Informe Económico Mensual Noviembre de 2011 Lola Mora 421 • Torre 1 • Piso 14 • Edificio Madero Harbour Dique 1 • Puerto Madero Este • CABA • Argentina Tel. +5411 5245.8585 • contacto@abeceb.com www.abeceb.com 01. Editorial: Las dos agendas para la economía que viene 02. Controles cambiarios: Apagando el fuego con fuego 03. La quita de subsidios aliviará las cuentas y favorecerá mayores inversiones 04. Bitácora: los datos y hechos más relevantes del mes 05. Principales variables internacionales Director Lic. Dante Sica Coordinador Lic. Mariano Lamothe Equipo Técnico Lic. Mauricio Claverí Lic. Belén Olaiz Lic. Soledad Pérez Duhalde Lic. Santiago Novoa Lola Mora 421 • Torre 1 • Piso 14 • Edificio Madero Harbour Dique 1 • Puerto Madero Este • CABA • Argentina Tel. +5411 5245.8585 • contacto@abeceb.com www.abeceb.com 01. Editorial: Las dos agendas para la economía que viene Resumen 1. Para entender el futuro de la economía argentina es necesario comprender que hay dos agendas económicas bien diferenciadas: una de corto plazo y otra de mediano plazo. 2. En el corto plazo, la clave está en estabilizar la macroeconomía. En los últimos años, el avance en la maximización del crecimiento económico llevó a la pérdida de esa condición de estabilidad macro. 3. Pero aun cuando la agenda de corto plazo lograra encaminarse, la economía argentina debe enfrentar los postergados desafíos de mediano plazo. En ese lapso, la agenda tiene como tema clave la productividad del país, que es la que permite encauzar la economía en el sendero de crecimiento y desarrollo con un horizonte de más largo plazo. La economía argentina enfrenta un nuevo ciclo en el cual es previsible que, en caso de continuar con similares acciones de política económica, ya no se pueda arribar a iguales resultados en el campo macroeconómico. La causa principal radica en las diferentes condiciones sobre las que se implementan estas políticas económicas. Para entender el futuro de la economía en Argentina, es necesario comprender que hay dos agendas económicas bien diferenciadas: una de corto plazo y otra de mediano plazo. Actualmente la agenda de corto plazo se sobrepone a poder discutir la agenda de mediano plazo. En el corto plazo, la clave está en estabilizar la macroeconomía. En los últimos años, el avance en la maximización del crecimiento económico llevó a la pérdida de esa condición de estabilidad macro. La conjunción de inflación persistente con debilitamiento de las cuentas fiscales y externas confluyó en un desequilibrio en el mercado cambiario, poniendo en duda la consistencia macroeconómica. La política de ingresos ha sido sin lugar a dudas el corazón del modelo económico de los últimos 8 años provocando algunos desajustes sobre la macro y la microeconomía. La implicancia más visible se observa en la dinámica adquirida por el gasto público, que ha resentido fuertemente las cuentas fiscales. De hecho, el superávit fiscal ya hubiese desaparecido si no fuera por la contribución de ingresos al Tesoro por parte de la Anses y el Banco Central. Por otra parte, vemos a los subsidios y la política energética que impactan tanto en las cuentas públicas como en las externas. Este año se produjo una situación inédita: luego de 24 años Argentina se convirtió en importador neto de energía, con un déficit del sector que rondaría los U$S 4.600 millones en 2011 y ascendería a U$S 8.000 millones el año próximo. Por esto y el crecimiento de las importaciones por efecto de la demanda doméstica la brecha externa tiende a debilitarse. El último eslabón de esta cadena de desequilibrios de la macro sobre los que habrá que trabajar involucra al BCRA, que se convirtió paulatinamente en uno de los principales financiadores del Estado. Con una tasa de expansión monetaria que supera el 40%, el Central busca cubrir las necesidades del Tesoro para afrontar vencimientos de deuda y financiar el gasto público récord. Además del efecto directo adverso que esto implica sobre la calidad del patrimonio de la entidad monetaria, la elevada emisión también ha alimentado la incertidumbre acerca del respaldo de la moneda, favoreciendo la dolarización de portfolios, que alcanzó en los últimos meses niveles que no se registraban desde 2008. Esta agenda de corto plazo que ya estaba latente, ahora se vuelve