Caminos del MERCOSUR 2010 Presidenta de la Nación Dra. Cristina Fernández de Kirchner Jefe de Gabinete de Ministros Dr. Juan Manuel Abal Medina Ministro de Educación Prof. Alberto E. Sileoni Secretario de Educación Lic. Jaime Perczyk Secretario de Políticas Universitarias Dr. Alberto Dibbern Jefe de Gabinete A. S Pablo Urquiza Subsecretaría de Coordinación Administrativa Arq. Daniel Iglesias Directora Nacional de Cooperación Internacional Lic. Juliana Burton INTRODUCCIÓN “Pensar la educación es prepararnos para el futuro, acopiar posibilidades para las nuevas formas de ser, estar y convivir. Es, necesariamente, revisar nuestras raíces y fortalecer nuestra identidad. Es, en definitiva, contribuir al surgimiento de una América Latina preparada para ofrecer y recibir en el diálogo de las culturas”. MERCOSUR 2000: Metas y desafíos para el Sector Educativo “Caminos del MERCOSUR”, es un Proyecto diseñado en el marco del Sector Educativo del MERCOSUR, propuesto por la delegación Argentina y aprobado en la V Reunión de la Comisión Regional Coordinadora de Educación Básica y en la XLIV Reunión del Comité Coordinador Regional (CCR), del 12 y 13 de marzo de 2003 Cada uno de los Ministerios de Educación del MERCOSUR, junto con la Organización de los Estados Iberoamericanos (OEI), quien colabora en la difusión y organización de esta iniciativa, lanzan la edición del concurso de cada año el día 26 de marzo, fecha declarada en el calendario escolar como “Día del MERCOSUR” en conmemoración de la firma del Tratado de Asunción, origen del MERCOSUR. La primera instancia de este Programa fue organizada, en el año 2003, por esta Dirección Nacional de Cooperación Internacional, del Ministerio de Educación. Desde ese año se viene desarrollando ininterrumpidamente el Concurso histórico – literario Caminos del MERCOSUR, cuyo objetivo es estimular y fortalecer la identidad regional de los jóvenes estudiantes de 16 y 17 años, en la que los participantes además de ampliar sus conocimientos, podrán vivenciar y apreciar el valor la integración regional, respetando la diversidad cultural. En 2010 Argentina tuvo la responsabilidad de organizar el evento. En concordancia con los festejos de los doscientos años de la Revolución de Mayo, el tema de la convocatoria fue “Bicentenario en la gesta emancipadora”; para ello, los participantes debieron optar por los siguientes subtemas: • Manuel Belgrano: Ideas sociales y compromiso revolucionario. • Las mujeres y la independencia de las Provincias Unidas en Sud-América (Juana Azurduy, Macacha Güemes, las mujeres de Cochabamba –“Heroínas de la Coronilla”-) • La participación de los pueblos originarios en las campañas libertadoras Manuel Belgrano es uno de los próceres que condensan en su persona el ideario de aquellos revolucionarios: por su formación, capacidad e iniciativa su legado permanece vigente y se consideró que el Concurso sería una buena oportunidad para que su figura sea conocida por los jóvenes de la Región; asimismo, se trató de dar visibilidad a las mujeres y los pueblos originarios, que si también formaron parte de la gesta emancipadora y poco se sabe de ellos. De los trabajos recibidos en los Ministerios de Educación de los países participantes, cada uno seleccionó seis. Es así que llegaron a nuestro país treinta jóvenes provenientes de Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay, que junto con los seis estudiantes argentinos de Mendoza, Misiones, Santa Cruz, Salta, Santiago del Estero y la Provincia de Buenos Aires, realizaron una visita a la Casa Rosada, sede del Poder Ejecutivo Nacional y un recorrido por el casco histórico de la Ciudad de Buenos Aires, para luego trasladarse a la provincia de Jujuy, en donde pudieron apreciar los valores naturales y culturales del lugar en donde se desarrollaron importantes sucesos de la lucha por la independencia. En la organización del itinerario recorrido, se contó con la valiosa colaboración del Ministerio de Educación de la Provincia de Jujuy, encabezado por la Prof. Liliana Josefina Domínguez y su equipo, a quienes agradecemos las atenciones dispensadas. Felicitamos a cada uno de los finalistas por el empeño puesto en la realización de los trabajos, a los docentes que los alentaron y guiaron en la realización y a las instituciones educativas que apoyaron la iniciativa. A continuación, se publican los trabajos seleccionados en el año 2010, como reconocimiento a la tarea realizada por los alumnos de la Región y con el objetivo de dar mayor difusión a este Concurso que tiende firmes lazos entre nuestros jóvenes, y es un aporte más del Sector Educativo del MERCOSUR para que las nuevas generaciones puedan culminar la construcción de la Unión latinoamericana soñada por nuestros próceres. Lic. Juliana Burton Directora Nacional de Cooperación Internacional Ministerio de Educación de la Nación Argentina Manuel Belgrano: Ideas sociales y compromiso revolucionario Juan Emanuel Argañarás Argentina Introducción A lo largo de la historia sucedieron hechos que marcaron el rumbo de la Argentina que conocemos en la actualidad. Esta realidad estuvo marcada por la acción de hombres decididos y valientes que se tomaron de forma personal, pero siempre en pos del bien común, el proceso de revolución como el camino hacia la libertad y la construcción de la nación; uno de estos hombres fue Manuel Belgrano. En sus palabras expresa: “Nadie me separará de los principios que adopté cuando me decidí a buscar la libertad de la patria amada, y como éste solo es mi objeto, no las gloria, no los honores, no los empleos, no los intereses, estoy cierto de que seré constante en seguirlos”. Hoy en día, estos valores han perdido la importancia dentro de una sociedad marcada por la indiferencia y el individualismo. Es imprescindible romper con dichos flagelos, y que cada uno de nosotros tengamos la decisión de llegar a alcanzar nuestros propósitos, movilizados por un espíritu crítico, consciente y transformador de la realidad para enaltecer la obra de quienes iniciaron la construcción de nuestra patria y cuyo legado está en nuestras manos. La presente monografía explora el pensamiento y los ideales de Don Manuel Belgrano, como promotor de la libertad Americana y Argentina, plasmados en su biografía, obras, acciones, documentos y textos personales. Se indaga acerca de su posición frente a la responsabilidad de la construcción de un Estado; el rol desempeñado por la educación como instrumento de promoción y distribución de la cultura, para alcanzar una sociedad justa e igualitaria, encaminada por la senda de la prosperidad y el desarrollo; además, las directrices para la organización económica del país y los principios en que se fundaba como así también la influencia ideológica de la que se nutrió. Si bien los textos escolares lo recuerdan como el Creador de la Bandera nacional y uno de los más importantes jefes del Ejército revolucionario, a Manuel Belgrano le cabe también una fundamental tarea en el establecimiento de las primeras instituciones educativas y culturales del país, y en esto radica la importancia del legado de las ideas sociales hoy en día. Ideas sociales Comenzando por el principio a saber, el General nació en el seno de una acomodada familia porteña (la del comerciante italiano Domingo Belgrano y Pérez (o Peri) y la criolla María Josefa González Casero) y se educó en el Real Colegio de San Carlos con la mejor formación que podía encontrarse en la colonia en el último cuarto del siglo XVIII, aprendiendo junto con las primeras letras "la gramática latina, filosofía y algo de teología". Partió luego a España, a estudiar leyes en Salamanca, Valladolid y Madrid, para recibirse de abogado, finalmente, en la cancillería de Valladolid. Orienta entonces su prédica a dotar al Virreinato de instituciones educativas (propone la creación de una escuela de matemáticas, y otras de diseño y de comercio), pero chocará con la desidia de las autoridades virreinales. No obstante, por su iniciativa nace en 1799 la Escuela de Geometría, Arquitectura, Perspectiva y Dibujo, que se fusionará poco después con la recién creada Escuela de Náutica. En el Reglamento, que redacta, Belgrano le da derechos igualitarios de educación a los indios (tanto como a criollos y españoles) y ordena cuatro vacantes para huérfanos, mostrando así las altas consideraciones sociales que se gestaron en Europa. En un discurso de 1802, Belgrano presentará sus ideas acerca de lo que esperaba de la Escuela: "...sabéis que de aquí van a salir individuos útiles a todo el Estado y en particular a estas provincias; sabéis que ya tenéis de quién echar mano para que conduzcan vuestros buques; sabéis que con los principios que en ella se enseña tendréis militares excelentes; y sabéis también que hallaréis jóvenes que con los principios que en ella adquieren, como acostumbrados al cálculo y a la meditación, serán excelentes profesores en todas las ciencias y artes a que se apliquen, porque llevando en su mano la llave maestra de todas las ciencias y artes, las matemática, presentarán al universo, desde el uno hasta el otro polo, el cuño inmortal de vuestro celo patrio." Publica también la obra Principios de la ciencia económica-política, y se encarga de difundir en Buenos Aires los trabajos acerca del liberalismo económico de Adam Smith. Además se dedica con mucha atención al periodismo colaborando con el Telégrafo Mercantil (entre 1801 y 1802). Belgrano residió ocho años en España, donde pudo imbuirse en las nuevas ideas. En 1724, Ustariz publica su Teoría y práctica de comercio y marina, donde manifiesta que la grandeza de los pueblos reside en el comercio, sin perjuicio de la liberación de gravámenes y del fomento de la industria. España está de acuerdo en que se ocupe en este aspecto de sus colonias americanas, poblándolas, repartiendo sus tierras, fomentando sus cultivos y tomando decisiones necesarias para su desarrollo. Estos pensamientos surgían de escritores españoles como Campomanes y Jovellanos, sin olvidarnos de Adam Smith. Este tipo de corriente considera a la tierra como primera fuente de riqueza, que es preciso trabajarla, o sea explotarla, aumentando su productividad, dándola en propiedad a quienes se dediquen a tales tareas. Entre los españoles, Jovellanos fue el más capacitado, cuyo "Informe sobre la ley agraria" constituyó su más importante contribución. Por entonces decía: enseñanza primaria aun para labradores, técnicas en el laboreo, enajenación de baldíos por venta o enfiteusis, etcétera. "La riqueza nace de la cultura, luego, las naciones más instruidas, y por consiguiente ricas, gozarán de los beneficios de la paz." Pero la riqueza intelectual de Belgrano se formó en importantes pensadores como Rousseau, Condillac, Locke, Genovesi, Turgot, D'Alembert y otros, cuyas ideas luego se vieron reflejadas en sus escritos en el Consulado y en sus artículos en el "Correo de Comercio". Se puede decir que Belgrano como iniciador de los estudios económicos en el Río de la Plata y publicista de variada y profunda cultura que imprimió fundamentos a la emancipación, fue además un divulgador consciente y sistemático de la filosofía económica y política del siglo XVIII, con un pragmatismo, de criterio flexible, aplicando las teorías o escuelas de los distintos autores de acuerdo con la materia por tratar, los momentos por encarar, los dineros disponibles y el medio en que debía operar, en la defensa de lo inherente a una libertad económica orientada al bienestar de sus conciudadanos." El Correo de Comercio En 1809 Belgrano aceptó la creación de un nuevo periódico (auspiciado por el entonces virrey Cisneros), que apareció a fines de enero de 1810 con el nombre de Correo de Comercio de Buenos Aires. Su objetivo principal era popularizar los sanos principios de la economía política y ocuparse de materias científicas y literarias, impulsando a través de esas publicaciones la Revolución, según afirmaría en su autobiografía. También exponía acerca de los beneficios económicos que resultaría de una difusión de la educación. De los siete primeros artículos publicados en el semanario, tres de ellos correspondieron al tema educación, siendo éstos los más extensos. En el primero, titulado "Educación" expresaba: “No es fácil corresponder en que ha podido consistir, ni en que consista el fundamento más sólido, la base, digámoslo así, y el origen verdadero de la felicidad pública, cual es la educación, se halla en un estado tan miserable, que aun en las mismas capitales se resienten a su falta. (...) A la falta de estos establecimientos debemos atribuir los horrores que observamos”. Llegaba a ligar el amor al trabajo y las virtudes básicas de todo ciudadano con la educación primaria. Según su pensamiento, ninguna sociedad podía progresar si sus habitantes no tenían aprecio por el trabajo y esfuerzo y eran virtuosos: ¿Cómo se quiere que los hombres tengan amor al trabajo, que las costumbres sean arregladas, que haya copia de ciudadanos honrados, que las virtudes ahuyenten los vicios y que el gobierno reciba el fruto de sus cuidados, si no hay enseñanza, y si la ignorancia va pasando de generación en generación con mayores y más grandes aumentos? Más adelante, en el mismo Correo de Comercio, volvía a insistir en la formación de valores: ¿Quién le ha dicho que esas virtudes son la justicia, la verdad, la buena fe, la decencia, la beneficencia, el espíritu, y que estas cualidades son tan necesarias al hombre como la razón de la que preceden. Ruboricémonos, pero digámoslo: nadie. (...) Nuestros lectores tal vez se fastidiarán con que le hablemos tanto de escuelas; pero que se convenzan de que existen en un país nuevo que necesita echar los fundamentos de su prosperidad perpetua y que aquéllos para ser sólidos y permanentes es preciso que se compongan de las virtudes morales y sociales, que sólo pueden imprimirse bien, presentando a la juventud buenos ejemplos. Otorgaba a la educación primaria más importancia que a la universitaria, fundamentando su afirmación de la siguiente manera: Séanos lícito aventurar la proposición de que es más necesaria la atención de todas las autoridades, de todos los magistrados, y de todos los ciudadanos para los establecimientos de la enseñanza de niñas, que para fundar una Universidad. (...) Con la Universidad, habría aprendido algo de verdad nuestra juventud en medio de la jerga escolástica, y se habría aumentado el número de nuestros doctores, pero ¿equivale esto a lo que importa la enseñanza de las que mañana han de ser madres? (...) Es indudable que no, y para prueba, no hay más que trasladarse a donde hay Universidades, y no hay quién enseñe al bello sexo. Debido a la importancia que asignaba a la educación es que se ocupaba que ésta fuese impartida del modo que él consideraba el más adecuado y eficiente. Limitaba los castigos corporales, que representaban un hábito muy arraigado en la sociedad. Eliminaba, en gran medida, la humillación pública del alumno incorregible, por considerar que era contraproducente e innecesaria. Manuel Belgrano y la educación Manuel Belgrano fue uno de los próceres argentinos que más énfasis puso en impulsar la educación. Durante su estadía en España había elaborado un plan de acción, que en total abarcaba seis puntos. Uno de ellos estaba dedicado a la educación: Antiguamente se halló en la política la máxima siguiente: ´Es bueno, mantener la gran masa del pueblo en la ignorancia, idea que aunque no fuera indigna del hombre, se opone directamente al verdadero interés del Soberano. (...) Ése es uno de los objetivos más importantes del gobierno. Vasallos dichosos y Soberano poderoso, son los resultados del estado actual de las escuelas públicas, y de la educación lugareña, que después de mil ensayos, se han establecido en varias provincias de Alemania, Suecia, Inglaterra, etc. (...) Por este medio se logran en la gran masa de una nación costumbres sanas. Hay que observar que era el secretario del Consulado, un cuerpo colegiado y, por lo tanto, con gran habilidad tendía a lograr lo posible, considerando la época, las circunstancias y los intereses que se debatían y entrelazaban. Mas tarde con la revolución de mayo de 1810 podrá impulsar la obra de acuerdo a esas ideas formadas en "el espíritu de la época". Es así como lo vemos sostener que la agricultura es la única industria considerada productiva, "constituyendo los fabricantes y los artesanos una clase estéril". Durante su gestión estuvo casi en permanente conflicto con los vocales del Consulado, todos ellos grandes comerciantes con intereses en el comercio monopólico con Cádiz. Año tras año presentó informes con propuestas influenciadas por el librecambismo que, en general, fueron rechazadas por los vocales. Belgrano sostenía por entonces que "El comerciante debe tener libertad para comprar donde más le acomode, y es natural que lo haga donde se le proporcione el género más barato para poder reportar más utilidad". De todos modos obtuvo algunos logros importantes, como la fundación de la Escuela de Náutica y la Academia de Geometría y Dibujo. Belgrano, a través del Consulado, también abogó por la creación de la Escuela de Comercio y la de Arquitectura y Perspectiva. Su motivación para fundar la escuela de comercio radicaba en que consideraba que la formación era necesaria para que los comerciantes obraran en función del crecimiento de la patria. Con las escuelas de Dibujo y Náutica se pretenderá fomentar en los jóvenes el ejercicio de una profesión honrosa y lucrativa. Estas últimas funcionaban en un mismo local, contiguo al consulado, de forma que Belgrano pudiese observar e inspeccionar su desenvolvimiento. Estas escuelas operaron durante tres años, y fueron cerradas en 1803 por orden de la Corona española — en particular del ministro Manuel Godoy — que las consideraba un lujo innecesario para una colonia. Belgrano consideró que el impulso educativo "no podía menos que disgustar a los que fundaban su interés en la ignorancia y el abatimiento de sus naturales En este espacio quiero marcar que, además de las imágenes que nos llegan del prócer, existía en Belgrano un fuerte convencimiento acerca del poder transformador de la educación, basado en principios iluministas y fuertemente marcados por los ideales de la Revolución Francesa. No se trata de un prócer que cree en la "pureza y bondad" intrínsecas de educar, sino que entiende que el avance en el conocimiento hará avanzar a la sociedad. Para Belgrano, la educación era entendida, básicamente, como un fundamental y necesario motor de progreso de la sociedad. Además, en varias de sus Memorias Consulares, Belgrano dedica espacio a reflexionar sobre la importancia de la educación, dejando en claro su postura. En la primera de ellas sostiene: "Uno de los principales medios que deben aceptar a este fin, son las escuelas gratuitas, donde pudiesen los infelices, [es decir, los pobres] mandar a sus hijos sin tener que pagar cosa alguna por su instrucción: allí se les podría dictar buenas máximas e inspirarles amor al trabajo, pues un pueblo donde no reine éste, decae el comercio y toma lugar la miseria; las artes que producen abundancia que las multiplica después en recompensa, decaen; y todo, en una palabra, desaparece, cuando se abandona la industria, porque se cree no es de utilidad alguna". Cabe destacar el interés de Belgrano por la educación de las mujeres. En esta línea, en sus primeras Memorias Consulares señala: "Igualmente se deben poner escuelas gratuitas para las niñas, donde se les enseñase doctrina cristiana, a leer, escribir, coser, bordar, etc., y principalmente, inspirándoles amor al trabajo, para separarlas de la ociosidad." En todo el ideario educativo de Belgrano está presente la posibilidad de educar a los más desfavorecidos y darles de ese modo una posibilidad de progresar socialmente. En este sentido señala en su Memoria Consular de 1802: "sin enseñanza no hay adelantamientos" y "he clamado siempre por la escuela (...) como medio para la prosperidad del Estado”. Desde una posición que algunos definirían como liberal, Belgrano, experto en economía política, estaba convencido de que era necesario formar a las nuevas generaciones en diversas artes y ciencias y, además, que esta formación debía ser gratuita. Los esfuerzos de Belgrano en materia educativa se plasmaron en dos instituciones que corrieron diversa suerte: La Escuela de Náutica, que continúa abierta en la actualidad, creada bajo la premisa de que no podía darse el desarrollo económico sin una flota mercante autónoma. La Academia de Geometría y Dibujo, que tuvo corta vida y que Belgrano defendía señalando que: "Los buenos principios los adquirirá el artista en una escuela de dibujo que, sin duda es el alma de las artes. Algunos creen inútil este conocimiento; pero es tan necesario que todo menestral lo necesita para perfeccionarse en su oficio; el carpintero, cantero, bordador, sastre, herrero y hasta los zapateros no podrán cortar unos zapatos sin el ajuste y perfección de vida, si no saben dibujar. Aún se extienden a más que [a] los artistas, los beneficios que resultan de una escuela de dibujo; sin este conocimiento los filósofos principiantes, no entenderán los Planisferios de las esferas celeste y terrestre, ni los armilares que se ponen para [estudiar] el movimiento de la tierra, y [de] más planetas en sus respectivos sistemas: y por consiguiente, los dueños de las máquinas eléctricas y neumáticas y otros muchos que se ponen ya en sus libros". Se ocupaba también de señalar cómo debía ser la selección de los maestros, y de describir cuáles debían ser sus características principales. Los alumnos sólo tenían una oportunidad de recibir educación, y ésta debía ser la mejor disponible. La opinión de Belgrano al respecto era contundente, tanto cuando se refiere a la educación primaria como a la técnica o terciaria: • En relación a la educación primaria: "Si por desgracia una sola de éstas [las maestras] hay que sea de malas costumbres, ¿es dable hacer el cálculo de los males que pueden resultar a la sociedad? Porque desengañémonos, el ejemplo... Si, el ejemplo es el maestro más sabio para la formación de las buenas costumbres." • En relación a la educación terciaria o técnica:"Una especulación mal hecha puede traer consecuencias muy funestas al comercio de una provincia y de toda una nación. (...) ¡Qué de perjuicios para un país agricultor y comerciante! ¿Y qué modo de prevenirlos? La extensión de conocimientos, (...) que ni el labrador ni el comerciante ni el artista ignoren lo que les corresponde..." En su primera memoria alertaba a sus oyentes sobre el tema de la elección de los maestros, cuando decía que "debía confiarse el cuidado de las escuelas gratuitas a aquellos hombres y mujeres que, por oposición, hubiesen mostrado su habilidad y cuya conducta fuese de público y notorio irreprensible". Las Escuelas de la Patria y los maestros Por sus victorias de Tucumán y Salta, la Asamblea de 1813 le otorgó como premio 40 mil pesos fuertes (equivalentes a casi 80 kilos de oro). Belgrano respondió que prefería ser un buen hijo de la patria más que un padre de la misma, y expresó que el dinero de tal premio fuera dedicado para la construcción de escuelas públicas estatales y gratuitas en las ciudades de Tarija (en la actual Bolivia), Jujuy, San Miguel de Tucumán y Santiago del Estero. En el texto de su donación proponía el mecanismo de elección de los maestros, que debía estar basado en el mérito. Por ejemplo, en cuanto a la educación primaria escribió que la provisión de escuelas se hará por oposición, y pasaba a establecer con minuciosidad el procedimiento que la regularía. En el artículo siguiente, el cuarto, establece que “Cada tres años podrá el ayuntamiento abrir nueva oposición, y convocar opositores si lo tuviese por convencimiento o hubiese proporción de mejorar el Maestro”. El que ha servido o desempeñado la Escuela en igualdad de mérito y circunstancias deberá ser preferido. Si se refirió en numerosas oportunidades a estas virtudes, sin duda era porque lo consideraba importante. Insistía Belgrano en los valores en numerosos ocasiones: Basta con que los maestros sean virtuosos y puedan con su ejemplo dar lecciones prácticas a la niñez y juventud y dirigirlos por el camino de la Santa Religión y del honor y pudiendo enseñar a leer bien, poco importa que su forma de letra no sea de lo mejor; suficiente con que se pueda entender. Porque desengañémonos, el ejemplo... Si, el ejemplo es el maestro más sabio para la formación de las buenas costumbres. Nada valen teorías, en vano las maestras explicarán y harán comprender a sus discípulas lo que es justicia, verdad, buena fe, etc., y todas las virtudes, si en la práctica las desmiente, ésta arrollará todo lo bueno, y será la conducta en los días ulteriores de la depravación. Buscó elevar la condición del maestro mediante el pago de sueldos dignos. Para asegurar la financiación de la educación, propuso siempre la creación de fondos, para que los institutos tuviesen asegurados su financiamiento a perpetuidad. Belgrano exponía que el progreso económico depende del conocimiento técnico y de los valores de la sociedad. Haciendo referencia a los males que traería el que los habitantes no estaban suficientemente capacitados, preguntaba: "¿Qué modo de prevenirlos? La extensión de conocimientos, la ilustración general, el que las luces se difundan por todos, que todos se instruyan, que adquieran ideas, que ni el labrador ni el comerciante ni el artista ignoren lo que les corresponde, que unos y otros procuren no apegarse tan íntimamente a los pensamientos de sus antepasados, los cuales sólo deben adoptarse cuando convienen y cuando no, desecharlos y abandonarlos: que lo fue útil en otro tiempo, hoy es perjudicial; las costumbres varían; los usos igualmente; y todo, de tiempo en tiempo, cambia, sin que en esto haya más misterio, que el de la vicisitud de las cosas humanas." Su iniciativa ayudó a la publicación del primer periódico de Buenos Aires, el Telégrafo Mercantil, dirigido por Francisco Cabello y Mesa, y en el que colaboraban Belgrano y Manuel José de Lavardén. Dejó de aparecer en octubre de 1802, tras tirar unos doscientos números, después de varios problemas con las autoridades coloniales, que veían con malos ojos las tímidas críticas allí deslizadas y el estilo desenfadado de las sátiras y críticas de costumbres. También colaboró en el Semanario de Agricultura, Comercio e Industria, dirigido por Hipólito Vieytes. Allí explicaba sus ideas económicas: promover la industria para exportar lo superfluo, previa manufacturación; importar materias primas para manufacturarlas; no importar lo que pudiese producir en el país ni mercaderías de lujo; importar solamente mercaderías imprescindibles; reexportar mercaderías extranjeras; y poseer una marina mercante. Ya por entonces Belgrano se veía afectado por una enfermedad contraída en Europa, descripta en el certificado médico como "un vicio sifilítico". Dicha enfermedad lo obligó a tomar licencias de varios meses en el Consulado, y motivó también que recomendara a la Corte a su primo Juan José Castelli, de principios similares, como posible reemplazante. La oposición de los comerciantes españoles demoró la designación de Castelli hasta 1796. Es en esa época que redactó los Reglamentos para las provincias de Misiones, cuerpo legislativo que es precedente para la Constitución Nacional argentina. Reglamento para los pueblos de misiones: A consecuencia de la proclama que expedí para hacer saber a los naturales de los pueblos de misiones que venia a restituirlos a sus derechos de libertad, propiedad y seguridad de que por tantas generaciones han estado privados, sirviendo únicamente para las rapiñas de los que han gobernado... He venido en determinar los siguientes artículos: 1°) Todos los naturales de misiones son libres, goz aran de sus propiedades y podrán disponer de ellas como mejor les acomode; como no sea atentando contra sus semejantes; 2°) Desde hoy les liberto del tributo; a todos trei nta pueblos y sus respectivas jurisdicciones, les exceptuó de todo impuesto por el espacio de diez años; 3°) Concedo un comercio franco y libre de todas sus producciones, incluso la del tabaco, con el resto de las provincias del Rio de la Plata; 4°) Respecto a haberse declarado en todo iguales a los españoles que hemos tenido la gloria de nacer en el suelo de América, les habilito para todos los empleos civiles, políticos, militares y eclesiásticos... 5°) (Los pueblos) se delinearan a los vientos norde ste, sudoeste, noroeste, sudeste, formando cuadras de a 100 varas de largo y 20 de ancho... 6°) A los naturales se les darán gratuitamente las p ropiedades de las suertes de tierra que se les señalen, que en el pueblo será de un tercio de cuadras, y en la campaña según las leguas y calidad de tierras que hubiere cada pueblo,... 7°) A los españoles se les venderá la suerte la suer te que desearen en el pueblo después de acomodados los naturales, e igualmente en la campaña por precios moderados para formar un fondo con que atender a los objetos que adelante se dirá,... 8°) El fondo que se ha de formar... no ha de tener o tro objeto que el establecimiento de escuelas de primeras letras, artes y oficios, y se han de administrar sus productos... por los cabildos de los respectivos pueblos... 9°) En atención a que nada se haría con repartir tie rras a los naturales, si no se les hacían anticipaciones así de instrumentos para la agricultura, como de ganados para el fomento de las crías, ocurriré a la excelentísima junta, para que abra una suscripción, para el primer objeto,... 10°) Aunque no es mi ánimo desterrar el idioma nativ o de estos pueblos; pero como es preciso que sea fácil nuestra comunicación,... prevengo, que la mayor parte de los cabildos se han de componer de individuos que hablen el castellano,... 11°) En cada capital del departamento, se ha de reun ir un individuo de cada pueblo que lo compone, con todos los poderes para elegir un diputado que haya de asistir al congreso nacional, bien entendido que... será mantenido por la real hacienda, en atención al miserable estado en que se hallan los pueblos... 12°) Para que todas estas disposiciones tengan todo su efecto,... y lleguen a noticia de todos los pueblos, mando que saquen copias para dirigir al gobernador don tomas de rocamora, y a todos los cabildos para que se publiquen en el primer día festivo, explicándose por los padres curas, antes del ofertorio,... Campamento de Tacuarí, 30 de diciembre de 1810 Las ideas económicas Muchos creen que si se concede entera libertad para la extracción de frutos el país quedara pobre y miserable, y todo vendrá a ser caro; y se presenta a su imaginación un cuadro lastimoso... otros, que avizorados contra todo lo nuevo, ponen en movimiento algunos resortes, que desgracian los proyectos mas útiles: en contraposición, me contento con citar las máximas 16 y 25 del celebre economista Quesnay, que dicen: primera: que no se impida el comercio exterior de los frutos, porque según es la extracción, así es la reproducción y aumento de la agricultura. Segunda: que se de entera liberad al comercio, pues la policía del comercio interior y exterior, mas segura, exacta y provechosa a la Nación y al Estado, consiste en la plena libertad de la concurrencia. Manuel Belgrano Memoria del 14 de junio de 1798. Citada por RICARDO CAILLET BOIS, op. Cit., pág. 34 Compromiso revolucionario: Belgrano no tenía, como él mismo lo ha dicho, grandes conocimientos militares, pero poseía un juicio recto, una honradez a toda prueba, un patriotismo puro y desinteresado, el más exquisito amor al orden, un entusiasmo decidido por la disciplina y un valor moral que jamás se ha desmentido. En 1806 se producen las primeras invasiones inglesas. El acontecimiento despertó todo el celo patriótico del joven abogado, quién encontró en la tarea de promover la independencia su más alto cometido. Sin haber vestido nunca un uniforme, ni haber recibido instrucción, se hizo militar. Para sus lamentos, porque halló ejércitos acobardados, sin orden ni disciplina, mal armados y peor acostumbrados. Y entre los intelectuales criollos, encontró malos patriotas, que no sabían si subordinar el país al rey de España (entonces ocupada por Napoleón) o al de Inglaterra. Sin embargo, los sucesos europeos alentaron la revolución y Belgrano protagonizará el movimiento independentista. Más tarde, recordará los sucesos de mayo de 1810 con estas palabras: "Se vencieron al fin todas las dificultades, que más presentaban el estado de mis paisanos que otra cosa, y aunque no siguió la cosa por el rumbo que me había propuesto, apareció una junta, de la que yo era vocal, sin saber cómo ni por dónde, en que no tuve poco sentimiento." De inmediato, se lo convoca para dirigir una campaña militar al Paraguay, a fin de propagar la revolución. Y a pesar de su escasa experiencia militar, se las arregla para instituir la subordinación y el orden en las tropas, haciendo del respeto por la población civil la máxima premisa de la expedición. Ya todos reconocen en él las virtudes comunes a muchos patriotas, como la honestidad, la probidad y la austeridad, combinadas con una particular moderación, que para muchos era signo de debilidad de carácter. Por más, su voz, marcadamente aflautada, y su poca firmeza en los ademanes y gestos, lo hicieron aparecer como impropio de la milicia. Estas percepciones ayudaran, por ejemplo, a que sea reemplazado del mando del Ejército del Norte, que debió a entregar a San Martín en 1814, luego de los desastres de Vilcapugio y Ayohuma. Para entonces, con una suerte desigual, Belgrano había comandado el ejército durante un año, demostrando su vocación patriótica de la manera más cruda, y grandes cualidades como jefe. Ya había sucedido también el episodio de creación de la Bandera nacional, jurada por primera vez a orillas del río Paraná, en Rosario, en febrero de 1812. A comienzos de 1815, Belgrano abandona completamente sus funciones militares y es enviado a Europa, junto a Rivadavia y Sarratea, en funciones diplomáticas. Conoce allí al célebre naturalista Amado Bonpland, y lo convence de venir a América, a estudiar la naturaleza y el paisaje de estas regiones. También se destacará como diplomático, desarrollando una importante labor propagandística, cuya finalidad es que la revolución sea reconocida en el Viejo Continente. Regresa al país en julio de 1816 y viaja a Tucumán para participar de los sucesos independentistas, donde tiene un alto protagonismo. Tres días antes de la declaración de la Independencia (9 de julio de 1816), declama ante los congresistas e insta a declarar cuanto antes la independencia. Propone una idea que contaba con el apoyo de San Martín: la consagración de una monarquía: "Ya nuestros padres del congreso han resuelto revivir y reivindicar la sangre de nuestros Incas para que nos gobierne. Yo, yo mismo he oído a los padres de nuestra patria reunidos, hablar y resolver rebosando de alegría, que pondrían de nuestro rey a los hijos de nuestros Incas." No obstante, la propuesta monárquica de Belgrano no prospera, dado que habían corrido rumores de que incluía la cesión de la corona a la casa de Portugal. Más tarde, Belgrano seguirá desarrollando una ardua actividad político-diplomática: por ejemplo, será el encargado de firmar el Pacto de San Lorenzo con Estanislao López que, en 1919, pondrá fin a las disputas entre Buenos Aires y el litoral. Además, volverá a encabezar el Ejército del Norte, en el cual, gracias a la fama que gozaba entonces como jefe y patriota, será vivamente admirado por la tropa. Aquejado por una grave enfermedad (hidropesía) que lo minó durante más de cuatro años, y todavía en su plenitud, el prócer murió en Buenos Aires el 20 de junio de 1820, empobrecido y lejos de su familia (si bien no se casó, de sus amores con una joven tucumana nació su única hija, Manuela Mónica, que fuera enviada por su pedido a Buenos Aires, para instruirse y establecerse). Culminaba así una vida dedicada a la libertad de la Patria y a su crecimiento cultural y económico. En este sentido, se destaca de Belgrano que fue el promotor de la enseñanza obligatoria que el virrey Cisneros decretó en 1810. Se destaca también su labor como periodista (después de su actuación en el Telégrafo Mercantil, creó el Correo de Comercio, que se publicó entre 1810 y 1811, y en el cual se promovió la mejora de la producción, la industria y el comercio); y como fundador de la Escuela de Matemáticas (en 1810, costeada por el Consulado), y de la Academia de Matemáticas del Tucumán, que en 1812 instauró para la educación de los cadetes del ejército. Una de sus últimas frases fue de esperanza, a pesar de los malos momentos que pasaban tanto él como su patria: ...sólo me consuela el convencimiento en que estoy, de quien siendo nuestra revolución obra de Dios, él es quien la ha de llevar hasta su fin, manifestándonos que toda nuestra gratitud la debemos convertir a su Divina Majestad y de ningún modo a hombre alguno. Conclusión Belgrano fue un destacado representante de la población criolla de Buenos Aires, y uno de los principales impulsores de la emancipación del país -que luego se llamaría Argentina- respecto a España. Junto a otros patriotas impulsó la destitución del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros, lo cual produjo la Revolución de Mayo; integró la Primera Junta que dirigió el gobierno desde entonces. Se le encargó la dirección del Ejército del Norte, y aunque fue derrotado por las fuerzas realistas, sentó las bases de la declaración de independencia paraguaya de 1811. En 1812 creó la bandera de Argentina en las cercanías de la ciudad de Rosario, y dirigió el éxodo jujeño, tras lo cual se impuso a los españoles en las batallas de Tucumán y Salta. Formó parte del Congreso de Tucumán y propuso la idea de establecer una monarquía constitucional dirigida por un noble Inca, pero no logró apoyo. Para Belgrano su pragmatismo revolucionario implicaba la búsqueda de un camino americano, y en esto también se diferenciaba de la “inteligencia” porteña que vivía mirando a Europa. Hasta último momento mantuvo la fe revolucionaria en la suerte de la patria: “Tal vez mis buenos paisanos trabajarán en remediar sus desgracias”. Al evocar hoy la figura de Belgrano, este héroe tan puro y tan injustamente despreciado, deberíamos quizás hacer un examen de conciencia, ¿Seremos nosotros esos “buenos paisanos” en los que Belgrano depositaba sus últimas esperanzas? ¿Estaremos a la altura del legado Belgraniano? Bibliografía Gálvez, Lucía (1999). Historias de amor de la historia argentina. Grupo editorial Norma. ISBN 987-933408-6. Best, Félix: “Historia de las Guerras Argentinas“, Ed. Peuser, Bs. As., 1980. Bidondo, Emilio, La guerra de la independencia en el Alto Perú, Ed. Círculo Militar, Bs. As., 1979. Camogli, Pablo, Batallas por la libertad, Ed. Aguilar, Bs. As., 2005. Horowicz, Alejandro, El país que estalló, Ed. Sudamericana, Bs. As., 2004. López Rosas, José R., Entre la monarquía y la república. Memorial de la Patria, tomo III, Ed. La Bastilla, Bs. As., 1981. Mitre, Bartolomé, Historia de Belgrano y de la independencia argentina. Ed. Estrada, Bs. As., 1947. Núñez, M., Bustos, el caudillo olvidado, Cuadernos de revista Crisis, Bs. As., 1975. O’Donell, Pacho, El grito sagrado, Ed. Sudamericana, Bs. As., 1997. Paz, José María, Memorias póstumas. Ed. Emecé, Bs. As., 2000. Pezuela, Joaquín, Memoria de gobierno, Escuela de Estudios Hispano-Americanos, Sevilla, 1947. Ruiz Moreno, Isidoro J., Campañas militares argentinas, Tomo I, Ed. Emecé, Bs. As., 2004. Saavedra, Cornelio, Memoria autógrafa, Ed. Emecé, 1944. Scenna, Miguel Ángel, Las brevas maduras. Memorial de la Patria, tomo I, Ed. La Bastilla, Bs. As., 1984. Segreti, Carlos S. A., La aurora de la Independencia. Memorial de la Patria, tomo II, Ed. La Bastilla, Bs. As., 1980. Shumway, Nicolás, La invención de la Argentina, Ed. Emecé, Bs. As., 2005. Sierra, Vicente D., Historia de la Argentina, Ed. Garriga, Bs. As., 1973. Manuel Belgrano, mucho más que una bandera Florencia Borda Argentina “Mucho me falta para ser un verdadero padre de la Patria, 1 me contentaría con ser un buen hijo de ella” En este trabajo de investigación trataremos de demostrar que Manuel Belgrano, fue mucho más que el creador de la bandera que distingue a la República Argentina. Fue además un hombre comprometido con su patria, lo que lo convirtió en un baluarte del proceso revolucionario latinoamericano. Los objetivos de este trabajo serán los siguientes: 1. Mostrar que Manuel Belgrano, con su ingenio, pudo crear una bandera que, por un lado nos representara, pero que a su vez, no levantara sospechas en el ejército realista. 2. Demostrar que sus ideas revolucionarias fueron, tal vez, las más medidas y pacíficas. 3. Exponer que a pesar de no tener ninguna experiencia militar, decidió tomar el mando de un ejército, sin tener en cuenta los probables perjuicios hacia su persona. 4. Por último, manifestar que fue un ilustrado que se preocupó por aspectos de la sociedad que luego serían retomados por otras personalidades, dentro y fuera de la República Argentina. Para abordar este tema, recurriremos a una perspectiva teórica multidisciplinaria: histórica, económica, política y social; y para la obtención de datos nos basaremos en la información que las distintas fuentes nos provean. Las fuentes a utilizar son las siguientes: documentos de la época, libros de diferentes autores, sitios de Internet, revistas, programas de televisión, entrevistas con profesionales en el área de la historia y cualquier otra que pueda surgir en el momento de la realización del presente estudio. El trabajo de investigación constará de varias partes: 1. En primer lugar, veremos y presentaremos de manera breve la vida de Manuel Belgrano, lo que nos servirá para poder entender la personalidad y las ideas de nuestro héroe. 2. Una vez concluida esta breve reseña biográfica, nos centraremos en demarcar el momento histórico a nivel mundial (Europa, América del Norte y América Latina). Luego nos enfocaremos brevemente en los sucesos que ocurrían en el Virreinato del Río de La Plata. 3. Continuaremos nuestro trabajo intentando mostrar a Belgrano como a un hombre comprometido con su patria, viendo cómo llevó a cabo esto desde los distintos lugares en los que se desempeñó. 4. Concluiremos nuestro trabajo mostrando si la historia afirma o refuta nuestra postura. Con esta última parte del trabajo buscaremos que la figura de Manuel Belgrano pueda ser develada por completo, y poder entender así por qué un hombre común como él, fue uno de los grandes próceres de la historia en Latinoamérica y principalmente en la Argentina. Breve reseña biográfica 1 Pigna, Felipe “Los mitos de la historia argentina” 2005- Grupo Editorial Norma- Buenos Aires Pág. 343 Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano – tal su nombre completo- nace en 1770 en la ciudad de Buenos Aires. Es hijo de Josefa González y Domingo Belgrano Pérez. Realiza sus estudios en Buenos Aires en el “Real Colegio de San Carlos”, y a los 16 años es enviado a Europa por sus padres con el fin de realizar sus estudios universitarios en España, en la Universidad de Salamanca. Allí es donde tiene acceso a los llamados “libros prohibidos” cuando el papa Pío VI se lo autoriza debido sus antecedentes, lo cual lo acerca a autores tales como: Bayle, Monstesquieu, 2 Rousseau, Voltaire y “toda una pléyade de pensadores, filósofos y sociólogos” de donde recibe la influencia de la Ilustración Francesa y de la Ilustración Española. Una vez terminados sus estudios en la Universidad de Valladolid, recibe el diploma de Bachiller en Leyes, y luego se gradúa como abogado en la Cancillería de Valladolid. Posteriormente vuelve a Buenos Aires, en donde ocupará varios puestos importantes, en el Consulado, en el ámbito periodístico, en el político o en el militar. Participará también en la defensa de Buenos Aires, frente al avance inglés en 1806 y 1807; y en 1810 ocupará un lugar en el Cabildo Abierto que dará inicio a la gesta independentista; momento en el cual será designado vocal de la Junta Provisoria de Gobierno y, posteriormente, nombrado General. En 1812, creará la bandera que será enarbolada por primera vez a orillas del Río Paraná. Será un ilustrado de la época que se preocupará por su patria, y prueba de ello, será la donación de su sueldo para la construcción de escuelas; razón por la cual morirá en la pobreza en 1820. Belgrano será recordado por varias de las figuras que lucharon por la independencia, entre las que se encuentran: Juana Azurduy, Miguel de Güemes, José de San Martín, y posteriormente por Bartolomé Mitre –quien escribirá su biografía-; Domingo Faustino Sarmiento -que al igual que Belgrano verá a la educación como la fuente del progreso-; Juan Crisóstomo Lafinur, alumno de la Academia de Matemática -fundada por Belgrano en Tucumán- y muchos otros. Su nombre se perpetuará en diferentes lugares de la Argentina y de Latinoamérica. En Argentina, principalmente en el Norte, por haber organizado el Éxodo Jujeño, debido a su comunicación con Güemes y por haber sido quien combatió al Ejército Realista en esa zona. También estará presente en otros sitios por donde transitó, como San Isidro, Villa Luján o Morón, entre tantos. En Latinoamérica es reconocido en Perú por la valentía que mostró al ponerse al frente de un ejército, aún sin tener una vasta experiencia militar. Marco histórico Europa: Por los años en que Manuel Belgrano estudiaba en España, se desarrollaba la Revolución Francesa (1789), la cual alentada por el Iluminismo, llevaba a cabo uno de los movimientos más importantes del siglo XVIII, al intentar cambiar el sistema político reinante en Francia. Según la versión romántica de la misma, el “pueblo” se levantaba en armas, dando fin así al Absolutismo. Pero la revolución no fue importante por eso nada más, sino también porque consiguió que se dictara la “Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano”, la cual entre sus tantos artículos mencionaba básicamente la libertad, en todos o en la mayoría de los ámbitos que se pudieran en la época. La Revolución Francesa terminará con la llegada al poder de Napoleón Bonaparte en 1799. 2 Gimenez, Ovidio “Los conocimientos económicos y sociales de Manuel Belgrano” En: “Anales de la Academia Nacional de Ciencias Económicas” Vol. XLII – (1997) Sigma Pág. 408 Otro hecho a destacar, en relación a lo mencionado anteriormente, es que uno de los factores que también influenciaron a Belgrano fue La Ilustración, tanto la Francesa como la Española. Dado que Belgrano era un hombre muy católico, recibirá mayor influencia de la segunda. En el plano económico, Belgrano se veía atraído por las teorías fisiocráticas postuladas por Quesnay, quien sostenía que la fuente de riqueza provenía de la naturaleza. Otro autor que tuvo mucha influencia en su pensamiento fue Adam Smith, que dio categoría de ciencia a la economía, dando inicio a la futura era industrial. Unos de los hechos que más van a influir en los revolucionarios del Río de La Plata, son las Guerras Napoleónicas. Entre los reinos que peleaban estas guerras, el más importante es el Reino de España, el cual -al ser vencido- debe ceder su trono al hermano de Napoleón, José Bonaparte. Vale aclarar que en ese momento el rey de España, Fernando VII es encarcelado junto con su padre Carlos IV. Entonces, y atento a dicha situación, se crea la Junta de Sevilla, la cual una vez que es derrotada, pasará a denominarse el Consejo de Regencia de España e Indias. América del Norte: En 1776, en las colonias inglesas del Norte, se forma un movimiento revolucionario. Este comienza, en principio, por las medidas que el rey Jorge III de Inglaterra toma con respecto a las Trece Colonias (nombre que se le da al territorio que luego será conocido como Estados Unidos de América). En este proceso, sus referentes fueron George Washington, Thomas Jefferson y Benjamín Franklin, entre otros. América Latina: En las colonias españolas de América, comienzan a gestarse los movimientos libertadores, teniendo como protagonistas a diferentes personalidades que representarán a los diversos sectores de la sociedad. Ejemplos de estas diferencias se pueden ver principalmente en la Argentina y en México. Si bien los procesos revolucionarios en México comienzan con posterioridad a los desarrollados en el Virreinato del Río de La Plata, los utilizaremos para poder contrastarlos y poder ver cómo el ámbito social influía en cada lugar de las colonias americanas. El proceso revolucionario en México comienza también en 1810 con el hecho histórico conocido como el Grito de Dolores y culminará con la victoria del ejército mexicano y su entrada en la Ciudad de México. Esta revolución, al contrario de la revolución llevada a cabo en las provincias del Río de La Plata, estuvo dirigida por el campesinado, las poblaciones indígenas y por los parroquianos del cura Hidalgo de la ciudad de Guanajuato. En este movimiento se puede apreciar que la situación social no era la misma que se veía en el Río de La Plata. En México existían las formas de sometimiento indígena llamados “mita y encomienda” para el trabajo forzado. En el Río de la Plata, no se explotaba ningún metal precioso, por lo que estos sistemas no se hallaban implementados. Buenos Aires, por su parte, era la capital del Virreinato del Río de La Plata; y se veía afectada, por la escasez de productos y por el monopolio impuesto por España. Además la “burguesía” criolla, que en ese momento se encontraba fortalecida económicamente, esperaba su momento para poder acceder a algún cargo de poder. Revolución de Mayo en la Ciudad de Buenos Aires: Este proceso comienza en Mayo de 1810, luego de que llega desde España la noticia de que el rey Fernando VII ha sido derrocado por Napoleón Bonaparte. Los ilustrados que residían en Buenos Aires veían esto como una oportunidad de cuestionar la autoridad del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros. Entre las figuras más relevantes del proceso revolucionario podemos destacar a Cornelio Saavedra, Juan José Castelli, Mariano Moreno, los hermanos Rodríguez Peña y Manuel Belgrano. Manuel Belgrano: su figura Comenzaremos refiriéndonos a las formas en las que demostró tener un verdadero espíritu revolucionario. Belgrano, cuya profesión era la abogacía, comienza su carrera militar durante la primera invasión inglesa, tratando de ordenar y de formar las milicias, tarea que le fue muy difícil. Una vez terminados los ataques ingleses, Belgrano decide continuar con el estudio militar , pero concentrándose esta vez en el aprendizaje de técnicas de combate básicas. Entre 1806/7 y 1810, se opone al alzamiento de Martín de Alzaga contra el virrey Santiago de Liniers y su actividad se desarrolla en el plano periodístico, político y económico; para, luego de la Revolución de Mayo, ser nombrado Comandante de las Fuerzas destinadas a la Banda Oriental y General en Jefe de la Expedición Militar a los pueblos de la Banda Oriental. En esa ocasión, fundará los pueblos de Curuzú Cuatiá y Mandisoví. Podríamos considerar a la Campaña al Paraguay como uno de sus éxitos a pesar de la derrota militar, dado que se pueden resaltar su esfuerzo y su sacrificio. Por un lado, se puede apreciar la valentía de los casi mil hombres, frente a un ejército paraguayo de siete mil, que cruzaron el río Corrientes durante tres días para poder engañar al enemigo. También resaltar el esfuerzo en las recorridas que Belgrano les imponía, ya que éstas consistían en cuarenta kilómetros diarios. En la zona del Paraguay, aunque Belgrano es derrotado por el ejército del gobernador Velasco, logra llevar con éxito el mensaje de la revolución hecha en Bs. As, y consigue que las relaciones diplomáticas entre estos dos territorios sean positivas. Dentro de esta campaña se destacan las batallas de Campichuelo (ganada por el ejército patriota), Paraguarí, en la cual Belgrano es derrotado, y la batalla de Tacuarí donde también es derrotado y, por ende, se pierde definitivamente el control del Paraguay. Luego de los fracasos en la zona del Paraguay, Belgrano es designado como jefe del Ejército del Norte, para reemplazar a Juan Martín de Pueyrredón. Aquí, debido a la cercanía del ejército realista, impulsó el denominado Éxodo Jujeño, que consistió en transportar a los habitantes de la ciudad de Jujuy hacia el Oeste arrasando con todo lo que pudiera abastecer al enemigo. Belgrano fue el último en abandonar la ciudad, con órdenes de llegar hasta Córdoba, pero mostró su valor y convicción al desobedecer esta orden, y enfrentó al ejército realista, venciéndolo en Tucumán. Viendo la victoria obtenida por Belgrano, el Primer Triunvirato, que por motivos egoístas le había ordenado ir hacia Córdoba, queda disuelto y da lugar al surgimiento del Segundo Triunvirato, quien le brindará al ejército de Belgrano apoyo incondicional. La victoria que se obtuvo en el Norte se consolidará luego gracias a la victoria de la batalla de Salta. Siguiendo en el Norte, Belgrano continuó con la campaña libertadora por la zona de Bolivia, entrando triunfalmente en la ciudad de Potosí. Estando en dicha ciudad, contaba con el apoyo de los indígenas, que se encontraban bajo el mando de líderes de guerrilla de la zona. Sin embargo el líder de la resistencia, Joaquín de la Pezuela, derrota a Belgrano en dos oportunidades, la primera en la Batalla de Vilcapugio, y la segunda en la batalla de Ayohuma. Entre las causas de la derrota, se pueden mencionar, por un lado, la desventaja numérica y, por el otro, el factor sorpresa del ejército enemigo. Luego de la pérdida de estas dos batallas, Belgrano, en la posta de Yatasto, le deja el mando al General José de San Martín, quien dijo sobre Belgrano: “es de lo mejor que tenemos”. El compromiso de Belgrano con la patria iba más allá de estar dispuesto a dejar su vida en el campo de batalla con el único fin de verla a ésta totalmente libre: el dinero obtenido como premio de estas campañas fue donado para la construcción de escuelas. Otra forma que tuvo Belgrano de mostrar su compromiso desde el comienzo de su trayectoria pública fue por medio de las ideas que mostró a la hora de crear la bandera y de presentar su opinión en el Cabildo. En primer lugar tendremos en cuenta un plan presentado por los revolucionarios para no levantar sospechas mientras el proceso estaba en gestación: “La Máscara de Fernando VII”. En segundo lugar tendremos en cuenta el plan que Belgrano defendía, para poder encontrarle una salida pacífica a esta revolución, conocido como el “Carlotismo” Comenzaremos entonces con el primer punto de esta parte de la investigación. Si bien este fue un plan sostenido por muchos de los miembros de la Primera Junta y del proceso revolucionario, Belgrano la tuvo en cuenta para poder crear la bandera. Muchas veces escuchamos la versión romántica de la creación de la bandera. Según esta versión la inspiración de Belgrano para incluir el celeste y blanco en la bandera fue el cielo. Sin embargo, si vemos un poco más allá y hacemos un análisis histórico, la verdadera fuente de inspiración fueron los reyes de España. Si Belgrano buscaba la emancipación ¿cómo es posible esto? En primer lugar esto es posible ya que los revolucionarios debían mantener en secreto sus ánimos de desvincularse del reino español y, por otro lado, porque no podían -debido a lo mencionado anteriormente- declarar la independencia de manera abierta. Ahora bien, ¿qué relación hay entre Belgrano, la bandera y los reyes de España? La respuesta se halla en que la banda que los reyes de España utilizaban era de color celeste y blanca. Debido a que la Junta debía mantenerse en secreto hasta el momento en que se lo considerara oportuno, Belgrano decide seguir con el plan establecido y poner en una bandera, que representara al ejército patriota, los colores de estos reyes. De esta manera nadie sospecharía de las verdaderas intenciones que había tras esta insignia. Terminando con este punto, presentaremos la idea del Carlotismo. ¿Qué fue el Carlotismo? ¿Qué resultados tuvo? En primer lugar, empezaremos diciendo de donde proviene el nombre. Carlota Joaquina era la hermana del rey de España (Fernando VII) y la esposa del rey de Portugal (Juan VI de Portugal). La idea de este plan era traer a Carlota a la ciudad de Buenos Aires, no porque algunos de los miembros del Cabildo quisieran a una mujer en el poder, sino porque, de esta manera, mostrarían al rey Fernando VII que todavía le eran leales. Los resultados no fueron los esperados y Carlota se rehusó rotundamente a venir a esta ciudad. La causa por las que el plan fracasó fue -fundamentalmente- porque Carlota se dio cuenta de la estrategia de los revolucionarios. Para finalizar, vemos en Belgrano a un hombre que, si bien apoyó y tomó parte de las campañas revolucionarias, también buscaba las vías pacíficas de la emancipación. Belgrano y su compromiso con la sociedad La educación 3 “La educación y el conocimiento son la base de la libertad” En esta parte del trabajo, mostraremos que Belgrano no fue sólo un hombre de ideas y principios que estaba dispuesto a dar su vida por la libertad, sino que también era un hombre que se preocupó, principalmente por la educación. En las siguientes líneas se observa el pensamiento que Belgrano tenía sobre la idea de la educación: ´Es bueno, mantener la gran masa del pueblo en la ignorancia, idea que aunque no fuera indigna del hombre, se opone directamente al verdadero interés del Soberano. (...) Ése es uno de los objetivos más importantes del gobierno. Vasallos dichosos y Soberano poderoso, son los resultados del estado actual de las escuelas públicas, y de la educación lugareña, que después de mil ensayos, se han establecido en 3 http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/5853192/Efemerides_-Manuel-Belgrano_actualizado_.html varias provincias de Alemania, Suecia, Inglaterra, etc. (...) Por este medio se logran en la gran masa de 4 una nación costumbres sanas. Entendía que la educación era el factor básico para que la patria progresara y desde los tiempos del Consulado, apoyó la creación de las escuelas de Agricultura, de Dibujo, de Náutica, de Comercio y de Matemática. Fundamenta la necesidad de la primera diciendo que eran indispensables tres condiciones para mejorar la agricultura: querer, poder y saber. No sólo bastaba con querer la tierra, era imprescindible tener los conocimientos para poder lograr mejores rendimientos. En relación con la Escuela de Dibujo, afirma que sin ese saber, sería imposible comprender mapas o gráficos necesarios para el aprendizaje de otras ciencias. En cuanto a la Escuela de Náutica, nos menciona su importancia diciendo “sin cuios principios nadie pudiese ser patrón de lancha en este Río, y además hubiese Jóvenes de quien echar 5 mano para las embarcaciones que vienen de España caso de encontrarse sin piloto o pilotín” Aquí insiste además en la instalación de faros que asegurarán la navegación y con la creación de una compañía de seguros para la protección del comercio, lo cual se vinculaba con la creación de la Escuela de Comercio para que “los Jóvenes vayan a instruirse en la Aritmética, en el modo de llevar la cuenta y razón, y tener 6 los libros; en el cálculo y reglas de cambio; en las reglas de la navegación mercantil; de los seguros etc.” Respecto al estudio de las Matemáticas, en 1806, resalta su importancia debido a la aplicación de ésta en los instrumentos creados para mejorar la vida de las personas. Creía también en la igualdad de oportunidades por lo que quería una educación tanto para varones como para mujeres, pensando que una mujer sin educación no podía formar nuevos ciudadanos, libres y que fueran útiles para servirle a su patria. “La educación pública fue su gran pasión. Quería ver una escuela 7 en cada poblado, en cada villa, en cada ciudad, en cada rincón del país” Pedía escuelas gratuitas, que 8 dieran razón a la vida y transformaran al hombre “para inspirar amor al trabajo contra la ociosidad ”. Por ello es que donó el dinero proveniente del premio de sus campañas exitosas para la creación de cuatro escuelas en el Norte, en cuyo reglamento afirmaba “que deberá regir en la quatro Escuelas de Tarija, Jujuy; Tucumán y Santiago del estero que he resuelto dotar con los cuarenta mil pesos de premio que me señaló la Soberana Asamblea general constituyente, mientras que el Supremo Poder Executivo quien se remite pa. Su aprobación, se sirve con mejores luces enmendarlo y perfeccionarlo según estime 9 más conveniente al interés la educación de la Juventud de los Pueblos” Proponía la enseñanza primaria aun para los labradores, entendiendo que la riqueza de un país nacía de la cultura, y que “las naciones más instruidas y por consiguiente ricas, gozarán no sólo de los beneficios de la paz, sino del bienestar y la riqueza” 10 A pesar de ser un hombre muy religioso, Belgrano va a criticar a las iglesias y los hombres de éstas, porque nunca había hecho llegar el conocimiento a todos los hombres -recordemos que en esta época la Iglesia concentraba todo el conocimiento de la época. 4 http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/5853192/Efemerides_-Manuel-Belgrano_actualizado_.html 5 Belgrano, Manuel “Memoria Consular de 1796” Pág29 – vocabulario expresado en castellano antiguo 6 Op. Cit. Pág.28 y 29 - vocabulario expresado en castellano antiguo7 Gimenez, Ovidio “Los conocimientos económicos y Sociales de Manuel Belgrano” En: “Anales de la academia Nacional de Ciencias Económicas” Vol. XLII – (1997) Sigma Pág. 415 8 ibidem 9 Mandelli Humberto “Ls escuelas donadas por Belgrano y su Reglamento” Cuaderno N°2 Instituto Belgraniano Central de la republica Argentina Pág. 56 10 Gimenez, Ovidio “Los conocimientos económicos y Sociales de Manuel Belgrano” En: “Anales de la academia Nacional de Ciencias Económicas” Vol. XLII – (1997) Sigma Pág. 418 En su primer proyecto de enseñanza, además de pedir que pongan escuelas en cada uno de los lugares del territorio, pide que los jueces obliguen a los padres de los niños a mandarlos a la escuela: “… Obliguen los Jueces a los Padres, a que manden a sus hijos a la escuela, por todos los medios que la 11 prudencia es capaz de dictar.” El reformador económico Frente a la pobreza que veía en parte de la sociedad, Belgrano exponía lo siguiente: “He visto con dolor (…) una infinidad de hombres ociosos en quienes no se ve otra cosa que la miseria y desnudez; una infinidad de familias que sólo deben su subsistencia a la feracidad del país que está por todas partes 12 denotando la riqueza que esto encierra, esto es, la abundancia…” y para poder acabar con esta situación de pobreza y de miseria propone una solución: la entrega de tierras baldías para que las personas desposeídas pudieran trabajarlas. Con estos pensamientos en su época, se ganó el respeto y el odio de muchos colegas, debido a su “atrevimiento” de sugerir, una “reforma agraria” como la llamaba él, para poder otorgarle trabajo y dignidad 13 a los que “… casi se avergüenzan de presentarse a sus conciudadanos por su desnudez y miseria…” . El odio venía principalmente de algunos dueños de campo, ya que Belgrano, de alguna manera, los “obligaba” a poner sus tierras al servicio de los desposeídos: “… Y mucho más se les debería obligar a los que tienen sus tierras enteramente desocupadas, y están colindaras con nuestras poblaciones de 14 campaña, cuyos habitadores están rodeados de grandes propietarios…” Vale la pena recordar que Belgrano adhería al movimiento económico fisiócrata, por lo tanto veía en la tierra la forma de que la patria podía progresar, e inspirado en Gaspar Melchor de Jovellanos fue el primero en estas tierras que se refiere a la enfiteusis como forma para mejorar las condiciones de los 15 labradores, “aunque la posteridad le adjudica a Bernardino Rivadavia tal adecuada aplicación” . Sus conocimientos de la ciencia económica nos muestran a un hombre muy por encima de su tiempo, de la cual fue el primer propulsor en tierras de Hispanoamérica. El periodista Por medio de los periódicos, pudo defender la libertad de expresión, término que en la época de la Buenos Aires colonial no se tenía conocimiento a causa de las políticas censuradoras de los virreyes. Los periódicos que contaron con su colaboración fueron: • El Telégrafo Mercantil (1802) • El Correo de Comercio (1810) El primero de todos aparecía dos veces a la semana, si bien el contenido de este periódico no era estrictamente político, el virrey Del Pino -ofendido por una de las publicaciones que aparecían- decide clausurarlo. Sin perder las esperanzas de poder tener un medio de expresión, en 1810 Belgrano crea el Correo de Comercio. Desde este diario insistirá en el crecimiento económico desde la industrialización, pero nunca dejando de lado sus ideas fisiócratas. 11 Pigna, Felipe “Los mitos de la historia argentina” 2005- Grupo Editorial Norma- Buenos Aires Pág 347 Pigna, Felipe “Los mitos de la historia argentina” 2005- Grupo Editorial Norma- Buenos Aires Pág 351 13 Op.Cit 352 14 ibidem 15 Gimenez, Ovidio “Los conocimientos económicos y Sociales de Manuel Belgrano” En: “Anales de la academia Nacional de Ciencias Económicas” Vol. XLII – (1997) Sigma Pág. 416 12 Uno de los tema, ya mencionados y que se exponían en estas publicaciones, era el tema de la libertad de prensa: “Es tan justa dicha facultad (…) como lo es la de pensar y de hablar, y es tan injusto oprimirla, como lo sería el tener atados los entendimientos, las lenguas, las manos o los pies a todos los ciudadanos (…) Solo pueden oponerse a la libertad de la prensa los que gusten mandar 16 despóticamente…” El precursor de la Constitución Si bien la constitución argentina no fue creada hasta 1853, a Belgrano se lo podría considerar como uno de los “pioneros” en el tema, incluso precediendo a lo dispuesto por la asamblea del año 1813. Su aporte al aumento de la constitucionalidad se dio por medio del “Reglamento para el Régimen Político y Administrativo y Reforma de los 30 Pueblos de Misiones” de 1810, entre cuyos puntos se destacan los derechos de libertad, propiedad, igualdad y otras consideraciones referidas a la instalación de cementerios, escuelas, lugares asignados para cada institución dentro del pueblo y demás. Estos documentos fueron llevados a cabo por él durante las campañas al Paraguay, y luego, en 1853, incluidos en la Constitución, ampliando estos derechos a todos los habitantes del territorio, ya que en un principio eran solamente para los habitantes de la zona de Misiones. En este documento se cubrían aspectos de la vida cotidiana que incidían sobre la población de la época, otorgándoles a las personas más derechos en temas, que en la actualidad, serían denominados derechos de la seguridad social, el medio ambiente y la igualdad, entre otros. Palabras Finales Para concluir, en este trabajo de investigación intentamos rescatar la imagen de un hombre que merece ser considerado algo más que el creador de un signo patrio; que merece ser visto como el primer hombre en el territorio argentino en levantar banderas de igualdad y de justicia, “(…) divulgador consciente y sistemático de la filosofía económica y política del siglo XVIII (…) cuyas 17 concepciones tienen aún en su mayoría actualidad y vigencia” . Un hombre que a lo largo de su vida demostró que su profundo sentido social estaba intensamente arraigado en su interior. Un hombre que desde su juventud alzaba las banderas de la libertad económica frente al sistema de monopolios. Alguien que intentaba encender en el espíritu de su pueblo las ideas que terminarían plasmadas en la independencia de la Nación. “Era un erudito, un pensador, un excepcional hombre de gobierno que nació adelantado en su tiempo. A él cabe lo que se le atribuye a Cervantes en el Quijote: << uno no ha de envanecerse de 18 ser el hijo de su padre, sino el padre de sus obras>>” BIBLIOGRAFÍA: Apuntes de las clases de historia del profesor Javier Colantonio. Belgrano, Manuel: “Memoria Consular de 1796” 16 Pigna, Felipe “Los mitos de la historia argentina” 2005- Grupo Editorial Norma- Buenos Aires Pág 354 Gimenez, Ovidio “Los conocimientos económicos y Sociales de Manuel Belgrano” En: “Anales de la academia Nacional de Ciencias Económicas” Vol. XLII – (1997) Sigma Pág. 419 18 Op. Cit. Pág.430 17 Gimenez, Ovidio: “Los conocimientos económicos y Sociales de Manuel Belgrano” En: “Anales de la academia Nacional de Ciencias Económicas” Vol. XLII – (1997) Sigma Mandelli, Humberto: “Las escuelas donadas por Belgrano y su Reglamento” Cuaderno N°2 - Instituto Belgraniano Central de la República Argentina - Pigna, Felipe: “Los mitos de la historia argentina” Grupo Editorial Norma - Buenos Aires - 2005 Rosa, José María: “Historia Argentina” Tomos 2 y 3 Editorial Oriente. 1973 Seignobos, Charles: “Historia universal” Tomo 5 Ediciones Argentinas. 1973 Sitios Web: http://www.manuelbelgrano.gov.ar/ http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/5853192/Efemerides_-Manuel-Belgrano_actualizado_.html Manuel Belgrano, mucho más que una bandera Jamisel Mojsiuk Argentina Andresito Fuiste siembre un bandolero, Che Comandante Andresito, General improvisado montonero guaraní, de un ejército harapiento; según sea el invasor, profanador de costumbres, sos aguará o jabalí... de apellidos y abolengos; Sos tábano bajo el sol usurpador de la tierra, Y a la sombra, mbariguí... vengador de tus abuelos... ¡Centinela de la Patria, Para nosotros, en cambio, de Iguazú a Mandisoví! tu nombre seguir{a siendo Sos la memoria viviente la sagrada rebeldía de Oberá a Mobororé... de una dignidad sin precio, que lo diga el español, que se aguanta la pobreza que lo diga el portugués... y sobrevive al saqueo... ¡Sos dignidad, sos justicia, Hijo fiel de tus mayores, sos Patria Grande de pie! peleando por tus derechos... una vez más, por nosotros: ¡volvé, Andresito, volvé! ¡Pueblos Libres! ¡Pueblos Libres! Se oye el grito y se oye el eco Aquí donde no hace mucho que desciende por los ríos vivíamos compartiendo y va trepando los cerros... la comida y la plegaria, Y ese grito libertario, la música y el festejo... como una bandera al viento, General Guacurarí, va delante de Andresito Que llegas montado en pelo, y está en la boca del pueblo... tu sombra pasa y nos libra de las coyundas del miedo... De San Borja a Porto Alegre, Con sólo decir tu nombre maniatado en cuero fresco, vuelve a soñar nuestro pueblo, te llevaron caminando resucita la esperanza como antaño a tus abuelos... y nos juntamos de nuevo... Te engrillaron los tobillos, pero no tu viejo sueño que, según se rumorea, logró escapar y anda suelto... Paisano de San Martín, hijo de Artigas sabemos que tu lanza montonera marca el rumbo verdadero... Y en las fronteras del alma, junto al río de los sueños, tu sombra sigue de guardia igual que un tigre en acecho... COMANDANTE DON ANDRÉS GUACURARÍ (Himno – Marcha) I Un potente Sapucay es el clarín Sables, lanzas su arsenal, son las huestes de la raza guaraní, con coraje luchan por la Libertad. II Ahí están Andresito y sus Centauros enfrentando al invasor, defendiendo heroicamente nuestra tierra, con firmeza desplegando su valor. Estribillo ¡COMANDANTE DON ANDRÉS GUACURARÍ! ¡HONRA Y GLORIA! ¡HONRA Y GLORIA A SU VALOR! III Candelaria, Apóstoles, San Nicolás San Carlos, Yapeyú... Sosteniendo con coraje la Campaña Junto a Artigas y la Causa Federal IV Marcha al frente combatiendo al invasor arengado hasta el confín, Andresito el más grande entre los grandes, de los bravos de la Raza Guaraní. Ramón Braulio Toledo: Base de Letra y Música Prólogo En la base del texto literario, hay expresado sentimientos, emociones, relatos de una trayectoria espiritual y regional; que marcaron la vida de Andrés Guacurarí. Este fue un héroe litoraleño que dedicó su vida a luchar por la causa del Federalismo, y defendió las fronteras de Misiones contra los intereses expansionistas de los portugueses. En los primeros capítulos se puede percibir el origen del medio narrativo, que es la lanza; y conjuntamente, una pequeña parte de la vida, en fragmentos, que muestran la esencia y el perfume característico del monte misionero y esta hermosa tierra colorada, intermediando las mezclas de lenguaje castellano y el Mbyá-guaraní, que dan a la narración un toque característico distintivo. Esta pequeña obra, no difiere en algunas circunstancias, de la amplia bibliografía a la que recurrí para obtener los datos necesarios para lograr esta historia. Conjuntamente, muestra facetas que la historia oficial no reproduce, a pesar de encontrarse ampliamente documentada. En la mezcla de heroísmo y humanidad transcurren estos hechos, que muestra al Comandante como un héroe que lucha por la independencia de su raza, pero que también es atormentado por angustias y fantasmas que lo hacen caer en excesos y desenfrenos. A través de la conflictiva historia, se van describiendo las diferentes campañas en las que se vieron involucrados, Andresito y sus seguidores, en intentos por recuperar la tierra que lo vio nacer. En estas circunstancias, se manifiestan las apariencias más contradictorias de la conducta de Andrés Guacurarí y son ampliamente descritas a lo largo de esta singular histórica-literaria narración. Inmersos en estos conflictos que superan sus voluntades, arrastrándolos por caminos de victorias y derrotas, transcurre la historia inconclusa que lleva adelante el hilo narrativo atravesando batallas y destinos. 19 Capítulo 1: “Mbá apo ita” Hacia un remoto lugar, siglos atrás, un pequeño aborigen de tez oscura, mientras caminaba por 20 la Ka’aguy pa’û hyakuambapa’íva , encontró entre unos arbustos una piedra muy llamativa, que lo llevó a recogerla y colocarla en su bolsillo. Y así, al instante siguió su trayecto por el monte misionero. Horas después, cuando el sol se escondía y la luna comenzaba a salir despiadadamente en el cielo, y las Mbyjami pora ku ojajaipaitéva, oje’oikuetévo hata ombogue, Peteî mbyaja ipy’a hatavéva, peina 21 ojepoity ndererahase , el hombre llega a su aldea, que se encontraba cerca de la ribera de un arroyo. A las pocas horas del amanecer, comienza a tallar la piedra muy lentamente, para que vaya adquiriendo una singular forma. Y así, tiempo siguió en su tarea, hasta que después de unos días logra terminar de esculpirla; transformándole en una interesante punta de lanza. Una vez que terminó el trabajo, 22 buscó un pedazo de madera y lo trabajó detalladamente; con un pedazo de isipó la ató junto a la punta de la piedra y al final juntó unas plumas que estaban en el suelo y lo adicionó. De esta manera, resultó como una verdadera lanza de batalla, con características detallistas que difieren de una determinada cultura. 19 Frase en idioma Mbyá-guaraní que significa: “Trabajar la piedra”. Selva guaraní de eterno perfume. 21 Hermosas estrellas, rutilantes, bellas; que al amanecer dejan de alumbrar y una más bonita, resuelta te espera, llama con su lumbre te quiere llevar. 22 Globito- Urvillea uniloba Radlk- Familia: Sapindaceae. Otros nombres comunes: isipó. Enredadera leñosa, hojas alternas pecioladas, compuestas por tres folíolos, los dos laterales más cortos; flores verdosas, pequeñas; fruto trialado. 20 23 Una vez terminado, la llevó a bendecirla con el cacique de la aldea, que asombrado por la excelencia de lo que fabricó, lo felicitó y por esta razón, consagró la ceremonia a su obra maestra, como lo había pedido el aborigen. 24 Capítulo 2: La Lanza de la Benevolencia “Años pasaron, de la desaparición de esa pequeña aldea a la ribera de ese arroyo”, exclamaba José Artigas a Andresito. “Mientras regresaba de investigar qué sucedió con aquella pequeña aldea, me encuentro, ahí 25 mismo, en medio de la selva, con un indio atrapado en una trampa de cazadores. Al momento, salté hacia el lado de él y cuidadosamente abrí la trampa, saqué su pie que estaba muy lastimado; lo subí a mis espaldas y lo cargué hasta el pequeño pueblito, mientras caían lágrimas de sus ojos, como arroyo 26 turbulento en tiempos de lluvierada , sobre mi camisa de color verde”. “Así una vez, que llegué al pueblito, lo llevé directamente al médico, que sin muchas especializaciones en su rama, lo trató como mejor podía”. El General Carai Guazú 27 se detuvo unos segundos, en la historia que le contaba a su ahijado Andresito. Después, de los puntos que llevó en la herida, el aborigen muy agradecido por la ayuda que le brindó, decide concederle un obsequio: una lanza muy bien trabajada; que representaba para él una verdadera “reina de las batallas”; forjada por la prosperidad que el cacique de esa aldea, ahora desaparecida, le proporcionó al objeto. Así este mismo, según las creencias regionales adquirió una fuerza vital y un espíritu guerrero benevolente. 28 Una vez sanado el aborigen se fue muy lentamente por un pequeño trillo en medio del monto, que iniciaba su recorrido en el pueblito. A medida que el sol se ponía entre los árboles, el hombre se despedía con una tonalidad fugitiva de buenas razones. Andresito, sorprendido por la historia que le contó su padrino, le preguntó si aún tenía esa lanza, que le había regalado el aborigen. Artigas, sin decir ninguna palabra, se levantó y se dirigió hacia uno de los cuartos de la casa, y al instante tomó de una mesa, una caja; la cual contenía en su interior el presente del aborigen. El General José, entonces, decide obsequiarle a Andresito la lanza, como un regalo diferente y compensador, que carga una inmensidad de costumbres y tradiciones. La alegría del niño, por esa situación, se transformó en una laguna de risas; al igual que en 29 tiempos de primavera cuando los patos deambulan felizmente por las charcas , por la abundancia de comida. 23 Es la persona que ejerce el poder en una comunidad. Significa: “El Señor responsable o autoridad de los hombres”. 24 La lanza de la buena voluntad, que es utilizada así por la simpatía y la espiritualidad de quienes la tuvieron en sus manos. 25 Indio es un término común utilizado por la población de las provincias de Corrientes y Misiones, para referirse a los aborígenes locales. 26 Término que se utiliza en la región del litoral argentino, para referirse a la abundancia de precipitaciones. 27 General Carai Guazú lo llamaban a José Artigas sus seres queridos más cercanos. 28 La palabra “trillo” se utiliza para referirse a un camino angosto, en que sólo transitan personas. 29 “Charcas” es un sinónimo de la palabra laguna. Capítulo 3: Arma Reina 30 de las Batallas Andresito con años más de edad, emprendió junto a su lanza benevolente, una campaña contra la invasión paraguaya y contra José Isasí, con la fuerza de 500 indios de caballería e infantería, que recuperaron, tras una significativa batalla forjada por violencia, los pueblos misioneros que habían sido tomados por el capitán uruguayo Francisco González. Con orgullo en su pecho, caracterizado por una sumisa victoria, asume la gobernación de Misiones con el cargo de Comandante General, donde instaura un régimen recto, justo, próspero e igual para todos; pero fue interrumpido por la invasión luso-brasileña en 1816; Andresito se propuso reconquistar a las misiones orientales, para ello instaló una fábrica de pólvora y reorganizó su ejército. Inicia la marcha con 1000 hombres desde Santo Tomé. Obtiene un triunfo en Sao Joa Vello. Luego se vuelve a enfrentar contra los luso-brasileños en Rincón de la Cruz, donde obtiene la victoria. Andresito salió de San Borja el 21 de septiembre de 1816; los opuestos se resisten, y gracias a refuerzos lo derrotan, obligándolo a retirarse repasando el Río Uruguay. Los portugueses vuelven a atacar en 1817 en la cercanía de la barra del Aguapié. Por órdenes del gobernador de Río Grande do Sul, los luso-brasileños saquearon e incendiaron los pueblos de Yapeyú, La Cruz, Santo Tomé, Santa María y Mártires; llevando objetos de gran valor económico. Y fueron dos veces más que atacaron los portugueses, pero el ejército de Andresito los derrota en Apóstoles y San Carlos. Luego de estos singulares conflictos, Andresito empeña la Campaña de Corrientes en defensa del Federalismo (1818-1819); donde instaló su cuartel en Tranquera de Loreto y vigiló los movimientos de los paraguayos y portugueses. Recibió las órdenes de Artigas, para marchar sobre Corrientes para reestablecer la autoridad federal, resentida por un golpe militar dirigido por el capitán José Vedota, adherido al Centralismo Porteño. Se produjeron dos encuentros, uno en Caa-Catí y otro en Saladas en 1818, ambos posibilitaron el triunfo de Andresito; que en menos de un año, llega a la gobernación de Corrientes en abril de 1919. Reorganizó el gobierno civil y ningún pueblo dejó de tener autoridad constituida. Había un enfrentamiento entre el patriciado de las ciudades capitales y las masas rurales. La sociedad correntina estaba acostumbrada desde la época de las colonias, a encomiendas donde no existían los sueldos y se trabajaba por la comida; a los hijos se los tenían en las casas de viejas familias como “criados”, con la paga del plato diario. Los indios eran la base de todas estas actividades y los esclavos. Andresito se abocó a la tarea de liberarlos y realizó el reparto de tierras a los que las necesitaban y a los que las querían para trabajarlas. En la Segunda Campaña del Río Uruguay (1819) el ejército de Artigas, ya no contaba con suficientes medios, ni hombres para resistir a los invasores. Sólo Andresito volvió a la lucha; abatió guarniciones enemigas y tomó posición de los pueblos de las misiones orientales. Se instaló en San Nicolás y quiso atacar a Chagas, pero el asalto fracasó y los lusos-brasileños se retiraron y pidieron refuerzos a Porto Alegre y Alegrete. Andresito marchó al sur intentando contactarse con Artigas, pero no lo consiguió; entonces, Chagas con refuerzos retomó San Nicolás y decide retornar y en su contramarcha choca con las poderosas fuerzas brasileñas en Itá-Curuví en julio de 1819. El combate fue muy violento. Andresito debió 30 A la lanza se consideró desde tiempos remotos, como una verdadera “Reina de las batallas”. retirarse y dispersar sus tropas con la consigna de reunirse en la otra Banda del Río Uruguay, en la provincia de Misiones. Cuando Andrés Guacurarí se preparaba para cruzar el río con una jangadilla con un pequeño grupo, fue sorprendido por una fuerte patrulla que lo tomó prisionero. Así, las ilusiones de victoria e igualdad de Andresito se desvanecieron en el aire, como si la lanza fuese sometida a la acción brutal de utensilios, que la convirtieran en unos simples pedazos de roca, madera, isipó y plumas. Tales momentos fueron presenciados por esa detallista lanza, que con fines útiles desde su comienzo, marchaba por obtener la victoria y proclamar la justicia, junto a sus poseedores. Desde su primer batalla contra los paraguayos, las victorias fijaron en la personalidad de ese simple niño, que al convertirse en hombre de tierra litoraleña, defendió a su patria amada y a su región como un tesoro muy precioso, que no tenía un valor económico para él, pero sí un valor moral, ético, de costumbres; que se fijó en su carácter gracias al apoyo de su padrino. Que con sus actitudes proclamaron una fija distinción del valor de un verdadero ser humano, en la inocencia de Andresito, que provino de carencias y humildades de familia. Las emociones archivadas en esta lanza, configuran una tradición, ¿pero por qué este instrumento de guerra, como consideran algunos, escribirá la historia? La distinción de lanza es presencial, ella estuvo en todos los momentos en que Andresito tuvo dificultades, alegrías, momentos irreversibles y situaciones inauditas. Pero cuando digo presencialmente, no me refiero a que es sólo un medio inanimado, una textura física, sin percepciones; ella consagra un valor sentimental y espiritual, que fijará su rumbo cultural y tradicional en la historia de la tierra del litoral. Capítulo 4: “Upeicharamo Hai 31 Tembiasakue” Cuando Andresito fue tomado como prisionero, lo llevaron a las cárceles de Porto Alegre a pie y muy cruelmente, con cueros frescos atados por el cuello que se iban secando por el 32 camino. Además, debió trabajar en obras públicas, y luego fue llevado en un pontón a Río de Janeiro con otros compañeros y a la Isla Das Cobras. El español Francisco de Borja Magariño gestionó y obtuvo su libertad, poniendo fin a su calvario en 1821. El 3 de julio de ese mismo año Andrés Guacurarí arribó a Montevideo y a partir de esa fecha se pierden sus rastros. No se sabe si falleció en Montevideo, si volvió a Misiones, si murió en el viaje o si fue envenenado en la prisión. Lo que sí se sabe es que con su prisión Misiones perdió uno de sus mejores hombres. Su acción permitió que esta provincia quedara para la patria. Así, se conforma y concluye una verdadera utopía de historias y recuerdos que nunca se podrán borrar del espíritu guerrero y batallador. El destino de Andresito tuvo un fin inesperado, sus trayectos se esfumaron, como un cigarro en manos y boca de un campesino desesperado, que conforme a la situación que vive, se desboca y consume sus problemas, con el hecho de fumarse todo. 31 32 Frase en idioma Mbyá-guaraní que significa: “Y el destino, escribirá la historia...” Barco chato, para pasar los ríos o construir puentes. Las batallas que enfrentó, no fueron unos simples desenlaces, sino, que ayudaron a que las tierras del litoral argentino se independizaran de corrientes externas que punzaban en el beneficio propio de la “clase alta”. La historia que presenció la lanza, es extraordinaria y misteriosa, pero su fin no fue semejante al de Andresito, ella obtuvo su libertad al ser extraviada por uno de los hombres que conformaban el ejército de los lusos-brasileños. Al poco tiempo, aparece en manos del brasileño Abreu, que celebró al ver la derrota de Andrés Guacurarí. Años pasaron, después de la muerte del General, la lanza queda, entonces, como un recuerdo olvidado en la casa de la familia; hasta que la misma al ser puesta en venta, pasa a ser patrimonio de otra estirpe. Al día siguiente los nuevos dueños, de apellido Ambrosio, deciden revisar los cuartos de la nueva propiedad, donde encuentran la lanza tirada en el rincón de un armario. El padre, al momento, la toma y muy sorprendido por lo que halló, decide llevarla a un coleccionador de objetos antiguos de la ciudad, donde éste, según las características del arma, determina que se trata de una obra de tribus Mbyáguaraní. El señor Ambrosio le concede, entonces, como donación al pequeño museo local. La lanza se preserva en ese lugar hasta la actualidad como un bien histórico, cultural y tradicional, determinado por una historia, marcada por la multiplicidad de hechos y narraciones literarias de la tierra. Y así, concluye esta interesante historia, la lanza sobrevivió a muchísimos enfrentamientos y puesta en escenas, y pasó a ser una memoria; donde el destino podrá ser el único en modificar un nuevo rumbo y precisamente, volver a reconstituir toda la trayectoria narrativa, que cargaba la lanza desde sus comienzos. ANEXO Andrés Guacurarí: Historia de un Modelo de Vida y Perseverancia Podría constituirse como un modelo de vida, perseverancia, justicia, honradez, para nosotros los jóvenes que conformamos esta nación argentina, la figura de Andresito. Hombre bajito, bien proporcionado de cuerpo, cara redonda, huellas de viruela, poca barba, mirada penetrante, mestizo de blanco e india, valiente y supersticioso, sabía leer y escribir muy correctamente. Para la clase dominante 33 de entonces, era hijo de “bastardo” , así que debió vivir con su madre. Un cura de Santo Tomé advirtió la 34 inteligencia del mancebo , tomándolo a su cuidado, brindándole una esmerada educación. En los años de la invasión portuguesa al litoral norte argentino, conoció a José Gervasio Artigas, oriental comprometido en las luchas políticas de su tiempo. “El protector de los pueblos libres”, lo adoptó como hijo, nombrándolo en 1815, Comandante General de las Misiones. Su misión era custodiar el territorio apetecido por los lusitanos afincados en Brasil. Eran épocas de organización nacional, coincidiendo con el Congreso de Tucumán en 1816, donde Artigas lideraba el envío de los diputados litoraleños. Nuestro personaje se ganó la admiración de sus contemporáneos, que lo llamaron cariñosamente “Andresito”. Con ese apelativo se inmortalizó en la toponimia misionera. 33 34 Que degenera de su origen o naturaleza Mozo de pocos años. Se dice de una persona de estilo y carácter juvenil. Participó en numerosas campañas militares contra las fuerzas brasileñas, destacándose siempre por su arrojo, valentía y dotes de mando. Resplandeció en los encuentros militares de La Candelaria, Rincón de la Cruz, Saladas, San Nicolás y otros. El 9 de mayo de 1819 fue derrotado junto a su padre adoptivo, Artigas, por el comandante portugués Abreu, en la batalla de Itacurubí. Cae prisionero y comienza para él una degradante vida transcurrida en cárceles brasileñas. El comandante Andresito consigue en 1821 el indulto gracias a Margariño. A partir de ese momento pierde protagonismo histórico, al desaparecer sus rastros en Montevideo, Uruguay. Andresito ocupó los cargos de: Comandante General de las Misiones Teniente gobernador de Corrientes Coronel de Caballería del Ejército Patriota. Vivió y murió en el anonimato, luchando por la causa federal que le supo transmitir su padre adoptivo, el General Caraí Guazú Artigas. ¡Comandante Don Andrés Guacurarí! ¡Honra y gloria a su valor! Coronadas de gloria en el olvido Florencia Yapur Argentina Introducción En lo que llevo de vida y en el tiempo transcurrido en el colegio, observo como cada vez que se acerca una fecha patria, el país entero comienza los preparativos para conmemorarla. Reparo en cómo los medios de comunicación, las escuelas, las familias y la gente en general recuerdan aquellos días tan trascendentes para la Patria, instruyéndonos a nosotros, los menores, cómo nuestros héroes, por medio de grandes sacrificios, hazañas y esfuerzo lucharon para garantizarnos un país libre. Pero en sí, a nuestra historia la podemos definir como “la gesta de los grandes hombres”. Es allí en donde no estoy de acuerdo. Haciendo la aclaración de que mi deseo - en lo absoluto – no es quitarles importancia a esos “grandes hombres de nuestra historia”, el fin que persigo en este escrito es confirmar el conocido dicho popular de “Detrás de un gran hombre existe una gran mujer” y recordar la enorme importancia que tuvieron las mujeres en nuestra independencia, ya que muchas veces el rol de éstas parece olvidado o pasa a un segundo plano, cuando tendrían que estar identificadas con los papeles protagónicos. En las siguientes páginas intentaré homenajear a nuestras heroínas y recalcar que ellas ofrendaron generosamente su existencia al servicio de la Patria. Lo haré en forma de narración, en la cual se comunican por modo epistolar Magdalena Güemes con Juana Azurduy y el General Martín Miguel de Güemes, en el contexto histórico: “La Guerra Gaucha”. Si bien los datos son basados en hechos reales yo los dispondré en forma ficticia para hacer más amena la narrativa. En una casita escondida entre montañas. Sentada en la mecedora, con la pava a punto de hervir, se encontraba Magdalena redactando sin demora la siguiente carta: Salta Estimada Juana: Tengo ante mí su carta. La he leído y he vuelto a releer con sincero asombro. ¿Sabes todo lo que implica unirse al Ejército?, ¡has perdido totalmente la razón, tienes cuatro hijos! Ya me imagino la reunión anterior a tu decisión, en torno a la mesa familiar habrás dicho a Manuel: “Cuando hicimos nuestros votos prometimos estar siempre juntos, y quiero cumplirlos al pie de la letra. He decidido luchar contigo codo a codo en la batalla.” También me lo imagino a él, totalmente lívido el pobre hombre, agregando “Juana, ¿cuando fue que perdiste así la compostura? Jamás dejaré que me acompañes”, pero él muy bien sabe, que a esta lucha ya la ha perdido . Mi querida perdón por lo breve de mi carta, pero también me ha llegado una carta de mi hermano Martin y el mensajero me repitió un centenar de veces que es urgente. No me queda más remedio que responderla a la brevedad. Espero con ansias tu respuesta y cariños de mi parte a Manuel y a los niños Afectuosamente Maria Magdalena PD: Tu padre estaría muy orgulloso de ti. Pasados algunos días, después de hacer algunas diligencias en el pueblo y conversar con sus queridas paisanas, por fin recibió noticias de su hermano. Salta, Mí querido hermano: Ya mismo me pondré a confeccionar vestimentas y alimentos para los soldados. Cuentas con mi ayuda para lo que precises. Estoy muy perturbada con esta lucha. Muchos seres queridos están en ella. Creo que llego mi momento de participar y ponerme a disposición de los míos. Siento que debo luchar por la soberanía de nuestro pueblo, cuyas necesidades conozco muy bien ya que estoy en contacto permanente con las distintas clases sociales y créeme que tanto la clase alta como la de extracción humilde la están pasando muy mal. Se puede sentir el miedo en los rostros de todos hasta en los más pequeños, que presienten que algo de tamaña dimensión está por estallar. Sin nada mas que decir, me despido muy afligida, pero reuniendo fuerzas para serte útil, mi querido hermano. Adiós. Recuerda que te estoy esperando, pero sé que nuestro pueblo esta primero. Con cariño, tu hermana Magdalena. Mirando hacia el cielo, manchado de cenizas pudo imaginar gritos y llantos retumbando en tinieblas sordas, fue en ese momento cuando supo que responder a su querida amiga y sin demora comenzó a escribir. Salta Estimada Juana: ¿En verdad quieres saber mi opinión sobre la guerra?, pues aquí la tienes: La guerra es algo horrible, mi querida. Desde el mismísimo momento en que un paisano se enfrenta con otro, lo único que se conseguirá es sufrimiento y muerte. Nada más. Pero has de tener siempre presente las causas y los logros a los que queremos llegar por medio de esa lucha. ¡Libertad e independencia! Son dos palabras que nuestro pueblo las tienen grabadas en el alma y da la vida por lograr que sus hijos y los hijos de sus hijos puedan vivir en libertad. Pero a ella, ”la tan anhelada”, debemos ganarla para merecerla. Sin mucho más que decir me despido con real afecto y sinceras bendiciones. Tú amiga Magdalena. PD: ¿Qué se siente estar en dentro del campo de batalla? En una tienda perdida entre gritos y agonías Allí estaba, noble Juana, observando el último suspiro de vida, luego de la batalla. Un árbol despajado de sus hojas, de sus sueños. Le arrebataron todo cuanto le había dado la vida pero seguía allí, en pie. No necesitaba más. Sabía que debía continuar. No debía dejar que se apague la vela en su interior que la llenaba de luz y esperanzas. Se acurrucó junto al árbol, saco una pluma y un pergamino y comenzó a escribir… Campo de batalla. Mi querida Magdalena : Como imaginarás no he encontrado tiempo suficiente para responder tu segunda carta. Estoy sumida en un caos total, pero como ya has dicho anteriormente, tengo bien en claro nuestras metas. Por eso es que intento luchar con insistencia. Con respecto a tu pregunta, te diré que cada vez que debo luchar y arrebatarle la vida a alguien por dentro también muere una parte de mí. Es inevitable pensar en las pobres familias que recibirán la noticia de la pérdida de un ser querido, por las noches mientras oro por nuestras almas, lloro su dolor y ausencia. Y al final de cada batalla se puede sentir, junto con la brisa, antes fresca y exquisita, ese olor a sangre que me desgarra el alma. Es en ese momento en el que me pregunto, ¿En verdad hago bien? Pero luego miro al cielo y veo como los cóndores nos sobrevuelan desplegando sus hermosas alas, orgullosos de su territorio y de el hecho de saber que nadie se los puede quitar. Quiero que nuestro querido pueblo tenga esa satisfacción algún día. Quién sabe, quizás podamos llegar a los 200 años de libertad. Con mucho cariño y con deseos de un prospero futuro. Tu amiga Juana Otra derrota…Sin esperar ni desesperar, ¡imposible! Su corazón sólo repetía esa oración una y otra y otra vez. ¿Cómo iban a recargar suministros?, ¿en dónde conseguirían medicinas para los pobres soldados que agonizan de dolor? Era demasiado. Las gotas pesadas de lluvia no la dejaban ver con claridad. ¿Existe en este mundo alguna otra solución posible?, pensaba aturdida. Se dejo caer en el sucio catre, agotada, desanimada, perdida en un laberinto de sombras. De repente una caja atrajo su atención. Era allí donde guardaba las cartas de su querida comadre Magdalena. ¿Podría ser esa la solución que tanto anhelaba? Vilcapugio Estimada Magdalena: Debo darle una drástica noticia. Hemos sido derrotados. Sufrimos muchas perdidas humanas y nuestras reservas de suministros se están agotando. Me ha contado de su taller y se me ocurrió que quizás podrías juntar provisiones para nuestra unidad ya que como te he mencionado estamos al borde del abismo. El desaliento y la angustia se pueden observar en todos los rostros y yo en particular no encuentro consuelo. Hecho mucho de menos a mis hijos y a mi querido esposo que se encuentra muy mal ya que ha sido herido. Debo ponerme a curar heridas. Espero con ansias su ayuda mi querida amiga. Terriblemente abatida. Juana. PD: Pido disculpas pero ésta no es una carta sino un grito desesperado pidiendo ayuda. En un taller provisorio, junto con bondadosas paisanas que han brindado ayuda. Corría de aquí para allá, sin parar, con tanto trabajo por realizar. “Gracias a Dios todavía existe gente noble que desea brindar servicios a la Patria ayudando a nuestros gauchos”, pensó luego de abrir la puerta del taller y ver a más de 50 mujeres y niñas cosiendo, cocinando y empacando provisiones. Su orgullo fue inmenso. A continuación, corrió a responderle a Juana. Salta Querida Juana: Al leer tu carta me consumió un sentimiento de profunda tristeza. Cada día que pasa sólo significa pérdidas, que debemos sufrir para ganar esta batalla, solo espero que de frutos positivos. Aquí estamos las paisanas para brindarle nuestra ayuda. Conseguimos crear un taller para ustedes, nuestros guerreros, que con honor luchan en nombre de todos nosotros. Están siempre presentes en nuestras oraciones. Cada vez que aparece un nuevo capullo es pequeñito e indefenso, pero luego crece y se transforma en una hermosa planta fuerte que brinda frutos rojos y brillantes. Eso me recuerda a nuestro pueblo, a nuestros compadres y comadres, como ustedes, que empezaron siendo pocos luchando por un mismo ideal y ahora incentivaron a vaya saber Dios cuántos gauchos, para luchar por nuestro amado territorio. Me despido. Seguiré con mi trabajo y sólo deseo mejoras y ruego a Dios que su próxima carta sean sólo buenas noticias. Con mucho afecto, Magdalena Sostenía su retrato a la carbonilla con firmeza. Qué mal que se sentía. Sentirse triste y no poder llorar, en honor a él. Sabía que a él no le causaba ninguna gracia que derrame lágrimas. Era una mujer muy fuerte, no debía llorar. Los recuerdos parecían atropellarlas. Su querido hermano no estaba a su lado. Como lo echaba de menos. No pudo contenerse más y se largo a escribir. Salta Mi querido hermano: No encuentro consuelo, te recuerdo en cada momento. Ayer cuando fui al arroyo a lavar, vino a mi mente un recuerdo de nuestra infancia. ¿Te acuerdas cuando creíamos que éramos peces y nadábamos en él? ¿O cuando hicimos aquel puente con nuestro padre? Tantas horas trabajando en él, buscando madera, uniendo con cuerdas. Pensábamos que esa era la tarea más importante de nuestra vida. Construir aquel puente para que mamá pueda cruzar por él sin tener mojarse sus vestidos. Qué orgullo reflejaban los ojos de nuestro querido padre al verlo terminado ¡Imagínate ahora!, cómo me gustaría volver a aquéllos tiempos sin preocupaciones. Teníamos todas las montañas y sus valles para nosotros. Nunca se nos cruzo por la cabeza que todo aquello no era completamente nuestro. Cuando nos mencionaron aquella palabra tan extraña,”Patria”, inentendible, en ese entonces para nosotros. No sabíamos dónde empezaba ni dónde terminaba pero sabíamos que era algo grande y algo en nosotros dijo:¡prepárate para luchar por ella! Me gustaría volver a verte y con unos buenos amargos que me hacen la vida más dulce y recordar juntos nuestra historia. Tu hermana Magdalena En aquel lugar más allá del horizonte, en donde no hay lugar para rendirse. Cayó la noche súbita y silenciosa. La muerte podía sentirse rondando a lo lejos, la observaba. Parecía una serpiente acechando a su presa, registrando y estudiando minuciosamente todos sus movimientos. Le recorrió un escalofrío por todo su cuerpo. Debía alejar aquel pensamiento inmediatamente de su mente., entones comenzó a escribir… Ayohúma Estimada Magdalena: He llegado a una conclusión. Todos tenemos miedo por dentro. Pude descubrirlo cuando en medio de la lucha me detuve y comencé a observar…ojos marrones, pardos, grises, celestes, verdes, en fin, todos distintos, mas algo común no cambiaba en ninguno: ¡Era temor! Es este el rasgo que encontré repetitivamente en las pupilas, por doquier, a donde mirara lo podía distinguir .Fue en ese momento cuando me di cuenta de que no soy la única que cada vez que esta por comenzar a luchar siente en lo más profundo del pecho aquel miedo desgarrador. He de admitir que consigue, a menudo, desmoronarme ya que pienso en mis amados hijos y esposo, pero es en ese mismo instante, cuando pienso en ellos, me pongo firme y con mi ideal gravado a fuego en mi corazón. Me despido mi querida comadre. El sueño me ha ganado. Tu amiga Juana. Entreabrió los ojos lentamente. “Sólo es un día mas” pensó y a continuación dio gracias a Dios porque todavía no se habían extinguido el canto de los pájaros silvestres. Quiso acordarse de qué se sentía despertar en su casa, voltear y ver a su marido, poco después oír aquellas voces, las mas hermosas y que la llenan de alegría… la de sus hijos. Cómo los extrañaba. Apartó todo los pensamientos de su casa rápidamente de su cabeza. No iba a darse por vencida. Mientras intentaba concentrase se percato de que algo diferente sucedía: se escuchaban… risas. Rápidamente abrió la tienda y allí estaban, su General al mando, con su querido compadre, el General Don José de San Martín. Campamento Magdalena: Le escribo brevemente mi comadre para darle a conocer un acontecimiento que realmente nos elevó el ánimo y nos generó nuevas fuerzas para continuar. Se han juntado hoy, en el campo de batalla, dos grandes personalidades que ya los podemos llamar “nuestros héroes”. Mi General al mando, Manuel Belgrano junto con el General Don José de San Martin. Este último viene de batalla en batalla, enfermo y ya entrado en años. Era tan sincera su expresión de alegría y regocijo al ver a mi general, como cuando uno ve a un compadre o a una comadre muy querida luego de haber pasado muchos años sin verse. Después de un afectuoso abrazo entre ellos, se presentó y no tardó en contarnos sus experiencias, sus nuevas estrategias, puntos claves y más tácticas para enfrentar a nuestros enemigos. Para finalizar desvainó su sable y todos miramos aquella hermosura con los ojos como platos. Es muy curioso el peso indescriptible que puede tener un simple objeto en el futuro de tantos gauchos. Sin nada ms que contar me despido muy afectuosamente mi querida. Juana Azurduy de Padilla. En un lugar a donde reinaba en el corazón la desesperanza. Había pasado tiempo ya desde la última carta ´de Juana recibida por Magdalena Juana. Comenzaba a preguntarse qué será de ella. Supo que debió ocultarse con sus hijos en los pantanos del Valle de la Suegra. Envió varias cartas pero no obtuvo respuestas. Mientras paseaba junto con sus llamas rio abajo y observaba los distintos y fascinantes colores de las montañas, escuchó unos gritos. Desorientada observó atentamente el paisaje sin poder divisar figura alguna. De repente, de algún lugar del valle, apareció la chinita mas chiquita de la región, era Consuelito con una carta en muy mal estado. Por su expresión supe que no se trataba de nada bueno. Suipacha Querida hermana: Tengo que darte la más terrible de las noticias. Los hijos de tu comadre Juana han muerto por la fiebre y su esposo ha sido asesinado al defenderla. Luego de refugiarse la contrajeron y nadie pudo hacer nada al respecto murieron todos. Juana, como es de esperar, está totalmente abatida. Espero que pueda comunicarse con ella y darle ánimos. Me despido con la mayor aflicción. Tu querido hermano Miguel de