Versión digital de la publicación - Instituto de Estudios Madrileños

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Antonio González Bueno
Rosa Basante Pol
José Hortega (1703-1761)
La peripecia vital e
intelectual de un
boticario ilustrado
Madrid, 2015
José Hortega (1703-1761)
La peripecia vital e intelectual
de un boticario ilustrado
Antonio González Bueno
Rosa Basante Pol
Madrid, 2015
© de los textos: Antonio González Bueno, Rosa Basante Pol
© Insituto de Estudios Madrileños
ISBN: 978-84-940491-0-1
Depósito legal: M-35547-2015
Imagen de la portada:
“La rebotica” (1882) Óleo de José Jimenez Aranda (1837-1903)
Madrid, Colección particular.
3
Prólogo
La profesora Basante y el profesor González Bueno me piden un
prólogo para su excelente biografía de José Hortega. Dado que
ninguno de los dos necesita presentación ni aval, ni mucho menos
su libro -la opinión sobre el cual acabo de adjetivar en el párrafo
anterior- la solicitud la considero una deferencia derivada del
tiempo: del mucho tiempo desde el día en que nací y del largo
periodo de años durante los cuales venimos trabajando juntos.
En mi vida académica no creo haber tenido más de cinco
ideas de investigación. Tres las he desarrollado yo mismo y dos
se las he brindado a mis próximos. Como además soy curioso,
y los historiadores de la ciencia y de la farmacia no podemos
convertirnos en especialistas en un determinado periodo, me he
interesado por épocas muy distintas, lo cual me ha obligado a
esfuerzos intelectuales grandes, si bien me ha proporcionado
también enormes satisfacciones.
La Ilustración, las expediciones científicas dentro de ella,
y las instituciones de investigación y docencia, ha sido uno de mis
intereses, en el que he coincidido con otros muchos modernistas,
historiadores de la ciencia o no.
Desde hace al menos treinta años se conoce bien ese
ilusionante periodo de nuestra historia. Se sabe la vida y las
intenciones de los reyes de la nueva dinastía, de sus principales
ministros reformistas y de la mayoría de quienes intentaron
llevar a cabo sus proyectos.
En el ámbito científico, el advenimiento de los Borbones
supuso la resolución de lo que Maravall denominó la polémica
entre antiguos y modernos, a favor de estos últimos. Los llamados
despectivamente ‘novatores’, durante el Barroco, pasaron a ser
apoyados por los técnicos, y por las ideas ligadas al despotismo
ilustrado de la nueva dinastía. Sin establecerse un plan pautado,
se llegó a la conclusión, como también se hizo en otros países de
los denominados periféricos, como Portugal o Rusia, de emplear
4
la ciencia moderna con una doble finalidad: reconquistar el
poderío militar y político del antiguo imperio español, y mejorar
la vida de los españoles de ambos lados del Océano: en España
y los virreinatos.
En el tablero de los científicos dedicados a esa tarea,
faltaba una inicial y fundamental pieza: José Hortega u Ortega,
que de ambas maneras se firmaba el personaje. En un país en
donde la inmensa mayoría era analfabeta, los ilustrados fueron
una excéntrica minoría, en lo intelectual, aunque muy centrada
en el poder de la Corona. Dentro de esa excentricidad, el papel
de los boticarios en la política científica ilustrada resulta aún
más extravagante. Los médicos contaron con enseñanzas desde
la aparición de la universidad en el siglo XIII. Fuera de ella
quedaron los cirujanos (tanto romancistas como latinistas) y
los boticarios, considerados artesanos hasta que, en 1650, una
Real Cédula pasó a estimarlos como practicantes de un ‘Arte
Científica’, en consideración, precisamente, a su dependencia
de la medicina. Si su situación social varió favorablemente, no
hizo lo mismo el estado de su enseñanza. Desde la aparición
del Real Tribunal del Protomedicato en el siglo XV, se encargó
de examinar a los sanitarios, entre ellos los boticarios, y de
vigilar sus establecimientos. Felipe II, en este como en tantos
campos, reorganizó y sistematizó su funcionamiento, pero las
enseñanzas siguieron ligadas al sistema de maestrías gremiales,
en donde existían los gremios y, en donde estos no funcionaron,
al aprendizaje magistral y luego al examen del Protomedicato.
Sin faltar a la verdad se podría dar fe de la existencia de una
gran mayoría de boticarios ignorantones y una pequeña
elite, generalmente autodidacta y ligada a la Real Botica, otra
institución creada por los Reyes Católicos, excepcionalmente
bien preparada en las materias necesarias para la elaboración
de fármacos: principalmente la Botánica y la Química, también
la Mineralogía y la Zoología y con una excepcional curiosidad
científica.
A esa elite autodidacta y sabia, ligada a la Real Botica y
por tanto al Ejército, pues se convertían en boticarios militares en
campaña, perteneció José Hortega. Además gozó de una buena
posición económico-social por un matrimonio afortunado y
estableció en la calle Montera una de las mejores farmacias de
Madrid y de España. Tan boticario fue que llegó a poseer dos
farmacias o tres, si como tal consideramos también la dedicada a
la atención de las Reales Personas, en un periodo en el que, como
5
ha sucedido luego sin discontinuidad hasta nuestros días, estaba
prohibido poseer más de una.
José Hortega, hasta ahora, era casi un desconocido. Me
había ocupado de él, brevemente, yo mismo en la biografía que
hice de su sobrino el gran Casimiro Gómez Ortega. Ahora, en
un libro claro, ameno y fácil de leer. se nos ofrece su vida con
pelos y señales. La amenidad del texto no impide la rigurosidad
del método, tan necesario cuando lo expuesto es absolutamente
novedoso, si bien las frecuentes y minuciosas notas a pie de
página, la abundancia de la bibliografía, no impiden la agradable
lectura a quien desee prescindir de ellas.
Para un experto valdría con este prólogo. Para quien no
lo es, que deseo sea mayoría pues el texto vale para unos y otros,
les diré que José Hortega fue Boticario mayor de los Ejércitos y
Boticario de la Real Botica. Se convirtió en el principal animador
del Real Jardín Botánico de Madrid y luego en su subdirector.
Mantuvo correspondencia con Linneo y se ocupó de su discípulo
Löfling cuando llegó a España para visitar los virreinatos
americanos. Tras su desdichada muerte en el Orinoco, durante
la expedición mandada por el capitán Iturriaga, posiblemente se
convirtió en el guardián de sus trabajos. José Hortega fue uno
de los principales animadores del Real Colegio de Boticarios
de Madrid, la corporación creada con fundamentos científicos
y aspiraciones gremiales que, pasados los siglos, derivó en
la Real Academia Nacional de Farmacia. En la casa en donde
tenía su botica y su magnífica biblioteca estableció una tertulia
con médicos, reconocida por el Consejo de Castilla como Real
Academia Médica Matritense y superviviente en la actualidad
en la Real Academia Nacional de Medicina, en la cual, en los
respaldos de los sillones de los académicos, puede verse una copa
y una serpiente enroscada, en recuerdo de la profesión de quien
fue su creador. Participó también en la confección de las primeras
farmacopeas y, además, viajó por varios países europeos, bajo el
manto del marqués de la Ensenada, aunque él era de la clientela
de Joseph de Carvajal, para estudiar las Academias de ciencias
con el fin de establecer una en España. Proyecto incumplido
hasta bien entrado el siglo XIX.
Estos y otros muchos temas son estudiados, en
profundidad y con amenidad, en el texto que tengo el placer de
prologar.
6
Con este libro se completa el mosaico de los científicos
ilustrados y del proyecto científico de la Ilustración en España y
se hace en un escrito que, repito, será del agrado de modernistas,
historiadores de la ciencia y curiosos en general.
Para acabar, mentiría si no dijese que, a mis ojos, uno de
los mayores logros de José Hortega, o al menos el que me hace
verle con más afecto, fue el actuar como mentor de su sobrino
Casimiro Gómez Ortega, ‘el gordo’ Ortega, a quien dediqué
mucho tiempo de mi vida para redactar su biografía y mi discurso
de ingreso en la Real Academia de la Historia.
Javier Puerto
Real Academia de la Historia
Real Academia Nacional de Farmacia
7
Índice
Introducción
Los primeros años
Los inicios en Añover
La botica de la calle de la Montera
En los aledaños de la Puerta del Sol
Una acomodada vivienda
Un boticario y su Colegio
La Congregación de Nuestra Señora de los
Desamparados y del Glorioso Evangelista
San Lucas
El Real Colegio de Profesores Boticarios de
Madrid
La tertulia de la botica de Montera
La ‘Tertulia Literaria Médico-ChymicoPhisica’
La Real Academia Médica Matritense
Al servicio del Rey
El cortesano
Pehr Löfling, ‘Botaniste du Roy de Hispania’
Una Academia para la Corte
Un Gabinete…
… y un Jardín
La aventura americana
Las canelas del Paraíso
La tierra de promisión
Los restos de un naufragio
El comercio de las quinas
La obra impresa de José Hortega
Un proyecto: la Historia Natural y Médica de
España
Una realidad: las Ephemérides barométricomédicas matritenses
Una atribución compleja: la traducción
castellana del Ensayo sobre la electricidad de los
cuerpos… del abate Nollet
9
11
15
29
37
48
93
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129
136
149
156
159
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174
183
189
191
214
219
8
Coda. La crítica académica al Elogio…. de
Joseph Cervi
Un hombre en su tiempo
El erudito hipocondríaco
Una vida burocratizada
En el ámbito familiar
Sic transit gloria mundi
Los bienes terrenales
Cronología
228
231
233
240
242
247
255
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
9
Introducción
La tradición historiográfica ha querido ver en los primeros años
del reinado de Carlos III el periodo en que el reformismo cobra,
en nuestro país, carta de naturaleza. No hay duda de que la firma
del Tercer Pacto de Familia y, con él, los dramáticos resultados
de la Guerra de los Siete Años, supuso algo más que un cambio
en las coaliciones hasta entonces existentes entre las Coronas
europeas. Pero la primera mitad del XVIII español no estuvo
vacía de contenido.
Durante los reinados de Felipe V y Fernando VI se
comienza a tejer un entramado ideológico, y se planetan algunos
proyectos políticos, que permiten explicar el posterior estallido
reformista del periodo carolino.
Nuestro objetivo es aproximarnos a esos proyectos,
plenos de ambigüedades y en buena parte utópicos, visualizadas
a través de una de las figuras clave de la primera mitad del siglo:
José Hortega. En él confluyen buena parte de las características
definitorias del programa reformista: un servidor del Monarca,
desde el campo de batalla y desde la tertulia cortesana, que
asume un marcado protagonismo en la búsqueda de una nueva
estructura profesional y científica, tanto desde la remodelación
emprendida en el Real Colegio de Boticarios de Madrid, como
desde las innovadoras sesiones tenidas en la Real Academia de
Medicina; y que empleará la Ciencia, en particular la Botánica y la
Química, para propiciar los necesarios cambios en los ambientes
profesionales y culturales en los que se desenvuelve. Un gestor
de instituciones, algunas realmente consolidadas, como la Real
Academia de Medicina o el Real Jardín Botánico; otras apenas
bosquejadas, o sólo temporalmente activas, como el Real
Gabinete de Historia Natural o la Real Academia de Ciencias. Un
comprometido defensor de los intereses del país, que supo mirar
más allá de la realidad pensinsular y alentó –y coordinó con mano
férrea- la exploración de la naturaleza americana, atisbando la
conveniencia de la realización de inventarios de flora y fauna, en
particular de las especies alimenticias y medicinales, con ánimo
10
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de asegurar su explotación comercial y liberar a la Corona de
unas importaciones innecesarias.
José Hortega responde bien al concepto de ‘moderno’:
cómodo en los ambientes extrauniversitarios, en las tertulias y en
las Academias; poco afín a las doctrinas escolásticas de Aristóteles
y Tomás de Aquino y más próximo a las ideas de Descartes,
Gassendi y Maignan; un hombre que asiste, como otros muchos
de su tiempo, al colapso de una imagen aristotélica-medieval de
la naturaleza, debido al empuje de la concepción mecanicista que
había encontrado su formulación en el orden del pensamiento
matemático. Amigo de una ‘segunda generacion de novatores’
que descubre en la experiencia un valor que no acierta a encontrar
en la razón. Gregorio Mayáns le califico como ‘boticario de buen
gusto’, y no parece que el valenciano –antiguo bibliotecario realerrara en su apreciación. Su biblioteca responde a un criterio de
‘europeización’ en el saber científico, similar al que otros eruditos
poseyeron en el ámbito de la literatura o del derecho.
Pero su pensamiento no es rupturista ni revolucionario,
buen conocedor del pasado, que valora y aprecia, se aprestará a
reformarlo bajo las nuevas luces de la ilustración que emanan de
la vecina Francia.
José Hortega fue uno de los más influyentes boticarios
de la España dieciochesca: ejerció con botica propia, preparó
medicamentos para particulares y para el Ejército; su contribución
a la modernización científica española apenas llegó a los tórculos
de la imprenta y -quizás por ello- su figura ha quedado envuelta
en la penumbra. Reconstruir la peripecia vital y el pensamiento
de un personaje prácticamente ágrafo no es una aventura fácil;
sin embargo, el peso de sus actuaciones y la solidez de sus
iniciativas fueron tan fuertes que es posible rastrear su huella
en los documentos oficiales y en la correspondencia de sus
contemporáneos; éstas serán nuestras principales fuentes.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
11
Los primeros años
Los inicios en Añover
Hijo de Francisco Hortega Vázquez y María Hernández, José
Hortega nació en la villa de Añover de Tajo (Toledo), el 22 de
octubre de 1703; apenas unos días después, el 2 de noviembre,
fue bautizado en la Iglesia parroquial de Santa Ana; actuó como
padrino Isidoro Carmena1. Su padre era originario de Añover, su
madre había nacido en Robledillo de la Jara. El matrimonio tuvo
otros cinco hijos más: Bárbara Manuela (n. 1714)2, Saturnino,
Manuel, María y Josefa.
José Hortega mantuvo una buena relación con su familia
de Añover; en el verano de 1731, a poco de contrarer matrimonio,
les recordará en sus primeras mandas testamentarias3. Al final de
La partida de bautismo fue transcrita por Rafael Folch Andreu (Los
farmacéuticos en la Academia durante el siglo XVIII. Labor de D. José Hortega. Madrid:
Academia Nacional de Medicina [Imprenta de J. Cosano], 1935. [Reimpreso
en Academia Nacional de Medicina 1734-1934. Publicaciones conmemorativas del
II Centenario de su fundación. Conferencias: 177-282. Madrid: Imp. de J. Cosano,
1935] -cf. pág. 106-); actuó como ministro del bautismo el cura párroco, Alfonso
Díez de Cossío. Hemos consultado el acta en el folio 290 vuelto del Libro VI de
Bautismos [1684-1704] conservado en el Archivo parroquial de Añover del Tajo
[AP Añover], en nada discrepa, salvo en alguna libertad de transcripción, de la
publicada por Rafael Folch.
1
Su acta de bautismo, anotada en el folio 165 del Libro VII de Bautismos
[1704-1722] (AP Añover) dice a la letra: “Barbara Manuela, Hija de Francisco
Hortega y María Hernández. En la Iglesia Parroquial de la Sra. Sta. Ana de esta
Villa de Añover de Taxo en quinze dias del mes de diciembre de 1714 años
yo Fray Cristobal de Sta. Cruz, Religioso de la Sra. del Carmen con licencia del
Sr. Cura, baptice solemne a una niña que nacio á 4 dias de dicho mes, hixa
lexitima de Fco. Hortega natural de esta villa y de Maria Hernandez, natural
de Robledillo de la Xara, Obispado de Toledo pusola por nombre Barbara
Manuela, fue su padrino Isidoro Carmena quien avise el parestesco espiritual,
la obligacion de enseñarla la doctrina cristiana y lo firme. Xtobal de la Sta. Cruz
[rubricado]”. Fruto del matrimonio de su hermana Bárbara con Pedro Gómez
González, nacerá, en 1741, su sobrino Casimiro Gómez Hortega [Ortega].
2
Cf. Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana
Aztina, su mujer. Madrid, 1-VIII-1731 (Archivo Histórico de Protocolos
Notariales de Madrid [AHPNM], protocolo 14.102, fols. 275r-277r).
3
12
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
sus días, en el verano de 1760, volverá a tenerlos presentes en las
que entonces establece4. Ninguno de estos codicilios habría de
ser el definitivo, todos quedaron anulados por el firmado el 18
de enero de 1761, apenas unos días antes de morir5.
No sabemos dónde pudo formarse como boticario, quizás
en la Corte, bajo la dirección de Gregorio Aedo (fl. 1723-1762), a
quien reconoce como ‘amo y maestro’ en un documento notarial
fechado en el verano de 17606. Sí nos consta que tenía establecida
una botica de su propiedad en Añover; en marzo de 1734 la
traspasó al toledano Francisco Fernández Conejo, entonces
residente en Madrid7; la declaración del propio adquirente hace
pensar en una falsa venta8; pero un testimonio colateral confirma
4
Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760
(AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
5
Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 18-I-1761 (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 250r-253v).
6
“… a mi Amo y Mro Dn Gregorio de Aedo la Lamina de plata, que
tengo, y me regalo el Excmo. Sr. Duque de Montemar difunto, y suplico al dicho
mi Amo la admita y perdone la cortedad pues solo es una muestra de cariño
en atencion al mucho afecto, amor, cariño y respeto qe spre le he profesado, y le
pido me encomiende a Dios Nro. Sr…” (Testamento otorgado por José Hortega.
Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
7
“Yo tengo como mia propia plantificada una Botica en el lugar de
Añover distante siete leguas de la Corte, la qual por ciertos motivos que a ello
me mueben, tengo trattado y conzertado traspasarla y benderla á Dn Franco
Fernandez Conexo, residente en esta Corte y Profesor de Voticario, examinado
por el Real protomedicato, la que haviendola tassado y regulado por persona
perita lo a sido en doce mil seiscientos y veinte y cinco rs de vn toda ella (…)
Que por precio fixo me ha de dar dicho Franco Fernz por todo el valor y traspaso
de la votica, Diez mil reales de vn. en interin de cinco años, á dos mill rs. en cada
uno para el dia de San Miguel de Septiembre, que el primero cumplira en el de
este año [1734]…” Escritura de tasación y venta que otorga José Hortega a favor
de Francisco Fernández Conejo de una botica sita en la villa de Chinchon [sic
por Añover]. Madrid, 21-III-1734 (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 372r-373v);
actúan como testigos Miguel Izquierdo Figueroa, Juan Romero y el bachiller
José Forteza.
“Digo que por cuantto por hacerme merced y buena obra y otros
motivos, que para ello ha tenido, el dia de la fecha [21-III-1734] (…) el señor Dn.
Joseph Hortega (…) ha otorgado á mi favor cierta escriptura de venta y traspaso
de una botica que dho Sr. tiene suia propia en el lugar de Añober, al precio y
quenta de Diez mil rs. vn. (…) y respecto de que el otorgamto. de dha escta solo
ha sido á fin de hacerme particular benefizio para ocuparme y mantenerme en
ella y ótros motibos, desde luego declaro qe la expresada votica y todo lo en ella
contenido es caudal propio de dho Sr. Dn. Joseph, y que ha obligazion que asi juro.
Como el ótro tenemos hecha pr dha esta. de taspaso, ha de darse de ningun valor
ni efecto…” Escritura de declaración que otorga Francisco Fernández Conejo
8
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
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la veracidad del traspaso: en agosto de 1735, José Hortega
confiará a su padre, Francisco Hortega, poder
“… para qe en mi nre y representando mi propia
persona acciones y dno y como yo mismo lo aria pudiendo
allarme preste, aia perciva y cobre asi judicial como
extrajudicialmte o como mas vien bisto le fuere todas y
quales quiera cantidades de mrs oro plata vellon trigo
zebada aceyte y otras quales quiera semillas y especies qe
en qualquier forma y manera se me estubiesen deviendo
asi en dicha villa de Añober como en otras quales quier
villas ciudades y lugares de estos reynos y señorios (…) o
al quitar como tambien por el importe de las receptas que
se me dieron para la curacion de diversas personas de la
villa de Añober de la botica que tube mia propia en dicha
villa que se me estan deviendo…”9.
Para esos años José Hortega reside ya en la Corte. Hacia
finales de 1728, o en los inicios de 1729, pasó a regentar la botica
de Mariana Aztina10, viuda de Luis Llorente11, sita en la calle
a favor de José Hortega. Madrid, 21-III-1734 (AHPNM, protocolo 16.638, fols.
374r-374v); figuran en ella los mismos testigos que en la venta de la botica (cf.
supra), practicada en el mismo momento en que firma ésta de reconocimiento
de propiedad.
9
Poder otorgado por José Hortega a favor de Francisco Hortega,
su padre. Madrid, 26-VIII-1735; actúan como testigos Francisco Fernández,
Raimundo Melitan y Mateo Fernández de Villa Nueva (AHPNM, protocolo
14.102, fols. 456r-457v).
Maríana Aztina fue hija de José de Aztina y Ana María de la
Ayesita, oriundos ambos de Tolosa (Guipuzcoa); aportó a su matrimonio con
Luis Llorente una dote de 8.587 ½ rs. en vestidos, basquiñas, casacas, briales,
guardapiés y mantillas, ropa blanca, plata, diamantes y alhajas, relicarios,
anillos y sortijas. La carta de dote y arras de Mariana Aztina fue protocolizada
ante Juan Félix del Valle, con fecha de 10-IX-1722 (AHPNM, protocolo 14.100,
fols. 151r-156r).
10
11
Luis Llorente, oriundo de Rincón de Soto (Calahorra), falleció en los
meses finales de 1728 o en los primeros de 1729; el 10-II-1729, en la escribanía
de Manuel García, se verifica la tasación de los bienes que le corresponden a su
viuda, Mariana Aztina, fijados en 68.961 rs. 28 ms.: 8.587 rs. 17 ms. de su dote,
2.200 rs. por sus arras, 695 rs. ‘en que se computó la mittad del lecho cotidiano’,
14.482 rs. por su mitad de ganancias y 42.997 rs 4 ms de la legítima de Manuela
Llorente, que recayeron en su madre (Cf. Escritura de amigable partición de
los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina.
Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Luis Llorente
fue enterrado en la Iglesia de San Luis, aneja a San Ginés. (Testamento de Luis
Llorente otorgado por Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 29-IV-1729. AHPNM,
protocolo 14.101, fols. [1729] 62r-63v). Vivió en el inmueble de la calle de la
14
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Montera, cercana a la parroquia de San Luis. En 1731 desposó
a la viuda y adquirió la propiedad de la botica, una de las más
importantes de la ciudad.
Montera, al menos, desde abril de 1726 hasta su fallecimiento; a su muerte, su
viuda pagó los alquileres atrasados (AHPNM, protocolo 16.481, fol. 54).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
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La botica de la calle de la Montera
En los aledaños de la Puerta del Sol
La botica de José Hortega estaba situada en un lugar céntrico de
la capital del Reino12, en la calle de la Montera, subiendo de la
Puerta del Sol a la Red de San Luis. El establecimiento gozaba de
cierta solera en Madrid; con anterioridad había sido propiedad
de Luis Llorente, primer marido de Mariana Aztina, a quien se la
había traspasado, hacia 1711, Ignacio de la Peña13.
El edificio donde se encontraba el establecimiento fue
adquirido por José Hortega, en una larga sucesión de trámites
legales, iniciados en 1731. Una parte del inmueble, en la que
se ubicaba la botica, fue comprado a Teresa María Sanguinete,
mediante escrituras otorgadas los días 11 y 23 de diciembre de
173214; el edificio estaba sujeto a diversos censos redimibles,
La casa ocupaba el número 8 de la manzana 342 de la ciudad de
Madrid; el edificio tenía salida a la calle de la Montera y a la calle de los Negros
[hoy Tetuán]; la fachada de Montera contaba con 26 pies de longitud y la de
los Negros con 16 pies. El espacio ocupado por este edificio corresponde hoy
al número 17 de la calle de la Montera; en él la Real Academia Nacional de
Medicina colocó, el 13 de septiembre de 1934, una placa con la que se quería
perpetuar el solar como ‘cuna de la Academia’ (Cf. Rafael Folch Andreu.
“Curiosidad historica. La cuna de nuestra Academia”. Anales de la Real Academia
Nacional de Medicina, 69(1): 141-152. Madrid, 1953).
12
Luis Llorente dispuso del local de la botica en régimen de alquiler;
la propiedad correspondía a Luis Sánchez de Molina, colegial en el Real de
Santa Cruz de Granada, quien disponía de ella por su matrimonio con Teresa
Sanguinete. Con fecha de 27-III-1725, Luis Llorente protocolizó un poder para
aceptar este arrendamiento, por un periodo de seis años, en un monto de 2.900
rs anuales (AHPNM, protocolo 14.101, fols. 466r-466v); no parece que, salvo
una primera entrega, Luis Llorente continuara abonando ese alquiler; tras
su fallecimiento, su mujer, Mariana Aztina, entregará a Teresa Sanguinete la
suma de 8.700 rs correspondiente a tres años de alquiler, vencidos en abril de
1729 (AHPNM, protocolo 16.386, [1729], fols. 54r-55r; la carta de pago queda
fechada, en Madrid, el 23-IV-1729).
13
José Hortega declara haber adquirido tres casas “… que lindan por
la parte de arriba con casas del conde de Moriana y pr la devajo con otras de
Franco. Labrada…” (Cf. Levantamiento, por José Hortega, del censo sobre tres
casas ubicadas en la calle de la Montera, perteneciente al mayorazgo de Nicolás
14
16
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
entre ellos los establecidos sobre los mayorazgos de Nicolás de
Ahumada y Velasco y Marín Nicolás de Castrejón15. Otra parte
de la finca, con fachada a la calle de Los Negros, fue adquirida,
el 10 de octubre de 1733, al Convento de la Merced Calzada16;
ésta en aparente estado de dejadez pues, en la primavera de
1759, José Hortega solicitó -y obtuvo- permiso para su derribo y
posterior construcción de obra nueva, levantada sobre diseño de
Diego de Villanueva17.
de Ahumada y Velasco. Madrid, 17-VII-1733. AHPNM, protocolo 15.776, fols.
413r-413v); son las mismas que, en una ocasión anterior, habían sido descritas
como “… unas casas que estan en esta dha. Villa [de Madrid] en la calle de la
Montera subiendo de la red de Sn Luis a mano izquierda y por las espaldas
salen a la calle de los Negros (…) mano derecha con casas del conde de Moriana
y por la izquierda con casas de Francisco Labrada…” (Reconocimiento de censo
perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco, por parte de
José Hortega, sobre unas casas en la calle de la Montera. Madrid, 16-V-1733.
AHPNM, protocolo 16.134, fols. 253r-254v).
15
Reconocimiento de censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de
Ahumada y Velasco, por parte de José Hortega, sobre unas casas en la calle
de la Montera. Madrid, 16-V-1733 (AHPNM, protocolo 16.134, fols. 253r-254v);
Carta de pago, otorgada por José Hortega, sobre unos derechos del mayorazgo
de Nicolás de Ahumada. Madrid, 17-VII-1733 (AHPNM, protocolo 15.776,
fols. 412r-412v); Levantamiento, por José Hortega, del censo sobre tres casas
ubicadas en la calle de la Montera, pertenecientes al mayorazgo de Nicolás
de Ahumada y Velasco. Madrid, 17-VII-1733 (AHPNM, protocolo 15.776, fols.
413r-413v); Carta de otorgamiento de Felipe Ceballos, a favor de José Hortega,
sobre el pago de un censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada
y Velasco. Madrid, 9-I-1736 (AHPNM, protocolo 15.781, [1736] fols. 3r-3v).
Escritura de venta de unas casas en la calle Los Negros de Madrid
otorgada por el Comendador y religiosos del Convento de la Merced de esta
villa a favor de José Hortega. Madrid, 10-X-1733 (AHPNM, protocolo 14.048,
fols. 642r-648v). La finca estaba adosada entre la perteneciente al marqués de
la Vera y la que fuera propiedad de Francisco Labrada; “tubo de linea treinta
y tres pies, con lo que la toca por sus medianerias”. Diligencia de Juan Joaquín
de Novales, practicada sobre una casa de la calle Los Negros. Madrid, 7-V-1759
(Archivo de la Real Academia Nacional de Medicina [ARANM], leg. 1,2).
16
17
“Dn. Joseph de Hortega (…) dice: que está derrivando una Casa suya
propia en la Calle de los Negros, Parrochia de Sn. Luis, y para poder volver
á fabricar. Suppª. á V.S. se digne nombrar sugetos qe. demarquen el sitio
segun se practica: á cuyo efecto presenta la Planta de la fachda que intenta
hacer…” Instancia de José Hortega. Madrid, 4-V-1759 (ARANM, leg. 1,2). “En
cumplimiento de el Decreto que prezede pase á la Casa que expresa el Memorial
con el Maestro de obras Joseph Serrano y el theniemnte Visitador y demas
Dependientes y aviendose hechado los Cordeles según consta en la Dilixencia
que a continuacion de este Ynforme se ofreze…” Informe de Juan Joaquín de
Novales, Comisario del Cuartel del Carmen. Madrid, 9-V-1759 (ARANM, leg.
1,2). “El prenotado señor Capitular previno á Dn. Diego Villanueva. Director de
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
17
El inmueble sería valorado, por José Gómez, en 1761, tras
el fallecimiento de José Hortega, en 296.510 rs18.
La botica se hallaba en la planta baja del edificio; el
mobiliario estaba compuesto por unas estanterías de madera,
con puertas vidriadas, en las que encontraban acomodo un
botamen de Talavera formado por un par de docenas de jarras,
de buen tamaño, orladas en azul, más de cuatrocientos botes con
un clavel central como adorno, unos doscientos ‘botes chicos’
con su correspondiente rótulo y casi doscientas vinagreras de
vidrio; completaban la decoración un par de jarras vidriadas de
Génova. Disponía, además, de dos bancos de respaldo, un par
de bufetes de nogal, una silla de vaqueta de moscovia19 y una
mesa de pino con cajón20. De los instrumentos con que contaba
la botica también tenemos constancia: un almirez grande, un par
medianos, dos chicos y cuatro de vidrio, con sus correspondientes
manos; tres cántaras, dos de estaño y una de azófar; una azuela
de cobre con tres medidas; un embudo y su cuchara; un par de
pesos; tres potes de hierro y tres espátulas del mismo material.
La rebotica aneja contaba, también, con una estantería de
madera conformada con puertas vidriadas, estantes y cajones;
encontraban en esta planta destino media docena de sillas de paja,
dos mesas acharoladas, una escalera de pie, un bufete de caoba
grande, un armario con un par de cajones, una mesa de pino,
una prensa con su barrón, una estructura de madera similar a la
la Rl. Academia de Sn. Fernando, como á cuio cargo á de correr la referida obra
y nueva construccion, obtenga lizencia expresa de Madrid, sin el qual requisito
no á de principiar…” Diligencia de Juan Joaquín de Novales, practicada sobre
una casa de la calle Los Negros. Madrid, 7-V-1759 (ARANM, leg. 1,2).
18
Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por
fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v). La localización de la escritura de partición
de bienes fue dada a conocer por Rafael Folch Andreu (“La Botica de D. José
Hortega”. Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 3: 1-10; 97-110;
151-158; 4: 67-71; 109-115. Madrid, 1952-1953).
19
Aun cuando la vaqueta de moscovia solía ser empleada para forrar
sillas de mano, no tenemos seguridad de que éste fuera el uso de la pieza
consignada en el inventario.
Estos datos, y el resto de los que se señalan sobre los enseres del
inmueble, proceden de la Escritura de amigable partición de los bienes que
quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v); los inventarios no ofrecen
una ubicación de las piezas por estancias, la reconstrucción de los espacios
es subjetiva y obedece a nuetra interpretación de la utilidad de la pieza y su
proximidad en el inventario.
20
18
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
empleada para espadar el lino21, un armario de cuatro puertas y
ochenta y tres cajones para conservar productos de droguería.
En la rebotica parece diferenciarse un espacio de taller,
al que ocasionalmente se denomina ‘obrador’; en él se disponen
unas mamparas y unas vidrieras, con las que se dota de cierta
privacidad a esta zona acotada en la que se ubica un ‘armario de
los emplastos’, una espetera para peroles, una grada de cuatro
niveles y algunas cordialeras22; para el trabajo en el obrador
se emplea un hacha de hierro, una pala pequeña o badil, unas
tenazas y unas trébedes chicas, utensilios que nos señalan la
presencia de un horno. Completan el ajuar de la rebotica una
cincuentena de orzas de Talavera grandes, una veintena de las
medianas y una docena de las pequeñas; además de un centenar
de botes de vidrio, cincuenta grandes y otros tantos medianos,
casi una treintena de vinagreras y un gran conjunto de redomas:
setenta de agua, sesenta y seis de jarabes y sesenta y cuatro para
aceites.
La espetera de la rebotica debió ser amplia, a tenor de los
utensilios contenidos en ella: un par de alambiques de estaño con
su ollas y cabezas; otro de cobre; un par de baños de María, de
estaño, con su ollas; una marmita de hierro con tapa y asas; once
peroles de cobre de diversos tamaños; una cazuela de cobre;
una argolla de hierro con su canal; un molde, cilíndrico, para
vaciar la ‘piedra infernal’ [nitrato de plata]; un rallador y una
espumadera; cuatro cazos de latón y uno de hierro; tres peroles
y un par de anafres de hierro; tres morteros de mármol, otro de
piedra y un almirez de metal; media docena de barreños, nueve
ollas y cuatro cazuelas de barro vidriado; casi una cincuentena
de botes de Talavera; dos piedras de moler con sus moletas;
tres embudos de vidrio, un par de hojalata; tres cedazos y ocho
tamices.
Unas puertas vidriadas comunicaban la rebotica con
el patio; otras, también vidriadas, daban paso a una alcoba, y
sendas escaleras permitían el acceso a las estancias particulares
y al sotano, respectivamente; la que conducía a las habitaciones
recibía iluminación del patio a través de una vidriera.
El inventario la identifica como “Quatro cruceros, y un Cavallete”, lo
tasa en tan solo 10 rs (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
21
Hasta ocho de ellas relata el inventario: cuatro sin vidrios, una
quinta con dos puertas, otra más con una mesa de nogal y dos en el hueco de
las ventanas.
22
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
19
La alcoba de esta planta baja, aneja a la botica y a la
rebotica, debía estar ocupaba por los mancebos al servicio del
establecimiento; a ellos queda destinado un cofre viejo con dos
cerraduras, ‘dos camas de los mancebos dadas de encarnado en
cinco tablas’ y otra en cuatro tablas. De la presencia de mancebos
en la botica de José Hortega da cuenta un anuncio del Diario
noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, publicado
en Madrid, el 9 de febrero de 1758:
“En la calle de la Montera, en casa de Don Joseph
Ortega, Boticario de los Reales Exercitos de su Majestad
(que Dios guarde): darán informe de un Mancebo de
Boticario, de cuatro años de practica en Madrid, que quiere
acomodarse para Mancebo en alguna casa Botica”23.
El patio debía estar parcialmente protegido24. Próximo a
él se dispuso una ‘pieza de aguas’; tres pares de puertas vidriadas
separaban esta estancia, sus paredes estuvieron cubiertas con
andanas y en ella se contuvo una silla poltrona, una escalera
portátil, cuatro arcones para traer las aguas de Puertollano, con
sus cerraduras y baretas de hierro, ocho pies de tinajas y nueve
tapas, un baño de madera, cinco cajones de droguería y un arca
para víboras. En este ‘cuarto de aguas’ se guardaban, entre otras
piezas, un centenar de redomas de diferentes tamaños, una vasija
de las denominadas ‘castaña’ por su forma, algunos frascos para
contener líquidos, una veintena de orzas doradas destinadas a
conservas y otra veintena de vinageras.
El sótano de la casa debía ser amplio; de los útiles que
en él se conservaban parece desprenderse la doble misión de
almacén y laboratorio; se señala la existencia de tres alambiques
de vidrio con sus cabezas, otro par de barro y uno más de cobre;
un evaporador, también de cobre, ‘tres maquinas de cobre’, un
anafre de hierro y un par de culebrinas de estaño, una de ellas
con asas; una cincuentena de redomas de vidrio, media docena
de matraces, una veintena de retortas, un par de docenas de
garrafas, media docena más con forma de ‘castaña’, tres docenas
de botellas de cristal y otras cincuenta y seis más de las de cristal
negro -las utilizadas para trasportar las aguas de Puertollano-;
Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, [9-II1758]: 4. Madrid, 1758.
23
Al menos así parece indicarlo el inventario, que recoge “tres
vidrieras del Patio en la parte de abajo” y, al referirse a los objetos de hierro,
“Quatro Barillas que caen del Patio de la Botica” (AHPNM, protocolo 19.150,
fols. 280r-477v).
24
cuatro retortas y una docena de crisoles de barro; una olla
vidriada y otra de cobre; un par de tinajas de barro, una docena de
cabezas de vidrio para alambiques y algunas piezas de Talavera:
cinco orzas pequeñas, un par medianas y otro par grandes, con
capacidad para un azumbre. Completa este ajuar un ‘recado de
plata para botica’ compuesto de veinte piezas entre medidas,
embudos, cucharas y pasaderas y cuatro balanzas romanas con
catorce pesas, también en plata. Posiblemente se encontraran en
este sótano casi un centenar de piezas de cristal: jarras, botellas,
frascos y tibores, inventariados por separado, pero que componen
unidad con los objetos de la botica25; entre ellos dos piezas de
difícil interpretarción: ‘La machina del cajon’, valorada en cien
reales, y la ‘Maquina que ay encima de las cordialeras’, tasada
en ochenta reales, quizás dos máquinas eléctricas, de alguno de
los modelos difundidos por Francis Hauksbee (1666–1713), en
los comienzos del siglo XVIII, donde el cristal ocupa el lugar de
la esfera de azufre con que Otto von Guericke (1602-1686) había
dotado a su generador electrostático.
De los simples y compuestos de que disponía la botica
de Hortega, también tenemos detallado inventario, realizado
en 1761, tras la muerte de su propietario26. Contaba con una
buena sección de ‘pedrería’, en la que se incluyen esmeraldas,
topacios, zafiros, jacintos, granates, rubíes, perlas, lapislázulis,
bezoares, bolos armenios, imanes, corales y una amplia panoplia
de ‘piedras medicamentosas’; sobresalen las 55 onzas de perlas,
estimadas por el tasador en 3.222 rs.
Entre los preparados se incluyen cuarenta y seis
elaboraciones distintas: lapislázuli, ojos de cangrejo, corales,
cinabrio nativo, madreperlas, marfil, mandíbula de pez lucio,
diente de jabalí, polvos de castóreo, polvos de pulmón de zorro
y un largo etcétera entre los que destacan, por sus valores de
tasación, las seis onzas de preparado de rubí (320 rs) y las ocho
onzas de preparado de esmeraldas (192 rs); las más abundantes
resultan dos libras de cristal montano (32 rs) y otras dos de
cuerno de ciervo (16 rs).
Los láudanos son pocos, tan sólo cuatro tipos reconoce el
inventario: opiado, histórico, de cinabrio –el más abundante, dos
Fueron adjudicados, en su totalidad, a la hijuela correspondiente a
Casimiro Gómez Ortega (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
25
Como en el caso anterior, también todos los objetos de botica
pasaron a la hijuela de Casimiro Gómez Ortega (AHPNM, protocolo 19.150,
fols. 280r-477v).
26
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
21
onzas- y urinario –el disponible en menor cantidad, tan sólo dos
dracmas-.
Las tinturas son abundantes: anticólica, uretrina, de
mirra, de antimonio, de succino, de contrayerva, de cascarilla, de
cidra, de Paracelso, de alcanfor, de benjuí, de corteza de naranja,
de azafrán, de ámbar gris y muchas más, hasta cuarenta y dos
refiere el inventario; el licor anodino de Hoffman despunta en la
tasación, las veinticuatro onzas de él disponibles suponen 192 rs;
el preparado en mayor cantidad son cuatro libras de la ‘tintura
de marte’ con vinagre, tasadas en 16 rs.
De licores o ‘espíritus’ disponía de hasta treinta y siete
tipos diferentes: carminativo de Silvio, de espliego compuesto,
de azufre volátil, de cardenillo, de lombrices, de víboras, de cidra,
de rosas, de enebros, de claras de huevo, etc.; la tasación más alta,
320 rs, corresponde a las dos onzas de vino rectificado, seguido
de los 192 rs en que se valoran las 64 onzas del de clocaria; en
cantidad preparada priman las cuatro libras de vitriolo ácido,
tasadas en 64 rs y las tres libras del de hollín (90 rs), de lombrices
(48 rs) y de succino (48 rs).
Aceites empireumáticos dispuso de diecinueve tipos
distintos: de jabón, de mirra, de antimonio, de azufre, de cera,
de calabaza, de víboras, etc.; la mayor tasación corresponde a
las dos libras de aceite tridentino (64 rs); el preparado en mayor
cantidad es un aceite de Pacorno, del que tenía disponibles cinco
libras (80 rs).
Contó aún de más alta variedad de aceites comunes,
hasta treinta trazas diferentes: ruda, trementina, rábanos,
Agripa, Aparicio, lombrices, alcaparras, romeros, etc.; tres libras
de aceite de Mathiolo quedaron tasadas en 150 rs; debió usar con
abundancia el aceite de almendras dulces, en el inventario figura
media arroba, tasada en 125 rs.
También estuvo bien surtido de ungüentos, hasta cuarenta
y ocho fórmulas distintas contabiliza el inventario de su botica
en 1761: manteca de azahar, blanco, alcanforado, sarraceno, de
altea, de cantáridas, egipciaco, rosado, de Galeno, de Agripa,
de corteza de castaña, etc.; la tasación reserva el precio más
alto, 160 rs, para una libra del ungüento de enjundia humana;
los preparados en mayor cantidad son dos medias arrobas de
pomada (125 rs) y litargirio (50 rs).
Los emplastos ocuparon, también, un buen espacio en
esta botica, hasta cuarenta y una composiciones distintas se
22
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
contemplan en el inventario que nos ocupa: de bayas de laurel,
de meliloto, matrialcal, de centaurea, de cicuta, de betónica, de
almáciga, de gálvano colado, etc.; a destacar las veinte libras
del emplasto de Guillén Servén [sub Cerven], tasadas en 70 rs;
el precio más alto de esta sección lo alcanzan las tres libras del
emplasto estíptico de Crolio, tasadas en 75 rs, seguido de las
doce libras del emplasto de jabón, valoradas en 72 rs.
De extractos dispuso de hasta veintitrés composiciones
diferentes: fumaria, tila, toronjil, ajenjos, acíbar, celidonia o
centaurea, comparten espacio con eléboro negro, jalapa o azafrán;
en 120 rs fueron tasadas las cuatro onzas de extracto de ruibarbo
y en 100 rs la media libra de extracto de opio; el preparado en
cantidad mayor son las dos libras del extracto de coclearia (20
rs).
Contó con un auténtico arsenal de ‘gomas’, hasta 53
preparaciones distintas: arábiga, escamonea, mirra, opio, benjuí,
incienso, tragacanto, pez griega, minio, limaduras de hierro,
plomo quemado, alumbre y alcanfor entre ellas; una arroba de
goma de agárico queda tasada en 400 rs; en mayor cantidad, tres
arrobas, tenía preparado los extractos de resina (42 rs) y de bolo
armenio (18 rs).
Las píldoras figuran en veintiún tipos: benedictinas
de Füller, histéricas, mesentéricas, etiópicas, de almáciga, de
ruibarbo, contra el fuego del vientre, etc.; destacan las dos libras
de las de palo santo, valoradas en 64 rs, las de más alto precio y
las preparadas en mayor cantidad.
Hasta siete ‘sales chímicas’ encontramos en la botica
de Hortega: de cuerno de ciervo, succino, víboras, lombrices,
milpiés, amoníaco y amoníaco aromáticas; las preparadas en
mayor cantidad –y también las cotizadas a más alto precio- son
las de succino: sus dieciseis onzas se tasan en 800 rs.
Entre las inventariadas como ‘sales’ contamos con treinta
y cinco fórmulas diferentes, figuran algunas de origen vegetal,
como las de quina, ajenjo, genciana o centaurea menor, junto
a otras químicas como la febrífuga de Silvio, sal policresta,
antimonio diaforético o sal de Marte. La sal de amoníaco fue la
disponible en mayor cantidad (24 libras, 384 rs); el precio más
alto, 600 rs, corresponde a las veintiuna libras de tartaro soluble.
Los ‘preparados de antimonio’ constituyen, en este
inventario, un capítulo diferenciado, cuarenta y tres tipos
diferentes figuran en él: manteca de antimonio, disolución
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
23
de Saturno, panacea mercurial, flores blancas de antimonio,
arcano coralino, ente de Venus, etc.; el valor más alto de tasación
corresponde a una libra de bezoárdico jovial (320 rs); el preparado
en mayor cantidad son las diez libras de cerusa de antimonio,
tasadas en tan solo 16 rs.
La botica de Hortega dispuso de veintinueve tipos de
aceites esenciales: de clavo, bergamonta, nuez moscada destilada,
naranja, cidra, azahar, espliego, hinojo, salvia, mejorana, cantueso,
agenjo, canela, benjuí, mostaza, etc.; casi todos preparados en
poca cantidad, salvo una libra de aceite de romero (96 rs); el de
más alto precio es el aceite esencial de naranja, las veinte onzas
con que contó la botica se tasaron en 240 rs.
Bajo el epígrefe de ‘confecciones’ recoge el inventario
treinta y cuatro preparados: de jacintos, matritense, mitridato,
conserva en flor de claveles, de violeta, de rosa, de jara compuesta,
coloquíntidas, de melocotón, antitísica de Junken, etc.; la tasación
más elevada del grupo corresponde a las ocho onzas de triaca
celeste, valoradas en 480 rs; la preparada en mayor cantidad
es una arroba de diacatalicón y jirapliega, de efecto purgante,
valorada en 125 rs.
Los oleosácaros son pocos, tan sólo cuatro: de canela,
naranja, cidra e hinojo; de los tres primeros dispuso de dos onzas,
del último sólo de una.
Más son los bálsamos, cuarenta y uno figuran en
el inventario de 1761: de Fioravanti, copaiba, terebinto, de
Saturno, venéreo, católico, betún judaico, etc.; la tasación más
alta la alcanzan las once libras de bálsamo peruviano, 480 rs; el
preparado en mayor cantidad es la sal de Inglaterra, dispuso de
una arroba, tasada en 125 rs.
De polvos figuran cuarenta y un tipos: dentífricos, de
eléboro negro, lirios de Florencia, Serpentaria virginiana, zarza,
sen, ruibarbo tostado, y otros de origen químico: etiope mineral,
flor de azufre, magnesia oftálmica, azafrán de Marte, etc.; en 180
rs se tasan las dieciocho libras de polvos de Tucia, la cantidad
más alta de producto, junto a igual cantidad de un ‘polvo verde’
(24 rs).
El epígrafe dedicado a ‘raices’ incluye setenta y dos
productos distintos, dentro de un concepto excesivamente
amplio; en su mayoría alude a cortezas: palo santo, cascarilla,
saxafrás, alcaparras; en otros a frutos: membrillo inmaduro,
pimienta larga; y, en algunas ocasiones, a artículos bien alejados
24
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de la idea de raíz: cantáridas, piedra pómez, víboras secas,
culebras, estiércol de lagarto; por supuesto, también incluye
algunas raíces sensu stricto: contrayerva, raíz de China, raíz de
lino, etc.; disponía de abundantes cantidades de estas ‘raíces’:
dos arrobas de palo santo (75 rs), una de saxafrás (87 rs) y otra
de quina escogida (750 rs) se contabilizan en su haber; el coste
mayor corresponde a las cortezas de quina.
Las ‘flores’ sí concuerdan con el concepto habitual del
producto; tuvo espliego, romero, malva, cantueso, azahar,
retama, amapola, melocotón, rosa…, y así hasta las dieciocho
listadas en el inventario, todas de bajo precio: media arroba de
flores de romero se tasan en 8 rs y la arroba de flores de malva
en 6 rs.
Las ‘yerbas’ suman treinta y seis especies distintas:
violeta, meliloto, eneldo, toronjil, fumaria, betónica, culantrillo,
pulmonaria, etc.; en la tasación sobresalen los 74 rs en que se
valora la media arroba de coloquíntida –quizás la pulpa de su
fruto, de acción purgante-, la media arroba de cebolla albarrana
–sin duda el bulbo de la planta- se tasa tan sólo en 4 rs, al igual
que la medida arroba de ajenjos, o la de artemisa.
Hortega dispuso de tres tipos de harinas: cebada, avena y
habas; la primera en mayor cantidad, ocho libras.
Entre las ‘simientes’, se recogen en el inventario hasta
cuarenta y ocho distintas: cártamo, lino, melón, calabaza, sandía,
eneldo, perejil, cardo santo, albahaca, rábanos, hortigas, etc.;
despuntan, en peso, la arroba de cártamo (25 rs), alholva (8 rs),
lino (16 rs), melón (25 rs) y calabaza (30 rs).
Los jarabes están representados, en la botica de Hortega,
por cincuenta y ocho tipos distintos: mora, limón, cuatro raíces,
tusílago, balsámico, corteza de cidra, fumaria, membrillo, coral,
calabaza, culantrillo, etc.; la tasación mayor corresponde a las
diez libras de rhamno catártico, valoradas en 120 rs; en lo relativo
a volumen se señalan, además del de rhamno ya comentado, las
ocho libras del de claveles (80 rs), yodo sácaro (48 rs), escorbútico
de la Bateana (96 rs), cerúleo (96 rs) y corteza de cidra (64 rs).
Las aguas componen, también, parte importante del
arsenal terapéutico; hasta cincuenta y tres tipos distintos ofrece
el inventario: vulneraria, de nueces verdes, de lirios del valle,
de ruda, de hinojo, de rosas, de ranas, y algunas más complejas:
palata, triacal, de vitriolo y orina, etc.; media arroba de agua de
rubia quedó tasada en 200 rs, una arroba de la de manzanilla en
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
25
25 rs, la misma cantidad de la de borraja en 18 rs, al igual que la
de achicoria.
Tasación de los efectos pertenecientes a la botica de José Hortega
[1761] *
Producto
Pedrería
Láudanos
Tasa
5.131 rs 00 ms
138 rs 00 ms
Producto
Tasa
Preparados
1.190 rs 00 ms
Tinturas
1.201 rs 00 ms
Espíritus
1.457 rs 00 ms
Aceites comunes
1.070 rs 00 ms
Aceites
empireumáticos
Ungüentos
Emplantos
1.171 rs 00 ms
Extractos
662 rs 00 ms
Gomas
4.948 rs 17 ms
Píldoras
198 rs 00 ms
Sales ‘chimicas’
1.425 rs 00 ms
Sales
1.821 rs 00 ms
Preparados del
antimonio
Confecciones
1.937 rs 17 ms
Aceites esenciales
1.509 rs 00 ms
1.303 rs 17 ms
Oleosácaros
104 rs 00 ms
Bálsamos
2.171 rs 00 ms
Polvos
572 rs 00 ms
Raíces
3.770 rs 17 ms
Flores
190 rs 17 ms
Yerbas
290 rs 00 ms
Harinas
209 rs 00 ms
Jarabes
Simientes
Aguas
1.672 rs 00 ms
417 rs 00 ms
1.100 rs 00 ms
30 rs 00 ms
1.712 rs 00 ms
Total
37.400 rs 17 ms
* Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento
de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v).
Las ‘Noticias de Comercio’ publicadas por el Diario
noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico de Madrid
dan cuenta de la actividad de la botica de José Hortega y de la
calidad de su clientela:
“Se perdió el día 18 del mes de Abril una Caxa
de tabaco, que forma un caracol, con pintas encarnadas,
y montada en plata: se acudirá para la restitucion á la
Botica de Ortega, calle de la Montera, en donde darán el
hallazgo”27.
“La persona que por descuido huviere dexado
una Cuchara de plata sobre uno de los mostradores de la
27
Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, [2-V1758]: 3. Madrid, 1758.
26
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Botica de Don Joseph Ortega, calle de la Montera, que la
hallaron hará algunos meses, acuda á cualquiera de los
Mancebos, los que la entregarán á quien diere ciertas
señas”28.
Una selecta clientela de la que también nos informan las
escrituras notariales; entre sus parroquianos figuran los familiares
del duque de Veraguas, Pedro Nuño Colón de Portugal (16761733)29; el batidor de oro Diego Fernández30, María Regalada
de Villalpando (1670-1738), marquesa de Osera31, Leonardo
Deuberberg32; y un amplio listado de nombres que nos facilita
la relación de deudores incorporada a la partición de bienes de
quien fuera el propietario de esta botica33.
28
Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, [1-VI1758]: 3. Madrid, 1758.
29
“Por la quenta, que se ha ajustado en esta conttaduria, á Alphonso
Gusano Votticario de S.E. y á Joseph Orttega, que lo fue de su familia, consta,
se les quedo deviendo por las medicinas que sacaron de sus tiendas hastta el
dia quatro de julio de mil setteztos y treinta tres dos mil trescientos y sessentta
un y cattorze mrs de vn lo que se consigna aquí…” Testamentaría del duque
de Veraguas. Madrid, 10-VII-1733 (AHPNM, protocolo 14.188, fols. 102v-103r).
30
“Item devo á Dn Joseph Ortega, Boticario en la calle de la Montera lo
que constase por las rezettas que presentara de las medizinas que se gastaron
en la enfermedad de (…) mi mujer…” Memorial y relación jurada que Diego
Fernández, batidor de oro haze de los acreedores y deudas contraídas. Madrid,
19-VIII-1735 (AHPNM, protocolo 16.098, fols. 1r-2r). Este conjunto de recetas
ha sido estudiado por N. Floro Andrés Rodríguez (“Preparaciones magistrales
del siglo XVIII”. Boletin de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 38
(149/150): 179-199. Madrid, 1987).
Informa de ello Diego de Guerra “á cuio cuidado án corrido las
Dependencias de la Cassa de la Excma. Señora Marquesa de Ossera mi señora
qe esta en el Cielo”, quien incluye, entre las deudas particulares reconocidas,
“A Joseph Ortega, Boticario en la Red de San Luis se le deven doscientos y
quarenta rs. de las medicinas especiales que de su Botica sacaron para mi
señora…” Testamentaría de la marquesa de Osera. Madrid, 16-VII-1738
(AHPNM, protocolo 15.223, fol. 627r).
31
32
“... ciento treinta y ocho rs que se han pagado a Joseph Hortega
boticario de la calle de la Montera por las medizinas que gastaron en la ultima
enfermedad de dho Dn. Lamberto en cuia cantidad fueron ajustadas las rezetas
que de ello entrego”. Inventario y tasación de los bienes, hacienda y efectos que
han quedado por la muerte de Lamberto Deuberbeg, vecino que fue de esta
villa. Madrid, 9-III-1737 (AHPNM, protocolo 17.141, fol. 448r).
33
Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por
fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Estos créditos no fueron contemplados en la
valoración de bienes, pero sí quedan reflejados en la testamentaría: “Declaramos
los otorgantes que de todo lo que se recobrase de los creditos a favor de esta
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
27
Reconocimientos de deudas por medicamentos procedentes de la
botica de José Hortega. 24-VI-1761*
Deudor
Marqués de Estepa
[hasta 21-I-1761]
Príncipe de Orange
Cantidad
adeudada
33.191 rs 00 ms
Deudor
Vicente Alegría
Cantidad
adeudada
143 rs 00 ms
10.000 rs 00 ms
Julian de Vascuñana
100 rs 00 ms
Convento del
Carmen Calzado
Gaspar Salza
9.000 rs 00 ms
Juan Trigueros
96 rs 00 ms
7.723 rs 00 ms
94 rs 00 ms
Príncipe de
Macerano
José de Praga
4.033 rs 00 ms
2.929 rs 00 ms
Marqués de la
Regalía
Juan Bautista
Lastroyero
Duquesa del Populi
Martín Martínez y
hermanos
Francisco Bruno
Labradía
José Ignacio Torres
2.253 rs 22 ms
Pinto Miguel
77 rs 00 ms
1.440 rs 00 ms
Gordezuela
76 rs 00 ms
1.400 rs 00 ms
Andrade
70 rs. 00 ms
Juan Valera
1.310 rs 00 ms
Gómez
67 rs. 00 ms
Sebastián
Fernández de Elices
Ramón de la Cruz
1.211 rs 00 ms
Juan de Palafox
66 rs. 00 ms
1.200 rs 00 ms
Gramont
59 rs. 00 ms
Duque de
Bournombila
Manuel de Erre
1.132 rs 00 ms
Ardit
53 rs. 00 ms
1.014 rs 00 ms
Rubián
52 rs. 00 ms
Duque de Veraguas
1.057 rs 00 ms
Quijarro
50 rs. 00 ms
85 rs 00 ms
79 rs 00 ms
Diego Sada Parada
994 rs 00 ms
Jerónimo Conde
47 rs. 00 ms
Embajador de
Alemania
José Miguel de
Quebec
Francisco de
Cepeda
José Rogamas
802 rs 00 ms
Trabiesso
45 rs. 00 ms
740 rs 00 ms
42 rs. 00 ms
725 rs 00 ms
Conde de
Valdehermoso
Príncipe Bergeri
674 rs 00 ms
Ustariz
28 rs. 00 ms
José Real
600 rs 00 ms
Larrea
23 rs. 00 ms
Conde de la Coruña
529 rs 00 ms
20 rs. 00 ms
Benito Hernández
450 rs 00 ms
Embajador de
Venecia
Marqués de la Roca
31 rs. 00 ms
19 rs. 00 ms
testamentaría que resultan de la escta. que en este mismo dia se otorga (…) deben
hacerse dos partes yguales, la una para la mencionada Dª Mariana Llorente
(…) deduciendose lo que resultase importar el quinto [destinado a los nietos de
Mariana Aztina] (…) y la otra para el expresado Dn. Casimiro Gómez Ortega…”
28
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Blas de Lesso
367 rs 00 ms
Felipe Nápoles
19 rs. 00 ms
Salvador de la Mota
364 rs 00 ms
18 rs. 00 ms
Agustin Navarro
360 rs 00 ms
Campanero de San
Luis
Domingo de la Hoz
Manuel Calvo
300 rs 00 ms
Hamileon
17 rs. 00 ms
Felipe Murillo
240 rs 00 ms
Conde de Lemus
16 rs. 00 ms
José Orco
240 rs. 00 ms
Lazuela
16 rs. 00 ms
Pedro de Yebes
212 rs 00 ms
Antonio Gálvez
16 rs. 00 ms
Conde de
Valparaiso
Pedro Estuardo
211 rs 00 ms
Fábrica de Zaragoza
16 rs. 00 ms
204 rs 00 ms
12 rs. 00 ms
Tomás de Castro
Colona
Gorba
198 rs 00 ms
Marqués de la
Victoria
Marquesa de
Montemar
Navarro
Catalina de Ramos
137 rs 00 ms
184 rs 00 ms
17 rs. 00 ms
12 rs. 00 ms
12 rs. 00 ms
* Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento
de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v).
No siempre el cobro de estas recetas fue fácil; tal las
dispensadas para Diego Fernández, batidor de oro, para quien,
entre los años 1732 a 1735, José Hortega elaboró 49 recetas,
purgantes y laxantes en su mayoría34, cuya suma hubo de ser
reclamada en concurso de acreedores35.
En cualquier caso, los datos aportados nos permiten
afirmar que José Hortega dispuso de una botica bien surtida;
buena parte de su éxito se debio al trabajo que realizara Luis
Llorente, su anterior propietario, quien elevó sustancialmente la
calidad y cantidad de sus materiales frente a los que recogió de
34
Hay también bastantes recetas para el tratamiento de enfermedades
respiratorias, antidiarreicos, tónicos estomacales y digestivos, antiartríticos y
antirreumáticos y algún antivenéreo (cf. N. Floro Andrés Rodríguez, Op. cit.
nota 30. 1987).
José Hortega justificará, tras aportar las recetas: “Importan estas rezs.
que se han despachado en mi Botica para Casa del Sr. Diego Fernz. en los años
de [17]32-33-34 y [17]35 rs mill quatrocientos, y cinquenta, y ocho rs vn de cuya
cantidad baxado el tercio segun estilo quedan ligs. // novecientos, y setenta y
dos rs de vn salvo error. Md. y Septbre 1º de 1735 // Son 972 rs.vn [firmado, José
Hortega]”. Ante lo cual el juez setenciará: “Que a Dn. Joseph Ortega vezino y
boticario de esta Corte, con los bienes de dicho Concurso se le paguen 972 rs
prozedidos de receptas por generos sacados de su Botica [firma el escribano,
Silvestre Fernández de Lara]”. Concurso de acreedores de Diego Fernández.
Madrid, [1735] (AHPNM, protocolo 16.098, fol. 220r y 219r).
35
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
29
Ignacio de la Peña. Más signativa nos parece la relación entre
lo que representa el valor de la botica frente al total de bienes
del boticario: la práctica totalidad de su haber en el caso de
Ignacio de la Peña; algo más de la mitad de su patrimonio para
Luis Llorente; y aún menos del cuarto de sus bienes para José
Hortega. Resulta evidente un aumento en el potencial económico
del boticario en la primera mitad del XVIII, al menos en la serie
de quienes trabajaron en la botica de la calle de la Montera.
Tasaciones de la botica, y del total de bienes, pertenecientes a los
boticarios establecidos en la calle de la Montera (1710-1761)
Fecha
1710. 24-I
Boticario
Ignacio de la Peña*
Tasación de bienes
11.270 rs 17 ms
Tasacion de la botica
10.275 rs 00 ms
[91.17%]
* “Ynventario y tasazn. de los bienes que quedaron por muerte de Ignacio de la
Peña. Boticario qe. fue de esta villa”. Protocolo del escribano Francisco Nicolás
Cascajedo. Madrid, 1710 (AHPNM, protocolo 14.980, fols. 117r-185r); la tasación
de la botica fue realizada, el 24-I-1710, por Martín de Zufibia y Francisco de
Sienes, asistidos por Diego Bartolomé, en representación del Protomedicato;
del resto de los bienes: mobiliario, ropas y pinturas, se ocuparon Francisco
Rodríguez del Pozo y Antonio Serratón
1722. 27-VIII Luis Llorente**
80.675 rs 00 ms
49.715 rs 00 ms
[61.62%]
** Inventario de los bienes de Luis Llorente. Madrid, 22-VIII-1722 / 12-IX1722, protocolizado ante Juan Féliz del Valle (AHPNM, protocolo 14.100, fols.
101r-136r); de la tasación de la botica se ocuparon José Manzano y Manuel
de Lamas, boticarios de la Corte; la tasación de las pinturas corrió a cargo
de Salvador Martínez Jordán; la de la ropa blanca, de la costurera Francisca
Martina; la de los vestidos, el sastre Mateo Recuero; la de de los muebles de
madera y nogal, el carpintero Felipe Portello y de la de los cobres y demás
mobiliario de la cocina, se ocupó el calderero Felipe de Linares.
1761. 24-VI José Hortega***
327.009 rs 01 ms
64.323 rs 22 ms
[19,67%]
*** Incluimos la totalidad de la biblioteca (14.356 rs 00 ms), los productos (37.400
rs 17 ms) y utensilios conservados en la botica (2.867 rs 00 ms), la rebotica (1095
rs 00 ms), el cuarto de aguas (505 rs 17 ms), la espetera de la botica (2.666 rs 11
ms), el sótano (4742 rs 11 ms) y el cristal (691 rs); no podemos contabilizar el
monto del mobiliario, difícil de deslindar entre el propio de la botica y el del
domicilio particular. (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
Una acomodada vivienda
Los espacios de la zona habitada del inmueble son difíciles de
delimitar con la información disponible; vaya por delante que
todas las puertas que separan las estancias eran vidriadas, lo que
debió dar una amplia luminosidad a las habitaciones. El inmueble
constó de tres plantas: un bajo, donde se encontraba instalada
30
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
la botica, un principal y un segundo; disponía, también, de un
sótano y de un desván.
Además del dormitorio destinado a los mancebos, anejo
a la botica y del que nos hemos ocupado líneas arriba, debieron
disponerse, al menos, otras seis alcobas: una de ellas estaba
amueblada con una cama verde con su cabecero, un arca de
cedro con cerradura y llaves, un bufete pequeño de nogal con
cubierta de badana y un respaldo de cama de cuero amarillo;
otra se situó en la zona del edificio orientada sobre la calle de los
Negros36, en ella debió ubicarse una cama torneada y dos camas
de cuatro tablas; quizás se trate de la habitación destinada al
servicio; nos consta que, al menos en 1734, habitó en el domicilio
Manuela López37. Los demás dormitorios debieron situarse en
la zona principal de la casa38, al menos fueron cuatro, a tenor de
las camas que se indican en los inventarios: una cama verde de
cuatro tablas y un tocador de charol con su espejo y cuatro cajones
debió constituir el mobiliario del primero; una cama torneada
dada de blanco con siete tablas debió ubicarse en el segundo;
una cama torneada dada de blanco con cuatro tablas compuso
el tercero y dos catres de haya conformaron el cuarto; entre ellos
se distribuyeron algunos muebles auxiliares: una mesa redonda
en blanco, un espejo con una luna de dos tercios, unos pies de
cama, una mampara de badana amarilla y un “Escaparate con
36
Los inventarios aluden a “Unas vidrieras que estan en el pasillo de
la alcoba de la calle de los Negros” (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
37
“… que resido en casa de Dn. Joseph de Ortega de ocupacion Boticario
(…) Declaro soi pobre de solemnidad y como tal me mantienen en su casa el
referido Dn Joseph de Ortega y Dª Mariana de Aztina su mujer mediante lo qual
no teniendo como no tengo vienes ni hazienda alguna para costerar mi entierro,
ni para mandar se haga vien por mi alma, atento a lo referuido pido y suplico
al Señor Cura o theniente de la Parrochial del Señor San Gines de esta Corte y a
el theniente del Señor de San Luis anejo de esta parrochia del Señor San Gines
donde a el presente soi parrochiana ó a los de donde fuere al tiempo de mi
fallecimiento sean servidos de mandar se me entierre de limosna. Y hagan todo
el vien qe pudieren por mi anima como lo acostumbran hazer con otros pobres
de solemnidad como yo qe Dios les pagara en buena hora…” Declaración de
pobre de Manuela López. Madrid, 29-XII-1734; actúan como testigos Cristóbal
García Carretero, Patricio Riel Martínez y Julián de Roda Castillo, “no lo firmo
por qe dijo no saber a su ruego lo firmo uno de los testigos” (AHPNM, protocolo
14.101, fols. 438r-439r).
Todos ellos, junto a los de la ‘sala de ocio’ que luego describiremos,
quedaron asignados a Mariana Llorente (AHPNM, protocolo 19.150, fols.
280r-477v), por lo que pensamos que constituyen un espacio físico común.
38
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
31
un Sn Joseph, y su mesa con remate de Bronce”, a buen seguro
perteneciente al dormitorio principal.
Otro espacio quedó dedicado a lugar de ocio: un cofre
tumbón de pellejo de caballo con cerradura y llave, otro cofre de
camino forrado de igual material, un oratorio de dos cajones, una
mesa de jugar de nogal con dos cajones forrada en paño verde,
una grada de tres peldaños y un bufete pequeño con los pies
de nogal torneado y cubiertos con distintas maderas y conchas
debió conformar su mobiliario.
La biblioteca fue la más amplia de las habitaciones de la
casa, su paso se franqueba a través de ‘tres puertas vidriadas con
vidrios entrefinos’; además de los muebles destinados a contener
los libros de su propietario39, la estancia dispuso de chimenea
francesa, con pantalla de hojalata, rodapiés y protección de nogal
guarnecido de damasco, sobre la que se situó un espejo con su
adorno dorado y jaspeado; para el trabajo en la chimenea se contó
con dos tenazas de hierro con su badil y urgadero y dos morillos
de hierro; la iluminación de la sala se conseguía con una araña
de dos cuerpos, con doce luces, la única lámpara con que debió
contar la casa. En la sala se dispuso una mesa de juegos, con forro
de damasco, media docena de sillas poltronas, una docena de
taburetes de nogal forrados de damasco carmesí, otra docena de
taburetes de charol y una silla blanca, tallada, guarnicionada de
carmesí, quizás la destinada a la presidencia de la Real Academia
Médica Matritense, que habría de reunirse en este espacio.
Completaban la estancia un tocador con su espejo de nogal,
embutido de distintas maderas; un cofre tumbón guarnecido
de baqueta de moscovia, otro de baqueta con dos cerraduras;
un bufete de nogal con los pies torneados y un tapete de paño
verde; un par de escritorios con cajones de nogal y cerraduras;
dos alacenas acristaladas, una de ellas con seis puertas en el
cuerpo inferior; una banca de pino, destinada a guardar la plata;
una mesa camilla con cuatro pies torneados y dos espléndidas
cómodas, realizadas en Inglaterra, con tapa de mármol y cajones
de madera con aldabones en bronce40.
Ubicado en la biblioteca, o en una sala próxima a ésta, se
dispuso el gabinete de Historia Natural; “barias piezs y fracmtos
39
Sólo “la Madera de la Llibreria” queda tasada en 1.300 rs (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
40
Constituyen éstas las piezas muebles que gozaron de más alta
tasación, 2.700 rs (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
32
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de los reyns Animal, Mineral, que adornan el Gavinete de Histª
nat. (…) tassado en tres mil rs. vn” según relata el inventario de
bienes de José Hortega levantado tras su fallecimiento.
Aneja a la biblioteca debió quedar una sala dedicada
a servir de auxilio a ésta principal; un tablero de damasco, un
bufete de nogal con pies torneados, otro de nogal y hierro, un
armario con cerradura, otro de dos cuerpos, un tercero con
puertas y cerraduras, una docena de sillas ordinarias, una mesa
redonda de charol y un pie de tinaja debieron encontrarse entre
sus enseres.
La estancia utilizada como cocina dispuso de tres pies de
tinajas, un tajo de picar, una mesa con cajón, una percha de madera
para colgar los utensilios de cobre, un fregadero de madera con
dos artesas, unos fuelles y un cubo. Los utensilios que componían
la espetera de la cocina quedan también inventariados: cazos y
perolas de cobre, otros de latón, media docena de velones de
diferentes tamaños, un almirez de seis libras y media de peso,
doce calderos de latón, un tarro de cobre, tres chocolateras, un
par de ollas de cobre y una buena copa de azófar.
Aneja a esta estancia queda un ‘cuarto oscuro’41,
probablemente una zona de almacén. No lejos debió estar un
espacio destinado al cuidado de la ropa: una ‘camilla de secar
la ropa’ y una ‘arquilla vieja sin llave ni cerradura’ debieron
encontrar aquí acomodo.
El inmueble contó con un desván; en 1761 habían recaído
en él una artesa de salar tocino, una “mesa de nuebe pies de
largo de quita y pon con sus pies”, un escritorio viejo, un bufete
pequeño de nogal, ocho bastidores, dos cajones -que fueron de la
botica- con sus aldabones, una rinconera de charol, un colgador
de vestidor con su pie, un cofre con sus llaves y cerraduras, media
docena de sitiales con sus cubiertas de badana y tres jofainas de
brasero.
Las pinturas que ornaron la casa no fueron muchas y, a
tenor de lo tasado, no eran de gran calidad; sobresalen las piezas
de temática religiosa: una lámina de San José, un cuadro de ‘Nra
Señora de México’, otro con la representación de la parábola del
rico avariento, una adoración de los Reyes, un Jesucristo con
marco dorado y una Concepción de igual moldura; también
dispuso de algunos con motivos decorativos más profanos:
41
Los inventarios aluden a ‘una vidriera del cuarto oscuro’ (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
33
cuatro bodegones de flores, de gran tamaño42; otros cuatro, algo
menores, de igual tema43; una representación de un pájaro ‘con
su marco dorado’, dos láminas de cobre enmarcadas en negro,
dos “Paísajes de una vara de largo y tres quartas de ancho, con
marcos dorados” y un cuadro apaisado de ‘muchachos’.
Acompañaban a las pinturas cuatro tapices que recreaban
temas de Historia Sagrada44. Completan la decoración de las
paredes, además de los espejos de madera, ya consignados en
los dormitorios, uno de marco negro de una vara, otro par de
lunas, de igual tamaño, con su adorno dorado y media docena
de cornucopias de luna, también de una vara de longitud. Para
proteger el suelo, probablemente el de la biblioteca, se dispuso
de una alfombra turca y de un tapete de Liétor.
El equipamiento textil de la casa también nos es
conocido: lienzos de distintas calidades, desde el sutil cambray
(2 varas), hasta el delgado y vasto bocadillo (33 varas, 4rs/vara),
pasando por algodón (8 varas), morlés (5 varas), true (34 varas),
cambaryón (5 varas), cotanza (25 varas), gusanillo (18,5 varas) y,
el más común, lienzo de León (67 varas); un juego de manteles de
Flandes, otro adamascado, ocho servilletas de gusanillo y otras
veinte de lienzo de León, diez tablas de manteles con dieciocho
servilletas; media docena de toallas; seis cortinas blancas; una
colcha de gusanillo y otras cinco de lienzo ordinario, cuarenta
y seis almohadas, ocho sábanas de lienzo de La Coruña, otras
tres de cotanza, veintiocho sábanas ‘de familia’ y once sábanas
más. Completan el ajuar doméstico nueve camisas de hombre
y seis camisolas sin hacer. Se añaden a él once mantas y dos
colchas manchegas; cinco colchones buenos poblados de lana,
una hijuela compañera de los colchones, catorce colchones ‘de
familia’ de peor calidad, dos colchones de catre y veintidós
fundas para colchón.
El cortinaje de la casa queda globalmente inventariado;
además de las cortinas blancas ya consignadas como lienzos,
se añaden otras ciento catorce varas “de lienzo pintado de las
cortins (…), una cortina nubarada de coton que tiene nuebe varas
42
“Quatro floreros de á bara, y tres quarts de ancho con su marco oscuro
en quatrocientos, y ochenta rs”(AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
“…quatro floreros de a media bara de alto, y mas de tercia de ancho,
en tres cientos rs”(AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
43
Éstos tenían “de corrida, veinte y tres anás por cinco de cayda que
hacen en quadro ciento y quince anás, valen mill rs. vn” (AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v).
44
34
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
(…) cortinas de bayeta encarnada viejas, que tienen veinte y siete
varas (…) diferentes cortinas de tafetan anubarradas (…) estopa
de la parte de afuera de los Balcones…”
La loza de china, utilizada para el servicio de la casa,
estaba compuesta por dos orzas largas con sus tapas, sesenta y
dos platos de vajilla, otros cuatro platos más para servir, cinco
fuentes, tres ensaladeras, treinta y un platos con sus jícaras para
tomar chocolate, dieciocho jícaras más y tres tazas sueltas, tres
teteras, ocho vasos y dos jarras.
Los objetos de plata que fueran propiedad de la casa
quedaron tasados al peso, supusieron en total 785 onzas y cinco
ochavos45; buena parte eran utensilios para el servicio de mesa:
dieciocho platos trincheros con molduras torneadas, un plato
grande con moldura y dos asas, tres azafates cincelados con
hojas y flores, seis macerinas ovadas decoradas con galones y
con sus pocillos soldados, una salvilla con moldura torneada y
pie atornillado con nudete, una cazuela con dos asideros y tapa,
dieciocho cucharas de plata y tres cucharones, nueve cuchillos y
dos tronchantes, una bandeja rectangular cincelada -y maltratada-,
tres tembladeras con dos asas cada una, tres vasos redondos y
un salero ovado con dos tapas engrosadas. No podían faltar un
par de candelabros con plantillas y mecheros ochavados y un
platillo y tijeras de espabilar; se completa la serie con algunos
útiles de escritorio: un tintero de plata y una salvadera; y algunos
otros artículos de uso doméstico: una palangana con moldura y
asa, una pila de plata con pilón rematada en una cruz de chapa,
una campanilla -sin badajo-, una hebilla, un pedazo de cadena y
algunas piezas menores fuera de uso.
No cabe duda de que José Hortega disfrutó de sobrados
medios económicos, e hizo ostentación de ello; en carta de Pehr
Löfling dirigida a Carl Linné, fechada el 15 de octubre de 1753,
escribirá:
“El Sr. Ortega logró la semana pasada doble
sueldo, y es primer Boticario del exército, y goza 24@ de
pension como en tiempo de guerra, de modo que en el
dia es hombre poderoso. Tiene á más su botica propia,
que es la mejor y mas bien surtida de todo el pueblo…”46
Al precio de 19 rs/onza quedaron tasados en 14.915 rs (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
45
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 15-X-1753 [L-1652].
(The Linnean Society (London) [LS], signatura: ms. LS, IX: 379-380; 383-384
[duplicado]. El documento, sin cita de localización, fue hecho público por
46
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
Bienes muebles pertenecientes a José Hortega y
Mariana Llorente*
35
Tasa
Mobiliario de casa y botica
28.755 rs 00 ms
Pinturas
3.010 rs 00 ms
Lienzos y ropa blanca
4.196 rs 00 ms
China
1.353 rs 00 ms
Tapices
1.408 rs 00 ms
Gabinete de Historia Natural
3.000 rs 00 ms
Librería
14.356 rs 00 ms
Efectos de la botica [productos]
37.400 rs 17 ms
Efectos de la botica [utensilios]
2.867 rs 00 ms
Rebotica
1.095 rs 00 ms
Cuarto de aguas
505 rs 17 ms
Espetera [botica]
2.666 rs 11 ms
Sótano
4742 rs 11ms
Cristal
691 rs 00 ms
Colchones y mantas
1.481 rs 00 ms
Hierro
737 rs 00 ms
Espetera [cocina]
1.048 rs 00 ms
Cortinaje
1.318 rs 00 ms
Plata
14.915 rs 00 ms
4.290 rs 00 ms
Alhajas7
Total de bienes muebles
129.834 rs 22 ms
* Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento
de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v).
Ignacio Jordán de Asso. “Observaciones de Historia natural hechas en España y
en America por Pedro Loefling: traducidas del sueco, según la edicion de Cárlos
Linneo”. Anales de Ciencias Naturales, 3(9): 278-315; 4(11): 155-191; 4(12): 324339; 5(13): 82-104; 5(15): 296-340. Madrid, 1801-1802. [Reeditadas en Memorias
de la Real Sociedad Española de Historia Natural, 1907]; la referencia en Op. cit.
4(12): 311-319. 1801).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
37
Un boticario y su Colegio
La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del
Glorioso Evangelista San Lucas
En 1721, dos asociaciones religiosas, ambas en situación de
decadencia, se fusionaron en una, sosteniendo el carácter
mariano de la primera -con capilla propia y fundación privada
para el mantenimiento de su culto- y el profesional de la segunda,
fundamentalmente integrada por boticarios de la Corte47.
La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados
y del Glorioso Evangelista San Lucas tuvo su sede canónica en
una capilla ubicada en el camposanto del Hospital General y de
la Pasión de Madrid, junto a la calle Santa Isabel, cercana a la
de Atocha; se dedicó ésta a la asistencia espiritual de las pobres
que morían en el Hospital General, a la vez que practicaba el
socorro económico de los congregantes enfermos y la oración
por los cofrades fallecidos, combinando así funciones benéficas
47
Justifica esta fecha el siguiente comentario: “Silbestre Fernz. Sacristan
que soy, demas de doze años, a esta parte, de la Capilla y Congregzon. de Nra.
Sra. de los Desamparados, sitta en el Campo Santo del Rl. Hospital de la Passion
de esta Corte (…) Digo, que por el año passado de 1721, se celebró, por dha
Congregazon. Junta general á fin de unir á ella la del Glorioso Evangelista Sn.
Lucas. Y aviendo efectuado entre otras raznes. qe. se acordaron en ella, fue
una, la de qe. como tal sacristan, hiziese un Ynventario de todos los efectos, y
Alhajas de dha Congregazon. y Capilla…” Libro 2º de la Juntas de la Congregacion y
Hermandad de Nuestra Señora de los Desamparados sita en la Capilla del Campo Santo
del Hospital de la Passion de esta Corte desde el Año de 1699 en Adelante. Archivo
de la Real Academia Nacional de Farmacia [ARANF], L-3, fol. 94r). La primera
junta celebrada por “el Colegio y Congregª de Nra. Sra. de los Desamparados de
Valencia, y Glorioso Evangelista Sn. Lucas” lleva fecha de 30-VII-1722 (ARANF,
L-3, fol. 96v); la anterior de que tenemos constancia se retrotrae al 8-XII-1715, es
ésta la última celebrada por la “Congregacion de Nra. Sra. de los Desamparados”
(ARANF, L-3, fol. 92v). De historiar esta Congregación se han ocupado Toribio
Zúñiga Sánchez-Cerrudo [María del Carmen Francés Causapé, ed.]. Historia de
la Real Academia de Farmacia. Volumen I. Las Congregaciones de boticarios. Madrid:
Real Academia Nacional de Farmacia, 2002 y Antonio González Bueno
“Ciencia, trabajo y piedad: el quehacer farmacéutico en la España de la primera
mitad del XVIII”. Anales de la Real Academia Nacional de Farmacia, 77(3): 76-119.
Madrid, 2011.
38
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
con devocionales48. Su calendario festivo se centraba en dos
celebraciones, las de sus dobles patronos: el 14 de mayo, Nuestra
Señora de los Desamparados y el 18 de octubre, San Lucas.
A esta Congregación perteneció José Hortega desde el
año de 172949; su integración se produce junto a la de Andrés
Famada, Cristóbal de los Ríos, Francisco Ledesma, José Zavaleta,
Juan Martínez y Pedro Mercado. Desde entonces contribuyó
asiduamente, tanto con su asistencia habitual como con la entrega
de limosnas para atender a los gastos de las funciones religiosas
organizadas por la Congregación50.
La participación en la vida de la Congregación de José
Hortega ha de entenderse desde un doble postulado; por un lado
-por qué dudarlo- desde una actitud personal vinculada a su
piedad individual; y por otro, desde una perspectiva social, como
elemento de su adscrición a un mundo profesional determinado,
con el que compartía fe y problemas laborales. La entrada en
48
No era ésta la única cofradía vinculada al Hospital General,
conocemos otras a lo largo de este siglo XVIII: la Congregación de la Concordia
de la Capilla del Obispo para asistir a los enfermos del Hospital General (fl.
1696); la Real Archicofradía y Congregación del Santísimo Sacramento, Nuestra
Señora de la Misericordia y Ánimas del Purgatorio de los difuntos pobres del
Hospital General, con advocación de la Visitación de Nuestra Señora a Santa
Isabel (fl. 1721-1755) (cf. Mercedes Agulló Cobo. “Archicofradías, Cofradías,
Congregaciones, Esclavitudes y Hermandades de Madrid (siglos XVIIXVIII)”. Anales del Instituto de Estudios Madrileños, 47: 715-723. Madrid, 2007).
Francisco Aguilar Piñal (“Asociaciones piadosas madrileñas del siglo XVIII
(Descripción bibliográfica de sus Constituciones). Anales del Instituto de Estudios
Madrileños, 7: 253-260. Madrid, 1971) recoge las constituciones publicadas por
la Hermandad de Nuestra Señora de la Caridad, con sede en el Hospital Real
de la Pasión (ca. 1715), la de la Congregación de Nuestro Padre y Patriarca
San Felipe Neri, de seglares, siervos de los pobres enfermos del Real Hospital
(1745), la Real Congregación de indignos esclavos del Santísimo Cristo de la
Obediencia y Nuestra Señora de las Tres Necesidades, sita en la Iglesia del
Buen Suceso, del Real Hospital de la Corte (1749) y la de la Congregación del
glorioso San Antonio de Padua erigida en la Iglesia del Real Hospital General
de Madrid (1799).
En las “Quentas con cargo y data del año 1729 que dexaron Dn.
Alfonso Gusano y Dn. Joseph Orobegoitia, consiliarios a dho. año” (ARANF,
leg. 3,8,6) queda consignado: “Sr. Dn. Joseph Hortega 60 [rs] y dos tercios”, la
anotación correspondiente a su ingreso y a la cuota anual de ese año.
49
50
Sus aportaciones giran en torno a los 15 rs, la cantidad habitual en
otros congregantes; con los 15 rs 30 ms que entregó en 1729 apenas hubiera
podido abonarse los 15 rs de propina que se le dio al capellán por su actuación
en ese dia, o los 15 rs 15 ms que importó el vino y los bizcochos con que se
obsequió a los sacerdotes para su desayuno (cf. ARANF, L-5, fol. 17r).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
39
la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y
del Glorioso Evangelista San Lucas era el primer paso para
integrarse socialmente en el gremio de los boticarios madrileños;
en una situacion que ha sido definida, para otras agrupaciones
semejantes, como una ‘familia artificial’51 que manifiesta su
solidaridad en términos de asistencia material y espiritual.
Esta Congregación, como la práctica totalidad de las
cofradías vigentes en el Madrid del XVIII, era una asociación
de laicos, dotados de carácter autónomo tanto para la elección
de sus cargos como para la organización de sus actos o para la
adquisición y reparación de sus objetos de cultos y, por supuesto,
para la gestión de sus bienes. Su vinculación administrativa se
establece con el vicario eclesiástico y no con los poderes civiles.
La Congregación anotó las juntas realizadas en sus Libros,
que nos han llegado íntegros, y conservó la documentación
acreditativa de los gastos e ingresos realizados, lo que nos
permite aproximarnos a su historia durante el período en que
José Hortega estuvo integrado en su seno.
Los ingresos de la Congregación se correponden con las
cuotas anuales abonadas por sus miembros -60 rs en el periodo
temporal que nos ocupa-, las lismonas que éstos colectasen
o cediesen a la hermandad, y los beneficios que producía la
Fundación Sobremonte, a ella testamentariamente adscrita52. Los
gastos se deben a las honras, misas y sufragios por los difuntos,
las limosnas entregadas a los congregantes necesitados, algún que
otro pleito y el mantenimiento de la capilla de la Congregación,
sus enseres y los inmuebles de la Fundación.
La Hermandad mantuvo una estructura interna similar
a la de la cofradía mariana de procedencia: un hermano mayor,
auxiliado por dos consiliarios, un secretario –y su suplente-,
contador, tesoro y sacristán, que adquiere la condición de
‘mayordomo de cera’; entre 1725 y 1745 este cargo de sacristán y
51
Milagrosa Romero Samper. Las Cofradías en el Madrid del Siglo XVIII.
Madrid: UCM, 1998. 2 vols. (cf. vol. 1: 71).
52
Quedó ésta constituida tras el fallecimiento de José Sobremonte,
acaecido en octubre de 1710, quien cedió a la Congregación dos casas de
su propiedad, sitas en la calle de San Agustín, frente al Monasterio de las
Trinitarias Descalzas, con el compromiso de que, a perpetuidad, se ofrecieren
cuatro misas rezadas cada semana por su alma y la de su esposa, Luisa Mateo, y
se contratara a un sacistán (cf. Libro de los títulos de la fundación de la capellanía que
dejó José de Sobremonte a la Congregación de Nra. Sra. de los Desamparados. ARANF,
L-4).
40
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
mayordomo de cera es asumido por quien ostenta el de contador.
En la junta formada para 1732 figura un nuevo empleo, el de
‘enfermero’, al que se adscriben dos personas; en las posteriores
cambiarán el título por el de ‘celadores’; tradicionalmente este
cargo corresponde a quienes han desempeñado el puesto de
consiliarios en la junta del año anterior. En diciembre de 1748
la Congregación determina que, en los cargos de consiliario, se
alternen los nuevos con los viejos hermanos, para favorecer la
integración de los primeros en la estructura de la Hermandad53.
Los congregantes realizaban, al menos, una junta general
anual, para la elección de los cargos que habrían de conducir la
marcha de la Cofradía durante el siguiente año; tradicionalmente
celebrada por la congregación mariana en el día de la Inmaculada,
desde la década de 1730 cambia de fecha para pasar a realizarse,
en la mayor parte de los años, en la fiesta de la Virgen de la
Esperanza, el 18 de diciembre. A ésta se añaden otras dos juntas
generales anuales más, ambas destinadas a la recaudación de
fondos: la primera días antes de la Pascua, para preparar un
desayuno para las enfermas pobres internadas en el Hospital
General de Madrid, y la segunda, a fines de abril, para organizar
las fiestas del tercer domingo de mayo, en honor a su patrona,
Nuestra Señora de los Desamparados. Las juntas se celebran, a
primera hora de la tarde, en la sede canónica de la Hermandad,
la capilla sita en el camposanto del Hospital General y de la
Pasión de Madrid.
En la asamblea de diciembre de 1731 José Hortega es
nombrado consiliario de la Hermandad, junto a Andrés Famada54;
“... tambien se acordó en dicha Junta, qe para en ádelante, se
propusiessen para Consiliarios, un ántiguo Hermº con otro moderno…” (Junta
particular de 18-XII-1748. ARANF, L-3, fol. 124r-124v).
53
54
“Los Congregantes y Colegiados de Nra. Sra. de los Desamparados: y
Colegio del Sr. Sn. Lucas estando en Junta general en esta Capilla (…) nombraron
tomando Botos Secretos (…) por el año que viene de 1732 los Oficiales siguientes,
por hemº maior se religio Dn. Joseph Quessada, por Consiliarios á Dn. Andres
Famada y á Dn. Joseph Hortega, por contador y mayordomo de cera se religio
á Dn. Antonio Ysnardo de Mora, por Thesorero á Dn. Joseph Ontanillas, para
enfermeros á los Consiliarios del año antezedente Dn. Joseph Guerrero y Dn.
Joseph Alday, y para Secretario á mi el referido Lorenzo Alquizaleete [sic]”
(Junta general de 18-XII-1731. ARANF, L-3, fols. 106r-106v-). Juntos entregarán
las corresponcientes cuentas anuales: “Quentas del año de 1732, Dadas por Dn.
Andres Famada y Dn. Joseph Ortega Consiliarios de dho. año” (ARANF, leg.
3,9,2).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
41
como venia siendo habitual en la Congregación, ambos pasaron,
al siguiente año, a desempeñar las funciones de celadores55.
En enero de 1736, la Congregación y Colegio de Nuestra
Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San
Lucas decide, en junta general extraordinaria, modificar sus
constituciones56; la razón parece residir en la inviabilidad de
mantener vinculados los privilegios gremiales de los boticarios
de la Corte a una congregación religiosa, de la que no formaban
parte todos los individuos del gremio y, sobre todo, en la que
tenían cabida otros profesionales no relacionados con esta
actividad. La comisión nombrada al efecto –en la que tomó
parte José Hortega- produjo, en realidad, unos estatutos, los del
Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid, de los que nos
hemos de ocupar más adelante. No supuso ello una ruptura de
la congregación mariana, que siguió manteniendo su propia
vida, paralela a la del Colegio de Boticarios; lo que sí ocurrió fue
una separación de funciones: las estrictamente gremiales –y las
científicas, en la medida en que éstas tuvieron lugar- pasaron al
Real Colegio de Boticarios.
Al menos desde diciembre de 1748, la Congregación de
Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista
San Lucas estuvo compuesta sólo por boticarios57, la exclusividad
se produce años después de escindido el Real Colegio, por un
mecanismo que es consecuencia de la propia segregación de
esta Corporación: a los boticarios colegiados se les obliga a estar
55
“… por hemº maior se religio al referido Dn. Joseph Quessada,
por Consiliario primero á Dn. Nicolas Pasqual, y para segundo á Dn. Franco.
de Lerma, para Comntador, y mayordomo de cera se religio á Dn. Antonio
Ysnardo de Mora, por Thesorero á Dn. Joseph Ontanillas, para Zeladores á los
referidos Dn. Andres Famada y Dn. Joseph Ortega, y para Secretario á mi el
referido Lorenzo Alquizaleete [sic]” (Junta general de 18-XII-1732. ARANF,
L-3, fols. 106v-107v).
“… estando en junta general en dicha Capilla nra casi todos los
Colegiales (…) se nombraron en dho dia para formar las Constituziones de la
Hermandad de Nra Sra de los Desamparados, y las Ordenanzas y Constituciones
del Colegio del Glorioso Evangelista Sn. Lucas los colegiales siguientes: Dn. Felix
Palacios, Dn Joseph Quessada, Dn. Juan Moreno Botte, Dn. Joseph Ortega, y a mi
el infraescripto secretario [Alquizalete]…” (Acuerdo de 10-I-1736. ARANF, L-3,
fol. 109r).
56
57
El literal de la junta particular celebrada el 18-XII-1748 nos revela: “...
en esta Junta se admitieron por Herms de la referida congregacion (haviendo
precedido los informes y demas requisitos; qe previenen las Constituciones, y
hallarse todos los pretendientes admitidos por colegiales del Rl. Collegio de
esta Corte de Madrid)…” (ARANF, L-3, fol. 124r-124v).
42
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
inscritos en esta Cofradía, pues es ella quien se ocupa, además
de las cuestiones devocionales, de los aspectos asistenciales,
con lo cual la entidad se convierte de facto en una congregación
profesional, aunque no lo fuera de iure58. Pero, aunque estén
constituidas por el mismo colectivo, Congregación y Real Colegio
son entidades independientes, con normas de funcionamiento
propias, y con autonomía en sus respectivas contabilidades.
Los boticarios de la Congregación y Colegio de Nuestra
Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San
Lucas funcionaron con las constituciones de la hermandad
mariana, barrocas en su estructura, anteriores a la fusión entre
ambas corporaciones; no se remodelaron tras su unión con la
Congregación de San Lucas, ni tampoco tras la segregación de
funciones asumidas por el Real Colegio de Boticarios.
