EN PORTADA LA CIENCIA DEL RUIDO io! nc e l i ¡S A bocinazos ¿Crees que los demás te oirán mejor si hablas a gritos? Te equivocas: los sonidos que superan los 120 decibeles lo único que hacen es dañar los tímpanos. Gritos, ladridos, portazos, alarmas… Podemos cerrar los ojos y taparnos la nariz, pero no desactivar nuestros oídos. Ahora que vivimos en una ensordecedora jungla de cemento, el ruido puede ponernos los nervios de punta. 14 E fotos: other images, EFE Y ARCHIvO EDITORIAL TELEVISA l profesor llama la atención al más desordenado de la clase, pero el joven no está para sermones, así que aprieta el botón “off” de su dispositivo con forma de reloj que lleva en su muñeca. Automáticamente, sus oídos se desconectan y dejan de escuchar lo que le están diciendo. Estamos en el año 2035 y Hugo tiene 12 años. Gracias a unos dispositivos de conexión inalámbrica (wi-fi) que se colocan en cada oído puede conectarse a una radio ubicada a 100 metros para sintonizar su emisora favorita. También puede enterarse de lo que la niña que le gusta susurra de él a su mejor amiga o aislarse por completo de la música que escucha su hermana mayor. Qué maravilla, ¿verdad? Si existieran los ciberaudífonos no solo nos harían pasar buenos ratos, también nos permitirían protegernos de la contaminación acústica, esto es, de la brutal cantidad de ruidos molestos como los del tráfico o los de los taladros usados en la construcción que, literalmente, nos “taladran la oreja”. El mundo urbano actual es tan escandaloso que llega a ser perjudicial para los delicados componentes del oído humano. De hecho, los médicos alertan sobre los daños auditivos que están sufriendo muchos jóvenes por estar expuestos a sonidos fuertes de manera prolongada, como escuchar a todo volumen el iPod o la música estruendosa en conciertos y discotecas. Y es que cuando huele a huevo podrido, nos tapamos la nariz; si no queremos ver escenas de terror en las películas, cerramos los ojos. Así de fácil. Pero, ante un ruido ensordecedor, ¿qué podemos hacer? Taparnos las orejas con las manos no es suficiente. ¡gritarÉ hasta que se callen! el rn To cía r a in ist Ga r rC Po ido! u r é u Q ¡ a de en cerc viv Los que uerto sufren p o r un ae e los al ruido d por el al despegar y lla e s u avione r. Pero esta h a o iz ll aterr s un murmu l e sonora paramos con e s m lo o c n e la si e hac u q lo . a s escánd supersónico s e n avio 15 EN PORTADA LA CIENCIA DEL RUIDO Un órgano muy trabajador PABELLÓN AUDITIVO (OREJA) MARTILLO El órgano del oído por el que escuchamos, es de lo más complejo y está en servicio las 24 horas del día. Los sonidos entran por la oreja y viajan a través del conducto auditivo externo hasta el tímpano. Su membrana empieza a temblar y transmite las vibraciones por una cadena de tres huesecillos –martillo, yunque y estribo– al caracol. Relleno de un fluido, este órgano espiral transforma las ondas en señales eléctricas que viajan hasta el cerebro. El laberinto nos permite mantener el equilibrio. LABERINTO CANAL AUDITIVO EXTERNO ESTRIBO CARACOL YUNQUE TROMPA DE EUSTAQUIO OÍDO EXTERNO OÍDO MEDIO OÍDO INTERNO 65 LÍMITE ACEPTADO POR LA OMS DURANTE EL DÍA LAVADORA CONVERSACIÓN EN VOZ BAJA alada Decibeles en edesmcedida de la 16 COMPUTADOR 60 30 20 PISADA FUERTE 5 INTENSIDAD DEL SONIDO unidad es su El decibel (dB) es la nido. Cuanto mayor so da intensidad de un bi su na ¡U o. es el sonid valor, más potente o por id ib rc pe es dB lo 10 de volumen de so