LasHeridasdePluspetrolenlaAmazoniaPeruana

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Las Heridas de Pluspetrol en la Amazonia Peruana
Después de 15 años de explotación y a seis meses de que su contrato concluya,
Pluspetrol –una transnacional que opera en Sudamérica y África– pelea judicialmente
para no pagar S/. 39,400.592 millones por 12 multas impuestas por infracciones
ambientales e intenta silenciar un documento que señala su responsabilidad en la
remediación de 92 sitios impactados. La petrolera –que además tiene procesos penales
por contaminación y controla los lotes más estratégicos del Perú, pues producen el 40%
del petróleo nacional y el 95% de gas– ya obtuvo una primera medida cautelar y piensa
en quedarse en el Lote 1-AB.
La vida de Carlos Sandi está asociada al petróleo, aunque él no lo haya decidido. Nació
cuando la Occidental Petroleum (Oxy) llevaba 15 años extrayendo el petróleo de territorio
indígena, en la región amazónica de Loreto; creció viendo los pastizales sepultados en
ese crudo oscuro y pegajoso, cumplió 14 cuando Pluspetrol Corporation adquirió los
pozos, y se hizo adulto sorteando las cochas ahogadas en petróleo. Carlos Sandi tiene
ahora 29 años, es jefe de la Federación de Comunidades Nativas del Río Corrientes, y
desde hace tres semanas lidera una protesta que exige la remediación de los daños
ambientales tras cuatro décadas de explotación petrolera.
-Así como el Estado garantiza ganancias, también debe garantizar nuestros derechos,
dice el joven achuar de voz templada y ojos pequeños.
Hace 15 años Pluspetrol Norte -filial de un conglomerado transnacional que opera en
Sudamérica y África- explota el Lote 1-AB, ubicado en las provincias de Loreto y Datem
del Marañón. Entre el 2010 y el 2014 el Organismo de Evaluación y Fiscalización
Ambiental (OEFA) la sancionó en 12 oportunidades por infracciones al ambiente con
multas que suman un total de 39'400.592 soles*. Sin embargo, la petrolera rechazó
pagarlas, llevó seis de ellas ante el Poder Judicial, y además ha puesto una medida
cautelar contra un informe del OEFA que menciona su responsabilidad en la remediación
de los 92 sitios identificados con daños ambientales en el lote que explota.
El contrato de Pluspetrol vencerá en seis meses y la incertidumbre sobre quién atenderá
las zonas afectadas ha despertado nuevamente las demandas de las comunidades
indígenas. Lo que empezó hace tres semanas como una protesta en la comunidad achuar
de Pampa Hermosa, liderada por Carlos Sandi, en el río Corrientes, se extendió en pocos
días -ante la indiferencia de las autoridades- a las otras cuencas afectadas por la
contaminación: el Tigre, el Pastaza y el Marañón.
Desde que en 1971 la Oxy perforó el primer pozo de petróleo en esta zona las
condiciones económicas y sociales de la población indígena no han mejorado. Las cifras
oficiales desbaratan los promedios nacionales de crecimiento. Aquí, la desnutrición
crónica afecta al 31% de los niños y la pobreza monetaria al 78% de las familias. La
contaminación de las aguas y los suelos ha incrementado la inseguridad alimentaria: en
estas provincias las comunidades son tres veces más vulnerables a pasar hambre que el
promedio nacional.
-El único patrimonio de los pueblos indígenas es su territorio. No estamos en contra de las
inversiones, pero estamos hartos de vivir así, dice Carlos Sandi.
BATALLA JUDICIAL
En los últimos tres años, el OEFA realizó 23 supervisiones al Lote 1-AB y la multó en 12
ocasiones. Las resoluciones de sanción detallan cada una de las infracciones ambientales
cometidas: exceder los niveles permitidos de hidrocarburos en suelos, perforar pozos sin
instrumento de gestión ambiental aprobado, disponer residuos sólidos peligrosos a la
intemperie, utilizar un área mayor a la aprobada para la perforación de los pozos,
incumplir la rehabilitación de las áreas intervenidas, no tener válvulas de bloqueo
instaladas estratégicamente para minimizar el derrame, impactar con hidrocarburos la
laguna Shanshococha y luego drenarla, suelos impactados con hidrocarburos, y hasta
ausencia de permiso para captación de agua.
