Consejo de la Magistratura RESOLUCION N° 600/09 En Buenos Aires, a los 26 días del mes de noviembre del año dos mil nueve, sesionando en la Sala de Plenario del Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la Nación “Dr. Lino E. Palacio”, con la Presidencia del Dr. Luis María Bunge Campos, los señores consejeros presentes, y VISTO: El expediente N° 280/2009, caratulado “Coronel Teresa Ramona c/Juzgado de Ejecución Penal N° 2 Dr. Marcelo Alejandro Peluzzi”, del que RESULTA: I. La presentación efectuada con fecha 6 de octubre de 2009 por la Sra. Teresa Ramona Coronel, en representación Ibañez, en de la su que concubino, denuncia el al Sr. Dr. Ángel Marcelo Gorosito Alejandro Peluzzi, Juez Subrogante a cargo del Juzgado de Ejecución Penal N° 2, actuación en hasta la el 8 causa de N° octubre 415, de 2009, imputándole por su abuso de autoridad y mal desempeño. La denunciante refiere que el motivo de su presentación radica en las irregularidades cometidas en la situación de detención de su concubino. Fundamenta sus dichos en el tiempo de detención que lleva su concubino, y la falta de atención médica dispensada al interno, el cual sufre distintas patologías, como fractura de húmero del brazo derecho, incontinencia urinaria y fecal debido a una lesión sufrida por parte del personal de requisa de la Unidad N° 9 de Neuquén (S.P.F.). Este hecho fue denunciado ante el Juzgado Federal de Neuquén N° 2, el que ordenó el traslado del interno a Buenos Aires, alojándose en HPC del SPF N° 2 de Capital Federal, para luego derivarlo al Hospital Fernández. Señala, que una vez internado allí, se le realizaron los estudios pertinentes a fin de ser operado 1 de su lesión en la columna y brazo derecho, hecho que nunca ocurrió por diferentes motivos. Agrega que “el SPF no contaba con la seguridad y los insumos para dicha intervención quirúrgica” (fs. 4). Por lo que la dicente quiere poner de manifiesto que su concubino sigue con la misma patología de vejiga y fractura de su brazo. Señala la denunciante que quiere poner en conocimiento, que su concubino se encuentra excedido de la pena impuesta por el Tribunal Oral en lo Criminal N 11 de la ciudad de Buenos Aires. Solicita, que se tomen las denuncias de abuso de autoridad, y abandono de persona, y se investigue la situación actual de su concubino, el Sr. Gorosito Ibañez. II. Juzgado encontró El magistrado, Nacional de en su Ejecución subrogrando el Juzgado carácter Penal titular del N° 4, quien se Nacional de Ejecución Penal N° 2, desde el 13 de junio de 2008 hasta el 8 de octubre del corriente año, se presenta en los términos del art. 11 del Reglamento de la Comisión de Disciplina y Acusación (fs. 44/46). Refiere el magistrado que de las constancias del legajo de ejecución, surge que Gorosito Ibañez ha sido condenado por sentencia definitiva del 1 de diciembre de 1999 a la pena única de veintitrés años de reclusión, con más la declaración de reincidencia, accesorias legales y costas, dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 11 en la causa n° 415, comprensiva de la sanción también única de dieciocho años de prisión, accesorias legales y costas que le fuera aplicada en la causa N° 18.343 de la Cámara Segunda en lo Criminal de la Provincia de Neuquén, el 12 de febrero de 1997. Agrega, que actualmente se encuentra detenido a exclusiva disposición de dicho Juzgado de Ejecución Penal, en virtud de que tras haber sido detenido el 6 de enero de 1998, se dispuso su libertad el 8 de octubre de 2007, en tanto que la sentencia dictada el 28 de septiembre de 2006 por 2 el Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Consejo de la Magistratura Buenos Aires donde se lo condenara a la pena de doce años y ocho meses de reclusión (por la denominada causa "Motín de Sierra Chica") se encuentra recurrida en la Corte Suprema Provincial, sin contar a la fecha con sentencia firme para ese expediente. En Ibañez, cuanto el al tiempo magistrado de detención refiere, que de Gorosito habrá de circunscribirse desde la fecha en que asumió como Juez subrogante de la sede citada -13 de junio de 