TEMA 7.LA HIDROGRAFÍA Y LA PROBLEMÁTICA DE LOS RECURSOS HÍDRICOS EN ESPAÑA. EL AGUA EN CASTILLA Y LEÓN. FACTORES FÍSICOS DETERMINANTES DE LA HIDROGRAFÍA PENINSULAR. CARACTERES DE LOS RÍOS PENINSULARES. La hidrología española incluye las aguas superficiales y las subterráneas, ambas pueden ser corrientes (ríos y arroyos), o estancadas (lagos y humedales). Un río es una corriente de agua, más o menos caudalosa, que desemboca en el mar, en otro río o en un lago. Los ríos están condicionados por diversos factores que influyen en su caudal y en la organización de las cuencas y las vertientes hidrográficas: -el clima: las precipitaciones determinan el caudal y sus variaciones anuales y la temperatura colabora con la mayor o menor evaporación del agua. -el relieve y la topografía influyen en la organización de las cuencas y vertientes hidrográficas; en la erosión de los ríos, que aumenta con la inclinación del terreno, y en las obras hidráulicas, que se ven favorecidas por la topografía abrupta. -la litología determina la escorrentía superficial o subterránea del agua, la roca caliza es permeable y aumenta la escorrentía subterránea, la silícea es poco permeable y la arcillosa es impermeable. -la vegetación aminora la evaporación, la erosión y el riesgo de inundaciones. -la acción humana realiza obras para el abastecimiento y regularización de los ríos. El caudal es la cantidad de agua que pasa en un segundo por un punto dado del río. Se mide en m3/seg en estaciones de aforo instaladas en diversos puntos del río. El caudal relativo es la relación entre el caudal medio anual y la superficie de la cuenca y se expresa en l/seg/km2. El caudal experimenta variaciones: -a lo largo del recorrido del río el tramo de mayor caudal suele ser la desembocadura, donde se acumulan las aportaciones de todos los afluentes, excepto en zonas con fuerte evaporación, infiltración o consumo. Los más caudalosos son el Ebro, el Tajo y el Duero. 1 -a lo largo del tiempo podemos tener irregularidad anual, con estiajes y crecidas, e interanual. Los más regulares son los de la vertiente cantábrica y los más irregulares los mediterráneos. El régimen fluvial es la variación estacional del caudal de un río y depende de la distribución de las precipitaciones y de la importancia de la precipitación nival. Distinguimos entre: -los ríos con régimen pluvial solo dependen de las precipitaciones, por lo que su caudal refleja los máximos y mínimos de estas en cada zona climática. Tenemos cuatro tipos: oceánico, mediterráneo, mediterráneo levantino y mediterráneo subtropical. -los ríos con régimen nival nacen en la alta montaña, su caudal máximo se registra a finales de la primavera o en verano, con el deshielo, y las aguas bajas tienen lugar en invierno. -los ríos con régimen mixto pueden ser nivo-pluviales o pluvio-nivales, según predomine la influencia de la nieve o de las precipitaciones. La cuenca hidrográfica es el territorio cuyas aguas vierten a un río principal y a sus afluentes. Se caracterizan por los siguientes rasgos: -están separadas por divisorias de aguas, formadas por las cumbres de los relieves montañosos que las delimitan. Son las del Norte, Miño, Duero, Tajo, Guadiana, Guadalquivir, Pirineo oriental, Ebro, Júcar, Segura y Sur. -los ríos circulan por un cauce o lecho, y forman una red organizada jerárquicamentedesde los subafluentes y afluentes hasta llegar al río principal. Una vertiente hidrográfica es el conjunto de cuencas que vierten sus aguas en el mismo mar. En la Península se observa una gran disimetría entre las vertientes cantábrica y atlántica (69% ríos) y la mediterránea (31%). Los ríos de la vertiente cantábrica, la cuenca Norte,son cortos y tienen una gran fuerza erosiva. Son caudalosos y de régimen bastante regular. Se da un elevado aprovechamiento hidroeléctrico. Los ríos de la vertiente atlántica son largos y