Paracaidistas: diferencias entre el civil y militar

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doi:10.3900/fpj.4.3.137.s
EISSN 1676-5133
Paracaidistas: diferencias entre el civil y
militar
Artículo Original
Ualber Soares Dias, M.Sc. (CREF 6797 G/RJ)
ualberprec@ig.com.br
Prof Dr. Manoel José Gomes Tubino, Ph.D. (CREF 0004 G/RJ)
manoeltubino@aol.com
DIAS, U. S.; TUBINO, M. J. G. Paracaidistas: diferencias entre el civil y militar. Fitness & Performance Journal, v. 4, n. 3, p. 137 144, 2005
RESUMEN: La historia sobre este deporte en Brasil y en el Mundo, muestra la razón que justifica un “mito” en la tropa de paracaidistas y un placer en la aventura. El estudio, fue una investigación descriptiva, con objetivo de identificar el origen y quién eran los
pioneros de paracaídas; sus características principales y diferencias entre ellos. La investigación buscó establecer las acciones de
paracaídas militar y civil, además de cómo se han desarrollados. Para concretar este objetivo se realizó una encuesta única a los
dos grupos que contenía treinta categorías sobre el tema. La encuesta y fue previamente evaluada y aprobada por 10 (diez) jueces.
Posteriormente se aplicó la encuesta para 40 paracaidistas, 20 (veinte) del ejército y 20 (veinte) civiles. Se clasificaron las respuestas
entre 10 (mayor grado) y 1 (menor grado). Se identificó las diez características más importantes para los grupos del ejército y civil.
El estudio apunta diferencias significativas entre el paracaídas militar frente al civil, principalmente su forma y finalidad, así como
la percepción de esta actividad considerada por estos grupos.
Palabras clave: Paracaidismo, Militar, Deportes de aventura.
Dirección para correspondencia:
Rua: Joaquim Ferreira, n. 49, casa, Jardim Sulacap, Rio de Janeiro – RJ, CEP: 21741-090: Brazil
Fecha de Recibimiento: enero / 2005
Fecha de Aprobación: abril / 2005
Copyright© 2008 por Colégio Brasileiro de Atividade Física, Saúde e Esporte
Fit Perf J
Rio de Janeiro
4
3
137-144
may/jun 2005
137
RESUMO
ABSTRACT
Pára-quedismo: diferenças entre o civil e o militar
Sky-diving: differences between civilian and military
A história do pára-quedismo no Brasil e no Mundo nos mostra o porquê da
mística que envolve a tropa páraquedista e o gosto pela aventura, seja no meio
militar ou no civil. O estudo foi desenvolvido como pesquisa descritiva, com
abordagem quantitativa, e teve como objetivo identificar a origem e os pioneiros do pára-quedismo, bem como suas principais características, formações e
diferenças. A investigação abordou aspectos do pára-quedismo militar e civil e
a forma como ambos se desenvolvem. Para chegar ao perfil dos pára-quedistas,
foi utilizado 1 (um) questionário comum aos dois grupos, com trinta categorias
ligadas a área do pára quedismo e previamente aprovadas por um total de
10 (dez) validadores. Depois de validado, o questionário foi apreciado por 40
(quarenta) pára-quedistas, 20 (vinte) militares e 20 (vinte) civis, que indicaram,
dentre as trinta categorias propostas, as 10 (dez) com que eles mais se identificavam, em ordem de importância. Foram atribuídos valores às respostas, sendo
que a primeira categoria escolhida recebeu 10 (dez) pontos e a última 1 (ponto).
Dessa maneira, hierarquizaram-se as dez características mais importantes tanto
para os militares, como para os civis. O estudo encontrou diferenças significativas
entre o pára-quedista militar e o civil, principalmente no que diz respeito à forma
como a atividade é vista por esses grupos e à sua finalidade.
The history about this sport and its evolution in Brazil and in the World, shows
the reason that justify a “myth” in the parachutist troop and a pleasure to be in
adventure as military or civil place. The study, as descriptive research, had had
the object with a big approach to identify the origin and who were the pioneers
from sky-diving; the principal characteristics from civilian and military parachutist’s theirs graduations and differences among them. The investigation looked
for what does military and civilian sky-diving mean and how did they grow. A
questionnaire was delivered. It’s has thirty categories about sky-diving and was
previously approved for 10 (ten) judges. After the questionnaire was appreciated
for 40 (forty) parachutists, 20 (twenty) militaries and 20 (twenty) civilians, it was
answered from them about thirty sky-diving’s categories. Considering 10 (ten)
for importance scale and what was the categories that identified whit parachutist’s characteristics. Values were given for these answers, and the first chosen
category received 10 (ten) points, and the last 1 (point). It was assigned, ten more
important characteristics for militaries and civilians. The study find out important
differences between military and civilian parachutist, mainly about the finality that
this activity has been seen.
Palavras-chave: Pára-quedismo, Pára-quedista militar, Esportes de aventura.
Keywords: Sky-diving, Military parachutist, Adventure sports.
INTRODUCCIÓN
Desde que Leonardo Da Vinci, en el siglo XVI, concibió un paracaídas
en forma de pirámide, con estructura rígida cubierta de un tejido más
resistente, el conocimiento humano está perfeccionando el material,
la técnica y la preparación sicológica para la ejecución de saltos.