2008- hasta el 8 de octubre pasado, en que cesó la misma por haber sido designado el Dr. Néstor Guillermo Costabel. Agrega que “[n]o obstante ello, no pued[e] dejar de señalar, ya que la denunciante ha manifestado que Gorosito Ibáñez no ha tenido beneficio alguno hasta el presente, la circunstancia de que el titular del Juzgado, Dr. Gustavo Javier González Ferrari, el 15 de febrero de 2008 (…), modificó el cómputo originario y declaró que la mencionada pena única de veintitrés años de reclusión, reincidencia y costas vencería el 29 de febrero de 2016, aclarando que a esa fecha llevaba detenido el lapso de catorce años, once meses y dieciséis días. Además, se rechazo el pedido de excarcelación formulado” (fs. 44 vta.). Asimismo, destaca que el Dr. González Ferrari, “aclaró en su decisorio que el nombrado estuvo detenido para la Cámara 2° de Mendoza por espacio de dos años, cinco meses y doce días (…), en tanto que desde el 25 de mayo de 1996 -fecha de comisión de los hechos por los que fuera condenado en la causa que se ejecuta en autos- hasta el 23 de abril de 1997 (fecha en la que se evadió del instituto donde se hallaba detenido), estuvo privado de su libertad diez meses y veintinueve días, siendo nuevamente aprehendido el 19 de enero de 1998 permaneciendo en tal situación hasta el presente” (fs. 44 vta./45). Aclara el Dr. Peluzzi, que él mismo, por resolución del 9 de octubre de 2008, no hizo lugar a la aplicación del art. 7 de la ley 24.390 (denominada ley 2 por 1), en el entendimiento que el condenado había 3 cumplido un lapso inferior a los dos años establecidos por la norma como para computar el lapso en forma doble. Destaca el magistrado, que “la señora Defensora Oficial, estado (…) habiendo de autos, manifestado no recurrió que se notificó el decisorio del antes mencionado, circunstancia que denota su apego a derecho” (fs. 45). En referencia al estado de salud del interno, detalla, que la Defensora Oficial a cargo del encartado, solicitó se adopten las medidas necesarias tendientes a incorporarlo al arresto domiciliario. Agrega adoptadas que por pretendidos luego éste por a la de una serie fin de acreditar parte, no hizo de los lugar medidas extremos al pedido, entendiendo que en el caso de autos no se reunían los requisitos que establece en forma expresa la legislación. En tal sentido a fs. 822 surge que el interno se hallaba recuperándose de una fractura en el húmero izquierdo, en tratamiento y controlado por el seguimiento de traumatología del CPF N° II. Al momento del examen surge que se hallaba compensado y en tratamiento con ciprofloxacina vía oral, por una infección baja. A fs. Subdirectora 906 de obra División el informe Médica realizado Nacional, quien por la en su conclusión refirió que "…de la evaluación correspondiente se considera que el control y asistencia médica es adecuada a las imposiciones del interno, recibiendo las prescripciones en tiempo y forma y los cuidados de higiene y enfermería de acuerdo a su necesidad…" (fs. 45/45 vta.). A fs. 1007 obra un informe confeccionado por el medico Jorge Pérez, quien señaló que: "se encuentra en seguimiento por los servicios de Urología y Traumatología del Hospital Fernández de Capital Federal. Se realizaron estudio tomográficos, pendiente la resonancia magnética de columna. Los estudios, interconsultas y tratamientos indicados hasta la fecha pueden ser realizados por el Servicio Penitenciario Federal; solamente que los tiempos 4 Consejo de la Magistratura son más prolongados debido a la obtención de turnos extramuros y la capacidad operativa. No cumple con los puntos a, b y c del art. 33 de la ley 24.660…" (fs. 45 vta.). Ahora bien, pone de manifiesto el magistrado, que habida cuenta que la patología que padece actualmente Gorosito no resulta ser de índole terminal, permitiendo inferir dicha circunstancia que sus condiciones de salud puedan verse modificadas con el transcurso del tiempo como así también el tiempo parcial que lleva privado de su libertad con relación al monto definitivo impuesto y la fecha de que precedentes, es datan los que informes