Resumen curricular Dra. Andrea Leticia Ramírez Campos andramirez@uv.mx anleticia@hotmail.com Universidad Veracruzana Andrea Leticia Ramírez Campos estudia Letras Españolas (UV), desde que egresa se dedica a impartir cursos de redacción. Ha trabajado como correctora en las revitas Extensión, La Palabra y el Hombre, Semiosis y Diálogos educativos (SEC). Realiza otros estudios: especialidad en Docencia, diplomado en edición, maestría en Literatura Mexicana y doctorado en Educación. A lo largo de 32 años se ha desempeñado en la Universidad Veracruzana en diferentes dependencias: Facultad de Administración y Comercio, Editorial UV e Instituto de Investigaciones Lingüístico-Literarias. Actualmente labora como maestra de tiempo completo en la Facultad de Ciencias Administrativas y Sociales de esta casa de estudios. 1 COMPETENCIA ESCRITURAL DESDE PROYECTO AULA (UV) Dra. Andrea Leticia Ramírez Campos 5. Didáctica de las competencias en el aula Ensayo Resumen: Con las estrategias de aprendizaje derivadas de Proyecto Aula de la Universidad Veracruzana el docente encuentra un espacio para renovar y transformar su quehacer académico, mediante la elaboración de un diseño instruccional conformado por actividades integradoras; percibe la trascendencia de ser guía atento e innovador; es sensible a los cambios emergentes del entorno, comparte y desarrolla su creatividad en la interacción lúdica con sus educandos. Por su parte, el alumno universitario resuelve tareas apegadas a su perfil de egreso: investiga, lee y escribe sobre temas propios de su carrera, de manera asertiva; aprecia el proceso de articulación de la escritura con otras demandas de comunicación propias de su medio laboral; es capaz de resolver problemas a través del ejercicio de tareas complejas y llevarlas a cabo con eficacia, eficiencia, efectividad, pertinencia y responsabilidad. Descubre que su habilidad para escribir puede transformarse en una competencia que le posibilitará expresarse eficientemente en contextos y circunstancias diversos; competencia escritural que halla aplicación en el entramado de su vida cotidiana, académica y laboral. Docente y alumno construyen un ambiente de aprendizaje liberador. Palabras clave Complejidad, escritura, aprendizaje, competencia y creatividad. “Frente a la complejidad nueva el antiguo lenguaje muchas veces es débil o impotente.” Jorge Wagensberg Introducción Como egresada de la carrera de Letras Españolas siempre consideré a la escritura una cualidad, una virtud, incluso, un don. Impartía mis clases pensando en que escribir era una habilidad genérica; sí, pero que no dejaba de estar tamizada con una valoración de actividad selecta, ejercida gracias a la sensibilidad de unos cuantos individuos. Me contaminé en el ámbito universitario con un espíritu de ilustración, de suma especialidad, como si per 2 se la escritura estuviese circunscrita a un ámbito específico. Acto reservado sólo para quien había nacido con ese don. Mi labor docente, y más adelante la editorial, me llevó a mantener esa idea, la del cuidado atento hacia la lectura, hacia la interpretación apegada que derivase en una intencionalidad escritural reflexiva. Evitar el caer en ambigüedades, en falacias, en errores diversos. Y así continué impartiendo cursos, repitiendo una normativa de manera acotada a las ciencias humanísticas y poniendo el énfasis en el proceso de escritura. Ahora me cuestiono: ¿La escritura es un don? ¿Sólo la dominan determinados alumnos?¿Dónde quedan los alumnos de otras áreas de conocimiento? ¿La escritura es una competencia? ¿Por qué el énfasis en la escritura? Deseo aclarar de inicio que el proceso escritural conlleva de manera recursiva la lectura. Cuando escribo necesito verificar lo que he asentado, lo que voy construyendo de manera personal, leo y releo para orientar mis ideas lo mejor posible. Lectura y escritura se complementan, sin embargo, leer es deconstruir un significado (interpretarlo) y escribir es construirlo (proponerlo). Cuando leo, dependiendo de mi intencionalidad (entretenerme, informarme, evadirme, encontrarme), la mayor de las veces sólo releo, tal vez subrayo o anoto algunas palabras significativas. Sé que la escritura exige competencias más complejas. Mi propuesta es apreciar analíticamente si las estrategias de aprendizaje propuestas en Proyecto Aula pueden modificar la percepción que los alumnos