TEMA 1º ¿QUÉ ES LA FE? Comenzamos invocando al Señor: Ven, Espíritu Santo, Llena los corazones de tus fieles Y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía, Señor, tu Espíritu. Que renueve la faz de la Tierra. Amen. PREGUNTA 1ª: ¿QUÉ ES LA FE PARA MI? Pensamos un poco la respuesta y hacemos una lluvia de ideas sobre la fe. Es importante que reflexionemos sobre lo que pensamos, sentimos o creemos que es la fe. Seguro que entre todos somos capaces de dibujar un precioso retrato sobre esta virtud tan importante y necesaria. Muchas ideas están repetidas. Pero este es el resumen de todo lo que habéis dicho. La fe es: -Una fuerza -Confiar, fiarse de Dios, como un niño (fiarse del piloto) -Nos ayuda a crecer -Una “herencia” de nuestros padres y de otras personas -“Saber” que Dios nos ama, a pesar de nuestras imperfecciones -Un don o regalo de Dios, que debo alimentar y hacer crecer -Una “descarga eléctrica” -Una relación de amor -Una gracia de Dios en el Espíritu que nos lleva a confiar en Jesús -El Sentido de la vida -Alegría en la vida -Agradecimiento al Señor que me ha salvado -Creer sin entender -Fe inmadura y fe madura -Dejarse guiar -La certeza de que Él no nos abandona -Una responsabilidad que hay que trabajar -“Los ojos del alma” -Descansar en Él -Creer también en nosotros mismos -Fiarse de Dios y Él de mí Hemos dicho muchas cosas acertadas. No vamos desencaminados, pero creo que hay que afinar un poco más. Al igual que nuestras madres en la tierra, nuestra Madre la Iglesia nos enseña a creer, a tener fe... 1 VAMOS A VER EL VIDEO 1º ¿QUÉ ES LA FE? Os ruego que lo veáis una o varias veces y me digáis si hay algo nuevo que no se haya dicho con claridad, acerca de lo que es tener fe... https://www.youtube.com/watch?v=OzQwvtwiW3s Esta es la 2ª cuestión: ¿Hay algo nuevo en el vídeo acerca de lo que es tener fe que no se haya dicho con claridad en las respuestas anteriores? Os mando una reflexión que acabo de poner por escrito por si os ayuda. Se trata de volver a los comienzos, a los orígenes del cristianismo... Este no es el tema, es simplemente una iluminación desde la historia por si os ayuda a entender y a comprender mejor la FE... EL KERYGMA Y EL CATECUMENADO EN LA IGLESIA PRIMITIVA Existe una gran admiración acerca de los inicios del cristianismo: ¿Cómo unos pocos desconocidos y de clase baja pudieron en unas décadas llegar a todos los rincones del Imperio, y en tres siglos evangelizar el Imperio romano, tan pagano y poderoso? No cabe duda que lo primero fue el celo que infundió el Espíritu Santo en estos primeros cristianos. Tenían conciencia clara de que Jesús estaba vivo y de que su Espíritu les acompañaba. Al principio eran poquitos los que deseaban hacerse cristianos, y la Iglesia los incorporaba en su seno, en sus comunidades, y allí aprendían a creer y a vivir en cristiano. Pero cuando el número fue creciendo, hacia el siglo II y III, la Iglesia inventó el CATECUMENADO: un proceso de 2 o 3 años en el que una persona que era pagana aprendía el Evangelio, la Historia de la salvación, las bienaventuranzas, el padrenuestro... Sólo después de ese aprendizaje, se le admitía a los SACRAMENTOS y desde ese momento entraba a formar parte de la comunidad, de la Iglesia, antes no. Los cristianos no dejaban de anunciar el KERYGMA. El anuncio o kerygma es un resumen del Evangelio, una especie de Credo muy básico, con unas cuantas ideas: 1º) DIOS TE AMA: Él te ha creado y ha enviado a su Hijo para salvarte 2º) La prueba de que Dios te ama es que JESÚS HA MUERTO POR TI, para darte el perdón de tus pecados, con su Resurrección. 3º) Si CREES EN JESÚS su Espíritu viene a habitar en ti, se te personan los pecados y cambia tu vida. Nunca estarás solo, descubrirás la Presencia de Dios en ti… 2 4º) Para ello, es necesaria la CONVERSIÓN: tienes que cambiar de vida y vivir y pensar como Jesús, dejándote guiar por su Espíritu. Los que creían este anuncio eran llamados SIMPATIZANTES. Si se presentaban en la comunidad y pedían entrar en la Iglesia, no entraban al día siguiente, sino que la Iglesia los admitía en el CATECUMENADO o escuela de la fe. Allí tenían que estar dos o tres años preparándose para ser cristianos, es decir, conociendo y aprendiendo a ser como Jesús. La ceremonia de admisión al Catecumenado se hacía un Domingo en la Iglesia. Desde hace unas décadas, se ha recuperado para los adultos que piden el Bautismo. El sacerdote sale a la puerta del templo y les pregunta a los simpatizantes: +Sacerdote: ¿Cómo te llamas? -Simpatizantes: Cada uno decía su nombre +Sacerdote: ¿QUÉ PEDÍS A LA IGLESIA DE DIOS? -Simpatizantes: LA FE +Sacerdote: ¿QUÉ OS OTORGA LA FE -Simpatizantes: LA VIDA ETERNA +Sacerdote: Dios ilumina a todo hombre que viene a este mundo y le manifiesta lo que permaneció invisible desde la creación del mundo para que aprenda a dar gracias a su Creador. A vosotros, pues, que habéis seguido su luz, he aquí que ahora se os abre el camino del Evangelio, para que sobre el fundamento de la fe, conozcáis al Dios vivo, que habla en verdad a los hombres; y para que caminéis en la luz de Cristo, confiéis en su sabiduría, y pongáis vuestra vida en sus manos cada día, y podáis creer de todo corazón en él. Éste es el camino de la fe, por el cual Cristo os conducirá en la caridad, para que tengáis la vida eterna, ¿estáis, pues, preparados para empezar hoy, guiados por él, ese camino? -Simpatizantes: Estoy preparado. +Sacerdote: Vosotros, PADRINOS, que nos presentáis a estos candidatos, y, vosotros, HERMANOS TODOS, aquí presentes, que les habéis oído renunciar a esos cultos, ¿sois testigos de que estos candidatos han elegido a Cristo, el Señor, y quieren servirle a él sólo? Todos: Somos testigos. +Sacerdote: ¿Estáis dispuestos para ayudarlos a buscar a Cristo y a seguirle? Todos: Estamos dispuestos. 3 +Sacerdote: Padre de bondad, te damos gracias por estos hijos tuyos que atendiendo a tu solicitud y movidos por tu gracia te buscan y públicamente han respondido hoy a tu llamada. Por eso todos nosotros te alabamos y te bendecimos, Padre de bondad. Todos: Te alabamos y te bendecimos, Padre de bondad. Después se les hacía la señal de la Cruz a todos los candidatos y pasaban a la Iglesia. Se sentaban en los primeros bancos, y escuchaban las lecturas, el Evangelio y la homilía. Después de la homilía eran despedidos, pues aún no podían proclamar el CREDO (la fe de la Iglesia) ni hacer la oración de los fieles (pues aún no eran fieles de Cristo), y mucho menos participar en el resto de la Misa, hasta que no recibieran los sacramentos del Bautismo, de la Confirmación y de la Eucaristía. LA FE ES LA RESPUESTA A LA REVELACIÓN DE DIOS En el cristianismo, lo primero de todo es la REVELACIÓN DE DIOS. Dios no sólo nos ha creado, también nos ha hablado, ha querido mostrarnos como es El y como somos nosotros. El se ha mostrado y ha salido a nuestro encuentro. Dios quiso iluminar nuestra oscuridad: reveló sus secretos en la Sagrada Escritura y nos envió a su Hijo Jesucristo. Es importante entender este proceso de REVELACIÓN: Dios se ha ido mostrando y se ha ido dando a conocer a los seres humanos a lo largo de la historia. Antiguamente revelábamos los carretes de las fotos. De un negativo oscuro salían unas preciosas fotos. Así es Dios: un misterio oscuro que poco a poco se ha ido dando a conocer, se ha ido revelando, desvelando... La historia de la salvación es un álbum de fotos, cada vez mejores, de Dios... La vida y mensaje de Jesus constituyen las mejores fotos de ese álbum... En El vemos clara y perfectamente a Dios. Quien ha visto a Jesus, ha visto a Dios... La FE es la RESPUESTA DEL HOMBRE a esa Revelación de Dios: Responder a Dios, creer en Él y en su Palabra y disponerse a seguirle es tener FE. La fe no la construye e inventa cada persona, sino todo lo contrario: DIOS ES LA VERDAD, ES EL PRIMERO, EL SEÑOR... Y nosotros lo acogemos, lo escuchamos, lo recibimos... Esta Revelación se halla en la Palabra de Dios... De ahí la importancia de escuchar... ESCUCHA, ISRAEL, EL SEÑOR TU DIOS ES UNO: AMARÁS 4 AL SEÑOR CON TODAS TUS FUERZAS, CON TODS TU ALMA, CON TODO TU SER, CON TODO TU CORAZON... LOS RASGOS DE LA FE La FE, según el Youcat, tiene siete rasgos: 1. Es un DON DE DIOS, que recibimos, si lo pedimos ardientemente. 2. Es la fuerza sobrenatural NECESARIA para obtener la salvación. 3. Exige la VOLUNTAD LIBRE y el ENTENDIMIENTO lúcido del hombre cuando acepta la invitación divina. 4. Es absolutamente CIERTA, porque tiene la garantía de Jesús. 5. Es incompleta mientras no sea efectiva en el AMOR. 6. AUMENTA si escuchamos con más atención la voz de Dios y si mediante la oración estamos en un intercambio vivo con él. 7. Nos permite ya ahora GUSTAR POR ADELANTADO LA ALEGRÍA DEL CIELO. LA FE COMO UNA RELACIÓN PERSONAL CON DIOS A mí me encanta la definición que da el YOUCAT acerca de la fe. El YOUCAT es un catecismo para jóvenes que Benedicto XVI regaló a los jóvenes de la JMJ 2011 en Madrid. Me refiero a Youcat 22 que presenta la fe como una relación personal con Dios: QUIEN CREE BUSCA UNA RELACIÓN PERSONAL CON DIOS y está dispuesto a creer todo lo que Dios muestra (revela) de sí mismo. Al comienzo del acto de fe hay con frecuencia una conmoción o una inquietud. El hombre experimenta que el mundo visible y el transcurso normal de las cosas no pueden ser todo. SE SIENTE TOCADO POR UN MISTERIO. Sigue las pistas que le señalan la existencia de Dios y paulatinamente logra la confianza de dirigirse a Dios y finalmente de adherirse a él libremente. En el evangelio de san Juan leemos: «A Dios nadie lo ha visto jamás: Dios unigénito, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer» (Jn 1,18). Por eso debemos creer en Jesús, el Hijo de Dios, si queremos saber qué nos quiere comunicar Dios. Por eso CREER ES ACOGER A JESÚS Y JUGARSE TODA LA VIDA POR ÉL. La persona que mejor ha centrado esta cuestión ha sido el Papa humilde Benedicto XVI: «No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva». 5 El Papa Francisco cita en varias ocasiones este texto y estas ideas: “Invito a cada cristiano, en cualquier lugar y situación en que se encuentre, a renovar ahora mismo su encuentro personal con Jesucristo o, al menos, a tomar la decisión de dejarse encontrar por Él, de intentarlo cada día sin descanso. No hay razón para que alguien piense que esta invitación no es para él, porque «nadie queda excluido de la alegría reportada por el Señor». Al que arriesga, el Señor no lo defrauda, y cuando alguien da un pequeño paso hacia Jesús, descubre que Él ya esperaba su llegada con los brazos abiertos. Éste es el momento para decirle a Jesucristo: «Señor, me he dejado engañar, de mil maneras escapé de tu amor, pero aquí estoy otra vez para renovar mi alianza contigo. Te necesito. Rescátame de nuevo, Señor, acéptame una vez más entre tus brazos redentores». ¡Nos hace tanto bien volver a Él cuando nos hemos perdido! Insisto una vez más: Dios no se cansa nunca de perdonar, somos nosotros los que nos cansamos de acudir a su misericordia. Aquel que nos invitó a perdonar «setenta veces siete» (Mt 18,22) nos da ejemplo: Él perdona setenta veces siete. Nos vuelve a cargar sobre sus hombros una y otra vez. Nadie podrá quitarnos la dignidad que nos otorga este amor infinito e inquebrantable. Él nos permite levantar la cabeza y volver a empezar, con una ternura que nunca nos desilusiona y que siempre puede devolvernos la alegría. No huyamos de la resurrección de Jesús, nunca nos declaremos muertos, pase lo que pase. ¡Que nada pueda más que su vida que nos lanza hacia adelante!” (Evangelii Gaudium 3) RESUMEN FINAL ACERCA DE LA FE -La fe no nace de nosotros, no la inventamos y construimos nosotros, sino que viene de Dios, que se ha revelado, se ha dado a conocer… La fe viene de fuera, a través de testigos, a través de la Iglesia. San Pablo decía que la fe llega a través del oído: Al proclamarse la Palabra de Dios, el Evangelio, si la escuchamos con el corazón, se despierta la fe. -La fe es el regalo de Jesús a sus amigos, a los que creen en Él y le siguen. Nos da la verdad, porque viene de Jesús. -La fe es una relación viva con Jesús: Crece escuchando su Palabra, orando y dialogando con Él. -La fe nos permite sentir en algunos momentos la alegría del cielo, la alegría plena de Jesús. -No nos fuerza, sino que cuenta con nuestra voluntad y nuestra inteligencia. ¡Podemos cerrarnos a la fe! -La fe se demuestra en la vida de entrega y amor a Dios y a los demás. Una fe sin obras es una fe muerta. Pero la fe es la causa de las obras y no al revés. -La fe es una fuerza (=virtud) sobrenatural que nos da la salvación. 