CUADRANTEPHI No. 24 Enero - junio de 2012, Bogotá, Colombia El Observador Universal y La Cultura de Lo Instantáneo Sebastián Arias León Carrera de Filosofía Pontificia Universidad Javeriana Bogotá, Colombia elpelaosinoficio@hotmail.com La globalización está saturada en sentido sistémico desde los responsables de la salida al espacio abierto se ven obligados a admitir que todas las iniciativas están sujetas al principio de acción recíproca y que la mayoría de las ofensivas se retrotraen a la fuente tras un cierto tipo de asimilación […]. Responde hoy un malestar difuso por la estructura hipercomunicativa del sistema del mundo: una sensación justificada, pensamos, puesto que lo que se celebra hoy como bondades de la telecomunicación lo experimentan innumerables personas como una consecución sospechosa, con cuya ayuda nos podemos hacer tan desgraciados mutuamente desde lejos, como antes sólo estaba reservado a los vecinos directos. Cuando se niega la dignidad de las distancias, la Tierra, junto con sus éxtasis locales, se encoje en un cuasi-nada. (Sloterdijk, 2007:28) Al borde del límite siempre ha sido un concepto obsoleto para la humanidad, nuestro momento actual, el de los no límites, el de la sociedad de consumo y el mundo de las tecnologías de la información, sólo nos pone de manifiesto lo efímero de la existencia humana. Porque precisamente en un mundo inundando por medios electrónicos y piezas tecnológicas rondando entre las manos de los individuos, es el lugar común donde se da 1 CUADRANTEPHI No. 24 Enero - junio de 2012, Bogotá, Colombia encuentro lo instantáneo con lo inmediato y lo perecedero. Es precisamente éste el asunto de lo temporal lo que nos mueve gran parte de nuestras vidas como animales de razón a dejar una huella para la posteridad y buscar inscribir nuestro nombre en la historia universal del ser humano. Pero lo efímero en este siglo se confunde con lo inmediato del proceder humano, nuestra persistente sed de tecnificación de procesos y perfeccionamiento de las tecnologías amables con el entorno, nos han convertido con el pasar de los años en seres predecibles con un enorme déficit de accionar o de constitución de praxis. Nos pensamos entonces como los individuos masa, de forma no alineada, y a su vez cada uno de estos individuos constituido dentro de su propio Universo, tanto físico como virtual. Agentes inertes que ven pasar su realidad por una pantalla de dos dimensiones, y desde la cual acceden al Universo mundo del acontecimiento concreto. El cambio al interior de las sociedades de la información es tan veloz que desactualizarse es un fenómeno común al interior del mundo de los individuos masa. Suena demasiado mordaz hablar en contra de las tecnologías y los puentes invisibles de comunicación que generan las redes sociales y el Internet a través de sus polifacéticas formas de aparecer en el mundo de lo post-técnica. Pero no es sencillo hacer una adecuada defensa tanto de la tecnología como de los medios masivos de consumo, por más libre que sean los contenidos distribuidos en la web, siempre existe un director o un ente regulador que afina los hilos invisibles de las telecomunicaciones. Detrás de un mar de conocimiento se esconden terceros que buscan un lucro o un impacto mediático para lograr su objetivo. Siempre debemos distinguir entre medios masivos de consumo y Opiniones verdaderas, en donde prima la objetividad y se vela por la constitución de un verdadero criterio. Los medios masivos y las tecnologías de la información siguen siendo medios o puentes del conocimiento más no el conocimiento verdadero de facto. Una de las grandes dificultades hoy día es la asimilación de la información, con infinitas fuentes de consumo, es difícil distinguir entre lo objetivo y lo que se nos arroja al universo del Internet, que finalmente en su gran mayoría es conocimiento consumo más no la verdad 2 CUADRANTEPHI No. 24 Enero - junio de 2012, Bogotá, Colombia de lo concreto. Es una sociedad de la hiperinformación precisamente porque cuenta con todos los datos, de todos los temas, de todos los universos a la mano, sin siquiera tener la posibilidad de encontrar un criterio para diferenciar entre fuentes confiables y panfletos o discursos proselitistas. El conocimiento no puede ser simplemente un dato de la inmediatez que se nos muestra y después se olvida, porque otro de mayor relevancia le restó importancia, todo el conocimiento humano es valioso pero sobre todo útil. El mar del conocimiento al interior del Internet es siempre un universo en construcción, un rompecabezas que no cuenta aún con una ficha ultima, entonces es necesario un desprendimiento del mundo de las tecnologías de la información para lograr una adecuada asimilación del conocimiento consumo. Es frágil intentar construir un modelo de sujeto sobre la base del Internet y las redes sociales; este mecanismo, el de las redes y el Internet, es sólo una herramienta para un sujeto de este siglo, son el medio bajo el cual se desenvuelve cualquier sujeto que haga parte de este entorno de la era de la posttécnica. A consecuencia de ello no podemos educar ni formar personas bajo el amparo de un mar de incertidumbres que son tan solo una pieza del conjunto de la sociedad globalizada y el pensamiento unificado. La mejor definición de sujeto en esta era de la post-técnica es el de individuo masa, un término de uso frecuente en los postulados de Sloterdijk, posiblemente esto sea lo que mejor se adecue al modelo de sujeto constituido