su fuerza erosiva es escasa. De caudal abundante, sin embargo su régimen es irregular, ya que sufren la aridez 2 estival del clima mediterráneo. Presenta estiaje en verano y crecidas en otoño y primavera. El Duero es la cuenca más extensa, ya que drena toda la submeseta norte y las estribaciones de la C. Cantábrica, S. Ibérico y S. Central. El Tajo es el más largo de la península y su cauce está regulado por trasvases y numerosos embalses. El Guadiana atraviesa una litología caliza que hace que su circulación sea subterránea en algunos tramos (los Ojos del Guadiana). El Guadalquivir es un río con régimen subtropical, con prolongado estiaje. Los ríos de la vertiente mediterránea, excepto el Ebro, son cortos y con elevada fuerza erosiva, suelen tener cauces abarrancados por la deforestación de las laderas. De caudal escaso y régimen muy irregular, presentan un acusado estiaje (más prolongado cuanto más al sur) y pueden sufrir crecidas catastróficas en otoño (gota fría). Se han construido embalses para regularizar su caudal y abastecer las necesidades de agua. Podemos distinguir entre los ríos catalanes (de régimen mixto), los levantinos (pluviales o nivo-pluviales con gota fría) y los meridionales o Sur (subtropical). El Ebro es la excepción y se caracteriza por ser largo y caudaloso, de régimen pluvio-nival. En su desembocadura forma un delta y tiene aprovechamiento hidroeléctrico y de regadío. También son frecuentes los torrentes, cursos de agua intermitentes que solo llevan caudal cuando llueve. Su cauce o rambla está seco gran parte del año. Las Baleares y las Canarias carecen de ríos propiamente dichos. Tienen arroyos (corrientes de agua de escaso caudal, alimentadas por manantiales) y torrentes. La litología de ambas, caliza en las Baleares y volcánica en las Canarias, ha favorecido los acuíferos, en el caso canario su sobrexplotación ha supuesto que apenas existan arroyos permanentes. En Ceuta y Melilla hay arroyos de carácter estacional y torrencial, se explotan las aguas freáticas. LOS LAGOS Y HUMEDALES ESPAÑOLES. Los lagos son masas de agua, dulce o salobre, acumuladas en zonas deprimidas, que alcanzan cierta profundidad. Las lagunas tienen menor profundidad (inferior a un metro), aunque la diferencia no es muy precisa. 3 En España están catalogados 2474 lagos, pero muchos son de escasa dimensión y de carácter estacional. Su vida suele ser corta por causas naturales, como la colmatación, o por causas humanas, como la extracción de agua para el riego, el vertido de escombros o la desecación por considerarlos tradicionalmente espacios insalubres. Según su origen podemos distinguir dos tipos de lagos: endógenos y exógenos. Los endógenos están originados por fuerzas del interior de la Tierra: pueden ser tectónicos, se forman en terrenos hundidos por la acción de fallas o pliegues, como laguna de La Janda (Cádiz) o volcánicos, se alojan en el cráter de un volcán apagado, como los del Campo de Calatrava (Ciudad Real). Los exógenos están originados por fuerzas externas, como la acción del agua, el hielo o el viento. Los lagos glaciares están formados en las cubetas excavadas por el hielo en el circo del glaciar o en el valle, o por la acumulación de morrenas: son los lagos de circo (ibones de los Pirineos, Lagos de Covadonga, Lagunas de Neila (Burgos), Laguna Negra (Soria)), de valle o de morrena (Lago de Sanabria (Zamora)). Los lagos cársticos se alojan en cubetas creadas por la disolución de la caliza o del yeso, como las Lagunas de Ruidera (Albacete). Los lagos eólicos ocupan depresiones excavadas por el viento en materiales blandos, como las closes del Ampurdán. Los lagos endorreicos son el tipo más común, se forman en zonas áridas o semiáridas, donde las escasas aguas no tienen fuerza para llegar al mar y se acumulan en zonas llanas o deprimidas. Suelen ser salobres y de escasa profundidad, como