PROCEDIMIENTO ORDINARIO - 000503/2009 N.I.G.: 46250-33-3-2009-0006827 RECIBIDA 13-11 NOTIFICADA 14-11 SENTENCIA Nº 974 / 2012 TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DE LA COMUNIDAD VALENCIANA SALA DE LO CONTENCIOSO-ADMINISTRATIVO SECCIÓN 2 Iltmos. Sres: Presidente D/Dª MIGUEL SOLER MARGARIT Magistrados D/Dª RAFAEL MANZANA LAGUARDA D/Dª JOSEP OCHOA MONZO En Valencia, a doce de noviembre de dos mil doce.VISTOS, por la Sección Segunda de este Tribunal, los presentes Recursos Contencioso-Administrativos acumulados nums. 503 y 582/09, promovidos por ACCIÓ CULTURAL DEL PAIS VALENCIÀ, ASSOCIACIÓ CULTURAL DIMONIS DE L’AVERN, D. MANEL ALEXANDRE PUJADES VICENT, Dª. LAURA RUBIO HERAS, D. ROSER MARTÍNEZ RUBIO, Dª. TRINIDAD MARTÍNEZ RUBIO, D. JOSEP ANTONI ARAGÓ SERRANO, D. JUAN JOSÉ CANCIO DEL RAMO, Dª. PATRICIA IBARS CISTER, D. ROBERT BARBERÁ CERVERÓ, Dª. FELICIANA ALCOVER GARCÍA, D. JOSEP ENRIC PERIS RODRIGO, Dª. MARIA JOSÉ TORREGROSA PÉREZ, Dª. CARMEN MARTÍ MONROS, D. JOAN BAPTISTA GALAN VICENTE, Dª. ROSA Mª. VIELBA ALEGRE, Dª. SUSANNA PUCHADES VICENT, Dª. ISABEL GARCÍA RISQUEZ, Dª. FERNANDA GARCÍA RISQUEZ, Dª. MILAGROS CARBONELL CASARES, D. JOSEP DOLÇ MARTÍNEZ, D. ELIO MARTÍN CAMPBELL CHIAPPO, Dª. MARIA JESÚS FURIÓ MARTÍNEZ, D. JOSEP LLUIS PUCHADES VICENT y D. CRISTOBAL RUBIO HERAS, contra los Acuerdos plenarios del Ayuntamiento de Alboraia de 19/junio/09, sobre aprobación del Presupuesto general del ejercicio 2009; de 29/junio/09 sobre aprobación definitiva del “Plan de ocupación, modificación de la relación de puestos de trabajo y plantilla; y de 29/junio/2009, sobre modificación del Reglamento para la Promoción y Uso del Valenciano, en el que han sido partes, los actores, representados por el Procurador de los Tribunales D. Juan Antonio Ruiz Martín y defendidos por la Letrada Dª. Mercè Teodoro Peris, y como demandado, el AYUNTAMIENTO DE ALBORAIA, representado por la Procuradora de los Tribunales Dª. Asunción Garcia de la Cuadra Rubio y defendido por el Letrado D. Miguel Miravet Bergón; ha pronunciado la presente Sentencia. Ha sido Ponente el Ilmo. Sr. Magistrado D. Rafael Salvador Manzana Laguarda. ANTECEDENTES DE HECHO PRIMERO.- Interpuestos y acumulados los presentes Recursos y seguidos los trámites previstos en la Ley, se emplazó a las partes demandantes al objeto de que formalizaran su escrito de demanda, lo que se verificó en tiempo y forma, solicitando se dictara Sentencia anulando por no ser ajustado a derecho el acto recurrido y reconociendo sus pretensiones. SEGUNDO.- La Administración contestó a la demanda mediante escrito en el que se solicitó la desestimación del recurso y la confirmación íntegra de las resoluciones objeto del mismo, por estimarlas ajustadas a derecho. TERCERO.- Habiéndose recibido el proceso a prueba, se practicó la propuesta por las partes que resultó admitida, y cumplido dicho trámite se dio traslado a éstas para que formalizaran sus escritos de conclusiones, verificado lo cual quedaron los autos pendientes de deliberación y fallo. CUARTO.- Se señaló para la votación y fallo del presente Recurso el día treinta y uno de octubre último, en cuya fecha tuvo lugar. QUINTO.- En la tramitación del presente Recurso se han observado las prescripciones legales. FUNDAMENTOS JURIDICOS PRIMERO.- Los recurrentes dirigen sus pretensiones impugnatorias frente a determinadas actuaciones llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Alboraia, en el marco del denominado “Plan de mejora y saneamiento económico financiero”, cuya finalidad formal es la corrección del desequilibrio presupuestario, y que no ha sido objeto de aprobación expresa mediante Acuerdo Plenario; por ello, su recurso se dirige frente a las actuaciones aprobadas en tres Acuerdos plenarios diferenciados, pero conectados entre sí, a saber: 1º.- El de 19/junio/09, sobre aprobación del Presupuesto general del ejercicio 2009, 2º.- El de 29/junio/09 sobre aprobación definitiva del Plan de viabilidad, ocupación, modificación de la relación de puestos de trabajo y plantilla; y 3º.