Los nuevos sacerdotes. Filoh republicqino. Los egoístas.

Anuncio
No mat^s, oo hnrtei. no mlentaa, no
pravariqnei, honra á tus padrea: en
suma, cumple la ley de Dios, amándole
y sirviéndole.—MotjM.
La fuente de la vida es la ciencia. En
caso de duda, el Juez supremo ee la conciencia.—Afanri.
Conócete á ti mismo.—Síeroí»»,
Traliaja para extirpar el mal. Embellece la tierra cubriéndola de veg'etales
y animales útiles.—Zofoosíro.
Todos los humanos son iguales. No
hay otra diferencia entra ellos que las
virtudes quo poseen.—JJud/ia.
Amaos los unog á los otros.—Sad
perfectos como nuestro Padre que estft
en los cielos.—/estis.
La piedad no consiste en volver el
rostro hacia Levante 6 al Poniente.
Piadoso es el que socorre á los huérfanos, á los pobres, rescata los cautivos,
observa la oración, da limosna, es paciente en la adversidad. El que es justo
y teme & Dios clemente y misericordioso.—Afa/ioma.
NÚM. 27.
81 ptlcano <!«• lalira, It nxDw qtu
Las Domínicalos
Precios.
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lVIadrid,triní. 8 ptas. I Eít^íJ^OiS^o-í^PÍ"Provincias, id. 3,50 » I UJí,™™?f' >?• • • •" *
'
Número atrasado, iB céntimos
El pago se hace por trimestres adelantados.
La i«d acción dará cuenta de toda obra de que
reciba dos ejemplares.
Administración: Corredera baja, 59, Bej^undo.
Domingo 5 de Agosto de 1883.
Ramón Chies.
H«daotore8.{gJS6fllo.'
«nwtrui su cam, «1 aagMtMdo q«« « • •
empella «ua funciones, el obrero qn«
traoaja, hacen nna obra tan santa cono
«1 monje que ora y ayt^na.—£ui0re.
Desde U tndift ¿asta la Francia el sol
no. ve mis que una familia tnmaoM
(jue debía regrirse por Iw leyes del
amor, Mortales, todos sois hermanos.-*Voltaire.
Haz el bien por el bien. No'emjileei
jamas la humanidad como un íiimple
medio... Respétala como un fln.-AKanl.
El hombre debe realizar bajo Dtos la
armonía de la Naturaleza y el Bsptrltti
en forma de voluntad racional y pQr «1
paro bien.—¿rfMM.
Que la Verdad ostente todos sns esplendores en la tierra; qua Se desplomen los templos y caigan hecboa polvo los tronos, y se soterren bajo 61 nng'o los adoradores del vellocino de oro
si Se interponen en su camino. |Paso,
aso & la verdad divinal—£i BtpWiht
tíitgl».
£
La redacción no responde de los artionlos firmados.
No devuelve los manuscritos.
La Administración no admite anuncios de pagfo.
ANOI
iPobre periodista! ¿Cuándo llegarás, aun nes y buscar en el caldeado piso de las callea toda contribución y gabela. El pobre es futuros ediles, que saldréis algún dia del
aquí también el que resulta perjudicado: pueblo aherrojado hoy, pero triunfareis masiendo el más renumerado, esté tu parti- el aire y el espacio'que necesita.
para coger las riendas del Estado. Se
La revolución ha abierto una nueva do en el poder 6 en la oposición, á tener
Guando yo veo edificar suntuosas casas en veamos cómo existen actualmente en Madrid ñana
hizo
una
revolución, y no obstante, permaunas
85
iglesias,
de
las
cuales
20
son
parroEra para la humanidad. Los sacerdotes por vivienda un palacio como el que los reemplazo de las antiguas, más económicas,
nece
todo
esto; ly si no fuera más que todo
quias,
31
conventos
de
monjas,
tres
de
fraime pregunto: ¿dónde se meten los pobres?
de lo viejo se ocultan como las aves noc- jesuítas han construido en Zaragoza?
estol
Calculad
que ai tal auoede en Madrid,
les
y
31
oratorios
y
ermitas.
