Memorias Foro Departamental del Buen Trato “Por una niñez digna y feliz”. Mayo 25 de 2007 UNA VÍA DE CONSTRUCCIÓN DEL BUEN TRATO EN ANTIOQUIA DESDE LA FAMILIA Y LA ESCUELA Omaira Aristizábal Z. Psicóloga. Especialista en Psicoanálisis con niños Universidad de Antioquia “El arte no es un objeto que se decora y se dibuja, sino una relación conmigo, una relación con lo que me rodea, con mi gente Dirigirme a ustedes niños, niñas, familias, maestros/as, gestores comunitarios y profesionales tiene un objetivo y una apuesta, darles a conocer la apreciación y concepción que tienen nuestros niños, niñas y jóvenes de sus convivencias y del trato con los demás en diferentes regiones de nuestro departamento. También mostrarles desde un ejercicio práctico realizado con ellos, la posibilidad que encuentran en el arte para dar a saber sus expectativas, vivencias, ideales, miedos, sueños, realidades entre otras manifestaciones. Y es que el arte ofrece un espacio para hacerse un lugar de reconocimiento, primero de sí mismo y en segundo lugar un llamado de reconocimiento al otro. Por ello concretamente este escrito pretende acercarse al análisis, desde el campo de lo psíquico, de las producciones artísticas, particularmente el dibujo y la pintura, elaboradas por los niños, niñas y jóvenes, de los diferentes municipios del Departamento de Antioquia, en el marco de las actividades del I Festival Departamental de las Artes Visuales, El Buen Trato. Los invito en un acto de cortesía a verlos, reconocerlos y escucharlos en lo que aquí nos han revelado. El dibujo y la pintura son consideradas para la psicología técnicas proyectivas. Una técnica proyectiva es un procedimiento de recogida de información. Este procedimiento brinda una visión sobre las maneras como el sujeto se vincula con la realidad, el arte como medio de proyección mueve a la reflexión, al encuentro del sujeto consigo mismo, es un medio para acercarse a la realidad. ¿Cómo se da este proceso? La proyección significa que cada vez que se hace o se responde a algo se está reflejando algo de sí mismo. En este análisis se tratara de mirar algunos de los hilos que tejen la realidad de la infancia y la juventud de nuestro departamento en esos innumerables mensajes que se ven plasmados en sus obras y en los decires que las acompañan. Desde esta óptica se leerán las posibilidades que ofrece el arte para promover la vida, el buen trato y la convivencia social, y también como es lógico, para poner de manifiesto los dramas existenciales, aquello que los sujetos manifiestan como obstáculo para una vida pacifica. En el I Festival de Artes Visuales, pudieron encontrarse los siguientes elementos: Las expresiones artísticas más comunes en los niños, niñas y jóvenes giraron alrededor de la familia y es que en ella se encuentra presentes 1 Memorias Foro Departamental del Buen Trato “Por una niñez digna y feliz”. Mayo 25 de 2007 los mayores aciertos pero también las más grandes tristezas de la vida infantil. En los jóvenes aparecen con mayor relevancia aspectos concernientes a su vida sexual, a la identidad y al significado que tienen de la existencia según las experiencias de vida, son obras y discursos con un tinte un tanto filosófico reflexivo, en otros lo que se pone de manifiesto es su drama existencial. Relacionado con lo anterior se ve claramente reflejado en algunas de producciones artísticas elaboradas en el I Festival Departamental de Artes Visuales cómo cada uno de los niños y niñas pudieron plasmar al mismo tiempo sus sentimientos e impresiones alrededor de sus historias personales usando la indicación del maestro como una excusa para dar a saber al mundo su concepto de convivencia, sus propuestas de buen trato, sus anhelos y sus dramas existenciales, así es como, afloraron de inmediato múltiples manifestaciones de alegría, positivismo, jubilo, regocijo pero también de tristeza, angustia, melancolía, duelo entre otras. El buen trato empieza por casa En la sistematización de los trabajos de los niños y niñas: dibujos y pinturas, se encontró reflejado el lugar y la importancia que ellos y ellas le asignan a la familia en su crecimiento, el hecho de sentirse amados, reconocidos y respaldados por la familia es un elemento de seguridad, les abre las puertas al encuentro de otros mundos, de