Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Estudio de casos 99 Heterometrías de extremidades inferiores B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova Heterometry of lower limbs Diplomado en podología. Profesor de la Escuela Universitaria de Podología. Departamento de Enfermería. Universidad de Extremadura. Correspondencia: Beatriz Gómez Martín Centro universitario de Plasencia Avda. Virgen del Puerto, 2 10600 Plasencia (Cáceres) E-mail: bgm@unex.es Fecha de recepción: 20/5/06 Aceptado para su publicación: 23/1/07 RESUMEN SUMMARY La heterometría de los miembros inferiores es una alteración frecuente que repercute en todo el aparato locomotor. Existen dos tipos de heterometrías, la estructural y la funcional. La estructural se debe a diferencias de longitud en alguno de los segmentos óseos (fémur y/o tibia), y causa un desequilibrio en los niveles glúteos, pélvicos y escapulares. La funcional se caracteriza por estar causada por diferentes apoyos podálicos, principalmente por pronación asimétrica. Esta posición puede aparentar una heterometría estructural, aunque la causa no está en la diferente medida de los segmentos óseos. El tratamiento que puede realizarse desde el punto de vista podológico es diferente, ya que la estructural requiere la inclusión de un alza en el soporte plantar. La funcional en cambio no requiere de alza, sino de la diferente corrección de la posición en cada pie. The heterometry is a frequent alteration that rebounds in the whole apparatus locomotive. There is two types of heterometry, the estructural and the functional one exist. The structural one is due to differences of longitude in some of the bony segments (femur and/or tibia), and it causes an imbalance of gluteal, pelvic and scapular levels. The functional one is characterized to be caused by different foot loadings, mainly for asymmetric pronation. This position can look a structural heterometry, although the cause is not in the different measure of the bony segments. The treatment that can be carried out from the podologist point of view is different, since the structural one requires the inclusion of a material in the support to plant. The functional one on the other hand doesn’t require of rise, but of the different correction of the position in each foot. PALABRAS CLAVE KEY WORDS Heterometría; Pronación; Soporte plantar. Unequal leg length; Pronation; Foot orthoses. Fisioterapia 2007;29(2):99-105 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 100 B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova Heterometrías de extremidades inferiores INTRODUCCIÓN factor etiológico de ambas heterometrías es distinto, cabe hacer referencia a que el planteamiento del tratamiento será también diferente4. La palabra dismetría es el término mas utilizado para hacer referencia a una discrepancia en la longitud de los miembros inferiores. No obstante esta terminología no es del todo correcta. El estudio etimológico confirma que el término dismetría hace referencia a la discrepancia de movimiento y/o falta del mismo para realizar una función en un segmento corporal1. La palabra adecuada para definir la desigualdad en la longitud de los miembros será “heterometría” (cuyo origen proviene del griego héteros: otro, desigual y métron: medida). La heterometría de los miembros inferiores, es una alteración muy frecuente en la infancia a consecuencia de algún tipo de alteración del crecimiento. El principal problema que se plantea en consulta es que esta alteración repercute en todo el aparato locomotor, lo que nos hace extrapolar la patología no solo al pie, ya que también compromete a la columna vertebral2. No obstante no siempre que exista una heterometría es necesario tratamiento ortopédico. La mayoría de los autores no consideran susceptibles de tratamiento las discrepancias de longitud inferiores a 1 cm3,4. La discrepancia de la longitud de los miembros inferiores se divide en dos tipos básicos: funcional y estructural. Se define como discrepancia estructural, la alteración de los miembros inferiores que presenta una malformación ósea consolidada, bien de afectación al fémur o la tibia, es decir un acortamiento real de un miembro con respecto al otro. Será necesario diferenciarla clínicamente del tipo funcional, ya que en este caso es el posicionamiento de la extremidad el que define una discrepancia de longitud, aún siendo anatómica y métricamente una igual que la otra. Suele ser este el aspecto clínico más problemático y más conflictivo de cara al tratamiento1. Autores como Messier y Pittala5 demostraron que las discrepancias estructurales mayores de 0,64 cm predisponían a problemas de fascitis plantar, mientras que Rothbart y Estabrook6, describen