En los años centrales del XVIII, la Congregación y Colegio
de Nuestra Señora de los Desamparados y de San Lucas en nada
se parecía a la hermandad mariana de procedencia; de igual
modo que en 1737 se habían autorizado unos nuevos Estatutos…
para regularizar las funciones del Real Colegio, se hacía preciso
redactar unas nuevas Ordenanzas que normalizaran la vida
cotidiana de la Hermandad y adoptará sus estructuras a la
realidad de la España ilustrada; nos consta la redacción de tales
normas en la primavera de 176059, pero no fueron aceptadas
58
Los mismos congregantes reconocen este carácter de cofradía
religiosa vinculada a una actividad gremial: “Estando juntos los Herms.
Congregantes, en la Capilla de Nra Sra de los Desamparados, sita en el campo
sto del Hospital Rl de la Passion de esta Corte (propia dicha Capilla de la
Congregacion de los Profesores Boticarios)…” (Junta particular de 18-XI-1750.
ARANF, L-3, fols. 126r-126v). Incluso en las manifestaciones formales, tal la
junta particular celebrada el 16-XI-1751, reunida en casa del director del Real
Colegio “… quien haze las vezes del Hermº Maior, por hallarse este ausente y
tener acordado la Junta General, que en el caso de hallarsse impedido el qe es,
y en adelante fuese Hermº Maior ocupase su lugar el Director que fuese del
Colegio, y en defecto de este ocupe el lugar el Decano del Colegio…” (ARANF,
L-3, fol. 127v).
59
“… se leyeron tambien en esta Junta las Nuebas constituciones que
la Congregacion tenia determinado se formasen en las que no se alló reparo
alguno, y determino que se presentasen en la primera Junta General que se
celebrase; y que antes se consultase con abogado si se nos podia seguir perjuizio
de subordinacion con el Sr. Administrador del Hospital el darle quenta de
las dhas Constituciones…” (Junta particular de 11-III-1760. ARANF, L-3, fols.
152v-153r). “Y teniendo presente los Señores congregantes la falta que ai de
nuebas ordenanzas arregladas a nuebo modo de gobierno por la calamidad,
necesidad y trascurso de los tiempos; dispuso a este fin nuebas ordenanzas
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
43
por un conflicto de competencias entre la jurisdicción real y la
eclesiástica; pese a ello, la Hermandad las tomó como propias
y las usó en su vida diaria. Aunque carentes de validez jurídica,
quedaron anotadas en el Libro de la Congregación para su exacto
cumplimiento60. De ellas conviene resaltar algunas de sus
las que leídas en Junta particular celebrada en 11 de Marzo de 1760, se
resolbió que se consultasen con persona inteligente y á maior abundamto con
el Abogado de mejor nota; lo que se ejecutó, y vistas por los dhos se hallaron
varios incombenientes por razon de la oposizion de la Jurisdicion Real con la
Eclesiastica, y no era posible a la Congregn superar estas dificultades, por lo que
determinó cesar en este asumpto asta mejor ocasión (…) y para precaberse en
lo sucessibo la Congregazion de las dificultades que ocurran y resoluziones qe
deban practicarse para su gobieno, determina respecto a lo antezedte se gobierne
la Congregn por los acuerdos que en adelante se hagan y que estos tengan la
misma validazion que ordenanzas (interin que se probee lo combeniente en
adelante) y para su inteligencia se acordó…” (Junta general de 18-XII-1761.
ARANF, L-3, fols. 156r-159v).
60
“1ª. Que la contribuzion annual de cada congregte sea de treinta y
seis reales vn al año, pagados en dos tercios cuia cobranza sea a cargo de los
consiliarios y con la eficazia posible pª que no padezca atraso la Congregn. //
2ª. Que los consiliarios no gasten cosa alguna en el año de su empleo, y que los
gastos que hubiese sean de qta de la Congregn. // 3ª. Que atendiendo al pago de
la obra de la Capilla y otros empeños, no se a de hazer por ahora, la funcion
de Nra Sra que se hazia en Mayo con los gastos crecidos que antes, y si solo
con su Misa maior como es costumbre en las demas festibidades del año y su
gasto a cargo de la Congregn. // 4ª. Que a los Congregtes y sus Mugeres se les
asista el dia de su fallezimto con quatro cirios y Blandones pª ponerlos a que
alumbren al cuerpo el tiempo que estubiere en la casa. // 5ª. Se acordó que si
alguno de los Congregantes ó sus mugeres pidiesen abito para amortajar su
cuerpo, se les dara dho abito en la especie de abito, y no el dinero para el y si no
lo pidiese dho abito, no se le dará ni en especie de abito ni dinero, y quedará a la
Congregzn este veneficio y no a los herederos del difunto. // 6º. Se acordó que a
los Congregantes y sus Mugeres que fallecieren se les aya de asistir con veinte
y quatro cirios de apabilo y veinte y quatro pobres del Abemaría para que los
lleben y acompañen al Cuerpo el dia de su entierro por la calle (si fuere en
publico) y si fuese el entierro de Noche, se les asistira solamente con doze achas
de a tres pabilos que alumbren al Cuerpo en la Iglesia, y su rescate de quenta
de la Congregazion. // 7º. Se acordó que a los Congregantes y sus Mugeres
difuntos se les ayan de mandar decir veinte y quatro missas rezadas por el
Alma de cada uno de los dhos congregtes lo antes que se pueda, y por cuenta de
la Congregazn., recogiendo esta el rezibo correspondiente para entregarlo a los
herederos ó parte interesada del Difunto. // 8ª. Que si muriese algun Congregte
en remora, se le abisara a la vda ó a la parte interesada del Difunto, de los atrasos
del Congregte para la paga de ellos, y haziendola efectiba se le asistira con todos
los sufragios y si pudiendo hazerlo, no quisiere pagar los dhos atrasos, no se le
asistira con sufragio alguno; pero si fuese pobre y no pudiese pagar los dhos
atrasos, se le asistira con todos los sufragios, ó con los que le pareciere a la
Congregn. y sea mas combeniente hazer en estos casos, sin que en esto se le
44
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
particularidades: el abandono de la antigua tradición de ofrecer
un desayuno a las enfermas pobres del Hospital de la Pasión –la
propia esencia de la inicial hermandad barroca-, la contención
del gasto en las actividades públicas de la Congregación -‘sin
aparato de pompa ni vanidad’-, la particular atención a la
asistencia de los congregantes en el momento de su fallecimiento
y la incorporación de los mancebos como parte de la familia
del difunto, para quienes se destinan los mismos sufragios que
para los hijos y viudas. Y el hecho notorio de que estas nuevas
ordenanzas de 1760 estipulan, de manera formal, “Que no se
admita Congregte que no sea Boticario y con Botica propia en
Madrid”.
La tensión entre los viejos cofrades barrocos de Nuestra
Señora de los Desamparados y los boticarios que se adscribieron
a la nueva Cofradía y Colegio, bajo planteamientos gremiales,
produjo algunos conflictos sobre el sentido de esta Corporación
y los objetivos que habría de perseguir. Centrémonos en uno de
estos pleitos, completamente banal, pero que puede ayudarnos
a entender el funcionamiento de estas agrupaciones aún
barrocas en su mentalidad. Se trata de la exclusión temporal de
Cristóbal Vélez como miembro de la Congregación, en el otoño
de 1739; el motivo: su enfrentamiento con Miguel Echeverría,
a la sazón consiliario primero, al negarse Vélez a postular a
pueda precisar a la Congregn en cosa alguna, respecto a ser acto voluntario
y charitatibo el que siempre a efectuado la Congregn. por su piedad con sus
individuos. // 9ª. Que a los hijos, bajo de la patria potestad, Mancebos y Viudas
de los Congregtes se les asistira en su fallecimto con el abito (si lo pidiese como
está prevenido en la ordenanza quinta) dos cirios pª alumbrar al Cuerpo en la
casa, doze cirios con doze pobres del Ave Maria para que acompañen al cuerpo
el dia de su entierro por la calle, y si pidiese los doze cirios pª la Iglesia se le
de tambien. Y si fuese dho entiero de Noche no se le dara zera pª la Iglesia. //
10ª. Que se les ayan de mandar decir por cada uno de los hijos (bajo la patria
potestad) Mancebos y Viudas difuntos, doze misas rezadas y segun queda
establecido en la ordenanza septima. // 11ª. Que se hagan onrras generales
todos los años sin aparato de pompa ni vanidad, y en este dia se celebraran a
lo menos doze misas rezadas por los vibos y Difuntos Congregtes y dhas onrras
se han de hazer en el mes de Noviembre, y el coste de todo sera de quenta
de la Congregn. // 12ª. Que los Consiliarios deberan correr con el cuidado de
todo y los gastos que tengan se los a de abonar la Congregazn. / 13ª. Que no se
admita Congregte que no sea Boticario y con Botica propia en Madrid.” El texto
de las Ordenanzas fue copiado en el Libro 2º De las Juntas de la Congregacion
y Hermandad de Nuestra Señora de los Desamparados sita en la Capilla del Campo
santo del Hosptal de la Passion de esta Corte desde el Año de 1699. en Adelante, como
parte del acta correspondiente a la junta general de 18-XII-1761, en que fueron
aprobadas (ARANF, L-3, fols. 156r-159v).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
45
favor de la Hermandad mediante la venta de unas roscas, y
hacerlo públicamente61. El caso nos interesa porque Cristóbal
Vélez apeló a las autoridades superiores, y éstas no fueron
otras que las religiosas, porque la vinculación administrativa de
la Hermandad se establece con el vicario eclesiástico y no con
los poderes civiles62. La actitud de Cristóbal Vélez, negándose
a limosnear para la Cofradía, no fue un caso aislado; es una
reacción frente a la ‘costumbre antigua’ que intenta perpetuar
viejos hábitos de piedad pública, comunes en el Barroco, pero
obsoletos para muchas mentes ilustradas63. José Hortega hubo de
mediar, en este otoño de 1739, junto a José Muñoz, Juan Moreno
El asunto debió tener su enjundia, pues a esta junta general asistió la
practica totalidad de los miembros de la Congregación: “para deliberar sobre
un caso y accion Indecente que ejecuto Dn. Cristoval Velez Congregte. Boticario
en la Plazuela de la Red de Sn. Luis con Dn. Miguel Echeverria fiscal del Rl.
Protomedicato y consiliario primero de dha. Congregn. yendo como Consiliario
repartiendo las rroscas, como es costumbre antigua a los Herms. Congregtes.
y recoger la limosma para parte de los gastos de las Honrras que se celebran
todos los años por nuestros Hermanos Congregantes Difuntos al entregarle
en su mano dho Consiliario las rroscas las rrecibio y Inmediatamte. las tiro a la
calle dho Velez en su misma Botica, y volviendo la espalda se apartaron, por
cuio motibo y Accion tan Indecorosa pidio dho Consiliario satisfacion a dha
Congregon.; y en vista de su memorial y declaracion de Antonio Mizn., Criado
de dha Congregon., Determino por pluralidad de Botos se le vorre el asiento que
tiene en dha Congregon., para que no goze de emolumento alguno, y dho. Miguel
de Echevarria se contentó y se dio por satisfecho en la dha Congregon…” (Junta
general de 20-XI-1739. ARANF, L-3, fols. 112v-113r).
61
Cristóbal Vélez, descontento con el dictamen de la Congregación,
acudió al Vicario “pidiendo que se le volviese á rrecivir en dha Congregon.
como estava antes y echo autos sobre esto se rrecurrio por rrecurso aparte de
la Congregon al referido Sr. Vicario, y visto lo rreferido por Congregon., acordo
nombrar quatro sugetos garantes para componer dha dependencia dejando
vien puesto a la dha Congregon y a Dn. Miguel de Echeverria quien perdono su
vejacion publicamte…” (Junta general de 1-XII-1739. ARANF, L-3, fol. 113v).
Cristóbal Vélez fue readmitido en la junta general celebrada el 18-XII-1739: “…
se le recivio por Congregte. asentando en los Libros á Dn. Christoval Velez por
haver cumplido en lo que se le mando ejecutar por los dhos Quatro Diputados…”
(ARANF, L-3, fol. 114r).
62
63
El asunto venía de atrás; ya en la junta general celebrada en diciembre
de 1738 se anota: “Y ultimamte intentando algunos de los Congregantes (que
fueron pocos) en dha Junta gnral rebatir, y derogar el uso y Memoria antiquissima
de que se repartiesen roscas por el tmpo de las animas, por quien se haze esta
memª y en cuio beneficio redunda la mucha Limosna, que se saca, quando se
reparten, rebatiendo semejante proposizon el mayor numero de los referidos,
quedo por acordado su continuazon y stablecimto de dha Roscas…” (Junta general
de 18-XII-1738. ARANF, L-3, fols. 111r-112v).
46
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Bote y Lorenzo de Alquizalete, en la readmisión de Cristóbal
Vélez como miembro de la Congregación.
Será en 1751 cuando José Hortega ocupe un rol de
mayor protagonismo en la vida de esta Hermandad; en la junta
particular celebrada por la cúpula directiva de la Congregación,
en noviembre de 1750, se incorporará su nombre a la terna sobre
la que los congregantes habrían de elegir hermano mayor, lo
haría junto a dos miembros excelsos, el habitual secretario de
la Hermandad, Lorenzo de Alquizalete, y Juan Moreno Bote,
que había ostentado la primera presidencia del Real Colegio de
Boticarios de Madrid64. La elección de cargos, celebrada el 17
de diciembre, le fue propicia, será José Hortega quien ocupe el
cargo de hermano mayor durante 175165.
Nuestro congregante no pudo culminar su mandato
como hermano mayor, por razones de Estado tuvo que salir,
ese verano de 1751, de viaje por Europa; sus funciones pasaron
a ser desempeñadas por Juan Moreno Bote, director del Real
Colegio66. Pero antes ya había dejado dispuestos algunos
cambios sustanciales en la organización de la vida social de la
Congregación; su actuación al frente de la Hermandad estuvo
imbuida de un cierto espíritu ascético, más centrada en la
religiosidad personal que en la pompa de la celebración, un intento
de superar viejas formas barrocas de devoción, una muestra más
de su actitud reformadora; nos queda el testimonio de una de las
reuniones celebradas por la cupula de la Congregación durante
el periodo en que José Hortega ejerció como hermano mayor, la
junta particular celebrada el 15 de marzo de éste 1751:
64 Cf. Junta particular de 15-XI-1750 (ARANF, L-3, fol. 126r).
65 “Y haviendose tomado los votos, como es practica, en semejamntes
actos; quedaron elegidos, los Herms. siguientes. Por Hermº. Maior, el Sr. Dn.
Joseph de Ortega. Para Consiliario primero, el Sr. Dn. Sebastian Malo…” (Junta
general de 17-XI-1750. ARANF, L-3, fol. 126r).
66 “… estando juntos todos los Herms. que componen la Junta
particular, en Cassa del Sr. Director de el Colegio, quien haze las vezes del
Hermº. Maior, por hallarse este ausente, y tener acordado la Junta General, qe
en el caso de hallarse impedido el qe. es y en adelante fuere Hermª maior ocupe
su lugar el Director qe fuese del Colegio, y en defecto de este ocupe el lugar el
Decano del Colegio…” Junta particular de 16-XII-1752 (ARANF, L-3, fol. 127v).
Y un par de días después, en la junta general celebrada el 18-XII-1752, “El Sr.
Director Dn. Juan [Moreno] Botte, qe. ocupaba el puesto del Hermano Maior,
por estar este ausente, y tenerlo assi acordado la Junta….” (ARANF, L-3, fol.
138r).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
47
“Estando juntos en Cassa del Sr. Hermº. Maior,
todos los oficiales de la Junta particular, y á mas de estos
el Sr. Dn. Gregorio de Ahedo; Nro Hermº Maior propusso
á la Junta diferentes assumptos pertenecientes al buen
gobierno, y edificacion de los Herms. (…) fue proponer, la
ninguna utilidad qe. trahía á la Congregacion, la Mussica,
que en la principal fiesta de Nra. Sra. se practicaba llevar á la
funcion, cuio gasto, le parecia mas propio destinarlo para
las urgencias de la Congregacion, y beneficio espiritual
de los Herms. Congregantes: lo que igualmente parecio
bien, y se aprobó…”67
Todo ello sin merma del sentir religioso propio de la
Hermandad, pues, a renglón seguido de suprimir la música en
las celebraciones:
“Tambien se acordo que Nra. Sra. no estaba Bendita,
y que era necessario bendecirla, por lo que el Sr. Hermº.
Maior, encargó esta diligencia al Sr. Dn. Martin de Arevalo,
primer Comnsiliario, para qe. sin dilacion buscasse sugeto
eclesiatico con potestad para ello, y se bendixesse…”68
En definitiva, una muestra más de la actitud reformadora
con que los boticarios de mediados del XVIII encaran los nuevos
tiempos.
67
No obstante, en la propia junta particular hubo sus discrepancias,
de forma que quedó pactado: “Pareció assi mismo á la Junta, qe. en lugar de la
Mussica, se podria llevar, seis niños de los expositos, y sus Maestros, para la
Missa, y demas funcion, ajustandolo primero, como las honrras funerales en lo
[que] quedaron combenidos..” (Junta particular de 15-III-1751. ARANF, L-3, fol.
126v). Los acuerdos fueron llevados a la junta general celebrada el 18-III-1751,
“cuias proposiciones fueron admitidas, y aprobadas por toda la Junta general
nemine discrepante. Tambien se aprobó por dicha Junta general el combenio
ó ajuste qe. el Herº Maior [José Hortega] y el Ssrio. de nra. Congregacion [José
Zavaleta] hicieron con el Capellan Maior ó Protector de los niños expositos, y
fue qe. la Congregacion, les havia de dar por cada funeral treinta rs. de vellon,
y qe devian assistir seis niños de buenas vozes, sus Maestros, con vaxon,
y vaxoncillo. Y qe. en la fiesta grande de Nra. Sra. se les havia de dar ochenta
reales de vellon, por mañana y tarde, acudiendo á la Missa, y á la fiesta para
reservar, y los intermedios de los instrumentos, y organo, corrian por cuenta de
los referidos Maestros, llebando sugetos aptos para sus exercicios, y todo esto
por los ochenta rs. arriba mencionados, en los qe. qedamos combenidos, aunqe.
sin obligacion de papel, ni escritura…” (Junta general de 18-III-1751. ARANF,
L-3, fol. 127r).
68
Cf. Junta particular de 15-III-1751 (ARANF, L-3, fol. 126v).
48
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
El Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid
En la tarde del 30 de julio de 1723, en el mismo acto público en
que, en la Capilla de Nuestra Señora de los Desamparados, se
procedía a la creación de la Congregación y Colegio de Nuestra
Señora de los Desamparados y San Lucas Evangelista, dos
boticarios, Luis Llorente y José Manzano, provenientes de la
antigua Cofradía de San Lucas, dan cuenta
“… de haverse tratado en Junta particular de las
cosas pertenezients á la fundazon del Colegio de Boticarios,
y se avia considerado, en ella, ser nezessario, anttes de
entablar la pretension, se hiziese publicamte la Theriaca, y
Mitridato; para qe hecho fuesse mas formal dha prettesion;
qe entendido por la Junta combino, en el todo, y se acordo,
que para ayuda de hazer dha Theriaca, respecto de existir,
algun caudal del Colegio de Sn Lucas, se usase de el para
dho efecto…”69
Su propuesta sería retomada cuatro años después por
Francisco Sienes, quien, en la primavera de 1726, mientras
ejercía como hermano mayor de esta Congregación, propuso
la elaboración de cincuenta arrobas de Triaca magna “echa con
las solemnidades que acostumbran hazer por otros Colegios
Pharmazepticos de otros Reynos…”70
La solución proyectada en 1726 es compleja: parte de la
disminución de los gastos ocasionados por las manifestaciones
religiosas de la Cofradía, la supresión de los pagos
correspondientes a la asistencia por enfermedad, salvo casos
excepcionales, y la elección de un grupo de boticarios ‘notables’
que se ocupen de negociar, con el Protomedicato, las condiciones
Junta general de 30-VII-1723 (ARANF, L-3, fols. 96v-97r). Sobre esta
etapa del Colegio de Boticarios de Madrid, previa a la formalización de sus
Estatutos... de 1736, nos hemos ocupado en Antonio González Bueno (Op. cit.
nota 47. 2011), seguimos lo allí expuesto en sus líneas generales.
69
70
Bajo el acápite de “Proposiziones del Sr. Dn. Franco. de Sienes, nro.
Hermº mr.” se anota: “Que todos aian de estar unidos componiendo el Colegio
de los Armazepticos [sic] de Madrid, y habiendo considerado ser precisso
buscar algº. arbitrios ó medios que sean proporcionados al lustre y honor de
nra. facultad y conservacion perpetua de nro. Colegio (…) se discurrio hazer un
calculo de Costa que tendria la elaboracion de Cinquenta arrobas de Triaca
Magna echa con las solemnidades que acostumbran hazer por otros Colegios
Pharmazepticos de otros Reynos, y haviendo parecido á nra. Profesion, y
utilidad al Colegio, y al mismo tiempo havra caudal del Colegio que con poca
diferencia bastara para poner en execucion la referida elavorazion de Triaca...”
(ARANF, L-3, fols. 101v-102v).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
49
de la elaboración y el privilegio para la elaboración de la Triaca71.
No parece que las propuestas formuladas por Francisco Sienes en
la primavera de 1726 se llevaran a término, al menos en lo que se
refiere a la vida económica y devocional de la Hermandad, pero
marcan la senda por la que, años después, habría de discurrir el
Real Colegio de Boticarios de Madrid.
Al menos una de sus iniciativas sí parece llevarse a la
práctica: la configuración, dentro de la Congregación y Colegio
de un sanedrín de boticarios a los que, inicialmente, se confirió el
encargo de elaborar la Triaca magna72 y que, en definitiva, llevaría
a la segregación del Real Colegio de Boticarios de Madrid.
Las negociaciones debieron ser arduas pero, en 1732,
Felipe V otorgó, en Sevilla, un 15 de marzo, el deseado privilegio
de elaboración de la ‘Teriaca magna de Andromaco’ tomando
como modelo -no podía ser de otro modo- la “que executó el Rey
Christianissimo Luis Decimo quinto (…) que se hizo en la Botica
de Versallas [sic], el año de mil setecientos y veinte y ocho…”73; el
privilegio real se concede una vez elaborada la primera Triaca, con
las solemnidades versallescas, en el Monasterio de las Descalzas
Reales74 y otorga al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’
“… y pareziendo ser casi imposible ademas de ser mui embarazoso
a el todo del Colegio el tener que hazer muchas Juntas a lo que ocurra sobre
la fabrica de la Triaca como será preciso para la compra de los simples tanto
extrangeros como naturales hablar, y consultar con el Prothomedicato la rezeta
que se ha de executar aprovacion de los sustitutos que se deven poner por no
allarse verdaderos simples, y en fin otras muchas diligencias que se ofrezcan
para qual es preciso que el Colegio elixa diez o doze colegiales de su maior
aprovazion para que juntos ó llamados por el hermº maior den disposizion á lo
que ocurriese sobre lo referido…” Proposiciones de Francisco de Sienes [1726]
(ARANF, L-3, fols. 101v-102v).
71
“… y para la elavorazion de la Triaca, para eleccion y compra de
los simples, y para todo lo demas que se ofreziere se nombraron los Colegiales
siguientes por Diputados: Lizdo. Dn Felix Palacios, Dn Ignacio Echevarria, Dn.
Franco Botte Díaz, Dn Juan Elias de Ariza, Dn. Franco Alfaro, Dn. Joseph Ontanilla,
Dn Joseph Manzano, Dn Franco Ortiz, Dn Antonio Sanchez de Mena, Dn Antonio
Iznardo de Mora, Dn. Joseph Muñoz, Dn. Miguel Garcia Parra, Dn Joseph Malo
y Lorenzo Alquizaleete y lo firme como Scrio de dha Congregacion y Colegio…
[Lorenzo de Alquizalete]” (Acuerdo de 6-IV-1726. ARANF, L-3, fols. 101v-102v).
72
Una copia del privilegio concedido por Felipe V al ‘Colegio de
Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca magna, firmado en
Sevilla, a 15-III-1732, se conserva en ARANF, leg. 4,1. Ha sido reproducido, de
manera facsimilar, en Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo (Op. cit. nota 47, cf.
págs. 81-87. 2002).
73
74
“… os movió á acordar el fabricarla con la mayor solemnidad, y
50
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
el privilegio de elaboración y venta de este medicamento, al
precio fijado por el Real Tribunal del Protomedicato75.
No hay error en la concesión del privilegio; éste se otorga
a una agrupación ficticia, englobada en una cofradía religiosa.
Obviamente no era ésta una situación que pudiera mantenerse
por mucho tiempo; la separación de funciones se presenta como
la única solución y, para ello, es necesario discernir entre lo
profesional y lo devocional.
El detonante que habría de producir esta segregación del
colectivo de los boticarios madrileños pudieron ser los problemas
planteados por la ‘renta del aguardiente’; ante lo que los boticarios
entendieron como una pérdida de sus privilegios profesionales,
la Cofradía dotó de poderes, en los comienzos de 1736, a cuatro
de sus miembros para que defendieran los intereses de los
colegiados76. Los privilegios en torno al impuesto sobre el uso
del aguardiente -como ocurriera con la elaboración de la Triacaafectan sólo a una parte de los congregantes, y en el asunto tienen
también interés otros boticarios no sometidos a la disciplina de la
Cofradía de los Desamparados y San Lucas77; este mismo enero
exáctitud, haziendo traher acosta de mucho cuydado y dispendio los generos
mas selectos de los parages donde ay Compañía de Levante; y recogidos todos,
y puestos de manifiesto, en la Oficina de las Descalzas reales por tres dias,
reconocidos, y aprovados con asistencia del Doctor Don Pedro de Aquenza
Prothomedico, de el Fiscal, y otros Professores del Colegio, se executo dicho
Medicamento con toda puntualidad, y observancia, haviendo quedado
depositado en dicha Oficina, hasta que lo aprovase el Prothomedicato, y tasasse
el precio á que se devia distribuir…” (Copia del privilegio concedido por Felipe
V al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca magna.
Sevilla, 15-III-1732, ARANF, leg. 4,1).
“…Privilegio, para que solo Vos, y vuestro Colegio pueda elaborar,
y vender este Medicamento á los precios que tasare el Prothomedicato; y que si
por algun Professor de fuera de Madrid se quisiere fabricar, haya de ser, con la
misma formalidad que se han hecho por Vos, y vuestro Colegio, y con vuestra
aprovacion, ó como la mi merced fuesse…” (Copia del privilegio concedido por
Felipe V al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca
magna. Sevilla, 15-III-1732, ARANF, leg. 4,1).
75
76
“… estando juntos la maior parte de los hermanos, y colegiales en
nra capilla [nombramos] por Diputados á Dn. Franco Ortiz, Dn Juan Moreno
Botte, Dn. Miguel García Parra y Dn. Andres Famada, para seguir y defender la
dependencia del Aguardiente con el Recaudador y se les dio poder para seguir
en Justicia ó la mejor forma que haia lugar…” (Acuerdo de 6-I-1736. L-3, fols.
108v-109r).
77
“… estando en junta general en dicha Capilla nra casi todos los
Colegiales se acordó, continuasen los apoderados en las diligencias empezadas
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
51
de 1736 se acuerda nombrar una comisión mixta, conformada por
boticarios y no boticarios, que se ocupe de reformar los estatutos
de la Hermandad para hacer viable la independencia colegial, la
conforman Félix Palacios, José Quesada, Juan Moreno Bote, José
Hortega y Lorenzo Alquizalete78.
En menos de un año, la comisión redactó el texto de
los Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid,
aprobados en asamblea reunida el 12 de diciembre de 1736.
El Real Colegio se configura como una corporación limitada
a los boticarios con establecimiento abierto en Madrid, siendo
obligatoria la colegiación si se desea gozar de los beneficios de la
Corporación79. Se rige por una junta directiva compuesta por un
director, dos diputados o vicedirectores, un secretario, un fiscal,
en la dependencia de los Aguardientes, y que qualquiera individuo que usara
del aguardiente fuera de los medicamentos que debe elaborar en su casa, y
despacho con rezetas, de Medicos, y Cirujanos, sea excluido del Colegio, y se
prozeda contra los tales por la via juridica, como defraudadores de la rrenta
del aguardiente, y que se prevengan, y se tengan presentes los Boticarios que
no son Colegiales, prezediendo antes un recado a los tales, para si lo quieren
ser…” (Acuerdo de 10-I-1736. L-3, fols. 109r).
“…asi mismo se nombraron en dho dia para formar las Constituziones
de la Hermandad de Nra Sra de los Desamparados, y las Ordenanzas y
Constituciones del Colegio del Glorioso Evangelista Sn. Lucas los colegiales
siguientes. Dn. Felix Palacios, Dn Joseph Quessada, Dn. Juan Moreno Botte,
Dn. Joseph Ortega, y a mi el infraescripto secretario [Lorenzo Alquizalete]…”
(Acuerdo de 10-I-1736. ARANF, L-3, fol. 109r).
78
79
El estatuto II limita su composición a los “Professores Pharmaceuticos,
los quales estén examinados por el Real Protomedicato: que sean de buena vida, y
costumbres, y assimismo capaces de desempeñar los assumptos, que el Colegio
fiare á su cuidado”; pero el estatuto XIX precisa: “El Colegio se compondrá de
todos los Boticarios, que al tiempo de la aprobacion de estos Estatutos tuvieren
Botica propia en Madrid, para que unidos todos, y congregados, coadyuven
y adelanten el principal intento que se ha propuesto el Colegio en el Estatuto
primero, que tiene por objeto el bien del Publico, y el adelantamiento de todos,
y cada uno de los Professores Pharmaceuticos”; y aún más tajante se muestra
el estatuto XX: “Ningun Colegial podrá separarse del Colegio de Boticarios, sin
licencia del Real Protomedicato”. El estatuto XXIII recuerda: “Ningun Boticario
de esta Corte gozará de los Privilegios concedidos por su Magestad al Colegio,
ni de los que en adelante les concediere, no siendo individuo suyo” (Estatutos
del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid… Madrid: Imprenta Real, 1737.
ARANF, leg. 4,6. Reproducidos por José Luis Valverde. “Textos básicos de
Historia de la Farmacia. Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de
Madrid… Madrid, 1737”. Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia,
23(89): 91 + [27 p.]. Granada, 1972 y en Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo (Op.
cit. nota 47, págs. 94-116. 2002).
52
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
un tesorero y un contador, cuyo mandato se estipula con una
vigencia anual.
El peso que el desarrollo profesional tendría en la
configuración de los trabajos de los que habría de ocuparse
este Real Colegio está explicitado en las funciones asignadas
a los dos diputados; en ellas se intuye cómo la concesión del
privilegio concedido en 1732 fue la razón primera que condujo a
la adaptación de la vieja estructura a otra más acorde -al menos
formalmente- con los nuevos presupuestos ilustrados80.
Los estatutos así conformados fueron elevados por José
Hortega, en nombre del Colegio de Boticarios, ante el Tribunal del
Protomedicato81; fue su compañero de la Real Academia Médica
Matritense, Baltasar de la Torre y Ocón quien, actuando como
Presidente subdelegado del Real Tribunal del Protomedicato
solicitó, en 2 de enero de 1737, el informe pertinente del Fiscal
del Tribunal; éste fue redactado, apenas un par de días después,
por Miguel de Echeverría, boticario a la par que Fiscal del Real
Tribunal, quien los reconoció y dio por válidos el 5 de enero82.
Baltasar de la Torre remitió los Estatutos…, con la
aprobación del Real Tribunal, el 12 de enero de 1737; pasaron
80
Estatuto VIII: “Los dos Diputados, ó Vicedirectores deberán correr
con la compra, y la preparacion de todas las Drogas, que necessitase el Colegio
para la elaboracion, y composicion de la Thriaca magna, que por Privilegio de
su Magestad (…) está concedido privativamente al Colegio, su fecha en Sevilla
á quince de Marzo de mil setecientos treinta y dos; y assimismo para otras
qualesquier composiciones, assi Galenicas como Chimicas, que se resolvieren
executar…” (Estatutos… cit ut supra, págs. 6-7).
“El Colegio de Professores Boticarios de esta Corte (…) Ha formado
quarenta Estatutos, que tienen por objeto el bien Publico, la union de los
Professores, y el cultivo, y adelantamiento de la Pharmacia, y sus partes; y
respecto de intentar suplicar á su Mag. (…) la aprobacion de dichos Estatutos
que exhibimos. Por tanto suplica á V.S. mande vér, y reconocer dichos Estatutos,
y estando á la satisfacion del Tribunal, se le devuelvan para el efecto que lleva
expressado, en que recibirá merced, & D. Joseph Ortega” (Estatutos… cit ut
supra, págs. 20-21).
81
82
“… reconoció los Estatutos que se refieren, los que le parece son muy
utiles al bien Publico, por las Reglas, y Maximas que establece para el cultivo,
y adelantamiento de la Pharmacia, Chimica, Botanica, é Historia natural, cuyas
Facultades es justo que se cultiven, y adelanten, á imitacion de las demás
Naciones de la Europa (…) por lo que es digno el Colegio, que V.S. apruebe,
por lo que á si toca, dichos Estatutos, interponiendo su Autoridad, para que se
pongan en practica con la maior brevedad…” (Estatutos… cit ut supra, págs.
21-22).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
53
a manos de José de Quesada, secretario del Real Tribunal, a
la vez que activo congregante de la de Nuestra Señora de los
Desamparados de la que, en esos momentos, ocupaba el cargo de
hermano mayor83, éste tuvo diligenciada toda la documentación
el 23 de febrero de 1737. La tramitación no pudo producirse de
manera más rápida.
Los estatutos del Colegio de Boticarios, favorablemente
informados por el Real Tribunal del Protomedicato, pasaron
al Consejo Real de Castilla; el 21 de agosto de 1737 da a ellos
su aprobación su presidente, fray Gaspar de Molina, quien los
firmará como Obispo de Málaga. El círculo se cierra el 24 de
septiembre de 1737, ese día la Cofradía de Nuestra Señora de los
Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas realiza, en
su Capilla del Real Hospital de la Pasión, un acto extraordinario,
presidido por Baltasar de la Torre, médico de Cámara y presidente
de la delegación castellana del Real Tribunal del Protomedicato;
en él se aceptan formalmente los Estatutos… por los que habrá
de regirse el Real Colegio de Boticarios de Madrid, que toma de
la Cofradía los privilegios relativos al trabajo de los boticarios84.
Él mismo forma parte de la comisión encargada, por acuerdo de
10-I-1736, de la redacción de unas nuevas constituciones: “Se nombraron en
dho dia para formar las constituciones de la Hermandad de Nra. Sra. de los
Desamparados y las Ordenanzas y Constituciones del Colegio del Glorioso
Evangelista Sn. Lucas los Colegiales siguientes: Dn. Felix Palacios, Dn. Joseph
Quessada, Dn. Juan Moreno Bote, Dn. Joseph Hortega, y a mi el infraescrito
Secretario [Lorenzo Alquizalete]” (ARANF, L-3, fol. 109r).
83
84
El literal del acta es como sigue: “En la Villa de Madrid á veintte y
quatro dias del Mes de Septiembre de mill settezienttos y treintta y siette el Sr. Dr.
Dn. Balthasar de la Torre y Ocon, Medico de Camara de S.M., Prothomedico de
Castilla, y Presidente Subdelegado del Rl. Prothomedicato, con mi asisttencia,
se halló en la Capilla de N. Sra. de los Desamparados (propia del Colegio de
Botticarios desta dha Villa), sita en el Campo Sto. deel Rl. Hospl. de la Passion,
siendo (por papeles de avisso de su sria. deel dia antecendente) se hallaban Juntos
la maior parte de los individuos de dho Colegio, á quienes hizo presentte la
dignacion de su Magd. y de su Rl. y Supremo Consejo de Castilla, en la aprobazn
de los quarenta estatutos que avian firmado para los efectos expressados en
ellos: como tambien la que dispensó el Rl. Tribunal del Protomto., y que para
continuarlo (en adelante) proporcionandose á ello el Colegio, desseaba toda
buena Armonia, y uniformidad, no solo en la observaciozn. de los estatutos,
sino tambien en el comercio civil, economico, y christiano; Y que para que assi
se estableciesse, y sirviesse de norma en lo siguiente, (supuesta la voluntad del
Colegio), nombraria los sugetos que debian ocupar los empleos determinados
en dhos estatutos, y por haver combenido todos los Colegiales pressenttes, hizo
su ssria. la siguiente eleccions: Para Director. Al Sr. Dn. Joseph Muñoz Valdiviesso.
Para Diputado 1º. Al Sr. Dn. Sebastian Martinez. Para Diputado 2º. Al Sr. Dn.
54
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
¿Cómo se logra tanta presteza administrativa? Es
posible que se deba a dos razones: por un lado el peso social e
institucional alcanzado por algunos boticarios, particularmente
por José Hortega; de otro, por la adecuación de los Estatutos…
a las propias querencias de la Administración borbónica. En
ellos tiene lugar un cambio estructural sustancial: el paso de
Cofradía a Colegio. Las cofradías -y la Congregación de Nuestra
Señora de los Desamparados no es una excepción- quedan bajo
la jurisdicción eclesiástica, ante la que han de rendir cuentas
y acudir en caso de protección o autoridad85. Con los nuevos
Estatutos… el Real Colegio de Boticarios acepta su condición
de institución sanitaria, y se cobija bajo el Real Tribunal del
Protomedicato, se erige en una institución de carácter civil86.
Los Estatutos… del Real Colegio de Boticarios son, en definitiva,
una manifestación de la adscripción regalista con que el gremio
asume su integración en la estructura estatal borbónica87.
Gregorio Ahedo. Para Secretario. Al Sr. Dn. Juan Moreno Botte. Para Fiscal. Al
Sr. Dn. Miguel de la Parra. Para Thesorero. Al Sr. Dn. Franco. Ortiz Crespo. Para
Contadr. Al Sr. Dn. Lorenzo Alquizalete. La qual fue admitida, y aprobada con
general consetimto de todos y en su virtud los nombrados y elegidos ocuparon
los respectivos assienttos, y mandó su ssria se pusiesse este auto en el libro de
Acuerdos de dho Colegio; en cuyo cumplimiento, y para qe siempre conste lo
executo y firmo. Joseph de Quesada [firmado]”. Juntas Generales deste el Año
1737 fundacion de Colegio hasta el año 1767 (ARANF, L-7, fols. 1r-1v).
Recuérdese, a modo de ejemplo, el problema creado por la expulsión
de Cristóbal Vélez, del que nos hemos ocupado líneas arriba (cf. ARANF, L-3,
fols. 112v-114r).
85
No podía ser de otra forma, y así lo explicita el estatuto XXXVIII:
“El Colegio estará sujeto en lo que toca á la profession Pharmaceutica al Real
Protomedicato, con la particularidad que el mismo Tribunal, ó en su nombre
el primer Medico, que es, ó fuere de su Magestad, pueda mandar juntarle, y
presidirle, como Protector suyo, siempre, y quando lo dispusiere, y á quien el
Colegio deberá dar quenta de todo lo que ocurriere digno de su noticia, cuya
decision se observará puntualmente…” (Estatutos… cit ut supra, pág. 18).
86
87
Es significativo el contenido del escrito con el que Juan Moreno Bote,
secretario de la Corporación, acompaña a la copia impresa de los Estatutos…
remitida a José Cervi, Presidente del Real Tribunal del Protomedicato: “…. cuya
notizia, passan gustosos á V.Sª. esperanzados en que, por su Proteccn. han de
lograr las maiores ventajas, á emulazion de las naziones estrangeras, cediendo
todo en beneficio del Publico, en quien, como en el Colegio, vivira siempre la
memoria de deverse á la Heroicidad de V.Sª. el auge, en que se contempla la
facultad Medica, y el Arte Pharmaceutica…” (Traslado de carta del Secretario
del Real Colegio de Profesores Farmacéuticos [Juan Moreno Bote] a José Cervi
[Madrid, 1737]. ARANF, leg. 3,11,2); en términos similares se dirigió a José
Suñol, médico de Cámara. Ambos contestaron dando su aprobación y apoyo
a la nueva Corporación: “No he podido Yo aver recibido noticia de mayor
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
55
Los Estatutos… normalizan una estructura ya existente,
que había permanecido larvada durante décadas, y que ahora
se desarrolla al calor de las luces dieciochescas; los mismos
boticarios ilustrados reconocían la existencia de su corporación
gremial, aun cuando ésta no tuviera cobertura legal hasta la
proclamación de septiembre de 1737 a la que acabamos de
referirnos. El propio José Hortega admite la existencia del
Colegio de Boticarios cuando, en los comienzos del octubre de
1734, y a instancias de quien entonces ostentaba la presidencia
de la Real Academia Médica Matritense, el protomédico Baltasar
de la Torre y Ocón, comunica la fundación del nuevo instituto; en
unos términos básicamente similares a los que utilizará el propio
Colegio al establecer el objeto de su fundación en sus estatutos
de 1737: la utilidad pública, el amor a la Nación, el desarrollo de
las disciplinas sanitarias y la imitación de lo practicado en otras
Cortes europeas88. Y nos queda constancia de que, al menos en
gusto, y complacencia, que la que Vmd. en nombre del Colegio de Boticarios
se ha servido participarme (…) de lo que me he alegrado infinito, pues no ay
duda, de que esto servira de mucho adelantamiento al arte pharmaceutica, y
de singular lustre á la Nacion Española….” (Carta de José Cerví a Juan Moreno
Bote. San Ildefonso, 4-X-1737. ARANF, leg. 3,11,2).
88
“La union de algunos pocos profesores de las facultades Medica
Chirurxica, y Pharmaceutica motivó el feliz atrevimto. de emprehender la
fundazn. de una Academia Medica, á imitazn de las que ai en otras Cortes,
que tuviese pr fin primario el adelantamto. y cultivo de aquellas facultades,
y assimismo el aprovechamiento de sus individuos. El amor á la nacion en
todos, y el fomento de muchos á promover la utilidad del Publico, acaloró los
animos del Magistrado para que se lograse su establecimto. con las seguridades,
que verá V. en sus estatutos. La facultad Pharmaceutica, como pral parte de
la Academia, contribuira poderosamte. al total desempeño del fin. Con este
cuidado instituyo la Academia Plazas de Chimicos, y de Botanicos, que tendra
á especial dicha las ocupen los individuos de tan ilustre, y docto congreso; pues
sin duda, en poco fiaria la Medicina sus progresos, si la faltasen los ausilios
de la Chimia, y la Botanica, finalmente pr esto, y por ser uno de los cuidados
de la Academia procurar la comunicazn. y comercio literario con los sabios
y eruditos, desde ahora la solicita con V. asegurando por su parte la maior
sinceridad para una perpetua correspondencia, y deseando en todo tiempo sus
mas agradables mandatos, para venerarlos con el mas profundo respeto…”
Carta de José Hortega al ‘Colegio Pharmaceutico’ de Madrid. Madrid, 5-X1734 (ARANF, leg. 3,1,1). El escrito tuvo contestación, firmada en Madrid,
a 9-X-1734, por José Quesada y Lorenzo de Alquizalete, quienes a la sazón
ocupaban los cargos de Hermano Mayor y Secretario de la Congregación de
Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas: “...
al Colegio Pharmaceutico de esta villa le leyó su Secretario el cortesano papel
de V. (…) celebrando los azertados Institutos de su fundacion, los halla tan
conformes con el fin que el Colegio tubo presente al tiempo de su fundazion,
56
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1735, se preparó Triaca por parte del ‘Colegio de Boticarios de
Madrid’; su elaboración estuvo a cargo de José Ignacio Muñoz de
Valdivieso, quien otorgó las correspondientes cuentas; se obtuvo
con ello un pequeño caudal que no revirtió en las arcas de la
Congregación de los Desamparados, lo que induce a pensar en
la independencia que venimos señalando89.
La actuación ‘políticamente correcta’ de quienes se
ocuparon de elaborar los Estatutos… del Real Colegio -y la mano
de José Hortega nos parece en ellos particularmente evidente- les
permitiría disponer de nuevas prerrogativas: la elaboración de
la Pharmacopoea matritense…, y el establecimientos de las tarifas
de medicamentos. Para ello tuvieron que conciliar sus exigencias
gremiales con el ideario ilustrado defendido por los ministros de
Felipe V; en el primero de los cuarenta estatutos con los boticarios
madrileños se dotan para su organización interna se establece:
“El Fin primario, é Idea general del Colegio de
Boticarios de Madrid, será el cultivo, y adelantamiento de
la Pharmacia, Chimia, Botanica, é Historia natural; para
lo qual se formará un Jardin Botanico, y un Elaboratorio
Chimico, donde publicamente se hagan todos los años,
por sus Colegiales, un Curso de Operaciones Chimicas, y
otro de Lecciones y Demostraciones de Plantas, y Drogas
Exoticas…”90
Una exposición de motivos en la que se hace evidente el modelo
seguido: el propuesto por la Real Academia Médica Matritense en sus
Estatutos… de 173491, con las salvedades propias de las respectivas
que se consideran en la precision de mantener entre uno y otro cuerpo la mas
senzilla é ingenua correspondª. (…) aplaudiendo tan noble deseo, y deseando
el feliz logro de su execucion, para que se interesen en su utilidad la Medicina,
el honor de la Nacion, y el beneficio publico…” (ARANF, leg. 3,1,1).
89
“Cuentas dadas pr. Joseph Ignacio Muñoz de la thª que estubo a su
cargo. Año [17]35” (ARANF, leg. 3,10,1); los costes de elaboración se elevaron
a 9.095 rs, las ganancias a 9.455 rs 32 ms, la diferencia supuso un beneficio para
el Colegio de 360 rs 32 ms; estas anotaciones figuran “Aprobadas pr. el Real
Colegio y pasada en quenta”.
90
Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid… Madrid:
Imprenta Real, 1737 (ARANF, leg. 4,6). El párrafo transcrito corresponde al
estatuto I (cf. pág. 4).
Estatutos de la Academia Medica Matritense, aprobados por el Real
y Supremo Consejo de Castilla. [Madrid: s.n., 1734]. En el archivo de la Real
Academia Nacional de Medicina se conserva una copia manuscrita, firmada
por José Hortega el 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a).
91
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
57
disciplinas92. Como aquéllos, éstos también incorporan la organización
de actos literarios, con carácter público93 y la conveniencia de mantener
“comunicación, y comercio literario con los Professores Pharmazeuticos,
Chimicos y Botanicos, que puedan servirles de alguna utilidad para el
desempeño del fin primario que se á propuesto…”94; actitudes ambas
muy del gusto ilustrado, tanto por su carácter centralista, su afán de
acercar a la sociedad los adelantos científico-técnicos y el esfuerzo por
insertar las actuaciones de estas instituciones entre las de sus homólogas,
españolas o europeas.
Pero no hemos de llevarnos a engaño, tras estas remozadas
formas ilustradas, que tanto recuerdan las estructuras de las
academias científicas95, se encuentra la organización gremial
“El fin primario ó idea general de la Academia sera manifestar las
racionales y provechosas maximas de la Medicina y Cirugia y la mejor practica
de sus operaziones por el camino de la obserbazion y experienzia, proponer
las utilidades de la Phisica Mecanica, adelantar los descubrimientos de la
Anatomia, distinguir sin confusion los experimentos chimicos y finalmente
aberiguar quanto pueda ser util y combeniente de la variedad admirable de la
Historia natural, en cuia consequencia se pondra con claridad lo vedadero como
seguro, lo probechoso como util, lo berosimil cono opinable, y lo experimental
como demostrable” (cf. Estatuto 50. Estatutos de la Academia Médica Matritense
aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Copia manuscrita, firmada por
José Hortega. Madrid, 1-X-1734. ARANM, leg. 1C,2a).
92
93
Estatuto XXXII: “Si á los Actos literarios concurrieren Medicos,
cirujanos, Boticarios, ú otros Sugetos de Distintincion…” (Estatutos… cit ut
supra, pág. 16).
94
Estatuto XXXVII (ARANF, leg. 4.6). El estatuto 48 de la Real Academia
Médica Matritense también establece el que “La Academia procurara tener
comunicazion y comercio literario, no solo con los eruditos de España, sino
tambien con los extrangeros á fin de lograr por este medio los mejores lazos
para su aprovechamto.” (Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por
el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Copia manuscrita, firmada por José Hortega.
Madrid, 1-X-1734. ARANM, leg. 1C,2a).
Incluso en el protocolo seguido en las reuniones: la junta particular
de oficiales de 22-II-1738 fue reunida sólo para una cuestión de orden: “se
acordó que en Juntta Gral de el Colegio, ninguno de los indibiduos de el Colegio
se lebantte para salirse deella, con ningn. pretexto, â excepcion de una grave
urgencia / Y tambien acordó que los colegiales, que en adelante entraren,
despues de la formn. de el Colegio, hayan de sentarse en inferior assiento, â
diferencia de los fundadores Colegiales, y por consiguientte los que fueren
entrando en adelante, spre hayan de ser los que gozen de el mas inferior assiento;
con lo que se disolvio la Junta.” (ARANF, L-7, fols. 4r-4v). Y en la posterior, de
4-V-1738, “… assi mismo se acordó, que assi como en los demas Colegios, y
congregas, tienen la politica, estando Juntos y congregs., de darse unos â otros,
el tratamiento de V.Sª. se execute lo mismo en el ntro. en adelante” (ARANF,
L-7, fol. 4v).
95
58
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
heredada, por ello -y en clara diferencia frente a los estatutos de la
Academia Médica Matritense que le sirven de modelo- en los del
Colegio de Profesores Boticarios se prevé, también, una función
asistencial para sus colegiales, fijada en términos estrictamente
económicos y no religiosos96, y normas sobre la organización del
trabajo, fundamentalmente referidas a los mecanismos de acceso
a la formación profesional de los futuros boticarios97.
La participación de José Hortega en las tareas del
Real Colegio de Boticarios de Madrid fue continua desde su
‘fundación’; desarrolló una intensa labor por mantener vigentes
los privilegios conseguidos por el Colegio relativos a la Triaca
y de defender los más antiguos sobre el aguardiente y las
alcabalas98. Así lo reconoció la Corporación quien, en sesión
pública celebrada ante el notario Juan Alfonso López de León,
el 20 de abril de 1740, en la Capilla de Nuestra Señora de los
Desemparados:
“… acordaron se diese Poder General á dos
individuos del referido Colegio, para seguir todas las
dependencias de él, y principalmente lo que se contiene
en la citada Real Cedula [dada por Felipe V, el 15 de
marzo de 1732, otorgando privilegio perpetuo al Colegio
de Boticarios de Madrid para fabricar, elaborar y vender
la Triaca magna de Andromaco] (…) dán todo su poder
Estatuto XXXIV: “El Colegio tendrá especialisimo cuidado de
mirar por las viudas, é hijos menores de sus Colegiales difuntos, procurando
en quanto sea possible su alivio, para lo qual señalará el Director el Colegial
que tuviere por mas conveniente”. Estatuto XXXV: “Si por la calamidad de los
tiempos, ú otro motivo decente, llegase algun Colegial á tal estado, que se vea
en la Carcel, ú en otro infortunio, tendrá el Colegio obligacion de atenderle,
y mirar por su Botica en todo lo que fuere possible.” (Estatutos… cit ut supra,
págs, 16, 17).
96
Estatuto XXXVI: “Ningun Colegial podrá recibir en su Botica
Mancebo que no sea hijo de buenos padres, y assimismo que no sepa la lengua
latina; como ni tampoco admitir al que saliere de otra Botica de esta Corte,
sin que le presente justificacion por escrito del modo con que ha procedido, ó
motivos por qué le han despedido, ó se ha despedido.” (Estatutos… cit ut supra,
pág. 17).
97
De sus viajes a la Corte, tanto cuando ésta se encontraba dentro
o fuera de Madrid, y de los pagos a escribanos e impresores dan noticia las
pormenorizadas “Quentas dadas de los poderes de el Rl. Colegio a Dn. Juan
Moreno Bote, Dn. Joseph Hortega, y Dn. Christobal Velez de todos los gastos
causados en el pleyto con el recaudador de la renta del Aguardiente, gasto de
la aprovacion de los estatutos del Colegio, pleyto con los alcabaleros y otras
cosas hasta 29 de Septbre de 1737 que importan 3.048 rs vn.” (ARANF, leg. 4,7).
98
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
59
cumplido general, el que de dercho se requiere, y mas se
necesite, y convenga á los dhos. Don Juan Moreno Botte, y
Don Joseph de Ortega, Individuos de dicho Colegio, y á
cada uno in solidum, para que en nombre del expressado
Colegio de Boticarios de esta Corte, y representando su
accion, y derecho, hagan se guarde, cumpla y execute en
todo, y por todo lo resuelto por su Magestad en su citada
Real Cedula…”99
Durante 1740 José Hortega desempeñó el cargo de
diputado primero; entre los años 1743 y 1747 actuó como
secretario primero, en 1748 y 1749 ejerció como director y en
1751, 1756 y 1757 desempeño el cargo de fiscal100.
El asentamiento del Real Colegio en Madrid, dentro de
una política estatal de marcado carácter centralista, habría de
convertirle pronto en modelo a seguir y en el interlocutor válido
para plantear, ante el Rey, las reivindicaciones profesionales
de todos los boticarios del Reino. En buena parte de estas
intervenciones la actividad de José Hortega tuvo un papel crucial,
especialmente al ocuparse, entre 1743 y 1747, de la secretaria de
la Corporación.
99
Poder otorgado por el Real Colegio a Juan Moreno Bote y José
Hortega. Madrid, 20-IV-1740 (ARANF, leg. 4,13,5); además de esta copia,
impresa, se conservan un par de copias manuscritas legalizadas (ARANF,
leg. 4,13,3; 4,13,4). El acuerdo quedó protocolizado entre los documentos de
Juan Alfonso López de León (AHPNM, protocolo 16.386, fol. [1740] 68r-69v).
Tras el fallecimiento de Juan Moreno Bote, será Gregorio Aedo quien ostente
la representación, “suplicandole concurriese con el Sr. Dn Joseph Hortega, á
quanto tuviere por conveniente, y favorable al Colegio” (Junta general de 13XII-1755. ARANF, L-7, fols. 129v-131r).
100
La participación de José Hortega en el Real Colegio de Profesores
Boticarios de Madrid puede seguirse a través del Libro de Juntas generales del Colegio
de Boticarios de Madrid [1737-1767] (ARANF, L-7). Las ocasionales ausencias de
sus cargos, en virtud de sus servicios al Rey, fueron convenientemente suplidas:
“… respecto del precisso empleo que es el del primer diputado, y este estarle
ocupando Dn. Joseph de Hortega, con el motibo de precissarle el salir de la
Corte, en cumpto. de su empleo de Boticario mr. de los Rs. exercitos, sé acordó en
dha Junta, que el fiscal, que actualmente lo és del Colegio, sirva intterinamte las
ausenzias de Dn. Joseph Hortega…” (Junta particular de 8-V-1740. ARANF, L-7,
fols. 15v-16r); José Zavaleta “que hizo de Fiscal por ausencia del propietario
el Sr. Dn. Joseph Hortega” (Junta particular de 30-XII-1751. ARANF, L-7, fols.
97v-98r); José Zavaleta “que hizo de Fiscal por ausencia del Propietario el Sr.
Dn. Joseph Hortega quienes [sic] esta actualmente empleado en negocios de
entidad fuera de España y de orden de la Corte...” (Junta general de 5-I-1752.
ARANF, L-7, fols. 98r-99r).
60
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
No obstante, la primera actuación de carácter centralista
se produce con anterioridad, se trata de la edición de la
Pharmacopoeia Matritensis… (Madrid, 1739), encomendada
al Real Colegio. El asunto fue puesto en conocimiento de la
Corporación en la junta general celebrada el 6 de mayo de 1738
por su secretario, Juan Moreno Bote:
“Por mi, el Ssrio. se hizo presente una carta del Sr.
r
n
D . D . Joseph Cervi, primer medico de Su Magestad, y
Presidente del Rl. Protomedicato, en que participaba al
Colegio la gracia y cesion que hacia de el libro ‘Pharmª.
Matritense’ para que dicho Colegio lo hiciese imprimir y se
utilizase el producto de el. Y habiendo conferidose sobre
los gastos de su impresión, por no haverlos actualmente
en dho. Colegio, se acordo, de conformidad, dar comision
á los oficiales que componen la Junta particular, para que
estos busquen los caudales que fueren necesarios para
dicho fin, como tambien que estos procuren agasajar á
dicho Sr. Cervi por el beneficio que recibe el Colegio con
dicha cesion…”101
Los caudales los proporcionó, de su pecunio personal,
el entonces diputado primero del Real Colegio, Sebastián
Martínez102, con quien la Corporación se endeudó en escritura
pública; por ella sabemos que la cesión de los derechos sobre
la farmacopea se extendió, en el Palacio del Buen Retiro, el 9 de
julio de éste 1738103.
101
Junta general de 6-V-1738 (ARANF, L-7, fols. 4v-5v); con
anterioridad, el tema había sido debatido en una junta particular, la celebrada
el 4-V-1738 (ARANF, L-7, fol. 4v). Sobre la participación del Real Colegio en
la edición de las farmacopeas matritenses, utilizando estas mismas fuentes,
cf. Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo (“Historia de la Farmacopea durante la
colaboración del Real Colegio de Farmacéuticos”. Anales de la Real Academia de
Farmacia, 10(4): 427-482. Madrid, 1944) y María del Carmen Francés Causapé
y María José Aliaga (“Intervención del Real Colegio de Farmacéuticos en
la edición de la Farmacopea matritense”. Acta 34º Congressus Internationalis
Historiae Pharmaciae: 62-65. Belluno: Accademia Italiana di Storia della Farmacia
[Tipographia Piave], 2001; una versión más extensa en Ibid. Anales de la Real
Academia Nacional de Farmacia, 67(2): 319-332).
102
Obligación del Real Colegio de Boticarios de Madrid contraída con
Sebastián Martínez. Madrid, 4-VIII-1738 (ARANF, leg. 4,11,1). La escritura de
obligación quedó protocolizada entre los documentos de Juan Alfonso López
de León; la deuda habría de saldarse el 14-VII-1741 (AHPNM, protocolo 16.386,
fols. [1738] 81r-82v).
103
“Dijeron les toca y pertenezen el Libro yntitulado Farmacopea
Matritense en virtud de la Zession hecha de el a favor del expressado Collexio
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
61
Del carácter centralizador con que fue redactado el texto
da cuenta el decreto regio, firmado por Felipe V a instancias de
su Real Protomedicato y del Consejo de Castilla, inserto tras el
extenso y laudatorio texto de la dedicatoria a José Cervi:
“… para que por él se hiciessen, y executassen
por todos los Boticarios las Medicinas, que debian
tener en sus Boticas, assi Galenicas, como Chymicas
(...) havia mandado el Proto Medicato su parte, que
todos los Boticarios dependientes de su jurisdiccion en
estos nuestros Reynos, le tuviessen precisamente, con la
calidad de que su falta fuesse Capitulo de Residencia en
las Visitas que diessen; y que á todos los que en adelante
se examinassen de Boticarios, se entregase con el Titulo
de su aprobacion la referida Pharmacopea, pagando su
importe según la tassa…”104
La autoria de tan singular obra nos ha quedado velada,
tan sólo un breve comentario en el prefacio ‘Lectori S.P.’ nos
acerca a su carácter colectivo:
“Illius
confinciendae
cura
eruditioribus
demandatae túm Facultatis Medicae Doctoribus,
túm peritissimis Collegi Pharmaceutici Sociis, atque
Examionatoribus, quos omnes in Physica experimentali,
& Iatrica speculatione versatissimos oppidò notum
omnibus…”105
Lo que parece cierto es que, para el verano de 1738, el
texto ya debía estar muy avanzado106, prácticamente listo para
entrar en la imprenta de Miguel Rodríguez107; es probable que,
por el Sr. dr. Dn. Joseph Zervi (…) su fecha en el Buen Reiro a nuebe de Jullio
proximo pasado de este presente año…” Obligación del Real Colegio de
Boticarios de Madrid contraída con Sebastián Martínez. Madrid, 4-VIII-1738
(ARANF, leg. 4,11,1).
104
“Decreto del Tribunal del Real Proto-Medicato, auxiliado por el
Real y Supremo Consejo de Castilla, para que todos los Professores Boticarios
se arreglen en la composicion de los Medicamentos, por lo dispuesto en esta
Pharmacopea Matritense &ª (…) Dado en Madrid á seis de febrero de mil
setecientos y treinta y nueve años”. En: Pharmacopoeia Matritensis…: [26-32].
Matriti: Michaelis Rodriguez, 1739.
105
“Lectori S.P.” En: Pharmacopoeia Matritensis…: [18-25]. Matriti:
Michaelis Rodriguez, 1739.
106
Ya en la junta general de 4-VIII-1738 se tenía noticia de a cuánto
habría de elevarse el costo de edición, 40.320 rs (ARANF, L-7, fols. 6r-6v), lo que
induce a pensar que se conocía la extensión total de la obra.
107
Pharmacopoeia
matritensis
Regii,
ac
Supremi
Hispaniarum
62
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
para diciembre de este año estuviera impreso, a la espera de
insertar en él las páginas del prefacio, que llevan numeración
independiente108, y en las que se incluye el decreto del Real
Tribunal del Protomedicato, firmado en Madrid el 6 de febrero
de 1739, declarando obligatoria la tenencia de la obra en todas las
boticas de España. En cualquier caso, el libro estaba encuadernado
y listo para ser distribuido en julio de 1739109.
Aun cuando no nos quede testimonio documental de ello,
parece evidente que José Hortega colaboró en la elaboración de
esta primera edición de la Pharmacopoeia Matritensis… a tenor
de su protagonismo en la preparción de la segunda edición del
Código, pergeñada desde 1756. En la junta particular celebrada
en la primavera de 1756, a la que asiste José Hortega, entonces
en su condición de fiscal, se pone de manifiesto la ausencia de
ejemplares de la farmacopea y la conveniencia de su edición, por
lo que se encarga a Francisco Lerma, a la sazón director del Real
Colegio, que se ocupe de practicar las diligencias pertinentes ante
el Consejo Real y el Protomedicato110; apenas unos días después
se reúne la junta particular para aprobar el escrito preparado por
Francisco Lerma, dirigido a José Suñol, donde solicita permiso
para que
“… el real Colegio de Boticarios (...) pueda ocurrir
al Consejo por nueva licencia, y Pribilegio pª poder
reimprimir la Pharmacopea Matritense, concediendole el
Protomedicatus auctoritate jussu atque auspiciis. Nunc primum elaborata. Matriti: e
typographia regia Michaelis Rodriguez, 1739. [38], 484 p., [1] h. de grab. La obra
porta un grabado de José Cervi, realizado por Juan Palomino (1692-1777) sobre
un dibujo de Valerio de Iriarte.
108
En junta particular de oficales de 28-XII-1738 se acuerda almacenar
la nueva farmacopea, una vez impresa, en casa de Sebastián Martínez, quien se
ocupó de gestionar las compras de papel y los pagos al impresor (ARANF, L-7,
fol. 8r). La ‘Errata typographica’ queda firmada, por Manuel Licardo de Rivera
‘C.M. Generalis Corrector’ en ‘Matriti, jv Idus Decembri, An. MDCCCXVIII”
(Pharmacopoeia Matritensis…: [484]. Matriti: Michaelis Rodriguez, 1739).
109
El 13-VII-1739 se reúne a la junta general con el fin de hacer llegar a
los distintos obispados la farmacopea impresa (ARANF, L-7, fol. 10r). Se tiraron
3.200 ejemplares de esta primera edición; para ello se invirtieron 420 resmas de
papel marquilla, adquiridas a la casa Nevo, a 53 reales la resma; y 836 pliegos
para el grabado de Cervi. El impresor, Miguel Rodríguez, cobró 7.416 rs por su
trabajo, el encuadernador 12.890 rs. El coste total de edición alcanzó el monto
de 58.750 rs, lo que supone algo más de 18 rs. por ejemplar, el Real Tribunal
tasó el precio de venta en 40 rs, lo que suponía un evidente beneficio económico
para el Real Colegio.
110
Junta particular 23-IV-1756 (ARANF, L-7, fols. 135r-136v).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
63
usufructo de la impresión pº. los mismos fines que deja
expuestos, concediendole al mismo tiempo la facultad
de hacer las adiciones, y correcciones que tubiere por
convenientes, según el estado en que se halla actualmente
la Medicina en España, y el metodo que se obserba en las
Cortes mas cultas de Europa en esta especie de obras…”111
La respuesta de José Suñol es inmediata, en ella accede
a las pretensiones de los boticarios; el Real Colegio, tras pactar
la contestación de agradecimiento, delega en su secretario, Juan
Bayo, y en Clemente Zaydin para que se ocupen de “asistir a las
correcciones y adiciones de la Pharmacopea…”112 No obstante
es José Hortega quien actuará como director de la edición del
nuevo texto: el 18 de mayo de éste 1756 la junta directiva del Real
Colegio acuerda “qe el señor fiscal Dn Joseph Hortega, formase
un plan para dha reimpn. y que formado lo presentase en junta
particular…”113 Y así fue, en la de 9 de junio de este año:
“El Señor Dn Joseph Hortega, cumpliendo con
lo acordado en la Junta antecedente presento un plan
qe ha formado pª la nueba edicion de la Pharmacopea
Matritense, y bisto por los señores de la Junta, y hechado
las reflexiones qe pide tan grabe asunto, aprobaron dho
Junta particular de 29-IV-1756 (ARANF, L-7, fols. 136v-138v).
En cuanto al uso de los beneficios, se señala expresamente: “… á fin de qe el
usufructo se emplease en la conservacion del pequeño Jardin Botanico, que
tiene dispuesto pª la educacion de los manzebos qe se aplican a la Pharmacia,
y para las demas urgencias que pudieran ofrecerse al referido colegio (…) no
tiene fondo alguno cierto pª mantener y defender el honor de la Pharmacia
bastantemente deteriorado pr. la miseria ó infelicidad a que se hallan reducidos
sus Profesores…” (ARANF, L-7, fols. 136v-138v). El escrito fue firmado por
toda la junta directiva.
111
La respuesta queda fechada en 1-V-1756; de ella se da cuenta en
la junta particular de 3 de ‘abril’ [sic por mayo] de 1756 (ARANF, L-7, fols.
138v-140r). En esta misma junta se pasa aviso a Juan Bayo y Clemente Zaydín,
informándoles de la nueva edición de la farmacopea matritense “con las
adicciones y correcciones qe combengan para cuia obra los ha nombrado el Rl.
Colegio, y en su vrtd se les dara abiso pª qe asistn. a las juntas particulares…” De
estas actuaciones se informa en la junta general de 11-V-1756, en ella Francisco
Lerma solicita de los colegiados “qe cada uno de dhos señores diese noticia y
razon de los defectos qe aia notado de la Pharmacopea, como asi mismo si
tubiese algun nuevo medicamto assi simple como compto, los qe examinados por
la Junta particular se probidenciara sobre ello…” (ARANF, L, fols. 140r-141v).
112
113
Junta particular de 18-V-1756 (ARANF, L-7, fols. 141r-142v).
64
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Plan, y acordaron se remitiese una copia de el, al señor
Dr. Dn. Joseph Suñol para su aprobacion…”114
Pero en el mismo acto en que Francisco Lerma informa
de la remisión del proyecto de edición de la nueva farmacopea,
comunica a los colegiales un escrito de José Suñol, presidente
del Real Tribunal del Protomedicato, en el que plantea algunas
dificultades sobre la impresión, una vez consultada la propuesta
del Colegio con los protomédicos Miguel Borbón, Gaspar Casal
y José Amar:
“… pues aunque dias pasados dige á Vmds podian
hazer la reimpresion fundado en el exemplar de Cerví que
dio por si el permiso en la impresión, he hallado despues
el reparo de si se opondra el Real Proto-Medicato por ser
todos los products que del penden pertenecientes a la real
acienda de S.M. y asi quando Dn. Miguel Eugenio Muñoz,
su subdelegado en el Reyno de Valencia pidio permiso
pª hacer una reimpresion del Examen de Cirujanos y
Parteras, cediendo el producto a su favor en atencion a los
gastos qe se le havian originado de dho ministerio, le fue
negado por la razon dicha, en cuia consequencia se me
hace preciso consular al tribunal pª la determinacion…”115
La respuesta de los protomédicos, remitida a través de José
Suñol, supone la paralización del proyecto; otra opción no era
posible116. El Real Colegio habrá de esperar tres años, de largas
y complejas negociaciones, para que el Real Tribunal concediera
los permisos de edición.
Aun cuando las transacciones afectan a la estructura toda
del Real Colegio, avancemos en lo estrictamente concerniente a
Junta particular de 9-VI-1756 (ARANF, L-7, fols. 142v-143v). En
Junta particular de 19-VI-1756, el director informa de haber remitido el plan de
la nueva farmacopea, con su firma, la de todos los compenente de la junta y la
de los colegiales Juan Bayo y Clemente Zaydin (ARANF, L-7, fols. 143r-144v).
114
115
Junta particular de 19-VI-1756 (ARANF, L-7, fols. 143r-144v). El
escrito de José Suñol queda fechado en Aranjuez, a 16-VI-1756; el Real Colegio
responderá -en principio- que no precisa de los permisos de impresión, de
los que ya dispone, sino del plácet al programa de revisión remitido; luego
revisaría su postura (cf. infra).
En junta particular de 24-VI-1756, el Real Colegio “acordo suspender
todas las dilign respecto a la reimpresion de la Pharmacopea Matrits. asta qe V.S.
[José Suñol] y el Rl. Proto-Medicato dispongan lo qe hallaren pr mas combte.
porqe el Colegio no tiene otro objeto de maior beneracion qe la obediencia y
respeto qe tributa A V. y a sus justas determinaciones…” (ARANF, L-7, fols.
145r-145v).
116
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
65
la edicion del texto: en febrero de 1757, la junta directiva -sin el
consentimiento de José Hortega- decide elevar un memorial al
Rey indicándole la necesidad de imprimir la nueva obra117; ese
verano Francisco Lerma, acompañado de algunos colegiales de
su confianza, visita, en San Lorenzo de El Escorial, al marqués
de los Llanos118, quien sugiere la construcción de un laboratorio
químico en las dependencias colegiales como vía para facilitar
la concesión de permisos119. Activadas las negociaciones, se
retoma el proceso de revisión de los textos120, mas nada habría
de avanzarse hasta noviembre de 1760, sin duda las disensiones
internas dentro de la organización colegial -de las que luego
habremos de ocuparnos- llevaron al Real Tribunal a mantener
un prudente silencio121.
Será en noviembre de 1760, bajo la dirección de Bartolomé
Fernández Ortiz, cuando la junta del Real Colegio tenga noticia
de la respuesta oficial del Real Tribunal: “qe se presente dha
Pharmacopª, sus correctiones, y cathalogo de Medicinas qe se
han de aumentar para hacer su dever…”122; entonces volverán a
encargar a José Hortega los trabajos de edición:
“Que al Sr. Dn. Joseph Hortega se le abonen todos
los gastos que ocurran en la correccion de la pharmacopea
117
Junta particular de 14-II-1757 (ARANF, L-7, fols. 148r-148v).
118
Junta particular de 3-VI-1757 (ARANF, L-7, fols. 151r-151v).
En junta particular de 14-VI-1757, a la que no asiste José Hortega,
Francisco Lerma da cuenta de su reunión con el marqués de los Llanos, “…
resulto haver dado los Sres. del Real Proto-Medicato un Memorial al Rey
exponiendo á S.M. qe para conseguir el Colegio lo que pretende se obligue este
á poner el laboratorio chimico qe tiene ofrecido en sus estatutos…”, se acuerda
emprender de inmediato “quantas diligencias sean precisas pª la construccion
de dho elaboratorio, haciendo qe por mros de obras se formen diseños, los qe hara
ver a la Junta pª su determinacion…” (ARANF, L-7, fols. 151v-152v).
119
120
En junta particular de 1-VII-1757 “se acordo tener junta el lunes
proximo pª disponer el modo de hacer dha Pharmacopea…” (ARANF, L-7, fol.
152v); y en junta particular de 4-VII-1757 “… se acordo formar la Pharmacopea
nª arreglada al Plan qe tiene aprobado el Colegio (…) juntandose pª este fin,
los oficiales actuales, el Sr. Dn Juan Bayo, Dn Clemente Zaydin, y demas Sres.
Colegiales qe combengan, en la Casa del Colegio…” (ARANF, L-7, fol. 153r).
121
En la junta particular de 30-XII-1761, Bartolomé Fernández Ortiz,
director y propietario de las instalaciones del Real Colegio de Madrid, se
referirá a la publicación de la segunda farmacopea matritense como “la que
tanto tpo ha estado parada por vars pasiones de nosotros mismos por las que
huviera sido imposible el hallarla oy en el estado de salir a luz” (ARANF, L-7,
fols. 240r-241r).
122
Junta particular de 27-XI-1760 (ARANF, L-7, fol. 224r).
66
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
matritense, y que elija los sugetos que gustase dando la
junta todas sus facultades…”123
Es un último reconocimiento público a quien tanto había
colaborado en la preparación de unos textos que él no habría de
ver impresos; en noviembre de 1760, apenas unos días después
de serle encomendado este trabajo, es relevado en éste y en las
demás misiones que el Colegio le tenía asignadas:
“Estando las Dependencias del Rl. Colegio sin
curso por la quebrantada salud de Jph Hortega Apoderdo
de el, se trato del modo mas util para la menor omision en
ellas y se determino qe el Sr. Director y los Sres Diputados
practicasen quantas diligencias fuessen precisas y de las
resultas diessen noticia individual al dho. Apoderado…”124
José Hortega no pudo disfrutar de los resultados de sus
afanes; enfermo desde noviembre de 1760, habría de fallecer en
el enero de 1761 y el polémico texto, apenas remozado frente a la
versión anterior, no estuvo disponible hasta 1762125.
Junta particular de 4-VII-1760 (ARANF, L-7, fols. 221r-221v). En lo
cual se reafirma la junta general de 12-VII-1760: “Asi mismo fue determinado
el que la Pharmacopea Matritense, que al presente esta arreglada en parte la
corrija y concluia el Sr. Dn. Jph. Hortega, y que para este asumpto pueda nombrar
algun otro sugeto que le alivie considerando el Colegio la mui dilatada que es
esta Comision como que a cargo de dho señor estan tambien las Instituciones
Pharmaceuticas que el Colegio tiene ofrecidas al Rl. Protho Medicato…”
(ARANF, L-7, fols. 221v-222r).
123
124
Junta particular de 17-X-1760 (ARANF, L-7, fols. 222r-222v).
Pharmacopoeia matritensis regii ac Supremi Hispaniarum Protomedicatus
auctoritate, jussu atque auspiciis elaborata. Editio secunda locupletior, et longè
emendatior. Matriti: typis Antonii Perez de Soto, 1762. [32], 556 p. En junta
particular de 17-XI-1760 se presenta el pedimento realizado al Real Tribunal
para que “se confirme la gacia de poder reimprimir la Pharmacopea Matritense
addicionada como dho tribunal ha conocido en dia quatro de Junio de 1756 en
atencion a ser dha obra una de las mas bien recividas en la Europa, y no hallar
por util la impresión de la nueva por no dar lugar a mayor demora, como la que
se experimenta asta oy de la que se ha seguido, y sigue notable perjuizio assi al
beneficio comun de los Profesores, como al mayor bien estar del Rl. Colegio…”
(ARANF, L-7, fols. 223r-223v). Diez días después, en junta particular de 27XI-1760, se da noticia de la respuesta del Real Tribunal: “qe se presente dha
Pharmacopª, sus correctiones, y cathalogo de Medicinas qe se han de aumentar
para hacer su dever…” (ARANF, L-7, fol. 224r). En la junta general de 12-XII1760, ante la imposibilidad de localizar préstamos a interés menor a un 3%, “por
esta razon fue preferido a otro el Sr. Dn Bartholome Fnnz Ortiz Botº de la Reyna
Madre (…) cediendole segunda vez su venta para su reembolso como tambien
se le dio la facultad para que corra con dha impresión, gastos, gratificaciones &ª”
(ARANF, L-7, fols. 225v-226v). El 21-XII-1760 se acuerda, en Junta particular,
125
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
67
La actividad de José Hortega en el Real Colegio de
Boticarios de Madrid habría de descollar en un segundo frente: la
polémica con las boticas de religiosos; un problema incialmente
gestado como de índole local que derivó hacia una solicitud de
carácter nacional.
En la junta particular del 28 de abril de 1745 se da noticia
de la apertura de botica presentada ante el Real Tribubal del
Protomedicato por el madrileño Convento de Santo Tomás; ante
la queja de sus colegiados, la reacción de los miembros de la
junta es unánime:
“Demanda ante el juez competente, pidiendo que
ninguna Comunidad Religiosa pudiese tener botica ni
vender Medicina en publico ni secreto según lo regulado
por las Bulas Pontificias (...) pidiendo que no solo se
cierren las Boticas de las Comunidades, Congregaciones
y Lugares Píos de Madrid sino tambien de toda España, y
demas dominios de S.M.” 126
buscar sujeto que abra el retrato del Rey para la Farmacopea, pero que antes
se pida al Rey licencia para dedicársela, se nombra para ello a Bartolomé
Fernández Ortiz (director), José Burruezo y Francisco Brihuega (diputados)
(ARANF, L-7, fol. 227r). En la junta particular de 6-I-1761 se da noticia de la
aceptación regia, comunicada por real orden de la Secretaría de Gracia y Justicia
a Juan Curiel, juez de imprentas, y al Colegio de Boticarios (ARANF, L-7, fols.
227r-231r). Tras la incapacidad de José Hortega de ocuparse de la edición de la
obra, la junta general de 12-II-1761 elige a Bartolomé Fernández Ortiz (director)
y José Zavaleta (decano) para su coordinación; en esta misma sesión, el director
informa haber comprado ya el papel para la impresión de la farmacopea, “lo
que hizo presente a la Junta para su aprovacion, y haviendose suscitado sobre
este particular controversia, unos, que aquel, otros, qe otro distinto, y algunos
que papel fino de Olanda se disolvio la expresada junta sin determinacion…”
(ARANF, L-7, fols. 232v-233v). Para marzo de 1761 está escriturado el préstamo
de Bartolomé Fernández Ortiz: “… se determino, y aprovo que desde este dia
goce el señor Director Dn Bartholome Fernz Ortiz el premio de tres por ciento de
los sesenta mill rrs de vn que ha prestado al Rl. Colegio (…) para la reimpresion
de la Pharmacopea Matritense…” (Junta particular de 26-III-1761. ARANF, L-7,
fols. 234r-234v). A primeros de julio de 1762 la obra está ya concluida, entonces
se encomienda a José Burruelo (vicedirector) el que concrete los costes (ARANF,
L-7, fol. 253v); será en septiembre de éste 1762 cuando la junta general designe
a Francisco Brihuega (secretario interino) y a Antonio Moreno Bote (diputado
segundo) “para recoger las Pharmacopoeas de Casa del Impresor y que de ellas
se haga pago al Sr Dn Bartolomé Ortiz” (Junta general de 18-IX-1762. ARANF,
L-7, fol. 258v).
Del análisis de estos pleitos nos ocupamos en Antonio González
Bueno. “Las farmacias de religiosos en la reforma sanitaria de la España
ilustrada”. Butlletí de la Societat d’Amics de la Història i de la Ciència Farmacèutica
Catalana, 2(2): 46-54. Barcelona, 1993.
126
68
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
El Real Colegio de Madrid asume, en su propuesta, una
función centralizadora, muy acorde con la organización estatal
del momento y vaticinadora de lo que habría de ser su actuación
en otros asuntos defendidos por la Corporación127.
El pleito contra el Convento de Santo Tomás pone de
manifiesto un enfrentamiento entre el Protomedicato castellano,
favorable a la apertura de la botica, y la posición de control a
ultranza mantenida por el Real Colegio, dispuesto a conseguir el
final de la competencia religiosa a cualquier precio128.
El Colegio de Boticarios delegó sus facultades en José
Hortega y en Juan Moreno Bote129, a quienes dotó de todas las
capacidades, legales y económicas, necesarias. Su actuación fue
rápida, en la junta particular celebrada a fines de este agosto
de 1745, presentaron un primer memorial donde solicitaban la
Cf. María del Carmen Callega Folguera. La reforma sanitaria en la
España ilustrada. Madrid: UCM, 1988.
127
La visita de inspección para proceder a legalizar la botica de este
Convento se realizó en 30-X-1745, pese a la oposición, ya explícita, del Colegio
de Boticarios de Madrid; el Protomedicato denegó el permiso de apertura
aduciendo falta de géneros. Algo menos de un año después, el 1-X-1746, Pedro
Ibáñez, boticario del Convento, formula ante el Prior una declaración en la que
acusa a José Moreno Bote, José Hortega y José Fernández de haberle inducido a
declararse contrario a la apertura “prometiéndome ácoger, ámparar y regalar,
para lo que le prometieron veinte pesos de á quince cada uno”; ante esa
declaración se reafirmó, en presencia del juez Antonio Camuñas, un día después.
En el documento conservado en la Real Academia Nacional de Farmacia
(ARANF, leg. 7,1) consta, anotado al margen por los colegiados acusados: “esto
es verdad, pero es falso que le señalásemos cantidad determinada”.
128
En la junta particular de 28-IV-1745, el fiscal, José Zavaleta, da
cuenta “que respecto de aver acordado el Colegio en la Junta Genl. de 9 de Sepre
de 1741 que se pusiese Demanda ante Juez competente, pidiendo que ninguna
Comunidad Religiosa pudiese tener Botica Publica, ni vender Medicina en
publico, ni en secreto según lo decretado pr Bulas Pontificales, le parecia muy
conveniente qe con la mr brevedad se pusiese en execucion el acuerdo del Colegio;
y aviendo oido los Sres. de la Junta la proposicion del Sr. Fiscal, despues de un
reflexivo Examen la aprobaron, y acordaron qe los Sres. Apoderados del Colegio
Dn. Juan Bote, y Joseph Hortega dirijan enteramte esta Dependencia hasta su
total Conclusion favorable ó adversa, recurriendo á S.M. ó á sus Tribunales, ó al
Sumo Pontfice, ó finalmte á donde juzguen pr mas conveniente pidiendo que no
solo se cierren las Boticas de las Comunidades, Congregaciones, y Lugares Píos
de Madrid, sino tambien de toda España, y demas Dominios de S.M. y para
qe en esto obren con toda livertad acordó la Junta darles todas sus facultades,
y las del todo el Colegio sin limitacion alguna, y qe para ello se les libre todo
el caudal qe pidieren á fin de qe se practique quanto se pueda para lograr este
intento tan favorable al Colegio, y á la facultad…” (ARANF, L-7, fols. 49r-49v).
129
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
69
clausura de todas las boticas religiosas130. El escrito fue divulgado
entre los profesionales del Reino, con lo cual cumplía una
doble misión: servir como concienciador de los boticarios aún
indecisos, a través de la compilación de textos legales y morales
favorables a sus pretensiones y, por otra parte, promover la
correspondencia entre los boticarios el Reino y la Corporación
madrileña, convirtiéndose ésta en aglutinadora de las demandas
emitidas en todo el territorio nacional.
Los argumentos esgrimidos por el Colegio madrileño
en su extenso memorial, en el que se entrevee la pluma de José
Hortega, tienen como base una razón de índole moral: el estado
de perfección al que deben aspirar los consagrados al culto
divino les obliga a alejarse del trato mundano. Para sostener
su teoría, los boticarios madrileños presentan una seleccionada
y amplia colección de textos conciliares, junto a otros salidos
de las plumas de los Santos Padres, tendentes a demostrar la
imposibilidad moral de los religiosos para dedicarse a labores
venales. Sirviéndose de la diferenciación establecida por san
Jerónimo entre el estado laical y el eclesiástico131, y estableciendo
la separación de ambos, en funciones y deberes –el elemento
primordial de su discusión-, solicitan ante el Rey, en su calidad
de ‘Protector de la Iglesia y de sus sagradas disposiciones’, el
que vele por la buena marcha del Estado haciendo cumplir las
decisiones de la Santa Rota referente a la inconveniencia de que
los religiosos ejercieran oficio público. Sólo en raras ocasiones el
Junta particular de 30-VIII-1745 (ARANF, L-7, fols. 49v-50r). Este
escrito podría corresponderse con el impreso conservado en el archivo de la
Real Academia Nacional de Farmacia (ARANF, leg. 4,3); José Antonio Pérez
Romero (“El Colegio de Boticarios de Madrid y las boticas de religiosos”.
Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 25(99): 139-146. Madrid,
1974) estudió un ejemplar de este mismo impreso, conservado en la Cátedra
de Historia de la Farmacia y Legislación Farmacéutica de la Universidad de
Granada; basándose en las notas marginales, fija su redacción entre 1743 y 1753.
130
131
El autor cita a san Jerónimo tomando su testimonio de Baltasar
Gracián: “S. Hyeronomyn. apud Gratia. 12.q.I.can. 7.ibi: Duo sunt genera
Christianorum: est autemunum genus quod mancipatum Divino Officio,
& deditum contemplationi, & orationi ab omni stepitu temporalium caesare
convenit, ut sunt Clereci, & Deo devoti, videlicet concversi. S. Petr. Clun. Ad D.
Bernard. Ep. Apolog. Ibi: An non videtur indecens, &c. Concil. Trident. Sess. 22
de Reform. C.I.”, de donde deduce que “siendo el Religioso, y el Eclesiástico,
por su elevada perfeccion, dedicado solamente á la Oracion, Oficio Divino,
Exercicios espirituales, y cultivo del Alma, debe estar enteramente apartado
de todo esserpito, oficio y cuidado temporal” (Memorial…cit ut supra, fol. 1v.
ARANF, leg. 7.1).
70
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
extenso memorial hace alusión a la verdadera razón motivadora
del escrito, la dura competencia económica ejercida por las boticas
conventuales, constante problema planteado en las actas de las
reuniones mantenidas por el Colegio madrileño; y aún cuando
ésta aparece lo hace socarronamente, con una disculpa final en
la que vuelve a relucir la necesaria separación de las funciones
entre clérigos y seglares.
A nadie escapa que las consideraciones morales resultan
insuficientes para justificar la petición de los boticarios; quizás
por ello los colegiales madrileños cuidan de añadir un decisivo
planteamiento macroeconómico, de claros tintes ilustrados:
“De cuyas consideraciones se infiere igualmente
el perjurio grave de la Real Hacienda; pues minorados
los Profesores Seculares, y disminuidos sus Patrimonios,
se desfalcan, y pierden las Rentas, y Derechos de V. Mag.,
faltan familias para su Real Servicio y contribuyentes para
la subsistencia de la Monarquía (…) y entran los caudales
y riquezas en las manos muertas de los Eclesiasticos, y
Comunidades Religiosas, donde se estancan, y pierden el
debido circulo que debieran dar entre los Vassallos de V.
Mag., por ser la sangre que vivifica, y conserva el Cuerpo
mystico de la Republica, y mantiene el Comercio, en que
consiste su principal subsistencia, de que se sigue grave,
y notorio detrimento (…) en perjuicio público y del Real
Erario…”132
En la resolución del Memorial… enviado por el Real Colegio
de Madrid cifran los boticarios madrileños la esperanza de ver
incrementados sus haberes profesionales133; para reforzar su
causa, José Hortega, en nombre del Real Colegio, decide solicitar
132
Memorial… cit ut supra, fol. 11v (ARANF, leg. 7.1).
En la junta general de 31-VIII-1745, el secretario da noticia de
que quieren abrir botica pública los Conventos de Santo Tomás y Carmelitas
Descalzos de Madrid, se les pide a los apoderados que se ocupen de paralizar
los permisos “pr los graves perjuicios que resultarian á la mayor parte de
los Sres colegiales de qe estos dos Combentos tengan Boticas publicas, y que
vendan Medicinas, como ya lo executan siete Comunidades desta Corte con
notable daño, y perdicion de los individuos del Colegio” (ARANF, L-7, fols.
50v-52r). La botica del Convento de Santo Tomás se abrió; el Diario noticioso,
curioso, erudito y comercial público y económico de 2-III-1758 (pág. 2), da aviso de
que quien quiera adquirir una ‘librería coral’ se dirija a este establecimiento.
También la botica del Convento de la Merced, donde darán cuenta de una capa,
según informa el Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico
de 18-III-1758 (pág. 4).
133
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
71
de otros colectivos farmacéuticos de todo el Reino informes con
los que apoyar la solicitud requerida en el memorial elevado al
Monarca; en la junta general celebrada por la Corporación a fines
de agosto de 1745 se acuerda:
“… se escriba en Nombre del Colegio á los
Colegios de Pharmaceuticos de Sevilla, Granada,
Zaragoza, Barcelona, Valencia, y Pamplona, y asimismo
á los principales Boticarios (…) y á los Visitadores de
Boticas (…) pidiendo su aprobacion y consentimiento”134
Los informes y poderes a favor de José Hortega, como
secretario del Colegio madrileño, no se hacen esperar; visitadores
de boticas y agrupaciones profesionales formadas en lo
obispados de todo el Reino de Castilla contestan, en breve plazo,
a la solicitud formulada desde la institución de la Corte135; mas
no sólo el territorio afecto al Protomedicato castellano; también
los territorios con jurisdicción independiente como Valencia,
Aragón o Navarra envían sus informes al Colegio de Madrid136.
A partir de este memorial, y como consecuencia de la
continua preocupación de la cúpula de los colegiales madrileños
por el problema de las boticas religiosas, se estrechan los lazos de
comunicación con otros Colegios profesinales, particularmente
con el de Barcelona, que tiene planteados pleitos similares. Un
total de doce cartas, dirigidas a José Hortega por Raimundo
Ribas, desde la Ciudad Condal, todas durante los años 1746 y
134
Junta general de 31-VIII-1745 (ARANF, L-7, fols. 50v-52r).
Se conserva extensa documentación en el archivo de la Real
Academia Nacional de Farmacia; la correspondencia disponible ofrece una
buena visión de las farmacias de religiosos en la España de los años centrales
del XVIII: Sevilla (ARANF, legs. 6,19; 7,8), Cádiz (ARANF legs. 6,21; 7,16),
Puerto de Santa María (ARANF, leg. 6,26), Loja (ARANF, leg. 6,9), Antequera
(ARANF, leg. 7,6), Córdoba (ARANF, leg. 7,7), Badajoz (ARANF, leg. 6,10),
Yecla (ARANF, leg. 6,25), Sigüenza (ARANF, leg. 6,7), Guadalajara (ARANF,
legs. 7,11; 7,12), Toledo (ARANF, legs. 6,5; 7,21), Ocaña (ARANF, legs. 6,17;
7.17), Talavera (ARANF, leg. 7,22), Ciudad Rodrigo (ARANF, leg. 7,17), Segovia
(ARANF, legs. 6,6; 7,5), Soria (ARANF, legs. 6,4; 7,15), Burgos (ARANF, leg.
6,24), Meruelo (ARANF, leg. 7,24), Salamanca (ARANF, legs. 6,1; 7,18), Zamora
(ARANF, legs. 6,15; 7,14), Valladolid (ARANF, legs. 6,22; 7,19), Palencia
(ARANF, legs. 6,3; 7,20), Villamaño (ARANF, leg. 6.20), Astorga / Oviedo
(ARANF, leg. 6,12), Liébana (ARANF, leg. 6,14), Santiago de Compostela
(ARANF, leg. 6,11) y Coruña (ARANF, legs. 6,16, 7,23).
135
Nájera (ARANF, legs. 6,8; 7,13), Zaragoza (ARANF, legs. 6,18, 7,10),
Logroño (ARANF, leg. 7,13), Valencia (ARANF, legs. 6,13; 7,9) y Pamplona
(ARANF, leg. 6,22).
136
72
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1747137, mantienen directamente informado al Colegio madrileño
de la situación de un pleito similar entablado entre los boticarios
barceloneses y el Convento de Santa Catalina, información tan
precisa y detallada que José Hortega llegó a conocer las decisiones
rotales antes, incluso, que los propios boticarios pleiteantes138. La
razón parece clara, la decisión rotal influiría sobre el veredicto
regio ante el Memorial… enviado por el Colegio de Boticarios
madrileño; así lo reconoce José Hortega ante su comunicante
barcelonés al calificar como ‘lo mas eficaz para todos’139 la
publicacion de una decisión regia en la que se decretase el cierre
de todas las boticas conventuales.
La correspondencia mantenida por José Hortega desde la
secretaria del Colegio de Madrid confirman el papel centralizador
asumido por la Corporación; es a él a quienes los barceloneses
envían los ejemplares de las Cartas ejecutorias redactadas por la
Santa Rota para que éstas sean distribuidas al resto de los Colegios
de Boticarios del Reino y a quien se considera informado sobre
el alcance de estas resoluciones y su posible aplicación a todo el
territorio nacional140.
El problema de las boticas religiosas mantendrá la
atención de José Hortega, y del resto de la junta directiva del
Colegio, entre los años 1745 y 1747; en el verano de éste 1747, José
Suñol, presidente del Real Tribunal del Protomedicato, escribía
a Hortega:
“… Puede Vm. asegurar a ese Rl. Colegio, que
en quanto estubiere de mi parte protegeré su justa
pretension, y ya sabe VM. que siempre he sido opuesto
Correspondencia cursada entre Raimundo Ribas y José Hortega
(ARANF, leg. 7,4).