otras experiencias y de un futuro como buen ciudadano Los dibujos que apuntan al buen trato y los buenos modales son muchos, muestran claramente lo que motiva sus sentimientos de alegría, felicidad y también aquellos que aluden e invitan al buen trato. En estas obras sobresalen las texturas suaves, colores alegres e intensos, flores de diferentes colores, expresiones de alegría, ternura y unión. Sí el buen trato empieza por casa, en los dibujos y expresiones de muchos de estos niños, seguramente hay un mensaje que se dirige a una familia en particular y esa familia es la propia, pero también podemos decir que se dirige a un colectivo ya que hay un sentido de solidaridad muy profundo y un deseo implícito en sus trabajos: “que todos los niños puedan encontrar en sus familias un espacio seguro”. El buentrato es sentido y experimentado cuando a su alrededor hay personas que reconocen en ellos a un otro, es decir, cuando se genera un ambiente de cortesía cuyo núcleo es, como ustedes lo saben, la mirada a los ojos del que habla y del que hace, hacerles sentir que ellos son alguien, con esto los hacen existir y los reconocen como interlocutores válidos puesto que le dan valor a sus decires y haceres. Otro de los aspectos encontrados hace referencia al espacio físico en el que comparten el niño, niña con su familia, es decir, la casa. Ésta es denominada por ellos como el hogar, expresión con la que tratan de significar el afecto y regocijo que este espacio les brinda. El hogar se ofrece entonces como otra fuente importante de seguridad. Este elemento se refleja particularmente en las pinturas de niños que parecen vivir en situaciones favorables, pero que al 2 Memorias Foro Departamental del Buen Trato “Por una niñez digna y feliz”. Mayo 25 de 2007 reflexionar acerca del daño que la violencia armada ha causado a las familias desplazadas de sus tierras y de sus viviendas, intentan reparar, mediante una donación simbólica aquello que les significa sus arraigos más significativos, la casa (familia) y la tierra. Lo dicho anteriormente puede comprenderse en los dibujos donde los niños y niñas en un acto de solidaridad, ofrecen a los desplazados, en la actividad “La Caja de Siete Colores”, los elementos “físicos” que han perdido, en ellos aparece la casa, la tierra, el agua, los animales, el sol, los sembrados, el campo…. En los dibujos, lo que intentan ofrecer al otro, es lo que han perdido, ese vínculo, el arraigo y ratificar lo valioso de la función de la familia, es un llamado a conservarla sin permitir que tal situación termine también destruyéndola como le ha sucedido a algunos de los niños. Esta se configura como una vía de reparación que ofrecen los niños a las personas que según sus consideraciones, están en peligro de perder lo más valioso, sus lazos afectivos. En este contexto aparecen denuncias sociales que retoman elementos de los discursos ideológicos, religiosos y familiares a los que los niños, niñas y jóvenes se han visto identificados y/o sometidos pero también advierten sobre los peligros sociales que atentan contra el buen trato y por qué no decirlo, hacen un llamado al cambio social. Entre los mensajes también aparece un llamado ético a los desplazados y es el de hacerse cargo de sus vidas y de sus familias, seguir luchando por lo de ellos y no permitir que nada ni nadie les destruya sus familias. Sin embargo y como se dijo antes, el arte no solo está al servicio de resolver conflictos, problemas de agresión, duelos y violencia también es una vía para ir comprendiendo la importancia de uno mismo, desde la perspectiva del otro, de la familia, de la estructura social, de lo político. ¿Por qué las artes visuales para promover el buen trato y canalizar la agresión? Para abordar esta respuesta no puedo dejar de plantear lo que a mi modo de ver es una conclusión de lo trabajado en las diferentes actividades del Festival para introducir la verdadera función del arte en la promoción del “Buentrato”. Se puntualiza aquí lo que puedo desprender de lo analizado, con el ánimo de invitar a los docentes y padres de familia a reflexionar y en consecuencia a asumir una postura ética. Puede determinarse que hay diferencias entre los conceptos de Mal-trato y Maltrato-violencia desde el ámbito del sujeto y aquí vale la pena hacer una