Nota de prensa domingo, 16 de octubre de 2011 LA UNACC DEFIENDE EL FIN, PERO NO JUSTIFICA LOS MEDIOS ● La Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc) comparte el objetivo de asumir costes por el saneamiento del sector financiero, pero rechaza el modo en que se plantea el Real Decreto Ley sobre el Fondo de Garantía de depósitos aprobado el pasado viernes. ● La respuesta conjunta de todo el sector financiero debe ser proporcional y equitativa y debe tener en cuenta, respecto del patrimonio de cada uno de los Fondos, de dónde venimos y cómo venimos. La Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc), asume el objetivo último de que sea el propio sector financiero el que asuma los costes ocasionados por su saneamiento y recapitalización, con el fin de que el conjunto de reformas no suponga costes para el erario público, pero rechaza la articulación de las medidas de reforma del régimen jurídico de los Fondos de Garantía de Depósitos aprobadas, el viernes pasado, mediante Real Decreto-Ley, por el Consejo de Ministros. “Si hay un sector que tenga interiorizada la idea de la solidaridad es el de las cooperativas de crédito. Nuestro sector siempre ha estado a la altura de las circunstancias y, en esta ocasión, no va a ser menos. Ahora bien, si podemos asumir el fin último, no podemos, sin embargo, compartir ni los medios empleados ni el momento en el que se produce esta modificación. Además, se presenta como novedoso algo que no lo es. Parece que la unificación de los Fondos resulta necesaria para que todo el sistema financiero de una respuesta conjunta. Debemos recordar que en otras ocasiones se han producido aportaciones conjuntas y proporcionales de los tres Fondos como han sido las aportaciones destinadas a inversores y al FROB, en los que la participación del Fondo de Garantía de Depósitos en Cooperativas de Crédito ha sido respectivamente del 4,95% y del 8,12%, representando este último porcentaje un desembolso, en favor del FROB, de cerca de 183 millones de euros”, comenta Marta de Castro, secretaria general de la Unacc. La modificación aprobada presenta aspectos jurídicos difíciles de justificar, el primero de los cuales es el incumplimiento de los fines para los que fueron creados los desaparecidos tres Fondos de Garantía de Depósitos. En concreto, el Fondo de Garantía de Depósitos en Cooperativas de Crédito se constituyó y, así ha permanecido hasta el último día, con el objeto de garantizar los depósitos en las cajas rurales y demás cooperativas de crédito, así como realizar cuantas actuaciones estimara necesarias para reforzar la solvencia y mejorar el funcionamiento de las cooperativas de crédito en defensa de los intereses del propio Fondo. “Por tanto, los fondos actualmente existentes jamás se aportaron para servir a finalidades distintas que las que ha establecido la legislación que los exigió a lo largo de casi 30 años. Dedicar, a fondo perdido, el patrimonio disponible del conjunto de los Fondos hasta el límite de las pérdidas ocasionadas por operaciones, decididas por el FROB, de reestructuración o apoyo a entidades es una finalidad nueva y distinta. Esta circunstancia deja traslucir el carácter expropiatorio de la medida. Ahora bien, soslayando lo anterior y, admitiendo la unificación del 1 Nota de prensa conjunto de los Fondos para no solo mantener las tradicionales funciones, sino asumir una nueva, esta patronal tiene que manifestar su oposición a determinados aspectos de la nueva regulación”, comenta De Castro. Abordamos, a continuación, los aspectos más relevantes de la nueva regulación. En primer lugar, se establece que el patrimonio de los Fondos de Garantía de Depósitos en Cajas de Ahorro, Establecimientos Bancarios y Cooperativas de Crédito, se integrará en el Fondo de Garantía de Depósitos en Entidades de Crédito con efectos desde la entrada en vigor del real decreto-ley 16/2011, esto es, desde el 15 de octubre de 2011. El Fondo se subrogará en todos los derechos y obligaciones de los fondos disueltos. “De esta manera se integran los patrimonios de los extintos Fondos, así sin más; sin tener en cuenta de dónde vienen y cómo vienen. Pero no podemos olvidar que las aportaciones de las entidades de crédito a los distintos Fondos de Garantía de Depósitos han sido distintas siendo que, tradicionalmente, el mayor porcentaje de aportación es el que se ha exigido a las cooperativas de crédito, es decir el 0,8 por mil de la base integrada por los depósitos a los que se extiende la garantía. Pero es que, también, es distinto el nivel de cobertura patrimonial sobre la cifra de depósitos garantizados que ofrecen y, otra vez más, el mayor es el correspondiente a las cooperativas de crédito, de forma que el fondo patrimonial no comprometido representa en 2010 una cobertura del 0,72 % de la base de cálculo de las aportaciones. Del mismo modo y, sin entrar en detalle, las obligaciones de los Fondos disueltos son radicalmente distintas, siendo que el correspondiente a las cooperativas de crédito, no presenta ningún debe”, comenta De Castro. La secretaria general añade: “la unión con otros Fondos con distintos niveles tanto de aportación como de cobertura patrimonial y con distintos parámetros de gestión del riesgo de las entidades que lo conforman, algunas de ellas con niveles de solvencia, retribuciones y políticas de actuación alejados de la media de nuestro sector, no favorece precisamente a las cooperativas de crédito”. Ahora bien, señala el