Muchos
de
esturnas en la sombra, caminan silencio¿Y quién alimenta esto? ¿Quién costea ¿Tienen casa los que las construyen?
lo miamo provisionalmente ae verifica en las
tos
edifioios'son
del
Estado,
otros
son
de
Porque la desproporción ^s aiómbrosa, y particulares, como San Pascual, Santo Do- 48 provincias restantes, en laa 160 ciudades
sos, yacen arrinconados, apenas si se esos palacios suntuosos, para que habite
fatalmente
ha de producir el hacinamiento, mingo, la Concepción Jerónima, La Latina, y en los 15.120 pueblos que contienen unas
percibe su paso al deslizarse por la tier- en ellos el enemigo de la sociedad pre-*
y
tras
éste
la inmoralidad, la depresión del el Sacramento, las Salesas, Jesús y San An- 90.000 iglesiaa y muchos couventoa, hoy
ra: en cambio, otros nuevos, sin atavíos senté? Esa gente llamada de orden. Esos espíritu, el crimen.
tonio del Prado: todos llenos de riquezas: próximoa á ser de nuevo lo que fueron. Calni fórmulas, vienen á reemplazarlos.
propietarios, banqueros, comerciantes, enY es muy de extrañar que las clases pri- pero ninguno produce nada; sus dueños dis- culad millonea sobre millonea, y os queda¿Qué es el escritor público, si se hace riquecidoft por la libertad, que todo se lo vilegiadas, los que viven del trabajo del puecargo del alto ministerio que ejerce y lo deben al brazo que ha hundido en los an- blo, no se hayan preocupado, siquiera por frutan el dulce agradecimiento de las mon- reis siempre cortos.
jas: el Estado paga.
Esto es, pues, sin cojitar laa alhajas de oro
desempeña á conciencia, sino un verda- tros, de donde no saldrán más, aunque en egoísmo, de tan pavoroso problema.
y
plata
de que me ocuparé oti^ dia, lo que
Ahora
valuemos
las
iglesias
y
conventos
dero sacerdote? No os moféis, partidarios ellos se refocilen, á jesuítas y frailes, que
No creo gran remedio la idea de los barnoa
cueata
á todoa la misa ((úe oyen mal
mejor
situados,
y
calculando
que
como
soladel antiguo régimen, al oirme hacer esta sin él no serían sino unos miserables por- rios para obreros; pero ^s una idea alfin,y
unos
pocos;
bien es oiet'to que los curas,
res
serian
comprados
á
200
reales
el
pié,
afirmación. Si la razón con que os dotó dioseros ó estarían atados á la cadena de \ los que la patrocinan de buena fe son dignos
moujas
y
frailes
pasan la vida pidiendo... ¿
tendremos:
natura no es un adorno vano, ponedla en la servidumbre, que hoy merecían arras- de aplauso, como todo el que se preocupa de
Su valor.
Dios
por
nosotros,
á fuerza de gruñir en una
Pies
ejercicio, y escuchadme.
trar de nuevo. Esos son los ignorantes que algo trascendental; la indiferencia en los que
lengua
que
apéoaa
entienden; también nos
cuadrados.
Reales,
Por lo justo, 1Q verdadero y lo bello, se llevan sus hijos á que sean educados por pudieran muy bien ser victimas de sus premoralizan,
como
lo
prueba la adelap.tada
y su apatía, es lo que no se com30.000 6.000.000 educación civil y le%iosa del pueblo; Ison
eleva el hombre sin duda á Dios. Y bien: los tales, y les llenan los bolsillos de oro. ocupaciones
prende.
24.246 4.849.200 ademas acaten firmíaimo del deapotismo,
Los que .tienen ojos notan y ven que
¿quién es, en la sociedad que nos circun5.852.000
No se me oculta que los ricos ven con gus29 260 5.369.200 fraguadores de guerras civiles, y solícitos á
da, el más ardiente defensor de esas cate- cuanto brilla y vale hoy en el inundo de to la miseria del obrero; por eso es de moda,
26.846 5.145.400
inculcar el odio á todo cuanto hay de civlli*
la ciencia y del arte, sale de la Universi- y propio de gentes de orden, burlarse de
gorías divinas? El escritor público.