como la discrepancia de longitud (funcional o aparente) que aparece a consecuencia de una pronación asimétrica, es la causa fundamental del desarrollo de lumbalgias tipo ciática por distensión de cadenas musculares implicadas. Puesto que el Fisioterapia 2007;29(2):99-105 CASOS CLÍNICOS Caso 1 Una paciente de 31 años de edad, acude a consulta tras ser diagnosticada de heterometría de extremidades inferiores. Presenta antecedente traumático por accidente de tráfico. En la exploración en estática se observa pliegue glúteo y cadera derechos más bajos. La escápula derecha se encuentra más elevada que la izquierda y el brazo derecho más alto. Se observa actitud escoliótica a nivel de la columna dorso-lumbar (fig. 1). En bipedestación prolongada la paciente compensa mediante flexión de la ro- Fig. 1. Caso 1. Pliegue glúteo y brazo derecho más bajos. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova Heterometrías de extremidades inferiores 101 Fig. 2. Telemetría. Fémur izquierdo más largo. Igualdad en tibias. Fig. 3. Soportes plantares. Alza de 1,5cm en soporte derecho. Fig. 4. Nivelación de los pliegues glúteos y de los brazos. dilla izquierda, para intentar nivelar las caderas. En dinámica se observa que el pie izquierdo, durante el apoyo medio realiza un exceso de movimiento de pronación. La paciente aporta telemetría de extremidades inferiores, en cuya medición se evidencia que el fémur izquierdo es 2 cm. más largo que el derecho. Las tibias son de igual longitud (fig. 2). Se realiza soporte plantar, termomoldeado sobre molde en carga. Para compensar la diferencia de longitud se añade espuma de polietileno de alta densidad bajo el soporte derecho hasta conseguir un grosor de 1 cm. bajo el cuerpo del astrágalo, lugar donde se sitúa el centro de masas de las extremidades inferiores (fig. 3). La compensación debe hacerse de forma progresiva para permitir a la musculatura adaptarse a la nueva posición. Con el soporte plantar se observa como se nivelan los pliegues glúteos, las escápulas y los brazos al mismo nivel (fig. 4). Caso 2 Una paciente de 20 años de edad, acude a consulta para realizar soporte plantar por pie valgo. Como antecedentes, la paciente refiere que ha sido diagnosticada de heterometría de extremidades inferiores, en el que la pierna izquierda es 1 cm más larga. En la exploración estática se observa pie valgo bilateral, más marcado en el pie izquierdo y genu valgo (fig. 5). La paciente presenta el pliegue glúteo izquierdo más bajo, dato que llama la atención ya que si este miembro Fisioterapia 2007;29(2):99-105 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova Heterometrías de extremidades inferiores 102 Fig. 5. Caso 2. Pliegue glúteo izquierdo más bajo. Hiperpronación izquierda. fuera más largo el pliegue debería estar más alto que el derecho. Las mediciones con cinta métrica ofrecen datos de igualdad de ambas extremidades inferiores. El test de Allis tampoco ofrece diferencias entre las extremidades. La exploración dinámica muestra pronación durante toda la fase de apoyo en ambos pies, siendo más acusado en el pie izquierdo. La paciente aumenta el ángulo de la Fick en la marcha, despegando a través de la primera articulación interfalángica. Presenta Hallux Limitus funcional en pie izquierdo. Estos datos nos llevan a la conclusión de que la heterometría es de tipo funcional. Al controlar la pronación del pie izquierdo los pliegues glúteos se sitúan a la misma altura. (fig. 6) Se realiza soporte plantar para controlar la pronación. Con los soportes plantares, se consigue controlar el movimiento de pronación de la articulación subastragalina y se observa como se nivelan los pliegues glúteos. (fig. 7) DISCUSIÓN La importancia de discriminar entre las causas de heterometrías estructurales y funcionales, recae a la hora de Fisioterapia 2007;29(2):99-105 Fig. 6. Corrección manual de la pronación. Nivelación de pliegues. Fig. 7. Nivelación de los pliegues mediante la aplicación de los soportes plantares. plantear no sólo el abordaje clínico sino también la proposición terapéutica. Si bien los factores etiológicos de las heterometrías funcionales pueden presentarse en Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova Heterometrías de extremidades inferiores cualquier período de la vida, lo más normal es que la causa de las heterometrías estructurales se de durante la infancia, cuando el crecimiento y la diferenciación celular sean capaces de verse alteradas con mayor facilidad por cualquier agente causal. En este último caso existen dos posibilidades de afectación; la inhibición o la estimulación del cartílago de crecimiento, lo que llevará acortamientos o alargamientos del miembro en cuestión por causas como; Anomalías