Montevideo, trece de abril de dos mil cinco. VISTOS: Para sentencia

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Montevideo, trece de abril de dos mil cinco.
VISTOS:
Para sentencia estos autos caratulados: "OLIVAR
CABRERA, JULIO C/ ESTADO - PODER LEGISLATIVO - ACCION DE
INCONSTITUCIONALIDAD ART. 1 LEY No. 17.045 EN LA REDACCION DADA
POR LA LEY No. 17.818", Ficha 1-321/2004.
RESULTANDO:
I)
El
promotor
solicitó
declaración
de
inconstitucionalidad de las Leyes Nos. 17.045 de 14 de diciembre
de 1998 y 17.818 de 6 de setiembre de 2004 contra el Estado (Poder
Legislativo), por entenderlas vulneratorias del art. 29 de la
Constitución de la República.
Señaló que es permisario de los medios de
radiodifusión CX 147 Radio Cristal del Uruguay y CV 160 Emisora
Continental, según certificado notarial que adjuntó, postulando
que se siente lesionado en su interés directo, personal y legítimo
como radiodifusor.
Indicó que la Ley No. 17.045 estableció
limitaciones a su actividad en las elecciones internas de los
partidos políticos realizadas el 27 de junio del corriente al
establecer en su artículo 1o. que los partidos políticos podrán
iniciar
su publicidad electoral en los medios de radiodifusión,
televisión abierta y televisión para abonados sólo a partir de
cuarenta días para las elecciones internas, cincuenta días para
las elecciones nacionales, veinte días en caso de realizarse una
segunda
vuelta
y
cuarenta
días
para
las
elecciones
departamentales, artículo que fue modificado asimismo por la Ley
No. 17.818 de 6 de setiembre de 2004, limitando aún más las
actividades del actor como radiodifusor frente a las próximas
elecciones nacionales y departamentales al establecer que los
partidos políticos podrán iniciar su publicidad electoral en los
medios de radiodifusión, televisión abierta, televisión para
abonados y prensa escrita, sólo a partir de treinta días para las
elecciones internas, treinta días para las elecciones nacionales,
quince días en caso de realizarse una segunda vuelta y treinta
días para las elecciones departamentales.
Señaló que dichas Leyes imponen una limitación
a la libertad de expresión que constituye a criterio del
accionante una flagrante violación del art. 29 de la Constitución,
en tanto son violatorias de un modo de libertad específicamente
garantido por la Constitución: la libertad de emisión o de
comunicación del pensamiento, cuando el art. 29 de la Carta Magna
dispone que "Es enteramente libre en toda materia la comunicación
de los pensamientos por palabras, escritos privados o publicados
en la prensa, o por cualquier otra forma de divulgación, sin
necesidad de previa censura; quedando responsable el autor, y, en
su caso, el impresor o emisor, con arreglo a la Ley por los abusos
que cometieren". Por lo que el alcance del art. 29 es amplísimo,
se refiere a la libertad de comunicación de los pensamientos "en
toda materia".
Sostuvo, analizando el régimen constitucional
vigente a la luz de la opinión de la doctrina calificada en la
materia que es un régimen de previa censura el que resulta de
Leyes que exigen para el ejercicio del periodismo o de la
actividad de radiodifusión condiciones particulares, como es el
caso de las Leyes Nos. 17.045 y 17.818 cuya constitucionalidad se
objeta.
Concluyó que las Leyes Nos. 17.045 y 17.818 de
14 de diciembre de 1998 y 6 de setiembre de 2004 respectivamente
son inconstitucio-nales, por cuanto vulneran la libertad de
comunicación de los pensamientos consagrada en el art. 29 de la
Constitución de la República, solicitando su declaración de
inaplicabilidad.
II) Habiéndose dado ingreso a la pretensión de
inconstitucionalidad (f. 8 de autos), se confirió traslado de la
misma, el que fuera evacuado por el Estado - Poder Legislativo
(fs. 19 - 24 de autos), quien solicitó se declare que las Leyes
Nos. 17.045 y 17.818 no contienen ninguna disposición de carácter
inconstitucional.