decreto-ley que el Fondo se nutrirá con aportaciones anuales de las entidades de crédito integradas en él, cuyo importe será de hasta un máximo del 2 por mil de los depósitos a los que se extiende su garantía, en función de la tipología de las entidades de crédito y, a continuación, en la disposición transitoria tercera, señala que el régimen de aportaciones al Fondo de Garantía de Depósitos de Entidades de Crédito será el establecido en este real decreto-ley y su normativa de desarrollo, hasta el momento en que, conforme a la normativa correspondiente de la Unión Europea, se desarrolle reglamentariamente un nuevo régimen de aportaciones basado, además de en el volumen de depósitos, en el perfil de riesgo de cada una las entidades adheridas. “La incoherencia del régimen de aportaciones es manifiesta. Resulta que no hay razón para distinguir entre Fondos de Garantía de Depósitos, pero las aportaciones son en función de la tipología de las entidades de crédito, siendo que esta consideración no tiene carácter transitorio, de manera que el nuevo Fondo nace y permanecerá teniendo en cuenta la citada tipología que, suponemos, se refiere a la naturaleza jurídica de las distintas entidades. Además, con carácter, esta vez sí, transitorio y hasta que se apruebe la normativa europea, los porcentajes van a ser los actuales, es decir, se mantiene la distinción entre aportaciones por el sujeto que las realice”, resalta De Castro. Otra cuestión afecta a las reglas de funcionamiento del órgano de gobierno del Fondo de Garantía de Depósitos y, en concreto a la forma de adopción de acuerdos de la Comisión Gestora. Se mantiene la tradicional regla de la mayoría de sus miembros para la adopción 2 Nota de prensa de acuerdos, gozando el Presidente de voto de calidad y la regla de la exigencia de 2/3 para acordar la realización de derramas y para la adopción de las clásicas medidas preventivas y de saneamiento tendentes a facilitar la viabilidad de una entidad. “No solo se eleva de rango normativo la forma de adopción de acuerdos, que hasta ahora se contenía en una norma con rango reglamentario, sino que la nueva finalidad, otorgada al nuevo Fondo, puede cumplirse con la aprobación de la mayoría simple de los miembros de la Comisión Gestora. El fin que parece que persigue la reforma es que la Comisión Gestora del Fondo pueda acordar que se dedique, a fondo perdido, el patrimonio disponible del conjunto de los Fondos hasta ahora existentes hasta el límite de las pérdidas ocasionadas por operaciones, decididas por el FROB, de reestructuración o apoyo a entidades. Y este acuerdo no necesita de la mayoría cualificada de 2/3 que sí se requiere para realizar derramas o para adoptar medidas preventivas o de saneamiento”, comenta De Castro. De hecho la secretaria general asegura que hay que recordar que los miembros de la Comisión Rectora del FROB están obligados a guardar secreto de toda la información relativa al propio FROB, que tal Comisión adopta sus acuerdos por mayoría de sus miembros con voto de calidad de su presidente, y que tales miembros son dos en representación del Ministerio de Economía y Hacienda, cuatro en representación del Banco de España y tres en representación de los Fondos de Garantía de Depósitos, asistiendo, además, con voz y sin voto, un representante de la Intervención General de la Administración del Estado. “Con estos mimbres, no es difícil concluir que el Fondo de Garantía de Depósitos, ni ahora ni antes, ha podido conocer y mucho menos decidir sobre las operaciones acordadas por el FROB. En estas circunstancias, el Fondo de Garantía de Depósitos (con 12 miembros, 6 del Banco de España y 6 de las entidades de crédito, con voto de calidad también del presidente), actúa como mero cajero automático, es decir, se le presentan al cobro las pérdidas de una operación, decidida por otros y sin su conocimiento, y debe proceder a su pago. Esta regulación nos resulta excesivamente dura”, asegura. Como conclusión, la Unacc, como patronal y representante del sector de cooperativas de crédito, tiene que manifestar que se trata de un sector que, tradicionalmente, ha llevado a cabo una prudente y eficiente política de financiación y de gestión de riesgos, que no ha acudido a recursos públicos a través del FROB, que cumple al 100% los requerimientos de solvencia y que presenta la menor morosidad del sector de entidades de crédito. Por supuesto, queda mucho margen de mejora en muchos aspectos, pero el sector está llevando a cabo una reestructuración silenciosa que, de momento, le lleva a presentar una concentración no desdeñable, ya que desde finales de 2009, con 80 cooperativas de crédito, estamos, a esta fecha, en 57 cooperativas de crédito o grupos consolidables, con un horizonte cercano de rebajar hasta 46, de producirse la aprobación de proyectos ya consolidados. “Ni mucho menos pedimos un trato favorable o beneficioso pero sí que, dado que asumimos que nos corresponde dar una repuesta conjunta con el resto del sector de entidades de crédito, dicha respuesta sea, en algún momento, proporcional y equitativa y tenga en cuenta, respecto del patrimonio de cada uno de los Fondos, de dónde venimos y cómo venimos”, concluye De Castro. Departamento de prensa Patricia Vegas Teléfono: 682 49 21 07 pvegas@unacc.es La Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc) constituida en 1970, es la patronal del sector de cooperativas de crédito que ostenta su representatividad institucional. 3