LOS AÑOS MUNDIALES Por Martín Estevez Nota publicada en la edición de Febrero de 2014 de El Gráfico nº 4443 Desde 1986, cinco de las Copas del Mundo más importantes (fútbol, básquet, vóley, hockey femenino y hockey masculino) se juegan con apenas meses de diferencia. En esta nota repasamos cómo le fue a nuestro país desde que en 1950 se juntaron las de fútbol y básquet, pasando por el triste 1970 y el ambiguo 2002. Al principio, cada cuatro años, lo que había era un año bisiesto. Desde 1930, lo que hay es un Mundial de fútbol. Y en las últimas décadas, lo que aparece en uno de cada cuatro años es una sucesión de Copas del Mundo de cuatro de los deportes que más apasionan a los argentinos: fútbol, básquet, vóley y hockey sobre césped. Ahora que estamos en uno de esos años especiales, el 2014, respondamos la siguiente pregunta: ¿cómo le fue a la Argentina en cada uno de los años mundiales? LOS AÑOS CINCUENTA Y SESENTA En las primeras Copas del Mundo de fútbol, Argentina terminó subcampeona (1930), eliminada en primera ronda (1934) y no participó en 1938. Era el único Mundial que nos importaba, y ni siquiera tanto como ahora. El vóley vivió su primera Copa del Mundo en 1949, y los siguientes torneos tampoco coincidieron con el de fútbol: 1952, 1956 y 1960. Entonces, la primera vez que un año tuvo dos Mundiales atractivos para los argentinos fue 1950. Justamente en nuestro país se disputó la primera edición del Mundial de básquet; Argentina se impuso a cuatro selecciones sudamericanas, tres europeas, una africana y a Estados Unidos, al que derrotó en la final. Oscar Furlong y Ricardo González eran las figuras de aquel plantel que le dio al país su primer título en un deporte de equipo. El fútbol ni siquiera tuvo la posibilidad de igualar ese logro, ya que el gobierno de Juan Domingo Perón decidió que el equipo no se presentara. Lo mismo sucedió en 1954, tanto en fútbol como en básquet. Argentina volvió a competir en 1958, pero sin alegrías: en fútbol fue humillada por Checoslovaquia, que la derrotó 6-1 y la dejó afuera en la primera ronda, en lo que se recuerda como “el desastre de Suecia“. Los siguientes Mundiales de básquet se jugaron en 1959, 1963 y 1967, sin coincidir con los futbolísticos. En 1962 y 1966 hubo Mundiales de vóley, pero sin Argentina. La Selección de fútbol, en tanto, no pudo pasar la primera ronda en la Copa del Mundo de Chile 62 y alcanzó los cuartos de final en Inglaterra 66, cuando los locales ganaron 1-0 en el recordado día en que Rattín aplastó la bandera inglesa delante de la Reina. LOS AÑOS SETENTA Seamos sinceros: hasta la década del setenta, esto de los años mundiales no existió. Lo usamos sólo como introducción, pero recién en 1974, por primera vez, dos selecciones argentinas jugaron un Mundial, porque 1970 fue lo peor de esta historia: no clasificamos ni en fútbol ni en básquet ni en vóley. En el 74, los futbolistas lograron superar la primera fase, pero un 0-4 contra el fútbol total de Holanda nos mostró la realidad. El básquet se clasificó, pero cayó en su grupo ante España y Estados Unidos y finalizó 11º entre 14. Y también compitieron las chicas de hockey, que en el primer torneo de la historia finalizaron en el segundo puesto. La unificación total de los Mundiales llegó en 1978, cuando se sumó el hockey sobre césped masculino, cuyas primeras copas habían sido en 1971, 1973 y 1975. Desde entonces, los Mundiales de los principales cinco deportes de equipo en la Argentina, se juegan el mismo año (excepto 1982, porque el hockey femenino se jugó en el 81 y en el 83). ¿Qué pasó en el 78? El fútbol fue campeón jugando como local, en el terrible contexto de una dictadura militar sospechada de influir deportivamente. También se organizó en el país el Mundial de hockey masculino, en el que la Selección logró un gran 8º puesto. El hockey femenino llegó a semifinales en España; el vóley se clasificó por primera vez y terminó 22º entre 24; pero no hubo cartón lleno, porque el básquet se quedó afuera en el Sudamericano. LOS AÑOS OCHENTA Hasta ese momento, la Argentina tenía dos Mundiales ganados (básquet 1950 y fútbol 1978) y nunca había jugado los cinco torneos el mismo año. En 1982, Diego Maradona disputó su primera Copa del Mundo, pero terminó expulsado, y el equipo, en el 11º puesto. La gran alegría la dio el vóley, que de local y con un grupo de jóvenes dirigidos por el coreano Young Wan Sohn, sorprendió al terminar 3º en el Mundial jugado en nuestro país. Pero hubo dos grandes decepciones: el básquet otra vez no se clasificó, y el hockey masculino hizo historia porque, por única vez, una Selección Argentina terminó última en un Mundial. El tercer título llegó gracias al fútbol y a Maradona, con la victoria sobre Alemania en la final disputada en México 1986. Fue, hasta ese momento, el mejor año para el deporte argentino: el hockey masculino trepó al 6º puesto, el femenino y el vóley terminaron 7º, y el básquet volvió a los Mundiales: superó la primera ronda y concluyó 12º. Sí: por primera vez fuimos protagonistas de las cinco Copas del Mundo. 