dispuso obrantes mantener la a fojas periódica evaluación por parte de la División Asistencia Medica de ese establecimiento. Asimismo, con el objeto de que las dificultades que pudiere mantener el interno, dado su estado de salud, no afecten su acatamiento a los objetivos fijados por las distintas áreas que conforman el Consejo Correccional del establecimiento, señala el Sr. Juez que encomendó al Director de dicho lugar que arbitre los medios conducentes para que los objetivos fijados en el Programa de Tratamiento Individual de Gorosito Ibañez se adecue a las dificultades que su patología podrían acarrearle. Informa que la defensa recurrió dicha resolución, concediéndose el pertinente recurso de casación a fs. 1095 con fecha 21 de septiembre pasado. Agrega que, a fs. 1009, la defensa requirió la atención médica de su asistido, ordenando éste a fs. 1013, al Complejo pertinente Penitenciario para que se Federal brinde al N° II interno disponga la lo atención médica necesaria por los problemas urinarios que padece como así también los medicamentos correspondientes y se informe el tratamiento a seguir. También se lo autorizó a que de resultar necesario sea trasladado al nosocomio extramuros que corresponda. Por otra parte, destaca que Gorosito Ibañez se encuentra cumpliendo condena respecto de la pena única de 5 veintitrés años de reclusión impuesta por el Tribunal Oral Criminal n° 11 de Capital Federal, en donde por su calidad de reincidente recién podrá gozar del beneficio de libertad asistida para el 29 de agosto de 2015. Agrega que no puede soslayarse la circunstancia de que por la denominada causa "Motin de Sierra Chica" estuvo detenido desde el 6 de enero de 1998 hasta el 8 de octubre de 2007, período éste común con el que fue computado el tiempo de detención que lleva para la condena del Tribunal Oral Criminal n° 11. Asimismo, perjuicio de que remarca la pena el magistrado, impuesta por el que “sin Tribunal de Casación Provincial no está firme, el Juzgado de Ejecución no es competente para la unificación de penas, y tal requerimiento deberá ser efectuado oportunamente ante el órgano jurisdiccional que dictó la pena mayor, el que a su vez, a tenor del art. 493 del CPP, deberá practicar el cómputo de vencimiento de pena” (fs. 46). Por último, el Dr. Peluzzi acompaña prueba documental, informes médicos, resoluciones, certificado de Cámara, dictamen fiscal, etc., a los efectos de sustentar sus dichos. CONSIDERANDO: 1°) Que, el objeto de las presentes actuaciones consiste en analizar el desempeño del Dr. Marcelo Alejandro Peluzzi, en su carácter de Juez Subrogante a cargo del Juzgado Nacional de Ejecución Penal N° 2, en el marco de la causa N° 415, en la cual el Sr. Carlos Ángel Gorosito fue condenado por sentencia definitiva a la pena única de veintitrés años de reclusión y declaración de reincidencia, dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 11, comprensiva también de la sanción única de dieciocho años de prisión accesorias legales y costas, manteniendo la declaración de reincidencia, que le fuera aplicada en la causa n 18.343 por la Cámara Segunda en lo Criminal de la Provincia de Mendoza el 12 de febrero de 1997. 6 Consejo de la Magistratura 2°) Que, realizadas las aclaraciones precedentes cabe señalar que conforme surge del análisis de la denuncia, como así también del descargo formulado por el señor Juez, no se advierte que el magistrado se encuentre inmerso en la causal de mal desempeño, ni que haya cometido una falta disciplinaria. 3°) Que, el magistrado en su presentación en los términos del art. 11 del Reglamento de la Comisión de Disciplina y Acusación, ha efectuado una descripción de manera pormenorizada respecto de las peticiones formuladas por el Sr. Gorosito Ibañez, detallando su intervención a fines de dar solución a tales pedidos, circunstancias que se corroboran con las constancias acompañadas. Asimismo, actuaciones, el conforme magistrado surge de denunciado las presentes asume como Juez subrogante a cargo del Juzgado Nacional de Ejecución Penal N° 2, el día 13 de junio de 2008 hasta el día 8 de octubre de 2009. 