las Tablas de Daimiel, la laguna de Sariñena (Monegros, Huesca) y Gallocanta (Zaragoza y Teruel). En el litoral aparecen las albuferas, lagos salados separados del mar por un cordón de arena, como las de Valencia y del Mar Menor. Los humedales son extensiones de terreno cubiertas por aguas poco profundas, a veces intermitentes. Son lagunas, marismas, deltas, albuferas y turberas. En España hay inventariadas 2559 zonas húmedas, éstas tienen gran interés biológico por albergar especies adaptadas a un medio de transición y ser lugar de parada y anidamiento de aves acuáticas migratorias. Destacan los humedales del Parque Nacional de las tablas de Daimiel, las laguna de Toledo, Ciudad Real, Albacete y el 4 valle del Ebro, las marismas del Guadalquivir, el delta del Ebro y las albufera de Valencia y del Mar Menor. LAS AGUAS SUBTERRÁNEAS. Los acuíferos son embolsamientos de agua subterránea. Se forman cuando las aguas de precipitación se infiltran, encuentran un estrato impermeable y se acumulan sobre él. Pueden descargar sus aguas a través de ríos y manantiales, o directamente al mar. Presentan ventajas respecto a las superficiales: suelen carecer de organismos nocivos, su composición y temperatura son estables y complementan a las aguas superficiales en época de sequía. Actualmente existen más de 400 acuíferos, que encontramos en las depresiones terciarias (detríticos) del Duero, Tajo y Guadiana, en las proximidades de ríos y en las cabeceras montañosas (calcáreos) de los principales ríos. El problema principal es la sobrexplotación de estos recursos. También existen masas de aguas de creación humana: embalses y canales, que sirven para almacenar y transportar agua, pero también mercancías. Como el Lago de Proserpina (Badajoz) y los numerosos embalses de nuestros ríos, el Canal de Castilla y el Canal Imperial de Aragón (1529). LA PROBLEMÁTICA DE LOS RECURSOS HÍDRICOS EN ESPAÑA. El agua es esencial para la vida en la Tierra y para numerosas actividades humanas, por este motivo la población ha preferido los asentamientos próximos a los recursos hídricos. Entre los usos consuntivos o consumidores de agua destacan el regadío agrario, que absorbe más del 80% del agua consumida; el uso por los sectores económicos y el uso en los hogares y municipios. En España el agua consumida se ha incrementado en los últimos años, como consecuencia del desarrollo económico, urbano y del nivel de vida. Las cifras de consumo son de las más altas de Europa y del mundo: 160 l/hab/día en 2006 5 Entre los usos no consuntivos del agua se encuentran la pesca, la acuicultura, la producción hidroeléctrica, la navegación y los deportes náuticos. El balance hídrico presenta en España un déficit hídrico anual en torno a los 30004000 hm3. Los recursos hídricos proceden, sobre todo, de las precipitaciones, que alimentan las aguas superficiales y los acuíferos: de su volumen total (unos 346000hm3) solo queda disponible el 32% por la fuerte evaporación (111305 hm3) y se aprovecha menos de la mitad (46000 hm3), aunque la cantidad es superior a la demanda de agua (35323 hm3/año) existe déficit. Las causas son una serie de problemas: -la irregular distribución de los recursos: los ríos, principal fuente de abastecimiento, presentan una fuerte irregularidad estacional e interanual y una desigual distribución espacial. Tenemos cuencas excedentarias (Norte, Duero, Tajo y Ebro), cuencas equilibradas (Guadiana, Guadalquivir, Pirineo Oriental) y cuencas deficitarias (resto de las mediterráneas). El agua que procede de los acuíferos, de la desalinización y de la reutilización de aguas depuradas representa un volumen mucho menor. -la irregular distribución de la demanda, que se concentra en elárea de mayor dinamismo económico y demográfico, el arco mediterráneo, que es deficitaria. -la insuficiencia de los embalses y las pérdidas de agua, causadas