1990: OTRA VEZ MARADONA Diego había sido esencial cuatro años antes, y volvió a serlo en Italia, cuando junto a Sergio Goycochea impulsaron a la Selección a eliminar a Brasil, Yugoslavia e Italia. La derrota 1-0 en la final ante Alemania determinó un subcampeonato con gusto a hazaña. El básquet logró su mejor posición desde 1950: en la Copa jugada en la Argentina terminó 8º gracias a un triunfazo ante Canadá en primera fase. En aquel equipo brillaban Marcelo Milanesio y Héctor “Pichi“ Campana. El vóley llegó invicto hasta los cuartos de final, pero le tocó un cruce cruel con Italia, que luego sería campeón. De todos modos, el 6º puesto mereció aplausos. Las chicas del hockey hasta tuvieron que vender rifas para pagar el viaje al Mundial de Australia, y terminaron en el 9º lugar, al igual que los varones en Pakistán. 1994: PREHISTORIA LEONA Lo mejor del 94 fue lo de las chicas del hockey, que con Sofía McKenzie como estrella terminaron subcampeonas en el Mundial disputado en Irlanda. Los otros que mejoraron su ubicación fueron justo los varones del hockey, que ascendieron a la 7º posición. La Selección de básquet esta vez no pudo con Canadá, que fue local, y esa derrota la terminó condenando a luchar por el 9º puesto que finalmente logró. El vóley perdió todos sus partidos y sólo zafó del último puesto por diferencia de sets: terminó 14º entre 16. La gran tristeza se vivió con el fútbol. Dirigido por Alfio Basile y con Maradona, Gabriel Batistuta, Claudio Caniggia y Diego Simeone, el equipo era candidato al título. Comenzó derrotando a Grecia y Nigeria, pero Diego dio positivo en un control antidoping, el ánimo se derrumbó, y Rumania terminó eliminándonos en octavos de final y dejándonos en un triste 10º puesto. 1998: SIN PODIOS Hace 16 años ocurrieron por última vez dos sucesos negativos: ningún seleccionado finalizó entre los tres primeros, y además uno de los equipos ni siquiera jugó el Mundial: el de hockey masculino. Desde entonces, los equipos argentinos tienen asistencia perfecta. Lo mejor fue lo de las chicas, con Karina Masotta y Vanina Oneto como estandartes, al terminar cuartas en el Mundial de Utrecht, Holanda. El fútbol tuvo una alegría importante, al eliminar a Inglaterra en octavos de final, y enseguida una tristeza, al ser eliminado por Holanda en cuartos de final. Aquel equipo dirigido por Daniel Passarella, con Ariel Ortega en su esplendor y Gabriel Batistuta como romperredes, terminó 6º. El último Mundial de Milanesio terminó con un buen 8º puesto para el básquet, con un memorable triunfo ante Australia incluido. El vóley decepcionó: una gran camada de jugadores que incluía a Marcos Milinkovic, Javier Weber, Juan Carlos Cuminetti y Guillermo Quaini, dirigida por Daniel Castellani, perdió ante rivales teóricamente inferiores como Canadá y España, y finalizó en el 11º lugar. 2002: EL CONTRASTE MAS GRANDE Si 1986 había sido el año más feliz hasta entonces, 2002 podría haberlo superado. La Selección de hockey femenino, que dos años antes había incorporado el seudónimo de Las Leonas gracias a una gran participación en los Juegos Olímpicos, ganó por primera vez el título mundial. Luciana Aymar, Soledad García y gran elenco protagonizaron el torneo jugado en Perth, Australia, en el que derrotaron a la siempre poderosa Holanda en la final. Los varones no se quedaron demasiado atrás: lograron la mejor posición de su historia, un 6º puesto conseguido tras ganar seis partidos y perder sólo tres, basándose en los goles de córner corto de Jorge Lombi, máximo anotador del torneo. Y hubo más: la Selección de básquet sorprendió al mundo y en Indianápolis superó al Dream Team de Estados Unidos, bestias NBA que jamás habían conocido la derrota, candidatos totales, superiores por decantación. Manu Ginóbili, Pepe Sánchez, Andrés Nocioni y Fabricio Oberto fueron líderes de los doce gigantes que llevaron al básquet argentino a una final mundial por primera vez en 52 años. Arañaron el título, pero