INSTITUTO NACIONAL DE SILICOSIS MEMORIA Valoración del ruido en canteras, a través del Estudio Epidemiológico de un colectivo de 200 Trabajadores. Convenio de colaboración entre el Ministerio de Economía y el Insalud-Instituto Nacional de Silicosis. (21-5-2001) INSTITUTO NACIONAL DE SILICOSIS NOVIEMBRE 2001 ÍNDICE 1. INTRODUCCIÓN 1.1. - Antecedentes. 1.2. – Objetivo del Proyecto. 1.3. - Descripción de los puestos de trabajo. 2. CONCEPTOS DEL TRAUMATISMO SONORO ENFERMEDADES PRODUCIDAS POR EL RUIDO. CRÓNICO. 2.1. - Generalidades y conceptos. 2.2. - Factores de riesgo 2.3. - Etiopatogenia. Fases del trauma acústico. 2.4. - Fisiopatología. 2.5. - Anatomía patológica. 2.6. - Clínica. 3. MATERIAL Y MÉTODOS. 3.1. - Muestra estudio. 3.2. - Medición del ruido. 3.3. - Exploración funcional de la audición. 4. RESULTADOS OBTENIDOS. 4.1. – Estudio estadístico descriptivo. 4.1.1.- Mediciones de ruido 4.1.2.- Descripción de las variables cualitativas y cuantitativas estudiadas 4.2. – Estudio estadístico inferencial. 4.3. – Resultados comentados de los gráficos de exploración audiométrica y otoemisiones -2- 5. MEDIDAS DE PREVENCIÓN: 5.1.- Medidas de prevención técnica. 5.2.- Control médico. 5.3.- Implantación de protectores auditivos. 5.4.- Formación e información. 6. ESTUDIO PUNTUAL DEL POLVO EN ESTAS CANTERAS 7. CONCLUSIONES. -3- 1.-INTRODUCCIÓN. 1.1.-Antecedentes: La importancia de la minería a cielo abierto en nuestro país es un hecho evidente. Contadas las canteras de áridos y rocas ornamentales, puede decirse que esta industria extractiva supera, actualmente, en mano de obra, directa e indirecta, así como en facturación, a la minería del carbón de los mejores tiempos (en 1999 existían 3.400 explotaciones a cielo abierto y 22.000 trabajadores). Si bien los riesgos de accidentalidad en las canteras son de naturaleza distinta a los que se presentan en la minería de interior y, en general, inferiores si los comparamos con los derivados de la extracción subterránea del carbón, existen otros, tales como los que se derivan de la exposición al ruido, que suponen un importante problema de salud laboral. El control del ruido como riesgo, en general, se puede limitar, en el mejor de los casos, a medir su intensidad en los distintos puestos de trabajo, y en algunos casos, a los controles audiológicos efectuado a los trabajadores dentro de los reconocimientos médicos obligatorios. En este sentido, tampoco debe olvidarse que el sector de las canteras, en general, está constituido por un gran número de pequeñas explotaciones, superior a 3.000, la mayoría con un número muy escaso de trabajadores, del orden de 7 por explotación, y una escasa estructura empresarial. Del contacto directo que el Instituto Nacional de Silicosis tiene con el Sector, a través del estudio y análisis de los ambientes pulvígenos de las canteras, se ha llegado a la conclusión que el ruido al que se encuentran sometidos algunos trabajadores, constituye un importante riesgo que es necesario valorar con precisión tanto desde el punto de vista técnico como médico. En el aspecto técnico el control del ruido se puede definir claramente basándose tanto en medidas individuales realizadas mediante dosímetros que porten los trabajadores, utilizando sonómetros para valorar intensidades y frecuencias del ruido. Determinar como afecta el ruido medido a la salud del trabajador, constituye un tema más complejo, siendo el motivo por el que el Departamento Técnico del Instituto Nacional de Silicosis requirió la colaboración de los especialistas del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Central de Asturias, quienes, a la vista de las circunstancias, planificaron los reconocimientos médicos a los que, en los propios lugares de trabajo y a lo largo de la jornada laboral, debían someterse los trabajadores expuestos al ruido. -4- A fin de conocer la influencia que el nivel de polvo tiene como factor añadido a la existencia de ruido, dentro de una concepción integral de la salud laboral, se tuvieron también en cuenta los índices pulvígenos existente en cada caso. Es así como surge este proyecto técnico-médico cuyos objetivos y demás fases se exponen a continuación. 1.2. –Objetivo del proyecto: El objetivo del proyecto es estudiar desde el punto de vista médico, mediante reconocimientos audiológicos “ in situ ”, la repercusión del ruido existente en los diferentes puestos de trabajo, sobre la audición de un grupo representativo de trabajadores de canteras. Para cumplir este objetivo a la vista de los niveles sonoros previamente medidos, se diseñó un protocolo de pruebas médicas destinadas a la detección y confirmación del probable daño auditivo. Dicho Protocolo consistió en la realización de otoscopia, audiometrías, otoemisiones acústicas e impedanciometrías al comienzo y al final de la jornada habitual de trabajo. El hecho diferencial de este proyecto ha consistido, precisamente en que este tipo de reconocimientos médicos, permite una mejor valoración de la influencia del ruido en el medio laboral, así como una detección precoz de la hipoacusia inducida por traumatismo sonoro crónico. 1.3- Descripción de los puestos de trabajo: Los trabajadores objeto del estudio se han agrupado en 20 puestos de trabajo representativos de todos los trabajos que se realizan en las empresas estudiadas. A continuación se describen cada una de estas categorías junto con los sistemas de explotación empleados. En las empresas de áridos para la construcción, de caliza y dolomía para la industria siderúrgica y de caliza para la fabricación de cemento. El método de explotación es similar en todas ellas y consiste en el arranque de la roca con explosivos, la carga y transporte del material arrancado hasta la planta de molienda y clasificación, en donde la roca es calibrada en sucesivas etapas (molienda 1ª y 2ª) y posteriormente clasificada a tamaños comerciales. El método de explotación en las canteras de granito, consiste en la extracción de grandes bloques cúbicos sin dañar el macizo rocoso que los rodea. Estos bloques son posteriormente sometidos, en sucesivas etapas, a subdivisiones hasta alcanzar unas dimensiones fácilmente manipulables (bloque entre 6 y 28 toneladas) y que pueden usarse en las industrias de -5- transformación. La primera etapa consiste en la separación de la masa rocosa de un gran bloque cuyo volumen puede oscilar entre 50 y 80 m3. En el caso de la empresa estudiada, para la operación de arranque de este bloque primario han utilizado la lanza térmica, que más adelante describiremos. Una vez aislado el bloque de la masa rocosa, la rotura o separación del bloque en su base puede realizarse, bien perforando horizontalmente un barreno secante o aprovechando alguna diaclasa natural. Una vez despegado de la gran masa granítica este bloque primario, comienza lo que se puede llamar segunda etapa del arranque, que consiste en la subdivisión, in situ, en bloques de menor tamaño, mediante la perforación de una hilera de barrenos paralelos. La rotura entre barrenos se realiza mediante cordón detonante. La tercera etapa consiste en la subdivisión del anterior bloque en otros de medidas ya comerciales. Como en el caso anterior la subdivisión de los bloques se realiza mediante taladros verticales y paralelos. Por último la operación de escuadrado de bloques consiste en el perfilado de sus caras, para ello se utiliza un banqueador con 4 martillos, adosado al brazo móvil de una pala retro, que realiza perforaciones verticales. La rotura del trozo de roca sobrante se realiza mediante cuñas metálicas introducidas en los taladros y apretadas con golpes de maza. La nave de tratamiento de pizarra, es el lugar en donde los trozos de pizarra extraídos en la cantera (rachones) son procesados en sucesivas etapas hasta conseguir un tamaño, en cuanto a pesos y dimensiones comerciales, Para ello los camiones descargan la roca en una zona de la nave. El rachón cuyo grosor es superior al radio del disco cortador es troceado en el sentido de la estratificación. -6- Una vez conseguida la anchura apropiada, el rachón es colocado sobre una mesa en donde una sierra de disco lo corta en tamaños fácilmente manipulables. Una vez troceado el rachón, pasa a la sección de labrado y corte, en donde los trozos serrados son lajados a espesores variables entre 3 y 6 mm, y posteriormente cortados mediante cizalla a formas y tamaños comerciales. Posteriormente las pizarras son empaquetadas en palets. • Los puestos de trabajo de las empresas de áridos y de caliza y dolomía para siderurgia y caliza para la fabricación de cementos, son las siguientes: • Barrenista de carro perforador Los operarios con esta categoría son los encargados de la perforación de la roca. Utilizan un carro perforador rotopercusor con martillo en fondo. • Palista de Frente Los trabajadores de este puesto de trabajo son los encargados de cargar sobre camiones los materiales arrancados por las voladuras. Utilizan diversos modelos de palas cargadoras, sobre orugas o ruedas. • Conductor de Dumper La roca cargada en los frentes