congénitas, donde los acortamientos pueden aparecer por problemas como luxaciones o subluxaciones de cadera. Infecciones osteoarticulares, ya que procesos tuberculosos u osteomielíticos pueden llevar al acortamiento del miembro. No obstante afectaciones directas del cartílago de crecimiento tales como; osteomielitis metafisaria o sinovitis crónica pueden estimular su función y crear una hiperemia local, lo que consecuentemente se acompaña de un crecimiento exacerbado, es decir un alargamiento del miembro. Los problemas traumáticos pueden ser origen de acortamientos o alargamientos dependiendo del lugar de la fractura, de la formación del callo óseo y del proceso de remodelación del hueso. En casos en los que la fractura afecte a la zona metafisaria del hueso, la consecuencia es el alargamiento del mismo. No ocurre lo mismo cuando la fractura afecta a la diáfisis de los huesos largos. Otras alteraciones como la poliomielitis y la inmovilización prolongada de miembros en niños de corta edad, como por ejemplo en la enfermedad de Perthes, coxalgias, etc…suelen ser causas comunes de acortamientos, así como los tumores óseos de afectación metafisaria, que no solo pueden estimular el cartílago de crecimiento, sino también inhibirlo o incluso destruirlo7. En el caso de las heterometrías funcionales, la causas suelen ser posicionamientos anormales en cualquiera de los segmentos de la extremidad afecta tales como; Básculas pélvicas por contracturas musculares, atrofias de algún músculo o grupo muscular, movimientos asimétricos de las articulaciones tanto de la cadera, como de la rodilla, el tobillo o las articulaciones del pie. En alguna ocasiones las alteraciones de la rodilla asimétricas tanto en el plano frontal, como en el sagital (genu varo, valgo, flexo o recurvatum), así como los posicionamientos asimétricos del pie (talus, equino, retropié varo o retropié valgo). No obstante cualquier alteración que modifi- que el ángulo de marcha durante la dinámica de una extremidad puede ser el factor etiológico de una heterometría funcional. Independientemente de si la discrepancia de longitud es real o aparente, las consecuencias y compensaciones que se dan en el sistema musculoesquelético, van a ser comunes. Desde las basculaciones pélvicas que pueden llevar a contracturas musculares fijas, pasando por las compensaciones del raquis mediante dobles curvaturas de la columna vertebral, alteraciones del centro de gravedad con su consecuente incremento de la fatiga muscular, hasta llegar a la asimetría de apoyos a nivel de los miembros inferiores. Lo más común es que el paciente tienda a compensar mediante una posición en equino o varo de la pierna más corta, para intentar alargar funcionalmente esta extremidad, mientras que el patrón pronador se hace frecuentemente visible en compensaciones de la pierna más larga1,8. EXPLORACIÓN Y DIAGNÓSTICO DE UNA HETEROMETRÍA En cualquier caso e independientemente de que se trate o no de una alteración estructural o funcional, es necesario ser muy cuidadosos con la anamnesis. En estos casos se debe hacer hincapié fundamental en los antecedentes de fracturas o traumatismos sufridos por el paciente, así como en el posible diagnóstico de alteraciones neurológicas o antecedentes familiares. Antes de recurrir a cualquier prueba tanto exploratoria o complementaria, será necesario una inspección que permita descartar el desequilibrio entre la longitud de los miembros tales como; altura de pliegues anatómicos y principales estructuras colaterales (pliegues glúteos y mamarios, huecos poplíteos, altura de rótulas, posición escoliótica, asimetría en la musculatura bilateral, etc.). Una vez que tras la inspección se confirma la discrepancia de simetría, será necesario realizar un diagnóstico diferencial entre si la afectación se encuentra en el raquis o en los miembros inferiores9. Para ello se puede recurrir a pruebas exploratorias simples, como pueden ser el uso de la plomada para descartar irregularidades en la alineación vertical de la columna vertebral o las mediciones directas de los miembros, así como el test de Allis Fisioterapia 2007;29(2):99-105 103 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 104 B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova Heterometrías de extremidades inferiores para descartar heterometrías reales por acortamiento anatómico del miembro en cuestión10. En caso de no encontrar signos clínicos compatibles con discrepancia real de longitud, es necesario plantarse la causa funcional de la alteración. Para ello y orientado a la exploración cobra principal importancia la realización de valoraciones orientadas a la simetría de rangos de movilidad articular (cadera, rodilla, tobillo, subastragalina y