más crítica si se tiene en cuenta que el contexto mundial, más allá de que estructuralmente es favorable a las naciones emergentes como la nuestra, ya no permite las “holguras” que se repitieron durante los últimos años. Esto quiere decir que aún cuando el mundo seguiría creciendo en los próximos años, lo haría a tasas más moderadas que en el pasado, quitando parte del sustento sobre los precios de las materias primas. Adicionalmente, también aceleraron la agenda las mismas decisiones de política económica tomadas recientemente a niveles locales relativos a la escasez de dólares en el mercado, y a darle un carácter más “urgente” a los desbalances existentes, lo que incrementó la sensación de la inminencia de un ajuste en materia cambiaria. Aun cuando la agenda de corto plazo lograra encaminarse, la economía argentina debe enfrentar los postergados desafíos de mediano plazo. En ese lapso, la agenda tiene como tema clave la productividad del país, que es la que permite encauzar la economía en el sendero de crecimiento y desarrollo con un horizonte de más largo plazo. Vale destacar que el mecanismo por el cual a partir del tipo de cambio la macro otorgaba a los sectores productivos competitividad vía precio parece haber finalizado. Los costos y salarios en dólares ya no otorgan las ventajas de hace unos años y dificultan cada vez más la sustentabilidad de las cadenas productivas y de sus eslabones. Tampoco es sostenible en el tiempo utilizar una política comercial defensiva como método de suplantar la falta de competitividad. Además, es difícil encontrar margen para seguir intensificando las trabas a las importaciones sin que los sectores productivos locales se vean afectados por desabastecimiento de insumos, materias primas o bienes de capital. Gráfico 1: Salarios en U$S y Costo de bienes de capital. USD e índice base 1993=100. 1.200 400 378 380 367 1.000 352 350 335 800 331 360 328 332 322 340 314 317 317 320 600 Salarios en USD 300 280 Bienes de capital (e.d.) 260 949,9 2009 912,5 2008 698,3 2007 572,3 2006 491,5 2005 418,0 2004 2003 2002 936,5 2001 943,9 2000 939,8 1999 924,7 1998 914,0 1997 1.117,7 240 200 0 284 220 200 2010 400 286 Fuente: abeceb.com en base a INDEC, BCRA y estimaciones propias. Para afrontar esta agenda es necesario avanzar en una sustancial mejora en la productividad de las cadenas de valor de manera que se vaya encaminando la competitividad estructural de las mismas. En ese sentido, la clave pasa por acentuar el proceso inversor que permita alejar las fronteras tecnológicas. El Plan Nacional Industrial 2020 es un buen inicio para avanzar en esta agenda, pero hasta el momento su implementación ha consistido en un diagnóstico de los sectores y la definición de metas ambiciosas a ser alcanzadas en el año 2020, pero poco refiere acerca de medidas concretas para allanar el camino hacia los objetivos planteados. Es importante a la hora de diseñar la política industrial contemplar las capacidades productivas del país en términos estratégicos. En la recuperación post crisis la Argentina mostraba condiciones diferentes a las del promedio de su historia pero actualmente enfrenta restricciones por escasez de mano de obra y costos medios elevados. En consecuencia, a la hora de pensar en el desarrollo de ciertas cadenas productivas es importante que la estrategia de desarrollo se oriente rápidamente a fuentes genuinas de productividad, tales como las inversiones en bienes de capital, tecnología y capacitación de recursos humanos, que permitan relajar las restricciones imperantes de mano de obra escasa y le otorguen diferenciación a los productos, especialmente en un mundo donde la inserción de China se hace sentir de manera generalizada. En resumen, la agenda que viene contiene desafíos tanto de corto como de mediano plazo. Mientras que en el corto plazo ordenar la macro ocupará el centro de la escena, esto no será suficiente para garantizar que el proceso de crecimiento en curso adquiera sostenibilidad en el tiempo. Para poder logar un desarrollo sustentable en el largo plazo, será imprescindible desarrollar un nuevo perfil de inversiones que amplíe la capacidad de la oferta de responder al crecimiento de la demanda, a través de un incremento genuino de la competitividad. Gráfico 2: PIB y stock de capital. Índices base 1993=100. 