- El de igual fecha, sobre modificación del Reglamento para la Promoción y Uso del Valenciano. Se esgrimen los siguientes argumentos que, a juicio de los recurrentes, viciarían de nulidad tales actos; argumentos que vamos a analizar ciñéndonos a los tres bloques en los que se agrupan por aquellos: I.- El plan de viabilidad de empleo, encuentra su norma habilitante en el art. 15 de la Ley 30/84, en redacción dada por la Ley 22/93, de 29/diciembre, de Medidas Fiscales, de Reforma del Régimen Jurídico de la Función Pública y de la Protección del desempleo. Pero esta norma lo que prevé es la elaboración de Planes de Empleo dirigidos a la “óptima utilización de los recursos humanos”. Pero, en el presente caso lo que se prevé es la amortización de plazas, lo que constituye no sólo una medida excepcional, que debe ser justificada y negociada con las organizaciones sindicales, sino que contraviene la finalidad de los Planes de Empleo, que, con arreglo a lo dispuesto en el art. 18.bis del TRLFPV/1995, tienen como fin primordial “aumentar las capacidades de trabajo y las oportunidades profesionales del personal empleado público y, fundamentalmente, asegurarle y asignarle un trabajo efectivo y adecuado”. El documento obrante a los fols. 236 a 242 del expediente, refleja que las doce medidas concretas que se adoptan consisten en la reducción de empleados de la Corporación, amortizando 29 plazas entre funcionarios, personal laboral y eventual. De otra parte, las amortizaciones de puestos se justifican por la Corporación en los desequilibrios presupuestarios (fols. 227 a 232 del expediente) derivados del importante crecimiento de recursos humanos entre 1994 y 2008 y de la disminución de ingresos municipales desde 2005; sin embargo, del estudio de las tablas que reflejan la evolución de tales factores, se desprende que ni el número de efectivos, ni los gastos de personal, son las causas reales del desequilibrio presupuestario, ya que se omiten los análisis económicos y de gestión que permitirían determinar las causas reales de la actual situación y poner las bases para solucionarla. Tampoco existe ningún análisis o valoración de la dimensión de los servicios que debe prestar la Corporación, así como sobre sus objetivos estratégicos, como tampoco existe una reestructuración general, sino que únicamente se enumeran las plazas a amortizar. Y así, el propio Interventor municipal (doc. 16 del expediente del Plan de Empleo) denuncia la ausencia de un verdadero plan de ocupación que considere en su conjunto todas las previsiones relativas a los recursos humanos, y plantea asimismo sus objeciones con relación al complemento específico, la productividad y las gratificaciones de determinados colectivos funcionariales. Asimismo, no se habría negociado el Plan de Empleo, pues pese a que obra, como documento núm.12 del expediente, un certificado del Secretario de la Mesa General de Negociación del Ayuntamiento, haciendo constar que a lo largo de ocho sesiones se entregó documentación a la representación sindical y se trataron los temas relativos a la reorganización del Ayuntamiento, el Plan de Viabilidad en el empleo y su afectación a la Plantilla y RPT, lo cierto es que sólo hasta la reunión núm.7, los representantes sindicales no dispusieron de la totalidad de la documentación que precisaban, habiéndose denunciado por los sindicatos (v.gr: CCOO en el documento 28 del expediente) y por el propio Interventor (documento núm. 16 del expediente) la insuficiencia de la negociación, sin que se aceptara por el Ayuntamiento ni una sola de las propuestas o sugerencias efectuadas por la parte laboral, sin entrar siquiera a analizarlas. Los informes emitidos para garantizar la legalidad y oportunidad de las medidas adoptadas por el Plan de viabilidad de empleo, concretamente el de Recursos Humanos y el Jurídico, son insuficientes y genéricos, y sin efectuar análisis