137
“Esta noticia no he participado ahun á mi Colegio (…) sí á los señores
de la Junta que se convocaron á esta su Casa…”; la nota incluye unas supuestas
palabras puestas en boca del Pontífice ante la Prelatura: “Estos fraylassos no
procuran otro que engordarse ellos, y emprobeser a los Pobres seculares de
quienes sacan sus rentas”, todo un símbolo en si mismas (Carta de Raimundo
Ribas a José Hortega. Barcelona, 11-II-1746. ARANF, leg. 7,4,6).
138
Carta de Raimundo Ribas a José Hortega. Barcelona, 10-VI-1746
(ARANF, leg. 7,4,14).
139
“Estimare á Vm. me insinue quanto se ofresca para Inteligencia en
el Curso de la prevencion [que] sigue su Rl. Colegio en nombre propio y de
los demas de nuestra España…” (Carta de Raimundo Ribas a José Hortega.
Barcelona, 20-V-1747. ARANF, leg. 7,4,12).
140
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
73
a las boticas de los Conventos, lo malo es que tienen
muchos Protectores…”141
Tras el escrito de José Suñol, José Hortega interrumpe
la ronda de consultas establecidas con el resto de los colectivos
farmacéuticos; la opinión del Real Tribunal parecía proclive a
los intereses del grupo profesional al que defendía. No obstante,
Hortega no llegó a conocer la resolución del conflicto; la decisión
regia se haría esperar hasta el 28 de febrero de 1761, cuando
nuestro boticario hacía días que había fenecido; entonces Carlos
III dictaminó:
“Que subsistan todas las Boticas, que tienen
abiertas para el Público las Boticas Religiosas y Lugares
Píos; con tal de que la encabecen en personas seglares,
idoneas y aprobadas, y se sujeten a la Visita, como las de
los seculares, prohibiendo su Magestad, que por ninguna
Comunidad se pueda abrir otra nueva sin expressa
licencia suya…”142
No fueron éstos los únicos asuntos atendidos por José
Hortega como miembro de su Colegio; en enero de 1743, en
razón de su cargo de secretario, solicitará de Francisco Javier
Quesada, que lo era del Real Tribunal del Protomedicato, la
devolución de la documentación relacionada con el Colegio
de Boticarios, para que éste pudiera formar su propio archivo,
reconocido en sus Estatutos… 143; en el verano de 1744 asumió los
trabajos de edición de la nueva tarifa, arreglada a la Pharmacopoea
141
leg. 7,25,1).
Carta de José Suñol a José Hortega. Aranjuez, 12-VI-1747 (ARANF,
142
Novísima Recopilación de las Leyes de España. Mandado formar por el
señor Don Carlos IV. Madrid: en la Imprenta de Sancha, 1805-1807 (cf. tono VI,
libro VII, págs,. 107-108). Aunque dictado el 28 de febrero, la junta directiva del
Colegio de Madrid tuvo conocimiento de la decision regia con anterioridad;
el 11-II-1761 se reúne junta particular “para comunicar a todos los Sres. del
Colegio lo resuelto por los señores del Consejo de S.M. (…) en el Pleito con
los boticarios regulares…” (ARANF, L-7, fol. 232r); y en junta general del día
siguiente se acuerda: “… que el Señor Director subvenga a cumplir con los
Caudales necesarios para su conclusión y que gratifique y pague según parecer
de los Peritos que para ello le de el Colegio su entero y cumplido poder…”
(Junta general de 12-II-1761. ARANF, L-7, fol. 232v).
En junta particular de 31-I-1743 se acueda que José Zavaleta y
José Hortega “… supliquen en nombre del Colegio al Sr. Dn. Franco. Xavier de
Quesada secretario del Rey Nr. Sr. y Propietario del Rl. Protomedicato que mande
entregarles todos los Papeles, é instrumentos qe. se hallen en su Secretaria, y
que pertenezcan al Colegio para formar el Archivo que está prevenido pr. el
Estatuto IX...” (ARANF, L-7, fols. 25v-26v).
143
74
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Matritense…144, y aún cinco años después, en el verano de 1749,
volvería a ocuparse de su actualización145; intervino en las
negociaciones con los drogueros de la madrileña calle Postas para
evitar la venta de medicinas en sus establecimientos146, promovió
la adquisición de nuevos locales para el Colegio, facilitó las
relaciones entre la Corporación profesional y los miembros del
Real Tribunal del Protomedicato147; aseguró la distribución de las
Suponemos que se trata del opúsculo, sin fecha, titulado Tarifa o
regulacion de los precios a que se han de vender todos los medicamentos simples, y
compuestos, que se tienen repuestos en las Boticas de estos Reynos para el uso medico,
arreglada à la Pharmacopea Matritense, hecha por autoridad y mandato del Real ProtoMedicato. En Madrid: por Miguel Francisco Rodriguez, [s.a.]. 46 p., del que la
Biblioteca ‘Marqués de Valdecilla’ (UCM) dispone de un ejemplar (signatura:
BH MED Foll. 501). La aprobación de esta nueva tarifa por el Tribunal del
Protomedicato fue comunicada en junta particular de 23-VII-1744, en ella el
director, Lorenzo Alquizalete, informa que el documento está ya en su poder
y pronto a imprimirse; se tirarán 3.000 ejemplares, 200 en papel fino y 2.800
en ‘papel de la tierra’; se encomienda que “la eleccion del impresor, del Papel
necesario para la impresion, la Correccion de la imprenta, y demas cosas qe
sobre este punto ocurriesen, quedase al cuidado del Sr. Dn. Jph de Ortega, el qual
admitio este encargo” (ARANF, L-7, fols. 43v-44r). Apenas un mes después, en
la junta particular de 14-IX-1744, el director da cuenta de que la tarifa ya está
impresa, y firmados un buen número de ejemplares por Javier de Quesada, su
precio se tasa en 6 rs y se encarga de su distribución a José Hortega (ARANF,
L-7, fols. 44r-44v).
144
En junta general de 6-VI-1749, José Hortega, entonces director de
la Corporación, expone que el Real Protomedicato “havia mandado que se
compusiese nueba tarifa, mandando pª este effecto á dho Sr. Director [Hortega]
y a los Sses Dn Juan Bote, Dn Joseph Manzano, Dn Juan Bayo, y Dn Cristoval
Velez, los quales havian compto. la referida Tarifa con asistencia, voto y parecer
de todos los Sses. de la Junta particular…”, la tarifa fue leída en esta junta y
aceptada por el Colegio (ARANF, L-7, fols. 69v-71v); su texto estuvo listo para
la imprenta en agosto de éste 1769, según se señala en junta particular de 19VIII-1749 (ARANF, L-7, fos. 71v-72r).
145
En junta particular de 15-III-1748 se nonbra una comisión para
“la composicion de las antiguas diferencias, que subsisten entre el Colegio y
los Mercaderes de la Droguería de la calle de las Postas”; la conformarán José
Hortega, Juan Moreno Bote y Gregorio Aedo (ARANF, L-7, fol. 61r).
146
147
Particularmente interesante es la visita que el Real Tribunal realiza a
los locales del Real Colegio, con motivo de la exhibición de simples para preparar
la Triaca en la primavera de 1744, acuden al acto José Suñol, los protomédicos
Gaviria y Loqui, los visitadores José Pavón y Francisco Pérez Izquierdo,
boticarios de S.M. “estaban adornadas las salas con el Asseo, y compostura
que pr. menor esta anotado en papel separado (...) Todos los generos estaban
dispuestos en una Bajilla de China, y colocados en un aparador, que se hizo de
intento de Madera por orden de el Sr. Director [José Hortega] (…) Asistieron á
este acto todos los Sres Colegiales distribuidos en acto de ceremonia, los quales
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
75
producciones colegiales: tarifas, farmacopea y triaca, tanto entre
los boticarios asentados en el resto del territorio nacional148 como
entre la cúspide del Tribunal del Protomedicato149; potenció la
adscripción de los boticarios madrileños a su Colegio150 y, en
reiteradas ocasiones, se ocupó de velar, en representación del
Colegio, por los intereses pecuniarios de los colegiales difuntos151;
sus compañeros reconocieron sus trabajos dejando constancia de
su buen hacer, ya en junio de 1748, miemtras ejercía su primer
mandato como director:
aprovaron y se mostraron satisfechos (…) y el Sr. Director [Hortega] concluyó
el acto dando gracias al Tribunl. por medio de una oracion Gratulatoria á que
correspondio el Sr. Suñol” (Nota inserta entre las actas de la Junta particular de
15-I-1749 y la general de 6-VI-1749. ARANF, L-7, fols. 69v-71v).
Valga como testimonio la correspondencia cruzada con Vicente
de la Torre y Monteverde, ‘boticario examinador de la ciudad de Valencia’,
relativa a la distribución de la Pharmacopoeia matritensis… (Madrid, 1739) y de
la Triaca elaborada por el Colegio; un total de tres cartas fechadas en Valencia,
8-V-1743; Valencia, 5-VI-1743 y Madrid, 15-VI-1743 (ARANF, leg. 4,13,11).
148
149
Tal el envío de ‘doce botecitos’ de la Triaca elaborada por el Real
Colegio remitidos, en sendas cartas fechadas el 24-I-1744, a José Suñol y a José
Cervi; dación que éstos agradecieron con sus respectivas notas, fechadas en El
Pardo, el 25-I-1744, que se conservan (ARANF, leg. 4,13,15).
Durante su primer mandato como director, en la junta general
de 1-VI-1748, “El Colegio acordó admitir por sus colegiales á todos los Sres.
Boticarios que tenían Botica propia en esta Corte, que actualmente no eran
colegiales…”: Manuel de Torres, boticario de la calle Ancha de San Bernardo;
Martín de Arévalo, de la calle Magdalena; Cristóbal Pina, de la Plazuela del
Angel; Antonio Ximénez, de San Antonio de los Portugueses; Nicolás Regidor,
de la plazuela de San Ildefonso; Felipe Utrilla, de la calle de Santiago; Manuel
Girón, de la calle del León; Pedro Sebastián Malo, de la calle de León; Gregorio
del Arco, de la calle Provincia; Antono Méndez, de la calle del Príncipe; Matías
Avanzeno, calle de Hortaleza y José Fernández de la Vega, boticario en la
Fuente de Relatores (ARANF, L-7, fols. 61v-62v).
150
151
Así, tras el fallecimiento de Miguel de la Parra, se le elige, junto a
Lorenzo Alquizalete, “para qe miren y cuiden de su Botica (...) como previenen
los Estatutos” (Junta particular de 30-XII-1745. ARANF, L-7, fols. 52r-53v).
En marzo de 1748 actuó como tasador en el traspaso de la botica de Lorenzo
Alquizalete y María Tovares, su mujer, sita en en la calle de León; el traspaso
se efectuó a favor de Pedro Sebastián Malo y María Antonia González; José
Hortega actuó como parte propuesta por Pedro Sebastián Malo, Lorenzo
Alquizalate recurrió a Gregorio Aedo; la tasación tuvo efecto el 27-III-1748
y fue protocolizada trece días después (Traspaso de la botica de Lorenzo
Alquizalete y María de Tovares. Madrid, 9-IV-1748. AHPNM, protocolo 16.343,
fols. 89r-96v).
76
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
“… dando las gracias al Sr. Director por el zelo, y
quidado con que atendía á los aumentos del Colegio, y al
adelantamiento de la Profesion Pharmaceutica…”152
Como vemos, las labores cotidianas del Real Colegio se
centraron, al menos en estos años iniciales, en la defensa de los
privilegios adquiridos; el fin primero recogido en los estatutos
aprobados en el diciembre de 1736 quedó postergado ante la
solución de los problemas diarios; no exento de dolor, así lo
reconoce un cansado Juan Moreno Bote, en el escrito de dimisión
firmado el 22 de diciembre de 1742:
“Siendo el principal instituto de este ilustre, y
recomendable Colegio, el adelantamto. de las partes, que
hermosean la Pharmacia, en maior alivio, y utilidad del
publico, hasta hoy no numeramos otro progresso que
el de la arreglada formazion de la celebre Thériaca, y la
exquisita edicion de nra. Pharmacopea…”153
Quizás no otra cosa pretendiera José Hortega, quien centró
su actividad científica en la Real Academia Médica Matritense,
limitándose en su actuación en la vida colegial, al menos hasta
donde la documentación conservada nos permite deducir, a la
estricta y diligente defensa de los privilegios profesionales.
Desde su ‘regeneración’, el Real Colegio de Boticarios
contó con un espacio propio, unos locales alquilados en la calle
San Pedro154, pero parece que éstos sólo fueron utilizados para
la teatral exposición de los simples que habría de contener la
Triaca, y para su compleja preparación, de la que la Gaceta de
Madrid proporciona datos, al menos desde 1738155. Sin embargo,
152
Junta particular de 11-VI-1748 (ARANF, L-7, fols. 63r-63v). En
junta general de 5-I-1750, “finalizando los dos años de tal Director con una
oracion plausible, y llena de ternezas con que dejo a todos edificados, y dando
muestras de el Zelo; con que havia desempeñado este empleo, y todos los Sres
correspondieron igualmente agradecidos, como satisfechos…” (ARANF, L-7,
fols. 75r-77v).
153
Escrito de dimisión de Juan Moreno Bote. Madrid, 22-XII-1742
(ARANF, leg. 4,13,14).
154
Éstos eran propiedad de fray Manuel Pérez de la Villa, mercederario,
residente en el Convento de la Real y Militar Orden de Nuestra Señora de la
Merced, Redención de Cautivos, la sede general de la Orden en estos años; se
ocupaba de su cobro el Procurador general del Convento, Andrés Ramos. La
cantidad semestral del alquiler ascendía a 450 rs. Los datos disponibles parecen
asegurar que los locales fueron alquilados el 20-V-1738 (ARANF, leg. 4,8,2;
4,12).
155
“Por privilegio que tiene de S.M. (…) el Colegio de Boticarios de
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
77
y sin duda conviene señalarlo una vez más, las juntas del Colegio
no tenían lugar aquí, sino en la capilla de Nuestra Señora de los
Desamparados, propiedad de la Congregación mariana.
En el verano de 1748, bajo los auspicios de Zenón de
Somodevilla y Bengoechea, marqués de la Ensenada (17021781) y por decisión de José Hortega, quien entonces ocupaba
la dirección del Real Colegio, éste consiguió el alquiler de unos
locales en la calle del Barquillo; el nuevo inmueble permitiría,
además de realizar en él las operaciones para preparar la Triaca
magna156, la instalación de un jardín botánico y la construcción
del laboratorio químico previsto en los estatutos colegiales157.
esta Corte, está preparando publicamente los simples para consingir [sic]
una porcion considerable de Theriaca Magna de Andromaco, los que fueron
aprobados por el Real Protho-Medicato y estuvieron expuestos al público
tres días: Y queda asimismo aplicado en el cultivo, y adelantamiento de la
Pharmacia, como lo previenen sus Estatutos, en beneficio del público…” Gaceta
de Madrid, 19-VIII-1738. En términos similares, aún en el otoño de 1747: “Se
halla en la casa del Colegio, a la entrada de la calle de San Pedro, frente del
Hospital de la Pasión…” Gaceta de Madrid, 19-IX-1747.
156
Así lo recoge la Gaceta de Madrid correspondiente al 13 de mayo
de 1749: “El Real Colegio de San Lucas de Profesores Boticarios de esta Corte
tiene expuestos al público en su casa jardín de la calle Barquillo todos los
géneros medicinales de la Triaca Magna. El Tribunal del Real Proto Medicato
lo aprueba. El público queda satisfecho…”
157
El director, José Hortega, informa “… que con el motivo de los
varios Acuerdos, por los quales esta dispuesto, que se busque casa mas comoda
para celebrar las funciones del Colegio, respecto de la que actualmente tenia
en la calle de Sn Pedro era demasiado estrecha, y assi mismo teniendo presente
el deseo que tenian los Sres. Colegiales de que se pusiese en execucion el Jardin
Botanico y el Laboratorio Chimico, que están prebenidos pr los estatutos
desde el tiempo de la fundacion del colegio habia hallado casa capaz para la
consecucion de ambos intereses en la calle Rl. del Barquillo, con todas las Piezas
necesarias para la celebracion de las Juntas, y assi mismo con terreno capaz
para la formacion del Jardin Botanico, y del Laboratorio chimico, habiendose
interesado el Excmo. Sr. Marques de la Ensenada del Consejo de Estado, Ministro
de la Guerra, Yndias, Marina, y Hacienda, para el logro de la referida casa, cuyos
alquileres eran de mil Rs. de vn en cada un año…” Las nuevas instalaciones
estuvieron disponibles desde comienzos de julio de éste 1748; en junta
particular de 1-VII-1748 “El Sr. Director [José Hortega] dio cuenta á los Sres. de la
Junta como desde este dia empezaba a correr la casa de la calle Rl. del Barquillo
de cuenta del Colegio, y con este motivo se acordó, que inmediatamente se
hiziese la mudanza de los Muebles y demas efectos del Colegio á la referida
casa, y que para la disposicion de las obras que fuesen necesarias, assi en la
casa, como en el Jardin, donde era preciso poner Noria y tambien executar otras
cosas muy precisas para poner en execucion los intentos del Colegio, acordaron
tambien los Sres. de la Junta dar facultad amplia al Sr. Director para que execute,
78
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
En el jardín, ordenado de acuerdo a la propuesta sistemática
de Joseph Pitton de Tournefort (1656-1708)158, comenzaron a
impartirse clases de Botánica a los mancebos de botica en el
otoño de 1751; se ocupó de ello Cristóbal Vélez159.
y delibere por si quanto combenga, y que el Sr. Thesorero aprompte el dinero
necesario en la forma que se acostumbra…” (Junta particular de 1-VII-1748.
ARANF, L-7, fols. 63v-64r).
En la junta general de 26-VIII-1748 “... se acordó qe. se colocasen las
Plantas en el Jardin Botanico según el Methodo del Sr. Tournefort (...) se acordó
nombrar, y con efecto se nombraron á varios Sres. colegiales para cumplimentar
y dar gracias á varios Sres. que habian favorecido al Colegio con Plantas para
el Jardín y con algunas alajas para adornar la casa…”; José Hortega solicitó la
colaboración de todos los colegiales en las tareas de remisión de plantas con
las que poblar el Jardín (ARANF, L-7, fols. 64r-64v). La elección del jardinero,
Pedro Gallego, con un salario de 4 rs/dia, a correr desde el 9-IX-1748, tuvo lugar
en la junta particular de 10-IX-1748 (ARANF, L-7, fol. 65r). En la junta general
de 3-I-1749 se acordó “que el Sr. Director [José Hortega] y junta particular
pueda encargar a qualquiera Señor Colegial qe tenga Zelo, é inclinacon. a
las plantas tome á su cuidado la Clase, ó Clases de plantas, qe discurran ser
precisas, y necesarias, para la Poblacion de el Jardin, con tal, que se abone á
estos Sses. Colegiales el coste, que tuvieren las dhas plantas y su conduccion,
y que ninguno pueda escusarse con pretesto alguno…” (ARANF, L-7, fols.
66r-67v). Las obras del jardín se comienzan a hacer efectivas ese mismo otoño:
“para, que el Jardinero regase con mas comodidad, y beneficio de las plantas,
y assi mismo para la mejor comodidad, y colocacion de los tiestos, era preciso
hacer algunas obras en el referido Jardín, según el plan y demostracion que
les hizo presente…” (Junta particular de 8-XI-1749. ARANF, L-7, fols. 72r-72v).
158
159
“Deseando el Real Colegio el poner en execucion, lo que manda
el Estatuto primero, y veinte quatro, por lo que mira a el curso de Lecciones y
Demostraciones de Plantas que dice se hayan de hacer todos los as. para cuyo
fin se ha establecido el Jardin tres as ha, á costa de los caudales del Colegio
y por la buena diligencia de sus individuos, con el destino, de qe el publico
consiga quanto antes el beneficio tan deseado de esta grande obra, que asta
ahora no hay otra igual en España por esta linea: el Sr. Director con el unanime
consentimto de todos los señores Colegiados tubieron a bien el nombrar al Sr.
Dn Christoval Velez secretario actual del Colegio para qe hiciese las Lecciones
y Demostraciones de Plantas según el methodo de Tournefort, todos los
Domingos del aº mientras el tiempo lo permita a la ora mas comoda, para que
puedan asistir a ellas, los Mancebos de Botica, y los Colegiales que pudiesen
(…) dando principio a estas Lecciones desde el dia quatro de este mes que
es el Domingo inmediato…” (Junta general de 1-VII-1751. ARANF, L-7, fol.
91r-92v). Del funcionamiento inicial de este jardín botánico nos ocupamos en
Antonio González Bueno, Sagrario Muñoz Calvo (“El Jardín del Colegio de
Farmacéuticos de Madrid a lo largo del siglo XVIII”. En: Mª. Paz Ferrero (ed.).
Actas del Simposium 250 aniversario del nacimiento de José Celestino Mutis: 253-259.
Cádiz: Diputación Provincial de Cádiz, 1986).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
79
Este año de 1751 es época de cambios en el Real Colegio;
durante el verano, la Corporación, instigada por las propuestas
de Cristóbal Vélez160, comienza a desarrollar sesiones científicas;
los temas tratados en ellas se reducirían, inicialmente, a los
productos incluidos en la Pharmacopoeia Matritensis…; la primera
de las disertaciones corrió a cargo de José Hortega, se ocupó
de la pulmonaria oficinal161; significativamente hizo preceder
su estudio de un “Discurso Preliminar (…) con la historia del
restablecimto. del Real Colegio, sus progresos, y el estado en
qe oy se alla…”162; su contenido no ha llegado a nuestro días,
pero sí sabemos de la critica que en él realizó a los drogueros y
herbolarios.
Una situación externa, en apariencia banal, socavará
esta renacida Corporación, que comenzaba a articularse en
torno a sus fines ilustrados; se trata de la solicitud que realiza
160
En el acta de la junta particular celebrada el 17-II-1750 se anota la
propuesta de Cristóbal Vélez para que “se diese cumplimiento al estatuto 1º el
que expresa, que ademas de la Formacion de un Jardin Botanico y un Operatorio
Chymico, se hagan todos los años un Curso de operaciones, chymicas, y otro
de Demostraciones de plantas y Drogas exoticas, y para cumplir en parte, se
resolvio por la Junta, se diese qta. al Sr. Director, para, que este nombre seis
Colegiales, para, que estos desempeñen los Diez Meses que restan de este año,
siendo de obligacion de estos traer 10 actos literarios, arreglandose á no tratar,
por ahora de otros generos de simples, que los, que componen la Pharmacopea
Matritense en Materia Medica, y que en la eleccion de estos, sea peculiar, de el
Colegial, á quien se le encargare el assumpto, y si de el Sr. Director ademas de
la nominacion por su serie de sugetos, el de el dia, en que se ha de convocar
la Junta particular, para que antes, que pase a la General el asumpto pase por
esta su aprovacion, y visto, señale dia para convocarla…” (ARANF, L-7, fols.
79v-80v).
“El Sr. Fiscal Dn Joseph Hortega, cumpliendo con lo prevenido en
el Acuerdo antecedente, presentó una Disertacion cuyo titulo es Disertacion
Physico Botanica sobre la verdadera Pulmonaria officinal, y habiendola leydo como
previene el Acuerdo 17 de febrero de 1750 la Junta no solo la aprobo, si no es
qe se mostro muy satisfecha de todo el contesto de ella, y juntamente le dio las
gracias, por el particular desempeño con que esta escrita: y no ofreciendose otra
cosa, se determino el que se leyese en junta general…” (Junta particular de 28VI-1751. ARANF, L-7, fols. 90r-91v). La disertación fue leída en la junta general
de 1-VII-1751 (ARANF, L-7, fols. 91r-92v).
161
“… y algunas reflexiones muy utiles, sobre la equibocacion in
adbertida de algunas especies de Drogas, que estan en uso sin la critica y
examen que les corresponde. Una de ellas es aquella simiente que la gente
Popular nos pide con el nombre de Cominos rusticos, y que nros Arbolarios
ignorantes nos traen con variedad á medida de su antojo…” (Junta general de
1-VII-1751. ARANF, L-7, fols. 91r-92v).
162
80
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
el Ayuntamiento de Madrid, en el verano de éste 1752, para que
la Corporación colaborara, ‘por vía de limosna’, a las fiestas con
las que celebrar la concesión del culto público a santa María de
la Cabeza163. La polémica gira en torno a un asunto de identidad
institucional; las colaboraciones económicas se solicitan a las
agrupaciones gremiales, y algunos colegiados se muestran
contrarios a tal consideración, argumentando los privilegios
de los que dispone el Real Colegio164. La división de opiniones
produjo un cisma en la Corporación165, que tardaría décadas en
resolverse.
Los grupos nos quedan nítidamente definidos; por un
lado José Moreno Bote y José Hortega, quienes hasta entonces
habían ejercido la total autoridad sobre el Real Colegio, al
disponer, desde la génesis de la Corporación, de poderes
especiales otorgados para actuar en su representación166; de
La Sagrada Congregación de Ritos decretó, con fechas 7-VI-1694 y
6-VII-1695, la verificación inmemorial de culto público a la esposa de san Isidro,
confirmado y aprobado por el papa Inocencio XII mediante la Bula Apostolicae
servitutis officium de 1-VIII-1697. Un decreto de Benedicto XIV, de fecha 15-IV1752, concede en su honor oficio y misa con el rito de doble menor. Sobre la
recepción de la noticia en la Villa y Corte, y las celebraciones organizadas en
Madrid, cf. Nicolás José de la Cruz. Vida de san Isidro labrador patrón de Madrid,
adjunta la de su esposa santa Maria de la Cabeza… Madrid: Imprenta Real, 1790
[particularmente págs. 6-10].
163
José Moreno Bote, quien a la sazón ocupaba el cargo de director
del Real Colegio, argumentó que “en ningun tiempo podia perjudicar este
exemplar a los pribilejios de nro. Artte pues Nro. Rey qe D. Gde que nos los
ha conzedido y declarado en el año de [17]50 por su Rl. decreto solo puede
derogarlos y asi mismo el aprecio atencion y cortesia con que se nos ha hecho
esta supca. enbiando su Diputado lo que no han executado asi con todos los
demas Gremios solo llamando a sus cabezas en Casa del Sr. Corregidor (…) era
preciso y combeniente corresponder con bizarria en lo posible y que no tenia
por acertado dar este sonrrojo a la Villa de Madd…” (Junta particular de 4-IX1752. ARANF, L-7, fols. 111v-113r).
164
165
“… ablo uno de los Comisionados [Franciscco Lerma / José María
Hontanillas] diziendo con descarada autoridad y destemple, Señores despacito
que eso no se debe executar que mi Compañero y yo benimos aquí con veinte
y cinco botos cada uno y representamos a el Colegio pleno el Sr. Director [José
Moreno Bote] oiendo estas palabras fue tanto lo que se altero que no ubo forma
de aquietarle lebantandose de su Asiento y saliendo diziendo era un grande
atrebimiento y desverguenza contra su estimazon y honor que antes le tenia
dado el Colegio; los demas oficiales oiendo y biendo esto izieron despues lo
mismo quejandose que tambien a ellos se les azía poca merzed. Disolbiendose
la Junta…” (Junta particular de 4-IX-1752. ARANF, L-7, fols. 111v-113r).
166
“... hazer nombramto. de dos apoderados del Colegio, en quienes
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
81
otro, el liderado por Francisco Lerma, contrario a los poderes
permanentes otorgados a estos dos boticarios.
Finalmente el Real Colegio contribuyó a los gastos de
entronización canónica de santa María de la Cabeza con 3.000 rs,
entendiendo “que esta limosna se pide y se da según la boluntad
de la debocion de cada uno y no por otro motivo”167. Juan
Moreno Bote, que se mantuvo al frente del Real Colegio hasta
diciembre de 1753, intentó que la situación volviera a los cauces
por los que había discurrido hasta el verano del año anterior;
en la primavera de éste 1753 se toman medidas para restablecer
el buen funcionamiento del jardín colegial168 y se retorna a las
conferencias mensuales impartidos por los colegiados169; es un
canto de cisne ante una situación interna crítica, potenciada por
la ausencia de José Hortega de la Corte, quien hasta mayo de
1753 estuvo de viaje por Europa, con objeto de sentar las bases
de una non nata Academia de Ciencias; también colaboró a este
indeseable estado de prostración el fallecimiento de Cristóbal
Vélez en ese mayo de 1753 y el de Juan Moreno Bote, al término
de 1755.
Las funciones de ‘botánico’ del Real Colegio,
desempeñadas desde la instauración del jardín por Cristóbal
Vélez, pasarán, tras la muerte de éste, a las manos de José
recayesse un poder general para seguir todas las dependenzias del Colegio,
y principalmte para sostituirle limitado â los sugettos foraneos, que tubiessen
encargos del Colegio para las ventas de la theriaca, y denunciar lo que no
fuesse de este real Colegio, aunque spre sujetandolo â la Junta particular, y con
su inttervencion (…) fueron nombrados pr Podatarios… los Sres Colegiales Dn.
Juan Moreno Bote, y Dn. Joseph de Hortega...” (Junta general de 31-III-1740.
ARANF, L-7, fol. 15v).
167
Junta particular de 7-X-1752 (ARANF, L-7, fols. 113r-113v).
“Notando el Sr. Director [Juan Moreno Bote] y otros señores de la
junta particular, el notable quebranto del estanque de la noria, y que á dos pies
de altura el agua se iba toda por diversas partes, previendole insensible hizo
llamar Peritos para que lo registrasen, y no allando en ellos mas medio seguro
que el de hacerlo nuevo, conboco á los señores á esta junta…” se acuerda
proceder así “atendiendo de que su fabrica sea firme y permanente para qe
despues no origine nuebos gastos á el Colegio…” (Junta particular de 20-II1753. ARANF, L-7, fols. 116v-117r).
168
“Asi mismo se acordo el que se continuasen los exercicios literarios
que se havian suspendido pr. razones justas, para lo qual se mando dar los
avisos correspondientes…” (Junta particular de 27-III-1753. ARANF, L-7, fols.
117r-118v). Francisco de Aldea lee, en mayo de éste 1753, su “Discurso sobre la
Euphrasia ofizinal, y Ruta Capraria” (Junta general de 9-V-1753. ARANF, L-7,
fols. 119v-120r).
169
82
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Hortega170 y la vacante de Juan Moreno Bote como apoderado de
la Corporación sería cubierta por Gregorio Aedo171. No obstante,
pese a estos cambios, que suponen una continuidad en la cúpula
colegial, el Real Colegio no logrará superar la crisis latente desde
1752172.
En el fondo, asistimos a una lucha interna por el control
del Real Colegio y de los privilegios a éste concedidos: los
antagonistas, José Hortega y Francisco Lerma -y sus polémicasreverdecen durante los años 1756 y 1757, cuando ambos ocupan
lugar en la junta directiva del Colegio; el primero como fiscal, y el
segundo como director; subyacente a esta situación se encuentran
las negociaciones en torno a la edición de la segunda edición de
la Pharmacopoeia Matritensis…, éstas debieron iniciarse durante
la visita a los géneros que habrían de componer la Triaca magna,
a la que asistieron, en el verano de 1756, los protomédicos José
Suñol, Miguel Borbón, Gaspar Casal y José Amar, y de la que no
fueron informados algunos colegiales, entre ellos José Hortega173.
170
“… se acordó se levante el Jardin alto quitando los arboles frutales,
y que su direccion quede á la disposicion del Sr. Dn. Jph Hortega a cuias hordenes
ha de estar sugeto el Jardinero…” (Junta general de 13-XII-1755. ARANF,
L-7, fols. 129v-131r); “… el Sr. Director [Francisco Lerma] hizo presente que
el estanque del jardin estaba abierto y que hera preciso componer; y oyda la
proposicion, el Sr. fiscal [José Hortega], hizo oposicion a que se compusiera, y
que en caso de componerlo se diese pª ello quenta a la Junta gnral, y haviendo
controvertido sobre este particular se acordo por pluralidad de botos, el qe se
compusiera dho estanco sin dar quenta a la junta gnral y qe su coste no exceda
de ochocientos rs vn…” (Junta particular de 13-XI-1756. ARANF, L-7, fols.
147v-148r).
171
“… suplicandole concurriese con el Sr. Dn Joseph Hortega, á quanto
tuviere por conveniente, y favorable al Colegio...” (Junta general de 13-XII1755. ARANF, L-7, fols. 129v-131r).
172
Entre 1753 y 1756 sólo celebró dos juntas generales, el gobierno de
la Corporación se trasladó a las decisiones de las juntas particulares, y aún éstas
resultaron menos frecuentes que en períodos anteriores.
173
Cf. “Visita General de los generos de que se compone la triaca
magna” (ARANF, L-7, fols. 146r-147r); también asistieron los médicos de
Cámara Andrés Piquer, Alfonso Lope, José de León y Pedro Sedano. La visita
tuvo lugar el 7 de agosto; de ella da cuenta la Gaceta de Madrid correspondiente
al 10 de agosto de 1756: “El sábado pasó el Tribunal del Real Proto Medicato
a visitar los géneros medicinales de los que se compone el medicamento
llamado Triaca Magna”. Cuando Hortega proteste por no ser avisado, las
responsabilidades recaerán sobre el criado del Real Colegio: “… dio á este fin
el Sr. Director la orden para ello, pero el criado olbidando algunos sugetos de
la Junta particular, solo abisó, á algunos de una y otra Junta, como en efecto
assistieron hasta 8, ó 10 Colegiales, por lo qe es cierto de qe solo concurrieron
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
83
Apenas un año después, en los comienzos de junio de 1757,
Francisco Lerma se desplaza a San Lorenzo del Escorial para
negociar, con Gabriel de Olmeda, marqués de los Llanos (17041758), varios asuntos tocantes al Colegio, entre ellos la reedición
del texto174.
Los acuerdos de Francisco Lerma con el vice-protector
del Real Tribunal175 supusieron fuertes cambios en la dinámica
del Real Colegio, sin duda favorables a los intereses de los
boticarios madrileños, pero excesivamente arriesgadas desde un
aspecto económico. El Protomedicato exigió al Real Colegio la
construcción del laboratorio químico previsto en sus estatutos
fundacionales176; a cambio permitió la impresión de la nueva
Pharmacopoeia Matritensis… y comprometió la promulgación de
un Real Decreto por el se impidiese la venta de medicamentos
los Diputados y tal qual colegial…” (Junta general de 2-III-1758. ARANF, L-7,
fols. 180r-184v).
174
El acuerdo se toma en junta particular de 3-VI-1757 (ARANF, L-7,
fols. 151r-151v).
175
Tal era el cargo que, a la sazón, ocupaba Gabriel de Olmeda (17041758), protegido de fray Gaspar de Molina, miembro de Cámara desde 1744;
en el último año de su vida presidió, como Consejero de Castilla, el Honrado
Concejo de la Mesta; fue viceprotector del Protomedicato y protector del
Monasterio de El Escorial; antes había sido fiscal de la Cámara de Castilla (cf.
Peris Molas Ribalta. “Los Fiscales de la Cámara de Castilla”. Cuadernos de
Historia Moderna, 14: 11-28. Madrid, 1993).
176
“… resulto haver dado los Sres. del Real Proto-Medicato un
Memorial al Rey exponiendo á S.M. qe para conseguir el Colegio lo que
pretende se obligue este á poner el laboratorio chimico qe tiene ofrecido en sus
estatutos…” (Junta particular de 14-VI-1757. ARANF, L-7, fols. 151v-152v).
Esta junta particular de 14-VI-1758, a la que no asistió José Hortega, acordó
emprender de inmediato “quantas diligencias sean precisas pª la construccion
de dho elaboratorio, haciendo qe por mros de obras se formen diseños, los qe hara
ver a la Junta pª su determinacion…” (ARANF, L-7, fols. 151v-152v). Meses
después, el acta de la junta general de 2-III-1758, aportará nuevos datos sobre
estas negociaciones: “… la qe al principio solo fue conferencia verbal entre dhos
Señores, paso, á ser contrata formal; llebando por principal objeto en esto el
quitar á los Drogueros el qe vendan Medicamentos compuestos, adulterados
comunmte. y por eso perjudiciales, á la salud publica. Con este motibo dio el
Sr. Fiscal del Protho-Medicato el paso correspondiente en el tribunal (…) sin
qe el Colegio interbiniese (…) Tambien se quexa el Fiscal [José Hortega] de dho
Sr. Director [Francisco Lerma], de qe no permitió se hiciese contradiccion con
el Rl. Protho-Medicato sobre la Contrata; y tiene razon, pero fue el motibo, qe
teniendo dho Sr. Director vien penetrada la mente del tribunal, y sabia su celoso
fin, y qe no se seguia de esto ningun perjuicio á los Facultatibos, no tubo por
conveniente dho permiso…” (Junta general de 2-III-1758. ARANF, L-7, fols.
180r-184v).
84
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
simples al por menor en todas las tiendas de la Corte, salvo en las
boticas; la norma fue promulgada el 30 de junio de éste 1757177.
En respuesta, el Real Colegio abordó, con premura y exceso de
gastos, la construcción del laboratorio químico178.
El protagonismo adquirido por Francisco Lerma le llevó,
aprovechando una obligada ausencia de su antagonista de la
Corte, a privar a José Hortega de los privilegios que a éste tenía
concedido el Real Colegio desde marzo de 1740, y que asumió
como propios179.
La tensa polémica habría de resolverse en una junta general
extraordinaria, convocada en agosto de 1757, por decisión del
propio José Suñol, quien atendía así a una solicitud formulada
por José Hortega180; el cual -entre otras irregularidades- mantuvo
177
“… proibiendo asi mismo la venta de todo compto Chimico y
Galenico, con ótras cosas dirigidas todas a que se establezca un elaboratorio
chimico en donde se elaboren los medicamtos. qe por su costo y dificultad pueden
ser sospechosos de la bondad y qualidades qe deben tener (…) y siendo preciso
qe para poder dar curso á este negozio qe en el dia se obligue a mi voluntad el
cuerpo del Colegio á poner en ejecucion dho elaboratorio sugetandose á practicar
las elaboraciones qe se le señalen…” (Junta general de 6-VII-1757. ARANF, L-7,
fols. 153v-154v).
Ya en la junta particular de 1-VII-1757, Francisco Lerma presentó
los planos del laboratorio químico “y se acordo hacer diligencias pª lo benidero
de la casa pª asegurarla”, ya que la construcción se abordaba en un espacio que
no era propiedad de la Corporación (ARANF, L-7, fol. 152v); las obras fueron
adjudicadas a José Gutiérrez (cf. Junta general de 6-VII-1757. ARANF, L-7, fols.
153v-154v).
178
179
“… y que respecto de hallarse ausente el Sr. Dn. Joseph Hortega,
fiscal y apoderado, y el Sr. Dn Gregorio Ahedo (decano y asi mismo apoderado)
ocupado, le parecia preciso nombrar nuebos apoderados qe sigan las
dependencias del Colegio, maiormte la presente respecto del corto tiempo
qe ai pª visitar a los señores ministros, y enterados dhos señores acordaron
se propusieran nuebos apoderados, y con efecto propusieron pª primer
apoderado a los Sres Dn. Franco Lerma, y Dn. Jph Zavaleta pª segdo a los Sres Dn Jph
Burruezo y Dn Clemte Zaydin…” (Junta particular de 5-V-1757. ARANF, L-7,
fols. 148v-150r). En junta general de 8-V-1757 (ARANF, L-7, fols. 150r-151r) se
elegirán a Francisco Lerma y José Burruezo.
180
Cf. Junta general de 6-VIII-1757 “celebrada de orn del Sr. Dr. Dn. Jph
Suñol (…) a la que concurrió en su nombre, y como Presidente el Dr. Dn Juan
Jph Garcia Sevilla su Theniente de Protho-Medico (…) y el Dr. Dn. Thomas Joven
de Salas Abogado de los Reales Consejos, y Fiscal del mismo [Protomedicato]”
(ARANF, L-7, fols. 155r-171r). Responde ésta a una solicitud de José Hortega,
realizada a tenor de un escrito de Francisco Lerma, en la que “entre otras cosas,
que dara cuenta al Sr. Presidente de el Tribunal del Protho-Medicato, para que
con arreglo al Estatuto 38 nombre Persona que presida la Junta General para
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
85
que Francisco Lerma había renovado la junta directiva sin
elección, realizado actuaciones económicas perjudiciales para la
Corporación, usado de las arcas de ésta sin control y permitido
una errónea preparación de la Triaca181. Como resultado de la
evitar toda disension, que pueda experimentarse, a causa de la parcialidad.
Estas expresiones, dan á entender claramte. que el Fiscal [José Hortega] tiene
formado en el Colexio cierto espiritu de partido, que no penetra, ni puede
entender el Supte y deseoso de que se sepa la buena fee con que procede, y
que no tiene en el Collexio ningun espiritu de partido ni parcialidad; Supca
se mande qe cada uno de los Sres. Collexiales, presentes expongan en fée de
Hombre de vien las combersaciones, ó sugestiones qe. el Fiscal le hubiere echo,
de palabra o pr escrito, pr si, o pr interpuesta Persona, para atraerlos a su partido:
ó bien para desbanecer los supuestos Proyectos del Collegio, y si al Sr. Director,
no le pareciese suficiente esta especie de exposicion, podra solicitar, que cada
uno lo haga con juramento, y lo que resulte de estas Declaraciones, se ponga pr.
Acuerdo con inclusion de este papel…” (ARANF, L-7, fols. 155r-171r).
181
“… y enterado de todos ellos [los asuntos tratados en 1756 y
1757] el Sr. Fiscal Dn Jph Hortega, propuso entre otros reparos el perjuicio que
podia seguirse al Collegio, dando lugar a que los Directores hiciessen a su
arbitrio los gastos, que se causaron en la visita de los Generos de la Triaca,
debiendose establecer un methodo regular, y prudente (…) Y en este motibo
no puede menos el Fiscal [José Hortega] hablando con el debido respeto que
merece el Sr. Director [Francisco Lerma] de hacerle presentte: que le constta
que de la referida cantidad a tomado cerca de Diez y seis mil Rs de Vn de que
ha dado recibo a los Sres Diputados. No por estto intenta el Fiscal que el Sr.
Directtor manifieste el destino de este Caudal, pero le hace presentte que estte
es un exemplar que puede traer sus perjuicios en adelante, pues siendo la
cabeza del Colegio, es indecente que tenga que dar quentas, exponiendose á
las contradicciones, que suelen ocurrir en estas materias (…) Que en la Junta
particular de 5 de Mayo [1757] se trattó sobre la eleccion de oficios; que se
acordó releegir a todos los oficiales actuales, y en la Juntta Gral de ocho del
mismo mes consta igualmte que enterados los Sres Colegiales de la releccion de
oficios, digeron que la aprobaban, y aprobaron sbre cuios acuerdos, hace el Fiscal
las reflexiones siguientes: Que tales expresiones carecen de la formalidad, que
en semejantes actos se acostumbra. Que no hay Estatuto, que de facultad al
Colegio para hacer relecciones, ni esta voz reeleccion se halla en ninguno de
ellos: Que no constta en los citados Acuerdos que se tubiesen presentes los
Estatutos, que ablan de las Elecciones, y es mui regular, que el Sr. Secrettario
no los leyese, ni en la Juntta partticular ni en la General (…) Que el Sr. Director
en Junta particular de 5 de Mayo [1757], propuso qe se hacia preciso nombrar
nuebos Apoderados del Collegio, para seguir sus Dependiencias [sic], quitando
los antiguos Poderes que havia dado el Colegio al Sr. Decano Dn. Gregorio
Ahedo y Dn. Jph Hortega, sin expresar mas mottibo que hallarse el uno ausente,
y el otro ocupado, y pr la misma Certificacion consta que en la Junta Gral de
8 del mismo mes [V-1757], fueron despojados de los Poderes los expresados
Colegiales nombrando en su lugar al Sr. Director [Francisco Lerma], y al Sr.
Dn. Jph Burruezo. El Fiscal en vista de este procedimto y con la obligazon que
tiene de mirar pr el honor de los Indibiduos del Colegio, hace presente, que
86
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
reunión, el Real Colegio dispuso una serie de normas tendentes a
contener, dentro de los límites estatutarios182, las capacidades del
Director, pero José Hortega no logró el voto de censura esperado;
en enero de 1758 reiterará sus protestas y, ante el silencio de la
Corporación, optó por abandonarla183.
si hubiere algunos otros motibos para haver anulado los referidos Poderes, se
les de traslado a los antiguos Apoderados para dar satisfacion de ellos, y en
caso de no haverlos, se le reintegre su honor…” (Junta general de 6-VIII-1757.
ARANF, L-7, fols. 155r-171r).
“Despues de todo lo qual, teniendo presente los disturbios que
pueden originarse en adelante (…) se establece pr regla general que todos los
meses del año se haya de celebrar una Junta Gral, como se halla prevenido pr
los Estatutos, para que en ella pueda exponer cada individuo Colegl. lo que
juzgue pr conveniente a favor del Collegio, y en caso que ocurriese alguna
circunstancia digna de pronta providencia, podra el Sr. Fiscal pedir directamte
al Sr. Director la combocacion de Junta Gral, y este juntando la particular para
que estté inteligenciada de la instancia, debera proceder dentro del termino
de seis dias perentorios a la combocan. de una, y otra Junta, todo lo qual se
haia de obsebar, y obserbe imbiolablemte pr considerarse assi necesario para el
rectto regimen del Collegio (…) a cuio efecto y para que se estime estte Acuerdo
pr una de las Leyes Generales del Collegio, y se obserbe en todas sus partes
(…) se hará presentte en la primera Junta Gral a fin de que no pueda alegarse
ignorancia pr ninguno de los Sres indibiduos del Collegio…” (Junta general de
6-VIII-1757. ARANF, L-7, fols. 155r-171r).
182
“Que continuando las representaciones, y protestas, qe por
palabra, y escrito, tiene hechas en los años passados de [17]56 y [17]57 (…)
de nuevo protesta solemnemente en esta Junta todos los acuerdos hechos,
y resoluciones, contra los Estatutos en dichos años de [17]56 y [17]57, y assi
mismo, todos aquellos acuerdos, y resoluciones, en donde hubiese faltado
alguna formalidad, ó requisito de áquellos qe por derecho se requieren en tales
actos. Protesta igualmente el modo con qe se á hecho el Elaboratorio Chímico;
porque se á fabricado en terreno ajeno sin licencia formal de su Dueño; y assi
mismo sin cuenta, ni razon; y sobre todo, permitiendo qe su coste exceda a
los caudales qe actualmente tiene el Colegio. Protesta tambien el modo
indecoroso, con qe se á tratado al Decano del Colegio, el Sr. Dn. Gregorio de
Ahedo, á quien contra toda razon, y justicia, se le despojo de los poderes del
Colegio, sin haverle dado hasta ahora satisfaccion alguna, no obstante haverlo
pedido el fiscal [José Hortega], y haver conocido el Colegio, toda la razon, y
justicia qe le assiste (…) Protesta tambien la contrata hecha entre el Sr. Director,
y el Sr. Fiscal del Rl. Tribunal del Protto-Medicato; por qe dicho Sr. Director no
tiene facultad del Colegio para hacer dicha contrata, porque abussó de los
Estatutos, ácuerdos, y poderes del Colegio; Porqe dicha contrata es perjudicial,
y onerossa al Colegio, y sus Yndividuos (…) Sobre todo Protesta la cantidad
de quinze mill reales entregados por dichos Ssres. Diputados al Sr. Director sin
acuerdo del Colegio, porque esta suma, es cargo de dichos Ssres Diputados, y no
dando inmediatamente de alta justificada de ella deven pagarla sin dilacion, y
porque estos, y otros exemplares son nocivos, y de fatales consequencias por
lo sucesivo, y para el buen orden del Colegio (…) Porque le consta al fiscal,
183
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
87
Tras la junta general de agosto de 1757 nada volvió a ser
como antaño; los gastos del Real Colegio se disparan: aumenta el
coste del alquiler de los locales que éste ocupaba, la tasación de las
obras del laboratorio químico ascienden a un valor inalcanzable
para las arcas colegiales184, los sueldos del administrador185 y
otros empleados contratados durante la dirección de Francisco
Lerma186 sobrepasan la capacidad económica del Colegio, y
las necesarias obras de reparación en el inmueble y su jardín
botánico hunden la economía colegial.
La solución se buscó fuera del Real Colegio pero dentro
del colectivo profesional; el acta de la junta general de 19 de
junio de 1759 recoge la aceptación como colegiado de Bartolomé
Fernández Ortiz, Boticario mayor de la Reina viuda, Isabel de
Farnesio (1692-1766)187; quizás el asunto no mereciera mayor
qe en dicha Triaca no se pusso el Marum contusi [sic], y qe este mismo defecto
cometieron los Ssres Diputados en la triaca qe hicieron en el año de 1756, aun
haviendo assistido al reconocimiento de los generos el Rl. ProthoMedicato…”
(Junta general de 10-I-1758. ARANF, L-7, fols. 175r-178r). El grueso del acta de
la junta general de 2-III-1758 está dedicado a contestar las críticas formuladas
por José Hortega (ARANF, L-7, fols. 180r-184v).
184
En junta general de 20-VI-1758, el director, Clemente Zaydin,
notifica el auto de Juan Gayón, realizado a pedimento de José Ignacio Gutiérrez,
maestro de obras, mandando se le abonen los 53.430 rs vn “en cuyo precio esta
tasado el Elaboratorio Chimico, qe dicho Gutierrez hizo, para el Colegio…”
(Junta particular de 1-IV-1758. ARANF, L-7, fols. 190r-191r).
185
Probablemente la misma persona que, en otras actas, se denomina
‘agente’; la junta particular de 2-V-1758 acuerda entregar 1.000 rs al “Agente
qe el Colegio tiene actualmte para seguir sus dependencias…” otros 600 rs vn
más como ayuda de costa “en atencion, a qe há ya un año qe el dho Agente sirve
al Colegio…” (Junta particular de 2-V-1758. ARANF, L-7, fols. 187v-188v). El
acta de la junta particular de 26-VI-1758 nos desvelará su nombre: Alfonso
Cervantes (ARANF, L-7, fols. 191r-191v).
Entre ellos a un empleado para el laboratorio químico: “… se dio
quenta, a la Junta de un Memorial qe presentó Dn. Isidro Cudero, en el qe expone:
qe haviendo sido admitido por el Colegio para trabajar en el Elaboratorio
Chimico, pasó, á ocupar la Casa sin otro motibo qe mandarselo assi su Maestro
Dn Franco. Lerma (…) Que mediante qe el suplicante no ha obrado por si mismo
en semejante determinacion, ni jamas creyó, qe el ya dho mandato de su Maestro,
no estuviesse con la firmeza de estar conforme con las deliberaciones de la
Junta, suplica qe en atencion al notable perjuicio qe se le sigue en vivir fuera (…)
se le dé habitacion en la Casa del Colegio…” (Junta particular de 1-IV-1758.
ARANF, L-7, fols. 186v-187r).
186
“No siendo de menor excepcion, y meritos Dn. Bartholome Fernz.
Boticario Mayor de la Reyna biuda, Dª Isabel Farmesio, fue admitido pr tal
Colegial, y hallandose con este Carácter, y el ser examinador del Real Proto187
88
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
importancia, salvo porque este colegial, que ahora se recibe con
todos los honores, había sido expresamente repudiado por el
Real Colegio, en diciembre de 1744, ‘por varios motivos secretos’,
de los que, entonces, se dio cuenta al protomédico José Cerví188,
quien ostentaba, ademas, el cargo de Médico de la Reina.
Los motivos para su recusación en 1744 se vislumbran
dentro del intrigante entramado cortesano de los últimos años
del reinado de Felipe V (1683-1746)189; los de su aceptación en
el verano de 1759 son más evidentes: en el otoño de este año
Bartolomé Fernández Ortiz negocia una cesión de su capital
con el Real Colegio, aceptando como bienes garantes todos los
enseres de la Corporación, incluyendo la producción de Triaca,
reservándose la venta y distribución del medicamento elaborado
bajo privilegio190; el monto económico es imprescindible para
Medicato, se trató con delicadeza y madura reflexion el asiento, qe se le havia
de dar, y se resolvio pr. pluralidad de Botos que gozase el primero despues de
los Oficales qe componen la Junta Particular…” (Junta general de 19-VI-1759.
ARANF, L-7, fols. 208r-208v).
188
En la junta particular de 11-XII-1744 se dio cuenta del memorial
presentado por Bartolomé Fernández Ortiz, boticario examinado y sobrino
de Francisco Ortiz Crespo, en el que solicitaba ser admitido como colegial,
habiendo oido al fiscal, “acordaron que luego que este Pretendiente haga
constar que tiene Botica propia en Madrid, y que assimismo es Congregante
de Nra. Sra. de los Desamparados como disponen los Estatutos, y Acuerdos del
Colegio, se haga de nuevo presente á la Junta esta instancia… (…) y qe este
Acuerdo se haga luego presente al Sr. Dr. Dn. Jph Cervi pr varios motivos secretos,
y para qe siempre conste la justificacion, y recto proceder del Colegio…” (Junta
particular de 11-XII-1744. ARANF, L-7, fols. 45v-46r).
189
Analizados por Rosa Basante Pol. La demencia de un Rey: Fernando
VI (1746-1759). Madrid: Real Academia Nacional de Farmacia, 2009. La autora
señala: “Fernández Ortiz tuvo dos boticas abiertas en Madrid, que al menos se
nos antoja poco ético…” (Op. cit., pág. 87).
“… con tal qe el Colegio le entregue los enseres del Colegio; assi de
triaca, como de lo demas con la qta y razon qe es debida, y que ha de ser de su qta
la Renta de triaca y el dar Dineros para la compra de Generos spre que se necesite
su elaboraon y hta la instincion o Pagamto de lo anticipado pr si al Colegio; lo
que fue aceptado pr una y otra parte, con universal aceptazon. de todos los
Concurrtes.” (Junta general de 22-XI-1759. ARANF, L-7, fols. 210r-212r). En la
junta general de 15-XII-1759, Bartolomé Fernández Ortiz presenta un listado
con diez condiciones para asegurar el caudal que prestará al Colegio (ARANF,
L-7, fols. 212r-212v); éstas fueron estudiadas en junta particular de 29-XII-1759
“… y aunque se observaron algunos reparos, satisfizo dho Sr. Dn. Bartholome con
grande nervio, y natural fecundia pr lo que se dieron pr contentos, y satisfechos
nemine discrepante de los qe compusieron la Junta Particular…” (ARANF, L-7,
fols. 212v-213v).
190
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
89
hacer frente a los pagos -ya judicialmente demandados- de la
construcción del laboratorio químico191. En enero de 1760, apenas
unos meses después de aceptado como colegial, es elegido como
director de un Real Colegio, del que ya es depositario oficial de
sus enseres, producciones y documentación192.
Consciente de la caótica situación a que ha llevado a la
Corporación, Francisco Lerma presentará, en enero de 1760,
su dimisión como colegial, el Real Colegio le concederá la
consideración de ‘jubilado’193. En sesión general celebrada el 1
de febrero de 1760, el Colegio de Boticarios acuerda devolver
los poderes generales de la Corporación a Gregorio Aedo y José
Hortega
“… que se hallan agraviados con razon del modo
con que se executo este despoxo, lo mui util qe hallaba
el qe a dhos señores se les devolviessen con todas las
Preheminencias, y facultades correspondientes, y la
especial de poderlos substituir en otro alguno de sus
“… se hallaha a botarse el Pleyto del Mtro de obras y las muchas
pruebas, que tenia para salir desayrado el Colegio, y pr consigte a un atropellamto.
mandando el Consejo que se aportassen los caudales que no tiene…” (Junta
general de 22-XI-1759. ARANF, L-7, fols. 210r-212r).
191
192
En la misma junta general de 5-I-1760 en que se le elige como director,
se leen las condiciones del préstamo establecidas por Bartolomé Fernández
Ortiz y la protesta que sobre ellas establece Nicolás Regidor, se someten ambas a
votación entre quienes componían la junta general “y las aceptaron, y dieron pr
buenas y pr tal dieron Poder al Sr. Dn Jph Burruezo y Dn Juan de Herrera para que
arreglados a las Condiciones ya dhas (…) se escriturase (…) cediendo el Colegio
a dho Sr. Dn Bartholome todos los enseres, utensilios, Papeles, y todo lo demas
que le pertenezca percibir a dho Colegio ahora, y en adelante; Y al presente
há de percibir trece mil novecientos qta y quatro rs qe se hallan en Thesoreria
y todo lo elaborado hta aquí pr el Rl Colegio, de Medicinas…” (ARANF, L-7,
fols. 213v-214v). En la junta particular de 30-I-1760, Bartolomé Fernández Ortiz
solicitó del secretario, José Ruiz, un inventario de los documentos depositados
en secretaría “a que di solucion como asta ahora no se havia practicado tal
operación…” (ARANF, L-7, fols. 216v).
En junta general de 15-XII-1759, “se leyó pr mi el infraescrito ssrio
[Francisco Lerma] un Memorial, en que exponia reverente se me admitiese la
separazon del Colegio pr contemplar ser favorable ambas partes, y se probeyó se
resolveria para la primera Junta Gral” (ARANF, L-7, fols. 212r-212v); durante la
junta particular de 30-I-1760 se lee este memorial “al qe no se le dio curso por
estar embarazados en otros asumptos (…) y determino concederle la Juvilacion
que apetece respecto a hacersela el mismo por dho memorial” (ARANF, L-7, fols.
216v). Con él presentará la dimisión de su cargo José Burruezo, quien entrega
un escrito en el que “hace exonerazn del encargo de Apoderado del Colegio a
que se definio y condescendio…” (ARANF, L-7, fols. 216v).
193
90
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
individuos, lo que pr pluralidad de votos quedo otorgado
a favor de dhos señores en virtud del amor, celo y desinteres
con qe han servido al Rl. Colegio…”194
Es más una muestra de cortesía que un traspaso legal
de poderes; la ‘propiedad’ del Real Colegio está en manos de
Bartolomé Fernández Ortiz quien ni siquiera reúne a su junta en
los locales del Colegio, sino que los convoca en su propia casa.
El dolido honor de un -ya anciano- Gregorio Aedo, le impidió
aceptar esta ‘devolución’ de poderes; José Hortega sí los volvió
a asumir195 y ‘convenció’ al Real Colegio para que, por escrito,
se retractara de las declaraciones que la Corporación había
efectuado, en torno a sus comentarios sobre la composición de la
Triaca magna, en la junta publica de agosto de 1758, convocada
por José Suñol196.
José Hortega se reincorpora al Real Colegio, cansado y
enfermo, en febrero de 1760; sus esfuerzos se dirigen a reconducir
los trabajos de edición de la Pharmacopoeia Matritensis… que no
pudo ver impresos. En la junta general celebrada por el Real
Colegio el 7 de enero de 1761 se da cuenta de su fallecimiento:
194
Junta general de 1-II-1760 (ARANF, L-7, fols. 217r-219r).
En la junta particular celebrada el 14-II-1760, Bartolomé Fernández
Ortiz da cuenta “de la respuesta de el señor Dn Joseph de Hortega Boticario
de S.M. y Mayor de sus Reales Exercitos; como de la de el Señor Dn Gregorio
Ahedo Decano del Rl. Colegio, y vista la resulta de ambas se determino, que
los Poderes los haya solamente dho Señor Dn Jph Hortega respecto no poderlos
admitir el Señor Decano por sus achaques avituales, y abanzada edad, que assi
es publico…” (ARANF, L-7, fols. 219r-219v).
195
“Siendo noticioso el Sr. Director de que en la respuesta a una de las
protextas, que el Sr. Dn Jph de Hortega hizo siendo fiscal en la Junta general que
se celebro el dia seis de agosto del año pasado de mill, setecientos, cinqta. y siete
presidida por el señor Juan Jph Garcia Sevillano en nombre de el Sr. Dr. Dn Joseph
Suñol (…) la que fue solicitada por dicho Sr. fiscal respecto haversela negado
por dos veces el Señor Director que lo era en aquel tiempo [Francisco Lerma]; se
adelanta el Rl. Colegio a hacer publico, como jamas en la preciosa elavoracion
de la theriaca se havia puesto el Mano Contuso, y reflexionando bien un
supuesto tan contrario, mediante haver hecho al Sr. Contador Dn Luis Melendez
reconociese las Quentas de los Señores Diputados, y este haver hallado en
las pocas que se hallan en la contaduria constaba que los Señores Diputados
Dn. Martin de Urruzola, Dn Joseph Gomez Malo, Dn. Andres Caballero, y Dn.
Cristobal Velez lo pusieron en dha elaboracion por cuia razon combiene qe assi
conste (…) Asi mismo se hizo publico que el año pasado de 1758 no se hecho
dho Maro por no haver acudido por el a la casa del Sr. Dn Joseph Hortega pues
lo hizo venir para la theriaca…” (Junta general de 1-II-1760. ARANF, L-7, fols.
217r-219r).
196
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
91
“Havdo. fallecido Dn. Joseph Hortega nombro el Sr.
Director a dos Sres. Colegs. para que ofrezcan a su familia
toda la proteccion del Colegio” 197.
197
Junta general de 7-I-1761 (ARANF, L-7, fols. 231r-232r).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
93
La tertulia de la botica de Montera
La ‘Tertulia Literaria Médico-Chymico-Phisica’
José Hortega acostumbró a celebrar tertulia en ‘la pieza de librería’
sita en la vivienda que tenía sobre su botica, en la madrileña calle
Montera. Asistían a ella un destacado grupo de profesionales
sanitarios, entre los que se encontraban José Corralón, médico
de familia de la Reina y del duque de Solferino, Juan Andrés
Bereterrechea, cirujano mayor del Ejército, Vicente Carreras,
examinador del Real Tribunal del Protomedicato, Francisco
García Rico y su hermano, José García Rico, ambos cirujanos
asentados en Madrid y Alejandro Martínez de Argandoña,
también examinador del Real Tribunal del Protomedicato198.
En el verano de 1733, un 12 de julio, aquella tertulia,
dedicada a ‘castigar el ocio’ discutiendo sobre ‘lo que la
casualidad ofrecía’, decide dotarse de un cierto orden interno y
organizarse en ‘Tertulia Literaria Médico-Chymico-Phisica’199;
tras dejar correr los meses del estío, los tertulianos se reúnen en la
tarde del 1 de septiembre de 1733 y acuerdan un primer reparto
de funciones: José Corralón es elegido como presidente, ‘a quien
se le reconociese por cabeza’, José Hortega asumirá las tareas de
secretario: “para que con puntualidad escriviese los ácuerdos,
y árchivase los papeles, y los tubiese promptos para quando
fuesen menester”200, y Alejandro Martínez de Argandoña aceptó
De la participación de José Hortega en la génesis y primeros años
de funcionamiento de la Real Academia Nacional de Medicina se ocupa,
con extensión, Rafael Folch Andreu (Op. cit., nota 1. 1935). Sobre la creación
y funcionamiento de esta Real Academia cf. Luis Sánchez Granjel (Historia
de la Real Academia Nacional de Medicina. Madrid: Real Academia Nacional de
Medicina, 2006). De mano del propio José Hortega se conserva una “Historia
de la tertulia literaria Medico-Chymico-Phisica” con la que principia el libro de
[Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 1-12).
198
El libro de [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM,
L-1) da inicio con una “Lista de los tertulianos qe componen la tertulia literaria
según sus Antiguedades” (Op. cit. fol. [I]); allí se menciona un total de 39
tertulianos, el tercero de los listados es “Dn. Joseph Hortega fundr.”
199
200
[Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 3).
Sus ausencias serían cubiertas por Manuel Izquierdo: “En la Junta se acordo
94
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
las tareas de fiscal, responsable de regular el discurrir cotidiano
de las reuniones. El dos de septiembre definen sus funciones
y comienzan la elaboración de los estatututos que habrían de
regirles:
“… se establecio por toda la tertulia, nomine
discrepante, por primer instituto, fin primario, é idea gral.,
el cultivo de las tres facultades, Medica-Chyrurgica- y
Pharmaceutica. Exponer patentes sus erradas maximas;
poner de manifiesto lo que evindeciare la vien pensada,
y repetida experiencia; declarar como dudoso, lo que
aún esta en la linia de las verosimilitudes; castigar los
medicamtos. asi simples como compuestos; elevar á
predicamto. con digno lo que fuere laudable y de estimazon.
Abatir ásta lo infinito, lo que mereze desprecio: Y sobre
todo hazer una rigurosa critica á las tres facultades, y á lo
que con ellas tubiese conexión proxm. ó remota…”201
No puede quedar duda del afán renovador con que los
tertulianos emprenden su tarea; tampoco del campo profesional
al que dirigen sus actuaciones, todo el ámbito sanitario, en
igualdad profesional entre quienes recibieron su formación
universitaria con quienes la adquirían mediante sistemas
gremiales202.
Los estatutos por los que se habrían de regir los
tertulianos, unas ‘bien pensadas máximas’, fueron aprobados y
que dn. Manuel Izquierdo sirviese la Secretaria en áusencias y enfermedades
del secrº.” (Junta ordinaria de 19-X-1733. ARANM, L-1, fol. 42).
[Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol.
3-4). El mismo texto se repite, con variaciones ortográficas, en la copia de los
Estatutos que siguen en el libro de Acuerdos… (Op. cit., fols. 12-13).
201
202
Quizás por ello sean tan reglamentaristas los Estatutos con que se
dotan los tertulianos, en particular el capítulo 2º, el dedicado “De los tertulianos,
y su numº.“ [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fols.
12-17); en noviembre de 1733 se modificarán estos estatutos negando la entrada
como tertulianos a los cirujanos ‘que tengan tienda abierta’, en clara alusión a
los barberos, sin formación latina (Junta secreta de 21-XI-1733. ARANM, L-1,
fol. 31). En los comienzos de diciembre de 1740 vuleve a insistirse sobre este
particular: “Item se acordó que si algun Academico Honorario, y Cirujano se
viniere a establecer en Madrid, y ponga tienda que de ningun modo pueda
estar en las Juntas de los Actos pª. lo qual deberá el Ssº. darselo á entender pª.
que no se exponga al Desaire” (Junta particular de académicos de número de
6-XII-1740. ARANM, L-1, fol. 399).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
95
firmados en su reunión de 5 de septiembre de éste 1733203; para
dar mayor solemnidad a esta sesión, los ocho asistentes que
entonces conformaban la Tertulia toman posesión pública de sus
asientos204.
En la primera sesión oficial, la celebrada el 6 de octubre de
1733, ya está presente la firma de José Hortega como secretario;
sus funciones quedan concretadas en los estatutos:
“Tambien tendra esta Tertulia un secrº. cuio
óficio será recoxer los papeles, y colocarlos en el modo
mas óportuno; tenerlos promptos para quando se
ofrezcan; archivarlos con órden, y curiosidad; escribir los
ácuerdos: presentar los memoriales, y pettiziones: poner
los decretos: abisar para las Juntas: nottar los hechos
de la tertulia y conservarlos: tomar los votos secretos, y
resumir los que se dan en voz; dar una esquela á cada
tertuliano del ásumpto que se le repartte: noticiar los
pretendientes: leer, ál principiar las Juntas, los hechos de
la pasada: recibir y responder á las cartas de la tertulia,
de su órden ó en su nbre.: avisar de la muertte, ó áusencia
de los tertulianos: y ultimamente tomarles el establecido
juramto…”205
Inicialmente la duración del cargo de secretario queda
restringida, como la del resto de los miembros de la junta
directiva, a tres meses; no obstante, en los propios estatutos
de la Tertulia, ya se prevee una situación especial para José
Hortega, se reserva para él el puesto de archivero perpetuo206; y,
Transcritos, y sancionados con sus firmas, en las primeras páginas
de los [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fols. 12-19).
Estos estatutos fueron modificados en junta secreta celebrada el 21-XI-1733
(ARANM, L-1, fol. 31).
203
204
“Dn. Joseph Hortega en la quarta silla de la vanda yzquierda, y en el
mas inferior lugar por estar en su casa, y ser esta el lugar escoxido para celebrar
las Juntas” ([Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 11).
Tras su elección como Secretario pasará a ocupar el puesto que correspondía a
este cargo, a la izquierda del Presidente.
205
Cf. el estatuto 5º del capítulo 3º ‘De los Oficios” [Acuerdos comunes de
la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 19).
“Aunque se tiene preste. que en las mas de las Juntas ácademicas es
perpetuo el secrto. por varios motivos que han ocurrido se establece que sea,
como los demas oficios, por tiempo determinado; pero por áora, y sin limitazon.
de tiempo se nombra por archivero, y depositario gral., asi de los ácuerdos,
como de los estatutos, y demas papeles perttenecienttes á la secretaria de la
tertulia, á dn. Joseph de Hortega para que los guarde, y conserve en su cassa,
206
96
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
en la junta particular de fundadores celebrada el 2 de enero de
1734, se decide modificar los estatutos y nombrar a José Hortega
secretario perpetuo207.
A las funciones propias del secretario, José Hortega
unió, a partir de la junta ordinaria celebrada el 12 de marzo
de 1734, el cargo de tesorero, creado en ese mismo acto208. Sólo
temporalmente abandonó su cargo de secretario, y fue cuando
hubo de ostentar la presidencia de la Corporación, tal tras la
sesión celebrada el 5 de abril de 1734, quedando las labores de
secretaría encomendadas a Alejandro Martínez de Argandoña209,
mas no hubo de detentar la presidencia durante el trimestre
que le fue encomendada, el 12 de abril renunciará a su cargo,
por áver sido la elexida para celebrar las conferienzs. literarias, y las Juntas
extraordinarias y ordinarias, sin que por pretexto álguno pueda la tertulia
fundadora en ningun tiempo trastornar, ni alterar este estatuto.” (Estatuto 6º
del capítulo 4º “Del modo y orn. de elexir los óficios”. ([Acuerdos comunes de la
Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 22-23). Una ocupación que quedará
limitada, en sus actuaciones, por los propios tertulianos fundadores: “No
pueda permitir el dho. archivero dn. Joseph Hortega, ni quien por su muerte ó
ausencias le sucediese, sacar ningun papel concerniente á la tertulia, á ningun
tertuliano, ni á persona extraña sin licencia de los fundadores.” (Estatuto 7º
del capítulo 4º “Del modo y orn. de elexir los óficios”. [Acuerdos comunes de la
Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 23).
“… usando de su facultad deliberaron derogar el termino de tres
meses, que esta establezido pr. lo tocante al Ssro. y desde luego nombraron S. Ssro
sin limitacn. de tiempo á dn. Joseph Hortega hasta que se juzgue pr. la tertulia
fundadora otra cosa pr. mas conveniente, sin que esto le obste pª. obtener otros
qualesquiera honores, que en adelamnte intentaren darle.” (Junta particular de
2-I-1734. ARANM, L-1, fols. 65-66). La junta particular se celebró sin la presencia
de José Hortega, por lo que el acta figura firmada por Manuel Izquierdo.
207
“Después deliveró la tertulia de comun acuerdo tributar cada mes
para los gastos que ofrezcan; los tertulianos fundadores á razon de cinco rs. de
plata; y los demas á quatro rs. de plata; y se debera entender desde primº. de
Marzo de 1734 y para qe. estubiese guardado, y prompto este caudal se nombró
pr. thesorero pr. la tertulia fundadora á Dn. Joseph Ortega.” (Junta ordinaria de
12-III-1734. ARANM, L-1, fol. 93).
208
209
“El Sr. Presidente mando qe. el Sto. Propietario cesase de su empleo;
y qe. el sustituto Dn. Manl. Izquierdo sirbiese la Secretaria; y asi se executó. El
Sr. Presidente propuso para Presidente á Dn. Joseph Ortega, y con pluralidad de
votos fue aprovado.” (Junta particular de fundadores de 2-IV-1734. ARANM,
L-1, fol. 99). Y, a comienzos de abril de 1734: “Dn. Joseph Ortega fue elegido
pr. Presidente pr. pluralidad de votos; y como tal fue reconocido pr. todos; y
dada la posesion qe. al punto admitio.” (Junta general de elecciones de 5-IV1734. ARANM, L-1, fol. 102). En esa misma sesión fue electo como secretario
Alejandro Martínez de Argandoña.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
97
trocándolo con el que ostentaba Martínez de Argandoña, con lo
que Hortega volvió a ocupar la secretaría de la Corporación210.
De acuerdo con sus estatutos, los tertulianos
acostumbraban a reunirse tres veces en semana; los lunes y
viernes, en junta ordinaria, para exponer al resto de los asistentes
los asuntos científicos que el presidente les encomendara con
antelación; y los miércoles para tratar una cuestión propia de
anatomía211; y así fue en la práctica, pero -de manera ocasionalse unieron a éstas unas juntas médicas, reunidas otros días de la
semana, para discutir casos clínicos212; lo habitual fue que estas
discusiones se integraran en las juntas ordinarias. Las sesiones
tenían lugar a las siete de la tarde213.
El profuso reglamento con el que se dotan los tertulianos
establece, incluso, el formato en que habrían de construirse
las disertaciones presentadas; la opción neo-hipocrática es
claramente realzada:
“Asi en los ássumptos por escripto, como en
la lecciones ánatomicas, y demas actos literarios se
óbservara un estilo fluido, sin afectacn., elegante y claro
sin sonsonettes poheticos, y sobre todo se tendra cuidado
que en ninguna orazion lleve el sustantivo sino solamte.
210
“… represntó el Sr. Presidente pr. escrito qe. tenia justos motivos
para no continuar el exercicio de la Presidencia, y respecto de ellos esperaba
pr. la tertulia la dexazon. qe. desde luego hazia; y no obstante la repugnancia qe.
todos manifestaron, condescendieron ultimamte. á sus ruegos, admitiendole la
renuncia, con calidad de qe. propusiese para el empleo como acostumbraba...”
(Junta ordinaria de 12-IV-1734. ARANM, L-1, fol. 104). La elección del nuevo
Presidente recayó en Alejandro Martínez de Argandoña. En mayo de 1734, “La
tertulia eligio de comun acuerdo pr. Sto. propietario á Dn. Joseph Ortega sin
limitazn. de tiempo...” (Junta ordinaria de 10-V-1734. ARANM, L-1, fol. 107).
“Se juntara la tertulia tres vezes en cada semana. Lunes y Viernes
para hazer los discursos que se habran trabajado sobre la Medicina, Ciruxia,
y Pharmacia, en los quales se tocaran, quando convenga, puntos de Phisica
y de Vottica. Asi mismo el miercoles para explicar verbalmte. una leccion
ánatomica…” (Estatuto 1º del capítulo 5º “De las Juntas”. [Acuerdos comunes de
la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 23-24).
211
212
De manera autónoma sólo tenemos constancia de dos de ellas, las
reunidas el martes 10-XI-1733 (ARANM, L-1, fol. 50) y el domingo 29-XI-1733
(ARANM, L-1, fol. 56).
213
“En las noches destinadas para áctos literarios, empezara la tertulia
sus sesiones á las siete, desde primº. de Octbre. hasta fin de Abl. y desde este
tiempo hasta fin de Sepr. ácordara en adelante óra convte…” (Estatuto 1º del
capítulo 5º “De las Juntas”. [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752].
ARANM, L-1, fol. 23-24).
98
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
un adjetivo, porque lo contrario, asi como es bueno
para la poesia, es morboxo para la prossa, tambien se
observará no amontonar citas ni authoridades, pero esto
no se entendera con el savio Hippocrates, cuia solidez
en el discurrir, y modo el mas elevado en el pensar le
han hecho digno de la mr. benerazon. ante las facultades
Medica-Chyrurgyca-y Pharnaceutica”214.
Ningún material impreso dejó esta ‘Tertulia Literaria’;
pero la lectura de las actas de sus sesiones nos permite conocer
la actividad de José Hortega en ella215: en la reunión del 23
de octubre de 1733, apenas constituida, disertó acerca de la
composición del bezoárdico jovial y su acción en los casos de
histeria216; ese mismo día le fue encomendado un análisis de las
aguas minerales del Quinto, que defendió el 16 de noviembre,
como estaba previsto217; el 21 de diciembre trató sobre las
confecciones y electuarios cordiales e inició con ello un proyecto
de largo alcance, destinado “á hacer la critica á la Pharmacia
Galenica y Chymica”218; el 18 de febrero de 1734 desarrolló unas
214
Cf. estatuto 7º del capítulo 5º ‘De las Juntas’. [Acuerdos comunes de la
Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 26).
215
Lamentablemente no se conserva, manuscrita, ninguna de las
comunicaciones presentadas por Hortega ni a esta Tertulia ni a la Academia
que habría de continuarla, algo que ya dejó señalado Daniel García González:
“Los cambios de domicilio, los expolios bien o mal intencionados de algún
bibliómano han conseguido por ejemplo que de un hombre como José Hortega,
pilar central de la creación de la Academia, no se encuentre ni una sola de la
docena de comunicaciones referidas en los mencionados libros…” (Daniel
García González. Historia de la Real Academia Nacional de Medicina: primera
época, 1733-1808. Madrid: Universidad Complutense [tesis doctoral inédita],
1965 –cf. pág. 2-).
La disertación le fue solicitada el 6-X-1733, en la primera junta en
la que se repartieron temas de trabajo (ARANM, L-1, fol. 40); en el acta de la
junta ordinaria celebrada el 23-X-1733 quedó anotado: “Y yo el sto. presente á la
tertulia el ásumptto que me señalo el Preste. en 6 de octtre. el que fue leido por mi
y aprovado por todos los tertulianos. Y para que prosiguiesen las tareas me dio
el Preste. por nuevo asumpto la Historia de la Analisis de las águas minerales
del quintto para el lunes 16 de Novre. de este año.” (ARANM, L-1, fol. 43).
216
217
“Yo el secrto. presente á la tertulia el ásumpto que me señalo el
Preste. el viernes 23 de Octbre., el que fue leido por mi y aprobado por toda la
tertulia, y para que prosiguiesen las tareas me dio el Preste. por nuevo ásumpto
un discurso sobre las confecciones y electuarios cordiales para el Lunes 21 de
Dizbre de este.” (Junta ordinaria de 16-XI-1733. ARANM, L-1, fol. 52).
“Yo el secrto. presente á la tertulia el ásumpto qe se me señalo el
Lunes 16 de Ne. el qe. fue leido pr. mi, y aprovado pr. todos los tertulianos,
y para qe prosiguiesen las tareas me dio el Presidente pr nuevo asumpto; que
218
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
99
nuevas “Reflexiones sobre sus preparaznes. Pharmaceuticas”219,
continuadas en la sesión celebrada el 24 de marzo220.
La intervención de José Hortega no se redujo a su
participación en las juntas ordinarias, también tomó parte asidua
en las juntas anatómicas; el 18 de noviembre de 1733 expuso una
historia del mesenterio221, en la celebrada el 27 de enero de 1734,
trató de las partes externas de los ojos222 e incluso se le encomendó
continuar con las internas, tarea que no culminó por no celebrarse
la sesion para la que había sido convocado223. Y es que, desde
el 4 de marzo de 1734, las juntas anatomicas se convirtieron
en eminentemente prácticas, pasando a ser celebradas en el
teatro anatómico del Hospital General de Madrid, gracias a las
negociaciones establecidas por José Corralón ante fray Gaspar
de Molina, a la sazón presidente del Consejo Real de Castilla224.
supuesto qe se me avia propuesto un proyecto, qe se dirigia á hacer la critica á
la Pharmacia Galenica y Chymica, qe prosiguiese en hazer reflexiones sobre sus
preparaznes. pharmaceuticas y qe presentase un discurso para el Lunes 8 de febº.
de 1734.” (Junta ordinaria de 21-XII-1733. ARANM, L-1, fol. 63).
219
“Yo el ssrio. presente á la tertulia el asumpto qe se me señalo el Lunes
21 de Dizbre. de 1733 el qe. fue leido pr. mi, y aprobado por toda la tertulia; y
para que prosiguiesen las tareas me dio el Presidente pr. nuevo asumpto qe.
prosiguiese con mi proyecto, y qe. presentase un discurso para el Lunes 22 de
Marzo de 1734.” (Junta ordinaria de 18-II-1734. ARANM, L-1, fols. 79-80).
220
“Yo el ssrio. presente á la tertulia el asumpto qe se me señalo el
Lunes 8 de febº. de 1734 el qe. fue leido pr. mi y aprobado pr. toda la tertulia,
y para qe. prosiguiesen las tareas le [sic] dio el Presidente pr. nuevo asumpto,
qe. prosiguiese con mi proyecto y que presentase un discurso para el Lunes
3 de Mayo de 1734.” (Junta ordinaria de 26-III-1734. ARANM, L-1, fol. 97).
Probablemente no se llevó a efecto, no se celebró tertulia ese día.
221
“Yo el secrto. explique vervalmte. la leccion anatomica del mesentterio
que me señalo el Presidente en 27 de octtre. y para que prosiguiesen los temas
me señalo el Prete. por nuevo asumpto las partes externas de los ojos para el
Miercoles 27 de henerº de 1734.” (Junta ordinaria de 16-XI-1733. ARANM, L-1,
fol. 52). En efecto, en la “Junta general para repartir assumptos anatomicos”
celebrada el 27-X-1733, se le encarga: “dn. Joseph Hortega la Historia del
mesentterio el Miercoles 18 de Novbre.” (ARANM, L-1, fol. 46).
222
“Yo el ssto. explique vervalmte. la leccion anatomica qe. se me señalo
el Miercoles 18 de Ne. de 1733 la qe. fue aprobada pr. toda la tertulia; y para
qe. prosiguiesen las tareas me dio el Presidente pr. nueva leccion: las partes
internas de los ojos, para el Miercoles 7 de Abril de 1734.” (Junta ordinaria
anatómica de 27-I-1734. ARANM, L-1, fol. 77).
223
El miércoles 7-IV-1734 se celebró junta particular, la primera del
corto período de su presidencia (ARANM, L-1, fol. 103).
224
La noticia fue comunicada a los tertulianos en una “Junta general
extraordinaria para notificar a la tertulia el Decreto del Ilmo. Sr. Presidente de
100
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
La Real Academia Médica Matritense
La ‘Tertulia Literaria Medico-Chymico-Phisica’ optó, en la
primavera de 1734, por reformar su estructura; en mayo de 1734
los tertulianos detienen su actividad225 y emplean los meses del
verano en realizar los trámites para legalizar su situación ante
el Consejo de Castilla. En la sesión del 12 de agosto de 1734 la
‘Tertulia Literaria’ se convierte, por decisión de sus fundadores,
en ‘Academia’226; sus nuevos estatutos obtienen el refrendo regio
el 13 de septiembre de 1734227; nacía así oficialmente la ‘Academia
Médica Matritense’.
Castilla, celebrada el sabado 6 de Marzo de 1734” (ARANM, L-1, fols. 88-92).
El decreto, del que el acta de la sesión presenta copia, queda firmado por ‘fray
Gaspar, obispo de Barcelona’ [Gaspar de Molina y Oviedo, OSA (1679-1744)] el
4-III-1734. En junta ordinaria de 15-III-1734 “La tertulia nombró pr. Comisarios
para dar las gracias al Illmo. Sr. Presidente de Castilla al Dr. D. Joseph Corralon, al
Sr. Dr. D. Alexandro Argandoña; el Dr. Dn. Vizte Carreras y Dn. Joseph Hortega.”
(ARANM, L-1, fol. 94). La primera de las juntas anatómicas celebradas en el
Hostital General de Madrid tuvo lugar el 22-III-1734 (ARANM, L-1, fol. 88-92).
José Corralón era médico personal de fray Gaspar de Molina.
225
El 31-V-1734 se celebró junta general para organizar las vacaciones
estivales: “Atendiendo á el riguroso calor del tiempo de Estio deliberó la tertulia
dar Vacaciones hasta princps. de septe. con la condicion de qe en este tiempo aya
dos juntas cada mes…” (ARANM, L-1, fol. 110); y, en efecto, la Terulia celebró,
el 12-VII-1734, una junta particular de fundadores, seguida, ese mismo día, de
una junta general de elección, en la que se confirió la presidencia a Vicente
Carreras (ARANM, L-1, fols. 111-112); ésta sería la última reunión de la Tertulia,
en la junta particular de fundadores de 12-VIII-1734 se adoptarán ya los nuevos
estatutos y la Tertulia recibiría nuevo nombre (ARANM, L-1, fol. 110).
226
El acta de la junta particular de fundadores, celebrada el jueves 12VIII-1734, es escueta: “Aviendose determinado pr. los tertulianos fundadores
formar nuebos estatutos, y asi mismo mudar el nombre de la tertulia lo pusieron
en execucion, y ordenaron cincuenta estatutos y pusiron nombre de Academia
Medica matritense, y aviendose aprovado dhos estatutos y nombre deliberaron
dar quenta al Consejo real de Castilla para su aprovazon. lo que se hizo y se
consiguió oy Juebes 12 de Agto. de 1734. Nombrose pr. comisionados para dar
gracias a los Sres. del Consejo á los Dres. Alexandro de Argandeña, y Dn. Joseph
Corralon.” (ARANM, L-1, fol. 112).
227
“Oy se haze notorio á todos los tertulianos fundadores un decreto
de S.M. en que aprueba y manda guardar los estatutos qe. se citan en el acuerdo
antecedete. [Junta particular de fundadores celebrada el 12-IX-1734] y todos
unanimes y conformes, les pusieron sobre su cabeza, y dixeron qe. le obedecian
con la supor. venzon.” (Junta particular de fundadores de 16-IX-1734. ARANM,
L-1, fol. 113). La novedad fue anunciada al resto de los tertulianos en la junta
general celebrada al día siguiente, el 13-IX-1734 (ARANM, L-1, fol. 113). El
19-XI-1734, constituida ya la Academia Médico-Matritense, su primera junta
directiva otorga poder para pleitos, en su representación, a favor de Manuel
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
101
El cambio de ‘Tertulia’ a ‘Academia’ no es baladí, supone
el tránsito de una agrupación particular a una institución oficial,
sometida al poder del Consejo de Castilla y, por ende, a los
deseos del Monarca ¿fue a este cambio de estatus al que quiso
referirse José Hortega al argumentar sus “justos motivos para no
continuar el exercicio de la Presidencia”? Es posible, de hecho, el
peso de Alejandro Martínez de Argandoña y de José Corralón,
ambos médicos, el primero al servicio de la Cámara del Rey y el
segundo de la Cámara de la Reina –y del propio Presidente del
Consejo de Castila-, se hizo cada vez más evidente228.
Los Estatutos… de 1734 son, en esencia, similares a los de
1733, de los que resultan una versión ampliada229; se mantiene
en ellos el fin primordial, claramente imbuido de las ideas
ilustradas, con el que la Tertulia fue fundada:
“El fin primario ó idea general de la Academia sera
manifestar las racionales y provechosas maximas de la
Medicina y Cirugia y la mejor practica de sus operaziones
por el camino de la obserbazion y experienzia, proponer
las utilidades de la Phisica Mecanica, adelantar los
descubrimientos de la Anatomia, distinguir sin confusion
los experimentos chimicos y finalmente aberiguar quanto
pueda ser util y combeniente de la variedad admirable de
la Historia natural, en cuia consequencia se pondra con
claridad lo vedadero como seguro, lo probechoso como
util, lo berosimil cono opinable, y lo experimental como
demostrable”230.
Izquierdo (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 440r-441v).
De hecho, en la comunicación que realiza el Real Consejo de
Castilla se explicita: “aprovamos los Estatutos presentados por los Doctores
Dn. Alexandro Martinez de Argandoña y Dn. Joseph Corralon para que lo
contenido en ellos sea guardado, cumplido y executado en la forma, y vajo
las limitaziones y aditamentos que siguen…” Estatutos de la Academia Médica
Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Copia manuscrita,
firmada por José Hortega, en Madrid, el 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a).
228
229
Estatutos de la Academia Medica Matritense, aprobados por el Real y
Supremo Consejo de Castilla. [Madrid: s.n., 1734]. [2], 22 p.; la biblioteca de la
Real Academia Nacional de Farmacia conserva un ejemplar de este opúsculo
(signatura: A-C4 / registro: 3849). En el archivo de la Real Academia Nacional
de Medicina se conserva una copia manuscrita, firmada por José Hortega el
1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a), que es la que utilizamos en este epígrafe.
230
Cf. estatuto 50. Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados
por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a).
102
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
No obstante los nuevos estatutos presentan algunos
cambios que conviene señalar. Los académicos quedan ordenados
en tres categorías: de número, de ejercio y de honor231; los de
número se fijan en veinticuatro, de ellos ocho médicos, ocho
cirujanos y otros ocho farmacéuticos232; los académicos de ejercicio
guardan igual distribución y número; los de honor ascienden a
cuarenta y ocho233. La duración de los cargos electos se eleva a
un año, frente a los tres meses establecidos por los tertulianos.
Se incorpora la figura de ‘juntas públicas’, una en cada semestre,
destinada a mostrar los trabajos de la Academia234, y se establece
“Estatuto 1. La Academia Medica Matritense se compondra de
Profesores de Medizina, Cirugia y Pharmazia divididos en tres clases de
Academicos: la primera comprehendera los de Numero, la segunda los de
Exercicio, y la tercera los de Honor”. Estatutos de la Academia Médica Matritense
aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM,
leg. 1C,2a).
231
“[Estatuto] 2. Los Academicos de Numero seran veinte y quatro
tres Medicos, tres Anathomicos y dos fisicos Profesores de Medizina: Quatro
Cirujanos, y quatro Anatomistas disectores Profesores de Zirugia: Quatro
Chimicos, y quatro Botanistas, profesores de Pharmazia…” Estatutos de la
Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla.
Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). En la reforma de los estatutos adoptada
en la primavera de 1742 esta situación cambiará: “Que la Rl. Academia MedicaMatritense se componga ademas de los Profesores de Medicina, Cirugia, y
Pharmacia, de Profesores de Physica.” (Junta general de 3-IV-1742. ARANM,
L-1, fol. 439).
232
233
En la reforma de abril de 1742 quedará sin efecto esta limitación
numérica: “Que se suspenda la Clase de Academicos de Numero, y que dicha
Academia se componga solamente de dos clases, es á saber de Academicos
en Exercicio, y de Honor. Que en una, y otra clase sea abierto el numero de
Academicos, para que assi elija la Academia los sugetos que juzgue mas
aproposito para sus Exercicios Literarios…” (Junta general de 3-IV-1742.
ARANM, L-1, fol. 439).
La primera de ellas se celebró, en el Convento de la Santísima
Trinidad, el jueves 26-V-1735: “El Sr. Dn. Alexandro Argandoña explico
publicamente en el Combento de la Santisima Trinidad Como, pr. donde se
celebre la nutricion del foetus; sobre cuyo contenido dificultaron los Academos:
el Dr. Serena, el Lcdo. Xiorro y el Dr. Lara. Este acto se celebro en virtud del
Estatuto 46 á el qual asistieron ademas de los Academicos un gran numero
de facultativos y personas de la mr. distincion, aviendo favorecido este acto
dificultando el Dr. Dn. Franco. Perena Medico Honorario de Camara y el Dr.
Boncone, de cuya funcion se mostro muy satisfecho todo el numeroso concurso
qe asistio.” (Junta pública de 26-V-1735. ARANM, L-1, fol. 161). La siguiente
función pública se realizó el lunes 3-X-1735. Tales actos debieron despertar el
interés de los académicos pues, en el acta de la junta particular celebrada el 19XI-1735 queda anotado: “Asimismo se acordo qe. en el año proximo qe. viene de
mil setestos. y treinta y seis pueda aver dos Juntas mas qe. las dos qe. previenen
234
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
103
la conveniencia de mantener “comunicazión y comercio literario
(…) con los extranjeros”235, actitudes ambas muy del gusto
ilustrado, tanto por acercar a la sociedad los adelantos científicotécnicos como por insertar las actuaciones de las instituciones
españolas entre las de sus homólogas europeas. Los propios
académicos participan de este espíritu de apertura hacia el resto
de la sociedad y, en el acta de la junta general celebrada el 28
de febrero de 1735, queda anotado al margen: “En esta junta se
acordó que pudiesen entrar á oir, y ver las funciones literarias de
la Academia los facultativos, y curiosos qe. gustasen”236.
A los nuevos estatutos de 1734, conformados al gusto de
los tertulianos, el Consejo de Castilla añadió unas ‘limitaciones
y aditamentos’, de cumplimiento obligado, y que supondrían el
sometimiento de la Academia al Real Tribunal del Protomedicato:
“Por lo que mira á la subordinacion, y jurisdizion
que sobre la Academia y sus Yndividuos ha de tener el
Prothomedicato (…) Que el Presidente de la Academia
lo haya de ser perptuo. havitual primer Medico y Decano
que es ó fuere del Rl. Protomedicato con la prerrogativa
de presidirla siempre que pudiese concurrir, ó juntarla si
le parece combeniente (…) En orden á lo prebenido (…)
los Estatutos…” (ARANM, L-1, fol. 175); a partir de 1737 la Academia se limitó
a realizar los dos actos públicos anuales que señalan sus estatutos; en el acta
de la junta particular de 31-X-1737 se anota: “Asimismo se acordó qe. pr. este
año no aya mas Juntas publicas, qe las qe estan á cargo del Sr. Dr. Serena, y del
Sr. Dr. Leon Gomez, qe combenio con el Sr. Argendoña, se puedan pasar para el
año qe. viene, en el qual no puede aver mas que las dhas dos Juntas según los
Estatutos…” (ARANM, L-1, fol. 278).
235
“[Estatuto] 48. La Academia procurara tener comunicazion y comercio
literario, no solo con los eruditos de España, sino tambien con los extrangeros á
fin de lograr por este medio los mejores lazos para su aprovechamto.” Estatutos
de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla”.
Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). Las relaciones internacionales se
iniciaron solicitando un intercambio de correspondencia con la Royal Society;
en el acta correspondiente a la junta general celebrada el 21-X-1745: “se hizo
presente á la Junta la carta respuesta escrita á la Academia pr. el Caballero Hans
Sloane Presidente del Colegio medico y de la rexia Sociedad de Londres en
respta. á la qe. le escribió la Academia en 28 de febro. de este año su fecha en
Londres 16 de Septre. de 1735.” (ARANM, L-1, fol. 168). Y en la junta general
siguiente, la celebrada el 4-XI-1735: “Asimismo se acordó dar los honores de
Academico erudito al Dr. Dn. Juan Sloane presidente del Colexio Medico, y de la
rexia Sociedad de Londres con quien la Academia tiene comunicazn. y comercio
literario.” (ARANM, L-1, fol. 169). Sir Hans Sloane (1660-1753) fue médico,
botánico y coleccionista, de origen irlandés y religión protestante.
236
Junta general de 28-II-1735 (ARANM, L-1, fol. 144).
104
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
quanto á las plazas de Numero, de Exercicio, y de Honor
queremos sea, y se entienda que en caso de intentar ó
pretender entrar por Sozio de la Academia algun Medico
de Camara, ó de las familias Rs. se le admitiese desde
luego siendo de ejercicio aunque no aya vacante, y si
despues la hubiese no se probea hasta que por muerte ó
ausenzia falte alguno de los veinte y quatro, arreglandose
los estatutos que hablan de la formalidad con que deben
pretender, y ser admitidos los Academicos…”237
La imposición del Real Tribunal se llevó a efecto bajo la
presidencia electa de Baltasar de la Torre y Ocón, Subdelegado
del Real Tribunal del Protomedicato y protomédico: en junta
particular de numerarios reunida el sábado 25 de mayo de
1737, la Academia toma el acuerdo de tratar a los académicos
médicos de Cámara y de las Reales Familias como académicos
supernumerarios de número, lo que vendría a significar una
íntima dependencia entre la Institución y los médicos de Palacio;
el acuerdo fue considerado nulo apenas unos meses después238.
Con posterioridad, en la reforma de los estatutos presentada
en abril de 1742, se establecerá la total independencia de la
Corporación frente a los médicos de Cámara y de Familia239;
Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y
Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a).
237
En el acta de la junta particular celebrada el 25-V-1737 quedó
anotado: “Los Señores Academicos Medicos de Camara, y de las Reales
familias del Rey, y Reina nros. Señores seran tenidos, y tratados pr. Academicos
supernumerarios de numº. y gozarán de las mismas préeminencias, y
prerrogativas qe. los demas Academicos de numero.” (ARANM, L-1, fol. 249).
En la junta particular celebrada el 31-I-1738, apenas iniciada la presidencia
de Alejandro Martínez de Argandoña: “Los Señores Presidente, Directores,
Fiscal y Academicos de Numº. que se nombran acordaron derogar, derogan,
y dieron por nulo el Acuerdo qe. se hizo en 25 de Mayo de 1737 respecto de
ser en perjuicio de la Academia pr. lo qe. mira á que los Señores Academicos
Medicos de Camara, y de las Reales familias del Rey, y Reyna nres. Señores sean
tenidos, y tratados pr. Academicos Supernumerarios de Numº. y qe. gozen de las
mismas preeminencias, y prerogativas qe. los demas Academicos de Numº...”
(ARANM, L-1, fols. 291-292). La derogación quedó anotada al margen del acta
de la junta en la fue aprobada: “Este Acuerdo qe. toca á los Sres Medicos de
Camara, y de las Rles. Familias, derogó, y dio pr. nulo la Academia como consta
de la Junta de 31 de Enº. de 1738, y verifico no averse puesto en Practica pr. ser
en perjuicio de Tercero. Mª. y Enº 31 de 1738. Hortega.” (ARANM, L-1, fol. 249).
238
“Que qualquier Pretendiente á entrar en la Academia ahora
sea Medico de Camara, ó de las Rles. Familias presente Memorial como está
prevenido en el Estatuto X y que la Academia tenga entera libertad para
admitirle, ó no admitirle según se resolviese por votos secretos, y como executa
239
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
105
la Academia volvía a surgir libre, aun cuando su presidente
perpetuo siguiera siendo el Primer médico de Cámara del Rey240.
En cualquier caso, la transformación de ‘Tertulia’ a
‘Academia’ supuso una evidente pérdida de independencia,
una sujeción formal al Real Tribunal del Protomedicato y a la
ingerencia decidida de los médicos de la Real Casa; quizás
no fuera esto lo que el boticario José Hortega deseara para su
tertulia de rebotica. A cambio, la institución recibía el plácet del
Consejo de Castilla y obtenía la práctica seguridad del auxilio
de la Corona241; éste no tardó en llegar: en julio de 1738 Felipe V
otorgó su expresa protección:
“… concediéndoos juntamente mi Licencia, y
Permisso, para que podais abrir un Sello particular,
compuesto de alguna ingeniosa Empressa, y usar de él en
los casos que lo pidiern; y nombrar Impresor, que imprima
vuestras Obras, precediendo licencia de mi Consejo
(…) sin faltaros cosa alguna, por haver de subsistir, y
permanecer siempre debaxo de mi Real Proteccion…”242
con los demas Pretendientes, en virtud de los Estatutos X y XI los quales se
observaran como en ellos se expresa sin aditamentos algunos.” (Junta general
de 3-IV-1742. L-1, fol. 441).
De la aprobación de los nuevos estatutos informa José Hortega
en la junta general celebrada el 28-IX-1742: “En la Junta de oy di cuenta á la
Academia de una Rl. Providencia del Consejo su fecha á catorce de Sepre. deste
preente año, pr. la qual aprueba S.M. en todo, y pr. todo el Acuerdo hecho pr.
la Academia en tres de Abril deste mismo año, y aviendola leido de verbo ad
verbum, mandó la Academia que luego incontinenti se observase, y se pussiese
en execucion lo que S. Magd. mando, con los demas Estatutos, que pr. esta nueba
Providencia quedan en toda su fuerza, y vigor, y en consequencia dio la orden
para su observacia…” (ARANM, L-1, fol. 454).
240
En junta particular de académicos celebrada el 5-XI-1735: “Se acordo
q . se pidiese á su Magestad qe. Ds. gde. su real Proteccion para la Academia y
para governar esta pretension nombraron al Sr. Director, al Dr. Corralon y á mi
el sscro. [José Hortega].” (ARANM, L-1, fol. 169).
241
e
242
Real cédula extendida, en el Buen Retiro, el 15-VII-1738 (ARANM,
leg. 1C,3a). El amparo real fue dado a conocer a los académicos en la junta
celebrada el 19-VII-1738: “Los Comisionados nombrados pa. solicitar de S.M.
qe. Dios gde. su Proteccion Rl. pª la Academia, los quales son los Sres. Director,
Bereterrechea, Coralon y yo el Ssº. participaron á la Junta como el Rey avia
recibido á la Acadª. debaxo de Su Rl. Proteccion, y la concedia licencia pr. usar
de sello particular, y poder nombrar Impresor como constaba en la Rl. Cedula
de S.M. su fecha en Bn. Retiro á 15 de Julio de 1738 la qual puse yo en manos
del Sr Presidente el ql. beso, y puso sobre su cabeza la firma de S.M. y lo mismo
hicieron el Sr. Director, el Sr. Fiscal [Alfonso Lope], y yo, y despues se leyo pr.
mi la Real Cedula qe todos los Acads. manifestaron sumo gozo pr. las especiales
106
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
De acuerdo con la nueva estructura aprobada por los
estatutos de 1734, la Presidencia perpetua de la Academia
correspondió a José Cerví243; su presencia al frente de la Institución
es sólo testimonio de la sujeción de ésta al Real Tribunal del
Protomedicato; para su funcionamiento efectivo, los académicos
eligieron un ‘Presidente anual’, el primero de ellos fue Baltasar de
la Torre y Ocón, médico de Cámara244; con anterioridad, en la junta
primera académica de fundadores celebrada el 18 de septiembre
de 1734, los académicos nombraron a José Hortega Secretario
perpetuo, cargo que desempeñó hasta su fallecimiento245. Las
funciones que competen al Secretario quedan figuradas en el
estatuto 20 de los apobados en septiembre de 1734:
“El Secretario tendra a su cargo los papeles, los
quales archivara con horden y curiosidad. Escrivira los
Acuerdos, presentara las Memorias, pondra los Decretos,
avisara para las Juntas, notara los echos de la Academia,
resumira los que se den en voz, leera al principiar las
Juntas, los Acuerdos de la pasada, y finalmente tomara a
los Academicos el Juramento establecido…”246
El 20 de septiembre de 1734, los tertulianos fundadores
toman posesión de sus nuevas plazas de académicos de número;
honras qe. S.M. les hacia…” (ARANM, L-1, fol. 325).
243
Tal carácter de perpetuo se mantuvo mientras fue Presidente del
Real Tribunal del Protomedicato; al cesar en el cargo en 1746, a la muerte de
Felipe V, la ‘Presidencia perpetua’ de la Academia pasaría a ser ocupada por el
nuevo Presidente del Protomedicato, José Suñol Piñal.
“Los Academicos fundadores unanimes y conformes elixieron pr.
Presidente anual y ordinario, y como substituto del Sr. Dr. Dn. Joseph Cervi
Medico Primario del Rey nr. señor, y Presidente Perpetuo de la Academia, á el
Dr. Dn. Baltazar de la Torre y Ocon Medico de Camara con exercicio de S. Magd.
y se nombraron para qe. se lo participasen como diputados de la Academia
ál Dr. Dn. Alexdro. de Argensola, Dn. Juan Andres de Bereterrechea, y á mi
[José Hortega]…” (Junta particular de académicos fundacores de 19-IX-1734.
ARANM, L-1, fols. 114-115).
244
245
El artículo 28 de los Estatutos... establece que el cargo de Secretario
será perpetuo y elegido por los Académicos; éstos propusieron a José Hortega
para ocupar el puesto en la primera junta académica de fundadores, celebrada el
18-IX-1734: “Los Academicos fundadores; y de Numero unanimes, y conformes
elixieron pr. secretario perpetuo de la Academia, y como Su Majestad manda en
los estatutos á qe. se remiten, á Dn. Joseph de Hortega Academico fundador y de
numero; cuyo empleo desde luego admitio, y tomo la posesion y lo firmaron…”
(ARANM, L-1, fol. 114).
246
Copia manuscrita, firmada por José Hortega, en Madrid, el 1-X-1734
(ARANM, leg. 1C, 2a).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
107
José Hortega se adscribirá a una de las categorías profesionales
reservadas a los profesores de Farmacia: “Yo el secretario. Plaza
de Botanista de Numero”247.
La refundación de esta Real Academia Médica Matritense
entra, de lleno, en el nuevo espíritu que incita a las mentalidades
ilustradas, de las cuales sus más preclaras mentes científicas
encontraron acomodo entre sus bancales; Andrés Piquer Arrufat,
elegido académico el 25 de febrero de 1739, lo haría notar así en
su oración gratulatoria:
“No esta menos dispuesto el Orbe literario de las
grandes revoluciones que el Orbe politico, ni son en aquel
las epochas menos memorables que en este: Bien puede
contarse entre una de las mas notables el establecimiento
de tan docta, y sabia Sociedad, pues en ella se afianzan
enteramente en España el uso de las mas perfecta Phisica
y Medicina. Por su direccion se restituye á su ser el buen
gusto; y la Medicina ya cadente por la nimia delicadeza
de los razonamientos se reduce al punto fixo de la
observacion…”248
La Academia Médica Matritense y el domicilio de José
Hortega constituyeron una unidad de hecho incuestionable; el
texto del acta de la junta de gobierno, celebrada el 22 de agosto
de 1746, es bien elocuente de esta unidad simbiótica entre la
Academia y Hortega:
“… acordó la Academia que interin S.M. no
concediese á la Acadª. casa a proposito para celebrar
sus Juntas, nadie pueda innovar ni pretenda sacar á la
Acadª. de casa del Dn. Jph. Hortega, Ssrio Perpetuo de ella,
en atencion á qe. desde el principio de su fundacion no ha
conocido otra casa qe la expresada, pr. la buena voluntad
con que la franquea, de lo qe la Acadª. esta agradecida;
Junta particular de 20-IX-1734 (ARANM, L-1, fol. 116); el resto de
los tertulianos -los no fundadores- tomaron propiedad de sus asientos un día
después, en la junta general celebrada el 21-XI-1734 (ARANM, L-1, fol. 118). Al
unificarse sus categorías, también se unificaron sus cuotas: “cada uno de los
Academicos paguen pr. mesada á razon de quatro rs. de plata” queda anotado
en el margen del acta de la junta particular de fundadores celebrada el 16-IX1734 (ARANM, L-1, fol. 113).
247
248
Andrés Piquer Arrufat. Breve Oracion, que embio á la real Academia
Medica Matritense el Dr. Andres Piquer en accion de gracias por haber sido nomnbrado
su socio (ARANM, leg. 2,27). El manuscrito carece de fecha, pero va adjunto a la
carta en la que consta su envío, ésta queda dirigida a José Hortega y datada en
24-XI-1739 (ARANM, leg. 2,26).
108
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Pero qe. se practiquen las diligencias conbenientes
pª lograr Casa por S.M. y para este efecto nombró el
Sr. Argandoña qe hizo de Presidente, á los Sres. Lope,
Monleon y Palomero, cuyo acto fue acordado por los Sres.
Academicos…”249
Pese a estos claros intentos de emancipación, la
Corporación siguió residiendo en la biblioteca de José Hortega,
al menos, hasta 1752; probablemente permaneció allí hasta el
fallecimiento de su Secretario, acaecido en enero de 1761250.
La transformación en Academia supuso, también, un
cierto relajo en la actividad que habían desarrollado los antiguos
tertulianos; aunque anecdóticas, no dejan de ser significativas las
primeras decisiones que Baltasar de la Torre hace adoptar en la
junta general del 4 de septiembre de 1734:
“… qe. respecto de qe. las oras prevenidas pr.
los estatutos para celebrar los actos literarios eran de
mucha incomodidad en el invierno cuyas noches solian
ser muy asperas, y lluviosas, y pr. esto gravosas á los
Academicos qe. tenia por conveniente qe. durante el
invierno se ejecuten los actos literarios desde las onze de
la mañana en adelante (…) lo qual se conferenzio entre los
Academicos, y todos unanimes, y conformes acordaron
qe. assi se executase como el Sr. Presidente avia propuesto
(…) se acordó qe. puesto qe. muchas de las Plazas de
numero, y exercicio estaban pr. llenarse se tuviese pr. este
Junta de gobierno de 22-VIII-1746 (ARANM, L-1, fol. 585). Aún
así parece que mantenía alguna independencia, por ejemplo, disponía de
portero propio; en el acta de la junta particular celebrada el 30-I-1738 se anota:
“Asimismo acordaron qe. todos los Academicos Honorarios qe. de oi adelante
se reciban paguen un peso mas, de modo qe. en todo compongan cinco pesos, o
un doblon de oro, los quatro para los gastos de la Academia, como hasta aquí,
y el uno para el Portero qe. ahora lo es Franco. Ferreiro.” (ARANM, L-1, fol. 288).
249
250
El ‘Libro de Acuerdos de la Academia’ que habría de contener las
sesiones celebradas entre el 18-III-1752 y 5-X-1791 se encentra perdido, tal como
queda anotado en el primer Libro... ([1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 720). Tras el
fallecimiento de José Hortega, la Academia tuvo una sede errática, reuniéndose
en los domicilios de algunos de sus miembros hasta que, a fines de 1794, le fue
concedida una habitación en una de las casas de la calle del Tesoro; allí tuvo
lugar la primera sesión en sede propia, la celebrada el 12 de marzo de 1795. De
ubicar las diversas localizaciones con las que contó esta Real Academia se ha
ocupado Paula de Demerson. “El vagabundeo por la corte de la Real Academia
Médica Matritense”. En: José Checa Beltrán, Joaquín Alvarez Barrientos (coord.)
El siglo que llaman ilustrado. Homenaje a Francisco Aguilar Piñal: 253-260. Madrid:
CSIC, 1996.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
109
año una junta solamte. en cada semana en lugar de las dos
qe. previenen los estatutos, y se determinó qe. fuesen los
vierns. á las onze de la mañana como queda prevenido, y
se suspendio la que se devia executar los Lunes hasta qe.
aya mas Academicos…”251
Pese a estas limitaciones, la actividad de la Academia
siguió por los mismos cursos por los que -hasta entonces- se había
desarrollado la vida de la Tertulia, y José Hortega continuó dando
muestra de su aplicación y de sus lecturas; el 17 de diciembre
de 1734 diserta sobre la naturaleza e índole del alcanfor252;
el 1 de abril de 1735 intervino ‘presentando objeciones’ a la
conferencia pronunciada por Miguel Guarro sobre la utilidad de
la sangría para la curación de la catalepsis253 ; el 22 de abril fue el
propio Hortega quien expuso ante los académicos una serie de
experimentos realizados con alcanfor254; nuevamente interviene
en la discusión promovida, en la sesión del 13 de mayo de 1735,
tras la conferencia de Bartolomé Serena sobre si el ‘alma animal’
era necesaria para explicar el sentido y el movimiento255; el 21
251
Junta general de 4-IX-1734 (ARANM, L-1, fols. 120-124). Sí se
mantuvieron las juntas anatómicas, celebradas en el Hospital General de
Madrid, que siguieron reuniéndose los miércoles, como había sido habitual
hasta entonces. Éstas cambiarían pronto de formato y de día; en el acta de la
junta ordinaria celebrada el 18-II-1735 se lee: “Asi mismo se acordó tener otra
junta los lunes de cada semana en la qual cada uno de los Academicos explicase
verbalmte. una leccion Anatomica segun el órden que señalase la Academia (…)
dexando la Junta de el Vierns. para tratar solamente de actos literarios, sino
ocurriese cosa tan precisa que no admita dilacion…” (ARANM, L-1, fols. 140141). En la junta particular celebrada el 8-X-1736, se acuerda “Que las Juntas
Generales de los actos literarios empiezen á las onze en punto, y duren hasta
las doze y media, y no mas…” (ARANM, L-1, fol. 208).
252
Junta general de 17-XII-1734 (ARANM, L-1, fol. 135). El tema le
había sido propuesto en la junta general de 4-XI-1734 (ARANM, L-1, fol. 126).
253
“El Dr. Dn. Miguel Garro presentó á la Academia pr. escrito un
discurso qe. contenia: Si para la curazn. de la Catalepsis sea eficaz auxilio la
sangria? el qual fue leido en la Junta; y dificultaron sobre su contenido los Drs.
Argandoña y Lara, el Ldo. Lopez y Ortega, de cuya funcion se mostraron muy
satisfecho el Dr. Carreras qe. presidia, el Director y los demas Academicos qe.
se hallaron presentes…” (Junta general de 1-IV-1735. ARANM, L-1, fol. 152).
254
“Dn. Joseph de Hortega presentó á la Academia pr. escrito un
Discurso qe. contenia varios Experimentos sobre el Alcanphor; el qual fue leido
en la Junta, y dificultaron sobre su contenido el Dr. Serena, y Dn. Carlos Ximenez
de Aragon Academico honorario, y todo fue aprobado pr. los Sres. Presidente
y Director, y demas Academicos qe. se hallaron en la Junta, qe. fueron la mr.
Parte.” (Junta general de 22-IV-1735. ARANM, L-1, fol. 153).
255
“El Dr. Dn. Bartolome Serena presentó á la Academia pr. escrito
110
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de octubre de 1735 habló tras la disertación pronunciada por
Andrés Famada, sobre las preparaciones antimoniales256; el 18 de
noviembre será Hortega quien vuelva a tratar en la Academia
sobre el alcanfor, esta vez de sus reacciones en medios sulfúreos257;
ese mismo día se hizo público el primer informe solicitado a la
Academia sobre una obra científica: un texto de Ambrosio de
Almunia que habría de llevar por título Llave maestra Chirurgica
&; la impresión de la obra fue reprobada y ésta no vio la luz, en
su dictamen tomó parte José Hortega258.
En la junta general celebrada el 11 de mayo de 1736
Hortega presentó unas reflexiones sobre la raiz de la calaguala259;
un discurso qe. contenia: Si para el sentido, y movimiento eran necesarios los
espiritus animales, el qual fue leido en la Junta y dificultaron sobre su contenido
los Drs. Lara, Lope, Garro, el Lzdo. Xiorro y Ortega…” (Junta general de 13-V1735. ARANM, L-1, fol. 158).
“Dn. Andres Famada presentó á la Academia pr. escrito un discurso
q . contenia la continuacion de las operaciones utiles del Antimonio el qual fue
leido publicamte. en la Junta, y dificulte sobre su contenido yo el Ssrio. [José
Hortega] de cuyo Acto se mostraron muy satisfechos el Dr. Carrera qe. presidio,
el Sr. Director y los demas Academicos qe. se hallaron en esta Junta qe. fueron la
mr. Parte.” (Junta general de 21-X-1734. ARANM, L-1, fol. 167).
256
e
“Dn. Joseph Ortega presentó á la Acadª. pr. escrito un discurso qe.
contenia Experimentos sobre el Alcanphor pr. medio de menstruos sulphureos
el qe. fue leido en la Junta y aprobado pr. el Dr. Carreras qe. presidio, el Sr.
Director, y los demas Academicos qe. asistieron qe. fueron la mr. Parte.” (Junta
general de 18-XI-1735. ARANM, L-1, fol. 173-175). El asunto le fue adjudicado
en la junta general celebrada el 30-V-1735: “Dn. Joseph Hortega: Experimtos.
sobre el Alcanphor por medio de menstruos sulphureos el Vierns. 18 de Novbre.”
(ARANM, L-1, fol. 162).
257
258
“Asimismo se presento á la Academia la censura del libro Llave
maestra Chirurgica & su autor Ambrosio de Almunia, hecha de orden de la
Academia por los Dres. Garro, Lope, Dr Dn. Andres de Bereterrechea, Dn. Julio
de Dios Lopez, Dn. Andres Famada, y Dn. Joseph Ortega, de la qual consta la
reprobacion de dho libro (…) pr. no resultar del alguna utilidad al publico...”
(Junta general de 18-XI-1735. ARANM, L-1, fol. 173-175). La solicitud les fue
realizada en junta particular de académicos de número reunida el 5-XI-1735:
“… que los Dres. Lope y Garro, el Sr. Director, el Ldo. Lopez, Dn. Andres Famada
y yo el Sscro. registren para su aprobacion un libro titulado Llave maestra & qe.
el Consexo á remitido á la censura de la Academia…” (ARANM, L-1, fols. 169170).
“Yo el ssro. presente á la Academia un Discurso pr. escrito qe. contenia
varias reflexiones sobre la Raiz de Calaguala, el qual fue leido publicamte. en la
junta cuyo contenido dificultaron los Academicos Lope, Xiorro, é Ysasmendi,
de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Dr. Carrera, qe. presidio, Dn. Juan
Andres de Bereterrechea, y el Dr. Andres Famada qe. hizieron de Directores, y
assimismo los Academicos Zapata, Rico, Lope, Lopez, Lara, Brunet, Bedoya,
259
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
111
intervino en la discusión pública mantenida, en la sesión de ese
9 de noviembre, tras la conferencia de Bernabé Araujo sobre la
curación del coma soñoliento260, y en la que tuvo lugar el 3 de
diciembre, posterior al discurso de Vicente Carreras acerca de
la curacion de la alferecía261; él mismo presentó a la Academia,
reunida el 10 de diciembre, una visión general sobre el uso
médico del alcanfor262.
En 1737 fue elegido para dirigir la sección de Farmacia de
la Academia, pero rehusó antes de tomar posesión, pasando ésta
a ser desempeñada por Louis Riqueur263; es posible que, para
entonces, reclamaran más su atención los estatutos del Colegio
de Profesores Boticarios de Madrid, recién aprobados y aún
pendientes de la confirmación regia. No obstante su actuacion
Serena, Xiorro, Campillo, Rodriguez, Ysasi Ysasmendi, y Velez, qe. se hallaron
en esta Junta.” (Junta general de 11-V-1736. ARANM, L-1, fols. 202-203).
“El Dr. Dn. Bernardo Araujo presentó á la Academia pr. escrito un
Discurso q . contenia la Historia y curacion del coma somnoliento el qe. fue leido
publicamente en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos
Carreras, Lope, Rodriguez y Ortega…” (Junta general de 9-XI-1736. ARANM,
L-1, fol. 212).
260
e
“El Dr. Dn. Vicente Carreras presentó á la Academia un Discurso qe.
contenia la Historia y curacion de la Alpherecia el qual fue leido en la Junta,
y dificultaron sobre su contenido los Academicos Rodriguez, Campillo y
Ortega…” (Junta general de 3-XII-1736. ARANM, L-1, fol. 218).
261
262
“Dn. Joseph Ortega presentó á la Academia pr. escrito un Discurso
qe. contenia la Historia del uso medico del Alcanfor el qual fue leido en la Junta
y dificultaron sobre su contenido los Academicos Carreras y Lope…” (Junta
general de 10-XII-1736. ARANM, fols. 219-220). El discurso le fue encargado
en la sesión celebrada el 13-I-1736: “Diz. Lunes 10. Dn. Joseph Hortega: Del uso
medico del Alcamphora.” (ARANM, L-1, fol. 185).
263
La propuesta de José Hortega fue formulada en junta particular
celebrada el 31-XII-1736: “Para Directores Pharmaceuticos á Dn. Joseph Ortega y
á Dn. Andres Famada.” (ARANM, L-1, fol. 223); la elección se produjo en la junta
general celebrada el 1-I-1737: “Por Director Pharmaceutico á Dn. Joseph Hortega
Examinador del Real Protomedicato, y Secretario Perpetuo de la Academia,
el qual renuncia al referido empleo, y aviendolo admitido la Academia,
propusieron los Academicos de numero para Director Pharmaceutico á Dn.
Luis Riqueur primer Boticario de S.M. y á Dn. Xptobal Velez, y los Academicos
de numº y exercicio eligieron pr. votos secretos al dcho. Dn. Luis Riqueur.”
(ARANM, L-1, fol. 224). Estuvo propuesto para el mismo puesto en el año 1742;
en el acta de la junta particular de 31-XII-1741 queda anotado: “Para Director
Pharmaceutico á los Dres. Ortega y Dn. Jn. de Minuart Boticario de Barcelona.”
(ARANM, L-1, fol. 426), finalmente salió elegido Juan Minuart: “Por Director
Pharmaceutico á Sr. Dn. Jn. de Minuart Ayudante de Boticario mayor de los
Reales Exercitos.” (Junta de elecciones de 1-I-1741. ARANM, L-1, fol. 427).
112
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
en el seno de la institución durante este año es similar a la
desarrollada durante los anteriores; en la sesión del 1 de febrero
intervino en la discusión posterior al discurso pronunciado por
Miguel Campillo relativo a la curación de la artritis264 y, en la
semana posterior, el 8 de febrero, tras la disertación de Bartolomé
Serena sobre la curacion de la tisis265; participó en el coloquio que
siguió a la conferencia que Agustín Lorente leyó, en la junta de
22 de marzo, acerca de ‘la causa de la transmutación del delirio
en letargo’266. El 17 de mayo pronunció una conferencia sobre
el opio hispano267; el 8 de octubre tomó parte en las discusiones
promovidas tras la disertación de Tomás Francisco de Monleón y
Ramiro sobre la curacion del dolor cólico convulsivo268.
El 31 de octubre da inicio a sus ‘Lecciones botánicas’,
comenzó con una disertación histórica sobre la disciplina
para pasar a ocuparse, siempre de acuerdo con la propuesta
sistemática formulada por Joseph Pitton de Tournefort, de la
“El Dr. Dn. Miguel Campillo presentó á la Academia pr. escrito un
discurso q . contenia la Historia, y curacion de la Arthritide, el qual fue leido á
la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos Lorente, Rodríguez,
Lope, Garro, Argandoña, Carreras y Hortega…” (Junta general de 1-II-1737.
ARANM, L-1, fol. 232).
264
e
“El Dr. Dn. Bartholome Serena presentó á la Academia pr. escrito un
Discurso q . contenia la Historia y curacion de la Phtisis el qual fue leido en
la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos Rodriguez, Lope,
Garro, Carreras y Ortega…” (Junta general de 8-II-1737. ARANM, L-1, fol. 233).
265
e
266
“El Sr. Dr. Dn. Agustin Lorente presentó á la Academia un Discurso
pr. escrito, que contenia la causa de la transmutacion del delirio en letargo el
que fue leido en la Junta, y sobre su contenido dificultaron los Sres. Academicos
Nabarrete, Campillo, Lope, Carreras, y Ortega...” (Junta general de 22-III-1737.
ARANM, L-1, fol. 241).
“Dn. Joseph Hortega presentó á la Academia pr. escrito un Discurso
q . contenia la Historia del opio Hispano, el qual fue leido en la Junta, y dificultó
sobre su contenido el Sr. Dr. Lope, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos
el Sr. Dr. Dn. Franco. Fernz. Nabarrete, que hizo de Presidente, los Sres. Directores,
y Fiscal, y los demas Sres. Academicos qe. se hallaron en esta Junta, qe. fueron la
mr. Parte.” (Junta general de 17-V-1737. ARANM, L-1, fol. 247). La disertación
le fue encomendada en la junta celebrada el 11-I-1737: “Dn. Joseph Ortega: Del
opio Hispano. Vierns. 10 de Mayo.” (ARANM, L-1, fol. 226), pero ese día fue
Vicente Carreras quien ocupó la tribuna de la Academia (ARANM, L-1, fol.
246).
267
e
268
“El Dr. Dn. Thomas Franco. de Monleon y Ramiro presentó á la
Academia pr. escrito un Discurso que contenia la Historia, y curacion del Dolor
Colico Convulsivo el qual fue leido en la Junta y dificultaron sobre su contenido
los Sres. Academicos Palomero, Rodríguez, Serena, Campillo, Garro, Zapata,
Bereterrechea, y Ortega…” (Junta general de 8-X-1737. ARANM, L-1, fol. 273).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
113
asarina [Anthirrinum sp.], la hierba doncella [Vinca minor L.],
las flores del azafrán [Crocus sativus L.], la argentina [Potentilla
anserina L.] y de un Atriplex al que denomina ‘te de España’269;
las continuó en la junta del 8 de noviembre, entonces se interesó
por el arrayán [Myrtus communis L.], el hisopo vulgar [Hyssopus
officinalis L.], los claveles de muerto [Calendula officinalis L.] y la
consuelda real [Consolida sp.]; de los usos médicos de estas plantas
versaron los comentarios posteriores de José Isasi Isasmendi270.
La decisión de la Academia de publicar, desde el verano
de 1737, las Ephemérides barométrico-médicas matritenses… supone
la necesidad de establecer una ‘mesa censoria’ que se ocupara
de decidir sobre las publicaciones propias de la Institución
y, particularmente, de una figura que, actuando a modo de
‘secretario de redacción’, mantuviera la relacion con la imprenta
y el formato y estilo de los productos literarios que la Corporación
produjese; tales tareas quedan nítidamente definidas en el acta
de la junta general celebrada el 23 de julio de 1737:
“Asimismo se acordó qe. aya un fiscal de citas; el
qual tenga obligacion de comprobar las citas, y doctrinas
de los asumptos en los mismos Autores originales qe.
citase el Autor, lo qual estando conforme lo certificara al
pie del Papel; y la Academia nombró para este empleo á
mi el Ssrio.
“En esta Junta Yo el Ssº. principie las Lecciones Botanicas qe. pr.
varios motivos, y principalmte. pr. la esterilidad del año no se avian executado
este verano pasado. Antes de la demostracion de las Plantas expuse en una
oracion el Estado antiguo, y Moderno de la Botanica, y despues demostre
la Yedra terrestre, ó Asarina, la Vinca Pervinca, llamada vulgarmte. Hierba
Doncella, ó de la Garganta, las flores liliaceas del Azafran, la Pentaphyloides
Argentina, ó Potentilla, y el Atriplex Americanus, ó Atriplex odoratus llamado
vulgarmte. the de España pr. el methodo de Tournefort, qe. es ql. se haran las
demas lecciones…” (Junta general de 31-X-1737. ARANM, L-1, fol. 277-278). Y
es que, en efecto, lo acordado era que estas ‘Lecciones botánicas’ se impartieran
en los meses de verano, así quedó anotado en el acta de la junta celebrada el 11I-1737: “Dn. Joseph Hortega, y el Dr. Isasmendi darán hasta fin de 7bre un Curso
de Lecciones Botanicas, desde 7 de Junº. Vierns.” (ARANM, L-1, fol. 226).
269
270
“Yo el Ssº. demostre en la Academia las Plantas sigtes: el Arrayan,
el Hyssopo vulgar, la Calendula ó Claveles de Muerto, y la Consuelda Real ó
Espuela de Caballeros, y despues de la demostracion explicó el uso medico de
cada planta el Sr. Dr. Isasmendi de cuyo acto se mostraron todos los Academicos
mui satisfechos.” (Junta general de 8-XI-1737. ARANM, L-1, fol. 279). La
Academia le había encomendado una disertación más para este año, en el
acta de la junta celebrada el 11-I-1737 quedó anotado: “Dn. Joseph Ortega: Del
Alcanphor Hispano. Vierns. 6 de Dizbre.” (ARANM, L-1, fol. 226), pero ese día
no hubo junta.
114
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Asimismo se acordó qe. aya un revisor de estilo,
el qual tenga obligacion de notar lo qe. no estuviese
conforme con el buen uso de la lengua castellana, y para
este empleo nombró la Academia á mi el Ssrio.
Asimismo mando la Academia qe yo el Ssrio. la
proponga un systema ortographico, á fin de que todos sus
individuos usen en los escritos de una misma puntuacion,
y metodo ortographico…”271
No fue ésta la única publicación de la Academia; desde
el año 1738, la institución hizo públicos la relación de actos que
en ella se organizaban272; se imprimieron de ellos 150 ejemplares
anuales, aunque concebidos como efímera, alguno ha llegado a
nuestros días273.
Los actos literarios celebrados durante 1738 cuentan,
como en los años anteriores, con la presencia continua de José
Hortega; el 7 de marzo presenta en la Academia unas ‘memorias’
sobre la historia de las plantas de España274. Igual situación se
vive en 1739, el 21 de marzo leyó en la Academia una disertación
sobre los metodos de las plantas, continuó con las ‘memorias’
para la historia general de las plantas de España275 y, el 2 de
271
Junta general de 23-VII-1737 (ARANM, L-1, fols. 262-266).
En el acta de la junta particular de académicos de número celebrada
el 25-II-1738, se anota: “… acordaron se imprimiese el Catalogo de los Actos
Literarios para este Año de 1738 en la misma forma qe. esta dispuesto y qe se
leyó en esta Junta…” (ARANM, L-1, fol. 299).
272
273
Así se lee en el acta de la junta general celebrada el 5-III-1742:
“Asimismo arregló, y dispuso la Academia el Catalogo de los Actos Literarios
para este presente año, cuyo original queda entre los papeles de mi cargo, y
arreglado á el mandó que se imprimiesen ciento, y cinquenta Exemplares, como
se ha hecho otros años…” (ARANM, L-1, fol. 437). Este impreso tuvo cierto
éxito, Francisco de Sola solicita, en carta a José Hortega, fechada en Estella el
20-IV-1746, la remisión del correspondiente a aquel año (ARANM, leg. 7,504).
La Real Academia Nacional de Farmacia conserva uno de estos programas, el
relativo a los actos que habrían de celebrarse en 1744 (ARANF, leg. 5,11).
274
“Dn. Joseph Hortega presentó á la Academia pr. escrito su Discurso
que contenia las Memorias para la Historia de las Plantas de España, el qual fue
leido en la Junta, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Presidente,
el Sr. Director, el Sr. Fiscal y los Sres. Academicos: Garro, Lopez, Brunet, Serena,
Rodríguez, Isasi Isasmendi, Valle...” (Junta general de 7-III-1738. ARANM, L-1,
fol. 301).
“Dn. Joseph Ortega presento á la Academia pr. escrito una
Dissertacion sobre los methodos de las plantas, y continuacion de las Memorias
para la Historia Genl. de las Plantas de España, la qual fue leida á la Junta, y
assimismo aprobada…” (Junta general de 21-III-1748. ARANM, L-1, fol. 348).
275
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
115
mayo, intervino en la discusión mantenida tras la conferencia de
Cristóbal Vélez sobre el examen de la sal amoníaco276.
En la primavera de 1740 se anuncia la Campaña de
Mallorca, José Hortega, que apenas un año y medio antes había
sido nombrado Boticario mayor de los Reales Ejércitos, debe
acudir a ella, por lo que la Academia nombra secretario sustituto
en la persona de Juan de Dios López277. José Hortega no asistirá
a las juntas celebradas por la Academia entre el 20 de mayo de
éste 1740 y el 20 de enero de 1741; su asusencia afectó a los actos
programados por la Corporación, en el acta de la junta general
que habría de celebrarse el 2 de diciembre de 1740 se anota:
“Oi correspondia que el Sr. Ssrio. Dn. Joseph Hortega
presentase su Discurso: Continuacion de las Memorias pr.
la Historia de las Plantas de España, pero pr. estar a la
Expedicion de Mallorca de Orden de el Rey (qe. Dios gde.)
y pr. aver mui pocos Academicos no se celebró la Junta”278.
Se resarció de su falta de contacto con la Academia
durante el mes de mayo de 1741, ocupó entonces por tres veces
el estrado: el 5 de mayo presentó una disertación botánica sobre
una planta de origen chino: el ginseng279; el 12 de mayo otra
sobre una planta de América: la ‘cascarilla, ó chacarilla’280 y, el
26 de mayo, sobre la denominada ‘Scrophularia aquatica major
ó Betonica aquatica’281. Nada más nos consta que presentara éste
276
“El Sr. Velez presentó á la Acadª. pr. escrito el Examen del sal
amoniaco el qual fue leido en la Junta, y dificultó sobre su contenido el Sr.
Ortega, y ultimamte. fue aprovado pr. la Academia.” (Junta general de 2-V-1739.
ARANM, L-1, fol. 352).
“Asimismo se acordo que el Sr. Ldo. Dn. Juan de Dios Lopez sirbiese
el Empleo de secretario en la ausencia que está para hacer á la expedicion de
Mallorca de orden del rey Dn. Joseph Hortega Ssº. Pepº. de la Acadª.” (Junta
general de 8-IV-1740. ARANM, L-1, fol. 384). Juan de Dios López firmará el acta
de la junta celebrada el 20-V-1740 y las de los días posteriores, hasta la junta
general de 27-I-1741, en que vuelve a recogerse la firma de José Hortega.
277
278
Junta general de 2-XII-1740 (ARANM, L-1, fol. 396).
“Yo el Secretario presenté á la Academia una Dissertacion Botanica
sobre una Planta de la China llamada Gin-Seng, la qual fue leida en la Junta,
y aprobada por la Academia...” (Junta general de 5-V-1741. ARANM, L-1, fol.
416).
279
“Yo el Secretario presenté á la Academia una Dissertacion Botanica
sobre una Planta de la America llamada Casacarilla, ó Chacarilla, la qual
fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª...” (Junta general de 12-V-1741.
ARANM, L-1, fols. 416-417).
280
281
“Yo el Secretario presenté á la Academia pr. escrito una Dissertacion
116
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1741, las actas recogen su intervención en el coloquio posterior
a la disertación de Vicente Carreras, pronunciada el 25 de
diciembre, sobre las petequias282.
Intervino en la discusión suscitada tras la conferencia
de Joaquín Cervino, leída el 16 de febrero de 1742, que versó
sobre la utilidad de la aplicación de medicamentos simples en
la curación de las enfermedades283; también tomo parte en los
comentarios posteriores a la disertación de Pedro León Gómez,
el 16 de marzo, sobre el uso de la sangria284; el 13 de abril es
Hortega quien diserta en la Academia, esta vez sobre el kermes
mineral285.
Este año de 1742 correspondió a José Hortega pronunciar
una de las dos conferencias públicas que la Academia organizaba
anualmente; eligió una disertacion sobre ‘el licor anodino mineral
de que hace memoria en sus obras Federico Hoffman’, la leyó,
Botanica sobre una Planta llamada Scrophularia aquatica major, ó Betonica
aquatica la qual fue leída en la Junta, y aprobada pr. la Academia…” (Junta
general de 26-V-1741. ARANM, L-1, fols. 417-418). ‘Scrophularia aquatica major’
es el nombre empleado por Tournefort para designar la planta (Institutiones:
166), ‘Betonica aquatica’ es el común como oficinal.
282
“El Sr. Carreras presentó á la Acadª. por escrito una Dissertacion
sobre las Pethequias, que es uno de los Accidentes que acompañan á las
calenturas agudas, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido
los Sres. Ortega, y Lopez y fue aprobada por la Acadª...” (Junta general de 25XII-1741. ARANM, L-1, fol. 425).
283
“El Sr. Cervino presentó á la Academia por escrito una Dissertacion
sobre la utilidad de aplicacion de los Medicamentos simples en la curacion de
las Enfermedades la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido
los Sres. Torres, Sevillano, Palomero, y Ortega, y fue aprobada pr. la Academia…”
(Junta general de 16-II-1742. ARANM, L-1, fol. 434).
284
“El Sr. Leon Gomez presentó á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion
sobre el uso de la Sangria, sga. pte., la qual fue leida en la Junta, y dificultaron los
Sres. Palomero, Lopez, y Ortega, y fue aprobada pr. la Acadª….” (Junta general
de 16-III-1742. L-1, fol. 438).
“El Sr. Ortega presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion
intitulada Memorias sobre el Kermes Mineral, la qual fue leida en la Junta, y
aprobada por la Academia…” (Junta general de 13-IV-1742. ARANM, L-1, fol.
446).
285
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
117
ante la junta general del 28 de septiembre, ‘por vía de prueba’286
y la defendió en la junta pública del 1 de octubre287.
En los comienzos de 1743, el 25 de enero, participa en el
concurrido coloquio posterior a la conferencia de José Lorente
sobre el recto medio de administrar la quina288; volvió a intervenir
tras el acto, celebrado el 31 de enero, en que Lorente disertó sobre
el abuso de la quina289; el 15 de marzo hizo lo propio después
de las observaciones anatómico-quirúrgicas pronunciadas por
Santa Ana290; y el 22 de marzo intervino en el coloquio posterior
a la disertación de Miguel Rodríguez ‘sobre la ventajosa
verosimilitud, firmeza, y utilidad del sistema mecánico respecto
de los demás’291; el 25 de octubre correspondió disertar a José
286
“Yo el Srio. lei á la Academia, pr. via de prueba como es estilo, la
Dissertacion sobre el Licor anodyno Mineral de que haze memoria en sus
obras Federico Hoffman Medico del Rey de Prusia, la qual fue aprobada pr. la
Academia para el efecto de leerla en Publico el dia primº. de Octubre, como se
refiere en el Catalogo de los Actos Literarios deste año” (Junta general de 28IX-1742. ARANM, L-1, fol. 454-455). La bibliografía para preparar la disertación
estuvo en su biblioteca; en sus estantes conservaba los seis volúmenes en folio
de Friderici Hoffmanni... Opera omnia physico-medica, denuo revisa, correcta &
aucta, in sex tomos distributa, quibus continentur doctrinae solidis principiis physicomechanicis, & anatomicis, atque etiam observationibus clinico-practicis superstructae.
Methodo facili ac demonstrativa deductae, & per experientiam LVII. annorum stabilitae,
cum vita auctoris [J.H. Schultze scripta], et ejus praefatione de differente medicinae &
medicorum statu atque conditione, & criteriis boni ac periti medici... Genevae: apud
fratres de Tournes, 1740.
“Yo el Srio. lei en Publica Junta una Dissertacion sobre el Licor
anodyno-mineral, del que hace memoria en varias partes de sus obras Federico
Hoffman, Methodo de prepararle, y su uso, la qual fue aprobada pr. la
Academia…” (Junta pública de 1-X-1742. ARANM, L-1, fol. 456).
287
288
“El Sr. Lorente presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion
sobre el recto modo de administrar la Kina, la qual fue leida en la Junta, y
dificultaron sobre su contenido los Sres. Torres, Cervino, Campillo, Rodríguez,
Argandoña, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...”
(Junta general de 25-I-1743. ARANM, L-1, fol. 474).
“El Sr. Lorente presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion
sobre el Abuso de la Kina, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su
contenido, los Sres. Isasmendi, Lope, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado
pr. la Academia...” (Junta general de 31-I-1743. ARANM, L-1, fol. 476).
289
290
“El Sr. Santa Ana presentó á la Academia pr. escrito las observaciones
Anatomico-Chyrurgicas, cuyo assumpto fue leido en la Junta, dificultaron
sobre su contenido los Sres. Valle, Lopez, Carreras, Palomero, y Ortega, cuyo
acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 15-III-1743. ARANM,
L-1, fol. 481).
291
“El Sr. Rodriguez presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion
sobre la ventajosa verisimilitud [sic], firmeza, y utilidad del systhema mechanico
118
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Hortega, lo hizo sobre el jabón de España y su uso en medicina292,
en una primera parte, que habría de tener continuación en su
siguiente conferencia, pronunciada casi un año después, el 22 de
mayo de 1744293; durante los últimos meses de éste 1743 siguió
participando en las juntas generales: en el coloquio establecido
tras la conferencia de Juan José García Sevillano, pronunciada el
8 de noviembre, en la que trató sobre la linfa, su movimiento y
usos294; y en la discusión mantenida, el 22 de noviembre de 1743,
tras la conferencia de Joaquín Cervino, sobre el movimiento del
quilo295.
Durante el año de 1744 José Hortega ocupó la dirección de
la sección de Farmacia296. No estuvo ocioso durante los primeros
meses de 1744; la reforma de los estatutos de la Academia,
pergeñada en la junta general de 3 de abril de 1742 y aprobada
respecto de los demas, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su
contenido los Sres. Padros, Lorente, Campillo, Monleon, Lope, Carreras, y
Ortega, cuyo Acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 22-III1743. ARANM, L-1, fol. 482).
292
“El Sr. Hortega presentó á la Academia una Dissertacion sobre el
Xabon de España, y su uso en Medicina, primera parte, la ql. fue leida en la
Junta, y dificultó sobre su contendio el Sr. Fiscal, cuyo acto fue aprobado pr. la
Academia” (Junta general de 25-X-1743. ARANM, L-1, fol. 494).
293
“El Sr. Ortega presentó á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
el el [sic] Xabon de España, y su uso en la Medicina, la qual fue leida en la Junta,
y dificultaron sobre su contenido los Sres. Velez, Lope, Garro, y Carreras, cuyo
acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 22-V-1744. ARANM,
L-1, fol. 526).
“El Sr. Sevillano presento á la Academia. pr. escrito una Dissertacion
sobre la Lympha, su movimiento, y usos la qual fue leida en la Junta, y
dificultaron sobre su contenido los Sres. Padros, Lorente, Cervino, Leon Gomez,
Rodriguez, Lope, Carreras, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la
Academia...” (Junta general de 8-XI-1743. ARANM, L-1, fol. 496).
294
“El Sr. Cervino presentó á la Academia, pr. escrito una Dissertacion
sobre el Chylo en movimiento, y Destino: segunda Parte, la qual fue leida en la
Junta, y dificultaron sobre su contendio los Sres. Padros, Leon Gomez, Rodriguez,
Carreras, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta
general de 22-XI-1743. ARANM, L-1, fol. 498).
295
296
En la junta particular de 31-XII-1743 se proclama su candidatura:
“Para Director Pharmaceutico el Dn. Joseph de Ortega actual Srio. y el Sr. Dn.
Fco. Lozosoayn, Boticario de familia, y Acadº. Honorario residte. en Pamplona.”
(ARANM, L-1, fol. 503). La elección se produjo en la siguiente junta general,
celebrada el 1-I-1744: “Por Director Pharmaceutico el Sr. Dn. Joseph de
Ortega Boticario de S.M. y Mayor de sus Rs. Exercitos, Examinador del Rl.
Protomedicato, fundador, y Secretario Perpetuo de la Academia.” (ARANM,
L-1, fol. 505).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
119
por el Consejo de Castilla el 14 de septiembre de aquel año,
obligaba a su nueva redacción, a cuyo fin se nombró una comisión
formada por Miguel Campillo, quien a la sazón ocupaba plaza
de fiscal, y los académicos Vicente Carreras, Alejandro Martínez
de Argandoña, Tomás Francisco Monleón y José Hortega297; el
trabajo, asignado en los comienzos de febrero de 1744, se dio por
concluido en julio de este año, entonces se nombraría una nueva
comisión, encargada de su examen, en la que también participó
Hortega298.
Su colaboración en la redacción de los estatutos, al que
se unía su labor habitual como secretario de actas, no le impidió
seguir tomando parte en las discusiones académicas: el 23 de
marzo de 1744, Vicente Carreras y José Hortega “hablaron en
consulta sobre un caso Medico y Pharmaceutico”, cuyo asunto
no nos refieren las actas299; y el 22 de mayo continuó con su
conferencia sobre el jabón medicinal de España, a la que ya nos
hemos referido líneas arriba.
Aún más participativo se muestra en 1745: el 15 de enero
interviene en la discusión posterior a la conferencia de Vicente
Gilabert, sobre el origen de la máquina hidráulico-pneumatica300;
el 22 de enero, tomó parte en la tertulia que siguió a la conferencia
de Francisco Padrós sobre el abuso de los diaforéticos y el uso
297
“Con motivo de haber necesidad de hacer nueba impresión de los
Estatutos, acordó la Academia, que primeramte. se dispusiesen los referidos
Estatutos arreglados á las tres cedulas de S.M. para cuyo efecto nombró el Sr.
Presidente una Junta particular compuesta por el Sr. Fiscal, y los Sres. Carreras,
Argandeña, Monleon, y Ortega, á fin de qe. formen los referidos Estatutos,
los presenten á la Academia, con todo aquello qe. les parezca conveniente…”
(Junta general de 7-II-1744. ARANM, L-1, fol. 513).
“La Academia nombró por revisores de los nuebos Estatutos que
estan dispuestos una Junta Particular compuesta del Sr. Presidente, del Sr.
Fiscal, del Sr. Secretario, y de los Sres. Carreras y Argandeña, para qe. con su
Aprobación se impriman…” (Junta general de 13-VII-1744. ARANM, L-1, fol.
559).
298
299
“Los Sres. Carreras, y Ortega hablaron en consulta sobre un caso
Medico y Pharmaceutico, qe. les señaló el Sr. Presidente, y después que
hablaron dichos Sres. Academicos, hablo, y resolvio el Sr. Presidente, cuyo acto
fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 23-III-1744. ARANM, L-1,
fol. 520).
300
“El Sr. Gilabert presentó á la Academia por escrito una Dissertacion
sobre el origen, ó generacion de la Machina Hidraulico-Pneumatica, la qual fue
leída en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Campillo, Palomero,
y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 15-I1745. ARANM, L-1, fol. 541).
120
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
del agua en las calenturas agudas301; en la junta reunida el 9
de abril fue José Hortega quien arguyó sobre la trementina del
Principado de Cataluña302; el 26 de abril, dentro de la fórmula
del ‘hablaron en consulta’303, intervinieron Cristóbal Vélez y José
Hortega sobre un producto químico, el bezoárdico jovial304; en
la mañana del 7 de mayo volvió a participar, tras una nueva
intervención de Vicente Gilabert, de nuevo relativa a la máquina
hidráulico-pneumática305; el 21 de mayo tomó parte en el diálogo
que se estableció tras pronunicar, Juan José García Sevillano,
su disertación sobre las cautelas que deben observarse en la
administración de los medicamentos306.
El 24 de mayo de 1746 intervino en la presentación
que Antonio María Herrero realizó sobre fósiles, las ‘piedras
“El Dr. Padrós presentó á la Academia por escrito una Dissertacion
sobre el Abuso de los Diaphoreticos, y el uso del Agua en las calenturas agudas:
la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Sevillano,
Campillo, Palomero, Garro, Monleon, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la
Academia…” (Junta general de 22-I-1745. ARANM, L-1, fol. 542).
301
302
“El Sr. Ortega presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion
sobre la Trementina del Principado de Cataluña, la qual fue leida en la Junta,
y dificultó sobre su contenido el Sr. Velez, cuyo acto fue aprobado pr. la
Academia…” (Junta general 9-IV-1745. ARANM, L-1, fol. 550).
303
Era ésta la fórmula adoptada para las consultas médico-prácticas,
habitualmente celebradas las noches de los lunes y que, desde los comienzos
de 1748, pasarían a celebrarse en las mañanas de los sábados; en el acta de la
junta general celebrada el 1-II-1748 queda anotado: “La Academia acordó, que
las consultas Medico-practicas, que hasta ahora se han tenido los Lunes en la
noche, se tengan de aquí en adelante los Sabados á las 11 de la mañana, y qe.
los Sres. Academicos consultantes, no puedan hablar mas que un quarto de hora
cada uno…” (ARANM, L-1, fol. 629).
“Los Sres. Velez y Hortega hablaron en consulta sobre una operación
chimica llamada Bezoardico Jovial, principalmte. sobre su color, y sabor, qe. les
señaló el Sr. Presidente, y despues qe. hablaron dhos Sres. Academicos, hablo y
resolvio el Sr. Presidente, cuyo Acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta
general de 26-IV-1745. ARANM, L-1, fol. 550).
304
305
“El Sr. Gilabert presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion
sobre la Composicion, y Movimiento de la Machina, Hydraulico-Pneumatica,
la qual fue leída en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Sevillano,
Carreras, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general
de 7-V-1745. ARANM, L-1, fol. 553).
306
“El Sr. Sevillano presentó á la Academia por escrito una Dissertacion
sobre las cautelas que deben observarse en la Administracion de los
Medicamentos, la qual fue leída en la Junta, y dificultaron sobre su contenido
los Sres. Martinez, Ros, Padros, Cervino, Monleon, y Ortega, cuyo acto fue
aprobado pr. la Acadª…” (Junta general de 21-V-1745. ARANM, L-1, fol. 556).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
121
figuradas’, que habría de servir como una de las dos sesiones
públicas que la Academia tendría ese año307; el 9 de diciembre
de éste 1746 José Hortega ocupó la tribuna para tratar de la sal
natural catártica de Añover de Tajo308; y unos días después, el 15
de diciembre, volverá a acomodarse en el puesto del orador para
presentar varias noticias sobre el metal similar de ‘Mr. de Reney
[sic ¿por Koening?]’309. Ese verano de 1746 la Academia le había
encomendado, junto a Tomás Monleón, la representación ante
el Consejo de Castilla, para impedir que una nueva agrupación
médico-quirúrgica, la Sociedad Médica de Nuestra Señora de
la Esperanza, gozara de privilegios que pudieran equipararla
a la Regia Academia Médico-Matritense310; situación que
fue solventada, al gusto de la Academia, apenas unos meses
después311.
307
“El Sr. Herrero hizo la prueba de su Dissertacion publica sobre el
origen de las Piedras figuradas, y dificulto sobre su contenido el Sr. Ortega, cuyo
acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 24-V-1746. ARANM,
L-1, fol. 582). La junta pública tuvo lugar el 6-VI-1746 (ARANM, L-1, fol. 583).
308
“El Sr. Ortega presentó á la Academª pr. escrito una Dissertacion
sobre la sal natural cathartica de la Villa de Añover de Tajo, la qual fue leida en
la Junta, y aprobada pr. la Academia…” (Junta general de 9-XII-1746. ARANM,
L-1, fol. 591).
“El Sr. Ortega presentó á la Academia pr. escrito varias noticias
sobre el Metal similar de Mr. Reney [sic], las quales fueron leidas en la Junta, y
aprobadas pr. la Academia…” (Junta general de 15-XII-1746. ARANM, L-1, fol.
593).
309
310
La primera noticia sobre la fundación de esta sociedad figura
en el acta de la junta de gobierno celebrada por la Academia el 14-V-1746
(ARANM, L-1, fol. 580); en la siguiente junta de gobierno, la reunida el 23VI-1746, el problema se vuelve más acuciante: “…varios Medicos, y Cirujanos
continuaban la fundacion de una Sociedad Medica en esta Corte (…) y qe. para
lograrlo avian ocurrido al Consejo con cierto Pedimento y las constituciones
para su Aprobacion, de que enterada la Academia acordó qe. desde luego debia
oponerse pr. todos los Medios á qe. no se hiciese la fundacion de la Sociedad
Medica qe. se intentaba, y qe. para embarazarlo se ocurriese al Consejo judicial,
y extrajudicialmte. hasta conseguirlo, y en su consequencia nombro el Sr.
Presidente pr. Diputados de la Academia á los Srs. Monleon y Ortega para qe.
en su Nombre practiquen quantas diligencias judiciales, y extrajudiciales sean
conducentes, y necessarias, assi en el Consejo, como con los Sres. Consejeros, y
qe. de quanto practiquen den cuenta al Sr. Presidente…” (ARANM, L-1, fols.
583-584).
311
En la junta general reunida el 15-X-1746: “Se dio quenta á la Acadª.
de un testimonio fecha 25 de octre. [sic por septiembre] deste año, firmado de
Dn. Miguel Fernz. Munilla Secretario de Camara del Consejo de Castilla pr. el
qual consta, qe. pr. Decretos del Consejo de 12 de Sepre. y de 16 de dicho mes se
acordó qe. no ha lugar á la Aprobacion de las ordenanzas qe. solicita la Sociedad
122
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
En el verano de 1746, el 9 de julio, fallece Felipe V;
pocos días después, el 10 de agosto, subirá al trono de España
Fernando VI; la Academia no parece darse por enterada de estos
acontecimientos, al menos no queda testimonio de ellos en sus
actas312; sólo se anotó el cambio de su Presidente perpetuo, José
Suñol, quien vino a sustituir a José Cerví en la dirección del
Protomedicato313.
En enero de 1747 José Hortega es elegido por la Academia
para que se ocupe de dirigir la sección de Farmacia314; durante
este año las actas de la Corporación no llevan su firma de manera
habitual, sino la de quien actuará como su sustituto, Antonio
María Herrero315. Aun cuando parezcan producirse algunas
medica de Nra. Sra. de la Esperanza, cuyo testimonio queda entre los Papeles
de la Acadª. la qual quedó enterada de la referida Novedad...” (ARANM, L-1,
fol. 590). Sin embargo esta sociedad debió de seguir activa, o al menos una
homónima; la Real Academia Nacional de Farmacia conserva, en su archivo,
un programa de actos de la Sociedad Médica de la Real Hermandad de María
Santísima de la Esperanza de Madrid, correspondiente a 1760 (ARANF, leg.
9,13).
No hemos encontrado en ellas alusión alguna al encargo que, de
acuerdo con la “Noticia histórica del orígen, progresos y estado actual de la Real
Academia Médica de Madrid”, ésta le encargó componer a José Hortega: “…
Oracion que de acuerdo del Cuerpo dispuso su Secretario perpetuo a ejemplo
de otras Academias, que mas dichosas, pudieron costear con sus donaciones
la impresión de las suyas…” Memorias de la Real Academia de Medicina, 1: VII.
Madrid, 1797.
312
313
El cambio en la Presidencia de la Academia se anota en el acta de
la junta general reunida el 22-VIII-1746: “Aviendo nombrado S.M. al Sr. Dr.
Dn. Jph. Suñol pr. su Primer Medico, y de la Reyna nra. Señora, y assimismo
Presidente del Rl. Protomedicato, y jubilado en estos empleos el Sr. Dr. Dn. Jph.
Cervi, recayó pr. el mismo hecho la Presidencia Perpetua de la Academia en el
Sr. Dr. Suñol, en virtud de sus Estatutos, y Ordenes de S.M. y en consequencia
nombró el Sr. Presidente pr. Diputados para que le cumplimentasen con estos
motivos, y assimismo para qe. le reconociesen en nombre de la Acadª. pr. tal
Presidente Perpetuo á los Sres. Isasmendi, y Palomero, y el Sr. Palomero, qe.
estaba presente dio cuenta á la Acadª. de que ambos Sres. Diputados cumplieron
con este encargo, y leyo en la Junta la oracion de enhorabuena qe. le hicieron…”
(ARANM, L-1, fol. 586).
314
En el acta de la junta particular de 31-XII-1746 se anota la propuesta:
“Para Director Pharmaceutico á los Sres. Joseph de Ortega, y Dn. Joseph
Salvador.” (ARANM, L-1, fol. 594); su elección tuvo lugar en la junta general
celebrada el 1-I-1747: “Por Director Pharmaceutico al Sr. Dn. Joseph Ortega
actual Secretario.” (ARANM, L-1, fols. 585-598).
En el acta de la junta general celebrada el 14-I-1747 se anota: “El
S . Presidente propuso á la Academia que tenia por conbeniente que hubiese
en ella un Segundo Secretario que supliese las ausencias, y enfermedades del
315
r
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
123
ausencias316, la actuación de José Hortega en la Academia, este
año, apenas difiere de la mantenida durante cursos anteriores:
en la junta general del 23 de marzo de éste 1747 interviene en
la discusión habida tras la disertación presentada por Joaquín
Cervino sobre el abuso de algunos medicamentos tópicos317; y
el 26 de octubre fue Hortega quien pronunció una conferencia
sobre un método para aumentar la solidez de las maderas318.
Finalizado su mandato como director farmacéutico
vuelve a firmar las actas de las juntas de la Academia, desde
enero de 1748; y, como era norma, participa activamente en sus
conferencias: el 18 de enero activó el diálogo tras la disertación
de Antonio María Herrero sobre la electricidad de los cuerpos319;
Secretario perpetuo que lo es el Sr. Ortega actual Director, y conbenidos los Sres.
Academicos con la proposicion del Sr. Presidente, propuso este para segundo
Secretario á los Sres. Pueyo y Herrero, y habiendose votado por votos secretos
fue electo por pluralidad por segundo Secretario el Sr. Herrero, el qual exercerá
este empleo por todo el tiempo que fuere la voluntad de la Academia...”
(ARANM, L-1, fols. 599-600).
316
No es fácil seguir su asistencia a las sesiones académicas, en
ocasiones se anota la presencia de ‘los Sres. Directores’, en otras la del ‘Director
Pharmaceutico’ y en las menos se le menciona por su apellido, Ortega / Hortega;
probablemente se ausentó en las correspondientes a tres periodos: los días 6-II,
9-II y 16-II-1747; 18-V y 25-V-1747 y 23-XI, 27-XI y 14-XII-1747. De manera
excepcional, la firma de José Hortega figura en el acta de la junta general
celebrada el 16-XI-1747, aun cuando a ella también asistió Antonio María
Herrero quien, a la sazón, realizaba las tareas de Secretario de la Academia
(ARANM, L-1, fol. 618).
317
“El S. D. Joaquin Cervino presentó á la Academia por escrito una
Dissertacion sobre el Abuso de algunos Medicamentos topicos comunmente
recibidos en el uso Medico, la qual fue leida en la Junta y dificultaron sobre su
contenido los SS. Ortega, Lope, Lopez, Martinez, Gilabert, Pueyo, y Herrero;
cuyo Acto fue aprobado por la Academia…” (Junta general de 23-III-1747.
ARANM, L-1, fol. 608).
“El Sr. Ortega actual Director Pharmaceutico presentó á la Academia
por escrito la segunda Dissertacion sobre la Historia natural de España, la qual
intituló, Methodo facil, y demostrado de aumentar la solidez, y la fuerza de las
Maderas, y habiendo sido leida en la Junta, fue aprobada por la Academia…”
(Junta general de 26-X-1747. ARANM, L-1, fol. 615).
318
319
“El Sr. Herrero presentó á la Academia por escrito una Dissertacion
sobre la electricidad de los Cuerpos segunda parte, la qual fue leida en la
Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Lope, y Ortega, cuyo Acto fué
aprobado por la Academia…” (Junta general de 18-I-1748. ARANM, L-1, fol.
627). La primera parte fue defendida en la junta general celebrada el 9-XI-1747:
“El Sr. Herrero presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre la
electricidad de los cuerpos 1ª parte, la qual fue leida en la Junta, y aprobada por
la Academia…” (ARANM, L-1, fols. 616-617).
124
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
el 30 de marzo presentó a la Academia el Elogio histórico de Joseph
Cervi320, primer Presidente perpetuo de la Corporación, ésta
acordó su impresión inmediata321. Este año de 1748 le cupo, de
nuevo, el honor de impartir una de las dos conferencias públicas
anuales organizadas por la Corporación, optó por tratar sobre
una sal mineral amarga descubierta en la jurisdicción de la ciudad
de Cuenca; realizó la correspondiente prueba en la junta general
celebrada el 28 de septiembre322, y la expuso públicamente el
sábado 5 de octubre323. Aún ocupó por dos veces más, este año
de 1748, la tribuna de la Academia: el 24 de octubre presentó una
descripción de la ‘Becabunga germanorum, o Veronica aquatica
major’324 y, pocos días después, el 31 de este mismo mes, leyó el
examen de las aguas de San Fernando que realizó de orden de
la Corte325.
“El Sr. Ortega presentó á la Acadª. por escrito el Elogio Historico
del S . D . Dn. Joseph Cervi, qe. fue Primer Medico de S.M. y Primer Presidente
Perpetuo de la Academia, el qual fue leido en la Junta y aprobado pr. la Acadª.
nemine discrepante, la qual acordo que se imprimese el referido Elogio tomando
antes el beneplacito del Sr. Dr. Joseph Suñol actual Presidente perpetuo de la
Acadª.” (Junta general de 30-III-1748. ARANM, L-1, fol. 636). Giuseppe Cervi
había fallecido, en Madrid, el 25-I-1748.
320
r
r
321
José Hortega. Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi, leìdo a la
Real Academia Medica Matritense en 30 de marzo de mil setecientos quarenta y ocho,
por su secretario don Joseph de Ortega. En Madrid: en la Imprenta del Mercurio,
1748. 47 p., [1] h.
“El Sr. Ortega hizo la prueba de su Dissertacion publica la qual
intitulo sobre una sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion
de la Ciudad de Cuenca, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª.”
(Junta general de 28-IX-1748. ARANM, L-1, fol. 640).
322
323
“El Sr. Ortega, leyo publicamte. su Dissertacion sobre la sal mineral
amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca, y
sobre su contenido dificultaron los Sres. Herrero, y Borunda, de cuyo acto se
mostro muy satisfecha la Academia y el numeroso concurso de Profesores, y
gente de distinn. qe. asistió á esta Junta publica.” (Junta pública de 5-X-1748.
ARANM, L-1, fol. 640).
324
“El Sr. Hortega presentó á la Acadª. pr. escrito la Descripción historica
de la Becabunga Germanorum, ó Veronica aquatica major, folio subrotundo
IRH 145 la qe. fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª… ” (Junta general
de 24-X-1748. ARANM, L-1, fol. 641). La referencia alude a “Veronica aquatica,
major, folio subrotundo Mor. Hist. Oxon. Part. 2. 323.” (Joseph Pitton de
Tournefort. Institutiones rei herbariae. Editio tertia [...] Tomus primus. Parisiis: e
Typographia Regia, 1719, pág. 145).
“El Sr. Hortega leyó á la Academia el examen de las Aguas de S.
Fernando que hizo de orden de la Corte; contra el qual arguyó el Sr. Lope, y
fue aprobado por la Academia...” (Junta general de 31-X-1748. ARANM, L-1,
fol. 642).
325
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
125
Su participación en los actos celebrados en 1749 es parca;
sólo una intervención, en la sesión del 20 de marzo, para actuar
en el coloquio posterior a una disertación de Cristóbal Vélez
sobre la naturaleza del coral326. No asiste a las reuniones tenidas
en la segunda mitad de este año, quizás se encontrara ausente de
Madrid327.
El año de 1750 acude, desde los inicios, a las sesiones
de la Academia; el 26 de febrero participa activamente en el
coloquio posterior a la comunicación de Juan Minuart sobre su
descripción botanica de la ‘Petasites minor folio subrotundo’328,
que habría de hacer popular Pehr Löfling329; en la junta celebrada
326
“El Sr. Velez presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
la Naturaleza del Coral: á que Reyno pertenece, y si en los distintos colores
hay diversidad de virtudes, la qual fue leida en la Junta y dificultaron sobre su
contenido los Sres. Herrero, Martinez, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la
Acadª...” (Junta general de 20-III-1749. ARANM, L-1, fol. 660).
327
Su firma, como Secretario, figura en la junta general celebrada el 22V-1749 (ARANM, L-1, fol. 665), pero falta en la posterior, reunida el 21-IX-1749,
en la que es sustituido en sus funciones por Antonio María Herrero (ARANM,
L-1, fol. 665); su rúbrica -y la anotación de su asistencia- no volverá a estar
presente hasta la junta particular celebrada el 7-I-1750 (ARANM, L-1, fol. 669).
“El Sr. Minuart presento á la Acadª. pr. escrito la Descripcion
Botanica de la Petasites minor folio subrotundo, la qual fue leida en la Acadª. y
dificultaron sobre su contenido los Sres. Velez, y Ortega, cuyo acto fue aprobado
pr. la Acadª...” (Junta general de 26-II-1750. ARANM, L-1, fol. 680).
328
329
Sobre esta nueva planta, probablemente Petasites pyrenaica (L.)
G. López (Ginés López González. “De Linnaei plantis hispanicis novitates
nonnullae”. Anales del Jardín Botánico de Madrid, 42(2): 319-324. Madrid,
1986), escribió Pehr Löfling a Carl Linné: “Petasites minor, folio subrotundo
Minuartii, que él describió en la Academia médica. Antes de ahora la vi en
flor en el jardin [de la Real Botica]; es tan chica que apenas llega á la altura
de un dedo. Las hojas son arriñonadas, muy tenues, lisas y verdes por ambos
lados. La flor es del color de la del Pentasites vulgar, y consta de tantas piezas
quantas son las que forman las series squamarum calycis. Corollulae disci copiosae
hermaphroditae; radii feminea ligulatae oblongae integrae: thyrsus pauciflorus. ¿Será
quizá alguna de las especies que Vmd. cita, hablando de los Petasites Fl. Lapp.
303. S.? La descripcion que Minuart me comunicó es buena...” (Carta de Pehr
Löfling a Carl Linné. Madrid, 8-I-1753 [L-1515]. LS, signatura: ms. LS, IX: 360362 -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46 [4(12): 338-339. 1801; 5(13): 8290. 1802; la cita transcrita en págs. 87-88]-). Joseph Quer (fide Casimiro Gómez
Ortega. Continuacion de la Flora Española, ó Historia de las plantas de España, que
escribia Don Joseph Quer… Ordenada, suplida y publicada de órden del Rey nuestro
señor… por el Dr. don Casimiro Gomez de Ortega… Tomo VI. Madrid: Joachîn
Ibarra, 1784) aporta alguna información más sobre la planta: “Esta pequeña
especie se cria en Cataluña en las cercanías del Monasterio de S. Gerónimo.
La raiz es perenne. Florece por Febrero y Marzo. En el año de 1738 estando D
126
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
el 5 de marzo interpela a Antonio María Herrero tras ocuparse
éste de los fósforos naturales y artificiales330; volverá a intervenir
públicamente, el 12 de marzo, en el activo coloquio posterior a
la disertación de Manuel Pueyo, sobre la necesidad de sangrar
en las calenturas agudas331; en la sesión del 26 de noviembre fue
José Hortega el encargado de pronunciar la conferencia, en ella,
continuando la serie de sus memorias sobre la Historia Natural
de España, se ocupó del `lápiz plomo’ de Marbella332.
Su participación en las sesiones académicas de 1751
fue escasa, hasta donde los datos disponibles nos permiten
saber; el 11 de febrero participó en el coloquio mantenido tras
la presentación, realizada por Juan Minuart, sobre las Cacalias
y Petasítides333; unos meses después, el 13 de mayo, tomó la
palabra en la discusión posterior a la disertación pronunciada
por Cristóbal Vélez sobre las variedades, estructura y usos de
la fructificación334. Desde la junta general celebrada el 29 de
Juan Minuart hospedado en mi casa la hizo venir de Cataluña para el Señor
Duran Boticario mayor de S.M. y se plantó en el Jardin de la Real Botica, y ha
prevalecido como en su patria propia, de tal manera, que se ha propagado por
todas partes; esto es en los Reales Sitios, y Jardin de los Boticarios de Madrid, y
en otros de Castilla, Andalucía,Valencia, &c…” (Op. cit., pág. 86).
330
“El Sr. Herrero presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
los Phosphoros Naturales y Artificiales la ql. fue leida en la Junta y dificultaron
sobre su contenido los Sres. Llorente, Padros, Pueyo, Oconell, y Ortega, cuyo
acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta general de 5-III-1750. ARANM, L-1,
fol. 681).
331
“El Sr. Pueyo presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
la necesidad de sangrar en las Calenturas agudas segda. parte, la qual fue leida
en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Creagh, Padros, Herrero,
Gilabert, Borunda, Sevillano, Lopez, Lope, Oconell, Carreras, y Ortega, cuyo
acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta general de 12-III-1750. ARANM, L-1,
fol. 683).
332
“El Sr. Ortega presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
el Lapiz plomo de Marbella, en continuacion de las Memoria [sic] sobre la
Historia natural de España 4ª parte, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr.
la Acadª...” (Junta general de 26-XI-1750. ARANM, L-1, fol. 693).
“El Sr. Minuar presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
las Plantas llamadas Cacalias, y la diferencia entre ellas, y las Petasitides, la ql.
fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Velez, y Ortega,
cuyo acto fue aprobada pr. la Acadª...” (Junta general de 11-II-1751. ARANM,
L-1, fol. 701).
333
“El Sr. Dn. Christoval Velez hizo la Demostracion Botanica [sobre] la
Fructificación, de su variedad, estructura, y uso de las partes, que la componen
contra la qual dificultó el Sr. Ortega cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª...”
(Junta geenral de 13-V-1751. ARANM, L-1, fol. 706).
334
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
127
mayo de 1751 dejará de asistir a las reuniones celebradas por la
Academia; no nos queda constancia de cuándo se reincorporó
a ella, sin duda con posterioridad a la celebrada el 18 de marzo
de 1752, la última de la que tenemos testimonio por sus actas335.
Había iniciado su viaje por Europa, una nueva Academia se
estaba forjando en su mente.
La firma de José Hortega es sustituida por la de Antonio María
Herrero desde el acta de la junta particular celebrada el 13-V-1751, pero a
ella asiste, e interpela a Cristóbal Vélez que hizo de ponente en la reunión (cf.
supra), el acta de la junta particular celebrada el 29-V-1751 está sancionada por
Herrero, pero asiste a ella el ‘Secretario primero’ (ARANM, L-1, fol. 707). No
quedará testimonio posterior de su participación; una nota añadida al fin del
primer volumen de actas señala: “Se han extraviado todas las actas de las Juntas
celebradas desde el 16 [sic por 18] de Marzo de 1752, hasta el 5 de Octubre de
1791, qe. se hallaban insertas en el Libº. 2 de Acuerdos de esta Rl. Acadª. Medica
Matritense.” (ARANM, L-1, fol. 720).
335
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
129
Al servicio del Rey
El cortesano
Tras desposarse con la viuda de Luis Llorente, José Hortega
inicia una irresistible ascención en la Corte: con anterioridad
al verano de 1733 ingresó como examinador del Real Tribunal
del Protomedicato336; en razón de este cargo, en la primavera
de 1747, giró visita de inspección, junto a los protomédicos José
Suñol, Diego Gaviria y Francisco Logui y los examinadores José
Manzano de Carvajal y Juan Bayo, a las instalaciones de la Real
Botica, entonces regida por el boticario mayor Bartolomé Pérez
Durán337.
En octubre de 1738, José Hortega ocupó plaza de Boticario
mayor de los Reales Ejércitos338. El acceso al cargo no fue sencillo;
tras la muerte de Bernardo Abolín, acaecida el 28 de enero de
Así lo reconoce el propio José Hortega al historiar los inicios de
la ‘Tertulia Literaria’: “La Tertulia Literaria Medico-Chimico-Phisica tuvo
principio en doze de jullio de 1733, en casa de dn Joseph Hortega, Profesor
Pharmazeutico, Examinador del Rl. Protomedicato, y socio de la rexia Soziedad
de las Ciencias de Sevilla...” [“Historia de la Tertulia Literaria Medico-ChymicoPhysica” ARANM, L-1, fols. 1-12; la cita en fol. 1].
336
337
La “Copia del papel de aviso escripto al rl. Protomicato en 10 de
Abril de 1747” queda firmada, en el Buen Retiro, por Juan Pizarro de Aragón,
Sumiller de Corps. Unida a ella figura la “Respuesta del Rl. Protomedicato a este
aviso, incluyendo la certificación que despues se insertará de los tres voticarios
examinantes”, fechada en Madrid, a 16-IV-1747, por José Manzano de Carvajal,
José Hortega y Juan Bayo. La visita tuvo lugar entre el 13 y el 15 de abril; de
ella se extendió certificación firmada por “D. Joseph Moreno Carvajal voticario
de S.M. y examinador del Real Protomedicato y D. Jph. Ortega voticario de
S.M. y mayor de sus reales exercitos, examinador del Real Protomedicato de la
Real Academia de Medicina” (AGP, Administración, leg. 429). Esta visita a la
Real Botica fue estudiada por María Soledad Campos Díez. El Real Tribunal del
Protomedicato castellano (siglos XIV-XIX). Cuenca: Ediciones de la Universidad
de Castilla-La Mancha, 1999 -cf. pág. 152-).
338
El nombramiento de José Hortega como Boticario mayor de los
Ejércitos, fechado en San Lorenzo de El Escorial, el 22-X-1738, por Casimiro
Ustariz, se conserva en el Archivo General de Simancas [AGS], Guerra
Moderna, leg. 2411 (fide Rafael Roldan Guerrero. La farmacia militar española en
el siglo XVIII. Madrid: Imprenta de A. Marzo, 1925 –cf. pág. 40-).
130
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1738, el puesto se convocó a concurso público, al que accedieron
José Hortega y Gabriel Ribals, quien había ejercido como primer
ayudante de Abolín y tenía larga carrera militar339. Pese a lo
esperado, el elegido fue José Hortega; es probable que la decisión
de José Cerví influyera en su nombramiento340. En los comienzos
de febrero de 1739 comunicará la nueva al secretario del Real
Colegio de Boticarios:
“Aviendose dignado la Piedad del Rey nro. Señor
(...) honrarme con los Honores de Boticario de su Real
Persona, ofrezco esta nueva Honra á la disposición de nro.
Real Colegio de Boticarios, de quien tengo el Honor de
ser el menor subdito...”341
Como boticario de los Reales Ejércitos, mediante real
orden del 7 de abril de 1740342, fue nombrado boticario mayor
de la farmacia del hospital de campaña, formado en Barcelona,
para una expedición militar a Mahón, que no llegó a realizarse343,
339
El proceso ha sido estudiado por Rafael Roldan Guerrero (Op.
cit. nota 345, cf. págs. 30-40. 1925), utilizando la documentación depositada en
AGS, Guerra Moderna, leg. 2411.
340
No en vano escribiría en su Elogio histórico...: “… mostremos
públicamente nuestra gratitud todos quantos Academicos hemos tenido la
dicha de lograr por su mano tantos premios, y honores de la benignidad del
Rey...” (José Hortega. Op. cit. nota 328, cf. págs. 29-30. 1748).
“Suplico á V.S. me favorezca en darle quenta (...) al todo el Rl.
Colegio, asegurandoles, que vivira perpetuamente en mi agradecimiento las
singulares, y copiosas Honras con que siempre se han dignado distinguirme...”
Carta de José Hortega a Juan Moreno Bote. Madrid, 5-II-1739 (ARANF, leg.
4,9,2).
341
Con un sueldo de 100 escudos al mes; como ayudantes contó con
Andrés Boo y Juan Minuart (AGS, Guerra Moderna, leg. 2460 –fide Rafael
Roldán Guerrero. Op. cit. nota 338, pág. 41. 1925).
342
De inmediato, el 8 de abril, comunica la necesidad de emprender
el viaje a la Real Academia Médca Matritense: “Asimismo se acordo que el Sr.
Ldo. Dn. Juan de Dios Lopez sirbiese el Empleo de secretario en la ausencia que
está para hacer á la expedicion de Mallorca de orden del rey Dn. Joseph Hortega
Ssº. Pepº. de la Acadª...” (Junta general de 8-IV-1740. ARANM, L-1, fol. 384).
Ante el Real Colegio de Boticarios lo anunicaría un mes después: “… respecto
del precisso empleo que es el del primer diputado, y este estarle ocupando Dn.
Joseph de Hortega, con el motibo de precissarle el salir de la Corte, en cumpto.
de su empleo de Boticario mr. de los Rs. exercitos, sé acordó en dha Junta, que el
fiscal, que actualmente lo és del Colegio, sirva intterinamte las ausenzias de Dn.
Joseph Hortega…” (Junta particular de 8-V-1740. ARANF, L-7, fols. 15v-16r).
Debió viajar poco después del 16-V-1740, tras otorgar poder general a favor de
Vicente Carreras (AHPNM, protocolo 16.639).
343
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
131
mediante real orden de 17-XII-1740 quedó relevado del servicio
y pasó de nuevo a Madrid344.
Desde los comienzos de la década de 1750, quizás con
anterioridad, sirvió con fidelidad a José de Carvajal y Lancáster
(1698-1754), Secretario de Estado entre 1746 y 1754; actuó de
intermediario en la contratación de un médico para el Real Sitio
de San Fernando, eleccion que recayó en Miguel Barnades y
Mainader (1708-1771)345:
Desde luego, viajó a Barcelona; según él mismo comenta en su
correspondencia con José de Carvajal, estaba en la Ciudad Condal el 23-VI1740, fecha de la muerte de Jaume Salvador Pedrol (Carta de José Hortega
a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI-1751. AGS, Estado, leg. 7896;
transcrita por Juan Riera. Medicina y ciencia en la españa ilustrada. 1, Epistolario
y documentos. [Acta Histórico-Médica Vallisoletana. Monografías, 10]. Valladolid:
Universidad de Valladolid, 1981 –cf. págs. 92-94-); el 27-I-1741 ya se encontraba
en Madrid; ese día firma, en su calidad de Secretario perpetuo, el acta de la
junta celebrada por la Academia Médico-Matritense (ARANM, L-1, fol. 406).
Rafael Roldán Guerrero (Op. cit. nota 338, pág. 42-43. 1925) recoge un “Estado
de los empleados para el Hospital de Campaña del Exército de prevencion y
sueldos que les corresponden”, aprobado en El Pardo, a 31-I-1741 (AGS, Guerra
Moderna, leg. 2460), en el que figura José Hortega como ‘Boticario mayor (...)
lo es en propiedad’, con un sueldo mensual de 200 escudos, que este autor
relaciona con la expedición militar que, al mando de José Ignacio Carrillo de
Albornoz y Montiel (1671-1777), duque de Montemar, partió con destino a Italia
en diciembre de 1741; en realidad, el documento parece referirse a la plantilla
del personal disponible, no al destinado a esta campaña militar; en cualquier
caso, los datos sobre la actividad de José Hortega en la Real Academia Médica
Matritense parecen desmentir su participación en la expedición del duque de
Montemar. Sobre la biografía militar del conde de Montemar cf. Rafael Cerro
Nargánez. “José Carrillo de Albornoz y Montiel, conde de Montemar, un
militar andaluz entre Cataluña e Italia (1694-1725)”. Pedralbes, 18(2): 531-538.
Barcelona, 1998; Miguel Angel Castán y Alegre “Figura señera de la Caballería
española. Don Francisco Carrillo de Albornoz y Montiel. Primer Duque de
Montemar (1671-1747)”. Hidalguía, 314: 9-28. Madrid, 2006.
344
La construcción de este Real Sitio se retrotrae a tiempos de Felipe
V quien, mediante real decreto de 29 de junio de 1746, compró el lugar
de Torrejón de la Ribera para el establecimiento de una fábrica de paños
superfinos. Fernando VI tomó posesión del lugar el 30 de agosto de éste 1746;
nombró como gobernador a Teodoro Ventura de Argumosa, caballero de la
Orden de Santiago y Caballerizo de S.M., conocedor de las modernas técnicas
de producción textil de los países europeos. Sobre la historia temprana de este
Real Sitio cf. Aurora María Rabanal Yus. “Noticias sobre el Real Sitio de San
Fernando y sus Reales Fábricas”. Anales del Instituto de Estudios Madrileños, 10:
257-294. Madrid, 1974; Ibid. El Real Sitio de San Fernando: historia, arquitectura
y urbanismo. Madrid: Ayuntamiento de San Fernando de Henares, 1983; Juan
Antonio Sánchez Belén, Juan Carlos Saavedra Zapater. “Desarrollo de una
nueva población del siglo XVIII: el Real Sitio de San Fernando de Henares”. En:
345
132
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
“En fin la respuesta del Médico de Urgel Don
Miguel Barnades es muy larga; pero se reduce a una
pintura melancólica del Real Sitio de San Fernando, sin
duda por las noticias, y rumores populares que hasta
allí ha estendido la ignorancia, o la malicia, y esto le
hace mirar la proposición con temor. Lo segundo dice
que tiene muger y dos hijos, que se halla falto de medios
para levantar su casa, y traer su familia y sus muebles
a San Fernando; y concluye dexándolo a mi disposicion,
y dictamen, de que infiero con mucha naturalidad, que
como es hábil, quiere que le insten de nuevo, y que se dé
alguna gratificacion para emprender su viage, y conducir
su familia, y su casa, sobre lo que V.E. resolverá lo que
sea de su mayor agrado; y que yo bien conozco que a
lo mas tarde es preciso principiar las observaciones que
V.E. desea desde el mes proximo; y para consuelo de V.E.
le quiero dar parte de lo que tengo observado en San
Fernando aunque esta carta se dilate un poco…”346
Y aprovecha el escrito para dar su opinión sobre el estado
de salud de este Real Sitio, en términos claramente hipocráticos,
evidenciando la directa relación entre la correcta ubicación del
Juan Rafael Vázquez Lesmes, Siro Luis Villas Tinoco (coord.) Actas VI Congreso
Histórico sobre Nuevas Poblaciones: La Carlota, Fuente Palmera, San Sebastián de los
Ballesteros: 387-402. Córdoba: Junta de Andalucía, 1994.
“El mismo dia que tube el honor de recibir la Orden de V.E. para que
avisase al Médico de Urgel, si queria venir a ser Médico de San Fernando, puse
en execucion el precepto de V.E. y le escribí quantas circunsatncias me avia
prevenido V.E. pero puse especial cuidado en dexarle toda su livertad para
admitir, o no admitir cuya conducta no puede menos de ser de la aprobacion
de V.E. pues de lo contrario podrían seguirse con el tiempo aquellas quexillas,
y chismecillos interesados que dominan a la mayor parte de nuestros médicos.
No ha podido llegar la respuesta hasta oy, y como la ciudad de Urgel no está en
la carrera de Barcelona, tarda tres semanas la respuesta de una carta…” Carta
de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI-1751 (AGS, Estado,
leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 92-94. 1981).
“Está aborrecido el Médico [de San Fernando], y aunque esto
tambien me ha sido más sensible que el Médico de Urgel no aya admitido
generosamente la proposicion porque con mis tales quales auxilios, y su
habilidad huviera desempeñado honrosamente el encargo, y viendo la
necesidad, y la urgencia de embiar Médico, no encuentro a quién proponer
a V.E. con las prendas y circunsatancais que V.E. desea; pero en este estrecho
pudiera servir otro que no fuese tan aborrecido como el que oy existe, interin
que se hallava el que será menester…” Carta de José Hortega a José Carvajal
y Lancáster. Madrid, 11-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan
Riera. Op. cit. nota 344, págs. 92-94. 1981).
346
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
133
núcleo poblacional, las ventajosas condiciones de sus aires y, por
ende, las características saludables de sus habitantes:
“Un dia de la semana pasada pasé por la vez
primera a ver el Real Sitio de San Fernando, y en el poco
tienpo [sic] que estube, porque fui, y vine en un día,
observé; lo primero, la amenidad natural del sitio, y la
hermosura de su vega. Lo segundo la situación del lugar,
su vella planta, y la construccion de sus casas, y me dolí
mucho de que no estubiesen concluidas. Lo tercero que
está bien batido de los vientos, y particularmente de los
orientales, y nortes, a buena distancia del Río.
Observé que todos sus habitantes estaban de
vello color y robustos a excepcion de los fabricantes de
papel, y cartones, y de los vecinos del antiguo lugar. Me
informaron que avían pasado un invierno muy sano, y
que varias gentes enfermas que avian ido a convalecer
allí, se avían curado perfectamente. Al fin no sosegué
en hacer observaciones y preguntas, que son largas de
referir, pero todas se las diré a V.E. a voca a la venida
de Aranjuez; pero añado por último que este Real Sitio
solo puede estar sugeto a las mismas enfermedades
que los lugares situados en riveras, que en España son
muchisimos, y que las más frecuentes serán tercianas, a
que tambien son propensos los sitios cuya piedra es de
yeso, como sucede en San Fernando (…)
Aconsejé a los principales del sitio de San
Fernando que más del zumo de limón en la comida, y por
refresco, que es muy bueno para precaver las tercianas, y
algunos se proveyeron de limones en el mismo día…”347
La intervención de José Hortega -y el monto económico
ofrecido por Carvajal348- debió convencer al ‘médico de Urgel’,
Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs.
92-94. 1981).
347
348
“Pues la benignidad de V.E. es tan generosa, y afable, volveré de
nuevo a escrivir al Médico de Urgel, haciéndole presente el errado concepto
en que está acerca del Real Sitio de San Fernando, y ofreciéndole assimismo
la gratificación de los cinquenta doblones para su viage. Mueve a esto que
además de lo que tengo escrito a V.E. deste Médico, se aumentan cada día las
nuevas noticias de su abilidad; pues me han dicho estos días que el Cabildo de
Urgel es muy rico, grave, y circunspecto; que se precia siempre de tener buenos
médicos, y que es prueba de su suficiencia el ser Médico desta comunidad en
la edad de treinta y seis años. Quiera Dios que ve la buena intención, que sea
134
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
quien decidió su traslado a San Fernando de Henares; la
correspondencia se efectúa a través de José de Rueda y Guzmán
(m. 1764), Oficial de la Secretaría de Estado349.
No era ésta la primera vez que José Hortega se ocupaba
del nuevo Real Sitio de San Fernando; algo más de un año atrás,
el 31 de octubre de 1749, había leído ante la Real Academia
Médica Matritense, un ‘examen de las Aguas de S. Fernando que
hizo de orden de la Corte’350. Tampoco sería la última; en carta
a José Carvajal, fechada el 15 de julio de 1751, le informa de los
requerimientos técnicos para realizar nuevos informes sobre las
condiciones climáticas de la localidad:
“Para las observaciones que V.E. desea son
menester Barómetro y Thermómetro fieles. De los
primeros tengo yo bastante; pero de los segundos no
tengo mas que uno. Podrá V.E. encargar al embaxador que
tenemos en París, que remita seis thermómetros de Mr. de
Reaumeur [sic], y que se valga para que sean verdaderos
de Mr. el Abate Nollet, autor de las Lecciones de Physica
experimental351, sugeto bien conocido en aquella corte, mi
amigo y mi correspondiente, y Maestro que fue de Don
Ignacio Luzán352, estos instrumentos son pequeños, de
muy poca costa, y pueden venir por el correo ordinario.
como suyo el acierto…” Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster.
Madrid, 15-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit.
nota 344, págs. 94-95. 1981).
349
“La carta irá por mano de Don Joseph de Rueda, para que encargue
en Barcelona, que se dirija con seguridad a Urgel. Entre tanto que viene la
respuesta continuaré en hacer mis visitas a San Fernando, y me alegraré
hallar allí al Governador…” Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster.
Madrid, 15-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit.
nota 344, págs. 94-95. 1981).
“El Sr. Hortega leyó á la Academia el examen de las Aguas de S.
Fernando que hizo de orden de la Corte; contra el qual arguyó el Sr. Lope, y el
fue aprobado por la Academia...” (Junta general de 31-X-1748. ARANM, L-1,
fol. 642).
350
351
Jean-Antoine Nollet. Leçons de physique expérimentale par M. l’Abbé
Nollet.. tome premier [-sixième]. A Paris: chez les frères Guérin, 1743-1748. 6 vols.;
la obra estuvo en la biblioteca de José Hortega.
352
Ignacio de Luzán Claramunt de Suelves y Gurrea (1702-1754),
Consejero de Hacienda, escritor y diplomático; fue Secretario de la embajada
de España en Francia entre 1747 y 1750, su experiencia parisina quedó recogida
en Memorias literarias de París, actual estado y methodo de sus estudios... por Ignacio
de Luzán. En Madrid: en la imprenta de don Gabriel Ramírez, 1751.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
135
Años pasados se trageron para el Rey Nuestro Señor y
por dirección mía otros seis thermómetros…”353
Su proximidad a la Corte, a partir de la década de 1750, es
evidente; el 17 de mayo de 1757, se dirige al Secretario de Estado
de Marina e Indias, Julián de Arriaga354, por indicación de Juan
Francisco de Gaona y Portocarrero, el II conde del Valparaíso355,
para hacerle saber “los defectos que he observado en las
porciones de Quina que han venido para S.M. de la América y
están depositadas en las Bóvedas del nuevo Real Palacio, y que
al mismo tiempo exprese a V.E. las circunstancias y cualidades qe
ha de tener la Quina…”356
El informe, aparte de por su contenido intrínseco, quizás
uno de los primeros documentos donde la adulteración de la quina
se contempla como un problema de Estado, tiene importancia
Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs.