es transportada hasta la planta de molienda y clasificación mediante dumpers de gran tonelaje, entre 35 y 75 t de capacidad. • Operario de molienda 1ª La molienda 1ª consiste en la primera rotura de la roca mediante machacadoras de mandíbulas o con molinos de impacto. -7- Un operario controla esta operación, normalmente desde la cabina de mandos. • Operario de molienda 2ª El producto de la molienda primaria sufre un cribado. El rechazo de este cribado pasa a la molienda 2ª realizada con molinos de impacto de los cuales se obtiene ya el producto final. Un operario controla el funcionamiento de estos molinos desde una cabina de mandos. • Operario de limpieza. cribas y cintas Dentro de esta categoría se encuentra el personal que vigila el funcionamiento del circuito de cribado, compuesto por cintas y cribas. Normalmente controla el funcionamiento y limpia la zona. • Palista de Acopios: A esta categoría corresponden los operarios que mediante una pala cargadora de rueda de goma, cargan sobre el camión o transvasan sobre pila los productos finales ya molidos y clasificados. • Operario de tolvas y camión de acopios: Esta categoría corresponde a los trabajadores que con un camión sacan de las tolvas los materiales ya clasificados para almacenarlos en las diferentes pilas de estocaje. • Mecánicos de mantenimiento Dentro de esta categoría se encuadra a todo el personal que realiza tareas de mantenimiento eléctrico o mecánico de la instalación de molienda y clasificación, así como las reparaciones de palas, dumpers y vulcanizado de cintas transportadoras. • Administración y dirección En estas categorías se ha incluido a todos los administrativos, personal de básculas y laboratorio, así como a los directores técnicos de las explotaciones. • Encargados y jefes de equipo El personal con esta categoría, es el que controla los trabajos que se realizan en los frentes, en las plantas y en la nave de tratamiento. -8- • Los puestos de trabajo de las empresas de la nave de pizarra son las siguientes: • Abridor de rachones (Rachoneros) Son los encargados de cortar los grandes bloques, que llegan de la cantera de pizarra a la nave de tratamiento, para adecuarlos en grosor a las sierras. Para realizar su trabajo utilizan un martillo rompedor neumático, con un útil de golpeo en forma de espátula. • Operario de puente grúa Esta categoría corresponde al personal que maneja el puente grúa que alimenta de rachones las sierras y mueve los grandes bloques de pizarra. • Serrador Son los operarios que trocean, mediante una sierra de puente con discos de widia, los grandes bloques de pizarra (rachones). • Labrador Este personal laja o calibra los bloques cúbicos de pizarra a hojas de 3 a 5 mm de espesor. Para ello utiliza un cincel de boca ancha y un martillo. • Cortador de Tijera Las hojas de pizarra lajadas, pasan a los cortadores, los cuales mediante tijera de pedal cizallan las aristas o cantos de las caras. • Cortadora Automática: La labor de cortado de las lajas de pizarra, puede ser realizada con una máquina automática. El operario controla el funcionamiento de esta máquina. -9- 0 • Embalador El personal encargado de colocar en palets de madera las piezas de pizarra terminadas, son los embaladores. • En el caso de la explotación de bloques de granito los puestos de trabajo de las empresas son las siguientes: • Operario de lanza térmica: La lanza térmica es un sistema de corte de la roca basado en la propiedad que tienen algunas rocas de fracturarse en escamas en presencia de una fuente térmica. Consiste en una barra metálica, hueca, de unos 12 m de longitud por cuyo interior discurren dos canalizaciones, para el gasóleo y aire comprimido, que desembocan en una cámara en donde se produce la combustión. Las ondas de choque generadas salen al exterior a través de una tobera a velocidades supersónicas, produciéndose la fracturación del granito en forma de escamas. Un operario maneja la lanza, realizando pasadas sobre la masa rocosa, creando un surco de unos 70 mm de grosor. • Barrenista de corte y escuadrado Los operarios con esta categoría, son los encargados de realizar las sucesivas subdivisiones del bloque cortado con la lanza térmica. Utiliza martillos perforadores roto-percusores sujetos a un blanqueador. Puede utilizar banqueadores hasta con 4 martillos perforando a la vez. 2.- CONCEPTOS DEL TRAUMATISMO SONORO CRÓNICO. ENFERMEDADES PRODUCIDAS POR EL RUIDO. 2.1. Generalidades y conceptos: El oído es un órgano sensorial alojado en el hueso temporal. Desde el punto de vista anatómico y funcional, dividimos el oído en tres partes: oído externo, medio e interno. - 10 - A. Oído externo: El oído externo se divide, fundamentalmente, en dos partes: la porción exterior llamada pabellón u oreja y el llamado conducto auditivo externo oido interno oido externo oido medio El pabellón, con un perfil receptor, es la parte visible del sistema auditivo y ofrece unas características morfológicas adaptadas a su función como primera fase del proceso de captación sonora. La morfología de la oreja en forma de pantalla captadora, hace que las ondas sonoras se recojan conduciéndolas hacia el canal auditivo externo (CAE) que, con una longitud de unos 3 cm aproximadamente, termina en la membrana timpánica que está considerada como la frontera que divide el oído externo del oído medio. B. Oído medio: El oído medio es una cavidad tallada dentro del hueso temporal, llamada caja del tímpano. Está limitado en su parte más externa por la membrana timpánica y en su parte más interna por la pared ósea del oído interno. En el interior del oído medio se encuentra la cadena de huesecillos (martillo, yunque y estribo), que tiene por función unir la membrana del tímpano con el oído interno a través de la ventana oval ubicada en la pared ósea del mismo. En el oído medio se producen dos funciones fundamentales. La primera de transmisión del sonido hasta el oído interno. La segunda, de transformación del sonido - 11 - 2 amplificándolo o amortiguándolo. La transmisión del sonido se efectúa a partir del movimiento de la membrana timpánica a través de la cadena de huesecillos hasta la ventana oval donde comienza el oído interno. El movimiento de la cadena de huesecillos produce que la presión comunicada al martillo por la membrana del tímpano, se vea aumentada en razón de la menor o mayor longitud del estribo. Otro mecanismo transformador del sonido en el oído medio lo constituye el efecto multiplicador que supone la diferencia de superficies entre la membrana timpánica y la base del estribo, ésta mucho menor que aquella. Finalmente, la función del oído medio no es siempre amplificadora. Ante la recepción de fuertes sonidos los músculos de inserción de la cadena de huesecillos actúan en el sentido de limitar la movilidad de estos, lo que constituye una forma de amortiguación. C. Oído interno: En el oído interno radican importantes funciones: es el mecanismo final de la audición y el receptor del equilibrio. El oído interno por su complejidad recibe usualmente la denominación de laberinto Tres partes constituyen el oído interno: la cóclea, el vestíbulo y los canales semicirculares. La cóclea tiene forma de caracol soportado por una estructura ósea (laberinto óseo), también denominado laberinto anterior. En el conducto interior se distinguen dos canales pegados a la pared superior e inferior del conducto que se denominan rampa vestibular y rampa timpánica. Entre ambas rampas se encuentra el órgano de Corti con las células ciliadas externas e internas, que es el órgano receptor de la audición. El sentido del equilibrio se asienta en el sistema vestibular (laberinto posterior), próximo a la cóclea. Existen tres canales semicirculares (superior, posterior y lateral) que a partir del fluido que lo compone, transmite a un sistema de redes nerviosas conectadas con el cerebro, la información necesaria sobre la posición del cuerpo respecto al espacio. El funcionamiento del oído interno como receptor del sonido, queda resumido esquemáticamente de la forma siguiente: a través de la ventana oval y debido a los movimientos del estribo, se accionan los fluidos del oído interno (perilinfa y endolinfa) Este a su vez, mediante las membranas basilar y tectoria del órgano de Corti lo transmite - 12 - a las células ciliares, que están conectadas con células nerviosas, las que generando impulsos electroquímicos determinados según el sonido que ha producido la perturbación, lo conducen al cerebro a través del nervio auditivo. Este proceso permite la conversión de la onda sonora en mensaje neural que será transmitido por las fibras nerviosas de la vía auditiva hasta la corteza cerebral. El sistema auditivo realiza un primer análisis de la frecuencia (desde 20-2000 HZ) y de la intensidad (hasta 130 dB) del sonido, para lo cual dispone de varios sistemas mecanoeléctricos. La sensibilización a distintas frecuencias del sonido se localiza en diferentes puntos de la cóclea. Las bajas frecuencias (125-2000 HZ) se localizan en el ápex coclear, en la parte más interior de la