3 Blu Mediterraneo. Fragancias que encierran la energía, la luz y los colores de los lugares más emblemáticos del Mediterráneo Italiano. Expresión de un territorio inimitable donde el arte, la naturaleza y la cultura se funden en una armonía extraordinaria. Un estilo único e inconfundible que Acqua di Parma representa a la perfección. 4 Cerdeña, tierra donde habitan los más asombrosos colores del Mediterráneo Playas de arena blanca, ensenadas profundas como cuñas engarzadas en el corazón de la tierra, fondos cristalinos, granito de matices rosa que el viento esculpe dándole formas caprichosas, panoramas bordados por el amarillo de la retama y perfumados de enebro. Nos envuelve un paisaje de asombrosa variedad, dulce y salvaje, en el cual se alternan los tonos azules, turquesa y azul marino del mar con el verde de la vegetación mediterránea: encinas, olivos, algarrobos, madroños y arrayanes completan la mezcla intensa y fragante de olores que caracterizan esta tierra, agudizándonos los sentidos súbitamente. Cada ambiente de Cerdeña tiene un encanto especial, ya sean las ventiladas Bocas de Bonifacio, que las suaves calas de la zona de Santa Teresa di Gallura, las lagunas pobladas de impasibles flamencos rosa, o las playas de la zona de Cagliari. Todo aquel que haya estado en Cerdeña cuenta sus impresiones: la vegetación mediterránea del entorno de la playa de Razza Ruja - en Costa Esmeralda - con su estupendo estanque y las extensiones azul metálico de sus cardizales, sus farolillos marítimos y sus lirios de mar; el norte mundano y reluciente y el sur recogido y romántico, las bajas laderas llenas de árboles doblados por el viento, los bosques de alcornoques, y, naturalmente, los monumentos prehistóricos llamados “nuragas” (nuraghi). Los más afortunados, yendo en barco hacia el archipiélago de la Maddalena, han visto incluso delfines. Golfo de la Asinara, en el noroeste de Cerdeña 2 3 “No hay lugar al que pertenezca Cerdeña, no habiendo pertenecido jamás a ningún lugar; lo más, a España, a los árabes y a los Fenicios. Aun así, es como si nunca hubiera tenido un destino. Ningún sino. Apartada del tiempo y de la Historia.” David Herbert Lawrence Capo Testa, en el norte de Cerdeña 4 5 La fuerza enérgica de un paisaje pincelado por el viento Corallo Nero (Gherardia Savaglia). La colonia de coral más grande que hasta ahora se haya descubierto en el Mediterráneo se encuentra a treinta y tres metros de profundidad y sobresale de la pared rocosa formando dos grandes abanicos. Entre los quince y los cuarenta metros se nada entre morenas, congrios, langostas, cigarras, pulpos y meros con grandes ojos asombrados. Energia es la que se repira en las suaves calas ventosas; bien merece la pena visitarlas todas. La playa de Liscia Ruja está situada a lo largo de la carretera panorámica de Costa Esmeralda.Tiene un apodo singular y significativo: Long beach. Es una de las más grandes y hermosas de Cerdeña, gracias a sus excepcionales características naturales: un arco de arena rosada y tan ligera como los polvos de tocador delimita por más de quinientos metros una bahía de aguas purísimas, en- Lo primero que acude a la mente es la palabra “energía”. Una energía transmitida por el agua y por el viento, por el movimiento de las olas y por el susurrar de la hojas de los árboles. Todo es fresco e intenso. Las rocas modeladas por el mar son esculturas fabulosas: los leones marinos que luchan con el perfil del faro de Capo Testa, las tortugas que toman el sol a flor de agua y el enorme perfil de águila están en Santa Teresa di Gallura, mientras que el peñón que parece un pez está en Capriccioli (Porto Cervo). La energía llega del mar -sus matices son más de cincuenta, desde el azul marino o el