valorativo alguno, se limitan a dar por buenas las propuestas del Plan; así se hace ver en el Informe del Interventor, sin que se subsanen en la aprobación definitiva los defectos denunciados por el mismo. Todos los anteriores vicios invalidantes se proyectarían igualmente sobre la plantilla y el presupuesto municipal. Al margen del Plan de Viabilidad, existe una modificación en la Plantilla y en la Relación de Puestos de Trabajo carente de justificación a lo largo del expediente administrativo; concretamente, se trata de la creación de 7 puestos de trabajo de Coordinadores de Servicios, 9 de Directores de Oficina y 3 de Responsables de Unidad. Sólo hay reflejo de que son puestos destinados a funcionarios, pero nada consta acerca de su forma de provisión, contenido funcional o régimen retributivo. Asimismo, su creación resulta contradictoria con la amortización de puestos de trabajo prevista en el Plan de Viabilidad del empleo. II.- Por lo que atañe a la amortización de la plaza de Técnico especialista en promoción del valenciano, se trata de una plaza que existe desde 1999 reservada a personal laboral y desde la RPT de 2001 y OEP de 2002 (coincidiendo con la aprobación ese año del Reglament municipal per a la promoció de l’ús del valencià en el municipi d’Alboraia), clasificada para ser desempeñada por funcionario, grupo B, administración especial, subescala técnica, con la denominación de “Tècnic de promoció de l’ús del valencià”. Está desempeñada por la recurrente Dª. LAURA RUBIO HERAS, en virtud de sucesivos contratos laborales temporales (art. 15 ET), por lo que ha devenido indefinida. La amortización de la plaza, prevista en el Plan de Viabilidad, obedece a que “a fecha de hoy la mayoría de los funcionarios del Ayuntamiento y los ciudadanos, conocen con suficiencia el valenciano, por lo que las razones que motivaron la creación de la plaza ya no justifican el mantenimiento de la plaza” (fol. 19 del docum.num.1 del Plan). Esta afirmación sería inexacta, pues como demuestra la última encuesta (año 2005) sobre conocimiento y uso del valenciano, realizada por la Generalitat, en Valencia y su Area metropolitana (Horta Nord y Horta Sud), donde se ubica Alboraia, el conocimiento del valenciano está muy lejos de las previsiones que contenía la Llei 4/1983, d’Ús i Ensenyament del Valencià; tampoco es justificativa de la amortización de la plaza, la otra razón aducida por la Corporación cual es la asunción de otras funciones no relacionadas con la promoción del valenciano por parte de Dª. Laura Rubio, pues debe acudirse a la descripción de las tareas asociadas a la plaza 128 en la clasificación del puesto, y no a las tareas concretas derivadas de instrucciones recibidas de sus superiores. Finalmente, la amortización no ha sido objeto de negociación colectiva, ni se ha atendido a las alegaciones contrarias a su supresión, planteadas por diversos colectivos ciudadanos y por la propia empleada afectada, y tampoco existe justificación económica de la medida, pues el servicio de promoción lingüística está cofinanciado con otras instituciones, como la Diputación Provincial o la Conselleria de Educación. III.- Por último, se recurre la modificación del Reglamento Municipal de normalización lingüística, a la que se imputan no sólo omisiones procedimentales, sino una flagrante vulneración del deber de promoción del valenciano que recae sobre las instituciones públicas valencianas, en virtud del Estatuto de Autonomia y de la Llei d’Us. Concretamente, esta vulneración se pone de manifiesto en los siguientes aspectos: 1º.- Desaparece la Oficina de Promoció Lingüística (arts. 3, 4, 9 y 14), por lo que queda sin definir quien asumirá las tareas de fomento del valenciano, que tanto el preámbulo del Reglamento, como sus arts. 1, 2 y 4, señala como propias del Ayuntamiento de Alboraia, y se mantienen subsistentes. 2º.