180,0 PIB a precios constantes 170,0 169,4 Stock de capital por hora trabajada 160,0 +70,2% 150,0 140,0 130,0 124,0 121,8 121,6 120,0 110,0 105,2 100,0 -2% 99,5 100,0 90,0 Fuente: abeceb.com en base a MECON y estimaciones propias. 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2003 2002 2001 2000 1999 1998 1997 1996 1995 1994 1993 80,0 02. Controles cambiarios: Apagando el fuego con fuego Resumen 1. El proceso cambiario que se intentó contener en las pasadas semanas obedece a una situación más bien estructural, que se venía dando desde mucho tiempo. 2. Si bien es cierto que el nivel de reservas continúa siendo relativamente elevado, también cabe notar que las reservas llamadas de “libre disponibilidad” se han reducido por debajo de los mil millones, y prácticamente dejarían de existir hacia fines de año. 3. La buena noticia es que el gobierno tiene las herramientas para corregir esa dinámica sin la necesidad que se produzca un desequilibrio demasiado importante o una crisis significativa, teniendo en cuenta que fue el principal impulsor de la misma. Las medidas que tomó el gobierno tras las elecciones presidenciales sobre la liquidación de exportaciones petroleras y mineras primero, y los controles a la compra de dólares después, estuvieron orientadas a contener un desequilibrio coyuntural de la macro, dado por la aceleración en la salida de capitales durante los últimos meses. Pero la creciente dolarización no es más que el síntoma más visible de los desequilibrios macro acumulados durante los últimos años. En otras palabras, el proceso que se intentó contener en las pasadas semanas obedece a una situación más bien estructural, que se venía dando desde mucho tiempo. Básicamente, una dinámica macro que fue volviendo cada vez más escaso al dólar en relación al peso. La escasez relativa de la divisa norteamericana en la plaza doméstica se produjo por la confluencia de al menos dos factores. Básicamente, el deterioro constante del superávit comercial (principal componente de la oferta) y la financiación creciente de las necesidades fiscales del Tesoro a través del Banco Central, tanto mediante la utilización de reservas para pagar deudas en dólares como de la emisión de pesos lisa y llana para financiar el gasto público. Pero las medidas tomadas recientemente por el gobierno apuntaron únicamente a los síntomas del desequilibrio, pero nada resolvieron sobre las causas que lo ocasionan. Los síntomas En los últimos meses, la demanda privada de dólares se aceleró en forma sustantiva. De hecho, entre agosto y octubre promedió unos USD 3.547 millones de dólares mensuales, sumando más de USD 10.642 millones, guarismo que no tiene precedentes en los pasados años, ni siquiera en 2008 cuando el conflicto con el campo primero y la crisis financiera internacional después motivaron una escalada de la incertidumbre a nivel local. Y en los días previos a las elecciones, el apetito privado por la divisa norteamericana escaló a nada menos que USD1.089 millones en apenas una semana, cifra apenas inferior a lo que se demandó en todo el primer trimestre de este año (USD1.473 millones). Gráfico 3: Demanda Privada de Dólares. En Millones de dólares. Suma 3 meses. 4.000,0 1.734 2.000,0 940 -462 0,0 -1.394 -2.107 -2.000,0 -4.000,0 -6.000,0 -8.000,0 -6.399 -6.092 -6.367 -9.065 -10.000,0 Sep-11 Mar-11 Dic-10 Sep-10 Jun-10 Mar-10 Dic-09 Sep-09 Jun-09 Mar-09 Dic-08 Sep-08 Jun-08 Mar-08 Dic-07 Sep-07 Jun-07 Mar-07 Dic-06 Sep-06 Jun-06 Mar-06 Jun-11 -10.642 -12.000,0 Fuente: abeceb.com en base a BCRA y CIARA-CEC. Como resultado, en los últimos meses las reservas –que ya habían dejado de crecer a principios de año- comenzaron a caer, hasta ubicarse en USD 46.073 millones a mediados de noviembre. Al analizar los números detrás de esta caída, claramente aparece la venta de dólares para defender la cotización del peso. Este objetivo obligó al Central a vender entre agosto-11 y los primeros días de noviembre11 USD4.932 millones en el mercado doméstico para evitar una escalada de la moneda norteamericana. Pero si bien es cierto que el nivel de reservas continúa siendo relativamente elevado tanto en una comparación internacional como histórica, también cabe notar que las reservas llamadas de “libre disponibilidad1” se han reducido por debajo de los mil millones, y prácticamente dejarían de existir hacia fines de año. 1 Son aquellas que sobrepasan las necesarias para respaldar la base monetaria, y que según la legislación vigente pueden ser utilizadas para el pago de la deuda en dólares del Tesoro. Se estima que durante 2011 el Tesoro hizo uso de USD7.000 millones por ese concepto para enfrentar vencimientos de deuda, luego de haber utilizado alrededor de USD6.500 millones. Gráfico 4: Reservas Internacionales y Factores de Variación. En Millones de dólares. 