Güemes. Para ese entonces Magdalena ya estaba en su casa. Al terminar de leer la carta se derrumbo en su catre y se ahogo en un mar de lágrimas. “¡Pobre mi comadre! ¡Dios guarde las almas de sus queridos hijos y esposo!”, pensaba una y otra vez. Cuando, por fin, recupero la compostura tomo una pluma junto con un pergamino y redactaba mientras amargas lágrimas caían sin cesar. Salta Mi comadre querida: No hay nada que decir, simplemente hacerte saber que su dolor es también el mío y llega hasta lo más profundo de mis entrañas. Mi querido hermano recién le dio la noticia. Ten siempre presente que la vida continua y que estará por siempre en la memoria de todos nosotros el valor de ellos. Juana sé fuerte querida mía. Todo esto algún día debe acabar. Roguemos a Dios que sea para bien. Mientras nuestro deber es no desfallecer en la lucha y acordarse de que todo vale la pena cuando se trata de libertad. El pasado es recuerdo y nostalgia, el futuro esperanza, sueños y temor. Sólo el presente es pulsante y está vivo. Me despido con la más profunda de las angustias. Magdalena. PD: ¡A la carga! En algún lugar entre las cumbres donde se podía sentir olor a última batalla. “Fue la peor de mis derrotas. Todo lo que fue ya no es”, pensó Juana, al recordar a su difunto esposo e hijos. Podía verse en su rostro siempre dibujada la más amarga de las sonrisas, ocultando un corazón destrozado y, a la vez, una fiera justiciera sanguinaria. No había ni la más mínima señal de la Juana pacifista que había existido hasta ese entonces. Nada iba a quitarle la pena máxima de perder todo cuanto tenía, todo cuanto amaba. Tanteando el campo de batalla, registrando cada centímetro de él en su mente se, preparaba para su última lucha. Su cuerpo, por más que quisiera, no se encontraba en condiciones de seguir. Ya era hora. Debía alistarse e ir al frente de las tropas. Se la podía ver orgullosa, montada en su colosal caballo, tenía hambre y sed de justicia. Era asombroso, nadie tenia el valor de verla directo a los ojos. Grandes muros de silencio reinaron de repente. Estaban frente a frente. Todo estalló. Su última batalla había comenzado. Reinaba el polvo, sudor y sangre. Pudo oírse hasta en la Cordillera un grito desgarrador:”Morir antes que continuar siendo esclavos”. Era ella, nuestra Juana. Esas palabras retumbaron en los corazones de todos los paisanos e hicieron eco en ellos. Sin siquiera huellas de temor en sus rostros los paisanos enfrentaban de igual a igual a los realistas, que sólo profesaban gritos y llantos entre las tinieblas sordas. Juana siempre recordó esa batalla, su última batalla. Decía que en ella se encontraban todos los compatriotas que murieron por nuestra Patria. A su lado siempre estuvieron sus hijos y su esposo, luchando codo a codo con ella, guiándola y protegiéndola. Cuentan los paisanos que aún en la actualidad pueden oírse por toda la Puna las palabras de nuestra querida Juana Azurduy de Padilla. Fin. Epilogo La última carta Querido pueblo: Ha pasado ya mucho tiempo y parece un tema casi olvidado. En nuestros días ya no es necesario empuñar las armas por la libertad, pero han de saber que existió una época en la que se nacía y moría luchando por conseguirla. Y sabe sólo Dios ¿cuántas personas habrán muerto sin haberla siquiera acariciado? Hoy día es muy difícil encontrar individuos que en verdad la valoren, la respeten y la cuiden. Les pedimos que nunca se olviden que todo este hermoso y basto territorio fue regado con la sangre de nuestros héroes, que valiente y desinteresadamente ofrecieron su vida para poder regalárselo a sus descendientes. No hay nada más hermoso para nosotras que nuestra bandera este bien en lo alto, flameante, orgullosa y completamente libre. Alcen siempre la voz, cuando algún extraño quiera arrebatársela con falsas ideologías o utópicas promesas. Atesoren siempre este sentimiento en el corazón. Nos despedimos implorando que, desde lo Alto, siempre los cobije un manto de bendiciones. ¡VIVA LA PATRIA EN LIBERTAD! Atentamente Magdalena Güemes y Juana Azurduy Bibliografía: • Kirschbaum, Ricardo. Grandes Biografía de los 200 Años “Martin Miguel de Güemes”. Buenos Aires. Ed. Arte Grafico Editorial Argentino 2010. • Rey, Eugenia. Mujeres del Bicentenario “Juana Azurduy”. Buenos aires. Caras 2010. Sueño de un iniciado Franco Victor Manuel Barroso Argentina Aquí bajo este algarrobo te voy a contar mi gran sueño y solo espero que estés con tiempo porque si no es así, nos juntamos luego y te cuento. Qué sí decís, me contestas, bueno. Pero nada de bostezos y hacerme volver en la historia porque empiezo de un tirón y, por respeto, por más que no entiendas tenés que estar con todos los sentidos despiertos. Anoche me encontré con el dios de la noche. Ha bajado a hablar conmigo para contarme en esta larga noche todo lo que vivieron los huarpes, dueños de estas tierras, en las llamadas campañas libertadoras del Huinca. Al principio, los nombraban así a los blancos enviados de dios y después, significó para ellos hombre malo, según el vocablo araucano. Eso me enteré esa misma noche, la noche sobre la cual te voy a contar. No pretendo aburrirte con mi historia; pero mi deber de la verdad me pide contarte todo lo que más pueda, siento un deber de no olvidarme detalle alguno. Solo espero no olvidarme de nada y que aquel que estuvo en mis sueños no se aparte de mi mente para explicarles sin perderme de decir todo. Así quien estuvo en mis sueños me contó: “Todo empezó aquella semana cuando vino la huinca a darnos la noticia que si cooperábamos para nosotros y para ellos las cosas cambiarían... Primero pidió permiso para entrar, nosotros lo dejamos pasar. Él pasó pidió un mate para entrar en confianza, para que lo tratáramos de igual a igual, porque has escuchados que el mate une lazos de confianza, uno siempre da mate a quien estima. Luego empezó a hablar de todo, que nosotros éramos grandes sabios de la tierra, que éramos los más entendedores de la tierra y un motón de cosas que hacían creer a uno docto en estas cosas. En fin con palabras dulces nos dijeron que como éramos los únicos que conocíamos el territorio de manera excelente e intachable y, por lo tanto, tendríamos que ir al frente para guiar a todo el ejército. Y que pensemos en el ejército como dueños de él, ya que, éramos jefes en la tierra y en todo este tema por ser únicos en estos sucesos. Qué gran tesoro éramos para estos hombres. Pero, nos dijo cuando se estaba por ir, que las cosas no iban a ser después las mismas de antes… y si que no lo iban a ser. Todo cambiaría. Eso era verdad, nosotros informaron a nuestras familias y comunidades de tal travesía, de la famosa independencia y de la famosa campaña libertadora. Nos preparamos, informamos a nuestros dioses y pedimos protección. A la mañana siguiente partimos en nuestro camino, algunos a buena suerte tenían caballo. Había mucho que caminar, no me gustaba era que a algunos los utilizaban como bestia de carga para la expedición. Lo único que consolaba era que todo podía cambiar. Aunque no iba a ser nada bueno para su futuro. Llegaron una tarde cuando el sol se estaba escondiendo para no ser cómplice de lo que vendría y de lo que verían, hombres flacos y cansados gente conocida, amanecida, mujeres maltratadas y violadas empezaron con el exterminio. Luego, se decidieron e iban a matar a todos pero menos mal que algo los detuvo. Pero, por suerte no paso nada. Después de un par de horas cayó la noche y como no teníamos nada que comer nos tuvimos que ir a dormir sin decir nada con el estomago vacío. Aquella noche salí del campamento sin meter bulla alguna, pensé un millón de veces en escaparme; pero sabía que iba a morir de sed y de hambre en el desierto, además estaba muy lejos de casa. Por lo tanto, debía prevenir y pensar en todo. La única idea que se me vino a la cabeza fue acostarme y tratar de dormir un poco. ¡Si señor!.. tratar que el sueño abrigara mi espalda descubierta que sentía frío y soledad. De aquella infinita y fría noche lo único que me acuerdo es que dormí muy mal, “claro que dormí” en el piso como mis demás compañeros. La mayoría de ellos se enfermaron esa noche, se agarraron un catarro, fiebre, hipotermia y todo lo que se te pueda ocurrir en una noche de frío como esa. Yo por muy buena suerte zafé de esas enfermedades… El amanecer fue un triste suspiro del cielo. Mi mirada, mi mente y mí oído solo prestó atención a las órdenes y gritos que daba un supuesto jefe. Aquel hombre nos dijo que si no obedecíamos sus órdenes nos terminarían matando a todos. Eso cambió todo lo que había dicho aquel hombre que tomó mate con nosotros en mi casa. Ese si que era amable. Este hombre parece enojado. Yo tengo que hablar con este hombre, encontrarlo y decirle que se acuerde de mí y de todo lo que hablamos, de mi puesto de guía y jefe… Ese día no lo vi ni siquiera sus pestañas y no te miento en decirte que lo busque y mucho. En nuestro segundo día tampoco no vi ni siquiera a su caballo. En el cuarto tampoco. En toda la semana ni noticias. ¿Este tal Molina no pensaba presentarse? Yo desde ese momento empecé a tener solo frío y ese frío lo siento ahora al contarles esta historia. Mi espalda se pone crespa con solo pensar. ..Amaneció con un sol bien dispuesto a salir, la mañana se prestaba para levantarse temprano pero con lo mal que había dormido esa noche no me daban ganas de levantarme temprano. Lo único que quería era dormir. Ya había pasado varias horas y nadie pensaba en comer yo tenía hambre como toda la gente que estaba ahí supongo… Pero, nadie hablaba, ni pronunciaba ningún sonido que sea alarmante y llamativo para los jefes. De repente aparecieron unos hombres que ni saludaron. Uno de ellos era un tal José de San Martín ese hombre parecía más bien maldito, porque ni de las mujeres se apiado en darles de comer. Alrededor de nosotros había perros flacos que hacia días que no comían, seguramente, los pobres murieron de hambre con el tiempo. Más allacito se veían unos perros que cuidaban las provisiones. Uno ni pasar cerca podía porque al salto y al gruñido siempre atentos estaban. Han pasado varios días y solo nos hablan de estrategias de guerras de cómo luchar, qué hacer y de … Nos han dicho que por falta de presupuesto no nos van a dar ropa ni comida ni nada. Debido a las condiciones en que estamos se han muerto varios de los nuestros solo espero que alguien se apiade y nos den de comer. Tendré que pensar en cómo salir de esto vivo habrá mucho que esperar y pensar. Nada será fácil para lo que me toca vivir o mejor dicho para lo que me queda vivir. Tengo miedo siento un nudo en la panza solo espero que los dioses me ayuden y me protejan. Qué me toca vivir es lo que mi mente permanentemente se pregunta. Pienso mucho en qué será de mí familia, de mí solo espero volverlos a ver y que cuando vuelva me reconozcan. Ya no sé qué pensar nadie dice cómo terminará todo esto, solo hay órdenes y órdenes... De vez en cuando se acerca un tipo con cara larga y lo único que hace es maltratar a los más decaídos y flacos. La noche anterior, no se si contarte esta historia por que es muy cruda. Pero, ya que insistís tendré que contarte. Lo que pasó fue que a uno de los nuestros lo agarraron dos de los ayudantes del jefe cuando se estaba por escapar y le dijeron que si no obedecía sus órdenes lo delatarían. El ya sabía lo que le esperaba… seguramente, le darían una mansa paliza, además, la tortura por la que tendría que pasar el pobre. Pero, como él era tan rebelde no obedeció ninguna orden de las que le dieron y lo delataron unos soplones del jefe. Esos que siempre andan buscando la situación para sacar provecho a costa de otro. Todos vimos como lo azotaban. Sin compasión, el pobre quedó con su espalda molida, lamentablemente ninguno de nosotros pudo hacer nada porque de seguro nos hacían lo mismo, después lo quitaron de nuestra vista, al día siguiente nos enteramos que lo habían colgado para abajo amarrado de los pies y que le habían colocado vinagre en sus heridas. Llegada ya la tarde nos enteramos que escapó, no se sabe quién lo ayudó pero si cómo hizo para salir del Campamento Plumerillo, nos enteramos de que uno de los guardias lo descolgó creyendo que estaba muerto, luego de estar tirado varias horas en el piso se arrastró hasta el establo de los caballos, herido y sangriento como estaba, espero que el guardia les diera de comer, saco uno de ellos y, muy despacio salió al trote y escapó , me parece que se metió en el campo y llegó a un puesto donde según él no lo conocían ,era el de sus abuelos , creo que después lo reconocieron y le dieron muy buena atención ,bueno mira.. no me acuerdo muy bien… Porque todo esto que te cuento fueron mis sueños después de aquel accidente en la ruta camino a San Juan, pasando los altos limpios. Ya que nos queda tiempo te voy a contar lo que le pasó a una familia conocida que habitaban cerca de Lagunas del Rosario ,como en Chile necesitaban personal para trabajar en la explotación de minas y lavado de oro, vinieron unos hombres y se llevaron a toda la familia sin explicarles porqué Nunca supe más de ellos , pasó un tiempo y una vez caminando por el campo me encontré con un hombre que estaba con la cara sangrienta ,seguro había sido maltratado por los españoles que habitaban en Chile , este hombre estaba muy sediento ,y como yo llevaba agua le convide para que calmara su sed quería seguir camino sin decir nada , pero como le dije que estábamos en un lugar seguro , se calmó y decidió contarme lo sucedido ,y me dijo que los llevaron caminando acollarados de las manos , martirizados por el hambre y la sed ,también que si no caminaban les daban latigazos… El estuvo solamente una semana en la mina luego escapó a pie , dijo que lo siguieron , pero, no le dieron alcance , también me contó que trató de liberar a su familia más de una vez ;pero casi lo descubrieron así que decidió renunciar. Hermano, tu que tienes la luz, dime la mía Soy como un ciego. Voy sin rumbo y ando a tientas Voy bajo tempestades y tormentas, Ciego de ensueño y loco de armonía. Ese es mi mal. Soñar .La poesía Es la camisa férrea de mil puntas cruentas que llevo sobre el alma .Las espinas sangrientas dejan caer las gotas de mi melancolía Y así voy ciego y loco, por este mundo amargo a veces me parece que el camino es muy largo. Y a veces es muy corto…. Y en este titubeo de aliento y agonía, cargo lleno de penas lo que apenas soporto ¿No oyes caer las gotas de mi melancolía? Con respecto a cómo cruzamos te puedo decir que nos dividimos en filas continuas como las de la escuela ¿Te das cuenta cómo más o menos? Nosotros íbamos primero, luego los esclavos negros, seguidos los que iban a pie y, por último, los que iban a caballo. Ahí en los de caballo iba el tan nombrado “General Don José de San Martín” Ahora que estamos a tan cerquita del bicentenario creo que de campaña libertadora no tuvo nada. Más bien fue otro mal trago que tuvimos que pasar. La participación huarpe en las campañas libertadoras fue un completo exterminio, fue un jaque en el ajedrez un cuatro en el truco, un penal en el football. Qué mas te puedo decir de lo que me tocó vivir. No se porqué te cuento todo esto o porque me siento tan sincero al contarte todo Ya que estamos en noche de confesión te comento que en mi ser hace que esa historia sea propia, ya que, llevo sangre huarpe, mis abuelos y los abuelos de mis abuelos eran huarpe. Que no te parezca extraño si he soñado con algún tío, abuelo o primo de mi familia. Alguien que quiso que un poquito de la historia sea contada del otro lado del mapa, alguien que quiso que se escucharan las dos campanadas de la historia para poder empezar a descansar en paz. Creo que hubo una campaña en la que solo nos libertamos de España, en la que nos unimos como un pueblo como una nación para poder ser libres. Pero también creo que de beneficiosos recibimos poco. Se me pulsa el pecho al pensar que mi gente, aquellos que dejaron su sangre en tierra propia hoy no tenga ni una placa en su reconocimiento. Soy huarpe del secano de Lavalle, Mendoza, vivo en mi comunidad y orgullo me da que dejes contarte la otra cara de la historia de la participación de los pueblos originarios en las campañas libertadoras. ¡Libertad! proclamo para todo aquel ser humano que no es libre de pensamiento y de obra a realizar… Libertad es lo que hoy nos tiene que sobrar. Lo Sangue Fuerte De Las Mujeres Latinas Selene Gomes de O. Machado Brasil Elas estavam todas juntas com um ar grave e decidido. Era um belo dia, claro e azul, mas o sol tinha qualquer coisa de distante demais. Estavam reunidas na Catedral. Cada uma com suas preocupações, mas todas elas apontavam para o mesmo lugar: a pátria as crianças e os maridos. Tinham ido até a catedral para pensar, os murmúrios e exaltações do momento preenchiam demais as cabeças, e tudo o que elas precisavam naquele instante era de um pouco de paz. Estavam muitas ali, algumas delas eram: Manuela Gandarillas a cabeça das mulheres, que sendo fisicamente cega tinha uma visão interior que sanava todas as suas necessidades e ditava sábios conselhos aos outros. Manuela Rodríguez, mulher de Esteban Arze cabeça da reorganização das forças revolucionárias na região, com seu olhar profundo, as irmãs Juana e Lucía Ascui que oravam em voz baixa, Rosa Soto que parecia emergida em pensamentos profundos, as irmãs Parrilla que olhavam para o chão, Mercedes Tapia com os olhos desfocados e expressão de quem sentia raiva, María Pascuala Oropeza que tinha lágrimas nos olhos, Manuela Saavedra de Ferrufino que segurava um rosário, Lucía Alcocer León de Chinchilla que conversava em sussuros com María Isabel Pardo de Vargas e María Teresa Bustos Salamanca de Lemoine. Elas esperavam que María del Rosario Saravia de Lanza e Luisa Saavedra de Claure chegassem. Quando ela chegaram,os murmúrios silenciaram perante a reunião que começava. Todas ficaram atentas. Juana Ascui foi a primeira a falar: _Os monarquistas estão realmente voltando para cá, sob o comando de Goyeneche. E eles estão pertos. _Como aconteceu? Perguntaram algumas mulheres ao mesmo tempo. E então ela se pôs a descrever o que tinha escutado: _Goyeneche depois de derrotar o levante que aconteceu aqui, em Sipe, rumava para Argentina com o objetivo de invadi-la e por fim a outro levante que lá acontecia. Porém ficou sabendo que aqui, ressurgia a revolução, e resolveu instantaneamente voltar. Disseram-me que quando ele soube, pode-se ver os olhos do demônio em sua face, ele gritou, e se enfureceu diante do que ele chamou de imensa afronta. E disse, então, que voltaria para cá, e mostraria que quando Goyeneche derruba, as coisas ficam no chão. Todas as mulheres se entreolharam, as notícias não eram nada, nada boas. Inclusive eram as piores que podiam ter chegado, naquele momento. A insurreição sim acontecia, mas estava só se erguendo, e os homens mal haviam se recuperado da derrota de Pocona. Além do mais,uma grande porcentagem deles estava matriculada em tropas distantes da região.O exército de Goyeneche era grande,a cidade seria massacrada. Agitadas e ansiosas começaram a falar todas ao mesmo tempo, com medo e preocupação. Até que uma voz calma e alta se ergueu, era Manuela Gandarilha: _Silêncio. Eu sei que é uma situação extrema, mas perder a calma não vai adiantar em nada. E nem desistir. Logo se ouviu as vozes das mulheres, que concordavam. E mesmo sem que fosse dito, todas elas sabiam. Sabiam que iriam lutar, por sua honra, para proteger as casas, os maridos e crianças. Não importava que lhe dissessem de fracas, só as mulheres sabem o quão forte as mulheres são. Mulheres latinas então,nem se fala,nasceram com luta e suor no sangue.E iriam mostrar isso, principalmente agora que se sentiam como leoas,com um inimigo implacável ameaçando lhe as crias e a vida. E elas não precisaram dizer uma só palavra, só se olharam. E nesse exato momento elas souberam. Era hora de se preparar, organizar e buscar qualquer tipo de armamento, não havia muito tempo, o teriam de fazer imediatamente. As mulheres sabiam também da desproporcionalidade do exército para com elas mesmas, mas não importava. Nada daquilo importava. Não pensavam no “e se perdermos” só sabiam que iam lutar, nem que fosse até o fim, para proteger os entes queridos e aquele pedaço de chão que era o lar amado, a pátria. Manuela Gandarillas irrompeu o silêncio, e passou a matéria dos pensamentos gerais em uma palavra, para que tudo ficasse mais sólido. _Lutaremos! Todas assentiram, e ela completou: _Nosso lugar é sagrado, e não deixaremos que ele seja profanado. Nosso lugar é sagrado!Nosso lugar é sagrado! Diremos isso a eles. E levaremos La Virgen de La Merced, conosco, bloquearemos a entrada pela colina de São Sebastião. Eles não vão entrar nessa cidade! Então começou a corrida pra arrumar armas. A maior parte do armamento foi feito de pedras e paus. Um mensageiro havia sido mandado, por Goyeche, e ele nunca mais seria visto. Representava tudo quanto era repressão.Deram cabo dele,mostrando que realmente não teriam medo ou hesitação em lutar. Elas foram em romaria, para a colina. Levando a imagem de La virgen de La merced, repetiam como lembrete, para aguçar a coragem: ”Nosso lugar é sagrado!”, então se prostraram na entrada, interditando o caminho para a cidade. Goyeche, que vinha atrás de dissipar a revolta e pegar Esteban Arze, e seu exercito,surpreenderam-se com aquele pequeno exército a sua frente. E Goyeche não entendeu,não poderia mesmo déspota como era ,o sacrifício e a tentativa de salvar a cidade e as pessoas que nela se encerravam .Ele disse para que elas saíssem do caminho,mas como não o fizeram , não se deixou parar,e nem deixo que lhe comovessem os gritos de “Nosso Lugar é Sagrado”. Manuela Gandarillas que não podia ver o que acontecia, em meio à multidão, ouvia a batalha que começara... Gritos, tiros, e golpes violentos, não reagia com muita força, não podia correr o risco de bater sem direção e acabar acertando alguém querido. Só pode ficar parada. Pareceram anos, em minutos. Toda aquela violência, e todo aquele não saber, se o barulho do corpo que caía era de amigo ou inimigo. Ela odiou naquele instante,odiou de todo o coração,essa violência maldita,e a inerência a dominação de certos homens,que querem que se submetam os outros e que em sua maldade fazem tantos terem de pagar.Rezou para virgen de La merced,para que iluminasse o coração da humanidade,e acabasse com as guerras.Orou pelas mulheres que se encontravam ali,pelas crianças,e pelos familiares.E para que o futuro de toda essa gente fosse melhor. Para que os tiranos pudessem sair de sua cegueira, e encontrar a luz. Ela uma anciã cega, via mais que todos naquele instante secular de batalha. Foi rápido. Atingiram a cabeça de Manuela e logo ela estava no chão. O sangue saía impiedoso e acelerado. Um grito comum saiu da boca de todas as mulheres presentes, e a revolta diante da covardia, fez com que lutassem com todas as forças. Sangue, lágrimas, raiva e desesperança eram os compositores da batalha em seu fim. E apesar de toda a força e heroísmo delas, a batalha que começara desigual, desigual se findara. Todas as senhoras que tiveram o nome citado foram mortas. Mas a violência não acabara ainda. A matança da colina ocorreu um dia antes do dia de corpus Christi. E o exército então se manteve por lá para a comemoração do dia seguinte sob o combinado que Goyeche travara com os soldados: _Eu farei a liturgia. E durante o barulho dos fogos de artifício, vocês atirarão no governador Mariano Antezana, ele é um patriota!Atirarão também em qualquer outro suspeito de ir (contra a colônia e a monarquia.). É nosso momento, mostraremos nosso poder. E acabaremos de vez com o serviço por aqui, uma vez que essa gente tem a maldita capacidade de se recolocar contra mim. Todos concordaram, e no dia seguinte em meio às comemorações, lá estavam eles. Goyeche fazia a liturgia, tudo acontecia nos mais normais parâmetros da comemoração quando vieram os fogos. Muita gente não entendeu a gritaria, até que olharam para os lados. Os tiros não tinham sido ouvidos, mas muitos corpos tinham ido ao chão. Quando as pessoas viram,a correria começou, gerando empurra-empurra, alguns tropeçavam naqueles que estavam ajoelhados chorando sobre os cadáveres, ninguém podia acreditar em tanta morte e desastre. Apavorados,correram,estavam reduzidos demais, eram tantas perdas. Logo a praça ficou deserta, deixando no chão mais corpos, os corpos de Joaquín Mariano Antezana, Manuel Ignacio Ferrufino, Ascui Agustín, José Domingo Gandarillas, Bernardo Lujan, José Manuel Lozano, Juan Zapata, e do governador Mariano Antezana. Este dia, em cochabamba até hoje é conhecido como o dia da festa do “corpus triste” Esses acontecimentos são um ponto negro na história, negro não, vermelho. Vermelho como o sangue que aqueles dias tanto verteram. A tristeza assim como o brilhante heroísmo, pairam no ar, escritos para sempre na história. Juana Azurduy Dizem que quando a morte vem nos buscar, a nossa vida passa perante aos olhos, nos mostrando as coisas mais importantes que nela aconteceram. Juana Azurdy,saberia em instantes que era verdade.Estava quase completando 82 anos,quando a morte sem bater na porta entrou para lhe buscar,e foi isto o que ela viu: A liberdade tão grande de menina. As cenas nítidas de quando, aprendera com o pai à montar cavalo,a sensação que experimentara transbordando em si, da primeira à última vez que montou,de que se integraria ao vento.Outra quadro que lhe salto aos olhos foi sua mãe ensinando-a o quechua ,uma língua indígena ,via também os índios,que ficavam a serviço do pai,e as coisas que aprendera com eles. Agora via um tempo um pouco mais à frente o nascimento de Rosalía, sua irmã. Carregara a no colo, tão pequena... Pode senti-la pequenina nos braços. O foco do pensamento que a morte lhe trazia, vagueia então, para aquelas que seriam as primeiras perdas, num alto histórico dessas, em sua vida. A morte da mãe,quando ainda era muito jovem,e a do pai,um tempo depois. Vieram então os dias de convento, as regras, e as disciplina exigidas lá, não eram pra ela. Não nascera pra vida introspectiva de meditações do lugar, nem aceitava as pregações de que a mulher tinha de ser submissa. Nascera sim, para lutar, defendendo o que acreditava, logo acabou sendo expulsa de lá. Reviveu então tempos bem depois do convento... Tinha perdido e ganhado muita coisa no caminho, e não se fixado muito em lugar nenhum, é que ela sempre ia onde era precisa, entrando na batalha de igual com os homens. Sempre acompanhava o seu marido, general Manuel Ascencio Padilla, e era admirada por sua coragem. Manuel e ela, ouviam o chamado. O chamado que convidava os compatriotas a se reunirem contra a monarquia,e seus velhos tiranos.E não se deixarem levar pela corrente daqueles que já haviam se acostumado ao servilismo,e viviam acomodados e estagnados.Ouviam as histórias da América do Norte,onde os habitantes haviam se tornado independentes de uma potência ainda mais poderosa que a Espanha, e se sentiam incentivados. O pior de ir a luta com o marido era deixar os filhos, mas transvertia o fato de estar indo atrás de um mundo melhor e mais justo para eles, em coragem de sair. Ah os filhos... Então vem a tona a ementa de um dia de glória, daquela vitória em que tanto se tornara conhecida...Vivia dias turbulentos, e depois daquele acontecimento continuar viva parecia se não obra de Deus aliança com a Sorte. O marido dirigia um exército em direção a região do Chaco, e deixou-a responsável pela defesa de uma fazenda, a fazenda Villar. Lá ficaram ela,o general Padilla e mais apenas trinta fuzileiros, um dia, foram atacados pelos monarquistas . Ela sentiu de novo, muitos deles chegando, tiros e sangue para todos os lados. E aquela confusão que desnorteava, de sons, e lutas, típica de batalhas. Aos poucos, foram derrotando os inimigos. E em determinada hora, se viu, de frente ao chefe das forças inimigas,eles se olharam,e ela foi mais rápida.Matou-o,viu-o deixar os próprios olhos, e quando estava caído,ela pegou a bandeira que ele carregava para presentear o marido.Mais uma vitória pela pátria,mais um dia viva. Vem-lhe a tona então o marido. Ela o achava um homem bonito, era tão determinado e tão patriota quanto ela mesma, um general muito competente,sempre confiara nela.Tanto que a tinha deixado tomando conta da fazenda daquela vez ,enquanto muitos indagavam se ela era capaz de tal.Sempre ,sempre ,acreditara nela.Algumas vezes quando ela duvidava das suas capacidades ele a lembrava delas e vice e versa .Ela o amara,e amaria para sempre.A morte dele tinha sido tão difícil, fora na batalha de Viloma.Uma parte dela própria havia morrido naquele dia. A saudade do marido não pode deixar de puxar a lembrança dos filhos, e de quando, por estratégia do inimigo ela e sua tropa acabaram sem dinheiro nenhum. E eles morreram, todos os quatro.Ainda podia ver a vida deles se esvaindo .Filho não foi feito pra morrer antes da mãe,era dor demais.No momento da morte deles,o dilema dela,teve uma resposta diferente do que costumava ter.É que ela sempre se perguntava se valia a pena aquela vida,aquela luta,ser tão diferente das outras mulheres.E a resposta na maior parte das vezes tinha sido,e seria ainda sim.Mas não naquele momento,não. O quadro logo foi substituído por outro , que a lembrou da batalha que tomara parte grávida,de sua filha.Quando os filhos e o marido morreram, e só tinha sua filha, ela foi combater ao lado de general Martín Miguel de Güemes, em Salta. Um dos momentos mais bonitos de sua vida,que agora lhe chegava, foi quando o general Martín obtendo a permissão do diretor Pueyrredón, a designou tenente coronel. Ela quase podia tocar a sensação que tivera, de tão sólida e intensa, quando conquistara o direito de usar o uniforme e como todos os homens ter todos os privilégios da profissão. Foi uma conquista tão grande,e apesar de muitos terem duvidado lá estava ela. Como todo ‘guerreiro’, ela sofrera muitas perdas, e logo Miguel, foi-se também. Deixando-a, sem mais combates, e forma de retornar para sua pátria.Ficou lá por um bom tempo,até que o governo de Salta lhe ofereceu dinheiro para o regresso. Vê também o dinheiro da pensão que lhe fora concedida quando Manuel Isidoro Belzú tornara-se presidente e que fora paga apenas por alguns anos. Uma das ultimas cenas era a de quando ficara sozinha,pois seu genro fora transferido para trabalhar fora da sua cidade.E sua filha e neta foram juntas. Estava bem perto agora. Viu o rosto de Indalecio Sandi,bisneto de sua irmã Rosalía ,que lhe fizera companhia nos últimos dias. Então chegou finalmente ao ponto atual. Onde estava só,e anciã.Em breve chegaria a oitenta e dois anos. Mas nós sabemos que isso não aconteceria, pois ela estava morrendo. Mas antes de a luz se apagar, e ela ir, viu.E isso fez com que ela sorrisse.Viu, o sorriso do marido,as suas conquistas ,as lutas e belas vitória, e seus filhos. Macacha Güemes Ali no quarto, olhando o estado de risco do irmão Martín Miguel de Güemes, ela tremia. Tudo o que podia ser feito por ele estava sendo feito. Mas temia que ele não sobrevivesse mais de alguns dias,o estado dele era grave. Os monarquistas o haviam atacado, deixando-o à beira da morte. Ela o havia aconselhado a tomar mais medidas de segurança,por volta daqueles dias... Gostaria que ele tivesse seguido o conselho. Impaciente, preocupada e com medo, zelava pelo irmão em silêncio, no quarto. Se ele morresse seria uma perda enorme não somente para a família, como para a pátria, e para os soldados, ele era um agente importante das revoluções. Olhando-o ali inconsciente, ela conversou baixinho com ele disse lhe : _ Irmão, prometo-lhe que não pararei, não importa o que aconteça. Continuarei realizando as coisas que faço, e farei mais o que puder, em prol da emancipação, da liberdade e da pátria. E ela fazia muita coisa... Havia criado uma rede de mulheres espiãs e mensageiras de grande utilidade, tinha uma habilidade política realmente admirável, que já haviam sido essenciais para o irmão muitas vezes, e que tinham ajudado a alcançar a paz algumas vezes. E sua delicadeza e simpatia , em tratar igual poderosos e humildes,fez-se muito querida,assim comunicava-se com todos. Voltando ao hospital , a Martín e Macacha ,enquanto ele estava naquele estado, ela se pôs a lembrar de uma conversa com ele: _Para tudo dá se um jeito confeccionarei aqui em minha casa os uniformes para vocês. O irmão sorriu orgulhoso. _Obrigada. Isso era mais uma das facetas de Magdalena Güemes de Tejada,apelidada de Macacha,ela confeccionava os uniformes,essenciais, para a os soldados de la Partida de Observación,comandados por seu irmão. Os dias se passaram, e o pior aconteceu. Martín morreu. No velório sua irmã compareceu consolada pelo marido Román Tejada.Prestou-lhe homenagem e ouviu de um soldado,companheiro do irmão as seguintes coisas: _Ele sempre teve orgulho de você Macacha.Sempre.Disse-me ele que você sempre foi uma mulher de personalidade. Que nunca lhe faltava e era sua mais entusiasta colaboradora, armada de uma arma imprescindível sua inteligência, e a coragem que você sempre teve, mesmo nas situações mais perigosas,para ajudá-lo nessa grande causa. Ela sorriu ao soldado, e já começava a se sentir melhor, mesmo com o peso do luto. Muitas coisas aconteceram depois desse episódio. Uma certeza? Ela cumpriu o juramento que tinha feito a beira da cama do irmão enfermo , e não parou de lutar .Defendendo sempre as causas e idéias que ela tinha muito forte em si,e buscando uma pátria melhor,longe da dominação dos monárquicos tiranos,e os países por detrás deles. Bicentenário da ação emancipadora Flavio Igor Torquato Dos S. Santana Brasil O Mercado Comum do Sul é o principal bloco econômico do Sul da América, foi criado em 26/03/1991 com a assinatura do Tratado de Assunção no Paraguai, e reafirmado pelo Protocolo de Ouro Preto no Brasil, em 17/12/94. Os paises que compõem esse bloco são originalmente: Argentina, Brasil, Paraguai, Uruguai. No ano de 2006 os quatro países entraram num acordo e decidiram aceitar a Venezuela. Os blocos econômicos têm o objetivo de diminuir ou mesmo eliminar as barreiras tarifárias e não tarifárias que impedem o livre comércio de bens entre esses países e, eventualmente, a união entre essas economias. Embora tenha sido criado apenas em 1991, os esboços deste acordo datam da década de 1980, quando Brasil e Argentina assinaram vários acordos comerciais com o objetivo de união dos seus comércios. Chile, Equador, Colômbia, Peru e Bolívia participam até o momento como países associados ao Mercosul.Tais países poderão entrar neste bloco econômico assim que organizarem suas economias. As duas maiores economias do Mercosul (Argentina e Brasil) enfrentam algumas dificuldades nas relações comerciais. No entanto, espera-se que o Mercosul supere suas dificuldades e a partir daí comece a funcionar plenamente e venha possibilitar a entrada de novos parceiros da América do Sul. Esta integração econômica, bem sucedida, aumentaria, portanto, o desenvolvimento econômico nos países membros, além de facilitar as relações comerciais entre o Mercosul e outros blocos econômicos, como a NAFTA e a União Européia. O domínio espanhol Com o início das grandes navegações e a recente descoberta de terras ao oeste do planeta, as maiores potências marítimas do século XV decidiram arriscar-se em busca da conquista deste novo mundo. A viagem de Colombo América em 1492 trouxe à Espanha perspectivas de enriquecimento, pois acreditava, o navegador, ter encontrado um novo caminho para as Índias. Mesmo nas expedições subsequentes, desde o ano seguinte, Colombo manteve a mesma crença e conforme procurava as riquezas orientais fundou vilas e povoados, iniciando a ocupação da América. O processo de exploração da América colonial foi marcado pela pequena participação da Coroa, devido a preocupação espanhola com os problemas europeus, fazendo com que a conquista fosse comandada pela iniciativa particular, que por sua vez com um banho de sangue e muita violência. Um Conselho criado em 1524, por Carlos V, e a ele cabia as decisões políticas em relação às colônias, nomeando Capitanias-gerais e Vice-reis, estes com autoridades militares e judiciais. Foi criado o Conselho das Índias. O território colonial foi dividido em quatro Vice-Reinos - Nova Espanha, Peru, Rio da Prata, e Nova Granada - e posteriormente foi redividido, surgindo as Capitanias Gerais, áreas consideradas estratégicas ou não colonizadas. Os Vice-Reis eram nomeados pelo Conselho das Índias e possuíam amplos poderes, apesar de estarem sujeitos à fiscalização das Audiências Para que esta colonização fosse garantida com sucesso, a Espanha teria o trabalho de banir os índios nativos que naquela terra habitava. Foi a primeira luta contra colonização que dizimou os Astecas e os Incas. A economia destinada à nobreza era fruto da escravização dos nativos para a extração de ouro e pedras preciosas, os principais alvos de exploração nas terras americanas. A nobreza da época era dividida entre Criollos e Chapetones. Os Criollos - descendentes de espanhóis nascidos na América - eram a elite na época, mas perdiam direito de ocupar cargos políticos para os Chapetones (espanhóis que vieram para a América). Por isso, foram eles que iniciaram os manifestos de independência na América Espanhola. Os espanhóis não trouxeram apenas destruição à população nativa. Em tivemos sim batalhas que exterminaram grande um primeiro momento parte da população – matança esta ampliada pela falta de defesas biológicas dos nativos frente às doenças trazidas pelos europeus – mas com o tempo e a chegada dos jesuítas os massacres foram postos de lado em nome de uma convivência aparentemente pacífica, até mesmo porque os espanhóis precisavam de braços para trabalhar no Novo Mundo, e nem todos na Europa tinham tanta vontade de vir para a América trabalhar. A Espanha dominava desde o sul da América do norte, até o extremo sul da América do sul. No aspecto político, as forças militares mobilizadas pelos criollos passaram a disputar o poder em suas respectivas regiões, isso ficou conhecido como caudilhismo. Na Europa, o rei da Espanha, Fernando VII estava afastado do trono e a Espanha era então governada pelo irmão de Napoleão, José Bonaparte. Os criollos passaram a se basear nas idéias iluministas, visando uma reforma política e econômica, já que a coroa passara a dobrar os impostos sobre a colônia. A reforma foi executada e eles poderam, então, ocupar cargos políticos pequenos. Havia um grupo de criollos que se beneficiava do Pacto Colonial. Estes, por razões óbvias, eram contrários à idéia de independência. Os criollos “traidores” da idéia sobre a independência tornaram-se inimigos mortais daqueles que lutavam contra o absolutismo. O processo de independência da América hispânica foi conduzido e liderado pelos criollos (nobreza), os movimentos populares liderados por índios (Peru), mestiços (México) e escravos (Haiti) que existiram na América espanhola. Os principais líderes da independência eram descendentes diretos da elite espanhola a exemplo de Simon Bolívar. Em 1826, Bolívar convocou os representantes dos países recém-independentes para participarem da Conferência do Panamá, cujo objetivo era a criação de uma confederação pan-americana. O sonho bolivariano de unidade política (panamericanismo) chocou-se, entretanto, com os interesses da sociedade local e com a oposição da Inglaterra e dos Estados Unidos, aliados da Espanha. Somente no século XX, alguns países da América do sul uniram-se e formaram um bloco econômico denominado Mercosul. AS MULHERES E A INDEPENDÊNCIA DAS PROVÍNCIAS UNIDAS NA AMÉRICA DO SUL Quando se pensa nos processos de Independência que sacudiram a América Latina no século XIX, surge no imaginário sempre os grandes homens, considerados heróis, como Simón Bolívar, Belgrano, San Martin e Tiradentes, ou as grandes batalhas regadas à sangue, dos Criollos.que lutaram contra o poderio espanhol. Entretanto, a nossa memória ofusca a presença das mulheres, porque na história “dos homens” a presença de uma líder feminina não é contemplada. É com esse pensamento que se esvai grande parte da História da América do Sul. As mulheres desempenharam um papel relevante no processo de emancipação da América Latina. A participação intensa ocorreu desde o ofício de mensageiras, cozinheiras, lavadeiras dos batalhões, até mesmo a frente de movimentos guerrilheiros, a exemplo de Anita Garibaldi. A atuação feminina foi determinante para o sucesso da emancipação das colônias espanholas. Há nomes femininos que se destacam no processo de independência, como Juana Azurduy, Macacha Güemes e as Heroínas de Cochabamba, cujo empenho e determinação imprimiram um comportamento revolucionário, até então conhecido, apenas, no universo masculino. Tal postura foi considerada ícone de bravura e serviu como modelo para muitas outras mulheres, não apenas as latinas, mas também de outras partes do mundo. O papel da mulher em causas libertárias como estas é bastante simbólico, uma vez que se tratava de um “ser frágil” cuja vida era marcada pela dificuldade de acesso a tudo que pudesse ser relevante. Juana Azurduy nasceu em Chuquisaca, cidade qual recebeu também os nomes de A Prata e Lagoas, e foi uma das mais importantes da América espanhola. A cidade pertenceu ao vice-reino do Rio da Prata. Era uma cidade formada por aristocratas de pele branca que carregavam orgulhosamente no sangue parentesco direto com os povos ibéricos, principalmente os espanhóis. Uma aristocracia de mansões imponentes a partir dos frutos das minas de Potosí, pratas que fizeram a riqueza de alguns poucos em troca das milhares de vidas indianas, dilaceradas pela ganância da burguesia. Nas universidades circulavam as ideias resultantes da revolução francesa e do movimento iluminista, e foram lá onde às exigências igualmente iluministas de "Liberdade Igualdade e Fraternidade" surgiram para as colônias da América do Sul. Em meio a toda essa aristocracia, nos bairros de Chuquisaca nasce Juana Azurduy, índia, filha de Dom Matias Azurduy e Dona Eulália Bermudes. Foi uma criança agraciada por uma beleza de traços indígenas, de altura vantajosa, com traços bem acentuados. “Uma amazona com a beleza de um perfil agradável, cujo rosto brilhava a luz de um olhar doce e dominador, que exercia uma responsabilidade carismática aos seus contemporâneos”, descreve Valentias Abecia historiador boliviano. Sua mãe, Dona Eulália, de sangue mestiço, casou-se com Dom Matias Azurduy, um homem socialmente estável e com bens e propriedades. Foi ele quem mostrou as ideias de liberdade para Juana. O afeto que ela sentia pelos pais ocasionou no constante sofrimento com a morte prematura deles, Juana foi morar junto aos tios que só queria cuidar da jovem orfã com interesse nos bens materiais que ela havia herdado. A relação tempestuosa que ela tinha com os tios Petrona Azurduy Valle e Francisco Diaz fez com que sua bravura e coragem só aumentassem. Os seus tutores encontraram um jeito de tentar mudar a relação com a sobrinha, enviaram-na a um convento, mas Juana gostava de andar a cavalo, subir em árvores e mergulhar em águas torrenciais. Depois de certo tempo estando no convento Juana o abandonou para casar com Manuel Padilla um homem que ela pode confiar lutando lado a lado assimilando-o com as ideias revolucionárias do seu pai. O casal teve quatro filhos. As terras sul-americanas, depois de 300 anos de colonialismo, não suportavam mais dominio espanhol, e em 25 de maio de 1809 o povo de Chuquisaca se rebelou, foi o primeiro grito libertário da América do Sul. Da parte baixa, do vice-reinado do Rio da Prata, avançava um exército libertador, comandado pelo general Belgrano.Dirigiam-se para Chuquisaca para apoiar aos patriotas rebeldes. Juana e Manuel se colocaram as suas ordens deixando os filhos escondidos nas montanhas. Manuel Padilla conseguiu dominar o território de Pilcomayo. Juana Azurduy percorria de cavalo as terras de Tarabuco. Com o sabre na mão, recrutando homens para a guerra, organizava o batalhão dos Leais. Nas aldeias camponesas a viam como uma deusa, filha da mãe terra. Cavalgava pelas montanhas a frente dos rebeldes. Seu xale azul esvoaçava ao vento. O exército espanhol fugia em retirada ante aquela mestiça de olhos negros que liderava uma tropa de rebeldes Quando o general Belgrano a viu lutar, presenteou-a com sua espada. Poucos homens governavam um exército como ela. Juana Azurduy e seu marido Manuel tornaram-se um pesadelo para o exército espanhol. Depois das derrotas de Tarvita e Pomabamba, o general espanhol ordenou a todos os seus batalhões a captura daquele casal imbatível.Então eles se separaram para despistar o exército espanhol e ela se escondeu com seus quatro filhos pequenos mais um grupo de guerrilheiros no vale de Segura. Sem alimentos nem caminhos conhecidos, com pântanos repletos de mosquitos, os quatro filhos de Juana contraíram malária e disenteria e antes que Manuel pudesse chegar ao esconderijo, dois de seus filhos morreram. Suas lágrimas ainda não haviam secado quando as suas duas filhas também adoeceram e morreram. Então, o casal, transformou a dor em motivação para lutar.Em agosto de 1814, Juana Azurduy, novamente grávida, lutava na colina de Carretas. Com a cavalaria inimiga entrando em Pitantora, as dores do parto acometem Juana. A quinta e última filha dos amantes guerreiros nasceu junto ao Rio Grande em meio ao combate, sob os disparos dos canhões. A cavalo, com a filha recém-nascida apertada contra seu peito e a espada desembainhada, Juana Azurduy escapa de uma emboscada armada por um grupo de soldados traidores. As façanhas se sucedem, liderando 30 fuzileiros criollos e 200 índios armados com fundas e paus, Juana realiza uma surreal derrota aos espanhóis na batalha de El Villar. O exército libertador concede o grau de tenente-coronel à senhora Juana Azurduy de Padilla, ilustre amazona da pátria. Em 1816, em uma de suas tantas batalhas e cobrindo a retirada de sua esposa, o general Manuel Padilla caiu em mãos inimigas. Os espanhóis o degolaram e fincaram sua cabeça em uma estaca em praça pública. Juana Azurduy continuou lutando sozinha. Combatia agora no norte argentino, como se fosse sua terra, junto às tropas do General Güemes. Eles queriam unificar a América do sul, possuíam ideais semelhantes, lutavam por uma pátria unida. Depois de doze anos de luta, regressou a Chuquisaca. Voltava com sua filha, nascida e crescida em meio aos combates. Ninguém saiu para recebê-la em sua cidade natal. Um dia, Simón Bolívar veio visitá-la, o libertador venezuelano a cobriu de elogios na presença de todos. Exclamava que a nova república, antes Alto Peru, não deveria se chamar Bolívia, mas sim Azurduy. Envelheceu no bairro de Coripata e na mais absoluta pobreza. Passava longas horas em silêncio junto ao seu tesouro mais precioso, a espada presenteada por Belgrano e que ela empunhou até sua última batalha. Morreu ironicamente em um 25 de maio, dia em que se comemora o primeiro grito libertário da América. A filha dela pediu as autoridades de Chuquisaca uma ajuda para o enterro. Eles se recusaram. O corpo de Juana Azurduy foi jogado em uma vala comum. Em seu atestado de óbito escreveram: Flor do Alto Peru Juana azurduy – Mercedes Sosa ( Flor del alto peru) Juana azurduy Flor del alto peru No hay otro capitan Mas valiente que tu Oigo tu voz Mas alla de jujuy Y tu galope audaz Doña juana azurduy Me enamora la patria en agraz Desvelada recorro su faz El español no pasara Con mujeres tendra que pelear Juana azurduy Flor del alto peru No hay otro capitan Mas valiente que tu Truena el cañon Prestame tu fusil Que la revolucion Viene oliendo a jazmin Tierra del sol En el alto peru El eco nombra aun A tupac amaru Tierra en armas que se hace mujer Amazona de la libertad Quiero formar en tu escuadron Y al clarin de tu voz atacar Truena el cañon Prestame tu fusil Que la revolucion Viene oliendo a jazmin. Magdalena (Macacha) Güemes de Tejada nasceu na do dia11 de dezembro em 1787, numa cidade da Argentina chamada de Salta. De família rica e influente, filha de Doña María Magdalena Goyechea, influente nas causas a favor da independência, e Gabriel Güemes Montero, tesoureiro da fazenda real. Irmã do general Martín Miguel de Güemes, cuja ação pro - independência foi de suma importância para seu país. Casou-se com 16 anos, em 1803 com Román Tejada, idealista revolucionário, filho de uma rica e importante família da cidade de Salta. As qualidades de líder e colaboradora vista em Macacha foram bem exploradas. Teve importantíssima atuação na revolução de maio quando converteu sua casa em ateliê para confeccionar roupas para os soldados de um exército organizado por seu irmão. José Rondeau nasceu em Buenos Aires, entrou para os patriotas nas lutas do Alto Peru. Ele mediu forças com o general Martín Miguel Gümes e empunharam armas de fogo, com todo o apoio de Macacha. Sua contribuição para a causa patriótica ocupa um lugar importante na história da sua terra e sua vida se tornou uma lenda para os sentimentos de seu povo. A partir deste momento, ela tornou-se uma “heroína nacional” com suas participações em batalhas, principalmente quando os monarquistas estavam invadindo a cidade de Salta, Macacha havia permanecido na cidade atuando como mediadora entre as milicias de José Rondeau e o general Matín Güemes. Esta negociação foi chamadada de Pacto de los Cerrillos. MACACHA "Era un junco del minué la hermana del guerrillero. Con su talle se enjoyaban los coloniales espejos. Al recibir su mistela se inclinaban los caballeros, el zapato con hebilla y la camisa coin vuelos. Quién la viera en el caballo, con la chaqueta de cuero, cubrir vacantes de sangre en los rudos entreveros. El poncho en sus hombres cura nopstalgias del terciopelo. Se han hecho para la guerra sus ojos color de acero. Como su hermano Martín, jineteó potros en pelo, corrió ganado en el monte, bebió chicha con el pueblo, y cuando suene el clarín galopará selva adentro, entre lapachos y cardos, entre chalchales y ceibos, casi todas flores rojas, como si el monte guerrero sólo floreciera sangre a tono con esos tiempos. Macaccha, Macacha Güemes se ha contagiado de hierro. Ya no la nombran los pianos; los pianos quedaron lejos. Para siembre la ganaron las espuelas sin sociego, los tambores de voz ronca y el clarín del entrevero O primeiro movimento de rebelião contra o domínio espanhol foi em Chuquisaca, Alto Peru – Hoje Bolívia – 1809, que teve como uma das líderes Juana Azurduy. Já a segunda rebelião ocorreu na região de Cochabamba, em 1812. A população de Cochabamba ficou informada dos conflitos pró-independência que estava ocorrendo na região do Reino do Rio da Prata e decidiu também lutar pela independência sob o comando de Esteban Arze. A realeza, então, tentou conter o avanço dos guerrilheiros convocando José Manuel Goyeneche que já havia derrotado Arze na batalha de Pocona. Goyeneche era brutal e seu ataque principal foi a lendária batalha na montanha Queñual, ele abateu os guerreiros o povoado de Cochabamba com intenção de derrubar os líderes da revolução, então Esteban Arze perdeu a batalha para Goyeneche, mais uma vez, Manuela Rodríguez, esposa de Arze, decidiu organizar-se e armar-se para enfrentar as forças monarquistas, apesar da desproporção que ela sabia existir. Quando a população pensava em ter perdido a guerra, as pessoas com poucos recursos de defesa, ainda assim, se recusavam a entregar os líderes da insurreição. A população cochabambina contou com uma ajuda inimaginável das “Mulheres Lutadoras”, que com xales amarrados à cintura, seus filhos num braço e a espada noutro, tentaram dar continuidade a então derrotada guerrilha. Quando os soldados saíram da montanha Queñual e tentaram invadir o povoado de Cochabamba, depararam-se com um exército de Cochabambinas todas de armas em punho, sejam elas pedras, paus ou até mesmo espadas. Estes soldados invadiram a cidade e mataram os velhos, moças e crianças, queimaram as vilas e destruiram as plantações. Depois de três dias, a cidade de Cochabamba foi tomada apesar da heroica resistência oferecida pelas mulheres corajosas. Em homenagem a esta batalha, o escultor italiano, Prieto Piraino trabalhou uma escultura e em 27 de maio de 1926 foi apresentado o monumento com o título de Heroínas e foi referida pela primeira vez pelos habitantes desta cidade, Heroínas da coroa. Eis alguns dos nomes destas heroínas: Manuela Gandarillas, Manuela Rodríguez, as irmãs Juana e Lucía Ascui, Rosa Soto, Mercedes Tapia, María Pascuala Oropeza, Manuela Savedra de Ferrufino, Lucía Alcócer, León de Chinchilla, María Isabel Pardo de Vargas, María Teresa Bustos e Salamanca de Lemoine, María do Rosario Saravia de Lanza, Luisa Saavedra de Claure; e todas elas esposas de combatentes perseguidos que acompanharam a Esteban Arze. Concluimos então, que o desejo de conquista da independência fez com que homens e mulheres (apesar de relegadas a segundo plano) se unissem diante de uma causa tão nobre que resultou na emancipação das colônias espanholas. O guerreiro libertador da Argentina Jesica Mayara Marques Guilheme Brasil Introdução Nasce na calorosa pátria Argentina, conhecida como região da prata, a 03 de junho de 1770, um de seus mais encantadores e ilustres filhos: Manuel José Joaquim Del Corazón Jesus Belgrano, ou simplesmente comemorado com alegria Manuel Belgrano. Com característica criolla, ou seja, espanhola nascida na região latino-americana, este; também descendente de italianos, fez com que sua trajetória sintetizasse seus ideiais e sua luta. A vida deste advogado e jornalista foi marcada por total envolvimento político e perseverança nos seus sonhos libertadores, ficando sua postura de líder reconhecida na Histórica Mundial, pelo seu pioneirismo na diplomacia como modo de resolução de problemas envolvendo interesses distintos, considerando o melhor para ambos envolvidos. A própria história sobre a vida de Belgrano, isto é: suas ações e decisões retratam a influência e a educação; recebidas na Europa, onde desenvolveu suas caracteríticas de liderança norteadas pelo comando popular e além do modo diplomático, aperfeiçoou estratégias, inclusive militar, uma vez que descendia dos dois povos, ou seja, espanhol e argentino. Quando estudava na universidade localizada na própria Espanha, onde por ocasião ocorreu a revolução francesa, seus objetivos já incluiam o crescimento econômico. Assim, equilibrou e fundamentou o sonho de libertação dos sulamericanos, a partir do Iluminismo; movimento que ocorria na Europa, apresentando força total na França do século XVIII e proclamava: liberdade, igualdade e fraternidade entre os povos do mundo; vivenciando-o pessoalmente. O General José Maria Paz, um militar que participou de várias campanhas na Argentina e apontou a modéstia controlada do idealista mais famoso do país, exclamou que: “Belgrano não tinha, como ele mesmo o disse, grandes conhecimentos militares, mas possuía um julgamento recto, uma honradez a toda a prova, um patriotismo puro e desinteressado, o mais extraordinário amor à ordem, um entusiasmo decidido pela disciplina e um valor moral que jamais se desmentiu.” Esta auto-disciplina trouxe a proximidade com a rainha espanhola Carlota Joaquina, logo, ele estabeleceu primeiro a intenção de criar uma Monarquia Constitucionalista, onde a mesma desenvolveria seu governo reformado e mais popular na região da prata; porém, como não obteve o sucesso desta tentativa, resolveu depois, fazer uma revolução da idéia, tornando possível junto ao Exercito do norte e ao militar José Francisco de San Martín, a Independência argentina. Durante esta campanha, San Martín o substituiu e segundo a tradição, o encontro entre os dois efetuou-se na posta de Yatasto. Este facto é conhecido como “o abraço de Yatasto”. A Independência de toda uma Nação, o tornar soberano seus cidadãos e prepara-los para conquistar autonomia através da educação e do desenvolvimento agrícola; fizeram de Belgrano um dos pioneiros da visão unificadora da América do Sul. O contexto histórico de sua época ajudou as suas realizações e serviu de exemplo, pois além do movimento já citado, ocorreram nos períodos outras grandiosas revoluções mundiais, a serem consideradas, revoluções francesa, inglesa e industrial. O mundo tornando-se mais livre, mais culto, mais concorrido e necessariamente mais unido para melhoria das condições de vida, de consumo e de praticidade. Apesar da Argentina ter sido formada por inúmeras disputas políticas internas, sua centralização territorial foi fundamental para que ocorresse as transformações educacionais inclusive com as mulheres indo as aulas. Os feitos antes pretendidas por pensamentos coerentes de instrução e revolução reais de Belgrano, foram ao longo dos anos e até mesmo dos séculos melhoradas, pois, após a prova de que seu sonho fora realizado, isto é, de que é possível que um país se torne uma potência com a união de objetivos comuns, vemos nascer a consolidação de suas idéias já neste século XXI, com os acordos e tratados, tais como: “os doze protocolos de cooperação” conhecidos com Pice ou Programa de Integração e Cooperação Econômica Argentina/Brasil, que visava o início de uma nova fase na busca da integração entre os dois países e, na sequência encontramos registrado na História: o “Tratado de Assunção” assinado em Março de 1991 e que determinava o fim das tarifas de importação entre os países (já citados unidos também ao Paraguai e Uruguai) com tentativas de unificar a economia e fortalecer a cultura. Temos o começo do desenvolvimento das mesmas regiões defendidas por ele junto aos demais países Sul-americanos. Assim, vemos na origem do Mercosul ou Mercado Comum do Cone do Sul, cujos membros iniciais foram Argentina, Brasil, Paraguai, Uruguai a continuidade de melhorias das condições de vida dos países agora emergentes. Logo, segundo Walter Praxedes e Nelson Piletti, “renasce assim (exatamente) a ideia de integração entre os países da América Latina”. Desenvolvimento A liberdade dos argentinos está ligada à agricultura e ao desenvolvimento da educação, idéias compreendidas a partir da origem e ocupação do seu território e posteriormente de sua colonização espanhola. Assim, a História da Argentina começa com a chegada dos primeiros seres humanos a região, que é estimada em 11 mil anos antes de Cristo. Na região Noroeste do seu territorio atual, onde os Pampas eram denominados por Ameríndios Nômades, as primeiras terras foram cultivadas. Este amor pela terra trouxe a certeza de que as caracteristicas geográficas interferem no modo de vida da população, logo, sabemos hoje, que a Argentina pode ser dividida em 3 principais unidades: os Pampas, a Cordilheira do Andes e a Patagônia. De fato, a maioria da população argentina esta concentrada nos Pampas onde esta maior concentração e disputa territorial se justifica pelo clima ameno e, em especial por sua localização está nas margens do estuário do rio da prata. A colonização ocorreu inicialmente e também com mais força nesta parte do território, pois, as margens do rio, no ano de 1516, o navegante espanhol Juan Díaz de Solís pilotava sua embarcação ao seu encontro do lugar e reclamou a região em nome da Espanha. Uma vez que região noroeste já era dominado por espanhóis onde fora desenvolvido o vasto império inca e o asteca. A Colonização espanhola oficial se deu ao longo do século XVII e o nome escolhido para o território foi Argentina que significava prata em latim, porém, como o interresse de encontrar minas de prata, na região dos pampas foi despertado nos espanhóis, eles iniciaram a procura. Mas, de fato não foram encontradas grandes riquezas. Então, tentaram fazer as primeiras plantações, porém, o clima não era adequado aos produtos tropicais mais interessantes, no momento, ao mercado europeu. Resumindo, a região foi deixada de lado até século XIX, tornando no inicio o desenvolvimento tardio. Apesar deste atraso, desdos tempos coloniais, a bacia platina (que incluiu os rios Paraná, Paraguai e Uruguai), era um importante caminho para a saída de metais preciosos e outros produtos naquela época, e, entrada de mercadorias diversas. Apesar deste abandono, houve o impulso de uma concentração maior de parte da população nos arredores do estuário, motivado pelo necessidade de aumentar a produção de trigo, para alimentar a todos e ao mesmo tempo, o incremento do trabalho agrícola influiu agora para aumento da taxa de natalidade, e, centenas de vilas e cidades foram se formando, se desenvolvendo e se organizando no Novo Mundo. A partir desta organização natural, nascem figuras históricas buscando a mudança e a libertação de suas Nações. É interessante analisar que entre o período de 1811 a 1828, vários países, conquistaram a tão sonhada liberdade política. Como um dos exemplos mais conhecido vemos a tragetória e a luta ativa de José Francisco de San Martín y Matorras, companheiro do argentino Manuel Belgrano que nos anos compreendidos entre 1778 a 1850, libertou a Argentina, Chile e Peru. E a vida ímpar do herói Simon Bolivar (1703-1830), também contemporâneo de Belgrano, que destacou-se como líder na América do Sul, nos países: Venezuela, Equador, Bolívia e Colômbia. Ele acalentava o sonho de unificar o continente. Hoje, mostra que o sonho de ver uma só América, não se concretizou de modo político-territorial, mas, em parte de um modo simbólico chamado Mercosul, com muito mais força, pois apesar da interligação dos seus acordos, mantêm a autonomia de cada membro deste bloco econômico. A Ideologia dos movimentos nos países colonizados pela Espanha, as lutas que deram inicio à procura pela libertação e assim a Independencia, e, tantos outros fatores, fizeram aumentar a ideia de grupos de país antes considerados subdesenvolvidos. Destes grupos fez nascer de inicio o conceito de terceiro mundo, que particularmente é satisfatória e rica de sentido, pois faz sair dentro deste mundo várias noções diferentes combinadas entre si, e pode ser utilizada para conceituar os países que fazem parte deste grupo. A criação do vice-reinado do rio da prata trouxe um auge à belíssima cidade de Buenos Aires, que em pouco tempo, instalaram administrações burocráticas vice-reinal, a aduana(1778), o consulado(1794), que Manuel foi o primeiro e único secretário,então protegia os órgãos jornalísticos publicados no rio da prata, sendo que renunciou seu cargo em Abril de 1810. Obras e feitos de sua iniciativa, podem ser encontradas até hoje, como exmplos, temos: a Audiência, onde se podiam julgar as decisões dos vices-reis (tribunal superior), criada em 1785; a Academia de Náutica e a Escola de Desenho (1798). O seu primeiro jornal, nasceu em 1801, conhecido por Telégrafo Mercantil, foi o instrumento utilizado para difundir suas idéias revolucionárias. Este meio de comunicação durou pouco devido à censura do vice-rei. Porém, tais criações mostram, ao longo dos anos, que no decorrer de suas atividades, foram necessárias, pois, provam que a população das regiões envolvidas cresceram tanto que algumas continuaram a existir. Manuel apesar de ter se retirado para a vizinhança de Rosário, não deixou de criar um de seus principais e mais citados marcos na História de seu país. Teve a maravilhosa criação da Bandeira, homenageando sua pátria como um filho devoto, desda juventude; inicialmente, a bandeira era um distintivo para a divisão do exército, mas depois adaptou-a como um símbolo de democracia, no mesmo dia que fez flamear essa bandeira em janeiro de 1812, foi nomeado chefe do exército do Norte, partiu para o Peru, para subistituir a Juan Martín de Pueyrredón. Imaginemos como se sente cada criador dos símbolos republicanos, dentre eles: o Hino, Temas e Bandeiras. Imaginemos agora não só a criação, mas a luta, em si, pela “liberdade” das próprias raízes. A colaboração foi intensa e proveitosa, se eternizando em cada cidadão que descobre tais informações. E por falar em juvantude, muitos questionamentos preocupam e pedem respostas como o General buscamos acabar com a questão da da fome. Sabemos que os países subdesenvolvidos, que já não é o caso dos menbros estudados, são caracterizados pela falta de acesso a atividades culturais e de ensino, a serviços dignos de saúde, ao lazer, a uma distribuição de renda mais equilibrada; enfim a melhorias das condições de vida, que este país procurava mesmo antes da proclamação de sua República, como também seu libertador e guerreiro procurava. A Independência foi precedida pela criação da bandeira, nela vemos refletida os Ideias do Iluminismo e detalharemos no momento oportuno, que acompanhou este guerreiro, buscando respostas fundamentadas na razão, na liberdade de expressão e de pensamento. Iniciava-se a transformação da natureza, e o desenvolvimento tecnológico. Manuel na época foi um homem de sorte, pois, por pouco não participou no congresso de Tucumán onde aconteceu a Declaração Oficial da Independência da Argentina. Ele havia feito anteriormente uma proprosta, ou seja, o Plano Inca de criar a já citada Monarquia Constituicional; isto é um monarca não mais absoluto e autoritário, mais popular. O que fora proposto teve apoio de San Martin e de muitos delegados provinciais, mas foi rejeitado por Buenos Aires. Por outro lado, o congresso de Tucumán aprovou sua Bandeira como bandeira nacional. No ponto de vista político, após a independência ainda continuaram as disputas pelo poder e muitas guerras civis que duraram até 1870, principalmente na América Central e na Colômbia. Nenhum vencedor destas guerras, conseguiu passar muito tempo no poder. O fato nos mostra, que apesar das lutas pela independência ter sido longas, e depois dela, contribuiu para acentuar ainda mais o caráter concentrador da população e das atividades econômicas que marcou o final da colonização. Como já tinha dito, Belgrano era militar, logo, participou de várias batalhas, e, criou o seu destacado e renomado Pavilhão. Este foi aprovado pela Assembléia do ano XIII, para ser usado como a Nacional Bandeira de Guerra. Esse é um dos motivos pelos quais é considerado um dos principais libertadores do país. Motivos semelhantes aos de Bolívar que também defendia uma América forte e unida, uma de suas afirmações relevantes e interessantes é a certeza ao morrer, de que a América é ingovernável. Manuel amava tanto sua cidade, Buenos Aires, que lutou contra os ingleses,que a ocupavam. Foi comandante das tropas da Banda oriental, que na época era o território localizado ao oeste do rio o Uruguai e ao norte do rio da prata, que hoje é a atual república oriental do uruguai e parte do atual estado brasileiro do rio grande do sul. Continuou lutando, duas vezes na campanha do Paraguai, um combate nas cercanias entre forças revolucionárias, sob seu comando, foi membro da Primeira Junta. Foi comandante das forças armadas do Peru, lutou contra os espanhóis, vencendo-os em Tucumã, onde se mostrou um verdadeiro guerreiro, com o intuito de conseguir a liberdade de seu povo. No vice-reinado do rio da prata, Belgrano tornou-se um membro notável do Criollo na população de onde nasceu, tentou promover algumas políticas econômicas com seus novos ideais, mas encontrou forte resistência. Considero que liberdade não é um conceito entendido de forma única; tem diversos significados. Para ele ser livre era poder negociar com todos os países, livres para fazer como podiam, mas pricipalmente livres para comerciar com todos os países livres para produzir. Não temos opção, o mundo é uma selva capitalista. Desde que sabemos por capitalismo, na sociedade, só vencerá quem for competitivo. Os melhores sobreviverão, os fracos ficarão para traz e Belgrano tinha como principal preocupação a educação para o povo de sociedade, para suportar esta concorrencia. Essa é uma de suas ideias sociais para a população argentina, pois ele pensava que as pessoas eram moldadas pela educação que recebiam, que somente a educação poderia acabar com a ignorância que dominava a sociedade naquela época. Assim, se uma boa parte da população não fosse mais “ignorante”, ele poderia ter a certeza que o mundo teria menos conflitos, menos injustiças sociais e que assim expressariam livremente seus pensamentos. Enfim, ele sonhava que as pessoas poderiam se unir, dependendo de quem fosse para conseguir a “felicidade” comum entre eles. Se observarmos um pouco os fatos descritos, não são apenas os aspectos econômicos que interferem no modo de vida das pessoas, assim, precisamos comparar diferentes povos, e é preciso levar em conta suas diferenças culturais, religiosas ou de valores e definir o que é semelhante. Na América do Sul, como em outros continentes, por razões históricas, econômicas e culturais a população não se distribuiu de forma homogênea nos territórios. Entre as causas de rápido processo do colonização dos países da América do Sul, destacam-se: as péssimas condições de vida que levavam a população rural a trocar o campo pelas cidades em busca de trabalho, educação e melhores condições de vida; falta de políticos agrários e de investimentos governamentais na agricultura; em alguns países como exatamente a Argentina, aumentaram muitos empregos nas cidades após a segunda Guerra Mundial. Considerando que a fome em alguns países não é a falta de alimentos e sim a má distribuição da renda em todo o mundo e pela falta de iniciativa política dos governos de todos os países, inclusive aquele que não vivem o problema da fome de maneira tão presente, pensando profundamente neste tema, verificamos no cotidiano dos países do Cone do Sul, resoluções para mudar completamente este quadro. Afinal, a categoria de terceiro mundo, representa um passado onde as desigualdades sociais eram gritantes e obviamente muito maiores do que nos países desenvolvidos. A elite sempre uma minoria riquíssima, enquanto a maioria da população permanecia pobre. A pessíma distribuição de renda foi causada por fatores como o predomínio do latifúndio com os camponeses quase sem terras, os baiximos salários pagos aos trabalhadores, que proporcionava altos lucros aos patrões, e benefícios somente a estes, com governos não preocupados em realizar obras sociais básicas com: escolas, creches, hospitais, casas populares. Tudo isto tem ficado no passado, eram reflexos das péssimas condições de vida da população trabalhadora. E o mais encontrado motivo para tanto sofrimento popular atualmente quase extinto e por vezes sempre combatido: a existência de muitos adultos analfabetos, milhões de pessoas morando em favelas ou debaixo de pontes, epidemias de fome, crianças morrendo por falta de comida e de médicos. O aspecto mais importante foi que a maioria esmagadora dos países do terceiro mundo faziam e fazem parte também do mundo capitailista. Um capitalismo que depende da economia dos países capitalistas mais ricos: depende dos financiamentos, depende dos investimentos, depende da tecnologia, surge com a fantástica e realística união chamada de Mercosul, com intuito de mudar todo cenário de horror causado pelas desigualdades. Com tantas boas transformações encontramos na Argentina, a área representada por Buenos Aires, Córdoba e Rosário se tornando a mais industrializada da América Platina, como Manuel Belgrano, idealizara. Provavelmente, se sentiria feliz hoje, se ainda fosse vivo, vendo e descobrindo que sua cidade natal crescera, e que se alastrara culturalmente, que é muito grande territorialmente, e, quase não acaba mais de tanta beleza, que preserva como patrimônio. Dentre tanta beleza e graça, estão também responsáveis pela evolução nacional: os avanços da tecnologia, que globalizaram as informações e a culturas mesmo na tevê. Incrível observarmos que ao serem passados filmes e programas de muitos lugares do mundo, incluindo nas tvs por assinatura podemos acessar canais estrangeitros nos rádios e de cinema. Podemos ouvir o planeta todo, temos os microcomputadores interligados no mundo pela internet, os jovens de todos os países se tornam muito parecidos nas roupas, na diversão nos sonhos de consumo e de crescimento. A Globalização torna irmãos e assemelham os povos, basta analisarmos os novos modos de relacionamento pessoal. Na perspectiva de tanta mudança os humanos buscam sempre a felicidade, que não é mais uma questão de opção individual, da capacidade do indivíduo de conquistar seu espaço, maqs de todos conquistarem o espaço comum. Nada neste sentido se compara ao Mercosul em termos de cultura regional interligada e o jeito como vem sendo implantado, por etapas sólidas. A juventude do século XXI, ou era globalizada sonha ainda com Belgrano e tenta realizar feitos capazes de cessar de vez com o sofrimento dos povos em estado de transição para um mundo melhor. As desigualdades internacionais que já foram muito grandes, antes aumentavam rápido e consideravelmente, os países ricos tendiam a ficar mais ricos e parte dos países do Sul tendiam ao contrário: ficar provavelmente mais pobres, porém o surgimento deste Mercado Comum é justamente equilibrar a economia e a capacidade de instrução exigidas pela concorrência do mercado mundial. Notamos que Belgrano foi um dos maiores interessados na independência da America, principalmente da Argentina. Porém, ele não imaginava que com o processo de independência, as excolônias entrariam em endividamento. Mostrando que as conquistas populares por sua vez, foram limitadas, por um período de tempo, pois, apesar disto Belgrano estabeleceu direitos comuns a todas as pessoas e abriu caminho para revolução histórica vivida por todos neste século. Foi o fundador no Rio da Prata, apoiou a abertura ao comércio internacional do porto de Buenos Aires, ações que visavam desenvolver a grande cidade, era membro da junta com mais experiência política, e o mais bem relacionado:a maioria dos servidores públicos, foram escolhidos por seu conselho, dirigiu por pouco tempo o ex partido Carlotista,mas rapidamente o controle do grupo foi passado para Mariano Moreno. Curiosamente, ele se preocupou com as pessoas, e acabou se esquecendo da sua vida pessoal, não se casando com sua amada Maria Josefa, tendo somente uma filha, pois, ele estava nas campanhas procurando a grandiosidade de suas conquistas. Na época que Buenos Aires entrou em guerra com José Gervasi Artigos e Estaniscao López, Belgrano veio a falecer de lidrospisia, doença causada por distúrbios na circulação do sangue, em 20 de junho de 1820. Morreu na pobreza, apesar de sua família ter sido uma das mais famílias nobres do rio da prata dantes de que Manuel Belgrano se comprometesse com a causa da independência. Homem que deu praticamente sua vida pela liberdade de seu povo, seu país. Mas tem o fato que sua cidade no momento estava em crise que se abatia sobre a província de Buenos Aires. A única pessoa durante que prestou devida atenção a seu falecimento foi o religioso Francisco de Paula Castañeda. Entretanto seu legado ficou como herança para o país que tanto amou e se dedicou. Após sua morte passou a ser lembrado por seus compatriotas, que ainda o engrandecem. Conclusão A influência do Mercosul se faz sentir do ponto de vista também na política externa:em 1991, Argentina e Brasil assinaram com urgência a Agência Internacional de Energia Atômica (AEIA) um acordo que pôs fim aos possíveis riscos advindos de experiências nucleares com fins militares. Este fato é importantissímo, pois desde o século XIX esses gigfantes da América do Sul vinham competindo para conquistar a posição de potência regional. Ambos ambicionaram até mesmo conquistar o título de desenvolvimento. Esse acordo reflete sua época, existe necessidade militar de proteção e defesas soberanas, agora unidas territorialmente e mais fortalecidas. Desenvolve-se a cooorperação econômica e estratégica baseada em mercados regionais, fenômeno globalizante que põe fim a rivalidades e atinge de modo positivo os aspectos sociais tais como segurança e em última instância causa um bom impacto no próprio cotidiano da população que percebe a estabilidade em suas vidas e pensamentos. Não restando dúvidas de que geografia e comportamento estão intimamente interligados. O objetivo do Mercosul é o de ampliar os acordos de redução de tarifas com os países envolvidos, de modo a fortalecer o bloco para defender as respectivas indústrias no futuro. A Argentina vivia ainda em estado de recessão e precisava de investimentos na opinião dos economistas e consultores argentinos. O Mercosul revelou-se um sucesso irreversível mas a plenitude de sua consolidação depende ainda de muitos avanços tanto em questões importantes como em ciências e tecnologia quanto em rotinas alfandegárias de fornteiras, onde, por exemplo, ainda existem restrições à livre circulação de obras de arte. Sempre foi almejada uma revolução prova disto encontramos durante o processo democrático as causas da Revolução de Maio que segundo Mário Maestri no Programa de Pós-Graduação em História, UPF, RS; “consistiu numa Revolução por necessidade e por interesses, das classes dominantes de algumas regiões da colônia hispano-americana que esforçaram-se para unificar em seus proveitos importantes regiões periféricas. Esse foi o caso das oligarquias pastoril e sobretudo comercial de Buenos Aires, que se desdobraram para manter a unidade territorial e política do antigo vicereinado do Plata, e com elas, os privilégios da cidade-porto, agora sob a direção, autoridade e proveito das classes dominantes crioulas locais, onde Belgrano esteve presente participando no ano de 1810 e assentando o poderoso golpe articulação entre as provinciais de Buenos Aires, do litoral e do interior vigente no período colonial. Por longos anos, o confronto político platino organizou-se fortemente em torno do maior e menor liberalização do comercio e sobretudo no controle dos políticos e portos alfandegários do porto de Buenos Aires.” Esta análise feita tanto pela visão da classe dominada como da dominante deixa nitido que o País é um só e o objetivo final também. Falando nisto, na maioria dos países tanto desenvolvidos quanto subdesenvolvidos a classificação de aglomeração humana, fenômeno que ocorre com frequência durante unificações, como nas cidades costumam levar em consideração algumas variáveis básicas: demografia número de habitantes, tipo de localização e presença de equipamentos urbanos como comércio, atendimento médico, número de filhos na escola, correios e serviços bancários. Veremos que a América Latina tem enfrentado desafios no dia-a-dia problemas a serem paulatinamente encerrados a medida que os acordos sejam consolidados na prática, resultando dentro do sistema, reformas necessária ao bem de toda nação, dando respostas as dificuldades ainda encontradas, ocorridas muitas vezes desde as gandes navegacões e expansão de territórios. Depois de várias guerras de libertação nacional. Despois de tudo isto a população teve a consciência real das desigualdades a que eram submetidas. Nesta recente fase do capitalismo contemporâneo, a proteção de mercado organizada em equipe de países sejam asiáticos ou sejam européus, mostra a nova face do sistema de capital, ou seja, a comunhão entre os povos. Na época do libertador da Argentina, Buenos Aires foi utilizado como centro de exportação. Os espanhóis criaram o vice reinado do prata onde o General se destacou entre os partidários da Idependência, apesar de existiram numerosos partidários escolhidos. Dentre muitos, ele foi o “um” que fez a diferença. Aliás, o preconceito muitas vezes é quebrado ao se assemelharem povos, nos anos médios do século XIX, entre os prórpios brancos notava-se uma separação que teve efeitos decisivos nos movimentos de libertação, faziam-se distinção entre espanhois nascidos na metropole e criollo nascidos na América. Daí a exigência de uma luta pela glória mesmo que mestiça. Não houve hesitação e fizeram acontecer a pretensa vitória. Onde as idéias revolucionárias protegeu os órgãs jornalisticos publicados no Rio do prata, do qual fazia parte e utilizava para divulgar a ruptura com a dependẽncia e rotulação de raça. Dentre seus seis objetivos em vida Manuel Belgrano insistiu e persistiu na educação, uma de suas principais preocupações: para isso elaborou durante seu estadia em Espanha um plano de ação com avançadas ideias sobre a mesma. E, preocupou-se com os direitos do homem, com democracia e a paz. Três momentos necessários do mesmo processo histórico: sem direitos do homem reconhecidos e garantidos não há democracia; sem democracia não há condições mínimas para a solução pacífica dos conflitos sociais. No entanto a democracia é a sociedade dos cidadãos. As pessoas passam a ser cidadão quando seus direitos são reconhecidos. Argentina, como outros países, apesar das lutas políticas, conseguiu ter um progresso econômico favorável e atingiram um grau de cultura bastante elevado. Notamos que mesmo quando as pessoas não podiam escolher seus superiores, a população era orientada no sentido de educar cada cidadão à sentir e compreender a responsabilidade que lhe cabe, seja no campo das atitudes políticas e ou na escolha dos homens públicos. Mesmo com a emancipação dos países, alguns povos permaneceram com mentalidade de escravidão por algum tempo, afinal continuaram a viver em condições de acentuada ignorância, entretanto no deserrolar de anos se adaptaram. Diante de todos esses fatos expostos e aceitos com veracidade histórica, concluímos que Manuel Belgrano foi responsável pelo grande passo para a independência e desenvolvimento do seu país. Que não pensou só acrescentou autonomia econômica, mas transformou com impacto positivo a educação para seu povo, a presente certeza de saberem defender seus direitos e interesses como cidadãos daquela cidade, que estava para ser uma das cidades históricas do mundo em beleza e turismo. Concluimos ainda que as atividades do Mercosul fazem eternizar seus ideais e trazem muitas melhorias para os membros que delas se beneficiam, porque estão incentivando a exatamente a área do turismo, visando que o mundo conheça melhor quais foram os motivos dessa união Latino América e a respeitem em suas decisões, tornando seus anseios realizados e dando credibilidade aos resultados alcançados. Como lição até mesmo de vida pessoal devemos aceitar que para se desenvolver qualquer empreitada; primeiro, devemos unir e focar o objetivo, para que op sucesso seja conquistado, desde uma busca pessaol ao gigantesco sonho americano. Bibliografia O Mercosul e a sociedade global – Walter Praxedes e Nelson Piletti – História em movimento – editora ática. Mercosul, a intimidade do mundo – Paulo Martinez – FTD. História – volume único – Gislane e Reinaldo – editora ática. História Hoje – Oldimar Pontes Cardoso – editora ática. Libertade e Igualdade: Sonhos Reais de Manuel Belgrano Aline Souza De M. Medeiros Brasil INTRODUÇÃO Evidenciam-se em estudos históricos que abrangem sociedades sempre momentos de vitórias e de derrotas. Neste que se faz presente, procura-se expor e discutir a importância de determinado cidadão, este denominado de Manuel Belgrano, que em sua existência, procurou ser reconhecido não apenas como mais um personagem da história sulamericana, porém como indivíduo revolucionário e influenciador. Pela pesquisa de cunho historico-bibliográfico, buscaram-se referenciais necessários para a efetivação e veracidade qualitativa deste trabalho monográfico. DESENVOLVIMENTO Ao analisarmos a história dos países da América do Sul, observam-se nomes de diversas pessoas que se destacaram por pensamentos e ações que, geralmente, iam contra sistemas burgueses e a favor das questões sociais e principalmente, a favor dos direitos do povo. Um exemplo de homem, cujo nome está marcado na História, é Manuel José Joaquín Del Corazón de Jesus Belgrano, um importante revolucionário. Nascido em 03 de junho de 1770, em Buenos Aires, Belgrano teve uma boa formação escolar e cultural. Tinha como matéria escolar preferida, a Filosofia, que contribuiu grandiosamente para sua formação crítica e reflexiva. Estudou Direito na Universidade de Salamanca e completou os estudos na Universidade de Valladolid. Durante seus estudos na faculdade de Direito, teve conhecimento primordial sobre os sistemas legislativos, políticos e principalmente sobre os direitos públicos. O pensamento Iluminista, destacado na Revolução Francesa, influenciou de forma intensa as ideologias deste jovem - nesta época encontrava-se na Espanha - e o clima revolucionário ficava cada vez mais forte. Devido ao seu conhecimento, foi convidado a assumir o cargo de secretário do consulado de Buenos Aires. Durante este secretariado, assumiu suas obrigações e teve a oportunidade de aplicar seus conhecimentos em uma realidade muito próxima, tendo como conviver com os problemas e tentar solucioná-los da melhor forma, colocando em prática suas teorias. Estas ideias iluministas influenciaram também várias revoluções como a Inconfidência Mineira, a independência dos Estados Unidos e como tinham por objetivo derrubar o Antigo Regime, consistiam em novas concepções filosóficas, econômicas que defendiam a igualdade e a liberdade de pensamento. Em 1799, criou a Escola de Geometria, Arquitetura, Perspectiva e Desenho após ter mandado um sermão ao vice-rei para que fossem formadas escolas de comércio, design e matemática, porém não obteve apoio das autoridades. Sua iniciativa de formação de institutos educacionais oferecia como direito o ensino igualitário entre crioulos e espanhóis e projetos de cotas para órfãos demonstrando sua visão social. De acordo com historiadores, em um discurso de 1802, Belgrano deixa claro sua expectativa com relação à escola: “...sabeis que daqui sairão indivíduos úteis a todo estado e em particular a estas províncias; sabeis já têm a quem por nas mãos para que conduzam seus navios; sabeis que com os princípios aqui ensinados tereis militares excelentes; e sabeis também que formarei jovens que com os princípios que nela adquirirem, como o costume com cálculos e meditação, serão excelentes professores em todas as ciências e artes a que se apliquem, porque levam em sua mão a chave mestra para todas as ciências e artes, matemática apresentando ao universo, de um pólo ao outro, o carimbo imortal de vosso zelo patriótico.” Dissemina na capital os trabalhos sobre o liberalismo econômico que se baseava nas concepções de Adam Smith, um importante filósofo e economista escocês, considerado o pai da economia moderna. No final do século XIII e início do XIX, Inglaterra e França, como eram as potências da Europa, lutavam pelo domínio em todo o continente europeu. Tinham países aliados que, às vezes, eram os mais prejudicados, como foi o caso da Espanha aliada à França e acabou tendo seu sistema colonial enfraquecido devido às diversas batalhas enfrentadas. Com um clima de conflitos e derrotas, o povo percebe a oportunidade de mostrar a sua força e sede de mudança. É neste momento que Belgrano toma suas primeiras decisões como militar tornando-se, em 07 de março de 1797, capitão honorário de Milícias Urbanas e Infantaria. Sem receber instruções ou algum tipo de preparo, coloca em prática sua organização e inteligência tática. A partir deste momento, começa sua história de lutas essenciais na história da Ação Emancipadora na América Latina. Em junho de 1806, o militar assume o cargo de capitão do batalhão de Milícias Urbanas, de forma interina. É dada a ele a ordem de formar uma companhia de cavalaria com jovens comerciantes e oficiais veteranos. Ainda neste mesmo ano, ocorrem as invasões inglesas a Buenos Aires. Com o objetivo de adquirir mais riqueza, o sir Home Popham tinha como objetivo conquistar Buenos Aires, então formou uma expedição naval para que pudesse apossar-se das riquezas que diziam que lá existiam. Ouviu-se também que era uma cidade mal defendida o que facilitaria sua invasão. Além disso, visava ultrapassar o protecionismo mercantil do decadente império espanhol. No começo das invasões, os ingleses não tiveram dificuldades e o vice-rei Sobremonte retirou-se para Córdoba sem resistir, isto os deixou confiantes de que suas táticas teriam dado certo, mas não esperavam que os portenhos, vendo a situação em que se encontravam, reagissem de forma grandiosa e retomassem a cidade. O capitão Belgrano, ao saber dos planos para acabar com o domínio inglês e do apoio de tropas formadas em Montevidéu, começa a organizar-se para participar da luta, mas é avisado de que já havia ocorrido a reconquista e que os ingleses haviam perdido esta batalha ocorrida em 12 de agosto de 1806. O povo, que morava na capital, começou a fazer uma divisão, organizando-se em grupos de voluntários de acordo com suas origens tendo como meta defender seus territórios. Vendo a importância do cargo que assumira, o capitão prepara-se, tendo lições sobre a utilização de armas e sobre as organizações que envolviam os conflitos. Convidado a assumir um novo cargo e com a necessidade de voltar a seu antigo papel de secretário do Consulado, toma a decisão de pedir baixa, mas mesmo assim atua na defesa da cidade como Ajudante de Campo do “Cuartel Maestre General Balbiani.” Com ordens de tentar invadir novamente a capital, o general inglês tenta uma nova estratégia e desembarca com suas tropas a certa distância da cidade, pois esperava entrar no território inimigo pelo porto, que era considerado um lugar menos protegido, mas as tropas inglesas foram derrotadas, deixando claro o poder que o povo tinha em defender sua terra. Após a perda, o general invasor envia uma carta ao seu chefe na qual disserta sobre o empenho das forças locais: "a índole do fogo a que estiveram expostas as tropas foi extremamente violenta. Metralhada nas esquinas de cada rua, fogo de mosquetes, granadas de mão, ladrilhos e pedras lançados do alto de todas as casas. Cada morador com seus negros defendia sua moradia e cada uma delas era em si mesma uma fortaleza. Não exageramos ao dizer que todos os varões de Buenos Aires se empenharam na sua defesa" (de Whitelock e Windham, 10 de Julho de 1807). De acordo com o escritor Mario Maestri, as relações de subordinação mercantil e comercial europeu, espanhol e inglês influenciaram diretamente a história das nações independentes que surgiram na bacia do rio Prata. O exército francês começou a expandir-se na Espanha e à medida que adentrava o território, diminuía as terras governadas pela Junta Central de Servilla, que tinha como vice-rei Cisneiros.. Devido a um decreto de novembro de 1809, Cisneiros se vê em uma situação muito difícil e acaba tendo que abrir seus portos para navios estrangeiros de países aliados ou países sem interesses em seus conflitos com a França, tendo que deixá-los usufruir de seu comércio. As autoridades espanholas foram totalmente contra, pois isto se opunha aos seus interesses comerciais, afinal eram comerciantes e não queriam que houvesse concorrência de suas vendas com as de outros países. Sabiam que se os portos fossem abertos teriam sérios prejuízos, pois teriam que baixar preços ou não conseguiriam concorrer com tanta variedade de produtos. Estando a Espanha nesta situação, lavradores e produtores guiados pelo doutor Mariano Moreno e altamente influenciados pelas ideologias de Belgrano, demonstram-se a favor do comércio livre, pois teriam a oportunidade de seus produtos serem mais valorizados e de ter opções a quem oferecer, quebrando a obrigatoriedade de vender apenas para os comerciantes locais. Em maio de 1810, a Junta Central perde sua força e passa a ser questionada a atuação e a capacidade de Cisneiros de ser vice-rei. A partir desse momento de desconfiança na autoridade escolhida pela junta Central, forma-se, no dia 25 de maio de 1810, a Primeira Junta de Governo, que pretendia destruir a autoridade do vice-rei, mas era defensora do Rei Fernando VII. Nesta Revolução foi estabelecido que quando o Rei estivesse impossibilitado de governar, o povo deveria se tornar o governante, pois este deve organizar seu próprio governo. É nítida a participação de Manuel Belgrano nesta Revolução, seus pensamentos e conquistas apresentam-se de forma viva e vão contra os interesses das autoridades e buscam beneficiar e atender aos interesses do povo. Uma Revolução não é feita por apenas um homem, por isso vale a pena destacar a participação dos integrantes da junta de Governo: Matheu, Castellí, Azcuénaga, Albertí, Larrea, Saavendra, Paso e Moreno. Os membros que mais se destacaram foram Juan José Castelli e Mariano Moreno, mas o homem considerado ideólogo da Revolução foi Belgrano. O militar revolucionário é designado a fazer uma expedição ao Paraguai, para este leva e tenta difundir suas ideias revolucionárias. Não obteve sucesso do ponto de vista militar, pois o povo paraguaio ficou contra a junta de governo. Esta oposição deveu-se ao fato de que a iniciativa da criação de Buenos Aires se deu em Assunção, conhecida como “mãe das cidades” e ao concretizar-se essa iniciativa, a nova cidade tornou-se capital do Vice-Reinado do Rio da Prata, criando sérios conflitos políticos e econômicos. Isto fez com que o povo paraguaio criasse um forte sentimento regional e tivesse uma mentalidade voltada para a valorização e proteção de seu território, dificultando a ação de militares argentinos. Em 24 de julho de 1810, foi convocada uma assembleia na qual foi decidido que Paraguai e Buenos Aires teriam uma relação fraterna, mas não haveria submissão ao governo. Tomando, também, decisões acerca das políticas de guerra e proteção. Belgrano teve como missão fazer com que o governo paraguaio reconhecesse o poder e a autoridade da junta de Buenos Aires ou fazer com que fosse criado um novo governo para que houvesse boas relações com o governo da cidade. Aproveitou o momento em que as tropas paraguaias se encontravam em uma difícil chance defensiva, optou-se pela invasão ofensiva e surpresa para que os inimigos não conseguissem se preparar para reagir aos ataques. Outra missão era ocupar militarmente o território e derrotar o governador Velasco para que fosse mais fácil o controle do resto do território. Sua estratégia consistiu em procurar caminhos mais extensos e evitar o caminho tradicional a fim de que as tropas inimigas se dividissem em todo campo e tivesse menos força. Velasco tinha vantagem, pois seu exército era maior do que o de Belgrano, seu objetivo era impedir que as forças bonoarenses conseguissem invadir o Paraguai, criando assim como o general inimigo, estratégias e estas foram essenciais para que conseguisse dominar as embarcações inimigas que estavam no Alto Paraná. O general Manuel Belgrano não teve o desempenho esperado, nesta expedição, do ponto de vista do militarismo, mas conseguiu realizar uma operação rápida, eficiente e conseguiu levar o espírito revolucionário ao povo paraguaio, tendo um bom desempenho diplomático.( Raúl Guillermo, 1995) Como suas embarcações, tinham sido dominadas por Velasco, Manuel teve dificuldades para conseguir navegar pelo Rio Paraná e teve que construir e adaptar meios de transporte fluviais para prosseguir viagem. Teria que enfrentar uma correnteza forte e desembarcaria em uma parte de um monte chamado “El Campichuelo”. No dia 18 de dezembro de 1810, surpreendeu com apenas doze homens um acampamento inimigo e conseguiu se apossar de suas armas e de seus prisioneiros. Sua missão era apoderar-se do monte em que havia desembarcado. Conseguiu cumprir seu dever e conseguiu o domínio do território com um brilhante êxito e obrigou os inimigos a deixarem o local. Por essa conquista, na qual estava com um menor número de soldados, foi muito admirado. Sabendo que as forças paraguaias tinham saído das terras do monte Campichuelo, o general ordena que uma parte de sua tropa se adiante para poder traçar uma nova estratégia. Estas forças paraguaias foram adentrando em seus territórios, mas tiveram dificuldades devido às formações naturais do relevo (montes) e aos seus pântanos. Sabendo destas dificuldades, pelas quais os inimigos estavam passando, uma parte da tropa argentina recebeu ordens para ir atrás destes. Em 11 de janeiro de 1811, a companhia de Gregório Perdriel alcançou os seus inimigos e os atacou, tomando posse de dois prisioneiros e de armamentos. Velasco, por sua vez, resolveu evacuar algumas aldeias para que quando as tropas portenhas chegassem a seus campos e não encontrassem povos, nem conseguissem armamento e prisioneiros. Após confrontos, conquistas e perdas, acontece a derrota de Belgrano, no combate de Paraguai. Então, o sargento resolve percorrer e ocupar uma região ao sul do rio Tacuarí. Esperava que lhe fossem mandados reforços e objetos necessários nas batalhas, já que tinha sido derrotado e precisava recomeçar com seus combates, mas para isso precisava de suprimentos, mais tarde seria derrotado no combate de Tacuarí. Os milicianos, geralmente, deixavam os campos de batalha quando os paraguaios começavam a responder aos ataques, deixando o exército em grau de inferioridade. Isto fez com que houvesse uma preferência pelos militares de Buenos Aires, pois tinham um pensamento realmente patriota e uma boa instrução. Uma batalha que teve grande importância na história da Revolução, a batalha de Tucumán, pois nela ao sair vitorioso, o general Belgrano deteve o avanço das tropas do vice-rei do Peru, que ia contra as ideias e a Revolução de 1810. Em 27 de fevereiro 1812, Belgrano criou a bandeira da Argentina e às margens do rio Paraná fez o primeiro juramento à bandeira e foi designado comandante chefe do exército do Peru. Dentre tantas batalhas pelas quais passou estão a de Salta, Vilcapugio e Ayohuma nas quais teve grande expressão militar e política. Durante o período revolucionário, o importante visionário depara-se com importantes símbolos da emancipação das províncias Unidas da América do Sul. Entre eles estão: 1. As “Heroínas da Coronilla”, as quais Belgrano oferece o seguinte: “Gloria a las cochabambinas que se han demostrado con un entusiasmo digno de que pase a la memoria de las generaciones venideras.” 2. Juana Azurduy que participa ativamente do exército de sua província. Todos tinham em comum os preceitos libertadores e a coragem para enfrentar seus inimigos. Dentre as tantas qualidades atribuídas a Manuel Belgrano, destaca-se a de estadista na qual um de seus principais objetivos era a integração dos povos americanos. Em seus inúmeros escritos, pode ser vista sua preocupação com as relações diplomáticas entre os países americanos. Empenhado na formação de cidadãos críticos que pudessem enxergar os exageros das autoridades e abusos sobre o povo, torna-se também muito importante socialmente. As ações sociais de Manuel relacionam-se com os mais diversos temas presentes não só nas províncias como também em nossa sociedade contemporânea. Preocupou-se com sistemas de cotas e principalmente com a educação. Suas ações principais: 1. Procurou dar às mulheres o direito de ter uma educação na qual se tornassem mais ativas socialmente e tivessem participação política e econômica. 2. Tentou pressionar autoridades para que estas dessem prioridade à construção de escolas de formação intelectual oferecidas a todos os cidadãos. 