6 -El enemigo de la fe es el diablo que nos intenta confundir y desanimar en el seguimiento de Jesús. Nuestro Señor venció al diablo con la Palabra de Dios. Por eso la mejor arma que tenemos para crecer en la fe es la escucha, meditación y oración de la Palabra de Dios. -Es un don de Dios, que debemos pedirle continuamente. ORACIÓN DE LA FE PADRE DEL CIELO, te pido perdón por las cosas que he hecho mal en mi vida (Tómate unos momentos para pedir perdón por pecados concretos que estén pesando en tu conciencia) Por favor perdóname. Me arrepiento y dejo atrás todo aquello que sé que está mal y que me hace daño. Gracias por enviar a tu HIJO JESÚS para que pudiera recibir el perdón y la libertad y ser tu hijo. A partir de HOY, quiero seguirlo y obedecerlo como mi Señor. Gracias porque me ofreces el regalo de tu perdón y el don de tu ESPÍRITU SANTO. Recibo, ahora, ese don. Te pido que entres en mi vida, por medio del Espíritu Santo, y que permanezcas siempre conmigo. 7 TEMA 2º: CREO EN DIOS, PADRE TODOPODEROSO Aquí tenéis el 2º vídeo: CREO EN DIOS, PADRE TODOPODEROSO Hay un solo Dios y podemos conocerlo. Dios es Uno y Trino. Es Padre y es Todopoderoso. Dios es Amor https://www.youtube.com/watch?v=IzL0674VW1A ¿Quién es Dios? ¿Cómo te imaginas a Dios? ¿Qué es la Santísima Trinidad? Buscamos respuestas a preguntas de poca importancia. ¿Hay alguna pregunta capaz de cambiarnos la vida entera? Sí, hay una que encierra el secreto de nuestra existencia y nuestra felicidad. La gran pregunta es ¿EXISTE DIOS? De ella dependen nuestra vida, nuestra muerte, y un futuro que ni siquiera imaginamos. "Fuimos creados para Ti, Señor, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti" (San Agustín) Dios es Amor y por eso nos creó, y sembró en nosotros ansias de amor infinito, ansias que solo Él puede y quiere satisfacer. ¿Tendría sentido no creer en un Dios así? Dios desea que le amemos. Para amar a una persona necesitas conocerla, por eso Él nos reveló su intimidad, sus misterios... El mayor de ellos es éste: Él es un solo Dios en tres personas Padre, Hijo y Espíritu Santo. Tres personas, luego ¿tres dioses? No, mira. Así como en este triángulo ves tres ángulos iguales y cada uno abarca la totalidad de la superficie, así cada una de las tres divinas personas posee en plenitud la única naturaleza divina: Cada una de ellas es el Dios único. Si son iguales, entonces ¿Dios Padre no es aquel anciano con barba que nos pintan los cuadros? No. Eso es una representación artística. Las tres personas de la Trinidad se distinguen en sus relaciones recíprocas: El Padre engendra al Hijo. El Hijo es engendrado por el Padre. Y el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo. 8 ¿Y hacen cosas distintas? Las divinas personas actúan al unísono. Las tres tienen una misma naturaleza y un mismo obrar. Y sus obras son asombrosas. "...Porque para Dios no hay nada imposible" (Lucas 1,37) El poder de Dios es mayor que la fuerza de un volcán, de un tsunami... La omnipotencia de Dios es infinita, eterna, misteriosa, no tiránica... porque procede del Amor. Es Todopoderoso al crear el mundo y al hombre, pero también en la Encarnación y en la Resurrección de su Hijo, o en el perdón de los pecados... Creer que no hay Dios es hacer un acto de fe: fe en lo oscuro, en lo absurdo... Y creer en Dios ¿cómo me afecta? Si crees que tienes un Padre que te ama con locura y que además todo lo puede... Pues, lo primero será recurrir a su ayuda, darle gracias siempre, estar alegre y confiar en Él, pase lo que pase. CREO EN DIOS PADRE TODOPODEROSO. «CREO EN DIOS, PADRE TODOPODEROSO, CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA» Tomado del Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica 36. ¿Por qué la profesión de fe comienza con «Creo en Dios»? La profesión de fe comienza con la afirmación «Creo en Dios» porque es la más importante: la fuente de todas las demás verdades sobre el hombre y sobre el mundo y de toda la vida del que cree en Dios. 37. ¿Por qué profesamos un solo Dios? Profesamos un solo Dios porque Él se ha revelado al pueblo de Israel como el Único, cuando dice: «Escucha Israel, el Señor nuestro Dios es el Único Señor» (Dt 6, 4), «No existe ningún otro» (Is 45, 22). Jesús mismo lo ha confirmado: Dios «es el único Señor» (Mc 12, 29). Profesar que Jesús y el Espíritu Santo son también Dios y Señor no introduce división alguna en el Dios Único. 43. ¿Qué consecuencias tiene creer en un solo Dios? Creer en Dios, el Único, comporta: conocer su grandeza y majestad; vivir en acción de gracias; confiar siempre en Él, incluso en la adversidad; reconocer la unidad y la verdadera dignidad de todos los hombres, creados a imagen de Dios; usar rectamente de las cosas creadas por Él. 44. ¿Cuál es el misterio central de la fe y de la vida cristiana? 9 El misterio central de la fe y de la vida cristiana es el misterio de la Santísima Trinidad. Los cristianos son bautizados en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. 45. ¿Puede la razón humana conocer, por sí sola, el misterio de la Santísima Trinidad? Dios ha dejado huellas de su ser trinitario en la creación y en el Antiguo Testamento, pero la intimidad de su ser como Trinidad Santa constituye un misterio inaccesible a la sola razón humana e incluso a la fe de Israel, antes de la Encarnación del Hijo de Dios y del envío del Espíritu Santo. Este misterio ha sido revelado por Jesucristo, y es la fuente de todos los demás misterios. 46. ¿Qué nos revela Jesucristo acerca del misterio del Padre? Jesucristo nos revela que Dios es «Padre», no sólo en cuanto es Creador del universo y del hombre sino, sobre todo, porque engendra eternamente en su seno al Hijo, que es su Verbo, «resplandor de su gloria e impronta de su sustancia» (Hb 1, 3). 47. ¿Quién es el Espíritu Santo, que Jesucristo nos ha revelado? El Espíritu Santo es la tercera Persona de la Santísima Trinidad. Es Dios, uno e igual al Padre y al Hijo; «procede del Padre» (Jn 15, 26), que es principio sin principio y origen de toda la vida trinitaria. Y procede también del Hijo (Filioque), por el don eterno que el Padre hace al Hijo. El Espíritu Santo, enviado por el Padre y por el Hijo encarnado, guía a la Iglesia hasta el conocimiento de la «verdad plena» (Jn 16, 13). 48. ¿Cómo expresa la Iglesia su fe trinitaria? La Iglesia expresa su fe trinitaria confesando un solo Dios en tres Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Las tres divinas Personas son un solo Dios porque cada una de ellas es idéntica a la plenitud de la única e indivisible naturaleza divina. Las tres son realmente distintas entre sí, por sus relaciones recíprocas: el Padre engendra al Hijo, el Hijo es engendrado por el Padre, el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo. 49. ¿Cómo obran las tres divinas Personas? Inseparables en su única sustancia, las divinas Personas son también inseparables en su obrar: la Trinidad tiene una sola y misma operación. Pero en el único obrar divino, cada Persona se hace presente según el modo que le es propio en la Trinidad. 10 TEMA 3: CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA Un Dios que se revela y un libro como ningún otro Dios tiene que mostrarse (= REVELARSE) para que sepamos más sobre él. Y eso es lo que él hace. El Dios eterno y todopoderoso, que es incomprensible para nosotros los hombres, salió (y sale) de su silencio. Él se muestra. Dios da a conocer incluso sus pensamientos más íntimos. Nos deja mirar dentro de su corazón, si se puede hablar de "corazón" en el caso de Dios. Esto sucede en tu vida, pero también en la vida de todas las personas que escuchan la voz de Dios en la oración y que, en la historia de su vida, han buscado y buscan las huellas de Dios. En esto no empezamos de cero. La BIBLIA es el libro en el que podemos leer cómo Dios se mostró al principio en la historia del pueblo de Israel, cómo él se nos reveló a los hombres paso a paso, hasta que en Jesús expresó lo más profundo acerca de sí, lo grande que es su amor divino. Durante mucho tiempo los hombres sólo tuvieron ideas imprecisas acerca de Dios o de los dioses. Pueblos enteros consideraban a Dios un ser a quien había que ofrecer incluso sacrificios humanos, para alcanzar su benevolencia. Solamente en la vida del pueblo de Israel comienza a verse claro que Dios no es un monstruo de muchas cabezas, ante quien siempre hay que tener miedo. Que sólo hay un único Dios, que es bueno y fiel para con los que confían en él, esto se mostró en la vida de muchas personas concretas: madres, padres, hijos, profetisas y profetas, reyes y santos. Abraham descubrió a Dios bajo el cielo estrellado; Moisés lo conoció en la zarza ardiente. Ya conoces sus historias. Todas estas experiencias con Dios fueron escritas en un libro increíblemente rico y variado. El papa Benedicto XVI comparó una vez la Biblia con un jardín. Con un jardín claro y precioso, en que podemos encontrar los más profundos conocimientos sobre Dios como flores hermosas. Si leemos la BIBLIA y entramos por tanto en contacto con Dios, dice el papa, "entonces es como si paseáramos en el jardín del Espíritu Santo, nosotros hablamos con él y él habla con nosotros". (Tomado de Youcat. Libro de catequesis para la Confirmación, 22-23) EL RELATO BÍBLICO DE LA CREACIÓN (Gén 2,4-25) Y DEL PECADO ORIGINAL (Gén 3,1-15) En la Biblia, la creación es narrada de dos formas. La primera y más conocida se encuentra en Génesis capítulo 1º: Es la de los 7 días, cada día el Señor iba creando algo, el 6º día creó al hombre y a la mujer, y el 7º descansó. Esta 11 tradición es más moderna. Creemos que del siglo VI antes de Cristo, y está influenciada por las ideas de los babilonios, país de sabios que conquistó el Reino de Judá en el 587 antes de Cristo, y donde fueron desterrados los israelitas durante más de 50 años. La segunda tradición es más primitiva. Dios aparece como un personaje más que charla con Adán y Eva, se da paseos por las tardes con ellos para tomar el fresco… ¡Y estos se la juegan!. Se encuentra en Génesis 2, 4-25: La Creación de Adán y Eva. Aquí os dejo el relato: Esta es la historia del cielo y de la tierra cuando fueron creados. El día en que el Señor Dios hizo tierra y cielo, no había aún matorrales en la tierra, ni brotaba hierba en el campo, porque el Señor Dios no había enviado lluvia sobre la tierra, ni había hombre que cultivase el suelo; pero un manantial salía de la tierra y regaba toda la superficie del suelo. Entonces el Señor Dios modeló al hombre del polvo del suelo e insufló en su nariz aliento de vida; y el hombre se convirtió en ser vivo. Luego el Señor Dios plantó un jardín en Edén, hacia Oriente, y colocó en él al hombre que había modelado. El Señor Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles hermosos para la vista y buenos para comer; además, el árbol de la vida en mitad del jardín, y el árbol del conocimiento del bien y el mal. En Edén nacía un río que regaba el jardín, y allí se dividía en cuatro brazos: el primero se llama Pisón; rodea toda la tierra de Javilá, donde hay oro. El oro de este país es bueno; allí hay también bedelio y lapislázuli. El segundo río se llama Guijón; rodea toda la tierra de Cus. El tercero se llama Tigris y corre al este de Asiria. El cuarto es el Éufrates. El Señor Dios tomó al hombre y lo colocó en el jardín de Edén, para que lo guardara y lo cultivara. El Señor Dios dio este mandato al hombre: «Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol del conocimiento del bien y el mal no comerás, porque el día en que comas de él, tendrás que morir». El Señor Dios se dijo: «No es bueno que el hombre esté solo; voy a hacerle a alguien como él, que le ayude». Entonces el Señor Dios modeló de la tierra todas las bestias del campo y todos los pájaros del cielo, y se los presentó a Adán, para ver qué nombre les ponía. Y cada ser vivo llevaría el nombre que Adán le pusiera. Así Adán puso nombre a todos los ganados, a los pájaros del cielo y a las bestias del campo; pero no encontró ninguno como él, que le ayudase. Entonces el Señor Dios hizo caer un letargo sobre Adán, que se durmió; le sacó una costilla, y le cerró el sitio con carne. 