- En relación con la lengua de la Administración (art.6), así como la lengua en los ámbitos propios de comunicación, bienes de propiedad municipal y promoción de actividades (art.10), frente al empleo exclusivo del valenciano que se establecía en la redacción anterior, se opta por su redacción bilingüe (castellano/valenciano), suprimiendo así las medidas de discriminación positiva. 3º.- Se procede a la supresión de las medidas de fomento y subvenciones, información y asesoramiento a particulares y empresas, previstas en el suprimido art. 11 del Reglamento. 4º.- Se suprime la obligación del Ayuntamiento de disponer de consignación presupuestaria suficiente y estable para hacer efectivas las tareas, los objetivos y las competencias del Reglamento (art. 15). Analicemos, pues, los argumentos de los recurrentes. SEGUNDO.- En primer término y por lo que atañe a la impugnación del Plan de Viabilidad en el Empleo, éste aparece vinculado al Plan de Mejora y Saneamiento Económico-Financiero, obrante en el expediente referente al Presupuesto municipal y aprobado conjuntamente con la aprobación del Presupuesto. Los arts. 162 y ss. del R.D.Leg. núm. 2/2004, de 5/marzo, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, definen los presupuestos municipales como la expresión cifrada, conjunta y sistemática de las obligaciones que, como máximo, pueden reconocer la Corporación y sus organismos autónomos, y de los derechos que prevean liquidar durante el correspondiente ejercicio, así como de las previsiones de ingresos y gastos de las sociedades mercantiles cuyo capital social pertenezca íntegramente a la entidad local correspondiente; su ámbito temporal coincidirá con el año natural y a él se imputarán los derechos liquidados en el ejercicio, cual quiera que sea el período de que deriven y las obligaciones reconocidas durante el ejercicio, y por ello debe procederse a la aprobación definitiva del presupuesto general por el Pleno de la Corporación antes del día 31/diciembre del año anterior al del ejercicio en que deba aplicarse, aunque la jurisprudencia ha admitido su válida aprobación aún traspasado tal límite temporal, siempre que sus efectos puedan retrotraerse al 1/enero del ejercicio en que hubiese debido empezar a regir (Ss. TS de 18/enero, 20/mayo/2000 o 23/enero/2003). Es cierto que el art. 170.2 de la citada LRHL, restringe a tres supuestos los motivos de impugnación contra el presupuesto: a) Por no haberse ajustado su elaboración y aprobación a los trámites establecidos en esta ley. b) Por omitir el crédito necesario para el cumplimiento de obligaciones exigibles a la entidad local, en virtud de precepto legal o de cualquier otro título legítimo. c) Por ser de manifiesta insuficiencia los ingresos con relación a los gastos presupuestados o bien de estos respecto a las necesidades para las que esté previsto. Pero, como ha advertido el Tribunal Supremo, en Sentencia de 7/octubre/2009 (rec. 6275/2007): “Es claro que en la vía administrativa las reclamaciones que pueden efectuarse quedan circunscritas a los supuestos concretos que enumera el art. 170.2 del Real Decreto Legislativo, y ello es así porque las reclamaciones que se efectúen a tenor de ese artículo, han de ponerse en relación con el apartado 1 del anterior artículo 169 del Real Decreto Legislativo, puesto que forman parte de un trámite de participación ciudadana frente a un acto de trámite como es la aprobación provisional del presupuesto, pero no puede entenderse como se deduce de lo que expone la Sentencia, que el posterior recurso contencioso administrativo quede constreñido a esos aspectos del presupuesto, ya que las pretensiones de las partes se deducirán en el escrito rector del proceso y no es posible reducirlas de antemano del modo que según el artículo 170 del Real Decreto Legislativo se establece para las reclamaciones administrativas. Entenderlo de ese modo sería tanto como negar la posibilidad de interponer el recurso contencioso administrativo frente al presupuesto aprobado definitivamente a quienes no hubieran reclamado previamente el