중남미연구 제29권1호 년 8월 31일 491~512쪽 2010 El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática*1) Francisco Bermúdez Huertas**2) Indice Ⅰ. La alteración de la naturaleza Ⅱ. Complejos procesos naturales que afectan el planeta Ⅲ. La mina de oro vegetal Ⅳ. Los grandes retos a superar V. Conclusiones <Abstract> The most recent investigations about organic life in the universe reveal that in order for life bloom on one planet, as we know it on the Earth, it is necessary that some conditions be fulfilled, or at least very similar conditions, to our planet Earth. Such conditions are related not only to the interior of the planet, but also to the conditions outside in relation to the other planets of the solar system. In our particular case, we have proved that a specie, such as humankind, is able to challenge the natural principles, for good or bad, in such a way that we can change the nature of life to a considerable degree. But, several aspects such as Milankovitch cycles, which describes the collective effects of changes in the Earth’s movements upon its climate; fluctuations of Co2 concentration over thousands of years; the origin of geomagnetic storms associated with solar coronal mass ejections; the Amazon * “This work was supported by Hankuk University of Foreign Studies Research Fund of 2010” ** Hankuk University of Foreign Studies 492 중남미연구 제29권1호 rainforest, that is not an oxygen producing system as we used to think; the high potential expected from nanotechnology; bioprospecting used for the commercialization of traditional medicines, etc., are all factors that have a strong impact on the Earth´s climate changes, and humans cannot manipulate these factors in a free way or is impossible for them to do it. Despite the fluctuations in the world climate, due to natural or antropogenic causes, a natural system like the Amazonia and its huge hydrological basin can be considered as the best paradigm for regulating climate of our planet. The Amazonia houses an enormous biodiversity of more than 50% of the flora and fauna of the entire world. Unfortunately deforesting, bioprospecting, wood exploitation carried by large multinational companies, and even the social and politics problems of the region are destroying the Amazon rainforest. We are, then, facing a huge dilemma. How can we save this beautiful paradigm of climate regulation?. Asone might imagine, this endeavor means overcoming many challenges, challenges which are very complex because they imply huge investments and capital for many enterprises. Moreover, above all, we need the political will and an international consensus to stop the catastrophe, which BBC of London has been predicted in its documentary series about the Amazon rainforest in the last decades. Key words: Amazon, Carbon Dioxide, Greenhouse Effect, Antropogenic, Bioprospecting / Amazonas, Dióxido de carbono, Efecto de invernadero, Antropogénico, Bioprospección El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 493 Ⅰ. La alteración de la naturaleza El planeta tierra jamás ha renunciado a su naturaleza violenta. Hijo de una explosión, durante millones de años ha convulsionado desde sus entrañas fundidas por las altas temperaturas con diversas manifestaciones como la tectónica de placas, los volcanes, y los terremotos hasta su superficie en permanente cambio por erosión, tormentas eléctricas, huracanes, incremento o disminución de gases en la atmósfera como el oxígeno o el carbono por grandes períodos de frío (glaciaciones) hasta altas temperaturas. Es casi irónico pensar que este escenario cambiante y tormentoso se haya convertido en el hábitat apropiado para albergar múltiples y variadas manifestaciones de vida, desde las más simples hasta las más complejas conocidas hasta ahora en millones de kilómetros a la redonda en nuestro sistema solar y la Vía Láctea. Hasta ahora el planeta ha demostrado ser un sistema muy complejo capaz de regularse así mismo en su funcionamiento general aunque para ello utilice medidas extremas de equilibrio a través del caos o del orden con la desaparición de millones de especies vivas, pero a la vez con la aparición de millones más variadas y con otra complejidad que las hace aptas para estas nuevas condiciones. En la actualidad la especie humana es una de ellas y tal vez de la más exitosa no solo para adaptarse a ese paisaje planetario, sino para transformarlo. Pero justamente con su ciencia y su tecnología, ese poder transformador de alta envergadura ha sido capaz - a una velocidad sorprendente - de alterar muchos sistemas y procesos físicos, químicos y biológicos de la Tierra. Uno de ellos y el que está hoy de moda es el del aumento progresivo de la temperatura del planeta. De manera natural, como lo señala el Informe Especial sobre uso de la tierra, cambio de uso de la tierra y silvicultura(2000), “Los