An© i! (Segrunda época) Núm. 41 F E R I O O I O O SUBSCRIPCIÓN : Trimesfre, 2'25 pías.; número suelto, «'15 ptas. S Hi ^4: A IsT A . S á b a d o , 2 6 de Septiembre de 1931 EL PROBLEMA DE LA TIERRA Los esforzados parias de la gleba, seres de rostro desde lejanos tiempos andan en duro e interminable trajín trabajo alguno, m condiciones retributibas en jornal y en un par de decretos publicados por el gobierno provisional mediante ta presentación legal de una instancia al juez, actualmente trabajen. enjuto y negruzco tostado por el sol, que sobre el terruño, no conociendo horario de respeto, han levantado la inclinada cerviz ante de la República, en los cuales se les autoriza revisión del contrato y de la propiedad aue r r ^ L REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN: Calle Salvador Seguf, 27 — — IGUALADA ñable lazo de la solidaridad económica y moral, marchar a grandes zancadas hacia la nueva', era de la justiciq sociai. &l problema de la tierra es el problema social por excelencia, y el que ocupa la primera piaza en la vida de la humanidad. De Iq solución de él depende el bienestar y la libertad entre los hombres. Significa, es cierto, esta promulgación decretal, una posible reducción en el pago del contrato en metálico o en frutos, y el público conocimiento de las inmoralidades que cometen los propietarios a espaldas de la ley, como contribuyentes. La conocida y popular institución «Unión de Rabasaires de Cataluña», acaudillada por los dipulados parlamentarios, señores Luis Companys y Amadeo Aragay, en principio y muy calurosamente, iniciaron una campaña, con el buen propósito de dar a conocer el contenido de los decretos, y precisar la manera de comportarse según la legalidad vigente. Y una de las expresiones que alcanzaba mayor exiio rque ellos la usaban como golpe de Juerza convincente, aunque emanaba de los decretos, era que el aparcero, arrendatario o «rabassaire», podia demorar la entrega de ía renta: sm temor al deshaucio hasta que la junta tipo de pagacion. mixta nombrada aUfeclo entre propietarios _ Comarcas enteras, pueblos en masase conmovieron, justicia, y acudían en tropel de distintos lugures al juzgado revisión. y trabajadores, hicieron suyo de su distrito no fallara, fijando ' el el eco de esa voz de mínima con la consabida instancia de Prometia ese levantamiento del obrero campesino catalán ser compacto y enteramente regional, y de ello a la larga se podia atender otras y muy buenas consecuencias desde el punto de vista social. Preveyendolo. los propietarios agricultores que componen el «Instituto Agrícola Catalán de San Isidro» se asustaron, pusieron ei grito al cielo y se fueron a ver el señor gobernador civil de la provincia de Barcelona, Anguera de Sojo. para que enmendara la tal revisión cortándola a lo vivo. Este indigno .señor se atrevió a eso, malhabló en contra délos decretos o sea de la República, y aparentemente desautorizo la virtud de ambos, ' A su vez el señor maciá, presidente de la Generalidad de Cataluña y <.agüello» de todos los catalanes, llevado de su buena fe y limitadísima compresión, aconsejó con su voz paternal que por este ano y mientras no estuviera aprobado el providencial Estatuto Catalán, era un deber de todo ciudadano de noble corazón entregar sin chistar la renta a la manera de antaño. Los señores Luis Companys y Amadeo Aragay resistieron estos ataques, y organizaron algún acto para deshacer esos enormes absurdos, pero .. el dia veintiuno de septiembre de 1931 reunidos en el palacio de la Generalidad, bajo la presidencia del señor Maciá. con la asistencia del gobernador Anguera de Sojo, y una representación del «Instituto Agrícola Catalán de San Isidro» y otra de la ^Unión de rabassaires de Cataluña-, en la cual había Companys y Aragay, capitularon a toda raya y dejando de lado ¡as razones y derechos judiciales de los decretos, se avinieron en un pacto, que si económicamente resulta benelicioso al campesino, moralmente es la más soez negación y traición al mismo tiempo de la campana, de la palabra públicamente comprometida de estos señores, y de la confianza y franca estima que la gente del campo ¡es depositó en sus gestiones. T>aos cuenta hermanos del agro, de qué manera proceden ¡os poiíticos y ¡egu¡eyos, cuando de vuestra suerte se trata. Para eüos vuestro probtema agrario no es ni humano, ni sociai, sino simpiemeníe político. Se engarzan como en e¡ caso que nos ocupa en vuestros asuntos reivindicadores, pero es tan soto para extraer ganancia y púbüca significación. Su problema, su posición, y su horizonte social es el de los mandarines de la democracia española, mode¡o de ¡as democracias burguesas del más puro desprecio a la libertad y redención de los pueb¡os La dura lección que se desprende de este acontecimiento debiera serviros de norma y de guia. Aprovechad debidamente e¡ derecho de revisión de propiedad que ¡a ¡ey os autoriza; aprovechada ese vital resurgimiento de vuestras votuntades, agrupándotas, organizándo¡as en sentido emancipador, independiente, sin caudiüaje otutelaje poiitico, que os permitan ser vosotros mismos ios únicos y directos inleresados en mejorar