La evolución del material busca la conjunción de seguridad,
rendimiento y bienestar para el saltador. La técnica mejora el
desempeño del saltador en caída y en el aterrizaje. La preparación sicológica se destina la disminuir los bloqueos naturales de
la mente a las nuevas situaciones con las cuales el saltador se
enfrenta, sobre todo en casos de posibles accidentes. Feijó (1998)
dice que lo objetivo y a meta del entrenamiento psicológico es
la modificación de los procesos y estados psíquicos (percepción,
pensamiento, motivación), es decir, las bases psíquicas de la
regulación del movimiento. Esa modificación será alcanzada con
el apoyo de procedimientos sicológicos.
El Paracaidismo militar tuvo gran participación en la historia y en
la evolución de este deporte, siendo protagonista de una mística
existente desde la 2ª Guerra Mundial hasta los días actuales.
Este mito de ser paracaidista, sobre todo militar, es necesario
en la medida en que este sigue una tradición iniciada desde la
creación del paracaidismo militar en el mundo. Correa (2003, p.
44) afirma “que siempre hay, aunque en fragmentos y a pedazos,
un planchado y una tradición”. Ya el paracaidismo civil viene creciendo de importancia desde el final del siglo XX, cuando habían
empezado a surgir los deportes enchufados a la naturaleza.
[...] entre las innumeras vertientes de nuevos deportes, existe
aquella, impulsada por intereses económicos evidentes en
los consumos de los propios equipamientos, que está promoviendo la aparición de modalidades ricas en emociones
y que provocan contactos de muchas significaciones entre
el hombre y la Naturaleza. (TUBINO, 2001, p.28)
Una de las cuestiones actuales sobre el paracaidismo es la diferencia entre el paracaidista militar y lo civil. Esa cuestión se volvió
138
importante cuando el paracaidismo comenzó a ser encarado
como deporte, pues, inicialmente, fue concebido con la idea de
salvar la vida de pilotos, pasando al uso militar y, por último,
llegando al aspecto deportivo. Existe todavía, los días actuales,
mismo con la práctica deportiva realizada por las Fuerzas Armadas, una diferencia bastante acentuada entre el paracaidista
militar y civil. Esa diferencia es discutida y notada, sin embargo,
todavía hoy, carece de estudios científicos para que se pueda
definir mejor el perfil de los practicantes de esas dos categorías
y resaltar sus diferencias.
Objetivo General
Identificar las características de los practicantes del paracaidismo
civil y militar, apuntando las semejanzas y las diferencias entre
las categorías.
Objetivos Específicos
1. Identificar el origen y los pioneros del paracaidismo;
2. Identificar las principales características personales del
paracaidista civil y militar;
3. Identificar la formación del paracaidista civil y militar;
4. Identificar las diferencias entre los paracaidistas civiles y militares.
Relevancia del Estudio
Con el crecimiento de los deportes de riesgo o de naturaleza,
surge en medio civil el paracaidismo, como una actividad poco
conocida de aquellos que no la practican. El paracaidismo
militar se difiere en varios puntos del civil, sobre todo debido a
la finalidad, sin embargo, ambos presentan estrecha relación.
Desgraciadamente, existe una falla en la literatura brasileña, y
hasta mundial, en relación a ese deporte y, también, cuanto a
las diferencias entre los practicantes del paracaidismo militar y
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civil. Esas características vuelven lo presente estudio justificable
y relevante.
Delimitación
La investigación se limitó al Estado de Rio de Janeiro para la aplicación de los instrumentos del estudio, local donde se encuentra
una gran parte de los paracaidistas civiles y la amplia mayoría
de los militares. La población de la investigación fue constituida
de practicantes del paracaidismo, atletas o no, de los medios
civil y militar.
Conceptos Básicos
Existen varios conceptos utilizados que son mucho próximos en
sus significados, no habiendo la necesidad de adoptarse sólo
uno. De esa forma, la compatibilización disteis, permitirá una
interpretación que seamos los dos tipos de paracaidismo: lo
militar y lo civil.
Deportes de la naturaleza
El paracaidismo es un deporte radical, también clasificado como
deporte de la naturaleza, deporte de aventura o, todavía, según
algunos autores, como deporte pancartas. Se hace necesario,
por lo tanto, definir lo que es el deporte de aventura.
Tubino [s.d] define los deportes de aventura como: “modalidades deportivas que se caracterizan por el control de los grandes
desafíos relacionados a peligros, que son impuestos a los practicantes, sobre todo debido a las incertidumbres que envuelven
el desarrollo de las mismas”.
Costa (2000) cita los deportes de aventura como una tendencia
percibida en grupos de diferentes partes del planeta para hacer
cosas fuera del común. Se trata, hoy, de una aventura eivada de
sentidos lúdicos, una vez que la actitud de los sujetos que viven
la aventura en el deporte es tomada por un riesgo calculado,
en el cual osan echar a sí mismos con la confianza del dominio
cada vez mayor de la técnica y de la seguridad propiciada por
la tecnología.