54.000 2.000 53.000 52.502 52.001 1.357 1.000 52.000 55 51.000 51.210 20 0 50.722 50.000 -1.000 -1.149 49.000 -2.000 48.000 -4.649 47.000 -3.000 46.000 46.073 45.000 -4.000 -5.000 -4.649 Nov-11 Oct-11 Sep-11 Ago-11 Jul-11 Jun-11 May-11 Abr-11 Mar-11 Feb-11 Ene-11 44.000 -4.932 -6.000 Reservas Interv. Org. Inter Otras Op. Ef. Mínimo Del S. Pub Otros Fuente: abeceb.com en base a BCRA y CIARA-CEC. La receta post-electoral: tapar los síntomas a costa de agravar la enfermedad La respuesta del gobierno al drenaje de dólares del sistema estuvo claramente orientada a las consecuencias, y no a las causas de este fenómeno. Por un lado, se apuntó a la oferta de divisas en el mercado doméstico, restableciendo la obligación de que exportadoras petroleras y mineras liquiden las divisas en el país, y forzando a las aseguradoras a traer al mercado doméstico sus inversiones en el exterior. Mientras que por el lado de la demanda, se establecieron controles para la compra de dólares por parte del público, que se instrumentaron a través de la AFIP bajo criterios que hasta el momento no se han dado a conocer. Pero como era de esperar, los resultados de esta estrategia no fueron más que acelerar el proceso en curso, incrementando la percepción de escasez de la divisa norteamericana por parte del público, y por tanto el deseo del sector privado de hacerse de dólares. El principal reflejo de esto fue una abrupta caída en los depósitos denominados en moneda extranjera durante las pasadas semanas. Así, entre el 28/10 –fecha en que se anunciaron las restricciones- hasta el 4 de noviembre pasado –último dato publicado por el BCRA-, los depósitos en moneda estadounidense registraron una caída de USD682 millones, lo que representa alrededor de un 5% de los depósitos totales en esa moneda. Y esta fuga se habría mantenido elevado durante la segunda semana de noviembre, con lo cual en total los bancos habrían perdido más de 10% de los depósitos en moneda extranjera en sólo dos semanas. Las restricciones en el mercado cambiario local también motivaron un salto en la cotización del dólar en el mercado paralelo, que llegó a cotizar en máximos de ARSUSD 5,20, representando una depreciación implícita de alrededor de 20%. En todo, la dinámica anterior condujo a un abrupto incremento de las tasas de interés ofrecidas para los depósitos en pesos, como vía para incrementar el atractivo de la moneda local en relación al dólar. De hecho, la tasa BADLAR (para depósitos superiores al millón de pesos) terminó la semana pasada por encima del 20%, prácticamente duplicando el promedio registrado en la primera mitad del año (11,1%). Perspectivas: La solución, en las causas La buena noticia es que el gobierno tiene las herramientas para corregir esa dinámica sin la necesidad que se produzca un desequilibrio demasiado importante o una crisis significativa, teniendo en cuenta que fue el principal impulsor de la misma. En el corto plazo, las autoridades podrían restablecer la calma en el mercado si dieran marcha atrás, al menos informalmente, sobre el corset que impuso en el mercado cambiario. En este sentido, la medida tomada por el Banco Central a fines de la semana pasada liberando los encajes excedentes de los bancos apuntó en la dirección correcta. De todos modos, aun resuelto el stress disparado en las últimas semanas, la política económica deberá orientarse a resolver los problemas estructurales que seguirán operando, y por tanto, alimentando la escasez relativa del dólar en la plaza doméstica. Es que mientras la inflación se mantenga arriba del 20% anual, el superávit comercial continúe en declive y las necesidades fiscales sigan creciendo – en un contexto de capacidad limitada de salir a financiarse a los mercados internacionales (al menos mientras no se arregle la porción de deuda aún en default)- los desequilibrios macro continuarán acumulándose, incrementando los desafíos de la política económica. Finalmente, el equilibrio tendrá que llegar a través de una adecuación del crecimiento de la demanda a las posibilidades de la oferta doméstica, para lo que resulta necesario moderar la expansión del gasto y de la cantidad de dinero2. Y las señales otorgadas por el gobierno recientemente parecieran apuntar en esta dirección. Gráfico 5: Inflación y crecimiento. Variaciones % interanuales. 