25.127 1.279.000
zador.
¿No vale esto la pena de librane de
6.755.000
Se ha cometido un crimen, una indig- dad: allí enseñan y son enseñados los sen&iblerias reformistas, y resistir á cuanto San Antotiio del Prado...
6.395 3.333.000
las
armas
y de toda molestia y gabela, de no
. 93.776 22.135.600
nidad, una felonía. ¿Quién sale primero á Castelares, Salmerones, Moret. En los pueda regenerar ai que trabaja y sufre, á la
pagar
contribuciones
y de vivir cómoda y
16.665 5.778.400
la defensa de la víctima? ¿Quién levanta centros de enseñanza laica es donde se bestia, como le llaman en palacio); y con798.400
holgadamente?
110 678
una explosión de anatemas contra el in- forman los físicos, los matemáticos, los ventos.
4.640.000
25.892 6.400.000
El que no lo quiera así, que se meta fraile.
Y en verdad que sería más dilSeil manejar
fame agresor? El escritor público. Se tra- literatos. ©8 ellos han salido Echegaray,
3.992
CONSTANCIO MiRAi/sá,
Solo estas 14 iglesias .suman
ta de defender el honor nacional ultraja- Selles, etc^ Cuanto tiene verdadero valor, ó explotar á los hombres y seducir á las mu23.200443.877 pies
presbítero.
rs. Convertido: la viril pluma del periodista será la mérito real, en nuestra sociedad, se ha for- jeres de una clase ilustrada y laboriosa, que cuadrados.jr valen 77.335.400
. 27.000
pj^imera que aparecerá en liza', la que se mado fuera del jesuitismo; y si algún jo- tuviera coneienoia de su misioi. Ya no se das en fincas de cuatro pisos y planta baja,
podría declamar en público contra los vicios
esgrima antes de brillar en el campo las ven de vdélos ha comenzado á formarse que tanto divierten á los caballeros ^n se- con habitaciones por término medio de 1.000
pies cuadrados, á 15.000 rs. anuales, resultaLos egoístas.
espadas. ¿Hay que cantar las hermosuras con él, pronto se ha declarado su mayor creto.
/
rán
2.299
habitaciones
y
33.285.000
rs.
de
ali
de un cuadro, de una estatua y de una enemigo.
Pero hay un cómplice de todo esto, cóm- quiler, y de ellos obtendrá el Estado por
Al morir Enrique II de Trastamara
Nada de esto observan esas reatas do plice interesado y rastrero, el catolicismo, contribución, al tipo actual de 16 por 100, dijo á su hijo, sobré poco más ó jménos,
producción dramática, de una oda? Otra
vez, lo primero que se oirá, es la voz del hombres que, por haber oido decir á sus esa secta que asegura poseer I» sociología 4.320.800 rs. cada año. Haga el lector, si quie- esto:
periodista. ¿Qué obra de beneficencia, abuelos: «{los jesuítas son muy listos!» modelo, sacada del Evangelio, y en realidad re, otro cálculo más preciso: el resultado
«Te dejo tres géneros de vasallo^: ijngí^
qué Exposición pública, qué empresa repitanaúá^como los loros: «¡Sonmuy no ha encontrado nunca una sofeion prácti- será casi el mismo.
que me fueron siempre adictos; otros q^ae
ca y eficaz en beneficio del que sufre. La reindustrial se llevará á cabo que no cuen- listos!»
