EL AGOTAMIENTO DE LOS RECURSOS ENERGÉTICOS Y EL FUTURO DE LA SOCIEDAD SILVA, Carlos Mauricio Instituto Politécnico Superior "General San Martín", Rosario, Santa Fe Profesor Guía: FARINA, Juan Alberto INTRODUCCIÓN Alrededor del siglo - XXXV una civilización mesopotámica inventó la rueda. Más de cinco mil quinientos años de historia de la humanidad han demostrado que el hombre ha aprendido a adaptarse al medio utilizando su inteligencia, fabricando herramientas, procurándose alimentos y abrigo. Fue el Australopithecus, quien inventó el primer arma, el primero que para defenderse de otras especies utilizó una piedra. La alimentación y el abrigo constituían todas las necesidades del ser humano. Con el descubrimiento del fuego estas necesidades debieron verse aliviadas, pero es evidente que en realidad cada progreso se ha debido a que el hombre descubría cosas que, pensaba, les servirían para aliviar el hambre y protegerse de las inclemencias del tiempo. Luego llega la invención de la escritura y la utilización de los metales. El hombre ha aprendido a manejar una infinidad de materiales, ha logrado entender por qué ocurren las cosas en la naturaleza y gracias a su ingenio es el que domina actualmente casi la totalidad de la superficie terrestre habitable. Desde la invención de la rueda hasta el año 1957 en el que los rusos pusieron en órbita el Sputnik I, inaugurando la era espacial la inventiva humana ha venido avanzando a pasos agigantados y aún hoy, no dejan de sorprendernos los nuevos inventos que salen al mercado. Es importante aclarar que todos estos inventos deben ser utilizados aplicándoles alguna forma de energía, ya sea mediante la fuerza muscular del hombre o los animales, aprovechando la gravedad, el agua o el viento, etc. Cuando en el año 2005 se nos propuso, en el marco de la asignatura Tecnologías de la Energía, realizar una monografía acerca de algún tema referido a la energía, decidí trabajar el asunto de las crisis energéticas desde el punto de vista de la educación en las escuelas y por los medios masivos de comunicación. Sabía que para satisfacer las múltiples necesidades del hombre actual se estaba utilizando una gran cantidad de energía sin conciencia del derroche. Revisando el tema para realizar esta monografía me di cuenta que no había pensado en qué sucedería si se agotaran los recursos energéticos no renovables. ¿Cómo se modificarían las necesidades del hombre a partir de la falta de recursos energéticos? ¿Qué cambios sufriría su modo de vida si no se resuelve ese problema? El objetivo de esta monografía es buscar una respuesta a estas preguntas haciendo notar cuáles son las energías que corren más riesgo de agotarse y cuál es la importancia actual de cada una de ellas. DESARROLLO Podemos imaginar la vida de los hombres primitivos. Salir a cazar, comer, dormir; al otro día volver a salir de caza. Parece fácil pero, ¿podríamos imaginarnos a nosotros mismos viviendo como ellos? Sin radio, televisión, la cocina con gas natural, sin lámparas eléctricas, nos resulta muy difícil imaginar la vida. Las necesidades de estos hombres nómades se han ampliado. A comer y resguardarse se le ha agregado el confort. Apretamos una tecla y tenemos luz. Marcamos un número y podemos comunicarnos con un amigo en cualquier parte del mundo. Ya vemos cómo la energía juega un papel muy importante en nuestras vidas, tanto que no podríamos vivir sin utilizarla. El último informe del Consejo Mundial de Energía (WEC), estima que “el consumo global de electricidad puede llegar a incrementarse en aproximadamente un 75% para el año 2020 y prácticamente triplicarse para el 2050. En Argentina se calcula que el consumo para el 2010 podría llegar a duplicar los valores actuales. Países en desarrollo como Bangladesh y Tanzania consumen actualmente menos de 100 kWh por año y por persona, en Argentina el consumo es de aproximadamente 1500 kWh, mientras que en países como Canadá y Suecia se llega hasta 15.000 kWh. Mientras que no existen casi controversias sobre el aumento en la demanda de la energía eléctrica, el debate que se plantea es de donde provendrá esta electricidad” (CNEA, 2005). Las formas de generar energía útil actualmente, pueden diferenciarse en las utilizadas en forma masiva denominadas “energías tradicionales” (mediante la combustión de petróleo, carbón, gas natural, etc., la nuclear y la hidroeléctrica) y las que se encuentran en una fase de investigación y cuya aplicación se halla en sus primeras etapas conocidas como “energías limpias" o “nuevas energías” (geotérmica, eólica, mareomotriz, solar, etc.). Más de la mitad de las fuentes de energía utilizadas mundialmente corresponden a los combustibles fósiles, mientras que poco más de un cuarto está representada por la nuclear y la hidroeléctrica en proporciones semejantes. Sólo un 1% corresponde a las denominadas "energías limpias". Cada una tiene sus ventajas y desventajas, por lo que para su correcta utilización, éstas deben conocerse muy bien. Además, la posibilidad de