MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES Y DE COOPERACIÓN INTERVENCIÓN DEL EMBAJADOR REPRESENTANTE PERMANENTE DE ESPAÑA ANTE NACIONES UNIDAS, D. ROMÁN OYARZUN MARCHESI, EN EL DEBATE ABIERTO DEL CONSEJO DE SEGURIDAD DE NACIONES UNIDAS SOBRE PROTECCIÓN DE CIVILES EN CONFLICTOS ARMADOS Nueva York, miércoles 12 de febrero de 2014 Sr. Presidente, Me gustaría agradecer al Secretario General Adjunto para Asuntos Humanitarios, la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz y el Comité Internacional de la Cruz Roja sus valiosas contribuciones a este debate. Permítame felicitarla por su excelente labor al frente del Consejo de Seguridad, asumiendo la presidencia tan solo un mes después de entrar a formar parte del mismo. Su ambicioso plan de trabajo así lo demuestra. Le agradezco particularmente la prioridad dedicada a tres temas con los que España se siente muy vinculada: la relación del Consejo con los organismos regionales, el estado de derecho y, en el caso del debate de hoy, la protección de civiles. España se asocia plenamente a la intervención pronunciada por la Delegación de la Unión Europea y desea hacer las siguientes aportaciones a este debate a título nacional. Como, desgraciadamente, la realidad continúa mostrándonos, la protección de civiles en conflictos armados exige nuestra máxima atención y llama a una acción firme y decidida por parte de la comunidad internacional. Un somero análisis de los conflictos más recientes lleva a la conclusión de que, en la gran mayoría de los casos, las reglas centrales para la protección de la población civil, como son la proporcionalidad, la distinción entre combatientes y no combatientes y la adopción de medidas para evitar o minimizar daños a la población civil, son ignoradas, o incluso, deliberadamente violadas. La protección de la población civil es una responsabilidad primordial de los Estados, pero los conflictos que se desarrollan en la actualidad dejan cada vez más patente la dejación o flagrante violación de normas básicas del Derecho de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario en situaciones de conflicto y posteriores a él. Por tanto, mi país acoge con satisfacción que el Consejo de Seguridad preste cada vez más atención a la cuestión fundamental de la protección de la población civil en conflictos armados y situaciones post-conflicto. La celebración de este debate es un paso más en la consolidación de este tema en la Agenda del Consejo de Seguridad. Mi país se felicita por ello, ya que considera que este tema es un punto clave de la actual agenda internacional, por su impacto fundamental no sólo en el ámbito estrictamente humanitario, sino en la paz y la seguridad internacional, de la que este órgano es garante. 1 MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES Y DE COOPERACIÓN Sr. Presidente, La idea de que las Operaciones de Mantenimiento de la Paz deben tener un mandato de protección es algo que todos nosotros aceptamos. Sin embargo, su aplicación u operacionalización requiere nuestra máxima atención si queremos que sea eficaz en la práctica. Como indica el Secretario General en su último informe, la situación actual presenta todavía notables desafíos a los que debemos hacer frente, y esta constatación debe servir de acicate para esforzarnos en lograr el cumplimiento eficaz de este mandato de protección. Debemos trabajar para lograr mandatos claros y realistas, basados en una evaluación honesta de la situación sobre el terreno y de las necesidades de recursos indispensables para responder a la situación, que permitan una interpretación inequívoca y un cumplimiento íntegro y eficaz de estos mandatos. Debemos dotar a las operaciones de mantenimiento de la paz de recursos suficientes y adecuados en función de estos mandatos y tener en cuenta la necesidad de adaptarse a situaciones que a menudo cambian rápidamente. Asimismo, hemos de elaborar estrategias de protección de civiles e integrar éstas en todas las fases de las operaciones de mantenimiento de la paz (planificación, despliegue y fase operativa). En todos estos esfuerzos, la interacción con el conjunto de los actores humanitarios que operan sobre el terreno es fundamental. Debemos ser conscientes de las expectativas que despiertan en la población afectada los mandatos de las misiones de paz. Esta en juego la