mediotarsiana como articulaciones directamente implicadas en las compensaciones biomecánicas del miembro inferior), así como a la valoración de contracturas musculares existentes y balances musculares de musculatura implicada directamente el la realización de la marcha normal y el mantenimiento de la estática11. En casos en los que sea necesario apoyarse en pruebas complementarias para llegar a un diagnóstico definitivo se encuentra indicada la solicitación de pruebas radiológicas (telemetría o telerradiografía), donde la medición de los miembros inferiores se pueda realizar más objetivamente, así como la valoración de la posición y alineación de la columna vertebral12. En la exploración dinámica podemos observar unos patrones que si bien van a variar en aparición dependiendo del grado de afectación de la patología, suelen mantenerse constantes. Durante la marcha el miembro más corto posee una mayor distancia hasta llegar al suelo durante la fase tardía de balanceo que el contralateral. Esto implica un aumento de las fuerzas reactivas del suelo al contacto con la extremidad. Muchos pacientes intentan suavizar estas fuerzas enlenteciendo el descenso de la pierna hacia el suelo a partir de una contracción excéntrica de la musculatura abductora de la cadera, lo que puede desencadenar en contracturas musculares mantenidas y en consecuencia una fijación de la deformidad. En algunas ocasiones se puede desarrollar a consecuencia de esto, patrones de marcha en abducción del miembro implicado (patrones de marcha abductores asimétricos). Otros patrones comunes de acortamiento funcional del miembro pueden ser la hiperextensión de la rodilla y la posición en varo del talón, que en algunas ocasiones se acompaña del equino de tobillo en un intento de alargar la extremidad. No obstante no sólo es la pierna corta la que sufre de modificaciones biomecánicas. En la pierna más larga el arco de movimiento durante el período oscilativo es mayor, por lo que no es de extrañar que el individuo tienda a flexionar en exceso la rodilla para reducir ese tiempo, en un intento de acortar el miembro. Este movimiento puede aumentar excesivamente las fuerzas compresivas en la articulación de la rodilla y el concreto en la articulación patelofemoral, lo que puede desencadenar patología dolorosa a ese nivel. En el pie la forma más coherente de intentar el acortamiento se realiza a partir de un aumento en el rango de eversión de la articulación subastragalina. Esto ayuda al paciente a nivelar la pelvis4. La propuesta terapéutica dependerá del la clase de heterometría; estructural o funcional. El tratamiento de una discrepancia estructural en la longitud de los miembros, deberá ir encaminado a acercar el plano del suelo hacia el pie del miembro más corto. La mejor manera de conseguirlo es la colocación de una pieza que eleve el talón (alza). La mejor manera de encontrar la altura idónea del alza se realiza mediante la colocación de varias tablillas de distintas alturas y realizando al mismo tiempo evaluaciones con cada una de ellas. El alza adecuado será aquel que tras su colocación se pueda observar similar altura en la crestas ilíacas, así como la recolocación de la columna vertebral paralela con la vertical al suelo. Una de las contraindicaciones de este tratamiento es la irreductibilidad de la columna lumbar, lo que impide su realineación. La diferencia fundamental con el tratamiento de una heterometría funcional es que en este caso, la terapéutica irá orientada a compensar la pronación asimétrica. En la mayoría de los casos una buena compensación termina con la sintomatología dolorosa en la columna lumbar4,6,8. Fisioterapia 2007;29(2):99-105 CONCLUSIONES Es importante realizar un diagnostico diferencial entre las heterometrías estructurales y las funcionales. La diferenciación de ambos tipos permitirá plantear el tratamiento ortésico mas adecuado. En caso de constatar la diferencia de longitud de los miembros inferiores, la telemetría se evidencia imprescindible para valorar el grosor del alza que se deberá incluir en el soporte. La heterometría funcional se debe principalmente a la pronación asimétrica, por lo que el tratamiento deberá centrarse en el pie que presenta el exceso de pronación. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Heterometrías de extremidades inferiores B. Gómez Martín R. Sánchez Rodríguez A. Martínez Nova 105 BIBLIOGRAFÍA 1. Lafuente G, Espinosa I, Martínez L, Palomo I, Ramos J, Salcini JL. Dismetría y Equino. Estudio y compensación ortopodológica. Revista Española de Podología. 2000;11(1):28-34. 2. Albiol JM, Marugan M, Oller A. Repercusión de las dismetrías en el raquis. El Peu. 1994;58:28-41. 3. 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