instalar una central depende de los recursos existentes en la zona. No se puede instalar una central hidroeléctrica en una zona de llanura y sin ríos caudalosos. En el caso de grandes centrales, pueden producir impactos ambientales importantes en los ecosistemas alterando el microclima de la región en cuanto a humedad y temperatura. La producción de energía eólica esta condicionada a la intermitencia de los vientos, además produce contaminación sonora, por lo que los aerogeneradores deben ubicarse lejos de las áreas urbanas. La energía solar depende siempre de las variaciones en la radiación solar y no es aplicable en todas partes. Para su explotación en gran escala se necesitan grandes superficies de captación. Su instalación es sumamente costosa. Las centrales térmicas están muy bien desarrolladas pero provocan graves problemas ambientales por la liberación de CO2 y otras sustancias contaminantes. Los sitios apropiados para la producción de energía geotérmica son escasos y su tecnología aún está en desarrollo. La energía mareomotriz puede producir impacto ambiental en algunos ecosistemas. Como la anterior, sólo es aplicable en determinados lugares. La instalación de una central nuclear es sumamente costosa. Durante su correcto funcionamiento no produce ningún tipo de impacto ambiental. La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) explica detalladamente que las tres objeciones que se le hace a la opción nuclear (la incorrecta asociación de tecnología nuclear con el armamento nuclear, el temor a los posibles accidentes y la eliminación de los residuos producidos por la generación de energía) son fundadas en el temor popular y que han sido superadas. Teniendo en cuenta las ventajas y desventajas de cada forma de generación se puede decir que todas las fuentes de energía son necesarias pues con la central nuclear se puede producir la cantidad de energía base que se consume pero con ella no se pueden seguir las variaciones de demanda de la red, y para ello se necesita una hidroeléctrica o una térmica en la que se puede ir variando la potencia que se produce. Esto es lo que se llama producción de punta. La biomasa y la producción de biocombustibles merecen una mención aparte. Mediante la transformación de residuos sólidos urbanos y productos agrícolas se puede obtener combustibles sólidos como carbón vegetal, líquidos como alcohol, biodiesel, etc. y también biogás. De su combustión puede obtenerse energía eléctrica. Esto ayuda a disminuir la contaminación. Además se pueden aprovechar grandes terrenos que no son útiles para otros cultivos. En el caso de los biocombustibles, no contribuye al efecto invernadero porque el CO2 que se libera en su combustión es el mismo que captó durante su desarrollo. Es importante remarcar que esta tecnología aún se está perfeccionando. Se prevé que en 2007 la producción de biodiesel alcanzará los 15 millones de toneladas. En Argentina se ha anunciado la instalación, por parte de diferentes empresas, de más de 5 plantas de producción con un monto de 40 millones de dólares por planta. "De todos modos, si bien en el país se está tratando de pasar de una etapa artesanal a una de mayor escala, se trata de un proceso incipiente, con más interrogantes que seguridades" (La Capital, 2006). Parece evidente que los combustibles fósiles se agotarán muy pronto, y que su utilización tanto para producir electricidad como para calefacción y combustión de motores deberá reemplazarse. Sin embargo la concientización no llega a todos como deberíamos esperarlo. Son muy pocas las personas que apagan las luces cuando no son necesarias, que no utilizan estufas de cuarzo, que manipulan las heladeras correctamente y apagan correctamente todos los artefactos eléctricos (los que al dejarse en Standby siguen consumiendo energía), sabiendo que la mayor parte de la producción de energía eléctrica es térmica. Básicamente, el ahorro de energía se encuentra con una barrera conformada por la falta de información del consumidor final, la inexistencia de productos eficientes y las imperfecciones del mercado. Respecto a la información, ésta se consigue promoviendo la enseñanza de las tecnologías de la energía en las escuelas secundarias o medias y confeccionando folletos, publicidades, etc., en los medios masivos de comunicación. A partir de 1973 (año en que la crisis energética fue muy importante) los planes energéticos comenzaban a tener en cuenta la reducción de importaciones de petróleo mediante ahorro y sustitución de éste como fuente principal de energía, sistemas de premios y castigos, una vuelta a la extracción y utilización del carbón como recurso energético, la construcción (o desarrollo) de centrales nucleares, refuerzo de investigación y mentalización en el uso adecuado de la energía. Además se crearon instituciones internacionales para fomentar el desarrollo de la energía teniendo en cuenta el cuidado ambiental, promoviendo el reciclaje y la cogeneración y el desarrollo de diversos sistemas que lograran el uso