Betrán y Betrán (1995) los definen como nuevos deportes, los
cuales tienen como objetivo destacar su carácter innovador y
estructuralmente distinto con respecto a los deportes de la modernidad. Deportes de aventura es la definición más utilizada,
tomando como referencia la busca de incertidumbre y del riesgo
propio de la aventura.
Padiglione (1995) establece que los deportes de la naturaleza,
son practicados en escenarios, como desiertos (rally) y montañas,
siempre lejos del clamor del público y de la cobertura de las
televisiones.
Paracaidista militar brasileño
El paracaidista militar es uno combatiente especializado, preparado para ser lanzado atrás de las líneas enemigas, a fin de
conquistar objetivos importantes en la maniobra táctica y estratégica de los escalones superiores del Ministerio de la Defensa.
La tropa paracaidista se constituye totalmente de voluntarios,
seamos oficiales o soldados, con al menos 18 (dieciocho) años
de edad. El reclutamiento es hecho a partir de una rigurosa batería de exámenes de salud y tests de aptitud física. La Brigada
Paracaidista (local donde sirven los paracaidistas), se ejecutan
el salto semiautomático (enganchado) y el salto libre. El salto
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enganchado es realizado a una altura de como máximo 1200
Ft (360 metros), con el paracaídas redondo (poca dirigibilidad).
Ya el salto libre, realizado en alturas superiores la 3000 Ft (1000
metros), puede ser ejecutado tanto para la práctica de deporte y
disputa de torneos, como para fines operacionales (vuelto para
determinada misión).
El militar paracaidista está envuelto por una mística que es pasada
a través de los tiempos, por la propia institución. Esta mística, en
ser considerado por todos como un guerrero alado que no teme
el peligro, hace con que esta tropa sea diferente, considerada
por muchos como una tropa de elite, con rituales, símbolos y
manera de ser distintos de las de más.
Las sociedades siempre crearon un conjunto de representaciones, un imaginario, en cuyas prácticas sociales
distribuyen las identidades, los papeles, las necesidades y
las normas y valores que conducen los comportamientos
de los individuos integrando finalidades comunes. Se trata
de fijaciones simbólicas, imaginarias, estructuradas bajo
la forma de una red de sentidos que sobrepasa los gestos,
las personas, los momentos. (FERREIRA y COSTA, 2003,
p.32).
Adorno (1995) cree que ser combatiente paracaidista exige
cualidades que no son comunes de encontrarse. Rusticidad, determinación, coraje, objetividad, confianza en la instrucción y en
el equipamiento, resistencia psicológica y estabilidad emocional,
exigidas en situaciones las más diversas.
PARACAIDISTA CIVIL
El paracaidista civil es un ser en búsqueda de un deporte de
riesgos, que, sin embargo, son parcialmente calculados. El
inicio de su vida en la actividad puede darse a partir de 5
(cinco) años de edad, cuando ya es posible realizar el salto
doble, no teniendo límites para terminar, dependiendo lógicamente del estado de salud del saltador. La actividad puede
ser practicada por ambos los sexos y, generalmente, se inicia
a partir de los 17 (diecisiete) años, cuando lo interesado ya
está en condiciones de realizar los cursos propuestos para
la formación de uno paracaidista. El periodo de formación,
los aprendices pueden realizar o no el salto enganchado. En
ese aspecto, se difieren de los militares que, para se vuelvan
paracaidistas, necesitan realizar ese tipo de salto. La actividad
deportiva, el paracaídas es siempre rectangular, pues ese modelo presenta una dirigibilidad más grande que el redondo. La
actividad puede ser practicada por deporte y por ocio casual
o serio, exigiendo un poder adquisitivo considerable, teniendo
en vista los costes del curso y del material para salto, como
paracaídas principal y reserva, altímetro (registra la altura en
caída), etc. Por regla general, el paracaidismo es practicado
en aeroclubes, bajo la coordinación de una empresa particular, y allá se reúnen atletas y no atletas, dividiendo el mismo
espacio; parece hasta que pertenecen a algún tipo de “tribu”,
pues insisten en ser diferentes de los de más practicantes de
deportes, inclusive del paracaidista militar.
METODOLOGÍA
Serán descritos en este capítulo los procedimientos metodológicos
juzgados adecuados, a saber: Tipo de Estudio; Muestras; Instru139
mento del Estudio; Validación de los Cuestionarios; Colecta de
Datos; Desarrollo del Estudio; y Procedimientos Metodológicos.
Tipo de Estudio
El Tipo de Estudio puede ser caracterizado como Descriptivo,
debido su finalidad de “[...] obtener informaciones a cerca de
condiciones existentes, con respecto la variables o condiciones
en una situación” (FLEGNER y DÍAS, 1995, p.56).
Por ser de naturaleza descriptiva, el estudio puede ser todavía
clasificado como una investigación (Survey), pues, además de
describir condiciones actuales, realiza una comparación de
estas con criterios predeterminados. Se puede decir, también,
que, a través de uno Survey, es posible buscar el perfil de una
población blanco.
Asimismo, el estudio, como investigación descriptiva tipo Survey,
con abordaje cuantitativa, realiza una investigación de las características del paracaidista, buscando establecer una relación entre lo
militar y lo civil; establecer un perfil disteis; y, todavía, verificar posibles diferencias entre estos practicantes de actividades radicales.