12 Y el Señor Dios formó, de la costilla que había sacado de Adán, una mujer, y se la presentó a Adán. Adán dijo: «¡Esta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Su nombre será “mujer”, porque ha salido del varón». Por eso abandonará el varón a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne. Los dos estaban desnudos, Adán y su mujer, pero no sentían vergüenza uno de otro. ------------------Tras la descripción de la Creación, y especialmente de la creación de Adán y Eva, con nombre, la Biblia nos narra el PECADO ORIGINAL o PECADO DEL ORIGEN en Génesis 3,1-15: La serpiente era más astuta que las demás bestias del campo que el Señor había hecho. Y dijo a la mujer: «¿Conque Dios os ha dicho que no comáis de ningún árbol del jardín?». La mujer contestó a la serpiente: «Podemos comer los frutos de los árboles del jardín; pero del fruto del árbol que está en mitad del jardín nos ha dicho Dios: “No comáis de él ni lo toquéis, de lo contrario moriréis”». La serpiente replicó a la mujer: «No, no moriréis; es que Dios sabe que el día en que comáis de él, se os abrirán los ojos, y seréis como Dios en el conocimiento del bien y el mal». Entonces la mujer se dio cuenta de que el árbol era bueno de comer, atrayente a los ojos y deseable para lograr inteligencia; así que tomó de su fruto y comió. Luego se lo dio a su marido, que también comió. Se les abrieron los ojos a los dos y descubrieron que estaban desnudos; y entrelazaron hojas de higuera y se las ciñeron. Cuando oyeron la voz del Señor Dios que se paseaba por el jardín a la hora de la brisa, Adán y su mujer se escondieron de la vista del Señor Dios entre los árboles del jardín. El Señor Dios llamó a Adán y le dijo: «¿Dónde estás?». Él contestó: «Oí tu ruido en el jardín, me dio miedo, porque estaba desnudo, y me escondí». El Señor Dios le replicó: «¿Quién te informó de que estabas desnudo?, ¿es que has comido del árbol del que te prohibí comer?». Adán respondió: «La mujer que me diste como compañera me ofreció del fruto y comí». El Señor Dios dijo a la mujer: «¿Qué has hecho?». La mujer respondió: «La serpiente me sedujo y comí». El Señor Dios dijo a la serpiente: «Por haber hecho eso, maldita tú entre todo el ganado y todas las fieras del campo; te arrastrarás sobre el vientre y comerás polvo toda tu vida; pongo hostilidad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y su descendencia; esta te aplastará la cabeza cuando tú la hieras en el talón». 13 Conviene caer en la cuenta que, desde el primer momento, el Señor ha prometido hostilidad entre la serpiente y la mujer, entre la descendencia de una y de la otra… La descendencia de la mujer aplastará la cabeza de la serpiente. La iconografía católica ha dibujado el cumplimiento de esta promesa en la Inmaculada Concepción de María, que es representada pisando la cabeza de la serpiente… En este apartado, la teología cristiana suele abordar muchas cuestiones interesantes, que nos llevarían semanas y meses tratar. He cogido el YOUCAT, Catecismo de Jóvenes, y he reunido en un documento PDF sus enseñanzas para los que quieren profundizar. Son 31 temas que os enumero aquí. Yo, en principio, voy a centrarme en dos cuestiones que me parecen claves: la teoría de la evolución y la creación; y el pecado original y sus consecuencias en nosotros. No obstante, para los que quieran saber más les recomiendo el archivo pdf que os comparto. Si queréis que tratar alguna cuestión me la pasáis por privado y yo la comparto si veo que es interesante para todos. Estos son las preguntas y respuestas contestadas en el pdf: 40. ¿Dios lo puede todo? ¿Es omnipotente? 41. ¿Las ciencias naturales hacen innecesario al Creador? 42. ¿Se puede estar convencido de la evolución y creer sin embargo en el Creador? 43. ¿Es el mundo un producto de la casualidad? 44. ¿Quién ha creado el mundo? 45. ¿Las leyes de la naturaleza y las ordenaciones naturales también proceden de Dios? 46. ¿Por qué el libro del Génesis describe la Creación como un trabajo de seis días? 47. ¿Por qué descansó Dios en el séptimo día? 48. ¿Para qué ha creado Dios el mundo? 49. ¿Dirige Dios el mundo y también mi vida? 50. ¿Qué papel juega el hombre en la providencia divina? 51. Si Dios lo sabe todo, ¿por qué no impide entonces el mal? 52. ¿Qué es el cielo? 53. ¿Qué es el infierno? 54. ¿Quiénes son los ángeles? 55. ¿Se pueden establecer relaciones con los ángeles? 56. ¿Tiene el hombre una posición privilegiada en la Creación? 57. ¿Cómo se debe comportar el hombre con los animales y otras criaturas? 58. ¿Qué quiere decir que el hombre ha sido creado «a imagen» de Dios? 59. ¿Para qué ha creado Dios al hombre? 60. ¿Por qué es Jesucristo el modelo mayor para el mundo? 61. ¿En qué consiste la igualdad de todos los hombres? 62. ¿Qué es el alma? 63. ¿De dónde procede el alma del hombre? 64. ¿Por qué ha creado Dios al hombre como varón y mujer? 65. ¿Qué pasa con las personas que tienen tendencias homosexuales? 14 66. ¿Estaba en el plan de Dios que los hombres sufrieran y murieran? 67. ¿Qué es el pecado? 68. ¿Pecado original? ¿Y qué tenemos que ver nosotros con el pecado original de Adán y Eva? 69. ¿Estamos obligados a pecar por el pecado original? 70. ¿Cómo nos saca Dios del remolino del mal? Algunos están interesados en tener el YOUCAT. Hay tres opciones: 1ª. Comprarlo en las Nazarenas 2ª Comprarlo en internet, por ejemplo Amazon: https://www.amazon.es/Youcat-espa%C3%B1ol-catecismo-iglesiacatolica/dp/8499200990/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1469268460&sr=81&keywords=youcat 3ª Descargar una versión en blanco y negro en pdf (22 Mb) de nuestra web: http://pedropoveda.es/YoucatBN.pdf 4ª Hay otra versión en pdf con la letra más grande y sin dibujos: http://pedropoveda.es/YOUCAT.pdf Vamos con el vídeo Credo 03: Creador del cielo y de la tierra Dios ha creado el mundo de la nada. Creación y evolución. El hombre y la mujer. La caída. La promesa del Redentor. El misterio del mal y del dolor. https://www.youtube.com/watch?v=FXmjxclL5Iw 15 LA CREACIÓN Y LA EVOLUCIÓN Son numerosas las personas que dan por sentado que, de acuerdo a las últimas teorías de la ciencia, la hipótesis de un Dios Creador ya no es necesaria, no es racional, no es mínimamente creíble. La Iglesia tiene claro que el relato o los relatos de la Creación no son un modelo explicativo del principio del mundo, que se puedan tomar al pie de la letra, es decir, no son una afirmación científica. Se trata de una afirmación teológica: la Biblia afirma que Dios ha querido que exista el mundo, él lo acompaña y lo llevará a plenitud. Todo ha salido de Dios y todo tiene a Dios como meta. La Teología no se mete en el campo de la ciencia; las ciencias naturales tampoco tienen competencia teológica. Las ciencias naturales no pueden excluir “de manera dogmática” que en la creación haya PROCESOS ORIENTADOS A UN FIN; la fe, por el contrario, no puede definir CÓMO SE PRODUCEN ESTOS PROCESOS en el desarrollo de la naturaleza. En principio, los cristianos aceptamos la hipótesis o TEORÍA DE LA EVOLUCIÓN como la explicación más racional y consistente del origen del mundo y de las especies en la actualidad. Somos conscientes de que con el paso del tiempo y con el avance de la ciencia, muchas cosas que son tenidas ahora como verdaderas provocarán una sonrisa, la misma que nos provoca a nosotros explicaciones “científicas” de la antigüedad. De hecho, el relato de la creación usa una explicación científica para describir la obra de Dios, pero, claro, es la explicación científica del siglo VI antes de Cristo… ¡Y ha llovido en estos 2.600 años! En la actualidad, cualquier cristiano puede aceptar la teoría de la evolución como un modelo explicativo útil. Sin embargo, vemos varios puntos oscuros en la teoría de la evolución, como callejones sin salida que la ciencia no puede explicar, y que algunos intentan rellenar de una manera NADA científica, y bastante “dogmática”: 1º ORIGEN DEL COSMOS. La ciencia propone como origen del universo la teoría del Big bang. A mí desde pequeño me ha llamado la atención cómo de una pequeña semilla puede crecer un gran árbol: ¿Cómo el algo tan pequeño puede haber tanta fuerza? Cuando estudié la concepción humana y me explicaron que cuando un espermatozoide atraviesa la membrana de un óvulo y lo fecunda se produce un embrión y de ahí, en desarrollo y evolución, nace una persona completa, mi admiración fue mayor. ¡Cómo en algo tan pequeño, invisible al ojo humano, puede haber una persona entera con sus huesos, con sus músculos, con todos sus órganos…! 16 Algo así, dicen que fue el origen del Universo. Hace unos 14.000 millones de años se produjo una explosión (BIG-BANG) y de ahí salieron todas las galaxias y planetas… Suponiendo que la teoría sea cierta, la duda que no resuelve la ciencia es esta: ¿De dónde surgió ese “embrión cósmico” (¡esto nombre me lo acabo de inventar!) que explosionó? ¿Quién programó todo el proceso? ¿Todo se ha formado al azar? Como dijo Juan Pablo II en el año 1985: «Hablar de azar delante de un universo en el que existe tal complejidad en la organización de sus elementos y una intencionalidad tan maravillosa en su vida, sería igual a abandonar la búsqueda de una explicación del mundo como él se nos muestra. De hecho, sería equivalente a aceptar efectos sin causa. Supondría la abdicación de la razón humana, que renunciaría de este modo a pensar ya buscar una solución a los problemas». Nosotros creemos que es Dios quien ha puesto en marcha todo este mundo tan inmenso y maravilloso que se llama cosmos. No es puro azar, ni se ha hecho solo, porque todo en este mundo tiene una causa, y el cosmos no iba a ser la excepción. De hecho uno de los grandes filósofos de la actualidad Martin Heiddeger sorprendía siempre a su auditorio con una pregunta molesta: ¿POR QUÉ HAY ALGO, EN LUGAR DE NADA? Porque podía no haber nada … ¡Ah! Por cierto. ¿Sabéis quién fue el primero en proponer la teoría del Big Bang del origen del universo? Pues fue Georges Lemaître, un sacerdote belga, astrónomo y profesor de física de la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica). Él fue también el primer académico conocido en proponer la teoría de la expansión del universo, ampliamente mal atribuida a Edwin Hubble. Para los que quieran profundizar en la Teoría del Big Bang y en la labor del sacerdote católico Georges Lemaitre, que se codeaba con un Albert Einstein, puede leer este interesante artículo. Es triste que su Teoría fuese durante bastante tiempo desechada, por proceder de un sacerdote católico y por hablar de un principio, de un comienzo, que recordaba la creación de la Biblia. http://www.catholiceducation.org/es/ciencia/aportes-del-catolicismo/un-diasin-ayer-georges-lemaitre-y-el-big-bang.html 2º ORIGEN DE LA VIDA: Pasemos a la segunda cuestión donde la ciencia actual resbala: ¿Cómo y cuándo surgió la vida en la Tierra? La opinión más extendida en el ámbito científico establece la teoría de que la vida comenzó su existencia en algún momento del período comprendido entre 4400 millones de años y 2700 millones de años atrás. 17 Con el objetivo de reconstruir el evento o los eventos que dieron origen a la vida se emplean diversos enfoques basados en estudios tanto de campo como de laboratorio. A fecha de hoy, existen numerosas teorías que explican el origen de la vida en el planeta tierra. Incluso algunos han lanzado la hipótesis de que la vida primitiva pudo haberse formado originalmente fuera de la tierra. Se supone que una lluvia de material procedente de cometas que se precipitó sobre la Tierra primitiva pudo haber traído cantidades significativas de moléculas orgánicas complejas y, quizás, la misma vida primitiva formada en el espacio fue traída a la Tierra por material cometario o asteroides de otros sistemas estelares. En el Seminario bromeábamos con esta teoría que defiende que la vida en la tierra proviene “del polvo de las estrellas”. Os dejo un vídeo de poco más de un minuto que resume las cinco teorías más aceptadas, pero hay más de 20 teorías... En fin, lo que queda claro es que la ciencia actual no tiene una idea clara de lo ocurrido, y eso que lleva décadas intentado resolver esta cuestión: https://www.youtube.com/watch?v=UtRyAoCV4go La fe cristiana no es competente en explicar CÓMO surgió la vida en la tierra, cómo se pasó de la materia inorgánica a lo orgánico, de lo muerto a lo vivo, del polvo de los planetas a lo vivo (plantas, animales…). Pero tiene algunas preguntas que hacer: ¿Por qué sólo en este planeta se dan las condiciones para la vida? No sólo por el oxígeno, el agua, la temperatura..., sino hasta en la alimentación... Todo responde a un plan premeditado, complejo y perfecto... ¿También es todo esto fruto del azar? ¿Cómo un científico que intenta explicar el por qué, las causas, de las cosas se atreve a invocar un argumento tan chapucero y tan infantil como la suerte, el azar...? Y encima nos miran a los creyentes por encima del hombro, como si fuéramos unos estúpidos irracionales, dogmáticos ciegos... Nosotros creemos que, igual que Dios está en el origen del proceso del cosmos, de la misma manera, está también en el origen de la vida, y en el origen del ser humano… Este último es otro capítulo. 3º ORIGEN DEL HOMBRE. Durante el siglo XIX el científico Charles Darwin propuso su teoría de la evolución de las especies. Aunque la teoría de la evolución ha sido desarrollada durante muchos años por diversos estudiosos a través de críticas, reinterpretaciones y correcciones que definen cualquier labor científica, en esencia sus argumentos fundamentales son estos: 1. La vida en la Tierra se originó y evolucionó a partir de un ancestro común hace más de 3 mil millones de años. 2. Las poblaciones biológicas varían sus características hereditarias a lo largo de sucesivas generaciones, lo que da lugar a una diversidad en los distintos niveles de organización (moléculas, individuos, especies). 18 3. La especialización de las especies está determinada por la selección natural, cuando un miembro de una población muere, se le reemplaza por la progenie mejor adaptada a las condiciones ambientales. 