eficiente de la energía. Actualmente la energía más barata de la que se nutre el Mercado Eléctrico Mayorista en Argentina (MEM) es la hidroeléctrica, pero ya hemos visto que esta está condicionada a las cuencas hídricas, y en épocas de sequía debe ser reemplazada. En 1999 la Secretaría de Energía ante el déficit de las presas hidráulicas había resuelto que las usinas térmicas debían contar con reservas fijas de combustible puesto que al requerir el MEM energía de estas centrales se encontraba con que el aprovisionamiento de gas a los generadores de electricidad había sido interrumpido con los fuertes fríos para dar prioridad al consumo hogareño. Otro de los problemas es la competencia entre empresas de transporte de energía primaria. En el noroeste argentino tres empresas competían en la construcción de gasoductos internacionales para cubrir la demanda de energía en el Norte Grande de Chile para el año 2000. Los intentos de asociación habían fracasado pero las tres empresas sabían que sus proyectos no eran redituables si se mantenían todas firmes. Es importante darse cuenta que en esos casos es el gobierno el encargado de una decisión fuerte en esta materia, pues no puede arriesgarse una sobreproducción de más de 1000 MW por los intereses económicos de empresas nacionales o extranjeras. Cuando las reservas de combustibles fósiles se agoten nos encontraremos con que las centrales térmicas quedarán obsoletas. El combustible nuclear, aunque a largo plazo, también disminuirá su cantidad. Sabemos que el biogás no podrá cubrir la demanda; tampoco las llamadas "energías limpias" que estarán condicionadas a superficies ideales, horarios y condiciones climáticas. Imaginemos el caso de un náufrago en una isla desierta. Esta persona deberá, en su estado desesperante buscar alimento, un abrigo para las tormentas, aprender a hacer fuego y protegerse de los animales salvajes. Una persona en este estado no se preocupará por el confort. Una vez dominada la situación se acostumbrará a esa vida. Ahora bien, sumemos el caso de agotarse los recursos energéticos no renovables al caso del náufrago. Imaginemos que todo un país se quedara sin energía eléctrica no por una hora, sino por un año. Los primeros meses les costará acostumbrarse, pero utilizando una energía limpia podrá activar al menos una serie de fábricas, que, utilizando sus máquinas fabriquen baterías para todos los artefactos eléctricos. Pueden incorporarse células fotovoltaicas en los hogares, aerogeneradores en zonas de muchos vientos, etc., y, por supuesto, no hay que olvidar que parte de la demanda será cubierta por las centrales hidroeléctricas. CONCLUSIÓN En vista de lo enunciado anteriormente puedo decir que ciertamente la vida después de agotarse los recursos energéticos no renovables será más difícil para el hombre ya que se ha acostumbrado a sus artefactos eléctricos, las computadoras, la televisión, etc. En ese futuro cercano será muy difícil cubrir la demanda de energía y las alternativas propuestas actualmente no son ciertamente las más viables. El problema del desarrollo económico energético trasciende los límites de las exportaciones e importaciones de hidrocarburos. Este es un problema mundial y es necesario que la conciencia en este aspecto sea colectiva. Ante el panorama que se presenta opino que no habrá inconvenientes en encontrar una solución al uso indiscriminado de la energía con la intervención del Estado y podrá prolongarse en mucho tiempo la duración de los recursos no renovables. No hay dudas de que el hombre ha cambiado su forma de ver la vida con la utilización de la energía pero estoy seguro que aún cuando se acaben los recursos no renovables el desarrollo de su civilización continuará avanzando a pasos agigantados. BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA · DICCIONARIO ENCICLOPÉDICO SALVAT, Tomo 10. (1987), Salvat Editores, Barcelona. · ENCICLOPEDIA SALVAT DE CIENCIA Y TÉCNICA. (1986), Salvat Editores, Barcelona. · REVISTA MEGAVATIOS Nº 221. (1999), Editorial Edigar, Buenos Aires. · FABIANA MONTI. “Biodiesel: Argentina busca subirse al tren”. Diario La Capital, Sección Economía. Rosario, 25/06/2006. EN INTERNET: · Secretaría de Energía – República Argentina: http://energia.mecon.gov.ar · Comisión Nacional de Energía Atómica: http://www.cnea.gov.ar · Diario La Capital en Internet: http://www.lacapital.com.ar · BBC Mundo en Internet “Previsiones para vivir sin petróleo". Sección Ciencia y tecnología: http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/default.stm · Patricio Barros “Historia de los inventos”: http://librosinteresantes.ifrance.com/inventos/index.html · Asignatura Tecnologías de la Energía. Instituto Politécnico Superior “General San Martín”. UNR: http://www.ips.edu.ar -http:// ar.geocities.com/tecnologiasdelaenergia/ · Carlos Silva. “Enseñanza de la energía y alternativas energéticas”. Monografía escrita para la asignatura “Tecnologías de la Energía” del IPS -UNR (2005); en http://ar.geocities.com/carlosilva22ar/energía.pdf