Muestras
Fue establecido como criterio de selección que los sujetos
analizados fuesen paracaidistas en actividad, formados en
medio civil y militar, poseedores del curso de paracaidismo
hay al menos un año y con, por lo menos, 100 (cien) saltos,
todos sitiados en la ciudad de Rio de Janeiro, constituyendo
parte de la población a ser estudiada.
La muestra, del tipo intencional o proposital, fue constituida
por 40 (cuarenta) paracaidistas, siendo 20 (veinte) militares
y 20 (civiles), todos del sexo masculino. Tanto la muestra de
los paracaidistas militares como la de los civiles habían sido
desarrolladas atendiendo a la disponibilidad de los grupos.
Instrumento del Estudio
Fue utilizado un cuestionario específico tanto para los paracaidistas militares, cuanto para los civiles. El cuestionario era
constituido de dos partes: la primera tenía como objetivo obtener
informaciones personales del entrevistado; el lunes, presentaba
30 (treinta) categorías y sus respectivas definiciones, vueltas para
el paracaidismo. Las categorías habían sido concebidas con base
en la literatura encontrada sobre el paracaidismo y en la experiencia personal del investigador. El entrevistado debería informar,
en orden de importancia, las diez características más destacables
del paracaidista, de entre las 30 (treinta) categorías propuestas.
Habían sido atribuidos valores de 1 (uno) la 10 (diez), en que el 1
(uno) correspondió al menor valor de clasificación y el 10 (diez),
al mayor valor atribuido, objetivando colectar datos sobre las
características del paracaidista. El caso de resultados iguales en
número de puntuación, la categoría que obtuvo el mayor número
de notas más altas tuvo ascendencia sobre a otra.
Validación de los Cuestionarios
El cuestionario tuvo su contenido validado a través de un análisis
detallada de 5 (cinco) paracaidistas militares y 5 (cinco) paracaidistas civiles, todos comprovadamente con ancha experiencia en
la práctica del paracaidismo, con número de saltos superior la
300 (trescientos) y al menos 2 (dos) años de experiencia, siendo
denominados de “jueces validadores”.
140
A cada uno de esos jueces fue entregado un cuestionario, con
exactamente los mismos 30 (treinta) conceptos propuestos para
los entrevistados, para que ellos pudiesen marcar de cada una
de esas 30 (treinta) opciones las siguientes alternativas: MANTENER, EXCLUIR o REFORMULAR. Fue criado, todavía, un espacio
para sugerencias, caso el juez quisiese utilizarlo. Cabe resaltar
que, de los 30 (treinta) conceptos propuestos, todos habían sido
mantenidos, pues no hubo en momento algún, unanimidad por
parte de los validadores, en retirar algún de ellos.
Los valores y la percepción de los jueces elegidos cuanto a la coherencia, a la claridad y a la validez de las preguntas formuladas
en relación a la materia del estudio, fueron de suma importancia
para la validación de la disertación.
De esa forma, se validó el cuestionario como instrumento del
estudio, posibilitando el desarrollo de la investigación.
Colecta de los Datos
La colecta de los datos fue efectuada a través de los cuestionarios
validados que fueron entregados a cada sujeto previamente seleccionado, constituyendo un universo de 40 paracaidistas siendo
20 (veinte) militares y 20 (veinte) civiles, en la forma de encuentro
personal o vía Internet (correo electrónico). La devolución de los
referidos instrumentos ocurrió en el plazo de 10 (diez) días. Todos
los entrevistados habían sido informados sobre el propósito de la
entrevista, a través de comunicación previa, en que las posibles dudas habían sido esclarecidas, y el carácter voluntario consentido.
Desarrollo del Estudio
El estudio se desarrolló mediante revisión de literatura y de entrevistas con los paracaidistas, aliado a la convivencia obtenido
en la práctica deportiva durante este periodo. Habían sido seleccionados algunos libros que abordaban de manera sustancial el
paracaidismo, y otros que abordaban cuestiones enchufadas a los
practicantes de deportes de la naturaleza. En términos de material
bibliográfico, se puede percibir que la literatura relacionada al
asunto está mucho por debajo de del esperado.
Procedimientos Metodológicos
Según el esquema de desarrollo de la investigación, el estudio
fue cumplido referenciando los procedimientos metodológicos
en sus diversas etapas:
- La identificación del origen y del pioneirismo del paracaidismo se efectuó una Revisión de Literatura.
- La identificación de las principales características personales del paracaidista civil y militar, sus diferencias y
semejanzas, se habían aplicado un cuestionario y una
entrevista informal.
- Para dilucidar la formación de los paracaidistas civiles
y militares, más adelante de una revisión de literatura y
páginas de la Internet, habían sido realizadas visitas a las
escuelas de formación. El caso militar, el local seleccionado
fue la Subsección de Tacón Libre, perteneciente a la Peleada
de Infantería Paracaidista, situada en Rio de Janeiro. El caso
de las escuelas civiles, habían sido visitadas las escuelas
“Azul del Viento”, en Campinas, “Aeroclube de Resende”,
en el Estado de Rio de Janeiro, y el “Barra Jump”, en la
ciudad de Rio de Janeiro, donde habían sido realizadas las
entrevistas y aplicados los cuestionarios.