4. Existen otras causas que influyen en la evolución, como las mutaciones o alteraciones genéticas. Desde la publicación de la obra “El origen de las especies” de Charles Darwin, hasta la actualidad la Iglesia católica ha ido refinando su posición respecto a la teoría evolutiva. En los primeros momentos la Iglesia no se pronunció oficialmente en contra, a diferencia de la Iglesia Anglicana que condenó la "peligrosa idea" de que el hombre desciende de una "forma inferior". Con el paso del tiempo, la Iglesia católica permitió que las academias de sus Universidades estudiaran las implicaciones científicas del evolucionismo, siempre y cuando no atacaran a Dios. Es conocido que el propio creacionismo dentro de la Biblia ha resultado siempre un tema de debate entre los estudiosos eclesiásticos. Las personalidades más avanzadas han defendido la idea de que el Génesis no debe ser leído literalmente. Por tanto, la idea de que el mundo ha sido creado en 6 días podría ser un símbolo más que un dato real. A partir de la mitad del siglo XX, la Iglesia comenzó a mostrar una postura no oficial, que se conoce como evolucionismo teísta o creacionismo evolutivo, según la cual la fe y los hechos científicos en relación con el ser humano no están necesariamente en conflicto. La idea fundamental es que Dios es el creador del universo a partir de la nada. No niega que se haya producido en el planeta un desarrollo de formas variadas de vida a través del tiempo, sino que este proceso ha sido planeado y guiado por un Diseño Inteligente, con un propósito determinado solo conocido por él. Sin embargo, en cuanto al ser humano, aunque no niega su evolución biológica, sí insiste en el valor singular de su alma como creación divina. Esta no evoluciona ni se hereda, como sucede con nuestro cuerpo. La Iglesia, pues, no está en contra de la teoría evolutiva en sí, sino del evolucionismo ateo, o sea, la idea de que el universo, la vida en la Tierra y el ser humano, incluyendo su espíritu, no son creaciones de Dios. La teoría de la evolución nos parece la más plausible actualmente para explicar el origen y desarrollo de las distintas especies. Sin embargo, los cristianos consideramos que el ser humano está dotado de un alma espiritual creada por Dios. Esta alma, con conciencia, entendimiento y libertad, constituye la esencia más profunda de todo ser humano y además es personal y eterna. Donde nos separamos de la teoría de la evolución es que ésta considera al ser humano una especia más, con un poquito más de coeficiente intelectual… 19 Los cristianos, en cambio, consideramos que la diferencia entre el ser humano respecto a los demás seres vivos no es sólo de cantidad, sino que se trata de un salto cualitativo. Es lo que constituye la dignidad de todo ser humano, lo que nos hace diferentes al resto de animales. En la actualidad, algunos científicos y asociaciones (los animalistas) pretenden una misma dignidad entre el animal y el ser humano. Miremos, por ejemplo, esta noticia: “Los orangutanes tienen un 97% de coincidencia genética con los humanos. Así lo desvela un artículo publicado en Nature. Sus responsables, un equipo internacional con participación española, ha descifrado el genoma de este homínido, el más alejado del ser humano y con quien compartió un antepasado común hace más de 12 millones de años. Este trabajo permitirá entender mejor nuestra evolución, luchar contra el cáncer y ayudar a conservar a los orangutanes en peligro de extinción”. Para terminar: Francis Collins, director del Instituto Nacional Estadounidense de Investigación del Genoma Humano, el científico que lideró el equipo que descubrió el genoma humano ha publicado un libro en el que explica por qué ahora cree en la existencia de Dios. Reivindica que hay bases racionales para un Creador y que los descubrimientos científicos llevan al hombre "más cerca de Dios". Si quieres saber más de él pulsa este enlace: http://es.catholic.net/op/articulos/17225/cat/437/el-cientifico-francis-collins-heencontrado-a-dios.html DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO A LOS MIEMBROS DE LA ACADEMIA PONTIFICIA DE LAS CIENCIAS Lunes 27 de octubre de 2014 [...] En la conclusión de vuestra sesión plenaria, queridos académicos, estoy feliz de poder expresar mi profunda estima y mi caluroso aliento para llevar adelante el progreso científico y la mejora de las condiciones de vida de la gente, especialmente de los más pobres. Estáis afrontando el tema altamente complejo de la evolución del concepto de naturaleza. No entraré en absoluto, lo entendéis bien, en la complejidad científica de esta importante y decisiva cuestión. Quiero sólo destacar que Dios y Cristo caminan con nosotros y están presentes también en la naturaleza, como lo afirmó el apóstol Pablo en el discurso en el areópago: «Pues en Él vivimos, nos movemos y existimos» (Hch 17, 28). Cuando leemos en el Génesis el relato de la creación corremos el riesgo de imaginar que Dios haya sido un mago, con una varita mágica capaz de hacer todas las cosas. Pero no es así. Él creó los seres humanos y los dejó desarrollarse 20 según las leyes internas que Él dio a cada uno, para que se desarrollase, para que llegase a la propia plenitud. Él dio autonomía a los seres del universo al mismo tiempo que les aseguró su presencia continua, dando el ser a cada realidad. Y así la creación siguió su ritmo durante siglos y siglos, milenios y milenios hasta que se convirtió en lo que conocemos hoy, precisamente porque Dios no es un demiurgo o un mago, sino el Creador que da el ser a todas las cosas. El inicio del mundo no es obra del caos que debe a otro su origen, sino que se deriva directamente de un Principio supremo que crea por amor. El Big-Bang, que hoy se sitúa en el origen del mundo, no contradice la intervención de un creador divino, sino que la requiere. La evolución de la naturaleza no se contrapone a la noción de creación, porque la evolución presupone la creación de los seres que evolucionan. Respecto al hombre, hay un cambio y una novedad. Cuando, el sexto día del relato del Génesis, llega la creación del hombre, Dios da al ser humano otra autonomía, una autonomía distinta a la autonomía de la naturaleza, que es la libertad. Y dice al hombre que ponga nombre a todas las cosas y que siga adelante a lo largo de la historia. Lo hace responsable de la creación, para que domine la creación, para que la desarrolle y así hasta el fin de los tiempos [...] EL PECADO ORIGINAL A todos les gustaría que el mundo fuera un paraíso. Pero por mucho que los políticos, los filósofos y los educadores lo intentan no parece posible lograr que los hombres actúen humanamente, que se acabe el hambre en el mundo y que se supriman las enfermedades o la muerte misma. 1. ¿El hombre es bueno por naturaleza? El filósofo Jean-Jacques Rousseau (siglo XVIII) consideraba al hombre como un ser bueno por naturaleza, que se habría corrompido después, mediante la civilización y el Cristianismo. En algún lugar de América o quizás en los mares del Sur debían existir "buenos salvajes", que vivían como en el paraíso, porque no se les había cargado con el pecado. ¿Cómo se imaginaba esto Rousseau? -los "buenos salvajes" viven en la mejor armonía posible con la naturaleza -no necesitan dinero -son mansos e inocentes 21 -no pueden hacer otra cosa que amarse -no saben lo que es el pecado ni el crimen -desconocen la mentira -no necesitan a nadie que los juzgue -están totalmente sanos -van desnudos y son sexualmente libres. Más de cien años después de Rousseau también Paul Gauguin tuvo este sueño del mar del Sur: "Al fin libre, sin problemas de dinero, me dedicaría entonces a amar, cantar y morir", escribió Gauguin en 1890 a su mujer Mette. El pintor se dirigió de verdad a los mares del Sur y desde allí escribía lleno de entusiasmo a sus amigos de París que "en la jungla del interior de la isla" había descubierto realmente a los "buenos salvajes" inocentes. Allí no conocían el dinero ni las preocupaciones, su vida consistía sólo en cantos, bailes y amor libre. La verdad era totalmente diferente. Gauguin estaba profundamente decepcionado. Los plátanos no le crecían sin más en la boca. No sabía pescar ni cazar, de forma que vivía de las costosas conservas de importación. También los "buenos salvajes" sufrían numerosas enfermedades, sostenían una dura lucha por la existencia y tenían una moral muy severa. Gauguin, enfermo de sífilis, quería pintar a las hermosas muchachas desnudas, pero no le dejaron. Tuvo que conformarse con Titi, la prostituta. A cambio de dinero, por supuesto. En resumen: -ni Jean-Jacques Rousseau, -ni Paul Gauguin, -ni nadie más... ...ha encontrado jamás al hombre "bueno por naturaleza". Tampoco el mismo Rousseau era una excepción. El filósofo, que se consideraba a sí mismo como el gran educador de la humanidad, nunca educó a un niño. Ciertamente tuvo cinco hijos, a todos los que, sin embargo, al nacer dejó en el hospicio. 2. "No hago lo que quiero, sino que hago lo que aborrezco" Ahora es muy fácil hablar mal de Rousseau o de Gauguin, que, a su manera, fueron también gente importante. Sería mejor que nos golpeáramos el pecho y buscáramos el fallo en el tejido de nuestra propia vida. Cada uno de nosotros tiene algún tipo de daño o trastorno. Unos se dan cuenta antes, otros más tarde. Con frecuencia nos quejamos de nosotros mismos: "¡Lástima! Lo quería hacer tan bien. Pero luego he hecho justamente lo contrario. ¡Seré idiota!" 22 Imagínate: el mismo san Pablo tuvo esta experiencia. Lee Romanos 7,15-24 atentamente: ¡Es una pasada! Aquí está el texto de San Pablo: En efecto, no entiendo mi comportamiento, pues no hago lo que quiero, sino que hago lo que aborrezco; y si hago lo que no quiero, estoy de acuerdo con que la ley es buena. Ahora bien, no soy yo quien lo hace, sino el pecado que habita en mí. Pues sé que lo bueno no habita en mí, es decir, en mi carne; en efecto, querer está a mi alcance, pero hacer lo bueno, no. Pues no hago lo bueno que deseo, sino que obro lo malo que no deseo. Y si lo que no deseo es precisamente lo que hago, no soy yo el que lo realiza, sino el pecado que habita en mí. Así, pues, descubro la siguiente ley: yo quiero hacer lo bueno, pero lo que está a mi alcance es hacer el mal. En efecto, según el hombre interior, me complazco en la ley de Dios; pero percibo en mis miembros otra ley que lucha contra la ley de mi razón, y me hace prisionero de la ley del pecado que está en mis miembros. ¡Desgraciado de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte? ¡Gracias a Dios, por Jesucristo nuestro Señor! 3. ¿Y esto no se acaba nunca? Tratándose de estas experiencias, la fe habla del "pecado original" o "pecado del origen" y de sus consecuencias: -Todos queremos el bien, -pero parece que estamos presionados, -como si alguien nos impulsara a hacer precisamente lo contrario de lo que queremos. -Una y otra vez. Una y otra y otra vez. -De nada vale la educación, ni la persuasión, ni la psicología. El mundo va mal. Ya no vivimos en el paraíso. La Biblia también habla del paraíso; del paraíso perdido y del paraíso al que Dios nos quiere conducir de nuevo: el cielo. La Biblia explica el pecado original (y con ello la separación del paraíso) con la historia del primer pecado de Adán y Eva. Youcat 68. ¿Pecado original? ¿Y qué tenemos que ver nosotros con el pecado original de Adán y Eva? El pecado en sentido propio es una culpa de la que hay que responder personalmente. El término «pecado original» no se refiere por tanto a un 23 pecado personal, sino al estado caído de la humanidad en el que nace cada individuo antes de pecar por decisión propia. Por pecado original, dice Benedicto XVI, tenemos que entender que «todos llevamos dentro de nosotros una gota del veneno de ese modo de pensar reflejado en las imágenes del libro del Génesis. Esta gota de veneno la llamamos pecado original. [...] El hombre no se fía de Dios. Tentado por las palabras de la serpiente, abriga la sospecha de que Dios [...] es un competidor que limita nuestra libertad, y que sólo seremos plenamente seres humanos cuando lo dejemos de lado; es decir, que sólo de este modo podemos realizar plenamente nuestra libertad. [...] El hombre no quiere recibir de Dios su existencia y la plenitud de su vida. [...] Al hacer esto, se fía de la mentira más que de la verdad, y así se hunde con su vida en el vacío, en la muerte» (Benedicto XVI, 8.12.2005). 