sistemas ecológicos de la Tierra, por medio de los cuales el carbono queda retenido en la biomasa viva, en la materia orgánica en descomposición y en el 494 중남미연구 제29권1호 suelo, desempeñan un papel importante en el ciclo del carbono mundial. El carbono es intercambiado de manera natural entre estos sistemas y la atmósfera mediante los procesos de fotosíntesis, respiración, descomposición y combustión”1) Pero, se ha puntualizado – por expertos y agencias internacionales – que “el calentamiento global está directamente relacionado con el proceso de industrialización a través de la quema de carbón, petróleo y gas natural que liberan grandes cantidades de CO2 a la atmósfera.”2) Cuando se talan bosques y se quema madera, se reduce la absorción de CO2 realizada por las plantas y a la vez se libera el dióxido de carbono contenido en la madera. Pero también, el criar ganado bovino y plantar arroz –por ejemplo‐ genera metano, óxidos nitrosos y otros gases invernadero. Si el crecimiento de la emisión de gases invernadero se mantiene en el ritmo actual, comparados con la época preindustrial, los niveles en la atmósfera llegarán a duplicarse durante el siglo XXI y si no se toman medidas es posible que hasta se triplique la cantidad antes del año 2100. La razón de esta injerencia en el cambio de temperatura, es que la atmósfera es casi transparente a la radiación de onda corta, pero absorbe la mayor parte de la radiación de onda larga emitida por la superficie terrestre. Varios componentes atmosféricos, como el vapor de agua y el dióxido de carbono, tienen frecuencias moleculares vibratorias en el rango espectral de la radiación terrestre emitida. Estos gases de invernadero absorben y reflejan la radiación de onda larga, devolviéndola a la superficie terrestre, causando el aumento de temperatura, fenómeno denominado Efecto Invernadero y se ha dicho que el culpable directo es el aumento del CO2 y otros gases letales en la atmósfera producidos por la industrialización humana. 1) Watson Robert T(2000), Informe Especial del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático. OMM. PNUMA. 3. 2) Isaza Delgado, José Fernando(2007). Cambio climático: glaciaciones y calentamiento global. Bogotá: Fundación Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano. 201. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 495 Ⅱ. Complejos procesos naturales que afectan el planeta Sin embargo, todo lo antes mencionado es cierto parcialmente, pues no se ha aclarado lo suficiente con respecto a otros factores o circunstancias que ejercen o eventualmente podrían generar cambios en el clima del planeta. Debemos considerar a fondo entre otros aspectos los siguientes: ‐ La composición de la atmósfera está determinada además por otros factores como los cambios en la órbita de la Tierra alrededor del Sol (llamados ciclos de Milankovicy posiblemente la órbita del Sol alrededor del centro de la galaxia); la dinámica de las placas tectónicas y su efecto sobre la situación relativa y distribución de corteza oceánica y terrestrede la Tierra; variaciones en la actividad solar; la dinámica orbital del sistema Tierra‐Luna el impacto de meteoritos de grandes dimensiones y las erupciones volcánicas ‐ El porcentaje de CO2 en la atmósfera corresponde al 0,039 por ciento y que la cantidad neta ha oscilado desde miles de años atrás de la intervención humana :“La concentración actual en la atmósfera es aproximadamente el doble de la que ha existido en los últimos 160.000 años, tal y como se ha demostrado a partir de datos obtenidos por cuantificación de burbujas de aire atrapado en el hielo de la Antártida (…) Excepto los últimos 200 años, en el pasado geológico reciente las concentraciones de CO2 se han mantenido bajas, oscilando entre 180 y 260 ppm. Estas bajas concentraciones fueron normales en los diversos períodos hasta el Cretácico, cuando la tierra era mucho más caliente y la concentración de CO2 llegó a niveles que oscilaron entre 1200 y 2800 ppm”3) 3) Zeiger, Eduardo y Taiz, Lincoln(2007). Fisiología vegetal. España: Universitat Jaime. Castellon. 340. 496 중남미연구 제29권1호 Grafica 1. Concentración de dióxido de carbono en los últimos 417.000 años. La parteroja indica la variación a partir de 1800. (Tomada de: http://es.wikipedia.org/ wiki/Calentamiento_global) ‐ Además del discurso oficial y de los académicos ambientalistas existe una corriente de científicos e investigadores de diferentes institutos y universidades que defienden la teoría de las tormentas solares. Entre ellos se podría mencionar a Patrick J. Michaels profesor de investigaciones de ciencias ambientales de University of Virginia y científico invitado por el Marshall Institute en Washington, DC.; Syun‐Ichi Akasofu es Profesor Emérito de Física en la Universidad de Fairbanks en Alaska, fundador en 1998 del International Arctic Research