3. Objetivou a igualdade social, onde todos teriam os mesmos deveres e os mesmos direitos perante a lei. Tornando possível, alunos de diferentes nacionalidades ou origens terem as mesmas oportunidades de estudo, dando direitos às mulheres e reconhecendo o papel de cada cidadão dentro de uma organização social. Em 1819, debilitado devido a problemas de saúde, os quais eram frequentes, pediu licença de seu cargo como general e se despediu de seus soldados ao dar a ordem do dia. O governo provincial de Buenos Aires dá a Belgrano uma ajuda financeira para auxiliar em seu tratamento, mas no dia 20 de junho de 1820, veio a falecer. CONCLUSÃO O revolucionário estadista, militar e cidadão, Manuel Belgrano marcou de forma ímpar não somente a emancipação argentina, como também as inúmeras questões diplomáticas e sociais. As diversas nomenclaturas atribuídas a sua pessoa demonstram uma parte de seu prestígio e de suas conquistas. Ideologicamente questionava problemas que ainda se fazem presentes. Demonstrando assim, uma concepção que foi muito além de seu tempo, deixando claro que a educação, a igualdade de todos perante a lei e a luta pelos direitos devem constituir a base da sociedade. Além do exemplo de dedicação e coragem, a figura de Manoel Belgrano que com seus reais ideais de cidadania, proporcionou mudanças que beneficiaram não a um só grupo, mas a diversas nações. REFERÊNCIAS Sítios consultados: Instituto Nacional Belgraniano: http://www.manuelbelgrano.gov.ar Planeta Sedna: http://www.portalplanetasedna.com.ar Terra Educação / Voltaire Schilling – http://educaterra.terra.com.br/voltaire/ Pela Nação Anderson Michael Homburg Brasil Outubro de 2010 Deitou ao lado da mulher vagarosamente. Não falou sequer uma palavra, nem fez possíveis gestos que expressassem carinho ou nervosismo, apenas fechou os olhos e imobilizou-se. Talvez estivesse evitando sua esposa ou esperando para começar a discussão caso alguma palavra escapulisse da boca. Não conseguia entender o porquê de ela ter feito isso. Sabia que meter-se nesse assunto era muito perigoso e talvez até isso não levasse a nada, então, porque ariscar? Passaram-se alguns minutos, um tempo que parecia eterno. Um silêncio... Uma noite escura, pouco iluminada, onde se observava a luz da lua: radiante, branca, exuberante; e a das estrelas: paradas, caladas... Tão pequenas, porém gigantes, brilhantes, passando por caminhos difíceis em sua vida no infinito mundo eterno... Eterno tempo, alguns minutos, que se passaram. O silêncio foi quebrado pela doce e amorosa voz de sua mulher com o pedido de desculpas. - Perdoe-me! Eu só estava ensinando-lhes um pouco de história! - Que ensinando história o que, você estava colocando na cabeça desmiolada deles ideias de liberdade, de luta. Só porque ocorreu lá fora, acha que vai ocorrer aqui. Se é que um dia isso ocorreu lá. - Ocorreu sim! Eu ouvi a história. - Agora chega aqui, alguém, que a gente nem conhece direito, não se sabe se é de boa índole, de bom caráter, dizendo para gente se unir e lutar para esta terra virar um país. Tudo porque ocorreu lá... Nem sei onde. - Ocorreu na França, nos Estados Unidos, no Haiti! No Haiti, aqui na América, faz somente alguns anos. - Isso não é verdade, e mesmo que seja, nunca, ouviu bem? Nunca vai acontecer aqui. E eu te proíbo de participar dessa coisa e até de se misturar com essa gente. Entendeu, mulher? Proíbo-te. Virou-se de lado na cama para evitar sua esposa. Fechou os olhos novamente e descansou seu corpo. Queria esquecer isso. Ela poderia ter até continuado a discussão. Ter tentado convencê-lo a mudar de opinião, mas sabia que não valia à pena e que não conseguiria isso. Apagou a vela e deitou-se também de lado na cama, porém de costas viradas para o marido. Fechou os olhos, relaxou o corpo, mas diferente dele, não estava disposta e esquecer essa história. Apesar da hora, ainda estava meio escuro o dia. Parecia meio doente. No céu se viam somente nuvens escuras. O vento frio que pairava no ar, soprava por entre a vegetação de gramíneas e plantas rasteiras, fazendo flutuar as folhas de algumas árvores raramente encontradas perto de cursos d’água. Levantou-se da cama com os olhos meio cerrados. Foi lavar o rosto e voltou para fazer a cama. Seu marido já havia levantado, e pelo jeito, ido trabalhar nas minas de prata. Foi até o quarto dos filhos para ver se ainda estavam dormindo. Após ter confirmado, pegou um balde na cozinha e foi até o rancho para tirar o leite da vaca. O rancho já era meio velho, ou pelo menos aparentava. Era simples, construído com madeira e coberto com telhas de barro. Em seu interior se encontravam alguns ramos e plantas, usadas para alimentar a vaca no inverno quando a pastagem vira gelo e a grama morre e algumas ferramentas de trabalho da horta e em geral. Depois de ferver o leite e cortar o pão, foi acordar os filhos. Enquanto eles tomavam café da manhã, deu uma bronca neles por terem contado ao pai sobre a história, e ameaçou-lhes bater com o tamanco de madeira, caso contassem novamente algo para seu pai referente à revolta. - Porque mãe? Ele te bateu, brigou com você? – perguntou um dos filhos, Alejandro, o mais velho dos dois. Era muito voltado para a família, por isso carrega consigo sempre a responsabilidade de cuidar de seu irmão mais novo e de sua mãe. - Não, meu filho. Seu pai não fez nada, ele só não gostou muito da ideia da revolta. – explicou a mãe para o filho. - Mas porque ele não gostou dessa ideia de revolta? Você não disse que isso é bom para nós? – contestou Federigo. - É bom para nós! - Mas então, porque ele não gostou da ideia? – perguntou novamente o mais novo. - Ele só quer nos proteger. Ele acha que isso pode trazer uma desgraça para casa. Que possam nos matar por estarmos envolvidos. Depois de ter explicado para os filhos o porquê de seu pai não ter gostado da ideia, Belita notou que agora os dois estavam mais calmos, que pareciam ter compreendido o motivo do pai. Porém, Alejandro parecia meio estranho, durante todo o café não falou mais nenhuma palavra. Os filhos estudavam em uma Missão Jesuíta, construída no século XVII. O estilo de sua construção era uma mistura do barroco colonial europeu com construções guaranis. Tinha sido edificada por espanhóis com o objetivo de evangelizar e ensinar o idioma espanhol para os que ali moravam, principalmente os de descendência indígena. O trabalho em casa era muito dividido. Enquanto os filhos estudavam, Belita cuidava da horta, sendo esta muito importante para o sustento da família. Também era ela que preparava a comida e deixava a casa arrumada. Federigo, o filho mais novo, arrumava o rancho e Alejandro lavava a roupa. Todos buscavam a água em um poço. Antes de lavar a roupa, Alejandro sempre olhava quantas peças de roupa tinha para lavar, para assim, trazer a quantidade de água necessária. Ao olhar as roupas, Alejandro notou que a camisa, a calça e a peça íntima do pai estavam rasgadas. Como o este trabalhava em uma mina de prata, deduziu que a roupa foi rasgada lá, porém, para que isso pudesse ter ocorrido, ele deveria ter um machucado feio. Quando o pai chegou em casa, o jantar já estava pronto, carne bovina, muito expressiva na região. O que não era consumido imediatamente, era guardado em um baú de madeira, sendo a carne conservada com vários condimentos, o que lhe dava um gosto forte. Enquanto comiam, Alejandro se lembrou dos pedaços de roupa rasgados. Preocupado, resolveu perguntar: - Pai, você ainda está com dor? - Como assim? – perguntou o pai sem entender. - Se ainda está doendo a sua perna. - Mas porque minha perna deveria estar doendo? – perguntou o pai confuso, sem entender o que o filho estava querendo dizer. - Eu vi! Você se machucou no trabalho, não é verdade? - Não sei de onde você tirou essa informação, meu filho. Eu não me machuquei no trabalho. - Mas então porque suas roupas estavam rasgadas? – perguntou o filho, agora sem entender. Por um momento o pai ficou perplexo olhando para o filho. Não sabia o que responder. Sua esposa o encarava de uma forma que parecia um felino quando seu território é invadido. - Ah sim! É isso que você esta se referindo. Enrosquei em uma estalagmite, mas não me machuquei. Foi só um arranhão. Eu nem me lembrava disso – respondeu ele. - Mas pai, pelo rasgado da roupa você se machucou feio. - Não, meu filho. Não foi nada! Parecia que havia contornado a situação, pelo menos por hora. Depois que já estava satisfeito, queria se deitar, pois estava cansado. Pegou uma vela e foi para o quarto. Federigo e Alejandro tiveram que ajudar a lavar a louça antes de dormir. Após isso, os dois também foram para a cama, sendo acompanhados pela mãe. Quando chegou ao quarto, este já escuro, viu que Carlito já estava debaixo das cobertas. Belita trocou de roupa, deitou-se, apagou a sua vela e virou-se com a barriga para cima. Houve alguns segundos, onde pairou o silêncio. - Você pode enganar nossos filhos com essa história de que se machucou no trabalho, mas a mim você não engana. Conte a verdade! Não houve resposta imediata. Carlito pensou que se fingisse que estava dormindo, sua esposa deixaria a história de lado. Porém, sabia o quão astuta era ela. - Eu falei a verdade! – respondeu calmamente. - Não, você não falou a verdade que eu sei. Eu te conheço muito bem e sei quando você está mentindo. - Se você me conhece tão bem, então você sabe que eu estou falando a verdade! - Você está mentindo! – falou ela com um tom de voz um pouco mais alto e firme. - Se você não acredita, problema é seu. Eu sei que falei a verdade. E agora estou cansado. “Estou cansado”. A mesma resposta dada por ele na última vez em que discutiram. Essa mesma que causou a súbita ruptura na discussão, deixando-a, até o momento, sem ponto final. A agitação na região estava se tornando cada vez maior. Já se ouviram boatos da luta armada civil e da possível interferência da Espanha na, por hora, revolta. A população começava a juntar-se, unidos por um único objetivo, lutando lado a lado pelo novo país que iria formar: o país espanhol da América. Na praça principal da Buenos Aires era onde ficava o prédio da administração da capitania com sua construção exuberante de cor branca, dividida em dois pisos, tendo no segundo uma grande sacada. No telhado erguia-se uma grande torre com um relógio. Era rodeado com grandes casarões construídos um ao lado do outro e pintados de várias cores, o que dava um aspecto mais alegre. Ainda na praça, ficava uma enorme igreja, com sua torre podendo ser vista a milhares de quilômetros de distância e um monumento com duas bases quadradas, uma maior e a outra menor, com uma torre em forma de pirâmide no topo. Cada vez mais pessoas circulavam na praça. Os cavalos e burros que antes levavam frangos, gansos, caixas de madeira com alimentos, agora tinham suas mercadorias trocadas por armas, munição e outras ferramentas de guerra. Mesmo com toda esta agitação, era mais um dia normal para a família. O pai acordou cedo e foi trabalhar, os filhos foram para a missão jesuíta e a mãe cuidou da casa e da horta. Mal se podia acreditar que após um tempo tão ruim da noite anterior, o dia nasceria com um sol quente e com o céu azul. Como fazia tempo que não se via um dia assim, Alejandro queria aproveitá-lo, por isso resolveu que iria fazer uma surpresa para o pai. Iria visitá-lo no local onde ele trabalhava. Quando saiu da missão jesuíta com seu irmão, Alejandro falou para Federigo que era para avisar a mãe que ele iria visitar seu pai no trabalho e que voltaria com ele para o jantar. Ficou imaginando a cara do pai depois que ele visse o filho ali. Com certeza ele ficaria surpreso e feliz. Porém quem ficou surpreso, foi o filho. Ao chegar no local onde o pai trabalhava, não o encontrou imediatamente. Passou alguns minutos procurando-o, fora da mina, pois sabia que a essa hora já deveria estar fora da caverna se limpando para ir para casa. Começou a procurá-lo por entre os demais trabalhadores. Não o encontrou. Depois de algum tempo ouviu a voz de seu pai. Parecia meio estranha, porém começou a ir em direção a ela. Enquanto andava ia se afastando dos trabalhadores e logo Alejandro soube o porquê de estar afastado. Um sonho cruel e maligno? Um beijo... uma ilusão? Afogavam-se em beijos. E depois de braços abertos... a linda mulher parecia dormir enquanto ele passava seus lábios por entre seus seios. O desbotar da rosa enquanto ele palpitava, deixando-a com ar de desmaiada. Seria um sonho, ou melhor, um pesadelo o que estaria vendo? Foi um choque absurdo para ele a cena. Ficou ali parado, não conseguia se mexer. Após um momento, o pai percebeu a presença do filho. Vestiu-se rapidamente e andou em direção a ele. Este, quando percebeu que o pai estava se aproximando, começou gritar e a correr na direção oposta. Não o considerava mais como sendo seu progenitor. - Seu monstro, você não é meu pai! - Filho, pare! - Não! Seu monstro! - Eu mandei parar agora! Quando o pai falou, o filho tropeçou em uma pedra e caiu no chão. O pai se aproximava. Alejandro entrou em desespero, não queria que ele o tocasse, não queria vê-lo, queria esquecer o que viu, mas era impossível. Seus atos não responderam à sua consciência. Pegou uma estalagmite, que se encontrava perto, e com um golpe, perfurou seus olhos. A dor que sentia nem se comparava com a dor física naquele momento. O pai parou instantaneamente ao ver a cena. Viu o sangue sair dos olhos do filho, que se contorcia de dor e junto com o sangue, esvaia-se também a vida dele. Pos-se ajoelhado com o filho quase morto em seus braços. Uma vida por ele gerada e também tirada. A fácil palavra do pedido de desculpas se tornava uma difícil sentença diante daquela situação. Em ritmos ardidos de carne, sinais vitais em soluços de desespero a prata líquida da traição se esvaia do coração, levando-o para o eterno sempre vivo. - Não!! Meu filho! Não morra meu filho, não morra!Acorde, me dê um susto! Eu aprendi a lição, agora acorde! – falou enquanto sacudia o corpo morto – Não!! Não ensurdecedor. O doloroso adeus. O corpo em seus braços. Seu coração batendo forte senso camuflado pelos soluços da dor do desespero. Uma lágrima escorrendo pela face, antes nunca vistas. Os olhos vermelhos corados no rosto, vistas em sua vista. Seu mundo sumiu. Via-se perdido no nada. Sem motivo para estar vivo. Vagando na atmosfera esperando sua hora de dizer adeus. Não aguentaria tanta dor. Não teria forças para contar para sua mulher que matou seu filho. Sabia o que tinha que fazer. Subiu a montanha, onde se encontrava a entrada da caverna. Lá em cima,uma brisa suave lhe bateu no rosto secando suas lágrimas. - O que me resta, meu Deus? Nada! Não há motivos para viver! De tanta vida que em meu peito se enchia, morreu esta noite. Não levo sequer lhe flores floridas, meu filho, pois minha alma agora em trevas dorme e me consome. Um salto. O último salto. Um suspiro. O vento agita. Uma rocha... seu estômago perfura. Sem dor e lentamente o chegar da hora... do adeus. Enquanto isso, na casa onde moravam, Belita e Federigo estavam preocupados de Carlito e Alejandro não terem chegado para o jantar. Já eram dez horas da noite. Belita sentia que tinha acontecido alguma coisa, porém o que? A chuva começava. Ouvia-se o seu barulho, batendo no telhado da casa e os estrondos provocados pelos relâmpagos que caiam do céu e junto com eles as descargas elétricas que provocavam uma ligeira luz. - O que será que aconteceu? – falou para si mesma Belita – Lito nunca se atrasa para o jantar, ainda mais hoje que Ale estava junto. - Mãe, o que será que aconteceu que eles ainda não vieram? – perguntou Federigo. - Não sei meu filho! - Será que aconteceu alguma coisa? - Não! – respondeu a mãe. Eu espero Mais um estronde e um feixe de luz quando alguém bateu na porta. - Deve ser o papai e o mano. Eu vou abrir a porta. Quando ele abriu a porta, sua cara expressou desânimo. Era um homem, alguém que ele sabia que trabalhava com seu pai. - Oi Federigo – falou o homem – Tua mãe tá? - Está sim! Eu vou chamar. Pode entrar – disse o garoto e foi chamar sua mãe. Quando voltou com a mãe, ela percebeu que tinha razão, que havia acontecido algo com eles, Carlito e Alejandro. - O papai e o mano estão bem? – perguntou Federigo. - Já passou da hora de você ir deitar - falou a mãe para o garoto. - Mas mãe, eu quero saber por que o papai e o mano ainda não chegaram. - Eles não conseguiram chegar para o jantar por causa da chuva. - Mas acabou de começar a chover. - Mas está chovendo forte. - Mas, mãe... - É hora de dormir – falou a mãe interrompendo o garoto. - Isso não é verdade. Não deve ser por causa da chuva que eles não vieram para o janta. - Então, pergunta para o Adoniran! - É verdade? Adoniram fez que sim. - Viu, agora vai dormir que já é tarde. Boa noite, meu filho. Federigo deu um beijo no rosto de sua mãe, despediu-se de Adoniram e foi para a cama. Passara-se alguns segundo, Adoniram e Belita ficaram se encarando em silêncio. Ele estava pensando na melhor maneira de dizer o que aconteceu. - Eu sinto muito! - O que aconteceu? Porque eles ainda não chegaram? - Eles não vão mais chegar! Um trovão, uma luz, uma lágrima. A chuva salgada escorria por seu rosto, caindo do céu avermelhado. Impossível de se agüentar em pé foi até a cadeira sentar-se. Chorava tanto e tão alto que seus berros podiam ser ouvidos e vários metros de distância. O filho, que já estava deitado na cama, veio correndo para ver o que estava acontecendo. - Aconteceu alguma coisa, não é? - Teu pai e teu irmão não vão mais voltar para casa, eles morreram! Em estado de choque, Federigo ficou parado alguns segundos analisando a resposta. Não conseguia acreditar. Passado um tempo, também começou a chorar. Foi até a mãe e lhe deu um abraço sem muita força, pois já não mais tinha. A trovoada estava ficando cada vez mais forte. Com mais freqüência via-se os feixes de luz seguidos de grandes estrondos. No dia seguinte, o tempo não melhorou. O velório de Carlito e Alejandro foi feito com se eles fossem cristãos, mesmo sendo originários da região. Foram enterrados na missão jesuíta, local onde Alejandro estudava, junto com seu irmão. Com a vida ainda sem rumo, Belita e o filho não estavam à parte da antiga revolta, agora revolução, que estava acontecendo, porém não podiam negar que a cada dia a agitação estava ficando cada vez maior. A vida foi tomando seu caminho, e nele mãe e filho seguiam. Ela ora sabia aonde seus pés a levavam, ora se deixava levar... O filho entendia a mãe , mas nunca se atreveu a declarações. Sua ajuda – acreditava – era confiar e apoiar a mãe. Assim, os dias transcorriam... Em 1806 os ingleses chegam à América com o intuito de dominar a região holandesa do Cabo da Boa Esperança. Após ter-se concretizado, o general que comandava a expedição, avança a Montevidéu. Preocupado, Buenos Aires envia grande parte de seu exército para a cidade. Após isso, os ingleses marcham rumo a Buenos Aires. São recebidos primeiramente com entusiasmo pelos partidários da revolução, porém após perceberem que eles não estavam ali para ajudar na sua independência e sim para transformar a região em colônia inglesa, cercam o exército inglês, obrigando-os à rendição. Em 1807 chega a Montevidéu uma segunda expedição inglesa formada por 11 mil soldados. Com seu exército derrotado a cidade estaria indefesa, por isso, os soldados ingleses marcham em direção à Buenos Aires. - Mãe, eu ouvi que um exército de ingleses está vindo para cá – falou Federigo para a mãe. - Onde você ouviu? – perguntou ela. - Na rua. Ta todo mundo agitado. Diz que são mais de 10 mil soldados e eles estão vindo para conquistar a cidade. - Com da última vez. Querem tornar a cidade uma colônia inglesa. - Tem um monte de gente arrumando as coisas para ir embora daqui. - Eles estão com medo. Querem se proteger – justificou a mãe. - A gente também vai embora? Uma boa pergunta pensou Belita. Sabia que ir embora talvez fosse a única maneira de escaparem vivos, porém para onde iriam? A mãe não trabalhava fora. Depois que seu marido morreu dependiam muito do que produziam na horta e da vaca da qual obtinham o leite. - Não! – respondeu ela com rispidez. Sejam eternas as glórias que conseguimos e por estas vivamos ou juremos com glória morrer. - Meu filho, busque água no poço, muita água. E coloque-a para ferver. - Para quê? - Apenas faça o que lhe pedi. Logo entenderá. Enquanto o filho buscava a água, Belita foi até o sótão. Dentre as muitas coisas que ali se encontravam, buscava uma antiga arma, o qual herdara de seu avô. Carabina 22, cano longo, utilizada para a caça, porém sabia que ela não seria usada para isso hoje. Pôs a arma em cima da mesa, juntamente com vários cartuchos. Depois disso, foi até o rancho buscar um serrote, o qual utilizou para cortar a madeira que ficava na frente da porta de entrada principal. Tudo, tomando o cuidado de deixar como se aparentemente estivesse normal. Quando os soldados ingleses entraram na cidade, dividiram-se. Alguns foram lutar com os soldados de Buenos Aires que haviam restado, enquanto outros foram atacar casas de civis. Quando viu que os ingleses estavam chegando, mandou o filho com um balde de água quente para o sótão. Falou para abrir a janela e jogar a água quando os ingleses tentassem entrar pela porta da frente. Belita pegou outro balde de água e derramou-o embaixo da madeira da porta da frente da casa. Depois aguardou eles chegarem. Não demorou muito quatro soldados chegaram. Dividiram-se em dois grupos: um foi para a parte de traz da casa e o outro pela frente. Quando os dois soldados da parte da frente pisaram na madeira, ela quebrou-se, fazendo com que eles caíssem em um pequeno buraco, o qual estava chio de água fervendo. Os outros dois, ao ouvirem os gritos dos companheiros, foram até a porta de traz da casa para arrombá-la, porém Federigo, assim com sua mãe havia lhe ordenado, jogou o balde de água quente em cima deles, fazendo com que eles urrassem de dor. Após estarem imobilizados, Belita começou a atirar nos soldados ingleses, tanto nos da frente, como nos de tras. Quando todos estavam mortos no chão, ela pegou uma arma e munição de um dos soldados e mandou seu filho fazer o mesmo. Sabia que era perigoso para o filho ir junto com ela, porém não estava disposta a deixar sua única família em casa, desprotegida. Assim, foram ajudar outros civis a lutarem contra os inimigos. Quando tudo terminou, havia muitos corpos no chão, inimigos e amigos, porém sabiam que suas vidas são foram em vão, pois conseguiram proteger a cidade. A partir desta data, nada mais seria igual. Circulava a informação sobre o imperador Napoleão Bonaparte, que ele estava tentando conquistar toda a Europa e por isso ouviam-se informações da invasão da Espanha. As tropas de Napoleão haviam destituído o rei Fernando VII, sendo este substituído por José Bonaparte, irmão de Napoleão. Isto significava que a Espanha perdia sua autoridade sobre a colônia, deixando-a livre. Aproveitando a ocasião, os revolucionários que lutavam pela libertação da região, realizaram um movimento que visava a emancipação do vice-reino do Prata, da Coroa Espanhola. Para eles, não era uma questão a ser discutida, era algo como sendo necessário: a Proclamação de Independência. No dia 25 de maio 1810, foi formada a Primeira Junta. Esta teve o apoio das milícias de voluntários das guerras contra os ingleses. Essa Junta jurou fidelidade a Fernando VII, recusando-se a cumprir ordens vindas da Junta de Sevilha. Estava formado um novo país livre: A Província Unida do Rio da Prata. - Mãe! Mãe! – cutucava Federigo – Acorda! O sol despontava, o céu anunciava um novo e belo dia. Belita fitava, maravilhada, o filho. Via nele a presença do futuro que se aproximava a esperança que os impulsionava, a coragem para acreditar e, sobretudo a fé e a certeza que o sangue e as lágrimas derramados durante as batalhas forjaram a grande nação que resplandecia. A mulher abraçou e beijou seu filho, segura que assim como eles, todos os demais que conviviam naquelas terras – até os mais além – exalavam o mesmo perfume: o da Liberdade! REFERÊNCIAS BARBEIRO, Heródoto; CANTELE, Bruna R.; SCHNEEBERGER, Carlos Alberto. História: volume único: para o ensino médio. São Paulo, SP: Scipione, 2005. 488, 72 p. (De olho no mundo do trabalho) ISBN 8526256033. FIGUEIRA, Divalte Garcia. História: volume único. 2. ed. São Paulo, SP: Ática, 2004. 432 p. (Novo ensino médio) ISBN 8508089147. MELLO, Leonel Itaussu Almeida; COSTA, Luís César Amad. História do moderna e contemporânea. 5. ed. São Paulo, SP: Scipione, 2001. 487 p. ISBN 8526213571. MORAES, José Geraldo Vinci de. Caminhos das civilizações: história integrada geral e Brasil. São Paulo, SP: Atual, 1998. 583 p. ISBN 8570569637. Disponível em: <http://educacao.uol.com.br/historia/independencia-da-argentina.jhtm> Acessado em: 01/out/2010. Sonho de liberdade: Sonho de Liberdade: Emancipação e Atitudes Revolucionarias na Argentina Antonio Junio Pereir Araujo Brasil Republicanos e ativistas favoráveis à independência davam o primeiro passo para a autonomia política e econômica da Argentina, e isto desencadearia a liberdade dos outros estados formadores do Vice-Reino do Rio da Prata (Bolívia, Uruguai e Paraguai). “Se os povos não se ilustram, se não vulgarizam seus direitos, se cada homem não conhece o que vale e o que pode e o que se lhe deve, novas ilusões sucederão as antigas...” Mariano Moreno – 1810 1. Ser livre é ser... "Compatriotas. As armas vos darão a independência, as leis vos darão a liberdade.” Simón Bolívar 1 De uma forma geral, a palavra “liberdade” significa a condição de um indivíduo não ser submetido ao domínio de outro e, por isso, ter pleno poder sobre si mesmo e sobre seus atos. O desejo de liberdade é um sentimento profundamente arraigado e natural do ser humano. Está em sua essência a talante de procurar o desconhecido, agir sem imposição de ninguém, se relacionar com qualquer um. 2. Entrelaço: A formação da América Latina e seu desejo de ser liberta “A velhice é um estado de repouso e de liberdade no que respeita aos sentidos. Quando a violência das paixões se relaxa e o seu ardor arrefece, ficamos libertos de uma multidão de furiosos tiranos.” Platão Inicialmente, a América foi habitada por civilizações nativas. A teoria mais aceita para o seu povoamento, é que provenientes de nômades asiáticos 1 1 "Liberdade, essa palavra/ Que o sonho humano alimenta/ Que não há ninguém que explique/ E ninguém que não entenda",Cecília Meireles. conquistaram-na pelo estreito de Bering. Estas civilizações se firmaram pelo vasto território americano, formando assim, grande predomínio primitivo no continente. Durante os milhares de anos seguintes, essas civilizações cresceram, e se tornaram grandes impérios, onde a dominação já era visível, até mesmo em organizações tão primitivas. Bons exemplos dessas civilizações são os Astecas, Maias, Mixtecas, Chimu, Incas... Com a chegada dos espanhóis e portugueses ao continente, ele passou a ser chamado de “Novo Mundo”, e assim, colonizado. Os europeus começaram a migrar para o novo continente, e logo se “misturaram” com os povos originários da terra local. Assim, houve uma grande miscelânea entre as pessoas que ali viviam e os novos “visitantes”. Logo os costumes se uniram, e isso contribuiu para a atual formação cultural americana. Deve-se tomar cuidado para não achar que tudo isso aconteceu de forma pacífica e combinatória, como o texto sugere. Foi pela exploração, pelo domínio, e pela soberania imposta pelos europeus que as culturas se entrelaçaram. E foi por essa dominação que surgiu o desejo de liberdade. Os donos do “Velho Mundo” foram se instalando no novíssimo continente, e engajando suas vidas, como se tivessem nascido aqui. Índios e escravos se relacionaram com os brancos emigrantes. Deu-se início à miscigenação na América. As diversidades étnicas começaram a se juntar, e 2 naturalmente originou a formação dos povos crioulos , mestiços, e principalmente do hibridismo cultural. Tal miscigenação foi o que deu origem ao povo brasileiro, ao povo uruguaio, ao chileno, ao boliviano. E é essa mistura que origina a grande e rica identidade cultural do povo latino-americano. ___________________ 2 Crioulos ou criollos é a definição para indivíduo que nasce na América, mas descende de europeus. 2.1 Busca pela liberdade “A liberdade é a possibilidade do isolamento. Se te é impossível viver só, nasceste escravo.” Fernando Pessoa A exploração das metrópoles européias nas colônias tinha se tornado muito intensa. Haviam adotado a escravidão como sistema de trabalho. Trabalho como a criação de gado e rebanhos de ovelhas, plantação de grãos e cereais, e que tinha como único objetivo gerar lucro à coroa. 3 Revolucionários foram surgindo. Crioulos e caudilhos começaram a tomar partido na política local, e a consciência de que havia uma extrema exploração por parte da coroa espanhola, e que alguma atitude deveria ser tomada, estava sendo despertada. Pouco a pouco o desejo natural de liberdade ia surgindo nos colonizados. O apoio desses líderes fazendeiros e donos de terra foram de crucial importância para as atitudes que seriam tomadas a partir dali. Pequenos grupos e milícias revolucionárias começavam a ser formadas. O objetivo já era óbvio. 3. Tornar-se independente: A determinação argentina No advento do século XIX, a cobiça pela independência da coroa espanhola se tornava cada vez mais profunda na Argentina e em todo o Vice-reino da Prata. Já não se era mais suportado pelos países hispano-americanos o fardo de ter que depender da Espanha para toda e qualquer atividade política e econômica. Era expressamente proibido comerciar com colônias americanas, tampouco com nações européias. E a coroa espanhola era quem definia os governadores das colônias. ____________________ 3 O caudilhismo é um fenômeno comum até hoje na política latino americana, inclusive noBrasil. As elites agropecuárias privilegiam sua autoridade criando leis e formando exércitos próprios, sustendo por interesses pessoas e políticos. Movimentos internos em prol da libertação argentina começaram a se formar em Buenos Aires e seus arredores. Como o próprio nome sugere, Buenos Aires significa “bons ares”, e, certamente viver num estado colonizado e sem liberdade, não faz jus ao nome. 4. La Revolución de Mayo As Guerras Napoleônicas fizeram com que Fernando VII, rei da Espanha, fosse destituído do trono espanhol. Em seu lugar, foi nomeado rei Giuseppe Bonaparte, irmão de Napoleão. Devido ao enfraquecimento da coroa espanhola perante a dominação napoleônica, a Inglaterra 4 aventurou-se duas vezes em tomar Buenos Aires , o que provocou um grande tumulto no governo portenho. As milícias locais conseguiram afastar os invasores, e isso despertou a consciência de que o poder e auxílio da metrópole já não eram necessários. As vitórias perante os ingleses, e a autonomia da qual gozava o vice-reino fizeram com que idéias revolucionárias tomassem forma. A independência começava a ser algo viável. Surge então a figura de Manuel Belgrano. Estudou na Europa, e sempre promoveu a educação no vice-reino, fundando a Escola Náutica, e a Academia de Geometria e Desenho. Belgrano também havia sido líder da milícia que expulsou os ingleses, mas acabou afastado do cargo e sendo substituído por Santiago de Liniers. 5 Mayo estalló em 1810. A Revolução começava a acontecer. Em 22 de maio, Belgrano e outros ativistas (coronéis, crioulos, caudilhos, etc) convocaram uma reunião com um objetivo mais intenso e de maior impacto: arrancar do poder o vice-rei, Baltasar Hidalgo de Cisneros. Com a destituição de Cisneros, um conselho local seria eleito, e o primeiro passo para a independência seria dado. Foi a Revolução de Maio. ____________________ 4 Ouve-se muito falar que a Inglaterra apoiou Uruguai, Brasil e Argentina na Guerra do Paraguai, entre 1864 e 1870. A intenção inglesa seria frear o avanço paraguaio, já que ele crescia a largos passos, e poderia se tornar uma ameaça no mercado pós-Revolução Industrial. 5 “Maio eclodiu em 1810” (tradução livre) 5. O Ímpar Manuel Belgrano Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, ficou conhecido pelos seus compromissos sociais e revolucionários com o povo argentino e latino-americano. Nasceu a 3 de junho de 1770, em Buenos Aires, e teve sua morte em 20 de junho de 1820. Foi um político intelectual, economista, advogado e militar das Províncias Unidas del Rio de la Plata, atual Argentina. Participou ativamente da Revolução de Maio e da Independência da Argentina, juntamente de San Martín. 5.1 Compromissos Revolucionários 6 Belgrano , que herdava o sentimento crioulo de ser livre e independente, foi um dos principais nomes responsáveis pela emancipação argentina. Uniu-se à Primeira Junta, que dirigia o governo argentino desde a Revolução de Maio. Em 1810, quando nomeado dirigente do Exército do Norte, lançou a Expedição do Paraguai. O objetivo dessa campanha foi mais político que militar: a intenção de Belgrano era difundir entre os paraguaios a mesma idéia da Revolução de Maio, formando assim, a base para a Independência do Paraguai, que se deu em 1811. Em janeiro de 1812, Belgrano foi enviado à costa do Rio Paraná para protegê-lo dos espanhóis, e no dia 27 de fevereiro do mesmo ano, criou e levantou pela primeira vez, a bandeira da Argentina. É claramente notável a tamanha participação e contribuição de Belgrano no processo de libertação dos Estados formadores do Vice-Reino da Prata e nas campanhas patrióticas, que buscaram consolidar as nações latino-americanas, sobretudo a nação argentina. ____________________ 6 Em Buenos Aires existem uma avenida e uma estação de trem batizados em sua homenagem, além do elegante bairro de Belgrano, na zona norte da cidade. “Belgrano não era, como ele próprio afirmou, um homem de grande conhecimento militar, mas ele tinha a sabedoria de julgamento, uma honestidade a toda prova, o patriotismo, puro e desinteressado, o amor mais requintados da ordem, um entusiasmo decidido pela disciplina e valor moral que jamais foi contestado.” General José María Paz 5.2 Idéias Sociais Manuel Belgrano exerceu o cargo de Secretário do Consulado de Comércio de Buenos Aires, de 1794 até pouco antes da Revolução de Maio. Como Secretário do Consulado, considerava que o fator mais importante num Estado, era promover a educação, capacitando as pessoas para que utilizassem-na à benefício do país. Além da Escola Náutica e da Academia de Desenho, Belgrano fez várias outras contribuições para a educação. Tinha planos para a construção de escolas para meninas. Em suas palavras, “escolas gratuitas para meninas devem ser instaladas, onde elas aprenderão a doutrina cristã, leitura, escrita, costura, etc, e especialmente inspirar o amor ao trabalho, para separá-las da ociosidade, que é tão prejudicial para as mulheres quanto para os homens”. Belgrano defendia a educação gratuita para todos, sem barreiras sociais e culturais. Para o autor argentino Bartolome Mitre, Belgrano aconselhava que abrissem escolas em todos os bairros e vilas da cidade, oferecendo educação para crianças de ambos os sexos, em vista que em Buenos Aires só havia uma escola de educação primária, que se chamava “Desrey”, pois ainda era custeada pela coroa espanhola. 5.3 Belgrano e a Independência Sua participação na luta pela emancipação argentina do domínio espanhol foi de crucial importância. Talvez sem isso a independência da nação argentina só teria vindo muitos anos depois. Quem sabe só com as campanhas de Simon Bolívar e San Martín ou quem sabe com o enfraquecimento da metrópole. Foi aquela iniciativa de reunir os líderes locais para estabelecer um novo regime e destituir o vice-rei, que desencadeou o caminho da futura liberdade e independência. Liberdade em todos os sentidos: seriam livres para comerciar, para se expressar, seria definitivamente, a Liberta Nação Argentina. 6. Y finalmente...independiente Fernando VII que havia sido afastado, conseguiu por um golpe, novamente, o seu título de rei, devolvendo na mesma moeda a destituição de Giuseppe Bonaparte. Sua intenção agora era frear a rebelião emancipadora das colônias americanas. Ante tal panorama, os planos independentistas dos revolucionários viam-se seriamente afetados, gerando um monte de dúvidas sobre sua concretização. Por 7 isso, foi convocado um Congresso em Tucumán , com a presença de deputados de diferentes províncias. A escolha desta cidade do interior para a reunião se deveu, principalmente, ao sentimento antiportenho 8 da maioria das províncias, que buscaram dita decisão para limitar o poder centralista de Buenos Aires. Em 24 de março de 1816, deu-se início ao Congresso de Tucumán. Um dos assuntos mais debatidos na reunião foi a forma de governo que deveria ser adotada para as Províncias Unidas; apesar de a maior parte dos congressistas se mostrarem a favor da instauração de uma monarquia constitucional, houve encolerizadas e prolongadas discussões entre os diferentes representantes, que manifestaram não só suas posturas sobre o caminho a ser tomado, como ____________________ 7 Província no noroeste argentino. 8 Desde a Argentina Colônia, toda a atenção política e econômica era voltada para Buenos Aires. As províncias do interior eram simplesmente “complemento do vice-reino”. Esse sentimento por parte das regiões interioranas perdura até hoje na sociedade argentina. também os interesses políticos de cada uma das províncias. Os debates foram agitados, e se estenderam até 9 de julho de 1816, quando a pedido do deputado jujenho 9 Teodoro Sánchez de Bustamante se discutiu o projeto de Declaração da Independência. Nesse dia, o secretário Juan José Paso, que representava Buenos Aires, tomou a palavra e perguntou aos congressistas se queriam “que as Províncias da União fossem uma nação livre e independente dos reis da Espanha e sua metrópole”. Todos os deputados aprovaram por aclamação a proposta e depois cada um ratificou seu voto. Por fim, em um ambiente eufórico, procederam a assinar a Ata da Independência. O dia 9 de julho de 1816 convertia-se em uma data histórica: as províncias formadoras da Argentina proclamavam sua liberdade. 7. Argentina Pós-Independência Com a Independência da Argentina, o país passou por momentos críticos em sua história política. Primeiramente viu brotar-ser uma guerra civil que perdurou por anos a fio. Os federalistas do interior (fazendeiros conservadores, apoiados pelos gaúchos e trabalhadores rurais) lutavam por uma autonomia provincial. Do outro lado estavam os unitaristas de Buenos Aires (grandes comerciantes, imigrantes e ideais europeus) que defendiam um sistema de governo forte e centralizado na região portenha. O unitarismo prevaleceu com o caudilho e suposto federalista Juan Manuel de Rosas no governo. Já no século XX, outra grande crise governamental foi a frequente instabilidade política. Com a ascensão de Juan Domingo Perón ao poder, em 1943, a Argentina sofreu uma séria crise interna. Devido a dureza e incoerência no governo de Perón, um golpe de estado o derrubou do poder, dando lugar a 30 anos de alternância entre ditaduras militares e frágeis democracias. Com a sua volta em 1973, mais uma vez foi eleito presidente, logo deixando o cargo para sua mulher, Isabel, devido seu falecimento. ____________________ 9 Natural de Jujuy, província no noroeste argentino. Por pressões militares e instabilidade política e social na época, ela se viu obrigada a renunciar, e abrir caminho para uma nova ditadura. Esse novo regime militar só acabaria em 1983, mas até lá, opositores e militantes seriam torturados e estariam desaparecidos. Com a conturbada Guerra das Malvinas 10 em 1982, a Argentina acabou voltando à democracia no ano seguinte. 7.1 E o trabalho de Belgrano? Mesmo diante de toda a história que carimba a democracia argentina; depois de tanta luta pela independência e pela liberdade, o fatídico episódio da tortura e exclusão dos militantes de esquerda cruza a história da Argentina, e mostra o quão contraditório foi esse regime, levando-se em conta as lutas que Belgrano e San Martín travaram há duzentos anos trás, para promover a extrema liberdade na nação argentina. 8. A importância dos fatos "É curioso como certas palavras perderam o brilho e estima que tiveram em outros tempos. A questão é que agora esse brilho tem se transformado no contrário,já que o patriotismo se associa com o fanatismo" Carlos A. Ochoa Blanco Em 25 de maio deste ano, a Argentina celebrou assiduamente os duzentos anos da revolução que abriu o caminho para a independência. Foi a festa do Bicentenário da Ação Emancipadora. ____________________ 10 Conflito armado entre Argentina e Reino Unido, no ano de 1982. O objetivo era a soberania sobre as Ilhas Malvinas, dominada pelo Reino Unido desde 1833. O espírito patriota nunca esteve tão presente no povo argentino. E essa é uma das características que podem definir melhor esse povo. O sentimento de patriotismo está acima de qualquer coisa. Nos esportes, na política, na história. O povo argentino sempre será lembrado pelo seu imenso amor à bandeira. * Em virtude dos fatos mencionados, podemos entender a colossal participação que os povos originários das províncias latino americana tiveram na luta e ação pela independência da soberania espanhola. O povo argentino sempre demonstrou interesse e esteve presente nas revoluções, nas decisões políticas, e em quaisquer manifestações sociais (eventos, lutas, revoltas, festas) que envolvessem o nome de sua nação. Tomamos o Brasil como modelo: por mera questão cultural, nossa país nunca teve uma participação ativa de seu povo. A própria independência veio das mãos de um português, e desde a época colonial até os dias de hoje, essa consciência de “não participar” perdura no povo brasileiro, o que é claramente visto, por exemplo, na falta de posicionamento político no país. Com os argentinos isso foi bem diferente. Como foi citado, os crioulos e os formadores do caudilhismo deram uma enorme contribuição para o desenvolvimento histórico, político e cultural de seu país. Movimentos como a independência, guerras, revoluções políticas, manifestações culturais; os argentinos sempre estiveram presentes nestes atos, e é por essa razão cultural, que o espírito de patriotismo solidifica tanto a identidade argentina. Bibliografia Livros: • FLORIA, Carlos Alberto e BELSUNA, César A. Gárcia. Historia de los argentinos. Buenos Aires: Editora Larousse, 1992. • FERLA, Salvador. Historia Argentina com drama y humor. Buenos Aires: Editora Granica, 1974. 1ª edição. • MITRE, Bartolome. Historia de Belgrano. Buenos Aires: Editora Angel Acunã, 1947. 3ª edição. • GRONDA, Luís. Manuel Belgrano. Buenos Aires: Editora Peuser, 1938. 2ª edição. • GONZALEZ, Julio. Historia Argentina, Tomo I. Buenos Aires – México: Editora Tierra Firme, 1957. 1ª edição. Artigos: • Liberdade: Uma conquista do Homem, por Dora Lucia Alcântara. Rio de Janeiro: Jornal Existencial Online, 1999. • Liberdade. Ceará: Projeto Renasce Brasil, 2008. Sítios: • 3 de junio de 1770 – Nace Manuel Belgrano, (http://www.me.gov.ar/efeme/3dejunio/index.html). • História da Argentina, (http://www.portalsaofrancisco.com.br/alfa/argentina/historia-da-argentina.php). • A revolução de maio de 1810, (http://www.correiocidadania.com.br/content/view/4936/9/), • A revolução de maio de 1810, (http://cafehistoria.ning.com/profiles/blogs/a-revolucao-de-maio-de-1810). • Bicentenário, (http://www.bicentenario.argentina.ar/). • História Argentina: Colonização, independência, Perón, ditadura, democracia, (http://www.mibuenosairesquerido.com/Argentina7.htm#top). • A Jornada Histórica da Independência da Argentina, zaragoza/C728-a-jornada-historica-da-independencia-argentina.php). (http://www.pt.argentina.ar/_pt/expo- Las mujeres y la independencia de las provincias unidas en Sudamérica: Juana Azurduy, Macacha Güemes, las valerosas mujeres de Cochabamba- “Heroínas de la Coronilla” Mauricio Gabriel Morales Bolivia Cuando pensamos en la “Independencia” nos ponemos a pensar en hombres fuertes, guerra, y otros aspectos que son netamente machistas. Pero ¿qué hay de las mujeres aquellas figuras de porcelana que dejan sus vestidos de fiesta y toman las armas para poder defender a sus hijos y familias? A ellas me refiero como a grandes mujeres entre ellas tenemos a Juana Azurduy, Macacha Güemes y las mujeres de Cochabamba “Heroínas de la Coronilla”. Grandes mujeres llenas de amor por su patria y por sus familias, que pusieron sus vidas por amor a todo lo que tenían. Cuando escuchamos hablar de guerras y de experiencias que pasaron nuestros abuelos muy pocas veces escuchamos hablar de mujeres y creo que todos nos cuestionamos ¿por qué no se las menciona? Pues es por el simple hecho de que en nuestros países en ese entonces la mujer no jugaba un rol importante en la sociedad. Hoy en muchos países con la globalización, las mujeres juegan un papel muy importante en la sociedad. Si hacemos una remembranza de lo que ocurrió en esa época tan heroica en la que estas nobles mujeres hicieron de las suyas con las personas que las querían oprimir al yugo de esclavitud. Juana Azurduy “La capitana general”. Esta mujer se unió a la revolución de Chuquisaca que el 25 de mayo de 1809 que destituyo al presidente de la real audiencia de charcas. A continuación cito unas palabras de la heroína: "A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...)Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". Que hermosas palabras que nuestra heroína dio a conocer a las honorables juntas provinciales donde se demuestra el amor y la consternación de la perdida de su marido. Cuan noble es leer esta frase: “… En fin rodeada de una numerosa familia y de una hija que no tiene mas patrimonio que mis lágrimas…” Detrás de una figura muy fuerte en la cual se convirtió Juana Azurduy por la falta de su marido podemos apreciar a una mujer llena de amor por lo poco que tenia. Aun al leer los versos que dejo plasmados con letras de historia podemos recordar su imagen de cómo la describían los historiadores. Ella con su falda larga y con su sacón de militar, con su seño fruncido. Cuan noble es recordar a esta gran mujer que decidió tomar la carrera militar para poder defender su patrimonio, dejando de lado todo y sin olvidarse de su deber como mujer. Y ahora podemos mencionar a otra gran mujer que quedo en la historia mundial y que será recordada por siempre. Se trata de Macacha Güemes. Esta noble mujer acomodada de la ciudad de Salta Argentina se destaco por su habilidad en múltiples negocios. Hizo que se la utilizara para inclinar negociaciones a favor de la causa patriota. Machaca fue una de las mujeres más destacadas y resaltantes de Salta especialmente por las clases menos favorecidas. Estas clases consistían en su mayoría el ejército de Martín Güemes. Ella una mujer letrada nunca olvido que el amor por la patria y a sus ideales le hizo entender que cosas debía hacer sin dejar de lado sus responsabilidades en el hogar. Es en realidad grato poder escribir en estas páginas la de una gran mujer su historia. A continuación la historia de mujeres que dejaron a sus familias; las siguientes mujeres fueron algunas de las protagonistas de aquella sublevación femenina en Cochabamba son :Gabriela Taborga: Manuela Gandarillas, Manuela Rodríguez, las hermanas Juana y Lucía Ascui, Rosa Soto (la muchacha que inspiró el título de la novela de Nataniel Aguirre), las hermanas Parrilla (cuyos nombres no han podido ser establecidos), Mercedes Tapia, María Pascuala Oropeza, Manuela Saavedra de Ferrufino, Lucía Alcocer León de Chinchilla, María Isabel Pardo de Vargas, María Teresa Bustos y Salamanca de Lemoine, María del Rosario Saravia de Lanza y Luisa Saavedra de Claure. Estas grandes mujeres al ver que los soldados varones no tenían tropas para defenderse y al verse solas sin sus esposos decidieron tomar las armas que sus esposos dejaron y otras armadas con cucharones y cuchillos salieron a la batalla con sus hijos en la espalda, otros en los brazos y otros apenas caminando; mientras que otras embarazadas de varios meses. Se llenaron de coraje y fueron a la lucha. Es muy grande el respeto que debemos sentir por estas nobles mujeres que no escatimaron esfuerzos para poder defender e sus familias. A veces me pongo a pensar que en ciertos momentos estas mujeres decidieron cambiar la desesperación por la calma. Creo que el coraje de ellas fue muy grande para poder revelarse contra sus opresores y los opresores de sus familias. Este año en muchos lugares del mundo se llevaron acabo la celebración de los distintos Bicentenarios; Bolivia, Chile, México, Argentina y otros. Cada uno de estos lugares tuvo su historia y de seguro mujeres muy buenas que dieron su vida por defender a su patria y sus ideales. En los países que alcanzaron el desarrollo siempre tomaron a la mujer como una figura de adorno que solo tenia que ser una pieza de colección del marido. Nuestras mujeres demostraron ser muy patrióticas y demostraron al mundo entero que las mujeres pueden hacer las mismas cosas que los varones y en muchos casos lo hicieron mejor. Es más que obvio que en esa época la mujer no tenia derechos y por eso no se les hacía caso ni se tomaba en cuenta su opinión. Cuantas personas nos preguntamos que es lo que hizo que estas valientes mujeres cambien drásticamente su mentalidad de quedarse en casa tejiendo mantillas. Seguramente en la actualidad estemos volviendo en muchos países al tiempo de la opresión machista, muchos se preguntaran o dirán que yo como varón debería estar de acuerdo con el machismo. Gracias a Dios es que en mi familia me inculcaron el respeto al varón y de la misma manera o mas esmerado con la mujer. Ellas son nuestras madres, abuelas, hermanas, tías, primas, sobrinas, y en un futuro serán nuestras suegras, esposas, hijas y nietas. Por lo que creo que deberíamos de mantener es el respeto por ellas. Estas mujeres tardaron años en forjar este respeto. En especial creo que se debería festejar también en muchos países el bicentenario de la liberación de la opresión machista para poder recordar a los hombres supuestamente machos que de “machos” solo el nombre lo tienen porque son los maricones más grandes por no saber resolver sus problemas hablando con su pareja. A ellos les digo que macho es aquel que resuelve sus problemas hablando, maricón no es el que llora sino es valiente si se anima a acompañar con llanto, a su pareja cuando llora. En lo personal veo como un acto deplorable escuchar decir cundo un niño se cae y el es varón le dicen “machito, machito los hombrecitos no lloran” si saben que es una mentira los verdaderos hombres si lloramos. Gracias a estas mujeres es que muchas otras mujeres deciden superarse siguiendo su ejemplo. Gracias a ellas es que más o menos hace 200 años es que se vive una gesta libertaria en la cual seguramente muchas de ellas participaron en silencio. En muchos países se realizaron homenajes por sus bicentenarios en algunos se recordó a las mujeres participes de los procesos por los cuales se paso para poder llegar a esa emancipación. Cada vez que escucho hablar de estas mujeres se llena mi cuerpo de un espíritu de amor a la patria que hace que quiera hacer lo mismo por mi patria estas mujeres son la inspiración de la liberación; son el cherry de la torta; son el velo que completa el vestido de la novia; gracias a ellas y en su honor es que muchas personas incrementan su amor por la patria. Sin ellas creo que cada gesta emancipadora no hubiera tenido este realce. Deseo explicarles porque nosotros hablando netamente de Bolivia al vivir en una sociedad que por muchos años fue machista nos hicieron ver que la mujer debe estar sentada en la casa haciendo los deberes de casa bueno no quiero decir con esto que no lo deberían de hacer a muchas les agrada esta labor. Pero en todo creo que debe estar el toque femenino el cual da esa tranquilidad, se ha comprobado que donde se encuentra presencia femenina siempre se lleva un ambiente de tranquilidad. Creo que mientras las mujeres estaban en la batalla ellas se serenaban y salían a la lucha con la misma confianza que derramaban en sus esposos cuando partían a la guerra. Sin duda alguna esta confianza les daba la fuerza para poder vencer, esa confianza que derramaban en si mismas debe de ser la misma hoy y siempre no solo en las mujeres sino también en los hombres. Cuando un esposo confía en lo que desea emprender la esposa ella lo va ha hacer de la mejor manera. También creo que el apoyo de una mujer como el de estas heroínas es una clara muestra de lo que debemos de hacer apoyar a los que luchan por construir un país mejor. Otro de los valores que podemos rescatar es el bien común la definición de esta palabra es buscar el bien para tobos sin que nadie salga afectado; ellas tenían un bien común el velar por el bienestar de su patria. Creo que es el valor que debemos de cultivar los bolivianos, buscar un bien común el cual nos una y nos ponga con la mirada hacia un solo objetivo, mejorar nuestra amada patria. Debemos de ver adelante y unirnos como estas heroínas para mejorar y luchar por crear una mejor Bolivia. Otro valor que se destaca es el amor un mundo, sin amor creo que no existe estas heroínas, la gente necesita amar a las personas para poder luchar por ellas. En lo personal me considero como una persona amante de sus amigos y que estoy dispuesto a dar mi vida por ellos porque se que habrá un momento que ellos harán lo mismo por mi y una vez mas en este caso se demuestra la confianza, la confianza que yo tengo con mis amigos. También se da a conocer el amor por la patria que hermoso es poder decir ¡¡¡VIVA BOLIVIA!!! Con voz en cuello el amor por la patria es un valor que poco a poco se va perdiendo, la globalización daño mucho a los valores y uno de ellos es el amor a la patria estas heroínas amaron de gran manera a su patria que estaban dispuestas a morir para salvar a su tierra. Este patriotismo debemos de mantener y de inculcarlo en los colegios, puesto a que muchos jóvenes toman el amor a la patria como un juego y no lo toman en serio. También se hace notar sus agallas, que es una de sus fuerzas que nunca les faltara. Y en especial la esperanza, se dice la esperanza es lo ultimo que se pierde y ella hicieron merito a este dicho nunca se dieron por vencidas y es lo que debemos de hacer no darnos por vencidos nunca por mas difícil que sea la tarea a la cual se nos haya encomendado. Otro valor muy notable es la auto superación lamentablemente en muchas partes las personas no desean auto superarse y eso hace daño al lugar donde vive, estas heroínas se auto superaron y llegaron a ser grandes mujeres y porqué nosotros no podemos hacerlo. Muchos países se quedan estancados porque no todos sus habitantes desean superarse porque le temen a la tecnología. Por otro lado creo que hubiera sido una bendición haber podido conocer a tan grandes mujeres, espero no equivocarme con esto pero creo que ellas son las fundadoras de la liberación femenina en muchos países. Creo que como bolivianos deberíamos de sentirnos orgullosos no solo de nuestros libertadores varones sino de las heroicas mujeres bolivianas que dieron los años de su juventud en defensa de su país. En muchos lugares se las homenajeo; pude ver el acto que le hicieron a Juana Azurduy “La Generala Capitán” en realidad merecidos reconocimientos que recuerdan a una mujer de oro. En realidad no sé cuántos reconocimientos se hicieron a cada personaje por sus hazañas ni en qué lugares se los hicieron ni quien se los hizo pero una cosa si puedo decir que ellas no lo hicieron buscando que se les reconozca como otras personas. Cuando una persona hace las cosas sin interés alguno siempre lo hace de una manera mas desprendida como estas heroínas. Otro valor que creo notar es el servicio seguramente hubo un momento en el que ellas tuvieron que prestar servicio entre ellas y estoy seguro que lo hicieron de la mejor manera posible sin esperar nada a cambio. En la actualidad casi todos cuando hacen algo por alguien esperan una recompensa cuando debería de ser al revés hacer servicio sin esperar nada a cambio. Seguramente vieron la película “cadena de favores” si pusiéramos en practica esta cadena estoy seguro que el mundo cambiara y reviviremos el espíritu de nuestras heroínas. Para concluir deseo expresar estas palabras es tan grande el agradecimiento que tengo hacia estas grandes mujeres por no decirles súper-mujeres que no tengo palabras para expresar lo que siento por ellas. En esta época en la que muchos países celebramos distintos Bicentenarios, es grato para mí hacer una remembranza de lo que ocurrió y dar a conocer lo que estas mujeres hicieron. Gracias a ellas hoy estamos aquí, de seguro que hubo muchas mujeres que no se las nombra pero este ensayo también es un reconocimiento a estas mujeres y también deseo que nunca se olvide lo que ellas hicieron. Personalmente nunca las olvidaré, estas mujeres pasaron a marcar mi vida y de esta misma manera espero que marque la vida de los que puedan leer sus historias ellas son mujeres de oro, que en un gran momento estuvieron a nuestro lado. Ellas fueron las mujeres que cambiaron la vida de muchas personas me atrevo a decir de las señoritas que desean hacer el servicio militar toman el ejemplo de nuestras heroínas y este es el sentimiento que les impulsa a cumplir un deber mas con la patria. Ahora puedo decir en realidad que el dicho “al lado de cada gran hombre, hay una gran mujer”. Y me atrevo a cambiar el dicho por lo siguiente “detrás de cada familia hay una mujer heroica”. Estas heroínas fueron grandes madres, abuelas, hijas, etc. Que defendieron a su patria sobre todo y todos. Creo que ese es el espíritu que debemos de adquirir todos para que cuando toque defender a nuestro país lo hagamos de la mejor manera. Concluyó este ensayo con estas palabras ¡¡QUE VIVAN LAS HEROINAS DEL BICENTENARIO!! . Gracias a nuestras heroínas tenemos la libertad y ¡¡QUE VIVAN LASTIERRAS BICENTENARIAS!! DIAGRAMA DE LAS MUJERES HEROICAS DEL BICENTENARIO Nombres Juana Azurduy Fecha de Fecha de Lugares de El legado que nos nacimiento defunción participación dejaron Tras la derrota del "La propuesta Ejército del Norte de dinero y en la Batalla de otros intereses Huaqui el 20 de sólo debería junio de 1811, los hacerse a los realistas al mando infames que de José Manuel de pelean por su Goyeneche esclavitud, recuperaron el mas no al que control del Alto defendían su Perú y las dulce libertad, propiedades de los como él lo Padilla junto con haría a sangre las cosechas y sus y fuego."; ganados fueron comentario por confiscadas, siendo el rechazo del apresada Juana soborno Azurduy y sus ofrecido por un hijos, pero Padilla oficial español logró rescatarlos a su marido. 12 de Julio de 25 de Mayo de refugiándose en las 1780 1862 alturas de "Padilla es Tarabuco. cruel, es En 1813 Padilla y sanguinario Juana Azurduy se (...) La guerra pusieron a las se ha desatado órdenes de bárbaramente; Belgrano, nuevo ya no es la ley jefe del Ejército del Talión la Auxiliar del Norte, que prima, sino llegando a reclutar una ley más 10.000 milicianos. inhumana, por Durante la Batalla un muerto se de Vilcapugio, exigen dos, por Padilla y sus dos, cuatro", afirma milicianos debieron Gantier". transportar la "Juana artillería sin Azurduy está participar en el nuevamente combate. Juana embarazada Azurduy organizó cuando luego el "Batallón combate el 2 Leales" que de agosto de participó en la 1814 con Batalla de Padilla y su Ayohuma el 9 de tropa, en el noviembre de cerro de 1813, que significó Carretas. Y el retiro de los Juana Azurduy ejércitos argentinos sufre ya los del Alto Perú. A dolores de partir de ese parto cuando momento Padilla y escucha las sus milicianos se pisadas de la dedicaron a realizar caballería acciones realista guerrilleras contra entrando en los realistas. Pitantora. Azurduy lideró la Luisa Padilla, guerrilla que atacó la última hija el cerro de Potosí, de los amantes tomándolo el 8 de guerreros, marzo de 1816. nace junto al Debido a su Río Grande y actuación, tras el experimenta triunfo logrado en ahora en el Combate del brazos de su Villar recibió el madre los rango de teniente ardores de la coronel por un vida decreto firmado por revolucionaria". Juan Martín de Pueyrredón, Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, el 13 de agosto de 1816. Tras ello, el general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable. [1] El 14 de noviembre de 1816 fue herida en la Batalla de La Laguna, su marido acudió a rescatarla y en este acto fue herido de muerte. Al estallar la Revolución de Mayo, adhirió a la causa patriota, colaborando con su hermano de manera destacada en muchas formas, que iban desde la confección de vestimentas e indumentaria para los soldados, hasta la obtención de información entre los partidarios realistas. Macacha Güemes 11 de Diciembre 7 de Junio de También participó de 1878 1866 en múltiples negociaciones, utilizando su influencia para inclinar negociaciones a favor de la causa patriota. Después del fallecimiento de su hermano en junio de 1821, continuó sirviendo a la causa revolucionaria. Macacha fue una de las mujeres más destacadas y respetadas de Salta, especialmente por las clases menos favorecidas, las cuales constituían en su mayoría el ejército gaucho de Martín Güemes. Después de la “A los gritos de viva batalla de Guaqui y el rey, o mueran los de su triunfo en traidores, una Amiraya inmensa cantidad Goyeneche se de gente se agolpó dirigió a en la plaza…allí Heroínas de la Cochabamba, y de entre los ruidos de Coronilla allí a Chuquisaca y los tiros y sones de Potosí, con objeto campana, se llevó de detener a los a cabo la argentinos que ya revolución. …El estaban formando movimiento de el segundo ejército Charcas es el auxiliar; para ello comienzo de la mandó a Picoaga a lucha por la la fortaleza de emancipación de Cotagaita de donde los territorios alto salió para enfrentar peruanos”. a los patriotas, “…Libelos, comandados por leyendas, pintadas Díaz Vélez en en los muros se enero de 1812, convierten en cosa venciéndolos más o menos nuevamente en común; algunos Suipacha. son burlones o risueños, pero los Después de este hay quejosos y triunfo Goyeneche amenazantes; pensaba avanzar también lúcidos hasta Salta, pero alegatos a favor de tuvo que cambiar la independencia”. de planes al saber “…en el modelo de que Cochabamba orden social se había levantado patriarcal, vertical y nuevamente. Su autónomo, del cual ánimo no era eran portadores los conciliador como la conquistadores vez primera sino ibéricos; todo varón que iba dispuesto a era, por definición, dar un escarmiento superior a toda a los rebeldes. mujer…”. Para entonces Esteban Arze había coordinado con los jefes patriotas de Chayanta, Sicasica y Tapacarí, obstaculizando seriamente el movimiento de las tropas realistas. Para esa fecha, 1811, ya había un movimiento guerrillero considerable. El encuentro entre las tropas de Arze y Goyeneche tuvo lugar en Pocona, en mayo de 1812. Arze fue vencido y Goyeneche avanzó hacia Cochabamba que preparaba la resistencia con muy escasos recursos. Se intentó un pacto con Goyeneche, pero éste pedía que les entregaran a los cabecillas. La ciudad se negó a hacerlo, especialmente las mujeres, y se atrincheraron en la colina de San Sebastián, en el lugar conocido como "la Coronilla". Goyeneche entró en Cochabamba el 27 de mayo, quebrando totalmente la heroica resistencia. Las tropas realistas se dieron al saqueo y los principales jefes revolucionarios fueron ejecutados. La Búsqueda de la Libertad “El Grito De Dolores” Erick Yurguen Mendez C. Bolivia 1.- INTRODUCCIÓN. El Grito de Dolores es considerado el punto cronológico con que inicia la guerra de Independencia de México. Consiste en el llamado que el cura Miguel Hidalgo y Costilla (en compañía de Ignacio Allende y de Juan Aldama), hace a sus parroquianos con el fin de que estos desconocieran y se sublevaran en contra de la autoridad virreinal de la Nueva España en la mañana del 16 de septiembre de 1810. El llamado se hace al tañir la famosa Campana de Dolores, ubicada en el campanario oriental de la iglesia parroquial del entonces poblado de Dolores (hoy Municipio de Dolores Hidalgo C.I.N. (Cuna de la Independencia Nacional), ubicado en el territorio del estado de Guanajuato). Comenzando la lucha por la independencia, esta lucha que al principio fue encabezada por el Cura Miguel Hidalgo y el General Ignacio Allende, y que duró aproximadamente once años durante los cuales mucha gente estuvo al frente del ejército insurgente, hasta que en 1821 México se proclama un país independiente. 2.- OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN • Analizar las causas que desembocaron en el movimiento revolucionario que comenzó con “el grito de dolores”. 3.- MARCO TEORICO 3.1.- ANTECEDENTES. El movimiento independiente comprendió en México un período de once años que va de 1810 a 1821 y las causas que lo motivaron fueron tanto internas como externas. 3.1.1.- Causas Internas Sociales: Las internas correspondieron, primero, a la desigualdad social; los criollos se sentían relegados a un segundo plano por los peninsulares, y fueron aquéllos los que dirigieron la revolución; los mestizos no eran tomados en cuenta debido a que en su gran mayoría eran fruto de relaciones ilegítimas; los indígenas, protegidos por las leyes de Indias, querían emanciparse de este tutelaje; las castas se encontraban en condiciones inferiores por su propio estado natural y en general el descontento era unánime. España ya no era la nación unitaria en su moralidad y costumbres, pues los borbones habían llevado una conducta política extraña. Económicas: España había considerado siempre a América como parte de ella misma, y por ende había dejado en pie un sistema de monopolios, estancos y barreras que tendían a impedir el libre comercio exterior. Los impuestos eran muy elevados y España estaba en decadencia. 3.1.2.- Causas Externas Ideas de los enciclopedistas y economistas: Durante el siglo XVIII comenzaron a extenderse por Europa las ideas de los enciclopedistas y de los fisiócratas; los primeros hablaban de nuevos sistemas políticos con la soberanía del pueblo, libertad, tolerancia de la igualdad-tales eran los casos de Montesquieu, Voltaire y Rousseau, que ya no aceptaban el derecho divino de los reyes y querían la división de poderes. Los fisiócratas sostenían la libertad del comercio y la industria, pidiendo que se suprimieran barreras de aduana para que las mercancías fluyeran libremente sin la intervención del estado. La Revolución Industrial: Que había triunfado en Inglaterra a fines del siglo XVII imponiendo el sistema maquinista sobre el artesanal y creando, además, una nueva clase social que fue la burguesía capitalista, la cual tuvo que hacer frente a los problemas del proletariado. Las potencias industrializadas tuvieron que competir por los mercados, al luchar por el abastecimiento de las materias primas. La independencia de los Estados Unidos: En 1776. Esta fue otra causa externa que sirvió no sólo de ejemplo a los países latinoamericanos, sino que, además, privó a Inglaterra de algunas colonias, por lo que tuvo necesidad de buscar otras en diferentes regiones; de ahí el apoyo que esta nación prestó a los movimientos independientes. Los principios de la Constitución Americana, democráticos y populares, parecieron un arquetipo deseable para todas las colonias que se sentían llegadas a su mayoría de edad y capaces, por tanto, de gobernarse por sí mismas. La Revolución Francesa: constituyó otra causa con grandes repercusiones. Los Derechos del Hombre y del Ciudadano, sostenidos frente al estado e inalienables a la persona, se conocieron también en América a pesar de la vigilancia de la Inquisición. Lo que en Francia constituyó la lucha de la clase social más débil, el tercer estado que se había atrevido a enfrentarse a los privilegiados y reivindicando para sí sus derechos, fue un modelo digno de ser imitado. El liberalismo en general: con sus movimientos libertarios establecidos en sociedades secretas, completaron este panorama de inquietudes. En Londres, en 1798, se celebró una gran reunión que estuvo formada por liberales de toda América, que buscaban por lo menos una autonomía de gobierno propio emanado de los criollos y no importado de España. 3.2.- ETAPAS DEL MOVIMIENTO ARMADO. Así, que partir de estas causas, tanto internas como externas y sabiendo que el pueblo mexicano era un fiel seguidor de la iglesia, se pensó en invitar a un sacerdote a fin de convencer a todo el pueblo, por eso Allende propuso a Miguel Hidalgo y Costilla quien era cura de Dolores; Hidalgo aceptó la invitación., y fue Allende quien se encargó de mantener el contacto con Hidalgo. Se tenía planeado comenzar el movimiento de independencia el 2 de Octubre en San Juan de los Lagos (Jalisco), pero por denuncias hechas ante las autoridades por Mariano Galván, fue necesario adelantarla en septiembre. El gobierno Virreinal, enterado de que los conspiradores de Querétaro preparaban un levantamiento para principios de octubre de 1810, ordeno arrestar a los principales conjurados, el 13 de septiembre de ese año. El encargado de cumplir la orden fue el propio corregidor don Miguel Domínguez, quien incluso confinó a su esposa en su casa, pero esta logro enviar en secreto un mensajero a sus compañeros en San Miguel el Grande; el emisario, don Ignacio Ramírez, al no encontrarlos en ese sitio, continuo su camino hasta la villa de Dolores en donde, a propuesta del cura Hidalgo decidieron iniciar la lucha. Primero pusieron en libertad a los presos, aprehendieron a los españoles que se encontraban en la población. Luego a las 5 de la mañana del 16 de septiembre de 1810, se llamó a misa, el pueblo acudido al llamado y con el grito ¡Mexicanos, viva México!, ¡"Viva la Virgen de Guadalupe"!, ¡Viva Fernando VII! y ¡Muera el mal gobierno!; Hidalgo incitó al pueblo a levantarse contra los españoles. A este suceso se le conoce como "Grito de Dolores". Hidalgo acusó a los españoles de pretender entregar el reino a los franceses y hacer peligrar la religión, y en seguida informó a los habitantes que quedaban exentos de pagar impuestos e iba a realizarse la independencia. El pueblo muy molesto se armó como pudo (machetes, cuchillos, palos, lanzas, etc.) y se unió al movimiento. Llegando a San Miguel se les unió el ejército de Dragones de la Reina, y partieron hacia Celaya, donde Hidalgo fue nombrado General del ejército, Allende fue nombrado teniente y Aldama Mariscal, esto con el fin de organizar un poco a la gente. Y de ahí salieron hacia Guanajuato y en medio de una fuerte lucha entraron a la Alhóndiga de Granaditas (donde estaban los españoles), tomando así la ciudad. Cuando se dirigían a la capital derrotan a las fuerzas españolas al mando de Torcuato Trujillo en el Monte de las Cruces. Allende decide ir a Guanajuato e Hidalgo marcha hacia Valladolid, y luego hacia Guadalajara, donde organizó el primer gobierno el cual tuvo dos ministros: Ignacio López Rayón, a cargo del Estado, y José Maria Chico, en Gracia y Justicia, quedando Hidalgo como magistrado supremo de la nación. También se hizo la primera reforma agraria en la cual se manifestó que los indígenas eran propietarios de la tierra, se suprimieron los tributos y se confirmó la libertad de los esclavos. Elizondo que era el jefe del movimiento libertador en Coahuila, los traicionó y fueron arrestados en Acatita de Baján (Las Norias). Hidalgo, Allende, Aldama y Jiménez fueron juzgados y condenados a morir fusilados, luego de ser fusilados los decapitaron y sus cabezas las pusieron dentro de jaulas y las colgaron en las 4 esquinas de la Alhóndiga de Granaditas. La muerte de estos caudillos marcó el final de la primera etapa de la lucha por la independencia Al aproximarse a la ciudad de Guanajuato, se le envió una comunicación a Juan Antonio Riaño, intendente local, exhortándolo a rendirse y a tomar la causa de la independencia, pero él decidió permanecer fiel al gobierno español y resistir en la Alhóndiga de Granaditas, sitio en que se refugiaron los españoles, con sus familias y caudales. La localidad fue tomada a fuego y sangre, y al termina del combate las indisciplinadas masas saquearon, tanto las propiedades de los españoles peninsulares, como las de los criollos ricos. A los pocos días, el obispo de Michoacán, don Manuel Abad y Queipo, excomulgó a Hidalgo, pero ello no fue obstáculo para que este continuara su campaña. Tomo la ciudad de Valladolid, desde donde se encamino hacia la ciudad de México. En el trayecto, se entrevisto con José Maria Morelos en la hacienda el Charo, encomendándole extender la insurrección al sur del país. En la batalla de Monte de las Cruces, cerca de Toluca, Hidalgo derrotó a los realistas dirigidos por Torcuato Trujillo, fuerzas en las que militaba Agustín de Iturbide. Tras su triunfo, él ejército insurgente llegó hasta Cuajimalpa, en las afueras de la ciudad de México; para entonces esta se hallaba consternada ante la derrota del ejercito virreinal y la confusión se había apoderado de todos. Hidalgo, después de permanecer indeciso por varios días, discrepando de la opinión de Allende, inexplicablemente se dio vuelta sin entrar a la capital. En su marcha hacia Querétaro, en un lugar denominado San Jerónimo Aculco, él ejército insurgente sorpresivamente se encontró con las tropas de Félix Maria Calleja, ante las cuales sufrió una derrota. Mientras tanto la insurrección se extendía por otras partes del país. Hidalgo arribo a Guadalajara en noviembre de 1810 y poco después lo hizo allende. En Guadalajara el “Padre de la Patria” expidió los más importantes decretos sociales de la insurgencia: el que trataba sobre el uso de las tierras de comunidad por dueños, el relacionado con la abolición de la esclavitud, el que establecía la extinción de los monopolios estatales de tabaco y la pólvora, y el de la supresión de los tributos que pagaban los indios. Mientras tanto, Calleja había recuperado las ciudades en poder de los insurgentes, pretexto para que este jefe español permitiera feroces carnicerías contra sus adversarios. El 17 de enero de 1811, las tropas realistas de Calleja enfrentaron a las fuerzas insurgentes dirigidas por Allende, contingentes que si bien eran superiores en número, al carecer de disciplina militar, fueron derrotados. En Acatita de Bajan, en una emboscada que les tendió el traidor Ignacio Elizondo, fueron hechos prisioneros, juzgados y finalmente fusilados. Sus cabezas fueron exhibidas en cada una de las cuatro esquinas de la Alhóndiga de Granaditas, como escarmiento o advertencia para sus seguidores. A la muerte de los primeros líderes independentistas, don Ignacio López Rayón trato de reorganizar a los insurgentes en la junta de Zitacuaro. Pero fue con Morelos, cura de Caracuaro, con quien prácticamente continúo la guerra en el sur de la Nueva España. Aunque con Morelos él número de efectivos del ejército se redujo, los contingentes poseían mejor disciplina y no se les permitía el saqueo. El caudillo contó con la colaboración de hombres valerosos e inteligentes como los hermanos Hermenegildo, Pablo, Juan y José Galeana, de Miguel, Víctor, Máximo, Leonardo y su hijo Nicolás Bravo, de Mariano Matamoros y de Vicente Guerrero, entre otros. Entre 1812 y 1813 Morelos capturó pequeñas poblaciones del hoy estado de Guerrero. Con el propósito de apoderarse de la ciudad de México emprendió otras campañas. En Cuautla sus tropas fueron sitiadas por los ejércitos de Calleja, el sitio duro 73 días, el 2 de mayo de 1812 Morelos logro romperlo. Morelos, pensando que el fin de la dominación española se acercaba, decidió organizar un congreso nacional que le diera una constitución política al país. Es este, llamado Congreso de Anáhuac. En tanto Morelos se dedicaba a la actividad política, encabezando durante varios meses las sesiones del Congreso en Chilpancingo, Calleja reorganizo y equipo al ejército realista, por lo que, en los combates Morelos fue derrotado en Valladolid y las fuerzas virreinales lograron penetrar en el sur. El Congreso se vio obligado a peregrinar de un lugar a otro. Por fin, en octubre de 1814, en Apatzingán, el Congreso promulgó una constitución que fue el primer intento de constituir a México como una republica. Al sufrir varias derrotas y la perdida de varios de los mejores capitanes, Morelos cayo prisionero, siendo trasladado a la cuidad de México, donde fue juzgado y condenado a muerte. Con su fusilamiento, ocurrido el 22 de diciembre de 1815, en Ecatepec, Estado de México, solo quedaron unos cuantos insurgentes, resistiendo en distintas regiones de la Nueva España. A partir de 1816, la lucha por la independencia se desarrolló ya no en una guerra formal, sino en una guerra de guerrillas. En el año de 1817 todo parecía indicar que la insurgencia había sido plenamente derrotada. Y es que el nuevo virrey, Don Juan Ruiz de Apodaca, había buscado la pacificación ofreciendo el indulto a cambio de la rendición de los insurrectos. Muchos habían aceptado, mientras que otros habían decidido ocultarse y solo algunos más continuaron la lucha. Para 1820 prácticamente solo Vicente Guerrero quedaba en pie de lucha. El espíritu siguió con Morelos en pie y tuvo grandes victorias como la de Cuautla, sin embargo reunió en Chilpancingo al congreso para poner un orden en lo que hacían y cuando salió de aquí Iturbide lo encuentra y derrota. Mina intentó salvar la lucha por la independencia, y a pesar de sus victorias también es derrotado. Así Guerrero toma las riendas pero Iturbide es mandado para lidiar con los insurgentes y así nacen El Plan de Iguala y más tarde Los Tratados de Córdoba. El 21 de Septiembre de 1821 entra el ejército Trigarante triunfador a la Cede de México. 3.3.- SITUACIÓN ECONOMICA, SOCIAL Y POLÍTICA DEL MÉXICO INDEPENDIENTE El 27 de septiembre de 1821 fue un día lleno de alegría para los mexicanos. Creían que la independencia resolvería los problemas de la nación y que ya no habría obstáculos para progresar. Al día siguiente se instalo una Junta Provisional de Gobierno, encargada de redactar el Acta de Independencia y de organizar un congreso que decidiera la forma de gobierno para el país. La situación era difícil, ya que el comercio marítimo se hallaba suspendido; las fronteras no estaban bien señaladas en el norte ni en el sureste; en más de cuatro millones y medio de kilómetros cuadrados vivían menos de siete millones de habitantes, casi todos en el centro. Habían muerto seiscientos mil hombres: casi la décima parte de la población y la mitad de los que trabajaban. Minas, campos y fabricas estaban abandonados; casi nadie pagaba impuestos y los gastos de gobierno aumentaban día con día, sobre todo para mantener al ejercitó. En los caminos abundaban los bandoleros y casi nadie se atrevía a salir a comerciar. Hasta entonces las tierras de los indígenas pertenecían a los pueblos y no a las personas. Las trabajaban entre todos los habitantes del pueblo y nadie podía venderlas. Como los indígenas no estaban acostumbrados a que la tierra fuera propiedad privada, la igualdad de todos los mexicanos ante la ley los dejo en desventaja frente a los criollos. España no reconoció los Tratados de Córdova que O'Donojú había firmado. No acepto que México era independiente, y hasta 1825 siguió ocupando el fuerte de San Juan de Ulua, en Veracruz. Además de España, otros países europeos querían apoderarse de México, para explotar sus riquezas. A los mexicanos les faltaban armas y dinero, y así tendrían que defenderse. Lo peor era que se encontraban divididos, porque no estaban de acuerdo en la forma de gobierno que debían adoptar: unos querían la republica y otros la monarquía. De estos últimos, unos querían que reinara algún príncipe español, y otros que fuera coronado Iturbide. España no acepto enviar un príncipe al trono de México y eso reforzó las ambiciones de Iturbide, que quería ser emperador. Una noche, un sargento llamado Pío Marcha salió a la calle con soldados y otras personas que hicieron escándalo exigiendo que Iturbide fuera coronado. Bajo esta presión, al día siguiente el Congreso lo declaro emperador, con el nombre de Agustín I. La coronación fue muy elegante, pero el imperio duro apenas once meses. 4.- CONCLUSIONES. A partir de lo recopilado, es interesante analizar las causas por las que surgió este levantamiento armado, ya que en lo interno toman en cuenta la situación por la que pasaban los pobladores del pueblo de Dolores, que era de sometimiento a la corona española. Esto sumado a los factores externos que están ligados la revolución industrial, los pensamientos de independencia y soberanía, tanto en Estados Unidos como en Francia, son bases importantes por la cual se tomo la decisión de promover una sociedad independiente y con un propio gobierno, el cual consiguieron en el año de 1821. Pero es importante remarcar, que: si bien la historia nos demuestra algo, es que en la búsqueda de la libertad y la paz, es necesario combatir y formar un espíritu de unidad a fin de llegar a la verdadera libertad. BIBLIOGRAFIA. Compendio elemental de historia de América; Diego Barros Arana; Cabaut, 1904; Universidad de Harvard; 2008. Historia del México Contemporáneo; José Manuel Lozano Fuentes y Amalia López Reyes; Compañía Editorial Continental, 1974. http://www.sitesmexico.com/notas/2009/agosto/dia-grito-independencia-15-septiembre.htm http://html.rincondelvago.com/independencia-de-mexico_2.html http://es.wikipedia.org/wiki/Grito_de_Dolores MUJERES Y LA INDEPENDENCIA DE LAS PROVINCIAS UNIDAS EN SUD AMÉRICA (JUANA AZURDUY, MACACHA GUEMES, LAS MUJERES DE COCHABAMBA “HEROINAS DE LA CORONILLA”) Yesenia Yarhu Bolivia 1. INTRODUCCIÓN Todas las naciones en el mundo tiene algo que hablar cuando tocas a sus héroes, es así a los bolivianos no tenemos nada que envidiar de nuestras aguerrida y mitológica Juana Azurduy de Padilla y Manuel Gandarillas de las heroínas de la coronilla de Cochabamba y como la gran heroína de Argentina Macacha Guemes, quienes demostraron en aquellos tiempos su valentía su enfrentamiento en grandes emancipaciones por la independencia de sus países, demostrando una lucha incansable, sin valorar la pérdida de sus progenitores y las consecuencias sociales, económicos y culturales. 2. OBJETIVOS OBJETIVO GENERAL. Describir la historia de la emancipación de la independencia de las mujeres sobresalientes de Sud América. OBJETIVOS ESPECÍFICOS. Conocer y socializar las emancipaciones relevantes de Juana Azurduy de Padilla, Macacha Guemes y las mujeres de Cochabamba “Heroínas de la coronilla” Concientizar, valorar y estimular el liderazgo de las nuevas generaciones de mujeres 3. LUCHA POR LA LIBERACIÓN JUANA AZURDUY DE PADILLA LA GUERRILLERA ALTO PERÚANA Juana Azurduy de Padilla, nació en Sucre el 12 de julio de 1780. Fue hija de Matías Azurduy y Eulalia Bermúdez, propietarios de haciendas en las cabeceras de la zona del Río Chico. Los actos sublimes de los tiempos heroicos de Grecia y Roma, nada tenemos que enviar, porque Juana Azurduy siempre salía triunfante en las diferentes acciones bélicas en que le tocó tomar parte activa. Refiriéndose a los actos heroicos, el escritor José Macedonio Urquidi en su libro “BOLIVIANAS ILUSTRES” dice: “Juana de Arco parangonada, un bello ejemplo de firmeza de carácter de valor, de fidelidad, de espíritu sacrificado, de abnegación y amor para su pueblo (a quien movió contra los Ingleses); durante los dieciocho meses de su éxito, no se hizo notar por un solo rasgo que saliera del orden de los hechos vulgares”; Juana Azurduy, la Sublime heroína demócrata, por la magnanimidad de sus hazañas y sacrificio. Se estima que a la edad de quince años, Juana Azurduy ingresó al convento de Santa Teresa de Sucre, por que prefería la lectura de las vidas de San Ignacio de Loyola, San Luís de Rey de Francia, de San Juan de Dios, San Jorge, dijo: “Porque son guerreros.- Yo amo todo cuanto se refiere a las batallas y los peligros, ¡Oh daría me vida en algún combate donde sobresalen los valientes”, y que a los seis o siete meses abandonó convencida de que no tenia vocación para seguir la carrera religiosa. El 19 de mayo de 1799, contrajo matrimonio con MANUEL ASCENCIO PADILLA, en la localidad de Moromoro, tenían 4 hijos. Entre los testigos de la ceremonia se encontraba José Vicente Camargo, que con el tiempo se convertiría en un notable guerrillero del Alto Perú. Murió a los 81 años de edad, el 25 de mayo de 1862 Según el general Ramallo, “fue humilde, demasiado humilde, 4 o 5 personas acompañaron su ataúd al cementerio general, donde fueron inhumados sus restos” Cuanta injusticia “que ingratitud, para tan esclarecida Patricia, cuya filantropía y sublime patriotismo merecían las honras fúnebres que ninguna mujer. Pero ese es el destino que deparan los pueblos a sus gloriosos bienhechores, casi siempre”. “Juana Azurduy, manejando a caballo la lanza con empuje y singular y vistiendo pantalón blanco mameluco, blusa escarlata de oro y casco liviano de bruñida plata con cimera, la teniente coronela de las guerrillas de la independencia Alto peruana, bella y varonil; de cuerpo vigoroso y ojos expresivos, con ese golpe de vista de la penetrante mirada napoleónica, de aventaja estatura, las perfectas y acentuadas líneas de rostro, regaron con su sangre las antiguas provincias de la Plata y Potosí. Iniciada de 1809 la revolución contra el poder español en América; los patriotas llevaron la lucha de la ciudad al campo, organizando grupos de montoneros a los que Bartolomé Metrí, ha denominado “Republiquetas Alto peruana” “Doña Juana Azurduy, estaba cansada de contemplar los sacrificios de su esposo, sufriendo dijo, también yo debo sacrificarme, con mis hermanos de la libertad de mi patria. Entre las principales acciones de armas que tomó parte Juana Azurduy, tenemos el combate del Villar, cerca de la laguna, los patriotas al mando de Manuel Ascencio de Padilla, José Ignacio Warnes de Zárate, Huallpa Rimachi, vencieron el 4 de marzo de 1814 realista benito López, ha oír, en la memorable batalla de Pitantora, que tuvo lugar el 5 de octubre de 1814, Juana realizaba actos de Heroico, según relató de Valentín Abecia, “ Arrebató un estandarte español de manos del propio demandante Manuel Bosa; al poco de esta hazaña Juana Azurduy dio a luz a una niña, a orillas del río vecino, con la única ayuda de una india anciana. El 27 de abril de 1815, los guerrilleros de `padilla, ocuparon la ciudad de Chuquisaca, juntamente con el patriota Juan Antonio Álvarez de Arenales, Juana Azurduy, fue proclamada heroica por el pueblo y su esposo nombrado comandante de la ciudad. El 28 de mayo de 1816, los guerrilleros de Manuel Ascencio Padilla, pusieron nuevo sitio, a la ciudad de Chuquisaca, defendido por el presidente de la Audiencia José Santos de la era, los patriotas fueron repelidos por los realistas. El gobierno de Buenos Aires, al saber las acciones heroicas de Juana Azurduy, le dieron el grado de teniente coronel, el día 13 de agosto de 1816, el nombramiento le fue enviado en fecha 23 de octubre de ese mismo año con carta en que el general Belgrano, señala los actos heroicos, probada de esta manera su decidida adición a la causa de América. Uno de los sucesos más dolorosos, en la vida de Juana Azurduy, ocurrió el día 14 de septiembre de 1816, cuando el Manuel Ascencio Padilla, en el combate de el Villar, cayo muerto en manos de Mariano Ovando, quien había jurado vengarse del guerrillero, luego se traslado al Sur, el año 1817, para luchar junto a los guerrilleros tarijeños, al año siguiente, a lado de los gauchos del famoso jefe de montoneros Argentinos Martín Guemes. Durante su vid de las guerrillas Juana Azurduy sufrió incontables penurias en el monte, al lado de su esposo y sus hijos, que viajaban con las fuerzas patriotas. Las enfermedades y el hambre acosaban con frecuencia a los niños. Uno de ellos murió en brazos de la Guerrillera en pleno combate, para dar la sepultura la admirable mujer tubo que excavar la tierra, apresuradamente con las uñas y luego volver junto a los otros hijos, sintiendo como el dolor le abrió profundas grietas en el corazón, Alcanzada la independencia, Juana Azurduy, fue cayendo en el olvido de sus compatriotas y sufriendo la pobreza, llego hasta la edad de 81 años. Azurduy y su esposo, Manuel Ascensio Padilla, se sumaron a la Revolución de Chuquisaca que el 25 de mayo de 1809 destituyó al presidente de la Real Audiencia de Charcas, en la que tuvo protagonismo Juan Antonio Álvarez de Arenales. Ligados con las expediciones enviadas desde Buenos Aires, al mando primero de Antonio González Balcarce y luego de Manuel Belgrano, combatieron a los realistas defendiendo la zona comprendida entre Chuquisaca y las selvas que mediaban hacia Santa Cruz de la Sierra. Vio morir a sus cuatro hijos y combatió embarazada de su quinta hija. Tras la derrota del Ejército del Norte en la batalla de Huaqui el 20 de junio de 1811, los realistas al mando de José Manuel de Goyeneche recuperaron el control del Alto Perú y las propiedades de los Padilla junto con las cosechas y sus ganados fueron confiscadas, siendo apresada Juana Azurduy y sus hijos, pero Padilla logró rescatarlos refugiándose en las alturas de Tarabuco. En 1813 Padilla y Juana Azurduy se pusieron a las órdenes de Belgrano, nuevo jefe del Ejército del Norte, llegando a reclutar 10.000 milicianos. Durante la Batalla de Vilcapugio, Padilla y sus milicianos debieron transportar la artillería sin participar en el combate. Juana Azurduy organizó luego el "Batallón Leales" que participó en la batalla de Ayohuma el 9 de noviembre de 1813, que significó el retiro de los ejércitos argentinos del Alto Perú. A partir de ese momento Padilla y sus milicianos se dedicaron a realizar acciones guerrilleras contra los realistas. Azurduy lideró la guerrilla que atacó el cerro de Potosí, tomándolo el 8 de marzo de 1816. Debido a su actuación, tras el triunfo logrado en el combate de El Villar recibió el rango de teniente coronel por un decreto firmado por Juan Martín de Pueyrredón, Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, el 13 de agosto de 1816. Tras ello, el general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable El 14 de noviembre de 1816 fue herida en Viluma, su marido acudió a rescatarla y en este acto fue herido de muerte. El cambio de planes militares, que abandonó la ruta altoperuana para combatir a los realistas afincados en el Perú por vía chilena, disminuyó el apoyo logístico a la guerrilla comandada por Azurduy, que se replegó hacia el sur, uniéndose finalmente a Martín Miguel de Güemes. A la muerte de Güemes se vio reducida a la pobreza. En una carta escrita en 1830, cuando vagaba por las selvas del Chaco argentino: "A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...)Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". Pasó varios años en Salta solicitando al gobierno boliviano, ya independiente, sus bienes confiscados. El mariscal Antonio José de Sucre le otorgó una pensión, que le fue quitada en 1857 bajo el gobierno de José María Linares. Murió indigente el día 25 de mayo de 1862 cuando estaba por cumplir 82 años y fue enterrada en una fosa común. Sus restos fueron exhumados 100 años después, para ser guardados en un mausoleo que se construyó en su homenaje. MACAHA GUEMES Macacha –María Magdalena Dámasa Guemes de Tejada, hermana menor del Gral. Martín GuemesMacacha recibió la educación habitual para las mujeres de su época y posición, pero poseía cualidades propias que le permitieron descollar como patriota. Cosió uniformes pero también desempeñó arriesgadas tareas de espionaje a favor de la independencia despertando la admiración de los realistas. Macacha lideraba una red de informantes que actuaba en Salta, Jujuy y Tarija, aportando datos fundamentales para controlar al enemigo. Entre los integrantes de la red se encontraban mujeres de la alta sociedad y campesinos que mezclándose con partidarios y opositores recogían datos que ella interpretaba y transmitía a Martín. Fue muy querida por el pueblo debido a la generosidad con que ayudaba a los necesitados quienes la llamaban “Mamita de los pobres”, como lo describe Jaime Dávalos en la Serenata titulada La Macacha Güemes se encontraba con ella cuando una partida realista lo atacó e hirió en Salta, el 7 de Junio de 1.821, causándole la muerte pocos días después. Las mujeres nombradas son sólo algunas de las que merecen nuestro recuerdo permanente. Otras admirables destacadas durante la lucha por nuestra independencia fueron: Andrea Zenarruza de Uriondo; Candelaria Pacheco de Melo de Anzoátegui; Isabel Gorriti; Juana Torino; María Petrona Arias; Martina Silva de Gurruchaga; María Loreto Sánchez Peón de Frías; María Magdalena Goyechea y de la Corte. De otras no se saben sus nombres, como las llamadas “Niñas de Ayohúma”, que acompañaron a los hombres al frente de batalla, asistiéndolos. Sean estas líneas un respetuoso homenaje a todas ellas. María Magdalena Güemes de Tejada, nació en Salta, el 11 de diciembre de 1787, del matrimonio conformado por doña María Magdalena Goyechea y de la Corte y por Gabriel Güemes Montero, tesorero de la Real Hacienda. El General José María Paz en su libro “Campañas de la Independencia” (memorias póstumas), la describe como: “...mujer ambiciosa, intrigante y animosa, al paso que dotada de garbo y hermosura...” Según Bernardo Frías era “... arrogante y hermosa, que durante el gobierno difícil de la guerra, habría de llevar la armonía a las pasiones, la prudencia y el acierto en los consejos, la luz en los momentos más delicados del peligro y una sagacidad e inteligencia nobles y generosas en la diplomacia, acompañado todo ello de la seducción y el encanto que se desprenden de la mujer inteligente y culta. (Historia del General Güemes – Bernardo Frías – Tomo I – Página 482). Macacha, su apelativo popular, contrajo enlace matrimonial en octubre de 1803, a los 16 años de edad, con don Román Tejada, perteneciente a una antigua familia de Salta, de clase principal que integraba una larga nómina de familias realistas. Referirse a Macacha Güemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el Héroe Gaucho, para garantizar la emancipación de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta evocación representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su existencia al servicio de la patria. ACCION HEROICA DE LAS MUJERES COCHABAMBINAS Las aguerridas mujeres Cochabambinas, fueron al campo de la batalla a sacrificarse por su honor y su patria y guiaban a los ejércitos por los caminos de la gloria. Así se sucedían los acontecimientos, con las derrotas de las patriotas en la batalla de SIPESIPE, por las fuerzas de GOYENECHE, la primera revolución cochabambina quedó vencida, Goyeneche penetró en la ciudad, mostrando en la conducta más pacífica y humanitaria, distinta a la que presentara en La Paz. Una vez que se retiro el ejército de Cochabamba ARCE, provocó una nueva revolución, el año 1811, Goyeneche se preparaba para marcharse a la Argentina al encuentro de las tropas auxiliares, pero sabedor de esta nueva situación, se dirigió a Cochabamba, al encuentro de sus tropas con las de ARCE, se llevó a cabo en QUEHUIÑAL, el 24 de mayo de 1812 donde fueron derrotados los patriotas. Goyeneche condujo a sus tropas hacia Cochabamba, ciudad en la que falta de hombres, indujo a las mujeres a su audaz resolución de hacerse cargo de su defensa. Doña Gandarillas, fue la más resuelta y la capitana de estas valerosas mujeres y viendo que flaqueaban las fuerzas, lanzo sus arenga cual general antes del combate “SI YA NO HAN HOMBRES, AQUÍ ESTAMOS NOSOTRAS PARA AFRONTAR AL ENEMIGO Y MORIR POR LA PATRIA”, Menos de una hora tardaron de Goyeneche en rodear completamente la colina. Quedan sobre ello como doscientos patriotas de ambos sexos de todas las ciudades, niños que sus madres abrazaban con desesperación contra su seno, jóvenes que iban a vender sus vidas, ancianos que no tenían fuerzas para arrojar una piedra certero a sus enemigos, Fueron pues casi totalmente exterminados las mujeres, este hecho brutal por su atentado y heroico por su sacrificio, ocurrió el 27 de mayo de 1812, y para su eterno recuerdo se ha instituido el “DIA DE LA MADRE”, por Ley de 8 de noviembre de 1927. Nunca los recuerdos históricos, pondrán en claro los nombres de todas esas almas cívicas y virtuosas y la hipogea de la independencia. El general Belgrano, plenamente enterado del sublime del heroísmo de las mujeres Cochambinas y fin de estimular a las virtudes de su legión, estableció esta memorable costumbre, un oficial de cada cuerpo militar en voz alta decía: ¿Están las mujeres de Cochabamba? Y otro oficial respondía “GLORIA A DIOS HAN MUERTO POR LA PATRIA, TODAS EN EL CAMPO DE HONOR” A unos pasos del lugar, en las laderas de la colina de San Sebastián, los patriotas cochabambinos, buena parte de ellos mujeres, se enfrentaron a las tropas del realista de Manuel Goyeneche. Las mujeres salieron a las calles protestando, junto con sus hijos, contra aquellos allanamientos. "¡¡Nuestro hogar es sagrado!!" gritaban mientras se dirigían a la colina de San Sebastián, produciéndose un insólito aglomeramiento de gente. La sorpresa del realista no tuvo límites --ni su ira-- cuando tropezó con un pequeño ejército armado de machetes, mazos, algunos fusiles y tres cañones. No fue difícil para Goyeneche ganar semejante batalla aquel 27 de mayo de 1812. La descripción que hace Augusto Guzmán es una de las más detalladas de los historiadores, las descargas de artillería contra las tropas del Conde de Guaqui, quien despliega su caballería en aprestos belicosos, dispone el ataque por tres columnas bajo la protección de la artillería avanzando él mismo de frente por el centro. El fuego se mantiene activo durante dos horas, la montonera lucha bravamente, la caballería realista avanza por tres frentes sobre las tres cumbres de la serranía. A las cinco se apagan los fuegos sobre 300 bajas de hombres y mujeres que sangran en las colinas como despojos humanos privados de toda esperanza y auxilio. Era común que los caídos en las batallas quedasen en el mismo sitio, victimados por la artillería, apuñalados, golpeados, quemados como causa frecuente de la muerte. Como la consigna era el saqueo en las 80 manzanas de la ciudad, la gente se agolpa en las puertas de las Iglesias en busca de seguridad y asilo. En el duro combate quedaron los cadáveres sangrantes de las heroicas vallunas Con este relato se puede evidenciar la similitud de lesiones que presentan con los restos que se encuentran en la Iglesia. Según los datos que tenemos hasta 1831 se prohíben oficialmente el enterramiento en las Iglesias, según se consultó en el libro de entierros de la Parroquia más cercana, allí no figuran entierros numerosos el día de la batalla. Es de lógica que una vez que termina esta batalla estos restos sean llevados a la iglesia más próxima para ser enterrados en su cementerio o que mueran los heridos tratando de refugiarse del enemigo en estos lugares sagrados. BIBLIOGRAFIA www.academiadefolklore.com/system/pro Carmen Álvarez Daza, 1990. Antologías del saber de un pueblo de Ministerio de educación. Carlos Prieto, 1987. Manual de Alocuciones. 3º Edición Fernando Suárez, 2010. Educación Estado Ideología y Política E. Puña F. Comedias y Dramatizaciones. Mario Bautista Gumucio. Historia contemporánea de Bolivia. 3º Edición Delia Gambarte de Quezada, Minka Aurelio Crisólogo Arce. La Monografía y el informe de la Tesis Informe de Goyeneche sobre la batalla de San Sebastián. Augusto Guzmán, Gesta Valluna, Cochabamba 1953, pp. 142-149; Historia de Bolivia, Los amigos del libro, Cochabamba 1998. pp. 101-105. “LIDERESAS DE LA INDEPENDENCIA AMERICANA” Diego Arana Ibañez Bolivia Cuando celebramos en Bolivia el bicentenario, tal como sucedió en el centenario de 1910, y cuando el mundo ha recogido a través de la ONU en la planificación de los Objetivos del Milenio cuyo Objetivo 3 describe “ Eliminar las desigualdades entre los géneros…” el destacar el papel que en la lucha por la independencia, asumieron las mujeres, los esclavos y las minorías étnicas del continente es una operativización efectiva del objetivo; es un reconcomiendo justo merecido y honesto de el esfuerzo, coraje y valentía y templanza de muchas mujeres como la Indigenista Bartolina Sisa, la muy sagaz Manuelita Sáenz, las emblemáticas Doña. Manuela Beltrán, Gregoria Policarpa, Agustina Ferro, Antonia Santos, Josefa Cornejo Luisa Cáceres, Juana Ramírez, Teresa Heredia y otras muchas no menos valientes e importantes en el logro de nuestra independencia. Mujeres próceres que se incorporaron dentro de la lucha de los ejércitos patriotas, a semejanza de una “bandada de colibríes dentro de una bandada de cóndores” estas damas; nuestras Madres, fecundas por la libertad, dieron a luz una generación sobrehumana llena de la llama del cielo o del calor sombrío de la tempestad. Quienes a ejemplo de las espartanas, al pie del cañón estaban dispuestas a lanzar la horda mortal sobre los ejército enemigos. Sabemos que; a la mujer…. Nuestros antepasados la consideraban inferior al hombre y nosotros la consideramos igual… Unos y otros estamos grandemente equivocados, porque la mujer es muy superior… Dios la ha dotado de gran perspicacia y sensibilidad y ha puesto en su corazón fibras y delicadísimas, cuerdas muy sensibles a todo lo noble y elevado. El patriotismo, la admiración y el amor, hacen vibrar esas cuerdas, y de ahí resultan la caridad, la abnegación y el sacrificio. Así como las mujeres primitivas de la amazonía eran demasiados feroces. Sentían desprecio al presenciar la quema de sus casas y haberes por parte de los conquistadores y aún aparentaban cierta afabilidad sin ningún sentimiento de pesadumbre, entraban en la lucha y daban batalla encarnizada con gran ferocidad y valentía desbordada Hace dos siglos sólo existía, una íntima minoría de hombres deseosos de aprovechar con propósitos revolucionarios el estado de anarquía de la madre patria; por ello sin las mujeres, América nunca hubiera alcanzado su libertad. Muchos de los círculos, clubes y conjuraciones que entonces se formaron en América del Sur, nacieron a impulsos de mujeres heroicas y apasionadas. Fueron ellas las primeras en llevar la sublevación a la calle, en lucir la banda revolucionaria, en cantar himnos patrióticos; más tarde siguieron a sus maridos a los campos de batalla, tan firmes a caballo como a pie, a veces con un niño al pecho, otras con pantalones de soldados: Como en las viejas estampas que vemos en algunos libros. En las guerras de independencia, miles de mujeres sufrieron el martirio, fueron sacrificadas en aras de la libertad y la independencia de nuestra Patria, fusiladas, desterradas, confiscados sus bienes, asesinadas. Al sufrir el martirio de la persecución y la muerte se hicieron inmortales y acreedores a nuestro agradecimiento. Generalmente se dice que; detrás de todo gran hombre, hay una gran mujer. ¿Por qué detrás? ¿Por qué no al lado? ¿Por qué no es ella la reconocida y nombrada en la historia a partir de su propio rol social y político y no cómo la simple y fortuita acompañante de un gran hombre? Centenares de mujeres deliberantes y con criterio propio participaron a su manera, quizás no todas empuñando las armas, en la lucha por la independencia haciendo uso de la palabra, el rumor, la estrategia de guerra y la realización de diversos actos heroicos que marcaron, quiérase o no, el devenir de nuestra historia. La versión galante y romántica de la historia del siglo XIX, nos habla de mujeres sumisas y obedientes, plegadas a las dos grandes virtudes femeninas de la época: callar y obedecer. Las mujeres fueron expuestas en la historia como seres decorativos que embellecían el hogar y para quienes sólo existía dos opciones decorosas para sus vidas: el matrimonio o el convento. Esta visión no refleja sus inquietudes humanas y menos la participación política que muchas de ellas ejercieron en medio de enormes contrariedades, represiones y adversidades. Las mujeres de la independencia nunca fueron ángeles de hogar, ni las que pertenecían a las élites sociales ni aquellas que tenían su origen en los sectores populares. Al contrario, muchas de ellas fueron partícipes activas en la lucha contra los abusos virreinales desde el movimiento comunero, las luchas patrióticas y desde otras gestas de enorme significado histórico. En el centenario, después de 100 años de exclusiones, se intentó rescatar el nombre de algunas mujeres, pero se hizo desde una perspectiva machista de la historia, y también clasista. Muchas siguieron siendo minimizadas en su verdadero protagonismo político, al igual que los mulatos, indígenas y negros. También se les asignó características masculinas que no correspondían a su naturaleza y desestimaba sus características y potencial femenino. Este intento de rescate histórico no logró por tanto configurar una nueva perspectiva para el análisis de su desempeño político y social. No reconoció la real dimensión del rol que jugó la mujer en la historia y contrario a ello, le adjudicó valores masculinos para justificar su osadía y valentía, como sí estas características fuesen exclusivas de los hombres. Así por ejemplo, la historia personal y humana de Manuelita Sáenz fue distorsionada en los anales de la historia oficial. Sólo se le conoció durante varias décadas como la amante de El Libertador y no como una política aguerrida y comprometida, desde mucho antes de conocer a Bolívar y mucho después de su muerte, con el sueño de la libertad. En este texto tenemos el honor como pocas veces ocurre en los relatos de la historia oficial, la cual se ve embellecida y mitificada con el paso del tiempo; se excluye el nombre de valientes mujeres que aportaron a la lucha emancipadora. Si acaso se les menciona de manera rápida y sin mucho elogio, se hace referencia sólo a unas pocas sin mucho contexto y sin revelar su trayectoria y tampoco se conocen detalles sobre su vida y su historia y otros datos que hagan que jóvenes mujeres y varones las tomen como ejemplo. Para ello hemos recopilado información referente a dos heroínas de nuestra independencia y a un grupo de valientes mujeres que inspiraron a América y al mundo; ellas son Juana Azurduy de Padilla, María Magdalena Güemes más conocida como Macacha Güemes y las grandes Heroínas de la Coronilla; le invitamos a hacer un recorrido por la emocionante e inspirante vida de estas grandes mujeres. DOÑA. JUANA AZURDUY DE PADILLA Doña. Juana Azurduy fue comandante guerrillera en la entonces llamada Republiqueta de La Laguna. Junto con su esposo Manuel Asencio Padilla se sumaron a la Revolución de Chuquisaca del 25 de mayo de 1809. Juana vio morir a cuatro de sus hijos y con gran ahincó pese al dolor combatió embarazada de su quinta hija. Tras la derrota del Ejército del Norte en la Batalla de Huaqui el 20 de junio de 1811, los realistas al mando de José Manuel de Goyeneche recuperaron el control del Alto Perú y las propiedades de los Padilla junto con las cosechas y sus ganados fueron confiscadas, siendo apresada Juana Azurduy y sus hijos, pero Padilla logró rescatarlos refugiándose en las alturas de Tarabuco. Por su papel protagónico en el primer grito revolucionario en el alto Perú 1809, más conocido como la batalla de Chuquisaca, arrebatar un estandarte español, organizar el "Batallón Leales" que participó en la Batalla de Ayohuma el 9 de noviembre de 1813, y liderar importantes acciones guerrilleras contra los realistas entre ellas la del cerro de Potosí del 8 de marzo de 1816 y lograr el triunfo en el Combate del Villar, recibió el rango de Teniente Coronel. El decreto fue firmado el 13 de agosto de 1816 por Juan Martín de Pueyrredón, director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Tras ello, el general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable. El 14 de noviembre de 1816 Juana fue herida en la Batalla de La Laguna. Su esposo el guerrillero Padilla acudió en su rescate siendo herido de muerte. Ella siguió adelante en su lucha. Un posterior cambio en la estrategia militar de la guerrilla comandada por Juana Azurduy, le significó una disminución en el apoyo logístico. Ello llevo a que su ejército tuviera que replegarse hacia el sur, dónde se unió a Martín Miguel de Güemes. Sus planes no prosperaron. Güemes fue asesinado y Juana se vio reducida a la pobreza. En 1830, vagando por las selvas del Chaco argentino, Juana escribió una carta que da cuenta de su situación: "A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...)Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". Juana permaneció varios años más en el municipio de Salta solicitando al gobierno boliviano, ya independiente, sus bienes confiscados. El mariscal Antonio José de Sucre le otorgó entonces una pensión, que le fue retirada en 1857 bajo el gobierno de José María Linares. Murió en la indigencia y la soledad el 25 de mayo de 1862 a los 82 años. Fue enterrada en una fosa común. Cien años después sus restos fueron exhumados y llevados al mausoleo de Sucre. En 1962 la historia se acordó de ella. Fue nombrada generala de la nación por decreto. La dictadura militar intentó de nuevo sepultar su nombre y excluirla de la historia, pero en 1980 a través de las gestiones que impulsaba la academia de Historia, se restablece el decreto y se le asigna vigencia. Finalmente en el 2009 el gobierno de Argentina y de Bolivia la reconoce como Generala de los ejércitos emancipadores de ambas naciones. DOÑA MARIA MAGDALENA GUEMES María Magdalena Güemes de Tejada, nació en Salta, el 11 de diciembre de 1787, del matrimonio conformado por doña María Magdalena Goyechea y de la Corte y por Gabriel Güemes Montero, tesorero de la Real Hacienda. El General José María Paz en su libro “Campañas de la Independencia” (memorias póstumas), la describe como: “...mujer ambiciosa, intrigante y animosa, al paso que dotada de garbo y hermosura...” Según Bernardo Frías era “... arrogante y hermosa, que durante el gobierno difícil de la guerra, habría de llevar la armonía a las pasiones, la prudencia y el acierto en los consejos, la luz en los momentos más delicados del peligro y una sagacidad e inteligencia nobles y generosas en la diplomacia, acompañado todo ello de la seducción y el encanto que se desprenden de la mujer inteligente y culta. (Historia del General Güemes – Bernardo Frías – Tomo I – Página 482). Macacha, su apelativo popular, contrajo enlace matrimonial en octubre de 1803, a los 16 años de edad, con don Román Tejada, perteneciente a una antigua familia de Salta, de clase principal que integraba una larga nómina de familias realistas. Roberto Vitry en su libro “Mujeres Salteñas”, (páginas 139 y 140) cuenta que “... su acción a favor de la causa patriota se inició poco después de la Revolución de Mayo, cuando convirtió su casa en taller de confección de uniformes para los soldados de la partida de observación organizada por su hermano. A partir de entonces fue su más entusiasta colaboradora y supo sacar partido de su noble inteligencia y posición para desempeñar tareas arriesgadas, especialmente cuando los realistas ocupaban la ciudad de Salta y Güemes los combatía con todos los medios a su alcance. Dotada de gran habilidad política, la puso al servicio de su hermano en los momentos más difíciles, como en 1815, cuando gracias a sus gestiones se llegó a la paz de Los Cerrillos, luego de la delicada situación entre Güemes y las fuerzas de Buenos Aires al mando del General Rondeau. Cuando el general realista La Serna intentó sobornar al general Martín Miguel para que se retirase de la lucha o para que se mantenga neutral, proponiéndole a cambio llevarlo a España, educarle a todos sus hijos a costa del Estado, condecorarlo, darle el título de Marqués y Grande de España y a más de todo esto un millón de pesos. Para lograr su propósito La Serna “... Encargó al Jefe de su Estado Mayor don Jerónimo Valdés, pasara a verla (a Macacha) y pusiera todo su empeño en hacerla acceder para que lo acompañara al campamento de su hermano, sirviendo de mediadora, como contaban lo había sido con Rondeau en otra emergencia. Resistió cuanto pudo... Pero era casada con un hombre célebre en las sociedades del norte por su descarado cinismo, don Román Tejada, que pertenecía a una familia de marcado sello realista “... Lo que no pudo conseguir con Macacha lo logró con su esposo Román Tejada, quien lo llevó hasta el General Güemes, donde Valdés puso el pliego con la propuesta en manos del Jefe Patriota. Este lo leyó rechazó y despreció el ofrecimiento en forma categórica. Referirse a Macacha Güemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el Héroe Gaucho, para garantizar la emancipación de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta evocación representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su existencia al servicio de la patria. LAS HEROICAS MUJERES DE LA CORONILLA En este breve relato queremos mostrarle el gran aporte de Las Mujeres de la Coronilla en las luchas independentista; en 1812, Goyeneche, después de vencer a las fuerzas revolucionarias en Sipe (Cochabamba) emprendió camino hacia Argentina con el fin de invadir sus provincias y apagar la revolución que se había iniciado allí. Pero Goyeneche no contaba con la nueva insurrección que resurgió tras su salida. Al enterarse de la nueva rebelión, el general español retorna a Cochabamba para enfrentar a los patriotas encabezados por Esteban Arze, cuyas fuerzas se hallaban clandestinas y recuperándose tras la derrota de Pocona. En procura de protegerlos, las mujeres a la cabeza de la anciana no vidente Manuela Gandarillas y la esposa de Esteban Arze, Manuela Rodríguez, decidieron organizarse y armarse para enfrentar a las fuerzas realistas, pese a que sabían la desproporción que existía. El periodista e investigador, Wilson García, señala que las mujeres se organizaron en la Catedral bajo el lema: “¡Nuestro hogar es sagrado!” y se dirigieron en romería hacia la colina llevando en andas la imagen de la Virgen de la Merced, con el fin de bloquear la entrada de Goyeneche que venía en persona desde Tarata tras buscar infructuosamente a Esteban Arze. Luego de tres días, la ciudad de Cochabamba fue tomada a pesar de la heroica resistencia que ofrecieron las valerosas mujeres en la colina de San Sebastián (La Coronilla). Las víctimas de aquel desigual combate figuran en la siguiente lista difundida por Gabriela Taborga: Manuela Gandarillas, Manuela Rodríguez, las hermanas Juana y Lucía Ascui, Rosa Soto (la muchacha que inspiró el título de la novela de Nataniel Aguirre), las hermanas Parrilla (cuyos nombres no han podido ser establecidos), Mercedes Tapia, María Pascuala Oropeza, Manuela Saavedra de Ferrufino, Lucía Alcocer León de Chinchilla, María Isabel Pardo de Vargas, María Teresa Bustos y Salamanca de Lemoine, María del Rosario Saravia de Lanza y Luisa Saavedra de Claure; todas ellas esposas de combatientes perseguidos que acompañaban a Esteban Arze. Todo ocurrió en vísperas de la celebración del Corpus Christi (1812). Al día siguiente de la matanza de San Sebastián, 28 de mayo, Goyeneche presidió los actos litúrgicos y aprovechando el tronar de los petardos y juegos artificiales que matizaban la celebración y que podían camuflar disparos de bala, el realista mandó fusilar al anciano gobernador patriota Mariano Antezana. Junto a él fue fusilado todo sospechoso de colaborar con los luchadores libertarios. Murieron ese día en el paredón muchos ciudadanos, entre otros: Joaquín Mariano Antezana, Manuel Ignacio Ferrufino, Agustín Ascui, José Domingo Gandarillas, Bernardo Luján, José Manuel Lozano y Juan Zapata, relata García. Cochabamba recordó esos luctuosos días de fe cristiana como la “Fiesta de Corpus Triste”. Si bien las mujeres de Cochabamba no consiguieron una victoria que haya logrado un avance significativo en la lucha por la libertad de América; este acontecimiento inspiró a los patriotas para encarar una lucha más decidida por la libertad y también animaron a que muchas mujeres en las colonias participen en las acciones libertadoras. Como reconocimiento al gran valor demostrado por estas mujeres, el 27 de mayo de 1926 se estrenó en el paseo de la Coronilla, el monumento a las Heroínas y fue contemplado por primera vez por los habitantes de Cochabamba. En reconocimiento a esta importante fecha en Bolivia se celebra cada 27 de mayo el día de todas las madres; las cuales son heroínas no reconocidas de nuestros triunfos y la capacidad de asumir nuestra libertad como seres humanos de esta hermosa América latina. MUJERES DE LA INDEPENDENCIA EN SUDAMÉRICA Jessica Alejandra Ojeda Calle Bolivia Hoy en un clima de libertad, donde la palabra emancipación es un electo central del desarrollo personal de todos los que habitamos estas tierras porque es un lindo regalo que Dios nos pudo haber dejado, “la libertad”, es por eso que por esta libertad, la cual Dios nos dejo, pasaron hazañas heroicas e increíbles que el hombre y la mujer han podido desempeñar. Han pasado 200 años y todavía las personas tienen ese deseo, el de ser libres, lo cual llevan en la sangre y en el espíritu el gran deseo de buscar la libertad. En el siglo XX las guerras libertarias dejaron huellas recónditas para los países sudamericanos. Todo emprendió con las primeras manifestaciones ocurridas en el Alto Perú, gracias a la situación de España empezaron hechos que se desplegaban en el territorio Americano, por ejemplo en las ciudades de La Paz y Chuquisaca en 1809. Comenzó la llamada ahora guerra de guerrillas, entre los años 1809 y 1810, en el noroeste argentino, todo fue un movimiento total de la Nación en armas, en esta grande hazaña lucharon con la idea de defender su patria, en esta epopeya juntaron fuerzas mestizos e indios, participaron hombres, mujeres, niños, jubilados, sacerdotes, no importaba nada mas que salvar su patria. Toda esta sangrienta batalla se caracterizo por sus cabecillas y su brío en cada uno de ellos, ellos pasaron por todo pero jamás desaparecieron por que fueron naciendo de la sangre de otros con el ideal de “patria”. Hoy en día los historiadores dicen que existieron mas de 102 cabecillas, aunque la mayoría de ellos subieron al patíbulo o murieron el los campos de batallas. Asimismo la patriota guerrillera del Alto Perú Juana Azurduy de Padilla quien a su vez da un gran ejemplo de mujeres valerosas y luchadoras. Nació en La Plata (hoy Sucre), el 12 de julio de 1780, y sus padres fueron Juan Matías Azurduy y Eulalia Bermúdez, se dice que entro a un convento al de Santa Teresa de Sucre, pero de acuerdo a investigaciones se dice que doña Juana Azurduy ingreso al convento de Santa Mónica ya que se dice que en esos tiempos las mujeres que entraban a dicho convento se las trataba con respeto, además que era un convento muy cómodo, Juana permaneció en el convento de Santa Mónica durante cinco meses. En su juventud se caso con Manuel Ascencio Padilla quien era un noble guerrillero de la independencia del Alto Perú, se casaron el 8 de mayo de 1805 a los 24 años de edad de Juana. Cuando estallo la guerra de la independencia, ella juntamente con su esposo, logro libertarlo, dando mandos a una fuerza simulada. En Tarabuco logro rendir al jefe realista Claudio Rivero el 14 de enero de 1815 En la batalla de Viloma, encabezada por los llamados leales, a los que guío con tal acierto que mereció el grado de teniente coronel. Del mismo modo Juana Azurduy de Padilla dio grandes ejemplos con su valentía y sus ganas de luchar por su patria, así como las heroínas de la coronilla es muy reconocida en Argentina, por ejemplo, hay un nuevo programa de fortalecimiento de derechos y participación a las mujeres, este programa es llamado “Juana Azurduy”, se llama así en su homenaje. En Chaco hay una ruta llamada Juana Azurduy. Al igual que el ejército Argentino nombro a su infantería de monte como generala a Juana Azurduy. Al igual que en el país de Argentina es reconocida, también lo es el país de Bolivia, el aeropuerto de la ciudad de Sucre lleva su nombre, como la provincia Juana Azurduy de Padilla, en el 2009 en el gobierno de Evo Morales las mujeres reciben el bono Juana Azurduy de Padilla en la cual se trata de que las mujeres en gestación y los niños menores de 2 años reciben el monto de 260 dólares americanos (1.820 bs) todo esto se debe a la fuerte lucha que dio Juana Azurduy como mujer que igualmente la deben hacer las mujeres como madres. Como dejar de lado cada una de las hazañas que vivió Juana Azurduy ya que era una mujer que dio sorprendentes glorias a su patria. La vida de esta mujer, sus facetas e instancias, sus virtudes y nobleza de mujer, sus intervenciones legendarias en los campos de batalla, luchando por su patria, la vida y muerte de sus hijos, y tantos otros sacrificios como desesperanza, angustias, perdidas, también los halagos que recibía por ello, los triunfos que tenia, y por sobre todo saber afrontar cada cosa que venia con madurez y esperanza. En rota de Villar fue herida en la batalla de La Laguna y aunque perdió mucha sangre, ella aun así alentaba a la gente que estaba junto a ella, disimulaba el dolor que tenia y la falta de sangre, nada le importaba mas que seguir adelante, sus enemigos querían acabar con ella, pero ella seguía y no se dejaba derrotar por nadie, aun al saber que podría morir, tomo la bandera de su patria y agitaba el estandarte diciendo, VIVA LA PATRIA, VIVA LA LIBERTAD. El señor Padilla fue a su rescate pero en ese entonces fue herido de muerte, Juana al ver muerto a su señor esposo se le cayo la vista, se puso ciega de furor, ella logro levantarse donde tuvo que emigrar a Argentina donde combatía a las ordenes de Don Martín Miguel Guemes el famoso caudillo de los gauchos. Cuando la victoria de Ayacucho fue victoriosa abrió las puertas del Alto Perú y doña Juana Azurduy regreso a su país donde ella creí poder vivir tranquila, acabo la guerra y ella no vivía ambicionada ni deseaba nada, también porque ya varias veces había derramado su sangre para emancipar su país. Después de los contrastes de las victimas y por supuesto después de la muerte de su esposo Manuel Ascensio Padilla a quien amaba delirante, pensó hallar sociego en la soledad del campo Doña Juana Azurduy de Padilla también fue coronada Teniente coronel, y aparte de que participo de varias batallas por ejemplo entre una de ellas esta la batalla de Vilcapugio, la batalla de Ayohuma. Vio morir a sus cuatro hijos pero siguió luchando al estar embarazada de su quinta hija murió indigente el 25 de mayo de 1862 en el mismo suelo que la vio nacer y en el mismo día que 53 años antes se dio el primer grito de libertad, murió a la edad de 80 años, con una enfermedad de pulmonía, murió en su casa y en la comunión de Nuestra Señora Madre Iglesia de Hinchazón. Como guerrera es indisputable y la mujer mas ilustre que se conoció en el mundo de Colon y ahora un gran ejemplo en nuestra vidas diarias para seguir luchando cada día con mas fuerza y entrega como varias de estas heroínas lo hicieron. Entre estas guerras y batallas tuvieron grandes consecuencias como por ejemplo la muerte de varias personas que ya a su ves hoy se las reconoce como héroes, asimismo hizo reconocer la valentía que muchas mujeres pueden tener para poder sacrificar la vida por su patria. Hay grandes mujeres en la historia que sirven de fuente de inspiración para toda la población femenina en la actualidad. Pero ahora quisiera referirme mas a la historia de María Magdalena Guemes, (Macacha) una mas de las mujeres de la independencia mas conocida en la Republica de Argentina, ella nació en Salta el 11 de diciembre de 1787, a su corta edad, a los mas o menos 16 años decide casarse con el Militar Román Tejada y llegaron a tener una hija a la cual llamaron Eulogia. Asimismo en su corta edad, el hecho que mas marco su vida fue cuando era todavía una niña y su hermano que era cadete para ese entonces, lo llamaron a cumplir sus obligaciones en Buenos Aires para perpetuar con su carrera militar, se dice que fue el hecho que mas le marco porque encontraron un diario donde dice:”nos despedimos con un abrazo interminable”. Esta mujer se caracterizaba por su audacia, fue muy querida por todos los que rodeaban por la gran generosidad con la que ayudaba a los mas necesitados, y con la valentía con que los defendía era un ejemplo de mujer con inspiración intuitiva. Era hermana del general Martín Miguel Guemes quien fue héroe de la nacionalidad. El nombre de caudillo solo es aceptable como sinónimo de líder, pero como en nuestra historia el término está asociado con el secular antagonismo interior versus Buenos Aires o centralismo versus federalismo, definitivamente en el caso de Guemes lo mas justo es llamarlo por el digno rango militar que alcanzó en su meritoria carrera”. Ella siempre se dirigía a todos con delicadeza, con simpatía, con cariño y mucho mas con igualdad, no importaba que fueran poderosos o humildes, sabia como tratarlos, tenis una gran personalidad. Ayudaba a su hermano y siempre lo acompañaba, probo sus habilidades como costurera y ayudaba a confeccionar uniformes para los soldados de la partida de observación organizada por su hermano, en ese entonces el Teniente Miguel Guemes, a sus 23 años hizo su pequeño taller en su casa junto con unas primas y amigas. En 1810 y durante varios años, su casa aparte de ser taller de costura era un refugio para jefes, soldados y oficiales. María Magdalena Guemes participo de la grafía en la guerra gaucha que organizo su hermano, para defender la frontera. Cuando Macacha se hallaba en su casa de La Amargura y de Yocci (hoy Balcarce (ex de la Amargura) y España (de la victoria) en la noche del 7 de junio de 1821 llegó Guemes respondiendo a un apócrifo llamado de su hermana, pero luego se dieron cuenta que era parte de una táctica de los realistas que pretendían sorprenderlo al "mártir de la patria" -él único jefe militar muerto en el campo de batalla- abandonó el hogar y al disparar escoltado por sus "Infernales" fue mortalmente herido para morir diez días después. Macacha continúo participando de los sucesos políticos de la provincia, con la valentía que la distinguía. Martín Miguel Guemes su hermano fue un General de formación y carrera militar que obtuvo todos los grados por mérito en acción de guerra. Fue un estadista con un claro concepto de Nación. Por ello relegarlo al rol de caudillo local es no comprender, desconocer o soslayar estas circunstancias. El 1º de marzo de 1817, Guemes logró recuperar Humahuaca y se dispuso a esperar la invasión. Los realistas acamparon en las cercanías. Habían recibido refuerzos y ya sumaban 5.400. La estrategia de Güemes será una aparente retirada con tierra arrasada, pero con un permanente hostigamiento al enemigo con tácticas guerrilleras. En estas condiciones las fuerzas de La Serna llegaron a Salta el 16 de abril de 1817. El boicot de la población salteña fue absoluto y las tropas sufrieron permanentes ataques relámpago. El general español comenzó a preocuparse y sus tropas empezaron a desmoralizarse. No lo ayudaron las noticias que llegaron desde Chile confirmando la victoria de San Martín en Chacabuco. El año 1821, fue sumamente duro para Guemes porque a la amenaza de un nuevo ataque español se sumaron los problemas derivados de la guerra civil. Guemes debía atender dos frentes militares: al Norte, los españoles; al Sur, el gobernador de Tucumán, Bernabé Aráoz que, aliado a los terratenientes salteños, fustigaba permanentemente a Guemes, que será derrotado el 3 de abril de 1821. El Cabildo de Salta, dominado por los sectores conservadores, aprovechó la ocasión para deponer a Guemes de su cargo de gobernador. Pero a fines de mayo Guemes irrumpió en la ciudad con sus gauchos y recuperó el poder. Todos esperaban graves represalias, pero éstas se limitan a aumentar los empréstitos forzosos a sus adversarios, pero su hermana siempre lo acompaño y apoyo en todo momento. Intervino en la llamada "Revolución de las Mujeres" que, con el apoyo militar de Pablo Latorre derrocaron al gobernador José Antonio Fernández Cornejo y pusieron en el cargo al general doctor José Ignacio de Gorriti. Más tarde, en 1824, participó en un acto faccioso en oposición al general Juan Antonio Álvarez de Arenales "y nuevamente contra el General José Antonio Fernández Cornejo once años después, provocando la delegación del mando de éste en manos del general Felipe Varela", según María Teresa Cadena. Macacha ayudo bastante y mucho mas a su hermano porque gracias a ella, salvo a su pueblo e hizo que los jefes enfrentados en la guerra de recursos demoledora, subieran a un compromiso de paz y de no mas agresiones, ya que ellos estaban haciendo que las personas de Salta fueran despojados de por lo que ahora es conocido como la de los cerrillos. Referirse a Macacha Guemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el héroe Gaucho, para garantizar la soberanía de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta reminiscencia representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su vida al servicio de su patria. En mi perspectiva, esta valerosa mujer, así coma las demás mujeres que dieron su vida por su patria y por la libertad, esta mujer yo creo que ya nació con sangre de libertad en sus venas así como su insigne hermano, aunque tanbien ella lego a aprender grandes cosas de su hermano, el le dio un gran ejemplo de libertad de esperanza. Hay mujeres tan valerosas y a la vez podríamos comentar sobre las valientes mujeres que lucharon por lo que era suyo, las mujeres de la coronilla: La historia señala que tras los levantamientos armados que se produjeron en la ciudades de La Paz, Oruro y Chuquisaca a partir del año 1809, Cochabamba era llamada a seguir el ejemplo de sus regiones con el fin de derrotar el dominio español encabezado por Goyeneche. En ese marco tras la sublevación reprimida de Sipe – Sipe, Goyeneche emprendió camino hacia la Argentina con el fin de irrumpir sus provincias y apagar el fuego revolucionario que se había iniciado y así poder derrotarlos, pero con lo que no esperaba Goyeneche era con la nueva insurrección que se produjo tras la salida del comandante español, tras enterarse de la nueva rebelión, Goyeneche retorno a Cochabamba y enfrento a los patriotas encabezados por Esteban Arze, a quienes derroto el 24 de mayo de ese mismo año. Tres días después, la ciudad de Cochabamba fue tomada tras la resistencia heroica de las mujeres cochabambinas en la colina de San Sebastian, mujeres que al ver como morían sus esposos, hermanos, padres, y otros parientes que también defendían su patria, no dudaron en ir a defender la patria encabezada por Josefa Gandarilla, quien arengo a sus compañeras para ir a la lucha. En esta colina, mas conocida como Coronilla, cientos de mujeres murieron a manos de las fuerzas realistas, y en homenaje a ese valor, demostrando aquel 27 de mayo de 1812 es que se recuerda esta fecha como el día de la madre boliviana, conmemoración que fue confirmada a través de la ley ya referida. La ley del 8 de noviembre de 1927 también indica que las asociaciones de beneficencia y protección a los huérfanos podrán adherirse a esta fiesta y organizar festividades tendientes a resaltar la virtud del sentimiento materno, sin lugar a dudas festejar el día de la madre representa no solo rendirle honores a las heroínas de la coronilla, sino también rendirle un homenaje especial a todas las madres que día tras día suelen demostrar su heroísmo y su entrega por amor a los demás, aunque no sea en un campo de batalla pero lo es viviendo por su familia y demostrando su fuerza y entrega por los demás. Las heroínas de la coronilla mostraron que igualmente las mujeres pueden ser valientes y no como los hombres las ven, como seres delicados e indefensos, talvez la mayoría de las mujeres no se dan su lugar pero deberían, por lo menos para dar lugar a sus derechos, en mi opinión estas heroicas mujeres dieron mucho e hicieron conocer su valentía, al solo hecho de salir a luchar y mas sabiendo que sacrificarían su vida. Ahora estas mujeres son reconocidas en muchos lugares, por ejemplo en la ciudad de Cochabamba, también el día en que ellas murieron, el 27 de mayo, el pueblo Boliviano y su gobierno reconoce ese día como el día de la madre este heroico procedimiento de estas mujeres ha sido reconocido así, aunque del mismo modo Belgrano lo reconoció, exclamando gloria a las Cochabambinas. Hoy en día las Cochabambinas son conocidas como mujeres fuertes y valientes gracias a ese levantamiento que hace 198 años hicieron las heroínas de la coronilla, gracias a ellas las mujeres ahora tienen muchos mas derechos que los que tenían antes, ahora también se puede contar con las mujeres al igual que con los hombres, debería existir equidad de género, no solo en Bolivia sino también en los demás países. Asimismo dejar en claro esta pequeña aclaración que las mujeres de la coronilla fueron a combatir por falta de hombres como dice la historia si no que estas mujeres fueron anónimas, mujeres del pueblo que se abatieron en los flancos y en la colina de San Sebastian. La historia no ha identificado documentalmente hasta ahora a una sola de estas bravas mujeres, talvez a Josefa Gandarillas, pero ni aun así, por que vale recalcar que estas mujeres todavía no fueron identificadas documentalmente, pero estas heroicas mujeres derramaron su sangre en una jornada de trágicas inmolaciones. En los fusilamientos no existió mujer alguna y la gloria alcanza a todos por igual y a ninguna en particular. Toda esta historia de mujeres que supieron salir adelante por su patria y demostrar su valentía hoy en día nos enseñan cosas muy grandes al respecto, e hicieron que las mujeres también tengan derechos, mujeres de toda clase, actualmente las mujeres también valen como personas, por ejemplo Ana María de Campero,(mujer que hace pocas semanas murió) ella fue una defensora del pueblo boliviano, supo defender los derechos que tienen las personas, en especial las mujeres. Equivalentemente se podría decir que en Argentina, Cristina Fernández (no como defensora del pueblo o de su país) pero ella es una presidenta que da bastante estabilidad económica a su país, rompió el monopolio, pero esta mujer sabe dar lugar a las mujeres de su país y no solo a las mujeres sino que no deja que las personas pobres sigan sufriendo, hace todo lo posible por eso, para que todas esas personas tengan muchos derechos así como los demás, ella procura y da el ejemplo que las mujeres de la independencia dejaron para todos nosotros talvez no salvando y protegiendo su patria si no protegiendo el bien de su país por que las personas formamos parte de lo que es un país o un pueblo del mismo modo muchas mas mujeres a las que no dejare de mencionar por que ellas si saben tomar el ejemplo que las heroínas de la coronilla, Juana Azurduy de Padilla y Macacha Güemes nos dejaron ellas como ya añadí varias veces fueron mujeres que dieron todo para que hoy tomemos su valentía y entrega su esperanza, y cada uno de los sacrificios que hicieron por nosotros, para que hoy lo apliquemos a nuestra vida diaria.. Como por ejemplo lo hacen estas mujeres en la actualidad: Entre estas mujeres que mencione también esta Mercedes Sosa esta mujer, mas conocida como “la negra” quien da un gran ejemplo en que las mujeres también pueden ocupar oficios que antes solo el hombre podía ocupar, como Juana Azurduy quien fue coronada teniente coronel, demuestra que las mujeres pueden llegar a ser igual que los hombres, y no menos que ellos, y actualmente las mujeres no están solas, tienen el apoyo de los gobiernos, y aunque creo que la mayoría de los países aun no hace que la mujer valga mas o igual que el hombre, para mi es discriminación, pero gracias a Dios ahora la totalidad de las personas viven sin guerras ni muertes, aunque actualmente cada día las personas debemos luchar en la vida, a mi parecer luchar en la vida es solo voluntad de cada uno, y el esfuerzo que cada uno da para seguir adelante. Hay tanto que decir sobre lo que las heroínas inculcaron actualmente, levantaron la honra de todas las mujeres, hicieron que no se quedaran atrás y olvidadas sino que se levantaras y fueran como ellas, luchadoras. De esta forma se pueden nombrar a muchas mujeres como las que lucharon en la guerra del agua en la ciudad de Cochabamba, esta ciudad se caracteriza por el gran problema que tiene con la escasez del agua ya que la expansión de pobladores hacia que debido a la migración de campesinos y mineros entre otras causas a ocasionado con el paso de los años un gran incremento de los habitantes y la demanda del agua para el uso domestico, la guerra del agua en abril del 2000 fue el inicio de otras luchas, en esta guerra participaron mujeres que así como las heroínas de la coronilla entregaban su vida por defender lo que era suyo. Como también se puede aludir a las mujeres que lucharon en la guerra del gas. Hay tantas mujeres valientes que dieron su vida solo por su patria, aunque actualmente no hayan guerras ni luchas por tierras, todavía existen mujeres valientes y en la actualidad existen muchas de ellas, como también mencione a María Romero de campero, Cristiana Fernández… y muchas mas mujeres que en la actualidad muestran su valentía, talvez no entregando su vida por la patria, pero mejorando y haciendo que en el futuro todo sea mejor, estas mujeres a las que me refiero en este pequeño ensayo son mujeres que dan la vida por su familia, mujeres que dan la vida por sacar adelante a sus hijos, y también hay ejemplos de mujeres que hacen que den mas lugar a las mujeres, mujeres que luchan así por su patria, por la mejoría de ella, por el crecimiento y el futuro de SU PATRIA. En este año, 2010 es un año simbólico por que hay varios países que me permitiré mencionar que este año cumplen 200 años de libertad, por ejemplo: México, Argentina, Chile, Colombia y Venezuela, que celebran su grito libertario. Pero no dejemos atrás lo que pasa ahora, La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, ascendió al grado de generala a Juana Azurduy de Padilla, heroína de la independencia de Bolivia y la primera mujer en ingresar al Ejército argentino, con el que luchó por la independencia de la corona española. La declararon así mediante fuentes oficiales informaron que la mandataria firmó un decreto "de ascenso de grado post-mortem" a Azurduy, en una ceremonia en su despacho de la Casa Rosada. Su imagen es una de las que se destacan en el "Salón de las Mujeres" de la Casa de Gobierno de Argentina, creada por iniciativa de Cristina Kirchner. La mujeres de la independencia hicieron eso por nosotros, dieron su vida, su sacrificio, su entrega… por el futuro de su patria, porque no por nada ellas darían la vida mas que por ella, y no por eso hoy en día al casi tenerlo todo, (tecnología, comodidad, y sobre todo tranquilidad) debemos dejarlo todo así, porque todavía tenemos mucho por hacer en esta vida, porque cada día que pasa debemos darle ganas a todo, así como nos dejaron de gran ejemplo las valerosas mujeres de la independencia, porque no por nada ellas entregaron su vida mas que para que nosotros tengamos el futuro que tenemos, y la tendríamos mejor si nosotros damos de nuestra parte para que nuestro presente y futuro siga creciendo talvez no derrotando a personas que nos quieren quitar lo nuestro sino contribuyendo a nuestra patria para que crezca de la mejor manera, sin luchas, sin contiendas, sin mentiras, sino por lo contrario, con valentía para afrontar las cosas, con habilidad para solucionar los problemas, porque ahora talvez no haya problemas como los había antes de ser maltratados/as sino que actualmente, no solo en los países se sud América, porque también me refiero a demás países que hoy sufren por desnutrición, por falta de dinero, etc. Hay tantas causas por las cuales hoy en día hay que luchar para tener un mundo mejor que con una mujer nada mas no alcanzaría para mejorarla, o como antes con tenientes o con caudillos, sino que ahora debemos contribuir cada día un poco mas para tener, no un país mejor, sino un mundo mejor, y quedar libres de la pobreza y de la falta de alimentación. La mujeres de la independencia fueron mujeres que participaron de esta emancipación de los países sudamericanos y hoy son realmente reconocidas en todos todo lugar, y no dejan de ser homenajeados, porque fueron grandes libertadoras, se dice que no solo los mas reconocidos deberían ser homenajeados, sino también los que murieron y derramaron su sangre por estas tierras, no solo unos cuantos deberían ser reconocidos, porque en la historia se dice que centenares de personas murieron, pero si hasta los que mataron y decapitaron personas inocentes son reconocidas, si las reconocidas deberían mas ser las personas que se sacrificaron y no los que los mandaron a la muerte y a las ejecuciones, y los que no dejaban crecer nuestra patria… No solo por que estas mujeres de la independencia dejaron gran ejemplo debemos tener mas libertad, sino por nosotros mismos, porque una persona no puede vivir si libertad, y en la actualidad no somos completamente libres, vivimos en medio de robos, de delincuencia, de muerte y en fin hay tantas causas por las que aun no somos y ni siquiera hemos llegado ser libres y que todavía nos resta mucho por trabajar sobre este tema, el de “la libertad”. Este alegato, el de salvar y luchar por la libertad recupera la palabra silenciada y abre la perspectiva a un escenario de diálogo de racionalidades en muchos países. Un diálogo donde la interdependencia y retroalimentación entre Educación Ambiental, Ecología Política y Economía Ecológica supere los caminos engañosos que embarraron su desarrollo en las últimas décadas, suelo contaminado abonado por el desarrollo sostenible, difundido por tanto especialista de agencias internacionales y pedagogizado por tecnócratas de la educación dispuestos a transformar el sistema educativo desde las marismas enturbiadas por su propio linaje epistemológico de fragmentaciones. Este Manifiesto del Bicentenario, continúa el viaje iniciado por el Manifiesto para Ambientalizar la Vida, de una permanente reescritura y reelaboración, a la que convidamos... con la convicción de que se irá enriqueciendo colectivamente a partir de la alegría que nutre los corazones militantes de quienes cotidianamente luchamos por la defensa de la vida de todas las vidas. Entre otras de mis reflexiones y comentarios que se deberían promover que contribuyan en el desarrollo de nuestras vidas. Pero será que tanta lucha y tanta sangre derramada por estos mártires valió la pena en la actualidad. Yo creo que todo en la actualidad esta en manos de cada uno de nosotros, tal ves la libertad que ahora tenemos se la debemos a nuestros mártires, pero será realmente que nosotros hacemos todo para ser libres por completo, no libertinaje sino LIBERTAD, porque lo que mas busca una persona es libertad el tan solo hecho de ser libres es lo mas grande que tiene uno. Garantizar nuestra libertad política, económica y cultural, negada hace más de quinientos años de colonización y opresión, que promovieron el envenenamiento de nuestras tierras y comunidades y el genocidio de nuestros pueblos. El límite de la sustentabilidad en la racionalidad ambiental no se sostiene solamente en bases ecológicas y en la ley de la entropía, sino también en términos de equidad, en un proyecto de democracia y de justicia social. La cuestión de la distribución económico-ecológica se traduce en una política de la diversidad y de la diferencia, en una ética de la otredad, que vienen a cuestionar los principios de organización de la vida humana, más allá de la economía, en la subjetividad remitida al yo individual, y a una objetividad de la realidad sujeta a la unidad y a la universalidad del mundo. La apertura hacia la otredad es el encuentro con un Otro que no es asimilable en lo mismo. La otredad se sitúa en la exterioridad, en la complejidad, en la muerte entrópica, donde ya no puede pensarse al otro como un alter - ego, como un reclamo de reciprocidad y de igualdad desde el egocentrismo del yo, del logocentrismo de la racionalidad científica, del individualismo derivado de la racionalidad económica y jurídica que exigen igualdad y mismidad en el encuentro con el otro. La otredad remite al ser que busca emanciparse de su otro opresor: a los lenguajes de las culturas locales frente al monolingüismo del otro; a la ecología frente al poder hegemónico del capital; a los “derechos comunes a los bienes comunes” frente a la propiedad privada como lógica de un poder supremo global; al yo femenino y a las identidades diferenciadas y complejas –de género, de formas culturales de ser que se afianzan en su exigencia de igualdad en la diferencia, que no demandan igualdad en un mundo homogéneo, sino que buscan comprensión de su otredad y reclaman sus derechos a la diferencia. Por lo tanto este es un citado a, no solamente a un sector de nuestra patria sino un citado que interpela a cada uno de los que habitamos en el mundo y en estas tierras tan hermosas en las que nacimos, o en la que actualmente vivimos, porque todos somos quienes tejemos esta amplia trama de nuestra realidad poli cromática, y por lo propio todos estamos llamados a aportar desde nuestra realidad, a la construcción de respuestas integrales y corresponsales, todos debemos seguir a la libertad, con la cual nos dejaron como ejemplo estos hombres y mujeres que lucharon por nuestra patria, debemos estar orgullosos de eso, y no solo vivir con el orgullo de libertad por ellos sino también seguir aportando en nuestra vida diaria a la libertad. En esta crisis de civilización en la actualidad impulsa un cambio de racionalidad social que conlleva una reinvención de la producción, donde más allá de la posible economía, se construya una nueva sensatez productiva, una economía de la vida sustentada en los potenciales del planeta y en la creatividad de sus culturas: Un mundo global construido por las relaciones, alianzas, sinergias interculturales, este mundo debe ser llevado siglo por siglo de la mejor manera posible, si en algo puedes mejorar tu mundo, debes hacerlo y no dejarlo, porque esta vida pasa de generación en generación en la cual los hijos de los hijos de tus hijos tendrán que si o si vivir en ella y por ello no debemos dejar todo esto en blanco, debemos mejorar como ya había mencionado, todo lo que nos dejaron, porque no por el hecho de que todo este en desorden lo dejare así ya que yo no lo hice, no lo creo, se debe poner en orden, es así como lo que ahora vivimos, debemos hacer que las drogas y la delincuencia que cada día nos ataca nos deje y nos deje libres, nos deje sin miedo a crecer, a ser mejores. Hoy que la vida no es como antes debemos luchar por que sea mejor, ya que antes vivían por sobrevivir a los enfrentamientos por salvar sus tierras o salvar la vida de sus seres queridos, nosotros tenemos que luchar por crecer sanamente en un mundo sin peleas entre nosotros, en un mundo de paz, no completamente, pero que dejen vivir a los demás en alegría y esperanza. Albiceleste: El color de la esperanza Josefa Lucía Huerta Sunnah Chile Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano González fue un destacado miembro de la élite criolla, nació en el Virreinato del Río de la Plata, actual Argentina, el 3 de Junio de 1770. Década que coincidió con la llegada de los primeros libros e inmigrantes europeos, que a través de sus conocimientos, transmitieron al pueblo, principalmente a la élite, sus nacientes ideales reformistas resultantes del auge de las ideas ilustradas. Manuel fue el cuarto hijo de los trece concebidos por Doña María Josefa González Casero y Don Domingo Belgrano y Peri. Su padre fue un destacado comerciante de origen italiano, que basó su fortuna en el monopolio de productos de la época, por lo que siempre tuvo un buen sustento para la familia, por otra parte, su madre fue una mujer caritativa y humilde pese a estar ligada a las grandes familias aristócratas de Santiago del Estero. Gracias a la acomodada situación de su familia, Belgrano tuvo la oportunidad de obtener estudios de primer nivel tanto en Argentina como en Europa. Sus primeros estudios los realizó en el Colegio San Carlos, de la provincia de Buenos Aires, e incluían los ramos de filosofía, gramática latina y lo esencial de la teología. Posteriormente fue enviado por su padre a España, donde dio lugar a sus estudios en la prestigiosa Universidad de Salamanca. Su padre en principios deseaba que Manuel estudiara o ejerciera algo relacionado con el comercio, para seguir la tradición de familia, pero lamentablemente para éste, los intereses de su hijo Manuel se enfocaban hacia el área humanista. Belgrano estudió leyes y sus años de estudio finalizaron con gran éxito en sus ramos, por lo que se graduó y se recibió de abogado en la Cancillería de Valladolid. A una temprana edad, Manuel fue testigo de la noticia más impactante y trascendental de la época: La independencia de los Estados Unidos de América. Este hecho se conmemoró el 4 de julio de 1776, cuando Belgrano recién cumplía sus 6 años de edad. Esto dio lugar para el cambio de una monarquía absoluta a una nación libre y basada en un nuevo sistema de gobierno, desconocido hasta la época: La República Federal. “Vida, libertad y la búsqueda de la felicidad”, frase de la acta de la independencia de los EE.UU., fue el lema de progreso de esta naciente nación. De este conflicto, se dio espacio para la aparición de los primeros “ciudadanos ejemplares” con responsabilidad cívica y compromiso con el desarrollo económico, social y político de la sociedad. Ejemplos de estos fueron George Washington y Benjamín Franklin. Durante su estadía en Europa comprendió que no sólo estaba al otro lado del mundo en el ámbito territorial, sino que también eran verdaderos polos opuestos el ámbito intelectual. Desde aquellos momentos hubo muchos cambios en su parecer, ya que por consiguiente a dichos acontecimientos, ahora en su mente prevalecía el deseo de ayuda al pueblo a favor a la patria y el de intentar promover el desarrollo de todas las áreas de la sociedad, aprovechando al máximo las aptitudes de cada ser. Los años posteriores a la Independencia de las 13 colonias inglesas fueron de gran relevancia, debido a que para Latinoamérica el drástico cambio sucedido en América del Norte se convertía en un digno ejemplo a seguir por el éxito obtenido de su innovación de gobierno. Por otro parte, comenzó una década, donde se dejó de lado la puerilidad y se abrió camino a un flujo de ideales basados en la concepción ilustrada del poder. Manuel todavía se encontraba en España cuando se dio el estallido de la rebelión, que marcó el curso de Europa y el Mundo: La Revolución Francesa. Este conflicto se desencadenó en 1789, por disputas sociales y políticas de los partidarios y opositores del Antiguo Régimen. En el contexto del legado de los ideales y de las aspiraciones base de la Revolución Francesa, Belgrano amplió sus conocimientos para convertirse en un ser mas crítico con infinidades de influencias de pensadores de la época, donde posteriormente abrió paso para tener como convicciones los ideales de “Igualdad, fraternidad, propiedad, libertad”. En ese momento, Manuel cambio drásticamente algunos puntos de vista de su ser, es decir, a los que antiguamente consideraba que ejercían correctamente las autoridades de gobierno, ahora los consideraba como unos tiranos que solamente querían quitarle el poder y la voz que tenía el pueblo, privándolos de su divina libertad y generando poco a poco instancias, que lo único que se conseguía era provocar más desigualdad en la sociedad. Por el éxito obtenido por Belgrano en sus estudios y su carrera en Europa, obtuvo una autorización del Papa Pío VI, para leer la literatura considerada prohibida de la época, ya que según ciertos grupos de la sociedad atentaban con la armonía del gobierno y sólo daban lugar para la confusión y la critica barata a la autoridad. Por dicha autorización, Manuel tuvo acceso a los libros que contenían la base del cambio y el origen de muchos de los conflictos de la época. Belgrano leyó muchos libros y escritos de pensadores ilustrados, entre ellos estaba Jean Jacques Rousseau, este filósofo con su más trascendental texto, llamado ‘el contrato social’, Manuel pudo interpretar, que todo hombre nace libre, pero siempre está encadenado; la igualdad y libertad van sujetas a un contrato, al cual la sociedad está sometida. También se abasteció de ideas del famoso escrito ‘El espíritu de las Leyes’ de Montesquieu, texto que abrió espacio hacia el replanteamiento del poder absoluto del Monarca. Fue un escrito en donde disimuladamente se proponía un ideal de gobierno basado en la división del poder del estado en tres sectores: el Ejecutivo, Legislativo y el Judicial. En el ámbito legislativo se sumaba a esto lo expresado por el pensador italiano Filangieri. Por último, estaba lo expresado por Voltaire, donde sostenía que la moral estaba fundada en la creencia de la libertad de pensamiento y el respeto a todos los individuos. Por lo que los miembros de la sociedad tenían que encontrarse participadamente activos y poder tener su justo espacio para expresar libremente sus convicciones. Manuel también formó parte de una organización de corte filantrópico y filosófico, cuyos objetivos fueron la búsqueda de la verdad y el fomento del desarrollo intelectual y moral del ser humano, para llegar a su máximo esplendor. Dicha organización se denominó Francmasonería o Masonería y estaba constituida en ‘Logias’. El origen de la masonería en Argentina se debió gracias al arribo de inmigrantes europeos, que transmitieron de manera sigilosa esta nueva organización, formando Logias en la zona sur del continente. La primera Logia en suelo Argentino fue la “Logia Independencia”. Se desconoce la fecha exacta de su origen en Argentina, pero aproximadamente se dice que fue en la década de 1790. A fines del siglo XVIII en España, la economía tomó mayor importancia en la sociedad, por lo que a fines de 1793, cuando Belgrano terminaba sus estudios, fue designado por la Casa de Contratación como Secretario del Consulado de Buenos Aires. Esto se debió a que se necesitaba gente que tuviera conocimientos del tema para poder seguir con el desarrollo que estaba alcanzando Buenos Aires, como capital del Virreinato. Abordando a Belgrano como un hombre comprometido con su tiempo y particularmente con el proceso de emancipación latinoamericano, destacaremos los siguientes aspectos: - En primer término, dentro del ámbito social podemos destacar su gran preocupación por el desarrollo económico de la nación. Su visión económica la adquirió del economista francés François Quesnay, fundador junto a otros personajes, de la escuela de pensamiento económico del siglo XVIII. - Belgrano era considerado fisiócrata, es decir, afirmaba que una buena economía no siempre debía estar ligada al Gobierno. La fisiocracia está expresado en la frase ‘laissez faire’, que se interpreta como una baja participación del gobierno en lo económico, un rechazo al proteccionismo para implantar el librecambismo y establecer bajos impuestos. - Consideraba que el desarrollo de la economía no debía estar ligado solamente a un producto, por lo que no era un hombre mercantilista, pero sí elogiaba el agro y los cultivos hasta llamarlo delicia de los grandes hombres. - El consideraba que el desarrollo estaba basado en la producción y el orden y planificación de ésta. Belgrano presentó dos textos que hablaban de economía: “Principios de la Ciencia Económica Política” y “Máximas generales del gobierno económico de un reino agrícola”. Estos textos fueron adaptaciones de lo planteado por fisiócratas de la época. También, fue un propulsor de la idea de la “demanda efectiva”. Idea que consistía en que el precio de los productos no debía establecerse según el vendedor, sino por las necesidades del pueblo, las cantidades que se pueden producir, la cantidad de posibles compradores y otros factores que se podían negociar para no crear un ambiente de monopolio, en donde lo poco que se vendía, cuando se establecían los precios el comprador no podía negociar y tenía que acatar el precio que generalmente era inalcanzable. Durante el tiempo que ejerció como Secretario del Consulado, Belgrano potenció la imagen de su cargo y por consiguiente el Consulado se convirtió en una institución de mayor potencial y fue el foco de donde se impartían las nuevas ideas económicas. Dentro de su labor como Secretario, estuvo su aporte al primer periódico de corte económico, rural, político e historiográfico: El Telégrafo Mercantil. Además estuvo bajo su dirección, el periódico “El correo de Comercio”. En el proceso de divulgación de sus principios fue apoyado y ayudado por dos personajes: su primo, el Señor Juan José Castelli y el comerciante Hipólito Vieytes. En síntesis, Belgrano afirmaba que el comercio, la industria, y la agricultura eran las tres fuentes universales de la riqueza. Consideraba que había que generar amor por el trabajo; había que enseñar a trabajar, ya que un país que no trabaja, decae y llega a la miseria. En otro punto dentro de su labor social se encuentra la redacción tras la revolución de mayo, del Reglamento para el Régimen Político y Administrativo y Reforma de los 30 Pueblos de las Misiones, escrito 30 de diciembre de 1810. Este reglamento tuvo como fin devolverles a los pueblos de las misiones sus derechos de libertad, propiedad y seguridad, que durante mucho tiempo les fue arrebatado. Dentro de este reglamento se consideraba la libertad de tributo, el cumplimiento de los derechos de cada ser humano, un comercio franco y libre, la habilitación para la incorporación a los empleos civiles, políticos, militares y eclesiásticos, de que ningún pueblo tendría más que siete cuadras de largo y unas ocho de ancho, entre otros. 43 años más tarde, su Reglamento fue incorporado en la Constitución, redactada por Juan Bautista Alberdi. Cabe señalar además su compromiso revolucionario expresado con su tenacidad en el campo de batalla. Dentro de sus primeros roces, se encontró la primera invasión inglesa en 1806, al mando de Beresford, a las costas argentinas. Belgrano ya llevaba años al mando del regimiento, pero el mismo afirmaba: “Si el virrey Melo me confirió el despacho de capitán de milicias urbanas de la capital, más bien lo recibí para tener un vestido más que ponerme, que para tomar conocimientos en semejante carrera” . Manuel nunca estuvo muy interesado en ligarse a los asuntos militares, pero su compromiso con la sociedad y el afán de ayudar a su patria, provocó que se uniera de todas formas. Durante la invasión inglesa, sin poseer conocimientos previos de milicias, organizó un grupo de hombres dispuestos a ir a la guerra contra las tropas del General Beresford. El ejército inglés era mucho más poderoso y numeroso por lo que se ordenó la retirada al grupo de hombres que comandaba Belgrano. Tras la rendición del pueblo argentino, los ingleses exigieron firmar un juramento de lealtad a la corona inglesa. Claramente todos acataron, menos Belgrano, que exigía que tenía que volver el antiguo monarca o no aceptaría a ninguno más. Manuel tras dichos incidentes, se fue al autoexilio y se refugio en la Capilla de Mercedes. Posteriormente, los ingleses fueron expulsados y Belgrano regresó a Buenos Aires, donde fue nombrado Sargento Mayor del Regimiento de los Patricios, donde adquirió tácticas militares bajo la tutoría de Cornelio Saavedra. En 1808, la información traída desde España, de que Napoleón había dejado en prisión a Fernando VII, provocó en Belgrano y el pueblo conmoción y un temor progresivo al no saber cómo manejar dicha situación. Esto llevó a que se crearan Juntas Locales de Gobierno en España, ya que no aceptaban que “Pepe Botella” estuviera al mando de su nación. Posteriormente, se consolidaron en el Consejo de Regencia, que determinó que españoles y criollos eran iguales ante la ley por el hecho de que ambos eran súbditos del Rey. Esto provocó que en 1810 se formara una junta para determinar qué forma de gobierno seguir. A todos esos sucesos que ocurrieron durante la formación de la junta y levantamientos del pueblo, se les denominó La Revolución de Mayo y que como consecuencia se obtuvo que el Virrey del Río de la Plata, Don Baltazar Hidalgo Cisneros, fuera depuesto de su cargo. Esta junta quedó presidida por Cornelio Saavedra, Juan José Castelli, Manuel Belgrano, Miguel de Azcuénaga, Manuel Alberti, Domingo Matheu y Juan Larrea, como vocales y, por último, de secretarios a Mariano Moreno y Juan José Paso. Dentro de la junta estaban los ‘liberales’, liderados por Moreno y los ‘conservadores’, al mando de Saavedra. La revolución de Mayo implicó cambios profundos en el ámbito social, político y económico. No fue solamente reemplazar a un Virrey por una Junta de Criollos. Belgrano fue uno de los principales ideólogos que apoyaba el `programa de autogobierno´, que consistía en la proclamación de los divinos derechos de las personas, término del despotismo, emancipación americana de cualquier dominación extranjera, abolición de la esclavitud, educación popular, liberación del hombre de las tinieblas a las que estaba sometido; no sólo por su prédica popular ,sino también por su colaboración secreta en el célebre Plan de Operaciones escrito por Moreno. Desde aquellos momentos, a Belgrano ya lo tildaban como un hombre de fuertes convicciones y de grandes valores personales. Cabe destacar su participación en el éxodo jujeño, nombre que se le dio a la retirada hacia Tucumán. Este éxodo forzoso fue causa de las noticias de la llegada del ejército realista, por lo que Manuel no tuvo piedad ni paciencia para evacuar rápidamente la ciudad, para no dejar ni un recurso que pudiese abastecer a los realistas. Su medida fue muy criticada, pero eso salvó a los miembros de Jujuy de una violenta masacre. Fue un hombre muy comprometido, pese a que no era partidario de los constantes `derramamientos de sangre´, aunque no vaciló en determinar fusilamientos para los traidores y desertores, debido a que necesitaba gente que cumpliera, porque era indispensable para la disciplina revolucionaria. Manuel fue un personaje que no se destacó por ser un personaje corrupto ni por generar actos de masacre, al contrario, pese a estar ligado al ejército, sólo tuvo enfrentamientos cuando fue necesario y nunca abusó de su calidad de Sargento o General en actos que no fuesen benéficos. Considerando su espíritu de cambios, se consideraba como un revolucionario práctico y siempre anheló girar el eje de la sociedad, pero hasta el último de sus días sostenía que las posibilidades de poder concretar las metas planteadas, eran en su tiempo bastantes escasas, no sólo por las dificultades exteriores, sino también por la escasez de un espíritu cívico. Belgrano tenía claro que la ineficacia de sus postulados era, porque faltaba educación, por esto es que sostenía que la primera necesidad era la creación de escuelas primarias, obligar a los padres a que manden a sus hijos al colegio, bajo la pena de 16 años, si no cumpliesen. Manuel en sus últimos días de agonía, siempre sostuvo la idea que podíamos cambiar el curso de las naciones, es decir, pese a ver fracasados muchas de sus propuestas, él nunca desertó sus convicciones revolucionarias. Una de sus ultimas frases fue: “Tal vez mis buenos paisanos trabajarán en remediar sus desgracias”. Esas palabras nos llevan a la reflexión, a pensar si lo que hacemos lo estamos haciendo bien, si nosotros seremos esos paisanos y si hemos cumplido con sus deseos. En relación a lo anteriormente expuesto, a mi juicio pienso que Manuel Belgrano se puede considerar como el propulsor de el proceso de emancipación de la Argentina y, por consiguiente, un ejemplo para los países fronterizos, debido a que no sólo pensó en la libertad de su nación, al contrario, él consideraba que la América tenía que estar libre, plena en sus derechos, absuelta de cualquier dominación extranjera. Belgrano soñaba que los miembros de este continente se pudieran considerar como seres autónomos y no como personas controladas por algo superior. Belgrano, Bolívar y otros cuantos, compartían un mismo sueño, un sueño considerado para la época como utópico, el anhelo de unir América como una gran aldea, una gran familia, en donde no existan las diferencias, en donde las fronteras sean solamente territoriales y no sociales y podamos poseer una misma identidad. Hoy día, esos pensamientos difieren en ciertos puntos, pero lo expresado hace 200 años fue la base de lo que se planifica para el futuro de nuestras naciones de Latinoamérica en este siglo XXI. Claramente, todos los países de Latinoamérica no se pueden unir a través de la historia, debido a que cada país tiene un proceso de independencia diferente, tanto en fechas, personajes, conflictos y duración; en el ámbito de la idiosincrasia de cada país también existen diferencia, en síntesis, existen muchas diferencias dentro de los diferentes tópicos que podemos hablar de cada nación, pero hay una cosa que sí se puede hacer, es crear una misma identidad económica, es decir en esta década que el desarrollo del mundo, la globalización, se asocia con el desarrollo económico, todos los países de Latinoamérica se pueden unir y consolidarse, creando una alianza, de fuertes lazos de unión entre cada nación, a través de la economía. Es por esto que se hizo necesario la creación de un Organismo que recogiera todo lo una vez planteado por los próceres de cada patria de Latinoamérica, es decir, reunir todos los ideales americanistas, pero esta vez no para consolidarlos como una unión de todos los ámbitos de la sociedad, sino por la economía. De esta situación es que nace un 26 de marzo de 1991, el Mercado Común del Sur (MERCOSUR), una unión de países Latinoamericanos conformado por Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, a los cuales posteriormente se han agregado y asociado otras naciones. Esta organización estableció la libre circulación de bienes, servicios entre los países; un arancel externo común y la adopción de una política comercial común; coordinación de políticas económicas y sectoriales entre los Estados y por ultimo la armonización de las legislaciones para lograr el fortalecimiento del proceso de integración. “MERCOSUR: Nuestro norte es nuestro sur”; este lema del MERCOSUR alude a que no existen límites dentro de la expansión y consolidación del comercio del continente. El MERCOSUR significó para Latinoamérica no solamente un acuerdo significativo e importante de las últimas dos décadas, sino que significo la primera instancia, donde se crearon normas para generar relaciones económicas y comerciales genuinas, además de la estabilidad y de consolidación de la seguridad política de las regiones. Esta organización creo una plataforma donde la gente ligada a la economía pudo crear un foro de debate sobre sus intereses. En conclusión con esta Institución se creó un ambiente de integración en el ámbito internacional, ya que hubo más poder político y económico, ya que se consolidó la economía de los países y las relaciones diplomáticas entre cada uno de los miembros del MERCOSUR. Para concluir con este ensayo puedo decir que la labor ejercida por el ilustre personaje argentino, Manuel Belgrano, es decir, el de haber sido un hombre comprometido con el desarrollo de la sociedad en todas las áreas, significo para el pueblo un relevante cambio en la marginación que poseía la América Latina. La fuente de sus ideales revolucionarios que nacieron en Europa con Montesquieu, Voltaire, Rousseau, Filangieri y otros, fueron la base del replanteamiento de el orden de la sociedad, del absoluto poder del monarca, de la presión de la iglesia sobre el estado y de la desigualdad y la privación de libertad de las personas. Los procesos emancipadores de Latinoamérica no se preveían, pero ya se había hecho notoria la ineficacia de la gobernación por parte de España. Durante los fines del siglo XVIII hubo una serie de conflictos como la Revolución Francesa o la independencia de las trece colonias inglesas, que hicieron pensar que prontamente habría cambios, pero no tan trascendentales y drásticos como la independencia completa de las naciones. La primera causa directa de la gesta emancipadora, no fue sino hasta 1808 con la prisión del Rey Español Fernando VII, en que el pueblo se manifestó descontento y con temor, debido a encontrarse acéfalos, es decir, sin su cabeza gobernante. Debido a esta situación fue que se formaron las primeras Juntas de Gobierno en España, para luego consolidarse en el Consejo de Regencia. Este consejo expresó que españoles y criollos eran iguales, debido a que ambos eran súbditos del rey. Lo que se expresó, fue un cambio notorio y gratificante para la aristocracia criolla de Argentina, debido a que nunca se les había considerado con las mismas oportunidades, siempre se les minorizaba en capacidades y no podían acceder en plenitud a la política. Por consiguiente a los hechos sucedidos, fue que personajes criollos como Manuel Belgrano, un hombre ilustrado e inteligente, tuvo cabida y voz dentro de la sociedad. Así fue que rápidamente Belgrano empezó a tomar poder y sus convicciones, ideales y pensamientos comenzaban a marcar la historia, ya que se fue creando un ambiente de constantes cambios que para la época eran considerados utópicos, debido a la inexperiencia política y el no poseer un sustento económico estable para llevarlos a cabo. “Ya que por las obligaciones de mi empleo podía hablar y escribir sobre tan útiles materias, me propuse, al menos, echar las semillas que algún día fuesen capaces de dar frutos, ya porque algunos estimulados del mismo espíritu se dedicasen a su cultivo, ya porque el orden mismo de las cosas las hiciese germinar” , aquel fragmento de su autobiografía explicaba lo difícil que era imponer cambios en esa época, pero si la gente se interesaba con el desarrollo la “semilla” del progreso iba a seguir su curso. En la actualidad, sus ideales persisten y son tomados en cuenta, por su labor ejercida en la economía; sus labores sociales, que se ejemplifican en el establecimiento de planes para las misiones en Paraguay; en la preocupación por el desarrollo cultural del pueblo, a través del fomento de la educación por medio de la creación de escuelas y, por último, su incesable tenacidad en el campo de batalla, son la base de muchas planificaciones para la Argentina y la América Latina. Es así que se considera a Manuel Belgrano como uno de los primeros hombres en América, que dejo de lado la puerilidad para llegar a la libertad de expresión de todas sus convicciones, debido a que antes solamente se expresaba lo que te obligaban que debieras pensar y no existía la posibilidad de criticar a tu autoridad. Su perseverancia, humildad, preocupación y responsabilidad formaron con el tiempo a un hombre que cambio el curso de un Continente que se encontraba sumiso y que posteriormente se pudo cambiar, conformándose así un Continente con libertad de expresión y confianza en el desarrollo autónomo. Todo su legado se resume en el sueño de unir a Latinoamérica como una gran nación a través de la economía, ya que junto con la educación son el progreso de una sociedad. Es por eso la importancia de el MERCOSUR, debido a que es una organización que en parte se basa en los ideales expuestos por el prócer argentino el de unir a través de distintos mecanismos a nuestro continente. El MERCOSUR sigue el ejemplo de la Unión Europa, es decir, el intentar crear lazos cada vez más fuertes, donde la economía sea estable en todas las naciones y que se puedan identificar a través de un logo y una moneda común. Esto es un proceso, que lleva poco tiempo en uso, pero que se espera que siga avanzando, porque es sólo el comienzo, porque todos aciertan que hay que seguir el camino de la integración latinoamericana, para tener mayor eficiencia en nuestras relaciones políticas y económicas. Quizás Belgrano no pudo crear un sello insigne para la América Latina, pero si pudo realizarlo en su nación, ya que fue el creador de la bandera argentina, esa bandera albiceleste, del color de la esperanza. BIBLIOGRAFÍA - http://manuelbelgranorevolucionario.blogspot.com/ - http://www.portalplanetasedna.com.ar/belgrano.htm - http://www.elhistoriador.com.ar/biografias/b/belgrano_autobio.php - http://www.elhistoriador.com.ar/biografias/b/belgrano.php - http://www.abcpedia.com/republica/argentina/primera-junta.html - http://coronadosdegloria.wordpress.com/2010/06/14/belgrano-y-el-reglamento-para-el-regimenpolitico-y-administrativo-y-reforma-de-los-30-pueblos-de-las-misiones/ - http://www.todoelderecho.com/Apuntes/Historia%20Economica/Apuntes/historiaeconomica.htm - http://www.jujuyenletras.com.ar/jujuy-html/retazos/jujuy-belgrano.htm - Capítulo 1 http://www.youtube.com/watch?v=rT5qeGiJY-o&feature=related http://www.youtube.com/watch?v=wg6UjGuBjPU&feature=related - La Enciclopedia, volumen 3, página 1683, Editorial Salvat año 2004. al 2 - La enciclopedia del estudiante, volumen 19, página 140 a 148. Editorial Santillana, Buenos Aires 2006. - Chile y su Historia, Sergio Villalobos. Página 141 a 154, Editorial Universitaria Cabalgando hacia los recuerdos Beatriz Constanza Roque López Chile Con mis ojos cansados y mi piel arrugada me encuentro hoy, viuda y sola, sin más que los recuerdos que he conservado en mis pensamientos, cuando en lo Alto del Perú mi cabello se mecía con el viento y mis manos eran libres y jóvenes. Fue hace tanto tiempo que no logro dar una fecha ni recordar con exactitud cuándo fue que llegué acompañada de Manuel, que me dejó viuda a mis treinta y cinco años, con apenas nueve años de matrimonio. Me sentí tan sola y triste; para colmo, profundamente enamorada, con el único consuelo de embarcarme en los recuerdos de nuestro amor. Siempre supe que algo así sucedería… Cuando Manuel me dijo que asumiría el liderazgo de la Republiqueta de La Laguna y así colaborar con las luchas emancipadoras del Río de La Plata, no lo niego, siempre estuve de acuerdo, pese a las consecuencias que esto me traería. Me entusiasmé con los ideales de la Revolución Francesa y por mi mente sonaban bullantes las ideas de hermandad, igualdad y fraternidad. Pensé que, como una nación libre, podríamos ponerlas en marcha fácilmente, pensé que mi tierra sería generosa conmigo y con todos aquellos que lo necesitaran en algún momento. Pero hoy, a mis ochenta años, me he dado cuenta que la lucha libertadora no cambiaría la manera de relacionarnos entre sí. Perdí todo: mis cuatro hijos, mi marido, sólo me quedó mi hija. Pedí ayuda y no la tuve. Envié cartas cuando vagabundeaba en El Chaco Argentino, pidiendo un sueldo que me sirviera para vivir, porque no tenía más patrimonio que mis lágrimas y sentía que no tuvo sentido tanto sacrificio, el dormir en la selva y correr los riesgos que significaron las guerrillas que formé. Hasta hoy, nadie se ha acordado de nosotras y de la suerte que podemos estar corriendo, sin nadie que nos ayude. Siempre recuerdo aquella oportunidad en que Manuel me rescató cuando estaba herida en la batalla de La Laguna y comienzo a preguntarme qué sería hoy de mí con él al lado… Nunca olvidaré sus ojos tristes y suplicantes mirándome fijo. Pese a todo, no pudo conservar la vida: esa misma tarde falleció… Aún no comprendo por qué él. Creo que las batallas ganadas no valieron la pena, el sacrificio y las muertes sólo cobran sentido cuando pienso en el amor hacia mi patria. No podré olvidar la rebelión de Chuquisaca, a fines de la primera década del nuevo siglo. Esa tarde, cuando estábamos tranquilamente en nuestra casa con Manuel, llegó un íntimo amigo de él, ya no recuerdo el nombre, pero él nos traía mensajes que en un comienzo no entendía. Algo de un hombre, un tal Bonaparte, que junto con el gran ejército italiano invadió España y tomó cautivo al Rey Fernando VII, dejando en jaque la dinastía borbónica. También nos contó que irrumpió el orden del Reino y entraron a Aranjuez. Los nobles quedaron asustadísimos y escaparon en el primer barco a América, en especial a El Alto Perú… Quedamos impactados por lo que nos significaba la noticia, que se movió más rápido que el viento en invierno; en cosas de horas, todos sabían lo sucedido. Sin más que lo contado de boca en boca, se convocó a una Junta, donde participamos los independentistas y algunos universitarios, por supuesto, sólo los interesados en el tema. No todos querían emanciparse, pero yo quería que nos librásemos de Fernando VII; sin embargo, las condiciones no estaban dadas: se necesitaba de la formación de un gobierno provisorio, en el que nosotros decidiéramos qué hacer. Éramos leales al Rey, sólo al Rey… También nos llegaron rumores de Ramón García de León y Pizarro, en ese entonces el Gobernador. La situación nos pareció mal y acrecentó nuestros deseos de independencia del tirano; gritábamos de descontento y nos encontrábamos tan cansados de aguantar las humillaciones de La Corona española, que decidimos formar la Junta Tuitiva de los Derechos del Pueblo. Nos encaminamos desde Chuquisaca a muchos pueblos de nuestra tierra, repartiendo las ideas de independencia de la Corona y, por supuesto, recibiendo todo lo que nos ayudara a conseguir la victoria. Las tropas de realistas habían bajado la guardia y nosotros nos manteníamos más despiertos que nunca en nuestro propósito. Entonces el batallón de las milicias se tomó el cuartel de los hombres más viejos y aprisionó a los generales. Esa misma tarde se llamó a un Cabildo Abierto, que en un principio nos fue rotundamente negado, pero al dimensionar las reales magnitudes del problema, no quedó otra opción que ceder y formar dicho cabildo. Tuvimos la participación de Gregorio García, quien defendió hasta el fin nuestros ideales y no dio tregua junto con Juan Basilio Catácora. Ahora los recuerdo con cariño y nostalgia, porque en la represión murieron tantos, como Juan Bautista, ahorcado en la Plaza de La Paz. En la Junta Tuitiva, se nombró a nuestro Gobierno que comandó Murillo. Se quemaron las hojas de la deuda del fisco, entre otras cosas que con los años he olvidado. Hicimos que los españoles reconocieran nuestro gobierno y juraron alianza con los criollos. Lo hicieron bajo una carta que prometía ayuda a los hermanos del pueblo. Al tiempo después, se redactó la primera Constitución de América Latina que, si mal no recuerdo, fue bautizada como “Plan de Gobierno”, donde mostrábamos cómo sería que gobernaríamos; fuimos aplaudidos por las naciones ya independientes y las que iban camino hacia la emancipación. Sin embargo, no todo era perfecto y maravilloso: el Intendente de Potosí no quiso reconocer la junta. Supimos que nos enfrentaría y sólo contábamos con ochocientos fusiles. Perdimos la batalla de Chuquisaca y se disolvió la Junta Tuitiva. No sé con exactitud cómo sucedió todo, pero la junta se disolvió y las tropas realistas de nuevo tomaron el mando de El Alto Perú. En su venganza tomaron de rehén a todos los revolucionarios que pudieron, matándolos y torturándolos de las peores formas, hasta verlos agonizar, suplicando por sus vidas, todo para mostrar castigos ejemplares y disuadirnos de nuestros ideales. No les importó el baño de sangre que provocaron en Chuquisaca y La Paz. no les importó más que su afán de dinero y dominio sobre nuestras tierras, la dominación, la riqueza y la avaricia fueron sus móviles. Ni siquiera pensaron en un bienestar, porque el dinero que nos robaban descaradamente no era destinado a nadie que pudiera morir de hambre, sino a joyas, viajes, delicias, extravagancias, bailes y tertulias, que nunca han salvado del riesgo la vida de una persona. Muchas veces, vi a niños morir de hambre por la selva, comiendo hojas, raíces y, aún así, no tomaban conciencia sobre lo que robaban y lo que nos explotaban. Queríamos que se fueran, que nos dejaran en paz. Cuando, junto a las expediciones de Manuel Belgrano, defendimos Chuquisaca y Santa Cruz de La Sierra por la selva, yo, Juana Azurduy, embarazada de mi pequeña hija, vi morir a mis otros cuatro hijos en las batallas, pero aún así no di pie atrás y combatí embarazada las fuerzas realistas. Años más tarde, con mi marido, nos pusimos a las órdenes del argentino Manuel Belgrano, quien vino a suceder a Antonio González Balcarce y estuvo comandando el Ejército del Norte. Belgrano era un líder con pasión, entrega y mucha batalla que dar. Se logró reclutar más de diez mil hombres y mujeres, que estuvieran dispuestos a dar la vida por la liberación de la patria. A pesar de todo, las batallas no fueron productivas: organicé el batallón de leales, que significó la retirada de los ejércitos argentinos; pero la lucha no descansó y junto con mi marido organizamos guerrillas que, a nuestro juicio, funcionaban mejor que una campaña de liberación. Las guerrillas fueron un éxito, atacamos y nos tomamos Potosí y me nombraron Teniente Coronel y mi maestro Belgrano me obsequió su sable, que tanto valor y coraje me proporcionó para seguir adelante. Este sable me lo robaron o lo perdí no sé dónde, no lo recuerdo; mi memoria ha ido borrando muchos recuerdos, algunos tristes y otros felices: todavía extraño a Manuel y cada noche trato de ubicarlo entre las estrellas, para sentir su calor y compañía, como cuando la luna nos regalaba su luz y yacíamos en la selva más grande de toda América; ahí descansábamos y la violencia de nuestras batallas desaparecía, para dar paso a las más bellas caricias, que dos personas enamoradas pudieran darse. Por eso es que lo extraño tanto, porque sus abrazos me recordaban y yo lo animaba a no dejar la lucha, como siempre le dije, hasta el final. Vi morir a mis hijos y a mi marido, pero tuve que seguir adelante, aunque ya no tenía más que frío y desolación; por las noches seguí, aunque fue duro seguí y cumplí lo que juré en la tumba de Manuel: vengaría su muerte. Y eso fue lo que hice. Tuvimos la mala idea de abandonar la ruta alto-peruana para cambiar el rumbo de nuestra lucha y así conseguir la victoria definitiva, pero no era conveniente para nosotros, porque los hombres querían atacar por Perú usando como ruta Chile, país que ya estaba emancipado, pero que, en ese momento, había caído nuevamente bajo el dominio español; de ser libres, la ruta nos habría ayudado en nuestra lucha. Pero repito, no fue una buena decisión, porque disminuyó considerablemente la ayuda de la organización de la guerrilla, lo que provocó grandes y constantes disputas que terminaron por desunirnos. En el sur, nos unimos a Martín Miguel Güemes. Cuando murió Güemes quedamos desolados con mi pequeña hija, sin nada que hacer no nada para vivir; no teníamos nada y nuestros terrenos que habían sido confiscados, no fueron devueltos. Hasta ahora, no tengo una respuesta del por qué, nadie respondió a nuestras súplicas, aunque por unos años tuvimos un sueldo que fue provisorio, porque sin previo aviso, nos fue quitado y nuevamente quedamos a la deriva, desoladas y olvidadas en nuestro rancho de paja. En nuestra ausencia, el rancho había sido explotado constantemente y hoy no es más que un trozo de tierra árido y desvalido. Son tantos los recuerdos, que envuelve este rancho, esta tierra. Creo que se acerca la hora del final, el momento en que todo acabará y me iré de aquí, quién sabe dónde. Espero encontrarme con Manuel y mis cuatro hijos cuando me vaya de aquí, sé que el momento se acerca, lo sé, porque me siento cansada, más de lo normal, y en cada momento me cuesta más abrir los ojos y escarbar en los recuerdos de mi vida. La existencia se ha hecho lenta, tediosa y cansada. Aunque tengo mucha tristeza, siento felicidad por mi infancia, cuando danzaba entre la selva y miraba a los trabajadores laborar en el rancho de mi padre, siempre los ayudaba, mis padres no me permitían, sólo mirar. Aprendí el quechua con los indígenas y con mi madre asistíamos a sus rituales para aprender más sobre sus dioses y creencias. Me gustaba el ritual del sol y las ofrendas que les daban. Mi padre me llevaba de viaje, a lugares distantes y peligrosos, y todos me miraban, sorprendidos por mi valentía y agilidad al caballo. Con mi padre podíamos hacerlo a galope lanzado, sin miedo y con mucha pasión corriendo por las venas. Hoy quisiera cabalgar así, con la fortaleza y agilidad de antes. El viento debía seguir mi ritmo, porque la velocidad dejaba atónito a todo aquel que viera por primera vez cabalgar. Adoraba trepar árboles hasta la cima, nadar en las aguas más torrentosas. Mi padre siempre quiso tener un niño, siempre soñó con el niño que no tuvo y debió conformarse con sus hijas. Sin embargo, nuestra relación cada vez era más estrecha. En cada batalla me arriesgaba a la par con mis soldados, siendo muchas veces más brava y valiente que ellos. Nunca se atrevieron a desvalorarme por ser mujer; al contrario, mi coraje se anteponía a las críticas y hasta pienso que les causaba temor criticar mi accionar. Pero nunca abusé de eso. Si bien Manuel siempre me protegió, cuando murió tuve que vengar su muerte y demostré todo lo que podía y hasta lo que no sabía que podía hacer. Cuando Bolívar llegó a Sucre me vino a visitar, antes que a nadie. Conversamos acerca de las emancipaciones y me contó cómo estaba el ambiente en Venezuela. Me habló de su sueño, un sueño hermoso: se trataba de juntar las provincias de América Latina para conformar una sola nación, una nación más sólida que las fuerzas europeas que nos dominaban, compartir las riquezas de cada país y así beneficiarnos mutuamente y alcanzar un grado de liberación de la dominación española; algo definitivo, que no nos pudieran pasar a llevar ni atacar y así demostrar lo fuerte que resultaríamos todos unidos. Me enamoré de su idea y día a día pensaba en cómo cambiarían nuestras vidas si pudiéramos llevar a cabo ese pensamiento… Su nombre no lo recuerdo muy bien, pero creo que fue bautizado como el “sueño bolivariano”. Quisiera que ahora, donde sea que el viento lleve mi alma, pudiéramos compartir el sueño de mi estimado, probablemente aquí nunca se haga realidad y entonces tendríamos que encontrarnos vagando por las regiones de América y con la ilusión de poder gestar un modo de vida tan perfecto, que creo que es imposible concretar hoy. Pero soñar no está demás, más aún cuando sabes que tu tiempo aquí se acaba poco a poco y que tus horas se van gastando en pensamientos. No quiero olvidar el primer grito de libertad el veinticinco de mayo de 1810, cuando, acompañada de Manuel, escuché aquel estruendo que nos llenó de esperanza, mucho más que la que teníamos y alimentó los sueños de ser libres, por fin libres. La mayor parte de mi vida estuvo entre la guerrilla, con el pelo al viento y las manos siempre dispuestas a destrozar a quien intentara atacar a los míos o a mis sueños, la lucha emancipadora me fortaleció de orgullo, aunque pasé muchas penurias, sobre todo cuando amamantaba a mi pequeña Mercedes, y nos perseguían las tropas realistas, a pesar de que Manuel siempre nos protegió, fue inevitable nuestro secuestro del que nos rescató, pero falleció herido. Pese a nuestro coraje, nunca dejamos de ser afectivos y siempre soñamos con envejecer juntos en la patria emancipada, me da pena y nostalgia pensar que fueron sólo sueños, que las caricias ya no están y sólo tengo la memoria. No quiero pensar que en mi vida sembré en el viento y aré en el mar, porque me embargaría la nostalgia. Ayer soñé con las regiones de América unidas. Con Bolívar y San Martín satisfechos de los esfuerzos realizados; con la gente contenta, arando la tierra, y los niños felices trepando árboles y jugando bajo el sol del atardecer. Mis niños vivos y felices. Soñé que cabalgaba por el altiplano, cabalgaba más rápido que nunca y el viento acariciaba mis mejillas lozanas y preciosas, definidas y sencillas, como alguna vez lo fueron. Quisiera volver a los tiempos gloriosos en que mi fuerza y valor se destacaban entre hombres y mujeres, pero ahora esa valentía está esperando la hora de su muerte, sola, tranquila, porque llegó mi momento y mi piel arrugada como un pergamino viejo no pide más que el descanso de las batallas y de las lágrimas incesantes, que cayeron por mi rostro durante todo el tiempo de desolación, mientras miraba desde afuera la lucha y observaba a los indios trabajar de sol a sol y niños morir de hambre y frío, pensando en un consuelo, que esos niños ahora serían como aves libres y podrían vivir en las alturas de las montañas y disfrutar de la anhelada libertad. La rabia e impotencia de los abusos, la tristeza del sufrimiento ajeno y las injusticias. Todo eso me hizo ser cada vez más fuerte y estar cada vez más ansiosa por la independencia de mi patria, la patria que a pesar de haberme olvidado, amo con mi alma y cuando mi alma se vaya del cuerpo, cabalgaré por la selva, los cerros y las calles en busca de la justicia de mi pueblo, del pueblo que amo, del pueblo que me olvidó. BIBLIOGRAFÍA Vitale, L. 1998-1999. Historia social comparada de los pueblos de América Latina. Pueblos originarios y colonia. Punta Arenas {s/n}. Alberto Lapolla. “Juana de América”. {Consulta: 28 de octubre de 2010} {Disponible en: http://www.camdipsalta.gov.ar/INFSALTA/juana%20azurduy.htm} O’Donnell. “Juana Azurduy. La teniente coronela”. {Consulta: 28 de octubre de 2010} {Disponible en: http://www.elortiba.org/azurduy.html} Juana Azurduy: Una flor y un hito de esperanza en latinoamérica Daniela Antonia Vásquez Gavilán Chile Desde muy pequeña mi padre me observaba sentado desde una banca como cabalgaba, le encantaba estar debajo del árbol de damascos, para que no le llegaran demasiados rayos del sol, mientras mi caballo corría velozmente; siempre sentía fuertemente la brisa del aire tocando como pétalos de rosa mi rostro, mientras cerraba los ojos e imaginaba que volaba por los cielos. Mi padre veía en mí el hijo que nunca tuvo, es quizás por esto que siempre me llamó la atención las cosas que hacían los hombres, o también eran las ganas de demostrarle que siendo mujer, podía hacer las mismas cosas que un varón. No puedo negar que a pesar que mi padre me quería bastante, nunca pudo superar la muerte de mi hermanito, el que se fue prematuramente. Mi padre siempre quiso a un hombre en la familia, para que se sintiera orgulloso de tener su apellido y, sobre todo, para que administrara sus propiedades, ya que en esta época es muy mal visto que las mujeres se entrometan en asuntos que son de exclusividad para varones. Tengo que destacar mi gran valor y astucia para enfrentar diversas situaciones. Me siento orgullosa de tener entre mis venas sangre Inca, heredada de mi madre, una chola llamada Eulalia Bermúdez; y mi padre Matías Azurduy, un hombre muy astuto dedicado a su familia, administrador de propiedades, por lo cual tuve una buena situación económica. Esta combinación perfecta llevo en mí tener gran sabiduría de mis ancestros los Incas y el buen sentido aventurero de los españoles. De niña siempre jugaba con Rimaq, un indio, hijo del sirviente de mi padre. Corríamos horas y horas jugando a las escondidas por lo campos de trigo a pleno sol y cuando ya estaba oscureciendo nos colgábamos sobre un árbol, mientras veíamos cómo lentamente el sol iba desapareciendo. Recuerdo una vez que estábamos cazando lagartijas, yo iba corriendo rápidamente detrás de una y tropecé fuertemente con una gran roca. Me quedó una gran herida en la rodilla y como estábamos lejos de la hacienda, Rimaq trató de limpiarla con una planta que crecía por ese lugar, pese a que era muy pequeño (sólo tenía seis años), sabía bastante sobre plantas medicinales e hierbas. Luego que me curó la herida, nos fuimos a recostar sobre pastizales. Se nos pasaron las horas hablando, incluso vimos el sol que ya se estaba escondiendo, pero no nos importó, estábamos tan entretenidos, que seguimos con lo nuestro. Después de un rato, nos dimos cuenta que estaba todo muy oscuro y decidimos irnos, pero ya era tarde, nos perdimos por los campos de trigo y no encontrábamos la hacienda. Quizás pasaron unas dos horas en las cuales estuvimos ahí perdidos, ya nos estaba entrando una gran desesperación. Yo sólo quería llorar, quería que mi madre me abrazara. Nos quedamos sentados en el medio de tantas plantas de trigo y esperamos que amaneciera pronto, sólo rogaba que alguien viniera por nosotros. Rimaq se veía muy relajado, me abrazaba fuertemente para que yo no sintiera más temor. Cuando ya se me estaban acabando las esperanzas, sentí la voz de mi padre, quien venía con muchos de sus sirvientes. Me miró con cara de enfado, yo corrí a besarlo y lloré un mar de lágrimas. Creo que por lo que pasó, me castigó como por un mes: no pude salir a jugar con mis amigos y ni pensar jugar con Rimaq. Mi padre creyó que me habían secuestrado o algo por el estilo. Tengo que decir que cuando llegué a casa, mamá estaba muy angustiada, corrió a mis brazos y me hizo jurar que nunca más la asustaría de esa manera. Tengo muy bellos recuerdo de mis amigos indios y de sus familias. Siempre fui una chica curiosa y pasaba mucho con la familia de Rimaq. Yo hablaba fluidamente el Quechua y el Aymará con ellos, debido a que mi madre me lo había enseñado desde muy pequeña. Estaba con ellos en sus ceremonias, hasta incluso en sus matrimonios donde escuchaba atentamente todas sus historias y vivencias. Tengo que reconocer que aprendí bastante de ellos, me enseñaron muchos valores, me entregaron sabiduría y valentía; y quizás, lo más importante… creer siempre en mi misma. Pasó un tiempo y yo me sentía muy preocupada, pues Rimaq estaba muy enfermo, ya no era el mismo de siempre, se veía bastante decaído, con muchas ojeras, incluso hasta su color de piel había cambiado, cuando corríamos por los campos tosía bastante, incluso hasta sangraba de la boca. Un día lo fui a ver a su choza, estaba acostado en forma fetal. Lo miré a los ojos, tenía muchas gotitas de agua en su frente, le conté lo feliz que estaba por volver a verlo luego de mi castigo, él sólo me miraba, sin decir nada. Nunca pensé que esa sería la última vez que vería a mi mejor amigo de infancia, con el cual tuvimos muchas aventuras, a pesar de nuestra corta edad. Luego de la muerte de Rimaq - que sin duda me afectó bastante- me sentía muy sola, con él aprendí muchas cosas. Ya nada era lo mismo, pero el tiempo todo lo cura, según mi experiencia y es así que me hice de un nuevo amigo, el cual tenía el mismo espíritu aventurero que yo - Manuel Ascenciovecino mío, hijo de los mejores amigos de mi padres. Con su familia compartíamos mucho, pero fue desde la perdida de mi gran amigo que comencé a compartir más con Manuel, no me había tomado el tiempo de conocerlo, es por esto que con él pude llenar el vació que había dejado mi mejor amigo Rimaq. Era feliz, mi madre estaba embarazada y papá seguía teniendo la esperanza que del vientre de su querida esposa naciera un hombre, pero la verdad no fue así, lo que nació de lo más profundo de las entrañas de mi madre fue Rosalía, una bella bebé. Aún recuerdo esos ojos de mirada tan profunda cuando la vi por primera vez. Mi padre se tuvo que convencer que el destino no lo bendeciría con un varón y con eso él no podía hacer nada al respecto, es por esto que él logró igual querernos con muchas más fuerzas cada día que pasaba. Tengo que reconocer que mi vida no fue nada de fácil. Al poco tiempo de que me fui a estudiar a la ciudad a la edad de siete años, mi padre llegó con la noticia de que mi querida madre había fallecido, no podía creerlo, se veía tan joven, tan fuerte, tan sana; esa noticia cayó como un balde de agua fría sobre mí, era mi madre la que estaba muerta, la que me enseñó a hablar el Quechua y el Aymará, a comunicarme con los indios de la hacienda, quizás a esa de edad no se entiende bien lo que es perder a un ser querido y menos a una madre, pero con el tiempo ya más grande me di cuenta de lo mucho que me hizo falta. Es así que volví a la hacienda con mi padre para cuidar a mi pequeña hermana, mientras él se encargaba de sus negocios y propiedades, pero el destino otra vez me quitaría otro ser querido, mi padre, el cual murió unos meses después de la muerte de mi madre, se dijo que algún aristócrata de la zona lo habría mandado a matar, quizás por envidia, no lo sé, ya que a mi padre le iba muy bien en los negocios. Después de la muerte de mi padre, fui enviada con mi hermana a la casa de mi tía Petrona y su marido, hermana de mi padre. Debo decir que allí no lo pasé muy bien, mi tía sólo me regañaba y me trataba como su empleada, la verdad yo no estaba acostumbrada a ese tipo de cosas, y menos que dispusieran de mí, todo el tiempo discutíamos y mi hermana sólo observaba, ella era pequeña, por lo cual sólo acataba órdenes. Un día en el cual estaba planchando el vestidos de mi tía, que era bastante lujosos por lo demás, me desconcentré de lo que estaba haciendo, por lo cual el vestido ardió en llamas. Desesperada y corriendo por toda la habitación busqué algo con que apagar el fuego y poder salvar el vestido de mi tía , tomé una fuente con agua y la tiré sobre el lujoso traje, pero ya era demasiado tarde, su vestido preferido se había reducido en llama. El rostro de mi tía, cuando lo vio, fue impresionante… siento que nunca olvidaré esa cara. Supongo que tenía ganas de asesinarme, de ahorcarme, yo sólo la miré con rostro de pena, pero por dentro reía, y me parecía justo que se sintiera mal por una vez. Ese fue el último día que pasé en la casa de mis tíos, ya que al día siguiente, me enviaron a un convento. Creo que mi tía sólo quería deshacerse de mi, pero no lo hizo antes, quizás, porque no le convenía, debido a que sabía que mi padre me había dejado una gran herencia, pero lo del vestido fue la gota que rebalsó el vaso. Pese a ello, la idea de entrar al convento me parecía que era la oportunidad de librarme de los locos de mis tíos. Cuando llegué al convento por primera vez, a la edad de 11 años, luego de vivir tres años con la gritona y repugnante de mi tía, me pareció que no podía haber algo mejor que estar ahí, pensé que allí podría encontrar lo que estaba buscando, el espíritu aventurero, trepar por los árboles sin que nadie me regañara y me dijera que esas cosas no lo hacían las señoritas, pero no fue así. Siempre recuerdo, que cuando llamaban a la hora de comer, yo estaba sentada en el sauce que daba detrás de la cocina, ahí me pasaba horas leyendo libros, donde siempre había alguna aventura, salvar alguna princesa de las feroces garras de algún dragón o simplemente liberar a un país de un rey malvado, pero el libro que me llenaba de orgullo y me hacia soñar despierta era de las aventuras de Juana de Arco y cómo ella liberó a Francia de los ingleses. Desde pequeña me gustó la idea de combatir, de pelear por algún ideal, de defender lo que es justo, me imaginaba dentro de los campos de batalla y que todos se sintieran orgullosos de mi astucia y valentía, pero nunca imaginé que años después lucharía contra el ejército realista. Inquieta por naturaleza, organice una revolución dentro del convento, porque no me parecía sabrosa la comida, la verdad era bastante mala, y no estaba dispuesta a comerla por ningún motivo. Llamé a todas mis hermanas para que me ayudaran a realizar dicha acción, estaba todo planeado, pero nunca falta la persona que te tiene envidia o no le caes lo suficientemente bien , por lo cual todo lo planeado llegó a voces de la madre superiora , que me llamó a su oficina, ya cansada de mi mal comportamiento y mi carácter de revolucionaria me expulsó del monasterio a la edad de diecisiete años. Después de salir del monasterio, regresé a la ciudad que me vio nacer, Chuquisaca. Por supuesto, que no volví donde la ogra de mi tía, quedé al cuidado de Don Matías, el padre de Manuel. Mi sorpresa más grata fue cuando me reencontré con quien había logrado una amistad estando niña y conversábamos varias horas de las injusticias que se sucedían en donde vivíamos. No nos parecía justo estar al mando de un Rey, que no sabía lo que pasaba aquí, que se aprovecharan de los indios y que los españoles los trataran como esclavos, siendo que todos somos seres humanos y tenemos los mismos derechos. No era aceptable que se aprovecharan de nuestras materias primas para llevarlas a otro país, que ni siquiera conocíamos, y así conversábamos horas y horas de las injusticias que nos rodeaban como sociedad. Sentí un gran atracción por él, lo había dejado de ver cuando era bastante pequeño, ahora estaba muy guapo, con hombros grandes, con una mirara profunda y lo que más me llamaba la atención de él era, que teníamos los mismos objetivos. Manuel Ascensio Padilla estaba rodeado de amigos, los cuales todos eran antiespañoles y estaban convencidos que la única manera de sacar a los españoles de estas tierras, que no les pertenecían, era a través de la fuerza. Fue influenciado por varios de éstos para tener sus ideas claras y combatir contra lo realistas, que querían seguir invadiendo nuestras tierras. Con Manuel, finalmente nos casamos. Al principio todo era perfecto, vivíamos como cualquier familia criolla de la zona, al tiempo después, quede embarazada de mi primer hijo que se llamaría igual que su padre, luego le vinieron Mariano, Juliana y Mercedes. Manuel quería tener un cargo de Cabildo, pero no se lo dieron, ya que era un simple criollo, sólo estos cargos los podía tener un español, quizás fue esto lo que lo motivó a seguir luchando por las injusticias de la sociedad que nos rodeaba. Mi esposo, siempre se rodeó de personas con un pensamiento liberal, con corrientes de cambio, lo que llevó que le encargaran zonas de gran influencia, ya que se decía que los realista llegarían al Alto Perú. Manuel y todos lo que apoyaban la causa patriota, como uno de sus amigos, Mariano Moreno, con quien junto a más de dos mil indios y cholos defendieron la zona de Chuquisaca, para que los realistas no pudieran llegar a su objetivo. Tengo que decir, que esos momentos en que mi esposo iba a luchar por defender sus ideales y los de las demás personas, me sentí muy sola, ya que estaba con mis cuatro hijos pequeños , sin saber qué hacer , sintiendo la angustia tremenda de que un día llegaría algún coronel y me diría que mi esposo había muerto. Muchas veces pasó eso, llegaban rumores de que Manuel estaba muerto, pero yo no lo creía, y pensaba que él golpearía la puerta y lo abrazaría fuertemente porque otra vez lo tenía junto a mí. Cuando los niños dormían, pensaba en que me gustaría estar junto a él luchando, para defender lo que nos pertenecía, lo que era justo tener. Manuel ya era conocido por toda la zona como un representante de la libertad y revolucionario. Yo hace ya muchos meses que no sabía nada de él. Me tuve que ir a vivir a la ciudad , ya que todas nuestras propiedades habían sido confiscadas. Escondida entre tanto alboroto, los españoles descubren que soy la esposa de Manuel Ascensio Padilla, es por esto que me llevaron a un calabozo con mis hijos. Admito que sentí mucho miedo, temía que le hicieran algo a mis pequeñas criaturas, que nada tenían que ver en esta situación. Durmiendo por la noche , acurrucados en un rincón de la celda, sentí la voz de Manuel, quien había matado ya a los guardias, por lo cual abrió la reja y en silencion salimos rápidamente, para que los otros vigilantes no se dieran cuenta de mi fuga, nos subimos velozmente a los caballos y vi como nos alejábamos del lugar. Creo que siempre supe que algún día tendría la posibilidad de luchar, siempre supe que ese día llegaría tarde o temprano. Ahí demostraría toda mi valentía, todos mis ideales, mi espíritu aventurero y porque eso era lo que en verdad me apasionaba y me hacía sentir grata. El 25 de mayo de 1809 se produjo la revolución de Potosí, mi esposo había sido perseguido por Don Vicente Nieto, para abandonar la causa patriota y condenado a cárcel, de lo cual Manuel logró escapar del ejército realista. Me incorporé a la lucha cuando Manuel me contaba la astucia que tenían las mujeres de nuestra tierra y como a él le sorprendía lo valientes que eran. Eso me entusiasmó bastante y me fui a luchar con mi marido. Al principio, él no estaba de acuerdo, pero sabía lo terca que era y no insistió más en decirme que no. En 1813 junto con todos lo revolucionarios nos quedamos en Potosí, ya estaba integrada en el ejército junto con Manuel. Valerosos luchamos con nuestros indios en muchas guerrillas, luego de la derrota de Vilcapugio y Ayohuma, nos fuimos a otra localidad al noreste de Alto Perú. En Marzo de1814 vencimos a los realistas en Tarvita y Pomabamba. Creo que jamás en la vida había tenido el gran gusto de poder sentirme libre y satisfecha. No todo fue triunfo, tuvimos tanto de derrotas como de victorias, pero esto junto con mi esposo e hijos nos hacía ser cada vez más fuerte. Siempre imaginé que mi hijos crecerían en un mundo de libertades, en el que sus opiniones serían escuchadas, hasta quizás que tuvieran algún cargo público, que ayudaran a las personas más desamparadas de estas tierras, en fin, un millón de pensamientos. Tuve que escapar junto con mis hijos, mientras Manuel se dirigía a otro condado, ya que era perseguido por el Jefe del Ejército Realista, Don Pezuela. Todo un ejército en busca de nosotros para asesinarnos y así terminar con la revolución que estábamos realizando. Una noche, cuando todo estaba callado, todos dormían y sólo se podía sentir el sonido de los grillos, emprendí camino junto con mis hijos. Manuel estaba junto a mí, me besó la frente, caminé con los ojos llenos de lágrimas, volteé hacia atrás y le dije que todo estaría bien, que confiara en su valentía y fuerza, que todo con la ayuda de Dios saldría bien y juntos liberaríamos a América del gran opresor. Me interné en una zona llena de pantanos, allí mis hijos mayores enfermaron, y vi como morían en mis propias manos, sin poder hacer nada al respecto. Luego de que mis hijos Manuel y Mariano murieran, llegó mi esposo en mi auxilio. Hacía ya meses que no lo veía y me encontraba sola en aquel lugar. Tuve que contarle la fatal noticia, sólo recuerdo su rostro, estaba deshecho, al igual que yo, pero lo tomé de las manos y le dije que teníamos que seguir juntos en esto. Es así que volvimos al refugio, donde Juliana y Mercedes encontrarían la muerte. Combatiendo en el cerro de Carretas el 2 de agosto de 1814, escuchando los gritos de realistas y patriotas, me alejé corriendo del campo de batalla, pues estaba dando a luz a mi hija Luisa. Admito que sentí mucho temor de que nos pasara algo, pero al fin y al cabo todo salió bien, salimos ilesas de aquel combate. Mientras daba a luz, la miré a los ojos y juré que nunca le pasaría nada. Nuevamente tuve que salir a pelear, a Luisa la dejé al cuidado de Anastasia Mamani, una india en la cual confié, para que cuidara a mi hija, mientras yo luchaba y arriesgaba mi vida por la libertad de América. En 1816, salí a la pelea otra vez sin saber que esta vez no volvería a ver más a Manuel, nos sitiamos en Chuquisaca, teníamos al mando más 6000 indios, dispuestos a dar sus vidas por defender el lugar donde habían nacido y donde habían aprendido de la vida y de la naturaleza. Los realistas llegaron a Chuquisaca y es ahí donde todo se vuelve oscuro otra vez para mí; mi esposo con el cual habíamos ido a la lucha por vientos de cambios, con el que pasábamos horas hablando de las injustitas sociales, estaba ya muerto, no había nada que hacer. Sólo vi cómo se llevaban su cuerpo, arrastrado por los caballos. La cabeza de mi fiel compañero, amante y esposo fue exhibida en la plaza pública, fue muy doloroso, debo decirlo, es así que apenas pude armarme de valor y un 15 de mayo de 1817 con cientos de indios y cholos, recuperé la cabeza de mi amado Manuel, ver cómo todas las personas miraban el rostro de mi esposo, ya casi putrefacto, fue horrible. Un día recibí una carta del general Manuel Belgrano, en la cual daba a conocer toda mi valentía por la causa patriota y me nombraba Teniente Coronel. Debo decir que me encontraba muy contenta, sentía que cumplía el sueño que desde pequeña tuve, decidí reorganizar mis tropas, pero fue inútil, no tenía los recursos suficientes para hacerlo, es así que perdí toda la colaboración de mi ejército. Colaboré con el ejército de Martín Miguel Güemes, un hombre muy valiente y fuerte, con el cual combatí alrededor de tres años en esta lucha interminable , luego de su muerte en 1821 y sin nada más que hacer al respecto, decidí regresar junto a mi pequeña hija Luisa, con la cual recuperé todo el tiempo perdido. Luego de años de pelea, muerte y violencia en estas tierras y también en toda América, se declaró la independencia de Alto Perú, sintiéndome verdaderamente satisfecha por haber aportado en esta lucha insaciable de independizarnos de los españoles. Muchas veces cuando estoy sentada en aquel sillón viejo, pienso en lo diferente que habría sido mi vida si tan sólo hubiera estado en casa al cuidado de mis hijos, sin participar en ninguna revolución, sin defender a mi patria. Quizás habría sido mucho mejor, nunca habría perdido a mi familia, nunca habría estado sola, habría disfrutado de mis hijos, verlos jugar a la luz del sol, ver cómo se les caía su primer diente de leche o estar ahí cuando ellos necesitaran el más gordo de los abrazos… A veces me pregunto si esto lo hice para demostrar mi fortaleza como mujer o simplemente fui una egoísta que nada le importó el bienestar de sus hijos. Pero no me arrepiento. Me da real gusto y orgullo haber sido una de las mujeres partícipes de la Independencia de mi País, haber ayudado a defender las tierras que nos pertenecían desde tiempos remotos, defenderla de las manos de los ejércitos realistas y aportar con la independencia de América. Soy Juana Azurduy, nacida un 12 de julio de 1780 en Chuquisaca y muerta un 25 de mayo de 1862 en la más profunda soledad , flor del Alto Perú, heroína y guerrillera, mujer que luchó siempre defendiendo la Independencia de mi País y América. Fui mujer, fui madre, pero ante todo fui latinoamericana…mi mayor orgullo. BIBLIOGRAFIA http://uncajonrevuelto.arte-redes.com/?p=143 http://www.camdipsalta.gov.ar/INFSALTA/juana%20azurduy.htm http://www.biografiasyvidas.com/biografia/a/azurduy.htm http://www.elortiba.org/azurduy.html http://www.voltairenet.org/article128949.html http://www.elortiba.org/azurduy.html#Una_biografía_de_Juana_Azurduy_ Manuel Belgrano, propulsor de una nueva nación. Gustavo Patricio Tang Espejo Chile Introducción Este año hemos vivido tanto chilenos, como nuestros hermanos argentinos, mexicanos, colombianos y venezolanos la gran fiesta que significa para nuestras naciones, el Bicentenario. 