94-95. 1981).
353
354
Sobre Julián de Arriaga y Ribera (ca. 1708-1776), Gobernador y
Presidente de la Casa de la Contratación, cf. María Boudot Monroy. “Orígenes
familiares y carrera profesional de Julián de Arriaga, Secretario de Estado de
Marina e Indias (1700-1776)”. Espacio, Tiempo y Forma [serie IV. Historia Moderna],
17: 163-185. Madrid, 2004.
De Juan Francisco de Gaona y Portocarrero (1696-1760), miembro
del Consejo Real y Supremo de las Indias y Secretario de Estado y del Despacho
de Hacienda, y de su vinculación al grupo político liderado por José de
Carvajal, se ha ocupado Francisco Asensio Rubio. “El conde de Valdeparaíso
y su tiempo”. Espacio, Tiempo y Forma [serie IV. Historia Moderna], 8: 155-173.
Madrid, 1995.
355
El informe se conserva en el Archivo General de Indias [AGI],
Indiferente, 1552, fols. 471-473; ha sido trascrito por Francisco Murillo Campos,
Diego Bermúdez Camacho “Informe de don José Hortega, de la Real Botica
de S. M. [sic], sobre la Quina que vino de América remitida por los Virreyes
Pizarro y Mauro”. Anales de la Real Academia de Farmacia, 19(3): 257-258. Madrid,
1953) y estudiado por Matthew James Crawford. Empire’s Experts: The Politics
of Knowledge in Spain’s Royal Monopoly of Quina (1751-1808). [A dissertation
submitted in partial satisfaction of the requirements for the degree Doctor of Philosophy
in History (Science Studies)]. San Diego: University of California, 2009 (cf. págs.
24, 70-72), quien señala el documento como uno de los primeros testimonios
destinados a estudiar el tráfico de quina evitando el paso por Portobello, donde
la English South Sea Company mantenía una factoría, a la que responsabiliza
de los casos de adulteración: “Ortega’s report represents a key moment in
the development of the Crown’s employment of learned experts in Madrid
to address the problems of the estanco de quina especially the problem of
adulteration.” (Matthew James Crawford. Op. cit., pág. 71).
356
136
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
por la relación que establece el II conde de Valparaiso, conocido
cortesano del círculo del ministro Carvajal, con José Hortega:
“Por orden del Señor Conde [de Valparaiso]
he ido varias veces a elegir Quina para Embaxadores y
otras personas de distincion á quienes S.M. ha tenido
pòr conveniente mandar hacer este obsequio, y puedo
asegurar á V.E., que habiendo en el Real Palacio una
gran porción de corachas, ha sido muy rara la que he
encontrado de buena calidad…”357
Pehr Löfling, ‘Botaniste du Roy de Hispania’
En su Bibliotheca botánica…, publicada en el otoño de 1735358, Carl
Linné escribió:
“… la flora española no nos ha dado a conocer
ninguna planta; siendo así que en lugares fertilísimos de
España hay algunas plantas que no han sido descubiertas.
Es doloroso que en los lugares más cultivados de Europa
se experimente tanta barbarie en la Botánica en nuestro
tiempo…”359
El comentario enardeció a algunos entusiastas de la
Ciencia española, entre ellos a José Quer, quien realizó un
apologético discurso en defensa del conocimiento de nuestras
producciones naturales360; pero también afloró en las mesas y
AGI, Indiferente, 1552, fols. 471-473 (trascrito por Francisco Murillo
Campos, Diego Bermúdez Camacho. Op. cit. nota 356, págs. 257-258. 1953).
357
Carl Linné. Bibliotheca botanica recensens Libros plus mille de plantis
huc usque editos, secundum Systema Auctorum Naturale in classes, ordines, genera &
species dispositos, additis Editionis Loco, Tempore, Forma, Lingua &c. cum explicatione
Fundamentorum botanicorum pars Ima. Amstelodami: Apud Salomonem Schouten,
1736
358
“8. Hispania. Hispanicae Florae nullae nobis innotuerunt, adeoque
plantae istae rarissimae, in locis Hispaniae fertilissimis, minus detectae sunt.
Dolendum est, quod in locis Europae cultioribus, tanta existat nostro tempore
barbaries botanices! Paucissimas istas plantas, quae nobis ex Hispania &
Portugallia constant, debemus Curiosis classe III. Tournefortio & paucis allis.”
(Carl Linné. Op. cit. ut supra, pág. 96. 1736).
359
Joseph Quer y Martínez. “Catálogo de los autores españoles que
han escrito de historia natural”. En: Flora española, ó Historia de las plantas, que se
crian en España. 2: 105-128. Madrid: Por Joachin Ibarra, 1762. De su análisis se
ha ocupado Ricardo Pascual Guasch. El botánico José Quer (1695-1764), primer
apologista de la ciencia española. [Cuadernos Valencianos de Historia de la Medicina
y de las Ciencias, 10]. Valencia: Cátedra e Instituto de Historia de la Medicina,
1970.
360
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
137
tertulias cortesanas de la Europa de su tiempo. En los inicios de
1750, durante una cena ofrecida por José de Carvajal y Lancáster,
a la sazón Secretario de Estado de Fernando VI, a sir Benjamin
Keene (1697-1757), embajador en España del Imperio británico, a
la que asistió el botánico Robert More361, debió traerse a colacion
el comentario de Carl Linné, al que Carvajal aseguró tendría
pronta solucion362. Las consideraciones vertidas en aquella cena
madrileña tendrían importantes repercusiones científicas.
Robert More prosiguió su viaje europeo y, en Upsala,
transmitió la declaración a Carl Linné (1707-1778) quien, a su vez,
361
Robert More (1703-1780) debió de contactar con algunos botánicos
españoles; así se desprende del comentario de Pehr Löfling a Carl Linne, al
tratar de Drosera lusitanica L: “… he visto un exemplar seco en casa del Sr. Velez
(…) es de Portugal, y la adquirió hace pocos años del Caballero Inglés Roberto
More, que por curiosidad habia viajado en España…” (Madrid, 13-III-1752 [L1389]. LS, signatura: mss. LS, 9: 348-349 -cf. Ignacio Jordán de Asso, Op. cit. nota
46, 4(11): 166-172. 1801-).
La situación es recogida por John Talbor Dillon en la crónica de su
viaje por España: “This appears to have been owing to some English gentlemen
then at Madrid, and among them Robert More, Esq: F.R.S., who dinning with
the prime ministre Don Joseph de Carvajal, had been asked their opinion of
Spanish by that minister, who perceiving that the remark of Linnaeus was not
without foundation, and being informed that a Spanish flora would turn out
as new as it was rich, determined that his country should soon be free from
such a reproach; this was afterwards communicated to Linnaeus by Mr. More I
his tour throught Sweden, and account for the aplication above mentioned [la
venida de Pehr Löfling a España].” (John Talbot Dillon. Travels through Spain,
with a view to illustrate the natural history and physical geography of that kingdom,
in a series of letters. Including the most interesting subjects contained in the memoirs
of Don Guillermo Bowles, and other Spanish writers, interspersed with historical
anecdotes. Adorned with... a new map of Spain. With notes and observations relative
to the arts, and descriptive of modern improvements. Dublin: printed for S. Price,
W. and H. Whitestone, T. Walker, W. Gilbert, C. Jenkin, 1781 –cf. págs. 112113). Quizás recogiendo el comentario realizado por el propio Carl Linné en las
páginas introductorias al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling (Stockholm: Lars
Salvii Kostnad, 1758): “… algunos sabios ingleses (…) salieron á viajar por la
Francia, España, Italia, los Suizos, Alemenia [sic], Suecia y Dinamarca. Uno de
estos, el Caballero Roberto More, de la Sociedad Real de Lóndres, vino tambien
á Upsal, y me contó que hallándose dichos sábios en Madrid, los convidó á su
mesa el Exc. Sr. D. Joseph de Carvajal, Secretario de Estado de S.M. Católica, y
preguntándoles qué juicio formaban de España, respondiéron entre otras cosas
que las excelencias del pais habian sobrepujado de mucho á sus esperanzas;
pero que al mismo tiempo acreditaban lo que el profesor Lineo había escrito
en su juventud: que la Flora Española es tan rica como deconocida. Bibl. Bot.
pág. 96. Manifestó S. E. deseo de ver por si mismo mi proposición; y habiendola
leído, aseguró que no tardaría la España en rechazar semejante acusación…”
(Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 282-283. 1801).
362
138
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
se apresuró a contactar con el embajador de España en Suecia,
Gerolamo Grimaldi (1709-1789), ofreciéndole su colaboracion
y manifestándole sus deseos de enviar a uno de sus discípulos
a estudiar la flora española. La propuesta de Carl Linné fue
formulada a Carvajal en carta de octubre de 1750 y reiterada, al
menos, en una ocasión más363:
“… en los Dominios del Rey no se ha perfeccionado
tanto en otras partes el de las Plantas y Hierbas, cuyo
conocimiento y el de sus virtudes respectivas es tan
intersante y útil al bien y a la salud de sus gentes (…) el
particular beneficio del más individual conocimiento de
lo que en este género produce, y al mismo tiempo podría
mandar le siguiesen y acompañasen en los experimentos
y colecciones a sus Rs. expensas o de ellos, uno o dos
Mozos capaces de aprender y cultivar las noticias que
adquiriese…”364
En enero de 1751 Gerolamo Grimaldi tuvo constancia
oficial de la aceptación de la propuesta linneana365, la noticia
llegó a Carl Linné a través de Gaspard Raibaud (1695-1781),
profesor de lengua francesa en la Universidad de Upsala366. Ese
363
Carta de Gerolamo Grimaldi a José de Carvajal y Lancáster.
Estocolmo, 23-X-1750 (AGS, Estado, leg. 6678 -fide Manuel Lucena Giraldo.
Laboratorio tropical. La expedición de límites al Orinoco, 1750-1767. [Caracas]:
Monte Avila, 1992 –cf. pág. 118-); Ibid. Estocolmo, 8-I-1751 (AGS, Estado, leg.
6679 –fide Manuel Lucena Giraldo Op. cit., pág. 119). Para Carl Linné fue
Gerolamo Grimaldi el responsable último del viaje de Pehr Löfling a España:
“… no olvide nunca á S.E. el Sr. Grimaldi, que ha sido el organizador de este
viaje, al cual el mundo sabio debe estar siempre agradecido.” (Carta de Carl
Linné a Pehr Löfling. Upsala, 8-V-1751. Archivo del Real Jardín Botánico de
Madrid [ARJB], leg. II,1,6,8; traducida del sueco en [Real Sociedad Española
de Historia Natural]. 1908. “Cartas de propia mano de C. Linneo que
se conservan en el Jardín Botánico de Madrid”. Memorias de la Real Sociedad
Española de Historia Natural, 5: 93-151. Madrid: RSEHN, 1908 -cf. págs. 101-102).
Carta de Gerolamo Grimaldi a José de Carvajal y Lancáster.
Estocolmo, 23-X-1750 (AGS, Estado, leg. 6678 –fide Manuel Lucena Giraldo.
Op. cit. nota 363, pág. 118. 1993); en ella propone una dotación de 100 ducados
anuales para el discípulo elegido.
364
365
Carta de Gerolamo Grimaldi a José de Carvajal y Lancáster.
Estocolmo, 8-I-1751 (AGS, Estado, leg. 6679 –fide Manuel Lucena Giraldo. Op.
cit. nota 363, pág. 119. 1993).
366
Carta de Gaspard Raibaud a Carl Linné. Estocolomo, 7-I-1751 [L1223]. (LS, signatura: mss LS, XII: 99-100; reproducida por James Edward Smith.
A selection of the correspondence of Linnaeus, and other naturalist from the original
manuscripts. London: printed by Logman, Hurst, Rees, Orme & Brown, 2 vols.
–cf. vol. 2: 463-464-). Y así lo recoge Carl Linné: “No bien, habia yo entablado mí
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
139
mismo mes, Carl Linné informó a la Academia de Ciencias de
Estocolmo y escribió a José de Carvajal presentándole a uno de
sus discípulos, Pehr Löfling (1729-1756), dando cuenta de los
trabajos, eminentemenete aplicados, que éste podría realizar:
“Ut ejusmodi rerum Naturalium cognitio apud
vos excitetur mittam juvenem dilectissimum, Discipulum
meum vere primarium, Petrum Löfling, quem sancte testor
esse non minus Plantarum, quam Lapidum, et Animalium
solida cognitione instructum, nec ulla ratione inferiorem
Kalmio367 aut Hasselquistio368, quos nosmetipsi ad exteras
terras emisimus (…)
Usum exinde Hispaniae redundantem summum
fore prevideo, ex quo constabit quaenam Plantae utiles
apud Vos sponte occurrunt aut cum fructu coli possunt,
quasque chare ab externis antea debuistis. Constabit inde
quaenam Plantae Agris Vestris sunt noxia, ut Mechanici
Instrumenta conficiant ad easdem eradicandas. Docebit
modum, et loca apta demonstrabit rite instruendi
Plantationes secundum soli genium, cum dubitem
valde dari plantam Europaeam quae non cum fruu intra
Hispaniae limites sereretur, ubi fervor solis in depressis,
frigus autem in nivosis Alpibus regnat. Errores Populares
in Oeconomia quotidie describat, et emendationem
suadebit, terras unique observavit, et quomodo steriles
emendari queant indigitabit. Detreminanabit ubinam
officinalia sponte crescant, et quaenam ad exteras Nationes
exportari possunt. Idem de Animalibus et Lapidibus agat,
ne quidem neglecto Insecto minutisimo…”369
pretensión quando el Señor Teniente Radbaud [sic] me dio á entender de parte
de S. E. que S. M. Católica deseába tener á su servicio un Botánico qué hubiese
estudiado conmigo; casualidad que al pronto me llenó de admiración...”
(Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 282. 1801).
Pehr Kalm (1716-1779), discípulo linneano, explorador de las tierras
de Norteamérica.
367
368
Fredrik Hasselquist (1722-1752), discípulo linneano, viajero por las
tierras de Egipto, Siria, Palestina, Chipre, Rodas y la isla de Chios.
369
Carta de Carl Linné a José de Caravajal y Lancáster. Upsala, 14-I1751 [L-1222] (transcrita en James Edward Smith. Op. cit. nota 366, vol. 2: 459464. 1821); copia en ARJB, leg. II,1,3,1 (cf. [Real Sociedad Española de Historia
Natural]. Op. cit. nota 363. 1908, págs. 97-100). Es a este escrito al que debe
referirse Carl Linné en su correspondencia posterior con Pehr Löfling: “El
invierno pasado tuve el honor de escribir al Ministro del Rey de España, y le
propuse entonces lo que usted debía observar, con la idea de que S. E. misma
diera las instrucciones que para usted fueran más convenientes…” (Carta de
140
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Un detallado repertorio de lo que habría de consistir el
trabajo de Pehr Löfling en España, ya esbozado en esta carta
remitida a José de Carvajal, fue elaborado por Carl Linné, en una
Instruction för Hr. Löfling at observera uti Spanka riket, estructurada
en 27 bases, firmada el 8 de mayo de 1751. Tras detallar el
método que debía seguir en la descripción de plantas, animales
y minerales, y el interés con el que habría de abordar los estudios
de economía natural y de patología humana, las instrucciones
terminaban con algunas normas relativas a su comportamiento:
“25. Cuando haya llegado al término de sus
trabajos, deberá el Sr. Löfling entregar una fauna y una flora
completas de España, presentando á la Superioridad un
herbario de todas las planta del reino, con la descripción
de cada una ó referencias al libro donde se halle descrita,
así como una fauna sobre los aninales y colección de los
insectos, y enseñar cómo puede todo utilizarse en servicio
y beneficio del reino, en el cual se halla usted, y del que
ha recibido su subvención.
26. Trate de instruir algunos estudiantes españoles
en esta útil ciencia, si así les agrada, y observe lo que
compran del extranjero, poseyéndolo tal vez en su país,
de suerte que, al partir usted con el corazón agradecido,
sea sentida su marcha.
27. Ame con pureza, tenga fé en su Dios y no
inquiete á nadie en sus creencias: piense y hable siempre
con el debido repeto del Rey en cuyo país vive usted; sea
honrada su vida y limpia de maldad, y así podrá usted
viajar con felicidad por todo el mundo…”370
En abril de 1751, aún en Suecia, Carl Linné le dirigirá
la correspondencia, redactada en sueco, a “Mr. Pierre Löfling,
Botaniste du Roy de Hispania. Stockholm”371.
Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 8-V-1751. ARJB, leg. II,1,6,8; traducida del
sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363,
págs. 101-102. 1908).
El original se conserva en ARJB, leg. II,1,3,5; reproducido -en su
lengua original y traducido al castellano- en [Real Sociedad Española de
Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 5-9. 1908).
370
Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 22-IV-1751 (ARJB, leg.
II,1,6,6 -cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363,
pág. 100. 1908).
371
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
141
Pehr Löfling inició su viaje el 16 de mayo de 1751,
navegó en un barco de la Svenska Ostindinska Kompaniet, gracias
al patrocinio de su director, Clas Grill (1705-1767); desembarcó
en Oporto el 25 de julio372; en Lisboa contacto con el astrónomo
francés Louis Goudin (1704-1760), de vuelta de su expedición
americana373, juntos emprendieron el camino hacia la Corte de
España374, llegaron a Madrid el 20 de octubre, pero hubieron de
trasladarse hasta San Lorenzo de El Escorial, donde entonces se
encontraba establecido el Monarca y sus Ministros:
“Inmediatamente despues de haber llegado, pase
al Escurial [sic] para entregar al Ministerio de Estado
la carta que traia del Excmo. Sr. Marques de Grimaldi,
á quien atribuyo la causa de este viaje y mi fortuna,
por cuyo motivo le viviré eternamente agradecido. En
virtud de esta carta me despacháron tan pronto como
yo pudiera desear. El Excmo. Sr. D. Joseph de Carvajal me
dió esperanzas de hacerme pasar en breve á la América
á fin de exâminar sus producciones, cosa para mí de la
mayor complacencia (…) Mr. Godin se digna suplir mi
total ignorancia de la lengua española…”375
372
Desde allí escribió a Carl Linné, con fecha de 31-VII-1751 [L-1298]
(LS, signatura: ms. LS, IX: 337-338; traducida al castellano y publicada por
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 297-304. 1801) y 7-VIII-1751 [L1299] (LS, signatura: ms. LS, IX : 339-340; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit.
nota 46, 3(9): 304-309. 1801).
373
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 1-XI-1751 [L-1341] (cf.
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 155-162. 1801). De él adquirió
una singular habilidad: “Del señor Godin he aprendido la máxima de adular
y halagar y con detalles graciosos mantener a los magnates de buen humor...”
(Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751. LS, signatura: ms. LS,
IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. “Las actividades
científicas de Löfling y sus estudios de Zoología en España y América”. En:
Francisco Pelayo (ed.). Pehr Löfling y la Expedición al Orinoco, 1754-1761: 103-130.
Madrid: Turner, 1990 -cf. págs. 125-127-).
374
“El Excmo. Sr. Embaxador de España ha resuelto mi viage para
despues de la mañana, en compañía del célebre Matemático francés Mr.
Godin, miembro de la Academia Real de Ciencias de Paris, que ha poco vino
de América, donde permaneció por espacio de quince años (…) Es hombre de
muchas luces, que me servirá extraordinariamente para el viage, y de cuyo
trato espero sacar grande aprovechamiento…” (Carta de Pehr Löfling a Carl
Linné. Lisboa, 28-IX-1751 [L-1311] (LS, signatura: LS, IX: 344-345; cf. Ignacio
Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 309-315. 1801).
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 1-XI-1751 [L-1341] (cf.
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 155-162. 1801) y poco después
insistirá: “La suerte de tener al señor Godin como intérprete ha tenido gran
375
142
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Para su primer encuentro con Pehr Löfling, José Carvajal
había pedido un informe privado a José Hortega sobre la
situación de los estudios botánicos en España; con fecha de 15 de
junio de 1751, éste escribirá:
“Mándame V. E. que reservadamente le informe
si Don Christóval Vélez y Don Joseph Quer, son áviles
en la Botánica, y aplicados a poder esperar que hagan
observaciones exactas con utilidad, si se les encarga; y
satisfaciendo al honor con que V. E. se digna favorecerme,
informaré a V. E. del concepto que tengo formado de
ambos, y de los méritos de cada uno; y en todo ablaré
con la ingenuidad, y candor que acostumbro siempre que
tengo el honor de ser preguntado por V. E.” 376
Y expondrá una prolongada nómina de los estudiosos
españoles de nuestra flora, además de los ya indicados: Cristóbal
Vélez (m. 1753) y José Quer Martínez (1695-1753), comentará los
méritos de Joan Minuart Perets (1693-1768), Josep Salvador Riera
(1690-1760), Jaume Salvador Pedrol (1649-1740), Joan Salvador
Riera (1683-1726) y Miguel Barnades Mainader (1708-1771), para
finalizar:
“Concluyo, asegurando a V. E. que con Minuar,
Quer, Barnades y Vélez, puede V. E. establecer en la Corte
un Jardín Real Botánico, o una esquela Botánica, y por
consiguiente introducir en nuestra España este útil, y
delicioso estudio; que lo que no es capaz de hacer cada
uno en particular, lo executaran todos quatro, con tal que
a Minuar se le nombre por Jefe, y que los otros tres le
obedezcan, pues uno de nuestros más dañosos defectos,
es el infatuarnos fácilmente presumiendo que sabemos
mucho, y con esta apreensión no queremos obedecer a
importancia para mi causa en la Corte y también le estaré siempre agradecido
por su entrega a la ciencia en sus demostraciones ante los ministros, el señor
Carvajal sobre todo, y el Marqués de la Ensenada. En una palabra, habló por mi
con gran contundencia…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI1751. LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco
Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990).
Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896 –fide Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 95-100.
1981-). Unos días antes ya había prometido dar su opinión al respecto: “Vélez
y Quer son dos sugetos, y ambos aficionados a la Botánica, y mañána diré a V.
E. el juicio recto que tengo formado de ambos”. Carta de José Hortega a José
Carvajal y Lancáster. Madrid, 13-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por
Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 94-95. 1981).
376
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
143
nadie, ni reconocer por superior a quien imaginamos
erradamemnte que no tiene que enseñarnos.
De esta manera travajarán los españoles por un
lado, mientras que el Botanista Sueco Pedro Leoflingio
desempeña por otro las grandes cosas que ofrece. El
Terreno es mui basto, y muy inculto, y ay campo para
muchos operarios...”377
Tras instalarse en Madrid, Pehr Löfling travó contacto con
los pocos naturalistas que, entonces, se ocupan de estos estudios378;
en los comienzos de noviembre de 1751, en carta antecedida por
las palabras ‘Res privatae’, ya da cuenta a Carl Linné de su opinión
sobre el estado de la Botánica en España: “Los botánicos, aquí
en Madrid, son hombres interesantes, aunque casi demasiado
fieles a Tournefort...”, comenta los trabajos de Joan Minuart379,
Cristóbal Vélez -en cuya casa encontrará alojamiento-380 y José
Quer381, para acabar solicitando su intervención personal:
Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs.
95-100. 1981).
377
378
“El Sr. Minuart, que se hizo célebre en la Botánica por su nuevo
género Cerviana, es hombre de edad, pero un diligente observador. Puede
llamarse con razon el conservador de la verdadera Botánica en España. / El Sr.
Velez (…) Demostrador de Botánica en el huerto de los Boticarios, fue discipulo
del Sr. Minuart (…) tiene una buena librería, que me franquea con toda libertad.
/ El Sr. Quer (...) há recogido un Herbario, que á mi juicio contiene cosas muy
curiosas y exquisitas. Ha plantado tambien su huerto particular de las yerbas
mas raras que hay en estas cercanias, y de otras muchas…” (Carta de Pehr
Löfling a Carl Linné. Madrid, 1-XI-1751 [L-1341] -cf. Ignacio Jordán de Asso.
Op. cit. nota 46, 4(11): 155-162. 1801-).
379
“El señor Minuart ha fomentado la botánica aquí en España; es un
hombre muy bueno, a mi me quiere de todo corazón, como si fuera su propio
hijo…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura:
ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit.
nota 373, págs. 125-127. 1990).
380
“D. Cristóbal Vélez (…) tiene una hermosa biblioteca de botánica.
Su ‘Flora madritensis’ está escrita según el método de Tournefort, pero haré
lo que pueda para atraerle hacia otras ideas (…) El Collegio Pharmacopéo
Regio le ha encargado la tarea de enseñar botánica a la juventud (…) de ahora
en adelante viviré en su casa, donde una habitación ha sido alquilada para
mí por la persona que del señor Carvajal recibió la orden de facilitarme las
cosas necesarias…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS,
signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo
López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990).
381
“D. Joseph Quer es un hombre interesante, pero más ‘ad
ostentationem que verae scientiae caussa’. Tiene un estudio bastante bonito,
144
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
“Si usted tuviera a bien alentarles mediante
algún escrito o de otra manera, creo que sería una
tarea fácil inroducir aquí una nueva religión, según sus
principios (…) Si usted encontrara alguna forma para
mí de promover nuestra ciencia aquí, escribiendo algún
artículo u otra cosa que también me pueda recomendar a
mi, desearía de todo corazón que me lo hiciera saber, ya
que el tournefortianismo reina con tanta fuerza aquí…”382
Las condiciones económicas de Pehr Löfling, al servicio
del Rey de España, quedan nítidamente establecidas en los
comienzos de 1752383:
“De una cosa hablaré á Vm brevemente relativa
á mi mansion en esta Corte. El Excmo. Sr. Carvajal ha dado
órden para que se me paguen en la Tesorería ocho mil
reales anuales, que hacen quatro mil dalers de nuestra
moneda. Esta suma, si yo me manejo con prudencia, es
muy suficiente para mi solo, y descontando los gastos
de alquiler de casa y comida, puedo ahorrar lo bastante
para vestirme. Me alegra tener una cosa fixa en que
poder afianzarme. Este sueldo se me pagará de quatro en
quatro meses, empezándose á contar desde el dia en que
llegué…”384
pero su carácter me resulta más rígido que los otros, aunque la razón quizás
sea que todavía no puedo conversar bien con él, ya que no habla latín…” Carta
de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs.
125-127. 1990).
382
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura:
ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit.
nota 373, págs. 125-127. 1990). En su respuesta, Carl Linné sólo tiene palabras de
gratitud para estos tres botánicos: “Ter saluta viros aestimatissimos Dominos
Minuartium, Velez, Quer...” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 16-XII1751 (ARJB, leg. II,1,6,9; cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural].
Op. cit. nota 363, págs. 102-106. 1908).
383
No lo estaban con anterioridad; en noviembre de 1751 Pehr Löfling
escribía a Carl Linné: “Por lo demás, no están todavía concluidos mis asuntos;
queda pendiente el acuerdo sobre mi sueldo anual, dado que en este lugar
tan caro 100 ducados no duran más de dos a tres meses, tengo esperanzas de
conseguir más (…) Lo que ya está resuelto es vivienda y comida, así como
libros y ropa, que es muy importante en este país, donde no te consideran ni
minimamente si no te pareces a otra gente en todo…” (Carta de Pehr Löfling
a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida
al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990).
384
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 14-II-1752 [L-1375] (cf.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
145
La vida de Pehr Löfling en Madrid no debió ser fácil,
fundamentalmente debido a su falta de dominio del castellano;
comenzó a adquirir cierta fluidez en nuestra lengua durante
la primavera de 1752: “Ya empiezo á disfrutar del trato y del
comercio de las gentes, porque me hallo algo suelto en entender
y hablar el idioma…”385
Su trabajo como naturalista lo desarrolló, durante los dos
años que permaneció en la Corte, siempre en las proximidades
de Madrid, “… porque en España se dice que quien goza empleo
y sueldo del Rey ha perdido su libertad...”386 El desarrollo de su
actividad se rige por criterios fuertemente organizados:
“En el dia salgo á buscar las yerbas por la tarde, si
el tiempo lo permite, y hago su descripción por la mañana
(…) Escribo todas mis observaciones según el orden
de Vmd. en quartillas sueltas de papel, para tenerlas
siempre ordenadas (…) En mis descripciones botánicas
me detengo particularmente en la fructificación, para
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 162-166. 1801). Los mismos 8.000
reales se le asignaron, a fines de 1755, al francés Agustin La Planche, quien
pasó a prestar servicio en la Real Casa de la Geografía; al alemán Andrea
Keternin, se le concedieron 11.000 reales, con la condición de dar a su hijo,
Johan, la cuarta parte para que continuara su formación en la clasificación de
minerales; sólo William Bowles se escapa de este presupuesto: fue contratado
en estas mismas fechas, como físico-naturalista, por 24.000 reales, una cantidad
que se fijó él mismo como sueldo (cf. María de los Ángeles Calatayud Arinero.
“Antecedentes y creación del Real Gabinete de Historia Natural de Madrid”.
Arbor, 123(482): 9-33. Madrid, 1986 –cf. pág. 12-). Carl Linné le suponía dotado
con 100 ducados de pensión: “Si le dan á usted 100 ducados, comida, casa,
vestidos, libros, tiene usted más que ningún profesor, no pida usted sueldo
demasiado alto antes de estar en situación y que hayan visto lo necesario que
es usted y sepan que es para utilidad de la Botánica y honor de la naturaleza...”
(Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [XII-1751] [L-1349]. ARJB, leg.
II,1,6,10; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia
Natural]. Op. cit. nota 363, pág. 106-108. 1908).
385
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 7-V-1752 [L-1407] (cf.
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 172-178. 1801).
386
Líneas antes escribía: “Luego que venga el Sr. Carvajal haré un viaje
á los montes del Escurial [sic] y S. Ildefonso: pero sin su permiso no puedo
hacer el viaje mas corto…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 12-VI1752 [L-1434] (LS, signatura: ms. LS, IX: 350-351; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op.
cit. nota 46, 4(11): 179-187. 1908). Un análisis de las ‘Recolecciones y lugares
de herborización de Löfling en España’ en Ginés López González. “La obra
botánica de Löfling en Espña”. En: Francisco Pelayo (ed.). Pehr Löfling y la
Expedición al Orinoco, 1754-1761: 33-49. Madrid: Turner, 1990 (cf. págs. 40-42).
146
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
asegurarme mas en la determinacion y doctrina de los
géneros…”387
Mas no todo fue trabajo, sabemos que también hubo algo
de diversión; al menos en una ocasión asistió a una corrida de
todos388. Entre su círculo de amistades figuraron, además de
Cristóbal Vélez389, Miguel Barnades, con quien herborizó en los
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 7-V-1752 [L-1407] (Ignacio
Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 172-178. 1801). En la Linnean Society
se conserva un manuscrito, de 22 páginas, con letra de Daniel Scheidenburg,
titulado Herbarium Löflingianum Matriti, en él figuran 469 especies numeradas,
más un ‘suplementum’ en el que se incluyen cerca de 78 especies más, a éstas
han de añadirse las aún no estudiadas, “Restant plures indeterminatae, quae a
Botanicus Matritensibus determinavi vix possum” (cf. Ginés López González.
Op. cit. nota 386, pág. 43. 1990). Sobre estos materiales, y los pliegos remitidos
por su discípulo, empezó a construir Carl Linné un borrador, Flora Madritemsis.
P. Löflingii, completado con datos de su Iter hispanicum…
387
388
“La fiesta de toros (…) o corrida de toros es para los españoles
la mayor diversión. Tienen una pasión extraordinaria para presenciar este
peligroso juego, que a casi todos los extranjeros les parece cruel, hasta que se
habitúan algo a él (…) La lidia trascurre dentro de un anfiteatro completamente
redondo, con escaleras en las que pueden sentarse algunos miles de personas;
fue construido hace algunos años fuera de la puerta de la ciudad llamada la
puerta de Alcalá…” (Carta de Pehr Löfling a unos conocidos. Madrid, 16VII-1753; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373,
págs. 129-130. 1990). La carta figura en la edición alemana del Iter hispanicum…
Reise, nach den Spanischen Ländern in Europa und America in den Jahren 1751 bis
1756: nebst Beobachtungen und Anmerkungen über die merkwürdigen Gewächse.
Peter Loeflings; herausgegeben von Herrn Carl von Linné... Aus dem Schwedischen
übersetzet durch D. Alexander Bernhard Kölpin. Berlin und Stralsund: bey Gottlieb
August Lange, 1766. 406 p., 2 lám. [pleg.]. [2ª edición. Berlin: Gottl. August
Lange, 1776]. El documento proporciona una pormenorizada descripción
del festejo: la estructura de la plaza, el tiempo que cada toro permanece en el
ruedo, la apertura de los toriles, la intervención de los picadores (‘cavalleros de
plaça’), y de los banderilleros (‘chulos’), el toque de trompetas, la actuación del
matador (‘torero de a pie’), y los instrumentos que éstos utilizan: picas, baras
de detener, banderillas, muleta, estoque, etc., también describe una suerte de
rejones y algunas corridas con perros y monos en el ruedo.
“El Sr. Velez incluye a Vd. la inclusa (…) Conozco que elogiándolo
se le puede llevar adonde uno quiera; y yo debo estar á Vmd. muy agradecido
por haber hablado bien de él; circunstancia que ha bastado para convertir en
amistad estrecha nuestro trato regular y cortesano…” (Carta de Pehr Löfling
a Carl Linné. Madrid, 13-III-1752 [L-1389]. LS, signatura: LS, IX: 348-349. cf.
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 166-172. 1801). “Antes de ayer
perdí un verdadero amigo, y la España un botánico sabio en D. Cristóbal Velez,
cuya muerte me quita la proporcion de disfrutrar su bella librería…” (Carta de
Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 2-VII-1753 [L-1622]. LS, signatura: mss. LS,
IX: 372-373; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 100-104. 1802).
389
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
147
alrededores de San Fernando de Henares, lugar donde éste estaba
destinado como médico390; a ellos cabe añadir a los miembros de
la Legación sueca en la Corte, y pocos más:
“Hay algunos que me tienen envidia aquí, pero
entre los idiotas, según cuentan mis amigos, que por otro
lado, me dan prueba de una amistad que creo sincera”391
Carl Linné, preocupado por la buena ubicación de su
discípulo entre las elites del poder, no duda en darle consejos,
siempre en lengua sueca:
“Haga usted la corte al Sr. Carvajal; enséñele sólo
á él lo que usted descubra y hágale comprender que
usted es suyo totus animo et corpore; háblele siempre de él,
elogiándole como debe. Escriba usted al Ministro español
en Stockholm y déle las gracias; escriba también al Sr.
Rebault [sic]392, el profesor de francés, y al Secretario de la
Legacion española. Ese lo hace todo…”393
José Hortega no aparece aún en el círculo cortesano
frecuentado por Löfling, al menos oficialmente, pero saldría
390
“Aves solo he logrado dos ó tres; pero hará catorce dias que el Dr.
Barnades, (…) que estudió en Montpellier, muy aficionado á la Botánica, y mi
amigo, me ofreció hacerme traer algunas del país…” (Carta de Pehr Löfling a
Carl Linné. Madrid, 7-V-1752 [L-1407] -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota
46, 4(11): 172-178. 1801-); “A fin de esta semana iré á S. Fernando, quatro leguas
de aquí, con el Dr. Barnades, que reside allí, y espero enviar algunas plantas
curiosas (…) ha formado el proyecto de hacer juntos un viagecillo á los Pireneos
[sic]; lo que celebraré infinito, porque la lengua catalana es muy distinta de la
española, y asi yo solo no podía gobernarme...” (Ib., Madrid, 12-VI-1752 [L1434]. LS, signatura: ms. LS, IX: 350-351 -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota
46, 4(11): 179-187. 1801-); “… estando en S. fernando en casa del Dr. Barnades a
mediado del verano…” (Ib., Madrid, 28-VIII-1752 [L-1461]. LS, signatura: ms.
LS, IX: 354-355; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12): 324-330. 1801).
391
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura:
ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op.
cit. nota 373, págs. 125-127. 1990); algo más adelante señala, en este mismo
texto: “… estaría encantado de poder marchar a América (…) para evitar a los
españoles a los que tanto les cuesta ver a extranjeros tener éxito…”
392
Gaspard Raibaud (1695-1781).
Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [1752] (ARJB, leg.
II,1,6,11; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia
Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 108-111. 1908). La correspondencia de Carl
Linné a Pehr Löfling, durante su estancia en Madrid, va dirigida bajo sobreescrito a Carl Leuhusen [baron de Leuhusen] (1724-1795): “A Monsieur le baron
Lehusen [sic], secrétaire en Légation du Roi de Suède. Madrit” (cf. carta de Carl
Linné a Pehr Löfling. Upsala, 28-IV-1752. ARJB, leg. II,1,6,12).
393
148
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
pronto a escena; en carta a Carl Linné, fechada el 13 de noviembre
de 1752, Pehr Löfling le informa:
“En el dia se hallan en Madrid quatro Botánicos
Españoles. He disfrutado por espacio de un año la
compañía de los tres, y el quarto, que es el Sr. Ortega, no
ha vuelto todavia de sus viages, y es el mas afamado de
todos. Tengo el gusto de servirme de su librería.
Por ese motivo quisiera que á los quatro géneros
mencionados se les diesen los nombres de cada uno;
especialmente por ser de un órden natural y del mismo
pais que los Señores…”394
Lamentablemente la ordenación de los ‘genera nova’
que habrían de incorporarse a la primera edición del Species
plantarum… (Holmiae, 1753) estaba ya ultimada, y el maestro
no pudo contentar a su discípulo395; la falta de alusiones en la
correspondencia entre Pehr Löfling y Carl Linné a la figura de
José Hortega impide que su nombre figure en el modo en que
Löfling hubiera deseado; no obstante Carl Linné sabrá solventar
la situación, incluyendo el nuevo género, Ortega L., en la
‘Addenda’ que figura al final de la obra396. La perspicaz visión de
la situación política en la que se desarrolla la actividad de Pehr
Löfling lleva a Carl Linné a formularle una demanda más; sus
atenciones no han de dedicarse, en exclusiva, al mundo de los
naturalistas; su acercamiento hacia el poder debe llegar más allá,
394
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 13-XI-1752 [L-1507] (LS,
signatura: ms. LS, IX: 356-359; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12):
331-338. 1801).
395
Carl Linné. Species plantarum, exhibentes plantas rite cognitas, ad
genera relatas, cum Differentiis Specificis, Nominibus Trivialibus, Synonymis Selectis,
Locis Natalibus, Secundum systema sexuale digestas. Holmiae: Impensis Laurentii
Salvii, 1753.
“Me ha dolido mucho no poder ordenar lo que usted me pedía
referente á genera nova, pues ya estaba lo impreso en speciebus; usted me dejó
desde el principio en libertad, por lo que he obrado de este modo; así ahora
está la Pág. 35. Loeflingia (…) Pág. 89. Minuartia (…) Pág. 89. Queria (…) Pág.
560 Ortega (…) Pág. 332. Velezia (…) Si en algo, que no acierto á explicarme, le
he faltado á usted, perdóneme, pues siempre ha sido mi deseo serle grato y
causarle satisfacción…” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 13-III-1753
[L-1554]. ARJB, leg. II,1,6,17; traducida del sueco en [Real Sociedad Española
de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 130-134. 1908); la misiva se
despide con un “Salude á mis hermanos en la Flora Sres. Minuart, Ortega, Vélez
y Quer con millones de felicidades”. El género Ortega Loefl. ex L. se incluye
en la última página del primer tomo, con la advertencia de que habría de ser
incluido en: “Pag. 35, inter Melothriam & Loeflingiam”.
396
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
149
hasta las más altas esferas; en su ánimo de servirle de fiel ayuda
a su discípulo en tierras extrañas le escribirá:
“Pienso elevar ahora para él [el marqués de
Grimaldi] y S. E. el Sr. Carvajal un monumento en el
mundo Botánico, que sirva para que sean apreciados
mientras la hierba y las plantas crezcan; pues por medio
de usted han dado á conocer lo que en la hermosa España
ha estado oculto tanto tiempo. Haga de manera que
pueda reunir la Floram Hispanicam para honra de S. E.
Carvajal y marqués de Grimaldi, y para que el mundo
vea con asombro lo que nunca ha visto…”397
Una Academia para la Corte
La llegada de Pehr Löfling a la Corte coincide con la partida
de ella de José Hortega; a tenor de la información transmitida
por el cirujano catalán Josep Borges al botánico Josep Salvador,
salió de Madrid el 13 de agosto de 1751, en dirección a Aragón
y Cataluña; pocos días después, el 24 de agosto, se encuentra en
Barcelona, desde donde emprende camino a Francia; al parecer el
viaje queda voluntariamente envuelto en una nube de misterio398;
sólo años después, las páginas con las que la Real Academia de
Medicina comienza sus Memorias…, darán cuenta de él:
“Habian logrado varios Académicos á quienes
en calidad de tales concedía fácil acceso y su proteccion
el Marqués de La Ensenada, persuadir á este célebre
Ministro y por su medio al Rey, quan decorosa y util seria
a la Nacion Española la ereccion de una Academia de
Ciencias (…) confió S. M. al referido Secretario perpetuo
de la Academia Don Joseph Ortega la honrosa y delicada
397
Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 10-IV-1753 [L-1569]
(ARJB, leg. II,1,6,18, traducida del sueco en [Real Sociedad Española de
Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 134-136. 1908). Y, tras un extenso
exordio sobre el cultivo de Avena y Elymus, finaliza: “… todos los Botánicos
del mundo han de apreciar á SS. EE. Carvajal y Grimaldi.” Meses después, el
2-X-1753, ante la inminente partida de Pehr Löfling hacia América, insistirá:
“El Sr. Carvajal debe ser un gran hombre que ha comprendido antes que nadie
lo que otros no han sabido utilizar; debe, sin duda, apreciársele y elogiarle…”
(Ib., Upsala, 2-X-1753 [L-1660]. ARJB, leg. II,1,6,23; traducida del sueco en [Real
Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 147-151.
1908).
Carta de Josep Borges a Josep Salvador. Madrid, 24-VIII-1751 (Josep
Maria Camarasa, Botànica i botànics del països catalans [Biblioteca universitaria,
10]. Barcelona: Enciclopedia Catalana, 1989 -cf. págs. 52-53-).
398
150
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
comision de recoger por si mismo, en cada uno de los paises
mas cultos de Europa, informes y noticias exâctas del
merito de los literatos que florecian en ellos (…) viajando
a este fin con aparente motivo del restablecimiento de su
salud y el especial y reservado encargo de asegurarse de
las virtudes sociales y prendas morales que el piadoso
Rey exigia en todos los que hubiesen de componer tan
ilustre Congregacion…”399
Tradicionalmente –quizás siguiendo este comentario- se
ha vinculado la figura de José Hortega al proyecto de Academia
de Ciencias patrocinado por el marqués de la Ensenada, bajo
la orientación técnica de Jorge Juan y Antonio de Ulloa400;
enfrentándolo así a la propuesta de Ignacio Luzán, defendida por
José de Carvajal401. No obstante, la vinculación de José Hortega
al grupo de Carvajal y su amistad, casi devocional, hacia Ignacio
Luzán402, parecen sustentar la tesis contraria.
399
“Noticia histórica del orígen, progresos y estado actual de la Real
Academia Médica de Madrid”. Memorias de la Real Academia de Medicina, 1:
I-XIV. Madrid, (cf. pág. IX).
400
Cf. Pedro Roca. “Orígenes de la Real Academia de Ciencias”.
Homenaje a Menéndez y Pelayo en el año vigésimo de su profesordo. Estudios de
erudición española, 3: 845-940. Madrid: Victoriano Suárez, 1899. Guillermo
Carnero (“El Plan de una Academia… de Ignacio de Luzán”. Nueva Revista de
Filología Hispánica, 37: 167-201. México, 1989) señala: “Tanto el marqués de la
Ensenada como Carvajal y Lancáster patrocinaron la idea de una Academia de
Ciencias; el primero con la ayuda de José Ortega [sic], Jorge Juan, Antonio de
Ulloa y otros; el segundo, con la de Luzán...” (Op. cit. pág. 160). Sobre el proyecto
de Jorge Juan y Antonio de Ulloa cf., además de las referencia citadas, Julio
Guillén Tato. “Juan de Ulloa y los precedentes del XVIII de la Real Academia
de Ciencias de Madrid”. Revista de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas
y Naturales, 39: 440-461. Madrid, 1940; José María Torroja. “Jorge Juan y los
antecedentes de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físcas y Naturales”.
Revista de la Academia de Ciencias Exactas, Físcas y Naturales, 67: 11-25. Madrid,
1973.
401
“... mi amigo y mi correspondiente, y Maestro que fue de Don
Ignacio Luzán”. Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid,
15-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344,
págs. 94-95. 1981).
A poco de abandonar la sede diplomática española en París, en el
gozne entre 1750 y 1751, Ignacio Luzan presentará, ante José de Carvajal, un
Plan de una Academia de Ciencias y Artes en que se habían de refundir la Española y la
de Historia (Archivo Histórico Nacional [AHN], Estado, leg. 3022,3). La opción
planteada por Ignacio Luzán agradó al Secretario de Estado, quien anotó:
“… lo he celebrado infinito; esta breve y con méthodo, que se hace facil de
comprehender. Dios lo quiera y yo ayudaré, y mucho; sobre todo hablarenos...”
402
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
151
Resulta evidente que el plan de Luzán tiene muchos
elementos discrepantes con la propia posición mantenida por
José Hortega: la de Medicina es la única Academia que no dispone
de una sección propia en el proyecto y en él no se presta atención
alguna a los gabinetes requeridos para la experimentación o la
exhibición pública (jardín botánico, colecciones intrumentales,
de Historia Natural, etc.), cuestiones –ambas- primordiales en
cualquier planteamiento avalado por Hortega; pero, quizás por
ello, la presencia de José Hortega cobra especial significación en
el diseño de Academia ingeniado por José de Carvajal. Como
cabría esperar, la figura de José Hortega está presente en la “Lista
de Sugetos que conozco y me parece pueden ser aproposito
como Académicos” incorporada al proyecto de Ignacio Luzán;
se encuentra entre los propuestos para ‘asociados’, aquellos
“que deberán ser escogidos de entre los ingenios sobresalientes,
aplicados y que muestren más instrucción e inclinación á aquella
classe para que se les destina”403:
“Dn. Joseph Ortega, para la Chymica y Physica
experimental.”404
La gestación de una Academia de Ciencias está también
presente en la correpondencia cursada entre Carl Linné y su
discípulo Pehr Löfling; en carta remitida en los primeros meses
de 1752, redactada en su mayor parte en latín, reserva algunos
párrafos personales que escribe en sueco:
“El Sr. Godin será seguramente miembro de la
Sociedad de Ciencias de Upsala; ya he preparado á todos
los señores405.
El proyecto de Ignacio Luzán ha sido analizado, entre otros, por Antonio
Rumeu de Armas (Origen y fundación del Museo del Prado. Madrid: Instituto de
España,1980 –cf. págs. 19-20-) y, de manera particular, por Didier Ozanam
(“L’idéal académique d’un poète éclairé: Luzán et son projet d’Académie
royale des Sciences, Arts et Belles Lettres (1750–1751)”. Bulletin hispanique,
64bis [Mélanges Bataillon]: 188–208. Bordeaux, 1962), Alberto Gil Novales (“El
concepto de Academia de Ciencias en el siglo XVIII español”. Boletín del Centro
de Estudios del siglo XVIII, 7/8: 3-23. Oviedo, 1980) y Guillermo Carnero (Op.
cit. nota 400), quienes señalan la existencia de otro manuscrito del proyecto de
Luzán, probablemente un borrador inicial, con anotaciones de José de Carvajal,
en el Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores [AMAE] (mss. 87), éste ha
sido transcrito por Guillermo Carnero (Op. cit., págs. 167-201).
403
Guillermo Carnero (Op. cit. nota 400, pág. 184. 1989).
404
Guillermo Carnero (Op. cit. nota 400, pág. 200. 1989).
Meses después escribirá: “Si está el Sr. Godin en Madrid, salúdele
mil veces. Dígale, ante todo, que el 10 de Octubre fue omnium unanimi consensu
405
152
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Cuide usted de la organización de la Academia de
Ciencias, no hiera usted á los teólogos, que en ese caso
pudieran tener motivo de queja; proceda con calma y
prudencia. El que en el mundo prospera, va por lo más
largo; créame, que los pies se vuelvan hacia usted; todas
las cosas buenas luchan con los mayores obstáculos…”406
La coincidencia de hechos entre la llegada a la Corte de Pehr
Löfling y la salida de ella de José Hortega, unida a los comentarios
de Carl Linné sobre el proyecto de Academia de Ciencias,
ha llevado a algunos historiadores a pensar en el sueco como
posible sustituto del boticario madrileño en la gestión de un -ya
pergeñado- Real Jardín Botánico; para estos autores, Pehr Löfling
queda íntimamente vinculado a José de Carvajal, mientras José
Hortega lo es al marqués de la Ensenada, produciéndose entre
ellos un soterrado enfrentamiento407. No parece que sea así; la
figura de nuestro protagonista se nos acerca más al círculo de
Carvajal, quien -especialmente durante estos primeros años de
la década de 1750- no ceja en solitar sus informes, incluso sobre
la presencia en España del propio Pehr Löfling.
Apenas nos quedan datos del itinerario del viaje de José
Hortega por Europa; del 16 de octubre de 1752 data un escrito
al ministro Carvajal, fechado en París, en el que, a la vez que le
anuncia la remisión de un estudio sobre el arte de hacer los tintes
azul y verde que, hasta entonces, se habían guardado como
secreto en Sajonia408, le informa de su periplo, ya avanzado: para
elegido para miembro de la Sociedad de Ciencias de Upsala, como una pequeña
muestra de agradecimiento por el interés que ha demostrado á usted; ruéguele
considere esto como una primera muestra de agradecimiento…” Carta de Carl
Linné a Pehr Löfling. Upsala, 9-XI-1752 (ARJB, leg. II,1,6,16; traducida del sueco
en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs.
125-130. 1908).
Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [1752] (ARJB, leg. II,1,6,11;
traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op.
cit. nota 363, págs. 108-111. 1908). La carta carece de fecha, pero lleva una nota
posterior, de mano de Simón de Rojas Clemente, que la data en 1-IV-1752; Pehr
Löfling señaló haberla recibido el 28-IV-1752 y contestado el 1-V-1752.
406
407
“No fóra estrany que les murmuracions de la Cort tinguessin
fonament i que, mentre Ortega era el candidat de La Ensenada, Löfling ho fos
de Carvajal (...) oposat per la seva anglofilia a la francofilia del maques de La
Ensenada...” (Josep Maria Camarasa. Op. cit. nota 398. 1989; la cita en pág. 53).
La memoria no quedó adjunta a esta correspondencia pero, por
el contenido de la carta, sabemos que presentaba un método no incluido en
el tratado de M. Hellot, que acababa de traducirse (AHN, Fomento, leg. 3182
408
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
153
entonces había visitado Francia, Italia, Flandes y Holanda y se
disponía a marchar a Inglaterra.
Debió residir en Londres los primeros días de diciembre
de 1752; del 7 de diciembre data la propuesta, firmada por sir
William Watson409, Henriquez de Castro Sarmento410, Thomas
Birch411 y Gowin Knight412, para incluirle como fellow de la Royal
Society:
“Don Joseph Hortega Professor of Chymistry &
Botany in the Court of Madrid, perpetual Secretary of
the Royal academy Physico-Medica Matritense, Fellow
of the Royal Society of Sevil, Oporto & Bolonia, & of the
Academy of Botany of Florensia a gentleman very well
versed in Experimental Philosophy, Botany & Natural
History being desirous of the honour of being admitted as
fellow of the Royal Society of London, we under-writen
recomend him as a person deserving that honour, and as
the most proper member to communicate to us whatever
Shall be wanting from those Kingdoms in Natural
Hystory, & to prove a Valuable, & useful Correspondent
to the Royal Society.”413
[146]).
Sir William Watson (1715-1787), naturalista, médico y físico
británico interesado en los fenómenos eléctricos, particularmente en la ‘botella
de Leyden’; a él se debe la introduccción de la nomenclatura binomial linneana
en Gran Bretaña; fue miembro de la Royal Society desde abril de 1741.
409
410
Jacob [Henriquez] de Castro-Sarmento (1692-1762), médico
portugués, naturalista, poeta, exiliado en Londres desde 1720 por su origen
marrano y sus creencias deístas, perteneció a la Royal Society desde 1725; firme
defensor del newtonismo, realizó considerables esfuerzos por entroncar esta
idea científica con la teología judía.
Thomas Birch (1705-1766), sacerdote al servicio de la Iglesia de
Inglaterra (1731), historiador y crítico literario, amigo personal de Philip Yorke,
primer conde de Hardwicke; pertenecía a la Royal Society desde febrero de
1735, fue su secretario entre 1752 y 1765.
411
412
Gowin Knight (1713-1772), científico británico, especialmente
conocido por sus trabajos para crear acero fuertemente magnetizado, logrado
en 1745 y comercializado por George Adams como parte de sus brújulas; en
1756 fue nombrado primer bibliotecario del British Museum; pertenecía a la
Royal Society desde abril de 1745.
413
The Royal Society (London) [RS]. “Certificates of Election and
Candidature”. [Joseph Hortega], signatura: EC/1752/36.
154
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
La propuesta fue sometida a votación en la sesión
celebrada el 8 de marzo de 1753, y aprobada por mayoría414;
desde entonces José Hortega se convirtío en miembro de esta
prestigiosa academia británica.
En los comienzos de agosto de 1753 será la Academie des
Sciences parisina quien le incluirá entre sus correspondientes, su
contacto será el médico y botánico Bernard de Jussieu415:
“Aujourd´hui 8 août 1753. L’Acade, informée du
savoir et de la capacité de Don Vásques y Morales Hortega
[sic]. Secretaire perpetuel de l’Acade. de Médicine de
Madrid; Membre de la Société Royale de Londres, et de
l’Acade de l’Institut de Bologne, et décidant lui donner
des marques de son estime qui puissent l’encourager
à continuer le commerce des lettres dans lequel il est
avec Monsieur de Jussieu le cadet [Bernard de Jussieu],
pour les matières de mathématiques et de Physique. L’a
nommé pour son correspondant, lui accorde en cette
qualité le droit d’entreé aux assemblées quand il viendra
à Paris et l’invite à continuer cette correspondence avec
le plus de régularitè qu’il sera possible, persuadeé qu’elle
en tirera de l’utilité en foi de quoi j’ai signé les présentes
auxquelles j’ai apposé le seceau de l’Academie. Pour
minute [Jean Paul Grandjean] Defouchy”416
Posiblemente también estableció buenas relaciones
con Antoine Baumé417 a quien, pocos años después, en 1757,
entregaría una libra de platina para sus investigaciones418.
RS. “Certificates of Election and Candidature”. [Joseph Hortega],
signatura: EC/1752/35.
414
Bernard de Jussieu (1699-1777), médico y botánico francés,
professor del Jardin des Plantes de Paris desde 1722 y miembro de la Academie
des Sciences desde 1725.
415
“Lettres de Correspe. pr. D. Hortega”. Académie des Sciences
de Paris [ASP], “Dossier Joseph Hortega”. Agradecemos a Florence Greffe,
‘conservateur des Archives de la Académie des Sciences-Institut de France’, el
envío de una copia de esta documentación. Jean-Paul Grandjean de Fouchy
(1707-1788) fue nombrado Secretario perpetuo de la Académie Royale des
Sciences el 2-IX-1743.
416
Antoine Baumé (1728-1804), químico, alumno de Claude Joseph
Geoffroy, en 1752 se integró en la Faculté de Pharmacie parisina; no fue
miembro de la Académie des Sciences hasta 1773.
417
418
Cf. Luis Fermín Capitán Vallvey. “Platina española para Europa en
el siglo XVIII”. LLull, 17: 289-312. Zaragoza, 1994 (cf. pág. 294).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
155
José Hortega estuvo fuera de la Corte española hasta el 12
de mayo de 1753; Pehr Löfling, que esperaba con ansia su llegada
para terminar de concretar los detalles de su viaje419, informa de
su regreso en carta a Carl Linné, fechada a mediados de mayo:
“El Sr. Ortega llegó antes de ayer de sus viajes
por Italia, Francia, Inglaterra y Holanda, y ayer tuve el
gusto de verle en compañía del Sr. Minuart. Lo saludé
de parte de Vmd., y el Sr. Minuart le dixo que Vmd. le
habia honrado dando su nombre á la Juncaria; á lo qual se
manifestó muy agradecido. No tuve ocasión de hablarle
particularmente sobre mis viages, mas espero hacerlo
mas adelante…”420
Poco tardaría José Hortega en tratar del asunto con José
de Carvajal; de momento, Pehr Löfling tendría que continuar
con su trabajo habitual: aprender el castellano, herborizar en las
proximidades de la Corte421 y, de manera ocasional, responder a
algunas de las cuestiones planteadas desde el Gobierno422.
419
“… no haré viage alguno antes que Mr. Godin y el Sr. Ortega estén
de vuelta...” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 8-I-1753 [L-1515]. LS,
signatura: ms. LS, IX: 360-362; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12):
338-339. 1801; 5(13): 82-90. 1802).
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 14-V-1753 [L-1586] (cf.
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 92-98. 1802).
420
“En este año (..) He estado una vez en S. Fernando, y ahora en la
primavera con el Baron Lehusen en Aranjuez (…) La semana que viene pienso
volver allí, y después ir á Toledo, á los cerros del Escurial [sic] y á San Idefonso.
Estos serán mis viages en este año hasta que me destinen á otra parte…” (Carta
de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 8-I-1753 [L-1515]. LS, signatura: ms. LS,
IX: 360-362; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12): 338-339. 1801;
5(13): 82-90. 1802).
421
422
“El Excmo. Sr. Marques de Grimaldi hace un mes que está aquí; yo he
ido á ofrecerle mi respeto é informarle del estado de mis cosas hasta el dia de
hoy. Un día se dignó llamarme á su casa, y comunicarme lo que había hablado
con el primer Ministro el Señor Carvajal tocante á mi empleo y ocupación. /
Entre otras cosas tratamos de la utilidad que tiene en Suecia la Avena cultivada
en los arenales de Scania…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 26II-1753 [L-1530] (LS, signatura: ms. LS, IX: 363-364; cf. Ignacio Jordán de Asso.
Op. cit. nota 46, 5(13): 90-91. 1802). Carl Linné escribió, en latín, un pequeño
estudio sobre la aplicación agrícola de las gramíneas, que hizo llegar a Perh
Löfling a modo de carta (Upsala, 20-IV-1753 [L-1565]. ARJB, leg. II,1,6,19; cf.
[Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 136140. 1908), éste se lo remitió al marqués de Grimaldi, con leves retoques, en
los que se dismulaba el desconocimiento de Carl Linné sobre la realidad de
la agricultura hispana: “... entregué al Sr. Marqués copia (...) con la traduccion
española de la de Vmd. relativa á la Avena de los arenales. S. E. me mandó
156
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Un Gabinete…
No cabe duda del interés de José Hortega por fundar en la Corte
un Real Gabinte de Historia Natural, al modo de los que había
visitado en su viaje por Europa; y no desaprovechó ocasión
para ello. Con motivo del viaje organizado a los territorios
americanos, en el que habría de participar Pehr Löfling, dará a
éste instrucciones concretas sobre la remisión de materiales a la
Corte:
“… me mandó S. E. que con qualquier navío que
salga para Europa remita duplicadas las observaciones,
dibuxos y producciones naturales destinadas para el
Museo nuevamente establecido en esta corte, á fin de
que no se pierdan tan fácilmente. Estas piezas dobles
se distribuirán después á los demás Museos de Francia,
Inglaterra, Suecia, &c., con la condicion de que estos
comunicarán quanto posean de superfluo, y haga falta en
el Museo de aquí (…) El Sr. Ortega manifestó su alegría
delante de S. E., quien se dignó dar su aprobacion…”423
Sin duda pensando en el acopio de materiales para este
Real Gabinete se redactaron -quizás por el propio José Hortegaunas instrucciones dirigidas a Pehr Löfling, y que hoy solo
conocemos por la mano de éste, bajo el título “Lo que se debe
coleccionar para el Gabinete Real…”424
En la corresponencia remitida por el naturalista sueco a
José Hortega, poco antes de su partida para tierras americanas,
en diciembre de 1753, se refiere al modo en que habrían de
ordenarse las conchas en el Real Gabinete, recomendando las
propuestas de Niccolò Gualtieri (1688-1744)425, para advertir de
seguido:
que copiase una y otra, para entregarlas al dia siguiente al Sr. D. Joseph de
Carvajal…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Aranjuez, 24-VI-1753 [L-1600].
LS, signatura: ms. LS, IX: 370-371; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46,
5(13): 98-100. 1802).
423
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626]
(LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46,
5(15): 303-311. 1802).
ARJB, leg II,2,1 (transcritas en castellano por Francisco Pelayo
López, Miguel Ángel Puig-Samper. La obra científica de Löfling en Venezuela.
Caracas: Cuadernos Lagoven [Serie Medio Milenio], 1992; cf. págs. 41-43).
424
[Niccolò Gualtieri] Index testarum conchyliorum quae adseruantur in
museo Nicolai Gualtieri... et methodice distributae exhibentur tabulis CX. Florentiae:
ex typographia Caietani Albizzini, 1742.
425
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
157
“… Vmd. me perdone mi disgression en este assunto,
como Vmd, que ha visto tantos y tan bellos Gavinettes que
sabra mejor de todos, como se debe instituir el Gavinete
del Rey ns. Sr. correspondiente á su grandeza…”426
Es posible que este Real Gabinete sea el mismo que,
desde 1752, tuvo carta de naturaleza al cuidado de Antonio de
Ulloa; estuvo ubicado en Madrid, en el edificio chaflán entre
las calles Magdalena y Lavapiés427. En él encontraron acomodo,
además de las colecciones regias, los donativos ralizados por
los naturalistas que sirvieron en este establecimiento al servicio
de la Corona: William Bowles, Agustin de La Planche, Andrea
Keternin, Johan Keternin, Juan Pedro de Saura y José Solano.
La dirección de este Real Gabinete, también conocido como
Real Casa de la Geografía, pasó, en 1755, a manos de Eugenio
Reigosa, quien hasta entonces se ocupaba de la administración
del establecimiento y sustituía al director en sus ausencias. El
proyecto puede darse por finiquitado en 1756, cuando a los
alemanes Andrea y Johan Keternin se les traslada a las minas
de Almadén428; realmente, tras la destitución del marqués de la
Ensenada, principal adalid del plan, acaecida en junio de 1754,
este Real Establecimiento inicia un progresivo declive, que
pasará por la distribución de los instrumentos y piezas en él
conservados entre las muchas instituciones científicas gestadas
en la España de la segunda mitad del XVIII429.
426
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 18-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,11).
427
La casa, propiedad de José Pando, fue alquilada por el precio de
19.000 reales, constaba de tres alturas (principal, bajo y segundo), con fachada
a las dos citadas calles y a la de la Cabeza (cf. María de los Ángeles Calatayud
Arinero. “Antecedentes y creación del Real Gabinete de Historia Natural de
Madrid”. Arbor, 123(482): 9-33. Madrid, 1986).
428
Por estas mismas fechas se realquila el piso bajo y el segundo de la
casa, agrupándose todos los materiales del Real Gabinete en el principal (María
de los Ángeles Calatayud Arinero. Op. cit. nota 427, pág. 13. 1986).
429
De ello da pormenorizada cuenta María de los Ángeles Calatayud
Arinero (Op. cit. nota 427. 1986), basándose en el ‘Informe’ atribuido a Francisco
de Reigosa, último administrador de este Real Establecimiento, fechado en
San Lorenzo de El Escorial, el 29-XI-1773; el informe se conserva en el Archivo
del Museo Nacional de Ciencias Naturales [AMNCN], Real Gabinete, 159
(fide María de los Ángeles Calatayud Arinero. Catálogo de documentos del
Real Gabinete de Historia Natural (1752-1786). Madrid: Consejo Superior de
Investigaciones Científicas, 1987).
158
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
De ser cierta nuestra hipótesis, nos interesa destacar la
conjunción de intereses entre un proyecto orbitado en torno a José
de Carvajal -la participación de Pehr Löfling en la expedición al
Orinoco- y otro claramente dirigido desde la esfera del marqués
de La Ensenada -el Real Gabiente de la Casa de la Geografía-; y
el papel de conciliador de voluntades que, en tal caso, jugó José
Hortega en la aparentemente conflictiva Corte madrileña.
José Hortega dispuso de su propio gabinete de Historia
Natural; en época tan temprana como la de 1742, su colección
debía tener cierta importancia, la suficiente para ser expresamente
mencionada en L’histoire naturelle éclaircie dans deux de ses parties
principales, la lithologie et la conchyliologie, dont l’une traite des pierres
et l’autre des coquillages… publicada, de forma anómina (Paris:
chez De Bure, 1742), por Antoine Joseph Dezallier d’Argenville
(1680-1765):
“La Collection del Señor Hortega, Apotiquaire à
Madrid, prouve que le Maître est fort intelligent dans
l’Histoire Naturelle, il n’a néglicé aucune de ses parties &
il peut montree sur chacune, des piéces très-curieuses.”430
Poco más sabemos de esta colección; como el resto de sus
propiedades de carácter científico pasó a manos de su sobrino,
Casimiro Gómez Ortega, quien debió enriquecerla y reordenarla;
al menos para la parte mineralógica siguió el sistema de Johann
Friedrich Wilhelm Wiedemann, en la versión castellana que de
éste realizara Christiano Herrgen431. Este gabinete mineralógico
fue adquirido, hacia 1817, por el Real Colegio de Artillería de
Antoine Joseph Dezallier d’Argenville. L’histoire naturelle éclaircie
dans deux de ses parties principales, la lithologie et la conchyliologie, dont l’une traite
des pierres et l’autre des coquillages… Paris: chez De Bure, 1742 (cf. pág. 226).
430
“… siendo muy completa y aun duplicada o triplicada en algunos
ejemplares, que todos se hallan clasificados y marcados con el numero de la
pagina en que los descrive la Oritognosia de Videnmann, traducida por el
Profesor Herrgen…” (Solicitud, dirigida por el general-director del Real Colegio
de Artillería de Segovia, Martín García de Loygorri, al Secretario de Estado
del Despacho de Guerra, solicitando la adquisición del ramo geológico del
gabinete de José Hortega. Segovia, 20-VII-1817. AHM Segovia, s/c -fide Andrés
Díez Herrero. “La colección de minerales, rocas y fósiles de la Academia de
Artillería de Segovia”. Boletín Geológico y Minero, 108(2): 99-106. Madrid, 1997
-cf. pág. 102-). El texto aludido es: Johann Friedrich Widenmann. La Orictognósia,
escrita en alemán por D. Juan Federico Guillermo Widenmann... y traducida por Don
Christiano Herrgen... Madrid: en la Imprenta Real, por D. Pedro Julian Pereyra,
1797-1798. 2 vols.
431
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
159
Segovia, y constituyó el germen de la futura colección en él
atesorada432.
… y un Jardín
La conveniencia de fundar un Jardín Botánico en la Corte está
explícitamente expresa en la carta de presentación de su discipulo
Pehr Löfling, remitida por Carl Linné a José de Carvajal, en los
primeros días de 1751:
“Si placuerit Regi Vestro vere Magno Hortulum
concedere, poterit juvenis destinatus curare ut Plantae
Vestrates facile omnes, aut vivis radicibus aut seminibus
in eum introducantur quo Studiosi Vestrates in eo
addiscant patriae suae bona; vel etiam si placuerit mittere
juvenes aliquot Vestratum cum Loeflingio, indigitabit
non modo omni naturalia in locis eorum natalibus, sed
et ipsos docebit methodum singula facillimo negotio
dignoscendii.
Mihi suffiat si Discipulus mittat semina aliquot
minus trita pro Horto nostro, vel siccas aliquot plantas
per Herbario meo…”433
La idea debió estar presente en las tertulias de la Corte; al
menos Pehr Löfling era conocedor de ella; en carta a Carl Linné,
fechada en los comienzos de noviembre de 1751, ya señala: “El
señor Minuart (…) me ha enseñado el jardín que, según todos los
rumores por aquí, será el Jardín Botánico...”434 y, en diciembre
de 1753, en escrito remitido desde Cádiz, se refiere al Jardín
de aquel Real Colegio de Cirugía, como “muy necessario aqui
para el adelantamiento de la Historia Natural en España, y la
Al parecer existía un catálogo de este Gabinete, remitido, en 1817,
a la Junta Superior Facultativa de Artillería, para que aprobara su adquisición,
cuya localización actual se desconoce; la colección mineralógica de los Ortega
fue inventariada y recibida, en Segovia, por Antonio de Bartolomé (cf. Andrés
Díez Herrero. Op. cit. nota 431. 1997; Ibid. “Apuntes históricos sobre la colección
de minerales, rocas y fósilesde la Academia de Artillería de Segovia”. Llull, 28:
383-413. Zaragoza, 2005).
432
433
Carta de Carl Linné a José de Caravajal y Lancáster. Upsala, 14-I1751 [L-1222] (ARJB, leg. II,1,3,1 [copia]; transcrita por James Edward Smith.
Op. cit. nota 366, vol. 2: 459-464. 1821); copia en ARJB, leg. II,1,3,1 (cf. [Real
Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 97-100. 1908).
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura:
ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit.
nota 373, págs. 125-127. 1990).
434
160
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
conservacion del de Cadiz [tachado] Madrid, que Vmd piensa
erigir…”435
El rumor de su pronta creación se acrecentó en la
primavera de 1754, al menos entre los naturalistas catalanes; en
carta del cirujano Josep Borges a Josep Salvador, éste le comenta:
“… se formarà un Jardí Botànic y Real en la porta
de Atocha, prop de Santa maría de la Cabeza. Que D.
Josep Ortega es el principal, que D. Josep Quer té 18.000
reals de dotació y Minuart 12.000…”436
La orden de creación del Real Jardín de Madrid no fue
firmada hasta octubre de 1755437; pero, a finales de marzo de este
año, José Hortega escribe ya a Carl Linné dando cuenta de la
creación del Real Jardín, en Madrid, a la vez que le informa del
viaje de Pehr Löfling a Caracas y le agradece la descripción de
Ortega hispanica L. 438:
“Rex
noster
[Fernando
VI
(1713-1759)]
amplissimum Hortum Botanicum Madriti exivui
decreverit; huju studio at culturae assignati fuere D.
Quer et Minuart, mihique totius negotii cura, et institutio
commissa fuit, namq[ue] in his omnibus promovendis at
435
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 25-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,12).
436
Carta de Josep Borges a Josep Salvador. [Madrid], 6-IV-1754 (cf.
Josep Maria Camarasa, Op. cit. nota 398, pág. 54. 1989).
437
Sobre la primitiva instalación del Real Jardín Botánico en Migas
Calientes cf. Carmen Añón Feliu. “Noticias sobre los reales jardines botánicos
de Migas Calientes y el Prado”. Anales del Instituto de Estudios Madrieños, 21: 91116. Madrid, 1984; Ibid. Real Jardín Botánico de Madrid. Sus origenes: 1755-1781.
Madrid: CSIC, 1987; Francisco Javier Puerto Sarmiento. La Ilusión quebrada:
botánica, sanidad y política científica en la España ilustrada. Barcelona/Madrid:
Serbal/CSIC, 1988 (cf. págs. 38-66); Susana Pinar, Miguel Ángel Puig-Samper.
“La Botánica en el Jardín de Migas Calientes”. Asclepio, 48(1): 71-100. Madrid,
1996. Carmen Añón (Op. cit., 1987, pág. 11) señala como detonante de la
fundación del Real Jardín la presión ejercida por José Hortega ante José Suñol,
y la proposión realizada por éste a Fernando VI, con fecha de 31 de octubre
de 1753; en términos similares se expresan Susana Pinar, Miguel Ángel PuigSamper (Op. cit., 1996, p. 71).
438
Ortega hispanica Loefl. ex L., Species Plantarum: 560. 1753. “Pro
Ortega hispanica quam plurimas reddo tibi gratias, nullamque ocasionem
praetermitam ut literas tuas Leoffling scriptas ei diligenter transmitantur.”
(Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 25-III-1754 [L-1725]. LS, signatura:
mss. LS, XI: 277-278).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
161
assequondis aliquamtulum labori et diligentiae impesis
fuit…”439
La noticia de la fundación del Real Jardín es recogida
por Benito Paltor, en las lejanas tierras del Orinoco, en los meses
finales de 1756; éste parece sabedor de la empresa antes de
embarcarse hacia América, en el tránsito de 1753 a 1754:
“Acabo de recibir una noticia por un Amigo, la
que me ha alegrado muchissimo, y es: que el Rey ntro.
Señor (que Dios gde.) se ha servido establecer y dotar un
Jardin Real de Vegetables, nombrando por Yntendente
del referido Jardin, al Dr. Dn. Joseph Suñol, por SubDirectores con igual dependencia á Vm. y á Dn. Joseph
Martinez Toledano, por primer Professor de la Botanica
á Dn. Joseph Quer, y por segundo, á Dn. Juan Minuart, de
que doy á Vm. repetidas enhorabuenas (…)
Gracias á Dios que tiene Vm. conseguido, lo que
tanto deseaba para el bien publico. O! quan conbeniente
fuera que todas las Republicas tuviesen alguns. hombres
utiles para fomentar el bien comun, como en Vm. se
experimenta…”440
El organigrama del nuevo Real Jardín de Madrid estaba
fuertemente inspirado en el modelo organizativo francés, con
un médico de Cámara como Intendente, José Suñol, a quien
competen los asuntos de carácter económico y administrativo,
y dos profesores, José Quer y Juan Minuart, encargados de los
aspectos docentes. No obstante, el modelo español incorpora
una novedad: el establecimiento de dos cargos intermedios entre
el Intendente y los profesores, a modo de subdirectores; para
ocuparlos serían designados José Hortega y el boticario mayor
José Martínez Toledano. No cabe duda de que el Real Jardín nace
estrechamente vinculado a la Real Academia Médica de Madrid;
la plaza de Intendente recae en el Presidente de la Academia, y
los dos subdirectores también pertenecen a su seno441.
439
Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 25-III-1754 [L-1725]
(LS, signatura: mss. LS. XI: 277-278).
440
Carta de Benito Paltor a José Hortega. Muitaco, 8-XII-1756 (ARJB,
leg. II,4,3,5).
441
Así lo señala el bosquejo histórico que, a modo de introducción,
incorpora el primer volumen de las Memorias de la Real Academia Médica de
Madrid, de acuerdo con el cual, la Corporación: “... ha sido la oficina, por decirlo
así, en que se han fraguado los ventajosos designios de los Establecimientos del
Jardín Botánico y Laboratorio Chimico, y el plantel de todos sus catedráticos...”
162
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Las escrituras de venta de los terrenos donde se asentó
este primitivo Real Jardín, realizadas en diciembre de 1780, nos
ofrecen una extensa descripción física del espacio: la fachada
principal se encontraba en el camino del Real Sitio de El Pardo,
mirando al Soto de Migas Calientes; su perimetro tenía un
contorno irregular, cuyo lado mayor medía 800 pies442; disponía
de una ‘casa del jardinero’, estanque, un edificio con sólo una
crujía y alzado de cuarto principal y, a la derecha de ésta, otra de
cuartos pequeños de teja vana, un invernáculo, un cenador con
cubiertas a cuatro aguas, dos entradas y arcos que arrancaban
de una columna de piedra berroqueña con asientos del mismo
material443. Las casas y el invernáculo se ubican en la esquina
superior derecha del espacio, mientras en la esquina opuesta se
ubicaba el cenador.
La documentación disponible señala el especial
protagonismo ejercido por José Hortega durante los años de
acondionamiento del jardín del Soto de Migas Calientes444. A
[Real Academia Médica de Madrid]. “Noticia histórica del origen, progresos
y estado actual de la Real Academia Médica de Madrid”. Memorias de la Real
Academia Médica de Madrid, 1: I-LII. Madrid, 1797 (cf. pág. XIV).
Las otras medidas que ofrece la “Escritura de la venta del Jardín
Botánico...” (vide infra), son 282 pies por un lateral que, formando un ángulo
442
saliente, seguía la línea con 211 pies, hasta conectar con la línea recta de 800 pies;
por la izquierda, mirando al Norte, se extendía por 443 pies, a cuya distancia
formaba un ángulo entrante y seguía la línea con 306 pies; por el testero que
miraba a Oriente, un linea recta de 560 pies cerraba el sitio (AGP, Títulos, leg.
1257/13 –fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 445, pág. 94-106. 1987).
443
“Escritura de la venta del Jardín Botánico, sito a las márgenes del
río Manzanares, a favor de la excelentísima señora doña María Felipa Campbel,
marquesa de Castejón, con una descripción detallada del mismo”. Madrid, 22XII-1780 (AGP, Títulos, leg. 1257/13 –fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 445,
pág. 94-106. 1987).
Un documento, firmado por José Hortega, acompaña a las cuentas
de gastos efectuados, desde el 25-X-1756 al 24-XII-1756, con motivo de las
reparaciones efectuadas por varios hundimientos de los acueductos del Jardín;
éstas ascendieron a 5.636 rs.; en el escrito, dirigido a José Suñol, se hacía constar
que, como no se le habían entregado para las obras más que 4.700 reales, se le
adeudaba el resto. Con fecha de 26-I-1757 se cargan los gastos habidos en la
fábrica del invernadero, importaron la cantidad de 4.435 ½ rs. En 20-II-1758,
Hortega remite a Suñol las cuentas de gastos realizados, a la vez que solicita se
le librase alguna cantidad para reparar los desperfectos causados por el arroyo
que atravesaba el jardín, a la par que le recuerda el adeudo de 500 rs. 7 ms. por
los anticipos que él mismo había realizado. José Suñol se limitó a transmitir las
solicitudes de José Hortega al conde de Valparaíso (Carmen Añón Feliu. Op.
cit. nota 437, págs. 29-30. 1987).
444
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
163
su pluma debemos una extensa descripción de este espacio,
poblado de árboles frutales y de hortalizas antes de que fuese
destinado por el Monarca al estudio de las plantas. En el proceso
de acondicionamiento se desmontaron más de 800 árboles, que
fueron trasplantados en la huerta del Convento de la Visitación.
Tras finalizar las operaciones del desmonte se formaron doce
cuadros grandes adecuados al sistema tournefortiano de
veintidós clases y cuatro parterres; el espacio fue cercado con
cañas y estacas de pino y, cada parterre, disponía de una puerta
verde con llave y cerradura. En opinión de José Hortega, el
estanque grande, ubicado en una posición central, era el objeto
de menor valor estético, por lo que fue expresamente ‘adornado’
y cercado con una barandilla pintada de verde, en el mismo tono
que la protección con la que se dotaba a cada uno de los cuatro
parterres con que contaba el Jardín.
La vegetación existente con anterioridad a su
acondicionamiento estaba prácticamente perdida, en especial los
setos de boj, éstos fueron replantados junto con tilos, castaños de
Indias, olmos, robinias, jazmines, clemátides, granados, acacias,
laureles, pistachos, acebos, avellanos y algunos otros de los
árboles que José Quer disponía en el jardín de los Afligidos445.
El estanque central fue rodeado de plantas de muy
diverso tipo entre las que destacan un drago, algunas bignonias
y plantas de añil; en el lado oeste, cercano al río, se cultivaron
tiestos con aloes, opuntias, yucas y cereus; al norte del jardín se
ubicaba un cuadro de patrones para injertar, otro de hiedra, dos
de violetas, un bancal de corona imperial (Fritillaria imperialis
L.), tres de jacintos y cuatro cuadros de repuesto con bulbosas y
anuales. Junto al cenador, y en las proximidades de una pila de
agua, se encontraba un cuadro con plantas de flor como prímulas,
verónicas y ranúnculos, además de un cuadro dedicado al cultivo
de fresas y un depósito general plantas. El Jardín disponía de
cuarenta y dos eras enfocadas al cultivo de plantas medicinales,
una platabanda y otras diecisiete eras de plantas ‘venenosas’:
mandragora, belladona, datura, beleño, cicuta, tejo, acónito,
445
AGS, Sitios Reales, leg. 248, fol. 138-150 (fide Carmen Añón Feliu.
Op. cit. nota 437, pág. 27. 1987).
164
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
ricino, etc.446 Las obras del nuevo jardín comenzaron con rapidez,
de finales de 1756 data la construcción de nuevo invernáculo447.
Los gastos ocasionados por las labores de
acondicionamiento y mantenimiento del Real Jardín fueron
abonados con cargo a los ‘caudales sobrantes del Arca del
Protomedicato’; el mismo fondo se ocupó de sufragar los sueldos
de quienes habrían de encargarse de la enseñanza de la Botánica:
12.000 rs. vn para el primer catedrático y 8.000 rs. vn para el
segundo, además de las ayudas de costas para sus posibles viajes
de herborización. Tanto el cargo del Intendente, José Suñol,
como el de los dos Subdirectores, José Hortega y José Martínez
Toledano, tenían carácter honorífico.
El Real Jardín dispuso, en sus años iniciales, de un
presupuesto de 8.000 rs. para contratar a los jardineros precisos
y 800 rs. más para ajustar con un par de ‘soldados inválidos’ el
que trabajasen como porteros.
446
Casimiro Gómez Ortega. Inventario de todas las plantas, utensilios y
enseres del Real Jardín Botánico, hecho en el mes de octubre de I77I. Biblioteca del
Palacio de Santa Cruz de Valladolid (BPSC), ms. 109 (fide Susana Pinar, Miguel
Ángel Puig-Samper. Op. cit., nota 437. 1996).
Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 437, pág. 27. 1987. Al parecer,
de la construcción de los invernáculos –y aún de la planificaicón general del
Jardín- quiso ocuparse Ventura Rodríguez [Buenaventura Rodríguez Tizón
(1717-1785)] (AGS, Secretaría y Superintendencia de Hacienda, Protomedicato
y Jardín Botánico, leg. 951 -fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 437, pág. 27.
1987-), aunque no tengamos constancia documental de tales realizaciones.
447
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
165
La aventura americana
Las canelas del Paraíso
Tras regresar a la Corte, después de su viaje europeo, en la
primavera de 1753, es José Hortega quien se ocupa de coordinar
la participación de Pehr Löfling en un viaje trasoceánico. El
proyecto de viajar a América, bosquejado desde la primera
entrevista entre José Carvajal y Pehr Löfling, dos años atrás, hubo
de esperar a que Hortega realizara el suyo por las academias
europeas; entonces comenzó a vislumbrarse como una realidad;
a finales de junio de 1753, escribirá Löfling a Linné:
“Todavía no se explican con claridad sobre mi
viage; pero el Sr. Marques de Grimaldi me dixo en confianza
que ya estaba resuelto, y que pasaria á la América; no sé á
que provincia, pues no quiso declarármelo. Creo que iré á
Chile, en compañía de otros Señores Oficiales de Marina,
matemáticos y directores, y yo deberé tener dos segundos
á mis órdenes. Me expresó que nunca podia apetecer
mejor ocasión y que mi viaje tendria efecto dentro de
breve. En quanto á yerbas le respondí tenía entendido que
Mr. Joseph de Jussieu habia herborizado en todo el Perú.
Repuso el Sr. Marqués que era cierto; pero que yo iria á
otra parte. Le insinué que seria ventajoso el ir á México,
en donde Hernández habia estado, pero ob fata seculi dexó
sus observaciones obscuras é imperfectas…”448
Poco tiempo después, a mediados de agosto de éste 1753,
en presencia de José Hortega, el propio José Carvajal le aporta una
información mucho más precisa; tendrá entonces oportunidad
de conocer a quienes habrían de viajar con él al Nuevo Mundo:
“El 15 de Agosto pasado tuve la honra de hablar
con el Excmo. Sr. Carvajal por medio del Sr. Ortega en
presencia de mis compañeros, y parece que ya no debo
dudar de mi viage (…) Tengo ya dos Médicos jóvenes
graduados, conocidos de algún tiempo, por discípulos
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Aranjuez, 24-VI-1753 [L-1600]
(LS, signatura: ms. LS, IX: 370-371; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46,
5(13): 98-100. 1802).
448
166
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
y ayudantes (…) A mas de estos habrá dos dibuxantes
destinados para copiar al vivo todo lo que parezca digno
de atencion (…) yo seré el xefe de los quatro por lo
perteneciente á la historia natural (…)
Hay un xefe ó cabeza á quien todos estamos
sugetos. Este dirigirá los viages según las ordenes que
lleva, que sin duda son secretas. No podemos decir con
certeza adonde vamos hasta que con el tiempo se sepa. El
Sr. Ortega, á quien lo pregunté, me dixo que no lo sabia;
pero cree que por todo el mes que viene irémos á Cádiz (…)
que después nos embarcarémos para la Havana (ó tal vez
para otra parte), y de alli pasarémos al rio Marañón ó de
las Amazonas. Desde aquí atravesarémos toda la América
meridional, empezando por el Brasil, y acabando en el
Perú; y si no hay novedad caminarémos hacia el norte
hasta llegar á México, desde donde volveremos á España.
Otros juzgan que irémos directamente á México, luego al
Nuevo México que está más al norte quasi paralelo con
la Florida y la Virginia, donde pasarémos á lo largo de
la costa del golfo de California. Lo primero parece mas
seguro. Otros dicen que estarémos fuera quatro ó cinco
años, y otros de ocho á nueve; lo qual muy bien puede
suceder…”449
Para este viaje se prepararon unas instrucciones -quizás
de mano del propio José Hortega- sobre el trabajo que el sueco
habría de realizar; unas máximas que a Pehr Löfling le recordaron
a las establecidas en el Peregrinator que Carl Linné incorporó a
su Philosophia Botanica…450 Y se fijaron normas concretas para la
remisión de materiales y la redacción de los textos: “El diario de
mi viage se escribirá en castellano, y las observaciones en latín”451
La operación se concreta en los primeros días de octubre de 1753,
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626]
(LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46,
5(15): 303-311. 1802).
449
450
“... se me ha dado una instruccion para mi gobierno, que coincide
con las reglas que Vm. deduxo de la Filosofía botánica, é intituló Peregrinator…”
(Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626]. LS,
signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15):
303-311. 1802).
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626]
(LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46,
5(15): 303-311. 1802).
451
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
167
para entonces Pehr Löfling escribe a Carl Linné, precisando ya el
plan de su viaje:
“Mi viage de América está en el día tan
adelantado, que mañana, siendo Dios servido, saldré
para Cádiz (adonde se llega en 15 ó 16 dias), con el fin
de embarcarme este otoño (…) El xefe de la compañía es
D. Joseph de Iturriaga, Capitan de alto bordo en la Real
Armada, y Director de la Compañía de Caracas, que
comercia especialmente en cacao. Su segundo D. Eugenio
Alvarado, Coronel de Infantería natural de Lima. Síguese
D. Juan Ignacio Madariaga y D. Joseph Solano, Capitanes
de Fragata, por las matemáticas (...) Don Joseph Solano
es el mismo que me acompañaba á casa del Sr. Carvajal
quando yo no entendía el idioma (…) Tengo por
segundos dos Médicos jóvenes, D. Benito Paltor, natural
de los mismos Pireneos [sic], y D. Antonio Condal, de
Barcelona. A estos se agregan dos muchachos de 16 á 17
años de edad, hijos de dos sugetos bien acomodados en
esta corte, y se llaman D. Bruno Salvador y Don Juan de
Dios Castel, que dibuxan muy bien, y con esta ocasión
estudiaran la historia natural (…)
En Cádiz me darán 20@ rs. vn., que hacen 1500
rixdalers de Suecia, para vestirme y proveerme de ropa
blanca (…) Tengo ya 10@ rs. de sueldo al año, porque me
han aumentado 2@. Los Médicos tienen la mitad que yo,
así como por lo tocante á sueldo como por la cantidad
que recibirán en Cádiz (…) Según las noticias mas ciertas
vamos á Cumaná, situada en la parte oriental de Tierra
firme (…) desde allí pasarémos por tierra al Orinoco,
donde harémos nuestro principal campamento para
descubrir mejor este río, sobre el qual varian tanto las
relaciones.
Despues subirémos rio arriba hasta un ramo de
él, que se llama el rio Mete, continuando hasta Santa fe
de Bogotá: todo lo qual hace un viage de 500 leguas (…)
Desde aquí seguirémos por tierra hasta Quito, despues á
Lima y de allí á Buenos-Ayres. Luego baxarémos hácia
la tierra de Patagones; y por último ó nos embarcamos
para Europa, ó como parece mas cierto retrocederémos
por tierra, completamdo asi un giro de 6@ leguas. En una
palabra, examinarémos todas las provincias de la América
168
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
meridional. Dios nos conceda un feliz viage para gloria
suya y progreso de las ciencias…”452
José Hortega asumirá el control de las actuaciones
relacionadas con Pehr Löfling; la vinculación, hasta entonces
apenas bosquejada, adquiere un intenso protagonismo. En
primer lugar, a mediados de octubre de 1753, se presentará ante
Carl Linné como el mediador elegido por el Secretario de Estado:
“Mr. Leoffingius se prepare a partir pour
l’Amerique et j’ai ray soint pendant son absence de vous
remetre ses lettres, et de luy envoyer ses reponces; vous
aurez la bonté de me les adresser avec une segonde
envelope adressée a S. Exco. M. Dn. Jph. Carvajal Secretaire
[tachado] Ministre [sobrescrito] d’etat de S.M.C. Je vous
reitere les offr. de mes services et vous prie de croire que
Je suis de cour et d’affection…”453
Luego, desde los comienzos de noviembre de éste 1753,
se ocupará de mantener una correspondencia, prácticamente
semanal, con el discípulo linneano: se interesará por su viaje a
Cádiz, le solicita información sobre las plantas encontradas en el
itinerario, le sugerirá el estudio de las producciones marinas y le
servirá de contacto con Pedro Virgili (1699-1776)454; comentarán
452
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 15-X-1753 [L-1652] (LS,
signatura: ms. LS, IX: 379-380; 383-384 –duplicado-; cf. Ignacio Jordán de Asso.
Op. cit. nota 46, 5(15): 311-319. 1802). En términos similares, aunque limitando
el viaje hasta el Virreinato del Perú, se expresa en carta a Carl Linné. Cádiz,
31-XII-1754 [L-1692] (LS, signatura: ms. LS, IX: 388-389; cf. Ignacio Jordán de
Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 327-328. 1802 [sub 1-XII-1754], el original mantiene
la fecha señalada por nosotros).
Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 12-X-1753 [L-1654]
(LS, signatura: mss. LS. XI: 275-276]). La carta fue inserta en la correspondencia
remitida por Pehr Löfling: “Incluyo una carta del Sr. Ortega, quien se ha
ofrecido gustoso á servir de mediador para que yo desde América pueda tener
comunicacion con mi amada patria…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné.
Madrid, 15-X-1753 [L-1652]. LS, signatura: ms. LS, IX: 379-380; 383-384 –
duplicado-; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 311-319. 1802).
453
454
Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 6-XI-1753 (ARJB, leg.,
II,1,7,3). Sobr él escribirá Pehr Löfling: “Este Dn. Pedro Virgilio es grande amigo
de Don Joseph Hortega (…) Es hombre de luces, y de un talento sobresaliente,
muy amante de las ciencias, y de todos los que las cultivan. Actualmente es
director del Colegio de Cirugia de Cádiz, que él mismo fundó (…) Goza de
una grande autoridad, y es digno de los mayores elogios por su desinterés. Es
lástima que no sea Botánico; aunque su aficion á las ciencias, le ha movido á
poner un jardín en el Colegio…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Puerto de
Santa María, 18-XII-1753 [L-1687]. LS, signatura: mss. LS. IX: 381-382; cf. Ignacio
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
169
las riquezas naturales del Reino de Perú (canela de Quito,
calaguala, estoraque, acíbar, escamonea, etc.), se interasará por
su opinión sobre las teorías providencialistas defendidas por
el clérigo francés Jacques Bénigne Bossuet (1627-1704)455; le
sugerirá que recurra a José de Iturriga (1699-1767) para solvertar
los problemas económicos derivados de la conservacón de los
materiales coleccionados y le solicitará una traducción sobre
unas experiencias realizadas con aguas minerales, publicadas
en sueco456. A lo largo de toda la correspondencia se presenta
como el eslabón inmediato con del Secretario de Estado, José de
Carvajal y Lancáster:
“Estos dias he vuelto á hablar de Vm á S. Exª y
puedo asegurar á Vm, que goza plenamente de su gracia,
y en mi dexa Vm un amigo, y un agente que cuidara
en todo tiempo de conservarsela, porque ninguno mas
que yo conoce el merito de Vm, y el fondo de su buen
corazón…”457
Las cartas escritas por Pehr Löfling a José Hortega
siguen la misma cadencia, casi semanal; en ellas dará concreta
información sobre las plantas herborizadas durante su viaje a
Cádiz458, sus impresiones sobre el Jardín Botánico del Colegio de
Cirugía459; y sus trabajos sobre la historia natural de los mares
gaditanos, en particular sobre los peces, a los que dedica gran
atención, y de los que ofrece material “para dar principio al
Museo ó el Gavinete, que Vmd. intenta instruir en Madrid”460; y,
Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 319-327. 1802).
455
Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 20-XI-1753 (ARJB,
leg. II,1,7,5).
456
Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 11-XII-1753 (ARJB,
leg. II,1,7,9).
457
II,2,2,1).
Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 8-I-1754 (ARJB, leg.
Entre los fondos del Real Jardín Botánico (Madrid) (leg. II,2,5,10. [30
h.]) se conserva un diario de este viaje; recoge lo acontecido entre el 20-X-1753
y el 15-II-1754; ha sido transcrito por Agustín Barreiro. “De Madrid a Cadiz
en 1753; anotaciones y observaciones de D. Pedro Loefling…” Boletín de la Real
Sociedad Geográfica, 66: 7-31. Madrid, 1926. [Inicialmente publicado en lengua
sueca, con traducción de Johan Almkvist, en Svenska Linné-Sällskapets Ärskrift,
[1925]: 25-42. Upsal, 1925].
458
459
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 12-XI1753 (ARJB, leg. II,1,7,4).
460
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 27XI-1753 (ARJB, leg. II,1,7,6). Pehr Löfling recogió sus observacioens gaditanas
170
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
por supuesto, se explayará sobre el interés que tiene el estudio
de los simples medicinales americanos, particularmente sobre
la canela de Quito, pero también sobre la calaguala, ipecacuana,
contrayerba, jalapa, cascarilla, etc461. Toda la correspondencia
gaditana remitida por Pehr Löfling a José Hortega está plagada
de comentarios sobre los trabajos de Pedro Virgili462, con quien
estudia las posibilidades de aprovechamiento del Jardín Botánico
que éste había establecido en el Colegio de Cirugía:
“Con Dn. Pedro Virgilio passé algunos dias la
semana pasada tratando sobre el cultivo de su Jardín; y
daré en un papel las reglas, que he visto executarse en
otros Jardines, á ver como siguiendo á ellas, se logra el
fin de este Jardin que reputo muy necessario aqui para
el adelantamiento de la Historia Natural en España…”463
Pehr Löfling llegó al Puerto de Santa María el 2 de
noviembre de 1753, tras catorce días de camino desde la Corte;
pronto pasó a Cádiz y se mantuvo entre esta ciudad y el Puerto
a la espera de las órdenes de embarque464. Ocupa su tiempo en
sobre los peces en el manuscrito [31 h.] Pisces gaditana. Observata Gadibus ed ad
Portus Sª. Maria. 1753. Mens. Nov. et Dec. (ARJB, leg. II,1,7,15); de su estudio se
ocuparon Francisco Pelayo López, Joaquín Fernández Pérez. “Los peces de las
costas gaditanas descritos por Pedro Löfling en 1753”. En: Paz Martín Ferrero
(ed.) Actas del Simposio CCL aniversario nacimiento de Joseph Celestino Mutis: 451455. Cádiz: Diputación de Cádiz, 1986.
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 18-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,11).
461
462
“En Dn. Pedro Virgili he hallado un hombre tal como Vmd. nos hizo
favor de explicarnos, y estimamos individualmente el favor que nos ha hecho,
tanto de su propia inclinacion de querer bien a los que se aplican a las Ciencias,
como la especial recomendacion, que Vmd. nos dio…” Carta de Pehr Löfling a
José Hortega. Puerto de Santa María, 27-XI-1753 (ARJB, leg. II,1,7,6).
463
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 25-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,12).
464
Él mismo lo pone en conocimiento de Carl Linné: “El 20 de Octubre
pasado (…) fue el primer dia de mi salida para el viage de América. El 2 de
Noviembre llegué felizmente al Puerto de Santa María y el 5 á Cádiz, en donde
me detuve solas dos semanas, y luego me restituí al Puerto en compañía de los
demas señores, porque aquí hay mejor proporcion para adelantar en la historia
natural, y no en una ciudad aislada como Cádiz. Ordinariamente me han
ocupado los peces; y llegan á 50 ó 60 las especies, las que he puesto á conservar
en espíritu de vino, destinadas para el Museo de la Reyna Ntra. Señora…”
(Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Puerto de Santa María, 18-XII-1753 [L1687]. LS, signatura: mss. LS. IX: 381-382; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit.
nota 46, 5(15): 319-327. 1802); cumplía así una de las solicitudes efectuadas por
Carl Linné meses atrás: “... me ordenó S. M. la Reina muy encarecidamente
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
171
sus trabajos de historia natural, preferentemente la marina, y
suele estar acompañdo de los jóvenes médicos que el Rey puso
bajo su responsabilidad. Un equipo que tiene en José Hortega
su paladín ante la Corte; así se desprende de los comentarios de
Benito Paltor, en los momentos de mayor crisis de su aventura
americana:
“… de las penalidades del viage indispensables
por el terreno y su temperie ya era Yo sabedor en esta
Corte por el difunto Dn. Joseph Carvajal, requienscat; qn.
boca á boca nos lo dixo en presencia de Vm., en ocasion
en que Vm. nos presento á ns. Comps. y a ms. á S. Exca (…)
juzgo la satisfaccion, menos que en esto medie de todas
veras su alta proteccion y empeño de Vm. cuya confianza
me tiene amarrado con cadenas en el Rl. Servicio…”465
Pehr Löfling, y con él su pequeño grupo expedicionario,
se incorporaban, como naturalistas, a la Expedición de Límites,
mandada por José de Iturriaga y Aguirre (1699-1767)466, cuyo
objetivo era establecer las lineas divisorias entre los territorios
de las Coronas española y portuguesa, derivados del tratado
firmado, en Madrid, en 1750. La Expedición, diseñada por José
de Carvajal, incluye otros fines secundarios: la recopilación de
que le escribiera á usted y le rogara tuviera la amabilidad de reservar para ella
toda clase de animales, amphibia, peces en spiritu vini, de los que se hallan en
España, y mandarlos á S. M. ...” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala,
14-V-1753 [L-1587]. ARJB, leg. II,1,6,20; traducida del sueco en [Real Sociedad
Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 138-140. 1908). El envío
de estos peces a Suecia le supuuso contraer una deuda con el cónsul Bellman,
aún no saldada en el mayo de 1760, cuando Clas Alströmer visitó Cádiz: “…
Löfling, antes de su salida para América, pidió y recibió 400 piastras contra un
recibo a nombre del cónsul con el fin de comprar producciones de la naturaleza
para la Reina. El citado resguardo se lo ha enviado Bellman a los señores Gril
de Estocolmo para poder cobrarlo, pero no ha recibido ninguna respuesta…”
Carta de Clas Alströmer a Carl Linné. Cádiz, 7-V-1760 [L-2733] (LS, mss LS, I:
59-60; traducción de Joaquín Fernández Pérez. “Tres apóstoles de Linné en
Cádiz: Pehr Osbeck, Perhr Löfling y Clas Alströmer”. En: Francisco Pelayo (ed.)
Pehr Löfling y la Expedición al Orinoco, 1754-1761: 51-102. Madrid: Turner, 1990
(cf. págs. 95-96).
465
Carta de Benito Paltor a José Hortega. Muitaco, 25-XI-1756 (ARJB,
leg. II,4,3,4).
Con quien Pehr Löfling parece mantener una buena relación
personal, e incluso comenta asuntos relacionados con la utilidad terapéutica
de los vegetales que estudia: “Una Salanamunda de Clusio con ojas lisas y flor
blanca (el Infuso de esta es buena contra la Gota, segun como me enseño por
experiencia referida el Sr. Dn. Joseph de Iturriaga)…” (Carta de Pehr Löfling a
José Hortega. Puerto de Santa María, 27-XI-1753. ARJB, leg. II,1,7,6).
466
172
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
informes de carácter geográfico y económico sobre las tierras
visitadas; su organización territorial, las posibilidades de
su colonización, y otras memorias de carácter astronómico,
cartográfico y de historia natural:
“Uno de los destinados de la expedicion que esta á
cargo de V.S. como Comisario principal del Rey es Pedro
Leofling [sic] de Nacion sueco, y de profesion Botánico, al
cual acompañarán quatro muchachos españoles para que
se instruyan.
Bien conoce V.S. quanto importa examinar todo
lo posible las particularidades que cria la naturaleza en
aquellos países tan incognitos; y si como lo presumo el
estudio de este hombre se extiende á mas que á un mero
Herbolario, podrá ser mui util su trabajo, haciendole
reconocer además de los Arboles y hiervas raras, todos
quantos Minerales y piedras se encuentren (…)
Sin embargo haciendo memoria de los
descubrimientos antiguos (…) he discurrido que en
ninguna parte se puede emplear mejor la habilidad de
Leofling [sic], que en examinar la calidad de esta Canela
[de Quito] y ver si hay modo de mejorarla con el cultivo”467
Tras este informe de José de Carvajal a José de Iturriaga,
fechado a comienzos de octubre de 1753, la canela se convierte
en uno de los temas centrales de la correspondencia entre José
Hortega y Pehr Löfling: “Creo que irá vm al Rno. del Peru donde ay
grandes cosas qe. ver, y observar, y entre ellas la Canela de Quito
que se desea mucho, y creo que por falta de cultivo, coleccion,
u, otra circunstancia, nos es óy inutil…” escribirá Hortega en
noviembre de 1753468; “La Canela de Quito pienso sea la misma
que Plukenecis Phytograph. t. 22 f. 1 y tab. 160, fig. 7 llama Canela
peruana, y algunas Pharmacopeas Cortex Winteranno ó Canella
alba, que si es verdad, es claro que nunca puede ser de la misma
467
Informe de José de Carvajal a José de Iturriaga. Madrid, 8-X1753 (AGS, Estado, leg. 7375; transcrito por Francisco Pelayo, Miguel Ángel
Puig-Samper. Op. cit. nota 424 págs. 53-56. 1992). José de Carvajal también se
interesó por la Hitoria Natural del territorio comprendido entre el Orinoco y el
Amazonas y el estudio del cacao en las misiones de Moxos (cf. Manuel Lucena
Giraldo. “Del Tratado de Madrid al Tratado de El Pardo (1750/1761)”. En:
Manuel Lucena Giraldo, Antonio E. de Pedro. La frontera caríbica. Expedición
de límites al Orinoco 1745/1761: 6-81. Caracas: Cuadernos Lagoven [Serie Medio
Milenio], 1992 –cf. pág. 20-).
468
Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 20-XI-1753 (ARJB,
leg. II,1,7,5).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
173
calidad de la Canela del Levante como son seguros distintos
arboles…” responderá Löfling en su contestación de comienzos
de ese diciembre469; “…y le prevengo, que la Canela de Quito es
muy diferente de la Canela alba oficinal ó Corteza Winteriana,
y ácaso podra ser la Casia Lignea. El Sr. Iturriaga ha de tener en
su poder una memoria, que contiene las noticias de la referida
Canela, pero hasta que Vm se halle en Quito no podremos salir
de la duda…”, corregirá Hortega en enero de 1754470.
Y es que, de acuerdo con las instrucciones remitidas
por Carvajal a Iturriaga, tal debía ser el destino del grupo
expedicionario dirigido por Pehr Löfling:
“Discurro que luego que llegue V. S. á las cabeceras
del río Negro, despachará persona de confianza á Quito
para que se prevengan los caudales (…) que libren á favor
del Botánico todo quanto necesite para su vestuario y
manutencion, y al mismo tiempo podrá V.S. enviarle á
el y á los muchachos al pueblo de San Borja (…) á fin de
que inmediatamente dispongan que pasen á su destino
sin esperar las órdenes de Quito para que en los 3 ó 4 años
que ha de durar la expedicion tenga tiempo de hacer los
experimentos posibles…”471
Antes de su partida a tierras americanas, Pehr Löfling tuvo
acceso a dos textos básicos para su trabajo posterior: la primera
edición del Species Plantarum... linneano, y el primer volumen de
los trabajos de Pehr Kalm (1716-1719) sobre la naturaleza de la
América el Norte472, y a una animosa carta de su maestro, Carl
Linné:
469
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 18-XII1753 (ARJB leg. II,1,7,11).
470
II,2,2,1).
Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 8-I-1754 (ARJB, leg.
Informe de José de Carvajal a José de Iturriaga. Madrid, 8-X-1753
(AGS, Estado, leg. 7375; transcrito por Francisco Pelayo, Miguel Ángel PuigSamper. Op. cit. nota 424, págs. 53-56. 1992).
471
472
“… y como principalmente las Species plantarum de Lineo, que es
el uno de los dhos libros es para mi sumo necessario para el viage que voy á
hacer como contiene todas las especies que seguramente han podido reducir á
sus generos con sus diferencias especificas para conocerlos, y de tal suerte un
compendio de todos los autores qe. puede suplir la falta de los mas prolixos
quales no puede traer consigo un peregrinante (…) Como los otros son cosa
chica, saco que S. Exca. me permitira qe se embiaran juntos, por ser el otro libro
un viage, que [el] Profesor Kalm [Pehr Kalm (1716-1719)], Sueco hizo tres
años há á la America y con sus exemplos de una atencion grande sobre cosas
174
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
“Por usted será descrita por primera vez toda
la magnífica América, cuyo destino ha sido reservado
tantos siglos para usted y su tiempo. ¡Ah!, dichoso el que
pudiera estar con usted un solo día en el más hermoso
paraíso, le felicito á usted tanto como me compadezco
de mi. Mi querido Loefling, piense usted en mi, cuando
llegue á su destino…”473
La tierra de promisión
El 2 de febrero de 1754 Pehr Löfling llevó sus pertenencias al
navío Santa Ana, de la Compañía de Curaçao, en el que habría
de viajar hacia América474. Los materiales gaditanos que dispuso
llegaran a la Corte de España quedaron en poder de Pedro
Virgili, quien habría de ocuparse de remitirlos a José Hortega475.
La Expedición partió del puerto de Cádiz el 15 de febrero, nueve
días después los buques que la componían se sitúan a la altura
de las Islas Canarias476.
Mientras Pehr Löfling se encuentra camino al Orinoco,
José Hortega escribe a Carl Linné dando cuenta de la aventura
americana de su discípulo:
“Petrum Leoffling Discipulum tuum protegere
et amare non denitam, cum ob commendationis tuae
memoriam, tum denique ob ejus suavissimam indolem
et notissimum meritum: scias tamen vellem eum in
naturales y principalmente economicas, me servirá, para con el mayor cuidado
hazer semejantes…” Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cádiz, 8-I-1754
(ARJB, leg. II,2,2,2). El acuse de recepción de los libros, en carta de Pehr Löfling
a José Hortega. Cádiz, 2-II-1754 (ARJB, leg. II,2,2,4).
Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 2-X-1753 [L-1660] (ARJB,
leg. II,1,6,23; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia
Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 147-151. 1908).
473
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cádiz, 2-II-1754 (ARJB, leg.
II,2,2,4); el certificado de embarque (ARJB, leg. II,2,6,2) informa de “Tres Baules
regulares y en ellos Quatro Dozenas de Camisas nuevas y Diferentes Libros
vistos por el Sto. Oficio y su Cama”.
474
475
Algunos de ellos destinados a llegar a las manos de Carl Linné, tras
de que Juan Minuart se ocupara ‘de ponerlas en orden’ (Carta de Pehr Löfling
a José Hortega. Navío Santa Ana [a la altura de Canarias], 24-II-1754. ARJB, leg.
II,2,6,1).
Momento que aprovechó para remitir una nueva carta a José
Hortega (Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Navío Santa Ana [a la altura de
Canarias], 24-II-1754. ARJB, leg. II,2,6,1).
476
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
175
Provintiam Caracas jam profectum esse. Postea que
in Peruvianum Regnum migraturum cum aliis sociis,
duo nempe Medici, duoque Pictores, cet quacumque
rara, curiosa ac utilia in hac peregrinatione invenevint;
observere, colligant depingant, et in Hispaniam
transmitans, quaequidem res quamtum utilitatis et
incrementi rei Botanicas allaturant, facile conjectare
poteris, praesertim cura...”477
Los expedicionarios tomaron tierra en el puerto de
Cumaná el 11 de abril, tras un viaje algo más largo de lo habitual,
del que Pehr Löfling dará cuenta inmediata a José Hortega:
“Nuestro transito del Mar, ha sido verdaderamente
mas largo, (…) ha experimentado tanta calma, y viento
contrario, pues desde Cadiz á Cumaná, a donde saltamos
el dia 11 de Abril, hemos puesto 55 dias que todos
antes habian hecho en 40. A Dios gracias, que tantos
que salimos para esta expedicion, tantos hemos llegado
aca con completa salud. Dn. Antº Condal solamente ha
padecido de tercianas, por largo rato del viage.
Nuestro ordinario trabajo en el navio ha sido de
estudiar la Botanica, y continuar la enseñanza de ella á
los Medicos, que ahora se han adelantado muy bien, y
lo que mas me alegra, han tomado el gusto de aplicarse
seriamente al estudio, que ahora sirven con muchissima
utilidad en la collecion de las plantas y principalmente
de buscar y preguntar las virtudes y el uso de ellas de los
naturales.
Los he impuesto en los ambos methodos de
Tournefort; y de Lineo, que á breve por si mismos valdran
explicarse, en descubrir plantas, y describirlas...”478
Junto a este primer informe desde tierras americanas,
Pehr Löfling envía a José Hortega “La inclusa carta suplica á Vmd,
que le mande seguir para Suecia, ó por la mano del Embajador
Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 25-III-1754 [L-1725]
(LS, signatura: mss. LS. XI: 277-278]).
477
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cumaná, 18-IV-1754 (ARJB,
leg. II,2,6,4). En términos similares se expresa en carta a Carl Linné. Cumaná,
18-IV-1754 [L-1744] (LS, signatura: mss. LS. IX: 390-393; cf. Ignacio Jordán de
Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 328-338. 1802). Conservamos una “Memoria de
las cosas naturales que se han observado en el viaje desde Cadiz hasta ahora
en Cumana”, redactada por Pehr Löfling (AGS, Estado, leg. 7389, fol. 6 –fide
Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, pág. 166. 1993-).
478
176
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de Suecia, o por otra cubierta al Residente de Suecia en
Hamburgo Mr. Kôning; ella es para Mr. Lineo, con inclusa á mis
padres...”479 Josep Hortega no utilizará los caminos propuestos
por Löfling, y será él mismo quien se arrogue el protagonismo
de servir de intermediario entre ambos naturalistas suecos480; en
la carta, remitida a fines de octubre de 1754, solicita le remita la
correspondencia “sub involucro illo transmitantur à Illr. Mr. Wall
Premier Secretaire d’Etat de S.M.C. à Madrid”.
Tras la muerte de José de Carvajal y Lancáster, en marzo
de 1754, y luego de la breve interinidad de Fernando de Silva
y Álvarez de Toledo, es Ricardo Wall y Devreux (1694-1777), el
nuevo Secretario de Estado481, quien dirige las riendas de esta
política sobre la Historia Natural en cuyo diseño José Hortega se
encuentra inmerso.
Los cambios acaecidos en la vida política española, de
los que Pehr Löfling tiene noticia durante su estancia en tierras
americanas, provocan una evidente sensación de angustia en el
expedicionario. En carta remitida a su compañero Lars Jonasson
Montin (1723-1785), en 1754, escribe:
“De España no he recibido carta, pero he sabido
más de lo que hubiera querido. El Excelentísimo señor
Carvajal, mi mecenas, murió en el mes de abril482. El
Marqués de la Ensenada, segundo ministro, ha sido
depuesto, y toda la dirección del gobierno ha cambiado.
El futuro mostrará lo que me espera…”483
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cumaná, 18-IV-1754 (ARJB,
leg. II,2,6,4).
479
“Literas â charissimo Leofflingio tuo ex America transportatas
libentissime tibi mitto, ex ejis enim scire poteris illum in hac peregrinatione
multa rara ac mirabilia observate, quae magnum ornamentum historiae naturali
summamque Patriae gloriam imposterum allatura non dubitio: praecipue si
omnia quae Loefflingius caeteviquè socii annotaverint, descripserint, atque
in ordinem redexerint, Regis sumpotibus, et auspiciis publicam lucem portea
consequantur...” Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 30-IX-1754 [L1800] (LS, signatura: mss. LS. XI: 279-280).
480
481
El breve paso de Fernando de Silva y Álvarez de Toledo (1714-1776)
por la Secretaría de Estado apenas dejará huella en el proceso que nos ocupa.
482
José de Carvajal y Lancáster falleció en Madrid, el 8-IV-1754.
Carta de Pehr Löfling a Lars Montin. [América, 1754] (ARJB, leg.
II,2,1; traducción de Stig Rydén. Pedro Loefling en Venezuela (1754-1756). Madrid:
Ínsula, 1957 –cf. pág. 75).
483
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
177
Bajo uno u otro mandatario es José Hortega quien controla
la información relativa al viaje americano de Pehr Löfling; además
de convertirse en el interlocutor obligado ante Carl Linné, es él
quien informa a los interesados en los avances del naturalista
expedicionario; quedan testimonios indirectos de su relación
con Daniel Zacharias Hallman, agregado de la legación sueca en
España484, Henric Jacob Hildebrand, diplomático al servicio de
la Legación madrileña485 y Daniel Scheidenburg, capellán de la
Embajada486.
Los primeros datos sobre la naturaleza americana llegan
pronto a Hortega de la pluma de Löfling:
“En estos 7 ó 8 dias, que aqui hemos estado he
anotado cerca de 140 especies de plantas las quales
todas no puedo perfectamente todavia nombrar, como la
mayor parte de ellas nunca antes ha sido vista por tanto
que me parece haver entrado en un mundo totalmente
nuevo. Los Cerros estan llenos de Cereos y Opuntias, los
Sotos de Mimosas, Cassias, Tamarindos y otros arbustos.
El nocivo Manzanillo, y Mangles al borde del mar, los
campos de Amaranthoides, los predios y Quintas, con
Platanos, Nisperos, Cocos, Yuca, Caña dulce, Papapayas,
las calles con Papaver spinosum o Anemone de Linné &c.
&c.
484
“He tenido carta del señor Hortega esta semana. Dice que un barco
ha llegado de Buenos Aires pero que no trae ninguna noticia del querido Löfling
(…) No obstante, el señor Hortega ruega a Su Excelencia que tenga paciencia,
ya que también es una prueba para él y otros que tienen en esta compañía
sus amigos y familiares…”(Carta de Daniel Zacharias Hallman a Carl Linné.
Bordeaux, 26-II-1757 [L-2139]. LS, sigmatura: LS, mss. VI: 225-227 –transcrita en
Francisco Pelayo, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424, pág. 95. 1992).
Daniel Zacharias Hallman (1722-1782) fue alumno de Carl Linné entre 1744 y
1746; ejerció como pastor de la Legación sueca en Madrid.
485
“Hace unos días me fue contado por el señor Hortega que había
recibido de las Indias Occidentales la noticia indudable de la muerte del señor
Löfling (...) lo que sienten mucho todos los amantes de la Historia Natural que
están aquí…”(Carta de Henric Jacob Hildebrand a Carl Linné. Madrid, 27-VI1757 [L-2202]. LS, signatura: LS, ms. VII: 16-17 -transcrita en Francisco Pelayo,
Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424, pág. 96. 1992). Henric Jacob
Hildebrand (1707-1775), diplomático sueco, trabajó en la Legación de Madrd.
Daniel Scheidenburg (n. 1720), estudió bajo la tutela de Carl Linné,
recibió las órdenes eclesiásticas en 1754; ese mismo año fue nombrado capellán
de la Embajada sueca ante la Corte española; fallecería en Madrid (cf. Stig
Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 16. 1957).
486
178
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
La voz comun es que estaremos aqui en Cumaná
dos, tres ó quatro meses, en cuyo intervallo el Sr. Dn. Joseph
[Iturriaga] nos ha prometido de poder hazer diferentes
viages por esta provincia de Cumaná, á los lugares mas
famosos, y ricos de yervas, y otras cosas, donde esperamos
enriquezer de varias curiosas observaciones…”487
Pehr Löfling permanecerá en Cumaná hasta finales de
junio, fueron tres largos meses de espera antes de adentrarse
en las nuevas tierras; durante las primeras semanas de julio
herborizará, siempre junto a sus alumnos médicos y los
dibujantes, en Ipure, Macarapán y Cumanacoítica; a finales
de mes viajan, por mar, a Barcelona, donde, al menos Löfling,
cayó enfermo488; tras recuperarse, aún en esos primeros días de
agosto, los naturalistas exploran las misiones de Píritu, río Unare,
Tocuyo, Puruey y Clarines, desde donde regresan a Barcelona
y, a finales de mes, nuevamente por mar, retornan a Cumaná.
El último trimestre de éste 1754, Löfling permanece en Cumaná,
unas periódicas recaídas de fiebres le impiden el trabajo en el
campo abierto; desde aquí escribe su última carta a su maestro
Carl Linné:
“Estos dos últimos meses no he podido trabajar
considerablemente; porque una fiebre con quatro recaidas
me ha dexado casi sin fuerzas; pero confío de este modo
irme connaturalizando con el clima.
Creo que irémos a Guayana, y de allí por el
Orinoco arriba hasta el río Negro; podrá suceder que
recorramos las fronteras del Brasil, desde el nacimiento
del río de la Plata hasta el mar.
Mi colección de yerbas asciende ya á quinientas y
cincuenta [o] seiscientas distintas especies; las quales, á
excepción de unas cincuenta, he reducido á sus géneros
y especies. El mes de Agosto hice un viage con D. Benito
Paltor [a] treinta leguas de aquí, á las misiones de Piritu,
487
Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cumaná, 18-IV-1754 (ARJB,
leg. II,2,6,4). Carl Linné escribirá, en la introducción al Iter Hispanicum… de
Pehr Löfling (Op. cit. nota 362. 1758): “Hallóse Loefling como en un nuevo
elemento, en un paraiso terrenal parecido á un perpetuo jardin poblado de
yerbas olorosas, las quales ningun Botánico habia cogido ni observado…” (cf.
Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 291. 1801).
Las anotaciones conservadas de Pehr Löfling hacen pensar que no
fue él el único en enfermar; entre los gastos ocasionados este agosto de 1754
incluirá: “A un mulato por averme buscado hiervas fuera estando yo y los
compañeros malos…” (cf. Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 105. 1957).
488
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
179
donde hallé muy buenas cosas; pero no pude disfrutarlas
á causa de una fiebre cotidiana que no me dexó en todo el
viage. Para ir á Guayana nos dividirémos de modo que yo
tomaré el camino de Barcelona, y visitaré [por] segunda
vez las misiones (...) desde aquí por la llanura seguiré
hasta el Orinoco y Guayana; D. Benito tomará el camino
de Paria hasta la isla Trinidad, y de alli al Orinoco, hasta
que nos encontremos en Guayana.
He sido tan afortunado con los nuevos géneros,
que seguramente he hallado treinta, sin contar otros
muchos que no me atrevo á determinar por falta de
autores (...) Las descripciones de mis plantas subirán á
doscientas y cincuenta, las quales aumento cada día en
quanto me lo permite la estrechez del tiempo…”489
La visión de la realidad que nos ofrecen los escritos de los
médicos acompañantes no es tan idílica como la descrita por el
naturalista sueco; por las mismas fechas que Pehr Löfling escribe
a Carl Linné, Antonio Condal y Benito Paltor hacen lo propio
ante José Hortega:
“Escrivimos á v.m. desde Cadiz como nos
embarcamos sin haver podido alcançar, por muchas
representaciones, libro alguno Botanico, ni tampoco lo
hallamos con nuestro dinero; aora vamos experimentando
la falta [que] nos hazen, de manera que podemos dezir,
que mas es curiosidad lo que vamos á hazer, que
adelantamiento; pues a mas de no poder estudiar siempre
que hay ganas, no nos podemos apartar del lado de Dn.
Pedro [Löfling] para hazer collecciones de cosas que se
hallarian iendo por caminos distintos, cada uno en las
partidas que se dividen y caso de separarse sera cada uno
un soldado sin armas.
Á mas de esto (…) pareze se mira con desprecio
la Botanica, porque son tan pocas las prevenciones, y
auxilios [que] se nos dan para las collecciones assi de
animales como pezes (lo que es preciso encargar, y pagar)
que lo mas pagamos de nuestro corto sueldo.
Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Cumaná, 20-X-1754 [L-1820] (LS,
signatura: mss. LS. XI: 394-395; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15):
338-340. 1802). Francisco Pelayo López (“Los materiales botánicos americanos
de Pehr Löfling”. En: Francisco Pelayo (ed.) Pehr Löfling y la Expedición al
Orinoco, 1754-1761: 147-157. Madrid: Turner, 1990) presenta una valoración de
la actividad botánica de Pehr Löfling en tierras americanas realizada sobre la
documentación conservada en el archivo del Real Jardín Botánico de Madrid.
489
180
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Para la colleccion de plantas, y aun para escrivir,
tuvimos que esperar tres meses antes no nos dieron papel,
y esto despues de muchas representaciones. El trato que
nos dan corresponde a lo demas...”490
En diciembre de 1754, siguiendo el plan establecido por
Pehr Löfling, comentado en su correspondencia con Carl Linné,
los expedicionarios se separarán en dos grupos en su camino
hacia la Guayana. Pehr Löfling y los suyos –Antonio Condal y
Bruno Salvador Carmona- emprenden viaje a Barcelona; alcanzan
la ciudad el día 17 de diciembre, el naturalista sueco sufre un
‘cólico flatulento’ que le tuvo en cama desde esas Navidades
hasta los primeros días de 1755. El 18 de enero retorna al camino,
sale de Barcelona hacia San Bernardino; tomando esta localidad
como centro de trabajo, herboriza en El Pilar, a finales de febrero
recolecta en el río Aragua y el 20 de marzo se encuentra en San
Miguel. Tras dos meses herborizando en las misiones de la región
del Píritu, el 5 de abril inicia el viaje a la Guayana; atravesará
los lugares de San Pablo, San Lorenzo, Margarita -donde se
encontraba el 15 de abril-, Aragua, Nuevo Hato y Muitaco.
Partieron de Muitaco el 23 de abril; con ayuda de una piragüa
descendieron el río Pao hasta alcanzar la Guayana el 29 de abril.
Tras algunas herborizaciones por las proximidades de
la Guayana, los expedicionarios emprenden viaje hacia Suay,
donde permanecieron hasta el domingo 18 de mayo, en que
se dirigieron a Caroní; tomando como centro esta localidad,
colectan en Murucuri, Agacagua y Altagracia; se mantuvieron
en este área entre el 28 de mayo y el 10 de junio, allí el grupo
recibió noticia de la llegada a la Guayana de Benito Paltor y Juan
de Dios Castel, quienes se habían ocupado de herborizar en isla
Trinidad.
Los primeros días de julio son de frenética actividad
botánica, siempre que las lluvias lo permiten; el 11 de julio se
dirige a El Hato, regresaron a Capapuy, luego siguiron hasta
Altagracia y, de nuevo, hacia Caroní. El 18 de julio parten
para Guayana, atravesando Suay, con ánimo de colaborar con
Eugenio Alvarado en la elaboración de la carta geográfica del
curso del río Caroní. Los expedicionarios llegaron a Caroní el
22 de julio, Carmona pasa al servicio de Alvarado y Löfling
490
Carta de Antonio Condal y Benito Paltor a José Hortega. Cumaná,
19-X-1754 (ARJB, leg. II,2,6,24).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
181
solicitará formalmente la adscripción a su equipo del dibujante
Juan de Dios Castel.
Las herborizaciones del mes de agosto de éste 1755 parecen
decrecer, al menos las practicadas por Löfling; a mediados de
septiembre le aquejan unas calenturas, aún con fiebre se dirige,
junto a Antonio Condal, hacia Caroní; parece observar una ligera
mejoría en octubre, aunque las anotaciones de su diario prueban
que no continuó con su labor herborizadora491. Pehr Löfling
falleció el 22 de febrero de 1756, en la misión de capuchinos de
San Antonio de Caroní, donde fue enterrado.
Tras su fallecimiento, el equipo de naturalistas se disgrega;
Antonio Condal deserta y Benito Paltor reitera a José Hortega,
en distintas ocasiones, su deseo de liberarse de los compromisos
adquiridos con la Expedición:
“… por lo que suplico á Vm me solicite de todas
veras licencias que necesito para vivir en paz, con la
que prometo á Vm, exerceré con mas gusto la Botanica
á expensas mias; pues es grande la afficion que le he
tomado.
Con lagrimas en la cara suplico á Vm, se digne
solicitarme dha licencia pª. retirarme, la que espero á los
cinco meses de la fecha de esta, que tengo determinado
esperar, antes que me precipite y me baya por esos
montes á vivir entre las fieras ya que entre los hombres
tengo tan poca fortuna…”492
Aun cuando inicialmente intentó ocuparse de la formación
botánica de los dibujantes493, es probable que pronto abandonara
491
Borrador del Diario de Observaciones echas por Loefling en el Viage de
Cumaná à Guayana desde 23 de Abril hasta 6 de Nove. de 1755 (ARJB, leg. II,4,3,1).
492
Carta de Bemito Paltor a José Hortega. Muitaco, 25-XI-1756 (ARJB,
leg. II,4,3,4). En los mismos términos se expresará en carta de 15-V-1757, remitida
desde Cabruta: “Suplico a Vm. quiera hacer los oficios que puede para que se
me consiga la licencia que solicito pª. retirarme; y quando nó: la Graduacion,
y Sueldo que me corresponde, de que espero la resulta, lo mas pronto que
fuere del agrado de Vm...” (ARJB, leg. II,4,4,8). Benito Paltor continuó con su
actividad botánica tras su vuelta a la metrópoli; en 1772 presentó, ante la Real
Academia de Ciencias y Artes de Barcelona, una comunicación “Sobre una
nueva especie de Quina conocida con el nombre de Cunaurima de Guayana”
(cf. Francisco Pelayo, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424, págs. 119120. 1992).
“... me acaba de mandar el Xefe: que instruya diariamte. á los dos
dibujantes, Dn. Bruno Salvador, y Dn. Juan Castél, en la Theorica y Practica de
la Historia Natural, lo qué executo con toda puntualidad, mas por obedecer
493
182
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
esta idea y la propia Expedición. Los dibujantes se integraron,
casi de inmediato, en las tareas de apoyo técnico a los trabajos de
la Comisión de Límites494.
La muerte de Pehr Löfling conllevó el abandono de los
estudios sobre Historia Natural emprendidos por la Expedición;
no obstante, parece que sí se habían conseguido algunos objetivos;
Francisco Auzmendi, oficial que intervino en la organización del
viaje, informaba críticamente sobre su desarrollo en el verano de
1757:
“Sin haber hecho en tanto tiempo [José de
Iturriaga] otra cosa que empeñar inconsiderablemente a
sus subalternos en manos de el hambre y de la interperie,
no hemos sacado otros frutos sino unos cajones de hojas
y cortezas parecidas a la de la canela. No se ha empezado
a trabajar en su principal destino y no repara en pedir
premios sobre premios…”495
No cabe duda del protagonismo que la canela alcanzó en
esta expedición científica al Orinoco.
Tras la llegada al trono de Carlos III, la política estatal
sobre los acuerdos hispano-lusos relativos a la frontera caríbica
cambiaron sustancialmente. La Comisión de Límites dirigida
por José de Iturriaga se dio por finalizada en junio de 1760, sin
al Xefe que por gusto; porque en ello carezco de honra y provecho que gusto
puede haver?...” (Carta de Bemito Paltor a José Hortega. Muitaco, 25-XI-1756.
ARJB, leg. II,4,3,4). Proseguía en esta labor meses después: “Estoy actualmente
trabajando, en acabár los fundamentos Botanicos, que el difunto Dn. Pedro
Loefling dexó sin concluir; pª. instruir en todos los rudimentos a los dos
Dibujantes, que por especial orden del Gefe tengo á mi cargo, tomandoles
lección todos los dias, é imponiendoles de los referidos principios…” (Carta de
Bemito Paltor a José Hortega. Cabruta, 15-V-1757. ARJB, leg. II,4,4,8).
494
Hacia 1758, Juan de Dios Castel y Bruno Salvador Carmona tomaron
parte en los estudios, emprendidos por Vicente Doz, conducentes a ubicar un
asentamiento aguas abajo del Orinoco; de estos trabajos se conserva, de mano
de Castel, una “Relación del descubrimiento de las tierras intermedias entre
los ríos Cuchivero y Caura…” (Biblioteca del Palacio Real de Madrid [BPRM],
signatura 2824; publicado por Demetrio Ramos Pérez. “El problema de los
caribes de Guayana y los proyectos sobre el área del Cuchivero-Cauca”. En:
Demetrio Ramos Pérez (comp.) Estudios de Historia Venezolana [Serie Fuentes para
la historia colonial de Venezuela, 126]: 633-650. Caracas: Biblioteca de la Academia
Nacional de Caracas. 1976).
Dictamen de Francisco Auzmendi. [1757]. AGS, Estado, leg. 7395
–fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, págs. 48-49. 1993). Es probable
que estos cajones de canela fueran acopiados por José Solano, durante su viaje
a Cumaná, camino de Santa Fé, en los primeros meses de 1757.
495
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
183
que apenas se produjera contacto con la comisión portuguesa. El
Tratado de El Pardo, firmado el 12 de febrero de 1761 anulaba,
por entero, las decisiones firmadas en el Tratado de Madrid. La
división territorial fue aplazada, aunque la presencia española
quedaba consolidada tras la firma de acuerdos con los nativos
del Alto Orinoco496.
Los restos de un naufragio
Los envíos de Pehr Löfling a Carl Linné no fueron pocos,
“Tenemos en el jardín como 70 vegetales suyos” escribirá el
maestro hacia la primavera de 1753497, pero no tantos como éste
hubiera deseado; la Corte española no debió permitir que los
materiales elaborados y colectados por Pehr Löfling salieran en
dirección a Upsala, como reiteradamente solicitó Carl Linné498;
sus manuscritos, salvo “la flora y las observaciones respecto á las
plantas españolas”, sobre las que habría de trabajar durante el
viaje a Cádiz, quedaron en manos de José de Carvajal499.
496
Una crónica de esta Expedición en Demetrio Ramos Pérez (El
Tratado de Límites de 1750 y la expedición de Iturriaga al Orinoco. Madrid: CSIC
[Instituto Juan Sebastián Elcano], 1946) y Manuel Lucena Giraldo (Op. cit. nota
363. 1993).
Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [1753] (ARJB, leg.
II,1,6,22; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia
Natural]. Op. cit. nota 336, págs. 143-147. 1908); la carta carece de fecha, pero
incluye una anotación de Pehr Löfling: “recibida en 26 de Agosto, contestada
el 27 de 1753”. Gines López González (Op. cit. nota 386, pág. 43. 1990) valora,
en varios centenares, las semillas remitidas a Carl Linné por Pehr Löfling,
“probablemente más de 500”.
497
“Recoja usted sus materiales y envíelos sellados al Archivo
Academiae Upsaliensis, donde estarán más seguros…” (Carta de Carl Linné
a Pehr Löfling. Upsala, 20-VIII-1753 [L-1630]. ARJB, leg. II,1,6,21; traducida del
sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363,
págs. 140-142. 1908).
498
Carta de Pehr Löfling a Lars Montin. [América], 4-XII-1753 (ARJB,
leg. II,2,1). Y éstas constituían un volumen bastante significativo, de ser cierto
el comentario de Carl Linné: “Es casi increible que haya usted podido recoger
en España 1.300 especies de distintas plantas; así verá el mundo con asombro la
increible riqueza de ese país, y entre ellas tantas plantas raras y nuevas, que si
usted no me las hubiera descrito, nunca hubiera pensado que en toda Europa
se produjeran tantas especies curiosas.” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling.
Upsala, 10-IV-1753 [L-15619]. ARJB, leg. II,1,6,18; traducida del sueco en [Real
Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 134-136.
1908).
499
184
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Tras el fallecimiento de Pehr Löfling, Francisco Villalba,
secretario de José de Iturriaga, levantó inventario de sus
pertenencias; éstas quedaron en poder de Apolinar Díaz de la
Fuente, el maestro de instrumental de Ituriaga, quien firmó el
inventario junto a los botánicos-médicos compañeros de Löfling:
Benito Paltor y Antonio Condal; el registro quedó fechado el 22
de febero de 1756500. Junto a este inventario, el comandante Juan
Valdés realizó otro, datado el 3 de enero de 1756, con sus objetos
depositados en Guayana. Las pertenencias de Pehr Löfling, sus
ropas, equipajes y libros, salieron a subasta pública en San Pedro
y Santo Tomé de Guayana el 4 de julio de 1756, “Los papeles y los
otros manuscritos fueron entregados al señor Villalba, delegado
de Iturriaga, y no se vendieron (…) El dicho señor Francisco
Villalba guardó las cajas y los objetos de valor que pertenecían a
la expedición…”501
Las cajas así preparadas llegaron a la metrópoli años
antes de que la Expedición de Iturriaga diera por finalizados
sus trabajos502, posiblemente de manos de Juan de Madariaga,
quien retornó en la primavera de 1757503; contenían los diarios
del periplo americano de Pehr Löfling, una compilación de
descripciones botánicas, su Flora Cumanensis504 y un grupo de
descripciones zoológicas505.
Seguimos los datos aportados por Stig Rydén (Op. cit. nota 483, págs.
143-181. 1957) quien, a su vez, los toma de un artículo publicado, en sueco, por el
padre Agustín Barreiro (“Pehr Löflings kvarlätenskap och eftermäle”. Svenska
Linné Sällskapets Arskrift Ärgäng, 10: 131-136. Upsala, 1927). Los documentos
sobre los que el padre Barreiro construyó su trabajo no se conservan en el
archivo del Real Jardín de Madrid, tampoco pudo acceder a ellos Stig Rydén,
quien los considera “perdido durante la guerra civil española” (cf. Stig Rydén.
Op. cit. nota 483, pág. 144. 1957).
500
501
Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 147. 1957.
La Comisión de Límites dirigida por José de Iturriaga se dio por
finalizada en junio de 1760. Un comentario de Antonio José Cavanilles, parece
hacer pensar que los materiales regresaron a la metrópoli a la par que lo hacía
José de Iturriaga: “Muerte el xefe de la expedicion botanica, se dispersaron los
dos Médicos catalanes, Condal y Paltor, y solamente permaneciéron sin fruto
para la ciencia los citados dibuxantes, que regresaron á Europa en 1761. Ant.
Cavanilles” (Nota en Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 292. 1802).
502
503
Un viaje anunciado en carta de Benito Paltor a José Hortega.
Cabruta, 15-V-1757 (ARJBM, leg. II,4,4,8).
504
Flora Cumanensis de Loefling. Borradores arreglados por las 24 clases del
Methodo Linneano y empezados á poner en limpio. [Cumaná, IV-1754 / III-1755]
(ARJB, leg. II,3,2 [tomo I]. 375 h.; leg. II,3,3, [tomo II]. 228 h.)
505
Sus trabajos zoológicos apenas tuvieron repercusión, pudiéndose
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
185
Es posible que estos materiales pasaron a poder de Ricardo
Wall, quien debió hacer entrega de ellos a José Hortega, a quien
Carl Linné solicitó la posibilidad de obtener las pertenencias de
su discípulo506: éste no le entregó los originales, pero sí permitió
al capellán Daniel Scheidenburg que copiara lo que creyera
necesario para satisfacer los deseos de Carl Linné; Scheidenburg
trabajaba ya sobre una transcripción de la Flora Cumanensis… el
28 de noviembre de 1757507.
Con las copias remitidas por Daniel Scheidenburg,
más las propias cartas que Pehr Löfling le remitiera desde su
partida de Suecia508, Carl Linné compuso Petri Loefling… Iter
Hispanicum, eller Resa til Spanska Länderna uti Europa och America,
forrattad ifrän Âr 1751 til Âr 1756, med Beskrifningar och Ron ofver de
rastrear -no sin cierta dificultad- en la obra de su maestro, lo mejor de su
producción en este ámbito se produjo en los estudios ictiológicos; uno de los
manuscritos generados por esta expedición, Ycthiologia orinocensis, sive Synopsis
Piscium, quosin fluvio Orinoco piscari licet [61 h.] (ARJB, leg. II,4,4,1) recoge medio
centenar de descripciones de peces y algunos reptiles y aves. La letra parece
atribuirlo a Juan de Dios Castel, pero no hay duda de que en él se recogen
buena parte de los trabajos de Pehr Löfling.
En el prólogo al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling (Op. cit. nota
362. 1758), Carl Linné escribirá: “Mi único consuelo y confianza estriba en
el favor del Sr. Ortega, quien por amor y respeto á las ciencias, tendrá á bien
comunicarme una cosa tan deseada de los Botánicos como es la Flora de
España…” (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 288. 1801). “De todo
quanto ocurrió á Loefling en la América solo he llegado á saber lo que mi buen
amigo el Señor Ortega se dignó comunicarme…” (Ignacio Jordán de Asso. Op.
cit. nota 46, 3(9): 291. 1801).
506
507
“De los manuscritos de Löfling que acaban de llegar de la América
Española, J. Hortega me ha comunicado que copie las Observaciones in Plantae
Cumanensis, que se componen de Tres Secciones; la primera y la segunda tengo
el honor de enviárselas adjuntas a Vmd; la tercera que contiene observaciones
sobre los Genera Plantarum de Vmd, pienso enviarla dos semanas más tarde…”
(Carta de Daniel Scheidenburg a Carl Linné. Madrid, 28-XI-1757 [L-2260]. LS:
mss LS, XUIII: [s.p.]; traducida por Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 153-154.
1957).
508
Éstas cuidadosamente censuradas en aquellos párrafos que
pudieran ser ofensivos para los botánicos españoles, como ha señalado Gines
López González (Op. cit. nota 386. 1990) al cotejar la correspodencia original
con la publicada por Carl Linné en el Iter hispanicum… de Pehr Löfling: “Esto
se puede apreciar en los originales conservados en la Sociedad Linneana de
Londres, en los que dichos párrafos se encuentran enmarcados por paréntesis.
Las cuatro primeras cartas enviadas desde Madrid –tres en noviembre de 1751
(…) y otra en diciembre- las refundió Linneo en una, alterando no en poco su
contenido…” (Ginés López González. Op. cit. nota 386, pág. 39. 1990).
Markvardigaste Vaxter, utgifven Efter des Fränfälle af Carl Linnaeus
(Stocockholm: Lars Salvii, 1758)509:
“Esta obra comprehende primero las cartas
que me escribió (…) Segundo, las descripciones de
algunas plantas españolas (…) Tercero, un extracto de
los manuscritos de Loefling relativos á las yerbas de la
América, que debo al buen zelo é instrucción del Sr. D.
Daniel Scheidenburg, Capellan de la embaxada de Suecia
en la corte de Madrid, el cual con el permiso de mi grande
amigo el Sr. Ortega, tomó á su cargo el arreglar y disponer
esta parte de dicha obra en la forma que se publica.
Esto es quanto he podido adquirir de los trabajos
literarios de Loefling; poco en verdad, pero muy suficiente
para acreditar su pericia, y los ardientes deseos que
manifiesta el Sr. Ortega de contribuir al progreso de la
Historia Natural: quiera Dios que por su influxo logre yo
las descripciones de las plantas de América, á que tantas
veces se refiere en el extracto…”510
Poco sabemos del trabajo de José Hortega sobre estos
materiales, que no debió ser mucho más que el de la propia
custodia; el barón Clas Alströmer (1736-1794), discípulo de
Carl Linné, de viaje por España en 1760, intentó localizar,
La obra fue pronto traducida al alemán, gracias al trabajo de
Alexander Bernhard Kölpin: Peter Loeflings... Reisebeschreibung nach den spanischen
Ländern in Europa und America in den Jahren 1751 bis 1756, nebst Beobachtungen
und Anmerkungen über die merkwürdigen Gewächse herausgegeben von Herrn Carl
von Linné... Berlin: G.A. Langle, 1766; en 1771 ve la luz la traducción a lengua
inglesa, realizada por Johann Reinhold Forster, e incluida –como apéndice- en
una obra de Jean Bernard Bossu: “An abstract of the most useful and necessary
articles mentioned by Peter Loefling (...) in his travels through Spain, and that
part of South America called Cumana, consisting in his life and his systematical
descriptions of the plants of both countries, referred to the pages of the original
Swedish edition”. En: Jean Bernard M. Bossu. Travels through that part of North
America formerly called Louisiana. By Mr. Bossu (…) translated from the French, by
John Reinhold Forster (…) illustrated with notes relative chiefly to natural history,
to which is added by the translator a systematic catalogue of all the known plants
of English North-America, or, a flora Americae Septentrionalis. together with an
abstract of the most useful and necessary articles contained in Peter Loefling’s Travels
through Spain and Cumana in South America, referred to the pages of the original
Swedish edition… 2: 60-422. London: Printed for T. Davies, 1771; una versión,
incompleta, en castellano, obra de Ignacio Jordán de Asso, vio la luz en las
páginas de los Anales de Ciencias Naturales, editados al cuidado de Antonio José
Cavanilles (Op. cit. nota 46. 1801-1802).
509
510
Carl Linné en el prólogo al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling
(Stockholm, 1758) (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 293. 1801).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
187
infructuosamente, algunos materiales de Pehr Löfling en la
ciudad de Cádiz511, y proseguió su búsqueda en Madrid:
“Si yo pudiera conseguir parte de la colección
Löfling en Madrid, donde, según me han contado hay
paquetes esperando con la direción del Señor Arquiatra
[Carl Linné], sería la manera más fácil de saldar la deuda.
He reunido algunos informes sobre Löfling y todavía
espero ampliarlos en Madrid y, entonces, le informaré a
usted en seguida. Ortega no es tan íntegro como parece y
guarda algo de envidia por las publicaciones y colecciones
de Löfling. Como podrá imaginar, estos españoles tan
simples están contentos con la muerte de Löfling y dan
gracias a Dios porque un hereje hubiese muerto en manos
de los curas…”512
Es posible que, tras el fallecimiento de José Hortega, la
documentación pasara a ser custodiada por William Bowles,
asistido por Juan de Dios Castel513; no obstante los trabajos
del naturlista irlandés sobre la Historia Natural de España,
no debieron permitirle acometer esta responsabilidad que fue
encomendada a Casimiro Gómez Ortega, heredero material –y
en buena parte espiritual- de la obra de su tío; del aletargamiento
que éstos sufrieron nos da cuenta Antonio José Cavanilles, en los
inicios del siglo XIX:
“El cónsul Bellman (…) ha prometido acompañarme a una oficina
aquí en la ciudad [Cádiz] que ha tenido relación con la expedición americana
a la que acompañó Löfling, y que deben saber algo también de los restos de
éste…” Carta de Clas Alströmer a Carl Linné. Cádiz, 7-V-1760 [L-2733] (LS, mss
LS, I: 59-60; traducción de Joaquín Fernández Pérez. Op. cit. nota 464, págs.
95-96. 1990).
511
Carta de Clas Alströmer a Carl Linné. San Lúcar de Barrameda,
12-VIII-1760 [L-2774] (LS, mss LS, I: 64-65; traducción de Joaquín Fernández
Pérez. Op. cit. nota 464, págs. 99-100. 1990).
512
513
“… Don Juan de Dios Castel asista a don Guillermo Bowls [sic] en
la descripcion de la Historia Natural del Botánico Lofling, asistiéndole en este
tiempo con seis mil reales desde primeros de este año y que, despues, pase a
la Guayana como segundo de Apolinar Díez de la Fuente…” (Informe de José
Solano a Julián de Arriaga, Secretario de Indias. [s.l., s.a.]. AMN, Virreynato
de Santa Fe y Brasil, leg. 572(7); transcrito por Antonio de Pedro Robles. “Las
imágenes artístico-científicas de la Expedición de Límites al Orinoco”. En:
Manuel Lucena Giraldo, Antonio E. de Pedro. La frontera caríbica. Expedición
de límites al Orinoco 1745/1761: 82-119. Caracas: Cuadernos Lagoven [Serie
Medio Milenio], 1992, cf. pág. 91); otra copia en AGS, Estado, leg. 7398, fol. 51
–fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, pág. 231. 1993). El proyectado
segundo viaje al Orinoco no llegó a realizarse.
188
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
“Quiso Loefling que los dibuxos correspondiesen
en la exâctitud y tamaño á la grandiosa idea que se
propuso al concebir la obra de sus viages que destinaba
al público; pero habiendo muerto sin concluirlos, ni se
completó la coleccion, ni se executaron sus pensamientos.
Traxéronse á España los preciosos dibuxos, y se determinó
que se reduxesen á una forma menor sin perjudicar á su
verdad y hermosura. Comisionóse [Juan de Dios] Castel
para este importante trabajo, y por su muerte á [Bruno
Salvador] Carmona, como el mas alto para poderlo
desempeñar. Acudió sin cesar por espacio de diez y
nueve años á la casa señalada para ello, y depósito de
los dibuxos originales514; mas nada pudo hacer, sin duda
por las continuas y urgentes ocupaciones del profesor
Botánico que debía dirigir sus trabajos (…) Estas noticias
me comunicó el difunto Carmona el dia 7 de Diciembre
de 1800 en presencia de D. Luis Née. Murió en 10 de enero
de 1801. Ant. J. Cavanilles”515.
Parte de los manuscritos, y una buena cantidad de dibujos
pertenecientes a la expedición Löfling, llegaron al Real Jardín
de Madrid en septiembre de 1801, procedían de la Secretaría de
Indias donde fueron depositados por su último custodio privado,
Casimiro Gómez Ortega516.
Posiblemente la propia casa de José Hortega, ocupada luego por
su sobrino y heredero material, Casimiro Gómez Ortega (1741-1818), a quien
parecen dirigidas las críticas de Antonio José Cavanilles.
514
En nota a la traducción del Iter hispanicum… de Pehr Löfling
preparada por Ignacio Jordán de Asso (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46,
3(9): 290. 1801).
515
516
“… un tomo en folio de cincuenta y ocho dibujos, la traducion
publicada en sueco en 1758, el viaje de Loefling de Madrid á Cadiz y los
originales y copias de las dos primeras clases de la Flora de Cumaná…” Oficio
de Pedro Cevallos a Antonio José Cavanilles. La Granja de San Ildefonso,
8-IX-1801 (ARJB, leg. I,11,2,16). En la actualidad, en el archivo del Real Jardín
Botánico se conservan 200 dibujos pertenecientes a esta Expedición, 115
botánicos, 79 zoológicos, 4 etnográficos y dos mapas, además de cerca de 200
documentos, entre ellos los titulados Diario de viaje de Madrid a Cádiz [30 h.]
(ARJB, leg. II,2,5,10) y Flora Cumanensis. Nota: Contiene la Copia de las 4 primeras
Clases. Nota 2ª. Los originales y copia de la 1ª y 2ª clase se enviaron al Ministerio
de Indias [88 h.] (ARJB, leg. II,3,1), al que parece referirse el oficio remitido a
Antonio José Cavanilles.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
189
El comercio de las quinas
La participación de José Hortega en el diseño de la aventura
americana que llevó a Pehr Löfling, a los médicos Antonio Condal
y Benito Paltor y a los dibujantes Juan de Dios Castel y Bruno
Salvador Carmona a las tierras de Cumaná no fue un hito aislado
en su biografía. Al ocuparnos de su participación en las sesiones
de la Real Academia Médica Matritense ya dejamos anotado
su interés por las plantas americanas, particulamente sobre la
utilidad terapéutica de las quinas. Un informe remitido a Julián
de Arriaga en mayo de 1757, cuando éste ocupaba la Secretaría
de Estado de Marina e Indias, resulta especialmente ilustrativo;
no sólo por el peso político que la emisión del informe supone,
sino por la claridad con que afronta el problema del comercio y
de la adulteración del producto517.
El documento, de escasa extensión, es uno de los primeros
testimonios relativos al modelo que ha de emplearse en el tráfico
de quina:
“Es muy antigua en la América la adulteración de
la Quina y por ese motivo perdió el crédito este célebre
medicamento, a poco tiempo de su descubrimiento (…)
y llegó a tanto este descrédito y la mala calidad de la
Quina que habrá veinticinco años [1732] que yo mismo
tuve necesidad de valerme de los Ingleses y Holandeses
para lograrla buena, pues la que venía a Cádiz era
inútil. Esto depende de que los Factores y Directores de
las Compañías extranjeras que residen en Panamá, por
donde precisamente pasa toda la Quina que viene a
El informe, fechado en Madrid, el 17 de mayo de 1757 [sic], se
conserva en el Archivo General de Indias [AGI], Indiferente, 1552, fols. 471-473;
ha sido trascrito por Francisco Murillo Campos, Diego Bermúdez Camacho
“Informe de don José Hortega, de la Real Botica de S. M. [sic], sobre la Quina
que vino de América remitida por los Virreyes Pizarro y Mauro”. Anales de
la Real Academia de de Farmacia, 19(3): 257-258. Madrid, 1953 y estudiado por
José Fonfría Díaz, Joaquín Fernández Pérez, Cristina Jiménez Artacho.
“Las dosis de corteza de quina y de quinina en la lucha antipalúdica desde
el siglo XVIII”. En: José Javier Escribano Benito, Luis Español González, Mª
Ángeles Martínez García (coord.) Historia de las ciencias y de las técnicas [VIII
Congreso de la Sociedad Española de Historia de las Ciencias y de las Técnicas], 2:
585-602. Logroño: Universidad de La Rioja, 2004; y Matthew James Crawford.
Empire’s Experts: The Politics of Knowledge in Spain’s Royal Monopoly of Quina
(1751-1808). [A dissertation submitted in partial satisfaction of the requirements for
the degree Doctor of Philosophy in History (Science Studies)]. San Diego: University
of California, 2009.
517
190
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Europa, saben elegir la mejor, para dejarnos la que ellos
desprecian…”518
Sus conocimientos sobre el mercado de la quina no
son cortos: es sabedor de los desvelos de Thomas Blechyden,
principal factor inglés de la South Sea Company en Panamá y
Porto Bello, quien mantuvo relaciones comerciales con Charles
Marie de La Condamine (1701-1774)519. Y, por supuesto, de los
informes de Joseph de Jussieu (1704-1779) sobre la descripción y
calidades de la quina:
“Por estas noticias, que son harto ciertas, inferirá
V.E. que se sabe bien en la ciudad de Loja lo que es la
verdadera Quina, lo que es la mala, y lo que la adulterada,
y que no tengo yo necesidad de poner advertencia alguna,
pues el mismo Mr. De Jussieu hizo una prolixa y dilatada
descripción para conocerla, para distinguir sus especies y
precaver la adulteración520.
A V.E. toca el dar las órdenes convenientes sobre
este asunto, y V.E. sabrá los Revisores que debe haber en
Panamá para no dejar pasar a Europa sino a la Quina de
superior calidad, y aun no sería inútil que este examen se
repitiese en Cádiz con el mayor escrúpulo por personas
severas y de toda integridad…”521
Ciertamente, José Hortega era poco propenso a escribir,
pero el tono y la seguridad del informe nos muestran a un
experto, seguro del lugar que ocupa en la Corte.
518
AGI, Indiferente, 1552, fols. 471-473 (fide Francisco Murillo Campos,
Diego Bermúdez Camacho. Op, cit. ut supra).
519
Luis J. Ramos Gómez. Época, génesis y texto de las ‘Noticias secretas
de América’ de Jorge Juan y Antonio de Ulloa (1735-1745). Madrid: Consejo
Superior de Investigaciones Científicas, 1985. 2 vols. (cf. vol. 1, pág. 70); Larrie
D Ferreiro. Measure of the Earth. The enlightenment expedition that reshaped our
world. New York: Basic Books, 2011 (cf. pág. 121).
Probablemente se refiere al texto de Charles Marie de La Condamine.
“Sur l’arbre du quinquine”. Memoires de l’Academie Royale des Sciences de Paris,
[1738]: 226-243. París, 1738.
520
521
AGI, Indiferente, 1552, fols. 471-473 (fide Francisco Murillo Campos,
Diego Bermúdez Camacho. Op, cit. nota 517).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
191
La obra impresa de José Hortega
Un proyecto: la Historia Natural y Médica de España
En el acta de la junta general de la Real Academia Médica
Matritense celebrada el 2 de mayo de 1737 queda anotado:
“Asimismo se acordó qe. los Sres. Academicos
Medicos pongan en noticia del Sr. Dr. Dn. Franco. Fernandez
Navarrete las especies de enfermedades qe. ocurrieren
cada mes en su Practica, con los syntomas, terminaciones
buenas y malas para qe. forme las ephemerides
Barometricas qe. á tomado á su cargo…”522
Es la primera noticia que recogen estas actas del que
habría de ser el gran proyecto cientifico emprendido por la
Corporación: la elaboración de una Historia Natural y Médica
de España. El propio José Hortega dará cuenta de los orígenes
del proyecto:
“En el año de 1733, se empezó à fundar en Madrid
una Academia de Medicina, y de Physica experimentál.
Sus ilustres Fundadores se propusieron el Proyecto de la
Historia Natural, y Médica de España, en cuyo desempeño
debían trabajar gloriosamente los Professores de
Mathematica, de Physica y Medicina. Todas las Ciencias
naturales, todas las Artes utiles, que dan esplendor y
magnificencia al Estado, estan comprehendidas en tan
vasto Proyecto, y en su execucion se incluyen las mas
eminentes felicidades á favor de la Patria, la qual podía
gloriarse á su tiempo de competir, y aun exceder en la
cultura de las Ciencias, y las Artes á las Naciones mas
erudítas de Europa, pues hasta ahora no logra ninguna
la felicidad provechosa de tener una completa Historia
Natural, y Medica de sus Provincias…” 523
José Hortega atribuye a la Academia un proyecto cuya
idea matriz corresponde a uno de sus miembros, Francisco
522
[Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 244).
523
José Hortega. Op. cit. nota 321, págs. 27-28. 1748
Fernández Navarrete (ca. 1680-1742)524, quien había ingresado
como académico de número en enero de 1737525 y que, tan pronto
como tuvo ocasión, trasladó al ámbito nacional un programa
que había realizado en su Granada natal, en una dimensión
estrictamente local526. En su primera intervención pública,
durante la junta general celebrada el 8 de marzo de éste 1737527;
tras exponer las que, a su juicio, debían ser las actuaciones de la
Academia, concluyó:
“Todas las condiciones referidas concurren en
el Assunto de la Historia Natural, y Medica de España.
Ninguno creo que es mas notable, mas extenso, mas
dificil, mas deseado del Orbe Literario, y que mas llene
la curiosidad y expectacion del Principe y de los sabios:
utilizando la Nacion, y enriqueciendo la facultad: en que
todos los Academicos trabajen unidos: que tenga sugetas
todas sus partes al juicio y recto criterio y determinacion
de la Academia: y cuia execucion solo tiene materiales
dificultades: que infaliblemente se pueden vencer con el
favor del Principe, la aplicación, y el tiempo (…)
Es trabajo en que unidos se den la mano las tres
facultades. La Pharmaceutica tiene muy bien que hacer
los Examenes Botanicos, Calificacion, y Analysis, y
reconocimiento de Piedras, Tierras, Metales, Minerales,
&ª. La Chirurgica tiene en que emplearse en la Anathomia
No hay que olvidar que José Hortega publica su crónica en 1748, y
que las relaciones de Francisco Fernández Navarrete con la Academia Médica
Matritense habían sido especialmente tensas desde los comienzos de 1737 (cf.
Junta particular de 30-I-1737. ARANM, L-1, fol. 288).
524
525
“El Dr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete Medico de Camara de S.M.
y Cathedratico de Medicina de la imperial Universidad de Granada hizo en
mis manos el juramto. acostumbrado, y la promesa de guardar los Estatutos,
y acuerdos y tomo posesion de Academico…” (Junta general de 11-I-1737.
ARANM, L-1, fol. 226).
526
Francisco Fernandez Navarrete [Antonio Gil Albarracín, ed.].
Cielo y suelo granadino. Idea de la Historia Natural de Granada en varias observaciones
Físicas, Médicas y Botánicas que para estímulo y satisfaccion de la curiosidad bien
aplicda escribía… Almería: Griselda Bonet Girabet, 1997. Aunque inédito hasta
1997, el manuscrito había sido dado por finalizado hacia 1732.
“El Dr. Dn. Fco. Fernz. Nabarrete presentó á la Academia por escrito
un Discurso qe. contenia el Bosquexo para la Historia Natural de España, el
qual fue leido en la Junta, y deste acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Dr. Dn.
Alphonso Lope qe. presidia, los Señores Director, y Fiscal, y los demas Señores
Academicos qe. se hallaron en esta Junta qe. fueron la mr. parte…” (ARANM,
L-1, fols. 238-239).
527
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
193
de varios Animales, Aves, y Peces Españoles: en la
Disseccion de los que mueren de las Endemias, o mas
comunes Enfermedades en España, y la Medicina en la
Historia, y Fisica de los Vientos, Climas, Tiempos, Aguas,
Alimentos, Costumbres, y Enfermedades Endemicas:
y lo que es mas que toda la Academia podra conocer, y
deliberar sobre todos estos puntos (...)
Ruego pues y pido encarecidamente a la Academia,
que ya que por su buena suerte se halla constituida en tan
lucidos principios, no se contente con menos que igualar
ó exceder el adelantamiento de los Extranjeros. No se
puede leer sin rubor del modo que hablan de nosotros.
Aun quando no nos nombran, nos ofenden con el silencio.
No se dignan de nombrarnos entre las Naciones eruditas.
La Academia Leopoldina en su Carta Invitatoria despues
de las Italiana, Francesa, Inglesa, y Holandesa con razon
elogiadas, no dexa Danes, Suecos, Hungaros, Bohemios,
y Lituanos, y otros que no aplaude, y que no se sabe que
cosa grande ayan hecho (…) y nos han dexado solos en la
ignominia.
Vindiquemos pues nosotros nuestra Ilustre
Nacion de opinion tan vergonzosa. Y sepa el Mundo que
la que en todas Ciencias produxo tan Inimitables Heroes,
y la que en la Medicina producia los Valles, Vegas y
Mercados quando el resto de la Europa los veneraba, en
este Siglo puede producir Academias, que en adelante
con diferentes ojos atiendan, y con embidioso respeto
distingan…”528
El impacto que la lectura de este texto produjo entre los
académicos se evidencia en el acta de la misma sesión pública
donde tuvo lugar su lectura:
“Asimismo mando la Academia qe. el Sr. Presidente,
res
los S Directores y Fiscal, y el Sr. Dr. Dn. Franco. Fernandez
Navarrete se junten particularmte. para examinar el
Proiecto de la Historia Natural y Medica de España,
qe. presentó á la Academia el dho. Sr. Dr. Nabarrete, á
cuyas Juntas asistirán los demas Sres. Academicos qe.
gustasen, para poner en execucion el referido Proiecto,
Francisco Fernández de Navarrete. [Illª Academia]. En: Tomo 2º
Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas Francisco
de Monleon, y Ramiro… 1745, fols. 59r-67v (RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª
Biblioteca / 5). Las citas en fols. 63v-64r, 65v, 67r-67v.
528
194
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
admitido y aprobado pr. la Academia, daran quenta en
las Juntas ordinarias y Generales qe. se celebren los lunes
y viernes, para qe. en su vista resuelva la Academia lo mas
conveniente…”529
La asunción de este proyecto, como propio, por la
Regia Academia Matritense tiene un interés evidente, dota a la
institución de los mismos objetivos centralistas ofertados a la
Corona por las otras Reales Academias de la Corte: los cimientos
de una lengua común o la construcción de una única Historia
para todos los españoles530. A la par que le oferta una posibilidad
de visibilidad de sus trabajos ante sus homóninas europeas, uno
de los objetivos perseguidos tras la transformación de la vieja
‘Tertulia’ en ‘Academia’.
El proyecto presenta otro par de singularidades de interés:
establece un verdadero programa de investigación, estrictamente
observacional, y lo hace partidiendo de una premisa hipocrática:
la relación entre la salud y las condiciones ambientales531.
ARANM, L-1, fols. 238-239. Antonio Hernández Morejón señala, la
junta del 15-II-1737 como en la que tuvo lugar el hecho; probablemente ésta sea
la fecha que consta en el manuscrito que él pudo consultar, pero no la efectiva
de la proposición, a tenor de la información que ofrece el Libro de Actas...:
“Tambien poseo entre mis manuscritos la proposicion que hizo Navarrete en la
junta general de la Real Academia médica matritense, el viernes 15 de febrero
de 1737, para que ésta invitase á todos los medicos de la península á escribir
cada uno una disertación, á fin de que todos concurriesen á la formación de la
historia natural y médica de España, incluyendo el plan y estilo de la obra y
órden de las materias que á cada médico en particular se le habría de señalar.”
(Antonio Hernández Morejón. Historia bibliográfica de la medicina española.
Madrid: Imprenta de la viuda de Jordán e hijos, 1842-1852. 6 vols. La cita en
vol. 6: 439-440. 1852); de la localizacion actual del manuscrito al que alude
Hernández Morejón nada sabemos.
529
530
Francisco Fernández Navarrete elaboró un memorial
complementario de su exposición pública en la Academia en el que queda
expresamente patente este carácter centralista del proyecto: “Las primeras
Lineas se tiran desde el Centro de la Corte a toda la Circunferencia de España,
que unida con nuestras Leyes, esta oportuna para conspirar á nuestro intento.
Los Honorarios que tenemos en las Capitales, y Pueblos principales del Reyno
son Terminos a que se dirigen estas Lineas. Ya se ve que esta traza dispone hacer
Academia de toda España…” Francisco Fernández de Navarrete. [El Mercurio
Academico. Harmonioso Proyecto de la Historia Natural, y Medica de España de la Rl.
Academia Medica Matritense, por D.F.F.N. Medico de Camara de S.M. Catholica]. En:
Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas
Francisco de Monleon, y Ramiro… 1745, fols. 68r-78v. (RANM, manuscrito,
signatura: 17-3ª Biblioteca / 5). La cita en fol. 72r.
531
La idea ha sido sugerida, y desarrollada con mucho mayor detalle,
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
195
Nada puede extrañar el interés con que, desde los sitiales
académicos, se observa el desarrollo de esta actuación; en junta
general de 15 de junio de 1737 se conocen sus primeros resultados
y se toma una decisión trascendente:
“El Sr. Dr. Dn. Franco. Fernz. Navarrete presentó á
la Academia las ephemerides temporales del Barometro,
y Thermometro del mes de Marzo, y Abril, y en su vista
mando la Academia qe. se impriman en su Nombre.
Item se acordo qe. todos los Viernes hasta princips.
re
Oct . aya Junta Genl. para tratar sobre el proiecto de la
Historia Natural y Medica de España.”532
No hubo que esperar tanto; en la siguiente junta general,
la celebrada el 21 de junio, ya está pergeñado el programa y
distribuidas las tareas entre los académicos de número533.
por Horacio Capel. “Medicina y clima en la España del siglo XVIII”. Revista de
Geografia, 32/33: 79-105. Barcelona, 1999.
532
ARANM, L-1, fol. 254.
“Asimismo se determino qe. se empieze á buscar en todos los
Arzobispados, y Obispados de España los profesores mas Aviles, y de mr.
inteligencia, con quienes la Academia á de tener comunicación y comercio
literario para desempeñar el gran Proiecto de la Historia Natural, y Medica de
España; y para cumplir con esta resolucion se encargaron los Sres. Academicos
de varios obispados con el orden sigte.: / El Sr. Lerma de los Obispados de
Valladolid, Palencia, Zamora, y Leon. / El Sr. Monleon de Jaen, Alcala la Rl.,
Guadix, y Almeria. / El Sr. Campillo, Zaragoza, Tarragona, Teruel, y Albarracin.
/ El Sr. Lope, Valencia. / El Sr. Rico el mr., Salamanca, Segovia, y Avila. / El Sr.
Velez, Cuenca. / El Sr. Ortega. De los Arzobispados, y Obispados del Principado
de Cataluña, y del Reyno de Galicia. / El Sr. Bereterrechea del Obispado de
Pamplona. / Sr. Navarrete, Granada y Malaga. / Asimismo se encargaron de
varios asumptos conducentes á formar los aparatos de Historia Natural, y
Medica con este orden / Sr. Navarrete. Metodo para hazer las observaciones del
Barometro, y Thermometro. / Metodo para formar las Cartas Geographicas, y
Corographicas de España. / Metodo para hacer las observaciones Medicas. /
Dissertacion sobre el uso de las Mathematicas en Medicina. / Prolusion sobre
la Historia Natural y Medica. / Sr. Velez. Methodo para los semi-Metales. / Sr.
Monleon. Metodo para los Metales. / Sr. Lerma. Metodo para los Minerales.
/ Sr. Campillo. Dissertacion sobre los systemas Phylosoficos. / Sr. Brunet.
Experiencias Physicas, y Chymicas. / Sr. Bereterrechea, Lopez y Valle. Metodo
de Disecar los Animales, e insectos &ª. / Sr. Isasi Isasmendi. Metodo epidemico.
/ Sr. Carreras. Dissertacion sobre los systemas medicos. / Sr. Ortega. Catalogo de
los Autores para la Historia Natural. / Catalogo de los Autores para la Historia
Medica. / Catalogo de los Autores Medicos Españoles. / Metodo de plantas.
/ Metodo de Animales, insectos, Aves y Pezes. / Sr. Lope. Metodo de aguas. /
Srs. Rico. Observaciones obstreticias.” (ARANM, L-1, fols. 255-257). Es sin duda
éste el primero de los proyectos que señala Antonio Hernández Morejón: “Este
ilustre médico [Francisco Fernández Navarrete] concibió además dos grandes
533
196
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Distribución de tareas, entre los miembros de la Real Académica
Médica Matritense, para la elaboración de la Historia Natural y Médica
de España y el Mercurio Académico de Francisco Fernández Navarrete
Académicos
Historia Natural y
Médica de España [José
Hortega]*
Baltasar de la Torre
Ocón
José Corralón
Juan Andrés de
Bereterrechea
Obispado de Pamplona
José Hortega
Arzobispados y
Obispados del
Principado de Cataluña
y del Reyno de Galicia
Vicente Carreras
Alejandro Martínez de
Argandeña
Julián Zapata
Miguel Garro
Alfonso Lope
Juan de Dios López
Juan de Burnet
Bartolomé Serena
Miguel Campillo
Miguel Rodríguez
Obispados de
Valladolid, Ávila y
Segovia
Obispados de
Calahorra, Osma y
Burgos
Arzobispado de
Tarragona, Obispados
de Barcelona, Tortosa
y Vich
Obispados de Oviedo,
Lugo y Mondoñedo
Villa de Madrid y Sitios
Reales
Obispado de Pamplona
Obispados de Badajoz,
Salamanca y Ciudad
Rodrigo
Obispado de Valencia
Arzobispado de
Valencia y Obispado de
Segorbe
Obispados de Astorga,
León, Zamora y Palencia
Obispados de Córdoba
y Cádiz
Arzobispado de
Zaragoza y Obispado de
Tarazona
Obispados de Zaragoza, Obispados de Huesca,
Tarragona, Teruel y
Jaca, Barbastro y Lérida
Albarracín
Arzobispado de Toledo
Juan Isasi Isasmendi
Cristóbal Vélez
Mercurio Académico de
Francisco Fernández
Navarrete**
Arzobispado de Sevilla
Obispado de Cuenca
Provincias de Vizcaya,
Álava y Guipúzcoa
Obispados de Cuenca,
Siguenza, Albarracín y
Teruel
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
Tomás Francisco de
Monleón y Ramiro
Francisco Fernández
Navarrete
Obispados de Jaén,
Alcalá la Real, Guadix y
Almería
Obispados de Granada
y Málaga
Pedro León Gómez
Francisco Lerma
Obispados de
Valladolid, Palencia,
Zamora y León
Pedro Palomero
Obispados de Jaén,
Almería y Guadix y
Abadía de Alcalá la Real
Arzobispado de
Granada y Obispado de
Málaga
Arzobispado de
Santiago y Obispados
de Orense y Tuy
Obispados de Coria y
Plasencia
Obispados de Cartagena
y Orihuela
Obispados de Gerona,
Solsona y Urgel
Nicolás Valle
Francico Rico
197
Obispados de
Salamanca, Segovia y
Avila
*
ARANM, L-1, fols. 255-257.
Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado
de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia
Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739]
(ARAH, mss. 9/5964).
**
Los documentos de Francisco Fernández Navarrete
nos ofrecen otra distribucion de tareas, más avanzada que la
mencionada en las actas de la Real Academia Médica, en donde la
distribución de los territorios objeto de estudio queda repartida
en su totalidad y con participación de un mayor número de
académicos. La nueva propuesta atiende a la denominación de
‘Mercurio Académico’, un volumen que habría de ser coordinado
por el médico granadino534.
proyectos: el uno fué la formación de la topografía médica general de España,
cuyo plan presentó á la academia médica de Madrid, distribuyendo su ejecucion
por obispados; el segundo, el establecimiento de un comercio literario entre
todos los médicos de la península, á fin de escribir la historia cronológica de las
epidemias de nuestro país…” (Antonio Hernández Morejón. Op. cit. nota 529,
vol. 6: 434. 1852).
“Este Libro [Mercurio Academico] se participara a todos nuestros
Academicos del Reyno, con las demas Providencias que la Academia tenga
por convenientes. / El Repartimiento de las Provincias, y Territorios dispuso
la Academia que fuese de esta forma. / El Dr. Dn. Balthasar de la Torre y Ocon
(…) El Arzobispado de Sevilla. / Dn. Joseph Corralon (…) los Obispados
de Valladolid, Avila, y Segovia. / Dn. Juan Andres de Bereterrechea (…)
los Obispados de Calahorra, Osma, y Burgos. / Dn. Joseph Ortega (...) el
534
198
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Igual sensación nos transmite la distribución de los temas
que los académicos habrían de abordar; más estructurada en la
propuesta de Fernández Navarrete:
“Los Discursos, Methodos, y Noticias que deben
componer el Mercurio dispusso la Academia: que
precediendo una Razon de las Noticias que tubo para
abrazar este Proyecto, su Proposicion, y Distribucion y
la Nominacion de los Academicos, que deben executar
assi en esta Corte como fuera de ella en todo el Reyno se
repartan entre los de Numero y Exercicio, según la serie
siguiente: en que no se guarda el Orden de la Antigüedad
sino el que (por ahora pareze) deberan llevar los Assuntos:
I. Primeramente: Un catalogo de Libros Españoles
Antiguos y Modernos: en los que se ha de dar noticia de
todos los que se han escrito en Español, aunque sea por
Estranjeros, ó en Idiomas Estrangeros por Españoles, y
tratan de los puntos conducentes a la Histora Natural, ó
Medicina de España; ya sea por orden Alphabetico ya por
Clases, Phisicos, Mathematicos, Metalurgicos, Botanicos,
Chimicos &ª.
Dn. Joseph Ortega. II. Y Otro Catalogo de Libros
Extrangeros Antiguos y Modernos, que en Obra, ó
Arzobispado de Tarragona, Obispados de Barcelona, Tortosa, y Vique. / Dn.
Vicente Carreras (…) los Obispados de Oviedo, Lugo, y Mondoñedo. / Dn.
Alexandro Martínez de Argandoña (…) la Villa de Madrid, y Sitios Reales. /
Dn. Julian Zapata (…) el Obispado de Pamplona. / Dn. Miguel Garro (…) los
Obispados de Badajoz, Salamanca, y Ciudad Rodrigo. / Dn. Alphonso Lope
(…) El Arzobispado de Valencia, y Obispado de Segorbe. / Dn. Juan de Dios
Lopez (…) los Obispados de Astorga, Leon, Zamora, y Palencia. / Dn. Juan de
Burnet (…) los Obispados de Cordova, y Cadiz. / Dn. Bartolome Serena (…) el
Arzobispado de Zaragoza, y Obispado de Tarazona. / Dn. Miguel Campillo (…)
los Obispados de Huesca, Jaca, Barbastro, y Lerida. / Dn. Miguel Rodríguez
(…) el Arzobispado de Toledo. / Dn. Juan Ysasi Isasmendi (…) las Provincias
de Vizcaya, Alava, y Guipuzcoa. / Dn. Xptobal Velez (…) los Obispados de
Cuenca, Siguenza, Albarracin, y Teruel. / Dr. Dn. Thomas Franco. de Monleon y
Ramiro (…) los Obispados de Jaen, Almeria, y Guadix, y Abadia de Alcala la
Rl. / Dr. Dn. Francisco Fernandez Navarrete (…) El Arzobispado de Granada, y
Obispado de Malaga. / Dn. Pedro Leon Gomez (…) El Arzobispado de Santiago,
y Obispados de Orense, y Tuy. / Dn. Franco. Lerma (…) los Obispados de Coria,
y Plasencia. / Dn. Pedro Palomero (…) los Obispados de Cartaxena, y Orihuela.
/ Dn. Nicolas Valle (…) los Obispados de Girona, Solsona, y Urgel…” (Francisco
Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado de Toledo. Estilo de
la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles
remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739]. Archivo de la Real Academia
de la Historia [ ARAH], mss. 9/5964).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
199
Tratado Especial han tratado de los Puntos assi generales,
como Especificos que debera tener presentes la Academia
para las dos Historias [Natural y Médica], colocandolos
en la misma forma que a los antecedentes.
Dn. Juan Burnet. III. Exceptas de las Actas de
Inglaterra, Viageros y otros Autores de aquella Nacion
que han tocado noticias pertenecientes a la Historia
Natural, y Medica de España.
Dn. Francisco Fernandez Navarrete. IIII.
Disertacion Historico Medica. Proluzion (…)
Dn. Francisco Fernandez Navarrete. V. Dissertacion
Historica. Methodo Cosmographico (…)
Dn. Balthasar de la Torre y Ocon. VI. Dissertacion
Historica. Caracter de los Españoles (…)
Dn. Miguel Rodriguez. VII. Dissertacion Phisica
Historica, Methodo Anemologico (…)
Dn. Francisco Fernandez Navarrete. VIII.
Dissertacion Physica y Methodo Metheorologico (…)
Dn. Pedro de Leon Gomez. IX. Dissertacion
Physico Analytica de las Aguas (…)
El Dr. Dn. Miguel Garro. X. Dissertacion Physica
Medico Practica. Synopsis de los Baños (…)
Dn. Xptobal Velez. XI. Dissertacion Phisico
Analytica Mineralogica (…)
Dn. Thomas Francisco de Monleon y Ramiro. XII.
Dissertacion Phisico Analytica Metalurgica (…)
Dn. Nicolas Valle. XIII. Dissertacion Physico
Historico Lytographica (…)
Dn. Joseph Ortega. XIV. Dissertacion Historico
Phisica Methodo Phitologico (…)
Dn. Francisco Lerma. XV. Dissertacion Historico
Phisica Methodo Zoologico (…)
Dn. Juan de Dios Lopez. XVI. Dissertacion
Historico Anatomica (…)
Dn. Miguel Campillo. XVII. Dissertacion Historico
Critica Synopsis Philosophica (…)
Dn. Pedro Palomero. XVIII. Dissertacion
Philologica (…)
Dn. Alexandro Martinez Argandoña. XIX.
Dissertacion Historico Medica (…)
200
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Dn. Vicente Carreras. XX. Dissertacion Historico
Critica Synopsis Medico Systematica (…)
Dn. Julian Zapata. XXI. Dissertacion Empirico
Critica de la Empiria Curativa (…)
Dn. Alphonso Lope. XXII. Dissertacion Historico
Critica del uso y Abuso de las Mathematicas en
Medicina (…)
Dn. Joseph Corralon. XXIII. Dissertacion Historico
Medica de los mas famosos inventos Medicos (…)
Dn. Juan Andres Beretherrechea. XXIIII.
Dissertacion Historico Chirurgica de los inventos
Chirurgicos (…)
Dn. Joseph Ortega. XXV. Dissertacion Historica de
la materia Medica yndigena (…)
Dn. Juan Ysasi Ysasmendi. XXVI. Dissertacion
Historico Medica, del Methodo Epidemico (…)
Dn. Bartholome Serena. XXVII. Dissertacion
Historico Anatomica Particular (…)
Dn. Joseph y Dn. Francisco Rico. XXVIII.
Dissertacion Historico Critica Obstetricia…” 535.
Distribución de tareas, entre los miembros de la Real Académica
Médica Matritense, para la elaboración de la Historia Natural y Médica
de España y el ‘Mercurio Académico’ de Francisco Fernández Navarrete
Historia Natural y Médica de España
[José Hortega]*
Disertación
Académico
Autores médicos
José Hortega
españoles
Autores para la
José Hortega
Historia Natural
Fco. Fernández
Navarrete
Cartas geográficas Fco. Fernández
y corográficas
Navarrete
Prolusión
Mercurio Académico de Francisco
Fernández Navarrete**
Disertación
Académico
Bibliografía
hispana
Bibliografía no
José Hortega
hispana
Exceptas inglesas Juan Burnet
Fco. Fernández
Prolusión
Navarrete
Fco. Fernández
Cosmografia
Navarrete
Baltasar de la
Carácter de los
españoles
Torre Ocón
Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado
de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia
Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739].
ARAH, mss. 9/5964.
535
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
Anemología
Miguel
Rodríguez
Fco. Fernández
Navarrete
Observaciones
del barómetro y
termómetro
Fco. Fernández
Navarrete
Meteorología
Aguas
Alfonso Lope
Aguas
Minerales
Semimetales
Francisco Lerma
Cristóbal Vélez
Tomás Francisco
Monleón Ramiro
Metales
Método de
plantas
José Hortega
J. Bereterrechea,
Método de
Juan de Dios
disecar animales e
López y Nicolás
insectos
Valle
Método de
animales,
José Hortega
insectos, aves y
peces
Experiencias
Juan Burnet
físicas y químicas
Sistemas
filosóficos
Miguel Campillo
Observaciones
médicas
F Fernández
Navarrete
co
Sistemas médicos Vicente Carreras
Uso de las
Matemáticas en
Medicina
Francisco
Fernández
Navarrete
Método
epidémico
Juan Isasi
Isasmendi
Baños
Mineralogía
201
Pedro de León
Gomez
Miguel Garro
Cristóbal Vélez
Litografía
Tomás Francisco
Monleón Ramiro
Nicolás Valle
Fitología
José Hortega
Zoología
Francisco Lerma
Anatomía
humana
Juan de Dios
López
Metalurgia
Sinópsis filosófica Miguel Campillo
Sinópsis filológica Pedro Palomero
Alejandro
Medicina
Martínez
Argandoña
Sistemática
Vicente Carreras
médica
Crítica de la
Julián Zapata
empiria curativa
Uso y abuso de
la Matemática en Alfonso Lope
Medicina
Inventos médicos José Corralón
Juan Andrés
Inventos
quirúrgicos
Bereterrechea
Materia médica
José Hortega
indígena
Juan Isasi
Método
epidémico
Isasmendi
202
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Anatomía
particular
Bartolomé
Serena
José Rico y
Francisco Rico
José Rico y
Obstetricia
Francisco Rico
* ARANM, L-1, fols. 255-257.
** Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado
de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia
Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739]
(ARAH, mss. 9/5964).
Obstetricia
A medida que la definición del proyecto va avanzando,
el protagonismo de Francisco Fernández Navarrete se hace más
evidente; resulta significativo de este aserto la portada diseñada
por éste para el volumen que habría de contener el resultado
final: El Mercurio Academico. / Harmonioso Proyecto de la / Historia
Natural, y Medica / de España de la Rl. Acade / mia Medica Matritense,
por D.F.F.N. [Francisco Fernández Navarrete] Medico de Camara
de S.M. Catholica536. Conservamos copia de las minutas dirigidas
a un buen número de académicos en que, bajo la firma de
Fernández Navarrete, se les urge a remitirle:
“una razon de los Pueblos de que se componen
[los territorios confiados a su estudio], Obispados con
que lindan y quales son los lugares del confin de cada
uno por ser precisa antes de todo esta noticia para la
Geographia…”537
El afán de protagonismo de Francisco Fernández
Navarrete, que conllevó a un encontronazo institucional con José
Hortega, estuvo a punto de provocar un incidente diplomático
entre la Real Academia de Medicina y la de la Historia, a la que
Navarrete también pertenecía. En la primavera de 1738, la Real
Academia de la Historia, representada por Fernández Navarrete,
solicitó realizar una visita protocolaria a la Médica Matritense,
La biblioteca de la Real Academia Nacional de Medicina conserva,
entre los manuscritos de Francsico Fernández Navarrete, un bosquejo de esta
portada, cf. Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el
Dr. Dn. Thomas Francisco de Monleon, y Ramiro… [Madrid]. [1745], fols. 68r-78v.
(RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª Biblioteca / 5).
536
[Borradores de minutas firmadas por Francisco Fernández
Navarrete]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España.
Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 422r-430r. [1739] (ARAH, mss. 9/5964);
conservamos las dirigidas a José Corralón (fol. 422r), Julián Zapata (fol. 423r),
Pedro León Gómez (fol. 424r), Miguel Campillo (fol. 425r), Francisco Lerma
(fol. 426r), José Hortega (fol. 427r), Nicolás Valle (fol. 427r), Baltasar de la Torre
(fol. 429r) y Miguel Garro (fol. 430r).
537
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
203
ésta aceptó y señaló día y hora para el acercamiento institucional:
la mañana del martes 29 de abril de éste 1738, pero a él no acudió
representante alguno de la de la Historia; la Academia Médica
resolvió expresar sus quejas por escrito538.
La falta de asistencia de comisionados de la de la
Historia, o por mejor decir, de Francisco Fernández Navarrete,
era esperada; en un escrito de 30 de abril de 1738, éste da cuenta
de su visión de los hechos al que fuera primer secretario de la de
la Historia, Juan Antonio de Rada Berganza:
“… aviendo sabido que la Academia Medica ha
escrito a la nuestra y a otras partes para quexarse de mi
y dar no se que satisfaccion (…) no hubo Academia para
resolver el lugar del recibimiento, sino el mismo interesado
[José Hortega] (…) solo le pedi, suspendiesse el aviso de
Mañana para dar Yo cuenta, me parecio tan arrogante
la respuesta como agena del respeto de la Academia, y
propia de unos pobres hombres que se dexan mandar
(…) que por el sitio ha estado despreciada en la facultad
hasta que Yo entre venciendo satiras y chocarrerias de las
personas de mas distincion de la Corte (…)
Por lo que toca a mi podra ver si fue justo qe. con
el Caracter de mi comision un solo sugeto (cuio carácter
no corresponde) quede con la gloria de deslucirme (…)
Ellos gustaran sin duda que Yo pierda las dos Academias.
La de ellos por ahora lo hare gustoso: no del todo porque
Yo espero en Dios que con el tiempo de otra cosa: Y
para entonces Yo sere privilegiado, y ademas de que me
desearan no esta en su mano otra cosa…”539
538
El acta de la junta general celebrada el 29-IV-1738 es sumamente
elocuente: “La Real Academia de la Historia, a qn. el Rey nro. Sr. ha colmado de
muchas honras quiso dar parte de ellas, y de su fundacion á nra. Academia para
lo qual nombró pr. Comisarios al Sr. Dr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete el qual
pidio, dia, y hora á la Academia, y aviendolo dado oy el Sr. Presidente á las 11 y
mª. y estando los Sres. Academicos para este Acto, se arreglaron los asientos; y se
nombraron los Acads. qe. los debian conducir; pero aviendo esperado los Acads.
hasta cerca de la una, no acudieron al cumplimto. citado los Sres. Comisarios de
la Rl. Academia de la Historia, en vista de lo qual, y de los Papeles qe. en este
asunto ha escrito el Sr. Dr. Navarrete resolvió la Academia dar sus quexas á la
Rl. Academia de la Historia.” (ARANM, L-1, fols. 309-310).
Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada
Berganza. Madrid, 4-IV-1738. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n).
539
204
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
En un tono similar se expresa en una misiva, sin datar
pero de estas mismas fechas:
“… mis Medicos son unos pobres hombres, el
Boticario [José Hortega] los manda porque por su mala
cabeza se han separado el Dr Josse Araujo y otros, y Yo
no lo he hecho sino de la presente asistencia solo por ver
si en algun tiempo se mejoran de fortuna y por dexarles
que a fuerza de errar se desengañen. Lo que ha pasado
vera Vms. en essos papeles sobre el reparo de no aver por
donde entrar sino la tablilla del mostrador.
El manda al que hace de Presidente y contra el
gusto de los otros ha respondido con la magestad que
Vm. ve; el aviso mio de ayer fue a la ocasion, y a las once
de la noche me embio el otro papel sin hacerse cargo de
los motivos que le di.
Yo no juzgo necessario responderle. Y tuviese por
mejor no hacer caso de tontos presumidos…”540
Un borrador de respuesta, pergeñado por Francisco
Fernández Navarrete, insiste en los mismos elementos de la
polémica:
“Yo creo que nunca por reglas de razon se puede
uno librar de que otro se pase de necio o arrogante: y
devieron esta mañana aver desauciado pues no era seguro
que Yo pudiera aver evacuado mi dificultad que ayer
tarde propuse a algunos Señores y la juzgaron legitima. Yo
construi el papel de anoche en estos terminos: no queremos
esperar, ni dar lugar a que se medite, si quieren vengan aquí,
y sino no vengan. Yo es muy cierto que he ido y voy alli;
pero recibirle de la Comision me parecio que no cabia por
la tablilla del mostrador y por esta conciencia (erronea)
no debia por mi obrar en contra quando la Academia esta
tratando de establecer su Autoridad (…) La Academia si
quiere satisfacer a la otra sera muy facil culpandome a mi
y embiando a otro, y quedaran muy gustosos porque ya
para mi es tarde...”541
Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada
Berganza. [Madrid, IV-1738]. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n).
540
Borrador de respuesta [mss. Francisco Fernández Navarrete].
[Madrid, 29-IV-1738]. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n).
