguiente en que se manejen esas cifras, se pretende hacer un cambio de objetivos. En este caso sería la escala de prioridades sería de control de la situación conseguida en el área PRUG y control y erradicación en el área PORN. En resumen, las actuaciones a realizar en cada fase serían las siguientes: a. Reuniones informativas (inicio) b. Tratamientos silvícolas según el caso indicado anteriormente (anual) c. Control de nuevas poblaciones y reclutamientos (anual) d. Recogida de datos para el plan de seguimiento (anual) e. Destoconamiento y sustitución de pies ornamentales (inicial) f. Informes (anuales) 31 4. ANALISIS ECONÓMICO Vizcaíno (2007), en un Proyecto de Plan de control y manejo de la especie en el Parque Natural desarrollado en la ECFRN UA, realiza un análisis del coste económico sobre una serie de propuestas de actuación. El plan que se propone contiene unos objetivos a alcanzar, que irán verificándose en el tiempo mediante informes. Una duración en el tiempo de diez años, más dos años de control, lo que supone un total de doce años planificados para el control y manejo de la especie en la zona de estudio. El coste total del proyecto sobre el cálculo de superficies afectadas en el Parque Natural, con una duración total de 10 años de actuación y 2 más de control asciende a un presupuesto total de ejecución material de 70.509 € (sin considerar gastos generales, beneficio industrial ni IVA). A continuación se indican los precios unitarios, las unidades de obra y el coste unitario de las actuaciones. Tabla 4.1. Precios unitarios de las diferentes actuaciones para el control del ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007) ud Unidad Descripción de la unidad Planta arbórea tamaño grande (200-400 cm frondosas) Precio (€) 83,2900 l Herbicida con Glifosato 36% p/V (Glifos) 64,3000 hora Motosierra de 2,8/5 cv (48-70 cm), sin m.o 1,4800 km Vehículo todo terreno 111/140 cv, sin m.o 0,3300 hora Tijera de podar, con m.o hora Remolque basculante hidráulico, para 2000 kg hora Capataz Forestal (con desplazamiento) 21,0738 hora 11,4227 hora Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte proporcional de capataz) Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento) ud Cantidad fija para el cálculo del importe de un informe hora Estación de trabajo para Windows con monitor 21" 0,9600 hora Software para análisis de datos 3,4100 hora Técnico responsable del plan hora Astilladora accionada por motor de explosión, sin mano de obra 11,5000 0,9400 45,6908 195,9200 28,8400 2,3400 32 Tabla 4.2. Unidades de obra de las actuaciones para el control del ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007) Descripción Unidad Precio (€) Ud. de arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares. ud 70,24110 Ud. de arranque de árbol mediano sin posterior utilización, empleando maquinaria, e incluyendo el arranque de la cepa y la eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares. ud 13,12600 M2 de desbroce y limpieza del terreno por medios manuales, incluyendo carga y transporte de residuos a vertedero, herramientas y medios auxiliares m2 1,85490 M2 de desbroce y limpieza del terreno por medios mecánicos, incluyendo carga y transporte de residuos a vertedero, herramientas y medios auxiliares m2 0,43500 Ud. de excavación manual de un hoyo de 0,343 m3 en terreno compacto, para plantación de árboles de tamaño normal (100 - 200 cm) y arbustos o trepadoras de tamaño grande (150-200 cm), incluyendo herramientas y medios auxiliares. ud 3,03040 Roza manual de una hectárea de matorral con diámetro basal igual o inferior a 3 cm, en pendientes inferiores al 50%, y con una superficie cubierta del 100%, respetando aquellos ejemplares que, por cualquier motivo, deban conservarse. En el caso de que la superficie cubierta sea inferior al 100%, la medición se verá afectada por un coeficiente reductor equivalente a la proporción de superficie cubierta expresada en tanto por uno. ha 636,24750 Roza manual de una hectárea de matorral con diámetro basal comprendido entre 3 y 6 cm, en pendientes inferiores al 50%, y con una superficie cubierta del 100%, respetando aquellos ejemplares que, por cualquier motivo, deban conservarse. En el caso de que la superficie cubierta sea inferior al 100%, la medición se verá afectada por un coeficiente reductor equivalente