credibilidad del Consejo de Seguridad, la credibilidad de todo el sistema de Naciones Unidas. Al mencionar estas palabras no puedo dejar de recordar la actual situación de Sudán del Sur, que fue objeto de consultas ayer mismo en el Consejo de Seguridad. Por otro lado, debemos fortalecer los mecanismos de evaluación y seguimiento por parte del Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz y del propio Consejo de Seguridad, de manera que las lecciones aprendidas y buenas prácticas puedan inspirar el despliegue y la labor de las Operaciones de Mantenimiento de la Paz en el futuro. Sr. Presidente, Mi delegación querría reiterar en este debate su especial preocupación, al igual que hizo en su intervención hace un año, por tres situaciones que amenazan gravemente la implementación real de la protección de civiles. En primer lugar, la utilización de bombas y explosivos en centros urbanos que causan la muerte o mutilación de civiles, la destrucción de infraestructuras básicas, como hospitales, escuelas o depósitos de agua, y el desplazamiento de un número ingente de civiles. Mi delegación deplora esta grave violación del Derecho Internacional Humanitario y estima que este órgano debe seguir prestando atención y explorar y utilizar todos los medios a su alcance para poner fin a esta práctica. En segundo lugar, ancianos, mujeres y niños sufren de modo especial e intenso los conflictos. La violencia sexual continúa siendo utilizada como arma e incluso como 2 MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES Y DE COOPERACIÓN estrategia militar en los conflictos, sometiendo a las víctimas a secuelas que se extienden también a la etapa postconflicto. España considera que éste es un tema al que el Consejo y las comisiones de encuesta deben prestar especial atención. Cabe tener presente la inhibición de las victimas en la denuncia por miedo a la estigmatización que supondría en sus comunidades. Asimismo, entre los grupos particularmente vulnerables, mi delegación quiere enfatizar el impacto de los conflictos sobre las personas con discapacidad. El pasado mes de septiembre, la Asamblea General acogió una Reunión de Alto Nivel sobre discapacidad y desarrollo, cuyo proceso España, junto a Filipinas, tuvo el honor de facilitar. Debemos recordar que también en el ámbito de la efectiva protección de civiles deben tenerse en cuenta las necesidades especiales de este colectivo. En tercer lugar, los ataques a personal e instalaciones médicas y al personal humanitario, y las limitaciones de sus actividades a las que tienen que hacer frente, son también un ataque indirecto a la población civil. No puedo dejar de recordar aquí la situación que sufre la población civil Siria. España quiere reiterar la necesidad de que el Consejo de Seguridad asuma su responsabilidad y adopte las medidas necesarias para que la Declaración Presidencial del 2 de octubre pasado sea cumplida. Aprovecho esta ocasión para hacer un llamamiento a todas las partes en conflicto a que cesen los ataques expresamente dirigidos contra el personal humanitario y contra los civiles que, de acuerdo con la pausa humanitaria pactada por las partes, pretendían salir de las zonas sitiadas. Sr. Presidente, Mi país respalda plenamente las recomendaciones contenidas en el informe del Secretario General, pero me gustaría destacar especialmente la importancia de dos de estas recomendaciones. En primer lugar, el acceso humanitario sin restricciones ni trabas es una condición esencial de la protección de la población civil en conflictos armados. El Consejo de Seguridad debe usar todos los instrumentos a su alcance para hacer posible que los agentes humanitarios puedan desempeñar su labor garantizando su seguridad y promoviendo un entorno propicio para facilitar el acceso rápido y sin trabas a los civiles en situación de necesidad. España se congratula de la iniciativa del Secretario General relativa a la denegación arbitraria del consentimiento a las operaciones de socorro y está dispuesta a participar en las consultas entabladas por OCHA en este ámbito. En segundo lugar, la rendición de cuentas es uno de los pilares de un sistema jurídico eficaz, y es clave para evitar la impunidad que facilita la comisión de graves violaciones de normas básicas del Derecho de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario. Si