y ennoblecer el pesado trabajo de ¡a tierra Tensad que el porvenir arlifícialífino e industrialización del mundo moderno está en ia tierra. La' actual se inclina por el retorno a ¡a natura. civilización Conviene que ¡a organización de ciase de ¡os proletarios dei campo esléala misma organización procelaria de los obreros de la industria. Y todos unidos, organizados harta de aitura que ¡a por ese entra- Jesús Delgado Sugerencias volanderas S o m o s partidarios de la ociosidad. Nos gusta tumbarnos panza arriba sobre mullido c é s p e d , e n serena contemplación de las cosas altas O c o n c e m r a d o s en vivo y hondo soliloquio, ir desm e n u z a n d o las sagradas entelequias del O l i m p o . Casi todo el bagaje cultural que gravita en el íondo de nuestro espíritu lo h e m o s absorvido manteniendo la ociosa posición de la dolce fórmente. Parece que sea la única y natural acción para adentra en las intimidades del alma h u m a n a los tesoros rubicundos de la belleza y de la verdad. S u m a n larga lista los grandes varones del pen* s a m i e n t o que tumbados en donde sea, han llegado a g e n i o s del arte o industria escogida a v o c a c i ó n . L o s griegos, perfectos maestros de la ociosidad, fueron la raza genial por excelencia, que dentro el más breve espacio tiempo, lograron concebir y estructurar los eternos sistemas vitales de là ciencia, de la filosofía y el arte. Bien mirando el maravilloso «Pensador/> de Rodin, trabajado sobre piedra viva, se descubre en su actitud preñada de cavilación, ef m á s entero simbolismo de la ociosidad. * « * ¡Qué cosa tan absurda es la neutratídadi ¡Con qué e n c o n o la defienden esas palurdas personas de rancios pensares y vacíos sentimientos! Alguna vez, m u y seriamente, me he propuesto hacer una averiguación detectivesca, a fin de saber certeramente cual cosa es la neutralidad en la presente vida. Y tras largas y subterráneas pesquisas he sacado en claro que la neutralidad no es c o s a , ni sentimiento, ni ideación, sino holgazanería de la gente harta. Fijaos, n o m á s , cuales s o n , y en qué consiste el c o m p o r t a m i e n t o de la gente y los partidos llam a d o s neutros. Su primera obligación es, la irresponsabilidad ; la segunda desentenderse' de todo, vivir en calma católica y escamotear del próji.mo lo que se p u e d a ; y la tercera tener al alcance del deseo una buena coima para que dé los nuevernesinos frutos del matrimonio. ¡Neutralidad, ley mayor de la ínsula s a n c h o panzesca! A. (O CO c Ç3 •a co EL Ambient de verema Treball S e m b l a una c o s a fatal que les c o s e s dolentes é s fiquin per tot arreu. A les veremes franceses aquest fenomen no bi ha mancat pas. S'hi h a introduït una mena de plaga que ve a ésser c o m la de la llagosta. E s l'entrepreneur que diuen per aquí. El contratista o l'empressari, que s'en va a trotear als propietaris, els pren les veremes á preu fet i lloga a l a gent pagant-los cinc, deu o quinze francs m é s de jornal que l'ordinari. N o pregunteu pas c o m se ta el treball en aquestes vinyes q u e s'hi ha introduït aquesta plaga. A cada c o m p a n y i a hi h a un encarregat que cuida que la teína es faci depressa, N o hi fa res que quedin la mitat de raïms per terra, que barrejats a m b els que's cullen hi hagi la mitat de fulles i que's trinxin alguns seps. La qüestió és acabar aviat. El treball en aquestes condicions, és pesat i fastigós. I la coftséc|ü'ència de la intromissió d'aquest paràsit que's fa ric especulant a m b la recolecció del raïm, és que va desapareixent la forma típica del treball de verema de França de n o matar-se i d'intercalar la tasca a m b alguna broma de les alegres culHdores. La dona d'edat i el noiet i la noieta d'onze a quinze a n y s que s'anaven a defensar un jorualet a m b aquestes v e r e m e s , tenen la tendència a desaparèixer perquè per treballar així es necessita gent jove i forta. L a collita és m é s petita per la quantitat de raïm q u e ' s fa malbé. I c o m que el treball es ta a m b m é s rapidesa, deixa a un gros contingent de gent q u e s'hauria pogut llogar, en atur forçós... Però en canvi hi ha un tipus, Ventrepreneur, q u e a m b motiu d'aquestes c a l a m i t a t s , fa uns q u a n t s mils francs... Nosaltres h e m tingut la desgràcia d'anar a parar a treballar per una pinta d ' a q u e s t e s ; qué hi tarewï. Hi ha hagut e x c é s de braços i heni tingut de llogar-nos allà on h e m pogut. « C a n t e Jondo" La colla d£ c o m p a n y s de treball forma un conjunt l3a.staht abigarr^t. Hí ha representació de quasi totes les regions de la Península Ibèrica. P o r t u g u e s o s , valencians, aragonesos, catalatis, m u r c i a n s , andalusos... El propietari té una casa adequada per h o s tatjarà la <íolla que necessita en temps de v e r e m a . I en una saja que fa de cuina i menjador, en la q u e hi ha qnes llargues taules improvisades i al tons una infjpiensa Har on hi fa el menjar tota¡ la colla, n o hi pianca mai en havent sopat, la tertulia de «cante iondo». Hi ha algun murcià, algun andalús i fins algun valencià, aficionats al cant flamenc, q u e ens obsequien a m b