azul turquesa, hasta el verde esmeralda - que cuenta con un paisaje subacuático catalogado entre los diez primeros más bellos del mundo. Peñones gigantescos de granito forman magníficas grutas pobladas de coral rojo. Es una experiencia inolvidable bucear en Capo Testa, Cala dei Corsari, en el norte de Cerdeña 6 7 Archipiélago de la Maddalena, en el norte de Cerdeña por su parte interior. La perfección absoluta quizá le toque a la Playa del Príncipe, llamada así por ser una de las preferidas de Karim Aga Khan IV, cuya fuerza visionaria hizo nacer en 20 quilómetros del territorio de Arzachena el mito de la Costa Esmeralda. Dos alas de arena fina están separadas por un macizo de rocas rosa, recubierto de plantas y flores: si no fuera porque el viento despeina los arbustos, podría parecer un holograma, una postal. O un espejismo. marcada por una densa vegetación de madroños y estepa con tupidos arbustos de enebro que se extienden hasta la orilla del mar. La playa de Razza di Juncu está en el Golfo de Cugnana, cerca de Porto Rotondo. Legambiente, organismo que se ocupa de la tutela del medioambiente en Italia, le ha reconocido cuatro velas, es decir, lo máximo.Transmite una idea de candor, despide destellos; una zona de lagunas en donde los juncos marineros susurran, la abarca Capo d’Orso, en el norte de Cerdeña 8 9 El perfume del enebro “Así, le pareció ver por el camino la llama que emanaba de las cepas el olor del enebro; y este olor, a su vez, abría de par en par, más allá de una galería de musgo, un panorama de bosques, de peñones, de quinos verdes que descendían hasta el límite azul del mar.” de “Il Cedro del Libano” Grazia Deledda Árbol de enebro 10 11 La fuerza de una planta silvestre so complejo, tiene una nota elegante que nos proporciona la idea de una naturaleza intacta y llena de hechizo. Árboles virtuosos y fuertes, capaces de enfrentarse contra la salobridad, la sequía y el viento, los enebros más antiguos son magníficos. En Arbus, en las localidades de Piscinas, Scivu y Sabbie d’Oro crecen ejemplares majestuosos (de más de 9 metros) de enebro marítimo, considerados auténticos monumentos vegetales. Hasta el mismo Arbus se organizan viajes para ver el enebro plurisecular que fuera durante diez años la casa del poeta Efisiu Sanna. Después de recorrer tres quilómetros de curvas en medio de bancos de arena, nos encontramos con el famoso enebro fenicio. Debajo de la cúpula de hojas y ramas se oye el respiro del viento que sube desde la playa, la música de las olas y el zumbido de las abejas. Es el alma del Mediterráneo. Enebro de la miera, cambronera, enebro macrocarpa, conocido por sus bayas grandes y enebro común. En Cerdeña todos crecen silvestres, caracterizando el paisaje de suaves dunas y de colinas rocosas. Los tupidos enebrales proporcionan un perfumen inconfundible, dentro de los de la vegetación mediterránea: la fragancia de la resina se mezcla con el olor a pimienta de las bayas oscuras. Planta muy resistente, no se deja atacar por parásitos; la idea de su fuerza también está corroborada por su etimología. El nombre griego es Arkeutos, que deriva del verbo archèo, cuyo significado es “ahuyentar a los enemigos” porque se le atribuían propiedades protectoras. Alimentar el fuego con ramas de enebro, impregnando la habitación con sus efluvios ayudaba a los enfermos a reponerse. Aunque aún hoy no se use mucho en perfumería, porque la cosecha de bayas y la extracción de su esencia es un proceLa baya de enebro madura 12 13 La baya del enebro Amado por los antiguos romanos, en especial por Apicio, que sentía predilección por sus bayas, usándolas como especia esencial en sustitución de la pimienta, el enebro cuenta con una larga historia, llena de leyendas y