a la proporción de superficie cubierta expresada en tanto por uno. ha 1.214,65 € Recogida y apilado de una Ha. de residuos forestales procedentes conjuntamente de desbroces o rozas, podas y/o claras o clareos, con densidad inferior a 10 toneladas/hectárea (estimación previa del residuo en verde), distancia máxima de recogida de 30 metros y pendiente del terreno inferior al 30%. ha 116,83 € Recogida y apilado de una Ha. de residuos forestales procedentes conjuntamente de desbroces o rozas, podas y/o claras o clareos, con densidad inferior a 10 toneladas/hectárea (estimación previa del residuo en verde), distancia máxima de recogida de 30 metros y pendiente del terreno comprendida entre el 30 y el 50%. ha 128,51 € 33 Tabla 4.3. Unidades de Obra de las actuaciones para el control del ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007) Cantidad 60 15 15 25 2 5 15 25 2 5 1 1 hora hora hora hora 555 15 1 1 7 2 0,25 1,5 1 Unidad Actuación y obra Precio Subtotal ha Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo formadas por árboles de fuste débil y diámetro superior a 10 cm hora Motosierra de 2,8/5 cv (48-70 cm), sin m.o 1,48 88,8000 € hora Astilladora accionada por motor de explosión, sin mano de obra 2,34 35,1000 € hora Capataz Forestal (con desplazamiento) 21,0738 316,1070 € hora Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento) 45,6908 1.142,2700 € % Medios auxiliares (% s/total) 31,6455 € Total 1.613,9225 € ha Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo formadas por árboles de fuste débil y diámetro inferior a 10 cm hora Astilladora accionada por motor de explosión, sin mano de obra 2,34 11,7000 € hora Capataz Forestal (con desplazamiento) 21,0738 316,1070 € hora Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento) 45,6908 1.142,2700 € % Medios auxiliares (% s/total) 29,4015 € Total 1.499,4785 € ha Arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares. hora Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte 11,4227 57,1135 € proporcional de capataz) % Medios auxiliares (% s/total) 0,5711 € Total 57,6846 € ud Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del informe. ud Cantidad fija para el cálculo del importe de un informe 195,92 195,9200 € Total 195,9200 € ud Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes 10 Estación de trabajo para Windows con monitor 21" 0,96 9,6000 € 10 Software para análisis de datos 3,41 34,1000 € 10 Técnico responsable del plan 28,84 288,4000 € Total 332,1000 € ha Aplicación de glifosato sobre tocón l Herbicida con Glifosato 36% p/V (Glifos) 64,3 35.686,5000 € hora Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento) 11,4227 171,3405 € % Medios auxiliares (% s/materiales) 0,01 358,5784 € Total 36.216,4189 € ha Control de las actuaciones km Vehículo todo terreno 111/140 cv, sin m.o 0,33 0,3300 € hora Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento) 45,6908 319,8356 € ZZ%T Medios auxiliares (% s/total) 0,02 6,4033 € Total 326,2389 € ha Poda de flores y/o frutos de los pies de ailanto (para pies a 15*15m marco) hora Capataz Forestal (con desplazamiento) 21,07 5,27 hora Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte 11,42 17,13 proporcional de capataz) % Medios auxiliares (% s/total) 0,01 0,22 Total 22,6265 € 34 Continuación Tabla 4.3. 70,4 1 ud Excavación manual de un hoyo de 1 m3 de terreno compacto, para plantación de árbol ornamental de tamaño grande (200-400 cm), incluyendo herramientas y medios auxiliares hora Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte proporcional de capataz) Medios auxiliares (% s/total) % ud 80 1 hora % ud 8,8 hora 44 2 ud % 11,42 804,16 0,01 8,04 Total 812,1997 € Arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares. Cuadrilla forestal ( 4 peones oficiales con desplazamiento) 45,6908 3.655,2640 € Medios auxiliares (% s/total) 36,5526 € Total 3.691,8166 € Plantación manual de un árbol ornamental de tamaño grande (200-400 cm) en hoyo previo de 1 m3. Incluye tapado del hoyo, precio de la planta y transporte al tajo,herramientas y medios auxiliares Peón Oficial Forestal (con desplazamiento e incluye parte 11,4227 100,5198 € proporcional de capataz) Planta arbórea tamaño grande (200-400 cm frondosas) 83,29 3.664,7600 € Medios auxiliares (% s/total) 0,02 75,3056 € Total 3.840,5854 € 35 Tabla 4.4. Coste de las actuaciones