mismo por alguna o algunas de las causas a que se refiere el art. 170.2, lo que sería tanto como negar el control por los tribunales del acto de aprobación definitiva del presupuesto, algo incompatible con lo dispuesto por el art. 106.1 de la Constitución que les encomienda el control de legalidad de la actuación administrativa y el sometimiento de la misma a los fines que la justifican, y que ello es así lo demuestra también el que el artículo 171.3 del Real Decreto Legislativo disponga que la interposición de recursos no suspenderá por sí sola la aplicación del presupuesto definitivamente aprobado por la Corporación, sin perjuicio de la posibilidad de quienes recurran de solicitar del Tribunal la suspensión cautelar del presupuesto”. Acreditada, pues, la posibilidad de los recurrentes para plantear impugnaciones frente al Presupuesto y Plan de Mejora y Saneamiento Económico-Financiero aprobado junto con el anterior, así como frente al Plan de viabilidad del empleo, se trata de valorar la consistencia y eficacia de sus argumentos de fondo, advirtiendo que, en cualquier caso, el control de legalidad queda siempre limitado al ámbito de la esfera jurídica de los intereses de los recurrentes, que no ostentan una acción pública en esta materia que trascienda de dicho ámbito tutelado por el derecho. Así las cosas, las alegaciones que se formulan por éstos frente a tales instrumentos –Presupuesto, Plan de Mejora y Plan de Viabilidad en el Empleo-, entrañan un control de legalidad que no les incumbe, en tanto no genera una proyección directa sobre el ámbito de sus intereses individuales. Y en cualquier caso, lo cierto es que, frente a sus alegaciones de insuficiencia de justificación, falta de informes preceptivos o de negociación colectiva, la Corporación municipal, en su contestación a la demanda, hace descriptiva y detallada reseña del amplio conjunto de documentación obrante en el expediente administrativo, justificativa de la necesidad de adoptar un Plan de Viabilidad del empleo; y así, en la Memoria del Plan de Mejora y Saneamiento alude al objetivo de retornar a la estabilidad presupuestaria, dado que las medidas de corrección aplicadas durante los ejercicios 2002 a 2007 fueron insuficientes (pags. 107 y 108), y en el mismo se expone la situación económico-financiera del Ayuntamiento y el saldo negativo del presupuesto en 2007 (pags. 112 a 128), adoptándose una serie de medidas de reducción del gasto a corto y medio plazo, que afectan, entre otras partidas, a los gastos de personal, que suponen un porcentaje del 62 % de los recusos del Ayuntamiento, así como de incremento de ingresos (pags. 132 a 167); entre dichas medidas aparece la aprobación del Plan de Viabilidad en el Empleo. El equilibrio de la situación económico-financiera requiere una reducción de los gastos de personal en un 26 % (pags. 134, 137 y 138 del Plan de Saneamiento y 23 del Plan de Empleo), lo que supone una amortización de plazas vacantes de funcionarios, de plazas cubiertas por funcionarios interinos o por laborales temporales que resulten innecesarias, de jubilaciones, supresión de contrataciones estacionales y otras reducciones en materia de retribuciones, horas extraordinarias, etc.. Aparecería, por tanto, acreditada la justificación económica del Plan de Viabilidad. Asimismo, se han emitido informes de los Departamentos de Recursos Humanos (docs. 13 y 14), de los Servicios Jurídicos (doc. 15) y de Intervención (doc. 16). Cabe la legítima discrepancia frente a tales motivos, así como frente al contenido de los informes preceptivos, pero ello no constituyen argumentos impugnatorios jurídicamente válidos. Existió igualmente negociación en el seno de las correspondientes Mesas, y así lo acredita la certificación emitida por su Secretario, siendo, en su caso, los titulares del derecho a la negociación, quienes pueden acudir a la vía judicial para denunciar eventuales limitaciones o insuficiencias producidas en el seno de la misma, y