30,0 25,0 20,0 15,0 La inflación controlada, permitía un elevado crecimiento 10,0 5,0 0,0 -5,0 PBI var. i.a. La inflación se acelera y la actividad se resiente I.04 II III IV I.05 II III IV I.06 II III IV I.07 II III IV I.08 II III IV I.09 II III IV I.10 II III IV I.11 II -10,0 Inflación i.a. Fuente: abeceb.com en base a INDEC, oficinas de estadística provinciales y estimaciones propias. 2 Una deprecación más rápida del peso en relación al dólar sólo funcionaría en un contexto de desaceleración de la actividad económica, que podría aparecer, por ejemplo, si la situación internacional escalara, conduciendo a nueva apreciación del dólar a nivel global (como en 2008/2009). En el contexto actual en que la actividad económica se encuentra al límite de la capacidad, una depreciación sería contraproducente, dado que se traduciría rápidamente en una aceleración en la inflación doméstica. 03. La quita de subsidios aliviará las cuentas y favorecerá mayores inversiones Resumen 1. La reciente sangría de dólares que se produjo a lo largo del año ha terminado de acelerar algunas medidas que la economía demandaba y que ya no podían esperar. La quita de subsidios se ha incorporado a la agenda económica del Gobierno luego de varios años con tarifas congeladas. 2. Hasta ahora, los ingresos extraordinarios provistos por Anses y el Banco Central dieron una mano y sirvieron para maquillar un superávit que poco a poco se fue diluyendo. 3. Una paulatina actualización de las tarifas podría ayudar a descomprimir los abultados fondos que se destinan a los sectores energéticos y de transporte y mejoraría los incentivos sectoriales, favoreciendo el proceso de inversiones necesarias para mejorar la capacidad y calidad de la oferta doméstica. El importante drenaje de dólares que se registró durante el año llegó a niveles no registrados desde el año 2008, tras crisis con el campo y en plena crisis subprime. Sumado a esta ya considerable fuga de capitales, la interpretación de los agentes acerca de las medidas de intervención sobre el mercado cambiario, forzó a la autoridad monetaria a desprenderse de reservas internacionales a un mayor ritmo, llevando el cúmulo de reservas por debajo del umbral de los U$S 46.000 millones. Esta sangría de dólares que se produjo a lo largo del año ha terminado de acelerar algunas medidas que la economía demandaba y que ya no podían esperar. La quita de subsidios se ha incorporado a la agenda económica del Gobierno luego de varios años con tarifas congeladas. Ello no es más que un reconocimiento de que las cuentas fiscales ya no están dando. Al analizar los números, se observa que, mientras el gasto avanza al 34,6%, los recursos se expanden al 29% y con una variación que tiende a mantenerse estancada en dichas tasas. De este modo, en los primeros 9 meses de 2011 el superávit fiscal registró una caída del 42% interanual. En dicha ecuación, la incidencia de los subsidios es cada vez más determinante. Actualmente explican el 15,8% del gasto total y las partidas destinadas a estos rubros se expandieron con guarismos superiores al 100%, con un fuerte impulso del sector energético. Gráfico 6: Subsidios a empresas privadas. Como % del Gasto Total 18,0% 15,8% 15,1% 16,0% 12,5% 14,0% 13,8% 12,0% 10,0% 6,0% 8,0% 6,0% 3,8% 9,5% 4,0% 2,0% 0,0% 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011* Fuente: abeceb.com en base a MECON y estimaciones propias. Hasta ahora, los ingresos extraordinarios provistos por Anses y el Banco Central dieron una mano y sirvieron para maquillar un superávit que poco a poco se fue diluyendo. Estas transferencias se verificaron tanto por encima de la línea como por debajo, indicador de la variedad de mecanismos de que se sirve el gobierno