diferenciación ya que estás acepciones por lo general no las diferenciamos la una de la otra y cuando se habla del sujeto y sus relaciones es menester tenerlas presentes. El Mal-trato hace referencia a un tipo de relación mediada por expresiones y acciones bruscas, es una manera de tratarse bajo unos códigos en los que hay expresiones y acciones que pueden ser vistos por un tercero como agresivos pero que para los sujetos que están en el código no lo son, allí continúa habiendo lazo afectivo y social porque esto no genera para el 3 Memorias Foro Departamental del Buen Trato “Por una niñez digna y feliz”. Mayo 25 de 2007 sujeto que lo recibe un conflicto. Cuando hablamos de Maltrato y violencia se hace alusión a diferentes actos que implican la muerte simbólica del otro, aquí el lazo afectivo y social se rompe, en estos casos se corre el riesgo de encontrar niños, niñas y jóvenes desesperanzados y sin deseos de vivir. Así mismo se puede determinar el Buentrato como el acto de disponer los medios físicos y humanos para permitir que algo se transforme en la vida de los niños, niñas y jóvenes para su beneficio, convivencia y formación. En la vía del arte es disponer de los medios para que realicen en su propio ser un sentido estético de transformación, de esclarecimiento y de regulación pulsional consigo mismo y en relación con el otro. Defino Buen-Trato: como las diferentes acciones que se hacen cotidianamente para lograr una mejor convivencia pero que no tienen trascendencia en la vida de los sujetos. En las instituciones educativas están enmarcadas por lo general en la promoción de los valores, con muy buena intención pero con pocos efectos ya que no llevan a una transformación significativa de actitudes en los sujetos: niños, niñas, jóvenes e incluso en los adultos que acompañan la educación y crianza. El arte le permite al sujeto lograr en el espacio que le damos desde allí lo que en ocasiones, no puede lograr en el espacio de la vida cotidiana, en éste sentido el arte se vuelve un posibilitador de significaciones y resignificaciones, un medio para elaborar desde lo simbólico situaciones que de otra forma podrían ser destructivas para el sujeto y para sus relaciones y vínculos sociales. Este festival nos abre los ojos e invita a una reflexión ¿por qué en el campo educativo las artes son vistas para muchos directivos y familias como un relleno, por qué las secretarías de educación delegan esta función en personas que no tienen ninguna preparación en el campo?. Lo que acabamos de ver nos muestra la importancia de esta área no solo como promotora de cultura sino y particularmente como promotora de alternativas saludables para vivir, para promover una adecuada convivencia y como medio de simbolizar situaciones de complejidad para el sujeto. Es un hecho que el ministerio de educación nacional ya esta iniciando su función en la promoción de competencias ciudadanas pero aún nos queda mucho por hacer. Cuando los niños, niñas y jóvenes encuentran en la familia y en la escuela un espacio vital que les permite una expresión asertiva de sus sentimientos en las artes visuales podrán reflexionar, analizar, tratar y hasta resolver algunos de sus conflictos, malentendidos, miedos e incluso sus experiencias de dolor, maltrato, maltrato, agresión y violencia, de este ejercicio aprenden y reflexionan sobre su situación y a la vez construyen alternativas más saludables y pacíficas de abordarlas. Un ejemplo de ello lo vemos cuando el niño puede hacer un dibujo, una pintura… para representar la agresión que siente, así se protege de pasar al acto agresivo consigo mismo o con sus semejantes y al mismo tiempo le da pautas para modificar su actitud. 