( fundació fòrum ambiental la ecoetiqueta ecológica europea Silvia Ayuso. Randa Group Artículo publicado en “Món empresarial” - Noviembre de 2002 Las etiquetas ecológicas son sistemas voluntarios de calificación ambiental que identifican y certifican de forma oficial que ciertos productos o servicios, dentro de una categoría determinada, tienen una menor afección sobre el medio ambiente. La Unión Europea creó, en el año 1992, el sistema voluntario de la etiqueta ecológica para garantizar a los consumidores la corrección ambiental tanto de los productos como de los servicios, con independencia de las afirmaciones publicitarias. La etiqueta ecológica representa haber cumplido unos criterios ambientales selectivos, transparentes y con bastante información científica para que los consumidores y usuarios puedan escoger aquellos productos o servicios que la incorporen. Además, las ecoetiquetas también incorporan criterios de aptitud para el uso, lo que garantiza que su calidad sea igual o superior a la competencia. Con su elección, los consumidores se aseguran escoger las opciones que reducen los efectos ambientales adversos y contribuyen al uso eficaz de los recursos. La etiqueta ecológica es un distintivo oficial, válida en todos los estados miembros de la Unión Europea que en Catalunya otorga la Generalitat a través de su organismo competente, la Dirección General de Calidad Ambiental del Departamento de Medio Ambiente. Simbólicamente, la ecoetiqueta se representa con el dibujo de una flor, en la que los pétalos tienen forma de estrellas, representando a los 12 países miembros de la UE. La ecoetiqueta la puede solicitar de manera voluntaria cualquier fabricante, importador y prestador de servicios. También la pueden solicitar los comerciantes y detallistas siempre que los productos que pongan en el mercado tengan su propio nombre comercial. Es necesario que el fabricante lo considere estrategia de marketing o apueste por diferenciar su producto o servicio con la ecoetiqueta, y que el consumidor conozca su significado y el valor añadido al producto o servicio. De igual manera, los distribuidores pueden actuar como factor clave en el desarrollo de la ecoetiqueta, por dos caminos diferentes: promocionando los productos en sus estanterías y ecoetiquetando sus productos de marca blanca. Actualmente, en Catalunya existen un total de 9 empresas que han obtenido la etiqueta ecológica de la Unión Europea por alguno de sus productos. Pero, sólo se han certificado en 3 de las 19 categorías de producto definidas hasta al momento. Estas son: pinturas y barnices (57 referencias), productos textiles (26 referencias) y papel para copia (2 referencias). Pero, aún son muy pocos los consumidores que conocen la existencia de las ecoetiquetas. La encuesta realizada por la consultoría ambiental Randa Group, S.A. a 1000 consumidores españoles dentro del proyecto europeo de investigación “Developing Effective and Efficient Product Information Schemes” (DEEP), muestra que sólo un 1,2% de los encuestados conocen el símbolo de la ecoetiqueta comunitaria. Con el objetivo de aumentar de forma significativa la presencia de los productos con ecoetiqueta europea en Catalunya, la consultoría ambiental Randa Group, S.A. está llevando a cabo el proyecto “Desarrollo e implementación de una estrategia de marketing y promoción de la ecoetiqueta en Catalunya” mediante un contrato con la Comisión Europea, Dirección General de Medio Ambiente (B4-3040/2001/324181/MAR). Esta consultora pretende crear y, sobretodo, llevar a la práctica una política de marketing a largo plazo que esté adaptada a las condiciones específicas del territorio catalán.