Center y su director hasta enero de 2007; Ian clark paleoclimatólogo Canadiense, profesor de la Universidad de Ottawa; Friis Christensen es un experto en física del espacio y director del Centro Nacional Danés del Espacio; Nir shaviv profesor asociado de física e investigador en los campos de la ciencia de la astrofísica y del clima y actualmente profesor asociado en el instituto de Racah de física de la Universidad hebrea de Jerusalén; etc. ‐ El sol (la fuente de calor del planeta) ha tenido influencia en los cambios de la temperatura del planeta y que esprecisamente con las tormentas solares que se desencadenan cambios en los depósitos de CO2tanto de la masa verde en general (praderas, bosques, algas marinas)como la de la selva amazónica en particular, hasta los océanos que son el mayor reservorio de cambio rápido (en promedio 25 El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 497 – 40 años) después de las máximas y mínimas; o sea que a una máxima de tormenta solar le sigue un aumento de temperatura de la tierra y este incremento libera el CO2 a la atmósfera con otros efectos colaterales como el aumento del vapor de agua que es el principal responsable del Efecto Invernadero. En la siguiente gráfica de john christy (Profesor de Ciencias Atmosféricas y Director del Earth Systems Science Center de la Universidad de Alabama, en Huntsville), se puede apreciar la afinidad y correspondencia entre las fluctuaciones solares y las temperaturas de la tierra en un periodo de 250 años. Grafica 2. Variaciones modeladas del flujo solar y de las desviaciones de la temperatura en el hemisferio norte (curva fina, media de 11 años.) Tomada de: http://www.estrucplan.com.ar/articulos/verarticulo.asp?IDArticulo=1921 ‐ Los agentes más activos en capturar CO2 de la atmósfera tanto por la velocidad como por la cantidad son: los océanos (porque el dióxido de carbono es muy soluble en el agua), las algas y sobre todo las micro algas marinas, los casquetes polares y también claro está, el complejo sistema del Amazonas. ‐ El Amazonas no es un pulmón del mundo. Una selva madura en su proceso de fotosíntesis captura CO2 y libera oxígeno, pero, consume la misma cantidad de oxígeno liberado para su propio proceso metabólico. La única manera para que la 498 중남미연구 제29권1호 selva amazónica disminuya el CO2 de la atmósferaes que esté en expansión o en crecimiento, con lo cual lograría atrapar una mayor cantidad de dióxido de carbono. En este último caso la selva amazónica contribuiría a la disminución del CO2, como depósito del mismo. Las plantas como organismos autótrofos no necesitan alimentarse de otros organismos vivos, pues construyen su estructura convirtiendo sustancias simples (como el agua y el CO2) en otras complejas (como la celulosa, por ejemplo) y el combustible que consumen en la respiración no proviene de otros seres, sino de las sustancias complejas que han “fabricado” realizando la fotosíntesis. De modo que, las plantas cuando respiran, el oxígeno que liberan a la atmósfera ‐cuando realizan la fotosíntesis‐ lo absorben a su vez pues lo necesitan para completar su ciclo interno, ya que una de las dos funciones principales de la fotosíntesis es precisamente ésa: fabricar combustible que luego queman para seguir viviendo. La selva amazónica, en efecto, desprende muchas toneladas de oxígeno al año, pero ese oxígeno lo absorbe de nuevo respirando. Así que la parte de la fotosíntesis que sirve para dar energía a la planta, de forma neta, no proporciona oxígeno adicional a la atmósfera. La planta ha desprendido ese oxígeno sólo de forma temporal, para almacenar la energía y usarla cuando le haga falta. ‐ La ciencia y la tecnología han logrado y están implementando diferentes métodos y tecnologías (además de todas las ventajas que están por venir de la nanotecnología, energía nuclear, hidráulica, eólica, fotovoltaica, etc.) que contribuyen y contrarrestarán los efectos de la industrialización humana en un tiempo no muy lejano, aplicables en arquitectura, ingeniería, producción industrial y agropecuaria. ‐ Además de preservarla por ser un depósito de CO2, la protección de la selva amazónica, se debe a otros propósitos: “la biotecnología y sus herramientas tecnológicas han permitido realizar una aproximación a la biodiversidad, con énfasis en los recursos genéticos, efectiva en los términos de la bioprospección. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 499 De las aplicaciones convencionales de la biotecnología, como el cultivo de tejidos vegetales y de microorganismos, se ha avanzado a un punto de aplicación de una variedad de tecnologías que permiten el análisis a gran escala de la biodiversidad genética.