4°) Que, en cuanto al estado de salud del interno, es preciso remarcar, las diversas intervenciones de la judicatura en cuestión, a fin de garantizar el derecho a la salud del interno. En presentación tal de sentido, la se defensa evidencia el que magistrado ante ha cada procurado brindar una solución, con el objeto de que la situación del interno no se agrave, atendiendo así a las patologías que padece, formulado surgiendo por el Sr. en forma Juez la palmaria del circunstancia descargo de haber llevado a cabo un serio control de su evolución de salud. En momento alguno, hubo un estado de abandono de persona ni irregularidad por parte del magistrado cuestionado, quien tuvo el legajo a su cargo por espacio de un año y cuatro meses. Por el contrario, se ha atendido su problemática relativa al estado de salud, la que estuvo abordada por alojamiento, los tal profesionales como surge de de los la unidad informes de médicos obrantes en el legajo. 7 5°) Que, en lo referente al pedido de prisión domiciliaria, tal como lo ha señalado el magistrado en su descargo, y teniendo en cuenta los fundamentos que se tuvieron en miras al sancionar la Ley 26.472, se desprende que los legisladores, en el texto normativo sancionado, buscaron precisar al juez cuáles son las situaciones en las que podrá determinar la prisión domiciliaria. En este orden de ideas cabe señalar que, se está ante una facultad del juez y no de una obligación de otorgar la prisión domiciliaria ante causales humanitarias. Por lo tanto, "...el juez, dentro de sus facultades, podrá usar este beneficio o no, según cada caso, y determinará si cada una de las peticiones reúne los requisitos que se requieren para obtener esta libertad domiciliaria." (H. Cámara de Senadores de la Nación, 23 Reunión, 21 Sesión Ordinaria, 17/1272007; Secretaría Parlamentaria, Dirección de Información Parlamentaria). 6°) Que, en lo relativo al pedido de excarcelación formulado por el interno, le resta cumplir un lapso bastante prolongado para agotar la pena única de veintitrés años de reclusión impuesta. En tal sentido, el magistrado ha respondido jurisdiccionalmente a su reclamo de aplicación de llamada “ley del dos por uno”, denegando la solicitud al respecto. Asimismo, cabe destacar que tal decisorio no fue recurrido por la defensa. 7°) Que, sobre ello, es dable señalar que en diversas oportunidades se ha sostenido que la valoración de los criterios de interpretación normativa o probatoria que los magistrados incorporan a sus resoluciones se encuentran fuera de la competencia asignada a este Consejo de la Magistratura y solo son susceptibles de revisión a través de los canales recursivos que el ordenamiento procesal prevé. Al respecto, la Excma. Corte Suprema de Justicia de la Nación ha entendido que “lo relativo a la interpretación y aplicación de normas jurídicas en un caso concreto es resorte exclusivo del Juez de la causa sin 8 Consejo de la Magistratura prejuicio de los recursos que la ley procesal concede a las partes para subsanar errores o vicios en el procedimiento o para obtener la reparación a los agravios que los pronunciamientos del magistrado pudiera ocasionarles” (Fallos 303:741, 305:113). 8°) Que, en virtud de las consideraciones efectuadas precedentemente, y atento a que no se observa ninguna irregularidad denunciado que en la configure actuación alguna de del las magistrado causales de remoción previstas en el artículo 53 de la Constitución Nacional, ni alguna falta disciplinaria establecida en el artículo 14 de la Ley N° 24.937 y modificatorias, corresponde desestimar las presentes actuaciones. 9°) Que ha tomado intervención la Comisión de Disciplina y Acusación –mediante dictamen 337/09-. Por ello, SE RESUELVE: 1º) Desestimar la denuncia formulada contra el Dr. Marcelo Alejandro Peluzzi, titular del Juzgado Nacional de Ejecución Penal N° 4. 2º) Notificar al denunciante, al magistrado denunciado y archivar las actuaciones. Regístrese. Firmado por ante mí, que doy fe. Fdo: Luís María Bunge Campos - Hernán L. Ordiales (Secretario General) 9