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PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS
DE LOS RESULTADOS
que ella puede ser la manifestación de uno sentimiento muy
cerca al de la aventura y de la “locura” que representa el acto
de saltar.
Validadotes
Según Castoriadis (1999, apud CORREA, 2003, p.46):
Inicialmente, se llegó a la siguiente conclusión: pocos rellenaron
el requisito para ser uno validado, pues alcanzar el índice de 300
saltos no es tarea fácil. En especial en medio civil, en razón de la
cuestión financiera, ya que los militares no necesitan pagar para
saltar. Para ilustrar, un salto libre doble (en que el aprendiz salta
preso al instructor) no cuesta menos de R$ 500,00. Si la persona
quisiere registrar el momento, todavía deberá pagar el salto del
“cámara-man”, responsable por la foto-filmación, cuyo servicio
no sale por menos de R$ 150,00. Existen algunas explicaciones
para este valor ser tan alto: el alquiler de avión, el combustible,
la doblaje y el alquiler del paracaídas, el salto del instructor y del
cámara-man que irá a acompañar el alumno, además de gastos
con la revelación de las fotos y la edición de la cinta del salto.
Una otra razón para la dificultad en rellenar los requisitos para
ser uno validador está relacionada al tiempo, pues la amplia
mayoría de los paracaidistas entrevistados lleva una vida
normal de trabajo y compromisos, dedicándose a la actividad
de tacón solamente en los finales de semana o días festivos.
El caso de los militares, muchos están envueltos en viajes de
entrenamiento o misiones diferentes de saltar.
Entrevistas
Para la realización de las entrevistas en medio civil, fue elegido
el “Barra Jump”, principal club de paracaidismo, situado en
la ciudad de Rio de Janeiro; ya para los militares, todas las
entrevistas ocurrieron en la Brigada Paracaidista, en la misma
ciudad. Las entrevistas acontecieron en 4 (cuatro) finales de
semana, para los civiles, y a lo largo de la semana, para los
militares, en un periodo total de 1 (uno) mes.
Resultado del cuestionario civil
Las diez categorías seleccionadas por el personal civil son presentadas en el gráfico1, la seguir:
Análisis de las respuestas civiles
La “aventura”, categoría más elegida y con mayor puntuación
de entre las treinta propuestas, representa la característica más
destacable del paracaidista civil.
Según Costa (2000, p.78), “la palabra ‘aventura' viene del
latín adventura, que quiere decir, lo que rompe la rutina de los
días y provoca el espanto, la sorpresa, lo memorable”. Los días
actuales, donde muchos buscan una huida de la rutina, sea en
el trabajo o en los innúmeros compromisos, no Es sorpresa que
esta categoría haya sido una de las más puntuadas. El trecho a
seguir ilustra bien el entusiasmo con la actividad:
El lenguaje es el terreno más extenso y familiar de las significaciones imaginarias sociales. De cierta forma, el lenguaje
funciona como código, actuando de manera identitária a
las significaciones imaginarias sociales, se volviendo un
instrumento casi unívoco del hacer, del hablar y del pensar
en una sociedad.
– El Paracaidismo es pura adrenalina, compadre, o tu tienes
o vale fuera de la actividad, valió! (Maike)
El “placer” en saltar fue largamente comentado por todos los entrevistados civiles. Según Camargo (2003, p.12), “el más correcto sería
decir que en toda elección de ocio, existe el principio da busca del
placer, aunque la actividad se inicie con un esfuerzo para obtenerse la
relajación agradable o la sensación posterior de estar en forma...”.
Quizás una de las explicaciones para el deseo de saltar de los
paracaidistas sea el placer suministrado por la actividad:
– El placer para mí, es todo! (Ricardo)
La “emoción” que el paracaidismo despertada es algo impresionante. Sea la emoción derivada del primer salto, de recibir el
título de paracaidista o de controlar su propia caída, no importa,
ella es fuerte y destacable.
Según Sillani (1998, p. 87), “emoción es definida como reacción
global, intensa y breve del organismo a una situación inesperada, acompañada de un estado efectivo de tonalidad penosa o
agradable...”.
– Cara, mi corazón golpea más fuerte, cada salto es un
salto, una nueva emoción, una cosa medio loca, entiende.
(Joilson)
El “ocio”, quinta categoría con mayor puntuación, fue entendido
por la amplia mayoría de los entrevistados como la huida del trabajo. Assis (2003, p. 206) defiende la idea de que el ocio no puede
ser visto como una antítesis al trabajo. Ella cita en su texto, que:
El ocio aparece como un refugio en esta difícil pasaje del
primitivismo a la cultura, o del mundo infantil para el mundo
adulto. En otras palabras, el ocio despunta como una posibilidad de perpetuación del universo infantil y fantasioso,
próximo al paraíso, sin reglas o normas. Un universo aparentemente marcado por la ausencia del interdicto.