tienen sobre la escritura; y, sobre todo, si ello les motiva a trasformar en competencia su habilidad escritural, a fin de hacer más eficiente su comunicación en los ámbitos donde interactúe. Transformación de los códigos expresivos Pareciese que el lenguaje escrito se torna débil o impotente frente a la complejidad. Yo creo que transforma sus códigos de expresión y da paso a otro tipo de lenguajes más atrayentes. Cada día somos objeto de un mayor 3 impacto visual: imagen, sonido, color, forma, efectos; policronofonía que parece prescindir del uso del lenguaje escrito hasta constituir un lenguaje gráfico con el que los usuarios establecen un diálogo universal. Ante este surgimiento tecnológico desmesurado, mi inquietud deriva de observar que el alumno, en el nivel universitario, aún no logra integrar su competencia escritural: no enlazan el saber y el saber hacer con idoneidad y de manera responsable. Los alumnos tienen: Gran habilidad para localizar información en la Red pero no han desarrollado la competencia para seleccionarla ni leerla críticamente. Una diversidad impresionante de información, pero desconocen cómo “conectarla” al escribir un texto. Crean parcelas de conocimiento. La transversalidad e interdisciplinariedad de saberes no la visualizan. A cada docente le “entregan” la parte teórica y práctica que le corresponde sin visualizar la integración de la currícula. La idea de que lectura y la escritura son herramientas, algo externo. Pierden de vista que es un proceso inherente a su ser y una trama compleja de saberes cuya práctica constante deviene independencia intelectual. Una “desconexión” de saberes y habilidades derivada de la del docente. Un ejemplo, es evidente nuestra limitación para trabajar con el enfoque de Proyecto Aula, ya sea por desinterés en transformar nuestro sistema de trabajo, por desconocer los contenidos que lo sustentan, o por no atrevernos a explorar nuestra creatividad. Resalto en esto sólo el desempleo de las TIC. Un gran porcentaje de maestros estamos incomunicados tecnológicamente con nuestros alumnos. Renovación curricular: Proyecto Aula En 2009, la Universidad Veracruzana incursiona en el denominado Proyecto Aula. Una propuesta de diseño curricular centrado en el aprendizaje significativo, que pone el énfasis en las competencias, en el uso adecuado de las tecnologías, en el desarrollo del pensamiento complejo y en la investigación. Su objetivo es que el docente, a partir de su experiencia, 4 elabore un diseño instruccional donde relige emoción, sensibilidad, conocimientos, habilidades, creatividad, la naturaleza integral del ser humano inserta en la dinámica de un entorno micro y macro. Conjunción relacionada de elementos que motivan y revitalizan la práctica de enseñanza aprendizaje. Diseñar mi curso de Lectura y redacción a través del análisis del mundo contemporáneo (LyR) bajo este enfoque me permitió vislumbrar la trama donde me conformo y transformo, revalorar mi concepción sobre la escritura, sobre mi hacer académico, religar saberes y comprender lo que ya venía vislumbrando: que la actividad escritural no es un don, es algo intrínseco a nuestra naturaleza humana, una extensión de nuestras capacidades lingüísticas, una habilidad. Pude apreciar que el ser humano es lenguaje en sí mismo (Maturana, 2002), y lo más importante, que la escritura es una competencia susceptible de desarrollarse de manera consciente y lúdica. Esto considerando competencia desde la perspectiva de Tobón (2006), como un proceso complejo de desempeño con idoneidad y responsabilidad en un determinado contexto. La escritura como competencia Me pregunto qué diferencia habría al preguntarle a un alumno qué tan hábil o qué tan competente es para expresarse por escrito. Hábil, teniendo presente que desde una perspectiva biológica nacemos con cierta propensión para hacer algo, con un talento susceptible de desarrollarse; habilidad que aflorará en la interacción con los otros en el entorno socio-cultural. Sin embargo, el ser hábil en algo no deviene competencia: puedo ser hábil para tomar apuntes, pero no poseer aún la competencia para elaborar un ensayo. Respecto de competencia, tomo las definiciones de dos autores que registra Tobón (2010: 47): 1. Las competencias son una compleja estructura de atributos necesarios para el desempeño de situaciones específicas, que combinan aspectos tales como actitudes, valores, conocimientos y habilidades con las actividades a desempeñar (Gonczi y Athanasou). 