200 años de vida independiente, en el que recordamos a grandes hombres, que se unieron para conseguir esta gesta emancipadora en contra de la corona española; recordamos en nuestro país a Bernardo O’Higgins, José Miguel Carrera y Manuel Rodríguez, pero también a otros personajes de nuestra historia, que no siendo chilenos marcaron nuestra historia y construyeron las bases de lo que hoy representa actualmente América Latina. Es por esto que en esta recopilación pretendemos desentrañar la vida de un hombre que marcó un precedente relevante para la Independencia de la República de Argentina, me estoy refiriendo a don Manuel Belgrano, quien fue un intelectual de su época, además de desempeñarse como político, economista, abogado y periodista, siendo también un destacado militar. Para poder reconocer la importancia de la participación de este hombre en el proceso de Independencia de la Argentina y para valorar su ejemplo patriota indagaremos en los hechos que marcaron mayor importancia en su vida, además de sus obras más importantes y destacadas. No está de más mencionar parte de las cualidades que más enaltecieron a don Manuel Belgrano y que lo hacen un prócer de la emancipación Americana, poseía un juicio recto, una honradez a toda prueba, un patriotismo puro y desinteresado, el más exquisito amor al orden, un entusiasmo decidido por la disciplina y un valor moral, que jamás se ha desmentido. Esto de las palabras del General José María Paz. Espero que sea de vuestro agrado este trabajo, tanto como ha sido para mí el realizarlo y que en él encuentres tanto que admirar como yo lo he hecho. Manuel Belgrano, Propulsor de la Nueva Nación Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano nace en Buenos Aires un 3 de junio de 1770 en la casa de su padre, que estaba ubicada muy cerca del Convento de Santo Domingo, siendo bautizado al día siguiente en la Catedral de dicha ciudad, siendo criollo, su padre Doménico (de origen italiano) y su madre la señora María Josefa Gonzales Casero (nacida en Buenos Aires), no quiso seguir con la profesión de su padre (comerciante) y optó por estudiar Derecho. Luego de realizados estos obtuvo mucho éxito en sus proyectos, consiguiendo el permiso del Santo Padre Pío VI, para acceder a toda la literatura vetada por la iglesia, exceptuando la Obscena; este acontecimiento llama profundamente la atención, puesto que con esto podemos inferir que don Manuel tuvo acceso a obras que en ese entonces no se conocían en la zona, más específicamente a las obras del movimiento filosófico conocido como la Ilustración, que contenía nuevas ideas liberales, las cuales obviamente influyeron en este Hombre. Además debido a sus profundos conocimientos intelectuales, se vio rodeado de la elite intelectual española, en que se discutía sobre la recién sucedida Revolución Francesa, cuestionamientos a los derechos divinos de los Reyes, además de la aplicación universal de los derechos de los hombres y los ciudadanos. Para esta elite resultaba de suma importancia refundar las bases de la nación sobre estos ideales, como consecuencia de esto, quienes no apoyaban esta idea eran considerados verdaderos tiranos, partidarios de antiguas ideas ya desprestigiadas y obsoletas. Antes de continuar, analizaremos esta particular situación, Manuel Belgrano es bombardeado por estas nuevas ideas, influenciado fuertemente por la literatura Ilustrada y los Intelectuales Españoles, señala en su autobiografía. “Como en la época de 1789 me hallaba en España y la revolución de Francia hiciese también la variación de ideas y particularmente en los hombres de letras con quienes trataba, se apoderaron de mí las ideas de libertad, igualdad, seguridad, propiedad, y sólo veía tiranos en los que se oponían a que el hombre, fuere donde fuese, no disfrutase de unos derechos que Dios y la naturaleza le habían concedido, y aún las mismas sociedades habían acordado en su establecimiento directa o indirectamente”. Manuel Belgrano, Autobiografía. Es relevante como Manuel Belgrano declara que estas ideas se han apoderado de su persona y dentro de su motivación, dice sólo ver a tiranos que se oponen a estas ideas. Belgrano mostraba gran interés por las obras referidas al bien público y provecho general. El 2 de junio de 1794 es nombrado Secretario del Consulado del Comercio de Buenos Aires, donde se ocupa de administrar la justicia en casos de disputas mercantiles, además de fomentar el desarrollo de la agricultura, la industria y el comercio. Al encontrarse con algunas limitaciones para reformar las políticas comerciales, centró sus energías en fomentar el desarrollo de la educación, y como declaraba su profesor, la auténtica riqueza de los pueblo se halla en su inteligencia y el auténtico fomento de la industria se encuentra en la educación. Fundando así la Escuela de Náutica y la Academia de Geometría y Dibujo. Abogando también por la creación de la Academia de Comercio, Agricultura y la de Perspectiva. En 1803 las Escuelas de náutica y Dibujo son cerradas por orden del español Manuel Godoy (Ministro), quien considera, que son un lujo innecesario para la corona española. A lo que Manuel Belgrano responde: "…no podía menos que disgustar a los que fundaban su interés en la ignorancia y el abatimiento de sus naturales". Manuel Belgrano. Manuel Belgrano, y su incursión por el Mundo de las armas El año 1797 don Manuel Belgrano es nombrado por el Virrey Pedro de Melo como Capitán de las Milicias urbanas de Buenos Aries. Hecho que no representaba ningún atractivo para él. Más tarde el Virrey Sobremonte le encarga a Belgrano la creación de una milicia para prevenir algún ataque inglés, éste toma este cometido con muy poca seriedad. El 25 de junio 1806 en la argentina una expedición de 1600 hombres armados, da inicio a las invasiones inglesas. Manuel Belgrano al escuchar la alerta, se movilizó de inmediatamente hacia su puesto de mando donde reunió a sus hombres para enfrentar esta invasión. Belgrano, al no poseer conocimientos sobre milicia, ordena movilizarse hacia el sector del Riachuelo, lo que los hombres hacen desordenadamente, al escucharse un único cañonazo inglés, Belgrano debe ordenar la retirada. Al ocurrir esto, las fuerzas inglesas toman la ciudad; los ingleses exigen que las autoridades juren fidelidad a lo que el consulado en pleno accede; Belgrano se niega a esta posibilidad y debe exiliarse de Buenos Aires. Poco después las fuerzas invasoras fueron expulsadas ,a lo que don Manuel regresa a Buenos Aires, es nombrado Sargento Mayor del Regimiento de Patricios, pero por asperezas con sus iguales renuncia al cargo, sin antes profundizar sus estudios de tácticas militares. Belgrano, y su participación en la Primera Junta de Gobierno Argentina A principios de 1810 la situación de efervescencia política en Argentina es insostenible, el Rey Fernando VII había sido apresado por los ejércitos franceses de Bonaparte y la corona española ahora se encontraba sin cabeza. Esta situación crea tensión y voces de independencia en toda América, lo que en el caso de argentina explota con la revolución de Mayo. Manuel Belgrano fue uno de los personajes más importantes dentro de este proceso, donde participaría en el Cabildo Abierto del 22 de mayo, a favor de remplazar al Virrey. Tres días más tarde, el 25 de mayo, seria electo vocal de la nueva Junta de Gobierno. El sueño de la libertad de América, y la expedición libertadora del Paraguay A pesar que con los datos que hemos podido recabar, y sabiendo de que Manuel Belgrano no poseía gran experticia militar, es nombrado General al mando de la expedición que pretendería lograr la independencia del Paraguay, a lo que Belgrano responde en su autobiografía. “Me hallaba de vocal de la Junta Provisoria cuando en el mes de agosto de 1810, se determinó mandar una expedición al Paraguay. La Junta puso las miras en mí para mandarme con la expedición auxiliadora, como representante y general en jefe de ella; admití porque no se creyese que repugnaba los riesgos, que sólo quería disfrutar de la Capital, y también porque entreveía una semilla de desunión entre los vocales mismos, que yo no podía atajar, y deseaba hallarme en un servicio activo, sin embargo de que mis conocimientos militares eran muy cortos”. Manuel Belgrano, Autobiografía. Antes de continuar, analicemos estas palabras, Belgrano asume que no produce contento en él la situación de asumir este nuevo cargo, mas se ve en la obligación de tomarlo, aludiendo también a fuertes quiebres entre los miembros de la Junta de Gobierno Argentina. Continuemos, Dentro del desempeño militar de Belgrano llamaba la atención de quienes le rodeaban su templanza en el modo de vida de Manuel. Ya en Paraguay logra una importante victoria, venciendo a las fuerzas realistas en la batalla llamada Campichuelo, aun así es derrotado más tarde en las batallas de Paraguarí y Tacurí, al ser sobrepasado por tropas numéricamente superiores en el año 1811. Hacia el año 1812, Belgrano redacta los Reglamentos de las Provincias de Misiones, documentos que representan las bases de la Constitución Argentina. Más tarde la Junta de Gobierno pone al mando de Belgrado a las fuerzas que deberían sitiar y rendir la Ciudad de Montevideo. En Paraguay el 12 octubre de 1811 firma en conjunto al recientemente instaurado Gobierno de Argentina un tratado de amistad, auxilio y comercio para una Confederación. Manuel Belgrano y el Emblema Patrio En Rosario a orillas del rio Paraná, el día 27 de febrero de 1812, Manuel Belgrano, enarbola por primera vez la Bandera de la Argentina, emblema creado por él mismo con los colores de la escarapela, (otra obra de Belgrano). Cabe destacar que la intensión de Belgrano era utilizar este emblema como distinción de su ejército, siendo luego adoptada como símbolo de Independencia. La situación militar favorecía la proclamación de la soberanía del Rey, por lo que se le ordena la destrucción de ésta a Belgrano, éste la guarda pensando que en un triunfo militar alegraría a sus hombres después de ganada la batalla. Breve reseña de las proezas de Salta y San Miguel de Tucumán En Rosario, siendo aún 27 de febrero de 1812, a Belgrano le es encomendada una nueva tarea, siendo nombrado Jefe del Ejercito del Norte, por lo cual debía movilizarse hacia el Alto Perú, al llegar allí, instaló su cuartel en Campo Santo, ubicado al Este de la ciudad de Salta, dedicándose a mejorar la disciplina de sus hombres y a organizar el hospital de campaña, la maestranza y el cuerpo de ingenieros. Mientras se movilizaba por la Sierra Argentina, la Junta de Gobierno, recordemos, establecida en la ciudad de Buenos Aires, ordena a Belgrano replegarse con sus hombres hasta la ciudad de Córdova, éste aplicando sus conocimientos de logística, descubre la escasa posibilidad de defensa que ofrece esta ciudad, hecho que representa un gran peligro, pues cayendo Córdova quedaría el paso libre al ingreso de las tropas realistas a la ciudad de Buenos Aires. En el Sector de Las Piedras, es alcanzado por tropas realistas, donde se encuentra acorralado; después de perder algunos hombres, Manuel Belgrano ordena un contra ataque que resulta ser muy efectivo, viéndose en la obligación de obedecer las instrucciones de la Junta se dirige a Santiago del Estero, pero a última hora desiste de este cometido, convencido por la petición de los ciudadanos del San Miguel de Tucumán. En esta ciudad encontró varios centenares de soldados que se reclutaron en sus líneas, decidiendo Belgrano, ocupar la infraestructura de la ciudad como fuerte, el ejercito realista ultima la rendición de Belgrano en Tucumán, pero éste se niega a aquella posibilidad; los realistas avanza hasta las afueras de la ciudad, completamente desprevenidos, llevando incluso la artillería empacada sobre las mulas, siendo así, atacados sorpresivamente por las tropas independentistas, la Batalla de Tucumán se desarrollo el 24 de septiembre de1812 y por lo confuso del desarrollo de ésta, sólo se estableció la victoria de Belgrano al entrar la noche; esta batalla es una de las más importantes de la lucha emancipadora, y representa uno de los precedentes más importantes en la Historia Argentina. Manuel Belgrano reorganizó las tropas vencedoras, y se movilizó nuevamente a la ciudad de Salta, librándose el 20 de febrero la batalla en las calles de dicha ciudad; Belgrano consigue aquí un nuevo triunfo, además de ser esta la primera vez que la Bandera argentina encabeza el avance del ejercito independentista. Belgrano y la expedición libertadora del alto Perú En abril de 1813, Belgrano se moviliza con sus tropas hacia el norte, donde encontramos el actual territorio Boliviano, entrando en junio de ese mismo año en Potosí con un ejército de 2500 hombres, allí reorganizó casi todo el Perú Alto, designado nuevos cargos. Belgrano deja Potosí con el apoyo de los indígenas de la zona, además de poseer ahora un ejército de 3500 hombres, mil más de los que había llevado a esta ciudad. Un desastre para el ejercito de Belgrano se desato el 1 de octubre en Vilcapugio, donde una victoria segura se transformó en una sorpresiva derrota, cuanto un contra ataque realista, acaba con la mitad de las fuerzas de Belgrano, siendo derrotado en definitiva el 14 de noviembre en la batalla de Ayohuma, por lo cual Belgrano debe dejar la zona en manos de los realistas hasta un año más tarde cuando el Ejercito del norte se emprendería en una nueva campaña, eso sí, esta vez bajo el mando de José de San Martin; al verse Manuel Belgrano cuestionado por la Junta de Gobierno debe dejar el mando del ejército del norte. Manuel Belgrano, embajador de la libertad, y su muerte Manuel Belgrano es enviado a Europa para negociar el reconocimiento de la Argentina independiente, sin obtener resultados. Manuel Belgrano, uno de los Hombres más trascendentes para la independencia Argentina, yace gravemente enfermo en su cama, sumido en la pobreza, fue examinado por un médico que lo atendió en su casa, al no poder pagarle por sus servicios, pues en ese momento estaba sumido en la pobreza, quiso darle un reloj como pago, ante la negativa del galeno a cobrarle, Belgrano tomó su mano y puso el reloj dentro de ella, agradeciéndole por sus servicios. Sus últimas palabras fueron de esperanza, a pesar de los difíciles momentos que vivía él y su Patria. “...sólo me consuela el convencimiento en que estoy, de quien siendo nuestra revolución obra de Dios, él es quien la ha de llevar hasta su fin, manifestándonos que toda nuestra gratitud la debemos convertir a su Divina Majestad y de ningún modo a hombre alguno”. Manuel Belgrano. El 20 de junio de 1820, afectado profundamente de Hidropesía, muere en Buenos Aires, Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano. Análisis Al recabar los antecedentes de la vida de don Manuel Belgrano, observamos el profundo sentimiento de amor a la Patria que le embarga, sin dudas, sorprende el crecimiento de este hombre en lo militar, y su visión de futuro en lo académico. Manuel Belgrano resulta ser un Hombre con visión de futuro, netamente adelantado a su época. Llama además, profundamente la atención, como este hombre, que es tan importante para el proceso emancipador argentino, pasa los últimos días de su vida sumido en la pobreza, en condiciones realmente paupérrimas. Don Manuel Belgrano un hombre valeroso representa un ejemplo a seguir de Amor y Patriotismo y ,además, de saber sobrellevar los problemas. Comentario Me gustaría tomarme la libertad de comparar a Don Manuel Belgrano, con nuestro padre de la Patria don Bernardo O’Higgins Riquelme, Libertador de Chile. Ambos personajes, fueron hombres visionarios, quizá porque ellos tuvieron la oportunidad de salir de sus países y ver otras realidades, absorber otras ideas, además de acceder a literatura que no muchos conocieron en ese entonces. Belgrano muere sumido en la pobreza, al margen de la sociedad libre que él ayudó a construir; O’Higgins, por su parte, muere en Perú, lejos de su tierra en el autoexilio. ¿Fue realmente valorada la acción de nuestros héroes por sus contemporáneos? Al parecer no, lo que importa ahora es mantener la memoria viva de nuestros próceres, en el corazón, para que así sus sueños, de un mañana mejor siempre, nos encaminen a construir una Latinoamérica Solidaria, Fraterna, Progresista y sobre toda Unida bajo el anhelo de un Mañana Mejor. No me queda más que admirar la figura de don Manuel Belgrano, su coraje, fuerza y patriotismo. Termino este trabajo muy contento y muy satisfecho por lo que he podido aprender, y su ejemplo de vida, de la que me he empapado. BIBLIOGRAFÍA Belgrano, Manuel: “Autobiografía” , Ediciones El Aleph. Com Camugli, Pablo: “Batallas por la Libertad”, ediciones Aguilar, Buenos Aires, 2005. Mitre, Bartolomé: “Historia de Belgrano y la Independencia Argentina”, ediciones Estrada, Buenos Aires, 1947. Wikipedia, La Enciclopedia Libre.eswilipedia.org Belgrano: sueños de justicia y libertad Roxana Maribel Manquecura de Umacán Chile “Belgrano no tenía, como el mismo lo ha dicho, grandes conocimientos militares, pero poseía un juicio recto, una honradez a toda prueba, un patriotismo puro y desinteresado, el más exquisito amor al orden, 35 un entusiasmo por la disciplina y un valor moral que jamás se ha desmentido.” En el presente ensayo trataremos sobre las ideas sociales y el compromiso revolucionario del patriota y héroe de la Independencia, Manuel Belgrano. En su identificación probablemente decía “de nacionalidad argentina”, pero cuando se piensa en Belgrano, no sólo se piensa en un país, sino que en cada uno de los países que fueron liberados hace ya doscientos años. Fue, por lo tanto, uno de los principales impulsores de la libertad del Continente y de su País; participó en la Primera Junta de Gobierno, la Revolución de Mayo y en la guerra por la independencia de Argentina. Además, fue propulsor de una mejor educación y economía, a través de sus memorias. ¿Cómo manifestaba sus ideas sociales? Este hombre, periodista e intelectual por nombrarlo de una de las tantas formas que se lo puede hacer, tomó la oportunidad de expresar algunas de sus ideas cuando se le encomendó la creación de un nuevo periódico llamado Correo de Comercio de Buenos Aires. Aquí, según su propia autobiografía, tenía como objetivo popularizar los sanos principios de la economía política y de esta forma, impulsar a través de las publicaciones, la revolución. Sueños de educación para todos… Uno de los principales factores que a este patriota le preocupaba era la educación, así lo expresaba en sus memorias y lo manifestaba en el Correo de Comercio de Buenos Aires: “no es fácil corresponder en que ha podido consistir, ni en que consista el fundamento más sólido, la base digámoslo así , el origen verdadero de la felicidad pública , cual es la educación , se halla en un estado tan miserable que aún en las mismas capitales se resienten de sus faltas”. 36 Aquí se puede ver claramente que su lucha también radicaba en una educación más digna, por decirlo de alguna manera, ilustrando en la misma, las condiciones que tenía la educación hace ya más de doscientos años. Al ser nombrado secretario del consulado en 1796 propuso la creación de siete tipos de establecimientos educativos, que apoyarían en gran medida al sistema educativo imperante. - Una Escuela de Comercio - La Escuela de Náutica (creada en 1799) - La Escuela de Geometría y Dibujo (creada en 1799) - Escuelas Agrícolas - Escuelas de Hilanza de lana y de Algodón - Enseñanza Primaria gratuita y obligatoria en todo el reino - Escuela para Mujeres 35 General José María Paz. Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Belgrano - Vida, época y obra de Manuel Belgrano - Ovidio Jiménez - Ed. Academia Argentina Historia Ciudad Argentina – 1999 36 Con estas intenciones, podemos darnos cuenta que este patriota no discriminaba a nadie y quería gente más culta y educada de todos los sectores de su país y con relación a todos los ámbitos de una educación completa: las artes, la industria, la agricultura, el comercio, etc., integrando a un grupo que para esos tiempos era poco escuchado, las mujeres. Manuel Belgrano tenía dentro de sus preocupaciones la educación primaria de forma obligatoria, pues él sabía que la educación era el camino de un país mejor y más libre. “A estas infelices gentes(los pobres) que acostumbrada a vivir en la ociosidad, como llevo expuesto, desde niños, les es muy penoso en la edad adulta o resultan unos salteadores o mendigos, esto podía cortarse si les diese auxilio desde la infancia, proporcionándoles una educación regular. “ 37 De estos objetivos, Belgrano logró algunos, entre ellos, formó la Escuela de Náutica y la Escuela de Geometría y Dibujo cuando estuvo en el Consulado. Con esto, Belgrano pretendía promover en los jóvenes el ejercicio de una profesión honrosa y, a la vez, lucrativa. Pero como en ese entonces los españoles reinaban en nuestro continente, cerraron las escuelas tras tres años de funcionamiento. “…no podía menos que disgustar a los que fundaban su interés en la ignorancia y el abatimiento 38 de los naturales,…” refutó Belgrano en contra del monopolio Español. Belgrano poco a poco fue ganando conflictos dentro del Consulado por sus ideas revolucionarias para la época. Algunas de ellas y con respecto a la educación reinante, era que se oponía a los castigos corporales y que eliminaba la humillación pública del alumno incorregible, pues no era necesario este sistema basado en la violencia. También decía al respecto, que las mujeres se merecían una educación más digna, para después enseñar a sus hijos; este patriota de verdad era un hombre justo. Más tarde, su afán de libertad lo convoca a aportar en creación del primer diario de Argentina llamado “El Telégrafo Mercantil”, pero este también más temprano que tarde, es eliminado por la Corona española, ya que en sus páginas, expresaban tímidas e indirectas frases críticas al poder imperante. Ideales de una economía más justa… Otra de las preocupaciones que tenía era la economía, relacionada también de cierta forma a la educación. Para él, el desarrollo económico debía ser parte del desarrollo cultural y ser coherente con la economía de libre mercado, por eso, es que fomentaba el estudio de una de las principales actividades económicas del momento, como la agricultura. Las ideas económicas de Belgrano se basaban en Adam Smith, Galiani, Genovesi y Quesnay. Belgrano decía que había que promover la industria para exportar los superfluo, previa manufacturación; importar materias primas para manufacturarlas; sin importar lo que pudiese producir en el país ni la importación de mercadería de lujos; solamente centrando las energías en mercadería imprescindible y en la reexportación de mercadería; por lo tanto, la marina mercante jugaba un papel muy importante para él y sus ideales. Belgrano trató de impulsar esto muchas veces, pero no fue tomado en cuenta, como cuando propuso una monarquía que ofreciera el trono a los descendientes de los incas y un gobierno efectivo de tipo parlamentario, su idea fue ridiculizada, historia repetida de todos los grandes personajes de nuestra historia. 37 38 http://www.planetarios.com/historia-manuel-belgrano.htm http://anunciarnuestrahistoria.blogspot.com/2010/06/manuel-belgrano.html En su país, gran parte de los argentinos lo reconocen como el primer gran economista del país, pues sabía razonar y pensar, además de querer lo mejor para su país inculcando la educación y una economía más justa, a través de la entrega de los grandes conocimientos que había adquirido en su paso por el extranjero. Belgrano y el camino a la Libertad… “General sin las dotes del genio militar, hombre de estado sin fisonomía acentuada…Sus virtudes fueron 39 la honradez y la esperanza, la resignación y el trabajo desinteresado” en palabras de Don Domingo Faustino Sarmiento, compatriota luchador de la justicia social. En esta parte del presente ensayo, veremos como Belgrano lucha por la libertad participando en campañas y expediciones de liberación del dominio de la Corona Española. En Mayo 1810 participa en la primera junta de gobierno de su país y en esta instancia Belgrano aprovecha la oportunidad y vota por reemplazar al Virrey. Triunfos y derrotas obtiene nuestro revolucionario, durante su participación en campañas libertadoras. En 1812 obtiene el triunfo en la batalla de Tucumán, una de las más importantes en el proceso de independencia de Argentina, también obtiene el la batalla de Salta. A ver estos triunfos hizo que las provincias de los altoperuano se revelaran también contra los españoles. Gracias a los triunfos que obtuvo le otorgan un premio de 40 mil pesos equivalentes a 80k. de oro. En este punto, se debe destacar que él no se deja este dinero para él, sino una vez más, trata de igualar la educación para todos, donando este dinero a Bolivia para que cree escuelas públicas estatales. Acto de generosidad y conciencia de que todos somos hermanos en Sudamérica, contribuyendo así a la unión de las naciones. Algunas de los fracasos que tuvo fue tratar de mantener Paraguay y Argentina unidas, fue derrotado en Vilcapugio (el 1º de octubre de 1813) y en Ayohúma (el 14 de noviembre de 1813). Pero aún así siguió luchando por la libertad de su patria, sin parar, con el sueño de que algún día seríamos libres. Belgrano antes de participar en la primera Junta de Gobierno de 1810 ya había sido nombrado Jefe de Milicia en 1797 cuando Argentina fue invadido por los ingleses, da la impresión de que Belgrano no se toma muy en serio este cargo dado por la Corona. Uno de los registros es éste: “Si el virrey Melo me confirió el despacho de capitán de milicias urbanas de la capital, más bien lo recibí para tener un vestido más que ponerme, que para tomar en conocimiento de semejante carrera”. 40 En esta batalla, Belgrano fracasó y se va de Buenos Aires para refugiarse en las bandas orientales y tomar conocimientos de milicia, siempre pensando en el bien de su patria. El símbolo de su patria… Otro aporte que el patriota hizo por su país, además de luchar y tratar de inculcar ideales, fue la creación de la Bandera de Argentina. En 1812 propuso, esta vez, al Gobierno, la creación de una “escarapela nacional” la que fue aceptada por el Triunvirato. Entusiasmado con esta aprobación se decide a crear una bandera con los mismos colores. Promulgando la “Libertad y la Independencia”. 39 40 http://www.buenastareas.com/ensayos/Manuel-Belgrano/59674.html http://www.opusvida.com/manuel-belgrano/ Escarapela creada en 1812 por Manuel Belgrano Conclusión Se puede concluir de lo ya dicho, que Manuel Belgrano fue un gran impulsor de la libertad de la patria, cayendo en errores y obteniendo triunfos, siendo de esta forma modelo de lucha y amor a la patria a todos los países que fuimos liberados de la Corona Española y que hoy celebramos el Bicentenario de la Libertad y la Justicia. Aunque Belgrano haya sido de nacionalidad Argentina, es un modelo y héroe de toda nuestra Sudamérica querida, que luchó por su libertad. Luego de haber investigado sobre él y su lucha, me considero una admiradora al igual que de mis héroes patrios, Manuel Rodríguez, Bernardo O´Higgins, entre tantos que dieron su vida por poder decir hoy que somos libres y que vivimos en países que buscan la justicia. Él no sólo creyó en sus compatriotas, sino que también pensó en nosotros como Continente, en nosotras como mujeres y, sobre todo, en nosotros como ciudadanos que podíamos crear países más justos, más honrados y más educados. Anexo 4: Análisis de sus memorias Aquí analizaré algunas de las memorias que Belgrano escribió y expresó el interés por la educación y la política económica. “Una de las causas a que atribuyó el producto de las tierras y el ningún adelantamiento del labrador es porque no se mira a la agricultura como un arte que tenga necesidad de estudio, de reflexiones o de reglas”. Claramente expresa que no le tomaban mucho peso a la agricultura en Argentina y que eso habría que estudiarlo para así poder trabajar de una mejor forma la tierra. “La ciencia del comercio no se reduce a comprar por diez y vender por veinte, sus principios son más dignos sea el primero (de los medios de fomento del comercio ), una escuela titulada de Comercio”. Aquí expresaba que para tener un buen comercio había que estudiarlo, para eso había que fomentar la educación dentro del país. “Igualmente se deben poner escuelas gratuitas, para las niñas”. Ya en ese tiempo, él pensaba que la mujer también tenía derecho a estudiar y eso de un hombre en aquella época era difícil de encontrar. “Una especulación mal hecha puede traer consecuencias muy funestas al comercio de una provincia y de toda una nación que de perjuicios para un país agricultor y comerciante ¿ y de modo de prevenirlo? La extensión de conocimientos que ni el labrador ni el comerciante ni el artista ignoren lo que les corresponde…” Esto era a la educación terciaria, él pensaba que había que estudiarla para progresar en estos ámbitos. “… No hay objeto más digno de la atención del hombre, que la felicidad de sus semejantes...” Y por ultimo una de las frases mas “lindas”, con esto nos podemos dar cuenta que sinceramente a él le importaba sus pares y quería lo mejor para ellos. Anexo 1: Mapa conceptual N.1: Manuel Belgrano y sus ideales Proponía que todos deberían tener educación gratis Manuel Belgrano Impulsó ideas económicas y las relaciona con la educación. Libertad e Independencia Educación Primaria principal Estudiar la agricultura y el comercio Educación Técnica Ganar un sueldo digno y tener un trabajo honrado Las mujeres debían tener este derecho Mapa conceptual N. 2 : Manuel Belgrano y su lucha Manuel Belgrano Pierde la batalla Fracasa en su intención de mantener unida Paraguay y Argentina Jefe de la Milicia Expedición al Paraguay Participó en campañas al alto Perú junto a San Martín Invasión inglesa (1797) Gana la batalla de Tucumán, la más importante de Argentina. Se va del país. Pierde batalla de Paraguari y Tacuarí (1911) Inician causas después del fracaso Héroe de la patria y Sudamérica Lo declaran intachable Anexo 2: Entrevista imaginaria Este reportaje obviamente no es real, pero las ideas son auténticas. Esta entrevista se confeccionó considerado expresiones de Belgrano, tomadas de diferentes documentos y de su vida. ¿Qué sintió ante la llegada de los invasores ingleses? Confieso que me sentí indignado. Era muy doloroso ver a mi Patria cayendo bajo otra dominación. ¿Es verdad que el 24 de mayo de 1810 usted amenazó al Virrey Cisneros con echarlo? Juré que si a las 3 de la tarde del día siguiente el Virrey Cisneros no había sido derrocado, yo mismo, a fe de caballero, lo derribaría con mis armas. ¿Qué relación ha tenido con los demás miembros de la Junta? Yo creo que ellos recelaban de mi generosidad, de mi fervor... Como siempre pasa en las comunidades integradas por hombres, hay distintas ideas, distintos enfoques, muchos equivocados, algunos porque defienden intereses espurios, otros acertados... Yo me considero un hombre limpio; nunca me presté a nada. Tengo la impresión de que en algún momento algo en mí empezó a molestar y creo que por eso me mandaron al interior al frente de las tropas. ¿Qué figura podría decir que respeta o admira? Entre 1812 y 1813 traduje la despedida de George Washington al pueblo de los Estados Unidos, porque siempre he sentido una gran admiración por su sentido democrático. Me impactó enterarme de que él mismo aconsejara a su pueblo evitar la reelección, mientras él no aceptó la suya propia, porque, según sus palabras, debían venir otras personas a completar su obra. Sin duda, es el gran demócrata de América ¿Cómo del logró ser un buen militar Norte. si ésa no era su carrera? Después de haber participado en las milicias contra los invasores ingleses, recurrí a un maestro para que me diera algunas lecciones de manejo de armas. De hecho, esto me sirvió y mucho en el Paraguay en el Alto Perú. De todos modos, siempre privilegié la difusión de las ideas de manera política. Ir a las armas siempre ha sido para mí el último recurso a considerar. Sin embargo, dicen que usted es muy riguroso con sus jefes y oficiales subalternos... Yo conozco bien a nuestros paisanos y sin esta exigencia, que me repugna, no se podría hacer de ellos buenos soldados. Las masas están muy atrasadas en nuestro país. ¿En qué proyectos siente que ha podido plasmar sus ideas? Siempre me sentí conmovido por la situación de desamparo que vive la mujer hoy en día. Por eso puse empeño en crear escuelas profesionales, para que pueda ganarse la vida de manera honesta y enseñar a sus hijos sus derechos y obligaciones, porque ellos van a ser los ciudadanos del futuro. ¿Qué otras Escuelas fundó? Cuando fui designado Secretario Perpetuo del Consulado en 1794, se me dio la facultad de intervenir en todos los aspectos culturales. Eso me otorgó impulsó para fundar la Escuela de Náutica, porque los extranjeros se llevan la mayor parte de las utilidades con el flete. También pude erigir las Escuelas de Bellas ¿Qué Artes, piensa la de de los Ingenieros, caudillos que la de proponen Matemáticos un sistema y de la de Agricultura. gobierno federalista? No tenemos ni virtudes suficientes ni la educación necesaria como para ser una República. Lo que nos conviene es una monarquía moderada. Anexo 3: Una pequeña biografía En esta parte veremos algo de la vida de este gran hombre que fue para Argentina. Nacido en Buenos Aires el 3 de junio de 1770, hijo del matrimonio de Domingo Belgrano y Peri con María Josefa González Casero, fue enviado a proseguir sus estudios a España en el año 1786. Ya graduado de abogado retornará en 1794 a Buenos Aires habiendo recibido las influencias intelectuales de una Europa que abrazaba ya las ideas racionalistas y liberales. Como prueba de sus preocupaciones por el conocimiento, vale la pena mencionar que en 1790 había sido designado Presidente de la Academia de Derecho Romano, Política Forense y Economía Política de la Universidad de Salamanca. La efervescencia intelectual de la Ilustración, la Revolución Francesa y la Independencia de Estados Unidos marcaban el fin de una etapa histórica. El “tempo social” que se aceleraba y la atmósfera intelectual que cambiaba influirían decisivamente en la formación de las convicciones de nuestro ilustre patriota. Con absoluta claridad y sinceridad describió ese proceso en su Autobiografía cuando relata que: "Como en la época de 1789 me hallaba en España y la Revolución de la Francia hiciese también la variación de ideas y particularmente en los hombres de letras con quienes trataba, se apoderaron de mí las ideas de libertad, igualdad, seguridad, propiedad, y sólo veía tiranos en los que se oponían a que el hombre, fuese donde fuese, no disfrutase de unos derechos que Dios y la naturaleza le habían concedido, y aun las mismas sociedades habían acordado en su establecimiento directa o indirectamente". Más adelante, ya al final de su camino, a Belgrano lo esperaría (como a tantos otros grandes hombres de nuestra historia), la pobreza con que se enfrentó a la muerte. Finalmente muere el 20 de junio de 1920. “…solo me consuela el convencimiento en que estoy, de quien siendo nuestra revolución obra de Dios, él es quien la ha de llevar a su fin, manifestando que toda nuestra gratitud la debemos convertir a su divina majestad y de ningún modo a hombre alguno.” Bibliografía Para realizar este ensayo tome apuntes de lo siguiente: www.wikipedia.com Diccionario de biografías Anexo de entrevista imaginaria www.laangostur.com.ar Mapa conceptual (creación propia) Citas: 1 General José María Paz. Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Belgrano 2 - Vida, época y obra de Manuel Belgrano - Ovidio Jiménez - Ed. Academia Argentina Historia Ciudad Argentina – 1999. 3 http://www.planetarios.com/historia-manuel-belgrano.htm 4 http://anunciarnuestrahistoria.blogspot.com/2010/06/manuel-belgrano.html 5 http://www.buenastareas.com/ensayos/Manuel-Belgrano/59674.html 6 http://www.opusvida.com/manuel-belgrano/ Manuel Belgrano: un amante de la libertad Christopher Andrés Marquez Soto Chile En la emancipación de la República de Argentina surge un personaje destacable, que lleva a cabo una extraordinaria labor para permitir la libertad de su nación, su nombre es Manuel Belgrano. Este personaje realizó importantes cambios en una nación que comenzaba a forjarse, combatió como nadie en el campo de batalla, supo de triunfos y de derrotas, y siempre mantuvo un gran amor y respeto por su patria querida, a la que tanto le dio sin recibir mucho a cambio de ella; sus aportes e ideas fueron extraordinarias, y llevaron durante mucho tiempo a Argentina a ser una gran nación, que posee una organización única gracias a Belgrano; esta estructura quizá sólo podía comparase con las mejores potencias mundiales de la época, pero al pasar los años Belgrano comienza a sufrir por culpa de su gran amor, que parece maltratarlo y llevarlo a un futuro incierto. Palabras claves - Libertador - Patria – Revolucionario – Prócer -Independencia – Nación -República “Manuel Belgrano”, un amante de la libertad Siempre el futuro de un país, una región o de un mismo continente está basado en el duro trabajo que ejerce un gran hombre, un hombre que constantemente lucha para lograr aquel objetivo que tanto ansía, y que no descansa hasta poder lograrlo del todo, a este hombre es al que nosotros solemos llamar un líder o héroe, un hombre de valentía, de coraje y de mucho valor, aquel que da la vida por su patria y por defender los derechos de los que él ama. El objetivo de este hombre se basa en poder lograr que sus compatriotas puedan ser libres y puedan correr sin miedo alguno por lo verdes prados, bajo el enorme y reluciente cielo azul, sin esperar que alguien ajeno a este paraíso los atemorice e intente obligarlos a realizar una diversidad de trabajos, a los que ellos no están acostumbrados. Un héroe defiende una causa, defiende a sus hermanos y pelea hasta la muerte en el campo de batalla, con el fin de lograr sus objetivos, y cuando lo consigue es aclamado por el pueblo, quienes elevan su persona hasta lo más alto que se puede llegar, su nombre recorre el mundo, su cara está en todos lados, y todos lo recuerdan por siempre como un verdadero padre de la patria, siendo reconocido por ella y por los que la conforman, quienes valoran la lucha y la pelea que este ejerció a favor de su amada patria. Pero en muchas ocasiones, suele ocurrir que un personaje de gran trayectoria, de gran educación y de grandes ideales políticos y sociales, realiza una más que destacable presentación en la más importante de las batallas de una nación, su emancipación, su paso a un mundo mejor, a su libertad y este personaje no consigue el reconocimiento esperado para él, si no que sólo obtiene un papel de carácter más secundario, en aquel importante logro de su nación. El personaje cuya vida y logros merecen ser destacados dentro de nuestro consiente colectivo, y merecen perdurar por siempre en la mente de los ciudadanos argentinos, es la del gran General Manuel Belgrano, un hombre que peleó duramente, para que su amado país pudiera perdurar como una nación libre e independiente, como él lo deseaba desde hace ya muchos años; su trabajo para que Argentina consiguiera la independencia fue arduo, pero lo desempeñó en el lugar que sus superiores le señalasen, ya fuera en una oficina como también podía ser en el arduo campo de batalla. Personalmente, a Belgrano le agradaba más la idea de apoyar a su país creando y restableciendo nuevos planes para un mejor futuro de la nación, ya fuera en el ámbito social, político, económico, pero él, sin pensarlo, iba donde lo llamasen, debiendo en varias ocasiones combatir arduamente y duramente para defender su patria; en dichas batallas logro éxito, ya que ganó varias, pero también le tocó vivir la otra cara de la moneda, y en algunas ocasiones cayó derrotado, pero su objetivo principal estaba por cumplirse y su arduo trabajo comenzaba a dar frutos; como ya se menciona las habilidades primordiales de Belgrano no eran las batallas, y así se deja claro en la siguiente cita: “Belgrano no tenía, como él mismo a dicho, grandes conocimientos militares, pero poseía un juicio recto, una honradez a toda prueba, un patriotismo puro y desinteresado, el más exquisito amor al orden, un valor decidido por la disciplina y un valor moral que jamás se ha desmentido”. General José María Paz O como lo describiera: (Sarmiento; 1899:340) “General sin las dotes del genio militar, hombre de estado sin fisonomía acentuada...Sus virtudes fueron la resignación y la esperanza, la honradez del propósito y el trabajo desinteresado”. En éstos nos queda claro que la pasión de Belgrano no estaba en las batallas, si no que en ayudar a su nación de la mejor manera que él pudiera, además nos enteramos de su amor y pasión por el orden y la disciplina, por lo que para colaborar al desarrollo de su nación prefería utilizar su poderoso intelecto y capacidades para tomar decisiones. Por estas razones podemos pensar que sin duda alguna Belgrano merece ser llamado un verdadero Padre de la Patria de la República de Argentina, y poder estar al lado de la gran figura del General José de San Martín; además, merece ser reconocido como uno de los grandes libertadores de los ciudadanos de Hispanoamérica, para lo que sin duda, puedo mencionar que “Manuel Belgrano es un héroe sin reconocimiento”, ya que además merece ser llamado emancipador de Hispanoamérica y no se le reconoce como tal. Pero quizá el principal objetivo de esta investigación sobre Manuel Belgrano, a parte de demostrar que es un personaje que merece ser destacado dentro de Hispanoamérica, será el mostrar a todos que en un solo continente se pude encontrar un líder justo, que no sólo se interesa por su país, sino que además se interesa por la liberación total del Continente, donde se encuentra, lo que nos señala su compromiso por la libertad de toda Hispanoamérica, y su deseo de que todos podamos vivir por siempre como hermanos, pese a las dificultades que podamos llegar a tener entre países. Si nos concentramos internamente en la vida y obra de Manuel Belgrano, podemos comprobar claramente la frase anteriormente dicha, por lo que nos daremos cuenta del héroe que estaba dentro del personaje del General Manuel Belgrano, y demostraremos, que sin duda alguna, merece ser llamado uno de los libertadores de Hispanoamérica. Para comprobar esto, debemos saber acerca de la infancia de Belgrano, averiguar su pasado, ver y comprobar sus hazañas, para así observar si lo que hemos dicho acerca de él es verdadero, y si en realidad es un verdadero héroe. Para ello retrocedemos a su infancia, Belgrano fue un joven de características económicas acomodadas, con padres que poseían grandes sumas de dinero, pero él nunca se dejó guiar por lo material, si no que por un corazón libertador, que crecía y que se formaba poco a poco dentro de este joven niño. Ya mayor, Belgrano continuó sus estudios, abriéndose paso al éxito por lo que entró a estudiar Derecho en la Universidad de Salamanca y Valladolid, en el territorio español; esta actitud ya nos mostraba que con aquella carrera, Belgrano buscaría pelear por la igualdad y por los derechos de los más necesitados, como lo era los del futuro pueblo argentino, que entonces aún peleaba por la libertad, que se veía muy lejana. Nuestro personaje regresa a Argentina, convertido en abogado y de inmediato se pone a la orden del gobierno a cargo, pero es en sus primeras horas en la que nos deja en claro su entusiasmo por ayudar a las personas y a su país. Belgrano ordena crear nuevas escuelas para todos los entusiastas jóvenes deseosos de aprender cosas nuevas. Belgrano privilegió el dar clases de matemática y dibujo a los nuevos alumnos; su objetivo, a parte de dar a los jóvenes la posibilidad de tener una buena educación, era la de hacer que estos muchachos pudieran ocupar su nuevas dotes y habilidades para ayudar a servir a su Patria, pero ya no en un campo de batalla, sino que en un lugar más seguro y cómodo en el que tendrían un gran futuro. Belgrano educaba a estos chicos para que con sus habilidades ya poseídas pudieran ser políticos, hombres de negocios y quién sabe si hasta presidentes, la única condición a los jóvenes era que lo que aprendiesen lo usaran en beneficio de la República Argentina, así Belgrano no sólo se interesaba por el presente de su país, si no que preparaba un buen futuro para la nación, que para entonces ya estaría consolidada. Belgrano, con la actitud de un gran libertador que poseía, no se detuvo ahí, sino que continuó formulando nuevos planes e ideas que irían en beneficio del nuevo país y de cada uno de los ciudadanos, desde el más joven, hasta el más longevo, es así como crea un nuevo plan, en donde todas las expectativas del nuevo estado se centralizaron en la agricultura y en los hombres que la formaban, por lo que desde ese momento la tierra, que tanto le ha dado al hombre desde sus comienzos, volvería a tomar un papel central dentro de un nuevo estado; éste decide, gracias a Belgrano, fomentar como nunca se había hecho antes a la agricultura, llegando a llamarse la principal riqueza del pueblo argentino, por lo que para preservarla de buena manera se decide hacer un estudio completo de ella, es así como se crean mapas completos de los terrenos que se poseían, teniendo éstos la característica única de ser lo más precisos posibles; además ,Belgrano indicó que se le debía dar a los labradores del mencionado terreno todas las peticiones que ellos realizasen, siendo la más destacada la constante petición de semillas para sembrar el nuevo terreno, cosa que era aceptada de gran agrado por los encargados de la repartición de las semillas, que veían en aquella petición un mejor futuro económico para ellos y para la emergente Nación, por lo que esta medida de Belgrano fue enormemente alabada por los hombres de negocio de la época, ya que no sólo ayudaba económicamente a los empresarios, sino que también daba trabajo a los campesinos con menos recursos de la Nación. Posteriormente y con el objetivo de brindar ayuda de manera equitativa a la población, Belgrano implementa el segundo paso de su plan para levantar la economía de la nueva Nación, y fija su atención en la industria, en la joven y prometedora industria, el realizar este paso traería muchas repercusiones en la época, pero finalmente se le termina de catalogar como una excelente idea, debido a las ganancias que otorgaría a el nuevo País, que no atravesaba por un buen momento económico, pero al promover la agricultura y la industria, Belgrano se abría paso al triunfo, ya que la tercera etapa de su plan unía la agricultura y la industria para crear un mejor comercio, ya que a través de dicho comercio se transportaría por el País los frutos que daría la agricultura y lo que pudieran producir las grandes industrias emergentes. Para facilitar dicho comercio, Belgrano da la orden de construir nuevos y amplios caminos que atravesaran de Norte a Sur y de Este a Oeste el País, con el único objetivo de hacer que el comercio fluya de la mejor manera posible. Estos tres movimientos del plan de Belgrano son un rotundo éxito, por lo que desde ese momento pasa a ser respetado por todos los personajes destacables de la época, ya que con ideas como las de Belgrano el nuevo estado comenzaría a tomar más forma, en cuanto a organización política y social; su trabajo e ideales son reconocidos de la siguiente manera: "Puede admitirse sin temor de equivocarse, que toda la prédica doctrinaria de Belgrano, expuesta en la forma referida, es un rezumo del economismo liberal español, de la fisiocracia francesa y del industrialismo inglés". Julio V .Gonzales Hasta este momento, hemos podido conocer al Manuel Belgrano que, a través de brillantes ideas, pretendía formar la nueva Nación; Belgrano utiliza su intelecto y sus capacidades mentales, pero al pasar y al transcurrir el tiempo, Belgrano se ve obligado a realizar algo a lo que no estaba acostumbrado a hacer, Belgrano ingresa al campo de batalla a defender su Patria, esto era algo totalmente nuevo para él, y por lo tanto no tenía los conocimientos necesarios para tomar un fusil y menos para apuntarlo a un hermano hispanoamericano, ya que él era consciente, que no era nadie para quitarle la vida a un hombre, pero su Nación se lo imploraba y Belgrano como un verdadero amante de la Ptria fue a cumplir con la ya citada misión. Esto conlleva un cambio total en la vida de nuestro héroe, quien ahora deberá solucionar los problemas de la forma más odiada por el hombre, “la guerra”; para Belgrano, esto iba contra sus principios, pero debía acatar como un soldado más. Pero Belgrano no era un soldado más, ya que aunque no sabía sobre batallas, desde un principio fue un líder dentro del campo enemigo, por lo que se ganó rápidamente el respeto de sus ahora nuevos colegas, éstos ya no eran importantes políticos ni economistas, ahora eran soldados, hombres humildes, que quizá no poseían grandes riquezas, que quizá no iban de manera voluntaria a esta guerra, pero que por dios que valían y contaban para Belgrano, quien con ese ejército defendía un ideal de libertad, un ideal de patriotismo. Para Belgrano, un hombre de gran humildad, no había mejor premio para su trabajo que el ver a su Patria unida, él no pretendía ser reconocido por ello, así es como lo deja claro en la siguiente cita: “Sirvo a la Patria sin otro objetivo que el de verla constituida, ese es el único premio al que yo aspiro”. Manuel Belgrano Este hombre se preparaba para enfrenar su primer reto como soldado en el campo de batalla, allí debía poner en práctica lo poco que había aprendido sobre la guerra, ya que antes de este momento sólo había oído hablar de ella en breves relatos que le hacían sus anteriores colegas de la ciudad. Pero ahora ya nadie le hablaría de la guerra, sino que le correspondería estar ahí, y si sobrevivía a su primera batalla podría contarlo a sus nietos como una gran hazaña que llevó a cabo su abuelo, una hazaña que valdría a la libertad de un País. Manuel Belgrano cumple una labor extraordinaria como soldado, y lo hace en la batalla más célebre recordada por los argentinos, “la Revolución de Mayo”; ésta es donde los ciudadanos argentinos comienzan a pavimentar su camino a la libertad, y es esta batalla la que se recuerda por la actuación de Manuel Belgrano, a quien se le señala hoy en día como el verdadero líder de esa extraordinaria gesta histórica, que ahora es mencionada como la que le permitió a Argentina transformarse en una República libre e independiente, y todo gracias al valor y la valentía de este hombre que, sin duda, no tenía ningún temor a la muerte, por lo que el título de Padre de la Patria y Libertador se le es más que merecida. Posterior a esta victoria, a Belgrano se le nombra vocal, y se le encomienda la expedición a Paraguay, donde participa en el masivo éxodo del pueblo Jujeño, con lo que consigue el triunfo y logra una vez más la gloria que lo caracterizó gran parte de su vida , pero este triunfo pasa a ser una pequeña anécdota, comparado con lo que Belgrano lleva a cabo en este viaje, es aquí, en el camino hacia la batalla en Paraguay, donde Manuel Belgrano crea la majestuosa, imponente y maravillosa bandera de la que sería la nueva República de Argentina, es por este hecho que se recuerda con tanto entusiasmo en dicho País a la figura de Manuel Belgrano, es decir sólo se le recuerda como el creador de la bandera, por lo que su nombre sólo se escucha una vez al año, exactamente el día 27 de febrero, donde los argentinos conmemoran el día de la bandera. Sin duda alguna, la bandera es lo que representa a un país y a sus ciudadanos, es por lo que una persona se siente perteneciente a un lugar y es por lo que se emociona cuando la ve flamear tan lejos de sus fronteras, por lo que Belgrano, gracias a este acto, se ganó aún más la admiración de los personajes destacados de la época, quienes al verlo sólo podían sentir admiración y respeto por tan destacado personaje de la historia argentina. Luego de este importante acontecimiento, Belgrano vuelve al combate, donde continúa logrando y cosechando éxito sin límites, ya que saldría victorioso de las importantes batallas de Salta y Tucumán; por entonces, todos los hombres importantes y ciudadanos comunes se rendían a sus pies, el nombre de Manuel Belgrano comenzaba a tocar los cielos y ya casi se podía escuchar el seudónimo de Padre de la Patria hacia su persona; ante estas palabras, Belgrano mantenía cautela, y no le gustaba que lo llamasen de tal modo; esto nos queda claro al escucharlo de su propia boca, en una cita que refleja los pensamientos de Belgrano, además de volver a recalcarnos la humildad que lo caracterizaba: “Mucho me falta para ser un verdadero padre de la patria, me contentaría con ser un buen hijo de ella”. Manuel Belgrano Como se aprecia en la cita, a Belgrano no le importaba en demasía los reconocimientos públicos o privados que pudieran hacérsele; él era feliz si la Patria por la que trabajaba lo era, por lo que sólo pretendía ser un hijo más de ella, uno más entre los tantos que ya poseía la nueva Nación. Pero luego de tantas victorias y éxitos, el personaje que era Manuel Belgrano comenzó a decaer, es así como comienza a perder duras batallas, que quizá antes no hubiera perdido; luego de esto, Belgrano decide tomar la decisión más sensata y es así como anuncia su retiro del Ejército Argentino, para él su tiempo de gloria ya había quedado atrás, pero el saldo de esta aventura por el ejército había sido más que positiva, ya que obtuvo grandiosos e imponentes triunfos, que lo dejaron puesto ante todos como el gran General Manuel Belgrano. Pero si recordamos un poco a Belgrano no le agradaba del todo estar en el campo de batalla, ya que no poseía grandes habilidades para combatir, por lo que su éxito en él cobra mayor mérito con estos datos. Luego de este retiro, nuestro personaje volvió a lo que podríamos llamar sus orígenes, dejó el uniforme de batalla y el fusil a un lado, para volver a calzarse aquella elegante ropa que solía caracterizarlo como un gran pensador de su tiempo, y es así como ahora se integra satisfactoriamente al nuevo Congreso de Tucumán, donde participa de manera activa, aportando sus sabios conocimientos, que junto con la experiencia de este guerrero, hacían que los demás lo vieran como a alguien de opinión más que respetable dentro de este sabio Congreso. Más que popular era el discurso que Belgrano solía dar una vez al año ante una Asamblea Pública; en ésta Manuel Belgrano solía abordar una nueva temática de interés público. De este modo continuó pasando el tiempo y llegó un momento en que Belgrano no fue más a dar su discurso, esto ya debido a sus problemas físicos. Pero el nombre de Manuel Belgrano desapareció rápido de la mente de los ahora ciudadanos argentinos, ya que algo nuevo atraía sus mentes, una nueva batalla comenzaba a librarse, una guerra civil tenía atemorizados a los ciudadanos argentinos, por lo que la muerte de Belgrano pasó sin pena ni gloria ese día 20 de junio. Luego de terminada esta revuelta, los argentinos se enteraron de la muerte de Belgrano, pero no le dieron mayor importancia, sólo era un hombre más que pasaba por la faz de la tierra. Lo que no se supo hasta tiempo después fue en las condiciones en que pereció Belgrano; murió en la pobreza y en la miseria absoluta; lo más sorprendente fue el saber que esto se debió a que su querida y adorada Patria lo había prácticamente estafado, ya que no le habían pagado el dinero o sueldo que le prometieron por sus años de servicio y por todo lo que le dio a su adorada Argentina. Antes de morir; Belgrano le revela sus desgracias a un amigo y le ruega lo disculpe por las deudas que tenía con éste; esta cita quedó marcada en todos los que vieron en Belgrano un ejemplo a seguir: “Muero tan pobre que no tengo con qué pagarle el dinero que usted me prestó. El gobierno me debe algunos miles de pesos de mis sueldos y luego que el país se estabilice se los pagaran a mi albacea”. Manuel Belgrano Belgrano amó su patria hasta el final y aun cuando ésta lo había estafado, él continuaba pensando que algún día ésta le daría las gracias como se lo merecía, cosa que no llegó a suceder, sino hasta muchos años después de su muerte. El personaje de Belgrano tiene ahora algo del respeto que mereció años atrás, pero aún no se le recuerda como se le debe, luego de ver la gran vida y obra de este prócer me queda más que nunca clara la idea de que es un Héroe, un Padre de la Patria, y un Libertador Hispanoamericano, y que debería estar al lado de los grandes hombres que ya poseen con orgullo dicho título, como lo son Simón Bolívar, José de San Martin y el gran Bernardo O’Higgins. Si comparamos a Belgrano con los héroes chilenos podríamos encontrar similitudes; entre ellas, que Belgrano fue un gran libertador y guerrero, pero que terminó sin gran reconocimiento y fama como se la merecía, al igual que el prócer chileno Bernardo O’Higgins, quien murió en el exilio lejos de su amada Patria, sin el reconocimiento que merecía. Al menos algo que me consuela, es el hecho de esperar que los que tengan la oportunidad de averiguar sobre Belgrano, se maravillen con su historia, como lo he hecho yo, y traten de seguir su ejemplo de libertad y justicia. Espero que algún día los diversos líderes mundiales puedan darle el sitial que Belgrano merece por su trayectoria y pueda ser llamado por fin un prócer como los mejores del mundo. Actualmente, la República Argentina ha oído este llamado y le rinde homenaje a este hombre como se lo merece, el problema es que fue demasiado tarde, eso sólo me señala que las personas no valoran a sus héroes, hasta después de muertos, cuando ya no sirve de nada, quizá deberíamos aprender de estas experiencias y dar un merecido reconocimiento en vida a aquellos hombres y mujeres que dan tanto por nosotros, pero mientras no se haga seguiremos viendo repetirse este ejemplo una y otra vez. Para concluir puedo mencionar satisfactoriamente y con toda la seguridad del mundo que Manuel Belgrano es uno de los hombres con los mejores ideales revolucionarios y espero que algún día todo sigan su ejemplo, por lo que sólo puedo terminar diciendo: ¡¡¡¡Viva Belgrano, viva el Héroe, viva el Libertador!!!! Bibliografía Belgrano, Manuel ( 1968), Autobiografía, , Carlos Pérez Editor, Bs. As., Bidondo, Emilio (1979), La guerra de la independencia en el Alto Perú, Ed. Círculo Militar, Buenos Aires Gálvez, Lucía (1999), Historias de amor de la historia argentina. Grupo editorial Norma Luna, Félix (2004), «Las milicias criollas» (en español). Grandes protagonistas de la historia argentina: Manuel Belgrano (1º edición). Buenos Aires: La Nación. pp. 33-35. Mitre, Bartolomé (1947), Historia de Belgrano y de la independencia Argentina. Ed. Estrada, Buenos Aires. Argentina Shumway, Nicolás (2005), La invención de la Argentina, Editorial. Emecé, Buenos Aires Ovidio Giménez, Ovidio (1993), Vida, época y obra de Manuel Belgrano. Ed. El Ateneo, Buenos Aires. Argentina Paz, José María (2000), Memorias póstumas. Editorial. Emecé, Buenos Aires. Argentina Sarmiento, Domingo Faustino (1899), Obras de. Ed. imp. "Mariano Moreno", Bs. As. 1899, t XXI, pp. 340 a 349. Linkografía http://www.frasesypensamientos.com.ar/autor/manuel-belgrano.html http://www.portalplanetasedna.com.ar/belgrano.htm http://es.wikisource.org/wiki/Discurso_ante_la_Academia_N%C3%A1utica Manuel Belgrano: desde su nacimiento hasta hoy Martín Ignacio Giorello Zorrilla Uruguay M anuel Belgrano nació en Buenos Aires el 3 de junio de 1770: hace cuatro días cumplió su año número 40 y ¡qué forma de celebrarlo sino con un Buenos Aires mejor que en sus sueños! Su padre fue Domenico Belgrano y Peri, más conocido por Pérez debido a la traducción del apellido “Peri”, nacido en Italia, y su madre la bonaerense María Josefa González Casero. Ambos progenitores fueron marcados a fuego por la religión Católica, lo que luego marcará la ideología de su hijo Manuel. La ocupación de su padre fue la de comerciante, y como le tocó el tiempo del monopolio, adquirió riquezas para vivir cómodamente y dar a sus hijos la mejor educación de la época. Tanto Manuel como su hermano fueron a estudiar a España. Manuel Belgrano alcanzó un destacable éxito y prestigio, que le permitió obtener del Sumo Pontífice Pío VI una autorización para leer toda clase de literatura prohibida. De esta manera tuvo acceso a los libros de Montesquieu y Rousseau, entre otros grandes autores de la época. Se graduó de la Universidad de Salamanca con honores, recibiendo la medalla de oro. En Europa, Belgrano se vinculó con importantes especialistas en economía y tradujo a los más grandes economistas. En Salamanca fue el primer presidente de la Academia de Práctica Forense y Economía Política. En el viejo mundo asistió al nacimiento de la economía como ciencia y al de las sociedades económicas. En 1794 fue nombrado en Buenos Aires "Primer Secretario del Consulado de Comercio". Este organismo tiene funciones económicas y técnicas, relativas al comercio y la producción. Esa función le exigió escribir memorias anuales a fin de explicar proyectos a futuro, o ya realizados. A través de ellas propagó las doctrinas económicas en boga entonces en Europa y propuso cientos de iniciativas a favor del mejoramiento material de la comunidad. Años más tarde colaboró con Francisco Cabello y Mesa en el "Telégrafo Mercantil", primer periódico del Río de la Plata. Belgrano fue designado capitán de las milicias urbanas de Buenos Aires en 1797 por el Virrey Pedro de Melo. El 25 de junio de 1806 desembarcó una expedición de 1.600 soldados ingleses al mando de William Carr Beresford, lo cual inició las invasiones inglesas. Ruiz Huidobro, gobernador de Montevideo, delegó el mando de la expedición para reconquistar Buenos Aires en Santiago de Liniers, capitán francés al servicio de España. Pocos días antes que Liniers logre recuperar Buenos Aires, Belgrano se enteró y cuando estaba decidiendo si ir a tomar parte en el proyecto, le llegaron noticias del triunfo de Liniers. Entonces Belgrano decidió volver a Buenos Aires y llegó el día previo a que el Regimiento de Patricios eligiese a sus comandantes para el Cuerpo de Voluntarios Militares que iba a formarse. Los habitantes de Buenos Aires comenzaron a agruparse según su origen, en cuerpos de voluntarios militares bajo la dirección de Liniers; Belgrano participó activamente en la formación de los mismos. Entre tanto, tomó lecciones básicas sobre milicias y el manejo de las armas. El Virrey Sobremonte lo designó en 1806 como Sargento Mayor de la Legión de Patricios de voluntarios urbanos de Buenos Aires, bajo las órdenes de Cornelio Saavedra. Tras conflictos con oficiales del Regimiento de Patricios, Belgrano renunció al cargo de Sargento Mayor y regresó a su actividad en el Consulado. Sin embargo, cuando ocurrió la segunda invasión inglesa al Río de la Plata, Belgrano actuó en la defensa de la ciudad como Ayudante de Campo del Cuartel Maestre. Nuevamente fueron vencidos los ingleses, y los criollos, artífices del triunfo, tomaron conciencia de sus fuerzas. Para ello, ayudó muchísimo el periódico “La estrella del Sur”, editada por los británicos durante su estadía en Montevideo, donde se criticaba duramente al gobierno español y alentaba a los criollos a aceptar a los ingleses como gobernantes legítimos. Si bien no se los aceptó como tales, muchos tomaron conciencia de que se podía establecer un estado independiente. La fuerza militar estaba, y el poder político español estaba en una gran crisis. Como otro incentivo a realizar un golpe contra la metrópoli, en España seguían acentuándose las crisis políticas y militares. El 19 de noviembre de 1807, invadieron Portugal las tropas napoleónicas. En Portugal la familia real aceptó la propuesta del ministro inglés en Lisboa, Lord Strangford, de trasladar la corona al Brasil y evitar con ello caer bajo el poder napoleónico. Así llegó a Río de Janeiro la princesa Carlota Joaquina de Borbón, hija del rey español, y esposa del príncipe Juan, heredero de la monarquía portuguesa. Tres días después de su partida, el mariscal francés Junot entró triunfante en Lisboa. Paralelamente, en 1808 gobernaba España el rey Carlos IV. Con las “abdicaciones de Bayona”, engaños de Napoleón a la familia real española que acabó con la imposición de José Bonaparte como rey español, se logró formalizar la crisis que el sistema colonial español venía sufriendo hacía años. De esta forma, en un año se modificó totalmente la política europea. En España se establecieron dos gobiernos: el napoleónico, y el de la Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino, o Junta de Sevilla, leal a Fernando VII quien era hijo de Carlos IV, quien se encontraba preso en Francia. En Portugal dominaba Napoleón, y los reyes Juan VI y Carlota Joaquina, hermana de Fernando VII, habitaban en Río de Janeiro. En el Río de la Plata, Liniers fue confirmado como Virrey interino por las autoridades peninsulares en diciembre de 1807, luego de su gran actuación en las invasiones inglesas, y como consecuencia de la huida del Virrey Sobremonte. Al año siguiente, se formó en Buenos Aires un grupo carlotista, dentro del cual se destacó Belgrano. El partido carlotista logró tener bastante influencia, pero nunca llegó a poner en peligro el virreinato del Río de la Plata. Esto no fue de ninguna manera, óbice alguno para que el partido de Belgrano siga funcionando como centro de conspiraciones independentistas. E n julio del año pasado, Liniers fue sustituido por Baltasar Hidalgo de Cisneros por la Junta de Sevilla, en el cargo de Virrey. El hecho de ser de origen francés lo hicieron ser sospechoso de simpatizar por Napoleón, y no por Fernando VII. De esta manera, Cisneros se transformó en Virrey. El 14 de mayo del corriente noticias llegaron desde Inglaterra acerca de la caída de Andalucía en manos francesas, y de la formación de un Consejo de Regencia. Los criollos comenzaron a discutir qué hacer. Este proceso culminaría el 26 de mayo cuando todos juraron lealtad a una Junta representativa. Belgrano se destaca, junto con su primo Juan José Castelli y Mariano Moreno, como el ideólogo de la Revolución bonaerense. Entrevista al general Manuel Belgrano. Mucho se habla que usted tuvo su primera participación militar en las invasiones inglesas, pero a usted nunca le pareció que fue una participación digna. ¿Por qué? Básicamente porque actuamos como los más cobardes: huimos enseguida. Las invasiones inglesas fueron a fines de junio de 1806. Días antes, el Virrey Sobremonte me había pedido que formase una compañía de caballería con jóvenes del comercio, de forma preventiva a un posible ataque inglés. Entonces, el día de las invasiones inglesas, el 25, marché a la fortaleza apenas escuché la alarma general, donde reuní a bastantes jóvenes para enfrentar la invasión. Sin conocimientos de milicia, marchamos desordenadamente hacia el Riachuelo. Tras un único cañonazo inglés, debimos obedecer las indicaciones del jefe de mando y ordenar la retirada. Luego de tomar la ciudad, los ingleses exigieron a todas las autoridades que prestaran juramento de lealtad. Todos los funcionarios del Consulado accedieron a la demanda inglesa, exceptuándome. Yo dije: "Queremos al antiguo amo, o a ninguno". Luego de esto obviamente me fugué de Buenos Aires y busqué refugio en la capilla de Mercedes, en la Banda Oriental, donde fui muy bien recibido. Usted siempre dice que tanto en el momento que el Virrey de Melo lo nombró capitán de las milicias urbanas, como en el momento que tuvo que defendernos de las invasiones inglesas, no tenía mucha idea de qué hacer ya que nunca fue militar. Sí, así es. Hasta las invasiones inglesas nunca encontré razón alguna de los hombres por pelear. Yo siempre fui un hombre pacífico, rechacé las guerras. Incluso cuando de Melo me nombró capitán, pensé que era un cargo donde nunca necesitaría pelear. Sin embargo, cuando Sobremonte me pidió que empiece a organizar un ejército de jóvenes dispuestos a pelear me di cuenta del valor de la guerra, y me arrepentí de no haber aprendido a pelear. Sabía de litigios, de diplomacia, de gobiernos, de todo sabía; menos de pelear. Por eso luego comencé a tomar clases para que la próxima guerra no me encuentre tan desprevenido. Creo que lo que me hacía difícil entender por qué son necesarias las guerras, era el no tener nada por qué pelear. Ahora tengo esta patria preciada mía, la cual pienso defender hasta el fin de los tiempos, dónde, cómo y contra quién sea. Pero… ¿por qué aceptó si no tenía la más mínima experiencia de cómo luchar? Yo cumplo con lo que se me pide. No pongo excusas. Perfectamente habría podido decir que soy un abogado de renombre y que no debería entregarme a las armas enemigas sin saber pelear; pero si hubiese dicho eso, no amaría a mi patria. Peleé porque la amo. Peleé porque amo lo que dicen mis sueños, y ellos dicen que algún día tendremos una patria independiente. Por ese sueño luché y por ese sueño seguiré luchando. Si mi sueño exige que me sacrifique peleando de mala manera al frente de las tropas, no dude que lo haré. Así lo exigió en aquel momento, y entonces no dudé en aceptar la orden e ir a la batalla. Organicé al ejército de la mejor manera que pude, y peleé de la misma forma. ¿Por qué se negó a prestar juramento a los ingleses, si todos lo prestaron, y usted sabía que sería perseguido? Como le decía, cuando mis compatriotas me dijeron que vaya a pelear, cumplí la orden. Cuando los mismos me dijeron que nos entreguemos a los ingleses, cumplí la orden. Cuando los ingleses pidieron que jure lealtad, claramente que me debía negar. Soy un simple servidor de mi patria, de nadie más. Entendí entonces que en vano los hombres se empeñan en arrastrar a su opinión a los demás, cuando ella no está cimentada en la razón. ¿Dónde está la razón en prestar juramento sabiendo que no lo cumpliría? En ningún lado. Yo creo que la vida es nada si la libertad se pierde. Por esto fue que decidí poner en peligro mi vida huyendo de los ingleses. Yo jamás he faltado a mi palabra, y no iba a comenzar en ese momento. Me glorío de no haber engañado jamás a ningún hombre y de haber procedido constantemente por el sendero de la razón y de la justicia, a pesar de haber conocido la ingratitud. Sé que todos prestaron juramento, y traicionaron su palabra: lo sé. Pero así son los hombres de hoy día… ¿Por qué yo debí cambiar mis principios ante la necesidad? Yo no busco el concepto de nadie, sino el de mi propia conciencia, que al fin es con la que vivo en todos los instantes y no quiero que me remuerda. Nadie ni nada me separará de los principios que adopté cuando me decidí a buscar la libertad de la patria amada, y como sólo este es mi objeto, no las glorias, no los honores, no los empleos, no los intereses, estoy cierto de que seré constante en seguirlos. Yo renuncié a mi sueldo de vocal de la Primera Junta de Gobierno porque mis principios así me lo exigieron. Creo que la gran ausencia de principios es lo que nos hemos padecido durante todos estos largos años. Gracias a Dios, hoy nos hemos juntado muchos hombres de principios, quienes creemos que la libertad es la base de la vida. ¿Por qué surgió la necesidad de hacer una Junta? Nuestra Junta es consecuencia pura de lo que sucede en Europa. Allí Napoleón domina. En nuestra metrópoli, sucede que para comienzos del corriente estaba bajo dominio casi total de los franceses. Quedaban unas pocas resistencias, bajo el mando de la Junta de Sevilla. Como si fuese poco, el 29 de enero de 1810 la Junta de Sevilla constituyó el Supremo Consejo de Regencia a los efectos de transmitirle la totalidad de los poderes, ya que dicha Junta se vio obligada a disolverse. Al conocerse el 14 de mayo del corriente la noticia que la Junta Central de Sevilla se había disuelto ante el avance francés en Andalucía, siendo reemplazada por un Consejo de Regencia, se cuestionó la autoridad de Cisneros ya que había sido nombrado por la Junta disuelta. Se dio un proceso por el cual se formó la Primera Junta de Gobierno el 25 de mayo de 1810, destituyendo al Virrey, pero siguiendo siendo fieles a Fernando VII. La teoría suareciana es la base jurídica de la Revolución, ya que establece que estando el Rey imposibilitado de gobernar, el poder vuelve al pueblo, quien organiza su propio gobierno. ¿Cómo narraría el período que va desde que llegaron las noticias de lo ocurrido en Europa, hasta que todos prestaron juramento a la Junta? El 14 de mayo llegó a Buenos Aires el navío de guerra “Misletoe” con el cometido de reforzar la estación naval británica en el Plata. Traía periódicos y noticias del derrumbe militar español en Andalucía, de la disolución de la Junta Central Gubernativa, y de la creación de un Consejo de Regencia. El Virrey Cisneros intentó impedir que se dispersen las noticias y demoró que esto ocurra durante pocos días, ya que luego llegó el bergantín mercante inglés “Juan Paris”, con las mismas noticias. El 17, Cisneros edita un artículo con traducciones de los periódicos londinenses del 16, 17 y 24 de febrero. En la noche del 18, nos reunimos con otros compañeros para resolver qué hacer frente a lo visto. Hubo dos grupos que nos reunimos por separado: el nuestro, que optábamos por convocar un congreso general del vecindario principal, y el de los jefes y oficiales de los regimientos de Patricios, quienes tomaron una posición más radical queriendo derribar al Virrey por la fuerza. Con Cornelio Saavedra entrevistamos a dos personas muy cercanas a Cisneros: Lezica, y de Leiva. Les pedimos para que reúnan un Cabildo Abierto. Ellos elevaron la decisión a Cisneros, quien viendo que el grueso de los militares no lo respaldaba, accedió a lo solicitado. El 21, se reunió el Cabildo y decidió convocar un congreso vecinal para el día siguiente. Se citó a 450 personas consideradas como la parte principal y sana del vecindario, quienes son los militares, comerciantes, letrados, sacerdotes y propietarios principales. El 22 se reunió el congreso. El obispo Lue y Riega habló en primer lugar, argumentando que no había motivo para quitar al Virrey. Juan José Castelli, mi primo, fue quien rebatió lo dicho por el obispo. Expuso que la prisión en Francia de la familia real había hecho claudicar al gobierno soberano de España, y que la Junta Central era carente de facultades para crear el Consejo de Regencia. Éste era ilegítimo porque los poderes de los vocales de la Junta eran personales e intransferibles a otra institución. Además, en la elección del Consejo, no participaron representantes americanos quienes somos iguales en derechos a los españoles. Al terminar de hablar, parecía que el pleito había concluido. Sin embargo, Villota revirtió la situación para los defensores de Cisneros. Primero combatió el argumento de Castelli elección acerca de los de que en miembros la del consejo no hubo criollos. Dijo que la Junta Central eligió al Consejo de Regencia bajo circunstancias críticas determinantes, y que como la Junta ya representaba a los americanos, el hecho que reconociese al Consejo, bastaría para subsanar cualquier defecto en la elección. Luego atacó al tema tratado en el Congreso explicando que es verdad lo que dice el derecho, que acéfala la monarquía la soberanía vuelve al pueblo; pero la soberanía es indivisa, es decir, para todo el Reino. Pese a ello, el Congreso se estaba celebrando en representación de Buenos Aires, por lo tanto carecía de competencia en una materia reservada a todo el Reino, como lo era decidir la legitimidad del Consejo de Regencia. Quedamos todos desconcertados. No lo podíamos creer. Castelli le dijo a Passo, un gran abogado: “sálvenos doctor Passo”, y lo empujó al medio del recinto. Ante este hecho, Pasos quedó sin saber qué decir. Entonces empezó elogiando a Villota durante un buen tiempo, mientras pensaba qué exponer. Tenía que confrontar lo que Villota dijo, y ¡vaya que le sería difícil! Insistió en la urgencia de tomar decisiones rápidamente ante la dramática situación española, y dijo que Buenos Aires, la “hermana mayor” por ser la capital del Virreinato, podía actuar como apoderada de las restantes provincias y resolver provisoriamente el asunto. Esto se debía hacer de inmediato, para establecer el orden, y luego se deberá consultar a las demás provincias sobre lo hecho por nosotros. Todos nos alegramos ante esta salida casi insólita de nuestro compañero Passo. Villota, derrotado, se puso a llorar al terminar de escuchar el discurso de Passo. Luego se votó si se debía quitar al Virrey de su cargo o mantenerlo, y en quién debía depositarse la soberanía si no era en él. Al otro día se realizó el escrutinio y ganó la posición que yo defendía: se votó por destituir al Virrey. Cuanto a quién lo debía sustituir, triunfó el Cabildo. Esa misma tarde se cesó al Virrey y se estableció que el Cabildo gobernaría provisoriamente hasta que se designe una Junta. La Junta representativa fue nombrada a continuación, y los nombres que la componían fueron dichos al otro día. El Cabildo temía por la seguridad pública en caso de separar a Cisneros del cargo de Virrey. De este modo, lo puso al frente de la Junta representativa que además contaba con Inchaurregi, Saavedra, Sola y Castelli. Estos episodios fueron como una contrarrevolución llevada a cabo por el Cabildo, haciendo caso omiso a lo planteado en el Congreso General del 22. En la tarde del 24 la Junta prestó juramento. A la noche, en los Regimientos 1 y 2 de Patricios, la tropa y los jefes protagonizaron una agitación en los cuarteles en contra de la Junta. Castelli informó de la situación a la Junta y todos decidieron renunciar. El 25 tuvo tres grandes momentos. Un primer momento donde el Cabildo rechazó la renuncia de la Junta. Un segundo momento cuando, luego de entender que la Junta no contaba con apoyo militar porque en ella estaba Cisneros, el Cabildo pidió la renuncia al anterior Virrey y los demás miembros de la Junta fueron restituidos en el cargo. Un último momento en la tarde del 25, cuando el Cabildo recibe a un grupo de manifestantes quienes presentaron una petición con 411 firmas para modificar los integrantes de la Junta. La petición fue aceptada, así como los nombres propuestos para componer la Junta. La Junta quedó conformada con Cornelio Saavedra como Presidente; con Miguel de Azcuénaga, Manuel Alberti, Domingo Matheu, Juan Larrea, Juan José Castelli, y yo, como vocales; Mariano Moreno y Juan José Passo como secretarios. El 26 y el 27, todas las autoridades prestaron juramento de reconocimiento y obediencia a la Junta. Se habla que usted el 24 de mayo del presente amenazó al Virrey Cisneros con echarlo… ¿es cierto? Claro: juré que si a las 3 de la tarde del día siguiente el Virrey Cisneros no había sido derrocado, yo mismo lo derribaría con mis armas. Como le dije, yo soy fiel a mi pensamiento, a mi palabra, y mi pensamiento decía claramente: independencia, libertad, y justicia. Entonces debía usar todos los medios posibles para lograrlo. ¿En qué consistía su proyecto carlotista? El proyecto que veníamos imaginando junto a otros compañeros como mi amigo Nicolás Rodríguez Peña, o mi primo Juan José Castelli, consistía básicamente en establecer una monarquía constitucional, en manos de La Infanta Carlota Joaquina de Borbón. A primera vista parecería que se contradice con el proyecto de independencia, pero por el contrario, nosotros queríamos proclamar la independencia a través de su figura. Con ella al frente cesaría la calidad de colonia, sucedería el mejoramiento y perfeccionamiento de las costumbres, se daría energía a la industria y al comercio, se extinguirían aquellas odiosas distinciones entre europeos y americanos, se acabarían: las injusticias, las opresiones, la usurpación y dilapidaciones de la renta. Necesitábamos a la Infanta. En un principio el grupo fue llamado “el partido de la Independencia”. En realidad, nosotros queríamos tener una mayor autonomía que la que le corresponde a una simple colonia. En este gobierno primarían los criollos sobre los europeos. Desde que se tomó América, siempre hubo una gran preferencia desde el gobierno central por los europeos al momento de nombrar todos los cargos de alguna responsabilidad en el gobierno, sobre todo el ejército y la Iglesia. Nosotros queríamos eliminar estas preferencias. ¿Por qué este movimiento nace en 1808, y no antes? Como todo en América, este movimiento surge a partir de cosas ocurridas en Europa. Luego de las abdicaciones de Bayona, quedó como rey el hermano de Napoleón, “Pepe Botella” como le decimos todos. Sin embargo, nosotros tomamos que este señor fue puesto rey por un proceso lleno de vicios y entonces no es un rey legítimo. Tampoco lo es Fernando porque fue nombrado por otro proceso plagado de vicios. Quien es el Rey es Carlos IV. Su heredero legítimo al trono no es Fernando ya que según la Pragmática Sanción que publicó el rey de aquel entonces, Carlos IV, las mujeres volvían a poder heredar el trono. Entonces el rey de España es, por derecho, Carlos IV, y su heredera es la señora Carlota Joaquina. La infanta no podía ir a España a divulgar estas ideas ya que el territorio español estaba en manos de los franceses. Entonces, decidió que primero se debía iniciar este movimiento en América, para luego recobrar España. El 11 de setiembre de ese mismo año nos llegó un manifiesto donde la Infanta nos informaba de la situación. Ése fue el punto inicial de la lealtad hacia Carlota. ¿Por qué terminaron con esta propuesta? Para serle sincero, la propuesta terminó hace unos días; el mismo día que llegaron las noticias de la toma de Andalucía a manos de los franceses. Allí se terminó este movimiento. ¿Para qué ser leales a la infanta, si nosotros mismos nos podemos gobernar? La idea de que España existía era una ilusión, porque España ya casi no existía. ¿Cómo le íbamos a ser leales a algo que no existía? Entonces la lógica manda que nosotros intentemos ser independientes por nuestros propios medios. ¿Por qué se enfrentó con los juntistas? Lo que sucede es que los juntistas son de alguna manera defensores de los europeos. El señor De Álzaga, como De Elío, son defensores de España. No se dan cuenta que nosotros podemos invertir esta situación de inferioridad respecto a los españoles. Antes que llegue Cisneros, estaban planeando cómo derrocar a Liniers, cuando el francés fue quien nos salvó de los ingleses. Le crearon sospechas falsas para poder hacerlo, y de no ser por la llegada de Cisneros o por la mediación de Saavedra, hubiera terminado derrocado. Hoy, ellos quieren establecer Juntas de gobierno en todas las ciudades importantes del virreinato para poder mantener así, las posesiones españolas. No quieren independencia. Los denominamos democráticos, porque esta palabra simboliza el caos político y social que trajo consigo la revolución francesa. Si en el virreinato del Río de la Plata se aplica su teoría, esto terminará siendo un desorden total. Por eso en los próximos meses tenemos pensado solicitarle a Montevideo, cuyo gobernador es De Elío, que le dé a la Junta bonaerense su apoyo. Usted estuvo mucho tiempo en frente del Consulado de Comercio, y realizó muchas propuestas. En cuanto a la educación, ¿qué propuso? Lo principal de mis propuestas en la educación las expuse en las memorias de 1796. Si usted las lee, verá que muy poco se hizo de eso que está allí, y menos aún persiste hoy. Las propuestas allí escritas, abarcaban la creación de escuelas de agricultura, dibujo, arquitectura, primarias para niñas, de hilazas de lana, comercio y náutica, porque creo que fundar escuelas es sembrar en las almas de las personas. El interés que tenían los comerciantes en el establecimiento de una escuela de matemáticas, me presentó circunstancias favorables para establecerla. Ésta fue construida, pero igualmente debía obtener la aprobación de la Corte, pero nunca lo logré. La Corte no paró hasta destruir el proyecto. Los españoles, si bien sabían que era algo justo y necesario el establecimiento de estos proyectos, se oponían a ellos, para poder conservar las colonias. No menos me sucedió con otra de diseño que también logré establecer, sin que costase medio real el maestro. La idea era fomentar los tres importantes ramos de agricultura, industria y comercio, de que estaba encargada la corporación consular. Las propuestas merecieron la aprobación; pero desde la Corte se decía que todos estos establecimientos eran de lujo y que Buenos Aires todavía no se hallaba en estado de sostenerlos. También propuse que haya separación en la escuela de niños y niñas. Se deben establecer escuelas gratuitas para las niñas, donde se les enseñará la doctrina cristiana, a leer, a escribir, coser, y principalmente inspirarles amor al trabajo, para separarlas de la ociosidad, tan perjudicial o más en las mujeres que en los hombres. Propuse la educación como un proceso, donde los niños aprenden las primeras letras junto con matemática básica y el catecismo, para luego ser recibidos por los maestros de oficios en escuelas distribuidas en todos los barrios y villas de campañas, sin distinción de orígenes. Las dos escuelas que logré establecer por unos pocos años fueron las de náutica, y dibujo, en 1799. En los reglamentos de ellas estipulaba que especialmente debía darse lugar a los naturales, y a los huérfanos, por ser éstos los mayores desposeídos de nuestra tierra. Promoví la creación de escuelas gratuitas, a donde puedan los infelices mandar sus hijos, sin tener que pagar cosa alguna por su instrucción: allí se les podrán dictar buenas máximas, e inspirarles el amor al trabajo, pues en un pueblo donde reine la ociosidad, decae el comercio y toma su lugar la miseria. La gente se pregunta qué pasa con nuestra campaña, por qué está tan poco desarrollada, y yo ya dije muchas veces que debe seguirse el ejemplo de Europa, que vuelca todos sus esfuerzos a través de academias y sociedades para compensar el trabajo de los sabios que se han destinado al estudio más útil de la humanidad. Una de las causas del poco rendimiento que tienen nuestros campos, es debido a que no se mira a la agricultura como un "arte que tenga necesidad de estudio, de reflexiones, o de reglas, no se la ve como una ciencia. Sin embargo, hay que respetar tres condiciones para ser un buen agricultor: querer, poder, y estudiar para aplicar esos conocimientos al cultivo de la tierra. Pero claro, mis propuestas fueron rechazadas. ¿Por qué cree que fueron rechazadas esas propuestas? Básicamente porque un pueblo culto nunca puede ser esclavizado. La riqueza de los pueblos consiste en la inteligencia y la industria en la educación, nosotros no poseemos esa riqueza porque los españoles no desean darnos libertad para que no les pase lo mismo que les pasó a los ingleses con los norteamericanos. Sin embargo, también sucede que lamentablemente las autoridades del virreinato están muy influidas por la escolástica. Entonces ellos desprecian la actividad comercial y los oficios industriales, repuntándolos como ocupaciones de negros, indios, mulatos y mestizos, por lo cual mis iniciativas inclusivas de las personas con esos orígenes, no podían ser aprobadas. Si se hubiesen aprobado, hubiesen significado un cambio enorme en la política colonial y nadie estaba dispuesto a aceptarlo. ¿Qué obras realizó usted al frente del Consulado por la economía? Como usted sabe, yo regresé al país en mayo de l794 con todo el bagaje cultural que había adquirido en España. Al frente del Consulado, propuse un programa de reformas que también expuse en las memorias consulares. Este programa ponía en práctica todos aquellos conocimientos adquiridos. Procuré el fomento de la agricultura, ganadería, manufacturas y comercio del virreinato del Río de la Plata. Para lograr entender la realidad que se vivía en la campaña, mantuve fluida correspondencia con los Diputados del Consulado en las distintas ciudades del interior. Creo yo que así logré una visión integradora del espacio del virreinato, y entonces organicé expediciones para reconocer el territorio. Junto a geógrafos y topógrafos realizamos mapas bastante acertados del interior de la Provincia. Quise introducir nuevos cultivos como el lino y el cáñamo, pero se logró en una mínima medida. Lo que sí logré fue mejorar el ganado vacuno y el lanar, así como las llamas, alpacas, vicuñas y los guanacos. Durante mi presidencia, el Consulado se preocupó entre otras cosas, por la manufactura textil, del mejoramiento de los caminos, de la construcción de un muelle para el puerto de Buenos Aires, de la fundación de una plaza fortificada en Choele – Choel para contrarrestar el cuatrerismo practicado por los indios araucanos. El desarrollo económico está unido a un desarrollo social. Por eso no podemos separar la economía de la educación, sino que son dos cosas que van de la mano. Tanto la economía, como la educación son vitales para la sociedad. En este sentido, creo que el consulado realizó una gestión muy destacada, luchando contra todos los rivales que los españoles nos pusieron. En cuanto a la naturaleza, usted también tuvo proyectos, ¿por qué? ¿No considera que la sobreestimó? La agricultura es el verdadero destino del hombre. En el principio de todos los pueblos del mundo cada individuo cultivaba una porción de tierra. Estos pueblos han logrado sobrevivir mientras conservaron la noble simplicidad de costumbres, que preserva de todos los vicios y males. La naturaleza parece que se ha complacido en que todos los hombres se destinen a la agricultura, y sino ¿por qué se renuevan las estaciones? ¿Por qué sucede el frío al calor para que repose la tierra, y se reconcentren las sales que la alimentan? Las lluvias, los vientos, los rocíos, en definitiva, este orden admirable e inmutable que Dios ha concedido a la Naturaleza, no tiene otro objeto, que la renovación sucesiva de las producciones necesarias para nuestra existencia. La agricultura es la madre fecunda que proporciona todas las materias primeras que dan movimiento a las artes y al comercio. Tal es la importancia de la agricultura. ¿Qué proyectos propuso acerca de la agricultura? Respecto a la práctica de la agricultura, recomendé la rotación de cultivos, dejando pasar tres o cuatro años sin sembrar en un mismo lugar, semillas de una misma especie. Además estimulé a los agricultores a que aprovechen en buena forma al estiércol. En el tema de la naturaleza, estudié bastantes aspectos. Sobre todo los bosques y los montes de nuestra querida provincia. Sin embargo, las recomendaciones que les hice a los distintos virreyes, han recibido oídos sordos. Yo les dije que es indispensable hacer los mayores esfuerzos en poblar la tierra de árboles, mucho más en las tierras llanas propensas a la sequedad al no encontrarse defendidas; la sombra de los árboles contribuye mucho para conservar la humedad, los troncos quebrantan los aires fuertes. Algunos me dijeron que tenía razón, pero no actuaron en consecuencia. Como la mayoría de mis propuestas, las referidas a la naturaleza fueron desoídas. Muchas veces usted habla de un “bien común”, ¿a qué se refiere? El bien común es de donde parto yo para luego decidir qué estudiar, qué hacer, y en definitiva es lo que determina mis actos. Es algo ético. El bien común está en la naturaleza del hombre, y permite el desarrollo de todos los hombres. Yo insisto en la capacitación y educación de la familia, porque es allí donde se debe aprender el bien común. La salud, la educación, el trabajo, la conservación del medio ambiente son parte del bien común. Resulta imposible vivir la plenitud del bien común, sin Dios, ya que él posee todas las cualidades del bien común, y entonces logra trascender a la humanidad. Los contenidos del bien común son: el respeto a la persona y a sus derechos inalienables; el bienestar social y desarrollo de los grupos que integran la sociedad; la libertad, la solidaridad y paz entre las distintas comunidades para la estabilidad y seguridad de la sociedad; la unidad como un bien que debe estar por encima de otros bienes para alcanzar un desarrollo integrador. Se debe evitar la corrupción, la inequidad, el ocio y toda gama de los vicios que derrumban a la comunidad. En definitiva el bien común, es un instrumento que permite desarrollar la capacidad creativa del hombre a través de la familia, el trabajo, la educación y el amor a Dios. ¿Qué opina acerca de quienes desean establecer un sistema de gobierno republicano? Hoy en día, no tenemos ni virtudes suficientes ni la educación necesaria como para ser una República. Lo que nos conviene es una monarquía moderada. Yo ya comprendí que a cargo de la Infanta esta monarquía no debe estar, pero quizá podamos encontrar a alguien que sea más adecuado para el cargo. Creo que debe ser una monarquía similar a la inglesa, donde hay una Constitución, y donde hay cámaras que deciden cómo actuar. El Parlamento funciona de contralor del Rey, no como en Francia donde hay una monarquía absoluta. Desengañémonos: jamás han podido existir los estados luego que la corrupción ha llegado a sobrepasar las leyes y faltar a todos los respetos; es un principio inconcluso que en tal situación todo es ruina y desolación, y si eso sucede a las grandes naciones ¿qué no sucederá a cualquiera de los ramos que contribuyen a su existencia? Así es que ya es casi general la aceptación a la monarquía constitucional. Ha perdido casi totalmente el campo el republicanismo ¿Cómo entiende la palabra democracia? La palabra democracia nació con la revolución ocurrida en Francia hace algunos años. Como todos sabemos, es una palabra bastante nueva. Entiendo al término como un sinónimo de desorden, de retroceso en la historia humana. Ya los griegos lo propusieron y por algo nadie más tomó ese ejemplo… es la monarquía el futuro del hombre. La democracia en Francia se dio en un contexto muy acotado, muy difícil de comprender. Los monarcas gobernaban como quisieran, sin respetar a los demás, lo cual es un exceso. Otro condimento que contribuyó a que ésta se dé en Francia, es que allí el comercio está muy desarrollado, y justo son los comerciantes los que en mi ciudad se caracterizan por su personalidad de egoísta, cuya mentalidad sólo busca el bien personal, y nunca el global. Estoy seguro que los comerciantes franceses, luego de tener tanto dinero como han obtenido, sólo les faltaba subir al poder, y entonces se dedicaron a hacerlo. Ya vemos la personalidad de Napoleón: ambicioso como pocos, inteligente como el burgués que es, y egoísta como todos los hombres de estos tiempos. Mi padre quería que sea un comerciante, pero gracias a Dios que me negué a aceptarlo, y preferí ser abogado y ayudar a los demás. Yo creo que la democracia no debe ser ni contemplada a la hora de establecer la política que tendrá la Junta. Debemos establecer una monarquía en la cual, para que no ocurra lo mismo que en Francia, el poder esté sumamente controlado. Muchas veces se ha quejado de los hombres españoles con los que ha tenido que convivir a diario durante años. ¿Qué opina de su sociedad como conjunto? La palabra sociedad es un término muy nuevo. Yo lo entiendo como un término muy amplio que comprende a todas las personas, de distinto color de piel, de distinto color de ojos, de distinto origen, con distinta riqueza, con distinto honor, y con otras diferencias, pero viviendo todas juntas compartiendo muchas otras cosas. En cuanto a la sociedad de mi ciudad, creo que es una sociedad que está en caída. La razón es simple, y la encuentro en que cada vez que los europeos pierden terreno en Europa, se intentan afirmar en América poniendo impuestos ridículos y molestando así a los criollos. Nosotros somos en realidad la base de su imperio y su último punto de existencia. No nos dejan progresar en cargos políticos, aunque yo sea la excepción del caso, y muchas veces solamente siendo lacayos se puede llegar a un cargo mediocre. Claramente nos enoja esto, y no nos deja progresar como una sociedad, es decir no nos deja solidificarnos como una sociedad constituida. Esta concatenación de causas nos determina una sociedad en deterioro, con disputas internas por poder, y con desinterés hacia todo aquello que nos rodea. Así nace la figura del burgués bonaerense, odiado por la gente de la campaña. La sociedad cada vez está peor. Sin embargo, este glorioso 25 de mayo, más allá del desarraigo político de los españoles, espero que traiga una luz de esperanza para los más desgraciados. Información Complementaria Aclaración. La biografía anteriormente expuesta fue inventada interpretando la información recabada acerca del General Belgrano y el contexto histórico en el cual vivió. Del mismo modo, han sido introducidas, textualmente o guardándose su sentido, enunciados célebres de Manuel Belgrano. Se han introducido términos que en su tiempo no eran demasiado conocidos, pero hoy son fundamentales, para así tener la visión de Belgrano sobre su presente, y sobre términos que hoy día son muy recurridos. Manuel Belgrano después de mayo de 1810. El 22 de setiembre de 1810 la Junta lo designa General en Jefe de la Expedición Militar a los pueblos de la Banda Oriental, Santa Fe, Entre Ríos y Paraguay. El objetivo de la misma fue más político que militar: la intención de Belgrano era difundir entre dichos pueblos el ideario de la Revolución de Mayo. De paso al Paraguay, fundó con planificación de ejidos, a Mandisoví y Curuzú Cuatiá, el 16 de noviembre de 1810. Luego de vencer a los españoles en Campichuelo el 19 de diciembre, fue derrotado en Paraguarí, el 19 de enero de 1811, por un ejército español 14 veces más grande en número que el belgraniano. El 9 de marzo de 1811, fue vencido en Tacuarí. En noviembre de 1811 fue nombrado Jefe de Regimiento Nº 1 de Patricios. En enero de 1812 fue enviado por el gobierno a proteger las costas del Paraná de los españoles. Allí enarboló por primera vez la bandera nacional el 27 de febrero de 1812. Las tropas a las órdenes de Manuel Belgrano comenzaron a utilizar una escarapela bicolor azul-celeste y blanco. El mismo Belgrano expresó en un informe oficial que no usaba el rojo "para evitar confusiones", ya que los ejércitos “realistas”, como se les llamaba a los españoles y sus adictos, usaban ese color. Ese mismo día, el gobierno le encargó la jefatura del Ejército del Norte. El 25 de mayo de 1812 en Jujuy instaló el cuartel general y, en celebración del aniversario de la Revolución, hizo bendecir la bandera. Al observar que era imposible resistir el avance español, inició el 23 de agosto de 1812 el Éxodo Jujeño, es decir, la retirada hacia Tucumán. Los habitantes de Jujuy y de Salta abandonan sus hogares y arrasan todo a su paso, dejando a los españoles sin víveres para la tropa. Luego, el gobierno le pidió que fuera a Córdoba pero él se mantuvo en Tucumán y allí venció a los realistas el 24 de septiembre de 1812. El gobierno lo nombró Capitán General e inició el avance hacia el norte. Cruzó el río Pasaje y, junto con su ejército, juró obediencia a la Asamblea del año XIII. Derrotó nuevamente a los españoles en la batalla de Salta el 20 de febrero de 1813. Por sus victorias de Tucumán y Salta, la Asamblea de 1813 le otorgó como premio 40 mil pesos fuertes (equivalentes a casi 80 kilos de oro). Belgrano respondió que prefería ser un buen hijo de la patria más que un padre de la misma, y expresó que el dinero de tal premio sería dedicado para la construcción de escuelas públicas estatales y gratuitas en las ciudades de Tarija (en la actual Bolivia), Jujuy, San Miguel de Tucumán y Santiago del Estero. Ese año se dirigió a Potosí y fue derrotado en Vilcapugio el 1º de octubre de 1813. Reorganizó su ejército, pero fue vencido nuevamente en Ayohúma el 14 de noviembre de 1813. En enero de 1814 se encontró con San Martín en Salta y entregó el mando del ejército en Tucumán, quedando a cargo del regimiento Nº 1 con el grado de coronel. El 30 del mismo mes, Belgrano partió hacia Buenos Aires acatando la orden de someterse a proceso por sus derrotas. Allí lo arrestaron y lo procesaron, pero finalmente se le reconocieron sus méritos y honores. Frente a la grave situación internacional, el Director Supremo, Gervasio Antonio de Posadas, decide enviar a Manuel Belgrano y a Bernardino Rivadavia en misión diplomática ante las cortes de Inglaterra y España. El propósito era asegurar "la independencia política de este Continente, o a lo menos, la libertad civil de estas Provincias". Los Comisionados deben lograr "... o la venida de un Príncipe de la Casa Real de España que mande en Soberano, a este Continente bajo las formas constitucionales que establezcan las provincias; o el vinculo y dependencia de ellas a la Corona de España, quedando la administración de todos los ramos en manos de los americanos”. Las negociaciones tendientes a establecer una monarquía constitucional en el Río de la Plata, coronando al príncipe Francisco de Paula, hermano de Fernando VII, fracasan. Regresa a Buenos Aires en julio de 1816 y viaja a Tucumán para participar de los sucesos independentistas, donde tiene un alto protagonismo. Tres días antes de la declaración de la Independencia, el 9 de julio de 1816, declama ante los congresistas e insta a declarar cuanto antes la independencia. Propone una idea que contaba con el apoyo de San Martín: la consagración de una monarquía constitucional, cuyo modelo sería el tomado por los ingleses, pero sería consagrado rey un monarca de la casas de los Incas. No obstante, la propuesta monárquica de Belgrano no prospera, dado que habían corrido rumores de que incluía la cesión de la corona a la casa de Portugal. Más tarde, Belgrano seguirá desarrollando una ardua actividad político-diplomática: por ejemplo, será el encargado de firmar el Pacto de San Lorenzo con Estanislao López que, en 1919, pondrá fin a las disputas entre Buenos Aires y el litoral. Además, volverá a encabezar el Ejército del Norte, en el cual, gracias a la fama que gozaba entonces como jefe y patriota, será vivamente admirado por la tropa. Aquejado por una hidropesía que la tuvo durante más de cuatro años, y todavía en su plenitud, el prócer murió en Buenos Aires el 20 de junio de 1820, empobrecido y lejos de su familia. Si bien no se casó, de sus amores con una joven tucumana nació su única hija, Manuela Mónica, que fuera enviada por su pedido a Buenos Aires, para instruirse y establecerse. Bandera argentina usada por Belgrano en 1813. Frases históricas de Manuel Belgrano. “Trabajé siempre para mi patria poniendo voluntad, no incertidumbre; método, no desorden; disciplina, no caos; constancia, no improvisación; firmeza, no blandura; magnanimidad, no condescendencia”. “Si es cierto, como lo aseguran todos los economistas, que la repartición de las riquezas hace la riqueza real y verdadera de un país, de un Estado entero, elevándolo al mayor grado de felicidad, mal podrá haberla en nuestras provincias, cuando existiendo el contrabando y con él el infernal monopolio, se reducirán las riquezas a unas cuantas manos que arrancan el jugo de la patria y la reducen a la miseria”. “Sin educación, en balde es cansarse, nunca seremos más que lo que desgraciadamente somos”. “Sirvo a la patria sin otro objeto que el de verla constituida, ése es el premio al que aspiro”. “Se respetarán los usos, costumbres y aun preocupaciones de los pueblos; el que se burlare de ellos, con acciones, palabras y aun con gestos será pasado por las armas”. (Bando de Belgrano en su entrada en el Alto Perú). “Se apoderaron de mí las ideas de libertad, igualdad, seguridad, propiedad, y sólo veía tiranos en los que se oponían a que el hombre, fuese donde fuese, no disfrutase de unos derechos que Dios y la naturaleza le habían concedido”. (Palabras de Belgrano acerca del producto de su estadía en Europa). Agradecimientos. Se agradece mucho al gobierno argentino, y en especial al ministerio de educación, cuya institución facilitó gran parte de la información que se encontraba difundida en diversos de sus sitios de Internet. Del mismo modo, se agradece a El País S.A., quien proporcionó el papel prensa necesario para simular la primera edición de la Gazeta de Buenos Ayres. Por último, se agradece a Mercedes Ferreira, cuya editorial hizo posible la impresión del formato de periódico. Bibliografía. Barbero Falco, Cristina y otros, 2005, Historia y Geografía de Uruguay, Tomo 20 de La Enciclopedia del Estudiante, Montevideo, Editorial Santillana. Belgrano, Manuel, 1968, Autobiografía, Carlos Pérez Editor, Buenos Aires. Panizza Pons, C. y Williman, J.C., 2006, La Banda Oriental en la lucha de los imperios, Tomo 1 de Historia Uruguaya, Montevideo, Editorial Banda Oriental. VISOR Enciclopedias Audiovisuales S.A., 1999, Tomo 3 de Enciclopedia VISOR, Buenos Aires, VISOR E.A.S.A. www.wikipedia.es, Manuel Belgrano; La Gazeta de Buenos Aires; Las invasiones inglesas; Bandera de la Argentina, www.portalplanetasedna.com.ar, Manuel Belgrano. www.eumed.net, Manuel Belgrano. www.me.gov.ar, 3 de junio de 1770. www.manuelbelgrano.gov.ar, Biografía cronológica; Formación intelectual; Actividades en el Consulado de Buenos Aires; Actividad como Capitán; El proyecto carlotista; El bien común; La economía; La ecología; La educación de la mujer; Sus reflexiones. “DESCUBRIENDO A BELGRANO: ENCONTRÁNDOME A MI MISMO.” Débora Belén Benítez Uruguay - ¿Qué pasa cuando la lucha por un bien mayor se apodera de tu vida? Cuando el bien de los demás es superior a la búsqueda del bien propio… ¿es necesario dejar a un lado nuestras vidas y dar todo por el otro? No sé si es necesario o no, pero alguien tiene que hacerlo. Para mantener nuestra humanidad hay que dejar al costado el egoísmo y luchar por aquellos que se encuentran en peligro, por quienes están siendo oprimidos, por aquellos cuyos derechos están siendo violados. Es nuestro trabajo hacerlo, porque sea la forma de ganar un lugar en el cielo, en la historia o en la memoria de los demás. Es nuestro deber porque, el día que los hombres dejen de luchar por el bien de sus iguales, ese día, la humanidad habrá desaparecido. Gracias. - Muchas gracias Kamil, esa fue… una muy interesante argumentación. Bueno clase, un aplauso para ella y… ¿quién sigue? Luego de un aplauso forzado, Kamil se acercó a su banco. Apenas se sentó su compañera le dijo en un susurro. - Muy lindo el discurso, pero ¿siempre tenes que ser tan dramática? - Yo no soy dramática, sólo tengo mis ideas muy claras.- Contesto con cara de ofendida. - Y bien… ¿Quién sigue? ¿Algún voluntario?