Gráfico 1 – Categorías seleccionadas por el personal civil
– El paracaidismo es aventura del inicio al fin, desde el
momento en que usted recibe un paracaídas, que sabe allá
Dios quien dobló, y salta en el infinito sin saber se abre o
no. Quiere aventura mayor que esa mi hermano! (Ivan)
La “adrenalina”, muy cerca al sentido de aventura, fue elegida
por gran parte de los entrevistados civiles. Se resalta, sin embargo, dentro que se habló a respeto del lenguaje propio de los
paracaidistas,
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141
Relacionado al deporte, Tubino (2001) observa que el número de
practicantes de los deportes que provocan contactos de mucha
significación entre el hombre y la Naturaleza, reconocidos muchas
veces como alternativos, es creciente, sin sin embargo vincularse
a los tradicionales sistemas deportivos existentes.
Aunque un número grande de entrevistados haya visto el paracaidismo como modalidad deportiva, muchos no pueden praticá-lo,
sobre todo por el elevado coste:
– Encarar el Paracaidismo, como deporte es todo lo que
yo quiero, sólo que falta pasta. (Charles).
La “libertad”, que muchos practicantes de deportes de aventura
buscan, es bastante expresiva en el paracaidismo. El habla de
los paracaidistas civiles, queda bien claro este intenso deseo de
volar para la libertad:
– Me gusta sentirme libre, sin estar preso a nada, nada me
segura, nada me prende, nada me para a no ser el paracaídas, pero sólo cuando yo quisiere. (Carlos A.)
El “desafío” queda constatado en el deporte, a través de varios
ejemplos que la actividad ofrece. En varias oportunidades, se
observan artistas saltando, generalmente practicando el salto
doble, en programas de televisión. Cuando cuestionados sobre
el porqué del salto, generalmente la respuesta se refiere a unas
ganas de desafiar a sí mismo, desafiar el propio miedo. En otras
oportunidades, se observan los paracaidistas expertos desafiando
alturas, saltos de edificios (Base Jump) y otros tantos ejemplos
que justifican el espíritu disteis paracaidistas.
La conquista es vista por los paracaidistas como el “sabor de
victoria”. Es algo que hace el paracaidista buscar siempre más.
Conquistar campeonatos, por ejemplo, es una gran victoria.
– Yo sólo paro de saltar cuando conquistar un campeonato
mundial, y mira que falta mucho! Pero acontecerse, sólo
paro cuando atravesar el Océano Atlántico. (Thiago)
Audacia, que puede ser confundida con osadía, sin duda es una
característica destacable del paracaidista. Luis comenta, al tener
elegido esta categoría como la primera de entre todas las otras,
que ella es esencial para que usted rompa la rutina:
– “Si usted no fuere audaz, ¿como es que va a salir de
avión? Es mucho mejor aterrizar, ¿no es? (Luis)
Resultado del cuestionario militar
Las diez categorías seleccionadas por el personal militar fueron
las siguientes, conforme el gráfico 2:
Gráfico 2 – Categorías seleccionadas por el personal militar
Análisis de las respuestas militares
La “confianza”, categoría más elegida y con mayor puntuación
de entre las treinta propuestas, representa para los militares
mayor característica de los paracaidistas. Cuando se refieren
a la confianza, están abordando varias cuestiones del tipo: “el
paracaidista necesita ser confiado en sí mismo”, “creer en sus
equipamientos y en lo que es capaz de hacer con ellos”.
Costa (2000, p.93) afirma que: “en la ansia de vivir, el individuo
se auto-impone la necesidad de dar valor a su presencia en el
mundo. Insatisfecho, él se orienta para lazeres en que ignora el
peligro, pero en los cuales sobrestima sus capacidades y búsqueda superarlas” , se refiriendo al riesgo; sin embargo, ¿cómo
saber hasta que punto se puede correr riesgos sin tener la debida
confianza en el material, en la técnica y en sí mismo?
– Cuando enseñamos a saltar libre, una de las frases más
habladas por el equipo de instrucción es sin duda, “ confíen
en el equipo de instrucción, en las técnicas enseñadas y en
el equipamiento!”. (Fábio, instructor de tacón).
La “coraje” de todas las virtudes, es sin duda la más universalmente admirada. Hecho raro, el prestigio que disfruta
parece no depender ni de las sociedades, ni de las épocas,
y casi nada de los individuos. En toda parte la cobardía
es despreciada; en toda parte la bravura es estimada. Las
formas pueden variar, claro, así como los contenidos: cada
civilización tiene sus miedos, cada civilización suyas corajes.
Pero lo que no varía, o casi no varía, es que el coraje, como
capacidad de superar el miedo, vale más que la cobardía.
El coraje es la virtud de los héroes; y ¿quién no admira los
héroes? (SPONVILLE,1999)
El discurso de los paracaidistas militares, la superación del miedo
es muchas veces citada. El coraje, para estos hombres, va desde la
presentación de los voluntarios para hacer el curso, hasta la hora de
saltar en local totalmente desconocido, con varios equipamientos
presos a su cuerpo. Un aspecto bastante hablado es, sin duda, la
tradición de coraje que los paracaidistas traen en su historia, desde
la 2ª Guerra Mundial hasta recientes conflictos en Irak (local donde
habían sido realizados saltos por la noche en territorio enemigo).
Según Dantas (1977), en su libro intitulado El manual del Paracaidista, coraje es la fuerza moral que sustenta el hombre en las
adversidades y en las privaciones.