4 Memorias Foro Departamental del Buen Trato “Por una niñez digna y feliz”. Mayo 25 de 2007 En este sentido el docente y los padres de familia han de permitir dicha expresión sin hacer juicios precipitados sobre sus obras. Expresiones como: “Este dibujo tan agresivo seguro que es de…”, “No haga esos dibujos tan agresivos y violentos” “Vamos a dibujar cosas lindas” “con ese color no”, “Usted por qué hizo esa bobada”, limitan la posibilidad al sujeto de rectificarse y elaborar sus duelos y se vuelven un obstáculo para que a través del arte el niño vaya comprendiendo el sentido del buen trato, y a su vez le obstaculiza la posibilidad de convertirse en artista, sí esta ha de ser su elección. El sujeto al buscar y desarrollar sus propios estilos, está también encontrando y desarrollando su identidad. Lograr un estilo es un proceso continuo, de unión, construcción, integración, del pasado con el presente y con el futuro del sujeto, de lo interno con lo externo. Con el ejercicio de La Caja de Siete Colores y El Color de los Oficios se confirma el abanico de posibilidades simbólicas que ofrecen las artes para promover e ir conduciendo a los niños, niñas y jóvenes al encuentro y fortalecimiento de competencias para vivir en comunidad, para promover el respeto por los derechos y por la dignidad humana. Los dibujos y pinturas en los cuales los niños, niñas y jóvenes plasmaron situaciones de solidaridad, inclusión, respeto por la diferencia, participación y modales de convivencia pueden ser un referente para que los maestros impulsen en ellos la construcción del buen trato, acompañando esta actividad de espacios de reflexión y de conversatorios. De ahí que la invitación sea a que estas actividades no se realicen de manera esporádica. Para ser efectivas han de estar insertas en la cotidianidad de la escuela atravesando los diferentes espacios académicos y de convivencia, de lo contrario se convertirán en acciones aisladas sin efectos en lo singular y en el tejido social. El color de los oficios, además de permitir valorar los diferentes oficios de la región como se observó en los trabajos, también es una herramienta que facilita significativamente el desarrollo de actitudes emprendedoras y la transmisión de competencias laborales y en consecuencia para que los y las niñas puedan ir comprendiendo lo que hay en juego en cada uno de ellos y lo que de sí mismos está puesto allí. La elección de un oficio no es algo que esté separado de su historia, está tejida de innumerables situaciones que se dan en la relación con el otro, no obstante no es un asunto que el docente o padre de familia han de dirigir desde su mirada, ha de ser un asunto que el niño, niña, joven vayan construyendo y definiendo a partir de sus propios intereses. Los adultos les ofrecerán una serie de posibilidades y les permitirán explorarlas con los pros y los contras que cada uno de los oficios tiene pero también han de permitirles realizar las preguntas que para el sujeto generan algunas funciones. Mirando la función que tiene el arte en la escuela, no se puede desconocer la importancia del docente y del promotor de arte en la construcción con los estudiantes del sendero que los llevara a encontrar en el arte un lugar para la vida; (canalizar la agresión y para promover la vida). El ámbito escolar se sostiene en el deseo de los maestros; si el docente de artes no transmite en su acto la pasión por él mismo, difícilmente logrará unos estudiantes decididos por saber vivir desde la vía del arte, se requiere entonces un Otro que desee para poder transmitir. Un Otro deseante no identificado a una voluntad de poder o 5 Memorias Foro Departamental del Buen Trato “Por una niñez digna y feliz”. Mayo 25 de 2007 sometido a un ideal irracional, el que quiere a toda costa hacerlo amenaza al otro y no le permite ser sujeto. La escuela debe dar ganas de vivir. En la escuela se da básicamente una construcción de lazo social, el arte permite armar ese tejido anudando el mundo interno con el mundo externo, lo trágico con lo cómico, lo miserable con lo sublime, lo agresivo con lo tierno, conteniendo y regulando solidamente los excesos pulsionales como por ejemplo lo que tiene que ver con la agresión, la violencia en todas sus formas y la sexualidad. Cuando la escuela hace lo que debe hacer arrastra al sujeto mucho más allá del “ideal social”: le da la opción para construir vida. Lo que está en juego en las artes visuales es algo que se presenta para ser reconocido y leído incluso cuando no sabemos aún como leerla. La palabra es el complemento del trazo ya que permite vehiculizar lo que el sujeto proyecta y dice con él, produciendo efectos de simbolización. El arte plantea la posibilidad de ser artistas de nosotros mismos, ya que impulsa la creatividad del pensamiento para resolver problemas cotidianos y aspectos esenciales de nuestra vida y de lo que podemos hacer con nuestro ser. 6