541
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
205
Ante la solicitud de explicaciones por parte de Juan
Antonio de Rada542, Fernández Navarrete pergeñó una larga
representación, en la que da pormenorizada cuenta del incidente:
“No me detengo en las razones que me movieron
para solicitar privadamente que los Medicos se juntassen
en lugar mas decente y menos murmurado, para recibir
la Diputacion de V.S. ni en si, no siendo el lugar la esencia
de aquella Academia, era de mas lustre suio recibir en
otro. Solo dire que, aviendo estado el Segundo Secretario
D. Miguel Garro con migo el dia antes, y enterandose,
y aprobando mis razones: diciendole (sobre lo que antes
le avia propuesto) que ya no eran mias solas, se aparto
de mi diciendo, que lo iban a conferir. Pero a la noche,
sin dignarse de darles respuesta ni satisfaccion alguna,
embiaron seco el aviso para otro dia al medio dia en la
Botica.
Al qual respondi al instante: que lo hablado
ya en este punto me precissaba a dar cuenta a V.S. que
suspendieran la junta por aquel dia para tener lugar de
hacerlo. Me respondieron el mismo Domingo a las once
de la noche con otra exclusiva seca (…)
Este aire de altaneria, y siendoles tan facil
suspender aquella junta, negar la espera en el primer lance
a las resoluciones de V. S. parece a mi mal entender una
presumida afectacion de seguridad, que aunque tengan
las razones que tubieren me suena a desprecio de aquello
que todas las Comunidades tanto repasan para su decoro
y no les duelen terminos para arreglar el Ceremonial (…)
Contra mi persona es solicitar que V. S. desapruebe
lo hecho por mi, con continuarles sencillamente (sin hacer
caso de mi estimacion) su urbanidad ceñida a sus leyes:
pues ya no puede V. S. desentenderse de lo passado:
quedando yo manifiestamente descubierto, y de gran
A ellas debe responder el escrito de 5-IV-1738: “Yo no quiero cansar
a Vm. con cuanto le considero bien cansado, ni en que sea preciso hablar contra
otros: solo que si Vmd. cree de mi que no miento, ni tengo en esto interes
alguno particular mio, solo he mirado el decoro de nuestra Academia, y asi
con justicia espero que mire por el mio. Remito la copia de la suplica que tengo
que presentarle mañana. Y si pareciere sabio facer, o que le toca, o este bien
sacrificandome a mi, en haciendo Yo lo que me parece que debo: lo demas no
me toca…” Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada
Berganza. Madrid, 5-IV-1738. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n).
542
206
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
triunfo, jactancia y risa para ellos: que continuaron con
radicarme con esso en mala opinion con el Dr. Cervi: y
mas no siendo Yo capaz de desdecirme, ni satisfacerlo: no
debiendo uno ni otro…”543
Las explicaciones de Francisco Fernández Navarrete no
fueron atendidas por la Real Academia de la Historia; y apenas
una semana después de mediada la ofensa, en la sesión reunida
el 9 de mayo, José Hortega informa del escrito de desagravio
remitido por la de la Historia:
“Asimismo se dio quenta á la Academia de un
Papel escrito pr. el Ssrio. de la Rl. Acadª. de la Historia, y
de su orden, en el qual se expresa qe. siendo sabedora
la referida Academia de los excesos de sus Comisarios
los desaprobó, y advirtio seriamte. á sus Diputados qe.
no avian obrado bien, assimismo pedia a nra. Acadª.
qe. depusiese qualquier quexa qe. pr. este accidente
pudiera aver concebido, y que admitiese á los nuebos
Diputados los Sres. Dn. Antonio Fernz. Prieto y, Sotelo, y
Dn. Martín de Ulloa, sobre lo qual mando la Academia qe.
se suspendiesen de embiar á la Acadª. de la Historia las
justas quexas qe. tenian dispuestas, y qe. se respondiese
qe. la Academia estaba asegurada de la atencion y cortesia
de la Rl. Academia de la Historia, y assimismo que estaba
prompta á recibir á los nuevos Diputados, lo que se
executó.”544
Ese mismo día, el 9 de mayo, Francisco Fernández
Navarrete escribe a Juan Antonio de Rada una carta en tono
mucho más humilde, quizás destinada a ser mostrada, como
prueba de buena voluntad, ante los ojos de los académicos de la
de Medicina:
“… aviendo logrado mi corto merecimiento
que la Academia este satisfecha de que lo acaecido
543
Representación de Francisco Fernández Navarrete. Madrid, 5-IV1738. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH,
Secretaría, s/n). La representación se conserva por duplicado. De esta fecha
debe ser un borrador de oficio, dirigido a Miguel Garro: “… por lo que Vmd.
sabe que deseo y solicito el Lucimiento y decoro de essa Acadª. / Por esta misma
razon previne a Vmd. que no me parecia decencia el recibir un Cuerpo tan
respetable donde ahora se juntan: y aviendo esos hecho de oficio mio, lo repito
ahora por presuncion y reparo que se me ha hecho. / Tambien prevengo que con
la distincion que fuese el recebimiento, sera la correspondencia…” (Expediente
del académico Francisco Fernández Navarrete. ARAH, Secretaría, s/n)
544
ARANM, L-1, fol. 311.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
207
en la diferencia con mi Academia Medica (por una
extrajudicial diligencia que quisse hacer, no creiendome,
ni pareciendome necessario que llegasse a ser noticia
formal de una, ni otra) fue solo efecto del celo con que
apetezco el maior lustre de ambas…”545
La Academia Médica recibió, con todas las formalidades
precisas, a los diputados de la Academia de la Historia en la
mañana del viernes 16 de mayo de éste 1738:
“Aviendo noticiado el Sr. Dn. Juan Antonio Rada
rio
Ss . de la Rl. Acadª. de la Historia á nra. Academia qe.
estaban nombrados nuebos Diputados para dar la noticia
de su fundacion, y de las honras que S. M. avia concedido
á sus individuos, pidieron los nuebos Diputados el
Miercoles pasado Dia, y Hora pr. medio de un Papel, y el
Sr. Presidente señalo oi á las onze y mª á cuya hora llegaron
los Sres. Diputados Dn. Antº. Fernz. Prieto, y Sotelo, y Dn.
Martin de Ulloa a los quales baxaron á recibir á la Puerta
de la Calle los Sres. Academicos Dn. Miguel Rodriguez,
y Dn. Pedro Palomero los quales los conduxeron hasta
la Puerta del Salon de la Academia, y en este lugar los
recibieron los Sres. Academicos Dn. Joseph Ortega, y Dn.
Alphonso Lope qe. los acompañaron hasta que el Sr. Dn.
Antº. Fernadz. Prieto, y Sotelo ocupo el primer assiento de
las Banda derecha, y el Sr. Dn. Martin de Ulloa el primer
assiento de la Banda izquierda, y en este estado hablo el Sr.
Sotelo, y respondio nro. Presidente, y despues el Sr. Ulloa
y tambien respondio nro. Presidente. Dieron quenta de la
fundacion de la Rl. Academia de la Historia y presentaron
una Copia de los Decretos con que S. M. los ha honrado y
finalmte. propusieron á nra. Academia la amistad y mutua
correspondencia con la Rl. Acadª. de la Historia, á que
respondio el Sr. Presidente dandoles la enhorabuena, y
aceptando la amistad, y correspondencia, con lo que se
despidieron los Sres. Diputados, y se les acompaño hasta
la Puerta de la calle de la misma forma…”546
Tras la partida de la embajada de la Academia de la Historia,
los de la de Medicina decideron enviar una representación de
buena voluntad ante la de la Historia en la que se plasmaran sus
545
Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada
Berganza. Madrid, 9-IV-1738. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n).
546
ARANM, L-1, fols. 313-315.
208
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
deseos de cooperación; se nombró para ello a Vicente Carreras y
a Bartolomé Serena547, quienes cumplieron con el mandato el 19
de mayo, alli gozaron de ‘el mismo tratamiento, y recibimiento’
del que habían sido objeto los de la Historia en la casa de José
Hortega548. Se daba así término a un leve incidente diplomático
entre ambas Corporaciones, no exento de algunas consecuencias.
A partir de entonces la presencia de Francisco Fernández
Navarrete no fue bien tolerada en la Academia Médica; el 2 de
junio de éste 1738, el Fiscal de la Academia, Alfonso Lope, solicita
se le entreguen los documentos pertenecientes a este académico,
de los que se acuerda facilitarle copia549; desde entonces su
nombre apenas figura en las actas de la Corporación550. El médico
granadino trasladó su proyecto de ‘Historia Natural de España’
a la Academia de la Historia551.
547
“Asimismo se acordo qe. los Sres. Academicos Carreras y Serena
pasen á dar la enhorabuena á la Rl. Acadª. de la Historia en nombre de nra.
Acadª. cuya noticia se la comunique pr. su ssro. de quien tomaron el Dia, y Hora
los Sres. Diputados…” (ARANM, L-1, fol. 315).
El acta de la junta general celebrada el 23-V-1738 imforma: “Los Sres.
Carreras, y Serena dieron quenta á la Academia de aver executado la comision
qe. se les encargo cerca de la Rl. Academia de la Historia (…) Dixeron qe. la Rl.
Academia de la Historia les avia señalado el Lunes pasado á las cinco de la
tarde en la Pieza qe. ocupa en la Rl. Biblioteca, qe les hizo el mismo tratamiento,
y recibimto., y les dieron los mismos asientos qe dio á su Diputacion nra. Acadª
y que dexaron establecida la amistad, y mutua correspondencia entre los dos
Cuerpos, de cuya comision se dio por mui satisfecha la Academia…” (ARANM,
L-1, fols. 315-316).
548
“Que suplicaba á la Academia [el Fiscal] mandase entregarle todos
los papeles del Sr. Navarrete, pr. qe. tenia qe. pedir sobre ellos (…) [La Academia
acuerda] qe se le entregue al Sr. Fiscal una copia de los Papeles del Sr. Navarrete.”
(ARANM, L-1, fol. 317).
549
550
Sólo en una ocasión, que hayamos anotado, en la junta general
celebrada el 21-XI-1738: “El Sr. Navarrete presentó á la Academia un libro
intitulado Parynetica Epistola, y mandó la Acadª que se le diesen las gracias.”
(ARANM, L-1, fol. 332). Sin duda en alusión a la obra de Francisco Fernández
Navarrete: Philopolitae speculatoris, ad doctissimos patriaeque amantissimos per
Hispaniam medicos. Super morbosis temporum constitutionibus sedulò & communi
studio observandis. Paraenetica epistola /calamo ... Francisci Fernandez Navarrete...
Matriti: [s.n.], 1738.
Así lo relata Casimiro Gómez Ortega: “A pocos meses de haver
admitido la comision presentó á la Acadª. bajo el titulo Historia Natural de Espª:
un Manuscripto en que havia colocado infinitos materiales recogidos en sus
viages por varias Provincias de España y especialmte. durante su larga residencia
que hizo en su Patria Granada, cuyo Cielo y Suelo (como el dice) describió
con grande industria y exactitud en otra obra manuscrita, de mucha utilidad.
551
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
209
Las tensiones producidas entre Francisco Fernández
Navarrete y José Hortega en el seno de la Real Academia Médica
Matritense le hacen pensar que su proyecto de ‘Mercurio
Académico’ no habría de tener buen fin; a partir de la primavera
de 1738 centra sus afanes en convencer a la Real Academia de la
Historia de la viabilidad de un nuevo programa, éste concebido
como estrictamente personal, y centrado en el estudio de la
Historia Natural, en una concepción mucho más positivista,
menos filosófica, y -desde luego- nada médica:
“En 14 de Julio del mismo año [1738] empezó a
leer un papel sobre los principios y reglas de la Geografía,
estado de la de España, y medios de adelantarla. Se acabó
de leer el día 21 (…)
En 24 dho. [XI-1738] continuo leyendo el proyecto
de su encargo de Histª. natural (…)
En 16 de Marzo [1739] leyó su Disertª. sobre el
caracter de los Españoles propia de su materia de Historia
Natural (…)”552
“En 17 de Agto. [1740] empezó a leer dho. Sr.
Nabarrete sobre el citado asunto, en que hablaba de
la creacion del mundo, sus partes y orden dellas; y
habiendo reparado no corresponder aquella generalidad
a la Historia natural qe. habia de incluirse en el Aparato,
assi por deber ceñirse a la de España, como pr. haberse
Acompañó el primer Manuscrito con una Colección de 1.200 esqueletos de
plantas Españolas recogidas por su mano con la Lista Alphabetica de los
nombres antiguos españoles de algunas y razon climatologica de las que el
havia nuevamte. impuesto á otras: cuyo paradero se ignora igualmte. que el
de la Descripcion del Suelo y Cielo Granadino…” (Casimiro Gómez Ortega.
“Noticias historicas sobre los Manuscriptos del Dr. Navarrete y dictamen de su
obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles
remitidos por el Sr. Ortega: fols. 1r-5v. [1771]. ARAH, mss. 9/5964. La cita en fol.
1r). Hoy sabemos que el manuscrito de su Descripcion del Suelo y Cielo Granadino
se conserva en la Biblioteca y Archivo de la Provincia Franciscana de Cataluña
(cf. Antonio Gil Albarracín. Op. cit. nota 526. 1997); y su herbario fue cedido,
a la Real Academia de la Historia, en 1785, por intermediación de Cristóbal
Medina Conde, canónigo de la Iglesia Catedral de Málaga; lo componen 1.200
plantas distribuidas en 299 folios (ARAH, mss. 9/5620).
[Esquela sobre la actividad de Francisco Fernández Navarrete en la
Real Academia de la Historia]. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). Este escrito suscitó polémica, al parecer
promovida por un médico del conde de Benavente, cuyo nota de respuesta,
compuesta por Francisco Fernández Navarrete, en Madrid, el 28-I-1740, se
conserva entre los documentos de su expediente personal (Expediente del
académico Francisco Fernández Navarrete. ARAH, Secretaría, s/n).
552
210
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de tratar Historica, y no cientificamte. Se suscitó sobre
este punto alguna controversia, cuya resolucion se difirio
para la Acadª sigte. En ella expuso el secretario haberse
ofrecido al publico la Historia natural con la prevencion
de haber de tratarse señalando en general los montes,
rios, plantas, arboles, animales, &ª constitucion del cielo,
aves, &ª sin tocar en las exencias de ninguna de estas
cosas por ser esto propio de la fisica (…) En Academia de
31 de Agto. se votó sobre este particular, y quedó resuelto
qe. se ciñiese a la relacion del suelo y cielo de España,
adornada de las producciones de uno y otro, tanto de las
qe. tiene comunes a otras Provinicas, como de las qe. son
peculiares de ella, comprovando con los hechos, con la
notoriedad, o con la autoridad, procurando siempre no
internarse en las razones qe. conduzcan mas a lo cientifico,
qe. a la verificacion de los hechos (…)
En 19 de Septe. [1740] presento este i [individuo]
un interrogatorio de cosas pertenecientes a Historia
natural, y se acordó remitir copia a los Honorarios para
qe. remitiesen las noticias qe. pudiesen adquirir, que se
pedian en el.
En 2 de Enº de 1741 presentó concluido el Discurso
4 de su Hist. nat. y hizo solemne juramto. de qe. todas las
plantas qe. refiere sin remision a AA. las habia visto y
tenia vivas en libros, los quales mostró en la Academia,
de qe. certifica el Secretario…”553
La Academia de la Historia, consciente de los posibles
problemas que la iniciativa de ocuparse de la Historia Natural
podría provocar en la Médico Matritense, estableció nítidamente
la linde de sus intereses; en el informe emitido por Antonio
Boneta, fechado el 31 de agosto de 1742, se recoge:
“… que se distinga siempre la Ciencia Natural
de la Historia Natural, entendiendo propia de aquella
la explicacion de las ciencias de las cosas y sus causas,
y de esta unicamente la noticia de lo que es matteria de
553
[Historia Natural]. Expediente del académico Francisco Fernández
Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). Y aún después de su fallecimiento, seguirían
cuidándose estos aspectos: “En 21 de Enº de 1743 el Sr. Heredia dió cuenta qe Dª.
Feliciana de Bargas, viuda del Sr. Nabarrete presentaba a la Acadª. las piedras,
peces, conchas y otras curiosidades qe prueban lo qe dexo escrito de su asunto
de Hist. natural. Se acordó dar gracias a dha Sra”. [Esquela sobre la actividad de
Francisco Fernández Navarrete en la Real Academia de la Historia]. Expediente
del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
211
aquella ciencia; Y asi como se ha de distinguir lo que es
comun á todos los Payses de lo que es peculiar de España,
á que es preciso ceñir todos los puntos del Aparato…”554
Pese a que el proyecto de Historia Natural estaba ya en
manos de la Real Academia de la Historia, José Hortega no cejó
en su intento de mantenerlo vivo en la Médico Matritense; fiel al
encargo que le fuera conferido por su Academia, dará cuenta de
la idea al Capitán General del Pincipado de Cataluña, solicitando
su colaboración555, y siguió trabajando en el plan que la Academia
Médica había asumido como propio; en su seno presentó
una serie de disertaciones, todas bajo el marchamo común de
“Dissertacion sobre la Historia Natural de España”: el 7 de marzo
de 1738 realizó un “Discurso que contenia las Memorias para la
Historia de las Plantas de España”556, que prosiguió en la junta
general del 21 de marzo de 1739, donde leyó una “Dissertacion
sobre los methodos de las plantas, y continuacion de las
Memorias para la Historia Genl. de las Plantas de España”557;
554
Juan Antonio Boneta. [Escrito de Juan Antonio Boneta sobre la
Historia Natural de Fernández Navarrete]. En: Francisco Fernández Navarrete.
Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 7r-8v. [1742]
(ARAH, mss. 9/5964). La referencia en fol. 8r.
“… con aprobación de S. M. ha emprendido la Academia escribir
la Historia Natural y Medica de España, de qe han de resultar á la Nacion, á
las Ciencias, y á las Artes los mayores beneficios, y utilidades. Para conseguir
este intento necesita la Academia tener Individuos Academicos en todas las
provincias de España, y pr. consiguiente en el Principado de Cataluña. Estos
Academicos han de ser precisamte. Profesores Mathematicos, Physicos, Medicos,
Ciruganos, y Boticarios, todos los quales han de trabajar en la averiguacion de
las cosas naturales del referido Principado con el mr. zelo, y ardor, y respeto
de qe. S. M. tiene recibido á la Academia baxo de su Rl. Proteccion (…) y pr.
consiguiente deben estar distinguidos sus Academicos, para qe. con la debida
aplicación desempeñen los trabajos literarios qe. la Acadª. pusiese á su
cuidado…” Aun cuando el objetivo del escrito parece radicar en una solicitud
de distinción: “Suplica á V. E. se digne tomar la providencia necesaria á fin
de qe. los Academicos qe. nombrare la Academia en esse Principado, puedan
traer Espada, presentando antes á V. E. ó ante la Rl. Audiencia el titulo de tales
Academicos, para qe. con esta distincion se animen á trabajar en beneficio de
la Patria, las Ciencias, y las Artes…” Memorial dirigido al Capitan General del
Principado de Cataluña. [Madrid, ca. 1737] (ARANM, leg. 8, doc. 582).
555
“Dn. Joseph Hortega presentó á la Academia pr. escrito su Discurso
que contenia las Memorias para la Historia de las Plantas de España, el qual fue
leido en la Junta, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Presidente,
el Sr. Director, el Sr. Fiscal y los Sres. Academicos: Garro, Lopez, Brunet, Serena,
Rodríguez, Isasi Isasmendi, Valle y con mi asistencia.” (ARANM, L-1, fol. 301).
556
557
“Dn. Joseph Ortega presento á la Academia pr. escrito una
212
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
el 26 de octubre de 1747 hizo pública “la segunda Dissertacion
sobre la Historia natural de España, la qual intituló, Methodo
facil, y demostrado de aumentar la solidez, y la fuerza de las
Maderas”558; es posible que la tercera de estas entregas fuera la
conferencia pública dictada el 5 de octubre de 1748 “sobre una
sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de
la Ciudad de Cuenca”559; sí incorporó, como cuarta parte de esta
serie, su disertación sobre el “Lapiz plomo de Marbella”, leída en
la junta celebrada el 26 de noviembre de 1750560, y es posible que
siguiera la senda trazada en comunicaciones posteriores que no
han llegado hasta nosotros. Para entonces, Francisco Fernández
Navarrete ya había fallecido; expiró el 1 de abril de 1742561.
El discutido plan de la Historia Natural de España tuvo su
epílogo en la ‘Oración de Gracias’ que Casimiro Gómez Ortega,
Dissertacion sobre los methodos de las plantas, y continuacion de las Memorias
para la Historia Genl. de las Plantas de España, la qual fue leida á la Junta, y
assimismo aprobada…” (ARANM, L-1, fol. 348).
558
“El Sr. Ortega actual Director Pharmaceutico presentó á la Academia
por escrito la segunda Dissertacion sobre la Historia natural de España, la qual
intituló, Methodo facil, y demostrado de aumentar la solidez, y la fuerza de las
Maderas, y habiendo sido leida en la Junta, fue aprobada por la Academia…”
(ARANM, L-1, fol. 615).
559
Realizó el correspondiente ensayo en la junta general celebrada
el 28-IX-1748: “El Sr. Ortega hizo la prueba de su Dissertacion publica la qual
intitulo sobre una sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion
de la Ciudad de Cuenca, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª...”
(ARANM, L-1, fol. 640). Tuvo su presentación pública el 5-X-1748: “El Sr.
Ortega, leyo publicamte. su Dissertacion sobre la sal mineral amarga nuebamte.
descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca, y sobre su contenido
dificultaron los Sres. Herrero, y Borunda, de cuyo acto se mostro muy satisfecha
la Academia y el numeroso concurso de Profesores, y gente de distinn. qe. asistió
á esta Junta publica.” (ARANM, L-1, fol. 640).
“El Sr. Ortega presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre
el Lapiz plomo de Marbella, en continuacion de las Memoria [sic] sobre la
Historia natural de España 4ª parte, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr.
la Acadª...” (ARANM, L-1, fol. 693).
560
561
“Amigo y mui Sr. mio: Participo a V. como Dios Nº. Sr. se llevo para
si a nuestro Dr. Navarrete: lo qe. ha sido para mi de mui notable sentimiento.
He de mercer a V. de que passe al Sr. Presidente [de la Real Academia Médica
Matritense] el Sr. Dn. Vicente Carreras , para que dispongan ambos Vdes. el que
se repartan esas Esquelas a los Ssres. Academicos, para qe. assistan al entierrro.
Espero le encomiende a Ds. y me mande cosas de su agrado. Desta de V. oi
Domingo 1 de Abril de 1742”. Oficio de Tomás Francisco de Monleón a José
Hortega. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles
remitidos por el Sr. Ortega: fol. 449r. [1771] (ARAH, mss. 9/5964).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
213
miembro de antiguo de la Real Academia Médica, pronunciara
el 5 de octubre de 1770, con motivo de su ingreso en la Academia
de la Historia:
“Finalmente empeñado por las instancias de un
Académico (a quien la modesta desconfianza de sus
propias luces le da más honor que ánsi la misma aceptacion
de su encargo) en reveer y coordinar los Manuscritos
de Historia Natural del Dr. Dn. Francisco Fernandez
Navarrete, uno de los mas instruidos individuos de este
cuerpo…”562
El académico cuyo nombre nos oculta Casimiro Gómez
Ortega es Felipe García de Samaniego y Montalvo quien, hacia
1766, había valorado los manuscritos de la Historia Natural de
Fernández Navarrete. La propuesta de Gómez Ortega fue bien
atendida por la Academia y, en la sesión celebrada el 4 de abril
de 1771, el propio Casimiro ofrece unas “Noticias historicas sobre
los Manuscriptos del Dr. Navarrete y dictamen de su obra”563;
acompañó sus noticias de los informes que Juan Antonio Boneta
había efectuado, en el agosto de 1742, sobre el contenido del
manuscrito, en el que se refleja la opinión de la propia Academia
de la Historia564; los elaborados por Martín de Ulloa sobre los
‘monstruos marinos’ recensionados en el texto565 y sobre las
referencias en él a cuadrúpedos, reptiles e insectos, emitidos
Casimiro Gómez Ortega. [Francisco Javier Puerto Sarmiento, María
del Carmen Callega Folguera (eds.)] “Oración de gracias del Dr. D. Casimiro
Gómez Ortega a la Academia Real de la Histona por su admisión en ella, leida
en la junta de 5 de octubre: de 1770, día de su incorporación”. Dynamis, 7/8: 360366. Granada, 1988 (cf. pág. 365).
562
563
Casimiro Gómez Ortega. “Noticias historicas sobre los Manuscriptos
del Dr. Navarrete y dictamen de su obra”. En: Francisco Fernández Navarrete.
Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 1r-5v. [1771]
(ARAH, mss. 9/5964). Se trata del borrador del informe, encuadernado en el
inicio de los documentos compilados por Casimiro Gómez Ortega, en el escrito
consta “Leído en la Acadª. [Madrid] 4 de Abril de 1771” (Op. cit., fol. 5v).
564
Juan Antonio Boneta. [Escrito de Antonio Boneta sobre la Historia
Natural de Fernández Navarreete]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia
Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 7r-8v. mss. [1742]
(ARAH, mss. 9/5964). El documento queda fechado en “Madrid, Agosto 31 de
1742”. Juan Antonio Boneta ejerció como Secretario de la Real Academia de la
Historia entre el 26 de junio de 1741 y 22 de abril de 1743.
Martín de Ulloa. [Sobre monstruos marinos]. En: Francisco
Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr.
Ortega: fols. 9r-9v. [1740] (ARAH, mss. 9/5964). El documento lleva fecha de
“Junio 6 de 1740”.
565
214
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
respectivamente en junio y agosto de 1740566; más una sucesión
de escritos cruzados entre Diego Suárez de Figueroa y Blas
Antonio Nasarre, en representanción de la Real Academia de la
Lengua, y Fernando Fernández Navarrete, sobre la utilización
de vulgarismos y la invención de tecnicismos para referirse a
términos empleados en Historia Natural567.
La obra, prácticamente ultimada, al menos en buena parte
de sus capítulos568, quedó paralizada en su proceso de edición.
Los móviles que llevaron a Casimiro Gómez Ortega a no dar a
la imprenta el testimonio de los trabajos de quien tanta afrenta
causó a su tío no nos son documentalmente conocidos, pero son
fáciles de imaginar.
Una realidad: las Ephemérides barométrico-médicas matritenses
Como primera manifestación pública de la Historia Natural
y Médica de España, la Academia editó unas Ephemérides
566
Martín de Ulloa. [Sobre cuadrúpedos, reptiles e insectos]. En:
Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por
el Sr. Ortega: fols. 11r-12r. [1740] (ARAH, mss. 9/5964). El informe queda datado
en “Madrid, Agosto 11 de 1740”.
Diego Suárez de Figueroa [Informe realizado por Diego Suárez
de Figueroa sobre la invención de voces]. En: Francisco Fernández Navarrete.
Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 16r-19v. [1739]
(ARAH, mss. 9/5964). Representación de Francisco Fernández Navarrete a la
Real Academia Española (Op. cit., fols. 20r-28v); Informe de Diego Suárez de
Figueroa y Blas Antonio Nasarre sobre la denominación de las producciones
naturales y el uso de voces por tradición (Op. cit., fols. 30r-42v), éste queda
fechado el 20-I-1740.
567
Han llegado completos hasta nosotros: “Discurso II. Sobre las aguas
de Españas” En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España.
Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fol. 48r-66v. [1740] (ARAH, mss. 9/5964);
“Discurso III. Del terreno de España”. Op. cit., fol. 68r-115v; “Discurso IV. De
las Plantas de España”. Op. cit., fols. 118r-200v y “Discurso V. De los animales
de España”. Op. cit., fols. 201r-401r; el Discurso I, que habría de tratar sobre “El
Cielo propio de España”, no se conserva entre los documentos custodiados en
el archivo de la Real Academia de la Historia; pero, entre los depositados en
la Real Academia Nacional de Medicina, se encuentra El Mercurio Academico.
Harmonioso Proyecto de la Historia Natural, y Medica de España de la Rl. Academia
Medica Matritense, por D.F.F.N. [Francisco Fernández Navarrete] Medico de
Camara de S.M. Catholica]. En: Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido
en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas Francisco de Monleon, y Ramiro… [Madrid].
[1745], fols. 68r-78v. (RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª Biblioteca / 5), donde
se contemplan los materiales precisos para escribir este discurso primero; son
textos de diferente formato, complementarios en su contenido, que hacen
pensar en dos versiones de la misma obra.
568
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
215
barométrico-médicas matritenses, para el mas puntual, y exacto calculo
de las observaciones que han de ilustrar la Historia Natural, y Medica
de España…569 La publicación recogía los intereses primigenios
de la Academia y respondía al criterio hipocrático, tan querido
por la Corporación, en el que se establece la relación entre las
condiciones medio-ambientales y la salud de sus pobladores:
“La Real Academia Matritense, se ha propuesto
desde el principio de su fundacion por fin primario, é idea
principal de su instituto, conducir la Medicina Española
al termino de la mas possible perfeccion, por el camino de
la observacion, y experiencia, imitando aquellos pasos,
y sigiendo aquellos rumbos, que gloriosamente han
emprendido las Academias eruditas de la Europa (…) y
siendo tan estrecha la union entre la Medicina de un País,
y la Historia Natural de él, bien reflexionada, é ilustrada
con las disciplinas Physico-Mathematicas, examinó,
aprobó, y se hizo cargo del Proyecto de la Historia
Natural, y Medica de España, disponiendo su execucion
con distribución tan armoniosa, y comprehensiva, como
se verá á su tiempo (...)
La convinada observacion de los Phenomenos
Meteoricos, y Medicos, está á la vista de quien huviere
569
El título, aún más extenso, fue cuidadosamente valorado por
los académicos de número de la Institución; en el acta de la junta particular
celebrada el 27 de junio de 1737 anota José Hortega: “Hize presente, y lei á
la Academia las Pruebas de la impresión de las ephemerides, y reflexionando
las aprobó, y mandó imprimir como estaban baxo el titulo sigte.: Ephemerides
Barometrico-Medicas Matritenses para el uso puntual, y exacto calculo de
las observaciones qe. han de ilustrar la Historia Natural, y Medica de España
extractadas de orden de la Real Academia Medico-Matritense pr. el Dr. Dn.
Franco. Fernz. Navarrete Cathedratico de Medicina de la imperial Universidad
de Granada, Medico de Camara con exercicio de S.M. y Academico numº. de
la Real Academia. Dedicadas al mui ilustre Sr. Dr. Dn. Joseph Cervi &a. Nuestro
Presidente Perpetuo.” (ARANM, L-1, fol. 258). El volumen impreso mantiene el
título, salvo en el cargo asignado a José Cervi, quien no figurará como ‘Nuestro
Presidente Perpetuo’ sino como ‘del Consejo de su Magestad, &c.’ Sólo en el
volumen siguiente, el dedicado a las observaciones del mes de junio, figuraría
de manera expresa la presidencia de José Cerví sobre la Real Academia, pero
tras una larga serie de cargos previos: “Cavallero Parmense, Cathedratico
Eminente en la Insigne Universidad de Parma, del Consejo de su Magestad,
primer Medico del Rey, y Reina nuestros Señores, Presidente del Real ProtoMedicato, y de dicha Real Academia Matritense, &cc”; es ésta la misma relación
de títulos con que comienza la dedicatoria del primer volumen.
216
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
saludado las primeras Reglas de la Medicina practica, y
aun de la razon natural…”570
La tirada de esta publicación ascendió a 490 ejemplares,
estampados en la Imprenta Real, distribuidos entre los miembros
de la Academia y puestos a la venta por la propia Institución571;
su repercusión fue aún mayor al aparecer, las correspondientes
a los meses de abril y mayo de 1737, prácticamente reproducidas
in totum572, en el Diario de los Literatos de España573. El comentarista
del Diario… difunde el proyecto de la Academia con tonos
altamente elogiosos:
“Es la Historia natural la llave de las Ciencias, y
Artes, y su estudio el mas olvidado en nuestra España; pero
bien conocida su importancia por los Doctos Individuos
de la Real Academia Medico-Matritense, han empeñado
su aplicacion, é ingenio en solicitar á nuestra Patria los
imponderables beneficios que resultan de la continuada,
y exacta observacion de la naturaleza respectiva á nuestro
Pais: siguiendo el exemplo de las demás Academias de la
Europa…”574
El ansiado intento de redactar una Historia Natural de
España, del que las Ephemérides barométrico-médicas matritenses…
fueron su punta de lanza, quedó sólo en bosquejo; y eso pese
570
[Francisco Fernández Navarrete]. “Introducción”. Ephemérides
barométrico-medicas matritenses... extractadas de orden de la Real Academia MedicoMatritense..., 1: [3-9] . Madrid, 1737 . La cita en págs. [3-4, 5]
571
Así queda aprobado en la junta general celebrada el 23-VII-1737:
“Item se acordó que por el Sr. Director Chirurgico, y los Sres. Monleon y Ortega
formen una lista de todos aquellos sugetos á quien la Academia deverá dar uno,
ó mas exemplares de las Ephemerides. Que á cada uno de los Academicos de
numº y exercicios se den dos exemplares. A los Honorarios se les remita á cada
uno un exemplar. Que se impriman 50# en Papel de Marquilla, 400 en papel
fino, y # 40 en papel basto, cuya disposicion, y cuidado de la Imprenta mandó
la Academia qe. quedase á cargo de mi el Ssº. [José Hortega] como asimismo la
venta de dhas. Ephemerides…” (ARANM, L-1, fols. 262-263).
572
El propio comentarista dará cuenta de esta práctica trasliteración:
“No pueden facilmente extractarse estas observaciones: y assi las propondremos
en la misma forma que las comunica la Real Academia, creyendo de su generoso
espiritu que no se ofenderá de que se dilate por nuestra mano la noticia de
sus producciones con la misma extension que aplica su zelo al bien publico…”
Diario de los Literatos de España, 2: 312. Madrid, 1737.
573
Diario de los Literatos de España, en que se reducen á Compendio los
Escritos de los Autores Españoles, y se hace juicio de sus Obras… 2: 311-340. Madrid,
1737.
574
Diario de los Literatos de España, 2: 311. Madrid, 1737.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
217
a las facilidades de todo tipo, incluso económicas575, dadas
por la propia Academia a quienes se integraran en él como
colaboradores. ¿Cuáles fueron las razones del fracaso? Quizás
deban buscarse en el excesivo protagonismo que Francisco
Fernández Navarrete quiso adquirir en el proyecto, o -si se
prefiere- en el afán de apropiación que la Academia manifiestara
hacia él, al hacerle, de inmediato, un programa colectivo.
Los primeros datos climáticos, correspondientes a los
meses de marzo y abril de 1737576, fueron compilados por Francisco
Fernández de Navarrete quien los presentó en la sesión celebrada
el 15 de junio577; empleó para ello un ‘barómetro de Inglaterra’578
y un ‘termómetro florentino’579. Siguen a estos las anotaciones
correspondientes al mes de junio, cuyo compilador, aunque no
se haga mención expresa, fue el mismo Francisco Fernández de
Navarrete580; también él compuso las observaciones barométricas
y termométricas de julio581, no sin dificultades para disponer de
575
“Asimismo se acordó qe. los sugetos qe sean buscados pr. los
Academicos para trabajar en el Proiecto, sean livertados de pagar los sesenta
rs. y ocho mrs. de vn. qe es estilo qe paguen de entrada los Academicos
honorarios…” Junta general de 10-IX-1737 (ARANM, L-1, fols. 269-270).
“Aviendo, pues, gastados muchos dias, y trabajo, en prevencion de
aparatos y materiales, y pareciendo ser yá conveniente que empiecen á jugar
algunos muelles de los muchos que han de servir á esta grande organizacion,
determinó que desde el mes de Marzo de este año de 1737, se empezassen
las observaciones diarias del Barometro, y Themometro por esta Corte…”
([Francisco Fernández Navarrete]. Op. cit. nota 570, pág. [4]. 1737).
576
En el acta de la junta particular celebrada el 15 de junio de 1737
figura: “El Sr. Dr. Dn. Franco. Fernz. Navarrete presentó á la Academia las
ephemerides temporales del Barometro, y Thermometro del mes de Marzo,
y Abril, y en su vista mando la Academia qe. se impriman en su Nombre.”
(ARANM, L-1, fol. 254).
577
“… un Tubo cristalino sigilado por arriba, recurvo por abaxo con
una ampoya cylindrica, catorce vezes mas ancha que el Tubo, en la qual esta
suspenso el Mercurio á la altura que marcó Torriceli...” ([Francisco Fernández
Navarrete]. Op. cit. nota 570, pág [7]. 1737).
578
579
“… del Tubo por arriba sigilado, y abaxo la esfera, que continene el
espíritu de vino, tinturado con la raíz de Alcanna, de 40 grados de ascenso. y 40
de descenso, al tiempo de Madrid.” ([Francisco Ferrnández Navarrete]. Op.
cit. nota 570, pág [8]. 1737).
El acta de la junta general celebrada el 23 de julio de 1737 precisa:
“Asimismo se acordó qe. se impriman todos los meses las Ephemerides
Barometricas-Medicas Matritenses, cuyos extractos están encargados al Sr.
Navarrete…” (ARANM, L-1, fol. 262-263).
580
581
“El Sr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete presento á la Academia las
Ephemerides Barometrico-Medicas del mes de Julio, las quales fueron leidas en
218
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
las observaciones médicas, lo que lleva a requirir, en la junta
del 5 de agosto de 1737, bajo pena de expulsión, que “todos los
individuos tengan entregadas las observaciones Mensuales el
dia ocho del mes inmediato…”582 Los datos concernientes al mes
de agosto debieron ser los últimos compilados por Fernández de
Navarrete.
Las tensiones en la Academia Médica comienzan a
aflorar en octubre de 1737; una indisposición de Francisco
Fernández Navarrete lleva a acordar que de la elaboración de
las Ephemérides… correspondientes al mes de septiembre se
ocupara Alejandro Martínez de Argandoña583; éstas conllevan
una novedad, las observaciones termométricas se completan
con los datos procedentes de un “nuevo Thermometro de Mr. de
Reamur”584.
Martínez de Argandoña siguió realizando este trabajo
durante los meses restantes de 1737585; su elección como presidente
de la Institución para el año 1738 hace que el trabajo de componer
la junta, y para qe. se imprimiesen mando la Academia qe. las revisen los Sres.
Academicos Monleon, y Valle, todo lo qual fue aprobado por el Sr. Argandoña
qe. hizo de Presidente.” (ARANM, L-1, fol. 266).
“… en la suposicion qe. si pasase el dia señalado, y no cumpliese
algun individuo queda privado de voz activa, y pasiva en las primeras quatro
juntas qe. asistiese, y si prosigue en este Defecto dispondra la Academia lo [que]
hallare pr. mas util para su mejor orden y gobierno…” (ARANM, L-1, fol. 259).
582
583
“Asimismo se acordó, qe. el Sr. Argandoña tome á su cargo las
observaciones del Barometro y Thermometro, y el Extracto de las Ephemerides
Mensuales desde primero de Sept.” (Junta general de 8-X-1737. ARANM, L-1,
fol. 273). Respecto a la enfermedad de Francisco Fernández Navarrete queda el
testimonio del acta de la junta general celebrada el 18-X-1737: “… y respecto de
hallarse tambien indispuesto el Sr. Dr. Nabarrete mando qe. hiciesen el mismo
acto [visitarle] los Sres. Argandoña y Palomero.” (ARANM, L-1, fol. 275).
“Este Expertissimo Francés, despues de aver reflexionado los
gravissimos defectos del Thermometro Florentino, ó de Santorio (…) emprendió
renovar todos los inconvenientes, por medio de una nueva construccion del
Thermometro con el Espiritu del vino…”Alejandro Martínez de Argandoña.
Ephemérides barométrico-médicas matritenses, mes de septiembre, de 1737, extractadas
de orden de la Real Academia Médico-Matritense..., 1: 43-63. Madrid, 1737. La cita en
págs. 54-55, sigue (págs. 55-58) los principios en que se basa el funcionamiento
de este aparato.
584
585
“El Sr. Dn. Alexandro Martinez de Argandoña presentó á la Academia
las Ephemerides del Mes de Octbre. las quales fueron leidas en la Junta, y en
su vista mandó la Academia qe. los Sres. Academicos Carreras e Isasmendi las
rebisen, y con su aprobacion se imprimiesen…” (Junta general de 11-XI-1737.
ARANM, L-1, fols. 279-280).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
219
las Ephemérides…se distribuya entre dos académicos: Vicente
Carreras se ocuparía de compilar las observaciones médicas y
José Hortega las diarias de barómetro y termómetro586; pero para
entonces el proyecto está ya tocado de muerte:
“Asimismo se acordaron qe. se impriman las
Ephemerides del mes de Dizbr. y que se cese en la
Impresión de los qe se han formado hasta nueba orden.”587
En esa misma junta se da cuenta de un escrito de protesta
firmado por Francisco Fernández Navarrete, cuyo contenido no
ha llegado hasta nosostros588.
Una atribución compleja: la traducción castellana del Ensayo
sobre la electricidad de los cuerpos… del abate Nollet
Una leve alusión, en el prefacio histórico que sirve de presentación
al primer volumen impreso de las Memorias de la Real Academia
Médica de Madrid, señala a José Hortega, el que fuera su primer
Secretario perpetuo, como el traductor al castellano de un texto
del abate Nollet:
“Por la misma pluma [la del Secretario perpetuo]
se había publicado en el año anerior [1747] la traducción
Castellana del Ensayo de la Electricidad que había dado á
luz en Francés el Abate Nollet, contribuyendo este escrito
(…) á comunicar al Público la ilustración adquirida,
ó aumentada en el recinto, ó con la correspondencia
“Asimismo acordaron nombrar para hacer las Observaciones de
los Vientos, Barometro, Thermometro, y Temporal al Sr. Secretario Dn. Joseph
Ortega, y el Extracto, y disposicion de las Ephemerides al Sr. Academico Dn.
Vicente Carreras, lo qual se hizo pr. proposicion á el Sr. Presidente, el qual
hizo presente á la Academia qe. las ocupaciones de su Empleo no le permitian
proseguir en este trabajo…”(Junta general de 30-I-1738. ARANM, L-1, fols.
289-290). El acta está firmada por Vicente Carreras, Secretario segundo, “pr. no
averse hallado presente el Ssº. Perpetuo”.
586
587
ARANM, L-1, fol. 288. Aun cuando no se imprimieran los resultados,
sí consta que las observaciones asignadas a José Hortega, las barométricas y
termométricas, se siguieron realizando; las compilaciones correspondientes a
los años 1738 (ARANM, leg. 8C, doc. 34f), 1739 (ARANM, leg. 8C, doc. 34e),
1740 (ARANM, leg. 8C, doc. 34d), 1741 (ARANM, leg. 8C, doc. 34c), 1742
(ARANM, leg. 8C, doc. 34b) y 1744 (ARANM, leg. 8C, doc. 34a) se conservan,
manuscritas, en el archivo de la Real Academia Nacional de Medicina.
“En esta Junta se dio quenta á la Academia de un Papel del Sr.
Navarrete (…) y lo qe. se resolvio consta en los Papeles originales.” (ARANM,
L-1, fol. 290).
588
220
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
de la Academia, y á sostener el crédito del Cuerpo
imposibilitado todavía de publicar sus obras…”589
No obstante, la traducción castellana de esta obra del
abate Nollet fue firmada por José Vázquez Morales590, y las actas
de la propia Real Academia Médica avalan tal autoría591.
La edición castellana del Essai sur l’électricité des corps vio
la luz apenas unos meses después de que fuera impresa la versión
original francesa592, fue presentada a la Real Academia Médica
Matritense en la junta general celebrada el 13 de noviembre de
1747; en la misma fecha en que, según el esbozo histórico de
la Real Academia de Medicina, José Hortega dio a la prensas
su supuesta traducción. La imprenta que se hizo cargo de los
trabajos de publicación era bien conocida de José Hortega; según
reza en su pie, la obra vio la luz ‘En la Imprenta del Mercurio,
calle del Cavallero de Gracia. Se hallará en su Librería, calle de
la Montera”, la misma utilizada para el Elogio histórico del Señor
Doctor D. Joseph Cervii593. La obra, para completar el equívoco,
589
Memorias… 1: VIII Madrid, 1797. El Libro de Acuerdos de la Real
Academia Medica de Madrid que empieza desde el dia 6 de Octubre del Año de 1791
[-1814]: fol. 143v (ARANM, L-2) especifica quién se ocupó de redactar esta
noticia: “El Sr. Ortega, Secretario de las Correspondencias Extrangeras, leyó la
Noticia Historica, que ha de tener lugar de introduccion en la obra Academica que
se está imprimiendo, del Origen progresos y estado actual de la Rl. Academia Medica
de Madrid: la qual Noticia merecio la aprobacion de todos los concurrentes, y se
acordó la accion de gracias á los Señores, Vice-Presidente [Antonio Franseri],
Secretarios [Gregorio García Fernández y Casimiro Gómez Ortega] y Barnades
comisionados por la Academia para su formación...”
590
Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos escrito en idioma francès por
Mons. el abate Nollet... Traducido en castellano por D. Joseph Vazquez y Morales.
Añadida la historia de la electricidad. En Madrid: en la imprenta del Mercurio,1747.
[24], LXVII, [9], 131, [1] p., [1] lám.
En el acta de la junta general celebrada el 13-XI-1747 queda
expresamente anotado: “Assi mismo se dió cuenta á la Academia de una carta
de Dn. Joseph Bazquez y Morales, por la qual presentaba á la Academia un
Libro que la habia dedicado, y que intitulaba Ensayo sobre la electricidad de los
cuerpos, y en vista de la Dedicatoria acordó la Academia que se le respondiese
dandole las gracias, á cuyo Acto se hallaron presentes los Sres. Presidente, y
Director Pharmaceutico, y los Sres. Sevillano, Cervino, Martz., Ros, Bonillo,
Pueyo, y Herrero.” (ARANM, L-1, fols. 617-618).
591
Jean Antoine Nollet. Essai sur l’électricité des corps. Par M. l’abbé
Nollet… A Paris: chez les freres Guérin, 1746.
592
593
José Hortega. Op. cit. nota 321. 1748.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
221
está expresamente dedicada “A la Real Academia Médica
Matritense”594.
¿Será José Vázquez Morales un pseudónimo de José
Hortega? El asunto merece, cuanto menos, una reflexión sumaria.
Desde luego el traductor conocía la actividad de la Academia:
“Bien sé yo, que V.S. trata, y honra á este
Academico [Nollet] con iguales demonstraciones de
aprecio (…) Bien publicos son en la Corte los muchos
experimentos que ante V. S. han executado sus ilustres
Academicos sobre la Electricidad de los Cuerpos. Yo he
tenido el honor de ser mas de una vez testigo de ellos, y
tambien de las sólidas reflexiones, sacadas directamente
de los mismos Hechos, y Experimentos. A los principios
no ví sino una, u otra repeticion de los que por medio de
los Tubos de vidrio, habian executado en Londres Mons.
Gray [Stephen Gray (1666-1736)], y en Paris Mons. du
Fay [Charles François de Cisternay du Fay [Dufay] (16981739)]; pero luego que dos Sabios Españoles [Antonio de
Ulloa y Jorge Juan] traxeron de aquellas Cortes la idèa,
y el uso de los Globos, y de la Machina de Rotacion, se
hicieron mas maravillosos, y estupendos los Phenomenos
de la Electricidad, y se executaron por orden de V. S.
tantos, y tan deliciosos experimentos, que varios de ellos
se calificaron por nuevos, hasta que se vieron la luz en el
Ensayo de Mons. el abate Nollet…”595
Conviene recordar que la Academia mantenía un especial cuidado
con el uso de su nombre en vano; recuérdese, a modo de ejemplo, el comentario
inserto en el acta de la junta particular de académicos de número celebrada el
25-V-1737: “Asimismo se acordó qe. el estatuto 44 que dice, Ningun Academico
podra usar deste nombre en las obras particulares, que quiera dar á la estampa,
sin qe. primero se examinen en las Juntas, se debe entender tambien con las
Aprovaciones de Libros, elogios, censuras, y otro qualquier escrito qe. se
huviere de imprimir…” (ARANM, L-1, fol. 249). Entre los acuerdos tomados
por la Corporacion, en la sesión celebrada el 25-X-1743, se recuerda: “No se
podrá usar el nombre de Académico en la obras, si antes no fueron aprobadas
por la Academia, como tampoco en los elogios de obras ajenas.” (ARANM, L-1,
fol. 249); un requisito ya establecido en los Estatutos de 1734, como recuerda
Rafael Folch Andreu. Op. cit., nota 1, pág, 56. 1935).
594
José Vázquez y Morales (Op. cit. nota 590, págs. [2-3]. 1747). La
dedicatoria aparece firmada “En mi Estudio á 26. de Octubre de 1747”. La
aprobación de la obra fue realizada por José Ontiveros, en Madrid, el 18 de
octubre de 1747; la licencia del ordinario, mandada dar por Sebastián Peláez de
Caunedo, lleva fecha del 21 de octubre de 1747; y la aprobación de Ambrosio
Gambirasi es del 2 de octubre de 1747. El privilegio de impresión, por los
595
222
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Y su dedicatoria incluye una clara referencia a los
objetivos estatutarios de la propia Institución:
“… pues á quien se ha de obsequiar justamente con
Experimentos, y Observaciones physicas, racionalmente
explicadas, sino á una Academia, que las ha executado
con tanto méthodo, y utilidad, y cuyo noble Instituto es
promover el adelantamiento de la Physica, y Medicina
por medio de la Observacion, y Experiencia? A una
Academia cuyos ilustres Individuos saben deducir de
los mismos Hechos experimentales las razones, ó las
conjeturas mas acomodadas para explicar con juicio, y
sencilléz todo genero de Phenomenos?…”596
Tras relatar los experimentos relativos a la aplicación de
la electricidad como elemento terapéutico, realizados por los
ingleses Stephen Gray (1666-1736) y Granville Wheler (1701-1770)
o por el portugués João Mendes Sachetti Barbosa597, concluye:
“Estos
Experimentos,
y
Observaciones
principiadas sobre las Enfermedades de los Nervios, por
medio de la Electricidad, es otro motivo para dedicar á
V.S. esta Obra. Pues quien podrá discernir el mérito de
ellas, sino una Academia medica que tan juiciosamente
sabe distinguir la valencia de los Experimentos, y los
defectos de las Observaciones?...”598
A falta del prólogo hagiográfico habitual, el traductor
incluye una “Historia de la Electricidad”, según él mismo indica
“extractada de la Historia, y Memorias de la Academia Real
de Ciencias de Paris”, de una extensión más que notable599, en
acostumbrados diez años, fue despachado, en San Lorenzo, el 6 de octubre de
1747; la revisión de la fe de erratas fue llevada a cabo por Manuel Ricardo de
Ribera, quedó firmada el 29 de octubre de 1747, y la tasa de la obra, que corrió a
cargo de Miguel Fernández Munilla, es de 30 de octubre de 1747. De modo que
la obrita debió salir al mercado en los últimos meses de este año.
596
José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, págs. [4-5]. 1747.
Conviene detenerse en las observaciones recogidas en este introito
atribuidas a João Mendes Sachetti Barbosa (1714-1774); el médico portugués
era, desde 1747, miembro de la Real Academia Médica de Madrid. José
Vázquez recoge la historia clínica de Antonio Núñez, portero de la Cámara de
Elvas, en el Alentejo portugués, sometido a técnicas de electroterapia durante el
agosto de 1747. La inmediatez del hecho obliga a pensar en la existencia de una
correspondencia epistolar entre el portugués y el autor de las observaciones.
597
598
José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. [14]. 1747.
José Vázquez y Morales. “Historia de la Electricidad”. En: Jean
Antoine Mollet. Op. cit. nota 590, págs. [1-24], [I]-LXVII. 1747. La traducción
599
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
223
la que pasa detenida revista a las aportaciones de Girolamo
Fracastoro, William Gilbert [Gilberto], Otto von Guericke600,
Robert Boyle, los experimentos practicados en la florentina
Accademia del Cimento, los realizados por Francis Hauksbee, a
quien sigue en su edición italiana y no en la inglesa original601 y,
particularmente, los llevados a cabo por Stephen Gray602, Charles
castellana del abate Nollet ocupa IX, 131 páginas.
600
“… hallanse en la Coleccion de las Experiencias de Magdeburgo
pag 147 las mas principales son las siguientes…” (José Vázquez y Morales. Op.
cit. nota 590, pág. VI. 1747). En probable alusión a Ottonis de Guericke experimenta
nova ut vocantur Magdeburgica. De vacuo spatio primùm à R. P. Gaspare Schotto...
nunc verò ab ipso auctore perfectiùs edita, variisque aliis experimentis aucta quibus
accesserunt simul certa quaedam De aeris pondere circa terram; de virtutibus mundanis
& systemate mundi planetario.... Amstelodami: apud Joannem Janssonium à
Waesberge, 1672. Un texto que, hasta donde sabemos, no estuvo en la biblioteca
de José Hortega.
601
“En 1709 recogió Mons. Hauxbeé muchas Experiencias, y
Observaciones sobre la Electricidad del vidrio que havia hecho (…) y las publicó
en un Libro junto con las que havia hecho sobre la luz y sobre la diferencia de
otros Phenomenos en el lleno, y en el vacio. Este Libro se traduxo en Italiano
síete años despues. De él se ha tomado lo que en breves palabras se va a decir
para continuar la idea que se ha empezado…” (José Vázquez y Morales. Op.
cit. nota 590, pág. X. 1747). La edición original se publicó en lengua inglesa:
Physico-mechanical experiments on various subjects. Containing an account of several
surprizing phenomena touching light and electricity, producible on the attrition of
bodies... By F. Hauksbee. London: printed by R. Brugis, 1709; Ibid…To which is
added, a supplement, containing several new experiments not in the former edition.
London: printed for J. Senex and W. Taylor, 1719. La traducción italiana se
editó bajo el título Esperienze fisico-meccaniche sopra vari soggetti, contenenti un
racconto di diversi stupendi fenomeni intorno la luce e l’elettricita producibile dallo
strosinamento de’ corpi, con molte altre notabili apparenze non mai prima osservate,
colle spiegazioni di tutte le macchine. Opera di F. Hauksbee... tradotta dall’ idioma
inglese. In Firenze: per Jacopo Guiducci e Santi Franchi, 1716. Tampoco estas
obras figuran en el inventario de la biblioteca de José Hortega.
“En 1720 Mons. Estevan Gray publicó en las Transacciones
Philosophicas, num. 366 el descubrimiento que havia hecho de la Electricidad
de muchos cuerpos en los quales no se havia conocido…(…) que el mismo Autor
publicó en el num 417 de las mismas Transacciones mucho mas admirables y
assombrosas (…) En otro lugar de las Transacciones Philosophicas num 422
hace ver este Physico…” (José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, págs. XIVXVI. 1747). Es probable que aluda a “A Letter from Mr. Stephen Gray to Dr.
Mortimer (…) Containing a Farther Account of His Experiments concerning
Electricity”. Philosophical Transactions, 37: 285-291. Londres, 1731; seguida por
“Two Letters from Mr. Stephen Gray (…) to C. Mortimer (…) Containing Farther
Accounts of His Experiments concerning Electricity”. Philosophical Transactions,
37: 397-407. Londres, 1731. Estos textos sí debieron encontrarse en la biblioteca
particular de José Hortega.
602
François de Cisternay du Fay603 y, por supuesto, a Jean Antoine
Nollet. Este estudio constituye uno de los primeros trabajos
sobre los fenómenos eléctricos realizados en lengua española604.
Con todo, lo que más nos interesa señalar de él es el
carácter novedoso con que se concibe el desarrollo de la ciencia
ilustrada:
“Por esta razon no debe estrañarse que sin
embargo de ser conocida en algunos cuerpos la
Electricidad en tiempo de Platón, y acaso antes, nadie
haya tenido la curiosidad de examinarla con particular
atencion, hasta estos ultimos tiempos, en que cessando
poco á poco la verdadera causa de la corrupcion de las
603
“En quanto a Mons. du Fay (…) hemos insertado aquí los mas
principales, remitiendo á quien quisiere vér los demás á la Historia y Memorias
de la Academia Real de las Ciencias de Paris en los años 1733, 1734 y 1737…”
(José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, págs. LI-LII. 1747). Alude a la
colección de articulos publicadas por Charles François de Cisternay du Fay:
“Premier mémoire sur l’Électricité. [Histoire de l’Électricité]. Par M. du Fay”.
Mémoires de mathématique & de physique... tirez des registres de cette Académie [1733]:
23-35. París, 1733; “Second Mémoire sur l’Électricité [Quels sons les Corps qui
sont susceptibles de l’Électricité]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique &
de physique... [1733]: 73-84. París, 1733; “Troisiéme Mémoire sur l’Électricité [Des
Corps qui sont le plus vivement attirés par les matiéres électriques, & de ceux
qui sont les plus propes à transmettre l’Électrité]. Par M. du Fay”. Mémoires
de mathématique & de physique... [1733]: 233-254, 1 lám. París, 1733; “Quatriéme
Mémoire sur l’Électricité [De l’Atrácttion & Répulsion des Corps Eléctriques].
Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1733]: 457-476.
París, 1733; “Cinquiéme Mémoire sur l’Électricité [Où l’on rend compte des
nouvelles découvertes sur cette matiére, faites depuis peu par M. Gray]. Par M.
du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1734]: 341-361. París, 1734;
“Sixiéme Mémoire sur l’Électricité [Oú l’on examiné quel rapport il y a entre
l’Électricité, & la faculté de rendre de la Lumiére…]. Par M. du Fay”. Mémoires
de mathématique & de physique... [1734]: 503-526. París, 1734; “Septiéme Mémoire
sur l’Électricité [Contenant vuelques Additions aux Mémoires précédents]. Par
M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1737]: 86-100. París, 1737.
604
“En efecto, es en esta obra donde aparecen, por vez primera
en nuestro idioma, los términos que dan nombre a las distintas máquinas
generadoras de electricidad estática e instrumentos de medición (globos de
azufre, tubos de vidrio, máquina eléctrica, bruxula electrica…), pero también es en
ella donde, al tiempo que se adivinan los conceptos de chispa y luz eléctrica,
se constata la presencia de las voces electricidad, electricidad vitrea y electricidad
resinosa, así como de algunos de sus derivados (eléctrico, electrizar, electrizado,
electrizante, electrificar o electrificción)…” (José Antonio Moreno Villanueva.
“Jean-Antoine Nollet y la difusión del estudio de la electricidad: un nuevo
léxico para una nueva ciencia”. Documents pour l´histoire du français langue
étrangère ou seconde, 18: 405-417. Paris, 1996 -la referencia en págs. 412-413-).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
225
Ciencias, y felizmente introducido el verdadero modo de
philosophar, parece que la Naturaleza ha ido quitando el
velo á sus mysterios, y abriendo la senda para penetrar
sus ocultissimos arcanos…”605
Un renacer de la Ciencia largo tiempo oscurecida desde
que las portentosas mentes de los filósofos griegos reflexionaran
sobre ella:
“Esta opinion [la relativa a las cuestiones sobre
la gravedad, la electricidad y el magnetismo] tuvo la
misma suerte que otras muchas de los Antiguos que han
dado despues tanta gloría á los Modernos. La autoridad
de Aristoteles, adquirida por los medios que no ignoran
los Sabios, las sepultó en el olvido hasta que bolvieron
a restablecerse sobre las ruinas del vulgar Peripato…”606
Y por ello, tras la revisión de los avances del conocimiento
de la electricidad durante los últimos siglos, pasa una extensa
revista a la idea de los filosofos griegos al respecto; desde
Empédocles y Epicuro hasta Lucrecio; desde el Timeo de Platón
a las Quaestiones convivales… de Plutarco hasta alcanzar los
Progymnasmata… de Tommaso Cornelio, recopilación en si
mismos del pensamiento de Aristóteles y Galeno. Todo un
tratado de Historia de la Ciencia, en suma.
Esta versión castellana del Ensayo sobre la electricidad de
los cuerpos… corrió buena suerte entre aquellos de sus coetáneos
interesados en el desarollo científico de España; valgan de
ejemplo las alabanzas que le dedican el padre Feijoo en sus Cartas
eruditas y curiosas…607 o el padre José Francisco de Isla608.
605
José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. III. 1747
606
José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. LIX. 1747
“Por lo que mira al señor Abad Nollet, há mucho tiempo que
es objeto de una muy particular estimación, mía, por los extractos de sus
excelentes lecciones de Física, que leí en las Memorias de Trevoux. El ensayo
sobre la Electricidad sólo lo vi, y tengo en la traducción Española, que se hizo
en Madrid. Pero está tan bien puesto en nuestro idioma, que creo que para
nada nos haga falta el original Francés…” (Benito Jerónimo Feijoo. “Carta
XXV. Excúsase el Autor de aplicarse a formar Sistema sobre la Electricidad…”
En: Benito Jerónimo Feijoo. Cartas eruditas, y curiosas… Nueva impresión, 4: 351.
Madrid: por Pedro Marín, 1774. La edición principe es de 1753).
607
608
“Dice bien Don Josef Vázquez y Morales en su bella traducción del
Ensayo sobre la Electricidad de los Cuerpos, cuyo Prólogo comienza así…” José
Francisco Isla. Dedicatorias, prologos y advertencias del R.P. Joseph Francisco de Isla...
que se hallan en las primeras ediciones de los tomos de Enero, Febrero, Marzo, Abril, y
Mayo del Año christiano que traduxo al Castellano, del que escribio en francés el R.P.
226
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Si hemos de dar crédito a los datos aportados por
las Memorias… de la Real Academia Nacional de Medicina,
habríamos de ver en este José Vázquez un alter-ego de José
Hortega: la obra, de un claro talante ilustrado, salió de prensas
en la misma fecha señalada por la Academia para el supuesto
libro de Hortega, de los tórculos de un librero geográficamente
próximo a nuestro biografiado y que no encontró dificultad en
que la Academia Médica Matritense aceptara la dedicatoria de la
obra; es más, que viera complacida cómo en su proemio se hacía
el autor eco de los mismos objetivos que la Institución perseguía.
Por otra parte, las relaciones de José Hortega con el abate Nollet
están bien acreditadas; en el verano de 1751, éste se refería a
aquel, en su correspondencia con José Carvajal, como “Mr. el
Abate Nollet (…) bien conocido en aquella corte, mi amigo y mi
correspondiente…”609
Sin embargo existió un José Joaquín Vázquez Morales;
un sujeto coetáneo a José Hortega, del que apenas nos queda
testimonio biográfico610; sabemos que ejerció la profesión de
abogado, fue de origen madrileño y se formó en el Colegio de San
Ildefonso de la Universidad alcalaína, donde inició sus estudios
Juan Croiset. En Pamplona: por Joseph Longás, 1792 (cf. pág. XXIV). El volumen
recoge los textos introductorios del padre Isla a la traducción de Jean Croiset.
Año christiano ó Exercicios devotos para todos los dias del año, contiene la explicacion
del mysterio ó la vida del santo correspondiente á cada dia, algunas reflexiones sobre
la Epístola, una meditacion despues del Evangelio de la misa y algunos exercicios
practicos de devocion ó propositos adaptables á todo género de personas, escribióle en
francés el padre Juan Croiset, de la Compañia de Jesus; traduciale en castellano el P.
Joseph Francisco de Isla, de la misma Compañía. Madrid: en la imprenta de Antonio
Perez de Soto, 1762-1772. 12 vols.
Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs.
95-100. 1981).
609
Los pocos trabajos que se ocupan de este autor se limitan a valorar su
inestimable aportación a la difusión de las nuevas teorías científicas en España,
sin aportar datos relativos al personaje (cf. Juan Ramón Zaragoza Rubira. “La
electrología médica en la España del siglo XVIII”. Archivo Iberoamericano de
Historia de la Medicina y Antropología Médica, 14: 233-242. Madrid, 1962; Ibid.
“Esquema histórico de la electroterapia española del siglo XVIII”. En: Actas del
I Congreso Nacional de Historia de la Medicina: 181-184. Zaragoza: Cometa, S.A.,
1963; José Antonio Moreno Villanueva. Op. cit. nota 604. 1996). José Antonio
Moreno Villanueva (“El Essai sur l´électricité des corps (1746) de J.-A. Nollet:
primer texto sobre física eléctrica traducido al español”. Grenzgänge, 4(8): 17-32.
Leipzig, 1997) le hace miembro de la Real Academia Médica Matritense (cf. pág.
20), aunque, con tal nombre, no figura persona alguna entre los componentes
de la Corporación.
610
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
227
el 18 de noviembre de 1724; obtuvo la catedra de Cánones del
mencionado Colegio y, como era habitual entre estos colegiales,
pasó después a desempeñar un cargo en la Administarción:
el de Alcalde de hijosdalgo de Valladolid, de cuya plaza fue
promovido a la de Oidor; dejó la carrera togada para ocuparse
de la Secretaria del Consejo de Indias por lo tocante al Perú,
adscrita al Consejo Real y Supremo de Indias; por lo que hubo de
trasladarse a Madrid, donde nos queda asentado, al menos, desde
1749, según nos indica el Kalendario manual y guía de forasteros en
Madrid, quien le ubica en la madrileña calle del Baño611, lugar
en el que falleció en 1757, tras haber sido nombrado Caballero
de la Orden de Santiago612. Este José Joaquín Vázquez Morales
es autor de un par de textos polémicos, contrarios a Gregorio
Mayáns613, extrictamente relacionados con la interpretacion
del derecho de herencia; la polémica pone de manifiesto una
discrepancia doctrinal sobre la interpretación de las fuentes, pero
en ella subyace el enfrentamiento lastrado entre ‘manteistas’ y
‘colegiales’: los primeros partidarios del humanismo jurídico
611
Cf. Kalendario manual y guía de forasteros en Madrid. Para el año
M.DCC. LII. Madrid: Antonio Sanz, 1752 (pág. 54); Ibid. Para el año M.DCC. LII.
Madrid: Antonio Sanz, 1752 (pág. 54); Ibid. Para el año M.DCC.LIV. Madrid:
Antonio Sanz (pág. 51); Ibid. Para el año M.DCC.LV. Madrid: Antonio Sanz
(pág. 51); Ibid. Para el año M.DCC.LVII. Madrid: Antonio Sanz (pág. 51). En el
Kalendario… Para el año M.DCC. XLIV. Madrid: Antonio Sanz, 1744 (cf. pág.
64) e Ibd., Para el año M.DCC. XLV. Madrid: Antonio Sanz, 1745 (cf. pág. 64), el
nombre de Joaquin Joseph Vazquez Morales sigue figurando entre los Alcaldes
de Hijosdalgos adscritos a la Real Chancillería de Valladolid; en el Kalendario…
Para el año M.DCC. XLV. Madrid: Antonio Sanz, 1745 (cf. pág. 51), el cargo de
Secretario del Consejo y Cámara, por lo tocante al Perú, es desempeñado por
Miguel de Villanueva.
Joseph de Rezabal y Ugarte. Biblioteca de los escritores que han sido
individuos de los seis Colegios Mayores: de San Ildefonso de la Universidad de Alcalá,
de Santa Cruz de la de Valladolid, de San Bartolomé de Cuenca, San Salvador de Oviedo
y del Arzobispado de la de Salamanca… Madrid: en la imprenta de Sancha, 1805
(cf. págs. 408-409).
612
Joaquín José Vázquez y Morales. Otium complutense duobus libris
distinctum. Ad Justinianeae Constitutionis fragmenta sub. Tit. Cod. de incertis
personis, et in § 25 cum tribus seqq. Inst. de Legat. in quo eximii non milli J. Cuilis
tractatus, utcumque ad materiam pertinentes, ex nova plerumque obsevatione juxta
veriorem Jurisprudentiam explicantur. Auctore D. D. Joachin Joseph Vazquez et
Morales... Compluti: Josephus Espartosa, 1734; Ibid. Veritas a calumniis vindicata
sive Apologia pro otio Complutensi contra calumniam Gregorii Majansii, authore
Doct. D. Ioachim Ioseph Vazquez et Morales, J.C. Matritensi... in Maiori Ildephonsiano
Lycaeo Academia Complutensi iam hospite & in eadem Universitate Decretalium
cathedrae moderatore...... Compluti: [José Espartosa], 1734.
613
228
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
al que claramente se adscribe Mayáns; los otros, defensores del
tradicional derecho romano-canónico practicado de manera
acorde con el método bartolista614.
Nos cuesta ver al colegial alcalaíno que polemizó con
Gregorio Mayáns como autor de este tratado de Física615.
Nuestra hipótesis es que José Joaquin Vázquez Morales y José
Vázquez Morales son dos entidades distintas: el primero un
colegial alcalaíno, formado en leyes; el segundo, un pseudónimo
de José Hortega. Avala esta hipotesis la documentación relativa
al nombramiento de nuestro protagonista como miembro
correspondiente de la Academie des Sciences parisina; allí se le
hace figurar como: “Don Vásquez y Morales Hortega”616.
Coda. La crítica académica al Elogio…. de Joseph Cervi
La única obra salida de tórculos con la firma de José Hortega es
el Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi… previamente
leìdo ante la Real Academia Médica Matritense el 30 de marzo de
1748617. Ésta, también la primera obra impresa por la Academia,
siguió las normas que la primera Tertulia Literaria se había fijado
para la redacción de sus escritos:
614
Sobre su polémica con Gregorio Mayáns cf. Mariano Peset (ed.)
Gregorio Mayáns y Siscar. Epistolario. IV. Mayáns y Nebot (1735-1742): un jurista
teórico y un práctico. Valencia: Publicaciones del Ayuntamiento de Oliva, 1975
(págs. LXXXII-LXXXV) y Pascual Marzal Rodríguez. “Las Diputaciones Iuris:
Humanismo y controversia”. En: Antonio Mestre Sanchis (coord.) Actas del
Congreso Internacional sobre Gregorio Mayans: 59-87. Valencia: Publicaciones del
Ayuntamiento de Oliva, 1999 (en especial, págs. 67-77).
El que un jurista se ocupe de textos de Física experimental no fue
una excepción en la España ilustrada; baste recordar que Benito Navarro y
Abel de Veas, autor de la Physica Electrica, ó Compendio, en que se explican los
maravillosos phenomenos de la virtud eléctrica ([Madrid: s.n., 1752]) fue profesor de
Jurisprudencia en la Universidad de Sevilla y que su obra, un compendio de lo
aprendido en sus lecturas y en sus experiencias con la máquina electrostática,
es el segundo libro sobre electricidad publicado en España, tras la traducción
del Essai… de Jean-Antoine Nollet.
615
616
ASP, ‘Dossier Joseph Hortega’. Agradecemos a Florence Greffe,
‘conservateur des Archives de la Académie des Sciences-Institut de France’, el
envío de una copia de esta documentación.
José Hortega. Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi, leìdo a la
Real Academia Medica Matritense en 30 de marzo de mil setecientos quarenta y ocho,
por su secretario don Joseph de Ortega. En Madrid: en la Imprenta del Mercurio,
1748. 47 p., [1] h.
617
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
229
“… se óbservara un estilo fluido, sin afectacn.,
elegante y claro sin sonsonettes poheticos, y sobre todo se
tendra cuidado que en ninguna orazion lleve el sustantivo
sino solamte. un adjetivo, porque lo contrario, asi como es
bueno para la poesia, es morboxo para la prossa…”618
No agradó el estilo a quienes, en los comienzos del XIX,
quisieron abordar la compilación de los Elogios… académicos,
al modo que lo efectuaba la Academie des Sciences. Ante la
posibilidad de su re-edición, en una equivocada idea que
supone a José Cerví como fundador de la Real Academia Médica
Matritense619, ésta pidió informes a sus socios de número; al
menos dos han llegado hasta nosotros.
El primero de ellos, sin fecha ni firma, pero que cabe datar
en los inicios de 1808, define –probablemente sin ser sabedor de
ello- las líneas de estilo que José Hortega quiso imponer en los
escritos emanados desde la Real Academia Médica:
“… no es una pieza de eloqüencia varonil y
pomposa, pero tiene el mérito de ser una relación fiel
de su brillante carrera literaria, de su vida arreglada y
modesta, de los empleos distinguidos que obtuvo por
su merito, del buen uso que hizo del mucho favor que
debió á nuestros soberanos, de las virtudes que le fueron
familiares en todas las epocas de su larga vida (…)
Por otra parte el orden con que está escrito
es bueno, su lenguaje justo y no carece de algunas
expresiones sublimes al paso que no se halla una sola que
se pueda llamar baxa en el estilo de eloqüencia media que
era el propio de su autor…”620
Tremendamente más crítica es la opinión de Tomás
García Suelto y de Francisco Antonio Zea:
“No hay en toda ella un solo rasgo que pueda
llamarse oratorio: no hay calor, ni movimiento, ni vida:
618
Cf. estatuto 7º del capítulo 5º, “De las Juntas” (ARANM, L-1, fol. 26).
“Tal fue nro. fundador: sabio, celebre, zeloso y liberal patricio,
grande hombre á cuyo merito solo faculta para honor de la Academia un
elogio digno de su memoria…” Tomás García Suelto, Francisco Antonio Zea.
[Dictamen sobre el Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi]. Madrid, 4-II1808 (ARANM, leg. 23, doc. 1408).
619
Y concluye: “… me parece que se haria una infamia á su buen
nombre si se desechase esta produccion suya solo porque no llena nuestro oydo
tanto como otras de su clase…” [Anónimo]. [Dictamen sobre el Elogio historico
del señor doctor D. Joseph Cervi] (ARANM, leg. 8, doc. 575).
620
230
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
todo es inanimado, todo transpira el frio de la tumba en
que yacía Cervi (…)
En efecto si se pide eloquencia en los elogios
¿Quién osará comparar á Ortega con Platon, con Plinio, ni
con Vic d’Azir, ni con Thomas? Si solo se le pide ingenio,
profundidad, y filosofía ¿en dónde se hallará quien se
atreva á elevarlo al nivel de Fontenelle, de d’Alambert, ó
de Condorcet? Y si se quiere en fin la eloquencia y el gusto
unido á la Filosofía y con la Historia ¿Quién no temblará
de ponerlo en paralelo con el sublime é inimitable Tacito?
Sea pues qual fuese la doctrina qe se adopte, y qualquiera
el medio que se escoja, siempre será reprobado el elogio
de Cervi compuesto pr. Ortega…”
Aunque matizan:
“Pero aunque esta composicion considerada como
elogio merece los anatemas de la razon y del gusto, si
solo se mira como noticia ó relacion historica es ciertamte.
digna de aprecio y debe recomendarse á la Academia. En
efecto no podian exponerse con mas orden, sencillez y
claridad los estudios y servicios, merito y vida de aquel
sabio, que lo ha hecho Ortega en el escrito…”621
No cabe duda, la Academia Médica de los primeros años
del XIX, los de la dominación francesa, no fue, ni en estilo ni en
forma, el sueño anhelado por José Hortega. Atrás había quedado
el espíritu de sus fundadores:
“… en cuia consequencia se pondra con claridad
lo vedadero como seguro, lo probechoso como util,
lo berosimil cono opinable, y lo experimental como
demostrable”622.
Tomás García Suelto, Francisco Antonio Zea. Op. cit. nota 619.
1808 (ARANM, leg. 23, doc. 1408).
621
622
Cf. estatuto 7º del capítulo 5º, “De las Juntas” (ARANM, L-1, fol. 26).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
231
Un hombre en su tienpo
El erudito hipocondríaco
Es difícil definir el perfil de un personaje del que apenas nos
quedan testimonios escritos; sólo algunos retazos presentes en la
correspondencia cursada entre sus coetáneos pueden ayudarnos.
Contó entre sus afines con Andrés Piquer Arrufat (17111772) ; de la opinión que, de Hortega, tenía formada este médico
humanista nos da cuenta José Nebot en su correspondencia con
Gregorio Mayáns:
“Tiene [Andrés Piquer] una recomendación de D.
Joseph Ortega, aboticario, para Vmd., y se ha alegrado
mucho de que sea Vmd. su amigo. Nos admiramos de
que un boticario escriba tan bien y de indicios de tan
buen gusto...”624
623
También disfrutó del aprecio del propio Gregorio Mayáns
quien, en el verano de 1754, escribirá a Andrés Piquer:
“Me alegro de que Vm. se comunique con D.
Josef de Ortega. Yo le soi mui aficionado, porque es mui
docto mui curioso i mui amigo de que se cultiven las
ciencias. Quando Vm. le escriva, déle mil memorias de
mi parte i muchos agradecimientos porque se acuerda de
favorecerme…”625
623
“Un boticario de Madrid llamado Josef Ortega me encarga que
salude a Vm. [Gregorio Mayáns] encarecidamente. Hágolo por cumplir con
dos amigos que venero y estimo entrañablemente…” Carta de Andrés Piquer
a Gregorio Mayáns. Valencia, 18-VIII-1745 (Biblioteca del Colegio de Corpus
Christi [Colegio del Patriarca] (Valencia) [BCC], Mayáns, carta 45; transcrita por
Vicente Peset (ed.) Gregorio Mayáns y Siscar. Epistolario. I. Mayáns y los médicos.
Valencia: Publicaciones del Ayuntamiento de Oliva, 1972, pág. 60).
Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns, 25-V-1749 (BibliotecaArchivo Hispano-Mayansiano [Colegio del Patriarca] (Valencia) [BAHM], leg.
144; transcrita por Vicente Peset, Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972).
624
625
Carta de Gregorio Mayáns a Andrés Piquer. Oliva, 21-VIII-1745.
(Archivo de la Catedral de Valencia [ACV], leg. 339; transcrita por Vicente
Peset. Op. cit. nota 623, págs. 61-62. 1972).
232
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Es posible que Gregorio Mayáns y José Hortega
establecieran relación personal durante la estancia del valenciano
como bibliotecario de la Real Casa626; y no hay duda que, tras
su regreso a Oliva, será Andrés Piquer quien se encargue de
mantener viva la relación entre ambos eruditos627.
Al menos en 1749 Gregorio Mayáns requirió, en un par
de ocasiones, de los servicios de José Hortega para que orientara
a sus amigos por la intrincada vida de la Corte: en la primavera
le presentó al francés Jean Goezaud [sic] “para que tenga ocasión
de tratar con esse Cavallero (…) i aun añado mui útil por ser
el más profundo observador de la Naturaleza que Vm. habrá
conocido en su vida”628; y, en el otoño, al “Dr. D. Josef Gimeno es
inteligente en Medicina i sobrino de un íntimo amigo mío. Va a
essa corte a revalidarse...”629
Por la correspondencia de Gregorio Mayáns sabemos que
José Hortega pasó por Valencia en los primeros meses de 1753630,
quizás de vuelta de su viaje por las Cortes europeas. Y también
626
“Yo no le he escrito desde que estoy en este retiro…” Carta de
Gregorio Mayáns a José Nebot. Oliva, 21-VIII-1745 (anotada por Vicente Peset.
Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972).
“El doctor Piquer escribe a Ortega lo que Vmd. le dice sobre cierta
dependencia de un memorial o recurso que ha de poner un cuñado del Dr.
Piquer al Real Protomedicato, por haber el subdelegado de éste, que es el Dr.
Valaguer, injuriado a aquél, habiéndole llamado a su casa, hecho quitar el
espadín, no darle asiento, porque se quería hacer cirujano. Le dice Ortega que
solicite carta de Vmd., para el asesor del Protomedicato Dn. Matías de la Rubia,
sobre lo cual escribirá a Vmd. el Dr. Piquer”. Carta de José Nebot a Gregorio
Mayáns. 30-VIII-1745 (anotada en Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 62).
627
628
“Aunque Vm. se olvide de mí, quiero darle una buena prueva de la
amistad que le professo, suplicando a mi amigo el Sr. D. Juan Goezaud que Visite
a Vm. para que tenga ocasión de tratar con esse Cavallero, cuya comunicación
le será mui agradable, i aun añado mui útil por ser el más profundo observador
de la Naturaleza que Vm. habrá conocido en su vida…” Carta de Gregorio
Mayáns a José Hortega. Oliva, 25-V-1749. (BCC, fondo Mayáns, leg. 144;
transcrita por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 62. 1972).
“Estimaré que si acaso ocurriere algo que pueda causar detención,
aplique Vm. su autoridad para que le despachen presto i bien. I pues yo
molesto a Vm. repetidas veces, haga Vm. experiencia de mi deseo de servirle
i procure por su salud, que Dios guarde muchos años como deseo...” Carta de
Gregorio Mayáns a José Hortega. Oliva, 22-XI-1749 (BCC, fondo Mayáns, leg.
144; transcrita por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 486. 1972). José Ximeno
era sobrino del historiador y bibliógrafo Vicente Ximeno y Sorlí (ca. 1691-1764).
629
630
Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns, 23-V-1753 (comentada por
Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
233
por ella nos queda noticia del carácter hipocondríaco de Hortega,
y de su afecto por las aguas minero-medicinales; en carta de
Nebot a Mayáns, fechada en julio de 1749, éste le comenta:
“El Dr. Piquer me dijo el correo pasado, que dijese
a Vd. que Ortega le escribe que se va a unos baños por su
hipocondría. Y que no podrá ver ni asistir a Goezaud, a
quien Vd. encarga”631.
En terminos simililares escribe a su venerado José
Carvajal, en el verano de 1751:
“Buelbo a repetir a V.E. que es muy largo todo lo
que observé en San Fernando, y que sentí no haver hallado
al Governador que estaba ausente; pero mi hipocondría
adusta y porfiada no me dexa escribir más…”632
Y no debía estar exento de cierta vanidad; en el acta en la
que consta, en enero de 1744, su nombramiento como secretario
del Real Colegio de Boticarios de Madrid, se refiere a si mismo
en estos términos:
“Por Secretario reeligieron nomine discrepante
al Sr. Dn Joseph de Ortega Boticario de S.M. y Mayor de
sus Reales Exercitos, Examinador del Rl. Protomedicato,
Socio de la Regia Sociedad de Sevilla, Academico
fundador, y Secretario perpetuo de la Rl. Academia
Medica Matritense.”633
Una vida burocratizada
La presencia de José Hortega ante los notarios madrileños parece
ser habitual; son muchas las escrituras, poderes para pleitos o
generales, compromisos legalizados y otros actos formalizados
ante escribanos en los que figura su nombre. A los de carácter
personal, de los que nos ocupamos aquí, han de sumarse en los
que actuó como miembro de las corporaciones en las que tuvo
cargo de representación, a los que ya hemos hecho mención
páginas atrás.
631
Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns, 25-VI-1749 (comentada por
Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972).
Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs.
92-94. 1981).
632
633
Junta general de 2-I-1744 (ARANF, L-7, fols. 38v-40v); de ninguno
otro se hace ostentación de cargos.
234
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
En diciembre de 1732 otorgó poder de representación a
los procuradores Francisco de la Lastra y Gabriel Pedrero, de los
Reales Consejos, y a Diego de Sofa y a Juan Facundo Domínguez,
de número de Madrid634. Volverá a otorgar poderes para pleitos
en 1735; entonces lo hará en dos ocasiones prácticamente
seguidas: en mayo de 1735 contó con Gabriel Pedrero -a quien ya
había contratado en 1732- y con Francisco Xavier, de los Reales
Consejos y con Simón Casado y Antonio de Rama Palomino,
procuradores de Madrid635; apenas unas semanas después, en los
comienzos de junio de éste 1735, contará con tres procuradores
de Madrid, Antonio Pérez, Manuel Monedero y Antonio Rama
Palomino, y otros tres de los Reales Consejos, Manuel Antonio
Fraile, Manuel de Blas Ortiz y Pedro de Rueda Osorio, para que
le representasen en los pleitos en que pudiera verse inmerso636.
Actuó, en septiembre de 1735, como fiador de Tomás
Gutiérrez, maestro de obras, en una reclamación que éste
presenta por un devengo del que resulta acreedor el Convento
de Trinitarios Calzados de la Corte637.
“… para qe en mi nombre y representando mi persona propia me
defiendan en todos los Pleytos Casuas y negocios civiles y criminales qe al
presente tiempo y en adelante tuviese…”. Poder para pleitos que otorga José
Hortega. Madrid, 3-XII-1732 (AHPNM, protocolo 14.101, fols. 354r-354v).
634
635
Poder para pleitos que otorga José Hortega a favor de Gabriel Pedrero
y Francisco Xavier, de los Reales Consejos y Simón Casado y Antonio de Rama
Palomino, procuradores de Madrid, “para qe. en mi nombre y presentando mi
persona propia me defiendan en todos los Pleitos causas y negocios civiles y
criminales qe al presente tengo y en adelante tuviere...” Madrid, 11-V-1735.
(AHPNM, protocolo 14.102, fols. 450r-450v).
636
Poder para pleitos que otorga José Hortega a favor de Antonio
Pérez, Manuel Monedero y Antonio Rama Palomino, procuradores de Madrid
y Manuel Antonio Fraile, Manuel de Blas Ortiz y Pedro de Rueda Osorio,
procuradores de los Reales Consejos, para que le representen. Madrid, 3-VI1735 (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 495r-495v).
637
José Hortega se constituye como fiador de Tomás Gutiérrez y se
obliga sobre 13.461 rs que a éste corresponden como consecuencia de unas
obras por él efectuadas sobre unas propiedades pertenecientes a Mariana
Domínguez; éstas habían sido vendidas por un total de 132.000 rs, importe
depositado en las arcas del Convento de los Trinitarios de la Corte; para que “se
le den y entreguen treze mil quatrozientos y sesenta y un reales de vellon que
á el susodicho [Tomás Gutiérrez] se le estava deviendo resto de maior cantidad
que por autos judiziales se le havia mandado satisfacer por importe de obra y
reparos que executo en las mismas casas. Cuia fianza quiere hazer el otorgante
[José Hortega] y poniendola en execucion en la vía y forma que pueda y mas
haya lugar en derecho…” Fianza de acreedor de mejor derecho otorgada por
José Hortega a favor de Tomás Gutiérrez. Madrid, 17-IX-1735; actúan como
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
235
En mayo de 1740, ante su inminente salida de la Corte
como Boticario mayor de los Reales Ejércitos, otorgará un poder
general a favor de Vicente Carreras, su compañero de Academia
y marido de Mariana Llorente, una de las hijas de su mujer, lo que
le convertía en su vecino de la casa de la calle de la Montera638.
Son muchos los notarios ante los que José Hortega
protocoliza sus intenciones; ante Juan Félix del Valle otorga sus
primeros poderes a favor de su mujer, Mariana Aztina (1731)
y de su padre, Francisco Hortega (1735), para testar y para
reconocimiento de deudas, respectivamente; también ante él
legaliza las iniciales representaciones para pleitos (1732, 1735).
En tal elección quizás fuera guiado por su propia esposa, no en
vano ella protocolarizó en 1722, también ante este notario, su
carta de dote y arras y el inventario de los bienes de quien habría
de ser su esposo, Luis Llorente, con ocasión de su matrimonio639;
también ante él firma su declaración de pobre Manuela López,
criada al servicio de José Hortega y su esposa (1734), lo que
parece convertir a éste en el notario de preferencia para asuntos
familiares.
A partir de 1734 José Hortega parece optar por la notaría
de José de Gaviria; en ella escritura la venta de su botica de Añover
a favor de Francisco Fernández Conejo, con su correspondiente
declaración de deuda (1734); es éste el escribano elegido por la
Real Academia Médica Matritense para regular los poderes de
representación otorgados a favor de Manuel Izquierdo (1735) y
testigos Eugenio Alonso de la Monxe, Lorenzo Calderón de la Barca y Agustín
de Mena Miguel (AHPNM, protocolo 14.187, fols. 468r-469r). La carta de
pago, por parte del Convento de los Trinitarios quedó protocolizada pocos
días después: “… se han librado al otorgante para que se le entreguen (…)
cantidad que importo la obra y reparos que en el año de mil setecientos veinte
y siete havia hecho en dichas casas (…) los prezitados treze mil quatrozientos
y sesenta y un reales de vellon…” Carta de pago otorgada por el Definitorio
general de los Trinitarios Calzados. Madrid, 27-IX-1735 (AHPNM, protocolo
14.187, fols. 474r-475r).
638
“Joseph Ortega (...) Boticario Maior de los Rls. Exercitos de S. M.
Digo qe para su servicio me es forzoso qe está pronto á azer una ausencia de
esta Corte, y no teniendo otra persona de mi mayor satisfaccion qe Dn. Vicente
Carreras á quien encargar en dicha mi ausencia mi depenencia i negocios...”
Poder general que otorga José Hortega a favor de Vicente Carreras. Madrid,
16-V-1740 (AHPNM, protocolo 16.639, fols. 495v-496v).
El inventario de los bienes de Luis Llorente fue realizado entre el
22-VIII-1722 y el 12-IX-1722 (AHPNM, protocolo 14.100, fols. 101r-136r); la
carta de dote y arras de Mariana Aztina lleva fecha de 10-IX-1722 (AHPNM,
protocolo 14.100, fols. 151r-156r).
639
236
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
por el propio Hortega para conferir nuevos poderes para pleitos
(1735), firmar como tutor de Mariana Llorente (1738) u otorgar
poderes a favor del que fuera marido de ésta, Vicente Carreras
(1740).
Sus testamentos fueron protocolizados ante Antonio
Esteban (1760) y José Payo Sanz (1761), respectivamente.
Pero no fueron éstos los únicos notarios con los que José
Hortega entró en relación; las deudas contraídas contra su botica
por algunos de sus clientes hizo que acudiera a Alfonso Jacinto
Vecino, ante quien se solventó la testamentaría del duque de
Veraguas (1733) y ante la que él mismo firmó responsabilizándose
de Tomás Gutiérrez (1735); el levantamiento de censos sobre las
casas de la calle de la Montera le llevó al despacho de Miguel
Barrango (1733); el reconocimiento de deuda que sobre él hiciera
Lamberto Deuberberg obligó a su visita a José Vicente Fernández
(1737) y su vinculación con el Real Colegio de Boticarios de
Madrid hizo que trabajara con Alonso López de León, el notario
ante el que se protocolarizan la mayor parte de las actuaciones
de esta Corporación (1738, 1740).
Documentos notariales otorgados por José Hortega o
en los que él es parte interesada
Fecha
1731.
1-VIII
1732.
3-XII
1733.
10-VII
Asunto / Protocolo
Poder para testar que otorga José
Hortega a favor de Mariana Aztina.
AHPNM, protocolo 14.102.
Testigos
Francisco Ansorena
Juan Bautista Monleón
Jerónimo Martínez
Manuel Rabieso
Andrés de Conhina Blanco
Poder para pleitos que otorga José Manuel de Mendívil
Hortega, a favor de Francisco de la José Correa Linares
Lastra y José Pedrero, procuradores Antonio Francos González
de los Reales Consejos y Diego de
Sofa y Juan Facundo Domínguez,
procuradores de Madrid.
AHPNM, protocolo 14.101.
Testamentaría del duque de
Veraguas. [Reconocimiento de
deuda a José Hortega].
AHPNM, protocolo 14.188.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
Fecha
1733.
17-VII
1733.
17-VII
1733.
16-VIII
1733.
10-X
1734.
21-III
1734.
21-III
1734.
19-XI
1734.
29-XII
Asunto / Protocolo
Levantamiento, por José Hortega,
del censo sobre tres casas
ubicadas en la calle de la Montera,
pertenecientes al mayorazgo de
Nicolás de Ahumada y Velasco.
AHPNM, protocolo 15.776.
Carta de pago, otorgada por José
Hortega, sobre unos derechos
del mayorazgo de Nicolás de
Ahumada.
AHPNM, protocolo 15.776.
Reconocimiento
de
censo
perteneciente al mayorazgo de
Nicolás de Ahumada y Velasco, por
parte de José Hortega, sobre unas
casas en la calle de la Montera.
AHPNM, protocolo 16.134.
Escritura de venta de unas casas
en la calle Los Negros de Madrid
otorgada por el Comendador
y religiosos del Convento de la
Merced de esta villa a favor de José
Hortega.
AHPNM, protocolo 14.088.
Escritura de tasación y venta que
otorga José Hortega a favor de
Francisco Fernández Conejo de una
botica en la villa de Chinchón [sic
por Añover].
AHPNM, protocolo 16.638.
Escritura de declaración de deuda
que otorga Francisco Fernández
Conejo a favor de José Hortega.
AHPNM, protocolo 16.638.
Poder para pleitos que otorga la
Real Academia Médica Matritense
a favor de Manuel Izquierdo.
AHPNM, protocolo 16.638.
Declaración de pobre de Manuela
López, criada al servicio de José
Hortega.
AHPNM, protocolo 14.101.
237
Testigos
Miguel Izquierdo
Figueroa
Juan Romero
José Forteza [bachiller]
Miguel Izquierdo
Figueroa
Juan Romero
José Forteza [bachiller].
[Junta Académica de la
Real Academia Médica:
José Hortega, secretario]
Cristóbal García Carretero
Patricio Riel Martínez
Julián de Roda Castillo
238
Fecha
1735.
11-V
1735.
3-VI
1735.
19-VIII
1735.
26-VIII
1735.
17-IX.
[1735,
post. 1-IX]
1736.
9-I
1737.
9-III
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Asunto / Protocolo
Poder para pleitos que otorga José
Hortega a favor de Gabriel Pedrero
y Francisco Xavier, procuradores
de los Reales Consejos y a Simón
Casado y Antonio Rama Palomino,
procuradores de Madrid.
AHPNM, protocolo 14.102.
Poder para pleitos que otorga José
Hortega a favor de Antonio Pérez,
Manuel Monedero y Antonio Rama
Palomino, procuradores de Madrid
y Manuel Antonio Fraile, Manuel
de Blas Ortiz y Pedro de Rueda
Osorio, procuradores de los Reales
Consejos.