La “adrenalina”, como en el caso de los paracaidistas civiles,
además de estar muy cerca de la idea de aventura, forma parte
también del hablar de los paracaidistas militares.
– Nuestra adrenalina es igual al de los paisanos, sea a la
hora del salto para demostraciones, sea en el salto para el
cumplimiento de las misiones. Está claro que ese último
es mucho peor! (Kenzo)
La “audacia” es un trazo destacable de la tropa paracaidista. Muchos entrevistados concuerdan que el militar demuestra audacia
al intentar hacer el curso y “encarar” el periodo de práctica. Las
palabras de Hellen Keller son fuertes:
– ¿Por qué nos contentamos con vivir trastejando, cuando sentimos el deseo de volar?
En este caso, se vuelve obvio que la falta de audacia lleva a la
acomodación de procedimientos, y es exactamente esto que los
paracaidistas no quieren para sí.
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El paracaidista es un audaz en todo, en la manera de ser,
pensar y actuar, la gente no se contenta en quedar el resto
de la vida sin saltar de avión! (Vinícius)
El “control”, quinta categoría más puntuada por los militares,
fue defendida como un trazo destacable disteis paracaidistas.
El control de sí mismo en diversas situaciones es imprescindible,
sea en los momentos fáciles o difíciles.
– El paracaidista debe tener total control de toda la situación. Él no puede quedar nervioso y perder el control a la
hora que llegar la puerta de avión, y decidir que no quiere
más saltar porque quedó descontrolado emocionalmente,
es misión, eso no puede existir! (Anderson)
La “asignatura” en la actividad del paracaidismo es incontestable
en medio militar, según los entrevistados. Nada puede ser hecho
sin entrenamiento previo, sin aprobación o autorización de algún
militar calificado para tal.
– La asignatura de procedimientos es la más importante.
Atentar para la altura de comando del paracaídas, aterrizar
en locales pre-determinados, no infringir reglas de seguridad y tener asignatura intelectual son componentes básicos
para el saltador. (Eduardo)
La “concentración”, según Feijó (1998, p.132), “es la capacidad
de seleccionar estímulos, bloqueando el impacto de aquellos que
no importan, limitando la atención sobre aquellos que interesan
o son útiles”. Para concentrarse, entonces, el atleta necesita
tener un conocimiento adecuado de sí mismo, de su deporte,
de su ambiente, consciente también, del significado estratégico
de cada detalle.
Los paracaidistas creen mucho en esta concentración, considerando-a un aspecto muy importante, tanto que uno de los
procedimientos previstos antes del salto es lo de mentalizar todo
lo que será desarrollado tras la salida de la aeronave.
– Concentrar mucho para errar poco (Jorge)
La “conquista”, a la semejanza de los paracaidistas civiles, es
encarada como el “sabor de victoria”. La victoria en tornarse
uno paracaidista y poder compartir del mismo local de trabajo,
usando los mismos símbolos que pocos en el Ejército pueden, es
una verdadera conquista para estos militares.
– Para nosotros paracaidistas, no existe conquista sin la
lucha, sin el sufrimiento, y eso hace con que la satisfacción en alcanzarla sea mucho mayor. Nuestro curso no es
para quienquiera, y eso ya es una gran conquista para mí.
(Marcio)
Costa (2000) comenta que, bajo la visión ontológica, de la
antropología filosófica, la aventura se presenta como inherente
la naturaleza humana, siendo identificable en todas las culturas
y épocas.
Comparación entre civiles y militares
Del estudio comparativo entre civiles y militares cuatro categorías
habían sido elegidas, en común acuerdo entre estos grupos, como
indica el Gráfico 3:
Al analizar estas cuatro categorías, se puede llegar a algunas
percepciones: los paracaidistas militares y civiles, quizás por
pertenezcan a una misma sociedad que se puede llamar de “radical”, poseen uno hablar típico. La adrenalina, que se firmó en
la lengua portuguesa no sólo como una sustancia química, pero
también como una palabra que indica la presencia de emociones
fuertes, o todavía, como fue definida en el cuestionario, “el me
gusta la aventura radical”, fue a que más aproximó los dos grupos
habían sido estudiados en esta investigación.
La conquista, categoría que presentó un mayor equilibrio entre
los civiles y militares no es encarada de manera igual por los
grupos. Los militares ven en el hecho de volverse uno paracaidista
un gran motivo de orgullo personal, sea en el salto enganchado
o en el salto libre. El habla de los militares, una de sus mayores victorias fue el hecho de tengan se tornado paracaidistas,
conquistando el derecho del uso del “brevet”, de la boina y del
“boot marrón”. Asocian, también, la idea del sabor de victoria
con mejoras de la performance, como los civiles, y en ese punto
parecen concordar.
El paracaidista civil no ve así, pues entiende que, saltar de un
avión, hasta mismo un perro lo hace. La verdadera conquista,
para ellos, está en superarse en las actividades del salto, consiguiendo dibujar nuevas figuras o movimientos difíciles.