(…) En términos generales, se estima que el valor económico inmediato del mercado de la biotecnología es del rango de 780 billones de dólares y continua creciendo exponencialmente”.4) La selva amazónica es un verdadero laboratorio y una gigantesca fuente de estos recursos que apenas se empieza a valorar y explotar por grandes emporios multinacionales. Ⅲ. La mina de oro vegetal Hasta ahora la presión privada sobre la tierra y sus recursos naturales es enorme. Se ha buscado construir grandes presas hidroeléctricas, expandir la minería y los negocios del agro, sembrar soja, cultivos ilícitos y engordar diferentes especies de ganado. Según la Coordinación de Organizaciones Indígenas de la Amazonía Brasileña (COIAB), “la Amazonía perdió en los últimos 30 años, 80 millones de hectáreas de selva por actividades de desarrollo no duradero”. El riesgo de que la selva se vuelva una inmensa sabana de manera irreversible es real. Pero hoy la Amazonía ha tomado un nuevo valor, es “una mina de oro” porque es la más grande reserva vegetal y animal del mundo y abriga probablemente más del 50 % de las especies del planeta y porque en sus 5.5 millones de kilómetros cuadrados tiene la biodiversidad más alta del mundo con un récord de especies de flora y fauna por metro cuadrado. La Amazonía tiene una variedad asombrosa de insectos como mariposas, abejas, hormigas (muchas especies distintas de hormigas han sido encontradas en un solo árbol); reptiles como caimanes, 4) Zárate G., Carlos(2008). “Fronteras en la globalización: localidad, biodiversidad y comercio en la Amazonia”. Observatorio Andino. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana. 3. 500 중남미연구 제29권1호 lagartijas; anfibios como sapos y salamandras; una colección increíble de aves como guacamayos, tucanes, y el águila arpía; peces como paiches o pirarucú y pirañas; mamíferos como monos, el tapir y el jaguar; y roedores como la nutria, etc. La privatización de la biodiversidad está forzando a los países a modificar sus normas de propiedad intelectual para permitir un mayor grado de apropiación privada de los seres vivos y sus componentes, que la que establece la OMC. De modo que los países se han visto presionados a cambiar sus leyes nacionales para posibilitar la obtención de patentes sobre plantas y animales, a establecer condiciones que garanticen la propiedad privada de las obtenciones vegetales o variedades de plantas (semillas) en manos de las grandes empresas y a facilitar la patente de micro‐organismos adhiriéndose para ello al Tratado de Budapest. La bioprospección ― la exploración e investigación de la biodiversidad en busca de genes útiles y rasgos o procesos genéticos para nuevos productos comerciales ― está incluida en estos acuerdos, generalmente como un componente de las normas sobre servicios e inversiones. “Allí se modelan muchos nuevos derechos y libertades para las empresas extranjeras: el derecho a ingresar y llevar a cabo investigaciones, exportar los materiales biológicos recolectados, obtener derechos de propiedad intelectual sobre los resultados de las investigaciones, no tener que contar con un domicilio legal en el país donde se realiza la bioprospección, etc.”5) Estas disposiciones pueden ser incompatibles con la legislación nacional sobre biodiversidad y a pesar de eso imponerse por encima de ella. En otras palabras la humanidad del siglo XXI está empeñada en preservar la Amazonía con un propósito implícito avanzado pero con una maquinación de la más baja y antigua naturaleza humana: la codicia. Este afán de poder y de acapararlo todo para sí de acuerdo a su capacidad y a su circunstancia le ha permitido seguir utilizando métodos y estrategias antiguas que deberían ser vergonzosas para el momento actual. 5) Ibíd. p. 42. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 501 Tal como sucedió en la época antigua, en la edad Media o en la Edad Moderna la depredación sigue rampante como si la cultura humana no hubiese avanzado en lo absoluto excepto en las técnicas y las tecnologías con que lo hace. La extracción y la utilización de materias primas, de bosques y de la naturaleza en general se ha llevado a cabo bajo la misma idea tutelar desde hace mucho tiempo. A manera de ejemplo se podría citar al Imperio Romano que depredó y de qué manera las más variadas especies exóticas de África para proveer de espectáculo de sangre a sus clases poderosas y al pueblo romano; la Europa culta acabó con muchos bosques nativos de la Europa Oriental y de África para acomodarse en ingentes muebles de madera robusta estilo Luis XV y todo lo demás; el continente americano desde 1492 contribuyó con el aceleramiento de la industrialización europea con todas las riquezas minerales y alimenticias, aunque para ello hayan desaparecido millones de nativos; África fue saqueada, descuadernada y repartida por las naciones europeas a costa de truncar el proceso cultural y de bienestar económico, social y político de sus pueblos hasta convertirlo en lo que es hoy ese