Seria en extremo prolijo detenerse en un lo fueron á mi hermano D. Pedro, y otro»
Ahora bien, sólo el que no tiene sangre signación, la humillación ante el que da, es cálculo semejante con la|f iglesias restantes, que no se resolvieron por él ni por mí.
te á su lado inmediatamente con la cooperación del escritor para impulsarla y en las venas puede ver impasible el mal. su panacea. Si sufrimos, es porque hemos repartidas en diferentes lugares de muy di- A los primeros, sosténlos á tu lado; á los
pecado;» el sufrimiento es un bien, el desvallevarla á dichoso término? ¿Cuánta tinta No hay razón, no hay justicia para que lido, un predilecto de Dios; en la otra vida se versa valuación; me valdré de números re- segundos, protégelos; á los terceros, no
no habrán destilado las plumas para dar aquellos que son á todas luces miembros arreglará todo;» pero en ésta se arrastran dondos, y empleando como término medio les hagas caso,desprecíalos, queloaegoiscuerpo á los hermosos sentimientos del sanos de la sociedad, yazgan en la indi- curas, frailes y beatas á los pies del podero- entré el edificio más grande de los 71, la tas para nada sirven.»
Concepción Jerónima, que ocupa 98.307
alma del escritor en defensa de los dere- gencia vivan en la estrechez más lastimo- . so, adormeciéndole con la eterna cantinela pies, y el menor, la Cara de Dios, que tiene
En efecto, no hay tipo tan repugnante
chos del desvalido?; por ejemplo, ¿cuánto sa, mientras que los que son también, á to- pesimista de «siempre tendréis pobres,r. ven- 1.772, el número 50.000 pies, multiplicado como ese, <^ue también se encuei^tra con
no se habrá escrito en España pidiendo das luces, nocivos, vivan en la opulencia. diéndole la vida eterna allá y tas alabanzas, por 71, nos dará un total de 3.550.000 pies frecuencia en nuestro pueblo, que vive jr
Hay que arbitrar el medio para que la estimaoion, los primeros lugares aquí, á cuadrados, capaces para 3.550 habitaciones se regocija á solas, sin tomarse el más
por amor de Dios que se pague al maestro? Y cadadia brilla más, por nuestro esas corrientes de oro que van á palacios cambio de su dinero.
(según el cálculo anterior), que podrían pro- leve trabajo por los bienes comunes de la
El
rico
da
y
descansa:
esto
no
le
estorba
ducir
muy bien al año, en concepto de contri- humanidad.
en
que
moran
los
sacerdotes
muertos,
se
bien, en España el ejercicio de ese saceren
sus
placeres,
ya
hace
cuanto
debe,
la
bución,
cerca de medio millón de reales; 3550
docio. ¡Con qué fruición no hemos leido, repartan por mil moradas tristes, donEs, por ejemplo, un gran jurisconsulto;
Iglesia
administrará:
el
asilo
A,
la
escuela
familias
productoras vivirían cómodamente
en periódicos afiliados al antiguo régimen, de habitan sacerdotes vivos; hay que eslleva
al dedillo todas las teorías moderel convento X, le deben mucho; ¿qué en lo que hoy ocupan unos cuantos bigardos,
gritos de indignación contra pretoriauos trujar el bolsillo de esos mentecatos que B,
nas
del
derecho; sabe que es una usurpaquieren los pobres?
viviendo á costa del país.
que han atropellado estos dias á ciudada- llevan á sus hijos á que ennegrezcan sus
ción
de
la soberanía nacional toda prerPero loS hombretr^ serios ven muy claro
Y para que so erea que no exajero, recuérnos indefensos, creyendo quizá que po- conciencias, y aplicar sus monedas á pro- que ninguna institución católica se-traduce
rogativa
histórica que se le oponga, y
que la calle de Campomanes era antea
drían esconderse tras elevados poderes! teger de todas maneras á los que, en vez en utilidad real de otras personas que de dese
el convento de Santo Domingo, ocupado sólo sin embargo lo mira impasible: defiende
¿Puede ejercerse sacerdocio más alto de odiar, se imponen un verdadero sacri- elegantes damas que se pavonean tocando la por 10 monjas. Que una acera de la Cava sus pleitos, rodea de sibaritismo á su faque el que realiza la prensa, de defender ficio (en que no debe consentirse, porque trompeta, y de jesuítas y hermanas que ha- Alta, llena de buenasfincas,es sólo un trozo milia y deja bogar el mundo en la injusla justicia, la caridad, la verdad, eV bien? pasó el tiempo de la consumación de sa- cen su agosto.
de huerta del convento de la Latina, y que ticia.