creencias populares que le atribuyen los más variados poderes, desde el de ahuyentar a las brujas, hasta el de cocinar mejor la polenta, o purificar el aire. Las hojas son lineales y punzantes; las flores, muy minimalistas, brotan entre marzo y abril y son pardo-rojizas si son de género masculino, mientras que si lo son del femenino son verdosas. Los frutos, también llamados “gálbulas” o con el nombre cariñoso de “coccole”, son pequeñas y carnosas bayas esféricas, resinosas y aroLa planta de enebro es sempervirente con hojas lineales aciformes 14 15 máticas de color verde que se transforma en negro azulado cuando maduran. Es posible que en el mismo árbol haya al mismo tiempo bayas acerbas verdes y bayas oscuras, ya listas para ser recogidas. Ello obliga a hacer la cosecha a mano, sacudiendo la planta a principios de otoño; mejor si lo hacen manos hábiles con la ayuda de cestas de cribado. Maduras entre septiembre y octubre, las bayas de enebro son ricas en resina, cera, aceite esencial, ácido oxálico y málico, además de ser muy apreciadas por herboristas y destiladores. Para conservarlas se dejan secar a la sombra. Lo que más sorprende es su perfume: cuando se aplastan, las bayas dejan una sensación de dulzura salvaje, de frescor. Nos hacen pensar en lugares al aire libre en los cuales los enebros sacudidos por el viento susurran leyendas, haciéndonos soñar un poco más. Las aguas cristalinas de Cala Goloritzè, en el Golfo de Orosei, dentro del Parque Nacional de Gennargentu 16 17 En una pequeña baya, toda el alma de una isla El mistral corre sin cesar, llevando consigo aromas y calor del sol. Es el alma de esta isla, su soplo. De todos los perfumes de la vegetación mediterránea que impregnan el viento, uno solo destaca sobre los demás por su vitalidad primordial: el enebro. Balsámico e intenso, aromático y elegante, el arbusto está bien enraizado en la tierra, con sus hojas finas y resistentes y sus bayas de color violeta oscuro. Protagonista absoluto de la lozanía de la vegetación de la isla, tan densa de efluvios aromáticos, se le ve tanto en amplias superficies, como en pequeños claros, por las dunas, a lo largo del litoral, en el interior de los bosques de Cerdeña o entre las rocas y los troncos de árbol modelados por el viento cálido que extiende su perfume. En una eterna lucha contra los elementos, con una naturaleza escabrosa y fuerte y una luz potente, el enebro encierra en sí una profunda energía que transmite a través de su intenso aroma; un equilibrio sutil y delicado emana de su perfume a pimienta mezclado con notas amaderadas y ligeramente resinosas. La costa al sudeste de Cerdeña 18 19 Ginepro di Sardegna pura naturaleza mediterránea Llegar a Cerdeña significa también la emoción de sentir en la piel y en el alma el aroma sutil e inconfundible del enebro. Y Acqua di Parma elige esta esencia porque se distingue entre las demás por entrañar en sí la energía de esta isla. Nace así Ginepro di Sardegna. En sus notas se perciben las minúsculas calas y las playas infinitas, la arena rosa de conchas y la blanquísima, sin olvidar la vegetación que se extiende hasta el mar. Sensaciones intensas, como en todas las fragancias Blu Mediterraneo creadas por Acqua di Parma para evocar la belleza de los paisajes más exclusivos del Mediterráneo italiano, capturando la resplandeciente luz, la pureza del aire y las numerosas civilizaciones que han cruzado este mar, único en el mundo. Cada perfume de la línea Blu Mediterraneo celebra un ingrediente emblemático de un lugar, regalando la emoción de volver a vivir dondequiera que se esté y en cualquier momento la fascinación inolvidable de este mar, interpretando el más auténtico estilo italiano. 