alguna sonata de «cante jondo» a m b v e u de castalia. H i ha també alguna «i^ntaora que val a dir que canta a m b m é s art i a m b m é s bona v e u . A l g u n e s vegades mentres escrivim a la família, a algún amic o alguna cuartilla per a E L SEMBRADOR, tenim a la vora algun cantaire d'aquests, que s'obstina en eclipsar a Pepito «La Terla», Juanito «El Dorado», Paco Linares, e t c . i q u e ' n s allarga de tant en tant d'una manera molt formal, una copa de vi i un paquet de cigars... A pesar del poc art, he passat alguna vetllada agradosa en mig d'aquesta gent que l'atzar m'ha deparat c o m a c o m p a n y s de fadiga en el fons de quines tertulies no deixa de sentir-s'hi una sincera nota de sentimentalisme pur. Dansa A q u e s t s pobles agricols, són c o m tots ets p o b l e s , ensopits en qüestió de diversions. Per això en temps de verema, com que hi ha una gran afluència de gent jove d ' a m b d ó s s e x e s , aprofiten aquests dies per divertir-se. Cada dia s'organitza ball de_ vetlla. U n s balls —hi ha dues sales en aquest p o b l e — q u e s ' o m p l e nen de veremadors i veremadores disposats a puntejar fins a l'iiltitna nota. SEMBRADOR A q u e s t ball és de lo més democràtic. Res de cares enfarinades, ni llavis pintats, poses estudiades ni xicots galvanisats sota una vestimenta que els fa aparèixer c o m un maniquí... E s gent que va a saltar i brincar sota els acords d'una música de bullanga q u e toca d'una manera esbojarrada uns balls que s e m b l e n adequats a les ganes de bromejar de les parelles que hi a c u d e i x e n . . . La nota m é s x o c a n t , és que moltes parelles no s'entenen per ésser de nacionalitat diferenta. Però coincideixen i s'entenen perfectament a m b el gest, a m b l'expressió riallera... E s la forma d'esplai d'aquests dies, c o m a c o m p e n s a c i é a la continuada jornada de la v i n y a . . . J. Cuatrecasas Mosaic Anguera de Sojo, aquell sac de verí que odia la joventut i la fermesa perquè ell és xacrós i c o s a vulnerable, no es cansa d'empastifar la paraula llei a m b la seva boca, m é s capaça de vomitar improperis contra els obrers conscients que de deixar anar una paraula: llibertat, que tornaria a m b son poder la tranquilitat a moltes llars proletàries. Aquest h o m e de lleis que ha sigut glosat, alabat i incençat per la premsa ultramontana i monàrquic-republicana; aquest magistrat que tant presumeix de doctrinari en afers legislatius, és l ' h o m e que m é s s'ha passat per sota l'esquena la llei escrita, qUe converteix e n b o n s els procedim e n t s borbònics i qui més procura pel desordre i pel descrèdit de la República. A m b unes setmanes de governar, ha provocat una sagnanta vaga a Barcelona i ha aixecat la protesta unànime dels pobles de Calellai V i l a n o va i Geltrú a m b les detencions abusives, canallesques dels c o m p a n y s Broto i Arans. A q u e s t Anguera de Sojo és un subgecte que es riu del Dret, de la Democràcia i d e la mateixa Llei. Anguera de Sojo és un sàdic que vol rec r e a r s e marfiritzant el poblie treballador. A n guera de Sojo no és un jurista independent sinó un trist llogat que vol fer contents els s e u s a m o s de Madrid. Anguera de S o j o , no representa res més que la deshonra de Barcelona i el descrèdit de la R e pública. Q u e d e u - v o s a m b ell, reaccionaris, E s ven vostre. ^ Els qui a cada tñoment invoquen ia Llei, deurien dir-nos perquè essent-ne ella tan justa hi han persones que pateixen fam havent-hi m e n jar sobrer ; perquè gaudeixen de més aventatges socials els ganduls que els treballadors; perquè la terra la treballen uns i se n'aprofiten altres ; perquè als presidis sols hi han pobres; perquè l'assassinat d'una sola persona és cosa c o n d e n a ble i l'assassinat de moltes és cosa glorificable : perquè es confia l'ordre als màusers ; perquè l'alta instrucció és privaüva dels paràsits adinerats ; p e r q u è . . . Perquè la Llei és una enorme Menuda, quin destí no é s altre que justificar i defensar una societat fonamentada a m b ia més greu de les injusficies : l'escarni al productor. Al redactar la Llei, als treballadors no s e ' n s tingué en c o m p t e . N o som pas nosaltres d o n c s , els qui deuen retre acatament a les disposicions agenes. ^ L e s baboses del Diari d'Igualada han pretès infamar la memòria del màrtir Ferrer i Guardia, inventant-se unes indecències que e n caixen molt bé en les planes d'aquell paper infecte. A les baboses del minúscul Diari d'Igualada els ha costat poc de convertir en La Vergonya d'Igualada el periodiquet igualadí (?) inspirat i pagat per la Cova o Cavçrna de Manresa. ^ Aixequeu mantes vegades el calze i quan us senfiu atacats de belicisme religiós, agafeu una personalitat laica i l'afuselleu a Montjuïc. Morta ja, us afluixeu els pantalons i planteu d a m u n t del cadàver totes les impureses que tenen per estoig el vostre c o s . D e s p r é s . digueu que el vicUmat era un criminal i un indecent. I haureu guanyat la gloria del c e l . . . i una subscripció gratis del Diari d'Igualada. ^ A s s a b e n t e m als Lluïsos, als Marianos, a les Filles de Maria, a les