debe recordarse a este respecto que, como se afirma por el Tribunal Supremo, en Sentencia de 10/julio/2012 (rec. 6484/2010), reiterando la doctrina establecida en anterior Sentencia de 27/enero/2011 (rec. 5854/07): "la observancia del requisito de la negociación obligatoria comporta que se haya ofrecido la posibilidad de llevarla a cabo por quien tiene la obligación de promoverla, pero su cumplimiento no impone que la actividad desarrollada con esa finalidad haya culminado necesariamente en un resultado positivo de coincidencia plasmado en la perfección de un determinado pacto o acuerdo...". Finalmente se aprobó la propuesta de resolución (doc. 17), se emitió dictámen de la Comisión Informativa (doc. 18), se procedió a su aprobación inicial por resolución plenaria de 27/abril/2009, sometimiento a informacion pública en el BOP y trámite de audiencia a los interesados (doc. 19), culminando todo ello con su aprobación definitiva. Respecto a los demás extremos de discrepancia, relativos a la plantilla y RPT, concretamente, las discrepancias expuestas acerca de la creación de nuevos puestos de trabajo, su forma de provisión, su contenido funcional o su régimen retributivo, entre otros extremos, no pueden ser acogidos, pues, como se dijo anteriormente, no existe accion pública en esta materia, a diferencia de lo que sucede en otros sectores (v.gr: urbanismo); ello impide que un ciudadano, o incluso un empleado de la Corporación, pese a su nivel más intenso de vinculación con ésta, pueda ejercitar un control abstracto de la legalidad de la actuación de la misma, en cualquiera de sus ámbitos, pues su legitimación queda restringida a aquellos actos o disposiciones que de algún modo afecten o se proyecten sobre la esfera de sus legítimos derechos e intereses; así pues, serán los afectados por las concretas modificaciones de los puestos de trabajo, e igualmente, los sindicatos y órganos representativos de los intereses colectivos del personal, los únicos que puedan reaccionar judicialmente frente a posibles actuaciones administrativas que se juzguen contrarias a derecho. Deben, pues, desestimarse las pretensiones referentes a estos extremos. TERCERO.- Y en lo que se refiere a la amortización de la plaza de “Tècnic de promoció de l’ús del valencià”, debe analizarse conjuntamente con la relativa a la supresión de la Oficina para la Promoción del uso del valenciano, ya que esta Oficina, de conformidad con lo dispuesto en el art.14 del Reglamento municipal para la promoción del valenciano, venía dotada de los siguientes recursos bhumanos y materiales: “a) Un técnico de promoción lingüística a jornada completa, b) Equipo informático y c) Dotación para biblioteca básica de consulta y suscripción a publicaciones oficiales y profesionales específicas”. La plaza está desempeñada por la recurrente Dª. LAURA RUBIO HERAS, lo que atribuye a ésta legitimación procesal suficiente para recurrir su amortización y el desmantelamiento de la Oficina de promoción del valenciano, constituye materia directamente vinculada a los intereses cuya defensa asumen estatutariamente la entidad ACCIÓ CULTURAL DEL PAIS VALENCIÀ, de modo directo, e indirectamente la ASSOCIACIÓ CULTURAL DIMONIS DE L’AVERN. El art. 6.5 del Estatuto de Autonomía valenciano dispone que “se otorgará especial protección y respeto a la recuperación del valenciano”; asimismo, del Preámbulo y de los arts. 28 y 33 de la Ley 4/83, d’Ús, deriva una específica obligación para los Ayuntamientos de fomentar el uso del valenciano en todas las actividades administrativas de los órganos que de ellos dependan, así como en las actividades profesionales, mercantiles, laborales, sindicales, políticas, recreativas, artísticas y asociativas. Finalmente, el art.2 del Reglamento municipal de promoción del valenciano, en sus letras b) y c), subsistentes tras la modificación del mismo, señalan entre sus objetivos “promover la recuperación del valenciano y fomentar su uso en todos los