2. Una competencia es una capacidad para el desempeño de tareas relativamente nuevas, en el sentido de que son distintas a las tareas de 5 rutina que se hicieron en clase o que se plantean en contextos distintos de aquellos en los se enseñaron (Vasco). Resalto en cada definición la palabra que considero de interés, de acuerdo con mi lógica discursiva: combinan y distintas. En ocasiones, en el salón de clase perdemos de vista la importancia de vincular, intersectar, entrelazar, religar, combinar, aquello que consideramos nuestra área de conocimiento con otra área de conocimiento. Esto es, hemos parcializado nuestro saber, a tal grado que desconocemos hasta dónde el aprendizaje pertinente de la lectura y la escritura puede incidir en otros saberes al constituirse en competencia. Nos concentramos en abarcar nuestro programa de estudio estructurado con contenidos generales, lineales, sólidos, ciertos, organizados, basados en una lógica simple de la normativa gramatical y algunas estrategias de lectoescritura. Nuestra experiencia, impregnada de certezas, nos ha indicado que necesitamos centrarnos en ello. Y es justo esta acción es la que bloquea nuestra creatividad y, las más de las veces, nos impide apreciar la trama de relaciones que podemos abordar para construir un aprendizaje significativo imbricando actividades de distintas EE y considerando como guía de nuestro curso el programa académico y el perfil de egreso de los estudiantes. Programa académico y perfil de egreso Una de las bondades del Proyecto Aula es que considera el perfil de egreso como piedra de toque para determinar en cada EE qué competencia se desea alcanzar y diseñar la unidad de competencia que la desarrolle. En LyR podría ser que el alumno se comunique con idoneidad en contextos determinados, de manera responsable; es decir, que como maestro necesito elegir, de acuerdo con el perfil, lo que el alumno deberá saber (conocimientos), deberá saber hacer (habilidades) y cómo deberá actuar (actitudes y valores), ante situaciones académicas, laborales y cotidianas. La unidad de competencia se convierte en el eje creativo de todas las acciones, actividades, tareas, lecturas, estrategias didácticas, fuentes de información, evidencias, rúbricas, integrando conocimientos, procesos cognoscitivos, 6 destrezas, habilidades, valores y actitudes en el desempeño de actividades y problemas. El alumno incursiona con nuestra mediación –y retomamos la palabra clave de la definición de Vasco– en tareas de escritura distintas a las que ha venido realizando y, además, apegadas a su perfil: investiga, lee y escribe para las actividades complejas que hemos diseñado en apego a su carrera. Consigue apreciar el proceso de articulación de la escritura con otras demandas de comunicación propias del medio laboral; percibe que puede actuar resolviendo problemas de comunicación con idoneidad, es decir, con eficacia, eficiencia, efectividad y pertinencia. Descubre que su habilidad para escribir es susceptible de mejorar ejercitándose en temáticas vinculadas con sus intereses y con un producto común relacionado con distintas EE; y lo más importante: asume la responsabilidad de escribir de manera competente. Así, en el nivel universitario, lo que hacemos es dar continuidad a la reforma integral del bachillerato tecnológico implementada por la SEP, en el ámbito nacional, a partir de 2008. Propuesta manifiesta en su programa de Lectura, expresión oral y escrita, donde se asienta que: […] trae consigo innovación y sustitución de métodos, procedimientos, técnicas y acciones que nos obligan a concebir, planear, desarrollar y evaluar el proceso formativo de los alumnos a partir de su conocimiento previo, lo que nos permite y obliga a elegir o diseñar secuencias didácticas pertinentes a las necesidades e intereses de los estudiantes: hoy, son ellos y su experiencia acumulada quienes están en el centro del proceso (SEP, 2009: 4. Las cursivas son mías.). En la Universidad Veracruzana, la experiencia educativa de LyR no sólo requiere dar continuidad a esta propuesta, sino que debe ir más allá, comprometerse con una docencia de calidad, buscando asegurar en los alumnos un aprendizaje individual que trascienda, hacia la vida cotidiana y la profesional. Competencia holista que lo