Declaración Conjunta de la Comunidad Andina (CAN) Los Países Miembros de la Comunidad Andina, Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú, frente a la dimensión transnacional del tráfico ilícito de armas que constituye una grave amenaza a la paz, la seguridad, la gobernabilidad, la estabilidad y el orden democrático acordaron implementar el Programa de Acción de las Naciones Unidas para Prevenir, Combatir y Erradicar el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en todos sus aspectos, adoptado en Nueva York en julio de 2001. En tal sentido, en junio de 2003, el Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores adoptó la Decisión 552 “Plan Andino para la Prevención, Combate y Erradicación del Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en todos sus aspectos”, mecanismo subregional de obligatorio cumplimiento y aplicación directa en los Países Miembros de la Comunidad Andina, con un enfoque basado en la responsabilidad común y pleno respeto de la soberanía de cada País Miembro. Dicha norma tiene entre sus objetivos, el fortalecer la capacidad de los Países Miembros para implementar medidas contra la fabricación, importación, exportación, transferencia, comercialización, intermediación, transporte, tenencia, ocultamiento, usurpación, porte y uso ilícitos de armas pequeñas y ligeras, así como para identificar, confiscar y, cuando corresponda, destruir este tipo de armamento; institucionalizar programas nacionales y subregionales, así como los mecanismos de acción correspondientes, para prevenir, controlar y erradicar el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras en todos sus aspectos; ;y propiciar el desarrollo de una cultura de paz, dentro del marco del pleno respeto de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario. Los Países Miembros de la Comunidad Andina, siguiendo la recomendación emanada de la Cuarta Reunión Bienal de los Estados para examinar la ejecución del Programa de Acción de junio de 2010, han celebrado reuniones subregionales, de los organismos competentes de aplicación de la ley para intercambiar información, sobre las mejores prácticas y experiencias adquiridas, en relación con el tráfico de armas pequeñas y armas ligeras, y promover la armonización de las leyes, prácticas comunes y herramientas para prevenir el tráfico de armas pequeñas y armas ligeras a través de las fronteras. Dichas reuniones fueron llevadas a cabo tanto a nivel del Comité Operativo encargado de coordinar, armonizar e implementar los esfuerzos para prevenir, combatir y erradicar el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras en todos sus aspectos, creado por la Decisión 552, como de talleres y seminarios especializados en los que participaron las distintas entidades pública, como organizaciones de la sociedad civil vinculadas al tema. Estos últimos eventos, realizados con la colaboración del Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC), En ellas, se han venido examinando los medios para reforzar la cooperación y la asistencia entre Estados, así como evaluando su eficacia a fin de asegurar la aplicación de la mencionada Decisión, como del Programa de Acción de Naciones Unidas en la Comunidad Andina. Asimismo, el Comité Operativo ha avanzado en la determinación de acciones prioritarias pertinentes al tráfico ilícito de armas pequeñas y armas ligeras en todos sus aspectos. En ese sentido, ha priorizado las siguientes acciones contempladas en el Plan Operativo para la implementación de la Agenda Coordinada de Acción de la Comunidad Andina de la Decisión 552 que tienen vinculación con el Programa de Acción: • Promover la cooperación y el intercambio de información entre los Comités de Coordinación Nacional -Puntos Focales Nacionales-, las instituciones respon-sables de velar por el cumplimiento y cabal aplicación de las leyes y del presente Plan, y las organizaciones internacionales pertinentes vinculadas a la materia, con el propósito de abordar de manera coordinada la problemática de la proliferación ilícita de armas pequeñas y ligeras en todos sus aspectos; • Recomendar el diseño e implementación, por parte de cada Comité de Coordinación Nacional -Punto Focal Nacional-, de un Plan Nacional sobre la materia; • Desarrollar o mejorar los programas nacionales de capacitación para forta-lecer a las instituciones responsables de velar por el cumplimiento y la cabal aplicación de la presente Agenda Coordinada de Acción; y, • Propiciar el desarrollo de una cultura de paz. La Comunidad Andina ratifica su voluntad de continuar con el esfuerzo conjunto de aportar en el proceso de implementación del Programa de Acción y a su seguimiento y efectiva aplicación, en particular aquellas referidas a las medidas prácticas de cooperación y asistencia internacionales para lograr su ejecución plena.