- Dijo la profesora. Esta clase se estaba poniendo más aburrida que nunca. La profesora había planteado la tarea perfecta para que todos expresaran sus ideas, y sólo ella se había entusiasmado. No entendía porque sus compañeros no se ilusionaban con el hecho de poder plantearle a los demás que pensaban ellos de los revolucionarios, los líderes, aquellos que llevaban adelante la liberación de pueblos enteros. Había muchas razones por las que Kamil no tenía muchos amigos. Estaba el hecho de que no le gustaban la mayoría de las cosas que apasionaban a sus compañeros. También estaba el hecho de que debía ser la única en todo el liceo que prefería estudiar un sábado a la noche antes de salir con sus amigos. No es que no tuviera amigos. Si los tenía pero eran unos pocos y muchos no asistían a su liceo. Ella pasaba muchos de sus días entre bibliotecas, librerías y su casa. Y allí conocía a todos sus amigos. Los sitios de Internet eran su salvación, ahí encontraba personas con sus mismos intereses, con sus mismos ideales. Al final fue Luis quien decidió dar su discurso. Luego de los quince minutos más aburridos de su vida, tal vez no tanto, pero si, unos minutos muy lentos, la clase finalizó. Recogió todas sus cosas, se colocó la mochila en la espalada y se dirigió a la puerta. Pero no pudo salir, la profesora le bloqueaba el camino. Se asustó porque iba distraída y ya llevaba puestos los audífonos, notó que los labios de Marta (la profesora de Historia) se movían. Finalmente se dio cuenta de que tenía los auriculares puestos, se los retiró y le pidió a la profesora que empezara de nuevo. - Quería saber si podías ayudar a Gabriel con su tarea, porque dice que le está costando mucho. Sé que ustedes no se llevan mucho, pero estaría muy bueno que trabajaran juntos. Creo que les haría bien a los dos. ¿Qué estaba pensando esta mujer? Es verdad que ellos no se llevaban “mucho”, decir que ni se miraban en clase era una mejor opción. No había razones para que no se llevaran bien, nunca habían discutido, pero ni siquiera recordaba alguna vez que se hubieran saludado. - Si, no hay problema. ¿Cuándo tiene que dar la clase? -El jueves de la semana que viene. ¿Qué día era hoy? Lunes… eso daba unos nueve días para preparar una clase sobre un revolucionario. Con un compañero que ni siquiera saludaba, del que no conocía ni su voz. Perfecto… ¿porque siempre tenía que decir que si a todo? - Me alegro que no te moleste la idea. Si podes avísale vos. Ya salió, debe estar en la puerta o en la parada. - Claro. Salió en unos pocos segundos sin saber a dónde ir. Siguió hasta la puerta y allí lo vio. en la parada, rodeado de sus amigos, como siempre. Trato de llamarlo con la mano, pero él no se dio cuenta. ¿Cómo iba a hacer para que él se acercara?, porque podían pasar siglos antes de que ella decidiera acercarse. De repente, él miro hacia la puerta y la vio. Ella volvió a sacudir la mano llamándolo y esta vez él lo notó. Caminó hacia ella y se detuvo a unos pocos pasos. - ¿Qué pasa? - La profesora me pidió que te ayudara con tu clase. - Si, ya sé... yo le pedí si te podía preguntar. ¿Qué? El mundo se había vuelto loco y nadie le había avisado. ¿Gabriel quería su ayuda? Pero si ni siquiera la saludaba, ella dudaba que supiera de su existencia. Su cara de sorpresa debió delatarla porque él comenzó a reírse. Ella notó que estaba haciendo el ridículo y decidió tomar control de la situación. -¿Ya decidiste sobre quién vas a preparar la clase? - Ehhhh… no. Seguro vos tenes alguna idea. - Es tu deber, no el mío. - Claro. La profesora me pidió que hablara sobre algún participante de los movimientos que llevaron a la independencia de los países latinoamericanos. - Eso reduce las opciones. - ¿Te parece? Hay muchos de donde escoger. - Si pero no son todos los revolucionarios del mundo o de la historia. La conversación se estaba estirando más de lo necesario. Era hora de llevarlo a lo que era importante. - Aunque no hayas decidido a quien estudiar, tenemos que arreglar que días podes reunirte, porque no tenemos mucho tiempo. - De aquí al jueves de la semana que viene hay bastante tiempo. - Tal vez eso te parezca a vos, pero es muy poco para prepara una clase. - Bueno… yo practico futbol toda la semana. Sólo puedo el fin de semana. ¿Cómo? Esto iba de mal en peor. No solo tenía que trabajar con él, tenía solo nueve días para preparar la clase, iba a tener que elegir ella el tema, sino que además solo tenía dos días para reunirse. - No creo que con dos días nos dé. Pero si querés yo elijo el personaje y te digo que podés ir leyendo, así adelantamos algo. - Eso me parece una gran idea. - Mañana te digo a quien vamos a estudiar. Así podés ir buscando material. Y de aquí al sábado algún resumen vas a tener. - Buenísimo nos vemos mañana. Chau Se despidió con un beso en la mejilla. Estos chicos tomaban confianza muy rápido. Corrió a la parada porque vio doblar el ómnibus en la esquina del liceo. Llegó cuando el chofer comenzaba a cerrar la puerta. Le dio unos golpecitos y la abrió nuevamente. Se sentó al fondo del vehículo y con sus auriculares colocados nuevamente siguió con el libro de la semana. Al llegar a su casa se dirigió a la cocina y encontró a su madre cocinando. La interrogó sobre su día y le ordenó ir a prepararse para la cena. Al abrir la puerta del cuarto lo primero que hizo fue lanzar la mochila sobre la cama. Encendió la computadora y comenzó la conexión de internet. Comenzó la búsqueda del revolucionario latinoamericano. En las primeras páginas encontró numerosas referencias al bicentenario de países como Argentina, México y Chile. Decidió que su revolucionario pertenecería a ese tema. Busco entre los revolucionarios Argentinos, tal vez por la cercanía del país, o por otras razones… pero escogió un revolucionario de este país. De entre todos los nombres que surgieron el de Manuel Belgrano fue el ganador. Empezó leyendo algunas de las biografías que había en la red. Sacó el cuaderno de apuntes del cajón de su escritorio, tomó una lapicera y escribió: Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano. Fecha de nacimiento: 3 de junio de 1770. Fallecimiento: 20 de junio de 1820. - Sólo vivió cincuenta años. ¿Por qué la mayoría de los líderes o personas que buscan sólo el bien de los demás mueren tan jóvenes? ¿Será algo que habrá que aceptar cuando uno se olvida de su vida y lucha por el bien de los demás? Es posible que estuviera exagerando, ya que Belgrano vivió de acuerdo al estándar de la época. Cuando no existía el avance médico y todas las comodidades de hoy, la gente vivía menos. Existían muchas más enfermedades mortales. Si… estaba exagerando, sin embargo no estaba muy lejos de la realidad. Es muy común que aquellos que hablan a favor de los demás, que tienen una visión del mundo distinta de la cotidiana, que creen en un mundo mejor, tengan una vida más corta y muy frecuentemente termina de forma trágica. Para ellos muchas veces no existen finales felices Descubrió que Belgrano murió pobre en su casa de Buenos Aires y que su muerte pasó desapercibida. Resulta difícil creer que el día que un héroe de la independencia argentina murió, casi nadie notó su ausencia, que sólo un periodista le dedicó su tiempo. Sin embargo la historia logró darle a Belgrano todo lo que merecía. Logró darle el lugar que le correspondía y se encargó de que todos supieran de su papel en la revolución independentista. Media hora más tarde su madre la llamó a cenar. Dejó sus apuntes sobre la cama y bajó al comedor. La cena fue igual a la de todos los días. Conversó con sus padres, sus hermanos y luego volvió a su habitación. En una hoja anotó todas las páginas web que visitó y algunos libros que allí se recomendaban. La guardó en un sobre y luego en la mochila. II - Acá hay algunas direcciones y libros que podés ir leyendo.- Dijo a Gabriel entregándole el sobre que había preparado la noche anterior. - Hola ¿no?- Gabriel parecía enojado con su falta de educación. Ella se había aproximado a él en medio del pasillo y sin palabras de por medio le entregaba el sobre. Lo correcto habría sido saludarlo antes, pero ya era tarde para intentar comenzar de nuevo. - Si tenés razón... Hola, ¿cómo estás?, ¿eso te parece mejor?- Kamil sonaba muy sarcástica en ese momento. - Mejor. Bueno… muchas gracias, cuando llegue a casa lo reviso. - Nos vemos el sábado entonces. – Ella quería marcharse de allí lo antes posible. - Antes de que te vayas quería decirte que me suspendieron las prácticas de la semana y si querés podemos reunirnos mañana. - Perfecto. Si te parece bien, podemos reunirnos mañana en mi casa después de clases. -Sí, no hay problema.- Respondió él y anotó su dirección en el mismo sobre que ella le dio. Le pidió también su número de teléfono y lo ingresó al celular. Las clases siguieron con normalidad y al llegar a su casa siguió con la investigación. Esta vez descubrió la faceta social de Belgrano y su interés por la educación. Al parecer él creía en una educación igual para todos, en la que no importara el sexo, la raza o posición económica. Influenciado por pensamientos como el de la igualdad entre los hombres y la educación pública, tenía intenciones de que se fundaran escuelas en todos los barrios, villas, pueblos. Luego de algunas victorias en Tucumán y Salta, Manuel Belgrano, recibió dinero como recompensa que decidió se usara para la construcción de escuelas públicas. Este hombre no dejaba de sorprenderla. El punto más alto llegó cuando leyó que decidió dejar a la única mujer que amó porque su compañía fue trasladada. El miércoles por la mañana despertó con una fuerte fiebre y no pudo ir a clases. Gabriel le escribió un mensaje preguntando si se reunirían igual. Ella decidió no cancelar la tarde de estudio. Para la hora de la reunión la fiebre había disminuido y su ánimo estaba mejor. Cuando Gabriel llegó, ella comenzó a preguntarle acerca de su opinión sobre Belgrano y al no obtener ninguna respuesta imaginó que no había leído nada. Y tuvo razón, él no había visitado ninguna de las páginas que ella recomendó. - Primero lo primero, ¿qué sabes de Belgrano? - Nada. -¿Nada? – Preguntó con los ojos del tamaño de dos platos. - Bueno…- titubeó – Sé que creó la bandera Argentina. - Algo es algo. Comenzó a mostrarle sus resúmenes y la cara de asombro del chico le dio a entender que había realizado muy bien su trabajo. Mientras ella intentaba relatarle todo lo que había descubierto sobre Belgrano, él tomaba notas en su cuadernola. Unas dos horas más tarde Gabriel se marchó y ella continúo con su investigación. Apenas cruzó la puerta del liceo el joven corrió a su encuentro. Tras un rápido saludo le entregó una carpeta que contenía dos o tres hojas recién impresas. - ¿Esto qué es?- Preguntó sin entender nada. - Ayer me fui tan “inspirado” que pasé toda la noche escribiendo. Esto es todo lo que escribí. Léelo y después me decís que te parece. - Está bien.- Fue todo lo que pudo contestar. Siguió camino a su clase, sólo para enterarse que el profesor de su primera clase había comunicado que a causa de un imprevisto no podría llegar a la clase. Salió al patio y bajo la sombra de un árbol decidió comenzar a leer el trabajo del chico. El texto comenzaba con un titulo bastante simple: “Belgrano y la Revolución”. “Manuel Belgrano fue un pilar fundamental en la Revolución de Mayo. Movimiento que llevo a la independencia de Argentina. Es recordado por ser el creador de la bandera de dicho país. Formó parte del ejército y se vio involucrado en numerosas luchas durante la guerra de independencia. Sufrió algunas derrotas pero se caracterizo por su preocupación constante sobre la situación de sus soldados. En numerosas cartas se observan sus quejas acerca del hambre y las dolencias que sufrían sus tropas…” Todo el relato parecía extraído de un libro de historia; se nombraban las batallas que vivió, los lugares que visitó, el éxodo de Jujuy, su niñez, sus estudios. Sin embargo lo compaó con una lista de supermercado. Era un listado de sus vivencias sin ninguna opinión propia, sin ningún comentario, estaba… vacío. Decidió no leer más y esperó que llegara la hora del recreo. Visualizó a Gabriel en la puerta lateral del patio. Se acercó y le tocó el hombro ya que estaba de espaldas. - Estuve leyendo tu trabajo. - ¿Qué te pareció? - Honestamente… parece que hubieras copiado todo de un libro de historia. Es igual a cualquier cosa que podés leer en internet sobre él. - ¿Tan malo es?- Preguntó Gabriel con un poco de tristeza en su voz. Tratando de aliviar su pena buscó un argumento que no lastimara al joven. - No es que sea malo, es que le falta alguna opinión tuya, algún comentario sobre su papel social, una crítica a lo que hizo o sobre lo que pensaba. - ¿Podemos reunirnos más tarde y me ayudas a mejorarlo? - Claro. Esa tarde se juntaron en su casa nuevamente. Lo primero que hizo Kamil fue entregarle una hoja en la que sólo se leía una frase: “El miedo sólo sirve para perderlo todo.” Él tomo el papel y luego de leer preguntó: - ¿Vos escribiste esto? Kamil no pudo resistir el deseo de reír, pero al notar la cara de desconcierto de su acompañante contestó: - No. Esa es una frase de Belgrano. - Ah.- Fue lo único que pudo decir. - ¿Qué te parece la frase? - ¿Profunda? -No hay respuestas correctas en este tipo de pregunta. – Kamil trataba de mostrarle a Gabriel como ella veía a Belgrano. - ¿No las hay? ¿Vos qué opinas de esa frase? - Creo que alguien que ve la vida de ese modo descubrió todo lo que hay que descubrir. Entendió que las cosas hay que hacerlas, no esperar por ellas, que uno debe luchar por el bien de la humanidad aunque eso implique caerse a veces. Veo a alguien que decidió que había algo por lo que valía la pena luchar sin importar las consecuencias. - ¿Todo eso ves en una frase? - No es sólo una frase, es… mucho más que eso. - Ya que yo no veo todo eso en la frase, podrías decirme que es lo vos contarías si tuvieras que hablar de Belgrano. Me explicas que es lo más importante para vos y después yo intento escribir de nuevo mi trabajo. - Tal vez así quede mejor. Kamil comenzó por las cosas que más le impresionaron y siguió mostrándole sus notas. - ¿Sabías que Belgrano es considerado por algunos autores como el fundador de la escuela primaria? - él hizo un gesto de negación con la cabeza y ella continuó. – Entre sus ideas estaban las de crear escuelas para las niñas. Pensaba que estas para ser buenas madres y creadoras de los ciudadanos debían contar con conocimientos que podrían transmitir a sus hijos. Proclamaba que la educación debía llegar a todos los ciudadanos de la patria, incluidos todos aquellos habitantes de la campaña. En la educación no debían existir distinciones económicas, las escuelas debían ser gratis para que fueran accesibles a todos. En tu escrito nombras el Éxodo Jujeño, ¿pero sabes que implicó ese éxodo?- sin dejarlo continuar siguió hablando – Belgrano se dio cuenta de que no iba a poder hacer nada contra el avance de los enemigos y ordenó al pueblo que quemarán todo lo que pudiera servir a los otros. La gente no lo siguió sólo porque él lo ordenó, lo siguieron porque creían en la libertad que proclamaba. Decidieron abandonarlo todo, sus pertenencias, sus riquezas, todos, sin distinción de edad, raza o clase social, se marcharon de su pueblo en busca de la libertad que buscaban los revolucionarios. ¿Alguna vez te imaginaste dejar todo solo por un bien mayor? - No. - En su juventud fue enviado a España a estudiar. Allí comenzó a estudiar leyes y recibió el título de Bachiller en leyes y luego de Abogado. Pero decidió no seguir la carrera de doctor en leyes porque lo consideraba una pérdida de tiempo. Allí fue influenciado por las ideas políticas, sociales y económicas que estaban naciendo. Él arribo a España en tiempos que trajeron luego a la Revolución Francesa. Tomó como propias las ideas de igualdad, seguridad y propiedad. La idea de igualdad de todos los hombres que contaban con derechos otorgados por la naturaleza de ser hombres, debió de ser la que más impacto tuvo en su persona. La conversación siguió unas horas más hasta que él se tuvo que marchar. Kamil dejó la tarea de Belgrano a un lado y continúo con sus demás deberes. III El sábado no pudieron reunirse ya que Gabriel debió asistir a un partido de futbol. Por primera vez, en mucho tiempo, ella decidió salir con dos compañeras de clase en lugar de quedarse a estudiar. Llegó a su casa sobre la medianoche y lo primero que notó en su casilla de correo fue un mail de Gabriel. El mismo decía: “Intente de nuevo escribir el trabajo. Espero que esta vez si te guste. Te lo adjunte al mensaje, si podes mándame tu opinión. Gracias.” Dio un clic para descargar el archivo. Unos segundos después ya estaba en su computadora. Su padre golpeó la puerta y al entrar le preguntó si se había divertido. Hablaron de la salida y luego se fue a dormir, olvidando leer el escrito de su compañero. El domingo en la mañana recordó que tenía el trabajo de Gabriel en la computadora. Después de desayunar comenzó a leer. Esta vez su compañero la sorprendió. Casi logra sacarle alguna lágrima de la emoción. No pudo leer la última frase porque su celular comenzó a sonar. La llamada era de él. - Y… ¿Qué te pareció? – preguntó el joven sin darle tiempo a decir nada. - Está…- no sabía que decir. - ¿Tan mal esta? - No, claro que no. La verdad… está muy bien. - ¿En serio? – él no podía creerlo. - Honestamente es de lo mejor que he leído. - No puede ser para tanto. - Estoy siendo honesta. Está muy bien redactado y tiene todo lo que le faltaba al otro escrito. Este está más lleno de… sentimiento, de crítica. - Bueno… gracias. - Con este trabajo te vas a sacar muy buena nota. - Eso espero. Luego de este comentario la llamada terminó. El lunes a primera hora la profesora la llamó al finalizar la clase para saber cómo estaba saliendo el trabajo. Kamil le contó que estaba yendo mejor de lo que ella esperaba. En el patio, bajo el árbol que Kamil utilizaba para leer y estudiar, se encontraba Gabriel, sentado junto a una botella de jugo y un libro de historia. Se acercó, deteniéndose frente al joven. - ¿Sabías que la voz de Belgrano provocaba risas? - ¿Cómo es eso? - Supuestamente tenía lo que llamamos voz de pito, una vos un tanto chillona, que provocaba que algunos no pudieran evitar la risa cuando lo oían por primera vez. - Pobre. - Además muchos consideraban que no era buen militar porque era muy sensible. - Puede ser, pero aún así, logró mucho y jamás se rindió. - ¿De verdad te gustó mi trabajo? - Si. – jamás había sido tan honesta. - Espero que a los demás también. - Te va a ir muy bien el jueves. Dicho esto siguió hasta su siguiente clase. No vio a Gabriel por el resto del día. El martes y el miércoles pasaron más rápido que de costumbre y no notó la ausencia de Gabriel en el liceo. La noche previa a la exposición de su compañero recibió un mail del mismo. “Muchas gracias por tu ayuda. Quería llevarte un regalo hoy a clases pero estuve enfermo los últimos dos días, de seguro mañana ya esté mejor. Estoy un poco nervioso por lo de mañana pero como decía Belgrano: “No hallo medio entre salvar a la patria o morir con honor”. No es que lo de mañana sea cuestión de vida o muerte, pero sé que vos me vas a entender. Besos hasta mañana.” Claro que entendía a que se refería. El exponer frente a toda la clase, ponía nervioso a cualquiera, incluso ella sentía nervios al pararse allí. Salvar a la patria de la dinastía del imperio equivalía a morir, Belgrano lo sabía. Como también sabía que no había un punto medio entre estas dos cosas. Eran las dos o nada, y él lo aceptó. De la misma forma su compañero había aceptado que iba a sentir nervios, que tendría miedo, pero si quería aprobar la materia debía hacerlo. Eran cosas que si se miraban atentamente no tenían comparación. Pero en su mundo salvar la materia equivalía, para Gabriel, a salvar la patria. Esas son comparaciones que a veces se pueden admitir. IV La noche pasó velozmente. Al llegar al liceo vio a Gabriel en la puerta. Entraron juntos a la clase y ella le deseó mucho éxito, porque la suerte es para aquellos que no están preparados, la suerte siempre creyó la necesitan aquellos que no hacen su propio camino. La profesora esperó que todos se sentaran, pasó la lista y llamó a Gabriel. - Te escuchamos. – fue lo único que dijo la mujer. Miró sus manos por dos segundos, tomó el marcador y escribió en el pizarrón: “Nadie es más acreedor al título de ciudadano que el que sacrifica sus comodidades y expone su vida en defensa de la Patria”. Colocó sus apuntes en el escritorio y comenzó: - Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano nació el tres de junio de mil setecientos setenta. – Al decir esto se escucharon algunas risas en el salón, pero él siguió adelante con su discurso. – Aunque nació en una familia de alta posición económica murió en la pobreza. Una pobreza tal que no tenía con que pagar al doctor que lo visitó en su lecho de muerte. Luchó por su país hasta que no pudo más. Dedicó su vida a la revolución y a la independencia de su país, dejando de lado su vida personal. Aún así se le conocen dos hijos, pero jamás se casó. Y aunque, si lo deseó, nunca pudo hacerlo. La revolución se apoderó de su vida y no dejó espacio para nada más. - Tomó aire profundamente, observó a sus compañeros y colocó en el pizarrón una imagen de Belgrano, en la que se lo veía muy joven. - Con sólo dieciséis años su padre lo envió a España. Durante los dos meses que llevaba cruzar el Océano Atlántico pudo aprender mucho de la vida marítima, lo que influyo más adelante en su vida al demostrar una fuerte preocupación por esta actividad. Aunque se recibió de abogado no quiso estudiar para obtener el doctorado en Derecho. Belgrano había comenzado a descubrir que el mundo estaba cambiando y que de nada serviría dedicar tanto tiempo al estudio cuando lo que se necesitaba eran personas que lucharan por la igualdad de los hombres. – inmediatamente las risas comenzaron en el salón y los comentarios acerca de que todos deberían dejar de estudiar, si no era necesario, inmediatamente Gabriel tomó control de la situación. - El momento en que vivió Belgrano necesitaba de líderes, hombres que abandonaran sus vidas por los demás. Él no dejó de estudiar sólo porque le resultara aburrido o quisiera salir a divertirse. El comentario del joven asombró a la profesora y todos sus compañeros pusieron los ojos como platos. Resultaba increíble oír esas palabras de la boca de Gabriel, de un joven que lo único que hacía era quejarse de que no le gustaba ir al liceo y que siempre buscaba excusas para distorsionar las clases. - En 1794 – continuó para retomar su discurso – retornó a Buenos Aires. Fue el Secretario del Consulado de Comercio de la ciudad hasta que la Revolución de Mayo comenzó. Esta revolución marca el comienzo de la independencia Argentina. El veintidós de mayo de 1810 se realizó un cabildo abierto en el que se proclamó destituir el virreinato e instalar una junta que se encargara del gobierno. Sin embargo la independencia no fue inmediata y debieron librarse muchas batallas y transcurrieron algunos años antes de que la independencia fuese oficial. En agosto de ese año lo nombraron General, aunque no había realizado entrenamiento militar, dato que no interesó a Belgrano quien tomó el mando y se dirigió al norte argentino. Es destacable que durante su estadía en el ejército siempre trató ser un igual a sus hombres, preocupándose por su salud y su estado de ánimo. Aunque muchos dudaban de sus habilidades por creer que tenía un carácter blando, sensible o demasiado moderado, Belgrano consiguió victorias en ciudades como Salta y Tucumán. También sufrió derrotas que lo llevaron a tener que abandonar el norte. Como recompensa de sus victorias recibió oro que quiso donar a la construcción de escuelas públicas. Lamentablemente el dinero fue gastado en otras cosas y las escuelas no se hicieron realidad. – Observó a Kamil y notó que parecía consternada, de seguro no conocía este dato y la realidad la asombraba. – En 1814 partió a España con el fin de lograr el reconocimiento de la independencia. No le importó que su vida estuviera en riesgo ya que era considerado un rebelde y estaba ya muy enfermo. Sin embargo no logró lo que buscaba. Falleció el veinte de junio de 1820 en la ciudad de Buenos Aires, sólo y pobre y sin que ningún periódico anunciara su muerte. El único que se refirió al hecho fue un periodista llamado Castañeda. Él notó lo injusto que había sido que nadie del gobierno o el pueblo, asistieran al funeral de Belgrano. - Entre sus actos más destacados se encuentra la fundación de la Escuela de Náutica y la Academia de Geometría y Dibujo, aunque entre sus ideas estaba fundar más escuelas, impulsado por su deseo de una escuela primarias públicas y obligatorias a todos. – dejó a un lado sus apuntes y tomo aire para seguir – Pero más allá de las victorias, derrotas o planes que tenia, lo que habría que destacar y todos deberían tener en cuenta, es que, Belgrano dejó todas sus comodidades para luchar por la patria. Pudiendo dedicarse a una carrera que le diera riquezas económicas o siguiendo el camino de su padre, él decidió dejar su vida a un costado y se esforzó por lograr lo que creía justo y correcto. Cuando se enamoró profundamente de una joven en Tucumán hasta pensó en la posibilidad del matrimonio. Sin embargo fiel a sus ideales, cuando trasladaron a su ejército debiendo abandonar a la muchacha, lo hizo. Cuando pudo volver por ella, ya era demasiado tarde. De todas maneras tuvieron una hija en 1819. - No dudo que haya sido feliz a su manera, luchando por una sociedad libre y justa. Dejando todo lo que otros considerarían importante. Pero no puedo evitar preguntarme si lo haría de nuevo. Y no puedo evitar llegar a la conclusión de que su respuesta sería sí. Él que proclamó que “La vida es nada si la libertad se pierde”, vivió en busca de ella. Cuando terminó su discurso el silencio invadió la sala, la profesora se acercó al escritorio y quedó a su lado. Colocó la mano en su hombro y lo felicitó. - Un aplauso para Gabriel que hizo un muy buen trabajo. Después del aplauso se dirigió a su asiento, y vio que Kamil tenía la mirada fija en él. La clase terminó unos diez minutos más tarde. Al salir se encontró con la joven recostada sobre la puerta del salón. - ¿Por qué no seguiste leyendo tus apuntes y decidiste improvisar? - Porque me quedaban como diez hojas llenas de fechas y me pareció que de no le iba a interesar a nadie. ¿Te parece que salió mal? - Al contario… me gustó más así. - Fue más fácil hablar de lo que aprendí de él, que leer un montón de fechas, que se pueden leer en cualquier libro. - Es verdad. Yo suelo hacer lo mismo, no me gusta relatar de memoria fechas y datos sin sentido. Prefiero defender los ideales que tenían los personajes que estudiamos. - Exactamente lo que intenté hacer. La joven se despidió con un beso en su mejilla y lo felicitó nuevamente. Antes de verla llegar a la salida recordó que debía entregarle algo y la llamó. Cuando estuvo nuevamente frente a él preguntó que sucedía. Le entregó una hoja que contenía una sola frase. - Quería darte esto como regalo por ayudarme. - ¿Una hoja?... gracias. – el joven comenzó a reír. - No es sólo una hoja, es para decirte que creo que entendí porque actúas así– al notar la cara de sorpresa de la joven continuó – no es para decirte que cambies como dicen los demás. Es para hacerte ver que las personas que de verdad hacen la diferencia no son tan distintas a vos. - Gracias… creo. – dijo la chica. Continuo con su caminata rumbo a la salida y al llegar a la parada sacó la hoja del bolsillo de su campera y comenzó a leerla: “No busco el concepto de nadie, sino el de mi propia conciencia, que al fin es con la que vivo en todos los instantes y no quiero que me remuerda”. Manuel Belgrano. BIBLIOGRAFÍA. • Destefani, Laurio H.; “Belgrano y el mar”; Fundación Argentina de Estudios Marítimos; Buenos Aires; Argentina; 1979. • Mitre, Bartolomé; “Historia de Belgrano y la Independencia Argentina”; Volumen XXIX; Biblioteca de Clásicos Argentinos; Ediciones Estrada; Argentina; 1960 PÁGINAS VISITADAS. • http://www.manuelbelgrano.gov.ar/ • http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Belgrano • http://www.elhistoriador.com.ar/biografias/b/belgrano.php LAS MUJERES Y LA INDEPENDENCIA DE LAS PROVINCIAS UNIDAS EN SUD AMÉRICA Elena Victoria Burgos de León Uruguay “Las mujeres en la revolución Altoperuana”, demuestra que las mujeres en efecto participaron y lideraron varias acciones de guerra en la lucha por la emancipación, y que muchas de ellas fueron perseguidas y condenadas a la muerte por sus acciones. El fenómeno de la exclusión y la masculinización de las mujeres ha sido una constante en el trabajo historiográfico en toda América del Sur. El desempeño femenino en las gestas libertadoras, fue destacado y produjo importantes hechos que no son contenidos en la historiografía oficial. La acción heroica de buena parte de los próceres de la independencia contó con la asistencia y el apoyo de centenares de mujeres que vieron afectadas sus rutinas en el hogar con la partida de los hombres a la guerra. Fueron ellas en consecuencia quienes debieron asumir, como cabezas de hogar, tanto la manutención de sus hijos, el orden en el hogar y el desarrollo de diversas actividades económicas. Varias de ellas se vieron obligadas a asumir el rol de proveedoras del hogar, y de administradoras de bienes, si los había, de cultivos o empresas. La partida de los hombres a la guerra, produjo enormes problemas rutinarios, buena parte de los hombres enlistados eran trabajadores del campo, labriegos, y al partir ellos se produce un decaimiento en la producción económica que las mujeres ayudaron a superar. Hoy que tanto se habla de género y equidad y que por suerte estamos logrando igualdad de condiciones me parece una buena actitud acordarnos de estas heroínas muchas veces olvidadas y a veces que ni siquiera sabíamos que existían, que habían participado en la gesta emancipadora y que gracias a ellas hoy podemos decir que somos libres. Se suele decir que detrás de todo gran hombre, hay una gran mujer. ¿Por qué detrás? ¿Por qué no al lado? ¿Por qué no es ella la reconocida y nombrada en la historia a partir de su propio rol social y político y no cómo la simple y fortuita acompañante de un gran hombre? La versión galante y romántica de la historia del siglo XIX, nos habla de mujeres sumisas y obedientes, plegadas a las dos grandes virtudes femeninas de la época: callar y obedecer. Las mujeres fueron expuestas en la historia como seres decorativos que embellecían el hogar y para quienes sólo existía dos opciones decorosas para sus vidas: el matrimonio o el convento. Esta visión no refleja sus inquietudes humanas y menos la participación política que muchas de ellas ejercieron en medio de enormes contrariedades, represiones y adversidades. Las mujeres de la independencia nunca fueron ángeles de hogar, ni las que pertenecían a las élites sociales ni aquellas que tenían su origen en los sectores populares. Al contrario, muchas de ellas fueron partícipes activas en la lucha contra los abusos virreinales desde el movimiento comunero, las luchas patrióticas y desde otras gestas de enorme significado histórico. JUANA AZURDUY: “La Teniente Coronela” Juana nació el 12 de julio de 1780 en Chuquisaca. Eso no era nacer en cualquier lugar ya que dicha ciudad, que también recibía el nombre de La Plata o Charcas, era una de las más importantes de la América española. Su madre, de allí su sangre mestiza, era una chola de Chuquisaca que quizás por algún desliz amoroso de don Matías Azurduy, se elevó socialmente gozando de una desahogada situación económica, ya que el padre de doña Juana era hombre de bienes y propiedades. Juana heredaría de su madre las cualidades de la mujer chuquisaqueña: el hondo cariño a la tierra, la apasionada defensa de su casa y de los suyos, la viva imaginación rayana en lo artístico, la honradez y el espíritu de sacrificio. En aquella época, lo que resalta aún más la extraordinaria trayectoria de doña Juana, las mujeres estaban irremisiblemente condenadas al claustro monacal o al yugo hogareño. De niña, Juana gozó en la vida de campo de libertades inusitadas para la época. Vecinos de los Azurduy, en Toroca, eran los Padilla, también hacendados. Don Melchor Padilla era estrecho amigo del padre de Juana, y ellos y sus hijos Pedro y Manuel se ayudaban en las tareas campestres y compartían las fiestas. Y muy pronto entre Juana y Manuel Ascencio se despertó una fuerte corriente de simpatía. Marcada por un signo trágico que la perseguiría toda su vida y que la condenaría a la despiadada pérdida de sus seres más queridos, su madre muere súbitamente cuando Juana cuenta siete años sin que jamás pudiese enterarse de la causa misteriosa, por lo que su padre la llama nuevamente junto a él, al campo. Al desamparo por la prematura muerte de sus padres le siguió la difícil relación con sus tíos Petrona Azurduy y Francisco Díaz Valle, quienes se hicieron cargo de las dos huérfanas más por ambición de administrar las propiedades que habían heredado que por un sincero deseo de protegerlas afectivamente. Juana, que en la relación con su padre había sido estimulada en su rebeldía y en su libertad, se veía ahora encerrada en un vínculo que pretendía someterla, obligándola a acatar las disposiciones de sus tíos despóticos, anticuados, poco afectivos. Los encontronazos, sobre todo con doña Petrona, eran muchos y sin duda Juana no se resignaba a que su condición de mujer la determinara a un papel de debilidad ante las retrógradas convenciones chuquisaqueñas. El 8 de marzo de 1805 contrajo matrimonio con don Manuel Ascencio Padilla, criollo de familia adinerada que había apoyado el movimiento revolucionario de la ciudad de La Paz en 1809. Cuando en 1810 Padilla fue investido con el título de comandante de las doctrinas de varios pueblos indígenas; con dos mil indios ocupó La Punilla para impedir el acceso a Chuquisaca en poder de los realistas. Acompañó la azarosa vida de soldado de su esposo interviniendo activamente en la lucha. Los dos ayudaron al Ejército del Alto Perú en su marcha de Chuquisaca hasta La Paz auxiliando con cosechas y ganado a los ejércitos de Eustaquio Díaz Vélez y Antonio Balcarce, hospedando inclusive al Dr. Juan José Castelli. Juana siempre amó y admiró a Manuel, en quien seguramente encontró a alguien similar a su idealizado padre, y reprodujo una relación en la que se sentía alentada a emplear con libertad y audacia sus capacidades físicas e intelectuales. Es ese respetuoso y encendido amor que siempre sentirá por su esposo lo que hace que cuando Manuel Ascencio decide lanzarse a la lucha contra el opresor Juana no duda en unírsele, pero de la forma en que ella concibe la unión entre hombre y mujer: luchando a la par. Al principio la vida en común de los Padilla quizás no difirió demasiado de la de otros matrimonios criollos de buena posición económica y social. En 1806 nace su primer hijo, varón, a quien ponen el mismo nombre del padre: Manuel. Manuel, por su parte, cumple con el destino masculino de asegurar la manutención familiar y, de ser posible, progresar. Su ambición lo lleva a proponerse para un cargo en el gobierno de la ciudad de Chuquisaca, pero por ser criollo es postergado El almacenado rencor de los realistas contra los esposos Padilla estalla cuando el 14 de septiembre de 1810 Cochabamba se levanta contra el opresor hispánico y proclama su adhesión a la junta Revolucionaria de Buenos Aires, y Manuel Ascencio corre a ponerse a las órdenes de Esteban Arce, el caudillo rebelde. Padilla, a quien todavía no se ha unido doña Juana, encargada de la custodia de sus entonces 4 hijos, cumple con su misión apasionadamente, teniendo éxito en sublevar todos los pueblos y cantones de la comarca. Con 2.000 indios llega a ocupar Lagunillas para evitar que Chuquisaca reciba aprovisionamiento para los realistas. La revolución ha estallado en Chuquisaca, La Paz, Cochabamba, propagada desde Buenos Aires, y se extiende como pólvora encendida. Juana abriga esperanzas de que la situación podrá ser distinta. En el futuro para sus amadísimos hijos, y de que a pesar de ser criollos podrán ocupar en adelante los cargos que hasta ahora han estado reservados únicamente para los peninsulares. La madre se los imagina dirigentes en Chuquisaca y quizás otras plazas Alto peruanas, por lo que incorporarse en la lucha, aunque los niños deban pasar horas difíciles será -quiere convencerse doña Juana- también un acto de conveniencia, para Manuel, Mariano; Juliana y Mercedes. En la soledad de la finca de Río Chico, todavía amamantando a la pequeña Mercedes, Juana Azurduy rumia las últimas dudas. Finalmente algo termina con las cavilaciones: el ejército de Castelli es vencido en Huaqui y emprende luego una desesperada fuga con las fuerzas realistas pisándole los talones. Esta vez aún más cruel. Las propiedades de los Padilla son confiscadas, como así también todos sus animales y el grano cosechado. Doña Juana, que nada sabe aún de su esposo, se refugia en un primer momento en la ciudad, pero prontamente es delatada, apresada y confinada con sus hijos en una hacienda de extramuros, permanentemente vigilada por los godos, quienes así confían en apresar a Manuel Ascencio, conocedores de su amor por esposa e hijos. A pesar de la trampa bien montada, arriesgando su vida y cobrándose las de dos o tres carceleros, Padilla logra burlar el acecho y una noche consigue rescatarlos en tres caballos. En uno de ellos monta doña Juana con Juliana, en otro Manuel y Mariano que entonces tenían cinco y cuatro años, y en el restante Manuel llevará en brazos a la pequeña Mercedes. Finalmente Padilla, luego de casi un año de ausencia, regresó con su familia, al refugio de las montañas, Manuel le contaba también a Juana la heroica acción de las mujeres cochabambinas, quienes ante el avance del general Goyeneche y a pesar de la ausencia de maridos e hijos enrolados en tropas alejadas de la ciudad, decidieron tomar las armas por su cuenta y defender su honor y sus hogares. Pero lo que decidió a Juana finalmente a obviar las objeciones de su marido y a ahogar su sentimiento maternal abandonando a sus hijos en manos confiables fueron las noticias de que un nuevo ejército proveniente de Buenos Aires se habían internado en el altiplano para auxiliar a los patriotas que combatían contra los godos. Esta vez el jefe era el general Manuel Belgrano, quien, según se había difundido ya por la región, demostraba, muchas mejores condiciones que el anterior. Ahora las cosas parecían ser distintas. Belgrano era un hombre justo y respetuoso de las costumbres y de las creencias de los lugareños, y además había derrotado a los ejércitos realistas nada menos que en dos batallas, en Salta y en Tucumán, luego de la cual, en un gesto que le había ganado la simpatía de los habitantes de la región. Doña Juana, enfervorizada, recorre las tierras de Tarabuco convocando voluntarios para unirse a la lucha por la independencia y por la libertad. Su presencia en los ayllus era tan imponente, encabritada sobre su potro entero y apenas domado, haciendo entrechocar su sable contra la montura de plata potosina, enfundada en una chaquetilla militar que lucía con un garbo varonil que la embellecía como mujer, tan absolutamente convencida de aquello que también convencía a Manuel Ascencio, que llegó a reunir a 10.000 soldados. Los esposos habían recibido instrucciones de Belgrano de reclutar voluntarios, alistarlos y unirse a las tropas que pronto chocarían contra las fuerzas realistas. El hecho de que Juana fuera mujer, y tal estirpe de mujer, decidía a muchos hombres a unirse a la lucha y, lo que era más remarcable, también lo hacían no pocas mujeres. En campaña solía llevar un pantalón blanco de corte mameluco, chaquetilla escarlata o azul, adornada con franjas doradas y una gorra militar con pluma azul y blanca, los colores de la bandera del general Belgrano, quien le había obsequiado su espada favorita, en cierta ocasión en que presenció su valentía y liderazgo, prenda que doña Juana lucía con gran estima. Así se sucedieron batallas tras batallas unas ganadas y otras perdidas, unas compartidas con su marido y sus hijos, otras separados, así transcurrió el tiempo sin saber de su amado Manuel y entre tanto sus dos hijos: Manuel y Mariano caen enfermos. Es posible que doña Juana haya sentido en ese momento, desamparada de la protección de su marido y a merced de enemigos contra los que no sabía combatir como eran los mosquitos y la fiebre palúdica. La batalla de Manuelito contra su enfermedad fue tremenda, corajuda. Cuando su madre lo desvistió para ponerle paños fríos y acariciar su piel descubrió horrorizada cuán enflaquecido estaba, cuánto había sufrido el niño sin quejarse en esa vida de privaciones a que la lucha guerrillera los sometía. El aullido de esa madre debe de haber sido descomunal. Pero no hubo mucho tiempo para lamentos, por que era ahora el turno de Mariano, quien mostraba también a las claras que su situación iba tornándose desesperante. -Sí Manuel será un gran jefe, Mariano será un gran doctor -opinaba con orgullo Manuel Ascencio, tomados de la mano con doña Juana, cuando bañados por el sol generoso del altiplano hacían planes para cuando esa guerra horrible terminase. Pero esa guerra no había terminado sino que se había llevado ya a sus dos amadísimos hijos, y doña Juana ni siquiera sabía donde estaba su marido, temiéndolo prisionero o muerto en algún encuentro con el enemigo. Cava dos fosas precarias para sus hijos muertos, sin tiempo para el lamento pues un mal presagio la acosaba: el indio que debía llevar a Mercedes y Juliana al refugio más seguro no ha regresado. -Hijitos e hijitas míos, su muerte ha de tener algún sentido -se escuchó decir doña Juana y seguiría diciéndose, preguntándose y muchas veces insultándose, casi todos los restantes días de su vida. Por fin, Manuel Ascencio se echó en los brazos de su esposa y, abrazándola con fuerza y con amor, la besó interminablemente secándole las lágrimas y fundiendo sus dolores para transformarlos en fuerza, ya que tenían ahora una misión inmediata que cumplir: liberar a las dos hijas que les quedaba. A partir de ese momento la guerra se transformó para Juana y Manuel Ascencio en algo despiadado, en algo brutal. Su motivación era ya no sólo el librar a su patria del opresor extranjero, sino que de entonces en más se trató también, y quizás más que nada, de vengar la muerte de sus cuatro amadísimos hijos. Pero a partir de la muerte de Manuel, Mariano, Juliana y Mercedes la situación era otra, y ya no estaba Belgrano, derrotado por los realistas, imponiendo respeto y autoridad sobre los Padilla. Otra de las consecuencias de la muerte de sus hijos fue que doña Juana quedó rápidamente embarazada, quizás para expulsar tanta muerte de sus vidas y también para tratar de revivir imposiblemente a quienes se habían ido en quien estaba por llegar. Se siguieron sucediendo las batallas interminables, agotadoras, la mayoría de las veces perdiendo o que sus tropas se dividían. Mientras tanto en el vientre de doña Juana había ido creciendo el nuevo retoño, el que, como no podía ser de otra manera, se asomó al mundo en condiciones dramáticas y peligrosas. Las primeras contracciones sobrevinieron cuando los esposos se encontraban en el pueblo de Pitantora. Entre tanto, doña Juana y su corte parturienta pudieron alejarse más de doce leguas del lugar del combate, llevando consigo las cajas de monedas y objetos valiosos capturados al enemigo y requisados a quienes colaboraban con los partidarios del rey. Al día siguiente los guerrilleros, sopesando la superioridad numérica de sus enemigos, se dispersaron como en estas ocasiones acostumbraban hacer. Pero Padilla, temiendo que su esposa y su hija recién nacida no se hubiesen alejado bastante a causa de su estado, con pocos -guerrilleros armados de fusil y otros de hondas, sostuvo un encarnizado combate digno de toda admiración por la desigualdad de fuerzas. Los realistas tuvieron numerosas bajas y se alejaron con el objeto de rehacerse, y entonces pudo Padilla retirarse ordenadamente del campo de batalla, reuniéndose a poca distancia con el resto de su gente que lo esperaba y continuando su marcha ya sin ser molestados. Mientras Padilla y los suyos combatían con tanto valor en Pitantora, doña Juana avanzaba penosamente con su bebita y los recursos con que los esposos se aprovisionaban de armas, bestias y víveres, acompañada del sargento Romualdo Loayza y cuatro soldados más de su escolta. La futura teniente coronela comprendió que estaba en peligro y, rugiendo, decidió vender cara su vida, no tanto por ella sino por ese otro fruto de su vientre, decidida a evitarle lo que no había podido ahorrarles a Manuel, Mariano, Mercedes y Juliana. Sobrecogidos, sin poder reaccionar a pesar de los gritos de Loayza revolcándose sobre el suelo, observaron como la mujer apretó el bulto de vida contra su pecho y espoleando salvajemente su cabalgadura la obligó a zambullirse desde gran altura en las aguas revueltas del río. Muchas veces repitió en su vejez doña Juana que hubiese deseado un hijo varón, alguien tan maravilloso como su padre, como Manuel Ascencio o como quien conociere más tarde: Martín Güemes. Buenas noticias corrían de boca en boca por los villorrios alto peruanos: la expedición proveniente del Río de la Plata al mando del general José Rondeau había por fin ingresado al Alto Perú y avanzaba para auxiliar a la resistencia contra los soldados del rey. Tan difícil que hasta el mismo San Martín, designado para sustituir al general Belgrano, había desistido de ella por considerarla imposible. El abandono de Chuquisaca por parte de los soldados godos hizo que Juana Azurduy viviera una de las pocas experiencias gratificantes de su lucha sin cuartel, ya que los Padilla aprovecharon la débil defensa de su ciudad natal para tomarla, ingresando luego por su calle principal al lento y elegante paso de sus cabalgaduras, adornadas con plata y cuero, mientras los chuquisaqueños, algunos sinceros y otros adulones, los vitoreaban y arrojaban flores a su paso. Así hubieron otras batallas y otras decepciones que sufrieron al matrimonio Padilla pero que nunca hizo quebrar su moral y su patriotismo y su necesidad de ser libres. Otra vez a Juana le toca vivir otro momento de gran dolor que era la muerte de su amado Manuel caído en batalla, y que ella se salvó por poco ya que también salió muy mal herida de aquella batalla y llevando en esos lúgubres momentos la responsabilidad de poner a salvo su pequeña hija Luisa y llevar consigo una caja de madera en la que los Padilla guardaban sus papeles, entre ellos su designación como teniente coronela por parte de Belgrano. La cabeza de Padilla fue exhibida en la plaza pública durante meses, ésta se convirtió en un símbolo de la resistencia. El 15 de mayo de 1817 Juana al frente de cientos de cholos la recuperó. La fama del general don Martín Güemes se había extendido por todo el Alto Perú. Muchas veces Manuel y Juana habían comentado las hazañas de este hombre de noble origen salteño. Este era probablemente el más parecido a su esposo que podía hallarse: también provenía de una familia acomodada. Doña Juana pasó varios años luchando junto a Güemes. Una vez más, la tragedia está sobre Juana Azurduy la muerte de Güemes asesinado. La muerte de su amigo y protector despeña a doña Juana en la miseria, como lo revela la carta dirigida a las autoridades salteñas solicitándoles ayuda para regresar a su Chuquisaca natal y que le darían cuatro mulas y cincuenta pesos. Y allí Juana Azurduy nuestra querida Juana envejecía sola y olvidada con la sola compañía de su hija Luisa, con quien nunca llegó a desarrollar una relación con la intensidad afectiva que había llegado a tener con sus hijos muertos, y quedando sola aún más cuando ésta se casó y se fueron a vivir lejos. Por fin la muerte se apiadó de doña Juana y decidió llevársela. Sin parientes ni amigos, a los 82 años expiraba doña Juana como no podía ser de otra manera, un 25 de Mayo. “MACACHA” GÜEMES María Magdalena Güemes nació en Salta un 11 de diciembre en el año 1787, era hija de doña María Magdalena Goyechea y de la Corte y de don Gabriel Güemes Montero tesorero de la Real Hacienda, fue hermana del héroe de la nación el general don Martín Miguel Güemes. Recibió la educación habitual para las mujeres de su época y posición, pero poseía cualidades propias que le permitieron descollar en un medio rico en mujeres de personalidad, era poseedora, tan destacada, que se imponía donde quiera se encontrara dado que con igual idioma y cariño se comunicaba con todos: humildes o poderosos, con igual delicadeza y simpatía. El 24 de octubre de 1803 a sus 16 años de edad se casó con Román Tejada, perteneciente a una antigua familia de Salta, de clase principal que integraba una larga nómina de familias realistas. “...arrogante y hermosa, que durante el gobierno difícil de la guerra, habría de llevar la armonía a las pasiones, la prudencia y el acierto en los consejos, la luz en los momentos más delicados del peligro y una sagacidad e inteligencia nobles y generosas en la diplomacia, acompañado todo ello de la seducción y el encanto que se desprenden de la mujer inteligente y culta. Esta joven destacada por sus dotes como patricia a los veintitrés años, poco después de la Revolución de Mayo, convirtió su casa en taller, para confeccionar ropa para los soldados de la Partida de Observación organizada por su hermano. A partir de entonces fue su más entusiasta colaboradora, y supo sacar partido de su inteligencia y su posición para desempeñar tareas arriesgadas, especialmente cuando los realistas ocupaban la ciudad de Salta y Güemes los combatía por todos los medios a su alcance. Dotada de habilidad política, la puso al servicio de su hermano en los momentos difíciles, como en 1816, cuando estuvo a punto de concretarse el enfrentamiento entre las fuerzas de José Rondeau con las milicias de Martín Miguel de Güemes, gracias a Macacha y a sus gestiones se llegó al hecho histórico conocido como “Pacto de paz de los Cerrillos”, luego de la delicada situación surgida entre Güemes y las fuerzas de Buenos Aires al mando del general Rondeau. José San Martín, encontrándose en Mendoza, al conocer la feliz solución al conflicto se expresó así: "Más que mil victorias he celebrado las mil veces feliz unión de Güemes con Rondeau. Así es que las demostraciones en ésta sobre tan feliz incidentes han celebrado con una salva de veinte cañonazos, iluminación, repiques y otras mil cosas". En la noche del 7 de junio de 1821 llegó Güemes respondiendo a un supuesto llamado de su hermana, pero luego se dieron cuenta que era parte de una estrategia de los realistas que pretendían sorprenderlo al "mártir de la patria" -él único jefe militar muerto en el campo de batalla- abandonó el hogar y al disparar escoltado por sus "Infernales" fue mortalmente herido para morir diez días después. Macacha continúo participando de los sucesos políticos de la provincia, con la valentía que la distinguía. Intervino en la llamada "Revolución de las Mujeres" que, con el apoyo militar de Pablo Latorre derrocaron al gobernador Fernández Cornejo y pusieron en el cargo al general doctor José Ignacio de Gorriti. Más tarde, en 1824, participó en un acto sedicioso en oposición al general Juan Antonio Álvarez de Arenales "y nuevamente contra el General José Antonio Fernández Cornejo once años después, provocando la delegación del mando de éste en manos del general Felipe Varela". María Magdalena “Macacha” Güemes de Tejada abandonó este mundo el día 7 de junio de 1866, a los 78 años de vida. Fue querida por todo el pueblo debido a su carisma, a la generosidad con la que ayudaba a los necesitados e incluso la llamaron "la madre del pobrerío". MUJERES de COCHABAMBA: “Heroínas de La Coronilla” El 27 de mayo se conmemora el día de las madres en Bolivia en homenaje a la mujer cochabambina que en un día como éste, el 27 de mayo de 1812, defendió la patria y su hogar ante el ejército realista comandado por el brigadier Manuel Goyeneche, quien había determinado dar un duro escarmiento a Cochabamba por ser una ciudad extremadamente rebelde. Todo comenzó con la batalla de Amiraya, llevada a cabo cerca del pueblo de Sipe Sipe, el 13 de agosto de 1811, en la cual las fuerzas realistas habían derrotado a las fuerzas patriotas dando fin a la primera revolución cochabambina, la misma que surgió el glorioso 14 de setiembre de 1810. Pero apenas retiradas las huestes realistas, el guerrillero Esteban Arce provocó un nuevo levantamiento, el 29 de octubre del mismo año, y se apoderó del valle. Mientras tanto, el comandante realista Goyeneche había planeado invadir Salta y continuar hacia el sur para amenazar Buenos Aires. Pero la nueva rebelión cochabambina le obligó a dividir sus tropas en dos cuerpos: uno de ellos continuaría rumbo a Salta, y el otro, comandado por él mismo, se dirigió a Cochabamba. El encuentro entre las fuerzas de Arce y Goyeneche tuvo lugar el 24 de mayo de 1812 en el Quehuiñal, donde las tropas patriotas fueron aniquiladas. Luego de ese enfrentamiento, el brigadier realista avanzó hacia la ciudad del valle. Los pocos patriotas que quedaban se reunieron en un cabildo abierto donde se decidió pedir la paz. Goyeneche la aceptó poniendo como condición que le fuesen entregados los jefes de la insurrección, principalmente al gobernador, Mariano Antezana. El pueblo citadino no aceptó estos denigrantes términos y prefirió aprestarse a la defensa. En esta actitud primó la posición de las mujeres, más vehementes y más sentimentales, las cuales además constituían la gran mayoría de la población. En procura de protegerlos, las mujeres a la cabeza de la anciana no vidente Manuela Gandarillas y la esposa de Esteban Arce, Manuela Rodríguez, decidieron organizarse y armarse para enfrentar a las fuerzas realistas, pese a que sabían la desproporción que existía. Ellas resolvieron reunirse en la loma de San Sebastián o la “Coronilla”, para demostrar al enemigo que su ciudad estaba dispuesta a luchar heroicamente en defensa de sus libertades. Como habían pocos hombres, y eran además ancianos o heridos, las mujeres más enérgicas se fueron constituyendo en capitanas. Una de ellas, doña Manuela Gandarillas, demostró un coraje sin igual y llegó a ser el verdadero caudillo de los patriotas. Se dice que ella habría proferido esta célebre frase: “Si ya no hay hombres, aquí estamos nosotras, para enfrentarnos al enemigo y morir por la patria”. Como era de esperar, el combate duró poco, porque muy pronto fueron casi exterminadas esas valientes defensoras. No contento con ello, Goyeneche permitió, además, un horroroso saqueo de la ciudad por su feroz soldadesca. El gobernador Antezana, junto a muchos de sus valerosos acompañantes, fue vilmente ajusticiado. En Cochabamba fueron las mujeres las que salieron a pelear y ejecutaron valientes acciones. Una de ellas fue la toma de un cuartel militar. Y cuando el general realista Goyeneche se dio cuenta que eran las mujeres las que habían asaltado el cuartel militar y asesinado a su guardia, dio la orden de que fueran perseguidas y ejecutadas. Treinta mujeres, hoy conocidas como “Las Heroínas de la coronilla”, fueron fusiladas. Lo importante es que este sacrificio cochabambino no fue en vano. Como el ejército realista se dividió y debilitó, el cuerpo que partió a Salta pudo ser batido por el general Belgrano y, de este modo, el gobierno de la Junta de Buenos Aires se mantuvo independiente. Por este motivo, la prensa porteña difundió esta verdad: “El Alto Perú será libre porque Cochabamba lo quiere”. Luego de tres días, la ciudad de Cochabamba fue tomada a pesar de la heroica resistencia que ofrecieron las valerosas mujeres. En cuanto a estas heroínas cochabambinas, para honrarlas permanentemente, el general Belgrano ordenó que se pronunciase en la hora de la lista de los cuarteles, el siguiente lema: “¿Están presentes las mujeres de Cochabamba? Gloria a Dios, han muerto todas por la patria en el campo del honor”. Todo ocurrió en vísperas de la celebración del Corpus Christi (1812). Al día siguiente de la matanza de San Sebastián, 28 de mayo Goyeneche presidió los actos litúrgicos y aprovechando el tronar de los petardos y fuegos artificiales que amenizaban la celebración y que podían camuflar los disparos de bala, el realista mandó fusilar al anciano gobernador patriota Mariano Antezana y a otros tantos defensores de la libertad. En honor de esta batalla, el escultor italiano, Prieto Piraino trabajó una escultura que ha permanecido en lo alto de la colina durante muchos años. El 27 de mayo de 1926 se inauguró el monumento a las Heroínas. Anexo Poema a JUANA AZURDUY: En la zamba titulada Juana Azurduy, C. Molinero y L Manzini dicen: “Montonera de un tiempo de gloria Tu renombre en los cardos golpeó Amazona valiente y guerrera Alzada entre el pueblo te armaste la voz Con la fuerza de la tierra joven Que en vino levanta la nueva Nación. Vamos Juana que Aguilera Con pistola mató a tu Manuel Lo degüella y su cabeza lleva Clavada a una lanza en Laguna exponer”. Canción: FLOR DEL ALTO PERÚ (Letra: Félix Luna – Música: Ariel Ramírez) Ésta canción se encontraba dentro del repertorio de Mercedes Sosa Juana Azurduy flor del alto Perú No hay otro capitán más valiente que tú Oigo tu voz más allá de Jujuy Y tú galope audaz Doña Juana Azurduy Me enamora la patria en agaz Desvelada recorro su faz El español, no pasará Con mujeres tendrá que pelear Juana Azurduy flor del alto Perú No hay otro capitán más valiente que tú Truena el cañón, préstame tu fusil Que la revolución viene oliendo a jazmín Tierra del sol en el ato Perú El eco nombra aun a Tupac Amaru Tierra en armas que se hace mujer Amazona de la libertad Quiero formar en tu escuadrón Y al clarín de tu voz atacar Truena el cañón, préstame tu fusil Que la revolución viene oliendo a jazmín Poemas a MACACHA GÜEMES: Pedro Blomberg quien en el tema Macacha Güemes le dice: “Besaron tus labios del héroe la frente En la noche oscura que lo vio caer Tembló entre las lanzas tu lágrima ardiente Magdalena Güemes, porque eres mujer!” Jaime Dávalos en la Serenata titulada La Macacha: “Mamita del pobrerío Palomita mensajera Que entre el gauchaje lucía Lo mismo que una bandera”. Julio César Luzzatto “MACACHA” Bebió chicha con el pueblo, Y cuando suene el clarín Galopará selva adentro, "Era un junco del minué Entre lapachos y cardos, La hermana del guerrillero. Entre chalchales y ceibos, Con su talle se enjoyaban Casi todas flores rojas, Los coloniales espejos. Como si el monte guerrero Al recibir su mistela Sólo floreciera sangre Se inclinaban los caballeros, A tono con esos tiempos. El zapato con hebilla Macacha, Macacha Güemes Y la camisa con vuelos. Se ha contagiado de hierro. Quién la viera en el caballo, Ya no la nombran los pianos; Con la chaqueta de cuero, Los pianos quedaron lejos. Cubrir vacantes de sangre Para siembre la ganaron En los rudos entreveros. Las espuelas sin sosiego, El poncho en sus hombres cura Los tambores de voz ronca Nostalgias del terciopelo. Y el clarín del entrevero Se han hecho para la guerra Sus ojos color de acero. Como su hermano Martín, Jineteó potros en pelo, Corrió ganado en el monte, Cristina y Evo homenajearon a Juana Azurduy Juana Azurduy de Padilla ya es Generala del Ejército argentino • Los mandatarios la rindieron homenaje y presidente Morales sorprendió por su elocuencia histórica sobre la vida de Juana Azurduy. • La imagen de la heroína boliviana estará al lado de Eva Perón y las Madres de la Plaza de Mayo en la Casa Rosada de Buenos Aires. LOS PRESIDENTES CRISTINA FERNÁNDEZ Y EVO MORALES HICIERON HISTORIA, VALORANDO EL PATRIOTISMO Y LA VALENTÍA DE LA AHORA GENERALA, JUANA AZURDUY DE PADILLA. El 25 de mayo de 1809 se sublevó el pueblo de Chuquisaca. Con su ejército de Leales, Juana Azurduy, llegó a ganar 33 batallas. El general Belgrano, sorprendido por la valentía de esa mujer, le regaló su sable favorito y obtuvo para ella el nombramiento de teniente coronel. El sable que quedó en Argentina, será entregado, el viernes, por la presidenta de ese país, Cristina Fernández de Kirchner, a su homólogo boliviano, Evo Morales. La injusticia histórica contra Juana Azurduy En una carta fechada en 1830 Azurduy escribe desde el chaco argentino: “A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...) Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V. E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V. E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". BIBLIOGRAFÍA Información extraída de Internet: Una biografía de Juana Azurduy: Elizabeth Fernández e Irene Ocampo. La gesta olvidada: Verónica Engler. Juana Azurduy, Coronela del Ejército Libertador, por Colectivo de Base de la central de trabajadores de la Argentina. Juana de América: Alberto Lapolla. Juana Azurduy: en La Teniente Coronela por Mario “Pacho” O’ Donell. Una figura de mujer con la inspiración intuitiva: Andrés Mendieta. Historia de Bolivia: Las Heroínas de La Coronilla. Mujeres extraordinarias 2: Macacha Güemes Juana Azurduy, “Macacha” Güemes, “heroínas de la Coronilla”: madres de Libertad. María Jimena Curbelo Zabala Uruguay “Truena el cañón/ préstame tu fusil/ que la revolución/ viene oliendo a jazmín” En el Planeta Tierra viven aproximadamente seis mil seiscientos setenta y un millones de personas, de las cuales tres mil trescientos sesenta y un millones son hombres y tres mil trescientos diez millones son mujeres. Estos números nos muestran una aparente igualdad entre ambos sexos ya que el 50.4% de la población lo constituyen los hombres y el 49.6% las mujeres. La diferencia es de apenas décimas. Sin embargo, la realidad nos muestra una situación muy diferente: ¿Cuántas mujeres políticas podemos nombrar? ¿Cuántas filósofas, militares, escritoras, poetas? Investigando, sólo podremos encontrar un puñado de nombres. Nuestros países lograron la independencia luego de cruentas e incontables en batallas. Pero ¿quiénes son los que aparecen en los libros de historia o inmortalizados en retratos? Hombres en la casi totalidad de ellos. Nuestra historia mundial y regional es una historia contada por hombres y en la que los partícipes son los hombres mientras que las mujeres son relegadas a un segundo plano. Entonces, aquella equidad ente géneros que expresan los números del comienzo se olvida y cuesta rescatarla del pasado. La versión galante y romántica de la historia del siglo XIX, nos habla de mujeres sumisas y obedientes, plegadas a las dos grandes virtudes femeninas de la época: callar y obedecer. Las mujeres fueron expuestas en la historia como seres decorativos que embellecían el hogar y para quienes sólo existía dos opciones decorosas en sus vidas: el matrimonio o el convento. Pero esta visión no refleja sus inquietudes humanas y menos la participación política que muchas de ellas ejercieron en medio de enormes contrariedades, represiones y adversidades. Sin embargo, no todas las mujeres se conformaron con ese papel que la sociedad patriarcal de los siglos pasados les imponía, sino que, desafiando esta estructura social, protagonizaron muchos acontecimientos que contribuyeron a la creación de nuevas naciones y países. Las mujeres de la independencia nunca fueron ángeles de hogar, muchas lucharon por la liberación de nuestras patrias aún a costa de su propio dolor y sufriendo la indiferencia de la mayoría de sus contemporáneos. Mujeres que apoyaron a su familia, fueron emisarias, espías y guerreras, que fueron 41 la “mitad invisible de la historia” , invisibles, pero trabajadoras y que dejaron su vida por su patria; mujeres con la libertad por horizonte. Por todo ello recordarlas es lo mínimo que nosotros, como hijos de su esfuerzo, podemos hacer, y lo que este trabajo de investigación tiene por meta. Juana Azurduy, “Macacha” Güemes y las heroínas de la Coronilla simbolizan a la revolución americana, lo popular y lo nativo de la gesta emancipadora; simbolizan al pueblo en armas que pelean junto a los hombres, igual o mejor que ellos y simbolizan también el nacimiento de la independencia de nuestro continente. 41 Vitale, Luis. La mitad invisible de la historia. El protagonismo social de la mujer latinoamericana, Buenos Aires, Editorial Sudamericana- Planeta, 1987. Armadas con hondas, macanas, boleadoras, lanzas, a fuerza de coraje y firmeza. Con la decisión de luchar hasta el fin por la independencia y contra la opresión, por la justicia y contra el sometimiento de los semejantes; son madres de libertad. El Alto Perú Silencioso y privilegiado testigo de esta revolución de hombres y mujeres que cambiarán el destino de América es el Alto Perú. Esta es la denominación que las primeras expediciones españolas de 1538, en tierra de Charcas, utilizaron para designar las ricas tierras que en el periodo incaico conformaban la región del Collasuyo. La riqueza de Potosí, la instauración de la Audiencia de Charcas, el Arzobispado de La Plata y la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca dieron consistencia a lo que sería conocido como Alto Perú y que hoy forma parte de Bolivia. Inicialmente Charcas se encontraba bajo la administración del Virreinato del Perú con sede en Lima, hasta 1776, fecha en que se creó el Virreinato del Río de la Plata con sede en Buenos Aires. Tras el primer grito libertario en 1809 y la creación de la Junta de Buenos Aires en 1810, las facciones realistas de Charcas y Potosí decidieron pedir auxilio al virrey del Perú, poniendo a la Audiencia de Charcas bajo su tutela. Pero con la llegada del primer ejército de auxilio de Buenos Aires y los levantamientos de Cochabamba, Oruro y Charcas, la Audiencia de Charcas fue nuevamente reincorporada a Buenos Aires. Posteriormente, la región será disputada en repetidas batallas hasta 1824, en que cayó el último ejército realista del Perú y Charcas decidió constituirse en república independiente el 6 de agosto de 1825. El Alto Perú como parte del Virreinato del Río de la Plata estaba integrado por las intendencias de: Cochabamba, Chuquisaca o también llamada Charcas, La Paz, Potosí y Puno Corresponden al Altiplano andino o Puna, poblado por las etnias colla, aymará (principalmente en La Paz), uru (en la cuenca del Lago Titicaca), y otras etnias andinas que, en lugar del aymará hablaban o fueron forzadas a adoptar el quechua como idioma al producirse las conquistas incas en las zonas de Cochabamba, Chuquisaca y Potosí. Una vez que todos estos territorios, se separaron de las Provincias Unidas del Río de la Plata se 42 constituyeron en la República de Bolivia. Charcas o Chuquisaca En el territorio de los indios Charcas se fundó la ciudad de Chuquisaca (llamada luego La Plata y hoy Sucre) en 1538. Fue luego escenario de la rebelión de Gonzalo Pizarro y empezó a tener importancia a partir de 1545, cuando se descubrió la gran mina del Potosí, un gran cerro de plata a cuyo amparo surgió una de las ciudades más populosa de toda América. La Villa imperial, que así se llamó, llegó a tener 120.000 habitantes, albergando un teatro, 36 casas de juego y 14 salones de baile. En el año 1561 se fundó la Real Audiencia de Charcas en Chuquisaca, asumiendo esta población cierta relevancia regional, sobre todo después de establecerse allí la Universidad de San Francisco Javier (1624) por los 42 http://es.wikipedia.org/wiki/Alto_Per%C3%BA jesuitas, al abrigo del Colegio de Santiago. Esta Universidad adquirirá gran importancia posteriormente al extender las ideas revolucionarias de “La Enciclopedia” e impulsar los movimientos revolucionarios en América del Sur. En ella se formaron la mayoría de quienes protagonizaron la historia de las independencias argentina y altoperuana: cabe nombrar nada menos que a Castelli, Moreno, Monteagudo entre otros. Chuquisaca fue el gran corazón minero de Sudamérica y lugar de peregrinaje de todas las personas que iban a extraer plata a Potosí. A cambio 43 de la plata llegaban ganados, alimentos, manufacturas costosas y baratas y un sinfín de aventureros . Charcas interesa además porque un 12 de julio de 1780 vio nacer a una niña que años más tarde se convertiría en una de las mayores guerreras que la historia recordará: Juana Azurduy. Juana Azurduy/ flor del Alto Perú: / no hay otro capitán/ más valiente que tú. Desde niña rompió con los esquemas a los que comúnmente debían adaptarse las jóvenes de Charcas, gozando en la vida de campo de libertades inusitadas para la época. Compartía mucho tiempo con los indios que trabajaban con su padre, observándolos con curiosidad y respeto, comunicándose con ellos en quechua aprendido de su madre y participando de sus ceremonias religiosas. De hecho, Juana llevaba sangre indígena en sus venas, ya que su madre era una chola de Chuquisaca que alcanzó una buena situación económica, ya que su padre poseía bienes y propiedades. Su linaje mestizo le aportaría una singular belleza que actuaría tiempo después en un factor de atracción para los que se unieron junto a ella en la lucha. “De aventajada estatura, las perfectas y acentuadas líneas de su rostro recordaban el hermoso tipo de las transtiberianas romana. Tenía la hermosura amazónica, de un simpático perfil griego, en cuyas facciones brillaba la luz de una mirada dulce y dominadora". (Ver imagen Nº1) Pero además de los rasgos, de su madre heredaría el particular cariño a la tierra, la defensa de su casa y de los suyos, la honradez y el sacrificio. De su padre, Matías Azurduy aprendió a cabalgar a galope lanzado, sin temor, con agilidad, contribuyendo así al carácter de quien luego sería una indómita guerrera. Su vida en el campo y en especial el compartir mucho tiempo con su amado padre le dieron la posibilidad de desarrollar una inteligencia notable, organizando un pensamiento muy claro y firme. Su infancia y adolescencia son épocas de grandes acontecimientos. A los siete años de edad muere, sin causa conocida, su madre dejándola a ella y a su hermana Rosalía al cuidado de su padre. Pero este hecho no es menor, ya que poco tiempo después también muere de forma violenta su padre, envuelto en problemas amorosos. De esta forma comienza a tejerse alrededor de Juana un trágico destino, que la condenaría a perder uno a uno a sus seres queridos. Es probable también que la desaparición de sus padres haya ayudado a nacer en ella un intenso deseo de venganza que luego, por múltiples razones, dirigirá contra los sectores más poderosos y opresores de su sociedad. Ahora sin padres, Juana y Rosalía quedan a cargo de Petrona Azurduy, su tía paterna quien en vano intenta mantener a esas niñas cerca de las costuras y bordados. La mala relación con su tía, la quietud y la tiranía a la que está sometida, hacen que Juana poco a poco, deje de hablar. Rosalía, por su parte, era demasiado pequeña y doña Petrona la dominaba a su arbitrio. Para solucionar la tensa situación que viven con su sobrina mayor, Petrona y su esposo, deciden enviar a Juana al Monasterio de Santa Teresa para dominar el espíritu aventurero que advierten en la adolescente de 17 años que tienen a su cargo. Juana acepta la propuesta del monasterio porque estaba convencida de que cualquier oportunidad era mejor que vivir junto a sus tíos. A su vez, creía que la religión le otorgaría un papel 43 http://www.artehistoria.jcyl.es/historia/contextos/1579.htm relevante en la sociedad chuquisaqueña, de prestigio y en especial, de poder, para luchar por los derechos de los marginados. Estaba decidida a cambiar su destino que como mujer le esperaba en su ciudad. Sin embargo, la disciplina, las oraciones y la limpieza evidencian que la vida conventual no es para ella. Eterna amante de la libertad, se siente morir entre las paredes del convento, ante una opresión a la que sólo sabe rebelarse. Sus compañera del convento cuentan que lo único que parecía captar su atención eran las narraciones sobre San Luis el Cruzado, Santa Juana de Arco o San Ignacio de Loyola, todos ellos santos guerreros, ya que según las propias palabras de Juana: “me gustan los combates, oh!, 44 daría mi vida por hallarme en una de esas batallas donde tanto sobresalen los valientes” . Es por ello que Juana se cuestiona la utilidad de la vida de claustro y opine sobre el apoyo de la Iglesia a los sectores poderosos, terminando en un tremendo escándalo con la madre superiora que decidió expulsarla del Monasterio. Sin lograr completar un año en aquel lugar regresa a su casa en Toroca con un espíritu mucho más exaltado a la espera de que algún suceso le quitara la monotonía del convento. En el cantón de Toroca vuelve a entrar en contacto con los indios, reencuentra la libertad y la acción, recupera el quechua y aprende al aymará, trabaja en el campo, en las tareas de la casa y de vez en cuando visita a Eufemia Gallardo, la madre del que será su esposo, Manuel Padilla, para combatir la soledad de su gigante casa. Los Padilla eran vecinos de los Azurduy, en Toroca, también hacendados. Don Melchor Padilla era estrecho amigo del padre de Juana, y ellos y sus hijos, Pedro y Manuel Ascencio se ayudaban en las tareas campestres y compartían las fiestas. Eufemia recibe en su casa a Juana con gran cariño y simpatía, planeando el encuentro de la joven con su hijo Manuel, ella es quien comenzó a escribir la historia nómada de los amantes guerreros. El encuentro entre estos dos es impactante para ambos, se sorprenden de los cambios que habían experimentado en esos años de distanciamiento. Manuel reunía todas las virtudes que Juana buscaba en un hombre; era alto, musculoso pero de facciones armónicas, imponía respeto con una voz encantadora y ronca. No obstante, eran sus pensamientos lo que más atraía a Juana, a él también le preocupaba la situación de los indígenas y del trato que recibían de los demás sectores de la sociedad. Escuchará los relatos de Manuel Padilla, los cuales ejercerán una enorme influencia sobre su formación. En especial el relato de una escena a la que Manuel asistió cuando era pequeño: la ejecución del aymará Dámaso Catari, por sublevar a miles de indios de la región, El jefe rebelde había sido apresado por la traición de uno de sus jefes y ejecutado en la plaza de Chuquisaca mientras era insultado y apedreado por la mayoría de las personas pertenecientes a los sectores más honorables. Ambos compartían la misma filosofía de vida, amaban la libertad y deseaban la justicia, sentían admiración el uno por el otro y se amaban respetuosa e intensamente. Cuando Manuel tiene 30 años y Juana 25 se casan en una relación tan significativa que no le hacen dudar a ésta última ni un segundo cuando su marido emprende la lucha contra los opresores, se le une en batalla y pelean de igual a igual hasta el último segundo de su vida juntos. Manuel Ascencio siempre simpatizó con los "abajeños", como se apodaba a quienes provenían del Río de la Plata y había conocido a varios de ellos en Chuquisaca: Moreno, Monteagudo, Castelli y otros que eran estudiantes en la universidad San Francisco Xavier. Compartía con ellos agitadas reuniones, eran amigos del joven Padilla, los mismos que influirían en su pensamiento y que escribirían páginas importantes en la historia de nuestras tierras. Eran muy apasionados, fervorosamente anti -españoles, convencidos de que la revolución sólo era posible a través de 44 O' Donnell, Mario. Juana Azurduy La Teniente Coronela. Planeta. 1998 la violencia, llegando a tintes radicales como el adoptado por Mariano Moreno. Monteagudo, por su parte, también alentaba a la revolución: "Habitantes del Alto Perú: Si desnaturalizados e insensibles habéis mirado hasta el día con semblante tranquilo y sereno la desolación e infortunio de vuestra desgraciada patria, retornad ya del penoso letargo en que habéis estado sumergidos; desaparezca la penosa y funesta noche de la usurpación y amanezca el luminoso y claro día de la libertad. Quebrantad las terribles cadenas de la esclavitud y empezad a disfrutar de los deliciosos encantos de la independencia: vuestra causa es justa, equitativos vuestros designios". De estos ilustres pensamientos beberán Azurduy y Padilla y serán el principal motivo de su lucha. El instinto maternal siempre caracterizó a Juana Azurduy, quien siempre se preocupó en que sus hijos crecieran fuertes y sanos. En 1806 nace su primer hijo, Manuel, rápidamente nacerá Mariano y a continuación las dos niñas: Juliana y Mercedes. El amor que sienten por sus hijos también incentiva sus pensamientos de liberación; no desean que esos niños que tanto aman crezcan en la misma cruel sociedad en la que ellos crecieron. Merecen un mundo más justo y corresponde trabajar en pos de él. El deseo de darles un futuro mejor comienza a tomar forma el 25 de mayo de 1809, cuando una asonada en Chuquisaca depone al gobierno virreinal. En este momento Juana y su esposo se comprometen con el cambio y con la concepción del mundo al que aspiran, participando de la revuelta. Desde La Paz también llegan noticias de revueltas libertarias pero todos estos movimientos son ahogados en sangre por José Manuel de Goyeneche. Sin embargo y a pesar de esta derrota un nuevo destino estás trazado; la revolución aparece como una realidad cada vez más necesaria. Juana se dispone a seguir a su esposo por zonas de luces y de sombras, de violencia y pasión; por amor; a su patria y a sus hijos. Será en 1810, el 14 de septiembre cuando Cochabamba se releve de los opresores hispánicos y se una a la Junta Revolucionaria de Buenos Aires, cuando Manuel Padilla se ponga bajo las órdenes del rebelde caudillo Esteban Arce, como comandante de sus fuerzas. Sin embargo, aunque pocos lo vieran por ese entonces el levantamiento del 25 de mayo de 1810 tuvo su inspiración más directa en la asonada chuquisaqueña del año anterior. Una ves más la rebelión será sofocada por los ejércitos realistas, desatando una dura represión contra Juana y su familia que apoyan a las fuerza lideradas por Juan Castelli con la intención de apagar el foco que resiste a favor del Rey. En este tiempo los varones, por supuesto, eran los abanderados indiscutibles de la gesta independentista. Las chicas, en todo caso, participaban sin nombre propio, cosiendo banderas o arrojando aceite caliente desde las azoteas cuando las tropas reales se abalanzaban contra la insurgencia criolla. Como ya se vio el espíritu de Juana no era el de una mujer que se conformaba con dar comida y alojamiento a los revolucionarios, su más ferviente deseo era emprender personal y directamente la lucha. También piensa en lo más conveniente para sus hijos, pero finalmente decide que debe trabajar para que ellos luego puedan gobernar la ciudad en la que nacieron, es su trabajo entregársela libre de cualquier otro poder. Cuando la idea de marchar a la guerra ya ocupa el pensamiento de Juana, su propiedad es confiscada y junto a sus cuatro hijos, son apresados por las fuerzas godas, utilizándolos como una trampa para capturar a Padilla. Pero éste, haciendo muestra del inmenso amor que sentía por su familia los rescata y se alojan en un refugio en las alturas de Tarabuco, custodiados por los indios, quienes conocían plenamente esas tierras. Este refugio se convertirá en el lugar de entrenamiento de Doña Juana; sus ayudantes le confeccionaban muñecos de paja que ella atravesaba con las espadas que su marido desechaba. También se introdujo en el milenario arte de las boleadoras, que aprendió a manejar con gran certeza. Estos ejercicios y las cabalgatas que su padre le había enseñado, transformaron poco a poco a Juana Azurduy en una fuerte y ágil guerrera que pocos mese después vería concretar su sueño luchando codo a codo con cientos de hombres. Una figura que será fundamental en el destino de Juana será Manuel Belgrano, quien llegaba desde Buenos Aires dispuesto a no cometer los mismos errores que su antecesor, Balcarce y a eliminar de una vez y por siempre a los realistas del Alto Perú. Consideraban al “abajeño” como un buen hombre, y especialmente justo y respetuoso de sus costumbres, por eso los esposos Padilla se presentaron ante él, quien reconoció en ellos una gran valentía y con los que mantuvo una gran amistad. Desde ese encuentro, Juana se embarga por una poderosa fiebre revolucionaria que la impulsa a convocar voluntarios para unírsele a la lucha por la independencia llegando a reunir diez mil soldados. La imagen que esa mujer desprendía era mística, fascinante a la vez de cautivante. Montaba con audacia un potro apenas domado, y utilizaba chaquetillas militares que exaltaban la belleza ya descrita de Juana. Su feminidad decide a cientos de hombres a seguirla, pero también a muchas mujeres, que luego formarían su fantástico ejército de amazonas. Este ejército estaba compuesto de indias, mestizas y criollas dispuestas a dar la vida por la liberación de sus pueblos del yugo español. “Todo lo que come se 45 convierte en valentía. Los indios no la llaman Juana. La llaman Pachamama, la llaman Tierra” Así la describe Eduardo Galeano y así sucedía en realidad. Los mismo aymaras y quechuas que despertarían la curiosidad en la pequeña Juana, son ahora los que se maravillan con esa mujer, en la que ven reflejada a la madre Tierra, a la que amaban por ser suya y la que los godos les habían arrebatado. “Tierra en armas que se hace mujer, / amazona de la libertad.” Bajo las órdenes de Belgrano comenzaron desenvolviendo tareas menores como el transporte de cañones y víveres siendo testigos de una nueva derrota. Juana Azurduy se encontraba furiosa ante esa situación, ya que sus hombres no habían participado de la lucha, al concebirlos como poco disciplinados. Por este motivo decide organizar un batallón que pasó a denominar como “Los Leales”, enseñando personalmente tácticas de guerra guiada por textos prestados por Belgrano. Su particular fuerza de espíritu contribuía a la mística de su figura, era adorada por los indios. En poco tiempo, el prestigio de Juana Azurduy se incrementó a límites casi religiosos: los soldados de Padilla veían en ella la conjunción de una madre y esposa ejemplar con la valerosa luchadora; los indígenas prácticamente la convirtieron en objeto de culto, como una presencia vívida de la propia Pachamama. En campaña vestía pantalón blanco de corte mameluco, chaquetilla escarlata o azul, adornada con franjas doradas y una gorra militar con pluma azul y blanca, los colores de la bandera del general Belgrano. Los Padilla exhibieron el azul y el blanco en vestimentas e insignias en solidaridad con el general porteño y en desacuerdo con el Triunvirato de Buenos Aires, que a través de Bernardino 46 Rivadavia obligó a Belgrano a abjurar de su bandera y hacerla desaparecer. En combate siempre vestía, una túnica escarlata con franjas y alamares de oro y, un ligero birrete con adornos de plata y plumas blancas, (ver imagen Nº 2) afirmando su condición de mestiza y sembrando el terror entre la soldadesca española, ya que fue capaz de ir a combate, con sable en mano (el que le diera el General Belgrano, con el grado de teniente coronel) y, su hija, recién nacida en el otro brazo. Este sable regalado por Belgrano contiene una gran historia ya que fue entregado por el general luego de la derrota sufrida en Charahuayto. En ese enfrentamiento con los realistas, “Los Leales” de Azurduy lucharon de forma valiente y tenaz, a pesar de contar sólo con hondas y macanas para su defensa soportando durante largo tiempo las embestidas de sus opositores. Belgrano, emocionado por el coraje de esos hombres y por la entrega de Juana, le obsequia su espada, que ella lucirá hasta su última batalla. Pero además, luego de esa lucha los líderes altoperuanos deberán arreglárselas por sí mismos sin esperar demasiada ayuda de tropas 45 46 Galeano, Eduardo. 1816, Tarabuco. O' Donnell, Mario. Juana Azurduy La Teniente Coronela. Planeta. 1998 abajeñas, que se retiran a Buenos Aires a raíz de las derrotas sufridas. Una nueva etapa comenzará en la acción de Juana y su esposo, dando coherencia a una estrategia bélica: la guerrilla o guerra de republiquetas. Con una amplia zona en la que debían actuar, ( la que comprende en la actualidad el departamento de Chuquisaca, exceptuando la provincia de Cinti) desarrollan una táctica trágica por sus sangrientas represalias y también heroica por sus oscuros sacrificios, por la humildad de sus caudillos, de sus combatientes y de sus mártires. Es importante destacar que si bien aparenta una estrategia militar, estas guerrillas obedecen al impulso y a la pasión de aproximadamente ciento dos caudillos que lucharon durante quince años sin cesar ni siquiera un día de pelear. Padilla, Azurduy y los cien caudillos indios y gauchos como Vicente Camargo, el Cacique Buscay, el Coronel Warnes, el padre Muñecas, Francisco Uriondo, Angulo, Zelaya, el Marqués de Tojo, el Marqués de Yavi, José Miguel Lanza, Esquivel, Méndez, Jacinto Cueto, el indio Lira, Mendieta, Fuente Zerna, Mateo Ramírez y Avilés entre muchos otros, junto a Güemes en Salta, fueron quienes impidieron que luego de las sucesivas derrotas de los ejércitos porteños al Norte, los realistas pudieran avanzar sobre Buenos Aires y destruyeran la revolución. Sólo nueve caudillos sobrevivieron, pero ninguno de ellos capituló ni pidió tregua. Fue una guerra popular y por lo tanto anónima (a pesar de unos poco nombres rescatados del olvido), pero por sobre todo, fue una guerra esencialmente de indios, de caudillos, de gauchos, de los patriotas de a caballo, del pueblo puro de América. Ese mismo pueblo que las tropas realistas primero, y porteñas después, destruirían una y otra vez en la Banda Oriental, en el litoral o en el interior y finalmente en el Paraguay. Además eran guerrilleros, caudillos militares y habían ganado su grados -Manuel Ascencio Padilla fue designado Coronel del ejército del Norte cuando su cabeza estaba ya clavada en una pica. Juana Azurduy fue nombrada Teniente Coronel del ejército argentino a pedido de Manuel Belgrano- en el combate. Reivindicar su memoria es reivindicar lo “gaucho”, la "barbarie" condenada por Sarmiento, la lucha de los pobres. Es reconocer que los indios, los negros, los esclavos, los mestizos no eran inferiores sino que por el contrario, lucharon con mayor tenacidad y desprendimiento que la clase culta porteña por la libertad. Es reconocer por fin, a mujeres y hombres que destruyen ejércitos completos, superiores en número y armamento que lucharon hasta ver brillar en el cielo de su patria el hermoso sol de la libertad, Las republiquetas las constituían cada aldea, cada pueblo, cada montaña, que se comunicaban entre si por señales de fuego. Una hoguera visible en alguna altura, orientada en tal o cual dirección, encendida con maderas diversas, desde muy larga distancia avisaba a los guerrilleros la ruta que seguían las fuerzas realistas, su composición y hasta su número. Cuando Juana ya se encontraba en su refugio de La Laguna junto a su familia recibe una visita inesperada que marca el alcance que su figura como guerrera había alcanzado y el respeto que su nombre generaba. Fue así que el cacique Cumbay la visitó en su refugio, y ante ella inclina su cabeza en señal de sumisión mientras que sus hombres disparan al cielo sus flechas. Juana frente a tal hecho, le regala el poncho que trae puesto en señal de agradecimiento. El encuentro termina con un pacto de apoyo recíproco que ejemplifica la gran relación que Azurduy tenía con los indígenas y el respeto que éstos sentían por ella. La presencia incondicional del cholo Hualparrimachi junto a los esposos Padilla también es muestra de ello, quien cuidaba de los niños y participaba en las batallas. A pesar de encontrarse desprotegidos por las tropas abajeñas, la lucha contra la opresión y la justicia continuaba. Emboscaban a los alcaldes cuando se excedían en el cobro de multas e impuestas y recuperaban el dinero para repartirlo luego en la ciudad. Los realistas cansados de luchar con Padilla le envían una propuesta en la que ofrecían honores, garantías y cargos muy bien remunerados para que abandone la lucha. Pero Juana es muy firme en su posición y como respuesta envían la siguiente nota: "Con mis armas haré que dejen el intento, convirtiéndolos en cenizas, y que sobre la propuesta de dinero y otros intereses, sólo deben hacerse a los infames que pelean por su esclavitud no a los que defienden su dulce libertad como yo lo hago a sangre y fuego” También hubo momentos en la vida de esta impresionante mujer en los que no combatió alternando su honda relación con Padilla y su maternal dedicación a sus hijos con la organización de un escuadrón al cual dio el nombre de "Húsares". Dotándolos también de un uniforme precariamente concebido pero suficientemente marcial, para ser lucido con orgullo y altivez. Este regimiento tuvo su bautismo de sangre el 4 de marzo de 1814 en la batalla de Tarvita. Padilla hizo frente con sus hombres a un regimiento realista pero fueron Juana Azurduy y sus “Húsares” los que definieron la acción en su favor. Hay una cuestión sobre la vida de Juana que resulta especialmente llamativa; su maternidad, el modo particular de conjugar las dos experiencias más fervientes y que ella decidió vivir conjuntamente: ser madre y ser guerrera. Es de suponer que cuando Juana se decidió a participar en la lucha armada no imaginaba que sus hijos deberían pagar grandes consecuencias, las peores, ni que Manuel, Mariano, Juliana y Mercedes iban a sufrir estoicamente la vida de guerrilleros, a pesar de las incontables huidas, de los refugios precarios, del hambre, del frío y de gran parte de su vida sin la compañía de sus padres. Como su naturaleza indígena lo marcaba sentía un profundo vínculo con sus hijos y su amor era inconmensurable. Cada niño era diferente y ella los amaba a cada uno con la misma intensidad pero también amaba sus diferencias. Manuel tenía el mismo espíritu indomable de la madre, y como ella admiraba la naturaleza: siempre encaramado a algún árbol, demostrando a los demás que nada le era imposible. Si alguna rama se partía y lo arrojaba sobre el duro suelo de pedregullo nunca permitía que su rostro expresase el más mínimo dolor. Físicamente era muy parecido a su padre, en su pequeño cuerpo ya se adivinan músculos y tendones vigorosos, y cuando se enfadaba su mirada era fuerte y altiva. A Mariano en cambio, le gustaba jugar con amazonas y soldados, y su encanto residía en poseer un carácter sereno y seductor, imponiendo su voluntad de forma casi imperceptible. Juliana mostraba la tez cobriza coloreada por su ascendencia indígena e imitaba en todo a su madre. En cuanto a Mercedes, le encantaba ir de los brazos de Hualparrimachi a los de alguna chola sonriente, en incesantes y alborozadas idas y vueltas que no retaceaban revolcones, siempre risueña con ese carisma encantadoramente infantil. Los niños habían desarrollado una especial relación con Hualparrimachi, quien les enseñaba cómo sacarle punta a una flecha, cómo tensar un arco, cómo atravesar peces con una lanza, cómo cazar monos y cómo trepar hasta la copa de los árboles para vigilar, ocupando el lugar que los propios padres de los niños no podían ocupar debido a las batallas que libraban. Pero esta vida feliz y saludable se fue deteriorando por las sucesivas marchas y las precarias condiciones de vida en la que vivían. Perdían sus fuerzas, su piel palidecía y sus cuerpos adelgazaban incapaces de soportar ese ritmo de vida que sólo los ágiles guerreros podían llevar. Por este motivo Juana decide refugiarse con los niños en el valle de Segura, acompañada de unos pocos guerrilleros, mientras que Manuel Padilla continúa el viaje. Pocos días después, en marzo de 1814, se entera de que su esposo ha sido atacado y decide que deben cambiar de lugar ya que su refugio no ofrece las garantías necesarias. No le queda entonces otra alternativa que internarse en los pantanos del valle de Segura, de agua verdosa e infestada de insectos y de alimañas. Es tan inhóspito el lugar que la mayoría de los guerrilleros comprometidos ante Manuel Ascencio de custodiar a su familia desertan y buscan zonas más saneadas. Por primera vez Juana se siente impotente ante enemigos a los que no puede vencer: mosquitos y fiebre palúdica. Atada eternamente al instinto de protección de esos niños decide salir de la selva en busca de algún rancho con abrigo y alimento para sus hijos. Sin embargo, el peor de sus temores se confirma, ya que Manuel, el mayor, a pesar de ser el más robusto cae preso de las violentas fiebres de la malaria y va desmejorando hora tras hora ante la angustia de su madre. Su hijo batalló contra la enfermedad estoicamente, cuando su madre lo desvistió para ponerle paños fríos y acariciar su piel descubrió horrorizada cuán enflaquecido estaba, cuánto había sufrido el niño sin quejarse en esa vida de privaciones a que la lucha guerrillera los sometía. Juana ya no era aquella amazona invencible, sino una madre angustiada, inmensamente sola y destruida ante la situación de sus hijos. También Mariano estaba gravemente enfermo y fue más que evidente para la jefa guerrillera que igual destino les aguardaba a sus otros hijos. Luego de mucho sufrimiento murió Manuel pero no hubo mucho tiempo para lamentos, Mariano el niño reflexivo y de perspicacia asombrosa para sus cortos años, físicamente de impresionante parecido a la madre, agoniza hasta morir. Sin consuelo Juana cava en el mismo lugar donde se refugiaban dos fosas precarias para sus hijos muertos. Con dos ramitas fabrica una cruz para indicar donde descansarán para siempre dos de sus seres más amados, siendo un momento que la perseguirá toda su vida. Un profundo sentimiento de culpa la embargó, ya que se sentía totalmente responsable del trágico destino de sus dos hijos, condenándose por haber permitido tal desenlace. Cuando Manuel Padilla la encuentra ensangrentada y con su mirada perdida adivina que algo malo había sucedido. Cuando conoce lo ocurrido lo invade la furia, increpa violentamente a su esposa y le reprocha que no hubiera sido capaz de cuidar a sus hijos. Pero mayores eran sus propios reproches, buscando en vano satisfactorias justificaciones para el sacrificio que la lucha atroz había destinado a niños inocentes que no habían elegido esa vida, sino que les había sido impuesta por la decisión de sus padres. Doña Juana no podía evitar imaginar a los hijos de las damas chuquisaqueñas como ella, entibiados por el fuego crepitando en sus hogares, llevando la misma vida prolija y segura que su condición social y económica les hubiese permitido a Mariano y a Manuel, cumpliendo con un destino acomodado a pesar del alboroto en la región; a veces, muy de vez en cuando, el enfrentamiento, entre realistas y patriotas podía alterar sus vidas, quizás con algún cañonazo lejano o con algún relato de desgracias próximas. Por su parte las dos hijas que les quedaban habían sido apresadas en un rancho dentro de la selva y Juana, Hualparrimachi y Manuel Ascencio se abalanzaron como una tromba sobre el rancho, a puño limpio, hiriendo y matando. Mercedes y Juliana yacían con sus muñecas y sus tobillos atados con ligaduras a los barrotes de una cama, y desde allí, a través de sus lágrimas, presenciaron cómo sus padres lucharon largo rato hasta que fueron capaces de liberarlas. Con las niñas en los brazos partieron en busca de refugio percibiendo que los cuerpos hervían y temblaban a causa del paludismo. Y fue así como Juliana y Mercedes, también terminaron muriendo a pesar de que esta vez eran tres los que intentaron ayudarlas en sus esfuerzos por sobrevivir. En una semana trágica, Juana ve morir a sus cuatro hijos sin poder hacer nada, lamentando el destino que había trazado inconscientemente para sus niños. Fue la batalla más dura y más cruel que enfrentó, batalla en que, lamentablemente, le tocó perder. Probablemente, esta guerrera se peguntará durante su larga vida si todo ese sacrificio realmente valió la pena, si no hubiera sido preferible llevar la cómoda vida de toda dama chuquisaqueña. Pero, también probablemente la respuesta haya sido: sí, valió la pena. Consiente que para alcanzar objetivos es necesario renunciar a muchas otras cosas, su verdadero horizonte consistía en liberar a su pueblo y por eso fue capaz de reunir nuevas fuerzas y continuar luchando, para encontrar en la muerte de sus hijos un verdadero sentido. A su vez, y como algunos pensaron, tanta muerte insoportable trae la vida: Juana está nuevamente embarazada cuando combate el 2 de agosto de 1814 con Padilla y su tropa, en el cerro de Carretas. Las fuerzas que movían a los esposos guerreros eran ahora brutales, despiadadas, ahora debían vengar la muerte de sus hijos. Ninguno intervenía para la liberación de prisioneros, era la propia Juana la que avanzaba violentamente contra sus enemigos, la táctica empleada no es la del sigilo, la premisa es matar o morir. Las batallas desarrolladas en al Alto Perú son de las más sangrientas que la historia del continente ha conocido. "Padilla es cruel, es sanguinario (...) La guerra se ha desatado bárbaramente; ya no es la ley del Talión la que prima, sino una ley más inhumana, por un muerto se exigen dos, por dos, 47 cuatro", afirma Joaquín Gantier . En medio de tanta crueldad llegamos a agosto de 1814 con Juana Azurduy en el Cerro de Carretas, en un lugar situado sólo a dos leguas de Tarabuco. En este lugar los guerrilleros esperaron al ejército del coronel Sebastián Benavente. El 2 de agosto de 1814 se produce el encuentro entre los dos batallones. Como siempre, la diferencia de armamento entre ambas fuerzas es importante, ya que a las numerosas bocas de fuego se contraponían las huaracas, las lanzas y las flechas indígenas. Durante tres días Juana Azurduy luchó sin parar, contando con la ayuda de Hualparrimachi, ya que su esposo Padilla no se encontraba en el lugar de combate. La brava amazona atacada por varios soldados enemigos, se defendía con una valentía que arrancaba gritos aterradores de su garganta. Cuando Padilla llega al lugar, observa como una carga de fusil derriba al valiente cholo que lo había acompañado a sol y a sombra, incondicionalmente. Otra vez Juana Azurduy debió enfrentar la muerte de uno de sus seres más queridos, sin que su corazón nunca desarrollase útiles callosidades que la hubiesen vuelto insensible. La guerra se torna cada vez más brutal y parecía no tener final por lo que Padilla decidió dividir sus tropas, dejando una de sus columnas al mando de Juana. Azurduy debía asaltar Tarabuco y ocupar la ciudad. Mientras la muerte acechaba a cada paso sobre la tierra, en el vientre de Juana una nueva vida luchaba por nacer. Cuando Juana comenzó a sentir las primeras contracciones partió acompañada por indias hacia las orillas del Río Grande, donde dio a luz a Luisa Padilla. Mientras el cuerpecito era lavado en las turbias aguas del río y Padilla llegaba al encuentro de su nueva hija las fuerzas realistas alcanzaron el sitio. Entre tanto, doña Juana y su corte pudieron alejarse más de doce leguas del lugar del combate, llevando consigo las cajas de monedas y objetos valiosos capturados al enemigo. Pero Padilla, temiendo que su esposa y su hija recién nacida no se hubiesen alejado bastante a causa de su estado, con pocos guerrilleros y armas decidió enfrentar a los realistas y luego acudió junto a su mujer e hija. Los hombres que custodiaban a Juana presumieron que su jefa estaba débil y que era el mejor momento para arrebatarle el botín de guerra con el que contaban las tropas revolucionarias y que Juana custodiaba con celoso fervor. Además, la cabeza de Juana tenía precio, 10.000 pesos en plata. Los traidores al mando de Loayza complotan y arremeten contra la teniente coronela, que se alza frente a ellos con su hija en brazos decidida a vender cara su vida, pero también a marcar un nuevo destino lleno de vida para su recién nacida hija. (Ver imagen Nº 3) Ordenó el ataque en quechua a su tropa de indios amigos y sus ojos desprendían tal ferocidad que parecía que la Pachamama había recuperado sus fuerzas. Ella misma, con su espada, hirió con su sable en el cuello a Loayza, monta a caballo con la pequeña Luisa en brazos y, juntas, se zambullen en el río. Logran llegar con vida a la otra orilla. Restan todavía algunos desprendimientos y varias pérdidas: la hija recién nacida se queda a cargo de una india, Anastasia Mamani, que la cuidará durante el resto de los años en que su madre continúe luchando por la independencia americana. 