preámbulo “Lo que sabemos es una gota de agua, lo que ignoramos es el océano” Isaac Newton 1642-1727. Matemático y físico británico Durante los últimos años, la práctica clínica de los anestesiólogos ha experimentado grandes cambios. Es el resultado de múltiples factores, siendo quizás el más importante fruto de la mejora continua de nuestra formación. El sistema Médico Interno Residente (MIR) tiene mucho que ver: permitió una producción de conocimientos basado en pruebas y en la investigación clínica, y el intercambio de conocimientos creando valores e innovación, lo que se tradujo en bienestar para el paciente. No podemos olvidar que el conocimiento crece cuando se comparte, y el sistema MIR es un contexto de creación de conocimientos que busca la mejora continua y la innovación. Un resultado tangible lo representa el avance tecnológico experimentado en estos últimos años, lo que ha permitido optimizar la práctica anestesiológica. El desarrollo de agentes farmacológicos con propiedades farmacocinéticas y farmacodinámicas que permiten una rápida recuperación del paciente con escasos eventos adversos, los avances tecnológicos con la incorporación de sofisticadas máquinas de anestesia, los sistemas de monitorización o la ultrasonografía como método de localización de plexos, nervios o espacios fasciales, la incorporación de estrategias multimodales en el abordaje del dolor agudo postoperatorio y la prevención de náuseas y/o vómitos postoperatorios nos sitúan en un escenario muy favorable para el desarrollo de la cirugía sin ingreso. Inicialmente, la creación, el desarrollo y la implantación de Unidades de Cirugía Sin Ingreso (UCSI) fue por criterios economicistas, sin embargo, la implicación de los profesionales sanitarios y la aceptación por parte de la población receptora de esta modalidad asistencial permitió un rápido crecimiento hasta situarse en que más de la mitad de todos los procedimientos quirúrgicos se realizan sin ingreso hospitalario. Este éxito es el resultado de la suma de múltiples factores: avances quirúrgicos-anestésicos, cambio de actitud de los profesionales, necesidad de aumentar la eficiencia del sistema, introducción de las tecnologías de la información y comunicación, y nuevas formas de gestión clínica. 0. PRIMERAS PAGINAS.indd 7 27/08/14 16:20 En mi opinión, todavía son necesarios más cambios. Hay que centrarse en los pacientes, no solo para dar respuesta a sus necesidades, sino a sus expectativas. No basta con realizar una gestión de los procesos, sino que es necesario redefinirlos para adaptarlos a las necesidades de los pacientes y sus familiares, es decir, convertir al paciente en el protagonista. Significa que en cada proceso hay que definir los objetivos estratégicos para una mejora, incluyendo las expectativas de los pacientes. Ahora bien, para centrar la atención en los pacientes y cumplir sus expectativas, hay unos requisitos imprescindibles: los sistemas de información, los últimos avances tecnológicos y ofrecer a los profesionales sanitarios un mayor protagonismo para poder impulsar todas aquellas mejoras que repercutan en la calidad y seguridad del paciente. Estamos obligados a construir un nuevo concepto de hospital. El recurso cama hospitalaria es caro y poco eficiente, debiéndose considerar al hospital del futuro más como un concepto que como un edificio. Para construir el hospital del futuro debemos avanzar hacia un “hospital sin pacientes” donde la asistencia ambulatoria sea el núcleo central de la actividad asistencial. En este nuevo modelo debe existir una amplia red de prestación de servicios asistenciales en torno al paciente y compartir el protagonismo con los centros de salud y el domicilio de los usuarios. Las evidencias dicen que la Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) es una práctica eficiente que consigue resultados similares o mejores que la cirugía con ingreso, sin embargo, en la actualidad, todavía se sitúa como la alternativa a la hospitalización, no como la primera opción. Es necesario un cambio de mentalidad, y todo paciente que requiera cirugía se programará en régimen de cirugía ambulatoria salvo que existan criterios que dictaminen lo contrario. Las UCSI garantizan la eficiencia, la calidad y la seguridad de sus procedimientos, no existiendo razones científicas que justifiquen un ingreso para un elevado número de procedimientos. El objetivo de este manual es proporcionar a los anestesiólogos una herramienta útil a todos aquellos que trabajen en aspectos asistenciales relacionados con la atención quirúrgica ambulatoria. Los capítulos que componen el libro abordan los aspectos más importantes de los cuidados anestésicos, desde la selección de pacientes y procedimientos hasta la evaluación preanestésica, el manejo de la vía aérea, las diferentes técnicas anestésicas utilizadas tanto en quirófano como en consultorios, el manejo de las principales complicaciones postoperatorias (dolor agudo, náuseas y/o vómitos), el periodo de recuperación, los criterios de 0. PRIMERAS PAGINAS.indd 8 27/08/14 16:20 alta y, como no podía ser menos en el siglo xxi, el seguimiento postoperatorio y la seguridad del paciente. Actualmente, la búsqueda de información sobre cualquier tema relacionado con la anestesia y la cirugía ambulatoria no ofrece dificultades, basta introducir en un buscador palabras claves con lo que deseamos conocer. El presente libro pretende reunir todos los conceptos actuales relacionados con la anestesia ambulatoria, con el objetivo de resultar útil a todos los anestesiólogos, residentes, adjuntos jóvenes, así como a profesionales con responsabilidad en la gestión. Mi deseo es que este libro, Anestesia ambulatoria, sirva para elevar los niveles de seguridad, calidad y satisfacción de los pacientes ambulatorios. Es el fruto de la experiencia de sus autores, de muchos años desarrollando su labor asistencial en el campo de la anestesia ambulatoria, y de su deseo de compartir una forma de entender la práctica anestésica moderna. Los autores de cada uno de los capítulos han puesto todo su empeño para que este libro se convierta en una referencia y cubra las necesidades de formación de los anestesiólogos que desempeñan su trabajo en el área de cirugía sin ingreso. Quiero agradecer su intenso trabajo: sin su colaboración y apoyo este manual no sería posible. Asimismo, quiero expresar mi agradecimiento a todos aquellos compañeros que, a lo largo de los años, me enseñaron una forma de trabajar y entender la anestesia, y a mis amigos por la paciencia, el apoyo y la comprensión que han demostrado para poder hacer realidad este proyecto. Un agradecimiento especial a Mariví, por el apoyo incondicional durante los últimos años, por su amistad, su bondad, su equidad y por su ayuda en los momentos difíciles. Servando López Álvarez Editor 0. PRIMERAS PAGINAS.indd 9 27/08/14 16:20