por el uso de sistemas de riego inadecuados y por las fugas en las conducciones. Según los expertos este déficit podría elevarse hacia el 2050 si, como consecuencia del cambio climático, descienden las precipitaciones un 10% y aumenta la temperatura entre 2ºC y 2,5ºC. Las obras hidráulicas son las infraestructuras construidas para regular los recursos hídricos y mejorar la calidad del agua. Las obras de regulación cuentan con una larga tradición histórica en España. Los ríos se han regulado con embalses, canales y trasvases. Los embalses son grandes extensiones de agua almacenada artificialmente detrás de una presa o barrera transversal a la corriente. Su número ha crecido desde principiosdel s.XX (desarrollándose un ambicioso plan de embalses en la dictadura franquista) hasta sumar algo más de mil. Para su 6 construcción se han aprovechado desniveles y encajonamientos de la red fluvial. La mayoría de los embalses privados se destinan a la producción eléctrica y los estatales a asegurar el abastecimiento. Además sirven para regular el caudal y evitar o reducir las inundaciones. Los problemas que presentan los embalses son varios: -se aterran por la acumulación de sedimentos, lo que disminuye su capacidad. -algunos son inviables técnicamente al construirse en zonas de insuficiente alimentación de agua o fuerte evaporación, o no son rentables por proporcionar riego a producciones excedentarias de la UE. -provocan alteraciones sociales y medioambientales al inundar valles, pueblos y tierras de uso agrario y modificar las condiciones ecológicas de los seres vivos acuáticos. Los canales de distribución suman más de 15000 km y su principal problema es su antigüedad o el mal estado, causantes de fugas que suponen cuantiosas pérdidas de agua anuales (un 20% en el año 2006). Los trasvases son trasferencias de agua entre cuencas excedentarias y deficitarias. En la actualidad funcionan 38, entre los que destaca el del TajoSegura. Algunos pueden generar conflictos entre las zonas receptoras y las originarias por la reticencia a ceder recursos. Otros recursos hídricos aprovechados son los siguientes: -algunos lagos pirenaicos, localizados a más de 2000 m de altitud, se utilizan para producir energía hidroeléctrica, lo que puede repercutir en los ecosistemas dependientes de ellos por la disminución de su nivel. -los acuíferos se aprovechan mediante pozos y galerías para usos agrícolas, urbanos e industriales, especialmente en el sur, el Levante y ambos archipiélagos. Aunque su explotación permanente no siempre es viable y ha llevado al agotamiento de algunos. -el agua de mar y la salobre se aprovechan mediante la técnica de la desalación. España ocupa el primer puesto de la UE y el octavo del mundo, con más de 700 plantas y una capacidad de desalación de 2 millones de m3 diarios (2006). Las 7 desaladoras se sitúan en las zonas con más escasez de recursos hídricos: Canarias, Baleares, Ceuta, Almería, Murcia y Alicante. Los problemas son el elevado consumo energético y la eliminación de la salmuera. Las obras para mejorar la calidad del agua son las plantas potabilizadoras, que tratan las aguas destinadas al consumo, y las depuradoras, que tratan las residuales para evitar la contaminación. La política hidráulica tiene dos fines: la regulación y la gestión de los recursos hídricos. La regulación corresponde a la Ley de Aguas, que establece que todas las aguas superficiales y subterráneas son de dominio público estatal. Y la gestión se lleva a cabo mediante la planificación hidrológica, de cuencas y el nacional. Los Planes Hidrológicos de Cuenca determinan las necesidades y las obras de cada cuenca. Son elaborados por las Confederaciones Hidrográficas de las cuencas intercomunitarias (Ebro) y por los gobiernos autonómicos en la intracomunitarias (Duero). El Plan Hidrológico Nacional coordina los planes de las cuencas