cóclea, mientras que las altas frecuencias (3000-2000 HZ), se captan en la zona exterior de la misma, en la base del caracol tal como se muestra en la figura 2.2. Factores de riesgo: El riesgo fundamental que genera la exposición prolongada a altos niveles de presión sonora, es el aumento del umbral de audición. Existen cuatro factores de primer orden que determinan el riesgo de pérdida auditiva: A. Nivel de ruido: Es un factor primordial ya que, si bien no hay una correlación exacta entre el nivel de ruido (objetivo de este estudio) y daño auditivo, sí es evidente y conocida la relación entre la presión sonora y daño auditivo: a mayor ruido, mayor daño. - 13 - 4 B. Tipo de ruido: Hay que considerar, en primer lugar, su espectro de frecuencias, ya que el oído no percibe igual las bajas y altas frecuencias que las medias. Por otra parte, dependiendo de su variabilidad en el tiempo, el ruido se puede clasificar en: continuo o estable, oscila poco en torno a un valor medio; en fluctuante o intermitente, presenta una oscilación de valores mayor que en el caso anterior y en ruido de impacto que es un ruido de corta duración y elevado nivel sonoro. En general, se acepta que el ruido continuo se tolera mejor que el discontinuo. Los ruidos de banda estrecha son más nocivos que los de banda de frecuencias anchas, dado que los primeros concentran casi toda la energía en una octava. Las frecuencias más lesivas son las situadas entre los 2.000 y los 3.000 Hz. Ello se debe no sólo a que en este rango se sitúan las frecuencias de resonancia del oído, sino también a que la sensibilidad de la cóclea es distinta para las diferentes frecuencias, siendo máxima para las comprendidas en ese rango. Los sonidos de frecuencias más bajas de 2.000 Hz o más altas de 3.000 Hz, acarrean menor deterioro. Los ruidos no son tonos puros sino sonidos compuestos por distintas frecuencias, por ello cuando hablamos de la frecuencia de un ruido traumatizante, debemos considerar la frecuencia base que es la más importante y que generalmente coincide con la frecuencia fundamental. Los ruidos de impacto con niveles superiores a 140 dB, pueden generar un trauma acústico de forma inmediata. C. Tiempo de exposición: La cantidad total de energía sonora recibida por el trabajador en el oído no depende solo del nivel sonoro, sino también del tiempo que el operario esté expuesto al ruido. A mayor tiempo de exposición más ruido recibido y, por tanto, mayor trauma acústico. D. Edad laboral: Es el tiempo en años que el trabajador lleva actuando en un puesto de trabajo con un nivel de ruido determinado. E. Edad: La presbiacusia es un factor a tener en cuenta a la hora de valorar una deficiencia auditiva de origen laboral sobre todo en personas de cierta edad. No es la exposición - 14 - laboral la única causa del desplazamiento del umbral auditivo, se sabe que la agudeza auditiva disminuye generalmente con la edad. F. Factores genéticos heredados. Sensibilidad constitucional familiar al ruido. G. Otopatías previas. Un oído patológico previamente a la sobreestimulación acústica, reacciona de forma diferente a como lo hace un oído normal. H. Sexo. Parece influir sobre la susceptibilidad al ruido. Las mujeres conservan mejor audición que los hombres. I. Características del entorno. Un sonido traumatizante por sí mismo, es decir, con las características de intensidad antes mencionada, puede no ser lesivo si entre él y el oído del trabajador expuesto se interponen una serie de sistemas –esencialmente mecánicos- que lo atenúen (pantallas acústicas, sistemas de absorción del sonido, cascos protectores, etc.) Por el contrario, los efectos nocivos del ruido se potencian en recintos de paredes altamente reflectantes y que por tanto absorben poca energía sonora. 2.3.-Etiopatogenia. Fases del trauma acústico crónico: Los trastornos producidos por el ruido en el organismo humano se dividen en dos grandes grupos: A. Lesiones otológicas. Conllevan como secuela común la pérdida de audición; tienen extraordinario interés, como veremos en el estudio realizado, en la patología laboral. Las lesiones producidas en el oído como consecuencia de la exposición única o repetida a una presión sonora elevada y/o de duración excesiva, se conocen como traumatismo acústico cuando las lesiones son irreversibles o, como fatiga auditiva, cuando las lesiones son reversibles. - 15 - 6 B. Alteraciones no otológicas. Son enfermedades originadas por el ruido pero que afectan a aparatos o sistemas alejados del oído. Tienen interés en medicina general y en patología laboral. También deben ser conocidas por el otorrinolaringólogo, pues el agente traumatizante penetra por el aparato auditivo. Es importante considerar que el ruido empieza a ser traumatizante para el oído a partir de 80 dB de intensidad y que ante un mismo ruido, cuanto más tiempo de exposición, tanta mayor lesión se produce. Para comprender las lesiones otológicas inducidas por el ruido, deben tenerse en cuenta cuatro conceptos básicos: 1. Umbral auditivo. Es la mínima energía sonora que puede percibir el oído medio humano y que se sitúa en torno a los 20 µPa. Este umbral es variable de un individuo a otro e incluso en los dos oídos de un mismo individuo. 2. - Adaptación auditiva o fatiga preestimulatoria. Es una característica fisiológica del oído que consiste en la elevación subjetiva del umbral de audición durante la estimulación mantenida con ruido. Esta elevación del umbral regresa a los límites previos a la estimulación cuando cesa el sonido que la produjo. 3. - Fatiga auditiva postestimulatoria Es la consecuencia patológica de la sobreestimulación sonora. Consiste en la elevación subjetiva y objetiva del umbral de audición que ocurre cuando un individuo es sometido a un ruido intenso. Persiste incluso cuando cesa el estímulo sonoro que la originó. Transcurrido un tiempo, minutos u horas, el umbral de audición vuelve a los valores previos a la estimulación sonora. Este fenómeno es el reflejo de un daño reversible de las células neurosensoriales auditivas (células ciliadas externas del órgano de Corti) - 16 - 4. Trauma acústico. Ocurre cuando se perpetúan en la cóclea las lesiones histopatológicas por el ruido. La energía sonora que incide sobre el oído es de tal magnitud y ha actuado durante tanto tiempo que los daños ocasionados en las células ciliadas del órgano de Corti son irreparables, lo que se expresa clínicamente como hipoacusia irreversible. 2.4. -Fisiopatología: El sonido es necesario para la correcta maduración de la vía auditiva, pero la estimulación mantenida del oído humano mediante sonidos con las características no pertinentes de intensidad, espectro y tiempo previamente citadas, ocasiona daños en el órgano periférico de la audición. El oído interno no es capaz de admitir esta sobrecarga de energía sonora pues las células ciliadas ven sobrepasadas su actividad intrínseca. El sobretrabajo celular implica un incremento del metabolismo oxidativo con aumento del consumo de oxígeno y producción de radicales libres tóxicos. Se han observado también alteraciones vasculares por el ruido en los vasos cocleares, relacionadas con el tiempo de exposición al mismo. Así en exposiciones relativamente cortas menores de dos horas- existe una dilatación de los vasos espirales y, por encima de ese límite horario, se produciría una vasoconstricción. - 17 - 8 2.5.-Anatomía patológica: Un ruido intenso > 85 dB, aplicado con insistencia sobre el oído, somete a las células ciliadas externas (CCE) y a las internas (CCI), a un trabajo excesivo, ocasionando una situación de fatiga auditiva por alteraciones de estirpe bioquímico-enzimática en el organismo celular. De la citada fatiga sólo se recuperan las células tras un reposo por cese del ruido. La sumación de exposiciones a este tipo de situación traumatizante hace que, ocasionalmente, alguna CCE o CCI no resista la sobrecarga, sufra daño irreversible, muera y desaparezca. Las CCI son más resistentes a la exposición sonora que las CCE. En las CCE las lesiones más tempranas aparecen en los estereocilios. Las lesiones anatomopatológicas producidas por el ruido, siguen la siguiente progresión: células ciliadas y resto de las estructuras están dentro de la normalidad, comienza a aparecer tumefacción, picnosis y desplazamientos de los núcleos de las CCE así como vacuolización en las células de sostén, considerándose estas lesiones reversibles propias de la fatiga auditiva. Seguidamente aumenta tanto el volumen de las células de sostén que comprimen a las CCE, evulsionando del órgano de Corti y posteriormente las CCI, desapareciendo finalmente el mismo siendo ya irreversible. Esta lesión ocurre inicialmente en una zona concreta de la espira basal de la cóclea, encargada de recibir la energía sonora de la frecuencia de 4.000 Hz. Si la exposición al ruido persiste, la destrucción progresará en ambas direcciones, apical y basal, ampliándose la zona de destrucción. Esto se manifiesta clínicamente como hipoacusia progresiva hacia las altas, medias y bajas frecuencias DAÑO INDUCIDO POR