4. Un ingeniero explica el pecado original El cardenal Schönborn, arzobispo de Viena, comentó una vez en catequesis que un día un ingeniero le explicó con claridad de qué se trata en el pecado original o pecado del origen. Dice el cardenal: "Un ingeniero (es un buen ingeniero) me explicó una vez la definición más hermosa que he escuchado hasta el momento, o, digamos mejor, una definición muy atractiva y sencilla. Desde su experiencia como técnico sabe que cada aparato necesita un libro de instrucciones. Si yo no sigo el libro de instrucciones no puedo culpar al constructor de que el aparato no funcione. Este ingeniero dijo que el pecado original o, digamos con más precisión, el pecado de nuestros primeros padres, fue el rechazo a las instrucciones de uso. Dios nos ha dado una naturaleza humana, somos criaturas y en nuestra naturaleza de criatura están, en cierta manera inscritas, las instrucciones de uso, Dios nos las ha dado incluidas. Si hacemos de nosotros mismos un uso diferente, entonces no podemos demandar a Dios porque no funciona. El pecado original es el rechazo de la condición de criatura, el querer ser como dioses, pero sin Dios, no querer recibir nada de Dios, sino querer hacerlo por uno mismo. 'Seréis como Dios' ". 5. La llave de acceso al paraíso Por favor, ¿por dónde se va al paraíso? No por el camino de Rousseau, que se inventó un paraíso; ni por el de Gauguin, que lo pintó para sí. 24 Sino por Jesús, que abrió de nuevo el paraíso perdido, estableciendo de nuevo la conexión con Dios. Y comenzó viviendo como si no hubiera existido el "fallo''... (Esta Catequesis sobre el Pecado original está tomada de YOUCAT, Libro de catequesis para la Confirmación, 24-29) CONCLUSIONES Después de haber compartido la catequesis sobre el pecado original, concluyo la exposición sobre el pecado de origen con el resumen que ofrece el Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica. Veréis cómo ahí se responden muchas de las preguntas que habéis ido haciendo en estos días: Dios nos creó sin sufrimiento ni muerte. El ser humano que salió de las manos de Dios vivía en plena armonía con su Creador, con sus semejantes y con el resto de la creación. Es cierto que, antes del pecado de Adán y Eva, hubo una rebelión en el cielo: algunos ángeles, por soberbia, se volvieron malvados. Eso explica la presencia de la serpiente, inductora del pecado, en el relato de Adán y Eva. El pecado original consistió en esto: “El hombre, tentado por el diablo, dejó apagarse en su corazón la confianza hacia su Creador y, desobedeciéndole, quiso «ser como Dios» (Gn 3, 5), sin Dios, y no según Dios. Así Adán y Eva perdieron inmediatamente, para sí y para todos sus descendientes, la gracia de la santidad y de la justicia originales”. Adán y Eva, por su decisión, introdujeron en la especie humana un desequilibrio, que nos inclina al mal, a la soberbia y desobediencia a Dios (querer ser como Dios, sin Dios), a la envidia de nuestros semejantes, al dominio absoluto de los demás, a la explotación de la creación… El capítulo 4 de Génesis nos cuenta que, después del pecado de Adán, ocurrió el pecado de Caín, que mató a su hermano Abel por envidia. El pecado siguió proliferando hasta el punto de afirmar la Biblia: "Al ver el Señor que la maldad del hombre crecía sobre la tierra y que todos los pensamientos de su corazón tienden siempre y únicamente al mal, el Señor se arrepintió de haber creado al hombre en la tierra y le pesó de corazón. Dijo, pues, el Señor: «Voy a borrar de la superficie de la tierra al hombre que he hecho, junto con los cuadrúpedos, reptiles y aves del cielo, pues me pesa haberlos hecho»" (Génesis 6,5-7). Por este motivo, envió Dios el diluvio que arrasó la tierra entera, salvándose sólo Noé con sus hijos y sus nueras y una pareja de cada especie. Pero después 25 el Señor se arrepintió: «No volveré a maldecir el suelo a causa del hombre, porque la tendencia del corazón humano es mala desde la juventud. No volveré a destruir a los vivientes como acabo de hacerlo. Mientras dure la tierra no han de faltar siembra y cosecha, frío y calor, verano e invierno, día y noche» (Génesis 8,21-22). Hizo una alianza con Noé y su descendencia, y estableció un signo de esa alianza: el ARCO IRIS. Dios dijo cuando llueva y salga el arco iris me acordaré de mi promesa y dejará de llover. De alguna forma, Dios quiso empezar de nuevo la creación con un hombre justo, Noé, pero de poco sirvió. Por eso, Dios ideó otra forma de salvarnos. Ideó la historia de la salvación y comenzó una amistad con su criatura humana que culminaría con el envío de su Hijo, que morirá por amor a nosotros, dándonos el don de poder ser “hijos en el Hijo”. Hoy muchos piensan erróneamente como Rousseau: “el hombre es bueno por naturaleza, nace bueno, pero la sociedad y las religiones lo pervierten…”. La Biblia nos enseña todo lo contrario: nacemos rotos, sin armonía, inclinados al mal, “enfermos”… Sólo Jesús, el Hijo de Dios, con su amor y misericordia puede reconstruirnos, restaurarnos, devolvernos la armonía, liberarnos y sanarnos de ese veneno de la serpiente, en definitiva, sólo Él puede salvarnos… La cultura actual enseña que nacemos buenos y después nos rompemos. Por eso, muchas personas viven frustradas, culpabilizadas o culpando a los demás de su infelicidad... La Biblia enseña que nacemos rotos y divididos. Tardamos tiempo en darnos cuenta y nos es imposible arreglarnos con nuestras fuerzas... Necesitamos la ayuda de Cristo. Él nos salva a través de un proceso de transformación lento... Es obvio que son dos visiones antagónicas: la primera prescinde de Dios, mientras la segunda vive agradecida por su amor. DEL COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA: 72. ¿Cuál era la condición original del hombre según el designio de Dios? Al crear al hombre y a la mujer, Dios les había dado una especial participación de la vida divina, en un estado de santidad y justicia. En este proyecto de Dios, el hombre no habría debido sufrir ni morir. Igualmente reinaba en el hombre una armonía perfecta consigo mismo, con el Creador, entre hombre y mujer, así como entre la primera pareja humana y toda la Creación. 26 74. ¿Qué es la caída de los ángeles? Con la expresión «la caída de los ángeles» se indica que Satanás y los otros demonios, de los que hablan la Sagrada Escritura y la Tradición de la Iglesia, eran inicialmente ángeles creados buenos por Dios, que se transformaron en malvados porque rechazaron a Dios y a su Reino, mediante una libre e irrevocable elección, dando así origen al infierno. Los demonios intentan asociar al hombre a su rebelión contra Dios, pero Dios afirma en Cristo su segura victoria sobre el Maligno. 75. ¿En qué consiste el primer pecado del hombre? El hombre, tentado por el diablo, dejó apagarse en su corazón la confianza hacia su Creador y, desobedeciéndole, quiso «ser como Dios» (Gn 3, 5), sin Dios, y no según Dios. Así Adán y Eva perdieron inmediatamente, para sí y para todos sus descendientes, la gracia de la santidad y de la justicia originales. 76. ¿Qué es el pecado original? El pecado original, en el que todos los hombres nacen, es el estado de privación de la santidad y de la justicia originales. Es un pecado «contraído» no «cometido» por nosotros; es una condición de nacimiento y no un acto personal. A causa de la unidad de origen de todos los hombres, el pecado original se transmite a los descendientes de Adán con la misma naturaleza humana, «no por imitación sino por propagación». Esta transmisión es un misterio que no podemos comprender plenamente. 77. ¿Qué otras consecuencias provoca el pecado original? Como consecuencia del pecado original, la naturaleza humana, aun sin estar totalmente corrompida, se halla herida en sus propias fuerzas naturales, sometida a la ignorancia, al sufrimiento y al poder de la muerte, e inclinada al pecado. Esta inclinación al mal se llama concupiscencia. 78. ¿Qué ha hecho Dios después del primer pecado del hombre? Después del primer pecado, el mundo ha sido inundado de pecados, pero Dios no ha abandonado al hombre al poder de la muerte, antes al contrario, le predijo de modo misterioso –en el «Protoevangelio» (Gn 3, 15)– que el mal sería vencido y el hombre levantado de la caída. Se trata del primer anuncio del Mesías Redentor. Por ello, la caída será incluso llamada feliz culpa, porque «ha merecido tal y tan grande Redentor» (Liturgia de la Vigilia pascual). 27 ACLARACIÓN DE UNA DUDA Uno de vosotros me pregunta sobre unas frases que no comprende del Youcat 67. ¿Qué es el pecado? En el fondo el pecado es el rechazo de Dios y la negativa a aceptar su amor. Esto se muestra en el desprecio de sus mandamientos. El pecado es más que un comportamiento incorrecto; tampoco es una debilidad psíquica. En lo más hondo de su ser, todo rechazo o destrucción de algo bueno es el rechazo del Bien por excelencia, el rechazo de Dios. En su dimensión más honda y terrible, el pecado es la separación de Dios y con ello la separación de la fuente de la vida. Por eso también la muerte es la consecuencia del pecado. Solamente en Jesús comprendemos la inconmensurable dimensión del pecado: Jesús sufrió el rechazo de Dios en su propio cuerpo. Tomó sobre sí la violencia mortal del pecado, para que no nos toque a nosotros. Para ello tenemos la palabra Redención. Respuesta: El pecado es separación de Dios: Jesús experimentó esto en su propia persona. En una de las sesiones de Alpha se explica esto: Cuando Jesús en la Cruz exclama DIOS MÍO, DIOS MÍO, ¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO? está haciendo dos cosas: 1ª) Sentir el pecado en su propia carne, es decir, en ese momento que está cargando con todos los pecados de la humanidad se siente totalmente SEPARADO DE DIOS, solo, lejos de la Vida y del Amor. 2ª) Jesús está rezando el Salmo 22, que comienza así: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? A pesar de mis gritos, mi oración no te alcanza…” Este Salmo termina en esperanza: “Me hará vivir para él, mi descendencia lo servirá; hablarán del Señor a la generación futura, contarán su justicia al pueblo que ha de nacer: «Todo lo que hizo el Señor»”. La expresión “Jesús sufrió el rechazo de Dios en su propio cuerpo” puede inducir a error. No significa que Dios lo rechazó a Él, sino que el cargó con los rechazos y desprecios a Dios que nosotros los humanos hemos cometido… Por eso, su amor nos redimió… 28 TEMA 4º: CREO EN JESUCRISTO, SU ÚNICO HIJO, NUESTRO SEÑOR Os comparto el Vídeo 4º: Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor https://www.youtube.com/watch?v=ox1WpUVOInQ Jesucristo es el Hijo único de Dios. Los nombres de Jesús: el Cristo, el Señor, Jesucristo, el Hijo de Dios, el hijo del Hombre. Capítulo IV y V: Jesús - más que sólo un hombre Hay una historia verdadera del zar ruso Pedro el Grande (1672-1725). De joven, Pedro era una persona extraordinariamente ávida de saber. Quería aprender todo lo posible para, cuando ciñera en su momento la corona de zar, modernizar su país, que estaba algo retrasado. "¡En Rusia podríamos construir barcos tan geniales como los que hacen los holandeses!", se dijo. Efectivamente los holandeses eran los mejores constructores de barcos del momento. Por ello se coló bajo un nombre falso en un astillero holandés y aprendió el oficio de un carpintero de barcos. Cuando Pedro llegó a ser zar logró que los rusos se convirtieran en poco tiempo en constructores de grandes veleros... 1. Una idea genial para una peli Que Dios se haya hecho hombre es una historia mucho más increíble que la de que el zar jugara a ser carpintero un par de años. "Dios se hace hombre" suena casi a cuento o a una idea original para una película. En Hollywood podrían haber creado un guion imaginario: "Dios" se aburre en el cielo, así que se le ocurre la loca idea de disfrazarse de hombre. Llega a la tierra, pero hace bastante el ridículo, porque "Dios" no tiene ni idea de cómo funciona lo de aquí abajo. Se mete en líos absurdos; pero afortunadamente "Dios" conoce muchos trucos de magia y milagros, con los que puede teletransportarse escapando de las peores situaciones. Pero la cosa se pone crítica cuando conoce a una chica maravillosa, se enamora perdidamente de ella y ya no quiere regresar al cielo... Nos habríamos reído, habríamos acabado la coca-cola y vaciado la bolsa de palomitas y nos habríamos olvidado de la película a los tres días. 2. Mejor que cualquier película: los pensamientos de Dios ¿Qué es lo que Dios ha hecho realmente con su pobre creación, rota y herida por el pecado? Digamos primero lo que no ha hecho: -no nos ha olvidado sin más en la órbita -no ha cesado en su amor y no ha roto su fidelidad con nosotros 29 -no ha mandado un gran castigo sobre un mundo en el que reinan el odio, la envidia y la codicia, en el que las personas se torturan mutuamente, se dejan morir de hambre, se quitan mutuamente las oportunidades y los salarios justos; un mundo en el que los hijos no son mejores que los padres -no nos ha enviado una "pena de muerte" por nuestros pecados ¿Qué ha hecho Dios en lugar de esto? -Ha visto nuestros sufrimientos y nuestras lágrimas, porque debíamos morir. -Dios decidió ayudarnos, compartir todo con nosotros, excepto el pecado. -Dios ha tomado en Jesús de Nazaret nuestra naturaleza humana. Fue hijo de la joven judía María y nació cerca del año 7 a.C. en Belén. 