plicara! o si el sonido se du nido m co do oí o nuestr so de el ostramos el niv s que En esta gráfica te m ite lím los y s os aparato que producen algun n Mundial de la Salud ció marca la Organiza . (OMS) Las ondas sonoras viajan por el aire a toda velocidad: van a 331 metros por segundo y como también se transmiten por el medio sólido, usan los huesos del cráneo para hacerse oír. Los apaches ya entendían de esto. Por eso pegaban su oreja en el suelo, para escuchar el galope de los caballos del enemigo al aproximarse. Aunque no estudiaron física, sabían que el sonido viaja más rápidamente por el suelo (más de 4.000 metros por segundo) que por el aire. Quizá desconocían que las ondas también se transmiten mejor por el agua (1.493 metros por segundo) que por el aire. Conclusión: el sonido se propaga mejor cuando más sólido es el medio por donde lo hacen. Así que, si a ti te molesta hasta el zumbido de un mosquito, tienes dos opciones: esperar a comprar los neuroaudífonos o escaparte a la Luna. Ahí, al no haber aire, ni cuenta te darás si te cae un meteorito a un lado. COHETE ESPACIAL 55 LÍMITE ACEPTADO POR LA OMS DURANTE LA NOCHE BOMBA AVIÓN CONCIERTO DE ROCK TALADRO ELÉCTRICO 140 MOTO UMBRAL DEL DOLOR TREN 185 160 130 120 110 90 70 100 omos s s o d To onido. s e d ente u f a n oso, u d i u r y mu un Si eres n e s e t vier de te con o c o f able tica. s indese ú c a ción a n i m a cont ASPIRADORA 17 LA CIENCIA DEL RUIDO s a r u t a i r C s a d u g a muy a l l i l o 2P 1 Elefante Sus orejas de D les bastan. Est umbo no o usan, además s elefantes , sus patas para oír los m que otros e ensajes lefantes les transmiten pa la tierra com teando o tamtan, o sea si fuera un un tambor africano de gr an se golpea con tamaño que la veces, el men s manos. A sajero está a ¡30 km de d istancia! les, sí, jas especia r los e r o s a n u escucha s tienen Las polilla a! Las utilizan para u peor ig s r ¡en la bar sónicos que emite lucinantes a a r gritos ult l murciélago, y hacer engullidas. e r enemigo, éreas para evitar se a maniobras , oigo e t ? No ices d é ¿qu Los hombres que taladran el suelo con los ensordecedores martillos neumáticos, los que trabajan a diario con máquinas ruidosas, deben taparse las orejas con tapones y cascos especiales para no quedar sordos. to? s, u l bso ue e ete a q io c o l oh n c r e l e b si un ¿El res sa irte a Allí el ie ub acio. u s a. q e g p u a Si s q r al es prop á r d ja se a i ten o y v ido n son R R R ¡¡T ! ! R RR 18 Haz la prueba. Aunque sumergido casi no podrás articular palabra, comprobarás que el sonido se transmite espectacularmente en el agua. Por eso, los delfines, por ejemplo, se comunican entre sí en el fondo del mar. Ilustración: ÓSCAR MEDINA 3 Búho 4 Araña BLA, BLA A , BL BLA Este cazador noctur no posee unos supe roídos que le permiten sabe r en plena oscuridad dónde está exactamente la presa. Para ello, ba sta que esta haga el más míni una hoja seca e inclu mo ruidito, como pisar so respirar. Oye a través de sus patas, que las usa a modo de teléfono cuando está en un rincón de su tela esperando a que caiga una víctima. Cuando esto ocurre, las vibraciones al intentar escapar viajan por los hilos hasta sus pies. Bli, A todo volumen bli, bli El concepto de atronador, ruidoso, estruendoso es relativo. ¿Verdad que cuando vas a un concierto y salen al escenario tus ídolos, no te molesta para nada el ensordecedor griterío de todos los asistentes? Al contrario, gritas con ellos. 19