continente. Hoy el turno es para la selva amazónica y otros ecosistemas. Si hay un sistema complejo es el de la selva tropical húmeda. Ella posee centenares de especies de árboles por hectárea y una gama increíble de formas de vida animal, pero la competencia allí es tan fuerte que cada especie no cuenta sino con un pequeño número de individuos. Es exactamente lo contrario a lo que ocurre en las selvas siberianas o del Canadá. Aquellas no cuentan sino con pocas especies pero que alinean innumerables individuos, las cuales se convierten en especies extraordinariamente sólidas. De las seis naciones que comparten esta cuenca más grande del planeta, cada una enfrenta sus propios retos para la supervivencia del Amazonas: En Brasil, no existe control sobre la explotación maderera y las políticas siguen subvencionando y promulgando exenciones tributarias por deforestar la selva y dedicarla a la agricultura y la ganadería. Tan sólo en 1988 se quemaron 32.000 kilómetros de 502 중남미연구 제29권1호 bosques. En Colombia la selva Amazónica corre cada día más riesgo por el avance de colonos y narcotraficantes que arrasan sus bosques primarios para sus cultivos y crean un impacto de grandes proporciones aún no valorado por los especialistas. Sin embargo en los últimos años se han adelantado políticas a favor de las comunidades indígenas que hoy dominan más de 200.000 kilómetros donde se preserva el medio. Ecuador sufre la amenaza de la deforestación, contaminación de sus ríos, la construcción de carreteras y la explotación petrolera, en Perú y Bolivia es menos crítico el problema de los bosques amazónicos. En la Guyana, Guayana Francesa y Surinam se han podido mantener sus bosques debido a la baja intervención del hombre. Para los investigadores, geógrafos y ecólogos la amenaza que se cierne sobre el amazonas sólo puede ser contrarrestada y controlada si se suspenden los contratos ya realizados por los países de la cuenca con multinacionales farmacéuticas, madereras y petroleras tanto para explotar la rica biodiversidad de la Amazonía como por la protección de la depredación de los nativos y la explotación de sus ricos y abundantes suelos. Según expertos colombianos en materia de biodiversidad y biotecnología, en Colombia como en los países que comparten la cuenca amazónica,” se hace necesario proponer leyes a través de los estados que regulen de una vez por todas la utilización de los recursos genéticos que manejan tanto empresas transnacionales como nacionales, e igualmente realizar un estudio serio sobre el potencial de esta reserva del planeta”,6) Hoy se están haciendo grandes esfuerzos para frenar la deforestación y la depredación indiscriminada de la selva amazónica, y sería estupendo que se lograra por lo que ella representa como depósito de CO2, como depósito de agua 6) Carmona M., Sergio Iván(1998). Antropología y Desarrollo Sostenible. Medellín, Colombia: Instituto de Estudios Ambientales. Universidad Nacional de Colombia. 71. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 503 (en su cuenca y en sus seres vivos) y también por su biodiversidad. Pero claro, queda un mal sabor en la mente pensar que mientras se hace este gran esfuerzo por conservarlo, la biodiversidad del resto del planeta se extermina a una velocidad sorprendente. Los estados con grandes cantidades de divisas están comprando o alquilando tierras por todo el mundo subdesarrollado con consecuencias no muy halagadoras para las poblaciones nativas y qué no decir del medio ambiente y la biodiversidad. Lógicamente que existen muchas consecuencias y tejemanejes con respecto a estos contratos y uso de la tierra entre los que vale destacar algunos en lo que concierne al punto central del presente artículo: ‐ Básicamente estas tierras van a ser utilizadas en monocultivos tendientes a satisfacerla alimentación humana, de animales de granja y para la producción de agro combustibles. ‐ Todas las experiencias de cultivo intensivo de soja, palma aceitera, maíz, etc., muestran una considerable devastación de recursos naturales: desmonte de miles de hectáreas de bosques y de arbustos; contaminación y empobrecimiento de suelos por el uso de agroquímicos, pérdida de la biodiversidad inducida por el monocultivo; emisiones de gases que contribuyen al efecto invernadero, como el óxido nitroso producido por los fertilizantes. Además habría que agregar que el cambio de uso de suelo, por ejemplo, al dedicar áreas antes no cultivadas y desmontarlas para la siembra contribuye también al calentamiento global, por la reducción de la cubierta vegetal y a la mayor liberación de carbono. ‐ Si alguna cosa caracteriza a los monocultivos es el uso intensivo del agua. Las empresas interesadas en los biocombustibles no se van a dirigir a las tierras temporaleras, por su productividad van a preferir las superficies que cuentan con irrigación. ‐ Implica el desplazamiento de cientos de miles de pequeños y medianos productores, la expulsión de los mismos del campo hacia la ciudad, el desempleo forzado de todos aquellos que no tienen la posibilidad de cultivar grandes 504 중남미연구 제29권1호 extensiones para obtener los beneficios de economía de escala, que no cuentan con los recursos para adquirir la maquinaria especializada o los paquetes tecnológicos demandados. ‐ El cultivo masivo de plantas para producir biocombustibles incrementa la presión sobre la tierra actualmente dedicada a producir alimentos para la población nativa. Es aumentar su vulnerabilidad alimentaria pues provocaría una carestía aun mayor en los alimentos básicos y los haría más vulnerables a las presiones de los países y de las empresas trasnacionales que controlan el mercado internacional. ‐ Dispara la utilización de semillas transgénicas, como es el caso de la soya y del maíz, o de árboles genéticamente modificados, como la palma africana y el álamo transgénico, o el desarrollo de pastos también transgénicos. Es ponerse en manos de las trasnacionales como Monsanto, depender de ellas y pagarles patentes por emplear sus semillas. La segunda, peor todavía, es la agresión a las semillas, pastos, árboles nativos y a ecosistemas completos por la introducción de elementos transgénicos que pueden acabar con la diversidad y extinguir especies animales o vegetales. Ⅳ. Los grandes retos a superar Todo está listo para que el hombre inaugure una nueva manera de vivir y de relacionarse con el universo en general y el planeta, su país, su ciudad, su barrio, o el pequeño espacio que ocupa su masa corporal. Existen todos los conocimientos y adelantos en ciencia y en tecnología para capturar el CO2 con el que hemos contribuido a contaminar el planeta. Se sabe lo suficiente acerca de cómo manejar e incrementar los bosques naturales; se conoce la importancia del mar en el funcionamiento del planeta y sobre los actos destructivos con los que algunos seres humanos están atentando en su actividad El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 505 natural; existen tecnologías apropiadas y suficientes para revertir, atrapar el CO2 y los gases letales que se están emitiendo actualmente;” la ciencia ha alcanzado métodos y técnicas para que la industria humana reduzca sus efectos nocivos ya sea ahorrando energía, combinando sus materias primas, utilizando filtros o procesos biológicos o naturales que le permiten aprovechar al máximo las leyes físicas etc.”7) La producción agropecuaria tiene hoy a su disposición opciones variadas desde la utilización de abonos naturales y controles biológicos de plagas hasta procesos de excelsa tecnología como la nanotecnologíay la biotecnología ‐ a partir de micro algas ‐ que están en capacidad de producir en laboratorios un sin número de elementos desde nutrientes simples, biomasa con múltiples aplicaciones hasta toneladas y toneladas de alimento para humanos y animales como lo muestra un proyecto de la universidad de Antioquia en Colombia como ejemplo de investigación en un país subdesarrollado, pero con muchos adelantos e investigaciones en otras latitudes e institutos del mundo con niveles de desarrollo diferente. Además existen otro tipo de recomendaciones más puntuales como las sugeridas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio climático (IPCC) creadopor la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA): “• aumentar la fijación de carbono en el suelo mediante el uso de técnicas de labranza orientadas hacia la conservación y la reducción de la intensidad de uso de la tierra; • reducir el CH4 mediante una gestión adecuada del riego de los arrozales, un mejor uso de los fertilizantes y una disminución de las emisiones de CH4 entérico de animales rumiantes; • evitar las emisiones antropógenas de N2O de origen agrícola (que en el caso 7) Gómez Giraldo, Luis Jair(2007), Economía ecológica. Bases fundamentales. Bogotá: Instituto de Estudios Ambientales. IDEA: Universidad Nacional de Colombia. 22. 506 중남미연구 제29권1호 de la agricultura superan las emisiones de carbono resultantes del uso de combustibles de origen fósil) mediante el uso de fertilizantes de liberación lenta, estiércol orgánico, inhibidores de la nitrificación y plantas leguminosas que permitan la aplicación de técnicas de ingeniería genética. Los niveles más altos de emisiones de N2O se registran en China y los Estados Unidos, principalmente debido al uso de fertilizantes en suelos destinados al cultivo de arroz y otras tierras agrícolas. Se espera que para el año 2020 se disponga de más opciones para controlar las emisiones de N2O de los suelos fertilizados, lo que permitirá contribuir en mayor medida a la reducción de las emisiones.”8) Por otro lado Corea, Japón, Alemania, Francia y otros países han desarrollado prototipos de automóviles