EL RUÍ RUÍDO EN EL OÍ OÍDO CILIOS NORMALES CILIOS DAÑADOS DETALLE DE CILIO MUERTO - 18 - 2.6. - Clínica: La exposición crónica al ruido produce síntomas psíquicos y sistémicos como se muestra en la tabla 1, y síntomas otológicos. SISTEMA AFECTADO EFECTO Sistema nervioso central. Hiperreflexia y alteraciones en el EEG Aparato respiratorio. Alteración del ritmo. Aparato cardiovascular. Alteraciones de la frecuencia cardiaca, e hipertensión arterial. Aparato digestivo. Alteraciones de la secreción gastrointestinal. Sistema endocrino. Aumento del cortisol y otros efectos hormonales. Sistema nervioso autónomo. Dilatación pupilar. Órgano de la visión. Estrechamiento del campo visual y problemas de acomodación. Aparato vestibular. Vértigo y nistagmus. Tabla 1. Efectos del ruido a nivel sistémico. Respecto a los síntomas otológicos, en los primeros estadios de exposición al ruido el trabajador nota zumbido de oídos (acúfenos) y sensación de ensordecimiento, estas molestias desaparecen durante el descanso y reaparecen en la siguiente jornada laboral. Posteriormente estos síntomas se hacen ya definitivos y no desaparecen ni tras periodos prolongados de descanso. Para algunos autores la hipoacusia inducida por ruido es bilateral, sin embargo otros han encontrado peores umbrales auditivos en el oído izquierdo de personas expuestas a ruido (Pirila) A medida que la hipoacusia progresa y va afectando las frecuencias conversacionales (1252.000 Hz), se deteriora la discriminación verbal. El principal factor pronóstico de afectación de la discriminación verbal, más que el nivel sonoro a que está sometido, es la presencia del acúfeno. La sensación de ensordecimiento se va transformando en una pérdida de audición progresiva de instauración lenta y progresiva a lo largo de meses o años, siguiendo una norma - 19 - 0 típica bien descrita por diversos autores. La hipoacusia clínica se traduce en un descenso de la audición en la audiometría de tonos puros, iniciándose en 4.000 Hz afectando progresivamente al resto de las frecuencias conversacionales. Lafon y Duclos describen cuatro grados de hipoacusia neurosensorial por ruido: 1.Primer grado: Pérdida moderada (umbral a 30 dB), afectando exclusivamente a la frecuencia de 4.000 Hz. 2.Segundo grado: Mayor pérdida en 4.000 Hz (umbral a 50 dB) y comienzo de una disminución de la audición en las frecuencias de 2.000 y 3.000 Hz de por ejemplo 30 dB. 3.Tercer grado: El deterioro aumenta y comienza a afectarse la frecuencia de 1.000y 1.500 Hz. El trabajador comienza a sufrir claros problemas de comunicación. 4.Cuarto grado: La pérdida afecta fundamentalmente a todas las frecuencias, con caída brusca a 6.000 y 8.000 Hz. Existen graves problemas de comunicación AUDIOMETRÍAS AUDIOMETRÍAS 500 1000 2000 3000 4000 6000 8000 0 -10 -20 dB -30 -40 -50 fase1 -60 fase2 -70 -80 fase3 fase4 - 20 - Hz Es muy importante recordar que existe una relación causa-efecto en la que cesando la exposición al ruido, se detiene la progresión de la hipoacusia. 3.- MATERIAL Y MÉTODO. 3.1- Muestra estudio: El estudio se ha realizado sobre un colectivo de 175 trabajadores de 9 empresas mineras a cielo abierto, representativas del sector denominado “rocas industriales”. Los estudios se han contrastados con 25 controles voluntarios no expuestos a ruido. Se han estudiado 4 empresas de áridos calizos para la construcción. Una cantera que explota caliza para siderurgia y otra que explota dolomía para siderurgia. Una empresa que explota pizarra para tejar, otra que explota caliza para la fabricación de cemento y, por último, una empresa que explota granito ornamental. La duración del estudio ha sido de 6 meses. Los trabajadores estudiados estaban repartidos en 20 puestos de trabajo. De los trabajadores (n=175), 169 eran varones (96,6%) y 6 mujeres (3,4%). Del grupo control (n=25), 21 varones (84%) y 4 mujeres (16%). La media de edad para los trabajadores, fue de 39,1 ± 11,0 años (s), en un rango de edad entre 18-61años.. La media de edad de los controles fue de 37,8 ± 10,3 años (s). La edad se dividió en tres rangos de edad: < 35 años. 35-50 años. > 50 años. Se estudiaron 20 puestos de trabajo, tal como se expone en la siguiente tabla: - 21 - 2 PUESTO DE TRABAJO TRABAJADORES Nº % Barrenista Carro Perforador. 11 6,3 % Palista de frente. 22 12,6 % Conductor de dumper. 17 9,7 % Operario Molienda 1ª 8 4,6 % Operario Molienda 2ª - 3ª 9 5,1 % Operario de limpieza de cribas y cintas. 11 6,3 % Palista de acopios. 5 2,9 % Operario de tolvas y camión de acopios. 5 2,9 % Mecánico de Mantenimiento. 15 8,6 % Administración y Dirección. 15 8,6 % Encargado y Jefe de Equipo. 18 10,3 % Barrenista de corte y escuadrado. 8 4,6 % Operario de Lanza Térmica. 5 2,9 % Abridor de rachones (Rachonero ) 1 0,6 % Operario de sierra de disco (Serrador ) 5 2,9 % Operario de Puente Grúa. 1 0,6 % Labrador de Pizarra. 7 4% Cortador de Pizarra con Tijera. 8 4,6 % Operario de Cortadora automática. 2 1,1 % Embalador. 3 1,7 % Tabla 2. Numero de trabajadores en cada puesto de trabajo Los datos obtenidos en el estudio, se han analizado mediante el paquete estadístico SPSS 7.5 para Window. Se utilizó la estadística descriptiva para las variables cualitativas y cuantitativas. Estas últimas se describieron mediante la media, desviación típica y rango. Los valores encontrados en el oído izquierdo y el oído derecho (respecto a la pérdida auditiva), se compararon mediante la t-Student para datos pareados. Utilizamos el ANOVA de una vía, para - 22 - comparar las variables cuantitativas existentes en los distintos grupos. Cuando las variables numéricas seguían una distribución normal, se realizaron las pruebas de Mann-Whitney y de Kruskal-Wallis. Las variables cuantitativas, cuando fue necesario, se correlacionaron, utilizando el coeficiente de correlación de Pearson. Las diferencias se consideraron significativas, si superaban el nivel de significación α= 0,05, cuando el nivel de significación era p < 0,001, se expresó como p<0,000. Se han creado nuevas variables que se detallan a continuación para una mejor comprensión de los resultados: 1. Áreas de la pérdida auditiva global en los productos de distorsión (otoemisiones acústicas), para cada oído. 2. Media de la pérdida auditiva del oído izquierdo y el oído derecho. 3. El resultado global de la pérdida auditiva (área), registrado en las otoemisiones, se agrupó en tres grados: leve, moderado, severo, por percentiles (P33 y P66). 4. Otra variable creada fue el “ nivel de riesgo histórico” el cual viene dado por la fórmula: Años de exposición x ln dB (normalmente se agrupó en cuartiles). De esta forma que da el riesgo dividido en 4 categorías: • Bajo riesgo: <170. • Riesgo moderado: 170-240. • Riesgo severo : 240-290. • Alto riesgo: > 290. - 23 - 4 3.2- Medición del ruido: Para la realización del presente proyecto, se hicieron dos tipos de mediciones: Dosimetrías y Sonometrías. Para la realización de las Sonometrías se utilizó el Analizador en tiempo real, Sonómetro Integrador-Promediador CEL 573 B1, de precisión tipo “1”. Este analizador permite la medición de las frecuencias normalizadas para las bandas de octava entre 32,5 Hz y 20 KHz, con rangos de medición entre 10 y 140 dB. Permite además el almacenamiento en memoria simultáneo de los parámetros más usuales en control de ruido, a intervalos de tiempo predeterminados. Para realizar las Dosimetrías se utilizaron los Dosímetros CEL 460 de precisión tipo “2”. Este aparato permite realizar mediciones de ruido (Leq, Lpk, Lmax), acumulados en intervalos de 1 segundo hasta varias horas, así como su evolución a lo largo del tiempo. El Dosímetro se colocó a cada trabajador, situando el micrófono del aparato lo más cercano posible al oído. Normalmente se tomaba al comenzar la jornada laboral, retirándose al final de la misma. En algunos casos, por distintas circunstancias, no fue posible recoger los datos de toda la jornada laboral, aunque sí un intervalo representativo de la misma. El Sonómetro se utilizó como complementario de las Dosimetrías con una doble finalidad. Por una parte, para valorar los niveles de ruido instantáneos, según diferentes ponderaciones, lo que nos permitió orientar mejor la realización de las Dosimetrías. Por otro lado, su principal fundamento era conocer el tipo de ruido al que está sometido el operario, realizándose mediciones en frecuencias (bandas de octavas) De esta forma podemos seleccionar los protectores auditivos más convenientes para cada categoría profesional. En todos los casos, para la evaluación del riesgo al ruido al que están expuestos los trabajadores de las canteras, se ha aplicado el Real Decreto 1316/89 de 27 de Octubre, sobre “Protección de los trabajadores frente a los riesgos derivados de la exposición al ruido durante el trabajo”. 