3. Dios - ¿un niño? ¿Se lo puede uno imaginar? ¿DIOS y un llanto de niño, un bebé que es amamantado a los pechos de su madre y que ensucia los pañales? ¿Un niño que corre por las calles, se hace una herida en la rodilla y va llorando en busca de su madre? Un hombre joven que está orgulloso de su crecimiento en fuerza física y en conocimientos, que comparte sus alegrías y penas con amigos y amigas, que experimenta tentaciones sensuales y... que descubre cada vez más profundamente que, pese a todo esto, no es de este mundo, porque está unido de una forma profunda y única con su Padre del cielo. ¿Se puede uno imaginar esto? Si esto te causa dificultades, no estás solo. Los cristianos de los primeros siglos habían conocido en parte a Jesús con sus propios ojos. -Habían visto a una persona con la que podrían reír, llorar, comer, beber, cantar, divertirse. -Pero también habían visto a un Jesús que hacía milagros e incluso podía resucitar a los muertos. Sentían que en sus palabras había una fuerza sobrehumana y, sobre todo, veían que la muerte no tenía poder sobre él. Bajo Pondo Pilato, alrededor del año 30 d.C., Jesús había sido ejecutado cruelmente en la cruz, se había certificado inequívocamente su muerte. Pero tres días después "más de quinientos hermanos juntos" (1 Cor 15,6) lo habían visto vivo. Puedes imaginarte qué discusión se dio en la Iglesia naciente hasta que en el año 451, en el Concilio de Calcedonia (hoy es un barrio de Estambul), se llegó a la fórmula que Jesucristo es a la vez verdadero Dios y verdadero hombre". 4. Tan humano y tan divino: la historia de Lázaro 30 Muchas personas, que veían en Jesús sobre todo a Dios, se escandalizaron de que Jesús tuviera públicamente un verdadero amigo, Lázaro. Si fuera Dios, decían, ¡no podía haber tenido un "amigo"! Pero lo tuvo. Por la Biblia no sabemos cómo vivían ambos su amistad. Con seguridad estaban juntos a menudo; se alegraban cuando se veían; se dedicaban tiempo el uno al otro, quizás en caminatas o sentados juntos a la orilla del lago Genesaret e intercambiaban impresiones. Pues bien, el evangelio de san Juan nos cuenta que una vez Jesús llegó aparentemente demasiado tarde para ver a su amigo. Pregúntate: ¿qué es divino y qué es humano en Jesús? 5. Ningún dolor que Dios no conozca Imagínate que viene alguien y dice: "¡Déjame en paz con tu Dios! No necesito a ningún Dios que esté sentado en el cielo y a quien le vaya bien. ¡He experimentado cosas que no conoce ningún Dios! En tos infiernos en los que he estado no había ningún Dios”. Y quizás te diga: “He pasado por esta y esta enfermedad... Estuve en peligro de muerte... ¡Me marginaron y me presionaron!... ¡He sido traicionado por mis amigos!... Me han condenado injustamente... Me han torturado y maltratado...". ¿Y qué le puedes decir? Quizás algo como: "¡No sé a qué Dios te refieres! Mi Dios estuvo enfermo y en la angustia de la muerte; fue criticado y perseguido; fue traicionado por sus mejores amigos; fue condenado injustamente, torturado hasta la muerte. Estuvo donde ningún Dios estuvo antes: en el reino de la muerte. Toma mi Dios si no te basta el tuyo.” 31 TEMA 5. FUE CONCEBIDO POR OBRA Y GRACIA DEL ESPÍRITU SANTO Credo 05 Fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo El misterio de la Encarnación. Jesucristo es Dios y Hombre verdadero. El cuerpo y el alma de Cristo. Fue concebido sin obra de varón. https://www.youtube.com/watch?v=r6-IoBcpMM8 ENSEÑANZAS DEL YOUCAT SOBRE JESÚS 72 ¿Qué significa el nombre «Jesús»? Jesús en hebreo significa «Dios salva». En los Hechos de los Apóstoles dice san Pedro: «Bajo el cielo no se ha dado a los hombres otro nombre por el que debamos salvarnos» (Hch 4,12). Todos los misioneros, en el fondo, llevaron a los hombres esta noticia. 73 ¿Por qué se le da a Jesús el título de «Cristo»? En la fórmula «Jesús es el Cristo» se expresa el núcleo de la fe cristiana: Jesús, el sencillo hijo del carpintero de Nazaret, es el Mesías esperado y el Salvador. Tanto la palabra griega «Christos» como la hebrea «Messias» significan «ungido». En Israel eran ungidos reyes, sacerdotes y profetas. Los apóstoles experimentaron que Jesús está ungido «con la fuerza del Espíritu Santo» (Hch 10,38). Por Cristo nos llamamos cristianos, como expresión de nuestra alta vocación. 74 ¿Qué quiere decir «Jesús es el Hijo único de Dios»? Cuando Jesús se denomina a sí mismo «Hijo único de Dios» (Hijo único o Unigénito, Jn 3,16) y así es testimoniado por Pedro y otros, se expresa con ello que entre todos los hombres sólo Jesús es más que un hombre. En muchos lugares del Nuevo Testamento (Jn 1,14.18; 1 Jn 4,9; Heb 11,7 entre otros) se llama «Hijo» a Jesús. En el Bautismo y en la Transfiguración una voz celestial designa a Jesús como «el Hijo amado». Jesús comunica a sus discípulos su relación única con el Padre del cielo: «Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar» (Mt 11,27). Que Jesús es verdaderamente el Hijo de Dios se manifiesta en la Resurrección, aunque ya lo era eternamente junto al Padre. 75 ¿Por qué los cristianos llaman «Señor» a Jesús? 32 «Vosotros me llamáis “el Maestro” y “el Señor” y decís bien, porque lo soy» (Jn 13,13). Los primeros cristianos hablaban con naturalidad de Jesús como el «Señor», sabiendo que en el Antiguo Testamento esta denominación estaba reservada para dirigirse a Dios. Mediante numerosos signos Jesús les había demostrado que él tiene poder divino sobre la naturaleza, los demonios, el pecado y la muerte. El origen divino de la misión de Jesús se reveló en la Resurrección de los muertos. Santo Tomás confiesa: «Señor mío y Dios mío» (Jn 20,28). Esto quiere decir para nosotros: si Jesús es el Señor, un cristiano no debe doblar su rodilla ante ningún otro poder. 76 ¿Por qué se hizo Dios hombre en Jesús? «Por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación, bajó del cielo» (Credo de Nicea-Constantinopla) En Jesucristo, Dios ha reconciliado al mundo consigo y ha liberado a los hombres de la cautividad del pecado. «Porque tanto amó Dios al mundo, que entregó a su Unigénito» (Jn 3,16). En Jesús Dios asumió nuestra carne humana mortal (ENCARNACIÓN), compartió nuestro destino terreno, nuestros sufrimientos y nuestra muerte y se hizo en todo igual a nosotros, excepto en el pecado. 77 ¿Qué significa que Jesucristo es a la vez verdadero Dios y verdadero hombre? En Jesús Dios se ha hecho realmente uno de nosotros y con ello nuestro hermano; pero no por ello dejó de ser a la vez Dios y por tanto nuestro Señor. El concilio de Calcedonia, del año 451, declaró que la divinidad y la humanidad están unidas entre sí en la única persona de Jesucristo «sin confusión ni división». La Iglesia se ha esforzado durante largo tiempo para poder expresar la relación entre divinidad y humanidad en Jesús. La divinidad y la humanidad no están enfrentadas, de modo que Jesús sólo fuera parcialmente Dios y parcialmente hombre. Como no es cierto que la naturaleza divina y la naturaleza humana se mezclen en Jesús. En Jesús Dios no ha tomado sólo en apariencia un cuerpo humano (herejía del docetismo), sino que se hizo realmente hombre. Tampoco se trata en la humanidad y en la divinidad de dos personas diferentes (herejía del nestorianismo). Finalmente, tampoco es cierto que en Jesucristo la naturaleza humana desaparezca al ser asumida en la naturaleza divina (herejía del monofisismo). Contra todas estas herejías la Iglesia ha mantenido firme la fe en que Jesucristo es, en una persona, a la vez verdadero Dios y verdadero hombre. La conocida fórmula «sin separación y sin confusión» (Concilio de Calcedonia) no pretende explicar lo que es inalcanzable a la inteligencia humana, sino que, por así decir, fija los pilares de la fe. Designa la «dirección» en la que se puede buscar el misterio de la persona de Jesús. 79 ¿Tenía Jesús un alma, un espíritu y un cuerpo como nosotros? 33 Si. Jesús «trabajó con manos de hombre, pensó con inteligencia de hombre, obró con voluntad de hombre, amó con corazón de hombre» (Concilio Vaticano II, GS 22,2). A la humanidad plena de Jesús pertenece también que tuviera un alma y que se desarrollara espiritualmente. En esta alma estaba radicada su identidad humana y su particular autoconciencia. Jesús conocía su unidad con su Padre celeste en el Espíritu Santo, por quien se dejaba guiar en todas las situaciones de su vida. HEREJÍAS CRISTOLÓGICAS Son numerosas las comprensiones incorrectas del misterio de Jesús, Dios y hombre verdadero. Comento sólo las 3 que aparecen en Youcat 77: 1ª DOCETISMO: Jesús ha tomado sólo en apariencia un cuerpo humano, pero en realidad no era hombre como nosotros. Esta herejía apareció en el siglo I, y ya san Juan la combate en sus escritos. Decían: "Parece que come, parece que camina, parece que está cansado...". ¡Pero eso es indigno de Dios! 1 Jn 4, 2 enseña: "En esto podréis conocer el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa a Jesucristo venido en carne es de Dios". Jesús es verdadero hombre que come, bebe, se cansa, camina, llora, se admira. Jesús caminó por las calzadas polvorientas de Israel. Jesús miró con sus propios ojos a niños inocentes, a hombres enfermos, a fariseos complicados. Jesús amó con corazón también humano. 2ª NESTORIANISMO: Nestorio, monje que llegó a ser patriarca de Constantinopla, consideraba a Cristo radicalmente separado en dos naturalezas, una humana y una divina. Pero además, Nestorio afirmaba que hay dos personas en Cristo. También defendía que María era madre sólo de la parte humana, es decir, sólo madre de Jesús, pero no madre de la naturaleza divina. Según él, era erróneo llamar a María Madre de Dios. El Concilio de Éfeso, celebrado el año 431, declaró que en Jesús hay una SOLA PERSONA (en dos naturalezas, humana y divina), y que María es Madre de esa Persona, por lo que es lícito darle el título MADRE DE DIOS. Según la tradición, aquí se compuso la 2ª parte del Ave María, que todos hemos rezado miles de veces: SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS... 3ª MONOFISISMO: Aclarado que en Jesús hay una sola persona, el monje Eutiques explicó que en Jesús había también una sola naturaleza (“mono”“phisis”), pues la naturaleza humana, que es inferior, al unirse en Jesús a la divina, quedó disuelta, igual que un azucarillo se disuelve en un café. Es decir, Eutiques afirmaba una sola Persona en Jesús y además una sola naturaleza, la divina, pues la humana había sido absorbida… 34 El Concilio de Calcedonia, celebrado el 451, dejó definitivamente fijada la doctrina cristiana sobre Jesús: En Jesucristo hay una sola Persona (divina), pero coexisten dos naturalezas completas y perfectas, humana y divina: “sin confusión, sin cambio, sin división, sin separación”. Esta verdad la aceptan todos los cristianos: los católicos, los ortodoxos, los protestantes y los anglicanos. Para quien quiera ampliar, aquí tiene un breve artículo: http://es.catholic.net/op/articulos/17602/cat/693/herejias-sobre-jesus.html 35 TEMA 6º: NACIÓ DE SANTA MARÍA VIRGEN Jesús es una sola Persona con dos naturalezas (humana y divina). El lugar donde se ha producido la Encarnación del Hijo de Dios, la unión de lo humano y lo divino ha sido el seno de la VIRGEN MARÍA. María es la Mujer elegida por Dios para ser la Madre de Jesucristo, Dios y hombre verdadero. Es, por tanto, MADRE DE DIOS. Sus prerrogativas: Es inmaculada, siempre virgen, asunta al cielo, Madre de los cristianos. ¡Ah! Ella fue concebida SIN PECADO ORIGINAL. Dios hizo una excepción con María... Con ella comienza la nueva creación. La Iglesia llama a María NUEVA EVA, igual que san Pablo llama a Jesús NUEVO ADÁN. Aquí os dejo el 6º vídeo: NACIÓ DE SANTA MARÍA VIRGEN https://www.youtube.com/watch?v=SiimmrmZewc MARÍA EN EL YOUCAT 80 ¿Por qué es virgen María? Dios quiso que Jesucristo tuviera una verdadera madre humana, pero sólo a Dios como Padre, porque quería establecer un nuevo comienzo, que no se debiera a ninguna fuerza del mundo, sino únicamente a Él. La virginidad de María no es ninguna idea mitológica ya superada, sino un dato fundamental para la vida de Jesús. Nació de una mujer, pero no tenía un padre humano. Jesucristo es un nuevo comienzo en el mundo, fundado desde lo alto. En el evangelio de san Lucas, María pregunta al ángel: «¿Cómo será eso, pues no conozco varón?» (= no tengo relaciones con ningún hombre; Lc 1,34); a lo que responde el ángel: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti» (Lc 1,35). Aunque la Iglesia, desde sus orígenes, ha sufrido burlas a causa de su fe en la virginidad de María, siempre ha creído que se trata de una virginidad real y no meramente simbólica. 81 ¿Tuvo María otros hijos además de Jesús? No. Jesús es el único hijo carnal de Maria. Ya en la Iglesia primitiva se partía de la base de la virginidad perpetua de María, lo que excluía a hermanos carnales de Jesús. En arameo, la lengua materna de Jesús, hay una única palabra para hermano, hermana, primo y prima. Cuando en los evangelios se habla de «hermanos y hermanas» de Jesús (por ejemplo, en Mc 3,31-35), se trata de parientes cercanos de Jesús. 