XX Congreso – Cuam – AcMor TITULO: Rayos Cósmicos PARTICIPANTES: Erika Paola Estrada Castañeda, Natali Michelle Vargas Pérez y Andrea Patricia Gosset Soto. AREA: Físico-Matemáticas ESCUELA: Centro Universitario Anglo Mexicano (CUAM) ASESORES: Alejandro Reyes y Antonio Juárez. OBJETIVO: Representar los rayos cósmicos y poder justificarlo con teoría. MARCO TEÓRICO: No son rayos, sino un tipo de radiación del espacio exterior formada por partículas subatómicas que impactan contra nuestra atmósfera a elevada energía. Contribuyen con un 10% a la dosis media por radiación que recibe un ser humano. Fueron descubiertos por el físico Victor Franz Hess en el año 1912, lo que le valió el premio Nobel de física en 1936. Hess y sus colaboradores comprobaron que la conductividad eléctrica de la atmósfera terrestre se debe a la ionización y que ésta aumenta con la altitud. Concluyeron que la ionización se debe a radiación procedente del espacio exterior, formada fundamentalmente partículas cargadas desviadas por el campo magnético terrestre. Nuestra definición de rayos cósmicos será la siguiente: Los rayos cósmicos primarios son partículas energéticas de origen no térmico, presentes en el espacio extraatmosférico de la Tierra. Son protones, núcleos, electrones, fotones gama, positrones, antiprotones y neutrinos. Cada una de estas partículas da origen a rayos cósmicos de características diferentes, a saber: diferentes abundancias, distintos espectros de energía, diferentes técnicas de medición, etc.. No existe evidencia suficiente de que tengan fuentes comunes. La composición química de los rayos cósmicos, es decir, las abundancias relativas de los distintos elementos, es muy similar a la del sistema solar, de forma que la mayor parte de los rayos cósmicos son protones y partículas alfa, encontrándose, también, núcleos de número atómico intermedio, entre los que destacan los de C, N y O, y elementos pesados entre los que predominan los núcleos de Fe. Se ha estudiado también la dependencia del flujo de rayos cósmicos de la dirección de llegada a la Tierra, observándose que existe básicamente isotropía, a exepción de ciertas anomalías que afectan sólo a los rayos cósmicos de baja energía, debido a los efectos de los campos magnéticos cósmicos. Los primeros modelos que suponían que todos los rayos cósmicos provenían del Sol fueron pronto descartados porque el campo magnético solar no puede confinar rayos cósmicos tan energéticos como los que se han detectado y, por tanto, estos escaparían del sistema solar sin alcanzar la isotropía que observamos desde la Tierra. No obstante, una parte importante de aquellos de baja energía son de origen solar. El campo magnético de nuestra galaxia, por el contrario, puede confinar partículas de muy alta energía, pero hasta cierto límite. ANTECEDENTES: Analizar y crear los rayos cósmicos. HIPOTESIS: A partir de la teoría, simularemos los rayos cósmicos justo como pasa en el espacio exterior. METODOLOGÍA: Realizaremos un experimento creando un prototipo de rayos cósmicos. CONCLUSIONES: En proceso. BIBLIOGRAFÍA: http://weblogs.madrimasd.org/ciencianuclear/archive/2007/06/13/67628.aspx http://www.fisica.ucn.cl/sochifi/simposio2004/acta/contribuciones/deteccion1.pdf