3.3- Exploración funcional de la audición: Para la realización del presente estudio, se ha elaborado un protocolo de actuación y se han - 24 - realizado una batería de pruebas y exploraciones específicas para determinar la repercusión del ruido sobre el aparato auditivo de cada trabajador. A todos los trabajadores se les realizó una historia laboral y una historia clínica. En la historia laboral, se recogieron los datos personales y de identificación de cada trabajador, edad, categoría actual en la empresa y puesto de trabajo, maquinaria empleada, años en la empresa y en otros trabajos con exposición al ruido y utilización de protección auditiva durante la jornada laboral. En la historia clínica quedaron reflejados datos sobre alergias medicamentosas y ambientales, hábitos tóxicos (tabaco, alcohol, etc.), enfermedades sistémicas y otológicas, tratamientos crónicos, intervenciones quirúrgicas, antecedentes familiares de hipoacusia y sintomatología auditiva subjetiva. Posteriormente, antes de comenzar la jornada la jornada laboral con ambos oídos en reposo auditivo, se procede a realizar una exploración otorrinolaringológica consistente en otoscopia, Otoemisiones Acústicas por Productos de Distorsión (DPOAE), audiometría tonal, impedanciometría y timpanograma. Debido a la imposibilidad de trasladar a los trabajadores estudiados a una cabina insonorizada, la exploración audiológica se llevó a cabo en las propias instalaciones de las diferentes empresas, en locales no insonorizados con niveles de ruido medio inferiores a 75 dB(A) Una vez concluida la jornada laboral, se vuelven a realizar las otoemisiones acústicas (DPOAE) que nos indicará si existe fatiga auditiva tras la exposición al ruido en su puesto de trabajo y la susceptibilidad a padecer hipoacusia neurosensorial irreversible (hasta hace poco medida con el test de Peyser) 1. Una vez rellenado el cuestionario comienza la exploración funcional auditiva. En primer lugar se realiza una otoscopia para explorar el conducto auditivo externo y la membrana timpánica. Ante el hallazgo de tapones de cerumen se procedió a su extracción con un ganchito de oídos para poder realizar el resto de la exploración correctamente. Cuando en la membrana timpánica se observó alguna perforación conocida o desconocida para el trabajador (en nuestro estudio diagnosticamos 3 perforaciones ), no realizamos las otoemisiones acústicas, por carecer de validez, realizando únicamente la audiometría de tonos puros. - 25 - 6 2. En segundo lugar se procedió a la realización de las Otoemisiones Acústicas por Productos de Distorsión (DPOAE). Se utilizó un equipo de Otoemisiones Capella (Madsen) de Optómic conectado a un ordenador portátil Toshiba celeron 650 Satellite Pro 4600 Los DPOAE son sonidos medibles, tanto cualitativamente como cuantitativamente, en el conducto auditivo externo y son el resultado de la capacidad que presentan las células ciliadas externas (CCE) del órgano de Corti en la cóclea, para moverse en ambas direcciones de su eje longitudinal. La electro-motilidad, como se conoce a éste fenómeno, se pensaba que era el resultado de la capacidad de las CCE para manejar distintas presiones hidrostáticas de su citoplasma con lo que podían elongarse o acortarse provocando un mecanismo de reversibilidad de las - 26 - vibraciones sonoras. Sin embargo hoy se sabe que la membrana celular de las CCE posee un mecanismo de motilidad intrínseco a su estructura molecular específica y es conocido como el “motor molecular ”.Cuando llegan de forma simultánea a la cóclea dos tonos puros, de frecuencia conocida f1 y f2 (f2>f1), por los mecanismos activos ligados a la capacidad contráctil de ésta, se generan nuevos tonos o Productos de Distorsión Acústica (PD), de los cuales el predominante es aquel que posee una frecuencia definida por la fórmula 2f1-f2. Se considera como un reflejo de la capacidad que posee la cóclea de establecer una relación no linear entre las intensidades y las características frecuenciales del estímulo y la respuesta. La técnica básica de registro está basada en el análisis espectral de un sonido detectado en el conducto auditivo externo, constituido por la extracción de la respuesta a la estimulación acústica por dos tonos. Como fuente de sonido se emplean dos altavoces con propiedades de respuesta entre 200 Hz-10 KHz, y como receptor, un micrófono miniaturizado de bajo ruido y alta sensibilidad. Inicialmente le colocamos al trabajador, una sonda con una oliva (adecuada al diámetro del CAE), y hacemos una calibración de la misma para comprobar que esté bien colocada. Posteriormente realizamos un audiograma de Productos de Distorsión (PD-grama) que nos permite el estudio de la función coclear mediante una representación gráfica de las distintas amplitudes de los PD generados tras la variación de frecuencias de los primarios (la relación de los primarios f2/f1=1,2), manteniendo la intensidad de éstos constantes (65 dB). En todos los casos realizamos, un barrido frecuencial con incrementos cada ½ octava, de forma que obtenemos 8 PD registros con una frecuencia f2 bastante similar a las testadas en la audiometría tonal liminar (750/1.000/1.500/2.000/3.000/4.000/6.000/8.000 Hz). En la gráfica se representa el promedio del ruido de fondo y la amplitud del PD, medido en el CAE como nivel de presión acústica en dB SPL. Como criterios de detección de la prueba fue la obtención de PD 6 dB por encima del ruido base (S/N>6dB), o 260 estímulos aceptados. Por lo tanto las Otoemisiones por productos de distorsión constituyen una prueba de valoración de alteraciones de la función coclear por los distintos tipos de injurias que determinan el desarrollo de una hipoacusia neurosensorial, por lo tanto, en situaciones en las que se altera su función, se producirán las mayores - 27 - 8 afectaciones en el registro de los PD, concordante con las elevaciones de los umbrales audiométricos. La monitorización objetiva de la audición, es el campo donde podemos considerar que los productos de distorsión son de especial utilidad, ya que poseen gran sensibilidad para la identificación precoz de lesiones del oído interno. Las características temporales y frecuenciales de los productos de distorsión hacen que su registro pueda ser utilizado para el conocimiento de la función coclear a lo largo del tiempo. Para conseguir el máximo rendimiento de ésta aplicación, es fundamental disponer de un registro previo a la exposición que nos permite comprobar la estabilidad o deterioro de la micromecánica coclear, y en caso de ser factible poder instaurar las medidas de prevención adecuadas lo más precozmente posible, incluso con antelación a la aparición de las manifestaciones audiométricas. 3. En tercer lugar realizamos una Audiometría convencional tonal bilateral (aún en presencia de perforación timpánica).Utilizamos un Audiómetro portátil modelo AD229b, de dos canales. 4. Por último un Timpanograma y una impedaciometría (reflejo estapedial), para determinar la movilidad de la membrana timpánica y del huesecillo del estribo y así descartar patología del oído medio y su diagnóstico en caso afirmativo.Utilizamos para ello un Impedanciómetro portátil modelo Audiometer MT10 Todas estas pruebas complementarias (Otoemisones acústicas, audiometría tonal e impedanciometría y timpanograma), fueron incluidas en una base de datos NOAH-PAX, para posteriormente ser procesadas. - 28 - 4.- RESULTADOS: Una vez procesados los datos incluidos en la base de datos SPSS, se realizaron dos tipos de estudios estadísticos. Por una parte estadística descriptiva de las variables estudiadas y por otro lado estadística inferencial comparando unas variables con otras. 4.1.- Estudio estadístico descriptivo: 4.1.1.-Mediciones del ruido. Se presenta en la siguiente tabla, el resultado de las mediciones de ruido expresadas en dB(A) y nivel pico en dB(A), en los 20 puestos de trabajo estudiados. RANGO PUESTOS DE TRABAJO NIVEL DIARIO dB(A) NIVEL PICO dB(A) VALOR MEDIOdB(A) Nº Barrenista de carro perforador 8 81,6 – 100,3 127,6 – 147,8 92,8 Palista de frente 13 80,5 – 95,7 135,9 – 146,6 87,9 Conductor Dumper 10 79,5 – 98,1 104,6 – 145,9 85,5 Operario de Molienda 1ª 6 79,6 – 95,7 118,6 – 136,9 90,0 Operario de Molienda 2ª y 3ª 6 72,5 – 91,9 123,8 – 135,7 84,9 Operario de limpieza. Cribas y cintas. 8 83,4 – 101,4 125 – 148,2 90,3 Palista de acopios. 6 77,3 – 88,9 131,6 – 144,2 84,0 Operario de tolvas y camión acopios. 6 76 – 96,2 125,4 – 139,3 85,2 Mecánicos de mantenimiento. 3 88,6 – 96,5 129,5 – 141,7 93,2 Administración y Dirección. 6 69,8 – 98,5 113,4 – 140,2 84,3 Encargados y Jefes de equipo. 7 80 – 103,9 121,6 – 145,8 91,4 Barrenistas de corte y escuadrado. 10 93,5 – 114,1 139 – 147,7 106,7 Operario con Lanza Térmica 6 117,5 – 121,1 142,4 – 147,9 119,1 Abridor de rachones (Rachonero ) 1 106,8 146 106,8 Serrador de pizarra 1 100,6 133,3 100,6 Operario de Puente grúa. 1 101,6 135,2 101,6 Labrador de pizarra 1 99,5 142,9 99,5 Cortador de pizarra con tijera. 2 97,2 – 95,5 138,8 – 133,5 96,3 Operario Cortadora automática. 