y diseña las actuaciones generales que, de acuerdo con el Programa AGUA (Actuaciones para la Gestión y la Utilización del Agua), se proponen alcanzar los siguientes objetivos: -lograr el autoabastecimiento hídrico de cada cuenca, eliminando la dependencia del clima y del abastecimiento externo. Las medidas son dobles: realizar obras que aumenten las disponibilidades hídricas (desaladoras) y mejorar el aprovechamiento de los recursos ya disponibles (reparación de redes, reducción del consumo, mejora del regadío, reutilización del agua). -conseguir una buena calidad del agua para beber y para el mantenimiento de los ecosistemas acuáticos, de acuerdo con las directrices de la UE. Para ello se construirán depuradoras, se mejorarán las potabilizadoras y se recuperaran los sistemas hídricos deteriorados (como las Tablas de Daimiel). -prevenir inundaciones y sequías mediante el acondicionamiento de cauces y la reforestación de riberas. -impulsar la investigación y la innovación tecnológica encaminadas a lograr los fines anteriores. 8 En Castilla y León los ríos pertenecen en su mayoría a la cuenca del Duero, aunque los hay que son afluentes del Miño (el Sil), del Sella, del Cares, del Ebro (el Jalón) y del Tajo (Alberche, Tiétar y Alagón). El Duero nace en los Picos de Urbión y tiene su cuenca circundada por montañas que aportan afluentes procedentes de la vertiente sur de la Cantábrica, del Sistema Ibérico y de la norte del Sistema Central. Los de la derecha (Esla, Pisuerga) son más largos que los de su izquierda (Tormes, Eresma). En el tramo soriano el río posee fuerte pendiente y encajamiento, de régimen pluvio-nival, su caudal es escaso. En el tramo meseteño (Burgos, Valladolid y parte de Zamora) discurre con lentitud por la llanura terciaria, con régimen pluvial mediterráneo continentalizado, su caudal aumenta por el aporte de afluentes de mayor tamaño, como el Pisuerga, el Esla y el Tormes, que forman tres subcuencas. En el último tramo, desde Zamora, discurre por cañones de paredes verticales, formados al encajarse en la penillanura paleozoica y su régimen se torna pluvial oceánico por los aportes de los afluentes portugueses, su caudal aumenta y disminuye el estiaje. El resto de ríos tienen regímenes pluvio-nivales y caudales elevados. Los lagos no encuentran condiciones favorables, existen zonas endorreicas en el centro de la depresión, como las lagunas de Villafáfila y Villarrín (Zamora) y las de origen glaciar en la orla montañosa (Lago de Sanabria (Zamora), Laguna Negra (Soria), Lagunas de Neila (Burgos), Laguna de Peñalara en Guadarrama…) Los acuíferos se forman en la zona de contacto entre la orla montañosa y la cuenca sedimentaria y en las terrazas fluviales. Las aguas de Castilla y León no presentan problemas graves de abastecimiento y su calidad es bastante aceptable. El abastecimiento está garantizado para el 95% de la población, aunque unas 200 localidades del suroeste padecen escasez a finales del verano. Para solucionar el problema se contempla la dotación de infraestructuras de abastecimiento en las localidades afectadas y un mejor aprovechamiento de los recursos, sustituyendo los sistemas de riego, reparando las fugas y reutilizando aguas depuradas. La calidad del agua es un 55% aceptable y un 9 30% óptima para todos los usos, aunque debe mejorarse en un 25% de los núcleos de población. CONCEPTOS Ría: Delta: Estuario: Cauce fluvial: Cuenca fluvial: Vertiente hidrográfica Acuífero: Caudal: Régimen fluvial: Balance hídrico: Estiaje: Trasvase: Laguna: PRÁCTICAS. -Mapas temáticos de tipo hidrográfico con vertientes hidrográficas y con ríos principales y afluentes. -Análisis y comentario de hidrogramas sencillos y claros. -Gráficos sobre evolución de consumo, usos o necesidades de agua en España o Castilla y León. -Textos referidos a la problemática de los recursos hídricos en España. 10