2012 21 SALIDA Bergamota, Pimienta, Guindilla, Nuez Moscada El perfume del viento y su energía fagas intensas con repentinos momentos de calma. En su salida, las notas aromáticas y balsámicas del enebro se funden con la solar bergamota y con los vivaces acentos especiados de pimienta, guindilla y nuez moscada. Tras esto, se abren los aromas de la vegetación bajo un cielo azul y los colores llenos de luz que inundan las tierras de Cerdeña. En su corazón, la energía del enebro queda destacada por las notas resinosas y aromáticas de la salvia oficinal, mientras que el ciprés enriquece la fragancia con cálidos acentos balsámicos. En su fondo, equilibrando perfectamente la fragancia, el calor y los acentos amaderados del cedro de Virginia. Una sensación de profunda alegria que solamente los paisajes de Cerdeña, donde el Mediterráneo alcanza la perfección, saben dar. Un perfume que libera la esencia del Mediterráneo más puro y regala toda la energía del enebro, que solamente en Cerdeña emana un aroma tan intenso. Ya desde las primeras notas nos dejamos embriagar por la primordial fuerza del viento que azota las costas, el mar y los escollos de esta isla maravillosa. Un viento que lleva consigo los sutiles y exuberantes perfumes de la vegetación mediterránea, entre los cuales destaca el aroma elegante del enebro. Acqua di Parma interpreta dinámica e intensamente esta magistral composición de bayas oscuras en la que la fragancia se desarrolla manteniendo un ritmo sensorial sorprendente que varía entre intensidad y levedad, frescor y calor, suavidad y vivacidad. Se parece al viento que azota las costas sardas alternando rá- 22 CORAZÓN Salvia Oficinal, Enebro, Ciprés FONDO Cedro de Virginia 23 El frasco con reflejos de olas El frasco de Ginepro di Sardegna tiene toda la elegancia del Mediterráneo italiano. El cristal luminoso tiene el mismo color del más azul de los mares, mientras que la superficie recuerda los reflejos de las ondas al romperse la luz y la transparencia. Su diseño Art Déco recuerda al elemento más emblemático del mundo Acqua di Parma. Sobre el fondo blanco de la etiqueta está escrito en color violeta oscuro el nombre de la fragancia, recordando el característico color de las bayas de enebro. Una nota de elegancia también la lleva el estuche azul marino, hecho a mano con papel gofrado. 24 25 Un intenso ritual de belleza Las notas intensas de Ginepro di Sardegna se vuelven un elegante ritual de belleza. El Gel de Ducha Energizante, con su espuma suave y densa, limpia la piel delicadamente, dejándola fresca y suave. Las virtudes balsámicas del enebro envuelven la mente y el cuerpo en la más pura energía mediterránea. La Leche Corporal Energizante de textura suave y de rápida absorción, proporciona un efecto hidratante, dejando la piel lisa. El toque agradablemente aromático del enebro proporciona nueva energía a la piel, que aparece luminosa. Ambas fórmulas están enriquecidas por sacarosa, conocida por su capacidad de mantener la hidratación natural de la piel, y por vitamina E, con propiedades protectoras. El ritual se completa con el Desodorante Perfumado. Una textura ligerísima, un soplo de energía que dona una profunda sensación de frescor durante todo el día. 26 27 28 29 La Cerdeña de Grazia Deledda “Quiero recordar la Cerdeña de mi niñez, sobre todo la sabiduría profunda y auténtica, el modo de pensar y de vivir, casi religioso, de algunos pastores y campesinos sardos (...) a pesar de su absoluta falta de cultura, hace creer en una costumbre atávica de pensamiento y de contemplación superior de la vida y de las cosas más allá de la vida. De algunas de estas personas mayores he aprendido verdades y conocimientos que en ningún libro he encontrado tan limpias y confortantes. Son las grandes verdades