Nunca han hecho estas gentes un bien, las casas 11amad.ts de Madoz están edificadas
¿Dónde anda, entre tanto, el que el crificios inútiles), por colmar de bienes á
Otro es un naturalista insigne: conoce
que no haya privado dé su libertad al agra- sobre el convento de San Basilio.
mundo llama sacerdote? ¿Dónde anda, por la sociedad de quo forman parto.
la estructura de la tierra, ha excavado
Periodistas de entendimiento que gas- ciado. Asilo?, siempre asilos, cárceles disiAún hay más privilegios*, los 33 conventos sus capas, ha contemplado restos huipaejemplo, el fraile y el jesuíta? Nadie los ve
muladas,
luego
limosnas
humillantes,
escay
algunas
iglesias, disfrutan de una ó más nos ó instrumentos de su industria, que
ni los oye. Colúrabranse, empero, su exis- tais vuestras fuerzas todos los dias en
sas
y
con
ciertas
condiciones;
no
busquéis
pAudalosas
fuentes de la saludable y fresca prueban, con evidencia indubitable, (jue
tencia á las veces, por ejemplo, al ver es- defender una institución muerta como
otra cosa.
agua
procedente
de los antiguos manantiacrito en un periódico, con referencia á la monarquía, unios á nosotros: emplead
En resumen: el clero, y sobre todo las ór- les; 50 fuentes y alguns^s norias que no pro- el hombre ha existido muchos miles de
aquellos periodistas quo están á la brecha en objeto más real vuestra fuerza; traiga- denes monásticas, emplean toda su influenducen y podrían utilizarse en el servicio pú- años áhtes de lo que han escrito todas las
de continuo reluchando contra la iniqui- mos entre todos un estado de amplia li- cia en favor suyo; el pobre es un pretexto: blico.
Biblias; está seguro de que son patrañas
dad, al ver escrito en un periódico, repi- bertad y dignidad, y con las riendas del cada asilo supone cien conventos, cada soYa lo sabéis, infelices «que pasáis horas las que las religiones positivas presentaá
to, «ser liberal, es peor 'que ser asesino, poder en la mano, estrujemos el bolsillo corro á un pobre, veinte monjas regaladas. muertas de espera, si habéis de llenar un bo- como artículos de fe al mundo: sabe que
Llega la última hora de un potentado, y tijo de agua fresca; las monjas y los frailes la son inexorables las leyes de la natiiraleza,
de esos asnos dorados; no les dejemos
ladrón, canalla.»
allí
es el recordarle su confesor los deberes disfrutan: ¿qué digo? la tiran á cántaros, y y se rio de los que creen en el milagro.
medio
de
proteger
á
los
que
difunden
nu¿Eh dónde, en dónde están ocultos para
del
rico
para con la Iglesia, la excomunión, nada los cuesta.
inspirar ó decir esas cosas? Reparadlo,^ bes de error por el horizonte de la patria;
¿Qué le importa, sin embargo, todo eso?
vigente
aún,
contra los que poseen bienes
No quiero mencionar la contribución do ¿Qué le importa que el veneno de la ignobien: en esos palacios que construyen si- que su oro se vierta en las cajas públigilosamente en Zaragoza, en Madrid, en cas, é inventemos algo como premios, y nacionales ó sus frutos; hay que restituir ó los ciento ó más faroles de gas que no pagan rancia fluya por las venas del desgraciacondenarse. ¿Y el alma? No se acordarán tal
las más hermosas ciudades. Allí ateso- creación de instituciones donde el perio- vez de ella los herederos; por eso debo de- las iglesias, ni el palacio del cardenal, la Vi- do hijo del pueblo, que en ese estado de
rando, acaparando, viviendo como prín- dista, sin dejar de serlo, tenga ocupación jarse al convento este cuidado. Por fin se caría, la Nunciatura, y otros edificios, ni tinieblas en que yace sea fácilmente emcipes, hacen peor que nada: saturan de honrosa y bien retribuida; cualquier re- obtiene la deseada fundación. Nadie se acor- ocuparme ahora de otros detalles, todo se an- pujado por manos ocultas á la guerra cidará; y hoy los templos, mañana los misteodio contra la civilización el alma de la curso, en suma, para que el que quiere dó de los que sufren y trabajan; esto sería rios de la Vicaría ó del Cardenalato, pasando vil, y la patria se asuele, y caigan los vajuventud, y la preparan á traernos mana- ser útil y lo es realmente, á los intereses, filantropía, no cristiana caridad.