La aventura fue, de entre las diez categorías elegidas, la más
puntuada para los civiles, y la de menor puntuación, para los
militares. Tal hecho puede ser explicado llevándose en consideración su entendimiento por parte de los grupos. De la parte de los
militares, la aventura fue entendida como una forma de “placer
arriesgado” y, según ellos, la mayor parte del salto de paracaídas
es una aventura, pero ni siempre una aventura animada, muchas veces la misión queda arriba, en el grado de importancia.
Todos concuerdan, por lo tanto, que el paracaidista militar es un
aventurero en búsqueda de emociones. De la parte de los civiles,
fue entendido que la aventura de saltar las tira del estrés del día
a día y de la rutina pesado de trabajo. Buscan la aventura de
Gráfico 3 – Categorías comunes a los civiles y militares
La “combatividad”, según el diccionario Aurélio, es la tendencia
de quien no se recusa al combate. Puede ser añadido también,
el hecho de no recusarse al salto o a la misión. El militar paracaidista es un fiel cumplidor de este precepto.
– El paracaidista es un guerrero alado, si él recusarse a
combatir ¿quién es que va a tener condiciones? (Cláudio)
La ultima categoría elegida por los militares paracaidistas, sin
embargo no menos importante, fue la “aventura”.
El paracaidista es un aventurero nato, pero el paracaidismo
militar no es sólo aventura con placer, pero sí mucha misión y, a
las veces, mucha dificultad. (Gilson)
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saltar como forma de alcanzar el inalcanzable. Bachelard (1994),
apud Costa (2000), cita que “el hombre que se dispone a eso, la
transformar imposibles en posibles, realiza aventuras”.
La “audacia”, última categoría común a los dos grupos investigados, también es entendida de forma diferente por los grupos.
La diferencia existe en el hecho de que el militar paracaidista
ostenta la tradición de ser audaz en todas las actividades que
desempeña en su rutina, y no sólo en el salto. El civil, quizás no
sea visado en su trabajo como audaz, pero seguro revela esa
característica al saltar.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Conclusiones
Esta investigación fue concluida llevándose en consideración,
sobre todo, la exención de una posible afectividad que podría
influenciá-la, más adelante de una busca bastante profundizada
y rigurosa que ofreciese medios para extraer una compatibilidad
deseable entre el objeto de la investigación y los caminos metodológicos recorridos.
Con respecto al origen y a los pioneros del paracaidismo, queda claro a través de la historia, que el paracaidismo surgió con
finalidades distintas. Fue criado, inicialmente, para salvar vidas
de pilotos; posteriormente, fue utilizado como arma de guerra; y,
finalmente, se volvió una modalidad deportiva. Es, también, a lo
largo de esa historia que surgieron mitos y leyendas a respeto de
los paracaidistas militares los cuales permanecen “vivos” hasta
los días actuales.
Se puede concluir que las características del paracaidista militar
son las siguientes: confianza en los procedimientos y en sí mismo,
coraje, autocontrol en situaciones diversas, asignatura, concentración, me gusta el combate, me gusta la aventura, audacia y me
gusta conquista de retos. Los paracaidistas civiles son inclinados
al placer que la actividad les ofrece, como la emoción, el ocio, el
deporte, el desafío, la sensación de libertad, además del espíritu
aventurero, la audacia y lo sabor de conquista. Aunque hayan
concordado en cuatro categorías: adrenalina, aventura, conquista
y audacia, ellas significan conceptos y prioridades diferentes para
los dos grupos.
Las diferencias entre los paracaidistas civiles y militares aparecen
con más claridad, cuando se aborda el objetivo del salto. El
militar se prepara para el salto con la finalidad de la guerra y el
civil con la finalidad del ocio.
Los militares son más tradicionales, cultuam la historia de sus antepasados y perciben el paracaidismo con finalidades distintas del
civil, pues el salto es sólo una manera más de llegar al campo de
batalla. Cultuam símbolos, cantan canciones, repiten oraciones y
creen que Son Miguel Arcanjo es su patrono. Valorizan el deporte
y no descuidan de su forma física, al contrario, se preocupan
mucho con ella! Apoyan el rigor implementado para la formación
de uno militar paracaidista, creyendo que la misión no acaba en
el salto, al contrario, es ahí que ella se inicia.
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Los paracaidistas civiles parecen encarar la modalidad del paracaidismo de una forma diferente, pues cultivan sobremanera
el aspecto lúdico. Son aventureros y audaces. Contribuyen para
divulgación del deporte y de practicantes de ocasión. No perciben
la formación como lo más importante, pero sí la secuencia en
las actividades de tacón.
Recomendaciones
Sería interesante que las Fuerza Armadas observasen el perfil de
los militares paracaidistas, para que pudiesen con eso, mejorar
la selección de los integrantes de las tropas paracaidistas, valorizando, además de la forma física, las características que habían
sido levantadas en este estudio.
Un intercambio mayor entre los paracaidistas civiles y militares
debería ser estimulado para que un grupo pudiese pasar experiencias para el otro, ya que los militares participan de competiciones mundiales en algunas modalidades y los civiles en otras,
y ese intercambio sólo vendría a contribuir al perfeccionamiento
del nivel técnico.
Un estudio más profundizado sobre el imaginario social de los
paracaidistas militares seguro irá a obtener un retorno científico
y cultural significativo.
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