fundamentales que los primeros habitantes de la tierra tuvieron que recavar de ellos mismos, maestros y alumnos a la vez, ante los grandes arcanos de la naturaleza y del corazón humano...” Grazia Deledda Premio Nobel de Literatura, 1926 Cerdeña cuenta con 1.897 quilómetros de costas 30 31 La costa al sur de Cerdeña 32 33 Refugio y escenario mundano de la jet-set da por David Bailay en 1963 en Cala de Volpe, mientras Michelangelo Antonioni rodaba el final de “El desierto rojo” en la playa rosa de Budelli, y Soraya tomaba sol junto a Maximilian Schell en el islote de Spargi. En 1962, el príncipe Karim Aga Khan IV se enamoró completamente de este rincón del mundo y lo transformó en el refugio feliz y aristocrático que conocemos, fundando el Consorcio Costa Paisajes lunares y mar caribeño, ¿se puede pedir más? Meta preferida de buceadores, Cerdeña también es desde los años 70 un punto de referencia de la jet set internacional. En verano llegan fabulosos yates como el Nara, el Mirage, el Nafisa, o el Lady Moura del príncipe saudí Farouk Al Raschid, por nombrar algunos. Quien desee regresar unos años atrás encontrará a Catherine Deneuve fotografia- A la izquierda: La Costa Esmeralda A la derecha: Panorama de la bahía de Liscia di Vacca 34 35 La bahía de Porto Cervo, al norte de Cerdeña La placeta de Porto Cervo Garbo, Margarita de Inglaterra, Jacqueline Kennedy, Juan Carlos I, Harrison Ford y Sting. ¿Dónde está el secreto? En un cóctel de discreción y exhibicionismo, de estilo y de desenfreno, etiqueta y extravagancia. De naturaleza y mundanería de alta sociedad. Alberto y Carolina de Mónaco acostumbraban visitar la Costa Esmeralda ya desde pequeños. No hay artista o testa coronada que la haya excluido de su lista de lugares por visitar, de Michael Douglas a Aurelio De Laurentiis, o de Maurice Bejart a Eric de Rothschild. Esmeralda. Una transformación seguida por la de Porto Rotondo: en total, hay unos 1.500 plazas de embarcaciones. Y los barcos sirven para que el baño sea emocionante, entre escollos coloreados de algas rojas y violetas, anémonas de mar y esponjas color índigo. El perfume del salitre mezclado al de las plantas mediterráneas, la arquitectura discreta, los lujosos hoteles asomados a bahías impresionantes han hecho de Costa Esmeralda un lugar obligado para pasar las vacaciones. Cerdeña es de agrado a las más diferentes personalidades: Greta Cala de Volpe, al norte de Cerdeña 36 37 La lista de actores de Hollywood es interminable: Bruce Willis, Denzel Washington, Lenny Kravitz, Anne Hathaway, Kevin Spacey, Leonardo di Caprio, Edward Norton, Meryl Streep. Gwyneth Paltrow llegó en yate con sus hijos, invitada por Steven Spielberg. Pero no solamente actores llegan, ya que se ha visto a la estrella del pop Rihanna, o al escritor y escenógrafo chino contemporáneo Mo Yan, cuyo nombre significa “aquel que no quiere hablar”, quizá menos famoso, pero no menos admirado. Quiere hacer aparecer un poco de Cerdeña en su próxima obra. Los elementos naturales sardos: las aguas cristalinas, rocas rosas y enebro. 38 39 Flamencos rosa en las costas del sur de Cerdeña El Sur de la isla Costa Rei, al sur de Cerdeña 40 torre visible desde todas las playas, sus seis quilómetros son una sucesión de escollos, arena y piedras pulidas. Con sus olas de más de tres metros de altura y sus vientos fuertes de noreste y de oeste, es la zona ideal para los practicantes de surf. Y no solamente para ellos, claro. Vale la pena visitare la Cala Cipolla, cerrada, protegida y romántica con sus siete arrecifes que se sumergen a una profundidad de veinticinco metros. La zona de Chia llega hasta el promontorio Capo Spartivento, la segunda franja de tierra situada en el extremo sur de Cerdeña. Su faro