La lista de faltas es mucho más larga, pero la empresa ha decidido pelear el pago de
estas multas en el Poder Judicial. Pluspetrol enfrenta, además, investigaciones penales
por daños ambientales, en algunos de esos casos se ha citado a los directivos en calidad
de testigos.
Licitación. Perúpetro se ha comprometido a convocar a la licitación del Lote 1-AB,
solo después de la Consulta Previa. Crédito: David Hill.
El último intento de Pluspetrol Norte para judicializar e impedir los alcances de las
observaciones de OEFA ocurrió el 9 de diciembre del 2014. La petrolera interpuso una
medida cautelar en un juzgado de Iquitos solicitando la suspensión de un contundente
informe técnico (411-2014-OEFA/DS-HID) que resume las observaciones las 23
supervisiones realizadas al Lote 1-AB . Este documento menciona, entre otras
responsabilidades, que la empresa debe incluir en su plan de abandono de operaciones
(que aprobará el Ministerio de Energía y Minas) la remediación de todos los sitios
afectados
El 16 de diciembre, el juez civil de Maynas Alexander Rioja Bermúdez aceptó la medida
cautelar de la petrolera y ordenó que “se suspenda su eficacia jurídica”. En la resolución,
el juez recoge todos los puntos de vista de Pluspetrol y ordena que ninguna otra persona
ni entidad del Estado tome en cuenta el informe del OEFA.
Informe. OEFA determina que la empresa debe asumir la remediación de todos los
sitios impactados.
El documento que Pluspetrol quiere silenciar se denomina “Resumen ejecutivo sobre la
situación ambiental del Lote 1-AB operado por Pluspetrol Norte”, del 20 octubre del 2014.
En su demanda, presentada por el abogado Hugo Cavero Ruiz (socio del Estudio Balbi
Consultores Asociados), la empresa señala que “ni la entidad emplazada ni ninguna otra
podrá tener en cuenta el informe ni su contenido”. Pluspetrol cuestiona duramente al
OEFA -sus argumentos además fueron recogidos por el juez Rioja- y sostiene que esta se
ha excedido en sus competencias, que el informe es ilegal, inconstitucional y que la
autoridad en regulación y fiscalización ambiental no puede hablar sobre las
responsabilidades en torno a los pasivos ambientales.
La resolución del juez sorprendió a los funcionarios de la autoridad ambiental, no solo
porque el juzgado aceptó la demanda, sino porque esta se presentó en Iquitos, cuando
las sedes principales de Pluspetrol y el OEFA están en Lima. “Yo creo que ha habido un
error en la interpretación del juez al aceptar esta medida cautelar, tal vez por
desconocimiento”, explica Sandra Rossi, procuradora del OEFA.
La entidad ya apeló lo dispuesto por el juez y ha recordado que entre las funciones que la
ley le otorga y obliga está la de emitir reportes públicos de los informes de supervisión
directa de las actividades de hidrocarburos. “No puede haber un juez que nos diga que no
cumplamos con nuestras funciones. Todo lo tramitado por este juez debería ser declarado
nulo”, dijo la abogada del Estado.
UNA PETROLERA TRANSNACIONAL
Pluspetrol ingresó al Perú en 1986 y actualmente sus operaciones se extienden en siete
Lotes: 8, 115, 1-AB (Loreto), 88 y 56 (gas de Camisea, Cusco), 155 (Puno) y 108 (Cerro
de Pasco y Junín, donde se produjeron los últimos enfrentamientos de Pichanaki). Es una
empresa transnacional que nació en Argentina en 1976, pero cuya cabeza del grupo se
encuentra ahora en Europa.