IV) El Sr. Fiscal de Corte por Dictamen No.
4.257/004
consideró
que
corresponde
no
hacer
lugar
al
accionamiento promovido (fs. 14 - 15 vto. de autos).
CONSIDERANDO:
I)
Con carácter previo corresponde aclarar
que no obstante referirse la acción de inconstitucionalidad a las
Leyes Nos. 17.045 de 14 de diciembre de 1998 y 17.818 de 6 de
setiembre de 2004, en la medida que el artículo único de la Ley
No. 17.818 modificó lo dispuesto en el art. 1o. de la otra
disposición impugnada Ley No. 17.045, el análisis del subexamine
quedó acotado en referencia a la última de las disposiciones
aprobada, por ser la que se encuentra vigente a la fecha de
promoción del accionamiento.
II) Asimismo, corresponde poner de manifiesto
que la calidad de quien promovió esta acción no se ajusta a las
previsiones del art. 509 del C.G.P., en tanto de atenderse al
interés que debe revestir quien ejercita tal defensa, sólo puede
considerarse como titular de la solicitud, atento a lo que dispone
la norma ya citada, aquél que se considere lesionado en su interés
directo, personal y legítimo, y de autos surge que quien promueve
la
inconstitucionalidad
es
permisario
de
los
medios
de
radiodifusión que indica, en tanto la norma no establece
limitaciones a su actividad sino a los partidos políticos para la
publicidad que inicien dentro de los tiempos en ella establecidos.
Como lo señaló acertadamente el Sr. Fiscal de
Corte a f. 15, las limitaciones que imponen las normas atacadas no
lo son a los medios de comunicación, de alguno de los cuales es
titular, sino a los partidos políticos, los que podrán iniciar su
publicidad electoral a partir de los días en que en ella se
establece. Al accionante no le afecta jurídicamente (aunque
pudiera afectarlo económicamente) puesto que a su respecto no
existe la restricción temporaria prevista en la norma atacada para
los
partidos
políticos
(se
trata
de
elecciones
internas
nacionales, en caso de realizarse una segunda vuelta o de
elecciones departamentales).
Esta Corporación ha señalado, respecto al
análisis de las calidades que debe revestir el interés en actuar,
fundamento de su legitimación activa, que además de tener la
característica de legítimo (no contrario a la regla de derecho, la
moral o las buenas costumbres), personal (invocando un interés
propio, no popular o ajeno), debe ser directo, es decir que el
mismo "...sea inmediatamente vulnerado por la norma impugnada".
Partiendo
de
la
opinión
de
uno
de
los
maestros
del
constitucionalismo nacional se afirmó que este interés es también
el "... inmediatamente vulnerado por la aplicación de la Ley
inconstitucional. No lo es, en cambio, el interés que remotamente
pudiera llegar a ser comprometido si la Ley se aplicara" (Justino
Jiménez de Aréchaga, La Constitución de 1952, t. III, pág. 183).
En tesis coincidente con la postulada, del mismo modo, por
ilustrado administrativista, para quien "Interés directo significa
interés inmediato, no eventual o futuro. La existencia de un
interés directo implica que el particular se encuentra en una
situación
jurídica
definida
y
actual
con
relación
a
la
Administración" (Héctor Giorgi, El contencioso administrativo de
anulación, pág. 188)" (Citados en Sent. No. 335/97).
En consecuencia, no procede ingresar a la
cuestión de fondo en relación a la alegada inconstitucionalidad
del precepto impugnado respecto del art. 29 de la Carta.
Por las razones expuestas, la Suprema Corte de
Justicia,
FALLA:
DESESTIMANDO LA ACCION DE INCONSTITUCIONALIDAD
PROMOVIDA, CON COSTAS.
OPORTUNAMENTE, ARCHIVESE.
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