todavía está activo, siendo también un centro de hospitalidad de lujo. El panorama es incomparable. El Sur es menos frenético y mundano que el Norte; bien se adapta a quienes quieran descubrir la naturaleza y la comarca. Para la alegría de los observadores de aves, se Cagliari es la puerta de la Cerdeña del sur. Es una perla deliciosa de roca caliza blanquísima, con callejuelas y rinconcitos encantadores que se asoman al Golfo de los Ángeles. Caminamos en plena y resplandeciente luz, acompañados por el viento. Costa Rei ofrece amplias superficies de arena, forestas, lagunas y paisajes extraordinarios. Con sus cien quilómetros de senderos y cuarenta y cinco de playas es un paraíso para aquellos quienes adoran pasear en medio de la naturaleza o para quienes practican deportes como surf, windsurf, kitesurf y vela. Hay olas unos doscientos días al año; las mejores son las de otoño, invierno y primavera. Hay quien prefiere las zonas entre Oristano, Cagliari y Alghero (Piscinas, Porto Ferro o Capo Mannu) y quien nunca dejaría de ir a Chia, la joya del sur. Dominada por una orgullosa 41 Dunas, típico elemento natural de la costa suroeste de Cerdeña te intacto, sino que cuenta con nuevas especies de peces tropicales que aquí se “mudaron” hará unos veinte años. Se pueden observar las caracolas porcelanizadas que antiguamente se llamaban “Venus de Chipre”, así como tortugas marinas y delfines. Con un poco de suerte y espíritu de aventura, hasta es posible cruzarse con algún derrelicto o algún trozo de ánfora asomándose por la arena. Pula, con el parque natural de Sulcis ofrece más emociones: mangíficas montañas, ríos, arroyos y forestas por explorar. Domus de Maria, es un parque natural extraordinariamente bello. Nos encontramos en el Suroeste, entre los promontorios de granito, dunas y forestas de encinas más amplios del Mediterráneo. Acompañados por el viento, que nunca se cansa, regalándolos ese rico bouquet oloroso de enebro y aire salado que todos quisiéramos -y ahora podemos- capturar y llevárnoslo. pueden encontrar garzas reales, simpáticas cigüeñas, gritones cormoranes y flamencos rosa para nada tímidos que caminan elegantes e imperturbables a pocos metros de los turistas. Para los aficionados a lo antiguo, en Costa Rei se halla el complejo megalítico de Cuili Piras, que transmite una cierta sensación de haberse perdido o alejado. Pero... ¿dónde estamos? ¡La similitud con Stonehenge, en Inglaterra, es impresionante! Sumergida en la vegetación, entre los montes Sette Fratelli, encontramos la Tumba de los Gigantes, sitio arqueológico que se remonta a la cultura prehistórica de las nuragas (nuraghi). En definitiva, la única duda esté en decidir qué es lo se quiere visitar. Totalmente fascinante, como para enloquecer por su belleza, el paisaje que ofrece Villasimius, con su alternancia de pequeñas y grandes playas engarzadas en las montañas asomadas al mar. A pesar de ser meta preferida de buceadores, el fondo no solamente está biológicamen- Villasimius, en el sur de Cerdeña 42 43 Villasimius, en el sur de Cerdeña 44 45 Indice 3 Cerdeña, tierra donde habitan los más asombrosos colores del Mediterráneo 6 La fuerza enérgica de un paisaje pincelado por el viento 10 El perfume del enebro 13 La fuerza de una planta silvestre Textos Roselina Salemi 14 La baya del enebro 19 Fotos 20 Stefano Batistini En una pequeña baya, toda el alma de una isla Ginepro di Sardegna pura naturaleza mediterránea Pietro Cappa 22 Enrico Cerretelli El perfume del viento y su energía 25 El frasco con reflejos de olas 26 Un intenso ritual de belleza 30 La Cerdeña de Grazia Deledda 35 Refugio y escenario mundano de la jet-set 41 El Sur de la isla Robert Harding Martino Motti www.acquadiparma.com 49 50 51 52