queremos reforzar la eficacia del Derecho Internacional Humanitario y del principio de la responsabilidad primera de los Estados en la protección de su población civil, debemos insistir una vez más en la necesidad de que los Estados adopten medidas para perseguir a los infractores, reflejándolas debidamente en su Código Penal, y de que el Consejo de Seguridad adopte, cuando sea necesario, las medidas que tiene a su alcance para asegurar que no exista lugar a la impunidad en relación con toda violación del Derecho de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario. Esto implica el seguimiento detallado de las conclusiones de las comisiones internacionales de 3 MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES Y DE COOPERACIÓN investigación y las misiones de determinación de hechos, y, si procede, la remisión de los hechos a la Corte Penal Internacional. Sr. Presidente, La adecuada formación de las Fuerzas Armadas en los principios generales del Derecho Internacional Humanitario es un instrumento fundamental en su aplicación, como se señala en los Convenios de Ginebra. Es también una premisa básica si queremos que, por un lado, las Operaciones de Mantenimiento de la Paz cumplan con éxito sus objetivos y, por otro lado, se pueda exigir que rindan cuentas de su proceder. Compete a cada Estado la debida formación de sus militares, pero también es una responsabilidad compartida por parte de todos asegurarnos de que el personal que enviamos sobre el terreno posee la capacitación adecuada para desempeñar con éxito su labor. Por tanto, resulta indispensable, en estrecha colaboración con los Estados que suministran tropas, articular los mecanismos necesarios para ofrecer y verificar, de modo previo al comienzo de la misión, esta formación a todos sus integrantes, de modo que comiencen su labor entendiendo qué es lo que se espera de ellos y la responsabilidad que les incumbe en este terreno. En este ámbito, España acogió con gran satisfacción la aprobación de la Resolución 2106 (2013), que reitera la necesidad de formación en violencia de género y el despliegue de consejeras de protección. Sr. Presidente, En este debate mi delegación querría recordar el importante papel de los instrumentos de la diplomacia preventiva y mediación inclusiva en la prevención de conflictos. España, miembro activo del Grupo de Amigos para la Mediación y promotora de una Iniciativa para la mediación en el Mediterráneo, invita al Consejo a que tenga en consideración estos instrumentos, en la medida en que pueden contribuir decisivamente al cumplimiento efectivo del Derecho Internacional Humanitario y de los Derechos Humanos y, en definitiva, a una eficaz protección de civiles en casos de conflicto. España acoge con satisfacción la iniciativa del Secretario General “los derechos primero”, encaminada en este sentido. No hay paz estable y duradera si no se respetan los Derechos Humanos. Es importante prevenir los conflictos y, una vez que estallan, ponerles fin cuanto antes. Pero también lo es consolidar la paz. La construcción de la paz es el momento en que se tienen que crear las condiciones necesarias para poner fin a la violencia. Por ello, la protección de civiles debe formar parte también del tratamiento que la comunidad internacional dé a las situaciones post-conflicto, pues ello puede convertirse en una herramienta de prevención con vistas a evitar un resurgimiento de la situación bélica. Los esfuerzos desplegados en favor de la protección de civiles deben ser apoyados por medidas y actividades de apoyo al fortalecimiento del Estado de Derecho, especialmente en los ámbitos de justicia y seguridad, incluidas las actividades de Desarme, Desmovilización y Reintegración (DDR). Sr. Presidente, La experiencia de España en este terreno, fruto de la extensa participación de nuestro país en operaciones de mantenimiento de la paz, nos ha demostrado que debemos situar la protección de los civiles en el centro de nuestros esfuerzos en materia de paz y seguridad, así como avanzar, entre todos, hacia los mecanismos y las acciones concretas para la 4 MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES Y DE COOPERACIÓN implementación efectiva de esta protección. Mi país seguirá participando activamente en los esfuerzos de la comunidad internacional encaminados hacia esta meta. Muchas gracias. 5