Estropatjoses i demés corporacions religioses, que a Igualada va a ésser infantada, dintre de poc, una Agrupació Lliurepensadora destinada a fer-li el contrapès a la reacció. Cal advertir q u e el novell agrupament ve d e cidit a demostrar que es pot fer poc soroll i posseir moltes anous. ^ Garroti de l'obrer cristià : (Música «El Pais de las Hadas»). (Chor) Balla, balla cap de fusta balla, balla el garroti per gastar tanta catxassa n o calia vení aquí! de (Cristià) Soc un h o m e que hi fet pena, gairebé [tota la vida, pels burgesos i carcundes m'he deixat pendre la ' [mida. J o treballo unes dotze hores i soc de la Mariana i a m b això g u a n y o indulgències... i puc badallà [degana. (Chor) Ai rellamp quins disbarats, ai rellamp quins disbarats, vols jugar que aquesta pinta s'ha cregut que estem torrats! U n i dos són tres are mateix et fessin pres, perquè aquí en aquesta terra no hi serveixes pas per res. (Mutis per l'esquerra) Kunitu Recuerdos antiguos y memorables III En los últimos días de Diciembre de 1889, nueatro bien querido compañero Fernando Tarrida del Mármol, nos explicó en Una conferencia, el tema: «El trabajo de lioy y el trabajo de mañana». Si yo tuviera para escribir la cuarta parte de la» facilidades que él tenía para liablar, me daría por feliz y satisfeclio al poder comunicar a la Humanidad presente las altas concepciones y las convincentes razones que nos explicó aquella nòcbe, para mi inolvidable. Las demostraciones irrevocables, los argumentos contundentes y las razones tan claras, me hicieron ver un mundo completamente nuevo y fraternal, y aborrecer aquel presente arcaico y corrompido por el egoismo y la brutalidad. Ten^d presente, compañeros y lectores, que me refiero a 41 años atrás; y pido se me dispense si no lo presento en forma literaria, ni menos gramaticalmente, ya que no alcanzo más. Nos tuvo más de una hora pendientes de su eálida y bien argumentada peroración, sin que nadie osara resollar por no perder ni una sola frase; el local llenísimo, y con un calor asfixiante, aún que estábamos en Diciembre; pero n"die se movía ni se cansaba nadie; el tiempo transcurría agradablemente. A la acción de sus brazos, correspondía lajfogosidad de 9 u palabra. A lo mejor ae le escapaban los puños planchados y él sin dejar de hablar ni titubear en nn concepto, era la admiración y la atracción de todo el auditorio. Empezó su conferencia asi: «Al querer hoy demostraros la diferencia que existe en el trabajo que se realiza en el presente y del modo que se realizará en el porvenir, el trabajo del mañana quedará completamente desconocido». aHoy día, tal comoae efectúa la labor en todos loa sectores del saber, como en todos los quehaceres de la agricultura; lo mismo en las obras de construcción deedificios como en Us talleres y fábricas de todo género; igual en los muelles que lo que sucede en las minas; lo que se observa en los buques qué llevan mercancías a. semejanza de lo que se ve en almacenes, despachos y toda clase de trabajos; el trabajo de hoy, obligatorio, ea completamente repulsivo y denigrante». (O ¿? I CO c Ç3 •a co EL «Entiendo qué hoy existen trabajos pesados y tra_ bajos ligeros: entre los últimos, los hay de muy difícileg porque se refieren a los trabajos científicos, matemá, ticos y de cálculo; en cambio de los primeros, loa hay de pesadísimos y peligrosos, entre éstos, los agricultores, albañiles, curtidores, fundidores, carreros, faquines del comercio, picapedreros, carga y descarga en los puertos» marmolistas y mineros; estos últimos merecen artículo a parte por su importancia, su peligro y su arrojo al realizarlo, «Hoy se ve aí los mineros bajar al pozo sin ninguna precaución, sin ninguna previsión científica' que garantice la vida de los infelices mineros, ni preparativos por parte de empresas e ingenieros para prevenir las explosiones de grisú, los itesp^endiraientos de tierras o de piedras y cuando no, las filtraciones de agua que inundan pasos, galerías y toda clase <1e ascensos, y cuando nada sucede de lo anotado y el trabdju se realiza normalmente, cuanlo lea llega el descanso, tienen que echarse sobre una estera para todo reposo. Si no fuera el egoísmo de las empresas y la poca o ninguna bumauidad de los ingenieros, todos estos peligros y catástrofes que se registran muy ameuudo en las minas, se podrían evitar tau sólo preparando el trabajo tal como científicameúte aconseja el sentido común, Pero estas medidas de prudencia nunca han entrado en los cálculos de los que usurpan el sudor del moderno «8cl»vo y por este motivo no creo que en la sociedad capitalista sea nunca garantido el derecho a la vida del sufrido minero, ni de ningÚQ otro trabajador que tenga que trabajar debajo de la superficie. «Los ascensores, las lámparas incandescentes, los ventiludores, las máquinas perforadoras en sustitaoión del pico y del barreno, los explotadores, no los quieren emplear porque ceudrían que hacer un desembolsa antes que reajizar ninguna ganancia, Pero yo digo que empresas y negocios de todas elipses •que no preparen el trabajo como enseña la ciencia mo<ierna sobre todas las actividades humanas, no alcanzarán