ámbitos de la vida ciudadana” y “hacer efectivo el uso oficial del valenciano, como lengua propia de la Administración local y el municipio de Alboraia”. Retomando lo que se argumentaba en el fundamento jurídico segundo de esta resolución, cabe recordar que el Tribunal Supremo, en Sentencia de 10/julio/2012 (rec. 4916/2011), afirma que esta Jurisdicción está llamada a ejercer el control de las cuentas de un ente público cuando se esgrime como motivo o causa de impugnación el que prevé ese art. 170.2.b), en el que se dispone que "podrán entablarse reclamaciones contra el presupuesto... Por omitir el crédito necesario para el cumplimiento de obligaciones exigibles a la entidad local, en virtud de precepto legal o de cualquier otro título legítimo", y que del mismo modo, existe un interés privado hábil para legitimar la impugnación, en quien es titular del derecho a que afecta el crédito omitido. En el presente caso existe, pues, una obligación exigible al Ayuntamiento de Alboraia de promover el uso del valenciano, en los ámbitos a los que se ha hecho referencia. Sostiene la Corporación que el hecho de tener aprobado un Reglamento de Promoción del valenciano, evidencia que está dando cumplimiento al art. 28 de la Ley 4/1983, y que, de hecho, el Cap.III de dicho Reglamento prevé expresamente la promoción de su uso, sin que la creación de una Oficina de Promoción venga impuesta por la citada ley u otra norma legal, y el acuerdo de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias no es sino una mera recomendación al respecto. Sin embargo, lo cierto es que, al margen de otras modificaciones que son reflejo de la concepción que de la protección y fomento de la lengua tenga cada equipo político gobernante (art. 6, 11, etc., del Reglamento), pues el art. 30.1 de la Ley 4/83 únicamente dispone que las Corporaciones locales “podrán” exceptuar y bonificar respecto de obligaciones fiscales a aquellos actos y manifestaciones relacionados con el fomento, divulgación y extensión de la cultura valenciana, recibiendo una consideración especial las que conlleven el uso del valenciano, y su núm.4 sólo establece que “Los impresos, formularios y modelos oficiales que hayan de utilizar los poderes públicos en la Comunidad Valenciana deberán redactarse en forma bilingüe”, por lo que una y otra opción –la que se hallaba vigente y la adoptada por la nueva Corporación- se ajustan a las exigencias legales, existe sin embargo una actuación de trascendencia, cual es la supresión de la Oficina para la promoción del uso del valenciano y, por tanto, de todas las referencias que a la misma se contienen en el Reglamento (rúbrica del Cap.III, arts. 3, 4, 9, 14 o 15), y amortización de los puestos que la integran, asumiendo la Corporación el compromiso de crear un departamento encargado de la promoción de su uso. Ahora bien, el art. 14 contenía un explícito compromiso de consignación presupuestaria (“El Ayuntamiento de Alboraia deberá disponer de consignación presupuestaria suficiente y estable para hacer efectivas las tareas, los objetivos y las competencias de la Oficina para la Promoción del uso del valenciano y del presente Reglamento”), que desaparece con la modificación y se sustituye por un compromiso más genérico e impreciso en su nuevo art. 12 (“El Ayuntamiento de Alboraia deberá disponer de consignación presupuestaria suficiente y estable para hacer efectivas las tareas y los objetivos del presente Reglamento”), que no consta que haya producido en términos que permitan asegurar la obligación que pesa sobre la Corporación de promocionar el uso del valenciano, y que le viene impuesta no sólo por el art. 28 de la Llei d’Ús, sino por otros propios preceptos de su Reglamento, que se mantienen subsistentes y por tanto vigentes, entre los que cabe descatar el art.2 en sus apartados b) y c). No acredita el Ayuntamiento que la promoción del uso del valenciano, tras la supresión de la Oficina de Promoción, se haya seguido realizando