Salarios de tramitación en un despido improcedente Salarios de tramitación en un despido improcedente Se estudia si se tiene derecho a los salarios de tramitación desde el despido hasta la sentencia, cuando ya se ha trabajado en otra empresa La primera sentencia estableció que la empresa que despidió debía hacerse cargo de los salarios de tramitación pendientes de abono, desde la fecha del despido hasta la del comienzo de la prestación de servicios en una nueva compañía, sin que de esa cantidad se descontara lo percibido por el empleado en su nuevo trabajo (superior al salario que tenía en la empresa que le despidió). En su resolución, el Supremo señala que los salarios de tramitación se conciben como dinero a percibir como reparación de la falta de ingresos del trabajador durante la tramitación de un proceso que concluye con la declaración de improcedencia o nulidad del despido. De ahí que, si durante la citada tramitación el profesional tiene ingresos al emplearse en otra empresa, el artículo 56 del Estatuto de los Trabajadores autorice el descuento en los salarios de tramitación de esa retribución obtenida en su nuevo puesto. Los salarios de tramitación tienen una evidente y clara naturaleza indemnizatoria o compensatoria. Se pretende, tanto en los despidos nulos como en los improcedentes, compensar al trabajador uno de los perjuicios del hecho del despido, como no tener retribución alguna hasta que se resuelve el proceso; por ello, si el empleado ha trabajado para otra empresa en todo o parte de ese tiempo y ha cobrado, es obvio que no ha existido ese perjuicio; y si no hay tal, no puede tampoco resarcirse. Así, en estos casos desaparece la ratio legis, el fundamento esencial que justifica y genera la obligación de satisfacer los salarios de tramitación; así, la obligación no existe, al menos en la misma cuantía. La condena sólo alcanza a los salarios dejados de percibir. Por ello, si el trabajador ha prestado servicios para otra empresa durante el proceso, del importe de los salarios de tramitación se han de efectuar las deducciones de las remuneraciones percibidas por ese nuevo trabajo. Tras todo este análisis, el Tribunal Supremo concluye que cuando el trabajador despedido tiene un nuevo empleo, en los salarios de tramitación pendientes de abono procede descontar los meses trabajados en el nuevo empleo, siempre que su retribución sea de cuantía igual o superior. Si la remuneración obtenida cada mes en el nuevo trabajo es inferior al montante mensual del salario de tramitación, la empresa que le despidió incorrectamente tiene que complementar esa diferencia económica (sentencia en www.expansionyempleo.com/asesorlaboral). DICCIONARIO Salarios de tramitación.Importe al que tiene derecho el trabajador despedido, tras la declaración judicial de improcedencia o nulidad.La cantidad es igual a la suma de los salarios no percibidos desde el despido hasta la notificación de la sentencia o readmisión del trabajador, o hasta que tenga un nuevo empleo si se produce antes que dicha sentencia. Despido improcedente.Declaración judicial del despido efectuado, tras la solicitud judicial de tutela del trabajador afectado.Es improcedente un despido cuando no ha podido acreditarse el incumplimiento alegado, no ser éste lo suficientemente grave o culpable para motivar esta decisión, o porque no se hayan cumplido las exigencias formales establecidas. 1/2 Salarios de tramitación en un despido improcedente Expansion © CCOO SERVICIOS 2015 Logos y marcas propiedad de sus respectivos autores Se permite la reproducción total o parcial de todos los contenidos siempre que se cite la fuente y se enlace con el original 2/2