nunca el máximo de la producción con el mínimo de esfuerzo, ni el beneficio que por otra parte se obtendrá si se emplean y preparan los trabajos con los elementóte modernos que la maquinaria, la ciencia y el progreso nos enseñan. «Que el trabajo del mañana será completamente distinto y desconocido del <le hoy, os lo demostraré con las siguientes pruebas: «Tunemos que suponer por un momento que mañana ya no habrá egnísmo, que ya es anulada la explotación •del hombre por el hombre, que no se prodace para hacer negocio, sino todo lo contrario, »Se necesita mineral para satisfacer las necesidades déla comunidad, ciudad o nación; todos deseamos cooperar al trabajo que precisa para satisfacer aquella necesidad, todos deseamos cumplir como bneaos comunistas libertarios, ciudadanos e internacionalistas; nadie temerá al bajar a la mina ni recordará las explosiones de grisú ni ningún otro peligro; ¿y porqué no S9 tendrán que temer ningún desagradable accidente, dentro ni fuera de la mina? Porque en el porvenir lo primero que procurará preparar el iúgéutero director de aquella mina, será que las operaciones de descenso j'subida se efectúen en las debidas condiciones de seguridad; lo cual probará seguramepie el iudioado director'siendo «1 primero cxi bajar a la mina. ^Seguidamente cuidará el ingeniero, de disponer en -el interior déla mina buenos ventiladores para la renovación del aire y evitar la explosión del grisú Inmediatamente mandará establecer las lamparás incandeoentes (hoy día los arcos voltaico»; para impedirla inflamación dsl grisú o sus emanaciones, y a renglón seguido mandará retirar todas las herramientas malíua es que no aean indispensables ; sustituyéndolas por potentes máquinas de arraaqm y perforación para evitar todo accidenteypnraqueden lamáxima producción. »Por ultimó, mandará retirar las esteras de reposo y en su lugar; se colocarán los canapés, divanes o chestongs necesarios para el descanso, con la seguridad (1<* evitar toda molestia y humedad que pueda haber en el interior de la mina. Claro que estos muebles no contendrán lujos ni adornos como si fueran destinados a un gabisete; pero tendrán la misma utilidad, que es lo que interesa. »Estas son las preparaciones que se tomarán en el porvenir para trabajar en una mina. ¿Por qué no se toman en la hora présenter Por la ignorancia y mala fe de todos loa explotadores. »Ya tenéi»expuesto aquí con.los casos que h'e citado, del modo que se trabajará el día de un mañana más venturoso; y podría ser hoy igual a no mediar la usura y la rapiña más desenfrenada que impera en la sociedad presente. »Otra délas ventajas que tendrán los obreros del porvenir, consiste en la reducción de las horas de trabajo, pues con tres o cuatro diarias habrá lo suficieuie. Más con el empleo de toda clase de maquinaria lüodorna, el trabajo del mañana, por ser libre y cómodo üBrá también atractivo y agradable. SEMBRADOR Páff. 3 »Lo qtie dejo anotado para los mineros, podría decir otro tanto para los albañiles, con referencia al montaje de los andamios, realizar los cimientos y otros trabajos de cuidado. »No deben olvidarse las labores peligrosas a que deben entregarse marineros, pescadores, curtidores, tintoreros, maquinistas y fogoneros de fábricas, talleres, barcos, ferrocarriles y demás oficios que tienen el peligro encima sin. que se pueda evitar por el mal acondicionamiento del trabl·ljo de hoy día». Terminó así aquella conferencia tan agradable como instructiva para todos los allí presentes y para mí como dejo dicho al empezar estas anotaciones, ya que ello me impele a imaginarme el porvenir de la humanidad para el disfrute de una felicidad para todos. No crean mis compañeros y lectores de esta reseña que deje aquí anotado todo cuanto explicó nuestro compañero conferenciante pues los detalles, las aclaraciones y las observaciones que exponía a cada momento con aquella galanura de expresión y aquel concepto tan claro, no están en mi inteligencia poderlos relatar; sólo dejo anotado lo más notable y aún superficialmente, Lo que él nos explicó aquella noche, fué un completo tratado de ingieuería molerna para la seguridad del trabajo en las minas y,demás trabajos peligrosos. Es preciso en la hora presente que escribo este trabajo. .Septiembre de 1930, hacer un comentario o una reflexión sobre el particulsr. Seguramente que el compañero Tarrida del Mármol y todos nosotros que le estábamos escuchando con toda atención, en aquellos momentos, citándolos adelantos que se introducían en la maquinaria, en la electricidad y demás elementos científicos en beneficio de toda la humanidad, si a^uel entonces se nos hubiera asegurado que en este presente estaría la humanidad tan esclava y explotada como lo estaba en aquel tiempo, no lo hubiéramos creído; sin embargo, estamos como estábamos en aquel entonces. Todos los elementos de perfección y progreso se han ido completando y perfeccionando a las mil maravillas. La paaquinatia y la electricidad han ido resolviendo todos los problemas que era necesario para mejorar la condición económica y social del trabajador; pero nosotros, ni hemos mejorado ni podemos mejorar