por las tecnologías de la información. Pues nos muestra cómo estas “tecnologías” logran alienar al sujeto sin retrotraerlo de su esfera personal, es decir las necesidades de un sujeto son todas cubiertas desde su realidad subjetiva inmediata, y a su vez distribuyen sus puntos de concentración, entre redes sociales, tiempo compartido, videoconferencias, publicaciones de blog, compartir archivos y música y por supuesto la actualización o redefinición de sus dispositivos móviles. Esto con el objetivo de hacer valida la máxima de los pensadores, hacer del ser humano un ser extrañado en el mundo y un completo desconocido para el otro. Los Tecnócratas reclamarán su lugar en esta discusión, pero no puedo reflejar simplemente un argumento metafísico para oficiar como defensor de la buena fe y el progreso de las sociedades de las telecomunicaciones. Ese universo disímil que hemos 3 CUADRANTEPHI No. 24 Enero - junio de 2012, Bogotá, Colombia creado para reemplazar el mundo real sólo es otro tipo de mundo suprasensible, que embiste como una bestia salvaje y que tiene vida propia, pues recientemente y con estudios se ha demostrado que el Internet y las redes sociales tienen actitud propia que se denomina procesamiento algorítmico, no es que piensen de una forma propia como un ser o una entidad, simplemente a partir de un procesamiento de los diversos datos que el individuo registra y la forma como se comporta en estos medios, el mismo procesamiento lógico de la máquina y de las redes, logra identificar los gustos y los futuras necesidades o movimientos de su o sus usuarios. Nuestra propia realidad suprasensible cobra vida y se hace a las riendas de nuestros deseos y pasiones, a pesar de optimizar procesos y simplificar papeleos, este tipo de avances no mejoran nuestras habilidades intelectuales ni de discernimiento, sólo las condicionan a una respuesta determinada. Lo masivo y de consumo inmediato no puede ser un indicador de progreso, pero vale la pena mostrar el amplio margen de acción e impacto que ha logrado el Internet, tanto que transformó por completo hábitos y tendencias sociales. Desde un perfil establecido en una red social hasta los breves mensajes de 140 caracteres, muestran una sociedad en constante cambio que no se detiene, ese resquebrajamiento que se ofrece en multiplicidad de opciones es síntoma de una sociedad de Post-técnica que ha reemplazado los grandes relatos por instantáneos momentos de lucidez. Pero en general los campos de acción han redefinido tanto gustos como formas de ver el mundo, entre la perspectiva de escuchar música puesta en un servidor por terceros o por una compañía monopolizante, hasta el hecho mismo de querer imprimir un diario digital que pueda estar disponible en línea para la totalidad del mundo. Pero suele ser esta mimesis de mundo suprasensible, un efectivo atractivo para reemplazar en su totalidad el mundo real, tal es el caso de Second Life o de los Juegos tipo RPG, que consumen días, meses y años de tiempo real para ser completados. Habbo es otro tipo red social completamente interactivo que usa avatares para ofrecer un concepto completamente atractivo y que atrapa casi de forma inmediata. Estéticamente el espectáculo que ofrece el Internet y las redes sociales es simplemente insuperable, además de que genera un impacto de tiempo real, logra captar millones al 4 CUADRANTEPHI No. 24 Enero - junio de 2012, Bogotá, Colombia mismo tiempo en un solo lugar. Esto lo podríamos denominar como el fenómeno de las sociedades masivas en la red, actuando de forma masiva dentro de su propia esfera individual. Nos encontramos en una era de la post-técnica, porque hemos reemplazado la técnica humana por la técnica misma de lograr configurar una realidad completamente unificada, entre sistemas económicos, redes globales de comunicación y datos. La totalidad de ese estado de cosas digital desemboca en el observador global, un ser que contempla la unidad en lo múltiple pero no cuenta con suficientes herramientas para una adecuada asimilación del momento, porque es precisamente eso lo que se trata de captar, el momento que sólo está activo por unos cuantos espacios de tiempo. Es Instantáneo porque el mundo se acostumbra a vivir el presente y olvidar el mañana que ya no existe. Sólo hemos logrado un esbozo primigenio de la situación actual del individuo y su relación con el mundo digital. Debe sonar un poco sobrecogedor el diagnostico de si realmente se puede construir una realidad en torno al mundo de las redes sociales y el Internet. Esto sólo es un preliminar de lo que realmente podemos determinar de un asunto tan totalizador y unitario como el Internet. El asunto de cómo se puede rediseñar las interpretaciones o adecuados usos de las herramientas tecnológicas es una labor que se encuentra en construcción todos los días, evidentemente nos encontramos en un momento donde gran parte de las movilizaciones y revoluciones en el mundo se han logrado gracias al aprovechamiento de este tipo de herramientas. Pero el mundo y la vida son sólo un momento, entonces realmente cuenta más un instante vivido que uno pensado, pero vivir en pensamientos es lo que realmente nos define como seres de razón, a pesar de todas las transformaciones sociales y culturales la tarea sigue siendo la de aprender a pensar. Bibliografía Sloterdijk, Peter. (2007). “En el mundo interior del Capital” en Para una teoría filosófica de la globalización. Págs. 28 – 31 y ss. Biblioteca de Ensayo Siruela. Madrid. 5