para cerrar la brecha. En primer lugar, puede mencionarse el notorio rol que el BCRA pasó a cumplir como fuente de recursos. El traspaso de utilidades al Tesoro ya supera en los primeros tres trimestres del año los $9.300 millones. Por otra parte, los recursos provenientes del Fondo del Bicentenario aportaron en lo que va del año más de USD 7.000 millones. Este Fondo, cuya creación en 2010 devino en la renuncia de Redrado, ha sido renovado a comienzos de 2011, continuando con la erosión de la calidad del activo de la autoridad monetaria. Por otra parte, la ANSeS ha complementado al BCRA en este financiamiento a la Nación tras la estatización de las AFJP. En lo que va de 2011, el monto transferido ha superado los $2.600 millones. Pero se está agotando el margen y el aporte de la seguridad social y el BCRA ya no parece ser suficientes para financiar la dinámica de los gastos. La clave está en los subsidios. Para este año se estima que el monto de subsidios escalará hasta los $ 74.000 millones, esto es, casi en 55% por encima de lo verificado el año anterior. En este escenario el Ejecutivo decidió tomar como medida inicial el recorte de los subsidios al uso de electricidad, gas y agua para las empresas. La última movida anunciada por el Ejecutivo recientemente dispuso que se ampliará la eliminación de subsidios para los sectores productivos en $ 3.468 millones más (que se suman a los $600 millones anunciadas una semana atrás). Lo novedoso fue, en todo caso, que se determinará extender la quita para los sectores residenciales, donde se concentra actualmente el grueso de los subsidios. El reajuste tarifario, de acuerdo a lo resuelto por el Ejecutivo, se realizará de forma focalizada, avanzando barrio por barrio. Por el momento el Estado anunció un ahorro de $ 569 millones por la quita total de las subvenciones a los barrios de Puerto Madero, Barrio Parque y algunos countries. De esta forma, el ahorro anunciado hasta el momento asciende a un monto cercano a 4.600 millones de pesos, un 4,6% del total de los subsidios. Figura 1: Recortes a subsidios anunciados el miércoles 16 de Noviembre Empresas: Eliminación del 100% de subsidios a la electricidad a grandes empresas (se excluyeron las PyME) a partir de Diciembre •Refinación de combustibles •Procesamiento de gas natural •Biocombustibles y aceites •Agroquímicos Ahorro $472 M $1.493 M $745 M $758 M $3.468 M Residencial: Eliminación del 100% de subsidios a servicios públicos subsidiados en los barrios de Puerto Madero, Barrio Parque y en los Barrios Privados (Countries) a partir de Enero Ahorro •Agua (AYSA) •Electricidad •Gas $95 M $255 M $219,3 M $569,3 M •La quita aplicaría sobre 232.000 usuarios •Operará una renuncia voluntaria a los subsidios en otras áreas. Los beneficiarios figurarán en un registro de acceso público. •La medida se extenderá luego al resto de las regiones con subsidios. Ahorro : $4.037 M Ahorro total estimado (contemplando el anuncio previo): $4.637,3 M Fuente: abeceb.com. Cabe destacar, por otra parte, que el proyecto de presupuesto 2012 no contempla este ahorro –o el anterior anunciado. Dicho proyecto de ley, que sería tratado a mediados de diciembre, calcula subsidios al sector energético por $41.735 millones. Esta cifra resulta claramente insuficiente en vistas de que, pasados nueve meses de 2011, las transferencias a CAMMESA ya han sido sobre ejecutadas. Por otra parte, el incremento de 18,7% no cubriría siquiera el piso que impone el ajuste por inflación, que rondaría el 20%. Una paulatina actualización de las tarifas podría ayudar a descomprimir los abultados fondos que se destinan a los sectores energéticos y de transporte y mejoraría los incentivos sectoriales, favoreciendo el proceso de inversiones necesarias para mejorar la capacidad y calidad de la oferta doméstica. De realizarse un recorte abrupto, el resultado podría ser totalmente diferente, como ya quedó demostrado en el año 2008, cuando el Estado debió volver atrás con el “tarifazo”. 