perdieron ante Yugoslavia en una final que todavía duele, pero también enorgullece. El vóley tenía la responsabilidad de ser local y arrancó con todo: seis victorias consecutivas, incluida una ante la gigante Italia. En cuartos de final era favorito, pero perdió ante Francia y terminó con un 6º puesto que pudo ser mejor, pero al que le sobró dignidad. ¿Por qué, entonces, dudamos de que haya sido el mejor año del deporte argentino? Porque en medio de una crisis económica y social gravísima que se vivía en el país, la Selección de fútbol dirigida por Marcelo Bielsa entusiasmaba y era candidata al título. Pero no. Comenzó con un sólido triunfo 1-0 ante Nigeria, cayó injustamente ante Inglaterra y tuvo que definir su clasifición ante Suecia. Todavía lo tenemos en la garganta a ese partido, en el que Zanetti y Ortega fueron por la derecha, Sorin y el Piojo López por izquierda, Verón y Ortega por el medio, y Batistuta esperó y esperó una chance que nunca llegó. Un 1 a 1 que nos arruinó un año deportivamente maravilloso y nos condenó a un sorpresivo 18º lugar. 2006: A UN PASITO DE LA GLORIA... Los Mundiales de 2006 dejaron tres historias parecidas: las de tres equipos que estuvieron al borde, a muy poquito de lograr resultados históricos. La Selección de fútbol casi consiguió llegar a semifinales por primera vez en 16 años. El equipo dirigido por José Pekerman comenzó con tres triunfos y un empate hasta que en cuartos de final se cruzó con el local, Alemania, empató 1-1 y perdió por penales. El 6º puesto pareció poco premio. Los gigantes del básquet se habían transformado en la Generación Dorada dos años antes, al subirse a lo más alto del podio olímpico. En el Mundial estuvieron a un triple de ser finalistas, pero el tiro del Chapu Nocioni pegó en el aro, salió y terminamos cuartos. Fue un enorme torneo de Manu Ginóbili, elegido en el quinteto ideal. También Las Leonas pudieron ser finalistas, pero por diferencia de gol quedaron debajo de Australia en su grupo y no pudieron evitar a Holanda, que las eliminó en semis. En el partido por el tercer puesto, se sacaron la bronca derrotando 5-0 a España. Sin embargo, dos equipos estuvieron lejos de cualquier alegría. El hockey masculino finalizó 10º entre 12 equipos, en una triste campaña que incluyó una inesperada derrota ante Japón. El vóley también anduvo muy mal: sumó tres victorias y siete derrotas, y finalizó en el puesto 13. Hasta Puerto Rico nos ganó. 2010: ¡BICAMPLEONAS! No es un error, es un juego de palabras porque, en el Mundial de Rosario, la Selección de hockey femenino fue campeona mundial por segunda vez. Las chicas hicieron una campaña estupenda: siete triunfos en siete partidos, con 19 goles a favor (6 de Noel Barrionuevo) y apenas 4 en contra. Derrotaron 3-1 en la final a un ya clásico rival, Holanda. Segundo Mundial ganado para Aymar, que así se acomodó junto a Gabriela Sabatini como la deportista argentina más importante. Por segunda vez en la historia, las cinco Selecciones terminaron en los primeros nueve puestos. En básquet, Lituania nos ganó en cuartos de final; pero gracias a un enorme Luis Alberto Scola, hubo triunfos ante Rusia y España para terminar en 5º lugar. El fútbol llegó con el impulso de tener a Maradona como entrenador y arrasó con tres triunfos en primera ronda. Pero mostró dudas ante México, y Alemania terminó goleándonos 4-0 y enviándonos por tercera vez en cuatro copas al 6º lugar. El hockey masculino repuntó luego del fracaso 2006 y ascendió al 7º puesto, destacándose un triunfo ante la India. Y también mejoraron los chicos del vóley, que treparon cuatro puestos y terminaron novenos, con victorias ante Francia y Japón incluidas. 2014: DOS GRANDES DESAFIOS A partir del 2 de junio, por cuarta vez consecutiva, habrá representación argentina en los cinco Mundiales. Sabemos que los seguidores del básquet y el vóley femeninos estarán enojados por su ausencia en esta nota, pero deben reconocer que la popularidad de esas disciplinas en la Argentina aún está un escalón abajo. Las Leonas y el fútbol son candidatos al título; el básquet apuntará a recuperar su lugar en las semifinales; mientras que el hockey masculino y el vóley saben que el objetivo es no bajar de los primeros ocho puestos. A nivel grupal, hay dos metas gigantes que nunca se lograron y no parecen imposibles. La primera, que las cinco selecciones terminen entre los ocho primeros lugares. La segunda, que dos equipos argentinos sean campeones del mundo el mismo año. Bienvenidos a un año mundial.