De acuerdo al organigrama que presentaron a la Superintendencia del Mercado de
Valores en el 2010, Pluspetrol Resources Corporation N.V., de Holanda, lidera la
organización que también posee inversiones en diferentes países de Sudamérica,
España, Estados Unidos, Angola y en las Islas Caimán (Reino Unido). En Perú las cinco
subsidiarias que pertenecen al grupo dependen de esta y controlan los lotes más
estratégicos: producen el 40% del petróleo nacional, abastecen la mitad de la demanda
energética, y generan el 95% del gas que se consume en el país. El 45% de Pluspetrol
Norte, la filial que opera en el Lote 1-AB, está en manos de la Corporación de Petróleo de
China, la mayor compañía estatal de hidrocarburos del gigante asiático.
Infracciones: exceder los niveles permitidos de hidrocarburos en suelos, perforar
pozos sin instrumento de gestión ambiental aprobado, disponer residuos sólidos
peligrosos a la intemperie, impactar con hidrocarburos la laguna Shanshococha...
Ríos y suelos contaminados: Se han identificado más de 90 sitios afectados por el
impacto petrolero en el lote 1AB (38 cuenca del río Pastaza, 17 cuenca del río Corrientes
y 35 en la cuenca del río Tigre). Crédito: Federaciones indígenas.
Desde el año 2000 Pluspetrol Norte explota el Lote 1-AB y desde entonces existen -según
el OEFA- compromisos contractuales de remediación de las áreas contaminadas que ha
estado asumiendo. La empresa argumenta que se trata de pasivos ambientales dejados
por Oxy, pero el OEFA le ha recordado en su informe que no se puede hablar de pasivos
cuando en su contrato ellos asumieron la responsabilidad de remediar todo lo dejado por
la operadora anterior. “Pluspetrol Norte es la única responsable de los activos y pasivos
que devienen del contrato”, concluye el informe técnico judicializado por la petrolera.
¿Qué áreas entonces son las únicas que Pluspetrol quiere remediar? Ojo-Publico.com
pidió al Ministerio de Energía y Minas información sobre los aspectos que contempla el
Plan de Abandono que Pluspetrol ha presentado para el lote 1-AB, pero respondieron que
no tenían la información, pese a que esta entidad es la encargada de recibir y aprobar el
documento. También solicitamos información sobre el tema a Pluspetrol, pero hasta ayer
no respondieron. Sin esta información, la negociación en la mesa de diálogo, entre el
Gobierno, la empresa y las comunidades, es un proceso ciego.
LEGADO DE FALTAS
En las dos semanas de paralización en Loreto nadie llegó a Pampa Hermosa, la
comunidad achuar en el Río Corrientes en donde Carlos Sandi es el apu. El líder indígena
tuvo que venir a Lima para poder reunirse con los funcionarios del gobierno y plantear su
demanda: las más espeluznantes distancias del Estado con las comunidades afectadas
por la explotación petrolera no son las geográficas. La empresa ha dicho que algunas de
las comunidades impactadas, como Marsella, en la cuenca del río Tigre, están fuera del
área del contrato. La historia completa, sin embargo, es otra.
Cuando Pluspetrol asumió la conducción del Lote 1-AB el año 2000, este tenía 479 mil
hectáreas; pero al año siguiente, solicitó un recorte y el lote se redujo a un 42% (casi 200
mil hectáreas quedaron fuera). Con estos cambios, varias comunidades afectadas por la
contaminación acabaron excluidas, sin embargo, el Plan Ambiental Complementario ya
las reconocía como sitios afectados y, por lo tanto, como establece OEFA en el informe
rechazado por la compañía, esta empresa debería asumir también la remediación.
El
OEFA ha precisado que no se puede hablar de pasivos ambientales en el Lote 1-AB
porque Pluspetrol Norte asumió el control y compromiso de todos los sitios impactados
dentro de su área de explotación original.