36 82 ¿No es escandaloso llamar a María «Madre» de Dios? No. Quien llama a Maria Madre de Dios confiesa con ello que su hijo Jesús es Dios. Cuando la cristiandad primitiva discutía quién era Jesús, el título Theotokos («la que da a luz a Dios») se convirtió en el signo de identidad de la interpretación ortodoxa de la Sagrada Escritura: María no sólo había dado a luz a un hombre, que después de su nacimiento se hubiera «convertido» en Dios, sino que ya en su seno su hijo es el verdadero Hijo de Dios. En esta cuestión no se trata en primer lugar de María, sino de nuevo de la cuestión de si Jesús es a un mismo tiempo verdadero Dios y verdadero hombre. 83 ¿Qué significa la «Inmaculada Concepción de María»? La Iglesia cree que «la bienaventurada Virgen Maria fue preservada inmune de toda mancha de pecado original en el primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Jesucristo Salvador del género humano» (Dogma de 1854). La fe en la «Inmaculada Concepción» de María existe desde el inicio de la Iglesia. Hoy a veces se entiende mal esta expresión. Significa que Dios preservó a María del pecado original, y además desde el principio. Pero no dice nada sobre la concepción de Jesús en el vientre de María. Y en ningún caso es una minusvaloración de la sexualidad en el cristianismo, como si el marido y la mujer se «mancharan» cuando engendran a un hijo. 84 ¿Fue María únicamente un instrumento de Dios? Maria fue mucho más que un mero instrumento pasivo de Dios. También mediante su asentimiento activo se realizó la Encarnación de Dios. Al ángel que le dijo que daría a luz al «Hijo del Altísimo», María le respondió: «Hágase en mí, según tu palabra» (Lc 1,38). La salvación de la humanidad por medio de Jesucristo comienza por tanto con una solicitud de Dios, con el consentimiento libre de una persona, y con un embarazo antes de que María estuviera casada con José. A través de estos caminos tan poco comunes, María se convirtió para nosotros en la «puerta de la Salvación». 85 ¿Por qué María es también nuestra madre? Maria es nuestra madre porque Cristo, el Señor, nos la dio como madre. «Mujer, ahí tienes a tu hijo». «Ahí tienes a tu madre» (Jn 19,26-27). En estas palabras que Jesús dirigió a Juan desde la cruz ha entendido siempre la Iglesia que Jesús confiaba toda la Iglesia a María. De este modo María es también nuestra madre. Podemos invocarla y suplicar su intercesión ante Dios. 86 ¿Por qué Jesús no se manifestó nunca en público a lo largo de treinta años de su vida? 37 Jesús quería compartir con nosotros su vida y santificar con ello nuestra vida cotidiana. Jesús fue un niño que recibió de sus padres amor y afecto y fue educado por ellos. De este modo creció «en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y ante los hombres» (Lc 2,51-52); perteneció a una comunidad rural judía y participó en los rituales religiosos; aprendió un oficio artesanal y tuvo que mostrar en él sus capacidades. El hecho de que Dios quisiera en Jesús nacer en una familia humana y crecer en ella, ha hecho de la familia un lugar de Dios y la ha convertido en prototipo de la comunidad solidaria. ********** Comento la 83ª ¿Qué significa la «Inmaculada Concepción de María»? De una manera excepcional y desde el momento en que María fue concebida en el seno de su madre (santa Ana), ella no fue tocada por el pecado, es decir, Maria nació sin pecado original, y nunca tuvo contacto alguno con el pecado (ni el de Adán y Eva, ni ninguno otro). Este dogma mariano suele ser malinterpretado: Suele entenderse como que María concibió a su Hijo Jesús sin pecar, como si el marido y la mujer se «mancharan» cuando engendran a un hijo. Se trata de dos cosas distintas: -Virginidad perpetua: María se mantuvo siempre Virgen y nunca tuvo relaciones con varón. Este dogma está al servicio de la divinidad de Cristo: Jesús no es hijo natural de José, sino de Dios. -Inmaculada Concepción: De un modo excepcional y privilegiado, María no tuvo el pecado original que todos contraemos al nacer. Ella nació sin ese pecado de Adán y Eva, sin esa inclinación al mal, sin esa división y ruptura con Dios y con los demás… De modo que María es llamada Nueva Eva. 38 TEMA 7: PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO Avanzamos un poco más y nos acercamos a la Pasión. Este es el vídeo 7º: Credo 07 Padeció bajo el poder de Poncio Pilato Poncio Pilato, el gobernador romano, y el Sanedrín, el gobierno judío. La resurrección de Lázaro. La entrada triunfal en Jerusalén. Decisión de matarle. La Pascua y la última Cena. La oración del Huerto y el prendimiento. El juicio ante Caifás. https://www.youtube.com/watch?v=5dQ1F-PWb0Y Dos preguntas se me ocurren después de ver el vídeo: 1. ¿Quiénes fueron los culpables de la Pasión y Muerte del Redentor? 2. ¿Qué quiere decir Jesús con las palabras "HACED ESTO EN MEMORIA MÍA"? *********** 1. En el Pregón de la Vigilia Pascual cantamos: FELIZ CULPA QUE MERECIÓ TAL REDENTOR... 2. ¿Jesus pide simplemente que repitamos un RITO o quiere algo más? Es un poco como la conclusión de la Parábola del buen samaritano: ANDA, Y HAZ TU LO MISMO... *********** Una historia sobre el infinito amor de Dios para con nosotros El día terminó. De vuelta a casa, escuchas por las noticias que una terrible epidemia empezó a desarrollarse en un pueblo de la India. No le das mucha importancia, pero en pocos días lees en los periódicos que millones de personas fallecieron y que el virus comenzó a extenderse a países vecinos como Pakistán, Afganistán e Irán. Personal del Control de Enfermedades de los Estados Unidos viajaron de inmediato a la India para investigar la epidemia que ya era conocida como la "influencia misteriosa", y pronto, ante los resultados negativos de los expertos, los países europeos deciden cerrar sus fronteras y cancelar todos los vuelos aéreos con destino a Pakistán, India u otro país donde la enfermedad había brotado. Pero fue demasiado tarde, pues las noticias anunciaron que una mujer 39 falleció en un hospital francés. A los pocos días, la incurable enfermedad arrasó casi toda Europa y empezó a ocasionar severos estragos en Estados Unidos, país que de inmediato cerró sus fronteras y canceló todos sus vuelos internacionales. El mundo entró en pánico y la enfermedad rápidamente invadió casi todo el planeta. En tu barrio, tus vecinos están alarmados por el temor que existe ante la posibilidad de adquirir la enfermedad, que no distingue ni sexo, raza o religión. Organizan cadenas de oración en la parroquia de tu barrio para que los científicos, que están trabajando sin parar, encuentren el antídoto. Pero nada, todo el esfuerzo es vano. De pronto un grupo de científicos logra descifrar el código ADN del virus pudiendo preparar la cura para la enfermedad. Para ello se requiere la sangre de alguna persona que no ha sido infectada con el virus por lo que se pide a todos los ciudadanos que se dirijan a los hospitales para que se les practique un análisis de sangre. Vas de voluntario con tu familia junto con otros vecinos, preguntándote lo que está pasando, y si esto será el fin del mundo. De repente, un médico sale del hospital gritando un nombre que ha leído en su cuaderno. Dices "¿Quién?" y vuelve a gritar el mismo nombre. El más pequeño de tus hijos está a tu lado, te agarra la chaqueta y te dice: "¡Papá, ese es mi nombre!". Antes de que puedas reaccionar, los médicos cogieron a tu hijo y te explican que la sangre de tu niño está limpia, es pura y quieren asegurarse que no posee la enfermedad. Tras cinco largos minutos, salen los doctores y enfermeras. Uno de ellos, el que parece mayor, se acerca y te agradece porque la sangre de tu niño está limpia; es perfecta para elaborar el antídoto y erradicar la "influencia misteriosa". La noticia empieza a correr por todos lados, y todos están gritando, orando, riéndose de felicidad. Sin embargo, el doctor se acerca nuevamente a ti y a tu esposa y te pide tu firma para que autorices a que se utilice la sangre del niño. Al leer el contrato, te das cuenta que no han llenado la cantidad de sangre que necesitan tomar. Levantas los ojos y les preguntas cuanta sangre van a necesitar. La sonrisa del doctor desaparece y contesta: "No pensábamos que iba a ser un niño. No estábamos preparados: ¡La necesitamos toda!". No lo puedes creer y tratas de contestar: "Pero... pero..." El doctor te sigue insistiendo: "Usted no entiende. Estamos hablando de la curación de todo el mundo. Por favor firme. La necesitamos toda". Preguntas si le pueden hacer una transfusión de sangre pero ellos te contestan que no hay sangre limpia para hacerlo e insisten en que firmes. En silencio y sin poder sentir tus dedos que sostienen la pluma en la mano, lo firmas. Te preguntan si deseas pasar un momento con tu niño antes de iniciar el proceso. Caminas hacia la sala de emergencia donde tu hijo está sentado en la cama y te pregunta que está pasando. 40 Tomas su mano y le dices que papa y mamá lo aman más que nunca y que jamás dejarán que le pase algo. El doctor regresa y te pide que dejes al niño; es hora de empezar ya que gente de todo el mundo está muriendo. Te alejas, dándole la espalda a tu hijo mientras él te dice: ¿Papa?... ¿Mama?... ¿Por qué me has abandonado? A la semana siguiente, durante la ceremonia para honrar a tu hijo observas que hay pocas personas; muchas de ellas prefirieron quedarse a dormir en casa; otros no vienen porque prefirieron ir de pesca o ver un partido de fútbol, y otros vienen con una sonrisa falsa y fingen que les importa. Quisieras pararte y gritar: "Mi hijo murió por vosotros. ¿No os importa?" Tal vez eso es lo que ÉL quiere decir: "Mi hijo murió. ¿No sabéis cuanto os amó? Padre Nuestro, viéndolo desde tu punto de vista nos rompe el corazón. Tal vez ahora podemos empezar a comprender cómo es tu amor por nosotros. ¿Por qué tuvo que morir Jesús? Ante Jesús difieren las opiniones: ¿Actuaba por el poder supremo de Dios o era un impostor, un falso profeta, un blasfemo y un quebrantador de la ley? Quien le odiaba, sólo veía que se ponía en el lugar de Dios: perdonar pecados, relativizar la ley del sábado: estos eran delitos que se castigaban con la muerte. Ésta es la historia externa. Pero, *¿por qué se le ocurrió a Jesús meterse en el infierno de Jerusalén, sabiendo que moriría allí? *¿por qué no rehuyó del juicio? *¿por qué no animó a sus discípulos a luchar? *¿por qué no reaccionó el cielo? Para todo esto sólo hay una respuesta: JESÚS FUE A MORIR LIBREMENTE. ÉL LO QUERÍA ASÍ. EL PADRE LO QUERÍA ASÍ. Siempre se dice: Jesús lo hizo por amor a nosotros. O se dice: lo hizo para redimirnos mediante su pasión. Pero ¿qué quiere decir esto? 1. ¿Cuál fue el sufrimiento de Jesús? 41 Quizás has visto la película La Pasión de Mel Gibson. Algunos dicen que es una mala película, que sólo busca efectos brutales. Y realmente la película es una orgía repugnante de sadismo, sangre y violencia. Otros dicen: ¿Y qué queréis? En realidad, fue más o menos así el momento de la muerte de Jesús. La crucifixión estaba considerada como la forma más cruel de ejecución en la Antigüedad. Ningún ciudadano romano podía ser crucificado; en la mayoría de los casos se castigaba con ella a esclavos que se habían escapado. Jesús fue clavado en la Cruz, pero esto no fue todo. Le maltrataron y le torturaron antes de todas las formas imaginables. Jesús sufrió dolores crueles. Pero si Jesús únicamente hubiera sufrido por ello, ¿qué le diferenciaría de cada uno de los seis mil esclavos supervivientes del levantamiento de Espartaco (73-71 antes de Cristo), que fueron crucificados a lo largo de varios kilómetros en la via Appia, a las puertas de Roma? ¿Qué diferenciaría su miedo a la muerte del miedo a la muerte de los niños judíos en las cámaras de gas de Auschwitz? Sólo hay una única diferencia entre la Pasión de Jesús y el sufrimiento de tantos millones de personas: AQUÍ NO FUE CLAVADA EN LA CRUZ UNA PERSONA; AQUÍ MURIÓ EL AMOR MISMO: EL HIJO DE DIOS HECHO HOMBRE. ¿Cuál fue entonces el sufrimiento de Jesús? Padeció por todo el odio, toda la maldad, todos los crímenes, todas las faltas de amor que han oscurecido siempre la tierra. También padeció por ti y por mí. 2. El golpe mortal En el boxeo se habla de que algunos boxeadores tienen un "golpe mortal", es decir, que con sus puños podrían verdaderamente matar a alguien. En un solo movimiento de su puño está concentrada una fuerza tan inmensa que el contrincante es machacado por ella. Naturalmente los boxeadores correctos desean como mucho el k.o. de su adversario; pero ya se ha dado el caso de que algún boxeador muriera en el ring a causa del puñetazo de su contrincante. Cuando Dios se hizo hombre, para demostrarnos su amor sin límites, el MAL se preparó para asestar un golpe mortal. "Lucharon vida y muerte en singular batalla", dice un antiguo himno de Pascua. 