haga un mejor ser humano a través de lectura y la escritura. Transversalidad de saberes 7 De acuerdo con Proyecto Aula, esto puede lograrse si se diseñan secuencias didácticas que conecten de manera transversal saberes de EE del área básica, disciplinar y terminal de la carrera; y establecer en ellas su relación con las demandas emergentes de los perfiles de egreso del entorno social, ambiental y laboral. Visualizar como oportunidad la elección del alumno de un área de conocimiento desconocida, caldo de cultivo para incentivar su curiosidad y su creatividad. Generar estrategias que le permitan transitar de un nivel cognoscitivo a otro en habilidades básicas de escritura. Un ejemplo en LyR sería pasar de la descripción a la instrucción; de la información a la comunicación; y de la explicación a la argumentación. Esto, utilizando un mismo producto pero valorado desde distintas EE –por ejemplo en la carrera de Relaciones Industriales– el ensayo: en Derecho, analizar la pertinencia de su contenido teórico; en Valores, analizar su contenido y elaborar la estrategia denominada Intervención ética; y en LyR evaluar la pertinencia formal y de contenido. Creo que Proyecto Aula representa una oportunidad valiosa para renovar y fortalecer mi quehacer docente. Me permite recuperar la capacidad de integración que brinda la escritura mediante la transversalización de saberes. Tener presente que la palabra escrita une los procesos de simplificación que implican selección, jerarquización, separación y reducción, con otros contraprocesos que implican la comunicación, la articulación de aquello que está disociado y diferenciado. La escritura es un proceso de reflexión que totaliza una realidad. Conclusiones Con base en un criterio de economía didáctica es pertinente diseñar productos integradores que posibiliten abarcar más contenidos con menos actividades. Ello nos facilita abordarlos con profundidad, puntualizar cada uno de los atributos que lo conforma y evaluarlos mediante rúbricas detalladas y confiables. Propongo aunar a esto, actividades complejas de escritura que aborden: la observación de sí mismo (integración personal), la observación de los otros (integración laboral) y la observación del contexto (integración sociocultural), con base en el perfil de ingreso y el programa educativo. 8 Proyecto Aula es el espacio para motivar al alumno hacia el desarrollo de la lectura crítica que desbloquee su naturaleza indagadora. Volverlo observador acucioso y sensible hacia lo que el universo expresa, descubridor de puntos de bifurcación en el orden y el desorden en todos los niveles, actuando siempre desde lo local hacia global, y viceversa. Desde su esencia humana posibilitar que establezca vasos comunicantes ante lo que vive, cree, siente y aprende. Ello le permitirá tomar conciencia de su propia competencia comunicativa,1 centrada en la escritura. La escritura es una alternativa más para ligar competencias que conjuguen la expresión idónea de saberes multidisciplinarios. Alcanzar una competencia escritural nos fortalece y brinda seguridad frente a la incertidumbre. Según Wagensberg (2003) arte y ciencia tienen como fin común hacer inteligible el conocimiento cuyo origen y objeto es reducir el miedo a existir. Ambos cumplen un mismo propósito: trasmitir una complejidad inherente a nuestra naturaleza humana. Transitar de lenguajes en pos de la comprensión del entorno humano. Referencias Capra, F. (2002). Las conexiones ocultas. Barcelona: Anagrama. Maturana, H. (2002).Transformación en la convivencia. Chile: Dolmen Eds. Perrenoud, P. (2009). Diez nuevas competencias para enseñar. Barcelona: Grao. Price, A. (2010). Reinvéntate. Reescribe tu vida desde la experiencia. Barcelona: Paidós. Tobón, S. (2006). Aspectos básicos de la formación basada en competencias. Talca: Proyecto Mesesup. _______. (2010). Formación basada en competencias. Pensamiento complejo, diseño curricular y didáctica. (2ª ed.). Colombia: Ecoediciones. Universidad Veracruzana. (2009). Proyecto Aula. Transformación de los procesos de aprendizaje (Antología). México: UV. Wagensberg, J. (2003). Si la naturaleza es la respuesta ¿Cuál era la pregunta? Barcelona: Tusquets. 1 Capra apunta: “Cada comunicación crea pensamientos y significado, lo cual da pie a nuevas comunicaciones, y de este modo la red se genera a sí misma, es decir, es autopoésica”. (2002: 118) 9