con las condiciones de la explotación a que estamos sometidos, ¿Que determinación tomar para alcanzar nuestra completa emancipación? Profundizando el caso con la serenidad necesaria; recordándolo hasta aqui, actuado para alcanzar nuestro objetivo, que es nuestra manumisión del sal&riado lo oreemos que nuestro deber de hombres conscientes, es seguir defendiendo nuestros caros principios comunistas libertarios, sin desmayar ni dejar de educar a nuestros semejantes en la idea de empancipación para alcanzarla lo antes posible por nuestro propio esfuerzo. Si no hemos alcanzado ya nuestro triunfo implan- • tando la igualdad social económica, no ha sido porque nosotros no lo hayamos probado; hemos fracasado porque el pueblo no nos ha secundado y menos comprendido, * No obstante, nos pofjemos dar por satisfechos, cotí ei desarrollo que van adquiriendo nuestras ideasyïoa progresos que se van notando en todos los sectores del saber y la civilización. La humanidad no se detiene,'sigue el curso evolutivo de la emancipación. Debemos ser más optimistas hoy, que no lo éramos en aquellos tiempos. Terminada aquí esta conferencia y explanada la reflexión, debemos continuar su obra hasta terminar la labor de aquellos años, que seguramente somos pocos que la podemos recordar, y la juventud de hoy díala desconoce por completo. Pohte Patiràs Claroscuro andaluz El p u e b l o del "¡ay, a y , ay!", del triple d o l o r * — E n c u a n t o me levanto por la mañana y abro la puerta, se m e llena la casa de «jambre». * — N o s o t r o s s o m o s a m o s desde antes de que Jesucristo naciera. — Precisamente desde entonces s o m o s nosotros. tontos * —Nuestros ricok son sórdidos y .piojosos c o m o los de Jaén. Y a habrá oído usted que, en Jaén, los señoritos, mientras hablan en el casino, se llevan la m a n o al p e s c u e z o , agarran un piojo, lo tiran al suelo, lo revientan estrepitosamente de una patada y contintian hablando, sin dar importancia al incidente. * —¿En qué estación ha subido al tren ese fraile tan gordo? — En Jaén. —¡Rediez, qué bien crían en Jaén a los frailes! Ese pesa c o m o cuatro c a m p e s i n o s . * —Si no tenéis qué comer, robad ; e s o s e dice m u y pronto. Si le ponen a usted delante un guardia civil c o m o una palmera, ¿qué va, usted a hacer? , * — ¿ C o m o h e m o s de hacer írente a los s e ñ o ritos, a los c a c i q u e s , a la guardia civil? Le sopla usted a un segador debajo del sombrero y e c h a a volar, ' ¡Tan flojos e s t a m o s ! * —¿Tenéis escuela en este pueblo? — N o , señor. El cura nos dice que con él q u e s e p a leer, basta. * — E n este pueblo el cacique tiene acaparado el tabaco. Y e l que no lo vota, no turna, * — A q u í el médico ès de los caciques, ¿sabe? Y al que no se s o m e t e lo despacha para el otro mundo. * — ¿ V e usted esta correa? E s el cinturón de mi a g ü e l o . L a tripa de mi a g ü e l o c a l z a b a t o d o s estos puntos. La de mi padre, e s t o s . La mía, estos. P u e s a mi hijo ya no le s e r v i r á . S e podrá sujetar los pantalones con el collar de un perro. * — E n Linares tenemos m u y buenas escuelas. S o n esas que estan ahí. Pero ya ve para que las emplean los c a c i q u e s , para cuartel de la guardia civil. * — A q u í nos reímos de las segadoras y de las ametralladoras que ha c o m p r a d o el Gobierno. Con un haz de trigo s e c o atado a la enla de una yegua se malogra loda ía c o s e c h a de los filisteos de Andalucía. ' * — U s t e d es Ángel Sambiancat, no hay preguntar. que —Para lo que gusten mandar. — P u e s la v o z ha corrido por el pueblo, c o m o la pólvora, de que la guardia civil lo sacaba a usted de tapadillo, y h e m o s yenido cortando por l o s atajos para saludarle y decirle que le a c o m pañan en su calvario las mujeres de Baena. * — T e n g o el gusto de presentarle al sacristán del pueblo, secretario de la Agrupación S o c i a lista. * — Q u é cielo m á s claro tiene Andalucía, — S i . E s una cárcel bien «alumbra». / * —¿Hay sindicalistas en Montilla? —Más que gorriones. * —Trabajamos los dos m e s e s de la siembra y los d o s de la recolección ; el resto del a ñ o , a chuparse el dedo y a criar herrumbre en el e s t ó mago, Ángel (De El Tasquin del Sambiancat Pueblo) D E L MEU S A R R O L*home d'ordre Si portéssim tapa-caps, ens el I r e u r í e m s o l e m nialmenl per a reverenciar el pas d e l ' h o m e d'ordre. Serà per la seva gravetat, pel seu m a g e s làtic continent, per l'auriola de formalitat a m b qué l'han sapigut revestir llurs familiars.., q u e sò jol, però és el cas q u e aquest h o m e ens inspira un ver respecte. Sapigueu que el nostre personatge té botiga posada en un dels carrers m é s antics i c o n c o r r e guts de la ciutat. Ven a m b bástanla sort, no fia als pobres, i c r e m a ciris a una imatge gairebé a m a g a d a dintre una estiba de pots de conserves. Espiritualitat i practicisme. E s de bon tó exhibir q u e l c o m d e diví on es rendeix culte a la p e s - • seta. Ni un sol dia deixa d'oir missa, és conseller dels «Marianos» i de les «Hijas de Maria», i d e dica a la caritat cristiana d u e s pessetes