“Lo que dice el juez es que nosotros hemos identificado nuevos pasivos, y eso no es
cierto. Lo que decimos es que de acuerdo a sus instrumentos de gestión ambiental, la
empresa se comprometió a remediar cada uno de los lugares impactados. El término
pasivo ambiental no aplica para el Lote 1-AB ”, dice la procuradora Rossi.
SIN REMEDIACIÓN NI CONSULTA PREVIA
Las protestas han sido constantes en las cuencas afectadas por la contaminación de
hidrocarburos. El 2012 el gobierno conformó una comisión multisectorial para promover el
desarrollo en la zona y remediar los daños ambientales. Los dirigentes de las
comunidades quechuas del Pastaza, achuar y urarina del Corrientes, kichwa del Tigre y
kukama kukamira del Marañón exigen desde entonces la remediación ambiental como
paso previo a la consulta previa que se deberá realizar cuando venza el contrato de
Pluspetrol Norte el 29 de agosto y se convoque a una licitación pública para elegir al
nuevo concesionario.
Pero la remediación parece por el momento un deseo lejano. Daniel Guerra, gerente de
relaciones institucionales de Pluspetrol, afirmó en una reciente entrevista a Reuters que
"muchas de las protestas no solo tienen que ver con Pluspetrol, sino también con el
gobierno, son pasivos que vienen de 1970". La petrolera no acepta la remediación de
todos los daños, aunque el numeral 2.1 de la cláusula segunda de la modificación del
contrato del 2002 menciona que la empresa “asume todos los derechos,
responsabilidades y obligaciones de Pluspetrol Peru Corporation S.A. [corporación que
adquirió de Oxy el Lote 1-AB]”.
Otra de las conclusiones del OEFA en el informe en cuestión sobre el desempeño
ambiental de Pluspetrol Norte es que en todo este tiempo, “la empresa ha operado con
instrumentos de gestión ambiental que no han tenido en cuenta un planteamiento integral
de la gestión ambiental”. Pero advierte algo aún más preocupante: que Pluspetrol “no
alcanzará a ejecutar de manera íntegra su plan de descontaminación de suelos (PDS),
pues solo la elaboración de este contempla un plazo de un año y su ejecución un
aproximado de tres años”. Recién en octubre del año pasado la empresa comenzó a a
identificar las áreas con suelos contaminados. Sobre este tema, el Ministerio de Energía y
Minas ha guardado silencio.
Protesta. Las comunidades indígenas demandan la remediación antes de iniciar la
Consulta Previa. Crédito: David Hill.
En Perúpetro informaron que la licitación pública internacional para otorgar el nuevo
contrato del Lote 192 (que incluye la totalidad del actual Lote 1-AB y áreas adicionales
para efectuar actividades exploratorias) se realizará después de haber realizado la
Consulta Previa con las comunidades.
“Quedan pocos meses y nadie está atendiendo los temas más urgentes”, dice con voz
cansada Carlos Sandi, desde su comunidad de Pampa Hermosa, donde los últimos días
se han reunido con los representantes de la empresa y Julio Rojas, alto comisionado de la
Oficina de Diálogo y Sostenibilidad de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), sin
llegar a ningún acuerdo.
Ajeno a lo que se viene discutiendo en la capital, el líder achuar insiste en que no habrá
proceso de consulta previa hasta que atiendan las demandas de remediación, titulación
de tierras y compensación. En Lima, el gerente de relaciones institucionales de Pluspetrol
coquetea con la posibilidad de permanecer en Lote 1-AB y anuncia que están evaluando
presentarse a la licitación. “Nosotros definitivamente en el lote 1AB tenemos mucha
experiencia, dependerá de las bases que ponga el Gobierno para la licitación, pero en
primera instancia sí tenemos interés en participar”, dijo Daniel Guerra. Mientras en Loreto,
catorce pozos siguen paralizados.
* Las multas impuestas por el OEFA y judicializadas por la empresa ascienden 10.233,92
UIT
Con la colaboración del periodista Bryan Paredes Más en Ojo Público:
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