1 107,9 144,5 107,9 Embalador 1 93,1 144,2 93,1 Tabla 3 Resultado de las mediciones de ruido por puestos de trabajo - 29 - 0 En el Anexo I, se adjuntan las curvas de la evolución Nivel/Tiempo Real, en el caso de los puestos de trabajo de barrenista de frente, molienda 1ª, molienda 2ª, peón de limpieza, Dumper de acopios, mecánico, encargado, operario de lanza térmica, serrador de pizarra, cortadora de fresa y embalador de pizarra. En el Anexo II, se adjunta la distribución de frecuencias normalizadas para las bandas de octava entre 16 Hz y 16 kHz, para los puestos e trabajo de barrenista de carro, barrenista de escuadrado, palista de frente, palista de acopios, dumper de frente, molienda 1ª, molienda 2ª, peón de limpieza, cortadora de fresa, labrador de pizarra, cortador de pizarra, serrador de pizarra y embalador de pizarra. Estos niveles de frecuencias nos permiten escoger los protectores idóneos para cada puesto de trabajo, en función de la atenuación dada por el fabricante. 4.1.2.- Descripción de las variables cualitativas y cuantitativas estudiadas: En la siguiente tabla mostramos las frecuencias (nº de trabajadores) y los porcentajes de hallazgos positivos en cada variable de los 175 trabajadores estudiados. - 30 - VARIABLES ESTUDIADAS Nº % 12 6,9% Antecedentes familiares 25 14,3% Consumo de tabaco 114 65,1% Consumo de alcohol 90 51,4% Enfermedades crónicas 60 34,3% Cirugía 28 16% Tratamientos crónicos 28 16% Síntomas auditivos subjetivos 82 46,9% Afectación audiológica bilateral 147 84% Protección auditiva 85 48,6% Alergias medicamentosas/ambientales Tabla 4. Variables cualitativas. En la siguiente tabla se muestran el nº de trabajadores que están expuestos, según los decibelios y niveles pico que establece la Ley (Real Decreto 1316/89 ), clasificados en los siguientes grupos: • Grupo I →Art. 5º: 80-85 dB(A). • Grupo II → Art. 6º: 85-90 dB(A). • Grupo III → Art. 7º: > 90 dB(A) ó 140 nivel de pico. - 31 - 2 % I II III DB(A) 29,2% 23,4% 47,4% Nivel pico Superan el nivel pico 37,1% Tabla 5. Porcentaje de trabajadores incluido en cada grupo de exposición a ruido según la normativa vigente. En la siguiente tabla, se muestran los valores medios de los niveles diarios equivalentes por puestos de trabajo, en13 de las categorías estudiadas se sobrepasan los niveles de 90 dB(A) (un 65% del total). Entre 85 y 90 dB existen 4 categorías (el 20%) y solamente 3 (el 15%) están por debajo de 85 dB. INTERVALO dB(A) Nº puestos de trabajo % categorías > 90 dB 13 65 % 85 – 90 dB 4 20 % 80 – 85 dB 3 15 % El puesto de trabajo con mayor valor del nivel diario equivalente es la de Operario de Lanza Térmica con una media de 119,1 dB(A) y todas las medidas efectuadas a los trabajadores con esta categoría están por encima del nivel pico de 140 dB, a continuación de este puesto de trabajo y por orden de exposición de riesgo al ruido, están las categorías de Operario de cortadora automática en pizarra (107,9 dB), el Rachonero en pizarra (106,8 dB), el barrenista de escuadrado (106,7 dB), el operario de puente-grúa en pizarra (101,6 dB) y el serrador en pizarra (100,6 dB), a continuación en el riesgo al ruido está el labrador en pizarra (99,5 dB), el cortador de pizarra con tijera (96,3 dB), el mecánico de mantenimiento (93,2 dB), el - 32 - embalador de pizarra (93,1 dB), el barrenista de carro (92,8 dB), el encargado de la cantera (91,4 dB) y el operario de limpieza de cribas y cintas (90,3 dB). En todos estos puestos se deben tomar medidas de prevención. Por último, mostramos una tabla con el nº y porcentaje de trabajadores que presentaron alteraciones auditivas (media del área total de pérdida en ambos oídos registrada con las otoemisiones acústicas –OEA- distinta de cero), antes de comenzar la jornada laboral (oído en reposo) y tras finalizar la jornada de trabajo (fatiga auditiva). OEA Nº % PerdidasAntes 132 75,4% Pérdidas después 141 80,6% Tabla 6. Pérdidas globales en ambos oídos pre/postexposición. 4.2.- Estudio estadístico inferencial: Eliminamos de los estudios las variables dB y nivel pico de dB siendo sustituidos por la fórmula anteriormente comentada (años de exposición x Ln de los dB).Así mismo para algunos estudios hemos fusionado los valores de los dos oídos por su media (tanto por frecuencias como por áreas), dado que uno respecto al otro no eran estadísticamente significativos. Se han comparado las alteraciones auditivas detectadas en las otoemisiones acústicas, contra las halladas en las audiometrías. - 33 - 4 OTOEMISIÓN (OEA) AUDIOMETRÍA NORMAL PATOLOGICA TOTAL NORMAL 41 34 75 PATOLOGICO 0 100 100 TOTAL 41 134 175 Tabla 7. Tabla de contingencia χ2. Han resultado ser más sensibles las otoemisiones acústicas que las audiometrías dado que 34 trabajadores de 75 trabajadores (45,3%), que presentaban la audiometría normal, han presentado alteraciones en las otoemisiones acústicas, siendo este suceso estadísticamente significativo con una p< 0,000. Relacionando igualmente la pérdida auditiva global, detectada con las otoemisiones acústicas antes y después de la jornada laboral, observamos que las otoemisiones acústicas realizadas después de la jornada laboral se muestran más sensibles que las realizadas antes del comienzo del trabajo, detectando más alteraciones auditivas que la audiometría. En este caso en un 56% siendo también estadísticamente significativo con una p<0,000. Si comparamos el porcentaje de alteraciones auditivas detectadas en las audiometrías y las detectadas con las otoemisiones, frente a los controles y los 4 grupos de riesgo (denominado nivel de riesgo histórico), observamos que el porcentaje de alteraciones aumenta a medida que aumenta el nivel de riesgo. Así aparecen en un 24% en el grupo control; en un 89,1% en los de alto riesgo en las audiometrías frente a un 48% de los controles y un 95% de los de alto riesgo con las otoemisiones acústicas siendo estadísticamente significativo p< 0,000. Esto señala que las otoemisiones acústica podría ser un método sensible para la detección precoz de hipoacusia inducida por ruido. - 34 - % perdida audiometria otoemision 100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0 control <170 170-240 240-290 >290 Comparando la media de la pérdida auditiva en ambos oídos por frecuencias entre el grupo control no expuesto a ruido y el colectivo de trabajadores expuestos a ruido, globalmente, observamos que son diferentes significativamente entre ambos grupos para las frecuencias de 3000/4000/6000 Hz con una p< 0,001/p<0,024/p< 0,033 respectivamente. Es cuatro veces mayor la caída de audición en la frecuencia de 3000 Hz, en los trabajadores que en los controles y 3,2 veces superior para la frecuencia de 4000 Hz. Se compara los niveles de exposición en dB y los de nivel pico en dB, con los tres grupos de edad. Existen diferencias significativas (p< 0,000) entre los niveles de exposición en dB y la edad de tal forma que a menor edad existe mayor exposición en dB (94,2 ; 91,7 ;84,6 de media respectivamente). No se encuentran sin embargo diferencias estadísticamente significativas respecto al nivel pico de dB y los tres grupos de edad (p>0,05 ). Estudio del área de pérdida auditiva en las otoemisiones acústicas entre ambos oídos, relacionándolo con los tres grupos de edad descritos anteriormente. A mayor edad, mayor es el área de pérdida en las otoemisiones acústicas, resultando estadísticamente significativo (p< 0,000 ), para ambos oídos, siendo el área de pérdida de audición aún mayor cuando la prueba se realiza tras la exposición al ruido (una vez finalizada la jornada laboral ), determinando la fatiga auditiva patológica. El mismo estudio se realizó por frecuencias. Las diferencias significativas más acusadas se presentaron en las frecuencias de 3000 y 4000 Hz tanto antes como - 35 - 6 después de la jornada laboral (p< 0,000 ). Examinamos el coeficiente de Correlación de Pearson entre la caída en las frecuencias (Hz), con los cuatro grupos del nivel de riesgo. Existen mejores correlaciones en las frecuencias de 3000 y 4000 Hz que en las frecuencias graves y las más agudas, como observamos en la gráfica. COEFICIENTES DE CORRELACION (x1000) ODA OIA ODD OID 400 coeficiente r 350 300 250 200 150 100 50 0 0 2000 4000 6000 8000 10000 Hz Se analizan (ANOVA), las afectaciones auditivas por áreas, de los trabajadores que usan protección auditiva respecto a aquellos que no lo hacen. A pesar de estar expuestos a menos dB los que no se protegen (= 87,3 dB), frente a los que sí usan protección (= 95,6 dB), presentan más afectación auditiva (=29,5 vs 21,0), siendo estadísticamente significativo. Recordamos que el porcentaje de trabajadores que no usa protección , frente al que sí lo hace es de 51,7% y 48,3% respectivamente. con proteccion sin proteccion 70 60 50 % perdida 40 30 20 10 0 <170 170-240 240-290 >290 riesgo historico - 36 - Análisis de pérdidas auditivas por áreas, frecuencias y la caída en dB en las audiometrías, relacionadas con los cuatro grupos del nivel de riesgo. Existen diferencias estadísticamente significativas entre los grupos, en todas las frecuencias, excepto en la frecuencia de 750 Hz, apreciándose las máximas diferencias en las frecuencias de 3000 y 4000 Hz. Ocurre lo mismo si comparamos la pérdida en la audiometría y el área global de pérdida en las otoemisiones. Realizamos unas tablas de contingencia χ2, entre los grupos de nivel de riesgo y los controles, con los niveles de afectación gradual de las otoemisiones acústicas (leve, moderado y grave). Observamos que existen diferencias estadísticamente significativas (p<0,000). Hay que destacar que el comportamiento de los controles es igual al grupo de bajo riesgo de exposición. El incremento en porcentaje del grupo de trabajadores con afectación severa en la audición , es estadísticamente significativo (p< 0,000), a medida que aumenta el nivel de riesgo % perdida severa 60 50 40 30 20 10 0 control <170 170-240 240-290 >290 riesgo historico 4.3.