senceres per setmana a l'ajut de cinquanta tres pobres. E s un sant varó. (0 CD 1^ •o EL SEMBRADOR N o riu mai, és enemic de la g r e s c a , però això rio és obstacle per a que solsmeti a la seva muller a una p r o d u c c i ó extraordinària de fills. R e s , misteris celestials. Apart la religió, ell no està per cabòries, v o l e m dir per.idees ni partits. Prou en té l'home a m b ésser alcalde de barri i etern aspirant á s o t s - c a p del s o m e t e n t . N o nega, e m p r o , que sent una torta simpatia pels partits conservadors per allò de conservar el propi, i, el que no essent propi, és apropiable. El cas és sapiguer guardar tot el de bó que D é u ens posi a les m a n s . Heroic divulgador de la indiistria de la cera, seves són aqueixes definicions poètiques : L'aspelina, Pepeta, Del cel es claró matarà la bombeta, la llum del blando A m b aquests antecedents es c o m p e n d r à molt bé que el nostre biografiat sigui un f a m ó s organitzador de p r o c e s s o n s . A tothora i per qualsevol motiu sortiria al carrer a lluir la seva peça d'home assenyat i ordenador a m b un blaridó a la destra. Mai es cansaria de protegir una indústria que té en ell el més fidel representant. Val a dir també q u e c o m a figurant d'aqueixes religioses d e m o s tracions, é s de les persones q u e té el seu propi valer... Petiiet, si, però grassó, ficat éll dintre un vestit negre, d'un. negre lluent, solemnial, el veureu acompanyant els acords de l'orquestra a m b llurs passos, aguantant sempre a un mateix nivell l'artefacte lluminós, i mirant serena i s i s temàticament l'espai, c o n v e n ç u t de l'imporiància assolida per la seva figúrela. Mai s'ha vist a ningú qtie per tan llarga estona pugui mantindré's en aital situació de plena serenitat. S o l s una vegada l'anava a perdre. E n la p r o c e s s ó del dia tal, anava seguit d'un jove altot I encantadis. No se sap c o m va ocórrer detalladament la c o s a , però és el c a s que el nostre h o m e va sentir una gran escalfor al clatell seguida d'una forta fetor de pel. I, ai fillets! Si aquell dia no li recorden el lema de les tres vegades pauy h e m de portar un badoc a l'hospital i u n h o m e d'ordre a la p r e s ó . . Però Déu no volgué que fos així. Zigla Las duas mans enrampadas sobre la nafra del cor ; à mitj cap los ulls, que rodan voltats de cercle negros ; en un bassal de sanch presa enfonsat fins a genolls, recolzat lo front de marbre sobre'l cavall que ja ha mort, un soldat en l'agonia va dihent entre senglots ; — En lofesti de la terra so la carn que's dona al gos, y'm va fer la meva mare COm qui forja municions. Del instant de la naixensa que's partiren lo meu cos ; . en la vida he estai d'uns homes, en la mort seré dels corps. Jo he tingut somnis de gloria, ' y he sentit la fam d'amor ; y veig ponent sens albada, y ab un caball faig la son.../— disimas d e d u c c i o n e s e n torno de los decretos, p r e c i s a n d o hasta donde estos significaban una ayuda para el proletario de la gleba. Se objetivó trlaramente, el Aiodo dé proceder^ c o n esta nueva , ley agraria para provocar mediante los requisitos , necesarios la apetecida revisión de propiedad y de renta. Pero c o m o exposición esencial y s í n tesis d e todo lo hablado anteriormente, se les a d virtió que, el fruto más preciado que podrían recojer de este renacimiento reivindicador, demasió legal por el m o m e n t o , sería la creación de una organización sindical, sin jefes, sin decretos, ni leguleyos, desde la cual plantearán el día de m a ñana y por propia cuenta el mejoramiento moral y material de sus problemas, y labrarán al unísono el ilimitado c a m p o de un Porvenir de m á s libertad y justicia. Satisfechos y agradecidos los c a m p e s i n o s de la Pobla de Claramunt, portarán a buen término la oriemación social de su próxima organización. ' ' Y'es tancaran sas parpe lias, ¿Mes las bada estrany remor ; damunt lo camp de la iluyta, com lo vent, passa la Cort ; caballers cenyits de roure, estandarts y ganfanom, Montbuy . y entre máquinas de guerra lo triUnfant emperador. Llensa ün crit y estén los brassos, quan li cauhen altre cóp qu'es més poteni que sa. queixa Ja gateara del estol. Aixeca el cel la mirada com cercant Vúltim conhort ¿Mes fins de véurel li'privan rera d'un núvol de pols. : Y en tant que al llunr las campanas cantan al Deu victoriós, lo soldat amaga'l roÁtre, ' unglèjd la terra, y nior. Ángel Guimerà Desde L*EspcU Hacía dias que quería hablar desde este periódico dei cura parraeo que la divina providencia nos envió a este pueblo; de este curita o c u r o i d e que no se ha dado cuenta que la tierra que pisa no pertenece a las Hurdes ni menos a las m o n tañas vascas, sinó que está en el corazón de Cataluña y que el horno no está para h o s t i a s y ni para aguantar los insultos que vomita en s u s sermones. D i r e m o s algo, no t o d o , de la actuación del sotana de este pueblo. En las últimas elecciones municipales o sea en vísperas del advenimiento de la República, iba de casa en casa, (cuando los h o m b r e s n o estaban) conquistando a las mujeres para que influyeran cerca del