04. Bitácora Los hechos y datos relevantes del mes Resumen 1. Europa: Cambios institucionales en Italia y Grecia. El ex comisario europeo Mario Monti juró el miércoles como primer ministro de Italia y formó un nuevo Gobierno tecnócrata para enfrentar una gran crisis de deuda que amenaza a la zona euro, con el que espera tranquilizar a los mercados financieros. El ascenso de Monti se llevó a cabo luego de la dimisión de Silvio Berlusconi, quien puso como condición para su renuncia que se aprobara el presupuesto de su autoría. Tras su jura, Monti aseveró que pretende mantener el cargo hasta las próximas elecciones, en 2013. Por su parte, Papandréu renunció a su cargo de primer ministro griego, cediendo el puesto a Lucas Demetrios Papademos. Papademos, economista, no pertenece a ningún partido político y tiene en su haber una gestión como vicepresidente del BCE. 2. Europa: Elecciones en España. Con un nivel de desempleo récord de un 21,5% (que entre los menores de 25 años incluso llega a la cifra de 46%) y en medio de la peor crisis de las últimas décadas, se llevarán a cabo el próximo domingo 20 las elecciones presidenciales. Las encuestas presagian al unísono que el poder retornará al conservador Partido Popular (PP) de la mano de su líder, Mariano Rajoy, después de casi ocho años, con un 45,5% de intención de voto. 3. Europa: Cambios en las autoridades monetarias (BCE y FMI). El italiano Mario Draghi inició el primero del mes su mandato como presidente del Banco Central Europeo (BCE) en un entorno de escepticismo sobre la capacidad de Europa de solucionar la crisis de endeudamiento. Por otra parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) reemplazó a su director europeo Antonio Borges por Reza Moghadam, actual director del Departamento de Revisión y Política estratégica del organismo. 4. Brasil. Continúa la luz amarilla. La economía cayó 0,32% interanual en el tercer trimestre del año, a pesar de haber mostrado cierta mejora en septiembre, según el índice de actividad económica IBC del Banco Central de ese país. La producción industrial, por su parte, sufrió una fuerte baja en septiembre, en otra señal de que la mayor economía de Latinoamérica se está desacelerando más de lo esperado. La caída del 2% en la producción industrial en septiembre respecto a agosto se debió en parte a la baja en la actividad automotriz, tras una acumulación de inventarios, según el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). 05. Principales variables internacionales Resumen Variaciones Promedio anual Disponible Último dato aa mensual acum 07 08 09 10 EUR-USD Nov-11 1,37 0,3% -0,2% 5,4% 1,4 1,5 1,4 1,3 BRL-USD Nov-11 1,75 2,4% -1,0% -6,3% 1,9 1,8 2,0 1,8 MAIZ (U$S/ton) Nov-11 249,9 15,6% 3,0% 63,6% 144,3 205,2 145,0 164,4 SOJA (U$S/ton) Nov-11 438,7 -4,4% -2,2% 30,8% 317,2 452,9 378,0 381,6 Target FED Nov-11 0,25% 0 p.p. 0 p.p. 0 p.p. 5,0% 2,0% 0,25% 0,25% Act. Económica Brasil Sep-11 // 1,6% 0,0% 3,2% 6,1% 5,2% -0,6% 7,5% Valor. Agregado Industrial China Sep-11 // 13,8% // 14,2% 18,5% 12,9% 11,0% 15,7% TC COMMODITIES Las principales variables exógenas que inciden sustancialmente sobre el desempeño de la economía argentina indican que algunos de los elementos que constituyen el “viento de cola” comienzan a otorgar menos ventajas. En primer lugar, el precio de la soja, primer producto de exportación y responsable fundamental del ingreso de divisas, continuó cayendo en noviembre, promediando los USD 438,7, un 4,4% menos que el mes pasado. Por su parte, la economía de Brasil, nuestro principal socio comercial, se desaceleró en septiembre por tercer mes consecutivo, al expandirse un 1,6%, 0,3 p.p. menos que lo observado el mes anterior. Lo propio se observa para la industria en China, aunque la desaceleración fue marginal y la tasa de crecimiento dista de representar un peligro en el mediano plazo. En cuanto a las variables monetarias, el target de la FED sigue en sus mínimos históricos y, de acuerdo con las declaraciones de Bernanke, presidente de dicha institución, seguirán bajas hasta 2013, lo cual resulta beneficioso para Argentina. En este frente, las amenazas provienen de la cotización del real que, si bien corrigió respecto a la devaluación de mediados de septiembre, no volvió a los niveles previos, sino que osciló en torno a 1,75 BRL/USD, un 8,7% por encima del promedio enero- agosto. El fortalecimiento del dólar también opera negativamente para Argentina. Esta tendencia se reavivó con las recientes inestabilidades institucionales en Europa que emanan señales de ruptura para el Euro, debilitando la cotización de la moneda.