47 Gantier, Joaquín. “Doña Juana Azurduy de Padilla”, La Paz, 1973 Una de las pocas experiencias gratificantes que Juana Azurduy vivó se concretó cuando expulsaron a los godos de Chuquisaca, su ciudad natal, a la que ingresó por su calle principal lentamente mientras era vitoreada por sus conciudadanos. Detrás de ella y en correcta formación desfilaban los ”leales” y los “húsares” junto a las bravas amazonas que impresionaban por su ferocidad. Los Padilla prepararon a la ciudad para el ingreso de don Juan Antonio Álvarez de Arenales, quien lo hizo algunos días después. Quiero formar/ en tu escuadrón / y al clarín de tu voz / atacar. Es indudable la fortaleza de Juana Azurduy, una mujer con firmes convicciones e ideales que siempre estaba apoyando a su esposo, aconsejándolo incluso en momentos cruciales como cuando le ofrecieron a Padilla un soborno. Al acceder Padilla a la entrevista con los realistas Doña Juana lo acusó de ingenuidad y le advirtió que si su actitud trascendía, como era muy posible que sucediese dado el estado de gran alerta de toda la gente de la región, los guerrilleros mal interpretarían sus motivaciones. Tal como su esposa predijo, cuando Padilla regresaba de la reunión fue rodeado por una turba rabiosa que exigía su cabeza. Dentro de la casa donde a duras penas había logrado refugiarse, en precaria situación, encerrado con llave, su esposa le exigió juramento de que todo lo que se decía de él era mentira. Desde ese momento los esfuerzos altoperuanos se multiplicaron porque, sin las tropas porteñas, quedaron a la merced de los realistas. A pesar de esto, es éste también un período de triunfos y de victorias de las fuerzas irregulares de los Padilla sobre los cada vez mejor organizados y bien pertrechados ejércitos del rey. Entre las más importantes se encuentra la de El Villar, en la que, por su valor y por haber conquistado una bandera, doña Juana es premiada, a instancias de Belgrano, con el grado de teniente coronel del Ejército Argentino, en virtud de su "varonil esfuerzo", lo que la colmará de orgullo. Juana avanzaba casi en línea recta, rodeada por sus feroces amazonas descargando su sable a diestra y siniestra, matando e hiriendo. Cuando llegó a donde quería llegar, junto al abanderado de las fuerzas enemigas, sudorosa y sangrante, lo atravesó con un vigoroso envión de su sable, lo derribó de su caballo y estirándose hacia el suelo aferrada del pomo de su montura conquistó la enseña del reino de España que llevaba los lauros de los triunfos realistas en Puno, Cuzco, Arequipa y La Paz." Luego de varias batallas, en 1816 Juana y su esposo, quienes tenían bajo sus ordenes 6000 indios, logran sitiar por segunda vez la ciudad de Chuquisaca. Los realistas consiguieron poner fin al cerco, y en Tinteros, Manuel Ascencio Padilla encontró la muerte, batallando hasta el último segundo de su vida y con la mujer que más amó peleando a su lado. Los ejércitos realistas habían aumentado en poder y odia contra los Padilla, por lo que su principal objetivo era terminar con los esposos revolucionarios, y limpiar su camino para la dominación del Alto Perú, ya que los ejércitos argentinos no mostraban ánimos de regresar a la lucha. A su vez, las propias filas patriotas se desmenuzaban día a día, porque el cansancio y la impotencia eran mucho mayores que la voluntad de espíritu y las ansias de libertad. De esta forma, Mariano Ovando, quien había peleado innumerables batallas junto a Padilla, decidió pactar con los realistas, entregándoles información de las tácticas utilizadas por su antiguo jefe. El Coronel Aguilera, al frente de los realistas, odiaba sin reparos a Padilla y no dudaba en avanzar ferozmente sobre los guerrilleros. Así las cosas, el 13 de septiembre de 1816 los dos bandos se encuentran en La Laguna en una batalla sangrienta y cruel, al cabo de la cual las tropas revolucionarias se retiran apresuradamente, con muchas bajas en sus filas. Con fuerzas debilitadas Manuel Padilla llega al Villar y acampa en el santuario que era el lugar donde se desarrollaría el encuentro armado, esperando que sus hombres se le unieran para pelear, la que sería, su última batalla. La que seguía a su lado incondicionalmente era Juana Azurduy quien se había quedado en el Villar con algunos guerrilleros y una pieza de artillería. Pero en esta oportunidad los eternos maestros de la sorpresa fueron sorprendidos. La teniente coronela haciendo muestra de su gigante valentía enfrentó a los relistas sin dudas, en primera línea. Blanco fácil, recibió un proyectil en su pierna y otro en su pecho, pero estas heridas no le impidieron continuar luchando, tratando de no mostrar dolor para no desanimar a los suyos. Los realistas atacaban con arrojo, seguros de su supremacía y del debilitamiento de sus contrincantes. Mientras que los “Leales” y todos huían tratando de proteger sus vidas Padilla continuaba impartiendo órdenes con su atronadora voz de caudillos y la heroína Azurduy luchaba a brazo partido. "Solos ya los esposos Padilla, fueron los últimos en abandonar el teatro póstumo de sus heroicas hazañas. Padilla, seguido del padre Mariano Polanco y una mujer que acompañaba a doña Juana, que iba en último término, se alejaban precipitadamente, pero tarde... Un grupo de caballería a cuya cabeza se precipitaba Aguilera estaba apunto de apresar a doña Juana, lo cual notando el valeroso y ejemplar esposo tornó bridas para salvar a su amada compañera, descargó sus pistolas logrando derribar a uno de los oficiales, entretanto, ganaba distancia doña Juana. “Mas, había llegado el término de las fatigas para el óptimo espíritu del valeroso guerrillero que trabajó e hizo más resistencia que los grandes ejércitos contra las fuerzas coloniales y pasase al reposo de la inmortalidad. "Cargando con el arrojo del que mide el peligro y hace abnegación de su vida, sable en mano se lanzó contra sus enemigos, pero pronto una bala hirió de muerte al indomable caudillo que desplomado cayó para dar reposo a su fatigado organismo y la ascensión triunfal a su generosa alma " 48 . Como lo relatan las palabras de Gantier luchando y defendiendo a su esposa, Manuel Ascencio Padilla encuentra la paz de la muerte después de años de enfrentarla en los campos de batalla con la misma valentía y esperanza con la que comenzó a revolución, allá por 1810. Seis años de victorias y fracasos, de amores y odios, de luces y sombras, seis años buscando la libertad de su gente y de su pueblo. El coronel Aguilera movido por el inmenso repudio que le tenía a Padilla lo decapitó en el mismo lugar donde había caído abatido y con sus manos teñidas de sangre y con la sonrisa del triunfo dibujado en su rostro alzó el tétrico trofeo exhibiéndolo a sus soldados y oficiales. Para completar de realizar su sueño y acabar con la pareja de revolucionarios decapitó también a una amazona que iba al lado de Manuel Ascencio, creyendo equivocadamente, que se trataba de Juana Azurduy. Feliz, Aguilera coloca los dos cuellos en los extremos de largas picas para alzarlas en la plaza de El Villar, utilizándolas como forma de mostrar lo que le sucedería al que se opusiera a la voluntad del Rey. Una mujer que había soportado ver morir a sus padres, a cuatro de sus hijos y a Hualparrimachi podría pensar que el destino no le volvería a colocar a la muerte nuevamente en su camino. Sin embargo, pronto llegaron a sus oídos los comentarios de que su amado guerrero había muerto y esta vez, su corazón le decía que era cierto. Profundamente abatida y con el dolor recorriéndole todo su cuerpo decide internarse en el Valle de La Segura a pesar de los macabros recuerdos que ese lugar le generaban. Sin Padilla, ahora era ella la jefa de las fuerzas guerrilleras patriotas y debía proteger el tesoro valuado en 60 mil duros, fruto de las victorias conseguidas. Pero existía una razón aún más fuerte por la que seguir luchando: su hija Luisa estaba al cuidado de la india Mamani y debía ponerlas a salvo. Entonces, Azurduy decide llamar a los caudillos revolucionarios de la zona a un Consejo en el que decidirían a quien entregarle el mando de las fuerzas patriotas y cuál sería el destino de las luchas. Muchos fueron los nombres sugeridos, pero la mayoría de pospresentes estaban convencido que era la propia Juana la que 48 Gantier, Joaquín. “Doña Juana Azurduy de Padilla”, La Paz, 1973 debía ser la sucesora de Padilla. Azurduy, en cambio, alegaba que debía ser un hombre el nuevo jefe, al que ella apoyaría tal como lo hizo con su esposo. Ésta mostró su predilección por Jacinto Cueto, y como segundo nombró a Esteban Fernández. Pero estos hombres resultaban muy pequeños ante la imagen de seguridad y valentía que Azurduy, “la Pachamama” proyectaba por lo que nuevamente pidieron que ella se colocara al mando. Una serie de confrontaciones y confusiones entre los subjefes, produjeron varias divisiones en la fuerza patriota puesto que su principal anhelo era poseer los capitales reunidos como trofeos de guerra. Con el cuerpo sin fuerzas y su mente ocupada en diseñar el modo de recuperar la cabeza de su esposo, que continuaba en la plaza de la Laguna, Juana llama a su lado a un joven flechero indio y le encomienda la misión de reunir un nuevo ejército de indios y criollos. Pasados unos días el joven regresa con cien hombres y Juana llama a Fernández y a Ravelo para que le presten su ayuda. Emprendiendo el camino hacia la Laguna, Juana observa como grupos de indios que respetaban muchísimo a Padilla y adoraban a la Pachamama, se enfrentan furiosamente a los realistas, deseosos de vengar la muerte del jefe patriota. Con la sangre hirviendo en sus venas todos los hombres y mujeres que acompañaban a Juana luchan en uno de los enfrentamientos más sangrientos de la lucha por la independencia, masacrando a todo realista que encontraban a su paso y a todo aquel que hubiera colaborado con ellos. Azurduy, que antes pugnaba por la liberación de los prisioneros, nada dijo de la masacre que sus hombres realizaban ya que su única intención era bajar el cráneo de Padilla de la pica en el medio de la Plaza. Una vez que la tuvo en sus manos, El 15 de mayo de 1817, emprendió una procesión solemne y dolorosa hasta la Iglesia, donde la depositó sobre el Altar oficiándose a continuación un último rezo con los elevados honores correspondientes a su rango de jefe de la guerra de recursos altoperuana y de coronel del Ejército Argentino. Este funeral se considera un punto clave en la vida de Juana Azurduy, posteriormente sus fuerzas irán debilitándose y la incontrolable sed de libertad se ahogará en un mar de preguntas sin respuesta, de reproche y olvido. En situación de abandono y sin protección a su lado, parte hacia el sur en busca de un hombre cuya fama se había extendido por todo el Alto Perú y del que muchas veces Manuel Ascencio le hablaba por implementar en sus luchas en Salta y Jujuy tácticas muy similares a las de los jefes altoperuanos. Iba en busca del caudillo salteño Martín Güemes quien al igual que ella, convencido de sus ideales de libertad y justicia había empuñado las armas en contra de los intereses de su propia sociedad. Éste recibió a la teniente coronela con afecto y admiración, incluyéndola en su ejército con tareas de mando y responsabilidad, conocedor del espíritu guerrero de Juana y de que si no lo hacía ofendería a ese imponente mujer. Güemes atraía a Juana por la adoración que provocaba en los gauchos que veían en él al protector y padre de los pobres, como lo llamaban, y también, porque es preciso decirlo, el patriota sincero y decidido por la independencia. Pero otra vez los relistas aparecen en el camino de Azurduy, decididos a acabar también con Güemes y avanzando con 300 hombres sobre la casa del caudillo. Sólo en la noche, al salir de su casa por una detonación que había escuchado, Güemes cae en la redada y es herido por la espalda. Rápidamente logra subir a un caballo y llegar al río Arias, donde los transportan hasta la hacienda de la Cruz, para desde allí continuar su fuga hasta el El Chamical, donde fallece, después de desangrarse durante diez días y pese a los cuidados de su médico, el 17 de junio de 1821. La forma en que muere Güemes confirma la idea de que padecía hemofilia, razón por la cual no participaba, y sus gauchos lo comprendían, en entreveros y escaramuzas. Una vez más, la muerte le gana una batalla a Juana Azurduy, llevándose a su amigo y protector Martín Güemes con el que había compartido tres años de lucha. En la más absoluta miseria y dominada por una profunda depresión dirige a las autoridades salteñas una dolorosa carta solicitándoles ayuda para regresar a su Chuquisaca natal, convertida ahora en parte de la República Bolívar, la actual Bolivia, escrita ocho años después de la muerte de Güemes: “A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Cbarcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución. Aunque animada de noble orgullo tampoco recordaré haber empuñado la espada en defensa de tan justa causa. La satisfacción de haber triunfado de los enemigos más de una vez deshecho sus victoriosas y poderosas huestes, ha saciado mi ambición y compensado con usura mis fatigas; pero no puedo omitir el suplicar a V.H. se fije en que el origen de mis males y de la miseria en que fluctúo es mi ciega adhesión al sistema patrio ( .. ) Después del fatal contraste en que perdí a mi marido y quedé sin los elementos necesarios para proseguir la guerra, renuncié a los indultos y a las generosas invitaciones con que se empeñó en atraerme el enemigo. "Abandoné mi domicilio y me expuse a buscar mi sepulcro en país desconocido, sólo por no ser testigo de la humillación de mi patria, ya que mis esfuerzos no podían acudir a salvarla. En este estado he pasado más de ocho años, y los más de los días sin más alimento que la esperanza de restituirme a mi país (...). Desnuda de todo arbitrio, sin relaciones ni influjo, en esta ciudadano hallo medio de proporcionarme los útiles y viáticos precisos para restituirme a mi casa (...) Si V.H. no se conduele de la viuda de un ciudadano que murió en servicio de la causa mejor, y de una pobre mujer, que, a pesar de su insuficiencia, trabajó con suceso en ella...”. La respuesta oficial a tan dramática solicitud fue mezquina y absolutamente incomprensible tratándose de una mujer que dedicó su vida y la de su familia a la revolución, luchando por una sociedad que parecía haberla olvidado: “Salta, mayo 2 de 1825. Habilítese a la viuda del Teniente Coronel Manuel Ascencio Padilla, con cuatro mulas pertenecientes al Estado, entregándose, por el ministerio de Hacienda, la cantidad de cincuenta pesos para los gastos de su marcha”. Regresa a su ciudad natal junto a su hija de once años, logrando recién en 1825 que el gobierno le dé cuatro mulas y cinco pesos. Llegó sin que nadie le recibiera, abatida, triste y sin saber donde vivir, puesto que todas sus pertenencias habían sido confiscadas y otras en poder de su hermana Rosalía quien sí había cumplido con su destino de dama chuquisaqueña preocupándose por la educación de sus hijos y la atención de su esposo. Juana reclama que le devuelvan sus bienes y sólo logra que se le reconozca su hacienda en Cullco, que luego debe vender por la pobreza que la acosa. La libertad circulaba ahora por los caminos de la política y los caudillos que pudieron sobrevivir a años de luchas libertarias poco podían hacer en eso terrenos, más habituados a la acción que a las negociaciones. Este es el motivo que embargó a Juana y a muchos otros hombres y mujeres de una profunda depresión, preguntándose hasta el cansancio si todo el esfuerzo fue en vano, si dedicaron su vida a una causa perdida por la que ni siquiera se les reconoce olvidados en la miseria y la pobreza. Si acaso toda su entrega sirvió para facilitarles el trabajo a hombres como Santa Cruz, que luego de años combatiendo a favor de los realistas, incluso reprimiendo el levantamiento de 1809, se pasa al bando patriota poco antes de su victoria, siendo actualmente un héroe nacional de Bolivia. Quizá sea la visita sorpresiva de Simón Bolívar en compañía de Sucre, el máximo reconocimiento por su valentía. El general venezolano la colmó de elogios en presencia de los demás, manifestándole que la nueva república no debería llevar su propio apellido sino el de Padilla, y le concedió una pensión mensual de 60 pesos que luego Sucre aumentó a cien, respondiendo a la solicitud de la caudilla. Ésta en una carta explicaba que su hija no tenía más patrimonio que sus propias lágrimas por lo que deseaba gozar de una pensión por viudez tal como le correspondía. 49 La pensión de 100 pesos le fue enviada correctamente durante dos años luego de los cuales, el clima interno de la recién nacida República de Bolivia fuera sacudida por el asesinato del Presidente Pedro Blanco en la Recoleta. Tampoco de Buenos Aries llegaba apoyo a Juana, porque los nacidos más allá de sus nuevas fronteras eran extranjeros. Ni siquiera consideraban que esa mujer llamada Juana Azurduy que vivía en condiciones penosas había dedicado sus mejores años de vida luchando por la independencia que ahora gozaban. En sus últimos años de vida, recurrió al silencio y al recuerdo, tal vez evocando con su memoria a sus seres queridos, sin apartarse jamás de una cajita de madera en la que conservaba sus mayores recuerdos y la prueba exacta de su pasado: las comunicaciones de Belgrano nombrándola teniente coronela y algunas condecoraciones ya corrompidas por el paso del tiempo. Finalmente la muerte, vieja e invencible contrincante, la encontró en la alcoba de una casa ubicada en la calle España identificada con el número 218 , una pensión donde se alquilaban habitaciones por noche. El cuarto era pequeño y miserable, con un lecho humilde donde Juana suspiró por última vez. Francisco de Miranda murió en las mazmorras de Fernando VII en Cádiz. Mariano Moreno fue envenenado por el capitán de un barco británico y su cadáver arrojado al mar, anticipando un destino recurrente para los revolucionarios argentinos. Manuel Belgrano murió en la pobreza en 1820, Bolívar murió solo, perseguido por facciones oligárquicas que combatían su proyecto de unidad continental, expresando con amargura "he sembrado en el viento y arado en el mar.". Monteagudo fue apuñalado en una oscura calle de Lima. Juan J. Castelli el "orador supremo de la Revolución", quien destruyera los argumentos realistas en mayo de 1810, el jefe del ejército libertador americano que más cerca estuvo de llegar a Lima y destruir de un golpe el poder imperial español, antes de la llegada de San Martín, murió con su lengua cortada, preso y perseguido. En este marco de ingratitud caída sobre nuestros revolucionarios, aquellos que nos dieron la libertad y produjeron la más grande de las revoluciones del mundo occidental del siglo XIX, no es de extrañar que Juana Azurduy, la mayor guerrera de América, en 49 "Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". O’Donnell Mario Juana Azurduy. Planeta. 1998 un continente que hizo de la resistencia su identidad, terminara sus días en soledad. Sin embargo, el destino le tenía guardada una última jugada, murió un 25 de mayo de 1862, para el olvido se sus contemporáneos y el homenaje a la posteridad. Murió en soledad, en paz recordando su galope audaz y la sensación de libertad del viento rozando su cara, en paz porque ya no debía huir de ninguna trampa ni del camino de algún proyectil, porque era otoño y todo estaba en orden. Pero esencialmente murió en paz porque al fin tenía una respuesta a su máxima inquietud de que si en realidad su esfuerzo, su entrega, y tantas pérdidas habían valido la pena: la respuesta era sí, lo valieron, su pueblo al fin era libre del dominio español. Murió a los 82 años y sus restos fueron depositados en una fosa común, sin rendírsele los honores meritorios por el festejo de la fecha patria en que había muerto. Serán cien los años que pasarán para que sus restos sean exhumados y colocados en un mausoleo en Sucre como agradecimiento a su acción en favor de la libertad y la independencia de su pueblo. El 14 de julio de 2009 la presidente de Argentina, Cristina Fernández, le otorgó a Juana Azurduy de Padilla, el grado póstumo de Generala del Ejército. A su vez, el presidente de Bolivia, Evo Morales, la condecoró con el Cóndor de los Andes en el Grado de Gran Collar, la máxima distinción conferida por el Estado boliviano a los presidentes y jefes de Estado. 50 “El español no pasará/ con mujeres tendrá que pelear” En América el contagio revolucionario llegará a ser universal con una resistencia que involucra a hombres y a mujeres como Juana Azurduy. Pero al igual que esta incansable guerrera, muchas otras mujeres trabajaron por liberar a su pueblo. Este es el caso de Magdalena (Macacha) Güemes de Tejada, hermana del general Martín Güemes, de cuya acción en pro de la independencia fue eficaz colaboradora. Nació en Salta el 11 de diciembre de 1787 y era hija de María Magdalena Goyechea y de la Corte y Gabriel Güemes Montero, tesorero de la Real Hacienda. Recibió la educación habitual para toda dama salteña pero sus propios ideales de justicia la hicieron resaltar en su contexto social. Dueña de una gran inteligencia atraía con su simpatía desbordante, destacando en cualquier parte por el idioma y el cariño con los que se comunicaba con todos: humildes o poderosos, con igual delicadeza y cordialidad. El General José María Paz en su libro “Campañas de la Independencia” (memorias póstumas), la describe como: “...mujer ambiciosa, intrigante y animosa, al paso que dotada de garbo y hermosura...” Según Bernardo Frías era “... arrogante y hermosa, que durante el gobierno difícil de la guerra, habría de llevar la armonía a las pasiones, la prudencia y el acierto en los consejos, la luz en los momentos más delicados del peligro y una sagacidad e inteligencia nobles y generosas en la diplomacia, acompañado todo ello de 51 la seducción y el encanto que se desprenden de la mujer inteligente y culta. (Ver imagen Nº 4) Su acción comienza poco después de la Revolución de Mayo, cuando a la edad de veintitrés años convirtió su casa en taller para confeccionar ropa para los soldados de la Partida de Observación organizada por su hermano Martín. Desde entonces fue su más entusiasta colaboradora, y supo sacar partido de su inteligencia y su posición para desempeñar tareas arriesgadas, especialmente cuando los realistas 52 ocupaban la ciudad de Salta y Güemes los combatía por todos los medios. "En momentos de apuro, montaba a caballo, recorría las filas, arengaba las tropas. Frente a los escuadrones gauchos, gaucheaba 50 “Juana Azurduy” Letra: Félix Luna - Música: Ariel Ramírez. Frías Bernardo. Historia del General Güemes.Tomo I – Página 482. 52 Vitro, Roberto. “Mujeres Salteñas”, (páginas 139 y 140). http;//www.cta.org.ar/ 51 sin titubear. De niña cabalgaba en pelo, criada en el campo conocía a sus hombres y sus árboles, sus costumbres y sus voces." 53 Dotada de habilidad política, la puso al servicio de su hermano en los momentos difíciles, como en 1815, cuando gracias a sus gestiones se llegó a la paz de los Cerrillos, luego de la delicada situación surgida entre Güemes y las fuerzas de Buenos Aires al mando del general Rondeau. En medio de una guerra de recursos demoledora, Macacha, que se había quedado en la ciudad, desenvolviéndose como mediadora, obtuvo una conferencia entre los jefes enfrentados quienes suscribieron un compromiso de no agresión, paz que es conocido como la "de los Cerrillos". Compañera incondicional de su hermano, estaba junto al caudillo cuando éste fue herido de muerte en 1821. A pesar del inmenso dolor por la desaparición de su amado hermano, Macacha continuó participando en los sucesos políticos de la provincia, con la audacia y la valentía que la caracterizaban. Fue muy querida por el pueblo debido a la generosidad con que ayudaba a los necesitados. Incluso formó parte de la llamada "Revolución de las Mujeres" que, con el apoyo militar de Pablo Latorre derrocaron al gobernador Fernández Cornejo y pusieron en el cargo al general José Ignacio de Gorriti. Luego de una vida dedicada al servicio de la revolución y la libertad murió en su ciudad natal el 7 de junio de 1886 siendo llamado por su pueblo "la madre del pobrerío". Referirse a Macacha Güemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el Héroe Gaucho, para garantizar la emancipación de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta evocación representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su existencia al servicio de la patria Las Heroínas de la Coronilla Muchas de las páginas de la libertad americana fueron escritas por mujeres. Mujeres de temple que tenían ideas claras y determinación de acero. De todas ellas junto a Azurduy y Güemes, sobresalen con luz propia las heroínas de la coronilla. Hablar de las Heroínas de la Coronilla implica hablar de un símbolo de valentía para todos los cochabambinos. Cuando se hace alusión a la revolución, se debe recordar lo ocurrido el 27 de mayo de 1812. La colina de San Sebastián, en el sitio denominado la Coronilla, se convirtió aquél día en un bastión defensivo compuesto por ancianos, niños y mujeres, que salieron dispuestos a enfrentar a las fuerzas realistas comandadas por Goyeneche, quien tres días antes se topó con las fuerzas del patriota Arce. La sublevación que se produjo en Cochabamba gracias al accionar de Arce, quien depuso al gobernador Rivero, cambió los planes de Goyeneche de invadir Argentina. En ese marco, su acción inmediata consistió en enviar a sus fuerzas hacia Cochabamba con el fin de calmar los ánimos emancipadores. Los revolucionarios habían conformado una Junta de Gobierno presidida por Mariano Antezana y conformada por 3.000 hombres que se fueron a luchar a Oruro. El objetivo de los realistas era claro, recuperar la protección de Cochabamba sin importar que en el camino de ese propósito los soldados saquearan todo cuanto vieran a su paso. Una vez derrotado Arce en Pocona el 24 de mayo, el último muro para llegar a Cochabamba eran las mujeres que salieron a combatir en la colina de San Sebastián en un enfrentamiento sin igual en la historia de la independencia. En éste día Esteban Arce fue derrotado por el coronel Imaz en la Batalla de Pocona. Las mujeres, en vista de que estaban 53 Gonzáles Arrili, Bernardo. “San Martín”. Buenos Aires : Sociedad Impresora Americana, 1945 solas juraron morir en su defensa: “Si no hay hombres nosotras defenderemos” y tomaron posesión del vecino Cerro de San Sebastián, llevando allí los cañones que les quedaban. De esta manera, armadas de una manera precaria y animadas por la invidente Josefa Gandarillas, las mujeres se enfrentaron a las fuerzas de Goyeneche en una batalla desigual que permitió retomar la ciudad. A pesar de la ausencia de maridos e hijos enrolados en tropas alejadas de la ciudad, las mujeres decidieron tomar las armas por su cuenta y defender su honor y sus hogares sin atender a las súplicas y arengas del general godo, a quien inclusive le asesinaron su mensajero. La acción de ellas tenía el propósito de proteger a las tropas de Esteban Arce que se hallaban, clandestinas, rearticulando sus fuerzas tras la derrota de Pocona. Junto a Gandarillas actuaba la esposa de Esteban Arce, Manuela Rodríguez; las madres cochabambinas, bajo un lema tan doméstico y aguerrido a la vez: “¡Nuestro hogar es sagrado!”, se reunieron en la Catedral y se dirigieron en romería hacia la colina, llevando en andas la imagen de la Virgen de la Merced, con el fin de bloquear la entrada de Goyeneche que venía en persona desde Tarata tras buscar infructuosamente al caudillo revolucionario. Todo terminó en lamentable y espantosa matanza que extendió la fama de dichas heroínas por todo el Alto Perú. (Ver imagen Nº 5) El soldado Francisco Turpin escribió a Belgrano, 54 relatándole la acción de Cochabamba, con fecha 4 de agosto de 1812 en Jujuy . Señala que el ejército enemigo rompió fuego después de haber hablado el capitán de caballería Jacinto Terrazas con ellas, que sostuvieron no querer rendirse y más bien tendrían la gloria de morir matando. Seguido esto, el embajador que había llegado de Cochabamba, murió en manos de las mujeres. Éstas, con los rebozos atados a la cintura, haciendo fuego por espacio de tres horas, enfrentaron al enemigo, por cuatro puntos del cerco. La caballería enemiga rompió el cerco y, bajo el ruido del fusil y del cañón, atacaron el lugar. Poco después, entraron a sangre y fuego, pasando por las armas a algunos guerrilleros y mujeres. La ciudad fue totalmente saqueada y quemadas todas las cementeras, provocando con ello el terror. Murieron así 30 mujeres, 6 hombres de garrote y 3 fusileros. Los realistas se ensañaron con niños, ancianas, salvándose las mujeres de buen parecer. Esta acción provoca en Belgrano una profunda admiración exclamando: “Gloria a las cochabambinas que se han demostrado con un entusiasmo digno de que pase a la memoria de las generaciones venideras”. El gobernador Mariano Antezana, quien se encontraba refugiado en el convento de la Recoleta, fue capturado y decapitado conjuntamente con otros patriotas que murieron a manos de un "Tribunal permanente de Pacificación" dirigido por los realistas Imas, Berriozábal y Cañete. [] Goyeneche entró en Cochabamba el 27 de mayo, siendo saqueada e incendiada hasta el día 31. Fueron ejecutados multitud de revolucionarios juzgados por una junta militar, muchos otros se refugiaron en los campos. Lombera quedó a cargo de la ciudad como gobernador intendente al frente de 2.000 hombres, mientras Goyeneche regresó a Potosí, vía Chuquisaca y luego llevó su ejército a Chichas. Las víctimas de aquel desigual combate figuran en la siguiente lista difundida por Gabriela Taborga: Manuela Gandarillas, Manuela Rodríguez, las hermanas Juana y Lucía Ascui, Rosa Soto, las hermanas Parrilla (cuyos nombres no han podido ser establecidos), Mercedes Tapia, María Pascuala Oropeza, Manuela Saavedra de Ferrufino, Lucía Alcócer León de Chinchilla, María Isabel Pardo de Vargas, María Teresa Bustos y Salamanca de Lemoine, María del Rosario Saravia de Lanza y Luisa Saavedra de Claure; todas ellas esposas de combatientes perseguidos que acompañaban a Esteban Arce. Todo 54 Documento N° 299. Oficio original del soldado Francisco Turpin al General Manuel Belgrano. Jujuy, 4 de agosto de 1812 en Instituto Nacional Belgraniano, Documentos para la historia del General Don Manuel Belgrano, t. IV, 1811-1812, Buenos Aires, 2003, pp. 554-557. ocurrió en vísperas de la celebración del Corpus Christi (1812). Al día siguiente de la matanza de San Sebastián, el 28 de mayo, Goyeneche presidió los actos litúrgicos y aprovechando el tronar de los petardos y fuegos artificiales que matizaban la celebración y que podían camuflar disparos de bala, el realista mandó fusilar al anciano gobernador patriota Mariano Antezana. [] En el mayo de la revolución de Chuquisaca en 1809 participaron las mujeres. Un 27 de mayo de 1812 eran muertas treinta mujeres de Cochabamba porque como no había hombres ellas defendieron. Un 25 de mayo de 1862, se apagaba en Sucre la vida de Juana Azurduy. El mismo mes, de distintos años, cargado de dolor por la muerte de Azurduy, el mayo de las heroínas de Cochabamba, mujeres, como pocas tuvo la historia. El mismo mayo, mes de la libertad con nombre de mujer. A lo largo de los años, se ha tratado de circunscribir el ámbito de acción femenino al hogar y al cuidado de sus hijos y esposos y dejando para los hombres la exclusiva en terrenos tan importantes como el nacimiento de nuevos países en América Latina. El enfoque androcéntrico de nuestro relato histórico desconoce el rol de las mujeres en las luchas emancipadoras y establece unos parámetros prejuiciados, a través de los cuales se mide lo digno de ser recordado y lo que no lo es. A partir de estereotipos creados que privilegian la acción de los sujetos masculinos, blancos, de posición en algunos casos, se universaliza el prototipo a conservar. Las experiencias históricas de quienes no cumplían con el canon establecido fueron relegadas y minimizadas. Sin embargo, y como la obra de las mujeres estudiadas en este trabajo de investigación lo muestra, la realidad indica que cientos de mujeres participaron activamente en las luchas por la independencia y la libertad. Humildes y atrevidas, sucumben y aparecen otras, brotan de las montañas y del seno de las selvas y los bosques, pero también de los sectores más ilustrados de las ciudades del Alto Perú. Son exterminadas, vencidas y martirizadas, pero ellas jamás se extinguen pues fueron fecundando en la sangre de sus propios hijos el ideal de la patria. Constituyen un ejemplo con la realidad política de su época hasta las últimas consecuencias, postergando para ello sus intereses personales en pos de la construcción social. La deuda con el género femenino sigue sin resolverse. No obstante y como la memoria no es menos poderosa que el olvido aún es tiempo de rescatar del pasado un sin fin de nombres de mujeres que dieron su vida por la independencia de las, en aquel entonces, Provincias Unidas del Río de La Plata para ponerlas en el lugar que siempre merecieron, ya que los y las valientes escriben la historia con su sangre, palabras imposibles de borrar a pesar del paso de los años. En Bolivia el 27 de mayo se festeja el día de la madre, pero no debemos dar un giro a la historia de este día, las mujeres que enfrentaron a las tropas realistas abandonaron su hogar para defender a sus hijos, pero también a todo su pueblo, a toda la ciudad. Azurduy, Güemes y muchísimas otra mujeres, dejaron crecer en ellas el ideal de independencia y también la actitud de tomar la iniciativa, luchando por un mundo nuevo, una sociedad nueva; más justa y solidaría, más igualitaria, en la que la distinción entre mujer y hombre, criollo o español no tuviera lugar. Entendiendo y mostrando al mundo, que la batalla no es entre géneros, sino entre la libertad y la opresión, que la incompatibilidad no está en optar entra la maternidad o la lucha, porque ellas conjugaron las dos opciones, siendo madres de libertad. Fuentes consultadas Batticuore, Graciela. Juana Azurduy en "Mujeres Argentinas, El lado femenino de nuestra historia", Editorial Extra Alfaguara, Buenos Aires, Argentina, 1998. Documentos para la historia del General Don Manuel Belgrano, t. IV, 1811-1812, Buenos Aires, 2003, pp. 554-557.Documento N° 299. Oficio original del solda do Francisco Turpin al General Manuel Belgrano. Jujuy, 4 de agosto de 1812 en Instituto Nacional Belgraniano,. Félix Luna, Ariel Ramírez. Juana Azurduy. Frías, Bernardo. Historia del General Güemes. Tomo I – Página 482 Galeano, Eduardo. 1816 Tarabuco. Gantier, Joaquín. Doña Juana Azurduy de Padilla, La Paz, 1973 González Arrili, Bernardo. “San Martín”. Buenos Aires: Sociedad Impresora Americana, 1945. http://es.wikipedia.org/wiki/Alto_Per%C3%BA http://www.artehistoria.jcyl.es/historia/contextos/1579.htm O´Donnell Mario. "Juana Azurduy, La Teniente Coronela", Editorial Planeta. 1998 Revista Lilith de marzo de 2005. Buenos Aires. RIMA - Red Informativa de Mujeres de Argentina, Rosario, Santa Fe, Argentina http://www.cta.org.ar/. Semanario Virtual Caja de Herramientas Nº 217, Corporación Viva la Ciudadanía. www.vivalaciudadania.org. Vitale, Luis. La mitad invisible de la historia. El protagonismo social de la mujer latinoamericana, Buenos Aires, Editorial Sudamericana- Planeta, 1987. Vitro, Roberto. Roberto “Mujeres Salteñas”, (páginas 139 y 140). http://www.cta.org.ar/. MANUEL BELGRANO… PADRE DE LA PATRIA E HIJO DE LA JUSTICIA María Camila Curbelo Zabala Uruguay Era un día normal, como uno de esos tantos de la semana; un día que si bien no parecía nada fuera de lo común, Manuel sabía que tampoco iba a ser un día de esos para olvidar. Todos los días que iba a visitar a su abuela Helena se convertían en especiales. Por eso, a la hora que sonó el despertador no dudó se saltar de su cómoda cama, y salir a la fresca mañana de otoño que lo esperaba fuera de su casa. Ese día miércoles 12 de mayo nada parecía escapársele de su atenta mirada; las aceras estaban muy transitadas, por gente que llevaba mucha prisa para llegar a sus trabajos, o la escuela, sin pensar en nada más que en lo que harían, en el almuerzo, en el partido de fútbol de la tarde, el valor del dólar, etc.; sin embargo, Manuel no se imaginaba viviendo en otra ciudad, ni en otra época que no fuera esa. Esa mañana nada más pensaba en terminar el horario escolar, y al fin poder llegar a la casa de su abuela; que aunque para muchos ojos pareciera “chocha” , para él era una persona inteligente, vivaz, que el correr de los años la habían transformado en una persona sabia. Cuando le preguntaban la edad, siempre buscaba cambiar de tema: decía que la edad de las personas no se miden por los años vividos, pero sin embargo todas las personas que la conocían sabían que había pasado muchas épocas, transitando por muchos sucesos históricos que marcarían a la humanidad, y tuvieron gran repercusión tanto en los sucesos de la realidad actual como en las de futuro. Y aún así estaba dispuesta a los más nuevos y exóticos cambios. Se podía decir que era una abuela prehistórica y moderna a la misma vez. Pero lo que más le gustaba a Manuel de ella, es que era una caja de sorpresas e historias, prontas para contar, sin límites de imaginación, y a cualquier hora del día. En fin, con tantas ideas en la cabeza, su trayecto hasta la escuela se le hizo más breve de lo común. Ese día su maestra en vez de plantearles algún problema matemático, un dictado. O cualquier tarea, se planteó a desafiar los conocimientos históricos de sus alumnos, y vaya que sí lo hizo. - Niños, díganme ¿alguno de ustedes sabe qué día es hoy? Todos sus alumnos comenzaron a pensar y simultáneamente le dijeron - ¡25 de mayo!La docente sonrío. –Muy bien, creo que el calendario dice lo mismo que mis astutos alumnos, pero a lo que yo me refiero es si alguien de ustedes sabe qué ocurrió un 25 de mayo hace muchos añosAnte esa pregunta todos se miraron las caras apabullados, y quedaron callados; sin duda la historia no era una de sus materias favoritas, y lo dejaban bastante en claro. Desde el fondo de la clase, Manuel apresurado intentó probar con una de las típicas respuestas que se reciben en historia -¿una batalla, la muerte de algún héroe revolucionario, la independencia de algún país? - Sí, en eso tienes razón Manuel, una de tus respuestas fue acertada, pero dejaré que lo piensen y mañana espero todos me digan qué ocurrió un día como hoy hace 200 años atrás. A Manuel le quedó rondando todo el día las pregunta que su maestra les formuló en clase; si había una cualidad que lo describía a la perfección era la curiosidad. Por eso decidió recurrir a su abuela; quién era apasionada por la historia; siempre la encontraba leyendo algún libro histórico o haciendo investigaciones por su propia cuenta. En su tiempo supo ser una muy buena profesora de historia, y en la actualidad todos sus conocimientos acumulados estaban deseosos de poder encontrar un destinatario interesado. Por eso luego de la escuela, cuando llego a la casa de su abuela Helena, lo primero que hizo luego de saludarla y ponerse “al día” de las novedades de la escuela, de la familia y de un popurrí de cosas, y viendo que ya no tenían nada más que contarse, Manuel procedió a romper el hielo, y dar el primer paso para responder la pregunta de su maestra. -Abuela, hoy en la clase nos hicieron una pregunta, y nadie pudo responderla, así que espero que vos me la puedas aclarar. -Sí, claro, mientras la sepa por supuesto que la intentaré responder. Manuel ya confiado en que su abuela podría responderle prosiguió - ¿Qué ocurrió un día como hoy hace 200 años? La abuela dejando ver una sonrisa pícara en su rostro curtido por el paso de los años contestó – ¡Eso es fácil! Un día como hoy, 25 de mayo, nuestro país vecino obtuvo la independencia. Me extraña que no sepas eso Manuel. El niño contrariado le respondió – Uff abu, ya sabes que la historia es algo muy aburrido para mi, para qué quiero saber lo que pasó hace tanto tiempo! Y todavía en un país que no es el mío! – Sé que puede parecerte algo gracioso, pero la historia sirve para conocer tu pasado, responder preguntas que siempre nos acompañan, a pesar de que las épocas vayan cambiando y progresando. “No podemos olvidar que el estudio de lo pasado enseña cómo debe manejarse el hombre en lo presente y porvenir...” Porque aunque lo neguemos la base de nuestras operaciones siempre es la misma, lo único que varían con el tiempo son las circunstancias, y eso nos hace pensar que actuamos diferentes a nuestros congéneres de hace 200, 100 o 50 años antes, pero no es así. Vos sos parte de ese mismo pasado. Si las cosas no hubieran acontecido de la forma en que lo hicieron, tal vez hoy no estarías aquí. Aparte no debes olvidar nunca que esos hechos alguna vez fueron parte del presente, tal cual ahora estamos viviendo, algún día vamos a formar parte de la historia, y de seguro nuestras proezas van a aparecer en los libros, para que nunca sean olvidados. Manuel algo sorprendido intentó reflexionar lo que su abuela le había dicho. - ¿Cómo que hoy no estaría acá?- Sí, puede ser que la historia haya sido muy distinta; si no hubieran ocurrido todas las batallas, revoluciones, victorias y derrotas que acontecieron, tal vez estaríamos contando un cuento muy distinto. Y eso nos une a cada uno de los pueblos de América del Sur y del mundo. Somos fruto de la historia de muchos hombres valientes que lucharon por obtener la libertad. Por eso los uruguayos estamos tan unidos a los argentinos; por más de todas las discordias que siempre han existido entre ambas naciones, desde la época colonial, no podemos olvidar que los dos países estuvimos unidos, luchando para obtener la independencia. Claro, como en toda historia siempre hay personajes que son protagonistas. Estos son los que entregaron su vida por ver triunfar sus ideas políticas y sociales, y por sobre todo por conseguir el bien más preciado de toda la humanidad: la libertad. En este caso sería muy reprochable decir que la independencia de Argentina fue el fruto de trabajo de un solo hombre, pero sin dudas creo que el nombre que sobresale por sobre todos, en este conjunto de historias, es el de un tocayo tuyo. Manuel que en ese momento estaba escuchando muy atento, abrió grande los ojos -¿Quién es el protagonista?, ¿Se llamaba igual que yo? - Así es, la persona de la que te hablo es Manuel Belgrano. Pero si te interesa saber acerca de la vida y acción de él va a ser mejor que nos sentemos cómodos, porque es un largo cuento…Y a ti lector, te aconsejo que si estás listo para escuchar la historia de este hombre, te prepares para un viaje en el tiempo. De forma que si quieres viajar da vuelta la página y descubrirás de lo que te hablo… ¡Adelante y buen viaje!... Manuel José Joaquín Corazón de Jesús Belgrano nació en Buenos Aires, el 3 de junio de 1770, en la casa paterna. Era hijo de Don Domingo Belgrano y Peri. Un italiano nacido en Oneglia, quién autorizado por el Rey de España se trasladó al otro lado del mundo para radicarse como comerciante. Domingo y Peri ya erradicado en el continente Americano, se castellanizó y comienza a ser llamado por Domingo Pérez. Tras la unión con María Josefa González Casero, oriunda de Buenos Aires, nació un niño, que tiempo después llegaría a ser un hombre que dedicó su vida a construir el país de Argentina, y a liberarlo del dominio colonial; un luchador por sus ideales, y por los de todos sus compatriotas. Desde su nacimiento, Manuel Belgrano, como lo bautizaron sus padres, ya tenía su vida marcada; el buen negocio de su padre permitía que él como sus hermanos pudieran viajar a Europa y recibir los estudios más avanzados de esa época. Ellos soñaban con ver a su hijo convertido en un gran abogado. Manuel vivió sus primeros años en la ciudad porteña, y se educó en el Real Colegio de San Carlos con la mejor formación que se pudiera recibir en ese territorio, aprendiendo la verdadera importancia del valor de una buena educación. – Como bien decía Belgrano “Sin educación en balde es cansarse, nunca seremos más que lo que desgraciadamente somos”Es por esto que siempre puso mucho afán para estudiar la gramática latina, filosofía y algo de teología. Sucesivamente viajó a España para seguir la carrera de las leyes, y allí estudió en Salamanca, y se graduó en Valladolid. Luego continuó sus estudios en Madrid donde se recibió de abogado en la chancillería de Valladolid. -Sin embargo la realidad e ideales de ese adelantado continente cambiarían los planes de Belgrano. Muchas personas pasan sus vidas sin descubrir su verdadera vocación; pero ese no fue el caso de Manuel. Él fue una de los individuos que por el contrario de todos y todo, fueron capaces siempre de luchar por lo que verdaderamente querían para sus vidas, sin importar el costo que deberían pagar. De esta forma decidió entregarse a su pasión por la economía y por la política. Ese era un tiempo en el que los grandes ideales sacudían al mundo, pero solo tenían acceso a ellos los adelantados; nada se sabia de esas tendencias tan revolucionarios, prometedoras de grandes cambios del otro lado del océano Pacífico, en el Sur de América, en su verdadera tierra; donde se encontraban sus ancestros. Manuel quien se encontraba en un mundo rodeado de hombres que al igual que él deseaban por sobre todas las cosas el bien público, y emanaban pensamientos justicieros e igualitarios para todos los semejantes, se vio envuelto bajo el manto de esos ideales. Por eso decidió apegarse a estos pensamientos con un único y gran fin; dirigirlos a favor de la patria. - Es a causa de esto nieto, que digo que Belgrano quiso y luchó por cambiar la historia; es por eso también que merece dedicar un poco de nuestro tiempo para mencionar su vida y los ideales que lo impulsaron a actuar y obrar de la forma en que lo hizo. Es eso que lo diferencia del resto de los hombres que tienen las mismas ambiciones, pero no tuvieron el valor suficiente como para entregar su vida por estos mismos valores que perseguían. He aquí la razón de porqué Belgrano se convirtió en el personaje central de esta historia. Como él mismo dijo “Nada importa saber o no la vida de cierta clase de hombres que todos sus trabajos y afanes los han contraído a sí mismos, y ni un solo instante han concedido a los demás; pero la de los hombres públicos, sea cual fuere, debe siempre presentarse, o para que sirva de ejemplo que se imite, o de una lección que retraiga de incidir en sus defectos” Cuando estuvo erradicado en España y Francia se identificaría con las ideas de libertad, igualdad, seguridad, propiedad; mismas ideas que llevaría hasta el día de su muerte. Fue así que se inspiró en estos valores que la revolución dejó a la sociedad francesa. Posteriormente, tanto como abogado, como economista o como general del ejército, Belgrano quiso influir en la sociedad Argentina, destacando estos valores en numerosas ocasiones. Siempre pensaba en la manera en que estas ideologías pudieran servir al provecho general de sus compatriotas, que tan lejos se encontraban, pero tan presentes los sentía; porque fuera donde fuera siempre llevaba el recuerdo de su tierra en donde se encontraban sus raíces. -Belgrano como el mismo dijo “…sólo veía tiranos en los que se oponían a que el hombre fuese donde fuese, no disfrutase de unos derechos que Dios y la naturaleza le habían concedido...” Podemos decir Manuel, que sus principios fueron la piedra fundamental de nuevos cambios en la historia de la humanidad. Belgrano no solo trae los ideales sociales, el deseo de progreso y de cultura, sino que sobre todo nos inculca el principio de libertad, que luego debería recibir auxilio de las espadas blandidas por miles de hombres, defendiendo aquello en lo que creían “ la vida es nada si la libertad se pierde”. Existe Libertad cuando nuestra voluntad no está encadenada a otras voluntades que nos obliguen a obrar en contra de nuestras aspiraciones o inclinaciones legítimas. El hombre debe luchar no solamente por su libertad, sino porque todos sus semejantes sean libres. Suprimida la libertad, aparece el despotismo y la esclavitud. Belgrano así lo entendió -Hoy me dijiste para qué querías saber la historia de un país que no es el nuestro, bueno es simple; el conocimiento es un modo de acercar a nuestros pueblos y, a su vez, de fomentar la paz y la seguridad. Es la manera de fortalecer nuestros vínculos comerciales, culturales, turísticos, etc. Hoy en día, luego de haber atravesado momentos en los que esos vínculos se vieron tensados por distintas situaciones, no debemos olvidarnos que nos unen nuestros pasados. Somos pueblos que han pasado experiencias similares en su historia. Nos unen la vida de hombres que defendían a muerte su libertad; no era una lucha entre buenos y malos: cada uno tenía sus ideas y peleaban por sus derechos. Estos próceres, más allá de haber sido parte de la historia de cada país, constituyen parte fundamental de la historia de toda la comunidad internacional. Belgrano fue marcando el camino para la evolución de la democracia y de los derechos humanos de América Latina. - Generalmente nieto, si hacemos un cuestionario acerca de la vida de Belgrano, la mayoría de la gente se refiere a su persona como el gran patriota de la Revolución de Mayo, o al integrante de la Primera Junta de Gobierno, y por sobre todo al General de la guerra de la independencia y creador de la Bandera de Argentina. Sin embargo, muy pocos saben que Belgrano no tenia no tenía grandes conocimientos militares, pero poseía un juicio recto, una honradez a toda prueba, un patriotismo puro y desinteresado, el más exquisito amor al orden, un entusiasmo decidido por la disciplina y un valor moral que jamás se ha desmentido. Esos rasgos son los más conocidos del prócer argentino, e hicieron que su persona, más allá de la muerte tuviera una gran posteridad hasta nuestros días. Pero en paralelo encontramos otra cara de este hombre, que ha sido opacada por sus tareas de luchador por la independencia de su patria. El aspecto no difundido es el de Belgrano como un pensador de los problemas económicos. Manuel interesado y sorprendido interrumpió a su abuela. - Es decir que Belgrano era un economista, uno de esos como los que hay ahora y salen en la televisión para explicar si va a haber una crisis financiera o si se puede invertir? - Sí, exactamente, nuestro amigo era uno de esos; aunque te sorprenda la economía siempre fue algo que mantuvo muy ocupado al hombre. No hubo época en la que los pensadores se internaran en los profusos caminos del laberinto de la economía, para poder descubrir una manera de satisfacer los intereses particulares del Estado. Y don Manuel fue un claro ejemplo. Si te digo Adam Smith y Francisco Quesnay seguramente me mires con cara rara; pero en fin lo único que te voy a mencionar de estos señores es que fueron los principales maestros, y que marcaron definitivamente el pensamiento del prócer argentino. Aunque también tuvo otras influencias como de Condillac, Galiano, y otros, voy a dejar por aquí estos nombres extraños antes que te marees, y enfocarme en lo que verdaderamente nos interesa; en sus ideales económicos y sociales. - Pero, cómo sabes lo que pensaba Belgrano?, si vos dijiste que muy pocos sabían que era economista.- Bueno eso no es tan así; solo basta con buscar un poco en los libros de historia o en la tan usada Internet. Manuel transmitió sus ideas económicas a través de tres caminos diferentes. La primera de ellas es mediante traducciones efectuadas de los libros de unos señores con ideas muy parecidas a las suyas. La primer traducción fue “Las máximas Generales del Gobierno económico de un reino agricultor” del mencionado Quesnay. La segunda fue “Principios de la ciencia económica política, de Margrave de Baden” de dos autores. Sin embargo, Belgrano pudo advertir que el contexto más avanzado donde se desarrollaban las ideas del liberalismo económico europeo no podía ser obviado; ya que trasladar el nuevo paradigma a su tierra requería adaptaciones. El segundo instrumento fue a través de las memorias que debía leer anualmente ante los miembros del Real Consulado de Buenos Aires, del cual fue su secretario. Las memorias pueden ser consideradas como discursos doctrinarios y consejos prácticos con los que el secretario del Consulado debía abrir anualmente las sesiones del cuerpo. Por último publicó diversos artículos en el Correo de Comercio; el cual era un periódico que además dirigió el prócer. - Veamos…para detallarte alguna de las ideas que Manuel exponía te propongo que me respondas esta cuestión: ¿te parece bien que cuando vas a un almacén a comprar una manzana, ya esté marcado el precio?, es decir que cada cosa tiene su propio valor, sin importar mi opinión acerca de lo que vale, en nuestro ejemplo esa manzana? - Y claro, son los vendedores en acuerdo con el mercado los que fijan los precios de los productoscontestó rápidamente Manuel. - Bien tienes razón, ese precio de acuerdo a la opinión de Belgrano, depende del valor de uso y el valor de cambio. Él afirmaba “Ninguna cosa tiene su valor real ni efectivo en sí mismo, sólo tiene el que nosotros le queremos dar; y éste se liga precisamente a la necesidad que tengamos de ella; a los medios de satisfacer esta inclinación; a los deseos de lograrla y a su escasez y abundancia…” Un concepto muy claro que se puede deducir del pensamiento de Don Manuel es el papel de la demanda en la formación del precio. En la tercera memoria, trata el tema de la interdependencia entre la agricultura y comercio afirmando: “…apenas el hombre se dedica a cultivar la tierra, cuando ésta le presenta abundantes cosechas, pero si tuviesen valor, recompensarían su trabajo con exorbitantes ganancias; pero este valor no es posible lo tengan mientras no haya consumidores, o se supla su falta” - Es necesario Manuel que entiendas las condiciones históricas- políticas de esa época en América del Sur, para comprender porqué te digo que Belgrano era un hombre muy adelantado, que tenía ideas económicas muy claras y sabía como llevarlas adelante. Él supo ver el futuro que le esperaba a su país. Para explicarte un poco tienes que recurrir a la historia de nuestro país Uruguay; que en ese entonces era llamado como Banda Oriental y pertenecía junto con Buenos Aires, Paraguay, Tucumán, Santa Cruz de la Sierra, Alto Perú y Cuyo al Virreinato del Río de la Plata. Ésta fue una entidad territorial, integrante del Imperio español, establecida durante su período de dominio americano. Todos esos territorios, que ahora en nuestra actualidad pertenecen a países independientes como Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia y el Sur de Brasil, integraban el virreinato. España, conforme a su política mercantilista, impuso desde el comienzo a sus colonias la obligación de comerciar sólo con ella y en barcos españoles que zarpaban de sus propios puertos. En cuanto al Río de la Plata, lo consideró siempre como la puerta de servicio del imperio en territorio americano. Buenos Aires constituía la entrada y salida natural de la plata boliviana del alto Perú. Este virreinato, - como ya habrás estudiado en la escuela- fue creado debido al gran interés de los portugueses, ingleses y franceses en el nuevo y creciente mercado americano, tanto como de sus puertos. Se había creado un gran tráfico mercantil, que se veía coronado por el contrabando portugués y holandés. Esto no fue muy bien recibido por la Corona Española, que no simpatizaba demasiado con sus vecinos. Es así que en 1716 se funda el Virreinato y en 1778 se da lugar al Dictado del Reglamento de Libre comercio. Este estatuto rompió el monopolio portuario de Cádiz como salida del comercio con las Colonias hispánicas, permitiendo a diversos puertos españoles dicho tráfico. Pero ello no implicó la anulación de impuestos sumamente pesados que se reaplicaban tanto a la salida de los puertos españoles como a la entrada a las colonias. Aún así, la expansión de los negocios lleva a multiplicar las importaciones y exportaciones, permitiendo el desarrollo de las actividades productivas. De esta forma al llegar el año 1794, se crea el Consulado de Buenos Aires. Creo que ya te mencioné que Belgrano había sido su secretario, pero lo que no dije fueron sus funciones. Una de ellas era la tradicional de carácter judicial, y por otro lado dar consejos para promover el desarrollo económico. Manuel dura en este cargo desde 1794 a 1810 cuando renuncia. Sus acciones en el Consulado fueron sumamente importantes, ya que desde allí luchó para liberalizar el comercio rioplatense del fuerte proteccionismo español a los comerciantes de ese origen. Esta idea se ve expresada en las siguientes palabras que él mismo pronunció “…la agricultura solo florece con el gran consumo, y éste, ¿cómo lo habrá en un país aislado y sin comercio como el que yo he propuesto? Así es, que los economistas claman por el comercio, que se atraigan a los extranjeros a los puertos de la nación agricultora, pues la prosperidad de aquellos deba contribuir a la de ésta; con ella se multiplican los hombres y, por consiguiente, los consumidores; estas dan más valor a las tierras, y aumentan el número de los hombres que trabajan”. Otro punto que intentó fomentar es el desarrollo de la agricultura. Quizá Belgrano visualizó al país cerealero y exportador en el que se convertiría su país un siglo más tarde. Esta reexaltación de la agricultura está en lo principal de su obra. En la Primera Memoria dejaba muy en claro su opinión: “La agricultura es la madre fecunda que proporciona todas las materias primeras que dan movimiento a las artes y al comercio”, “…es sin contradicción el primer arte, el más útil, más extensivo y más esencial de todas las artes” - Dime Manuel, ¿alguna vez has escuchado la frase “la riqueza de un Estado se mide de acuerdo a la cantidad de oro que se encuentra en sus arcas”? - ¡Sí!, respondió muy orgulloso el niño, quién recordaba haber escuchado esa frase en una clase de historia en la que estuvieran hablando del mercantilismo. - Bueno, por el contrario a Colbert, Belgrano aseguraba que “el valor de los Estados no consiste en el tesoro público, sino en la cantidad de fanegas de tierra bien cultivadas que tengan” Don Manuel pensaba fomentar la agricultura por medio de la enseñanza. Sostenía que al igual que en Europa se debía volcar todos los esfuerzos a través de academias y sociedades para compensar el trabajo de los hombres que trabajaban la tierra. Además de dar varias recomendaciones sobre como aprovechar la tierra, aconseja a los jóvenes agricultores a profundizar sus estudios del suelo, perfeccionar sus conocimientos sobre bonos, intensificar la lucha contra plagas que perjudican la siembra y arruinaban las cosechas. Propone en consecuencia, la implantación de un sistema de premios y subsidios a los fines de estimular e incentivar una mayor producción agrícola a través de una adecuada educación tecnológica. Pero, este hombre, puso el mismo entusiasmo y convicción que utilizó para defender la actividad del campo en auspiciar la artesanía (o industria) y el comercio. “Fomentar la agricultura, animar la industria y proteger el comercio” es el título de la primera Memoria. Según Belgrano “Las ramas de agricultura, industria y comercio son las tres fuentes universales de la riqueza”. Afirmaba fuertemente que el comercio tenía una importancia vital sobre la agricultura “Este país, que al parecer no reflexiona ni tiene conocimientos económicos, será sin comercio un país desgraciado, esterilizada su feracidad y holgada su industria”. Sostuvo fervientemente que el valor de la producción agrícola crece cuando se han removido los obstáculos al comercio. Estos obstáculos eran: la ignorancia del pueblo; de ahí su insistencia en crear escuelas públicas donde se enseñará matemáticas, castellano, latín, dibujo las cuestiones prácticas inherentes a la actividad agrícola, mercantil y ala navegación. Otra de las trabas era la falta de comunicaciones adecuadas, tanto internas como externas, por lo que se lo vio luchando constantemente por la construcción de caminos, puentes, muelles, canales, etc. Y por último, otro impedimento era la falta de libertad para comerciar. - ¿Conoces el sector de recursos humanos de las empresas, tan mencionado en los últimos tiempos? - Claro, son los que se encargan de organizar estrategias para mejorar el negocio, y a su vez ayudan a la sociedad planteando distintos proyectos. Ciertamente, de eso mismo se encargaba Don Belgrano. Procuraba un desarrollo de este sector para alentar la producción y para fomentar un desarrollo de la persona que la alejara del ocio y de los vicios. También fue un gran luchador por los derechos de los negros y los mulatos. Para estos reclamaba que se conservaran registros para sus niños, con el fin de que recibieran instrucción común en las escuelas públicas. Por sobre todas las cosas se preocupaba por la situación moral y económica de los que vivían en ranchos miserables y sostenía que con una educación adecuada para el trabajo, se combatirá la vagancia recuperando de esa manera seres humanos aptos y capacitados para desarrollar la patria. Pero sin embargo Manuel, cuando Belgrano llega a Buenos Aires, todos sus ideales y planes se derrumban como una pared sin buenos cimientos al pasar una tormenta de viento. Esta ciudad se encontraba en la más profunda desorganización en todas las materias que interesaban a su función. Y por sobre todo, Don Manuel se desencanta ante el inactivismo de sus patriotas. “Me hierve la sangre, al observar tanto obstáculo, tantas dificultades que se vencerían rápidamente si hubiera un poco de interés por la patria”. En ese entonces los hombres eran movidos por sus intereses particulares posponiendo el bien común. Aún así, nuestro protagonista continúo luchando hasta el final de los días como un verdadero guerrero, que lejos de buscar su gloria, buscaba el bien público y ante todo la libertad de sus congéneres. “Sirvo a la patria sin otro objeto que el de verla constituida, ése es el premio al que aspiro”. Como verás, fue un hombre con grandes planes, pero más allá del cargo que ocupaba como Secretario del Real Consulado, enfrentaba un enemigo muy poderoso: la burocracia. Pero no había impedimento capaz de hacerlo posponer y cambiar sus ideales. En sus memorias se destacaba entre muchas cosas la importancia de la educación. El plan de éste abarcaba una enseñanza técnica a través de diferentes escuelas, como las de Náutica y de dibujo, buscando fomentar la ciencia y la técnica. Belgrano estaba convencido que un país con enormes riquezas naturales, si no poseía una flota para transportar sus productos, seguiría a merced de las condiciones que le impusiera quien tuviese los barcos. Recién pudo fundar la Escuela de Náutica el 25 de noviembre de 1799 a pesar de todas las controversias que se interponían en su construcción. La Academia de Dibujo por su parte comenzó a funcionar a fines del siglo XVIII en Buenos Aires, y su función se debe exclusivamente a la iniciativa de Belgrano, quién nuevamente debió enfrentarse a varios obstáculos. Por un lado la falta de apoyo de los miembros del consulado quienes trataban de impedir su instalación mencionando motivos económicos. Por otro lado, la situación de crisis en España que se encontraba en guerra con Inglaterra y que consideraba este tipo de establecimiento como un simple lujo. Don Manuel promulgaba la creación de esta escuela ya que sería útil para las diversas ramas de las artes manuales, como para los altos estudios de filosofía. Concluye Belgrano diciendo “ Que es forzoso que esta Junta, cuya obligación es atender por todos los medios posibles a la felicidad de estos países, lo establezca ( igualmente que una de arquitectura, pues en los países cultos no solamente es útil, sino de primera necesidad) en todas las ciudades principales del virreinato y con más prontitud en esta capital, para cuyo caso tendré el honor de presentar unas constituciones y métodos de enseñar, principalmente a aquellos que se destinan a los oficios menestrales”. A este plan de enseñanza también hay que sumarle la escuela de Comercio; para fomentar esta actividad, que se desempeñaba por herencia familiar. En esta escuela Belgrano propone que se enseñe aritmética, teneduría de libros, principios de cambio, reglas de navegación, etc. “La ciencia del comercio no se reduce a comparar por diez y vender por veinte: sus principios son más dignos, y la teoría que comprenden es mucho más elevada.” Hasta ahora Manuel, como habrás visto, hemos mencionado siempre a los hombres. Pero es muy importante que sepas que nuestro personaje fue uno de los primeros en ocuparse de la educación de la mujer en el Río de la Plata, buscando dignificarla. Inspirado en los ideales de la Revolución Francesa propone la fundación de escuelas para niñas. Esta iniciativa es muy original, ya que en ese entonces la mujer era dejada de lado en ese tipo de actividades. Belgrano no buscaba formar mujeres intelectuales, sino que con criterio práctico tuvo más presente a la madre de familia. Buscaba alejarla de la ignorancia y fomentar la virtud “ Se deben poner escuelas gratuitas para las niñas, donde se les enseñará la doctrina cristiana, a leer, a escribir, coser, bordar y principalmente inspirarles amor al trabajo, para separarlas de la ociosidad, tan perjudicial, o más en las mujeres que en los hombres”. Otro de los principales ideales de este hombre con respecto a la enseñanza, era que esta fuera gratuita para todos. Por ejemplo en los reglamentos de la Escuela de Náutica y de Dibujo estipulaba, escrito por su propia mano, establecía que especialmente debía darse lugar a los naturales, como se denominaba a los indios, y a los huérfanos, por ser estos los mayores desposeídos de nuestra tierra. En cuanto a los huérfanos, no constituyen un tema menor en una época donde poseer un buen apellido resultaba fundamental. De esta forma, los niños que terminaban en orfanatos en la llamada “Casa de los expósitos” quedaban con esa huella social para toda su vida. Para combatir la situación, Manuel planteaba un sistema de becas que incluyera el subsidio a los tutores. El proyecto de Belgrano fue el iniciador, y abarcaba una educación primaria gratuita y católica. Según sus palabras “…las escuelas gratuitas a donde puedan los infelices mandar a sus hijos, sin tener que pagar cosa alguna por su instrucción: allí se les podrán dictar buenas máximas, e inspirarles el amor al trabajo, pues en un pueblo donde reine la ociosidad, decae el comercio y toma su lugar la miseria”. Es de esta manera que se iba visualizando un futuro más igualitario para todos los integrantes de la sociedad argentina, sin importar su poder monetario, influencia política, etc. Como imaginarás Manuel, todos los cambios sociales se dan a través de un proceso que lleva mucho tiempo, y sobre todo empeño de las personas que lo llevan adelante. Los cambios no ocurren de un día para el otro; pero lo importante es siempre dar el primer paso, para demostrar que las realidades pueden cambiar siempre a favor de los más débiles, que irónicamente constituyen la más grande masa social. Sin dudas Belgrano fue uno de los principales auspiciantes de esos grandes cambios. Sin embargo los antiguos privilegiados, esos que habían vivido bien bajo el dominio de los españoles, sabían que estos cambios traerían grandes consecuencias, y no exclusivamente buenas para sus beneficios; para ellos era necesario que las cosas siguieran como antes. Por eso mientras hombres como Don Manuel intentaban echar frutos en su Patria Vieja, para poder afianzar sus raíces, otros simultáneamente tramaban la manera de recuperar su antiguo poder y privilegios. Me imagino que te estarás preguntando, cuál fue el papel que ocupó Manuel Belgrano el 25 de mayo de 1810, y cuáles fueron los hechos que se desencadenaron ese mismo día, y eso es lo que te intentaré contar, si mi memoria no falla… Sin duda alguna el 25 de mayo es la fecha más emblemática y destacada del proceso histórico argentino. Fue el día en que se concretó la formación del primer gobierno patrio, tras destituir del cargo al Virrey del Río de la Plata, el español Cisnero. Es así, que este día constituye el momento tan esperado en que las Provincias Unidas del Río de la Plata obtuvieron su libertad. Sin duda, no fue el último paso definitivo de los movimientos independentistas, sino que fue el gran comienzo que se venía gestando en la cabeza de cada uno de los compatriotas. En esos tiempos tanto en la ciudad de Buenos Aires, así como en otras capitales de los dominios españoles en América, existía un fuerte descontento de la población criolla con las autoridades españolas. Bastaba una chispa para encender la mecha, y esa chispa llegó en el mes de mayo de 1810, cuando se conoció la noticia de que la Junta de Sevilla (gobierno español tras la invasión de Napoleón) había caído. El gobierno del Virrey español Cisneros comenzó a cuestionarse, desatando de esa forma una crisis institucional. Como deberás haber escuchado alguna vez; cada final es un nuevo comienzo; bueno, el final del Virreinato del Río de la Plata fue el comienzo de las sucesivas acciones revolucionarias que tendrían lugar después de ese día. Posteriormente, en 1816 se daría la declaración de la independencia. Y por supuesto que estas acciones desataron una guerra contra España hasta 1824 ya que los funcionarios españoles no reconocían el nuevo gobierno. Es aquí que entra en acción nuestro amigo Belgrano, quién presiona junto a otros criollos para que se convocara un “cabildo abierto”. Este era una especie de asamblea en la que los miembros más importantes de la sociedad decidirían qué acciones tomar. El Cabildo Abierto se llevó a cabo el 22 de Mayo, en el Cabildo de Buenos Aires, quedando en su lugar una Junta de Gobierno. Así relataba Belgrano los hechos que se desencadenaron en mayo de ese año “Se vencieron al fin todas las dificultades, que más presentaban el estado de mis paisanos que otra cosa, y aunque no siguió la cosa por el rumbo que me había propuesto, apareció una junta, de la que yo era vocal, sin saber cómo ni por dónde, en que no tuve poco sentimiento." Después, la Revolución le arrancó a Belgrano la pluma de la mano, y con la misma diestra empuñó la espada, que había aprendido a utilizarla durante las invasiones inglesas. Inmediatamente, se lo convoca para dirigir una campaña militar al Paraguay, a fin de propagar la revolución. Y a pesar de su escasa experiencia militar, se las arregla para instituir la subordinación y el orden en las tropas, haciendo del respeto por la población civil la máxima premisa de la expedición. En su transcurso encabezaría un hecho que sin duda marcó para siempre su persona, así como la de todos los argentinos; el 27 de febrero de 1812 crea la bandera nacional. Belgrano diseñó la bandera, en vista de que los cuerpos del Ejército usaban distintivos diversos. De esta forma propuso el uso de la escarapela blanca y celeste. El Triunvirato – antes de qué me preguntes qué era el triunvirato te lo aclararé- repuso la abuela sonriendo – era el órgano ejecutivo que reemplazó a la Junta Grande y las Provincias Unidas del Río de la Plata. Originalmente, estaba formado por Feliciano Chiclana, Manuel de Sarratea y Juan José Paso- aprobó el uso de la escarapela blanca y celeste decretando: “Sea la escarapela nacional de las Provincias Unidas del Río de la Plata, de color blanco y azul celeste..." Ante la aprobación de su propuesta, Belgrano diseñó una bandera con los mismos colores, alzándola por primera vez en Rosario, a orillas del río Paraná. Allí en las baterías “Libertad” e “Independencia”, hizo jurar a los soldados de su tropa. Luego, mandó una carta al Gobierno para comunicarles el hecho. Ese mismo día, el triunvirato le ordenó hacerse cargo del Ejército del Norte. Sin embargo Manuel, ese gran hecho que marcaría la vida de los argentinos estuvo envuelta en mucha confusión. El gobierno le contestó la carta al General, ordenándole que disimulara y ocultara la nueva bandera y que, en su lugar, pusiese la que se usaba entonces en la Capital. Pero, cuando la orden salía de Buenos Aires, Belgrano ya marchaba hacia el norte y, por esta razón, no se enteró del rotundo rechazo del gobierno a la nueva insignia patria. Fue un 25 de Mayo de 1812, que al frente del Ejército del Norte, el entonces General en Jefe movilizó sus tropas hacia Humahuaca. En San Salvador de Jujuy, enarboló al ejército a su mando la bandera en los balcones del Ayuntamiento. En ese sitio la bandera argentina fue bendecida por primera vez. Ante este hecho, el Triunvirato nuevamente ordenó a Don Manuel que guardara la bandera, y le recriminó su desobediencia, sin sospechar que la carta dirigida a su persona nunca estuvo en sus manos. Ante esta petición, el General contestó que así lo haría, diciendo a sus soldados que se guardaría la bandera y le recriminó su desobediencia. Tanto en Argentina, como en cualquier país, la creación de la bandera nacional significaba una explosión de libertad, igualdad y fraternidad. Para tener una identidad un país necesita de héroes, relatos y leyendas. Con la creación de ese estandarte que los identificara, la gente se empezó a sentir “argentina”. Porque como sabes, un país no lo hacen solo los caudillos, los políticos, los soldados o los comerciantes; todos ellos necesitaban algo que los hermanara. Y en ese entonces no existía aún una insignia patria, que uniera a los argentinos y le diera una idea de país; de nacionalidad, que los impulsara a todos por igual; la bandera constituía un motivo por el que luchar, y ser leal a su Patria. Belgrano siempre fue un hombre realmente honorable. Se mostraba ante su ejército como uno más entre sus filas. No comía si el alimento escaseaba, vestía casi con harapos y padeció todas las enfermedades imaginables. Fue con todas las palabras un verdadero Líder. La situación del Ejército del Norte fue, en todo momento, desesperante. Así y todo, logró ganar las dos batallas más importantes de la revolución independista en territorio argentino, las de Tucumán en septiembre de 1812 y la de Salta en febrero de 1813. Ese mismo año se dirigió a Potosí y fue derrotado en Vilcapugio (el 1º de octubre de 1813). Luego, reorganizó su ejército, pero fue vencido reiteradamente en Ayohúma (el 14 de noviembre de 1813). Después de 1813, con las duras derrotas que sufrió, Belgrano transitó por una debacle política ya que fue removido de la comandancia del ejército siendo reemplazado por San Martín. Luego de esto viaja hacia Buenos Aires en donde lo arrestan y lo procesan, pero finalmente se le reconocerán sus méritos y honores. Obligado a participar en una desgraciada comitiva diplomática parte hacia Europa. A su regreso, toma nuevamente la comandancia del Ejército del Norte y forma parte del congreso que comenzó en Tucumán en 1816. Es en este congreso que Belgrano propone un ideal de gobierno que en esas épocas fue muy polémico, poniendo en cuestionamiento la tela de juicio de su persona. Este plan fue en general tratado como un disparate, pero sin embargo no deja de ser verdadero. una monarquía como - Dime Manuel, ¿qué pensarías si te hablará de forma de democracia? - Pues, creo que eso no es posible abuela, esas son cosas contradictorias, yo entiendo que una democracia es el gobierno de muchos, es el gobierno del pueblo, y eso se opone a una soberanía. - Es verdad, se puede decir que son cosas totalmente opuestas, pero sin embargo lo que planteo Belgrano era nada más ni nada menos que eso: una “ monárquica atemperada”, pero no absolutista. Al observar el panorama de su país, se apreciaba una ruptura entre los diferentes territorios. Pensaba que la solución sería una soberanía que tuviera a la cabeza un monarca perteneciente al linaje real de los incas, con capital en la ciudad de Cuzco. Buscaba un sistema que sirviera como factor de unión territorial, sin opresiones, y devolviéndoles, quizá simbólicamente, el poder americano a los dueños originarios y legítimos del mismo. "Ya nuestros padres del congreso han resuelto revivir y reivindicar la sangre de nuestros Incas para que nos gobierne. Yo, yo mismo he oído a los padres de nuestra patria reunidos, hablar y resolver rebosando de alegría, que pondrían de nuestro rey a los hijos de nuestros Incas." No es fácil comprender la idea monárquica del General Belgrano, lo que llevo a que la mayoría de la gente descalificarán su intención; le cayeran críticas por igual de liberales y revisionistas, acusándolo de 'iluso', de 'poco serio', de 'propuesta disparatada', de 'monárquico'. - Y, quién era el descendiente inca que se proponía para Rey de América del Sur? -Muy buena pregunta, el sucesor inca era un hermano del aguerrido Tupac Amaru. En son de burla, los periodistas porteños de esa época acuñaron el término “rey pata sucias” para nombrarlo. Hasta ese entonces la monarquía era la única forma de gobierno que conocían, y ¿qué monarca más legítimo que los descendientes de los incas? Sin duda alguna, si esta propuesta hubiera sido asentida, constituiría el factor de unidad de América del Sur. El proyecto de restauración de la antigua monarquía de los Incas, como coronación de la revolución americana, fue promovido por Belgrano y acogido por el Congreso de Tucumán. Era una idea que estaba en la cabeza de muchos pensadores y tenía su razón de ser, sino en los hechos, por lo menos en la imaginación, que a veces gobierna a los pueblos más que el juicio. Contenía empero un plan político, que tenía su procedencia histórica, y que encontraba eco así en las poblaciones indígenas, como en las ideas que en aquella época circulaban respecto de la identidad de causa entre los antiguos ocupantes del suelo y los nuevos revolucionarios hijos de la tierra. La revolución americana, elemental en sus propósitos y orgánicamente democrática por la índole misma de los pueblos, fue no sólo una rebelión de las colonias hispanoamericanas contra su metrópoli sino principalmente de la raza criolla contra la raza española. En sus proclamas en sus boletines, en sus bandos, en sus manifiestos, en los artículos de su prensa periódica, en sus cánticos guerreros, los patriotas de aquella época invocaban con entusiasmo los manes de Manco Cápac, de Moctezuma, de Guatimozín, de Atahualpa, de Siripo, de Lautaro, de Caupolicán y de Rengo, como a los padres y protectores de la raza americana. Los Incas, especialmente, constituían entonces la mitología de la revolución. En 1816, en medio del polvo del combate y el delirio sagrado de la lucha a muerte entre dos razas, no es de extrañar que el ideal fuese la continuación o la renovación del antiguo imperio del Cuzco. Pese a este despliegue argumental y erudito explicando el alto valor de la propuesta de Belgrano, se reconocía que el plan era casi imposible, y carecía de sentido práctico, ni siquiera sentido común. Era extravagante en la forma e irrealizable en los medios, concebido sobre falsas ideas, con más inocencia que penetración política y con tanto patriotismo como falta de sentido práctico. - Creo querido, que las siguientes estrofas que enunció Tupac Amaru resumen a la perfección las ideas de Don Manuel: Ya en Cuzco con empeño quieren sacudir, y es ley, el yugo de ajeno rey y reponer al que es dueño. El general Inca viva, jurémosle por rey porque es muy justo y de ley que lo que es suyo reciba No todos se opusieron a esta iniciativa, pero se necesitaba gran cantidad de votos para su aprobación. Otra vez los congresales de Buenos Aires tenia casi ganada la batalla ya que presentaban un bloque firme, dispuesto a desbaratar el plan del Inca, sostenido, sobre todo, por los altoperuanos. De esta forma la propuesta monárquica de Belgrano no prospera. La independencia fue declarada en 1816, aunque hasta 1880 la situación interna del país fue de constantes enfrentamientos civiles. Años más tardes, ya al final de su camino, aquejado por una grave enfermedad (hidropesía) que lo minó durante más de cuatro años, y todavía en su plenitud, al prócer lo esperaría, como a tantos otros grandes hombres de la historia, la pobreza y la soledad con que se enfrentó a la muerte. El 20 de junio de 1820 sus ojos se cerraron para siempre, llevándose la imagen macabra de su patria asolada por la guerra civil, que le dio la sensación de que se hundía irremediablemente en el caos, y con ella su obra y sus afanes. Parece demasiado irónico el destino que le esperaba a este gran héroe; dejó su vida por el bien de su patria, luchando siempre por sus convicciones, sin tener en cuenta sus beneficios, y cuando su vida llega al punto final, sólo un diario “El Despertador Teofilantrópico” se ocupó de su muerte; para los demás no fue noticia. Este final lo engrandece aún más a aquel hombre que contribuyó tan significativamente a la independencia de su país, Argentina. Sin embargo, cuando se hizo la luz en sus hermanos compatriotas, y por fin se llegó a un período de paz, Belgrano fue recordado con amor. Su obra de educador y hombre de ciencia; sus virtudes cívicas, su espíritu de abnegación, de sacrificio personal y absoluto desinterés, sus resplandecientes glorias militares, todo se incorporó para enriquecerlo, al sagrado acervo de la patria. Su nombre evoca esta multiforme obra, pero está identificado con la bandera nacional que creara a su imagen, porque los colores patrios reflejan la pureza del alma que la concibió. Esa bandera que fue explosión de libertad, de igualdad y de fraternidad. Una bandera que evoca voces que cantaban y gargantas que gemían, fue sangre, fue vida, fue derrota y fue triunfo, fue todo a la vez... Fue jirón del cielo, para recordar a los hombres y a los pueblos, que nada hay en el mundo superior a la libertad. Todo eso significa la bandera de Belgrano, la bandera argentina. - Pero, está en nosotros perpetuarlo, y hacer que su vida no haya pasado en vano, porque sin duda alguna lleva un papel protagónico en la historia de nuestro país vecino, pero también en la historia sudamericana, en nuestra historia. Recuerda siempre que fuimos y somos “hermanos de libertad” Y te lo aseguro, nuestro personaje, Manuel Belgrano nunca será enterrado en el olvido, y habrá de vivir mientras los cielos presten sus colores y hasta el último soplo de vida de los argentinos. - ¿Qué más decir de este hombre?, creo nieto, que nunca se va a poder llegar a describir todos los aspectos que fueron creando la vida de Manuel Belgrano, él supo vivir y entregar su existencia a los demás, y eso es sin duda algo que muy pocos lo consiguen. Nunca olvides que vivió como un hombre más, murió en el olvido, mientras resonaban los cañones y gritos de libertad de su ciudad natal. Pero este olvido fue aplacado por personas que existieron, existen y van a existir; personas que como tú ceden aunque sea unos minutos para regresar en el tiempo, y convertir a aquellos hombres en nuestros héroes. Es así Manuel que espero poder responder tu respuesta. Aunque aún quedan muchos cuentos que contarte; muchas leyendas, muchos protagonistas que al igual que Manuel Belgrano fueron constituyendo la identidad de su país Argentina, pero esa es una historia que te voy a contar otro día… FIN… Entre lienzos y óleos Estéfani Lucía Rodríguez Bobadilla Uruguay - ¡Es muy aburrido! Mariza lanzó una mirada desafiante a su madre, Laura, que parada en un banquito seguía buscando libros en la biblioteca de su cuarto. -No importa, tenés que hacer ese proyecto para salvar la asignatura y no darla en un examen. Ya harta Mariza saca una gomita de su bolsillo, se sujeta el largo cabello color azabache haciendo un gran moño y prende su lámpara de escritorio para ver mejor las hojas que se encontraban allí. - ¡Pero yo sé que en el escrito la apruebo! Con una mueca de exasperación Laura baja del banquito y abre la puerta del cuarto. - ¡Ponte a estudiar ya! Te aviso cuando la cena esté servida. Sin más paciencia pasa por el marco de la puerta y la cierra con un golpe seco. -¿Por qué tengo que estudiar esto? Su mente se resistía a todo conocimiento de Historia que pudiera inculcársele. - En el año 1814, el rey Fernando VII regresaba al trono de España… El celular empieza a vibrar y luego una canción de cumbia villera resuena en toda la habitación. Mariza, una Argentina de 15 años no podía evitar adecuarse a la moda y costumbres del momento. Su tío, Felipe, era el dueño de un par de discotecas de la zona, de esta forma ella podía ir seguido a bailar y muchas veces conseguir entradas para sus amigas, cosa que la hacía muy popular en el liceo. Pero en ese momento la popularidad no le servía de mucho, tenía que entregar un proyecto para Historia y como siempre se había olvidado, dejando todo para el domingo a la noche. - Hola ¿cómo andas? ¿Ya terminaste el trabajo? Nos vamos a juntar en la plaza un rato ¿venís? Va a venir Matías… Era Camila que le escribía un mensaje de texto al celular, y Matías era el chico especial para ella, pero la madre no la dejaría salir. -Será mejor que intente estudiar. Sin responder el mensaje se paró de la silla tomó el banquito y hurgó un poco más en la biblioteca. Sacó un par de libros y vio una caja de madera detrás de donde se encontraban los mismos, tiró fuerte pero la caja no salía. Siguió sacando los libros del último estante donde apenas alcanzaba, haciendo equilibrio sosteniéndolos con una mano y con la otra tirando de la caja de madera. La curiosidad la carcomía y no dudó en dejar caer los libros para sacar la caja. Se sentó en la cama y pasó una mano sobre la tapa llena de polvo, estaba tallada en el contorno y tenía iniciales que parecían ser de su tío Felipe. Abrió la caja como si hubiese encontrado un tesoro y al ver en su interior se desilusionó. Allí estaba un libro viejo de tapa amarillenta, ya se arrepentía del desorden que había hecho en su dormitorio. Pero igualmente lo abrió, en él se encontraban apuntes apenas legibles e imágenes de pinturas, cuadros famosos y esculturas antiguas. A ella le encantaba el arte, soñaba con ser una estupenda pintora. Pasaba una por una las páginas del libro mirando aquellas obras de arte de las cuales conocía sólo algunas, pero el tiempo pasaba y ya no podía seguir distrayéndose, así que cerró el libro y siguió con Historia. Pero el celular volvió a sonar. - Dale ¿venís? Martín quiere hablar contigo. Su amiga seguía insistente, Mariza ya se había imaginado a Martín de mil formas distintas. Soñaba con que le dijera que la quería de maneras originales y románticas, en ese momento pensó en él, estaban juntos viendo un atardecer en la costa. Ella sabía que eso nunca pasaría pero le gustaba soñar despierta. ¿Qué le querría decir Martín? Su cabeza le daba vueltas y siguió leyendo. -"La vida es nada si la libertad se pierde." Manuel Belgrano. Esa frase le golpeaba la cara. -¿Para que quiero saber lo que pasó en Argentina? ¿Quién fue Belgrano? ¡Yo quiero saber qué me quiere decir Martín! Miró el reloj de pared y se dio cuenta que había perdido mucho tiempo y el trabajo lo tenía que presentar al otro día. Se dispuso nuevamente a leer, así pasaron varias horas cuando notó que algo se movía dentro del libro de pinturas que había encontrado. Lanzó un grito ahogado y se movió rápidamente para atrás como cuando ve una araña. Se fue acercando lentamente y notó una luz brillante que salía entre las hojas del libro, éste comenzó a temblar cada vez más fuerte provocando que el escritorio también se moviera. Armándose de valor tomó una regla que estaba cerca de ella y abrió el libro que seguía agitándose. Al ver las hojas vio una pintura que tenía algo escrito en la parte inferior, no pudo distinguir bien que decía pero pudo notar que era de Ángel Della Valle y algo extraño sucedió. De pronto vio que una sombra se movía dentro de la pintura y parecía que los personajes querían salir, Mariza atónita balbuceaba, intentaba llamar a la madre pero no conseguía pronunciar palabra alguna, tomó los libros y cuadernolas que estaban encima del escritorio y los tiró sobre aquello tan extraño. Se alejó lo más que pudo dirigiéndose a la puerta pero ésta no abría, mientras tanto notaba como caían del libro cosas extrañas de colores pegándose al piso y a las paredes. Ella se cayó y quedó sentada junto a la puerta con una expresión de miedo en su rostro diciéndose a si misma que era una locura y que debía de estar soñando. Pronto la habitación cambió de color y las cosas se iban deformando muy rápido. Las paredes se caían, ella veía como la biblioteca así como todo en su cuarto se desvanecía dejando un paisaje de campo lleno de flores. De repente el sol brillaba sobre ella, alguna nube muy blanca se asomaba en el cielo y podía sentir el calor en todo su cuerpo, el pasto verde y un aroma a primavera llenaba el aire. Se levantó del suelo algo confundida pero no sin antes tocar el pasto con sus manos. En ese momento sintió que tenía unos guantes blancos con un bordado muy delicado y al levantarse pudo notar que su ropa había cambiado, sus jeans y su campera sport ya no estaban. En cambio lucía un espléndido vestido con una mezcla de color ocre y marfil, éste era de manga corta con bordados y tenía una faja que apretaba su cintura haciéndola más delgada. Pero no era lo único que había cambiado, se dio cuenta que ahora era una mujer de unos veintitantos años de edad. Se descalzó y giró varias veces en el mismo punto generando que su vestido bailara con ella y se dejó caer nuevamente en la fresca hierba del campo lleno de flores, esa armonía que sentía la hizo olvidarse por un momento de lo que había pasado. Pero al recordarlo se repitió a si misma que solamente era un sueño y se despreocupó de lo que pudiese pasarle. Sus pensamientos se interrumpieron por unas voces que escuchó a lo lejos, se trataba de varios hombres que discutían a unos cuantos metros de Mariza. Al igual que ella, vestían extraño pero al mirar detenidamente pudo reconocer a uno de los hombres. Era Martín, mucho mayor de lo que lo recordaba, pero no pudo entender su conversación hasta que se acercó al lugar. Los pájaros cantaban y Mariza se sentía una princesa dentro de ese vestido, cuando una carreta empujada por bueyes pasó junto a ella dejándola ver una especie de casita. Frente a ésta se encontraba Martín hablando con un hombre a caballo, ambos vestían camisa blanca, en los tobillos una especie de calzoncillo ensanchándose de arriba hacia abajo y rematado este con flecos y bordados. Usaban botas a las cuales les faltaban las puntas, por donde se asomaban los dedos de los pies. Martín llevaba un chaleco y detrás en la cintura calzaba un facón, llevaba un pañuelo color rojo que tapaba su melena desmarañada mientras el hombre a caballo usaba un sombrero cónico que parecía ser rígido. Otro hombre se encontraba sentado frente a la pequeña casa tocando una guitarra con una vestimenta similar pero además usaba un poncho que llevaba doblado sobre el hombro izquierdo. La joven no dudó en correr hacia Martín y abrazarlo, éste la rechazó dando un paso hacia atrás, no la reconoció. -Niña ¿qué haces tu por estos lugares?, una pulpería no es lugar para una señorita como tú. El acento con que pronunciaba cada palabra parecía que era una broma como las que le hacía siempre. -Martín soy yo, Mariza. En ese momento ella pudo notar algo extraño, su voz también había cambiado pero de una forma diferente. Él la miró con desden y siguió hablando con el hombre a caballo. -Hay que esperar que baje un poco el arroyo para poder cruzar el ganado… Martín escuchaba lo que le decía su compañero pero aún estaba algo distraído por la extraña situación de aquella mujer de alta sociedad en la pulpería. Ella, sin entender por completo de lo que hablaban se acercó al gaucho que se encontraba tocando la guitarra, se sentó en el suelo junto a él y se quedó un rato escuchando su melodía, .De repente la puerta de la pulpería se abrió bruscamente, dos hombres, uno de ellos más avejentado que el otro, discutían y se empujaban. Al parecer el más joven no le quería pagar la bebida que había tomado y el dueño lo echaba del lugar. Mariza con la discusión quedó exaltada y entró a la pulpería sin pensar demasiado. Una vez dentro el olor era apenas soportable, una pequeña ventana era la única fuente de luz y todos la miraban, se sintió muy incómoda y decidió sentarse en el banco más cerca de la puerta para no llamar mucho la atención; aunque parecía como si todos hubieran dejado de hacer sus cosas por su presencia. Los murmullos eran constantes pero estos se vieron interrumpidos por la puerta que nuevamente se abría de un sopetón, allí estaba Martín que se sentó junto a ella y pidió una caña. Les sirvieron las bebidas, y él tosió para aclararse la voz. -Bueno decirme, ¿qué te trae por aquí? Soy Eustaquio. -Yo soy Mariza. Ella lo miró extrañada pero notó que le estaba siendo sincero, no la recordaba y a pesar de la barba y el aspecto ella vio en sus ojos al mismo amigo fiel del que estaba enamorada. Él sonrió como si escuchara sus pensamientos y Mariza se decidió a contarle toda la historia, sin omitir detalle alguno, después de todo era su mejor amigo. Eustaquio no la interrumpió ni un solo momento y al terminar su relato él se quedo un instante en silencio, tomó un sorbo más de la caña que había pedido y simplemente le dijo “te creo”. Siguieron tomando por unos quince minutos más, ambos en silencio cuando escuchan que alguien grita algo en la lejanía. Todos salieron a ver que sucedía, un militar se acercaba a todo galope en un caballo marrón y blanco, él vestía del mismo modo que en sus libros de Historia, tenía chaqueta azul con muchos botones y botas de cuero hasta las rodillas. Cuando este se pudo acercar, alrededor de veinte personas ya estaban reunidas para ver que sucedía. - ¡Atención! Las fuerzas de Napoleón avanzan sobre España, todo cambiará en el Virreinato. Diciendo esto se retiró con la misma rapidez con que llegó y así poder hacer llegar el mensaje a otros lugares. Eustaquio confundido miró a Mariza, todo el paisaje sonoro se convirtió en un murmullo constante y dio lugar a alguna discusión, nadie entendía lo que pasaba. Toda la pulpería se encontraba en un mar de preguntas -¿Quién es Napoleón? - ¿Qué hacía en España? -¡Los militares nos van a matar a todos! -¡Me quieren quitar mis vacas, estoy seguro! -¡Nos van a mandar a la guerra! -¿Cambiará en qué? -¿Qué nos importa a nosotros? El gaucho de poncho se paró del suelo y sin opinar nada al respecto comenzó a tocar la guitarra y a cantar una payada sobre la situación. Todos rieron y entraron nuevamente como si el viejo solucionara los problemas que se avecinaban. Eustaquio y Mariza se sentaron bajo la sombra de un árbol -¿Quién será Napoleón?-Pensó en voz alta el muchacho. - Es el Emperador de Francia. Mariza recordó lo que hacía unas horas atrás se encontraba estudiando para su proyecto. -¿Y tú como sabes eso? A él le costaba mucho creer que ella supiera de esas cosas, aunque de la forma que vestía parecía pertenecer a la nobleza y no era extraño que supiera quien era Napoleón. Más extraño era encontrar una chica así y sola en un lugar como ese, a pesar de su extraña historia seguía siendo raro. -Ya te conté de donde vengo, todo esto ya pasó. Se encontraba enfadada por sentir que dudaba de ella. -Cierto que ya me lo habías dicho, pero entonces dime, ¿Qué va a pasar ahora? -No lo se, no terminé de estudiar, eso también ya te lo he dicho. En ese momento ella siente que el piso empieza a temblar, ese temblor se hace cada vez más fuerte y todo se desvanece. Ve que Eustaquio habla pero no logra escuchar lo que le dice y lo abraza fuertemente, cierra los ojos y de pronto escucha personas hablando, muchas personas conversando a la vez. Decide abrir los ojos y mirar primero a su derecha donde aún se encontraba Eustaquio con una expresión de susto en el rostro. Se dispone a mirar a su alrededor y vio que se encontraba en una especie de reunión, notó que habían personas de distintas clases sociales así que pensó que esta vez iba a pasar más inadvertida con su vestido, pero se dio cuenta que no había ninguna mujer. -¡Te lo dije! -Y yo te dije que te creía Se encontraban sentados como muchos otros en una reunión de unas cuantas personas cuando un señor vestido con un traje negro y largo se paró, se quitó el sombrero y todos se callaron. -Yo, escribano doy comienzo al debate de este cabildo abierto. Así tomaron la palabra muchas personas hablando sobre la soberanía de los pueblos americanos. El gran problema había surgido a partir de la toma de España y la Península Ibérica por Napoleón Bonaparte. Pero el debate giraba en torno a la soberanía del pueblo de Buenos Aires. Mientras que hablaban Mariza refrescaba su memoria con lo que estaba pasando. Eustaquio intentaba comprender la situación pero le resultaba muy difícil, tanto a él como al resto, entender algunas cosas. -¿Qué va a pasar con el mercado? -¿Y con mi ganado? - ¿Quién va a dirigir y gobernarnos? Las personas no paraban de preguntarse, estando perdidos sin el nuevo Rey de España Fernando VII, en un Buenos Aires que comerciaba fundamentalmente con esa gran potencia, y sus colonizadores. Otro hombre en esa reunión anunció finalmente. -La decisión de la cuestión es urgente así que se necesita establecer un Gobierno Provisorio que luego, se transformará en definitivo. Diciendo esto todos aplaudieron y se realizó una votación en forma pública, la destitución del Virrey Cisneros tuvo la mayoría de votos. Se decidió entregar el mando al Cabildo de la capital, quien establecería el modo de designación de una Junta, posición que coincidía con la opinión de Cornelio Saavedra, uno de los integrantes de la reunión. Salieron de allí una vez concluida la junta y al encontrarse en la ciudad Mariza pudo notar el nerviosismo que esto le causaba a Eustaquio, acostumbrado a la tranquilidad del campo. Aunque para ella estar en ese pueblito era más tranquilo que la alborotada ciudad de Buenos Aires del 2010 de donde ella venía. Caminaron un rato en silencio por las calles empedradas, se hacía la noche y las estrellas se notaban con claridad. -Me parece como si te conociera de otra vida. Eustaquio se decidió a romper el silencio. -Es que hay algo que no te conté, yo ya te conozco, antes de quedar atrapada en este libro vos eras Martín, mi… -¿Tu pareja? -Mi amigo… solo un amigo Se le trababa la lengua pero era cierto, aunque ella no lo quisiera eran solamente amigos. Él, al ver la expresión en el rostro de Mariza se acercó a ella, se miraron profundamente a los ojos y suavemente le tomó las manos. Ella sintió un ardor que quemaba sus mejillas y supo que estaba colorada de vergüenza, luego un escalofrío recorría toda su espalda, él se fue acercando cada vez más con la luna como única testigo que iluminaba sus rostros. Volvió a pasar… todo eso se desvanecía, miraban a todos lados y la serenidad de la noche cambiaba drásticamente convirtiéndose en polvo; ruidos fuertes aparecían de la nada; gente corriendo de un lado a otro. Ellos se encontraban en un cerro junto a muchos indios que asustados veían hacia abajo, mujeres tapándoles los oídos a sus niños, todos con miedo y confusos. -¿Qué está pasando? Mariza se había parado del charco de barro donde había caído y no lograban ver cual era la situación, sólo escuchaban esos ruidos estruendosos y veía las miradas de las personas que la rodeaban. Pronto apartando a algunas personas lograron llegar a ver lo que ocurría, ¡una batalla se presentaba bajo sus ojos! En ambos lados cañones y sables estallaban en combate y un juego de luces se distinguía a lo lejos. Mientras Eustaquio observaba la situación que se presentaba debajo de ellos Mariza se acercó a una niña que se encontraba sola llorando, parecía de unos dos años de edad. Pero ni bien se acercaba apareció una mujer y tomó a la niña en sus brazos. Al mirarla con atención vio que su sospecha era cierta, era su amiga, Camila que se encontraba allí. Ésta se sentó en el suelo y Mariza junto a ella. -¿De dónde vienes? Seguramente la ropa de Mariza le debía llamar mucho la atención y al igual que Martín no la había reconocido. -Hola, soy Mariza, vengo del campo y de la ciudad, de mi pueblo y de mi tierra, de muchos lados. ¿Vos quién sos? -Soy Guidai, vengo del campo de las tierras cercanas. Así conversaron un rato en medio de explosiones, gritos y esa polvorienta situación. La india le contó que allí en Tupiza los militares del ejército del Norte se defendían de los realistas, luchando por su patria y la libertad. También hablaron de la importancia de esos sentimientos. -Somos hijos de la tierra, esto nos hace cuidarla y respetarla pero también defenderla. Guidaí tenía muy claro sus ideales y la forma de hablar hacía que Mariza pensara mucho en como era Camila. Ella de cierta forma siempre estaba luchando por el bienestar de todos, era una chica vegetariana y naturalista. Media hora más tarde se asomaron entre los matorrales que las protegían. Contemplaban el campo de batalla donde no podían hacer nada pero sin darse cuenta estaban haciendo mucho. Los realistas eran mayoría, con más y mejores armas, sin embargo al ver tantos indios viendo la situación, se acobardaron, creyeron que en el ejército del Norte eran muchos más y cedieron ante ellos retirándose de allí. Se dieron a la fuga arrojando banderas, armas y municiones, siendo perseguidos por dicho ejército. Con estos acontecimientos Guidaí junto a Eustaquio comienzan a correr persiguiendo a Mariza que se dirigía hacia donde se concentraban los militares victoriosos que festejaban. Cuando llegaron al lugar de batalla el olor a pólvora mostraba la escena que hacía poco se había vivido. Mariza paró de correr y lograron alcanzarla, y ella simplemente observaba el panorama como si buscara algo y allí estaba, era Felipe, montando un caballo marrón oscuro salía cabalgando entre la neblina ocasionada por la pólvora de los disparos. Ella quedó mirándolo fijamente mientras que Eustaquio y Guidaía no entendían lo que estaba pasando. Los militares se iban marchando hacía la ciudad donde los recibirían la población, mujeres y niños que esperaban la llegada de sus padres, hermanos, vecinos y salvadores. Veía también como se llevaban a prisioneros españoles hacia la ciudad. Ella en medio de ese caos quería hablar con su tío Felipe. –Él es el dueño del libro, él sabrá como puedo volver a casa.- Pensó Mariza. De esta forma siguió a la tropa militar acompañada de sus mejores amigos. Se detuvieron varias veces para descansar y una vez en la ciudad vieron como un granadero perteneciente a la caballería les enseñaba orgulloso a un grupo de hombres a usar su fusil cargándolo por la boca del cañón. -Estos pasos le toman a un tirador experimentado cerca de un minuto, sin mirar y con un alcance de tan solo cincuenta metros acertar, dependía más de la buena fortuna que de la destreza… Los amigos se acercaron y Mariza le preguntó sobre el hombre que había visto a caballo, con una breve descripción el granadero le indicó un lugar con la mano, cerca del río Suipacha. Allí se encontraba Felipe en medio de un gran tumulto de gente que le agradecía. A diferencia de Mariza y sus amigos, Felipe aparentaba la misma edad con que ella lo recordaba, unos treinta y seis años de edad. Vestía como si fuera el comandante de esa guerrilla o algo parecido. Mariza se acercó a él que aún se encontraba sobre su caballo y la miró extraño, su vestido que en un principio estaba reluciente ahora se encontraba embarrado y roto, su peinado recogido se le caía en el rostro. -¿Perdiste a tu criada niña? Si quieres puedo decirle a alguien para que te recoja de inmediato. -No hace falta ¿señor…? - Teniente Coronel de Caballería Antonio González Balcarce a sus órdenes. -Muchas gracias, me gustaría hablar con usted pero en un lugar más tranquilo. -Claro, venid a verme en tres horas del otro lado del cerro Señaló el lugar y se marchó con un galope suave y fornido. Muy cansados marcharon los tres hacia el lugar que le había indicado el hombre mientras que Mariza les contaba con detalles su alocada historia, especialmente a Guidaí que no paraba de hacer preguntas al respecto. Llegaron al lugar acordado mucho antes de lo previsto, vieron una casona muy grande y al estar cansados y hambrientos decidieron llamar a la puerta para pedir algo de comer. La puerta se abrió y el ama de llaves se encontraba del otro lado, vio los aspectos de los tres y por un momento casi les cierra la puerta pero luego se apiadó y les dio comida. Ya con la panza llena se fueron a dormir a la sombra de algún árbol. Guidai logró alcanzar rápidamente el sueño mientras que Eustaquio y Mariza no paraban de hablar, reían y comentaban muchísimas cosas y aún así Guidai no se despertaba. Mariza pensaba que al hablar con Felipe sería la forma de encontrar su camino y poder regresar, sin embargo ya se había acostumbrado a esa vida y que le costaría mucho volver a la realidad. Se había dado cuenta que Eustaquio sentía la misma admiración que ella hacia él y temía que al volver Martín tal vez no la sintiera. Se quedaron dormidos, la calma interior que Mariza sentía era indescriptible cuando un ruido interrumpió sus sueños. Era el galopear de un caballo, se trataba de Antonio que volvía a su hogar, que al parecer era la casona en la que habían pedido comida hacía un par de horas atrás. Exaltada Mariza despierta a Eustaquio que confundido no logra entender por completo la situación y de repente todo se desvanece, todo se va destruyendo frente a ellos. Asustada por miedo a perder el contacto con su tío, le toma la mano a Eustaquio y corren hacia la casa pero es demasiado tarde; ésta ya estaba casi destruida y comenzaban a aparecer unas personas. Eustaquio, al darse cuenta que ya era tarde, la empuja hacia el otro sentido para buscar a Guidaí que se había quedado durmiendo debajo del árbol. Corrían lo más rápido que podían pero escuchaban conversaciones cada vez más fuertes y el espacio abierto se convertía en un lugar cerrado con muchas personas y no la lograban encontrar. Eustaquio paró de moverse y Mariza de la mano de él se quedó atónita sin decir nada, ahora se encontraban en un lugar algo diferente al Cabildo Abierto en que anteriormente estaban, era una especie de Junta pero esta vez reconoció a alguien más allí, este no pertenecía a nadie de su familia o amigos del año 2010 sino que era Manuel Belgrano. Ella lo había visto en alguna pintura, se acordó de varias cosas que había aprendido de él. Allí se encontraban reunidos civiles, militares y religiosos, Mariza de pronto se dio cuenta lo que ocurría, estaban en el Congreso de Tucumán. Vio por una ventana y notó que estaba muy soleado. Pronto comenzaron a deliberar sobre el proyecto de libertad e independencia del país pero esta vez no hubo discusión. Todos parecían estar de acuerdo en declarar la Independencia. Unos con ponchos y botas, otros con galeras y chaquetas pero todos unidos allí por el mismo motivo, una tierra libre. El objetivo principal era declarar la Independencia pero se hababa de muchas cosas como elaborar una Constitución buscando garantizar al pueblo sus derechos y libertades; mejores defensas enfocándose en armamentos del ejército patriota. Pero lo más importante era la unión con todas las provincias, comunicándose entre si para poder enfrentar al enemigo externo y discutir la forma de gobierno más conveniente para esas provincias unidas. Mariza ya había escuchado esas palabras antes, y recordó esas clases de historia súper largas que mientras la profesora les hablaba de la Independencia ella se mandaba mensajes por el celular. Sin embargo podía recordar varias de las razones de esa Junta y fue cuando se dio cuenta de lo que iba a pasar. Cada vez que aparecía en un lugar distinto pasaba algo clave para la historia y al terminar ese hecho todo se desvanecía, claro, ella sabía que luego del Congreso de Tucumán muchas batallas y acontecimientos importantes se habían generado en aquella Argentina antigua, pero allí terminaba su proyecto. Las personas hablaban y ella sólo pensaba en que tal vez ese iba a ser su regreso a casa, no iba a ver más a Guidaí, al Coronel Antonio e incluso a Eustaquio. La junta ya estaba casi en su fin y las manos le sudaban, no estaba del todo segura si lo volvería a ver pero tampoco quería despedirse de él. Pronto, así como en las otras veces, todo se caía pero ésta vez se alejó de Eustaquio sin dejar que se fuera con ella y se dijo a ella misma: -Somos libres… Casi en un susurro repetía una y otra vez esas palabras cuando se dio cuenta que estaba en su cuarto, levantó lentamente su cabeza del escritorio, secándose la saliva que había derramado encima del libro de pinturas que había encontrado, lo cerró de golpe y rápidamente lo puso en su caja. Se sentó es su cama y recorrió su habitación con la mirada corroborando que todo se encontraba tal y como la había dejado. Sus libros tirados en el suelo, su mochila junto a la cama, todo se encontraba exactamente de la misma forma que lo había dejado. -Ya estoy en casa- Pensó Mariza. Y corrió hacia la puerta de su cuarto, la abrió y se dirigió a la cocina donde su madre estaba cocinando. -Ve a terminar el trabajo, yo te aviso cuando esté pronta la comida. Laura dijo esto sin siquiera darse vuelta a mirarla pero ella la abrazó fuertemente como si no la viera desde hacia mucho tiempo, la madre la miró y sonrió. Al principio se sintió mal de que nadie se diera cuenta que se había ido y pensó en decirle a la madre lo que le había pasado pero no creyó que tomara enserio su historia, además ni la misma Mariza sabía si lo que había ocurrido fue producto del cansancio o de su imaginación y que eso hubiera ocasionado un sueño alocado. Fue nuevamente a su cuarto extrañando aquella versión de su amigo (Eustaquio), sintió más confianza en si misma, pensando que de esta forma que tal vez su vida podía ser un sueño. Se dio cuenta que había despertado su interés por la Historia, la importancia de vivir en un país libre sin depender de ninguna otra gran potencia y los ojos se le llenaban de lágrimas. El pensar en aquellas batallas, en todos los hombres que dieron sus vidas por obtener algo que ahora simplemente lo damos por hecho, estamos acostumbrados a la libertad y no pensamos en lo que esto significó y significa, no pensamos en lo que les costó llegar a ser independientes y así se pasó toda la noche estudiando como si mirara una película o estuviera bailando en una de sus discotecas favoritas. Las mujeres y la independencia de las provincias unidas en Sudamérica: Juana Azurduy, Macacha Güemes, las valerosas mujeres de Cochabamba- “Heroínas de la Coronilla” Mauricio Gabriel Morales Bolivia Cuando pensamos en la “Independencia” nos ponemos a pensar en hombres fuertes, guerra, y otros aspectos que son netamente machistas. Pero ¿qué hay de las mujeres aquellas figuras de porcelana que dejan sus vestidos de fiesta y toman las armas para poder defender a sus hijos y familias? A ellas me refiero como a grandes mujeres entre ellas tenemos a Juana Azurduy, Macacha Güemes y las mujeres de Cochabamba “Heroínas de la Coronilla”. Grandes mujeres llenas de amor por su patria y por sus familias, que pusieron sus vidas por amor a todo lo que tenían. Cuando escuchamos hablar de guerras y de experiencias que pasaron nuestros abuelos muy pocas veces escuchamos hablar de mujeres y creo que todos nos cuestionamos ¿por qué no se las menciona? Pues es por el simple hecho de que en nuestros países en ese entonces la mujer no jugaba un rol importante en la sociedad. Hoy en muchos países con la globalización, las mujeres juegan un papel muy importante en la sociedad. Si hacemos una remembranza de lo que ocurrió en esa época tan heroica en la que estas nobles mujeres hicieron de las suyas con las personas que las querían oprimir al yugo de esclavitud. Juana Azurduy “La capitana general”. Esta mujer se unió a la revolución de Chuquisaca que el 25 de mayo de 1809 que destituyo al presidente de la real audiencia de charcas. A continuación cito unas palabras de la heroína: "A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...)Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". Que hermosas palabras que nuestra heroína dio a conocer a las honorables juntas provinciales donde se demuestra el amor y la consternación de la perdida de su marido. Cuan noble es leer esta frase: “… En fin rodeada de una numerosa familia y de una hija que no tiene mas patrimonio que mis lágrimas…” Detrás de una figura muy fuerte en la cual se convirtió Juana Azurduy por la falta de su marido podemos apreciar a una mujer llena de amor por lo poco que tenia. Aun al leer los versos que dejo plasmados con letras de historia podemos recordar su imagen de cómo la describían los historiadores. Ella con su falda larga y con su sacón de militar, con su seño fruncido. Cuan noble es recordar a esta gran mujer que decidió tomar la carrera militar para poder defender su patrimonio, dejando de lado todo y sin olvidarse de su deber como mujer. Y ahora podemos mencionar a otra gran mujer que quedo en la historia mundial y que será recordada por siempre. Se trata de Macacha Güemes. Esta noble mujer acomodada de la ciudad de Salta Argentina se destaco por su habilidad en múltiples negocios. Hizo que se la utilizara para inclinar negociaciones a favor de la causa patriota. Machaca fue una de las mujeres más destacadas y resaltantes de Salta especialmente por las clases menos favorecidas. Estas clases consistían en su mayoría el ejército de Martín Güemes. Ella una mujer letrada nunca olvido que el amor por la patria y a sus ideales le hizo entender que cosas debía hacer sin dejar de lado sus responsabilidades en el hogar. Es en realidad grato poder escribir en estas páginas la de una gran mujer su historia. A continuación la historia de mujeres que dejaron a sus familias; las siguientes mujeres fueron algunas de las protagonistas de aquella sublevación femenina en Cochabamba son :Gabriela Taborga: Manuela Gandarillas, Manuela Rodríguez, las hermanas Juana y Lucía Ascui, Rosa Soto (la muchacha que inspiró el título de la novela de Nataniel Aguirre), las hermanas Parrilla (cuyos nombres no han podido ser establecidos), Mercedes Tapia, María Pascuala Oropeza, Manuela Saavedra de Ferrufino, Lucía Alcocer León de Chinchilla, María Isabel Pardo de Vargas, María Teresa Bustos y Salamanca de Lemoine, María del Rosario Saravia de Lanza y Luisa Saavedra de Claure. Estas grandes mujeres al ver que los soldados varones no tenían tropas para defenderse y al verse solas sin sus esposos decidieron tomar las armas que sus esposos dejaron y otras armadas con cucharones y cuchillos salieron a la batalla con sus hijos en la espalda, otros en los brazos y otros apenas caminando; mientras que otras embarazadas de varios meses. Se llenaron de coraje y fueron a la lucha. Es muy grande el respeto que debemos sentir por estas nobles mujeres que no escatimaron esfuerzos para poder defender e sus familias. A veces me pongo a pensar que en ciertos momentos estas mujeres decidieron cambiar la desesperación por la calma. Creo que el coraje de ellas fue muy grande para poder revelarse contra sus opresores y los opresores de sus familias. Este año en muchos lugares del mundo se llevaron acabo la celebración de los distintos Bicentenarios; Bolivia, Chile, México, Argentina y otros. Cada uno de estos lugares tuvo su historia y de seguro mujeres muy buenas que dieron su vida por defender a su patria y sus ideales. En los países que alcanzaron el desarrollo siempre tomaron a la mujer como una figura de adorno que solo tenia que ser una pieza de colección del marido. Nuestras mujeres demostraron ser muy patrióticas y demostraron al mundo entero que las mujeres pueden hacer las mismas cosas que los varones y en muchos casos lo hicieron mejor. Es más que obvio que en esa época la mujer no tenia derechos y por eso no se les hacía caso ni se tomaba en cuenta su opinión. Cuantas personas nos preguntamos que es lo que hizo que estas valientes mujeres cambien drásticamente su mentalidad de quedarse en casa tejiendo mantillas. Seguramente en la actualidad estemos volviendo en muchos países al tiempo de la opresión machista, muchos se preguntaran o dirán que yo como varón debería estar de acuerdo con el machismo. Gracias a Dios es que en mi familia me inculcaron el respeto al varón y de la misma manera o mas esmerado con la mujer. Ellas son nuestras madres, abuelas, hermanas, tías, primas, sobrinas, y en un futuro serán nuestras suegras, esposas, hijas y nietas. Por lo que creo que deberíamos de mantener es el respeto por ellas. Estas mujeres tardaron años en forjar este respeto. En especial creo que se debería festejar también en muchos países el bicentenario de la liberación de la opresión machista para poder recordar a los hombres supuestamente machos que de “machos” solo el nombre lo tienen porque son los maricones más grandes por no saber resolver sus problemas hablando con su pareja. A ellos les digo que macho es aquel que resuelve sus problemas hablando, maricón no es el que llora sino es valiente si se anima a acompañar con llanto, a su pareja cuando llora. En lo personal veo como un acto deplorable escuchar decir cundo un niño se cae y el es varón le dicen “machito, machito los hombrecitos no lloran” si saben que es una mentira los verdaderos hombres si lloramos. Gracias a estas mujeres es que muchas otras mujeres deciden superarse siguiendo su ejemplo. Gracias a ellas es que más o menos hace 200 años es que se vive una gesta libertaria en la cual seguramente muchas de ellas participaron en silencio. En muchos países se realizaron homenajes por sus bicentenarios en algunos se recordó a las mujeres participes de los procesos por los cuales se paso para poder llegar a esa emancipación. Cada vez que escucho hablar de estas mujeres se llena mi cuerpo de un espíritu de amor a la patria que hace que quiera hacer lo mismo por mi patria estas mujeres son la inspiración de la liberación; son el cherry de la torta; son el velo que completa el vestido de la novia; gracias a ellas y en su honor es que muchas personas incrementan su amor por la patria. Sin ellas creo que cada gesta emancipadora no hubiera tenido este realce. Deseo explicarles porque nosotros hablando netamente de Bolivia al vivir en una sociedad que por muchos años fue machista nos hicieron ver que la mujer debe estar sentada en la casa haciendo los deberes de casa bueno no quiero decir con esto que no lo deberían de hacer a muchas les agrada esta labor. Pero en todo creo que debe estar el toque femenino el cual da esa tranquilidad, se ha comprobado que donde se encuentra presencia femenina siempre se lleva un ambiente de tranquilidad. Creo que mientras las mujeres estaban en la batalla ellas se serenaban y salían a la lucha con la misma confianza que derramaban en sus esposos cuando partían a la guerra. Sin duda alguna esta confianza les daba la fuerza para poder vencer, esa confianza que derramaban en si mismas debe de ser la misma hoy y siempre no solo en las mujeres sino también en los hombres. Cuando un esposo confía en lo que desea emprender la esposa ella lo va ha hacer de la mejor manera. También creo que el apoyo de una mujer como el de estas heroínas es una clara muestra de lo que debemos de hacer apoyar a los que luchan por construir un país mejor. Otro de los valores que podemos rescatar es el bien común la definición de esta palabra es buscar el bien para tobos sin que nadie salga afectado; ellas tenían un bien común el velar por el bienestar de su patria. Creo que es el valor que debemos de cultivar los bolivianos, buscar un bien común el cual nos una y nos ponga con la mirada hacia un solo objetivo, mejorar nuestra amada patria. Debemos de ver adelante y unirnos como estas heroínas para mejorar y luchar por crear una mejor Bolivia. Otro valor que se destaca es el amor un mundo, sin amor creo que no existe estas heroínas, la gente necesita amar a las personas para poder luchar por ellas. En lo personal me considero como una persona amante de sus amigos y que estoy dispuesto a dar mi vida por ellos porque se que habrá un momento que ellos harán lo mismo por mi y una vez mas en este caso se demuestra la confianza, la confianza que yo tengo con mis amigos. También se da a conocer el amor por la patria que hermoso es poder decir ¡¡¡VIVA BOLIVIA!!! Con voz en cuello el amor por la patria es un valor que poco a poco se va perdiendo, la globalización daño mucho a los valores y uno de ellos es el amor a la patria estas heroínas amaron de gran manera a su patria que estaban dispuestas a morir para salvar a su tierra. Este patriotismo debemos de mantener y de inculcarlo en los colegios, puesto a que muchos jóvenes toman el amor a la patria como un juego y no lo toman en serio. También se hace notar sus agallas, que es una de sus fuerzas que nunca les faltara. Y en especial la esperanza, se dice la esperanza es lo ultimo que se pierde y ella hicieron merito a este dicho nunca se dieron por vencidas y es lo que debemos de hacer no darnos por vencidos nunca por mas difícil que sea la tarea a la cual se nos haya encomendado. Otro valor muy notable es la auto superación lamentablemente en muchas partes las personas no desean auto superarse y eso hace daño al lugar donde vive, estas heroínas se auto superaron y llegaron a ser grandes mujeres y porqué nosotros no podemos hacerlo. Muchos países se quedan estancados porque no todos sus habitantes desean superarse porque le temen a la tecnología. Por otro lado creo que hubiera sido una bendición haber podido conocer a tan grandes mujeres, espero no equivocarme con esto pero creo que ellas son las fundadoras de la liberación femenina en muchos países. Creo que como bolivianos deberíamos de sentirnos orgullosos no solo de nuestros libertadores varones sino de las heroicas mujeres bolivianas que dieron los años de su juventud en defensa de su país. En muchos lugares se las homenajeo; pude ver el acto que le hicieron a Juana Azurduy “La Generala Capitán” en realidad merecidos reconocimientos que recuerdan a una mujer de oro. En realidad no sé cuántos reconocimientos se hicieron a cada personaje por sus hazañas ni en qué lugares se los hicieron ni quien se los hizo pero una cosa si puedo decir que ellas no lo hicieron buscando que se les reconozca como otras personas. Cuando una persona hace las cosas sin interés alguno siempre lo hace de una manera mas desprendida como estas heroínas. Otro valor que creo notar es el servicio seguramente hubo un momento en el que ellas tuvieron que prestar servicio entre ellas y estoy seguro que lo hicieron de la mejor manera posible sin esperar nada a cambio. En la actualidad casi todos cuando hacen algo por alguien esperan una recompensa cuando debería de ser al revés hacer servicio sin esperar nada a cambio. Seguramente vieron la película “cadena de favores” si pusiéramos en practica esta cadena estoy seguro que el mundo cambiara y reviviremos el espíritu de nuestras heroínas. Para concluir deseo expresar estas palabras es tan grande el agradecimiento que tengo hacia estas grandes mujeres por no decirles súper-mujeres que no tengo palabras para expresar lo que siento por ellas. En esta época en la que muchos países celebramos distintos Bicentenarios, es grato para mí hacer una remembranza de lo que ocurrió y dar a conocer lo que estas mujeres hicieron. Gracias a ellas hoy estamos aquí, de seguro que hubo muchas mujeres que no se las nombra pero este ensayo también es un reconocimiento a estas mujeres y también deseo que nunca se olvide lo que ellas hicieron. Personalmente nunca las olvidaré, estas mujeres pasaron a marcar mi vida y de esta misma manera espero que marque la vida de los que puedan leer sus historias ellas son mujeres de oro, que en un gran momento estuvieron a nuestro lado. Ellas fueron las mujeres que cambiaron la vida de muchas personas me atrevo a decir de las señoritas que desean hacer el servicio militar toman el ejemplo de nuestras heroínas y este es el sentimiento que les impulsa a cumplir un deber mas con la patria. Ahora puedo decir en realidad que el dicho “al lado de cada gran hombre, hay una gran mujer”. Y me atrevo a cambiar el dicho por lo siguiente “detrás de cada familia hay una mujer heroica”. Estas heroínas fueron grandes madres, abuelas, hijas, etc. Que defendieron a su patria sobre todo y todos. Creo que ese es el espíritu que debemos de adquirir todos para que cuando toque defender a nuestro país lo hagamos de la mejor manera. Concluyó este ensayo con estas palabras ¡¡QUE VIVAN LAS HEROINAS DEL BICENTENARIO!! . Gracias a nuestras heroínas tenemos la libertad y ¡¡QUE VIVAN LASTIERRAS BICENTENARIAS!! Gracias. DIAGRAMA DE LAS MUJERES HEROICAS DEL BICENTENARIO Nombres Juana Azurduy Fecha de Fecha de Lugares de El legado que nos nacimiento defunción participación dejaron Tras la derrota del "La propuesta Ejército del Norte de dinero y en la Batalla de otros intereses Huaqui el 20 de sólo debería junio de 1811, los hacerse a los realistas al mando infames que de José Manuel de pelean por su Goyeneche esclavitud, recuperaron el mas no al que control del Alto defendían su Perú y las dulce libertad, propiedades de los como él lo Padilla junto con haría a sangre las cosechas y sus y fuego."; ganados fueron comentario por confiscadas, siendo el rechazo del apresada Juana soborno Azurduy y sus ofrecido por un hijos, pero Padilla oficial español logró rescatarlos a su marido. 12 de Julio de 25 de Mayo de refugiándose en las 1780 1862 alturas de "Padilla es Tarabuco. cruel, es En 1813 Padilla y sanguinario Juana Azurduy se (...) La guerra pusieron a las se ha desatado órdenes de bárbaramente; Belgrano, nuevo ya no es la ley jefe del Ejército del Talión la Auxiliar del Norte, que prima, sino llegando a reclutar una ley más 10.000 milicianos. inhumana, por Durante la Batalla un muerto se de Vilcapugio, exigen dos, por Padilla y sus dos, cuatro", milicianos debieron afirma transportar la Gantier". artillería sin "Juana participar en el Azurduy está combate. Juana nuevamente Azurduy organizó embarazada luego el "Batallón cuando Leales" que combate el 2 participó en la de agosto de Batalla de 1814 con Ayohuma el 9 de Padilla y su noviembre de tropa, en el 1813, que significó cerro de el retiro de los Carretas. Y ejércitos argentinos Juana Azurduy del Alto Perú. A sufre ya los partir de ese dolores de momento Padilla y parto cuando sus milicianos se escucha las dedicaron a realizar pisadas de la acciones caballería guerrilleras contra realista los realistas. entrando en Azurduy lideró la Pitantora. guerrilla que atacó Luisa Padilla, el cerro de Potosí, la última hija tomándolo el 8 de de los amantes marzo de 1816. guerreros, Debido a su nace junto al actuación, tras el Río Grande y triunfo logrado en experimenta el Combate del ahora en Villar recibió el brazos de su rango de teniente madre los coronel por un ardores de la decreto firmado por vida Juan Martín de revolucionaria". Pueyrredón, Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, el 13 de agosto de 1816. Tras ello, el general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable. [1] El 14 de noviembre de 1816 fue herida en la Batalla de La Laguna, su marido acudió a rescatarla y en este acto fue herido de muerte. Al estallar la Revolución de Mayo, adhirió a la causa patriota, colaborando con su hermano de manera destacada en muchas formas, que iban desde la confección de vestimentas e indumentaria para los soldados, hasta la obtención de información entre los partidarios realistas. Macacha Güemes 11 de Diciembre 7 de Junio de También participó de 1878 1866 en múltiples negociaciones, utilizando su influencia para inclinar negociaciones a favor de la causa patriota. Después del fallecimiento de su hermano en junio de 1821, continuó sirviendo a la causa revolucionaria. Macacha fue una de las mujeres más destacadas y respetadas de Salta, especialmente por las clases menos favorecidas, las cuales constituían en su mayoría el ejército gaucho de Martín Güemes. Después de la “A los gritos de viva batalla de Guaqui y el rey, o mueran los de su triunfo en traidores, una Amiraya inmensa cantidad Goyeneche se de gente se agolpó dirigió a en la plaza…allí Heroínas de la Cochabamba, y de entre los ruidos de Coronilla allí a Chuquisaca y los tiros y sones de Potosí, con objeto campana, se llevó de detener a los a cabo la argentinos que ya revolución. …El estaban formando movimiento de el segundo ejército Charcas es el auxiliar; para ello comienzo de la mandó a Picoaga a lucha por la la fortaleza de emancipación de Cotagaita de donde los territorios alto salió para enfrentar peruanos”. a los patriotas, “…Libelos, comandados por leyendas, pintadas Díaz Vélez en en los muros se enero de 1812, convierten en cosa venciéndolos más o menos nuevamente en común; algunos Suipacha. son burlones o risueños, pero los Después de este hay quejosos y triunfo Goyeneche amenazantes; pensaba avanzar también lúcidos hasta Salta, pero alegatos a favor de tuvo que cambiar la independencia”. de planes al saber “…en el modelo de que Cochabamba orden social se había levantado patriarcal, vertical y nuevamente. Su autónomo, del cual ánimo no era eran portadores los conciliador como la conquistadores vez primera sino ibéricos; todo varón que iba dispuesto a era, por definición, dar un escarmiento superior a toda a los rebeldes. mujer…”. Para entonces Esteban Arze había coordinado con los jefes patriotas de Chayanta, Sicasica y Tapacarí, obstaculizando seriamente el movimiento de las tropas realistas. Para esa fecha, 1811, ya había un movimiento guerrillero considerable. El encuentro entre las tropas de Arze y Goyeneche tuvo lugar en Pocona, en mayo de 1812. Arze fue vencido y Goyeneche avanzó hacia Cochabamba que preparaba la resistencia con muy escasos recursos. Se intentó un pacto con Goyeneche, pero éste pedía que les entregaran a los cabecillas. La ciudad se negó a hacerlo, especialmente las mujeres, y se atrincheraron en la colina de San Sebastián, en el lugar conocido como "la Coronilla". Goyeneche entró en Cochabamba el 27 de mayo, quebrando totalmente la heroica resistencia. Las tropas realistas se dieron al saqueo y los principales jefes revolucionarios fueron ejecutados. La Búsqueda de la Libertad “El Grito De Dolores” Erick Yurguen Mendez C. Bolivia 1.- INTRODUCCIÓN. El Grito de Dolores es considerado el punto cronológico con que inicia la guerra de Independencia de México. Consiste en el llamado que el cura Miguel Hidalgo y Costilla (en compañía de Ignacio Allende y de Juan Aldama), hace a sus parroquianos con el fin de que estos desconocieran y se sublevaran en contra de la autoridad virreinal de la Nueva España en la mañana del 16 de septiembre de 1810. El llamado se hace al tañir la famosa Campana de Dolores, ubicada en el campanario oriental de la iglesia parroquial del entonces poblado de Dolores (hoy Municipio de Dolores Hidalgo C.I.N. (Cuna de la Independencia Nacional), ubicado en el territorio del estado de Guanajuato). Comenzando la lucha por la independencia, esta lucha que al principio fue encabezada por el Cura Miguel Hidalgo y el General Ignacio Allende, y que duró aproximadamente once años durante los cuales mucha gente estuvo al frente del ejército insurgente, hasta que en 1821 México se proclama un país independiente. 2.- OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN • Analizar las causas que desembocaron en el movimiento revolucionario que comenzó con “el grito de dolores”. 3.- MARCO TEORICO 3.1.- ANTECEDENTES. El movimiento independiente comprendió en México un período de once años que va de 1810 a 1821 y las causas que lo motivaron fueron tanto internas como externas. 3.1.1.- Causas Internas Sociales: Las internas correspondieron, primero, a la desigualdad social; los criollos se sentían relegados a un segundo plano por los peninsulares, y fueron aquéllos los que dirigieron la revolución; los mestizos no eran tomados en cuenta debido a que en su gran mayoría eran fruto de relaciones ilegítimas; los indígenas, protegidos por las leyes de Indias, querían emanciparse de este tutelaje; las castas se encontraban en condiciones inferiores por su propio estado natural y en general el descontento era unánime. España ya no era la nación unitaria en su moralidad y costumbres, pues los borbones habían llevado una conducta política extraña. Económicas: España había considerado siempre a América como parte de ella misma, y por ende había dejado en pie un sistema de monopolios, estancos y barreras que tendían a impedir el libre comercio exterior. Los impuestos eran muy elevados y España estaba en decadencia. 3.1.2.- Causas Externas Ideas de los enciclopedistas y economistas: Durante el siglo XVIII comenzaron a extenderse por Europa las ideas de los enciclopedistas y de los fisiócratas; los primeros hablaban de nuevos sistemas políticos con la soberanía del pueblo, libertad, tolerancia de la igualdad-tales eran los casos de Montesquieu, Voltaire y Rousseau, que ya no aceptaban el derecho divino de los reyes y querían la división de poderes. Los fisiócratas sostenían la libertad del comercio y la industria, pidiendo que se suprimieran barreras de aduana para que las mercancías fluyeran libremente sin la intervención del estado. La Revolución Industrial: Que había triunfado en Inglaterra a fines del siglo XVII imponiendo el sistema maquinista sobre el artesanal y creando, además, una nueva clase social que fue la burguesía capitalista, la cual tuvo que hacer frente a los problemas del proletariado. Las potencias industrializadas tuvieron que competir por los mercados, al luchar por el abastecimiento de las materias primas. La independencia de los Estados Unidos: En 1776. Esta fue otra causa externa que sirvió no sólo de ejemplo a los países latinoamericanos, sino que, además, privó a Inglaterra de algunas colonias, por lo que tuvo necesidad de buscar otras en diferentes regiones; de ahí el apoyo que esta nación prestó a los movimientos independientes. Los principios de la Constitución Americana, democráticos y populares, parecieron un arquetipo deseable para todas las colonias que se sentían llegadas a su mayoría de edad y capaces, por tanto, de gobernarse por sí mismas. La Revolución Francesa: constituyó otra causa con grandes repercusiones. Los Derechos del Hombre y del Ciudadano, sostenidos frente al estado e inalienables a la persona, se conocieron también en América a pesar de la vigilancia de la Inquisición. Lo que en Francia constituyó la lucha de la clase social más débil, el tercer estado que se había atrevido a enfrentarse a los privilegiados y reivindicando para sí sus derechos, fue un modelo digno de ser imitado. El liberalismo en general: con sus movimientos libertarios establecidos en sociedades secretas, completaron este panorama de inquietudes. En Londres, en 1798, se celebró una gran reunión que estuvo formada por liberales de toda América, que buscaban por lo menos una autonomía de gobierno propio emanado de los criollos y no importado de España. 3.2.- ETAPAS DEL MOVIMIENTO ARMADO. Así, que partir de estas causas, tanto internas como externas y sabiendo que el pueblo mexicano era un fiel seguidor de la iglesia, se pensó en invitar a un sacerdote a fin de convencer a todo el pueblo, por eso Allende propuso a Miguel Hidalgo y Costilla quien era cura de Dolores; Hidalgo aceptó la invitación., y fue Allende quien se encargó de mantener el contacto con Hidalgo. Se tenía planeado comenzar el movimiento de independencia el 2 de Octubre en San Juan de los Lagos (Jalisco), pero por denuncias hechas ante las autoridades por Mariano Galván, fue necesario adelantarla en septiembre. El gobierno Virreinal, enterado de que los conspiradores de Querétaro preparaban un levantamiento para principios de octubre de 1810, ordeno arrestar a los principales conjurados, el 13 de septiembre de ese año. El encargado de cumplir la orden fue el propio corregidor don Miguel Domínguez, quien incluso confinó a su esposa en su casa, pero esta logro enviar en secreto un mensajero a sus compañeros en San Miguel el Grande; el emisario, don Ignacio Ramírez, al no encontrarlos en ese sitio, continuo su camino hasta la villa de Dolores en donde, a propuesta del cura Hidalgo decidieron iniciar la lucha. Primero pusieron en libertad a los presos, aprehendieron a los españoles que se encontraban en la población. Luego a las 5 de la mañana del 16 de septiembre de 1810, se llamó a misa, el pueblo acudido al llamado y con el grito ¡Mexicanos, viva México!, ¡"Viva la Virgen de Guadalupe"!, ¡Viva Fernando VII! y ¡Muera el mal gobierno!; Hidalgo incitó al pueblo a levantarse contra los españoles. A este suceso se le conoce como "Grito de Dolores". Hidalgo acusó a los españoles de pretender entregar el reino a los franceses y hacer peligrar la religión, y en seguida informó a los habitantes que quedaban exentos de pagar impuestos e iba a realizarse la independencia. El pueblo muy molesto se armó como pudo (machetes, cuchillos, palos, lanzas, etc.) y se unió al movimiento. Llegando a San Miguel se les unió el ejército de Dragones de la Reina, y partieron hacia Celaya, donde Hidalgo fue nombrado General del ejército, Allende fue nombrado teniente y Aldama Mariscal, esto con el fin de organizar un poco a la gente. Y de ahí salieron hacia Guanajuato y en medio de una fuerte lucha entraron a la Alhóndiga de Granaditas (donde estaban los españoles), tomando así la ciudad. Cuando se dirigían a la capital derrotan a las fuerzas españolas al mando de Torcuato Trujillo en el Monte de las Cruces. Allende decide ir a Guanajuato e Hidalgo marcha hacia Valladolid, y luego hacia Guadalajara, donde organizó el primer gobierno el cual tuvo dos ministros: Ignacio López Rayón, a cargo del Estado, y José Maria Chico, en Gracia y Justicia, quedando Hidalgo como magistrado supremo de la nación. También se hizo la primera reforma agraria en la cual se manifestó que los indígenas eran propietarios de la tierra, se suprimieron los tributos y se confirmó la libertad de los esclavos. Elizondo que era el jefe del movimiento libertador en Coahuila, los traicionó y fueron arrestados en Acatita de Baján (Las Norias). Hidalgo, Allende, Aldama y Jiménez fueron juzgados y condenados a morir fusilados, luego de ser fusilados los decapitaron y sus cabezas las pusieron dentro de jaulas y las colgaron en las 4 esquinas de la Alhóndiga de Granaditas. La muerte de estos caudillos marcó el final de la primera etapa de la lucha por la independencia Al aproximarse a la ciudad de Guanajuato, se le envió una comunicación a Juan Antonio Riaño, intendente local, exhortándolo a rendirse y a tomar la causa de la independencia, pero él decidió permanecer fiel al gobierno español y resistir en la Alhóndiga de Granaditas, sitio en que se refugiaron los españoles, con sus familias y caudales. La localidad fue tomada a fuego y sangre, y al termina del combate las indisciplinadas masas saquearon, tanto las propiedades de los españoles peninsulares, como las de los criollos ricos. A los pocos días, el obispo de Michoacán, don Manuel Abad y Queipo, excomulgó a Hidalgo, pero ello no fue obstáculo para que este continuara su campaña. Tomo la ciudad de Valladolid, desde donde se encamino hacia la ciudad de México. En el trayecto, se entrevisto con José Maria Morelos en la hacienda el Charo, encomendándole extender la insurrección al sur del país. En la batalla de Monte de las Cruces, cerca de Toluca, Hidalgo derrotó a los realistas dirigidos por Torcuato Trujillo, fuerzas en las que militaba Agustín de Iturbide. Tras su triunfo, él ejército insurgente llegó hasta Cuajimalpa, en las afueras de la ciudad de México; para entonces esta se hallaba consternada ante la derrota del ejercito virreinal y la confusión se había apoderado de todos. Hidalgo, después de permanecer indeciso por varios días, discrepando de la opinión de Allende, inexplicablemente se dio vuelta sin entrar a la capital. En su marcha hacia Querétaro, en un lugar denominado San Jerónimo Aculco, él ejército insurgente sorpresivamente se encontró con las tropas de Félix Maria Calleja, ante las cuales sufrió una derrota. Mientras tanto la insurrección se extendía por otras partes del país. Hidalgo arribo a Guadalajara en noviembre de 1810 y poco después lo hizo allende. En Guadalajara el “Padre de la Patria” expidió los más importantes decretos sociales de la insurgencia: el que trataba sobre el uso de las tierras de comunidad por dueños, el relacionado con la abolición de la esclavitud, el que establecía la extinción de los monopolios estatales de tabaco y la pólvora, y el de la supresión de los tributos que pagaban los indios. Mientras tanto, Calleja había recuperado las ciudades en poder de los insurgentes, pretexto para que este jefe español permitiera feroces carnicerías contra sus adversarios. El 17 de enero de 1811, las tropas realistas de Calleja enfrentaron a las fuerzas insurgentes dirigidas por Allende, contingentes que si bien eran superiores en número, al carecer de disciplina militar, fueron derrotados. En Acatita de Bajan, en una emboscada que les tendió el traidor Ignacio Elizondo, fueron hechos prisioneros, juzgados y finalmente fusilados. Sus cabezas fueron exhibidas en cada una de las cuatro esquinas de la Alhóndiga de Granaditas, como escarmiento o advertencia para sus seguidores. A la muerte de los primeros líderes independentistas, don Ignacio López Rayón trato de reorganizar a los insurgentes en la junta de Zitacuaro. Pero fue con Morelos, cura de Caracuaro, con quien prácticamente continúo la guerra en el sur de la Nueva España. Aunque con Morelos él número de efectivos del ejército se redujo, los contingentes poseían mejor disciplina y no se les permitía el saqueo. El caudillo contó con la colaboración de hombres valerosos e inteligentes como los hermanos Hermenegildo, Pablo, Juan y José Galeana, de Miguel, Víctor, Máximo, Leonardo y su hijo Nicolás Bravo, de Mariano Matamoros y de Vicente Guerrero, entre otros. Entre 1812 y 1813 Morelos capturó pequeñas poblaciones del hoy estado de Guerrero. Con el propósito de apoderarse de la ciudad de México emprendió otras campañas. En Cuautla sus tropas fueron sitiadas por los ejércitos de Calleja, el sitio duro 73 días, el 2 de mayo de 1812 Morelos logro romperlo. Morelos, pensando que el fin de la dominación española se acercaba, decidió organizar un congreso nacional que le diera una constitución política al país. Es este, llamado Congreso de Anáhuac. En tanto Morelos se dedicaba a la actividad política, encabezando durante varios meses las sesiones del Congreso en Chilpancingo, Calleja reorganizo y equipo al ejército realista, por lo que, en los combates Morelos fue derrotado en Valladolid y las fuerzas virreinales lograron penetrar en el sur. El Congreso se vio obligado a peregrinar de un lugar a otro. Por fin, en octubre de 1814, en Apatzingán, el Congreso promulgó una constitución que fue el primer intento de constituir a México como una republica. Al sufrir varias derrotas y la perdida de varios de los mejores capitanes, Morelos cayo prisionero, siendo trasladado a la cuidad de México, donde fue juzgado y condenado a muerte. Con su fusilamiento, ocurrido el 22 de diciembre de 1815, en Ecatepec, Estado de México, solo quedaron unos cuantos insurgentes, resistiendo en distintas regiones de la Nueva España. A partir de 1816, la lucha por la independencia se desarrolló ya no en una guerra formal, sino en una guerra de guerrillas. En el año de 1817 todo parecía indicar que la insurgencia había sido plenamente derrotada. Y es que el nuevo virrey, Don Juan Ruiz de Apodaca, había buscado la pacificación ofreciendo el indulto a cambio de la rendición de los insurrectos. Muchos habían aceptado, mientras que otros habían decidido ocultarse y solo algunos más continuaron la lucha. Para 1820 prácticamente solo Vicente Guerrero quedaba en pie de lucha. El espíritu siguió con Morelos en pie y tuvo grandes victorias como la de Cuautla, sin embargo reunió en Chilpancingo al congreso para poner un orden en lo que hacían y cuando salió de aquí Iturbide lo encuentra y derrota. Mina intentó salvar la lucha por la independencia, y a pesar de sus victorias también es derrotado. Así Guerrero toma las riendas pero Iturbide es mandado para lidiar con los insurgentes y así nacen El Plan de Iguala y más tarde Los Tratados de Córdoba. El 21 de Septiembre de 1821 entra el ejército Trigarante triunfador a la Cede de México. 3.3.- SITUACIÓN ECONOMICA, SOCIAL Y POLÍTICA DEL MÉXICO INDEPENDIENTE El 27 de septiembre de 1821 fue un día lleno de alegría para los mexicanos. Creían que la independencia resolvería los problemas de la nación y que ya no habría obstáculos para progresar. Al día siguiente se instalo una Junta Provisional de Gobierno, encargada de redactar el Acta de Independencia y de organizar un congreso que decidiera la forma de gobierno para el país. La situación era difícil, ya que el comercio marítimo se hallaba suspendido; las fronteras no estaban bien señaladas en el norte ni en el sureste; en más de cuatro millones y medio de kilómetros cuadrados vivían menos de siete millones de habitantes, casi todos en el centro. Habían muerto seiscientos mil hombres: casi la décima parte de la población y la mitad de los que trabajaban. Minas, campos y fabricas estaban abandonados; casi nadie pagaba impuestos y los gastos de gobierno aumentaban día con día, sobre todo para mantener al ejercitó. En los caminos abundaban los bandoleros y casi nadie se atrevía a salir a comerciar. Hasta entonces las tierras de los indígenas pertenecían a los pueblos y no a las personas. Las trabajaban entre todos los habitantes del pueblo y nadie podía venderlas. Como los indígenas no estaban acostumbrados a que la tierra fuera propiedad privada, la igualdad de todos los mexicanos ante la ley los dejo en desventaja frente a los criollos. España no reconoció los Tratados de Córdova que O'Donojú había firmado. No acepto que México era independiente, y hasta 1825 siguió ocupando el fuerte de San Juan de Ulua, en Veracruz. Además de España, otros países europeos querían apoderarse de México, para explotar sus riquezas. A los mexicanos les faltaban armas y dinero, y así tendrían que defenderse. Lo peor era que se encontraban divididos, porque no estaban de acuerdo en la forma de gobierno que debían adoptar: unos querían la republica y otros la monarquía. De estos últimos, unos querían que reinara algún príncipe español, y otros que fuera coronado Iturbide. España no acepto enviar un príncipe al trono de México y eso reforzó las ambiciones de Iturbide, que quería ser emperador. Una noche, un sargento llamado Pío Marcha salió a la calle con soldados y otras personas que hicieron escándalo exigiendo que Iturbide fuera coronado. Bajo esta presión, al día siguiente el Congreso lo declaro emperador, con el nombre de Agustín I. La coronación fue muy elegante, pero el imperio duro apenas once meses. 4.- CONCLUSIONES. A partir de lo recopilado, es interesante analizar las causas por las que surgió este levantamiento armado, ya que en lo interno toman en cuenta la situación por la que pasaban los pobladores del pueblo de Dolores, que era de sometimiento a la corona española. Esto sumado a los factores externos que están ligados la revolución industrial, los pensamientos de independencia y soberanía, tanto en Estados Unidos como en Francia, son bases importantes por la cual se tomo la decisión de promover una sociedad independiente y con un propio gobierno, el cual consiguieron en el año de 1821. Pero es importante remarcar, que: si bien la historia nos demuestra algo, es que en la búsqueda de la libertad y la paz, es necesario combatir y formar un espíritu de unidad a fin de llegar a la verdadera libertad. BIBLIOGRAFIA. Compendio elemental de historia de América; Diego Barros Arana; Cabaut, 1904; Universidad de Harvard; 2008. Historia del México Contemporáneo; José Manuel Lozano Fuentes y Amalia López Reyes; Compañía Editorial Continental, 1974. http://www.sitesmexico.com/notas/2009/agosto/dia-grito-independencia-15-septiembre.htm http://html.rincondelvago.com/independencia-de-mexico_2.html http://es.wikipedia.org/wiki/Grito_de_Dolores MUJERES Y LA INDEPENDENCIA DE LAS PROVINCIAS UNIDAS EN SUD AMÉRICA (JUANA AZURDUY, MACACHA GUEMES, LAS MUJERES DE COCHABAMBA “HEROINAS DE LA CORONILLA”) Yesenia Yarhui Bolivia 4. INTRODUCCIÓN Todas las naciones en el mundo tiene algo que hablar cuando tocas a sus héroes, es así a los bolivianos no tenemos nada que envidiar de nuestras aguerrida y mitológica Juana Azurduy de Padilla y Manuel Gandarillas de las heroínas de la coronilla de Cochabamba y como la gran heroína de Argentina Macacha Guemes, quienes demostraron en aquellos tiempos su valentía su enfrentamiento en grandes emancipaciones por la independencia de sus países, demostrando una lucha incansable, sin valorar la pérdida de sus progenitores y las consecuencias sociales, económicos y culturales. 5. OBJETIVOS OBJETIVO GENERAL. Describir la historia de la emancipación de la independencia de las mujeres sobresalientes de Sud América. OBJETIVOS ESPECÍFICOS. Conocer y socializar las emancipaciones relevantes de Juana Azurduy de Padilla, Macacha Guemes y las mujeres de Cochabamba “Heroínas de la coronilla” Concientizar, valorar y estimular el liderazgo de las nuevas generaciones de mujeres 6. LUCHA POR LA LIBERACIÓN JUANA AZURDUY DE PADILLA LA GUERRILLERA ALTO PERÚANA Juana Azurduy de Padilla, nació en Sucre el 12 de julio de 1780. Fue hija de Matías Azurduy y Eulalia Bermúdez, propietarios de haciendas en las cabeceras de la zona del Río Chico. Los actos sublimes de los tiempos heroicos de Grecia y Roma, nada tenemos que enviar, porque Juana Azurduy siempre salía triunfante en las diferentes acciones bélicas en que le tocó tomar parte activa. Refiriéndose a los actos heroicos, el escritor José Macedonio Urquidi en su libro “BOLIVIANAS ILUSTRES” dice: “Juana de Arco parangonada, un bello ejemplo de firmeza de carácter de valor, de fidelidad, de espíritu sacrificado, de abnegación y amor para su pueblo (a quien movió contra los Ingleses); durante los dieciocho meses de su éxito, no se hizo notar por un solo rasgo que saliera del orden de los hechos vulgares”; Juana Azurduy, la Sublime heroína demócrata, por la magnanimidad de sus hazañas y sacrificio. Se estima que a la edad de quince años, Juana Azurduy ingresó al convento de Santa Teresa de Sucre, por que prefería la lectura de las vidas de San Ignacio de Loyola, San Luís de Rey de Francia, de San Juan de Dios, San Jorge, dijo: “Porque son guerreros.- Yo amo todo cuanto se refiere a las batallas y los peligros, ¡Oh daría me vida en algún combate donde sobresalen los valientes”, y que a los seis o siete meses abandonó convencida de que no tenia vocación para seguir la carrera religiosa. El 19 de mayo de 1799, contrajo matrimonio con MANUEL ASCENCIO PADILLA, en la localidad de Moromoro, tenían 4 hijos. Entre los testigos de la ceremonia se encontraba José Vicente Camargo, que con el tiempo se convertiría en un notable guerrillero del Alto Perú. Murió a los 81 años de edad, el 25 de mayo de 1862 Según el general Ramallo, “fue humilde, demasiado humilde, 4 o 5 personas acompañaron su ataúd al cementerio general, donde fueron inhumados sus restos” Cuanta injusticia “que ingratitud, para tan esclarecida Patricia, cuya filantropía y sublime patriotismo merecían las honras fúnebres que ninguna mujer. Pero ese es el destino que deparan los pueblos a sus gloriosos bienhechores, casi siempre”. “Juana Azurduy, manejando a caballo la lanza con empuje y singular y vistiendo pantalón blanco mameluco, blusa escarlata de oro y casco liviano de bruñida plata con cimera, la teniente coronela de las guerrillas de la independencia Alto peruana, bella y varonil; de cuerpo vigoroso y ojos expresivos, con ese golpe de vista de la penetrante mirada napoleónica, de aventaja estatura, las perfectas y acentuadas líneas de rostro, regaron con su sangre las antiguas provincias de la Plata y Potosí. Iniciada de 1809 la revolución contra el poder español en América; los patriotas llevaron la lucha de la ciudad al campo, organizando grupos de montoneros a los que Bartolomé Metrí, ha denominado “Republiquetas Alto peruana” “Doña Juana Azurduy, estaba cansada de contemplar los sacrificios de su esposo, sufriendo dijo, también yo debo sacrificarme, con mis hermanos de la libertad de mi patria. Entre las principales acciones de armas que tomó parte Juana Azurduy, tenemos el combate del Villar, cerca de la laguna, los patriotas al mando de Manuel Ascencio de Padilla, José Ignacio Warnes de Zárate, Huallpa Rimachi, vencieron el 4 de marzo de 1814 realista benito López, ha oír, en la memorable batalla de Pitantora, que tuvo lugar el 5 de octubre de 1814, Juana realizaba actos de Heroico, según relató de Valentín Abecia, “ Arrebató un estandarte español de manos del propio demandante Manuel Bosa; al poco de esta hazaña Juana Azurduy dio a luz a una niña, a orillas del río vecino, con la única ayuda de una india anciana. El 27 de abril de 1815, los guerrilleros de `padilla, ocuparon la ciudad de Chuquisaca, juntamente con el patriota Juan Antonio Álvarez de Arenales, Juana Azurduy, fue proclamada heroica por el pueblo y su esposo nombrado comandante de la ciudad. El 28 de mayo de 1816, los guerrilleros de Manuel Ascencio Padilla, pusieron nuevo sitio, a la ciudad de Chuquisaca, defendido por el presidente de la Audiencia José Santos de la era, los patriotas fueron repelidos por los realistas. El gobierno de Buenos Aires, al saber las acciones heroicas de Juana Azurduy, le dieron el grado de teniente coronel, el día 13 de agosto de 1816, el nombramiento le fue enviado en fecha 23 de octubre de ese mismo año con carta en que el general Belgrano, señala los actos heroicos, probada de esta manera su decidida adición a la causa de América. Uno de los sucesos más dolorosos, en la vida de Juana Azurduy, ocurrió el día 14 de septiembre de 1816, cuando el Manuel Ascencio Padilla, en el combate de el Villar, cayo muerto en manos de Mariano Ovando, quien había jurado vengarse del guerrillero, luego se traslado al Sur, el año 1817, para luchar junto a los guerrilleros tarijeños, al año siguiente, a lado de los gauchos del famoso jefe de montoneros Argentinos Martín Guemes. Durante su vid de las guerrillas Juana Azurduy sufrió incontables penurias en el monte, al lado de su esposo y sus hijos, que viajaban con las fuerzas patriotas. Las enfermedades y el hambre acosaban con frecuencia a los niños. Uno de ellos murió en brazos de la Guerrillera en pleno combate, para dar la sepultura la admirable mujer tubo que excavar la tierra, apresuradamente con las uñas y luego volver junto a los otros hijos, sintiendo como el dolor le abrió profundas grietas en el corazón, Alcanzada la independencia, Juana Azurduy, fue cayendo en el olvido de sus compatriotas y sufriendo la pobreza, llego hasta la edad de 81 años. Azurduy y su esposo, Manuel Ascensio Padilla, se sumaron a la Revolución de Chuquisaca que el 25 de mayo de 1809 destituyó al presidente de la Real Audiencia de Charcas, en la que tuvo protagonismo Juan Antonio Álvarez de Arenales. Ligados con las expediciones enviadas desde Buenos Aires, al mando primero de Antonio González Balcarce y luego de Manuel Belgrano, combatieron a los realistas defendiendo la zona comprendida entre Chuquisaca y las selvas que mediaban hacia Santa Cruz de la Sierra. Vio morir a sus cuatro hijos y combatió embarazada de su quinta hija. Tras la derrota del Ejército del Norte en la batalla de Huaqui el 20 de junio de 1811, los realistas al mando de José Manuel de Goyeneche recuperaron el control del Alto Perú y las propiedades de los Padilla junto con las cosechas y sus ganados fueron confiscadas, siendo apresada Juana Azurduy y sus hijos, pero Padilla logró rescatarlos refugiándose en las alturas de Tarabuco. En 1813 Padilla y Juana Azurduy se pusieron a las órdenes de Belgrano, nuevo jefe del Ejército del Norte, llegando a reclutar 10.000 milicianos. Durante la Batalla de Vilcapugio, Padilla y sus milicianos debieron transportar la artillería sin participar en el combate. Juana Azurduy organizó luego el "Batallón Leales" que participó en la batalla de Ayohuma el 9 de noviembre de 1813, que significó el retiro de los ejércitos argentinos del Alto Perú. A partir de ese momento Padilla y sus milicianos se dedicaron a realizar acciones guerrilleras contra los realistas. Azurduy lideró la guerrilla que atacó el cerro de Potosí, tomándolo el 8 de marzo de 1816. Debido a su actuación, tras el triunfo logrado en el combate de El Villar recibió el rango de teniente coronel por un decreto firmado por Juan Martín de Pueyrredón, Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, el 13 de agosto de 1816. Tras ello, el general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable El 14 de noviembre de 1816 fue herida en Viluma, su marido acudió a rescatarla y en este acto fue herido de muerte. El cambio de planes militares, que abandonó la ruta altoperuana para combatir a los realistas afincados en el Perú por vía chilena, disminuyó el apoyo logístico a la guerrilla comandada por Azurduy, que se replegó hacia el sur, uniéndose finalmente a Martín Miguel de Güemes. A la muerte de Güemes se vio reducida a la pobreza. En una carta escrita en 1830, cuando vagaba por las selvas del Chaco argentino: "A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...)Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". Pasó varios años en Salta solicitando al gobierno boliviano, ya independiente, sus bienes confiscados. El mariscal Antonio José de Sucre le otorgó una pensión, que le fue quitada en 1857 bajo el gobierno de José María Linares. Murió indigente el día 25 de mayo de 1862 cuando estaba por cumplir 82 años y fue enterrada en una fosa común. Sus restos fueron exhumados 100 años después, para ser guardados en un mausoleo que se construyó en su homenaje. MACAHA GUEMES Macacha –María Magdalena Dámasa Guemes de Tejada, hermana menor del Gral. Martín GuemesMacacha recibió la educación habitual para las mujeres de su época y posición, pero poseía cualidades propias que le permitieron descollar como patriota. Cosió uniformes pero también desempeñó arriesgadas tareas de espionaje a favor de la independencia despertando la admiración de los realistas. Macacha lideraba una red de informantes que actuaba en Salta, Jujuy y Tarija, aportando datos fundamentales para controlar al enemigo. Entre los integrantes de la red se encontraban mujeres de la alta sociedad y campesinos que mezclándose con partidarios y opositores recogían datos que ella interpretaba y transmitía a Martín. Fue muy querida por el pueblo debido a la generosidad con que ayudaba a los necesitados quienes la llamaban “Mamita de los pobres”, como lo describe Jaime Dávalos en la Serenata titulada La Macacha Güemes se encontraba con ella cuando una partida realista lo atacó e hirió en Salta, el 7 de Junio de 1.821, causándole la muerte pocos días después. Las mujeres nombradas son sólo algunas de las que merecen nuestro recuerdo permanente. Otras admirables destacadas durante la lucha por nuestra independencia fueron: Andrea Zenarruza de Uriondo; Candelaria Pacheco de Melo de Anzoátegui; Isabel Gorriti; Juana Torino; María Petrona Arias; Martina Silva de Gurruchaga; María Loreto Sánchez Peón de Frías; María Magdalena Goyechea y de la Corte. De otras no se saben sus nombres, como las llamadas “Niñas de Ayohúma”, que acompañaron a los hombres al frente de batalla, asistiéndolos. Sean estas líneas un respetuoso homenaje a todas ellas. María Magdalena Güemes de Tejada, nació en Salta, el 11 de diciembre de 1787, del matrimonio conformado por doña María Magdalena Goyechea y de la Corte y por Gabriel Güemes Montero, tesorero de la Real Hacienda. El General José María Paz en su libro “Campañas de la Independencia” (memorias póstumas), la describe como: “...mujer ambiciosa, intrigante y animosa, al paso que dotada de garbo y hermosura...” Según Bernardo Frías era “... arrogante y hermosa, que durante el gobierno difícil de la guerra, habría de llevar la armonía a las pasiones, la prudencia y el acierto en los consejos, la luz en los momentos más delicados del peligro y una sagacidad e inteligencia nobles y generosas en la diplomacia, acompañado todo ello de la seducción y el encanto que se desprenden de la mujer inteligente y culta. (Historia del General Güemes – Bernardo Frías – Tomo I – Página 482). Macacha, su apelativo popular, contrajo enlace matrimonial en octubre de 1803, a los 16 años de edad, con don Román Tejada, perteneciente a una antigua familia de Salta, de clase principal que integraba una larga nómina de familias realistas. Referirse a Macacha Güemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el Héroe Gaucho, para garantizar la emancipación de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta evocación representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su existencia al servicio de la patria. ACCION HEROICA DE LAS MUJERES COCHABAMBINAS Las aguerridas mujeres Cochabambinas, fueron al campo de la batalla a sacrificarse por su honor y su patria y guiaban a los ejércitos por los caminos de la gloria. Así se sucedían los acontecimientos, con las derrotas de las patriotas en la batalla de SIPESIPE, por las fuerzas de GOYENECHE, la primera revolución cochabambina quedó vencida, Goyeneche penetró en la ciudad, mostrando en la conducta más pacífica y humanitaria, distinta a la que presentara en La Paz. Una vez que se retiro el ejército de Cochabamba ARCE, provocó una nueva revolución, el año 1811, Goyeneche se preparaba para marcharse a la Argentina al encuentro de las tropas auxiliares, pero sabedor de esta nueva situación, se dirigió a Cochabamba, al encuentro de sus tropas con las de ARCE, se llevó a cabo en QUEHUIÑAL, el 24 de mayo de 1812 donde fueron derrotados los patriotas. Goyeneche condujo a sus tropas hacia Cochabamba, ciudad en la que falta de hombres, indujo a las mujeres a su audaz resolución de hacerse cargo de su defensa. Doña Gandarillas, fue la más resuelta y la capitana de estas valerosas mujeres y viendo que flaqueaban las fuerzas, lanzo sus arenga cual general antes del combate “SI YA NO HAN HOMBRES, AQUÍ ESTAMOS NOSOTRAS PARA AFRONTAR AL ENEMIGO Y MORIR POR LA PATRIA”, Menos de una hora tardaron de Goyeneche en rodear completamente la colina. Quedan sobre ello como doscientos patriotas de ambos sexos de todas las ciudades, niños que sus madres abrazaban con desesperación contra su seno, jóvenes que iban a vender sus vidas, ancianos que no tenían fuerzas para arrojar una piedra certero a sus enemigos, Fueron pues casi totalmente exterminados las mujeres, este hecho brutal por su atentado y heroico por su sacrificio, ocurrió el 27 de mayo de 1812, y para su eterno recuerdo se ha instituido el “DIA DE LA MADRE”, por Ley de 8 de noviembre de 1927. Nunca los recuerdos históricos, pondrán en claro los nombres de todas esas almas cívicas y virtuosas y la hipogea de la independencia. El general Belgrano, plenamente enterado del sublime del heroísmo de las mujeres Cochambinas y fin de estimular a las virtudes de su legión, estableció esta memorable costumbre, un oficial de cada cuerpo militar en voz alta decía: ¿Están las mujeres de Cochabamba? Y otro oficial respondía “GLORIA A DIOS HAN MUERTO POR LA PATRIA, TODAS EN EL CAMPO DE HONOR” A unos pasos del lugar, en las laderas de la colina de San Sebastián, los patriotas cochabambinos, buena parte de ellos mujeres, se enfrentaron a las tropas del realista de Manuel Goyeneche. Las mujeres salieron a las calles protestando, junto con sus hijos, contra aquellos allanamientos. "¡¡Nuestro hogar es sagrado!!" gritaban mientras se dirigían a la colina de San Sebastián, produciéndose un insólito aglomeramiento de gente. La sorpresa del realista no tuvo límites --ni su ira-- cuando tropezó con un pequeño ejército armado de machetes, mazos, algunos fusiles y tres cañones. No fue difícil para Goyeneche ganar semejante batalla aquel 27 de mayo de 1812. La descripción que hace Augusto Guzmán es una de las más detalladas de los historiadores, las descargas de artillería contra las tropas del Conde de Guaqui, quien despliega su caballería en aprestos belicosos, dispone el ataque por tres columnas bajo la protección de la artillería avanzando él mismo de frente por el centro. El fuego se mantiene activo durante dos horas, la montonera lucha bravamente, la caballería realista avanza por tres frentes sobre las tres cumbres de la serranía. A las cinco se apagan los fuegos sobre 300 bajas de hombres y mujeres que sangran en las colinas como despojos humanos privados de toda esperanza y auxilio. Era común que los caídos en las batallas quedasen en el mismo sitio, victimados por la artillería, apuñalados, golpeados, quemados como causa frecuente de la muerte. Como la consigna era el saqueo en las 80 manzanas de la ciudad, la gente se agolpa en las puertas de las Iglesias en busca de seguridad y asilo. En el duro combate quedaron los cadáveres sangrantes de las heroicas vallunas Con este relato se puede evidenciar la similitud de lesiones que presentan con los restos que se encuentran en la Iglesia. Según los datos que tenemos hasta 1831 se prohíben oficialmente el enterramiento en las Iglesias, según se consultó en el libro de entierros de la Parroquia más cercana, allí no figuran entierros numerosos el día de la batalla. Es de lógica que una vez que termina esta batalla estos restos sean llevados a la iglesia más próxima para ser enterrados en su cementerio o que mueran los heridos tratando de refugiarse del enemigo en estos lugares sagrados. BIBLIOGRAFIA www.academiadefolklore.com/system/pro Carmen Álvarez Daza, 1990. Antologías del saber de un pueblo de Ministerio de educación. Carlos Prieto, 1987. Manual de Alocuciones. 3º Edición Fernando Suárez, 2010. Educación Estado Ideología y Política E. Puña F. Comedias y Dramatizaciones. Mario Bautista Gumucio. Historia contemporánea de Bolivia. 3º Edición Delia Gambarte de Quezada, Minka Aurelio Crisólogo Arce. La Monografía y el informe de la Tesis Informe de Goyeneche sobre la batalla de San Sebastián. Augusto Guzmán, Gesta Valluna, Cochabamba 1953, pp. 142-149; Historia de Bolivia, Los amigos del libro, Cochabamba 1998. pp. 101-105. LIDERESAS DE LA INDEPENDENCIA AMERICANA” Bolivia Cuando celebramos en Bolivia el bicentenario, tal como sucedió en el centenario de 1910, y cuando el mundo ha recogido a través de la ONU en la planificación de los Objetivos del Milenio cuyo Objetivo 3 describe “ Eliminar las desigualdades entre los géneros…” el destacar el papel que en la lucha por la independencia, asumieron las mujeres, los esclavos y las minorías étnicas del continente es una operativización efectiva del objetivo; es un reconcomiendo justo merecido y honesto de el esfuerzo, coraje y valentía y templanza de muchas mujeres como la Indigenista Bartolina Sisa, la muy sagaz Manuelita Sáenz, las emblemáticas Doña. Manuela Beltrán, Gregoria Policarpa, Agustina Ferro, Antonia Santos, Josefa Cornejo Luisa Cáceres, Juana Ramírez, Teresa Heredia y otras muchas no menos valientes e importantes en el logro de nuestra independencia. Mujeres próceres que se incorporaron dentro de la lucha de los ejércitos patriotas, a semejanza de una “bandada de colibríes dentro de una bandada de cóndores” estas damas; nuestras Madres, fecundas por la libertad, dieron a luz una generación sobrehumana llena de la llama del cielo o del calor sombrío de la tempestad. Quienes a ejemplo de las espartanas, al pie del cañón estaban dispuestas a lanzar la horda mortal sobre los ejército enemigos. Sabemos que; a la mujer…. Nuestros antepasados la consideraban inferior al hombre y nosotros la consideramos igual… Unos y otros estamos grandemente equivocados, porque la mujer es muy superior… Dios la ha dotado de gran perspicacia y sensibilidad y ha puesto en su corazón fibras y delicadísimas, cuerdas muy sensibles a todo lo noble y elevado. El patriotismo, la admiración y el amor, hacen vibrar esas cuerdas, y de ahí resultan la caridad, la abnegación y el sacrificio. Así como las mujeres primitivas de la amazonía eran demasiados feroces. Sentían desprecio al presenciar la quema de sus casas y haberes por parte de los conquistadores y aún aparentaban cierta afabilidad sin ningún sentimiento de pesadumbre, entraban en la lucha y daban batalla encarnizada con gran ferocidad y valentía desbordada Hace dos siglos sólo existía, una íntima minoría de hombres deseosos de aprovechar con propósitos revolucionarios el estado de anarquía de la madre patria; por ello sin las mujeres, América nunca hubiera alcanzado su libertad. Muchos de los círculos, clubes y conjuraciones que entonces se formaron en América del Sur, nacieron a impulsos de mujeres heroicas y apasionadas. Fueron ellas las primeras en llevar la sublevación a la calle, en lucir la banda revolucionaria, en cantar himnos patrióticos; más tarde siguieron a sus maridos a los campos de batalla, tan firmes a caballo como a pie, a veces con un niño al pecho, otras con pantalones de soldados: Como en las viejas estampas que vemos en algunos libros. En las guerras de independencia, miles de mujeres sufrieron el martirio, fueron sacrificadas en aras de la libertad y la independencia de nuestra Patria, fusiladas, desterradas, confiscados sus bienes, asesinadas. Al sufrir el martirio de la persecución y la muerte se hicieron inmortales y acreedores a nuestro agradecimiento. Generalmente se dice que; detrás de todo gran hombre, hay una gran mujer. ¿Por qué detrás? ¿Por qué no al lado? ¿Por qué no es ella la reconocida y nombrada en la historia a partir de su propio rol social y político y no cómo la simple y fortuita acompañante de un gran hombre? Centenares de mujeres deliberantes y con criterio propio participaron a su manera, quizás no todas empuñando las armas, en la lucha por la independencia haciendo uso de la palabra, el rumor, la estrategia de guerra y la realización de diversos actos heroicos que marcaron, quiérase o no, el devenir de nuestra historia. La versión galante y romántica de la historia del siglo XIX, nos habla de mujeres sumisas y obedientes, plegadas a las dos grandes virtudes femeninas de la época: callar y obedecer. Las mujeres fueron expuestas en la historia como seres decorativos que embellecían el hogar y para quienes sólo existía dos opciones decorosas para sus vidas: el matrimonio o el convento. Esta visión no refleja sus inquietudes humanas y menos la participación política que muchas de ellas ejercieron en medio de enormes contrariedades, represiones y adversidades. Las mujeres de la independencia nunca fueron ángeles de hogar, ni las que pertenecían a las élites sociales ni aquellas que tenían su origen en los sectores populares. Al contrario, muchas de ellas fueron partícipes activas en la lucha contra los abusos virreinales desde el movimiento comunero, las luchas patrióticas y desde otras gestas de enorme significado histórico. En el centenario, después de 100 años de exclusiones, se intentó rescatar el nombre de algunas mujeres, pero se hizo desde una perspectiva machista de la historia, y también clasista. Muchas siguieron siendo minimizadas en su verdadero protagonismo político, al igual que los mulatos, indígenas y negros. También se les asignó características masculinas que no correspondían a su naturaleza y desestimaba sus características y potencial femenino. Este intento de rescate histórico no logró por tanto configurar una nueva perspectiva para el análisis de su desempeño político y social. No reconoció la real dimensión del rol que jugó la mujer en la historia y contrario a ello, le adjudicó valores masculinos para justificar su osadía y valentía, como sí estas características fuesen exclusivas de los hombres. Así por ejemplo, la historia personal y humana de Manuelita Sáenz fue distorsionada en los anales de la historia oficial. Sólo se le conoció durante varias décadas como la amante de El Libertador y no como una política aguerrida y comprometida, desde mucho antes de conocer a Bolívar y mucho después de su muerte, con el sueño de la libertad. En este texto tenemos el honor como pocas veces ocurre en los relatos de la historia oficial, la cual se ve embellecida y mitificada con el paso del tiempo; se excluye el nombre de valientes mujeres que aportaron a la lucha emancipadora. Si acaso se les menciona de manera rápida y sin mucho elogio, se hace referencia sólo a unas pocas sin mucho contexto y sin revelar su trayectoria y tampoco se conocen detalles sobre su vida y su historia y otros datos que hagan que jóvenes mujeres y varones las tomen como ejemplo. Para ello hemos recopilado información referente a dos heroínas de nuestra independencia y a un grupo de valientes mujeres que inspiraron a América y al mundo; ellas son Juana Azurduy de Padilla, María Magdalena Güemes más conocida como Macacha Güemes y las grandes Heroínas de la Coronilla; le invitamos a hacer un recorrido por la emocionante e inspirante vida de estas grandes mujeres. DOÑA. JUANA AZURDUY DE PADILLA Doña. Juana Azurduy fue comandante guerrillera en la entonces llamada Republiqueta de La Laguna. Junto con su esposo Manuel Asencio Padilla se sumaron a la Revolución de Chuquisaca del 25 de mayo de 1809. Juana vio morir a cuatro de sus hijos y con gran ahincó pese al dolor combatió embarazada de su quinta hija. Tras la derrota del Ejército del Norte en la Batalla de Huaqui el 20 de junio de 1811, los realistas al mando de José Manuel de Goyeneche recuperaron el control del Alto Perú y las propiedades de los Padilla junto con las cosechas y sus ganados fueron confiscadas, siendo apresada Juana Azurduy y sus hijos, pero Padilla logró rescatarlos refugiándose en las alturas de Tarabuco. Por su papel protagónico en el primer grito revolucionario en el alto Perú 1809, más conocido como la batalla de Chuquisaca, arrebatar un estandarte español, organizar el "Batallón Leales" que participó en la Batalla de Ayohuma el 9 de noviembre de 1813, y liderar importantes acciones guerrilleras contra los realistas entre ellas la del cerro de Potosí del 8 de marzo de 1816 y lograr el triunfo en el Combate del Villar, recibió el rango de Teniente Coronel. El decreto fue firmado el 13 de agosto de 1816 por Juan Martín de Pueyrredón, director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Tras ello, el general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable. El 14 de noviembre de 1816 Juana fue herida en la Batalla de La Laguna. Su esposo el guerrillero Padilla acudió en su rescate siendo herido de muerte. Ella siguió adelante en su lucha. Un posterior cambio en la estrategia militar de la guerrilla comandada por Juana Azurduy, le significó una disminución en el apoyo logístico. Ello llevo a que su ejército tuviera que replegarse hacia el sur, dónde se unió a Martín Miguel de Güemes. Sus planes no prosperaron. Güemes fue asesinado y Juana se vio reducida a la pobreza. En 1830, vagando por las selvas del Chaco argentino, Juana escribió una carta que da cuenta de su situación: "A las muy honorables juntas Provinciales: Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V. H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución.(...)Sólo el sagrado amor a la patria me ha hecho soportable la pérdida de un marido sobre cuya tumba había jurado vengar su muerte y seguir su ejemplo; mas el cielo que señala ya el término de los tiranos, mediante la invencible espada de V.E. quiso regresase a mi casa donde he encontrado disipados mis intereses y agotados todos los medios que pudieran proporcionar mi subsistencia; en fin rodeada de una numerosa familia y de una tierna hija que no tiene más patrimonio que mis lágrimas; ellas son las que ahora me revisten de una gran confianza para presentar a V.E. la funesta lámina de mis desgracias, para que teniéndolas en consideración se digne ordenar el goce de la viudedad de mi finado marido el sueldo que por mi propia graduación puede corresponderme". Juana permaneció varios años más en el municipio de Salta solicitando al gobierno boliviano, ya independiente, sus bienes confiscados. El mariscal Antonio José de Sucre le otorgó entonces una pensión, que le fue retirada en 1857 bajo el gobierno de José María Linares. Murió en la indigencia y la soledad el 25 de mayo de 1862 a los 82 años. Fue enterrada en una fosa común. Cien años después sus restos fueron exhumados y llevados al mausoleo de Sucre. En 1962 la historia se acordó de ella. Fue nombrada generala de la nación por decreto. La dictadura militar intentó de nuevo sepultar su nombre y excluirla de la historia, pero en 1980 a través de las gestiones que impulsaba la academia de Historia, se restablece el decreto y se le asigna vigencia. Finalmente en el 2009 el gobierno de Argentina y de Bolivia la reconoce como Generala de los ejércitos emancipadores de ambas naciones. DOÑA MARIA MAGDALENA GUEMES María Magdalena Güemes de Tejada, nació en Salta, el 11 de diciembre de 1787, del matrimonio conformado por doña María Magdalena Goyechea y de la Corte y por Gabriel Güemes Montero, tesorero de la Real Hacienda. El General José María Paz en su libro “Campañas de la Independencia” (memorias póstumas), la describe como: “...mujer ambiciosa, intrigante y animosa, al paso que dotada de garbo y hermosura...” Según Bernardo Frías era “... arrogante y hermosa, que durante el gobierno difícil de la guerra, habría de llevar la armonía a las pasiones, la prudencia y el acierto en los consejos, la luz en los momentos más delicados del peligro y una sagacidad e inteligencia nobles y generosas en la diplomacia, acompañado todo ello de la seducción y el encanto que se desprenden de la mujer inteligente y culta. (Historia del General Güemes – Bernardo Frías – Tomo I – Página 482). Macacha, su apelativo popular, contrajo enlace matrimonial en octubre de 1803, a los 16 años de edad, con don Román Tejada, perteneciente a una antigua familia de Salta, de clase principal que integraba una larga nómina de familias realistas. Roberto Vitry en su libro “Mujeres Salteñas”, (páginas 139 y 140) cuenta que “... su acción a favor de la causa patriota se inició poco después de la Revolución de Mayo, cuando convirtió su casa en taller de confección de uniformes para los soldados de la partida de observación organizada por su hermano. A partir de entonces fue su más entusiasta colaboradora y supo sacar partido de su noble inteligencia y posición para desempeñar tareas arriesgadas, especialmente cuando los realistas ocupaban la ciudad de Salta y Güemes los combatía con todos los medios a su alcance. Dotada de gran habilidad política, la puso al servicio de su hermano en los momentos más difíciles, como en 1815, cuando gracias a sus gestiones se llegó a la paz de Los Cerrillos, luego de la delicada situación entre Güemes y las fuerzas de Buenos Aires al mando del General Rondeau. Cuando el general realista La Serna intentó sobornar al general Martín Miguel para que se retirase de la lucha o para que se mantenga neutral, proponiéndole a cambio llevarlo a España, educarle a todos sus hijos a costa del Estado, condecorarlo, darle el título de Marqués y Grande de España y a más de todo esto un millón de pesos. Para lograr su propósito La Serna “... Encargó al Jefe de su Estado Mayor don Jerónimo Valdés, pasara a verla (a Macacha) y pusiera todo su empeño en hacerla acceder para que lo acompañara al campamento de su hermano, sirviendo de mediadora, como contaban lo había sido con Rondeau en otra emergencia. Resistió cuanto pudo... Pero era casada con un hombre célebre en las sociedades del norte por su descarado cinismo, don Román Tejada, que pertenecía a una familia de marcado sello realista “... Lo que no pudo conseguir con Macacha lo logró con su esposo Román Tejada, quien lo llevó hasta el General Güemes, donde Valdés puso el pliego con la propuesta en manos del Jefe Patriota. Este lo leyó rechazó y despreció el ofrecimiento en forma categórica. Referirse a Macacha Güemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el Héroe Gaucho, para garantizar la emancipación de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta evocación representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su existencia al servicio de la patria. LAS HEROICAS MUJERES DE LA CORONILLA En este breve relato queremos mostrarle el gran aporte de Las Mujeres de la Coronilla en las luchas independentista; en 1812, Goyeneche, después de vencer a las fuerzas revolucionarias en Sipe (Cochabamba) emprendió camino hacia Argentina con el fin de invadir sus provincias y apagar la revolución que se había iniciado allí. Pero Goyeneche no contaba con la nueva insurrección que resurgió tras su salida. Al enterarse de la nueva rebelión, el general español retorna a Cochabamba para enfrentar a los patriotas encabezados por Esteban Arze, cuyas fuerzas se hallaban clandestinas y recuperándose tras la derrota de Pocona. En procura de protegerlos, las mujeres a la cabeza de la anciana no vidente Manuela Gandarillas y la esposa de Esteban Arze, Manuela Rodríguez, decidieron organizarse y armarse para enfrentar a las fuerzas realistas, pese a que sabían la desproporción que existía. El periodista e investigador, Wilson García, señala que las mujeres se organizaron en la Catedral bajo el lema: “¡Nuestro hogar es sagrado!” y se dirigieron en romería hacia la colina llevando en andas la imagen de la Virgen de la Merced, con el fin de bloquear la entrada de Goyeneche que venía en persona desde Tarata tras buscar infructuosamente a Esteban Arze. Luego de tres días, la ciudad de Cochabamba fue tomada a pesar de la heroica resistencia que ofrecieron las valerosas mujeres en la colina de San Sebastián (La Coronilla). Las víctimas de aquel desigual combate figuran en la siguiente lista difundida por Gabriela Taborga: Manuela Gandarillas, Manuela Rodríguez, las hermanas Juana y Lucía Ascui, Rosa Soto (la muchacha que inspiró el título de la novela de Nataniel Aguirre), las hermanas Parrilla (cuyos nombres no han podido ser establecidos), Mercedes Tapia, María Pascuala Oropeza, Manuela Saavedra de Ferrufino, Lucía Alcocer León de Chinchilla, María Isabel Pardo de Vargas, María Teresa Bustos y Salamanca de Lemoine, María del Rosario Saravia de Lanza y Luisa Saavedra de Claure; todas ellas esposas de combatientes perseguidos que acompañaban a Esteban Arze. Todo ocurrió en vísperas de la celebración del Corpus Christi (1812). Al día siguiente de la matanza de San Sebastián, 28 de mayo, Goyeneche presidió los actos litúrgicos y aprovechando el tronar de los petardos y juegos artificiales que matizaban la celebración y que podían camuflar disparos de bala, el realista mandó fusilar al anciano gobernador patriota Mariano Antezana. Junto a él fue fusilado todo sospechoso de colaborar con los luchadores libertarios. Murieron ese día en el paredón muchos ciudadanos, entre otros: Joaquín Mariano Antezana, Manuel Ignacio Ferrufino, Agustín Ascui, José Domingo Gandarillas, Bernardo Luján, José Manuel Lozano y Juan Zapata, relata García. Cochabamba recordó esos luctuosos días de fe cristiana como la “Fiesta de Corpus Triste”. Si bien las mujeres de Cochabamba no consiguieron una victoria que haya logrado un avance significativo en la lucha por la libertad de América; este acontecimiento inspiró a los patriotas para encarar una lucha más decidida por la libertad y también animaron a que muchas mujeres en las colonias participen en las acciones libertadoras. Como reconocimiento al gran valor demostrado por estas mujeres, el 27 de mayo de 1926 se estrenó en el paseo de la Coronilla, el monumento a las Heroínas y fue contemplado por primera vez por los habitantes de Cochabamba. En reconocimiento a esta importante fecha en Bolivia se celebra cada 27 de mayo el día de todas las madres; las cuales son heroínas no reconocidas de nuestros triunfos y la capacidad de asumir nuestra libertad como seres humanos de esta hermosa América latina. MUJERES DE LA INDEPENDENCIA EN SUDAMÉRICA Por Esperanza Bolivia Hoy en un clima de libertad, donde la palabra emancipación es un electo central del desarrollo personal de todos los que habitamos estas tierras porque es un lindo regalo que Dios nos pudo haber dejado, “la libertad”, es por eso que por esta libertad, la cual Dios nos dejo, pasaron hazañas heroicas e increíbles que el hombre y la mujer han podido desempeñar. Han pasado 200 años y todavía las personas tienen ese deseo, el de ser libres, lo cual llevan en la sangre y en el espíritu el gran deseo de buscar la libertad. En el siglo XX las guerras libertarias dejaron huellas recónditas para los países sudamericanos. Todo emprendió con las primeras manifestaciones ocurridas en el Alto Perú, gracias a la situación de España empezaron hechos que se desplegaban en el territorio Americano, por ejemplo en las ciudades de La Paz y Chuquisaca en 1809. Comenzó la llamada ahora guerra de guerrillas, entre los años 1809 y 1810, en el noroeste argentino, todo fue un movimiento total de la Nación en armas, en esta grande hazaña lucharon con la idea de defender su patria, en esta epopeya juntaron fuerzas mestizos e indios, participaron hombres, mujeres, niños, jubilados, sacerdotes, no importaba nada mas que salvar su patria. Toda esta sangrienta batalla se caracterizo por sus cabecillas y su brío en cada uno de ellos, ellos pasaron por todo pero jamás desaparecieron por que fueron naciendo de la sangre de otros con el ideal de “patria”. Hoy en día los historiadores dicen que existieron mas de 102 cabecillas, aunque la mayoría de ellos subieron al patíbulo o murieron el los campos de batallas. Asimismo la patriota guerrillera del Alto Perú Juana Azurduy de Padilla quien a su vez da un gran ejemplo de mujeres valerosas y luchadoras. Nació en La Plata (hoy Sucre), el 12 de julio de 1780, y sus padres fueron Juan Matías Azurduy y Eulalia Bermúdez, se dice que entro a un convento al de Santa Teresa de Sucre, pero de acuerdo a investigaciones se dice que doña Juana Azurduy ingreso al convento de Santa Mónica ya que se dice que en esos tiempos las mujeres que entraban a dicho convento se las trataba con respeto, además que era un convento muy cómodo, Juana permaneció en el convento de Santa Mónica durante cinco meses. En su juventud se caso con Manuel Ascencio Padilla quien era un noble guerrillero de la independencia del Alto Perú, se casaron el 8 de mayo de 1805 a los 24 años de edad de Juana. Cuando estallo la guerra de la independencia, ella juntamente con su esposo, logro libertarlo, dando mandos a una fuerza simulada. En Tarabuco logro rendir al jefe realista Claudio Rivero el 14 de enero de 1815 En la batalla de Viloma, encabezada por los llamados leales, a los que guío con tal acierto que mereció el grado de teniente coronel. Del mismo modo Juana Azurduy de Padilla dio grandes ejemplos con su valentía y sus ganas de luchar por su patria, así como las heroínas de la coronilla es muy reconocida en Argentina, por ejemplo, hay un nuevo programa de fortalecimiento de derechos y participación a las mujeres, este programa es llamado “Juana Azurduy”, se llama así en su homenaje. En Chaco hay una ruta llamada Juana Azurduy. Al igual que el ejército Argentino nombro a su infantería de monte como generala a Juana Azurduy. Al igual que en el país de Argentina es reconocida, también lo es el país de Bolivia, el aeropuerto de la ciudad de Sucre lleva su nombre, como la provincia Juana Azurduy de Padilla, en el 2009 en el gobierno de Evo Morales las mujeres reciben el bono Juana Azurduy de Padilla en la cual se trata de que las mujeres en gestación y los niños menores de 2 años reciben el monto de 260 dólares americanos (1.820 bs) todo esto se debe a la fuerte lucha que dio Juana Azurduy como mujer que igualmente la deben hacer las mujeres como madres. Como dejar de lado cada una de las hazañas que vivió Juana Azurduy ya que era una mujer que dio sorprendentes glorias a su patria. La vida de esta mujer, sus facetas e instancias, sus virtudes y nobleza de mujer, sus intervenciones legendarias en los campos de batalla, luchando por su patria, la vida y muerte de sus hijos, y tantos otros sacrificios como desesperanza, angustias, perdidas, también los halagos que recibía por ello, los triunfos que tenia, y por sobre todo saber afrontar cada cosa que venia con madurez y esperanza. En rota de Villar fue herida en la batalla de La Laguna y aunque perdió mucha sangre, ella aun así alentaba a la gente que estaba junto a ella, disimulaba el dolor que tenia y la falta de sangre, nada le importaba mas que seguir adelante, sus enemigos querían acabar con ella, pero ella seguía y no se dejaba derrotar por nadie, aun al saber que podría morir, tomo la bandera de su patria y agitaba el estandarte diciendo, VIVA LA PATRIA, VIVA LA LIBERTAD. El señor Padilla fue a su rescate pero en ese entonces fue herido de muerte, Juana al ver muerto a su señor esposo se le cayo la vista, se puso ciega de furor, ella logro levantarse donde tuvo que emigrar a Argentina donde combatía a las ordenes de Don Martín Miguel Guemes el famoso caudillo de los gauchos. Cuando la victoria de Ayacucho fue victoriosa abrió las puertas del Alto Perú y doña Juana Azurduy regreso a su país donde ella creí poder vivir tranquila, acabo la guerra y ella no vivía ambicionada ni deseaba nada, también porque ya varias veces había derramado su sangre para emancipar su país. Después de los contrastes de las victimas y por supuesto después de la muerte de su esposo Manuel Ascensio Padilla a quien amaba delirante, pensó hallar sociego en la soledad del campo Doña Juana Azurduy de Padilla también fue coronada Teniente coronel, y aparte de que participo de varias batallas por ejemplo entre una de ellas esta la batalla de Vilcapugio, la batalla de Ayohuma. Vio morir a sus cuatro hijos pero siguió luchando al estar embarazada de su quinta hija murió indigente el 25 de mayo de 1862 en el mismo suelo que la vio nacer y en el mismo día que 53 años antes se dio el primer grito de libertad, murió a la edad de 80 años, con una enfermedad de pulmonía, murió en su casa y en la comunión de Nuestra Señora Madre Iglesia de Hinchazón. Como guerrera es indisputable y la mujer mas ilustre que se conoció en el mundo de Colon y ahora un gran ejemplo en nuestra vidas diarias para seguir luchando cada día con mas fuerza y entrega como varias de estas heroínas lo hicieron. Entre estas guerras y batallas tuvieron grandes consecuencias como por ejemplo la muerte de varias personas que ya a su ves hoy se las reconoce como héroes, asimismo hizo reconocer la valentía que muchas mujeres pueden tener para poder sacrificar la vida por su patria. Hay grandes mujeres en la historia que sirven de fuente de inspiración para toda la población femenina en la actualidad. Pero ahora quisiera referirme mas a la historia de María Magdalena Guemes, (Macacha) una mas de las mujeres de la independencia mas conocida en la Republica de Argentina, ella nació en Salta el 11 de diciembre de 1787, a su corta edad, a los mas o menos 16 años decide casarse con el Militar Román Tejada y llegaron a tener una hija a la cual llamaron Eulogia. Asimismo en su corta edad, el hecho que mas marco su vida fue cuando era todavía una niña y su hermano que era cadete para ese entonces, lo llamaron a cumplir sus obligaciones en Buenos Aires para perpetuar con su carrera militar, se dice que fue el hecho que mas le marco porque encontraron un diario donde dice:”nos despedimos con un abrazo interminable”. Esta mujer se caracterizaba por su audacia, fue muy querida por todos los que rodeaban por la gran generosidad con la que ayudaba a los mas necesitados, y con la valentía con que los defendía era un ejemplo de mujer con inspiración intuitiva. Era hermana del general Martín Miguel Guemes quien fue héroe de la nacionalidad. El nombre de caudillo solo es aceptable como sinónimo de líder, pero como en nuestra historia el término está asociado con el secular antagonismo interior versus Buenos Aires o centralismo versus federalismo, definitivamente en el caso de Guemes lo mas justo es llamarlo por el digno rango militar que alcanzó en su meritoria carrera”. Ella siempre se dirigía a todos con delicadeza, con simpatía, con cariño y mucho mas con igualdad, no importaba que fueran poderosos o humildes, sabia como tratarlos, tenis una gran personalidad. Ayudaba a su hermano y siempre lo acompañaba, probo sus habilidades como costurera y ayudaba a confeccionar uniformes para los soldados de la partida de observación organizada por su hermano, en ese entonces el Teniente Miguel Guemes, a sus 23 años hizo su pequeño taller en su casa junto con unas primas y amigas. En 1810 y durante varios años, su casa aparte de ser taller de costura era un refugio para jefes, soldados y oficiales. María Magdalena Guemes participo de la grafía en la guerra gaucha que organizo su hermano, para defender la frontera. Cuando Macacha se hallaba en su casa de La Amargura y de Yocci (hoy Balcarce (ex de la Amargura) y España (de la victoria) en la noche del 7 de junio de 1821 llegó Guemes respondiendo a un apócrifo llamado de su hermana, pero luego se dieron cuenta que era parte de una táctica de los realistas que pretendían sorprenderlo al "mártir de la patria" -él único jefe militar muerto en el campo de batalla- abandonó el hogar y al disparar escoltado por sus "Infernales" fue mortalmente herido para morir diez días después. Macacha continúo participando de los sucesos políticos de la provincia, con la valentía que la distinguía. Martín Miguel Guemes su hermano fue un General de formación y carrera militar que obtuvo todos los grados por mérito en acción de guerra. Fue un estadista con un claro concepto de Nación. Por ello relegarlo al rol de caudillo local es no comprender, desconocer o soslayar estas circunstancias. El 1º de marzo de 1817, Guemes logró recuperar Humahuaca y se dispuso a esperar la invasión. Los realistas acamparon en las cercanías. Habían recibido refuerzos y ya sumaban 5.400. La estrategia de Güemes será una aparente retirada con tierra arrasada, pero con un permanente hostigamiento al enemigo con tácticas guerrilleras. En estas condiciones las fuerzas de La Serna llegaron a Salta el 16 de abril de 1817. El boicot de la población salteña fue absoluto y las tropas sufrieron permanentes ataques relámpago. El general español comenzó a preocuparse y sus tropas empezaron a desmoralizarse. No lo ayudaron las noticias que llegaron desde Chile confirmando la victoria de San Martín en Chacabuco. El año 1821, fue sumamente duro para Guemes porque a la amenaza de un nuevo ataque español se sumaron los problemas derivados de la guerra civil. Guemes debía atender dos frentes militares: al Norte, los españoles; al Sur, el gobernador de Tucumán, Bernabé Aráoz que, aliado a los terratenientes salteños, fustigaba permanentemente a Guemes, que será derrotado el 3 de abril de 1821. El Cabildo de Salta, dominado por los sectores conservadores, aprovechó la ocasión para deponer a Guemes de su cargo de gobernador. Pero a fines de mayo Guemes irrumpió en la ciudad con sus gauchos y recuperó el poder. Todos esperaban graves represalias, pero éstas se limitan a aumentar los empréstitos forzosos a sus adversarios, pero su hermana siempre lo acompaño y apoyo en todo momento. Intervino en la llamada "Revolución de las Mujeres" que, con el apoyo militar de Pablo Latorre derrocaron al gobernador José Antonio Fernández Cornejo y pusieron en el cargo al general doctor José Ignacio de Gorriti. Más tarde, en 1824, participó en un acto faccioso en oposición al general Juan Antonio Álvarez de Arenales "y nuevamente contra el General José Antonio Fernández Cornejo once años después, provocando la delegación del mando de éste en manos del general Felipe Varela", según María Teresa Cadena. Macacha ayudo bastante y mucho mas a su hermano porque gracias a ella, salvo a su pueblo e hizo que los jefes enfrentados en la guerra de recursos demoledora, subieran a un compromiso de paz y de no mas agresiones, ya que ellos estaban haciendo que las personas de Salta fueran despojados de por lo que ahora es conocido como la de los cerrillos. Referirse a Macacha Guemes es hacerlo acerca de una hidalga mujer de Salta, que trabajó incansablemente al lado de su hermano, el héroe Gaucho, para garantizar la soberanía de los pueblos de este continente. Su aporte a la causa patriótica ocupa un importante lugar en la historia de su tierra y su vida con el tiempo se convirtió en una leyenda para el sentir de su pueblo. Macacha en esta reminiscencia representa a muchas valerosas mujeres que ofrendaron generosamente su vida al servicio de su patria. En mi perspectiva, esta valerosa mujer, así coma las demás mujeres que dieron su vida por su patria y por la libertad, esta mujer yo creo que ya nació con sangre de libertad en sus venas así como su insigne hermano, aunque tanbien ella lego a aprender grandes cosas de su hermano, el le dio un gran ejemplo de libertad de esperanza. Hay mujeres tan valerosas y a la vez podríamos comentar sobre las valientes mujeres que lucharon por lo que era suyo, las mujeres de la coronilla: La historia señala que tras los levantamientos armados que se produjeron en la ciudades de La Paz, Oruro y Chuquisaca a partir del año 1809, Cochabamba era llamada a seguir el ejemplo de sus regiones con el fin de derrotar el dominio español encabezado por Goyeneche. En ese marco tras la sublevación reprimida de Sipe – Sipe, Goyeneche emprendió camino hacia la Argentina con el fin de irrumpir sus provincias y apagar el fuego revolucionario que se había iniciado y así poder derrotarlos, pero con lo que no esperaba Goyeneche era con la nueva insurrección que se produjo tras la salida del comandante español, tras enterarse de la nueva rebelión, Goyeneche retorno a Cochabamba y enfrento a los patriotas encabezados por Esteban Arze, a quienes derroto el 24 de mayo de ese mismo año. Tres días después, la ciudad de Cochabamba fue tomada tras la resistencia heroica de las mujeres cochabambinas en la colina de San Sebastian, mujeres que al ver como morían sus esposos, hermanos, padres, y otros parientes que también defendían su patria, no dudaron en ir a defender la patria encabezada por Josefa Gandarilla, quien arengo a sus compañeras para ir a la lucha. En esta colina, mas conocida como Coronilla, cientos de mujeres murieron a manos de las fuerzas realistas, y en homenaje a ese valor, demostrando aquel 27 de mayo de 1812 es que se recuerda esta fecha como el día de la madre boliviana, conmemoración que fue confirmada a través de la ley ya referida. La ley del 8 de noviembre de 1927 también indica que las asociaciones de beneficencia y protección a los huérfanos podrán adherirse a esta fiesta y organizar festividades tendientes a resaltar la virtud del sentimiento materno, sin lugar a dudas festejar el día de la madre representa no solo rendirle honores a las heroínas de la coronilla, sino también rendirle un homenaje especial a todas las madres que día tras día suelen demostrar su heroísmo y su entrega por amor a los demás, aunque no sea en un campo de batalla pero lo es viviendo por su familia y demostrando su fuerza y entrega por los demás. Las heroínas de la coronilla mostraron que igualmente las mujeres pueden ser valientes y no como los hombres las ven, como seres delicados e indefensos, talvez la mayoría de las mujeres no se dan su lugar pero deberían, por lo menos para dar lugar a sus derechos, en mi opinión estas heroicas mujeres dieron mucho e hicieron conocer su valentía, al solo hecho de salir a luchar y mas sabiendo que sacrificarían su vida. Ahora estas mujeres son reconocidas en muchos lugares, por ejemplo en la ciudad de Cochabamba, también el día en que ellas murieron, el 27 de mayo, el pueblo Boliviano y su gobierno reconoce ese día como el día de la madre este heroico procedimiento de estas mujeres ha sido reconocido así, aunque del mismo modo Belgrano lo reconoció, exclamando gloria a las Cochabambinas. Hoy en día las Cochabambinas son conocidas como mujeres fuertes y valientes gracias a ese levantamiento que hace 198 años hicieron las heroínas de la coronilla, gracias a ellas las mujeres ahora tienen muchos mas derechos que los que tenían antes, ahora también se puede contar con las mujeres al igual que con los hombres, debería existir equidad de género, no solo en Bolivia sino también en los demás países. Asimismo dejar en claro esta pequeña aclaración que las mujeres de la coronilla fueron a combatir por falta de hombres como dice la historia si no que estas mujeres fueron anónimas, mujeres del pueblo que se abatieron en los flancos y en la colina de San Sebastian. La historia no ha identificado documentalmente hasta ahora a una sola de estas bravas mujeres, talvez a Josefa Gandarillas, pero ni aun así, por que vale recalcar que estas mujeres todavía no fueron identificadas documentalmente, pero estas heroicas mujeres derramaron su sangre en una jornada de trágicas inmolaciones. En los fusilamientos no existió mujer alguna y la gloria alcanza a todos por igual y a ninguna en particular. Toda esta historia de mujeres que supieron salir adelante por su patria y demostrar su valentía hoy en día nos enseñan cosas muy grandes al respecto, e hicieron que las mujeres también tengan derechos, mujeres de toda clase, actualmente las mujeres también valen como personas, por ejemplo Ana María de Campero,(mujer que hace pocas semanas murió) ella fue una defensora del pueblo boliviano, supo defender los derechos que tienen las personas, en especial las mujeres. Equivalentemente se podría decir que en Argentina, Cristina Fernández (no como defensora del pueblo o de su país) pero ella es una presidenta que da bastante estabilidad económica a su país, rompió el monopolio, pero esta mujer sabe dar lugar a las mujeres de su país y no solo a las mujeres sino que no deja que las personas pobres sigan sufriendo, hace todo lo posible por eso, para que todas esas personas tengan muchos derechos así como los demás, ella procura y da el ejemplo que las mujeres de la independencia dejaron para todos nosotros talvez no salvando y protegiendo su patria si no protegiendo el bien de su país por que las personas formamos parte de lo que es un país o un pueblo del mismo modo muchas mas mujeres a las que no dejare de mencionar por que ellas si saben tomar el ejemplo que las heroínas de la coronilla, Juana Azurduy de Padilla y Macacha Güemes nos dejaron ellas como ya añadí varias veces fueron mujeres que dieron todo para que hoy tomemos su valentía y entrega su esperanza, y cada uno de los sacrificios que hicieron por nosotros, para que hoy lo apliquemos a nuestra vida diaria.. Como por ejemplo lo hacen estas mujeres en la actualidad: Entre estas mujeres que mencione también esta Mercedes Sosa esta mujer, mas conocida como “la negra” quien da un gran ejemplo en que las mujeres también pueden ocupar oficios que antes solo el hombre podía ocupar, como Juana Azurduy quien fue coronada teniente coronel, demuestra que las mujeres pueden llegar a ser igual que los hombres, y no menos que ellos, y actualmente las mujeres no están solas, tienen el apoyo de los gobiernos, y aunque creo que la mayoría de los países aun no hace que la mujer valga mas o igual que el hombre, para mi es discriminación, pero gracias a Dios ahora la totalidad de las personas viven sin guerras ni muertes, aunque actualmente cada día las personas debemos luchar en la vida, a mi parecer luchar en la vida es solo voluntad de cada uno, y el esfuerzo que cada uno da para seguir adelante. Hay tanto que decir sobre lo que las heroínas inculcaron actualmente, levantaron la honra de todas las mujeres, hicieron que no se quedaran atrás y olvidadas sino que se levantaras y fueran como ellas, luchadoras. De esta forma se pueden nombrar a muchas mujeres como las que lucharon en la guerra del agua en la ciudad de Cochabamba, esta ciudad se caracteriza por el gran problema que tiene con la escasez del agua ya que la expansión de pobladores hacia que debido a la migración de campesinos y mineros entre otras causas a ocasionado con el paso de los años un gran incremento de los habitantes y la demanda del agua para el uso domestico, la guerra del agua en abril del 2000 fue el inicio de otras luchas, en esta guerra participaron mujeres que así como las heroínas de la coronilla entregaban su vida por defender lo que era suyo. Como también se puede aludir a las mujeres que lucharon en la guerra del gas. Hay tantas mujeres valientes que dieron su vida solo por su patria, aunque actualmente no hayan guerras ni luchas por tierras, todavía existen mujeres valientes y en la actualidad existen muchas de ellas, como también mencione a María Romero de campero, Cristiana Fernández… y muchas mas mujeres que en la actualidad muestran su valentía, talvez no entregando su vida por la patria, pero mejorando y haciendo que en el futuro todo sea mejor, estas mujeres a las que me refiero en este pequeño ensayo son mujeres que dan la vida por su familia, mujeres que dan la vida por sacar adelante a sus hijos, y también hay ejemplos de mujeres que hacen que den mas lugar a las mujeres, mujeres que luchan así por su patria, por la mejoría de ella, por el crecimiento y el futuro de SU PATRIA. En este año, 2010 es un año simbólico por que hay varios países que me permitiré mencionar que este año cumplen 200 años de libertad, por ejemplo: México, Argentina, Chile, Colombia y Venezuela, que celebran su grito libertario. Pero no dejemos atrás lo que pasa ahora, La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, ascendió al grado de generala a Juana Azurduy de Padilla, heroína de la independencia de Bolivia y la primera mujer en ingresar al Ejército argentino, con el que luchó por la independencia de la corona española. La declararon así mediante fuentes oficiales informaron que la mandataria firmó un decreto "de ascenso de grado post-mortem" a Azurduy, en una ceremonia en su despacho de la Casa Rosada. Su imagen es una de las que se destacan en el "Salón de las Mujeres" de la Casa de Gobierno de Argentina, creada por iniciativa de Cristina Kirchner. La mujeres de la independencia hicieron eso por nosotros, dieron su vida, su sacrificio, su entrega… por el futuro de su patria, porque no por nada ellas darían la vida mas que por ella, y no por eso hoy en día al casi tenerlo todo, (tecnología, comodidad, y sobre todo tranquilidad) debemos dejarlo todo así, porque todavía tenemos mucho por hacer en esta vida, porque cada día que pasa debemos darle ganas a todo, así como nos dejaron de gran ejemplo las valerosas mujeres de la independencia, porque no por nada ellas entregaron su vida mas que para que nosotros tengamos el futuro que tenemos, y la tendríamos mejor si nosotros damos de nuestra parte para que nuestro presente y futuro siga creciendo talvez no derrotando a personas que nos quieren quitar lo nuestro sino contribuyendo a nuestra patria para que crezca de la mejor manera, sin luchas, sin contiendas, sin mentiras, sino por lo contrario, con valentía para afrontar las cosas, con habilidad para solucionar los problemas, porque ahora talvez no haya problemas como los había antes de ser maltratados/as sino que actualmente, no solo en los países se sud América, porque también me refiero a demás países que hoy sufren por desnutrición, por falta de dinero, etc. Hay tantas causas por las cuales hoy en día hay que luchar para tener un mundo mejor que con una mujer nada mas no alcanzaría para mejorarla, o como antes con tenientes o con caudillos, sino que ahora debemos contribuir cada día un poco mas para tener, no un país mejor, sino un mundo mejor, y quedar libres de la pobreza y de la falta de alimentación. La mujeres de la independencia fueron mujeres que participaron de esta emancipación de los países sudamericanos y hoy son realmente reconocidas en todos todo lugar, y no dejan de ser homenajeados, porque fueron grandes libertadoras, se dice que no solo los mas reconocidos deberían ser homenajeados, sino también los que murieron y derramaron su sangre por estas tierras, no solo unos cuantos deberían ser reconocidos, porque en la historia se dice que centenares de personas murieron, pero si hasta los que mataron y decapitaron personas inocentes son reconocidas, si las reconocidas deberían mas ser las personas que se sacrificaron y no los que los mandaron a la muerte y a las ejecuciones, y los que no dejaban crecer nuestra patria… No solo por que estas mujeres de la independencia dejaron gran ejemplo debemos tener mas libertad, sino por nosotros mismos, porque una persona no puede vivir si libertad, y en la actualidad no somos completamente libres, vivimos en medio de robos, de delincuencia, de muerte y en fin hay tantas causas por las que aun no somos y ni siquiera hemos llegado ser libres y que todavía nos resta mucho por trabajar sobre este tema, el de “la libertad”. Este alegato, el de salvar y luchar por la libertad recupera la palabra silenciada y abre la perspectiva a un escenario de diálogo de racionalidades en muchos países. Un diálogo donde la interdependencia y retroalimentación entre Educación Ambiental, Ecología Política y Economía Ecológica supere los caminos engañosos que embarraron su desarrollo en las últimas décadas, suelo contaminado abonado por el desarrollo sostenible, difundido por tanto especialista de agencias internacionales y pedagogizado por tecnócratas de la educación dispuestos a transformar el sistema educativo desde las marismas enturbiadas por su propio linaje epistemológico de fragmentaciones. Este Manifiesto del Bicentenario, continúa el viaje iniciado por el Manifiesto para Ambientalizar la Vida, de una permanente reescritura y reelaboración, a la que convidamos... con la convicción de que se irá enriqueciendo colectivamente a partir de la alegría que nutre los corazones militantes de quienes cotidianamente luchamos por la defensa de la vida de todas las vidas. Entre otras de mis reflexiones y comentarios que se deberían promover que contribuyan en el desarrollo de nuestras vidas. Pero será que tanta lucha y tanta sangre derramada por estos mártires valió la pena en la actualidad…??? Yo creo que todo en la actualidad esta en manos de cada uno de nosotros, tal ves la libertad que ahora tenemos se la debemos a nuestros mártires, pero será realmente que nosotros hacemos todo para ser libres por completo, no libertinaje sino LIBERTAD, porque lo que mas busca una persona es libertad el tan solo hecho de ser libres es lo mas grande que tiene uno. Garantizar nuestra libertad política, económica y cultural, negada hace más de quinientos años de colonización y opresión, que promovieron el envenenamiento de nuestras tierras y comunidades y el genocidio de nuestros pueblos. El límite de la sustentabilidad en la racionalidad ambiental no se sostiene solamente en bases ecológicas y en la ley de la entropía, sino también en términos de equidad, en un proyecto de democracia y de justicia social. La cuestión de la distribución económico-ecológica se traduce en una política de la diversidad y de la diferencia, en una ética de la otredad, que vienen a cuestionar los principios de organización de la vida humana, más allá de la economía, en la subjetividad remitida al yo individual, y a una objetividad de la realidad sujeta a la unidad y a la universalidad del mundo. La apertura hacia la otredad es el encuentro con un Otro que no es asimilable en lo mismo. La otredad se sitúa en la exterioridad, en la complejidad, en la muerte entrópica, donde ya no puede pensarse al otro como un alter - ego, como un reclamo de reciprocidad y de igualdad desde el egocentrismo del yo, del logocentrismo de la racionalidad científica, del individualismo derivado de la racionalidad económica y jurídica que exigen igualdad y mismidad en el encuentro con el otro. La otredad remite al ser que busca emanciparse de su otro opresor: a los lenguajes de las culturas locales frente al monolingüismo del otro; a la ecología frente al poder hegemónico del capital; a los “derechos comunes a los bienes comunes” frente a la propiedad privada como lógica de un poder supremo global; al yo femenino y a las identidades diferenciadas y complejas –de género, de formas culturales de ser que se afianzan en su exigencia de igualdad en la diferencia, que no demandan igualdad en un mundo homogéneo, sino que buscan comprensión de su otredad y reclaman sus derechos a la diferencia. Por lo tanto este es un citado a, no solamente a un sector de nuestra patria sino un citado que interpela a cada uno de los que habitamos en el mundo y en estas tierras tan hermosas en las que nacimos, o en la que actualmente vivimos, porque todos somos quienes tejemos esta amplia trama de nuestra realidad poli cromática, y por lo propio todos estamos llamados a aportar desde nuestra realidad, a la construcción de respuestas integrales y corresponsales, todos debemos seguir a la libertad, con la cual nos dejaron como ejemplo estos hombres y mujeres que lucharon por nuestra patria, debemos estar orgullosos de eso, y no solo vivir con el orgullo de libertad por ellos sino también seguir aportando en nuestra vida diaria a la libertad. En esta crisis de civilización en la actualidad impulsa un cambio de racionalidad social que conlleva una reinvención de la producción, donde más allá de la posible economía, se construya una nueva sensatez productiva, una economía de la vida sustentada en los potenciales del planeta y en la creatividad de sus culturas: Un mundo global construido por las relaciones, alianzas, sinergias interculturales, este mundo debe ser llevado siglo por siglo de la mejor manera posible, si en algo puedes mejorar tu mundo, debes hacerlo y no dejarlo, porque esta vida pasa de generación en generación en la cual los hijos de los hijos de tus hijos tendrán que si o si vivir en ella y por ello no debemos dejar todo esto en blanco, debemos mejorar como ya había mencionado, todo lo que nos dejaron, porque no por el hecho de que todo este en desorden lo dejare así ya que yo no lo hice, no lo creo, se debe poner en orden, es así como lo que ahora vivimos, debemos hacer que las drogas y la delincuencia que cada día nos ataca nos deje y nos deje libres, nos deje sin miedo a crecer, a ser mejores. Hoy que la vida no es como antes debemos luchar por que sea mejor, ya que antes vivían por sobrevivir a los enfrentamientos por salvar sus tierras o salvar la vida de sus seres queridos, nosotros tenemos que luchar por crecer sanamente en un mundo sin peleas entre nosotros, en un mundo de paz, no completamente, pero que dejen vivir a los demás en alegría y esperanza.