AHPNM, protocolo 16.638.
Memorial que Diego Fernández
hace
de
sus
acreedores
[Reconocimiento de deuda a José
Hortega].
AHPNM, protocolo 16.098.
Poder otorgado por José Hortega
a favor de Francisco Hortega, su
padre.
AHPNM, protocolo 14.102.
Fianza de acreedor otorgada por
José Hortega a favor de Tomás
Gutiérrez.
AHPNM, protocolo 14.187.
Concurso de acreedores de Diego
Fernández. [Reconocimiento de
deuda a José Hortega].
AHPNM, protocolo 16.098.
Carta de otorgamiento de Felipe
Ceballos, a favor de José Hortega,
sobre el pago de un censo
perteneciente al mayorazgo de
Nicolás de Ahumada.
AHPNM, protocolo 15.781.
Tasación de los bienes de Lamberto
Deuberberg. [Reconocimiento de
deuda a José Hortega].
AHPNM, protocolo 17.741.
Testigos
Diego Palencia
Domingo Hernández
Domingo López
Juan Romero
José Forteza
Juan del Cerro
Francisco Fernández
Raimundo Melitan
Mateo Fernández de
Villanueva
Eugenio Alonso de la
Monxe
Lorenzo Calderón de la
Barca
Agustín de Mena Miguel
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
Fecha
1738.
22-III
1738.
16-VII
1738.
4-VIII
1740.
20-IV
1740.
16-V
1748.
9-IV
1760.
11-VII
1761.
18-I
Asunto / Protocolo
Compromiso en fuerza mayor que
otorga José Hortega, como tutor
de Mariana Llorente, a favor de
Antonio de la Portilla.
AHPNM, protocolo 16.639.
Testamentaría de la marquesa de
Osera. [Reconocimiento de deuda a
José Hortega].
AHPNM, protocolo 15.223.
Obligación de deuda del Real
Colegio de Boticarios de Madrid
contraída con Sebastián Martínez,
para la publicación de la
Pharmacopoeia Matritensis…
AHPNM, protocolo 16.386.
Poder otorgado por el Real Colegio
de Boticarios de Madrid a favor de
Juan Moreno Bote y José Hortega.
AHPNM, protocolo 16.386.
Poder general que otorga José
Hortega a favor de Vicente Carreras.
AHPNM, protocolo 16.639.
Traspaso de la botica de Lorenzo
Alquizalete. Tasador por parte del
comprador, Sebastián Malo.
AHPNM, protocolo 16.343.
Testamento otorgado por
Hortega.
AHPNM, protocolo 17.095.
Testamento otorgado por
Hortega.
AHPNM, protocolo 19.150.
239
Testigos
Francisco Ferrizino
Raimundo Meritan
Juan Vázquez
[Junta directiva del Real
Colegio de Boticarios:
José Ignacio Muñoz de
Valdivieso, director; Juan
Moreno Bote, secretario]
[Junta directiva del Real
Colegio de Boticarios:
José Ignacio Muñoz de
Valdivieso, director; Juan
Moreno Bote, secretario]
José A. Forteza [bachiller]
Luis Romero
Pedro Sana
Juan Calvete [oficial de
carpintero]
Agustín García
Francisco Xavier
González
José
José
La relación de testigos apenas nos permite construir
un entorno personal para José Hortega; en cuatro de los actos
protocolizados se repite el nombre del bachiller José Forteza
(1734, 1734, 1735, 1740), pero todos ellos tienen lugar ante
el notario José de Gaviria, lo que más nos induce a pensar en
una relación entre este escribano y el bachiller que entre José
Hortega y éste; algo similar ocurre -y ante el mismo notario- con
Juan Romero (1734, 1734, 1735). No obstante, sí parece que, al
menos en algunos ocasiones, contó con compañeros de profesion
para que actuaran como testigos en relación con sus asuntos
240
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
personales; así, en el verano de 1735, cuando protocoliza, ante
Juan Félix del Valle, el poder otorgado a favor de su padre,
Francisco Hortega, figura como testigo un Raimundo Meritan; el
mismo que, en marzo de 1738, actuará también como testigo del
compromiso en fuerza mayor que otorga Hortega, como tutor
de Mariana Llorente, ante José de Gaviria. Es posible se trate
de Raimundo Lorenzo Meritan, boticario establecido, al menos
desde 1749, en la plazuela del Angel, que fuera miembro del Real
Colegio de Boticarios y de la Congregación de los Desamparados
y San Lucas, corporaciones ambas en las que llegó a desempenar
puestos de responsabilidad640.
En el ámbito familiar
El matrimonio de Mariana Aztina con José Hortega se produjo
en segundas nupcias de la que fuera viuda de Luis Llorente;
ésta aportó al matrimonio el fruto concebido con aquél, una hija
de corta edad, Mariana Llorente; otra más, Manuela Llorente,
falleció tres años después de que muriera su padre, poco antes
de que este segundo matrimonio tuviera lugar641. Luis Llorente
debió expirar hacia finales de 1728; el 23 de abril de este año,
enfermo, otorga poder para testar a favor de su mujer, Mariana
Aztina642; ésta atenderá a los deseos de su esposo, ya difunto, en
abril de 1729643.
En 1745 ocuparía el cargo de consiliario segundo de la Congregación
de los Desamparados y, en 1758, desempeñaría el de diputado segundo en
el Real Colegio de Boticarios (cf. Libro de la Congregación de Nra Señora de los
Desamparados [1699-1791]. ARANF, L-3; Juntas generales del Real Colegio de
Boticarios [1737-1767]. ARANF, L-7)
640
641
Cf. Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana
Aztina, su mujer. Madrid, 1-VIII-1731 (AHPNM, protocolo 14.102, fols.
275r-277r).
“.. el dicho Dn. Luis Llorente hallandome en cama de la enfermedad
q Dios mando servirme darme (….) pide ser enterrado con el hábito franciscano,
en la Iglesia de San Luis, con misa corpore insepulto y otras sesenta más rezadas,
de tres reales de limosna”; otorga el poder de testar a su mujer “atendiendo a
las muchas prendas, actitudes educacion y demas circunstancias expontaneas
que concurren en la dicha Dª. Mariana Aztina…”; nombra como albaceas
testamentarios a Juan de las Huertas, presbítero de la Orden de San Juan, Ignacio
Aguirre, Juan Antonio Santos de San Pedro y Pedro Llorente (Poder para testar
que otorga Luis Llorente a favor de Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 23-IV1728; actúan como testigos Juan de Montemayor, Francisco Lazcano, Baltasar
Gallego, Joaquín Pérez de Palacios y Francisco de Jaras. AHPNM, protocolo
14.101, fols. [1728], 14r-15v).
642
e
643
Mariana Aztina, viuda de Luis Llorente, otorga testamento, en
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
241
La relación de José Hortega con la hija de su mujer
parece fluida, a tenor de la documentación conservada; tras
su matrimonio con Mariana Aztina actuó con ella ‘como tutor
y curador de su persona y bienes’ hasta que Mariana contrajo
nupcias644. Cuando matrimonió, dispuso para ella y su primer
marido, Vicente Carreras (m. 1748), las estancias del segundo piso
del inmueble de la calle de la Montera645; de la confianza existente
entre ambos núcleos familiares da cuenta el poder general que,
en mayo de 1740, en vísperas de su incorporación a la frustada
expedición militar a Mallorca, José Hortega otorga a favor de
Vicente Carreras646; éste, médico de profesión, examinador del
Protomedicato, disfrutó de plaza de ‘académico fundador’ en
la Real Academia Médica Matritense, instalada en su propio
domicilio. Fruto de su matrimonio con Mariana Llorente
nacieron dos hijas, María Manuela y María Paula. Mariana
Llorente enviudó de José Carreras y contrajo nuevas nupcias
con Ignacio Marcoleta, caballero de la Orden de Santiago; de él
nombre de éste, el 29-IV-1729; siguiendo la voluntad de su marido, quien fue
amortajado con el hábito franciscano y enterrado en la Iglesia de San Luis, se le
rezó misa de cuerpo presente por su alma y sesenta misas más; se destinaron 4
rs por manda fozosa a los Santos Lugares de Jerusalén y, según el deseo de su
esposo, quedó convertida en curadora de las hijas habidas en el matrimonio,
Mariana y Manuela. Mantiene los albaceas instituidos por su marido, a los que
nombra por testamentarios junto a ella misma, y establece como sus únicas y
universales herederas a sus dos hijas, Mariana y Manuela (Testamento de Luis
Llorente otorgado por Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 29-IV-1729; actúan
como testigos Juan Leorgaz, Pº de la Sierra, José Pérez, Francisco Lerma y
Manuel Roque de la Regata y Quevedo. AHPNM, protocolo 14.101, fols. [1729]
62r-63v).
644
Mariana Llorente fue heredera usufructuaria de los bienes de su
tío Pedro Llorente, que recibio a la muerte del hijo de éste, José Llorente, su
antiguo poseedor. El abad del Convento de San José, Ambrosio de la Torre, se
interesó, en fecha de 4-XII-1737, por la dote que llevó al matrimonio quien fuera
mujer de Pedro Llorente, Juana Velázquez. José Hortega otorga los poderes
precisos a Antonio de la Portilla, abogado de los Reales Consejos, para que se
reintegre esta dote a los herederos legales de Juana Velázquez. Este compromiso
quedó protocolizado en Madrid, a 22-III-1745; firman como testigos Francisco
Ferrizino, Raimundo Meritan y Juan Vázquez (AHPNM, protocolo 16.639, fols.
164r-165r).
645
La carta dotal de Vicente Carreras, otorgada por su matrimonio con
Mariana Llorente, fue escriturada con fecha de 17-IV-1740, ante Antonio Muñoz
de Ribera (cf. Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por
fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
646
Poder general que otorga José Hortega a favor de Vicente Carreras.
Madrid, 16-V-1740 (AHPNM, protocolo 16.639, fols. 495v-496v).
242
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
nacieron María Josefa e Ignacio. A todos tuvo en su recuerdo José
Hortega cuando redactó sus mandas testamentarias: dejo sendas
alhajas para Mariana Llorente e Ignacio Marcoleta, y otras tantas
para cada uno de los cuatro nietos de quien fuera su mujer647.
María Aztina, falleció hacia el 3 de enero de 1761648; poco
tiempo después, apenas unos meses, habría de seguir su mismo
camino José Hortega.
Sic transit gloria mundi
Tras matrimoniar con Mariana Aztina, José Hortega y su cónyuge
se otorgaron, el 1 de agosto de 1731, mutuo poder para testar649;
“Dn. Joseph Ortega declaro ser su voluntad, el conceder como
concedio licencia, y Facultad cumplida a la mencionada Dª Mariana Llorente,
otorgase para tomar la Alagita que gustase de las qe quedasen por su
fallecimiento, y dar otra la que tubiere á bien á Dn Ignacio Marcoleta su marido,
a sus quatro hijos (...) á Dª Juana de Aguilar, a Dn. Alfonso Lopez su marido, y
á Dn Nicolas de Aguilar hermano de la Dª Juana, en atencion al mucho cariño,
que a todos profesaba…” (Escritura de amigable partición de los bienes que
quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
647
Ese mismo día, el 3-XI-1761, María Aztina otorga poderes, ante el
notario Antonio Esteban Hernández, “estando en cama de la enfermedad que
Dios nro Señor a sido servido darme sana de buen juicio, memoria y entendimto
natural, ttal qual Dios nro Señor fue Servido concederme (…) por quanto la
Gravedad de mi enfermd no me da lugar a hacer y Otorgar mi testamentto
Ultima y final voluntad y esta tenerla comunicada con los mis estimados y
querido Marido y hixo los nominados Dn. Joseph de Hortega (…) y con Dn.
Ignacio Marcoletta. Y para que tenga efecto, por el presente Otorgo quedo y
todo mi Poder Cumplido tan amplio y basttante como en ttal Caso se requiere
y es necesario a los citados (…) nombro por mis testtamentarios y Albaceas,
a los nominados Dn Joseph de Hortega mi segundo y Amado Marido, y a Dn.
Ignacio Marcoletta mi Querido Hijo, y a Dn. Alphonso Lopez, a todos tres juntos
y a cada uno Insolidum (…) y nombro por mi Unica y Unibersal heredera en
ttodos ellos a la referida Doña Mariana Llorente, mi Hija Unica lexitima…”
(AHPNM, protocolo 19.150, fols. 235r-243r); actúan como testigos el presbítero
Gaspar de Salas, Francisco Bonilla, Domingo Pazpet, Juan de Cevallos y José de
Echevarría, “la Otorgante a qn yo el Esno conozco no lo firmo por la Gravedad
de su enfermedad”.
648
Ambos solicitan ser amortajados con el hábito franciscano, que ella
aportaba en su dote, en la Iglesia de San Luis, de la que son parroquianos,
dejando el resto de los asuntos a sus albaceas y herederos; sólo establecen
que, el día de su muerte, se celebre misa de cuerpo presente y otras cien misas
rezadas por cada una de sus almas, y se pague de limosna 3 rs por cada una de
ellas. Este poder se protocolizó ante Juan Félix del Valle, en Madrid, el 1-VIII1731 (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r).
649
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
243
José Hortega nombra por universal heredera a su mujer, salvo
una manda testamentaria a favor de sus padres650; Mariana Aztina
instituye como heredera legítima a su hija, Mariana Llorente,
salvo el quinto de sus bienes, que deja para su marido, quien
asumiría la totalidad de la herencia en caso de fallecimiento de
Mariana Llorente651. Se nombran ambos consortes como albaceas
testamentarios, junto a Juan de las Huertas, presbítero de la
Orden de San Juan, Pedro Llorente, José Llorente, Manuel Muñoz,
Ignacio de Aguirre y Domingo de Aguilar. El documento, en el
que se repiten varios de los albaceas que el difunto Luis Llorente
había señalado como suyos, parece estar destinado a proteger
los bienes de la joven Mariana Llorente, único vástago vivo del
primer matrimonio de Mariana Aztina; la presencia de José y
Pedro Llorente entre los albaceas así parece indicarlo.
Mucho cambió la situación en los treinta años que median
entre la redacción de este codicilio y el momento en que habría
de ser puesto en práctica, tanto que nunca fue llevado a cabo.
En julio de 1760, “en pies, fuera de cama, aunque con algunos
achaqs. avituales, de mi buen juicio, memoria, y entendimiento
natural”, José Hortega redacta un primer testamento:
“… y nombro (por no tener, hijos, ni herederos
forzosos) por heredera usufructuaria en todos ellos [mis
bienes], a la explicada Dª Mariana Aztina, mi querida y
Amada esposa, para que todos ellos los disfrute, para todos
los largos días de su vida. Y despues de ellos, instituyo, y
nombro, por mi unico y universal heredero de todos los
dhos bienes hazdas. y efectos al nominado Dn. Casimiro
Gomez Ortega, mi sobrino, e hijo de Barbara Ortega mi
hermª y á sus hijos, pª pº todos los que assi fuessen (…)
Y caso de qe la nominada Dª Mariana Aztina mi muger,
sobreviviese al citado Dn Casimiro mi sobrino y este no
dejase hijos ningunos, es mi voluntad (…) qe despues de
los largos dias de la dha Dª Mariana mi Muger qe todos
mis bienes hazdas y efectos, se vendan, y su producto
se reparta por iguales ptes entre los citados Saturnino,
650
Les ajudica cien ducados, por una vez, “en atenzion a lo mucho que
les debo” y por la licencia que éstos le conceden de “disponer de mis bienes
libremte.” Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina,
su mujer. Madrid, 1-VIII-1731 (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r).
Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina,
su mujer. Madrid, 1-VIII-1731; actúan como testigos Francisco Ansorena, Juan
Bautista Monleón, Jerónimo Martínez, Manuel Rabieso y Andrés de Conhina
Blanco (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r).
651
244
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Manuel, María, Barbara, Josepha Ortega, todos cinco mis
hermanos, y entre Dª María Manuela y Dª Maria Paula,
Nietas de mi muger (…) por iguales ptes…”652
Añade al testamento algunas mandas, unas de carácter
religioso653, otras de disponibilidad de sus bienes: a su hermano
Saturnino le cede la casa de Añover que heredó de sus padres654;
a sus hermanos Saturnino y Manuel les otorga la propiedad
conjunta de sus bienes raíces en las tierras de Añover, procedentes
de la testamentaría de sus padres, y algunos otros adquirdos por
él en tierras de Yepes655; a sus hermanas, María, Bárbara y Josefa,
las recordará con 1.000 rs a cada una de ellas656. También tendría
652
Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano Antonio
Esteban. Madrid, 11-VII-1760 (AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
653
Las relativas a ser enterrado, con el hábito franciscano, en el
cementerio de la parroquia de San Luis, anejo de San Gines, “y en el sitio y
lugar qe. eligiere Dn. Juan Galvez Presbitero, uno de mis testamentarios”; misa
de corpore insepulto con los sacerdotes de la parroquia de San Luis, sepelio
acompañado de veinte cuatro pobres del Hospicio con sus hachas “y encargo
no se convide a nadie para dicho mi entierro”; manda se celebren por su alma
y la de sus padres “diezientas Misas rezadas”, con limosma de 3 rs “y confio
en otros muchos sufragios, Misas y diezmos, qe haran celebrar pr mi Alma, mi
muger, su hija, y mi hermana Barvara y su hijo Dn. Casimiro…”; reserva 1.000
rs de limosna para los pobres del Hospital General de Madrid y otros 1.000 rs
para los pobres del Hospicio de San Fernando de Madrid, a quien dispensa del
pago de las deudas que, por las medicinas servidas, pudieran devérsele “y les
pido y encargo me encomienden a Dios, y me tengan presente en sus oraziones
y exercicios…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760.
AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
“… una casa que tengo y gozo, mia propia, sita en la poblacion de la
citada villa de Añover de Tajo, y heredé de mis Padres y tengo aumentada pª qe
la goze en posesión y propiedad, haciendo, y disponiendo de ella á su arbitrio
y voluntad, como suya propia…” (Testamento otorgado por José Hortega.
Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
654
“… todos los bienes raizes, qe tengo, y me pertenezen por herencia,
y muerte de los dhos Sres. mis Padres, assi en dha villa de Añover, su termino y
jurisdiccion, y assi mismo un majardo, qe me toca y perteneze en posession y
propiedad en virtud de escriptura de venta, hecha á mi fabor, sito en la ribera
de Yepes, y una tierra que compré de Juan Muñz para que todo ello lo repartan
entre si…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760.
AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
655
“… mis tres hermas. un mil rs de vn por una vez, a cada una, y les
encargo me encomienden á Dios. Y es mi voluntad qe dhos Legados y mandas
los pague Dª Mariana Aztina mi muger quando gustare, sin que dhos Legatarios,
la puedan apremiar para su pago, hasta que como llevo dho fuere del agrado de
dha mi muger el pagarlos…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid,
11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
656
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
245
en su recuerdo a la familia de su mujer: a Mariana Llorente,
Ignacio Marcoleta, su marido, y María Paula, María Josefa, María
Manuela e Ignacio, los nietos de Maria Azxtina reserva “una
alaxica la que eligiere y fuera del agrado y voluntad de la citada
Mariana Aztina”, igual legado establece para Juana de Aguilar,
Alfonso López, su marido, y Nicolás de Aguilar “en atencion
al mucho amor y cariño que les professo y tengo”. Un último
legatario queda señalado en este codicilio, el boticario Gregorio
de Aedo, a quien cede una “lámina de plata”657.
La muerte de Mariana Aztina, en los comienzos de 1761,
fue el detonante que motivó la redacción de un nuevo testamento
por parte de José Hortega, dictado el 18 de enero de 1761658,
escasos días antes de su propio fallecimiento; en él instituye como
su heredero universal a su sobrino, Casimiro Gómez Ortega659 y,
como testamentarios, a sus vecinos y amigos Ignacio Marcoleta,
Domingo Marcoleta, Gaspar Salza, Juan Gálvez, Pedro Gómez
y Alfonso López. A su hermano Saturnino Hortega dejó el
usufructo de una casa de su propiedad en Añover de Tajo660; y
“… a mi Amo y Mro Dn Gregorio de Aedo la Lamina de plata, que
tengo, y me regalo el Excmo. Sr. Duque de Montemar difunto, y suplico al dicho
mi Amo la admita y perdone la cortedad pues solo es una muestra de cariño
en atencion al mucho afecto, amor, cariño y respeto qe spre le he profesado, y le
pido me encomiende a Dios Nro. Sr...” (Testamento otorgado por José Hortega.
Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v).
657
Testó ante el notario José Payo Sanz; “estando enfermo en la Cama
de la enfermedad que Dios nuestro Señor ha servido darme, pero en mi juicio,
memoria y entendimiento natural, creyendo firmemente como creo….” Madrid
18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). Rafael Folch Andreu
(Op. cit. nota 1, págs. 107-110. 1935) ofrece un extracto de algunas de las
cláusulas testamentarias.
658
“… instituyo y nombro por mi único y universal heredero de todos
ellos [sus bienes] al nominado D. Casimiro Gomez Ortega mio sobrino e hijo
de Barbara Ortega mi hermana y a sus hijos para que la gocen enteramente en
posesion y propiedad.- Y en caso de morir dicho D. Casimiro sin dejar hijos,
mando que todos mis bienes se vendan y su producto se reparta por iguales
partes entre Saturnino, Manuel, María, Bárbara y Josefa, mis cinco hermanos y
entre las mencionadas Manla y Dª Mª Paula Carreras…” (Testamento otorgado
por José Hortega ante el escribano José Payo Sanz. Madrid 18-I-1761. AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 250r-253v).
659
“… el usufructo por los días de su vida, de una Casa que me
pertenece en la población de dicha villa [Añover del Tajo], y en caso de morir
este antes que su mujer actual, y permaneciendo en viudedad es mi voluntad
la disfrute tambien por el tiempo que viviese y por su muerte Manuel Ortega y
la suya y despues pase esta casa en posesión y propiedad a D. Casimiro Gómez
Ortega, mi sobrino…” (Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano
660
246
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
para aquellos con quienes había compartido techo destina una
alhaja, en testimonio de recuerdo661; a Ignacio Marcoleta, y a su
mujer, Mariana Llorente, encarga particularmente
“… confieran el manejo y direccion de la Botica
que tengo a dicho mi sobrino (…) luego que se restituya
del Instituto de Bolonia, donde reside, atento a que su
inteligencia y circunstancias la podran conservar y ser
útil…”662
Firman el testamento, como testigos, quienes se hallaban
junto al enfermo: Antonio María Herrero, Juan de Andrade, Luis
Besterrechea, Francisco Bonilla y José Chavarria. El mismo día
en que firma su testamento, el 18 de enero, recibe la Unción de
Enfermos: es consciente de su próximo destino.
José Hortega murió el 23 de enero de éste 1761; siguiendo
sus deseos testamentarios, fue enterrado, con hábito de san
Francisco, en el camposanto de san Luis, anejo a la madrileña
Iglesia de san Ginés663:
“... Y es mi voluntad que cuando la de Dios fuese
sacarme de esta presente vida a la eterna, mi cadáver sea
amortajado con el hábito de nuestro Serafico Padre San
Francisco, sepultado en el Camposanto de la Iglesia de
San Luis, anejo de la Parroquia de San Gines de esta Corte,
pasadas veinticuatro horas de mi fallecimiento durante
cuyo tiempo se ha de poner mi cadáver en el suelo de
José Payo Sanz. Madrid 18-I-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v).
661
“Dn. Joseph Ortega declaro ser su voluntad, el conceder como
concedio licencia, y Facultad cumplida a la mencionada Dª Mariana Llorente,
otorgase para tomar la Alagita que gustase de las qe quedasen por su
fallecimiento, y dar otra la que tubiere á bien á Dn Ignacio Marcoleta su marido,
a sus quatro hijos, á Dª Juana de Aguilar, a Dn. Alfonso Lopez su marido, y á
Dn Nicolas de Aguilar hermano de la Dª Juana, en atencion al mucho cariño,
que a todos profesaba…” (Escritura de amigable partición de los bienes que
quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
662
Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano José Payo
Sanz. Madrid 18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v).
663
La partida de defunción, localizada en el archivo de la Iglesia
parroquial de San Luis, fue hecha pública por Rafael Folch Andeu (Op. cit. nota
1, págs. 106-107. 1935). Allí se señalan algunas de sus últimas voluntades: “…
manda se digan por su alma doztas misas rezadas su Limna tres reales vn, y que
sacada la Quarta Parroquial las demas se celebrasen en altares Pribilegiados, de
esta Iglesia de Sn. Luis, manda se den al Hospital gral. por una vez quatrztos reales
vn e igual cantidad a la casa de la Inclusa, doztos a los Desamparados y mil a la
Rl Casa de Hospicio (…) dio a la Fabrica diez Ducados”.
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
247
una de las piezas de la Casa con una sola vayeta negra
y cuatro velas de a libra sin mas pompa, ni ostentación,
sobre que encargo a mis testamentarios particularmente
el cumplimiento de esta Clausula. Que mi entierro haya
de ser precisamente en público, a hora correspondiente
de que se me diga en dicha Iglesia de San Luis Misa
de Cuerpo presente, con Diacono, Subdiacono, Vigilia
y Responso, pagandose los derechos regulares bien
entendido que solo han de asistir los Sacerdotes de dicha
Iglesia de San Luis y veinticuatro pobres del Hospicio con
sus achas, sin convidar a persona alguna para el entiero,
si solo se avisará sin detención a mis amigos y conocidos
para que me encomienden a Dios…”664
Los bienes terrenales
El 24 de junio de 1761, apenas un mes después del fallecimiento
de José Hortega, el notario José Payo Sanz, el mismo ante
quien había otorgado testamento, protocolizó la partición de
sus bienes; intervinieron en ella Mariana Llorente y su marido,
Ignacio Marcoleta; de otra parte Pedro Gómez Gutiérrez, padre
y administrador de los bienes de Casimiro Gómez Ortega,
principal heredero de José Hortega, aún en Bolonia665.
Los bienes pertenecientes a José Hortega -y los de quien
fuera su mujer, Mariana Aztina, de los que se hace distribución
conjunta666- fueron tasados y distribuidos en ‘amigable
Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano José Payo
Sanz. Madrid, 18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v).
664
Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por
fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761; firman
como testigos Francisco Bruno de Labrada, Diego Riaza y Dn. Trifón (AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v). La localización de la escritura de partición
de bienes fue dada a conocer por Rafael Folch Andreu (Op. cit. nota 12. 1953).
665
666
Tras la formación del obligado testamento de Mariana Aztina, José
Hortega e Ignacio Marcoleta “… para la buena cuenta, y razon en lo subscrito,
ocurrieron (…) en el inmediato dia ocho [I-1761] ante el Sr. Alcalde Dn Nicolas
Blasco de Orozco (…) y por la escribania de Provinzia que exerce Pº Sequeiros
y de los Cobos, pidiendo se formalizase el correspondiente Ymbentario y
tassacion; con zitacion y asistencia de dhos interesados se dio principio a las
formalizan. del primero. No pudiendose continuar como deseaban a causa de la
enfermedad que padecia el citado Ortega y mucho menos haviendose berificado
su muerte en veinte y uno del enunpciado mes (…) Ignacio Marcoleta dio nuevo
pedimto [de inventario y tasación] en veinte y ocho del referido mes [I-1761] (…)
pidiendo que con citazion del citado D. Pdro Gomez Gutierrez (…) se continuase
partición’; no consta la identidad de los tasadores y la valoración
de los bienes, significativamente baja, nos hace pensar más en
un acuerdo entre partes que en una estimación real; las piezas
-incluidos los materiales de la botica y los libros de la bibliotecase nos presentan tasados unitariamente667.
Bienes pertenecientes a José Hortega y Mariana Llorente
Tasa
Total de los bienes muebles
Censo sobre las casas de la calle Montera
Dinero en metálico
Créditos a favor de Mariana Aztina
Inmueble de la calle de Montera
Total
129.834 rs 22 ms
5.275 rs 14 ms
8.729 rs 00 ms
10.199 rs 00 ms
296.510 rs 00 ms
450.548 rs 02 ms
A los bienes de los que fuera propietario el matrimonio
Hortega/Aztina, de cuyo detalle nos ocupamos páginas atrás,
hubo de descontarse algunas cargas que pesaban sobre ellos
el Ymbentario y tassacion de los vienes que havian dejado el Dn. Joseph Ortega,
y su Mujer pª aclarar el Dro que a cada interesado correspondia…” (cf. Escritura
de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José
Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150,
fols. 280r-477v).
667
“… los referidos [Mariana Llorente, Ignacio Marcoleta y Pedro
Gómez Gutiérrez], nombraron tassadores, y con su assistencia se procedio
a formalizar el Ymbentario y tassacion (…) en cuio estado deseando los
Otorgants. proceder entre si con la Paz, y buena Armonia que los mismos Dn
Joseph Hortega y Dª Mariana Aztina les encargaron, y que conceptuan no
haver motivo para romper, ademas de que les asisten otras causas justas qe
reserban…” (cf. Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por
fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM,
protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
249
Cargas soportadas por los bienes pertenecientes
a José Hortega y Mariana Aztina
Tasa
Censo sobre las casas de la calle Montera a favor del
mayorazgo de Ahumada
Censo sobre las casas de la calle de Los Negros a favor
del mayorazgo de Mencía Ortiz Negrete
Carga Real sobre las casas de la calle de Los Negros
Réditos del Real Hospedaje de Corte por un privilegio
Reducción por el traspaso de propiedad
Censo redimible sobre el memorial de Pedro de Aragón
Dote aportada por Mariana Aztina al matrimonio
Total
380 rs 25 ms
60 rs. 00 ms
7.229 rs. 14 ms
1.433 rs. 28 ms
28.704 rs. 20 ms
44.000 rs. 00 ms
68.961rs. 21 ms
150.770 rs. 06 ms
De modo que la herencia líquida que habrían de percibir
los herederos quedó establecida en 299.777 rs 30 ms, una cantidad
nada despreciable.
Los bienes se repartieran por mitad entre los herederos de
los respectivos cónyuges: Casimiro Gómez Hortega [Ortega], el
sobrino de José Hortega, y Mariana Llorente, la hija de Mariana
Aztina; a ésta pasaron íntegros, además, los bienes que su madre
aportara como dote al segundo matrimonio, puesto que de éste
no hubo hijos668.
José Hortega reservó, por deseo de su esposa, un quinto
de los bienes de aquélla para sus nietos “en attencion al mucho
cariño qe les tenia, y para Ayuda a tomar estado…”, por cuestiones
prácticas, esta carga fue asumida por Casimiro Gómez Ortega669;
668
Por ello a Mariana Llorente le corresponden 218.850 rs 19 ms
(149.888 rs 32 ms, mitad de la herencia de José Hortega, y 68.961 rs 21 ms de
la dote matrimonial de su madre); de esta suma se descuentan 10.199 rs de
créditos incobrables, pertenecientes a la dote de Mariana Aztina, procedentes
de las facturas debidas a Luis Llorente y que, como perdidos, no se aplican en
la valoración del quinto que habrá de integrar la dote de los nietos de Mariana
Aztina. A los 208.651 rs 19 ms resultantes se aplicará el quinto que, por tanto,
queda establecido en 41.730 rs 10 ms y que habrá de descontarse del monto
correspondiente a Mariana Llorente. De acuerdo con estos datos, la hijuela de
Mariana Llorente se fija en 166.921 rs 9 ms, a los que se le han de sumar los
10.199 rs de créditos incobrables, lo que suponen 177.120 rs 9 ms.
“… y no siendoles util por lo mismo la adjudicacion de vienes, ó
efectos que no fuese en efectivo dinero: Estando de acuerdo todos los otorgantes,
y consienten en que este quede á cargo de Dn. Casimniro Gomez de Ortega su
669
250
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
también cargó sobre su propiedad el censo redimible sobre el
memorial de Pedro de Aragón670.
Distribución de los bienes pertenecientes a José Hortega y
Mariana Aztina
Mariana Llorente
Mobiliario de casa
y botica
Pinturas
Lienzos y ropa
blanca
China
Tapices
Gabinete de
Historia Natural
Librería
Efectos de la
botica [productos]
Efectos de la
botica [utensilios]
Rebotica
Cuarto de aguas
7.808 rs. 00 ms
Casimiro
Gómez Ortega
20.947 rs 00 ms
Total
28.755 rs 00 ms
3.010 rs. 00 ms
3.870 rs. 00 ms
-326 rs 00 ms
3.010 rs 00 ms
4.196 rs 00 ms
1.353 rs. 00 ms
1.408 rs. 00 ms
--
--3.000 rs 00 ms
1.353 rs 00 ms
1.408 rs 00 ms
3.000 rs 00 ms
---
14.356 rs 00 ms
37.400 rs 17 ms
14.356 rs 00 ms
37.400 rs 17 ms
--
2.867 rs 00 ms
2.867 rs 00 ms
---
1.095 rs 00 ms
505 rs 17 ms
1.095 rs 00 ms
505 rs 17 ms
pago a efecto, y señalado en la media casa que se le adjudicara, la qual no
ha de poder bender, ni enagenar sin la carga y obligzn de este gravamen…”
(Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento
de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v). La suma de este quinto ascendió a 41.730 rs 10 ms,
que fueron restados de la hijuela de Mariana Llorente (vide supra), de ellos
descontó Casimiro Gómez Ortega los gastos del funeral de Mariana Aztina,
que ascendieron a 3.728 rs; los bienes -en metálico- de los que se responsabiliza
Casimiro Gómez Ortega, a favor de los nietos de Mariana Aztina quedan
tasados en 38.002 rs 10 ms, que recaen sobre la propiedad del inmueble de la
calle Montera que a él pertenece.
670
“Hallandose como se alla impuesto, cargado sobre la casa que en
la calle de las [sic] Montera, con salida a la de los Negros corresponde a esta
testamª un censo a redimir y quitar de quarenta y quatro mil rs. de vn en pral con
reditos de dos y mº por ciento a favor de las memorias del Excmo Sr. Dn Pedro
de Aragon y deseando ebitar la molestia de pagar sus reditos por mitad interin
se redimen, estan de acuerdo los otorgants quede a cargo de dho Dn Casimiro el
practicarlo e interin obligado a satisfacer sus reditos, y sugeta su mitad de casa
al grabamen de uno, y otro, y la que se adjudica a Dª Mariana Aztina, passe
libre enteramte. de dho censo…” (Escritura de amigable partición de los bienes
que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
251
Espetera [botica]
-2.666 rs 11 ms
2.666 rs 11 ms
Sótano
-4742 rs 11 ms
4742 rs 11 ms
Cristal
-691 rs 00 ms
691 rs 00 ms
Colchones y
740 rs. 00 ms
741 rs. 00 ms
1.481 rs. 00 ms
mantas
Hierro
-737 rs. 00 ms
737 rs 00 ms
Espetera [cocina]
60 rs. 17 ms
987 rs. 15 ms
1.048 rs 00 ms
Cortinaje
45 rs. 00 ms
1.273 rs. 00 ms
1.318 rs 00 ms
Plata
14.915 rs. 00 ms
-14.915 rs 00 ms
Censo sobre las
5.275 rs. 14 ms
-5.275 rs 14 ms
casas de la calle
Montera
Inmueble de la
129.350 rs. 24 ms 129.350 rs. 24 ms 258.701 rs. 15 ms
calle de Montera*
Alhajas**
-4.290 rs 00 ms
4.290 rs 00 ms
Gastos del funeral
-5.001 rs 00 ms
5.001 rs 00 ms
de José Hortega
Totales
178.034 rs 21 ms
230.976 rs 24 ms
409.011 rs 11 ms
* La cantidad total por este concepto (258.701 rs 15 ms) es la que queda tras
aplicar las rebajas de los censos perpetuos y cargas reales sobre los 296.510 rs
en que fue valorado el inmueble por el maestro de obras José Gómez; la suma
total de dichos censos alcanza los 37.808 rs 19 ms, corresponden éstos al censo
sobre las casas de la calle Montera a favor del mayorazgo de Ahumada (380 rs
25 ms), censo sobre las casas de la calle de Los Negros a favor del mayorazgo
de Mencía Ortiz Negrete (60 rs), carga real sobre las casas de la calle de Los
Negros (7.229 rs 14 ms), réditos del Real Hospedaje de Corte por un privilegio
(1.433 rs 28 ms) y la reducción por el traspaso de propiedad (28.704 rs 20 ms);
sobre la finca también pesaba un censo redimible sobre el memorial de Pedro
de Aragón (44.000 rs), pero éste fue asumido por Casimiro Gómez Ortega
(Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento
de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v).
** En realidad fueron repartidas entre los más próximos a Mariana Aztina:
Mariana Llorente, Ignacio Marcoleta, sus cuatro nietos, Juana de Aguilar,
Alfonso López y Nicolas de Aguilar, pero corren por cuenta de la hijuela
de Casimiro Gómez Ortega “en calidad de Heredero del enunciado Dn.
Joseph de Ortega mandatario de la entrega de las referidas Alajas porque
a no procederse de este modo, y vajarse del todo del Cuerpo de Hazª
quedaria perjudicado el favor de la mencionada Doña Mariana Llorente por
representacion de su madre cuia voluntad no fue el hacer dichas mandas…”
(Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento
de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo
19.150, fols. 280r-477v).
252
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
Distribución de las cargas pertenecientes a
José Hortega y Mariana Aztina
Mariana
Llorente
Censo sobre la herencia de
Mariana Aztina a favor de
sus nietos
Censo redimible sobre
el memorial de Pedro de
Aragón
Totales
--
Casimiro
Total
Gómez Ortega
38.002 rs 10 ms 38.002 rs 10 ms
--
44.000 rs 00 ms 44.000 rs 00 ms
82.002 rs 10 ms 82.002 rs 10 ms
Distribución de la testamentaría de José Hortega y Mariana Aztina
Mariana Llorente
Bienes
Cargas
Abono de
nivelación
Totales
178.034 rs 21 ms
-- 914 rs 12 ms
Casimiro
Gómez Ortega
230.976 rs 24 ms
- 82.002 rs 10 ms
914 rs. 12 ms
Total
409011 rs.11 ms
- 82.002 rs 10 ms
--
177.120 rs 09 ms
149.888 rs. 26 ms
327.009 rs. 01 ms
El inmueble de la calle de la Montera, cargado con los
censos no liberados y los que la propia testamentaría de José
Hortega y Mariana Aztina hacen recaer sobre él, se reparte entre
Mariana Llorente y Casimiro Gómez Ortega; el matrimonio
Llorente/Marcoleta seguirá habitando en el segundo piso,
reservándose para Casimiro Gómez Ortega el principal de la
casa -con la biblioteca-, como zona habitable, y el bajo donde se
hallaba situada la botica, con las dependencias anejas a ésta671.
“Que habiendose de adjudicar (…) al mencionado Dn. Casimiro
Gómez Ortega (…) los efectos de la Botica, y librería (…) los quales estan
colocados, en la propia Casa que dejo, y que de ningun modo se ha de alterar
cosa alguna para que continue como se expresa por medio de la particular
inteligª y circunstanzs. de dho Dn Casimiro el credto de la referida Botica (…)
empieze a correr desigta. el quarto vajo pral de la Casa, que son los mismos que
ha de ocupar (…) y que Dn. Ignacio Marcoleta, y Dª Mariana Llorente su muger
continuen abitando el segundo con todo lo que le pertenece…” (Escritura
de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José
Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150,
fols. 280r-477v). Este desigual reparto convertía a Casimiro Gómez Ortega en
inquilino del matrimonio Marcoleta/Llorente: “… en esta inteligencia atento a
que los alquileres del quarto vajo se állan tasados en quatro mil y quatrocientos
671
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
253
Como si de un último acto de acatamiento a su secretario
perpetuo se tratara, la Real Academia Médica Matritense, en
la sesión celebrada el 10 de octubre de 1761, eligió a Casimiro
Gómez Ortega, con apenas veinte años de edad y con el único
mérito de ser el heredero de José Hortega, como miembro de la
Corporación672. El ‘nuevo académico’ tardaría en llegar a la Corte
española; se hallaba en Bolonia, estudiando -según él mismo
relata- Medicina, Botánica e Historia Natural673; el 12 de enero
de 1762 recibiría el título de doctor en Filosofía y Medicina por
la Universidad boloñesa. Regresó a Madrid con anterioridad al
13 de agosto de 1762, ese día obtuvo el título de boticario que
le permitiría ejercer en el afamado establecimiento de la calle
de la Montera674; no tenía los 25 años reglamentarios, ni había
ejercido los preceptivos cuatro años en botica abierta para poder
examinarse ante el Real Teribunal del Protomedicato675. La
sombra de José Hortega siguió protegiendo a su sobrino durante
muchos años después de su fallecimiento.
rrs, los del principal en cinco mil y quinientos y los del segundo en quatro mil y
quinientos, que todo hace Catorce mil, y quatro cientos rrs.: Y que computando
los respectivos a la mitad de Casa, que se adjudica a Dn Casimiro, y son siete mil
y doscientos rrs., con los nuebe mil y nobezientos que obtenga por la vivienda
vajo y pral, ay la diferª de dos mil y setecientos rrs. esta suma anual la ha de pagar
a los mencionados Dn Ignacio Marcoleta, y Dª Mariana Llorente otorgantes…”
(AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v).
Datos bio-bibliografícos de Casimiro Gómez Ortega en Francisco
Javier Puerto Sarmiento. Ciencia de Cámara. Casimiro Gómez Ortega (17411818). Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1992; también
en Antonio González Bueno. Gómez Ortega, Zea, Cavanilles. Tres botánicos de la
Ilustración. Madrid: Nivola, 2002.
672
673
Casimiro Gómez Ortega. Op. cit. nota 562. 1988.
674
Casimiro Gómez Ortega. Literatura, grados y méritos de Casimiro
Gómez Ortega, primer cadrático [sic] jubilado del Real Jardín Botánico de Madrid.
[Madrid]: [s.n.], 1814. 2 h. [Biblioteca de la Facultad de Farmacia. UCM,
signatura: AF-92GOM].
Sí cumplía el tercer requisito: dominio de la lengua latina, lo había
demostrado en su Casimiro Gómez Ortega. De laudibus Caroli III potentissimi
hispaniarum regis carmina. Bononiae: ex typograph. SS. Inqusition sub signo D.
Thomae Aquinat [Imprimatur Fr. Petrus Paullus Salvatori], 1759. XIV, [1] p., un
largo y elegíaco poema en el que se aprecia ya el carácter cortesano de su autor.
Es posible que aún publicara un poema anterior: Casimiro Gómez Ortega. Pro
Inmaculata Dei-Parentis Conceptionis oratio... / habita... a Don Casimiro Gomez de
Hortega... die VI iunii MDCCLVI... Barcinone: apud Paulum Nadal..., [1756]. [7] p.;
recientemente localizado en el Seminario Diocesano de San Miguel (Orihuela),
signatura: XVIII/3217(21) y que, de confirmarse, sería su primera obra impresa.
675
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
255
Cronología
1703
22-X. Nace en Añover del Tajo (Toledo), fruto del matrimonio
formado por Francisco Hortega y Maria Hernández [AP
Añover. L-VI Bautismos].
2-XI. Es bautizado en la Iglesia parroquial de Santa Ana, en
Añover; actuó como padrino Isidoro Carmena [AP
Añover. L-VI Bautismos].
1714
4-XII. Nace su hermana Bárbara Manuela, sería bautizada el 10XII [AP Añover. L-VII Bautismos].
[c. 1728]
Se traslada a Madrid, pasa a regentar la farmacia de
Mariana Aztina, viuda de Luis Llorente, sita en la calle
Montera.
1729
Se integra en la Congregación de Nuestra Señora de los
Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas,
núcleo de los boticarios de Madrid [ARANF, leg. 3.8.6].
1731
Contrae matrimonio con Mariana Aztina.
1-VIII. Otorga poder para testar a favor de su mujer, Mariana
Aztina [AHPNM, Protolo 14.102].
18-XII. Nombrado, junto a Andrés Famada, consiliario de la
Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados
y del Glorioso Evangelista San Lucas para el año 1732
[ARANF, L-3].
1732
15-III. Felipe V otorga, en Sevilla, privilegio al ‘Colegio de
Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca
magna [ARANF, leg. 4.1].
256
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
3-XII. Otorga poder para pleitos a favor de Francisco de la
Lastra y Gabriel Pedrero, procuradores de los Reales
Consejos, y de Diego de Sofa y Juan Facundo Domínguez,
procuradores de número de Madrid [AHPNM, protocolo
14.102].
18-XII. Nombrado, junto a Andrés Famada, celador de la
Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados
y del Glorioso Evangelista San Lucas para el año 1733
[ARANF, L-3].
1733
10-VII. La testamentaría del duque de Veraguas realiza un
reconocimiento de deuda a José Hortega, por la medicinas
surtidas desde su botica [AHPNM, protocolo 14.188].
12-VII. Se da por iniciada la ‘Tertulia Literaria Médico-ChymicoPhisica’; sus reuniones se celebran en la casa de José
Hortega [ARANM, L-1].
17-VII. Levanta el censo sobre tres casas ubicadas en la calle de
la Montera, perteneciente al mayorazgo de Nicolás de
Ahumada y Velasco [AHPNM, protocolo 15.776].
17-VII. Otorga carta de pago sobre unos derechos del mayorazgo
de Nicolás de Ahumada, relacionados con la propiedad
de la casa de la calle Montera [AHPNM, protocolo 15.776].
16-VIII. Reconoce el censo del mayorazgo de Nicolás de Ahumada
y Velasco sobre unas casas en la calle de la Montera que
han pasado a ser de su propiedad [AHPNM, protocolo
16.134].
1-IX. Sesión constitutiva de la Tertulia…; queda conformada por
ocho tertulianos [ARANM, L-1].
2-IX. Los tertulianos definen sus funciones y comienzan la
elaboración de los estatutos que habrían de regirles
[ARANM, L-1].
5-X. Los miembros de la Tertulia… dan su aprobación a los
estatutos por los que ésta habrá de gobernarse y toman
posesión de sus asientos; José Hortega firmará el acta
como Secretario de la Corporación [ARANM, L-1].
6-X. Primera Junta ordinaria celebrada por la Tertulia… [ARANM,
L-1].
10-X. Adquiere una finca en la calle Los Negros de Madrid –
colindante con las casas de Montera- al Comendador
y religiosos del Convento de la Merced de esta villa
[AHPNM, protocolo 14.088].
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
257
23-X. Diserta en la Tertulia… acerca de la ‘Historia sobre la
verdadera operación del bezoárdico jovial, sus señales y
modo de obrar en los afectos histéricos’ [ARANM, L-1].
16-XI. Expone en la Tertulia… una ‘Historia de los análisis de las
aguas minerales de Quinto’ [ARANM, L-1].
18-XI. Presenta, en una junta anatómica de la Tertulia…, una
‘Historia del mesenterio’ [ARANM, L-1].
21-XII. Defiende, ante la Tertulia… una disertación sobre
‘Confecciones y electuarios cordiales’, inicio de una serie
sobre preparaciones farmacéuticas [ARANM, L-1].
1734
2-I. La Tertulia… le nombra ‘Secretario sin limitación de tiempo’
[ARANM, L-1].
27-I. Trata, en una junta anatómica de la Tertulia…, de ‘Las partes
externas de los ojos’ [ARANM, L-1].
18-II. Prosigue desarrollando, en las juntas ordinarias de la
Tertulia…, sus ‘Reflexiones sobre las preparaciones
farmacéuticas’ [ARANM, L-1].
12-III. Ocupa el cargo de Tesorero de la Tertulia…, permanece en
él hasta la sesión celebrada el 23-IX-1734 [ARANM, L-1].
21-III. Protocoliza la venta de su botica sita en Añover (Toledo)
a favor de Francisco Fernández Conejo [AHPNM,
protocolo 16.638].
26-III. Continúa exponiendo sus ‘Reflexiones sobre las
preparaciones farmacéuticas’, ante la Tertulia… [ARANM,
L-1].
2-IV. Es propuesto, por la junta particular de fundadores, para
ocupar la presidencia de la Tertulia… [ARANM, L-1].
5-IV. Es electo como Presidente de la Tertulia…, permanece en el
cargo apenas unos días, renuncia el 12 de abril [ARANM,
L-1].
12-VIII. Los tertulianos aprueban los estatutos de la Academia
Médica Matritense, éstos son remitidos al Consejo de
Castilla. [ARANM, L-1].
12-IX. Se expide real cédula aprobando los estatutos de la
Academia Médica Matritense [ARANM, L-1].
18-IX. Es nombrado Secretario perpetuo de la Academia…
[ARANM, L-1].
20-IX. Toma posesión como miembro de la Academia…, lo hace
en calidad de ‘Botanista de Número’ [ARANM, Libro 1].
258
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1-X. Realiza la copia de los Estatutos de la Academia Médica
Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla
[ARANM, leg. 1C, doc. 2ª].
5-X. Como Secretario de la Academia Médica Matritense,
informa, al Colegio de Farmacéuticos de Madrid, de la
creación de la nueva Academia [ARANF, leg. 3.11.1].
19-XI. Firma, junto al resto de la junta directiva de la Academia
Médica Matritense, un poder para pleitos a favor de
Manuel Izquierdo [AHPNM, protocolo 16.638].
17-XII. Diserta, en la Academia…, sobre la ‘Historia del alcanfor
y examen físico de su particular naturaleza e índole’
[ARANM, L-1].
12-XII. Actúa como testigo en la declaración de pobre formulada
por Manuela López, criada de su casa [AHPNM, protocolo
14.101].
1735
1-IV. Toma parte en la discusión posterior a la conferencia
pronunciada por Miguel Guarro en la Academia… sobre
‘Si para la curación de la catalepsia sea eficaz auxilio la
sangría’ [ARANM, L-1].
22-IV. Expone, ante la Academia…, un ‘Discurso que contenía
varios experimentos sobre el alcanfor’ [ARANM, L-1].
11-V. Otorga poder para pleitos a favor de Gabriel Pedrero y
Francisco Xavier, procuradores de los Reales Consejos
y de Simón Casado y Antonio de Rama Palomino,
procuradores de Madrid [AHPNM, protocolo 14.102].
13-V. Interviene en el coloquio posterior a la conferencia de
Bartolomé Serena, que versó sobre ‘Si para el sentido
y movimiento eran necesarios los espíritus animales’
[ARANM, L-1].
3-VI. Otorga poder para pleitos a favor de Antonio Pérez, Manuel
Monedero y Antonio Rama Palomino, procuradores de
Madrid, y Manuel Antonio Fraile, Manuel de Blas Ortiz
y Pedro de Rueda Osorio, procuradores de los Reales
Consejos [AHPNM, protocolo 16.638].
19-VIII. Reconocimiento de deuda a su favor por parte de Diego
Fernández, batidor de oro, en razón de las medicinas
adquiridas en su botica [AHPNM, protocolo 16.098].
26-VIII. Otorga poder a su padre, Francisco Hortega, para que
gestiones sus bienes y propiedades en Añover, incluido el
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
259
cobro de recetas de su antigua botica [AHPNM, protocolo
14.102].
1-IX. Acude al concurso de acreedores de Diego Fernández, en
razón de las medicinas a él suministradas [AHPNM,
protocolo 16.098].
17-IX. Actúa, como fianza de acreedor, a favor del maestro de
obras Tomás Gutiérrez [AHPNM, protocolo 14.187].
21-X. Tomó parte en la discusión tenida en la Academia… a raíz de
la disertación presentada por Andrés Famada, referente a
las ‘Operaciones útiles del antimonio’ [ARANM, L-1].
18-XI. Presenta en la Academia… un discurso con ‘Experimentos
sobre el alcanfor por medio de menstruos sulfúreos’
[ARANM, L-1].
18-XI. Firma, junto a Miguel Garro, Alfonso Lope, Andrés de
Bereterrechea, Julio de Dios López y Andrés Famada, la
censura del libro Llave maestra Chirurgica & de Ambrosio
de Almunia, solicitada a la Academia… por el Consejo
de Castilla. El informe es contrario a su publicación
[ARANM, L-1].
1736
9-I. Otorga carta sobre el pago de un censo perteneciente
al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco,
relacionado con la propiedad de las casas de la calle
Montera [AHPNM, protocolo 15.781].
10-I. Nombrado, junto a Félix Palacios, José Quesada, Juan Moreno
Bote y Lorenzo Alquizalete, para formar los estatutos del
‘Colegio de Boticarios de San Lucas’ [ARANF, L-3].
11-V. Expone, ante la Academia…, unas ‘Reflexiones sobre la raíz
de Calaguala’ [ARANM, L-1].
9-XI. Interviene en el coloquio mantenido en la Academia..., tras
la conferencia de Bernabé Araujo sobre la ‘Historia y
curación del coma somnoliento’ [ARANM, L-1].
3-XII. Toma parte en las discusiones mantenidas en la Academia...,
tras el discurso de Vicente Carreras acerca de la ‘Historia
y curación de la alferecía’ [ARANM, L-1].
10-XII. Diserta, en la Academia…, sobre la ‘Historia del uso
médico del alcanfor’ [ARANM, L-1].
12-XII. Se aprueban, en sesión de sus colegiales, los estatutos del
‘Colegio de Profesores Boticarios de Madrid’ [ARANF,
leg. 4,6].
260
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1737
1-I. Es elegido para ocupar la dirección de la sección de Farmacia
de la Academia…; renunciará a ella, será Louis Riqueur
quien ocupe la plaza [ARANM, L-1].
1-II. Interviene en la discusión posterior al discurso pronunciado,
en la Academia..., por Miguel Campillo relativo a la
‘Historia y curación de la artritis’ [ARANM, L-1].
9-II. Toma parte en el coloquio que siguió a la disertación de
Bartolomé Serena, pronunciada en la Academia..., sobre la
‘Historia y curación de la tisis’ [ARANM, L-1].
9-III. Reconocimiento de deuda a su favor por parte de la
testamentaría de Lamberto Deuberberg, por las medicinas
adquiridas en su botica [AHPNM, protocolo 17.741].
22-III. Interviene, en la Academia..., tras la conferencia de Agustín
Lorente, acerca de la ‘Causa de la transmutación del
delirio en letargo’ [ARANM, L-1].
17-V. Diserta, en la Academia…, acerca de la ‘Historia del opio
hispano’ [ARANM, L-1].
23-VII. Acepta nuevas ocupaciones en la Academia…: asume
la revisión de fondo y estilo de los manuscritos que
ésta publicará como producción propia, entre ellas las
Ephemérides barométrico-médicas matritenses… [ARANM,
L-1].
21-VIII. Felipe V da su aprobación a los Estatutos del Real Colegio
de Profesores Boticarios de Madrid [ARANF, leg.4,6].
24-IX. Se reúne, por vez primera bajo sus nuevos estatutos, el
Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid; ocupa
la presidencia de la junta Baltasar de la Torre y Ocón,
médico de Cámara, Protomédico de Castilla y Presidente
Subdelegado del Real Tribunal del Protomedicato. José
Hortega, como el resto de los asistentes a esta reunión,
ostentará la consideración de socio fundador [ARANF,
L-7].
8-X. Toma parte en las discusiones promovidas por la disertación
de Tomás Francisco de Monleón y Ramiro, pronunciada
en la Academia…, sobre la ‘Historia y curación del dolor
cólico convulsivo’ [ARANM, L-1].
31-X. Da inicio, en la Academia…, a sus ‘Lecciones botánicas’,
tras una disertación histórica sobre la disciplina, pasa
a ocuparse, siempre de acuerdo con la propuesta
sistemática formulada por Joseph Pitton de Tournefort,
de la ‘asarina’ [Anthirrinum sp.], la ‘hierba doncella’
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
261
[Vinca minor L.], las flores del azafrán [Crocus sativus L.],
la ‘argentina’ [Potentilla anserina L.] y de un Atriplex al que
denomina ‘te de España’ [ARANM, L-1].
8-XI. Continúa, en la Academia…, sus ‘Lecciones botánicas’,
describe el arrayán [Myrtus communis L.], el hisopo vulgar
[Hyssopus officinalis L.], los claveles de muerto [Calendula
officinalis L.] y la consuelda real [Consolida sp.]; sobre los
usos médicos de estas plantas versaron los comentarios
posteriores de Joseph Isasi-Isasmendi [ARANM, L-1].
1738
30-I. No asiste a la junta general de la Academia…, le sustituye en
el trabajo de secretaría Vicente Carreras [ARANM, L-1].
30-I. La Academia… le encarga -en ausencia- realizar las
“Observaciones de los Vientos, Barometro, Thermometro,
y Temporal” con destino a las Ephemérides barométricomedicas matritenses… [ARANM, L-1].
7-III. Presenta, en la Academia…, un ‘Discurso que contenía
las memorias para la historia de las plantas de España’
[ARANM, L-1].
22-III. Actúa como ‘curador de la menor’ Mariana Llorente
en un ‘compromiso en fuerza mayor’ otorgado como
consecuencia de una herencia recibida por ésta [AHPNM,
protocolo 16.639].
4-V. El Colegio… trata, en junta particular, sobre la cesión a él
efectuada, por el Real Tribunal del Protomedicato, de los
derechos sobre la Pharmacopeia matritensis…; informará a
los colegiales en junta general de 6-V. Los componentes
de la Junta reciben poderes para ocuparse de este fin
[ARANF, L-7].
9-VII. Felipe V confirma la cesión de los derechos sobre la
Farmacopea al Real Colegio de Boticarios de Madrid
[ARANF, leg. 4.11.1; AHPNM, protocolo 16.386].
16-VII. La testamentaría de la marquesa de Osera reconoce la
deuda con su botica por las medicinas suministradas
[AHPNM, protocolo 15.223].
19-VII. Asiste, por delegación del Real Colegio, junto a José
Moreno Bote, a la sesión pública en la que habrían de ser
inspeccionados los géneros empleados para la fabricación
de la Triaca [ARANF, L-7].
4-VIII. Asiste, junto a un buen número de los miembros del Real
Colegio de Profesores Boticarios de Madrid, a la reunión
262
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
extraordinaria, celebrada en la capilla de la Congregación
de Nuestra Señora de los Desamparados, en la que la
Corporación se obliga en deuda con el boticario Sebastián
Martínez, obteniendo así fondos con los que dar a las
prensas la Pharmacopoeia Matritensis… [ARANF, leg.
4.11.1; AHPNM, protocolo 16.386].
22-X. Ocupa plaza de Boticario mayor de los Reales Ejércitos
[AGS, Guerra Moderna, leg. 2411 –fide Roldán, 1925-].
1739
5-II. Comunica al Real Colegio de Boticarios su nombramiento
como ‘Boticario de su Real Persona’ [ARANF, leg. 4.9.2].
6-II. Decreto del Tribunal del Real Protomedicato declarando
obligatoria la tenencia de la Pharmacopoeia Matritense…
[Pharmacopoeia Matritensis, 1739].
21-III. Lee, en la Academia…, una ‘Disertación sobre los métodos
de las plantas, y continuación de las memorias para la
historia general de las plantas de España’ [ARANM, L-1].
2-V. Interviene en la discusión mantenida tras la conferencia
pronunciada, en la Academia…, por Cristóbal Vélez, sobre
el ‘Examen de la sal de amoníaco’ [ARANM, L-1].
20-XI. Toma parte activa en la defensa de Cristóbal Vélez ante la
Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y
del Glorioso Evangelista San Lucas [ARANF, L-3].
1740
7-I. Nombrado para desempeñar el cargo de diputado primero
en el Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7].
28-III. Su nombre figura en la propuesta del Real Colegio de
Boticarios para elegir a dos colegiales “á quienes se les
diesse poder general, pª. qto. ocurriesse en beneficio del
Colegº…”; el Real Colegio validaría su propuesta, junto
a la de Juan Moreno Bote, en junta general de 31-III
[ARANF, L-7].
8-IV. Ante su inminente salida de la Corte, como Boticario mayor
de los Reales Ejércitos, la Academia… nombra como
Secretario sustituto a Juan de Dios López [ARANM, L-1].
20-IV. Recibe del Colegio de Boticarios de Madrid, junto a Juan
Moreno Bote, poder general para pleitos (ARANF, L-7;
Ibid. leg. 4.13; AHPNM, protocolo 16.386).
8-V. En junta de oficiales del Real Colegio de Boticarios de Madrid
se anuncia su proyectada salida de la Corte; por lo que se
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
263
acuerda acumular su cargo de diputado primero al del
fiscal del Real Colegio [ARANF, L-7].
13-V. Firma el acta de la junta celebrada por la Academia…, la de
la semana posterior (20-V-1740) llevará la rúbrica de Juan
de Dios López. [ARANM, L-1].
16-V. Otorga poder general a favor de Vicente Carreras [AHPNM,
protocolo 16.639].
23-VI. Permanece en Barcelona; en carta a José Carvajal reconoce
haber visitado el Gabinete de los Salvador y asistir al
fallecimiento de Jaume Salvador Pedrol, acaecido ese día
[AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981-].
17-XII. Mediante real orden es reintegrado a Madrid [AGS,
Guerra Moderna, leg. 2460 –fide Roldán, 1925-].
1741
27-I. Firma, en su calidad de Secretario perpetuo, el acta de
la junta celebrada ese día por la Academia MédicoMatritense [ARANM, L-1].
31-I. Su nombre figura, como Boticario mayor, en un “Estado de
los empleados para el Hospital de Campaña del Exército
de prevencion y sueldos que les corresponden” [AGS,
Guerra moderna, leg. 2460 –fide Roldán, 1925-].
5-V. Presenta ante la Academia… una ‘Disertación botánica sobre
una planta de la China llamada Gin-Seng’ [ARANM, L-1].
12-V. Pronuncia, en la Academia…, una conferencia ‘Sobre una
planta de América llamada Cascarilla o Chacarilla’
[ARANM, L-1].
26-V. Lee, en la Academia…, una memoria ‘Sobre una planta
llamada Scrophularia aquatica o Betónica aquatica’
[ARANM, L-1].
9-IX. No asiste a las juntas generales celebradas por el Real Colegio
de Boticarios entre el 9-IX-1741 y 1-I-1742 [ARANF, L-7].
25-XII. Interviene en la discusión mantenida en la Academia… tras
la intervención de Vicente Carreras, ‘Sobre las petequias’
[ARANM, L-1].
1742
16-II. Arguye tras la conferencia de Joaquín Cervino en la
Academia…, ésta versó ‘Sobre la utilidad de la aplicación
de medicamentos simples en la curación de las
enfermedades’ [ARANM, L-1].
264
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
16-III. Tomó parte en los comentarios posteriores a la disertación,
en la Academia…, de Pedro León Gómez, ‘Sobre el uso de
la sangría’ [ARANM, L-1].
13-IV. Diserta en la Academia…, esta vez bajo el título de
‘Memorias sobre el kermes mineral’ [ARANM, L-1].
28-IX. Lee, ‘por vía de prueba’, la conferencia ‘Sobre el licor
anodino mineral de que hace memoria en sus obras
Federico Hoffman’, con la que la Academia… celebra una
de sus dos juntas publicas anuales [ARANM, L-1].
1-X. Presenta, en junta pública de la Academia…, su memoria
‘Sobre el licor anodino mineral de Federico Hoffman,
médico del Rey de Prusia’ [ARANM, L-1].
28-XII. Propuesto, por la junta particular, para el cargo de
Secretario del Real Colegio [ARANF, L-7].
1743
1-I. Es electo para desempeñar, durante este año, la Secretaría del
Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7].
25-I. Participa en el coloquio posterior a la conferencia de José
Lorente, dictada en la Academia…, ‘Sobre el recto medio
de administrar la quina’ [ARANM, L-1].
31-I. El Real Colegio le designa para que, junto a José Zavaleta,
reclamen de Francisco Javier Quesada, Secretario del
Real Tribunal del Protomedicato, la documentación
concerniente al Colegio de Boticarios que esta institución
tenga en sus archivos, para formar con ellos el propio de
la Corporación [ARANF, L-7].
31-I. Interviene tras la disertación de José Lorente ‘Sobre el abuso
de la quina’, presentada en la Academia… [ARANM, L-1].
15-III. Toma parte en la discusión mantenida, en la Academia…, tras
la conferencia de Santa Ana, acerca unas ‘Observaciones
anatómico-quirúrgicas’ [ARANM, L-1].
22-III. Interviene, en la Academia…, tras la disertación de Miguel
Rodríguez ‘Sobre la ventajosa verosimilitud, firmeza,
y utilidad del sistema mecánico respecto de los demás’
[ARANM, L-1].
25-X. Pronuncia, en la Academia…, la primera parte de una
conferencia ‘Sobre el jabón de España y su uso en
Medicina’ [ARANM, L-1].
8-XI. Participa en el coloquio posterior a la conferencia de Juan
José García Sevillano, pronunciada en la Academia…,
‘Sobre la linfa, su movimiento y usos’ [ARANM, L-1].
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
265
22-XI. Toma parte en la discusión mantenida, en la Academia…,
después de la disertación de Joaquín Cervino, que versó
‘Sobre el quilo en movimiento y destino’ [ARANM, L-1].
30-XII. Propuesto, en la junta particular del Real Colegio de
Boticarios, por segunda vez consecutiva, para el cargo de
Secretario [ARANF, L-7].
1744
1-I. Es electo para ocupar, durante este año, la dirección de
la sección de Farmacia constituida en el seno de la
Academia… [ARANM, L-1].
2-I. Elegido para desempeñar, en este año, el cargo de Secretario
del Real Colegio de Boticarios de Madrid. En su
nombramiento se hace constar su cargo de examinador
del Real Tribunal del Protomedicato, el de Boticario
de S.M. y el de Boticario mayor de sus Reales Ejércitos
[ARANF, L-7].
7-II. Designado, junto a Miguel Campillo, Vicente Carreras,
Alejandro Martínez de Argandoña y Tomás Francisco
Monleón, para redactar los nuevos estatutos de la
Academia… [ARANM, L-1].
23-III. Junto a Vicente Carreras, presentó en la Academia… ‘Un
caso médico y farmacéutico’, cuyo asunto no nos refieren
las actas [ARANM, L-1].
[III/V]. Actuando como Director del Real Colegio de Boticarios,
articula la asistencia de José Suñol, los protomédicos
Gaviria y Loqui y los visitadores José Pavón y Francisco
Perez Izquierdo, boticarios de Cámara, en los actos
previos a la elaboración de la Triaca. José Hortega lee una
oración gratulatoria, a la que correspondió José Suñol
[ARANF, L-7].
22-V. Concluye la presentación, en la Academia…, de su disertación
‘Sobre el jabón de España y su uso en Medicina’, cuya
primera parte presentó en octubre de 1743 [ARANM, L-1;
ARANF, leg. 5.11].
13-VII. Nombrado por la Academia… para formar parte de la
comisión revisora del texto de sus nuevos estatutos
[ARANM, L-1].
23-VII. En junta particular del Real Colegio de Boticarios se le
encarga se ocupe de ‘la elección del impresor, del papel
necesario para la impresión, la corrección de imprenta, y
266
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
demás cosas que sobre este punto ocurriesen’ en relación
con la nueva Tarifa… [ARANF, L-7].
14-IX. Una vez impresa la nueva Tarifa…., se ocupará, por encargo
de la junta del Real Colegio de Boticarios, de distribuirla
entre la cúpula del Real Tribunal del Protomedicato
[ARANF, L-7].
29-XII. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le
propone, por tercer año consecutivo, para el cargo de
Secretario [ARANF, L-7].
1745
2-I. Electo como Secretario del Real Colegio de Boticarios de
Madrid, su mandato tiene cumplimiento anual [ARANF,
L-7].
15-I. Interviene, en la Academia…, en la tertulia posterior a
la conferencia de Vicente Gilabert ‘Sobre el origen o
generación de la máquina hidráulico-pneumática’
[ARANM, L-1].
22-I. Toma parte, en la Academia…, en la tertulia que siguió a
la conferencia de Francisco Padrés sobre ‘El abuso de los
diaforéticos y el uso del agua en las calenturas agudas’
[ARANM, L-1].
28-III. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le
encomienda que, junto a Juan Moreno Bote “pidan
en su Nombre al Rl. Protomedicato un testimonio, ó
certificacion de los Asuntos, y Providencias acordadas
pr este Tribunal, tocantes a la Profesion Pharmaceutica”
[ARANF, L-7].
9-IV. Diserta, en la Academia…, ‘Sobre la trementina del
Principado de Cataluña’ [ARANM, L-1].
26-IV. Interviene en la Academia…, junto a Cristóbal Vélez, en
una ponencia conjunta ‘Sobre una operación química
llamada bezoárdico jovial’ [ARANM, L-1].
28-IV. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le
encomienda lleve a término el pleito contra las boticas
regentadas por comunidades religiosas [ARANF, L-7].
7-V. Participa, en la Academia…, tras una intervención de Vicente
Gilabert relativa a ‘La composición y movimiento de la
máquina hidráulico-pneumática’ [ARANM, L-1].
21-V. Toma parte en el diálogo que se estableció tras pronunciar,
Juan José García Sevillano, su ‘Disertación sobre las
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
267
cautelas que deben observarse en la administración de los
medicamentos’ [ARANM, L-1].
30-VIII. Presenta ante el Real Colegio de Boticarios, junto a Juan
Moreno Bote, un Memorial arreglado a la pretensión del
Colegio contra las Boticas de las Comunidades Eclesiásticas
seculares y regulares [ARANF, L-7].
30-XII. Al fallecer el boticario Miguel de la Parra, la junta particular
del Real Colegio le elige, junto a Lorenzo Alquizalete,
garante de los bienes de esta botica [ARANF, L-7].
30-XII. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le
propone para el cargo de Secretario de la Corporación
[ARANF, L-7].
1746
3-I. Electo para desempeñar, este año, por cuarto consecutivo,
la Secretaría del Real Colegio de Boticarios de Madrid
[ARANF, L-7].
14-IV. Da cuenta, ante la junta particular del Real Colegio de
Boticarios, de cómo “avian conseguido dos Decretos de
S.M. sobre la instancia que hacia el Colegio de Sto Thomas
para abrir Botica al Publico…” [ARANF, L-7].
24-V. Interviene en la Academia… tras la presentación que
Antonio María Herrero realizó sobre ‘El origen de las
piedras figuradas’ [ARANM, L-1].
24-VI. La Academia… le otorga su representación, junto a Tomás
Monleón, para que impida, ante el Consejo de Castilla
y sus consejeros, que tome apoyo regio otra sociedad
médica de carácter similar; la situación fue solventada,
a gusto de la Academia, en septiembre de éste 1746.
[ARANM, L-1].
9-XII. Diserta, en la Academia…, sobre ‘La sal natural catártica de
la Villa de Añover de Tajo’ [ARANM, L-1].
15-XII. Ocupa la tribuna de la Academia… para tratar de ‘Varias
noticias sobre el metal similar de Mr. de Reney [sic]’
[ARANM, L-1].
29-XII. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le
propone como Secretario de la Corporación [ARANF,
L-7].
268
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1747
1-I. Es electo para ocupar, durante este año, la dirección de
la sección de Farmacia constituida en el seno de la
Academia…. [ARANM, L-1].
2-I. Elegido, por quinto año consecutivo, como Secretario del
Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7].
6-II. Inicia un periodo de ausencia a las sesiones celebradas
por la Academia…; además de a ésta, tampoco acudirá a
las juntas de los días 9-II y 16-II-1747; sí se encontraba
presente en las tenidas el 30-I y el 20-II-1747 [ARANM,
L-1].
23-III. Interviene en la discusión mantenida, en la Academia…,
tras la disertación de Joaquín Cervino, ‘Sobre el abuso de
algunos medicamentos tópicos comúnmente recibidos en
el uso médico’ [ARANM, L-1].
13-IV. Participa, como examinador del Real Tribunal del
Protomedicato, en la visita de inspección a la Real Botica
realizada junto a los protomédicos José Suñol, Diego
Gaviria y Francisco Logui, y los examinadores José
Manzano de Carvajal y Juan Bayo; la visita se continuó
el 15-IV, emitiéndose el informe al siguiente día [AGP,
Administración, leg. 429].
18-V. No asiste a la junta de la Academia… celebrada este día,
tampoco lo hará a la siguiente, la del 25-V-1747; sí
participará en la anterior (27-IV) y posterior (26-IX) a este
período [ARANM, L-1].
26-X. Pronuncia, en la Academia…, una conferencia sobre el
‘Método fácil y demostrado de aumentar la solidez y la
fuerza de las maderas’ [ARANM, L-1].
26-X. Firma, ‘en mi estudio’, la dedicatoria a la Academia… del
Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos… traducción al
castellano del tratado del abate Nollet.
13-XI. Presenta, a la Academia..., sub “Joseph Bazquez y Morales”,
la dedicatoria del Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos…
traducción al castellano del tratado del abate Nollet, que
es aprobada [ARANM, L-1].
23-XI. Ausente en la reunión de la Academia… mantenida este
día, tampoco asistirá a las posteriores, celebradas el 27XI y 14-XII-1747; sí participó en la realizada el 20-XI y en
la particular de elección de cargos tenida el 31-XII-1747
[ARANM, L-1].
1748
4-I. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le propone
para el cargo de Director; será electo por la junta general
de 5-I-1748 [ARANF, L-7].
18-I. Participa en el diálogo sostenido en la Academia… tras
la disertación de Antonio María Herrero: ‘Sobre la
electricidad de los cuerpos’ [ARANM, L-1].
11-III. Es nombrado, por el Colegio de Boticarios de Madrid,
junto a Juan Moreno Bote y Gregorio Aedo, miembro de
la comisión que ha de subsanar ‘las antiguas diferencias,
que subsisten entre el Colegio y los mercaderes de la
droguería de la calle de las Postas’ [ARANF, L-7].
27-III. Actúa como tasador, representando a Pedro Sebastián
Malo, en el traspaso por el que éste adquiere la botica de
Lorenzo Alquizalete, ubicada en la madrileña calle del
León [AHPNM, protocolo 16.343].
30-III. Presenta a la Academia… el Elogio histórico del Sr. Dr. Dn. Joseph
Cervi…, primer Presidente perpetuo de la Corporación,
ésta acordó su impresión inmediata [ARANM, L-1].
1-VI. La junta general del Real Colegio de Boticarios le otorga,
junto a Juan Moreno Bote, poder especial para pleitear
contra las boticas regentadas por comunidades religiosas
[ARANF, L-7].
1-VII. Recibe, de la junta del Real Colegio de Boticarios, plenos
poderes para el acondicionamiento de los locales de la
calle Barquillo, donde habrían de quedar instalada la
Corporación, incluyendo un jardín para la enseñanza de
la Botánica [ARANF, L-7].
28-IX. Realiza, ante la Academia…, la presentación de la
conferencia pública correspondiente al segundo semestre:
‘Sobre una sal mineral amarga nuevamente descubierta
en la jurisdicción de la ciudad de Cuenca’ [ARANM, L-1].
5-X. Expone su disertación sobre la ‘Sal nuevamente descubierta
en Cuenca’ en la sesión pública semestral celebrada por
la Academia… [ARANM, L-1].
24-X. Diserta, en la Academia…, sobre una ‘Descripción histórica
de la Becabunga germanorum o Veronica aquatica major’
[ARANM, L-1].
31-X. Lee, en la Academia…, el ‘Examen de las aguas de San
Fernando que hizo de orden de la Corte’ [ARANM, L-1].
1749
2-I. Propuesto por la junta particular, por segundo año
consecutivo, para el cargo de Director del Real Colegio;
será electo por la junta general de 3-I-1749 [ARANF, L-7].
20-III. Interviene, en la Academia…, en el coloquio posterior a una
disertación de Cristóbal Vélez, ‘Sobre la naturaleza del
coral: a qué Reino pertenece, y si en los distintos colores
hay diversidad de virtudes’ [ARANM, L-1].
6-VI. Redacta, junto a Juan Moreno Bote, José Manzano, Juan
Bayo y Cristóbal Vélez, una nueva Tarifa…, aprobada ese
día por el Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF,
L-7].
VI. Su estado de ‘hipocondría’ le hace alejarse de la Corte; se
traslada a unos baños, según comenta José Nebot en carta
a Gregorio Mayáns (25-VI-1749) [fide Peset, 1972].
21-IX. No asiste a las reuniones de la Academia…; su firma, como
Secretario, figura en la junta general reunida el 22-V-1749,
pero falta a partir de la celebrada este día; se incorpora
a los trabajos de la Academia en la junta particular
celebrada el 7-I-1750. [ARANM, L-1].
1750
5-I. Finalizados los dos años como Director del Real Colegio,
pronuncia “una oracion plausible, y llena de ternezas con
que dejo a todos edificados, y dando muestras de el Zelo;
con que havia desempeñado este empleo…” [ARANF,
L-7].
26-II. Participa activamente en el coloquio posterior a la
‘Descripción botánica de la Petasites minor folio
subrotundo’ realizada, por Juan Minuart, en la Academia…
[ARANM, L-1].
5-III. Interpela a Antonio María Herrero tras ocuparse éste, en
la Academia…, de ‘Los fósforos naturales y artificiales’
[ARANM, L-1].
12-III. Interviene, en la Academia…, en el coloquio posterior a
la disertación de Manuel Pueyo ‘Sobre la necesidad de
sangrar en las calenturas agudas’ [ARANM, L-1].
26-XI. Pronuncia, en la Academia…., una conferencia en la que,
continuando la serie de sus memorias sobre la Historia
Natural de España, se ocupa del ‘lápiz plomo de Marbella’
[ARANM, L-1].
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
271
17-XII. La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados
y del Glorioso Evangelista San Lucas le elige como su
hermano mayor para el año 1751 [ARANF, L-3].
1751
4-I. Propuesto para el cargo de fiscal del Real Colegio de Boticarios
por su junta particular; será electo en la junta general de
5-I-1751 [ARANF, L-7].
11-II. Participó en el coloquio mantenido, en la Academia…, tras
la presentación realizada por Juan Minuart ‘Sobre las
plantas llamadas Cacalias y la diferencia entre ellas y las
Petasitides’ [ARANM, L-1].
15-III. Celebra junta particular, en su domicilio, la Congregación
de Nuestra Señora de los Desamparados, se adoptan
actuaciones destinadas a dotar de una vida menos
cortesana a la Congregación; sus proposiciones fueron
aprobadas por la junta general de la Congregación
celebrada el 18-III [ARANF, L-3].
13-V. Activa la discusión posterior a la disertación pronunciada,
en la Academia…, por Cristóbal Vélez, acerca de ‘La
fructificación, de su variedad, estructura y uso de las
partes que la componen’ [ARANM, L-1].
29-V. Desde la junta general celebrada este día dejará de asistir
a las reuniones celebradas por la Academia…. [ARANM,
L-1].
11-VI. Escribe, desde Madrid, a José Carvajal y Lancáster, en
torno a las condiciones higiénicas del Real Sitio de San
Fernando, y el nombramiento de Miguel Barnades como
médico del lugar [AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981].
13-VI. Escribe, desde Madrid, a José Carvajal y Lancáster, sobre
los materiales precisos para realizar observaciones
climatológicas en el Real Sitio de San Fernando [AGS,
Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981-].
15-VI. Informa, desde Madrid, a José de Carvajal, sobre la
conveniencia de fundar un Real Jardín Botánico en la
Corte, y los botánicos que pueden ser útiles para este Real
Establecimiento [AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981].
28-VI. Presenta, ante la junta particular del Real Colegio, el texto
de la primera disertación científica que habría de leerse
en el seno de la Corporación; es aprobada [ARANF, L-7].
1-VII. Pronuncia, ante la junta general del Real Colegio de
Boticarios, su ‘Disertacion médico-botánica sobre la
272
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
verdadera Pulmonaria oficinal’; previamente, la junta
particular de 28-VI-1751, había dado su aprobación al
texto [ARANF, L-7].
7-VIII. Asiste a la junta general celebrada por el Real Colegio de
Boticarios de Madrid, no volverá a anotarse su nombre
hasta la junta particular de 29-XII-1753, en que excusa su
asistencia [ARANF, L-7].
13-VIII. Parte en dirección a Aragón y Cataluña; según el
comentario de una carta remitida por el cirujano Josep
Borges a Josep Salvador (Madrid, 24-VIII-1751) [fide
Camarasa, 1989].
23-VIII. Sale de Barcelona con destino a Francia, según comenta
el cirujano Josep Borges en carta a Josep Salvador [fide
Camarasa, 1989].
1752
[I/XII]. Viaje por Italia, Francia, Inglaterra y Holanda, con objeto
de sentar las bases de una non nata Academia de Ciencias.
16-X. Desde París, escribe al ministro Carvajal anunciando la
remisión de un trabajo sobre el arte de tintorería; en el
escrito afirma haber viajado por Francia, Italia, Flandes
y Holanda, disponiéndose a marchar a Inglaterra [AHN,
Fomento, leg. 3182].
7-XII. Sir William Watson, Henriquez de Castro-Sarmento,
Thomas Birch y Gowin Knight avalan su propuesta como
fellow de la Royal Society [RS, EC/1752/36].
16-XII. Ante la ausencia de su hermano mayor, la Congregación
de Nuestra Señora de los Desamparados se reúne en casa
del director del Real Colegio de Boticarios, Juan Moreno
Bote [ARANF, L-3].
1753
8-III. La Royal Society somete a votación la candidatura de José
Hortega como fellow de la Sociedad; es aceptado [RS,
EC/1752/35].
12-V. Llega a Madrid, tras su largo viaje europeo [LS. 1586],
probablemente vía Valencia, según comenta José Nebot a
Gregorio Mayáns (23-V-1753) [fide Peset, 1972].
8-VIII. La Académie des Sciences de Paris le nombra
‘correspondant’, con el aval de Bernard de Jussieu; el
expediente anota su nombre como ‘Don Vásques y
Morales Hortega’ [ASP, Ortega].
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
273
12-X. Escribe a Carl Linné, desde Madrid; asume el control
científico de las actividades realizadas por Pehr Löfling
en territorio americano [LS. 1654].
6-XI. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; se interesa por su
viaje a Cádiz, le solicita información sobre las plantas
encontradas en el itinerario, le sugiere el estudio de las
producciones marinas y le servirá de contacto con Pedro
Virgili [ARJB, leg. II,1,7,3].
20-XI. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; comenta las riquezas
naturales del Reino de Perú (canela de Quito, calaguala,
estoraque, acíbar, escamonea, etc.) y se interesa por su
opinión sobre las teorías providencialistas defendidas
por el clérigo francés Jacques Bénigne Bossuet [ARJB, leg.
II,1,7,5].
11-XII. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; le remite a José
de Iturriga para solvertar los problemas económicos
derivados de la conservacón de los materiales
coleccionados y le solicita una traducción sobre unas
experiencias realizadas con aguas minerales, publicadas
en sueco [ARJB, leg. II,1,7,9].
23-XII. Aunque no asistiera a la junta particular celebrada
por el Real Colegio de Boticarios, sí se anota en ella la
justificación de su ausencia; participará en la general
celebrada el 2-I-1754 [ARANF, L-7].
1754
8-I. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; reafirma su rol como
el eslabón inmediato con el Secretario de Estado, José de
Carvajal y Lancáster [ARJB, leg. II,2,2,1].
28-I. Asiste a la junta general celebrada por la Congregación de
Nuestra Señora de los Desamparados [ARANF, L-3].
25-III. Escribe a Carl Linné, desde Madrid, dando cuenta de la
fundación del Real Jardín, a la vez que le informa del viaje
de Pehr Löfling a Caracas y le agradece la descripción de
Ortega hispanica L. [LS. 1725].
30-IX. Escribe a Carl Linné, desde Madrid; se arroga el
protagonismo de servir de intermediario entre el
naturalista sueco y Pehr Löfling; solicita le remita la
correspondencia “sub involucro illo transmitantur à Illr.
Mr. Wall Premier Secretaire d’Etat de S.M.C. à Madrid”
[LS. 1800].
274
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
1755
17-X. Ocupa la subdirección de Real Jardín Botánico de Madrid,
recién fundado [AGS, Secretaría y Superintendencia de
Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987-].
13-XII. La junta general del Real Colegio de Boticarios le reafirma
en sus poderes de representación corporativa [ARANF,
L-7].
13-XII. La junta general del Real Colegio de Boticarios le
encomienda la dirección de los trabajos a realizar en el
‘jardín alto’ del Colegio [ARANF, L-7].
1756
19-I. Propuesto para desempeñar el cargo de fiscal en el Real
Colegio de Boticarios; será electo por la junta general
reunida el 22-I-1756 [ARANF, L-7].
18-V. El Colegio… le encarga que forme un plan para organizar
la segunda edición de la Pharmacopoea matritensis…
[ARANF, L-7].
9-VI. Presenta, ante el Colegio…, un plan para la elaboración de la
segunda edición de la Pharmacopoea matritensis…, éste es
aceptado y remitido a José Suñol [ARANF, L-7].
13-XI. En contra de la opinión de José Hortega, la junta particular
del Real Colegio de Boticarios emprende obras de
reforma en la estructura del jardín botánico; inicio de
sus desavenencias públicas con la organización colegial
presidida por Francisco Lerma [ARANF, L-7].
24-XII. Presenta, ante José Suñol, la cuenta de gastos efectuados
en el Real Jardín desde el 25-X-1756 al 24-XII-1756 [AGS,
Secretaría y Superintendencia de Hacienda, leg. 951 –fide
Añón, 1987-].
1757
26-I. Entrega a José Suñol la relación de los gastos habidos en la
fábrica del invernadero del Real Jardín [AGS, Secretaría y
Superintendencia de Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987].
14-II. No asiste a la junta particular del Real Colegio celebrada ese
día, su cargo será asumido por José Zavaleta; en la junta
particular reunida el 5-V-1757 se anota “… el Sr. Fiscal
[Hortega] qe se halla ausente de la Corte…”, no volverá a
asistir a las reuniones del Colegio hasta la propiciada por
él y reunida el 6-VIII-1757 [ARANF, L-7].
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
275
5-V. Ausente de Madrid; Francisco Lerma, director del Real
Colegio, solicita en junta particular los poderes otorgados
a Hortega para mediar en el pleito con las comunidades
religiosas y la firma de los volantes sobre la Renta del
Aguardiente; el Colegio… accede, y se ratifica en junta
general celebrada el 8-V-1757 [ARANF, L-7].
17-V. [sic] Firma, en Madrid, a solicitud del conde de Valparaíso,
un informe sobre la calidad de la quina conservada en
Palacio; el escrito queda dirigido a Julián de Arriaga,
Secretario de Estado de Marina e Indias [AGI, Indiferente,
1552 –fide Murillo Campos, Bermúdez Camacho, 1953;
Crawford, 2009].
6-VIII. Tras su retorno a la Corte, propicia una junta general del
Real Colegio, con una representación del Protomedicato;
en ella mostrará públicamente sus protestas sobre la
actuación de Francisco Lerma como director [ARANF,
L-7].
1758
10-I. Presenta un escrito, ante la junta general del Real Colegio,
en el que reitera sus impugnaciones a la actuación de
Francisco Lerma como director de la Corporación;
pretende sean anulados los acuerdos relativos a la
construcción del laboratorio químico del Real Colegio.
Hortega consigue que se lean sus denuncias, pero la
junta general da por válidas las negociaciones realizadas
por Francisco Lerma. José Hortega se retira del Colegio…
hasta enero de 1759 [ARANF, L-7].
11-II. El Real Colegio determina, en junta general, que José
Zavaleta y Matías Abancens contesten a las demandas
formuladas por José Hortega contra la actuación de
Francisco Lerma; el asunto ocupará, por extenso, la junta
general celebrada el 2-III-1758, a la que no asiste Hortega
[ARANF, L-7].
20-II. Remite a José Suñol las cuentas de gastos realizados en el
Jardín Botánico, solicita nuevas cantidades para reparar
los desperfectos causados al desbordarse el arroyo que
atravesaba el Jardín [AGS, Secretaría y Superintendencia
de Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987-].
4-V. Solicita, del Ayuntamiento de Madrid, las diligencias de
medidas previas al derribo de una casa de su propiedad,
sita en la calle de los Negros; de su nuevo levantamiento se
276
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
ocupará Diego de Villanueva. Las medidas se practicaron
el 7-V. Se conserva el plano de la fachada firmado por
Diego de Villanueva (ARANM, leg. 1, doc. 2).
1759
27-I. Tras un año de inasistencia, este día retoma su participación
en las juntas del Real Colegio de Boticarios, pero no
volverá a asistir a las celebradas a lo largo de todo este
año [ARANF, L-7].
1760
30-I. Ante la crítica situación económica en que se encuentra el Real
Colegio, por no poder satisfacer los créditos derivados de
las actuaciones de Francisco Lerma, mientras éste ocupó
la dirección de la Corporación, la junta general de la
Corporación acuerda la ‘jubilación’ del antiguo director,
que deja así de pertenecer al Real Colegio [ARANF, L-7].
1-II. A solicitud de Juan Herrera, fiscal del Real Colegio, José
Hortega recibe –de nuevo- los poderes de que gozó hasta
la primavera de 1757, “con todas las Preheminencias, y
facultades correspondientes, y la especial de poderlos
substituir en otro alguno de sus individuos, lo que pr
pluralidad de votos quedo otorgado (…) en virtud del
amor, celo y desinteres con qe han servido al Rl. Colegio…”
[ARANF, L-7].
21-II. En junta general del Real Colegio se reconoce la veracidad
de las propuestas formuladas por José Hortega, en torno
a la formulación de la Triaca, en su contencioso con
Francisco Lerma [ARANF, L-7].
11-III. La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados
y del Glorioso Evangelista San Lucas se dota de nuevas
constituciones, limitando formalmente su composición a
los boticarios establecidos en Madrid [ARANF, L-3].
4-VII. El Real Colegio delega en él los trabajos de reimpresión de
la Pharmacopea matritensis…; el acuerdo será refrendado
por la junta general celebrada el 12-VII-1760 [ARANF,
L-7].
11-VII. Otorga testamento ante Antonio Esteban [AHPNM,
protocolo 17.095].
17-X. Las actas del Real Colegio dan cuenta de su estado de
enfermedad: “Estando las Dependencias del Rl. Colegio
sin curso por la quebrantada salud de Jph Hortega
José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado
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Apoderdo de el, se trato del modo mas util para la menor
omision en ellas y se determino qe el Sr. Director y los
Sres Diputados practicasen quantas diligencias fuessen
precisas y de las resultas diessen noticia individual al dho.
Apoderado…” [ARANF, L-7].
17-XI. No asiste a la junta particular del Real Colegio de
Boticarios, “Dn. Jph Hortega no asistio pr estar enfermo”
[ARANF, L-7].
12-XII. Su estado de salud empeora día a día; las actas del Real
Colegio anotan: “… acordaron qe el Sr. Director exerza
por ahora en compañía de los Sres Diputados todas las
facultades, qe el Colegio tiene cedidas a su Apoderado
Dn. Jph Hortega mediante hallarse (hace muchos dias)
enfermo de cuidado a fin qe estos tengan las facultads y
viva voz de tales Apoderads par pagar gratificar gastos
que ocurran y fueren precisos…” [ARANF, L-7].
1761
3-I. Probable fecha del fallecimiento de su mujer, María Aztina.
8-I. Junto a Ignacio Marcoleta, acude a Pedro Sequeiros de los
Cobos para formalizar el inventario de los bienes de su
difunta mujer; éste, que se inicia, no puede completarse
por la enfermedad -y posterior fallecimiento- de José
Hortega [AHPNM, protocolo 19.150].
18-I. Dicta nuevo testamento ante José Payo Sanz [AHPNM,
protocolo 19.150].
21-I. Fallece en Madrid [AHPNM, protocolo 19.150]; en las actas
del Real Colegio de Boticarios se anota: “Havdo. fallecido
Dn. Joseph Hortega nombro el Sr. Director a dos Sres.
Colegs. para que ofrezcan a su familia toda la proteccion
del Colegio” [ARANF, L-7].
23-I. Es enterrado, con hábito de san Francisco, en el camposanto
de san Luis, anejo a la madrileña Iglesia de san Ginés
[AHPNM, protocolo 19.150].
Siglas utilizadas:
ACV. Archivo de la Catedral de Valencia
AGP. Archivo General de Palacio (Madrid)
AGI. Archivo General de Indias (Sevilla)
AGS. Archivo General de Simancas
AHM. Segovia. Archivo Histórico Militar de Segovia
AHN. Archivo Histórico Nacional (Madrid)
278
Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol
AHPNM. Archivo Histórico de Protocolos Notariales de
Madrid
AMAE. Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores
(Madrid)
AMN. Archivo del Museo Naval (Madrid)
AMNCN. Archivo del Museo Nacional de Ciencias
Naturales (Madrid)
AP Añover. Archivo parroquial de Añover del Tajo
ARAH. Archivo de la Real Academia de la Historia
(Madrid)
ARANF. Archivo de la Real Academia Nacional de
Farmacia (Madrid)
ARANM. Archivo de la Real Academia Nacional de
Medicina (Madrid)
ARJB. Archivo del Real Jardín Botánico (Madrid)
ASP. Académie des Sciences de Paris
BAHM.
Biblioteca-Archivo
Hispano-Mayansiano
[Colegio del Patriarca] (Valencia)
BCC. Biblioteca del Colegio de Corpus Christi [Colegio
del Patriarca] (Valencia)
BH. Biblioteca Histórica ‘Marqués de Valdecilla’ de la
Universidad Complutense (Madrid)
BPRM. Biblioteca del Palacio Real de Madrid
BPSC. Biblioteca del Palacio de Santa Cruz (Valladolid)
LS. The Linnean Society (Londres)
RS. Royal Society (Londres)
Este libro se acabó de imprimir del 22 de octubre de 2015;
273 años después de que José Hortega ocupara plaza de Boticario mayor de los
Reales Ejércitos
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