e s p o s o a que v o taran la candidatura monárquica; empleaba para ello todos sus grandes a r g u m e n t o s celestiales e infernales con el santo fin de o salirse con la suya o dejar 1» casa en franca batalla conyugal. Es de suponer la contrariedad que sufriría ante el resultado de las elecciones; y l u e g o , con la proclamación de la República, vaya que el hombre está chorreando bHli ^ por los poros; en s u s sermones vomita tanto petióleo y fuego que las pocas beatas salen de la iglesia c o n s t e r n a d a s y completamente mareadas. He haquí una muestra de s u s arengas : «Por lo que veo, estoy en medio de un pueblo de bestias. Ni en broma se a s o m a nadie en esta santa casa. N o hay fe ni temor al tremendo castigo que les espera. L o dicho :' c u a n t o más va, m á s bestias». Conque ¿bestias eh? tras.)uilar tiene el páter! Mort del Soldat ¡Mucha hambre de Terminaré advirtiendo a este párroco que ponga freno a su desmedida bilis o del contrario, un día los vecinos de este pueblo nos v e r e m o s obligados a atarle la lengua y a ponerle bozal. Xic FEDERACIÓN COMARCAL Mítines de propaganda agraria Pobla de Claramunt EÁ Comité d e la Federación Comarcal Igualadina, se desplazó el día 18 del que cursa a la Pobla de Claramunt, donde, con la ayuda del Sub¬ Comité de la Federación Comarcal residente eri Capcillades, dieron un extepso mitin de carácter especialmente agrario, el primero de la c a m p a ñ a que se presume llevar a meta. Al dia siguiente, por la noche, en el v e c i n o pueblo de Montbuy, s e realizó otro mitin de c a rácter agrario, a cargo del Comité y del S u b - C o mité d e la Federación Comarcal Igualadina. Hicieron uso de la palabra en nombre del Comité, los c o m p a ñ e r o s Alcaide, Ferrer, Gener, A n s e l m o y A m e n o s ; y por el Sub-Comité el c o m p a ñ e r o Estany de Capellades. Por ser el m i s m o el m o t i v o del mitin que el d e ' la vigilia y parecidas, salvo p e q u e ñ a s variaciones, las peroraciones-de los oradores, d a m o s s i m p l e mente una breve nota del a c t o . Cabe remarcar m u y justamente, el crecido interés que la masa campesina de M o n t b u y demostró hacia la finalidad que pretende guiar al presente movimiento agrario, la Federación C o marcal Igualadina. 'No será c o s t o s o de esperar la floración de organizaciones agrarias de una característica e m i nentemente sindical independiente en la C o m a r c a d e Igualada, después de la buena siembra que a manoá llenas hace por donde sea y en todo lugar pfesto, la Federación Comarcal igualadina. ¡Obrero"§í c a m p e s i n o s de Igualada y sus c o n tarnos, intensificad esta acción reivindicadora, y pensad que a vuestro lado hallaréis siempre dispuesta a avudaros en todo y por todo la F e d e r a ción Comafcal I g u a l a d i n a ! Gacetilla L a s c o m p a ñ e r a s Celia Abril y Anita F o r n , c o n la'compañía de sus p e q u e ñ u e l o s , se fueron el pasado domingo a visitar a nuestro querido c o m p a ñ e r o Agustín Broto en la ciudad condal, que c o m o s^ben nuestros lectores fué detenidosin causa alguna y encerrado en la bodega del «Antonio López», lugar donde c o n t i n u í preso sin saber por qué. De manera alguna podía negligir o desatender el Corhité Comarcal, este prometedor d e s v e l a miento de la gente del c a m p o , que en virtud de unos decretos sobre la revisión de la propiedad agraria, publicados por el gobierno provisional de la República, han sabido echar de lado su tradicional modorra, interesándose de las ventajas de dichos decretos, e iniciando seguidamente una c o m o reivindicación legal de las condiciones a pagar en frutos o en dineros, de las recolecciones, al patrón d,el agro. Con las lágrimas en los ojos agradeció la. atención, encareciendo al m i s m o tiempo recuerdos y s a l u t í c i o n e s para todos sus apreciados camaradas de Igualada. Contando en que la mala estancia le sea leve, le devolvemos su cariñosa salutación desde las páginas de E L SEMBRADOR, con un ¡viva la anarquia! F u é , pues, acojiendo este vagido esperanzador, y la delerenie demanda de los c a m p e s i n o s de ia Pobía o'.>e e.¡ Comité y el Sub-Comité de la Comarcal Is^ualadina celebraron el mentado mitin de propagación agraria. de E L SEMBRADOR. Integraron el Comité Comarcal y el S u b - C o mité, los compañeros Gener, A m e n o s y A n s e l m o , y Quintana, Castells y Estany, respectivamente. D e s d e diversos puntos de vista comentaron y enjuiciaron el vasto problema del terruño, durante sus peroratas. Se hicieron también atina- (O ^ A l g u n o s suscriptores y paqueteros de la ciudad de Tarrasa se nos han quejado del inexplicable r e b o s o con que reciben el envío s e m a n a l , Sin querer aludir a nadie ni conjeturar malos pensarriientos, r o g a m o s al señor administrador de correos de nuestra localidad, t o m e nota de lo que acaece, para que en lo sucesivo se restablezca la debida normalidad. ^ Boicot a los productos (cal y c e m e n t o ) ¿Maringallo. ^ Ateneo P o r v e n i r . — H o y a las diez de la noche, conversación sobre «El Libro». Mante nedor : |. A n s e l m o . I co •a co