los tenebrosos crímenes del claustro, todo lo lientes guerreros en el campo, y el llanría nuevas luchas civiles y nuevos cata- á la ciencia, al arte, á la vida, no solaBiSta es la historia de todos esos edifioios sacaré á la vergüenza: el catolicismo aborre- to corra á raudales de los qjos? A él le
pagan, vive querido, respetado, le besa
mente en el periodismo, sino en el profe- que se levantan para mengua nuestra, de ce la luz, pues alumbrémosle.
clismos.
¿Dónde vive entre tanto el verdadero sorado, en la literatura, en el arte bello, todas esas fundaciones y.cesiones de bienes
Con lo dicho basta para deducir que el dia la mano el pobre hijo del pueblo, lo masacerdote, el que.lucha á brazo partido obtenga su justa parte en la distribución que vemos desde la restauración, tan amiga qué se cumpla el gran deseo de la democra-* neja como un instruinento: es dichoso
cía, y sea un hecho la absoluta libertad de personalmente.
contra la injusticia, todos los dias y todas de la riqueza; quo no se confunda en la de jesuítas.
Así
veréis
aumentar
el
número
de
santuacultos, tendrá el pueblo que pagar ménoa
las horas? En un mezquino cuarto de ve- vida social con el pordiosero al sacerdote.
A este tenor, mucho comerciante, y banrios, y no veréis una sola construcción desti- que hoy: los 11.000 duros diarios que cuesta
cindad, quizá en una buhardilla, todavía
quero,
y dueño de extensas projáedades,
DEMÓPILO.
nada á que el pobre viva como hombre; así el culto y clero, y el importe de los Ingresos
más, en un calabozo infecto cuyo cerrojo
se
solaza
en decir que ni es carlista, ni linotareis la falta de los edificios públicos que que representan las contribucionea que haha abierto con una mano el Gobierno, que
beral,
ni
de
la izquierda, ni déla derecha;
reclama la época. Monos liberales nuestros brán de pagar todos los templos (excepto los
con la otra abría un portillo en las frontesino
de
los
más
útiles ciudadanos, porque
gobernantas que los de antaño, no derriba- monumentales), ya por su trasformaoion en
Filoh republicqino.
ras de la patria para que penetrasen por
da
algunos
reales
al fisco, á condición de
rán las más inútiles iglesias en beneficio del cosa productiva, ya porque los 'mismos catóél á sus anchas esos á quienes la moTodo el que pasee las calles de Madrid on estado 6 del municipio: mucho monos para licos tengan que comprar lo que ocupen y que éste le asegure con un egército de
narquía mismia» en el siglo pasado^ ha se- estos dias calurosos, podrá convenoerse de utilidad del obrero. '
pagar por ellos tributo, cual acontece on Iba cien mil soldados, y policía y guardia
llado la íreiÉte iqpn la marca de los ré- la miseria física y moral que oprime al pue<
municipal y rural, y una sarta interminaY para que todo sea lógico, los edificios pueblos verdaderamente librea.
No hay que olvidarlo, futuros gobemanies, ble de funcionarios públicos, el holgado
pKóbos,
blo, al verlo huir de sus infectfM hajaltaoio- que disfruta la Iglesia, están ^xentoa 4»
Los nuevos sacerdotes.
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