para el control de ailanto (adaptado de Vizcaíno, 2007) Unidad Actuación Precio TRATAMIENTO: CORTE DE TEMPORADA Y GLIFOSATO ha Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo formadas por árboles de fuste débil y diámetro superior a 10 cm 1613,92254 ha Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo formadas por árboles de fuste débil y diámetro inferior a 10 cm 1499,47854 ha Aplicación de glifosato sobre tocón 36216,4189 TRATAMIENTO: CORTE TOTAL 39.329,82 € ha Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo formadas por árboles de fuste débil y diámetro superior a 10 cm 1613,92254 ha Eliminación de la vegetación arbórea en una ha de masas continuas de fácil desarraigo formadas por árboles de fuste débil y diámetro inferior a 10 cm 1499,47854 TOTAL ha CONTROL DE LAS ACTUACIONES Control de las actuaciones ha PODAS SELECTIVAS Poda de flores y/o frutos de los pies de ailanto (para pies a 15*15m marco) DESTOCONAMIENTO Y SUSTITUCIÓN 3.113,40 € 326,238912 TOTAL 326,24 € 22,626525 TOTAL 22,63 € ha Arranque manual de árbol grande sin posterior utilización, incluyendo su cepa, y eliminación de restos. Incluye herramientas y medios auxiliares. 3691,81664 ha Excavación manual de un hoyo de 1 m3 de terreno compacto, para plantación de árbol ornamental de tamaño grande (200-400 cm), incluyendo herramientas y medios auxiliares 812,199661 ha Plantación manual de un árbol ornamental de tamaño grande (200-400 cm) en hoyo previo de 1 m3. Incluye tapado del hoyo, precio de la planta y transporte al tajo, herramientas y medios auxiliares TOTAL INFORME ANUAL Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del informe. TOTAL INFORME QUINQUENAL 3840,58536 Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del informe. 332,1 195,92 TOTAL 528,02 € ud ud ud ud INFORME CONTROL Ud Post-proceso en gabinete de datos de campo para su análisis y redacción de informes ud Ud. de cantidad fija del importe para la redacción de un Informe de tipo general, sea cual fuere la cuantía y complejidad de los medios utilizados en el trabajo, obra o instalación, objeto del informe. TOTAL 8.344,60 € 332,1 195,92 528,02 € 332,1 195,92 528,02 € 36 5. CONCLUSIONES GENERALES Y RECOMENDACIONES La prevención, el control y la erradicación son los pasos necesarios para combatir las especies exóticas invasoras, en concreto A. altissima. El método de control recomendado sobre el ailanto a largo plazo es el de desbroce a nivel de cuello de la raíz de los individuos y la aplicación de glifosato sobre el tocón recién cortado (ver apartado Protocolo de actuación recomendado). Es importante una participación de todos los actores implicados. Se indican los criterios y las bases económicas de aplicación de un Plan de actuación, que tomando como ejemplo las diferentes situaciones en el Parque Natural del Carrascal de la Font Roja y una duración de 10 años más dos de control, ascendería a un presupuesto total de ejecución material de 70.509 €. Es necesaria una gestión que integre dos estrategias, en función de la titularidad del terreno (público y privado) del área afectada por la especie invasora, y sus características (rodales silvestres o introducción ornamental). Las actuaciones deben iniciarse en las áreas prioritarias de conservación y considerando las zonas de mayor probabilidad de invasión. Se ha de considerar que el abandono de casas rurales donde el ailanto se cultivó como especie ornamental provoca el crecimiento incontrolado de la especie. Las campañas de educación ambiental a diferentes niveles y voluntariados ambientales son útiles como herramienta en la lucha contra las especies exóticas invasoras. 37 6. BIBLIOGRAFÍA • Arnaboldi F, Conedera M, Fonti P. 2003. Caratteristiche anatomiche e auxometriche di Ailanthus altissima una apecie arborea a carattere invasivo, Sherwood, V.91 • Algarra JA, Quero JM, Rodríguez Hiraldo C, Osuna UM. 2005. Conservación de flora en la Provincia de Córdoba, Conserv. Vegetal, 9: 9-11 • Baker HG. 1986. Patterns of plant invasion in North America. In: Ecology of Biological Invasions of North America and Hawaii, eds: Mooney, H.A., and J.A. Drake. SpringerVerlag, New York, NY, pp. 44-58 • Balaguer L. 2004. Las plantas invasoras, ¿el reflejo de una sociedad crispada o una amenaza científicamente contrastada? 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