42 Fue como si todas las desgracias y todo el mal del mundo se hubieran concentrado en Jerusalén en esos días oscuros de abril del año 30, para cargarse al AMOR por excelencia, a JESÚS. Se dio una situación que podía haber inventado el propio diablo: fanatismo, odio, mentira, falso testimonio, frío cinismo, juegos de poder, brutalidad, tortura, cobardía, apatía, traición, silencio. Como hemos dicho, era como si todo el mal del mundo se concentrara para asestar al Amor el golpe mortal. ¿Y qué hizo Jesús? Dejó caer los brazos. No devolvió el golpe. No se defendió. Permaneció en silencio ante Pilato. Cargó con la cruz. Permitió que todo el poder del mal cayera sobre él. Murió para poner un nuevo comienzo al mundo. Entregó su vida, también por ti y por mí. 3. ¿Cómo comprendía Jesús su propia muerte? Se puede especular mucho sobre la muerte de Jesús. Lo mejor es atenerse a lo que dice la Biblia. Pues Jesús mismo explicó el sentido de su muerte. Los evangelistas lo han escrito, ciertamente no de forma literal, pero en su conjunto de forma digna de confianza. Tenemos que leer una y otra vez estos textos sagrados (y pedirle al Espíritu Santo que nos ayude a entenderlos), para poder comprender cada vez más profundamente lo que quieren decir. 4. Una jugadora de voleibol, un franciscano y alguien que no se arrodilló ante Hitler ¿Qué se consigue muriendo por otra persona? ¿No sería mejor mantenerse con vida? Antes de hablar de Jesús debemos hablar de tres personas normales que lo han hecho. ¿Qué? ¡Mi vida por la tuya! Tres ejemplos: a) La jugadora de la selección polaca de voleibol, Agata Mróz (1982-2008), no sólo fue hermosa como una supermodelo y una deportista extraordinaria (entre otras cosas dos veces campeona de Europa), también fue una cristiana notable. En junio del año 2008 fue derrotada por un peligroso cáncer, después de que rechazara, antes del nacimiento de su hija en abril de 2008, todo tipo de tratamiento que pudiera haber puesto en peligro la salud de su hija. Murió 43 con 27 años. Y salvó a su hija. Poco antes de su muerte dijo: "No me arrepiento de mi decisión. Si tuviera que optar de nuevo, tomaría la misma decisión. Soy feliz y me voy satisfecha". b) Fue en el año 1943, en Auschwitz, el más terrible campo de exterminio de los nazis. Uno de los prisioneros era un famoso, un hombre genial, conocido en toda Polonia: Maximiliano Kolbe, un franciscano. Con 33 años había fundado una gigantesca ciudad-convento, que tenía una editorial, una imprenta, talleres, una emisora de radio, un convento y un instituto de enseñanza media. En 1939 Lo atraparon los nazis y lo llevaron finalmente a Auschwitz. Y allí pasó algo increíble: un día Kolbe vio cómo condenaban a muerte a un hombre Llamado Franz Gajowniczek. Kolbe sabía que este hombre tenía mujer e hijos. De forma espontánea se ofreció a los agentes de las SS: "Dejad vivir a este hombre. ¡Tomad mi vida a cambio de la suya!". Los nazis aceptaron el trato y arrastraron a Kolbe a un búnker para hacerle morir de hambre. Durante varios días, todos los que pasaban delante del búnker de la muerte oyeron cómo Kolbe oraba y cantaba dentro. Finalmente los agentes de las SS le pusieron una inyección de veneno. Cuando en el año 1982 fue canonizado Maximiliano Kolbe, Franz Gajowniczek estuvo en la plaza de San Pedro y no pudo contener las lágrimas. c) El padre palotino Franz Reinisch, austríaco, se había dado cuenta pronto de que Flitler era un criminal: "Como cristiano... no puedo prestar jamás el juramento de fidelidad a un hombre como Hitler. Tiene que haber hombres que protesten contra el abuso de autoridad; y me siento llamado a esta protesta". En algún momento sería llamado a filas y tendría que prestar el juramento a Hitler. Mediante órdenes e instancias, los amigos y los superiores intentaron proteger a Reinisch de su propio valor. En vano. Cuando, en abril de 1942, fue llamado a filas, declaró ya a la puerta del cuartel que se negaría a prestar a Hitler el juramento de fidelidad. Reinisch fue arrestado inmediatamente. El 21 de agosto de 1942 fue el día de su condena: a medianoche se confesó, a la una recibió la Sagrada Comunión. A las tres entregó todos los objetos que le quedaban: el crucifijo, el rosario, algunos libros y su carta de despedida. A las tres y media le quitaron los zapatos y los calcetines, le ataron las manos a la espalda y lo condujeron al sótano, al cuarto de ejecución. A las 5:03 fue decapitado. Agata Mróz murió en lugar de su hija. Maximiliano Kolbe murió en lugar de Franz Gajowniczek. Franz Reinisch murió en lugar de todos los que no tenían valor para ofrecer resistencia a Hitler. 5. El misterio de la sustitución Una sustitución es necesaria cuando uno mismo no puede estar en su sitio: 44 *Nadie más que Agata Mróz podría haber salvado a su hija. *No había nadie que tuviera fuerza para salvar a Franz Gajowniczek del búnker de la muerte, más que Maximiliano Kolbe. *Nadie más que Franz Reinisch estaba allí, a quien Dios le inspiró que era mejor morir que prestar juramento de fidelidad a un criminal. ¿Y por qué murió entonces Jesús? Porque nadie más podía hacer en su lugar lo que él hizo por nosotros. *Somos parte de un mundo que ha renegado de Dios, que se aleja de él a la velocidad de la luz. *No podemos salir de un apuro por nuestras propias fuerzas. Dios tiene que salvarnos. Alguien tiene que hacernos volver a casa. *En Jesús, Dios se acercó totalmente a nosotros. En la tierra del pecado original. En la miseria de nuestra lejanía de Dios. En la oscuridad de nuestro pecado. En nuestras tristezas, nuestros sufrimientos, nuestros gritos, nuestra desesperación, nuestra necesidad de morir. En los campos de concentración y en las cámaras de gas. *Aún podemos huir de Dios. Pero cuando llegamos al punto más profundo, allí hay alguien: Jesucristo. *En el valle de la muerte nos espera el AMOR. *Cuando Agata Mróz, Maximiliano Kolbe y Franz Reinisch llegaron al valle de la muerte, fueron recibidos por Jesús, que los llevó consigo a la alegría, a la gran fiesta de la vida: la comunión eterna con Dios. LA PASIÓN EN EL YOUCAT 94 ¿Sabía Jesús que iba a morir cuando entró en Jerusalén? Si. Jesús había anunciado en tres ocasiones su Pasión y su Muerte, antes de dirigirse consciente y voluntariamente (Lc 9,51) al lugar de su Pasión y de su Resurrección. 95 ¿Por qué eligió Jesús la fecha de la fiesta judía de la Pascua para su Muerte y Resurrección? Jesús eligió la fiesta de la Pascua de su pueblo como símbolo de lo que iba a suceder con él en la Muerte y Resurrección. Al igual que el pueblo de Israel fue 45 liberado de la esclavitud de Egipto, asi también nos libera Cristo de la esclavitud del pecado y del poder de la muerte. La fiesta de la Pascua era la fiesta de la liberación de Israel de la esclavitud en Egipto. Jesús subió a Jerusalén para liberarnos a nosotros de un modo aún más hondo. Celebró con sus discípulos el banquete de la Pascua. Durante esta celebración él mismo se convirtió en cordero pascual. Como «nuestra víctima pascual» (1 Cor 5,7) ha sido inmolado, para, de una vez para siempre, establecer la reconciliación definitiva entre Dios y los hombres. 96 ¿Por qué se condenó a un hombre de paz como Jesús a morir en la cruz? Jesús colocó a su entorno ante una cuestión decisiva: o bien él actuaba con poder divino, o bien era un impostor, un blasfemo, un infractor de la Ley, y debía rendir cuentas por ello según la Ley. En muchos aspectos Jesús fue una provocación única para el judaísmo tradicional de su tiempo. Perdonaba pecados, lo que sólo puede hacer Dios; relativizaba el mandamiento del sábado; se hacía sospechoso de blasfemia y se le reprochaba ser un falso profeta. Para todos estos delitos la ley preveía la pena de muerte. 97 ¿Son culpables los judíos de la muerte de Jesús? Nadie puede atribuir a «los judíos» una culpa colectiva en la muerte de Jesús. Lo que la Iglesia confiesa con certeza, por el contrario, es la responsabilidad de todos los pecadores en la muerte de Jesús. El anciano profeta Simeón predijo que Jesús llegaría a ser «signo de contradicción» (Lc 2,34). Existió el rechazo decidido de Jesús por parte de las autoridades judías, pero entre los fariseos, por ejemplo, hubo también partidarios secretos de Jesús, como Nicodemo y José de Arimatea. En el proceso de Jesús estuvieron implicadas diferentes personas y autoridades romanas y judías (Caifás, Judas, el Sanedrín, Herodes, Pondo Pilato), cuya culpa individual sólo Dios conoce. La tesis de que todos los judíos de entonces o los que viven actualmente sean culpables de la muerte de Jesús es absurda y no se sostiene según la Biblia. 98 ¿Quería Dios la muerte de su propio Hijo? No se llegó a la muerte violenta de Jesús por desgraciadas circunstancias externas. Jesús fue «entregado conforme al plan que Dios tenia establecido y previsto» (Hch 2,23). Para que nosotros, hijos del pecado y de la muerte, tengamos vida, el Padre del cielo «a quien no conocía el pecado, lo hizo pecado en favor nuestro» (2 Cor 5,21). La grandeza del sacrificio que Dios Padre pidió a su Hijo corresponde sin embargo a la grandeza de la entrega de Cristo: «Y ¿qué diré?: 'Padre, líbrame de esta hora. Pero si por esto he venido, para esta hora» (Jn 12,27). Por ambas partes se trata de un amor que se demostró hasta el extremo en la Cruz. 46 Para librarnos de la muerte, Dios se lanzó a una misión arriesgada: introdujo en nuestro mundo de muerte una «medicina de la inmortalidad» (san Ignacio de Antioquía): su Hijo Jesucristo. El Padre y el Hijo eran aliados inseparables en esta misión, dispuestos y deseosos de asumir sobre sí lo máximo por amor al hombre. Dios quería llevar a cabo un intercambio para salvarnos para siempre. Quería darnos su vida eterna, para que gocemos de su alegría, y quería sufrir nuestra muerte, nuestra desesperación, nuestro abandono, para estar en comunión con nosotros en todo. Para amarnos hasta el final y más allá. La muerte de Cristo es la voluntad del Padre, pero no su última palabra. Desde que Cristo murió por nosotros, podemos cambiar nuestra muerte por su vida. 99 ¿Qué sucedió en la Última Cena? Jesús lavó los pies a sus discípulos la víspera de su muerte; instituyó la-+ EUCARISTÍA e inauguró el sacerdocio de la Nueva Alianza. Jesús mostró su amor hasta el extremo de tres maneras: Lavó los pies a sus discípulos y mostró que está entre nosotros como el que sirve (cf. Lc 22,27). Anticipó simbólicamente su muerte redentora, pronunciando sobre los dones del pan y del vino estas palabras: «Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros» (Lc 22,19s). De este modo instituyó la Sagrada Eucaristía. Y al mandar a sus Apóstoles: «Haced esto en memoria mía» (1 Cor 11,24b), los convirtió en sacerdotes de la Nueva Alianza. 100 ¿Tuvo Jesús miedo ante la muerte en el Huerto de los Olivos, la noche antes de morir? Puesto que Jesús era verdaderamente hombre, experimentó en el Huerto de los Olivos verdaderamente el miedo humano ante la muerte. Con las mismas fuerzas humanas que tenemos todos nosotros Jesús tuvo que luchar por su asentimiento interior a la voluntad del Padre de dar su vida para la vida del mundo. En su hora más difícil, abandonado por todo el mundo e incluso por sus amigos, Jesús se decidió finalmente por un sí. «Padre mío, si este cáliz no puede pasar sin que yo lo beba, hágase tu voluntad» (Mt 26,42). 101 ¿Por qué tuvo Jesús que redimirnos precisamente en la Cruz? La Cruz, en la que Jesús inocente fue ajusticiado cruel-mente, es el lugar de la máxima humillación y abandono. Cristo, nuestro Redentor, eligió la Cruz para cargar con la culpa del mundo y sufrir el dolor del mundo. De este modo, mediante su amor perfecto, ha conducido de nuevo el mundo a Dios. Dios no nos podía mostrar su amor de un modo más penetrante que dejándose clavar en la Cruz en la persona del Hijo. La cruz era el instrumento de ejecución más vergonzoso y más cruel de la Antigüedad. Los ciudadanos romanos no podían ser crucificados por grandes que hubieran sido sus culpas. De este modo Dios 47 penetra en lo más profundo del dolor humano. Desde entonces ya nadie puede decir: «Dios no sabe lo que yo sufro». 102 ¿Por qué debemos nosotros también aceptar el sufrimiento en nuestra vida y así «cargar con la cruz» y con ello seguir a Jesús? Los cristianos no tienen que buscar el dolor, pero cuando se enfrentan a un dolor que no se puede evitar, éste puede cobrar sentido para ellos si unen su dolor al dolor de Cristo: «Cristo padeció por vosotros, dejándoos un ejemplo para que sigáis sus huellas» (1 Pe 2,21). Jesús dijo: «El que quiera venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga» (Me 8,34). Los cristianos tienen la tarea de mitigar el dolor en el mundo. Sin embargo, siempre habrá dolor. En la fe podemos aceptar nuestro propio dolor y compartir el ajeno. De este modo el dolor humano se hace uno con el amor redentor de Cristo y con ello se hace parte de la fuerza divina que transforma el mundo hacia el bien. 48