a través de otros medios, por lo que hay que concluir que dicha supresión y con ella la amortización de la plaza de Técnico de Prfomoción lingüística, suponen una vulneración de las obligaciones que pesaban sobre la Corporación y son, en consecuencia, contrarias a derecho, por lo que procede anularlas y dejarlas sin efecto. Y en lo que atañe a la amortización de la plaza de técnico de promoción lingüística, la inclusión de esta medida en el conjunto que ha sido objeto de negociación en la Mesa correspondiente, no supone sino el cumplimiento de un trámite imperativo que debe preceder a la adopción de la decisión administrativa al respecto, pero no otorga, por sí mismo, garantía de legalidad a ésta. Y realmente, no puede desvincularse la amortización de la plaza, de la supresión de la Oficina en la que la misma se inserta, y que no es sino una de sus consecuencias. Ahora bien, la recurrente Dª. Laura Rubio, no solicita en la demanda el reconocimiento de ninguna situación jurídica individualizada a su favor, vinculada y derivada de la anulación de la amortización del puesto que desempeña, por lo que, por estrictas razones de congruencia procesal, el pronunciamiento judicial debe en este punto limitarse a la mera anulación del acto recurrido. Así las cosas, y a la vista de los argumentos expuestos, debe ser objeto de acogimiento parcial el presente recurso. CUARTO.- No se aprecian motivos para un especial pronunciamiento de imposición de costas, a tenor del art. 139 de la Ley reguladora de esta Jurisdicción. VISTOS los preceptos citados, concordantes y demás de aplicación al caso, F A L L A M O S I.- Se estima parcialmente el Recurso Contencioso-Administrativo interpuesto por ACCIÓ CULTURAL DEL PAIS VALENCIÀ, ASSOCIACIÓ CULTURAL DIMONIS DE L’AVERN y Dª. LAURA RUBIO HERAS, , contra los Acuerdos plenarios del Ayuntamiento de Alboraia de 19/junio/09, sobre aprobación del Presupuesto general del ejercicio 2009; de 29/junio/09 sobre aprobación definitiva del “Plan de ocupación, modificación de la relación de puestos de trabajo y plantilla; y de 29/junio/2009, sobre modificación del Reglamento para la Promoción y Uso del Valenciano. II.- Se anulan y dejan sin efecto, por ser contrarios a derecho, los anteriores acuerdos, exclusivamente en cuanto disponen la amortización de la plaza de “Tècnic de promoció de l’ús del valencià” y la supresión de la Oficina para la Promoción del uso del valenciano. Se desestiman los demás motivos del recurso. III.- Se desestima el recurso contencioso administrativo interpuesto por D. MANEL ALEXANDRE PUJADES VICENT, D. ROSER MARTÍNEZ RUBIO, Dª. TRINIDAD MARTÍNEZ RUBIO, D. JOSEP ANTONI ARAGÓ SERRANO, D. JUAN JOSÉ CANCIO DEL RAMO, Dª. PATRICIA IBARS CISTER, D. ROBERT BARBERÁ CERVERÓ, Dª. FELICIANA ALCOVER GARCÍA, D. JOSEP ENRIC PERIS RODRIGO, Dª. MARIA JOSÉ TORREGROSA PÉREZ, Dª. CARMEN MARTÍ MONROS, D. JOAN BAPTISTA GALAN VICENTE, Dª. ROSA Mª. VIELBA ALEGRE, Dª. SUSANNA PUCHADES VICENT, Dª. ISABEL GARCÍA RISQUEZ, Dª. FERNANDA GARCÍA RISQUEZ, Dª. MILAGROS CARBONELL CASARES, D. JOSEP DOLÇ MARTÍNEZ, D. ELIO MARTÍN CAMPBELL CHIAPPO, Dª. MARIA JESÚS FURIÓ MARTÍNEZ, D. JOSEP LLUIS PUCHADES VICENT y D. CRISTOBAL RUBIO HERAS. IV.- No procede hacer imposición de costas. La presente Sentencia no es firme no es firme y contra ella cabe RECURSO DE CASACION ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, que deberá prepararse ante esta Sección en el plazo de DIEZ días y en la forma que previene el art. 89 de la LJCA. A su tiempo, y con Certificación literal de la presente, devuélvase el expediente administrativo a su centro de procedencia. Así, por ésta nuestra Sentencia, lo pronunciamos, mandamos y firmamos. PUBLICACION.- Leída y publicada ha sido la anterior Sentencia por el Ilmo. Sr. Magistrado Ponente que ha sido para la resolución del presente recurso, estando celebrando audiencia pública esta Sala, de la que, como Secretario de la misma, certifico en Valencia, y fecha que antecede.