-Resultados comentados de los gráficos de exploración audiométrica y otoemisiones: A continuación se exponen 3 gráficos representativos de la exploración auditiva realizada a cada trabajador, mostrando 3 ejemplos de afectación audiológica por ruido. 1. En el gráfico representamos por una parte una audiometría del oído derecho normal, con un umbral tonal entre 20-30 dB y el Pdgrama ( otoemisiones acústicas). El resultado de las otoemisiones acústicas, muestra la descrita fatiga auditiva postexposición. En un primer registro ( preexposición ), se detectan 8 productos de distorsión ( PD) normales - 37 - 8 para cada frecuencia estudiada ( 750-8000 Hz). En un segundo registro, el descenso del umbral auditivo tras la exposición al ruido durante 8 horas de trabajo. El trabajador al que se realizó esta exploración, ocupa el puesto de barrenista de corte y escuadrado, tiene una edad de 33 años, utiliza protección auditiva y está expuesto a un nivel diario equivalente de 100,3 dB (A). FATIGA 2. En segundo lugar, representamos la sensibilidad que detectamos con las otoemisiones acústicas por productos de distorsión. Representamos una audiometría normal y una caída precoz en el umbral auditivo en la frecuencia de 3000 Hz en la otoemisión acústica. En este caso se trata de un trabajador que ocupa el puesto de palista de frente, tiene 21 años de edad, utiliza protección auditiva y está expuesto a un nivel diario equivalente de 103,3 dB (A). PRECOZ - 38 - 3. En tercer lugar, representamos la audiometría y las otoemisiones acústicas de un trabajador, en la que se observa una hipoacusia neurosensorial severa, con caída en las frecuencias de 3000-8000 Hz (umbral de caída a 100 dB HL), así como un Pdgrama con importante caída del umbral auditivo en las mismas frecuencias. El trabajador ocupa el puesto de barrenista, tiene 42 años, lleva 17 años expuesto ruido y utiliza protectores auditivos desde hace 4 años. 5.- MEDIDAS DE PREVENCIÓN. El Real Decreto 1316/89, aparte de la evaluación de los riesgos derivados de la exposición al ruido (art.3), contempla también la toma de una serie de medidas preventivas necesarias para la protección de los trabajadores. NIVELES DE RUIDO EVALUACION NIVELES CONTROL MEDICO PROTECCION AUDITIVA OBLIGATORIA > 90 dB(A) ANUAL 85 – 90 dB(A) ANUAL TRIANUAL OPTATIVO 80- 85 dB(A) ANUAL QUINQUENAL SI SE SOLICITA ANUAL SEÑALIZACIÓN Tabla 8. Medidas preventivas a adoptar según el Real Decreto 1316/89 Concretamente el Real Decreto exige lo siguiente: - 39 - 0 Medidas de protección técnicas Control médico. Implantación de protectores auditivos. Formación e Información 5.1.- Medidas de protección técnicas: El articulo 10 del Real Decreto señala que todos los equipos que se adquieran a partir de su entrada en vigor, deben ir acompañados de una información suficiente sobre el ruido que producen cuando se utilizan en la forma y condiciones previstas por el fabricante. Por esto es muy importante que los empresarios a la hora de comprar maquinaria para las canteras, requieran al fabricante los niveles de presión acústica continuo equivalente, siempre que dicho nivel sea superior a 80 dB. También requerirán el valor pico, siempre que éste sea superior a 140 dB. En el caso de la maquinaria antigua que sobrepase el nivel diario equivalente de 90 dB ó 140 dB el nivel de pico, se analizarán los motivos por los que se superan estos valores y se desarrollará un programa de medidas técnicas (amortiguación, uso de silenciadores, utilización de cribas de goma, etc..), destinado a la disminución de la generación o la propagación del ruido. Por otro lado, queremos significar que muchos de los trabajadores de las canteras pasan gran parte de su jornada laboral en cabinas, desde donde manejan la maquinaria, sea ésta fija o móvil. Muchas de estas cabinas no aíslan suficientemente del ruido, como se ha visto en los resultados obtenidos. En muchas ocasiones es el propio trabajador, sobre todo en el caso de las cabinas de maquinaria móvil, el que trabaja con las ventanas o puertas abiertas, lo que le perjudica tanto para el ruido como para el polvo. 5.2.- Controles médicos: • Control audiológico: Las personas que obligadamente permanecen expuestas al ruido traumatizante, deben pasar por un control audiológico cada cierto tiempo (R.D. 1316/89). Deben realizarse - 40 - controles otoscópicos para el diagnóstico de posibles afectaciones del conducto auditivo externo (eccemas , forúnculos, otitis externa, tapones de cerumen etc) y del oído medio(perforaciones timpánicas, otitis media aguda, otitis media crónica, otitis seromucosa, etc. Esta exploración otológica, es importante a la hora de realizar las exploraciones audiométricas y las otoemisiones acústicas, para dar validez a las mismas. Por otro lado es fundamental , teniendo en cuenta que el trabajador debe utilizar protección auditiva y en el caso de los tapones antirruido es necesario que el conducto auditivo externo esté permeable y así evitar las posibles otitis de repetición que podrían producirse si las condiciones higiénicas del oído externo y medio no son las adecuadas. La frecuencia con la que se medirá la audición, dependerá de la valoración de su situación de riesgo (nivel de intensidad sonora al que está expuesto, grado de hipoacusia previa etc). Así mismo al personal expuesto al ruido, debe entregarse una lista de sustancias ototóxicas que deberá evitar tomar en la medida de lo posible. Cabe destacar el tabaco, alcohol, salicilatos (aspirina), antibióticos aminoglucósidos (estreptomicina, tobramicina etc), tetraciclina, vancomicina, diuréticos (furosemida, ácido etacrinico etc), derivados de la quinina etc. • Estudio de la susceptibilidad individual: Determinadas personas sufren lesiones auditivas producidas por el ruido con muchas más facilidad de lo normal. Debe conocerse quienes padecen dicha susceptibilidad para extremar en ellos las medidas de protección habituales. Así en una empresa donde existan puestos de trabajo con exposición elevada a ruido y otros en ambiente sonoro no lesivo, se evitará que los trabajadores susceptibles al ruido, ocupen plazas de riesgo. Si inevitablemente un trabajador susceptible debe trabajar en un medio ruidoso, tendrá que extremar con todo rigor las medidas de protección y control. Para la detección de los individuos susceptibles al ruido deben tabularse perfectamente los resultados de los controles auditivos periódicos. Existen distintas pruebas para detectar la susceptibilidad individual al ruido. La más usual utilizada es el Test de Peyser (exponer al trabajador a un sonido de intensidad de 100 dB durante 30 s y posteriormente realizar una audiometría para determinar el umbral de caída), es un test que estudia por lo tanto la - 41 - 2 fatiga auditiva. Hoy en día el método con mayor sensibilidad para detectar la vulnerabilidad del oído interno ante el exceso de energía sonora son las Otoemisiones Acústicas (Productos de distorsión). 5.3.- Implantación de protectores. El daño a la audición causado por niveles nocivos de ruido, es proporcional a la cantidad de energía acústica que alcanza el oído durante una jornada laboral. Un protector auditivo con una atenuación acústica de 30 dB sólo deja pasar el 0,1% de la energía que alcanza al protector. Si el trabajador se encuentra en un ambiente ruidoso, el oído recibirá entonces 1000 veces más energía por unidad de tiempo si se quita el protector. Esto significa que un minuto sin protección causa el mismo daño que mil minutos con protección. Los protectores auditivos son seleccionados según su valor SNR (reducción simplificada del nivel de ruido), que especifica un solo valor de atenuación. Sin embargo, el tiempo de utilización del protector por parte del trabajador, tiene una importancia mucho más considerable, que el valor SNR si el tiempo de utilización es inferior al 100%. Por consiguiente es de gran interés determinar cuales son las características de un protector auditivo, que puedan incentivar un mayor tiempo de utilización. Una de las razones principales para no llevar el protector auditivo durante todo el tiempo de la exposición al ruido, es poder oír y comunicarse con los compañeros y lo que sucede alrededor. Una mejora de la inteligibilidad del habla, puede incentivar un mayor tiempo de utilización del protector y por lo tanto una mejor protección. Hay tres factores que determinan la capacidad de percibir el habla en un ambiente ruidoso: 1. La razón señal-ruido: describe la fuerza del habla en relación con el ruido de fondo. Las altas frecuencias (graves), son las más importantes para la inteligibilidad del habla, desde aproximadamente los 1000 Hz, donde se encuentran sonidos - 42 - consonantes. El rango más importante es alrededor de 2000 Hz. 2. Nivel de la señal en relación con el umbral de audición: para poder percibir una señal, por ejemplo, la voz, es suficiente que el nivel de la señal supere el umbral de audición. Pero para poder comprender el mensaje verbal, el nivel de la señal, la intensidad de la voz, tiene que ser bastante más alta. 3. El efecto del enmascaramiento: cuanto más fuerte sea el ruido tanto más va a enmascarar el habla . Cuanto más se parece el espectro del ruido al espectro del habla , mayor resultará el enmascaramiento. Por lo tanto los dos factores más importantes son: que los protectores resulten cómodos y que permitan la comunicación. Estas dos características son a menudo opuestas a altos niveles de SNR. Existen muchos tipos en el mercado con atenuaciones del nivel de ruido importantes, que pueden ir, desde 40 dB en agudos, hasta 10 dB en graves. El estudio que se hizo en el Instituto Nacional de Silicosis sobre los protectores más adecuados para los trabajadores en la mina, pueden sernos de gran utilidad para los trabajadores de las canteras. Los resultados obtenidos en el citado estudio se recoge en la tabla adjunta BANDAS DE OCTAVA B. Ancha 63 Hz 125 Hz 250Hz 500 Hz 1 kHz 2 kHz 4 Hz 8 kHz 31,3 25,6 26,5 27,9 27,9 29,0 31,0 42,6 39,3 Tapón 3M 1100 28,3 19,5 19,5 23,7 27,4 25,4 30,3 37,8 38,1 Orej. Helberg Mark 27,9 15,2 15,2 19,0 28,5 29,0 34,5 37,5 37,5 Tapón 3M 1225 27,9 22,6 22,6 24,5 24,8 26,4 29,8 36,1 35,8 Orej. Peltor H7B 27,4 9,9 9,9 19,2 30,3 35,1 32,9 34,9 31,8 Orej. Bilson Viking 26,5 12,3 12,3 16,9 27,8 33,5 35,2 41,4 36,7 Tapón EAR Clasic 25,1 17,5 17,5 19,3 21,9 24,5 27,9 38,6 38,9 PROTECTOR T. Ear “Benefit” Tabla 7.- Nivel atenuado en frecuencias según protector. Barrenistas - 43 - 4 Como vemos en las frecuencias más altas existe una atenuación importante, que en algunos protectores llega a 40 dB. En el siguiente gráfico se representan los datos de la atenuación T. EAR “BENEFIT” Tapón 3M 1100 Orej. Helberg Mark Orej. Peltor H7B Orej. Bilson Viking Tapón EAR Clasic Tapón 3M 1225 45 40 35 30 25 20 15 10 5 0 B. Ancha 63 Hz 125 250 500 1 kHz 2 4 8 5.4.- Formación e información La formación e información a los trabajadores es una parte fundamental de la implantación de un plan de prevención y control del ruido. El trabajador debe conocer los niveles acústicos a los que está sometido y en función de estos niveles utilizar protectores auditivos y efectuar los controles médicos periódicos que correspondan. Esta formación debe comenzar por los técnicos y encargados al ser fundamental su colaboración en cualquier campaña que se inicie en este sentido. Por lo tanto, deben conocer adecuadamente el riesgo al que están expuestos ellos y los trabajadores. Igualmente, deben tener unos conocimientos de la ley que les permita responder a las preguntas que normalmente harán los trabajadores. 6.- ESTUDIO PUNTUAL DEL POLVO EN LAS CANTERAS. También se han tomado muestras de polvo, según indica la ITC 07.1.04, en todos los - 44 - puestos de trabajo. Para realizar estos muestreos se ha colocado un aparato personal a cada trabajador con el fin de conocer su riesgo dado en mg/m3 de polvo respirable y en el porcentaje de sílice que contienen los polvos. Los resultados por categorías se recogen en la tabla adjunta: PUESTOS DE TRABAJO mg / m3 % SiO2 Barrenista Carro Perforador. 3,1 3,2 % Palista de frente. 1,8 7,1 % Conductor de dumper. 1,9 6,7 % Operario Molienda 1ª 2,2 4,6 % Operario Molienda 2ª - 3ª 2,4 5,1 % Operario de limpieza de cribas y cintas. 2,8 6,3 % Palista de acopios. 1,9 5,2 % 2 5,8 % Mecánico de Mantenimiento. 1,8 9,6 % Administración y Dirección. - - Encargado y Jefe de Equipo. 1,6 11,3 % 3 17,2 % Operario de Lanza Térmica. 5,8 18,1 % Abridor de rachones (Rachonero ) 4,1 9,1 % Operario de sierra de disco (Serrador ) 4,6 9,1 % Operario de Puente Grúa. 2,9 9,1 % Labrador de Pizarra. 3,4 9,1 % 3 9,1 % Operario de Cortadora automática. 3,2 9,1 % Embalador. 2,5 9,1 % Operario de tolvas y camión de acopios. Barrenista de corte y escuadrado. Cortador de Pizarra con Tijera. Tabla 10 . Resultados por puesto de trabajo. - 45 - 6 7.-CONCLUSIONES • En general se han medido unos niveles diarios equivalentes muy elevados. Por ello se aconseja la protección de los trabajadores y la adopción de algunas medidas de prevención de carácter técnico. • El uso de la lanza térmica deberá ser muy restringido. Se aconseja en estos trabajos la doble protección auditiva Será utilizada solamente en casos muy aislados. De esta forma no solamente se protege al operario que la maneja, sino también al personal que trabaja en su entorno. • Las cabinas fijas utilizadas en las canteras deben mejorarse a efectos de aislar al trabajador del ruido existente en el exterior. • En las Palas y Dumper modernos las cabinas, suelen venir aisladas del ruido, y se procurará que el trabajador no abra las puertas y ventanas. Esto suele hacerse en el verano por carecer algunos vehículos de aire acondicionado. Lo normal es dotar a estas cabinas de estos aparatos. • En algunos casos el uso de cribas de goma y de revestimientos de goma en las tolvas, será la única forma de disminuir el ruido en las instalaciones de clasificación. • Todos los trabajadores, el personal administrativo y de dirección de las explotaciones mineras a cielo abierto y naves de tratamiento, deben pasar controles audiológicos específicos, según establece la Ley. • La exploración auditiva debe comenzar con una otoscopia para dar validez a las pruebas funcionales (otoemisiones acústicas, audiometrías e impedanciometrías). • Los estudios auditivos se deben realizar en instalaciones exentas de ruido (< 30 dB ), preferiblemente en cabinas insonorizadas homologadas. - 46 - • Las audiometrías y las otoemisiones acústicas, deben siempre realizarse con ambos oídos en reposo auditivo (antes del comienzo de la jornada laboral), para evitar confusión con la fatiga audiológica postexposición. • Las otoemisiones acústicas por productos de distorsión, han presentado, a la vista de los resultados obtenidos, una serie de ventajas: 1. Es un método válido para la detección precoz de la hipoacusia neurosensorial inducida por ruido ( traumatismo sonoro crónico). 2. Es altamente sensible a las modificaciones que ocurren en la cóclea. Resulta una exploración recomendada para la detección de trabajadores susceptibles a daño auditivo por ruido ( fatiga auditiva ). 3. Destacar que habría que comprobar si la fatiga auditiva detectada en el colectivo de estos 175 trabajadores expuestos a ruido en canteras, presentan en un futuro traumatismo sonoro crónico irreversible. 4. Constituye una técnica con importante aplicación en el seguimiento de trabajadores expuestos a injurias cocleares ( patología auditiva por ruido).Útil también en la monitorización de las alteraciones a largo plazo durante la exposición a la contaminación auditiva, así como en el diagnóstico topográfico de las lesiones cocleares. 5. Es una técnica no invasiva, fácil de medir y objetiva ( no requiere respuesta por parte del trabajador ). 6. Requiere cortos periodos de registro y exámenes. 7. Los productos de distorsión, están presentes en oídos normales con una incidencia del 96-100% y reducidos o ausentes en los oídos patológicos. • Para asegurar que la protección ofrecida por los protectores auditivos sea efectiva, éstos deben ser utilizados durante todo el tiempo que el usuario se encuentra en un ambiente de ruido nocivo, tal como indica la norma EN458 - 47 - 8 (Norma Europea de 1993). La protección por lo tanto no significa atenuación. La protección consiste en tres factores de igual importancia: 1) Atenuación adecuada ( ≥ 20 dB ). 2) Suficiente comodidad para permitir un tiempo de utilización del 100%. 3) Comunicación verbal ( reconocimiento de sonidos, tales como mensajes verbales y señales de advertencia. • El uso de tapones y/o cascos ( orejeras ), no va a depender del SNR, sino de la comodidad que suponga al trabajador siempre que ambos sean homologados. • Deben realizarse programas de formación y educación en salud a todo el personal expuesto a ruido, así como instruir a los trabajadores para la correcta utilización de las medidas de protección. • El uso de la protección auditivas se realizará según indica el R.D.1316/89. • Como conclusión final, tras los resultados obtenidos en el estudio, se ha demostrado que existen diferencias significativas en relación a las pérdidas auditivas exploradas entre los cuatro grupos de riesgo (nivel de riesgo histórico). Así mismo encontramos diferencias estadísticamente significativa entre el colectivo que usa protección auditiva frente al que no lo usa. Por último que las pérdidas auditivas en las frecuencias de 3000-4000 Hz son las más afectadas, correlacionándose ambas con la exposición al ruido. - 48 -