con cero contaminación usando hidrogeno, corriente eléctrica y otras tecnologías. En fin, la lista sería muy extensa pero no es el propósito del presente artículo. Solo que todas las anteriores soluciones no están en la mira de contribuir a solucionar el problema porque su rentabilidad no llena las expectativas de las grandes multinacionales, porque entre otras cosas, y es entendible, se resisten a desmontar las grandes infraestructuras de este tipo de producción industrial contaminante, por cuanto eso representaría perdida de ganancias por los sobre costos del tiempo de uso y de la rentabilidad programada. En fin, solo falta una cosa para ser más amables con el planeta: voluntad política. Con el poder desbordado de los medios masivos de comunicación y de transporte se ha masificado y globalizado una manera de ser y de pensar: las creencias, las costumbres y los modelos deconforten el vestido, en la alimentación en el sexo, en la diversión, etc. orientados al consumismo desbordado. Se ha globalizado la idea de las bondades del consumo desenfrenado y compulsivo en las grandes superficies, en todos los espacios y a todos los niveles. De esta tendencia no se ha salvado el planeta ni la naturaleza, incluso se 8) Watson Robert T(2001). Resumen técnico del Grupo de trabajo III del IPCC. OMM. PNUMA. 37. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 507 ha intentado declarar a la Amazonía como patrimonio de la humanidad, pero falta la decisión más loable y perentoria que se le declare patrimonio no de la humanidad, sino para toda la humanidad, igual que los océanos, los glaciales, los páramos, los bosques, las sabanas, las cuencas hidrográficas, la biomasa, etc. En esta perspectiva “la humanidad debe superar los supuestos implícitos que soportan la estructura economicista y cultural de la sostenibilidad del planeta”9). La historia adaptativa y cultural en la sociedad occidental –a la que prácticamente está sometido el planeta – se ha expresado en una inmensa especialización en saberes y en la “imposición de instituciones y empresas con control y producción de bienes y servicios como estrategias para obtener ganancias a través de formas de comportamientos como la creación de mercados, la competitividad y la competencia.”10) La reducción a lo tecno‐económico, debemoverse hacia una perspectiva postmoderna con visos macroeconómicos para una readaptación de las relaciones sociales y culturales de tal manera que se logre romper el doble discurso en el que por un lado está el “amor” por el medio ambiente construyendo parques ecológicos, paseos exóticos a la Amazonía o a otros parajes ajenos a la intervención directa del hombre, a las recomendaciones de cómo preservar los bosques y la fauna, a la promoción del turismo ecológico y esa contemplación casi piadosa y pasiva de la naturaleza virgen y sus ecosistemas. Y por el otro el “amor” y la pasión por mantener o incrementar excesivamente esos bacanales de consumismo que se observan en las tiendas y supermercados, cuyo único límite es su propia riqueza económica y la capacidad de endeudarse sin siquiera sospechar ni ruborizarse por la relación directa que existe entre su consumismo y todos los desmanes que hay que hacer con los bosques, suelos y 9) Noguera de Echeverri, Ana Patricia(2009). “El mundo de la vida. Elementos para la elaboración de Modelos de Educación Ambiental Rural”. El mundo de la vida. Manizales, Colombia: Universidad Nacional de Colombia. Instituto de Estudios Ambientales, IDEA. 78. 10) Holguin Borrero Sergio(2009). “Reducciones voluntarias para países en desarrollo”. El punto medio entre MDL y reducciones obligatorias. Bogotá. Uniandes. 44. 508 중남미연구 제29권1호 aguas para poder llenar de artefactos y utensilios a cada uno de los hogares humanos. Y de los cuales seguramente habrá muchos que no se utilizaran para lo que fueron adquiridos y otro tanto o más que serán suntuarios porque sencillamente fueron comprados para tener “la certeza interior” de no ser inferior al vecino o mejor aún: “demostrar” su superioridad económica,“social y cultural”. Tengamos en cuenta que “El crecimiento económico basado en el derroche de recursos no puede proseguir indefinidamente sin poner en peligro la capacidad sustentadora del planeta. Las viejas pautas de crecimiento deben cambiar –con rapidez‐ para que podamos garantizar la integridad a largo plazo de los sistemas naturales que sostienen la vida en la Tierra”11) Ⅴ. Conclusiones El gran cúmulo de conocimientos que ya tenemos sobre nuestro planeta, el sistema solar y el universo nos deben ayudar a comprender claramente que nuestro planeta Tierra, está sometido a una infinidad de fuerzas cósmicas y condiciones universales que implican un continuo cambio en la orografía, la atmósfera y las formas de vida que predominan sobre la superficie de nuestro planeta. En la medida que conozcamos estas condiciones podremos entender mejor la evolución o el funcionamiento de nuestro sistema solar para ir acondicionándonos mejor a las circunstancias cambiantes que rigen la vida sobre el planeta Tierra. Sin embargo, es preciso que razonemos concienzudamente hasta dónde podemos manipular la naturaleza para que los efectos de nuestra influencia sobre el planeta no sean catastróficos. Cierto es que descubrir y explorar la naturaleza 11) Cachán, Carlos(1995). Manipulación Verde ¿Está en Peligro la Tierra?. Madrid: Ediciones Palabra, S. A. 77. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 509 es realmente interesante desde el punto de vista de tratar de encontrar nuestros orígenes en el cosmos, pero no debemos olvidar que como seres humanos, tenemos ciertas limitaciones que no deben perturbar los principios divinos de la creación. Por otro lado, los alcances de los programas proambientales y de protección de la naturaleza sólo serán significativos si nuestra forma de pensar cambia y se orienta hacia la supervivencia de la biodiversidad, incluidala especie humana. El desarrollo, sobre todo en el campo industrial, debe ir de la mano de la naturaleza para evitar la destrucción del medio natural y los ecosistemas, pues de lo contrario sencillamente seguiremos cayendo en el precipicio de la autodestrucción. Con respecto al sistema amazónico de América del Sur, debemos dejar de creer que es el pulmón del mundo y que con su conservación sería suficiente para salvar el planeta del aumento del efecto invernadero. Lo que si debemos valorar es que el sistema amazónico es una parte primordial de la naturaleza para sustentar la vida en la Tierra y que debemos utilizarlo como paradigma de sostenimiento del proceso biológico para todos los demás ecosistemas del mundo, especialmente los océanos, y así poder garantizar nuestra existencia en el planeta en una perfecta armonía con la naturaleza. También se debe entender que la conservación del sistema amazónico no un asunto que compete sólo a Brasil, Colombia, Venezuela, Perú, Ecuador, Bolivia y los demás países que albergan pequeñas áreas de la intrincada selva amazónica. De la misma manera el cuidado de los océanos, humedales, cuencas hidrográficas, la Antártica, etc., también es tarea de todos por lo que la comunidad internacional debe hacer mayores esfuerzos para obligar a los países del mundo a adquirir compromisos sobre el cuidado y el desarrollo de la tecnología que se requiera para su protección. Somos parte de la naturaleza y no debemos olvidar que “La naturaleza es el espacio vital del hombre. La humanidad –como especie‐ está llamada a explorarla, descubrirla con prudente cautela y a hacer uso de ella salvaguardando su 510 중남미연구 제29권1호 integridad, porque debe sentirse responsable de ella frente al resto de los seres vivos y reconocer la dignidad propia de las cosas, el respeto que merecen.”12) Quizás, lo más bello de la historia son las enseñanzas que nos dejan la infinidad de capítulos que la conforman. Y en este campo de la destrucción indiscriminada del planeta son innumerables los casos que nos dicen que no debemos caer en los mismos errores: el imperio romano destruyó parte importante de la fauna Africana, la Europa del Medioevo redujo los bosques de Europa del Este y para completar el oscuro escenario, desde la conquista del continente americano en 1492 y la devastadora colonización del continente africano se aceleró todo este proceso de destrucción para dejar a África convertida en lo que es hoy. La adquisición de extensiones de tierra para ser deforestadas y luego sembradas con cultivos de pan coger debe ser controlada conforme a las necesidades reales de la población, pues este proceso sólo contribuye a una mayor degradación del problema de la deforestación. La política al respecto debe ser reorientada, y en este sentido, vale la pena destacar la reciente noticia de comienzos de noviembre del 2009 de que Corea del Sur está planeando comprar tierras áridas en Sudamérica para reforestarlas. Con esta orientación de buena voluntad podremos salvar el planeta. ¡Seamos más generosos con nuestro hogar planetario y dejemos un bello legado natural a la posteridad! 12) Cachán, Carlos(1995). Manipulación Verde ¿Está en peligro la Tierra?. Madrid: Ediciones Palabra, S. A. 356. El sistema amazónico: Vida o muerte de un paradigma de regulación climática 511 Bibliografía Biblioteca Virtual del Banco de la República(2005). Biodiversidad ‐ Ayuda de tareas sobre ecología y medio ambiente. Edición original. Carmona, M., Sergio Iván(1998). Antropología y Desarrollo Sostenible. Medellín: Instituto de Estudios Ambientales de la Universidad Nacional de Colombia. Cahán, Carlos(1995). Manipulación Verde ¿Está en peligro la Tierra?. España: Ediciones Palabra. S. A. 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